Calle de Italia, 14 28943 Fuenlabrada Madrid ENSAYO EN LA PRIMERA MITAD DEL XX (Esquema) EL ENSAYO EN LA PRIMERA MITAD DEL SIGLO XX. 1. Definición: El ensayo es un texto teórico que recoge interpretaciones y sugerencias de carácter personal sobre un tema concreto. Se caracteriza por su voluntad de estilo, originalidad, estructura libre y la multiplicidad de los asuntos que puede abordar. 2. Orígenes: El ensayo nace en la antigüedad clásica con escritos como los Diálogos de Platón, las Meditaciones de Marco Aurelio o las Cartas a Lucilio de Séneca. Los escritos más semejantes a los actuales surgen los los Ensayos de Montaigne en Francia en el s. XVI y los de Francis Bacon en Inglaterra. En España destacan Fray Antonio de Guevara (Epístolas familiares, 1539), Quevedo, Baltasar Gracián y Saavedra Fajardo. Ya en el s. XIX la corriente se acrecienta con Larra, Jaime Balmes o Juan Donoso Cortés; el siglo finaliza con los escritos de Giner de los Ríos y Joaquín Costa. 3. El ensayo de la Generación del 98. Une a los ensayistas del 98 su preocupación por España, su radical regeneracionismo (voluntad de reformar el país) para luego pasar a la contemplación de Castilla como paradigma de lo hispánico. 3.1.- Ángel Ganivet: Considera que el atraso de España proviene de sus esfuerzos más allá de las fronteras, cuando debiera concentrarse en sus problemas internos. Ideárium español (1897). 3.2.- Miguel de Unamuno. Le preocupan dos temas principalmente: el problema de España y la angustia existencial. Su obra En torno al casticismo (1895) recoge su interés por el presente y el futuro de España. Considera que el recurso a las tradiciones y el acercamiento a Europa puede remediar los males del país. Hay que buscar el sentido de regeneración el la intrahistoria de los pueblos de España, que guardan las esencias tradicionales del país que pueden coadyuvar a la recuperación del país, ese espíritu combativo que tan bien supo recoger Cervantes en el personaje de don Quijote. Esta vuelta a los orígenes debe combinarse con la apertura a Europa. Vida de don Quijote y Sancho (1905) revela esa verdadera naturaleza que reside en los pueblos hispanos; completan esta visión del paisaje ibérico Por tierras de Portugal y España(1911) y Andanzas y visiones españolas (1922). Sus reflexiones y angustias religiosas y filosóficas se recogen principalmente en Del sentimiento trágico de la vida (1913), donde habla del conflicto entre fe y razón, cómo el deseo de inmortalidad humano choca con las leyes de la lógica. En La agonía del cristianismo (1931) plantea cómo la religión se nutre del conflicto, agonía significa lucha y así la religión abraza el desasosiego y la angustia. 3.3.- Ramiro de Maeztu. Evoluciona desde una etapa regeneracionista, Hacia otra España (1899), hasta una identificación de lo hispánico con el catolicismo en Defensa de la hispanidad (1934). Considera que la pereza y la desidia están en el origen del desastre nacional, junto con el egoísmo. 3.4.- Pío Baroja. Será en sus novelas donde verterá sus ideas políticas y estéticas. Su visión de España se aprecia en El árbol de la ciencia, o en César o nada, donde defiende la europeización del país sin renunciar a la esencia española. Ensayos o memorias son El tablado del Arlequín (1904), Nuevo tablado del Arlequín (1917) y Juventud, egolatría (1917), en ellos se define como liberal radical, individualista y anarquista, escéptico con la democracia considera que la razón está en los inteligentes, no en la mayoría. Sus ideas estéticas aparecen en Las horas solitarias.Notas de un aprendiz de psicólogo (1918). 3.5.- José Martínez Ruiz, <<Azorín>>. Su obra se compone de artículos sobre el paisaje de España, la crítica literaria y la reflexión política. Los pueblos (1905), La ruta de don Quijote (1905) o Castilla (1912) son obras que captan su idea del alma castellana en el paisaje y los pequeños detalles cotidianos. Es otro de los escritores que evoluciona desde el anarquismo inicial hacia una postura moderada en la madurez.
4.- El ensayo del Novecentismo.
Los novecentistas se agrupan en torno a la Institución Libre de Enseñanza, herederos del 98 y del regeneracionismo; son elitistas, poseen espíritu científico, formación universitaria, fe en el porvenir y vocación europeísta. 4.1.- José Ortega y Gasset. El más influyente de los filósofos españoles del s. XX. En el campo filosófico formula la doctrina raciovitalista y la razón vital: la razón es una función de la vida y esta no tiene sentido sin aquella. Sus ideas estéticas se manifiestan en La deshumanización del arte (1925), el arte debe desconectarse del mundo exterior, buscar solo el goce estético, ajeno a lo humano y lo sentimental; sus Ideas sobre la novela (1925) defienden que la novela ha de ser un género donde la forma prime sobre la trama y los personajes, un género intelectual y deshumanizado, que solo persiga el placer estético. En España invertebrada (1921) y La rebelión de las masas (1930) cree que las crisis española y europea son debidas a unas masas que obvian las directrices de las élites preparadas, los únicos grupos capaces de dirigir a los pueblos. Asuntos varios los trata en El espectador y el amor en Estudios sobre el amor(1940). 4.2.- Eugeni d’Ors. Considera la educación estética como punto de partida para una nueva actitud ante la vida. Concilia tradición y renovación, casticismo y europeidad en Las ideas y las formas (1928). Sus ideas artísticas aparecen en Tres horas en el museo del Prado. Itinerario estético (1922). Sus ideas filosóficas se basan en los tres niveles del hombre (inferior-subconsciente, superior- angélico e intermedio-conciencia), el destino procede del diálogo de la conciencia con los otros dos estados. 4.3.- Salvador de Madariaga y Manuel Azaña. Salvador de Madariaga escribe sobre los caracteres europeos (Ingleses, franceses, españoles. Ensayo de psicología colectiva comparada, 1929; Bosquejo de Europa, 1951), sobre historia de España (España. Ensayo de historia contemporánea, 1931), sobre crítica literaria ( Ensayos anglo-españoles, 1922, Guía del lector del Quijote, 1926) y biografías sobre la colonización española de América. Manuel Azaña practica la crítica literaria (El jardín de los frailes, 1927) y los ensayos políticos (Estudios de política francesa: política militar, 1918; El Idearium de Ganivet, 1921; La velada de Benicarló, 1937). 4.4.- Gregorio Marañón, Américo Castro y Claudio Sánchez Albornoz. Marañón, médico y humanista, cultiva la biografía de personajes históricos (Tiberio, Enrique IV de Castilla o El conde- duque de Olivares), así como los mitos literarios (Don Juan). Américo Castro (La realidad histórica de España, 1954) y Sánchez Albornoz (España, un enigma histórico, 1956) protagonizan una polémica sobre los orígenes y la esencia de la nación española. Deben recordarse también otros nombres como los de Ramón Menénez Pidal en el estudio de la España medieval y los orígenes de la lengua castellana; a Santiago Ramón y Cajal, premio Nobel de medicina; José Bergamín o Blas Infante.