Está en la página 1de 6

Comprensión Ontológica de la Prospectiva

Elba Yolimar Sandoval Torres


Elbasandoval29@gmail.com

Docente Investigadora Universidad Nacional Experimental “Rafael María Baralt”


Coordinadora Académica programa Ingeniería y Tecnología Sede San Pedro. Participante
del Doctorado en Gerencia Universidad Yacambù

Concepción ontológica del futuro: las 4 verdades


En relación, a la concepción ontológica del futuro, es conveniente
mencionar a Mera (2014) en la cual la prospectiva es igual a la
anticipación, ya que se realizan análisis sistémicos para integrar
contextos, contenidos y procesos que conecten las variables y los
diferentes actores con sus múltiples interrelaciones, en busca de
discriminar con certeza dentro de grandes volúmenes de información, con
el propósito de extraer, mediante procesamientos adecuados, aquellas
informaciones principales, pertinentes y útiles que permitan realizar una
apropiación y contextualización de la información para dar mejores
respuestas dentro de los procesos de toma de decisiones.
Siguiendo con las ideas, Uranga (2007) presenta que la prospectiva es
una actitud frente a la vida y los acontecimientos, una “sistemática
mental”, dirá Agustín Merello (1973), acompañada de herramientas
metodológicas, que se apoya en la construcción de escenarios futuros
para, desde allí, diseñar y proyectar nuestras acciones del presente, es
una manera de buscar en el diseño de futuros el reverso de la trama del
presente para abrirnos a las posibilidades laterales de la realidad y, de
esta manera, percibir otros campos de acción hasta el momento
desconocidos.
En relación a lo anterior, Lucena (2014) explica que la prospectiva es
la herramienta cuya finalidad principal es prever el futuro en función del
presente, metodología interesante que reporta beneficios a la gerencia
organizacional, más aún en una sociedad cambiante donde el volumen de
información aumenta constantemente y la toma de decisiones.
Al analizar los planteamientos anteriores, se visualiza la prospectiva
como la anticipación acompañada de herramientas metodológicas, que se
apoya en la construcción de escenarios futuros en función del presente
para lograr propósitos colectivos que se han trazado o se pretenden
alcanzar en una organización.

Consideraciones sobre la prospectiva


Al respecto, se presenta lo que el autor Uranga (2007) explica respecto
a que la prospectiva es “primero un acto de imaginación selectiva y
creadora de un polo deseado, luego una reflexión sobre la problemática
presente (para confrontarla con la deseada) y por último una articulación
ensambladora de las pulsiones individuales para lograr el futurable (futuro
deseable)”
En este mismo orden de ideas, Mera (2014) el pensamiento
prospectivo es igual a la anticipación, ya que se realizan análisis
sistémicos para integrar contextos, contenidos y procesos que conecten
las variables y los diferentes actores con sus múltiples interrelaciones, en
busca de discriminar con certeza dentro de grandes volúmenes de
información, con el propósito de extraer, mediante procesamientos
adecuados, aquellas informaciones principales, pertinentes y útiles que
permitan realizar una apropiación y contextualización de la información
para dar mejores respuestas dentro de los procesos de toma de
decisiones.
Es por ello, que Uranga (2007) explica que toda imagen de futuro
exige dimensionar la complejidad social en la que un determinado actor
social está inserto, no es posible pensar ni pensarse de manera aislada,
toda construcción del futuro demanda una mirada que aborde el espacio
de la sociedad en su conjunta para delinear allí el lugar propio de cada
actor social, de cada organización, considerando también sus alianzas y
oposiciones.
El autor anteriormente citado, presenta una seria de consideraciones
sobre la prospectiva en las cuales presenta lo siguiente:

1. Construir el futuro no es adivinarlo


Según Uranga (2007) la finalidad de la prospectiva no es adivinar el
futuro, no es anticiparlo. Es asumir que el futuro se abre ante nosotros
como múltiples posibilidades, como una suerte de desafío que nos
convoca para generar caminos por los que estamos invitados a transitar.

2. Prospectiva, teoría del caos y complejidad


La prospectiva aparece claramente emparentada con la teoría del
caos, en el sentido que la plantea James Gleik (1991), para ello es
imprescindible desterrar aquella idea errónea que vincula el caos con la
anarquía y el desorden. Por el contrario, Gleik afirma que el caos es
indicativo de un orden tan perfecto que resulta incomprensible para la
mente limitada del ser humano. Se trata en definitiva de una evolución de
la teoría general de sistemas, que se puede aplicar tanto en el campo de
las ciencias básicas como en las ciencias sociales.

