Está en la página 1de 3

Ideología costumbrista: sentimiento nacionalista y el afán por mostrar la

realidad
El costumbrismo en España no es algo que surgió por primera vez en el siglo XIX, sino

que éste se encuentra durante el siglo XVIII como en algunos sainetes de Ramón de la Cruz,

incluso hay autores que encuentran un costumbrismo en el siglo XVII. No obstante, el

costumbrismo que surge en el segundo tercio de siglo XIX está mejor definido, pues ahora éste

está cargado con una notable ideología nacionalista y un interés por mostrar la realidad.

Para entender al costumbrismo decimonónico primero tenemos que entender el contexto

histórico en que se halla España: A inicios de la década de los cuarenta se incrementan el

contacto que tiene ésta con el resto de Europa (principalmente Francia). Esto provocara un

cambio el modo de vivir de los españoles en órdenes como estilo de vida, modas y costumbres,

lo cual se halla en relación con el surgimiento de una nueva clase media ciudadana (Salvador

García, 1971). De esta forma tendremos que:

Las modas ahora son extranjeras, los figurines vienen y vendrán de

parís, lo elegantes adoptan el pantalón de trabillas y las damas, ante la

indignación de los costumbristas, abandonan la airosa mantilla —la

cual es prenda característica de la dama española— que substituyen por

un sombrerito francés. (Salvador García, 1971, p. 133)

Estos hechos llevan a los costumbristas a tener una sensación de que se está perdiendo lo

nacional en su país, así tendremos a Modesto Lafuente que enumera:

“leyes francesas hechas por legisladores españoles, comedias francesas

ejecutadas por cómicos españoles, modas francesas y modistas ídem,

pan español amasado por panaderos franceses, botas y sobreros

franceses en pies y cabezas españolas, ropa usada en cuerpos españoles

y refundida por ropavejeros franceses, yeguas y coches franceses

conduciendo humanidades españolas, y hasta dientes y muelas


españolas mondadas con palillos franceses”. (Salvador García, 1971, p.

133)

Esta gran influencia extranjera, que se da principalmente por los franceses, logra hacer

surgir en los españoles un sentimiento nacionalista hacia las costumbres y estilos de vida que

hay en España con el afán de recuperar una identidad que se estaba perdiendo a su parecer.

No sólo esto detonó el sentimiento nacionalista en los españoles, sino que también lo hizo

el hecho de cómo éstos eran vistos por extranjeros, de esta forma señala Romeo Tobar (1994)

cómo Mesonero Romanos en su prólogo Panorama dice:

El medio más prudente de combatir tan ridículas caricaturas [las

foráneas impresiones de viaje] prodigadas hace dos siglos contra

nosotros, destruyendo la impresión funesta que causan en la crédula

multitud, es la de presentar sencillamente la verdad, oponer a aquellos

cuadros falaces e interesados el colorido propio del país, las acciones y

hechos comunes a todas las clases, la naturaleza, en fin, revestida de

formas españolas. (1835)

Con lo anterior se puede notar que existe una conciencia de la realidad nacional, pero

como se dijo anteriormente, durante esta época surge la aparición una nueva clase media, la

cual es suma importancia para el costumbrista, ya que para Mesonero en ella se asocia el

concepto de nación, pues es la más variada y la que construye los pueblos (Iris Zavala, 1982).

Ahora con otra arista, Larra, “propone que lo importante es ser observador imparcial al

margen de las clases sociales.” (Iris Zavala, 1982). En los cuales vierte cierta sátira.

Tanto Mesonero como Larra presentan la importancia mostrar la realidad, sin embargo,

este será desde dos puntos de vista diferentes: el primero, “denota a las claras su deseo de

presentar la armonía entre las clases sociales y la unidad social ‘Espíritu de asociación’”, y el
segundo, “por el contrario, con óptica más crítica, da testimonio de las divisiones sociales en

penetrantes bocetos, así como su fe en el hombre del pueblo ‘los barateros’” (Iris Zavala, 1982).

Como se puede apreciar el costumbrismo es un movimiento reaccionario en contra de la

cultura extranjera que comienza a penetrar en España, logrando así una revalorización de las

costumbres y estilos de vida que hay en España, y en consecuencia surgirá un deseo de mostrar

la realidad de cómo son las costumbres y la forma de vivir de los españoles. Es de esta forma

que en la culminación de este movimiento artístico surge la recopilación en dos volúmenes de

Los españoles pintados por sí mismos que muestra claramente las festividades y el tipo de

carácter de la gente del pueblo español.

Bibliografía:

 Garciá , S. (1971). Las ideas literarias en España entre 1840 y 1850. Berkeley:

University of California Press.

 Romero Tobar, L. (1994). Panorama crítico del romanticismo español. Madrid,

Castalia.

 Zavala, M. (1982). Historia y critica de la literatura española V Romanticismo y

Realismo. Barcelona, Critica.

También podría gustarte