3. Prospectiva: libertad, poder y voluntad


Hablar de la libertad en prospectiva supone retomar la idea de que el
futuro no está predeterminado o que nos viene dado, sino que está en
nuestra capacidad y en nuestras posibilidades construirlo, ello exige, sin
embargo, abonar el terreno y prepararnos nosotros mismos cultural y
técnicamente para afrontar ese desafío, entendiendo además que la
libertad no puede verse como hacer lo que cada uno quiere en el
presente, sino como la posibilidad de elegir en el futuro por aquello que
más le conviene después de haber construido las condiciones para ello
actuando desde el presente con esa perspectiva.

Desarrollo de los estudios del futuro y su rediseño


En este sentido, Mera (2014) explica que si bien es cierto que la
prospectiva nos permite ver las alternativas del futuro, también es
importante que nos planteemos la pregunta: ¿qué vamos hacer?, y
¿cómo lo vamos a hacer? Esto lo logramos con la articulación de la
prospectiva y la estrategia (Godet, 2007) “La estrategia nos dice cómo
construir el futuro que más conviene. La una sin la otra no tendría sentido.
La prospectiva consiste en la exploración de los futuros posibles, es
decir, de lo que puede acontecer, la estrategia consiste en lo que puede
hacerse. Ambas disciplinas son indispensables en el mundo actual y
debemos familiarizarnos con ellas, si queremos estar en la frontera de la
competitividad.”
En este mismo orden de ideas, la autora antes mencionada presenta lo
que corresponde a una metodología de lo que ella llama prospectiva
estratégica, en la cual menciona los siguientes aspectos a seguir para el
logro del desarrollo de estudios a futuro y su rediseño, en ella se destacan
una serie de pasos que están detallados en la figura número 1, los cuales
se deben seguir, ya que las fases y herramientas del modelo avanzado de
prospectiva estratégica permiten desarrollar, de manera sencilla,
sistemática y participativa, la identificación de factores de cambio, la
selección de variables claves o estratégicas, los juegos de actores, la
construcción de “escenarios apuesta” y el diseño de opciones
estratégicas.

Figura Nº1: Modelo avanzado de la prospectiva estratégica

Fuente: Mera (2014)


Alcance de la prospectiva en Venezuela

En relación, a la prospectiva en el ámbito venezolano es de interés


mencionar lo aportado por Lucena (2014) en un estudio realizado en las
universidades de Venezuela, ella explica la prospectiva es una de las
herramientas más empleadas en el ámbito gerencial porque genera
beneficios puntuales en cuanto a conocer el medioambiente donde opera
la organización, identificar su filosofía corporativa, orientar la toma de
decisiones y diseñar cursos de acción que respondan a los objetivos
corporativos de la organización.
Desde esta perspectiva, la planificación prospectiva forma parte del
menú estratégico, su propósito fundamental es emplear una metodología
gerencial que permita vislumbrar el futuro amparándose en el presente,
las organizaciones educativas son instituciones que en su estructura
cuentan con un cuerpo de gerentes, coordinadores, jefes, según sea el
caso, quienes tienen la responsabilidad de ejercer una gestión en función
de una imagen corporativa, reflejando la necesidad de las universidades
publicas venezolanas del uso de herramientas gerenciales para facilitar la
unificación de muchos criterios en una visión colectiva de operatividad, sin
restar espacio a la creatividad e innovación.
La autora en cuestión presento que en su estudio los casos de tres
universidades venezolanas estudiadas, en las cuales se apreció como la
puesta en práctica de la planeación prospectiva tiene alcances positivos
en su gestión en atención con las siguientes reflexiones puntuales, como
los siguientes: Apunta hacia un cambio de paradigma que promueve el
elemento gerencial como recurso estratégico en la educación
universitaria, que al mismo tiempo, logre utilizar las herramientas para la
aplicación de las TIC en todo el entorno social, por ser estas uno de los
principales factores externos de cambio en las universidades, en
particular sobre su impacto en los cuatro ámbitos principales de la
actividad universitaria: docencia, investigación, gestión y presencia en el
entorno social.
Referencias Bibliográficas

[1]. Lucena, Y. (2014) Visión analítica de la planificación prospectiva en


las universidades públicas venezolanas. Universidad del Valle. Colombia.
Artículo publicado en:http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=225033236011
Consultado: 25 de Junio 2018.

[2] Uranga, W. (2007) Soñar futuros para construir el presente. La


comunicación prospectiva estratégica para el desarrollo. Universidad
Catolica Boliviana. Bolivia. Artículo publicado:
http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=421839606003. Consultado: 24 de
Junio 2018.

[3] Mera, C. (2014) Pensamiento prospectivo: visión sistémica de la


construcción del futuro. Universidad a Distancia Abierta. Colombia.
Artículo publicado: Redalyc. Consultado: 25 de Junio 2018.

También podría gustarte