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UNIVERSIDAD DE CALDAS

ISSN 0122-8455
Fundada en 1997
Periodicidad Anual COMITÉ TÉCNICO
No. 13, pp. 406
Año 11 Enero - Diciembre, 2006 Juan David Giraldo Márquez
Manizales - Colombia Coordinador Comité Técnico
Gerardo Quintero Castro
Jorge Ronderos Valderrama Corrección de estilo
Sociólogo, M.Sc. Claudia Marcela Gómez Vallejo
Universidad de Caldas Correctora de abstracts
Director Revista Alejandro Grisales Valencia
Diseño y Diagramación
COMITÉ EDITORIAL

Tulio Marulanda Mejía Rector


Médico, M.Sc. Universidad de Caldas
Universidad de Caldas Bernardo Rivera Sánchez
María Mercedes Molina H. Vicerrector Académico
Historiadora, Phd. Jorge Oswaldo Sánchez Buitrago
Universidad de Caldas Vicerrector de Investigaciones y Postgrados
Josep M. Fericgla González Gonzalo Taborda Ocampo
Antropólogo, Phd Vicerrectora Administrativa
Societat d’Etnopsicologia Aplicada i Studis Cognitius Gladys Estella Ceballos López
Ana Patricia Noguera de Echeverri Vicerrector de Proyección
Filosofa, Phd. Fernando Cantor Amador
Universidad Nacional de Colombia sede Manizales Decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales
Ricardo Alberto Castaño Zapata
COMITÉ CIENTÍFICO Director del Departamento de Antropología y Sociología
Pompeyo José Parada Sanabria
Constantino Manuel Torres
Arqueólogo, Phd.
Universidad Internacional de la Florida, USA.
Jonathan Ott
Químico y Etnobotánico Editado por:
Natural Products Company, Veracruz - México Universidad de Caldas
Jim A. Bauml Vicerrectoría de Investigaciones y Postgrados
Biologist, Phd.
Angeles Arboretum and Botanic Garden, USA.
Ana María Llamazares
Antropóloga, M.Sc.
Fundación desde America, Buenos Aires - Argentina
Manuel Villaescuza de los Heros
Psicólogo, M.Sc.
Societat d’Etnopsicologia Aplicada i Studis Cognitius
Joaquín Muñoz de Mendoza
Antropólogo, Phd.
Fundación Eduard Seler, San Luis Potosí - México
Jorge Echeverri González
Filósofo, M.Sc.
Universidad de Caldas – Nacional de Colombia sede
Manizales
Jorge Eduardo Duque Parra
Neurociencia y Comportamiento, Phd.
Universidad de Caldas
Luis Miguel Álvarez
Ingeniero Agrónomo, M.Sc.
Universidad de Caldas
Beatriz Acevedo Holguín
Gerencia y sistemas, Phd.
University of Hull, UK
Giorgio Samorini
Etnomicólogo
Director Revista Eleusis, Italia
Danilo Antón
Ilustración Portada
Geógrafo, Phd.
Consultor CREFAL, México. Diana Ocampo
Montevideo, Uruguay

La responsabilidad de lo expresado en cada artículo es exclusiva del autor


y no expresa ni compromete la posición de la revista.
El contenido de esta publicación puede reproducirse citando la fuente.
Publicación anual del Grupo de Investigación Cultura y Droga de la
Universidad de Caldas.
Está adscrita al Departamento de Antropología y Sociología de la
Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad de Caldas.

Presenta artículos científicos e información de actualidad sobre


investigación y desarrollo de conocimientos y experiencias referentes
a las fuentes y aplicaciones culturales de enteógenos y otras sustancias
psicoactivas. Acoge artículos de diversas disciplinas: sociales y humanas,
naturales, médicas, artísticas, filosóficas, botánicas. Igualmente,
conocimientos indígenas tradicionales. Se divulga por medio de canje y
actividades académicas o de divulgación de la Universidad.

cult.drog. Manizales Colombia Año 11 N° 13 pp. 406 enero - diciembre 2006 ISSN 0122-8455
CONTENIDO

EDITORIAL 9
Jorge Ronderos Valderrama.........................................................................................

ARTÍCULOS CONFERENCISTAS DEL SIMPOSIO COLOMBIANO INTERNACIONAL


CULTURA Y DROGA UNA MIRADA HACIA ADENTRO

Una aproximación filogenética para la comprensión del uso de drogas por el


Homo sapiens sapiens
Jorge Eduardo Duque Parra......................................................................................... 21

Variantes genéticas y metabolismo de los opiáceos, los opioides y la cocaína


José Henry Osorio....................................................................................................... 39

Yagé: ¿un adaptógeno biológico específico?


José Carlos Bouso Saiz................................................................................................ 55

Drogas y economía una reflexión para Colombia


Edgard David Serrano Moya....................................................................................... 75

Control social y política criminal en drogas


José M. Borrero Navia................................................................................................. 93

El concepto “drogas”: desinformación en sociedades consumidoras periféricas


Danilo Antón................................................................................................................ 121

Shamans, peyote, and coca sacraments: a path that maintains indigenous


traditions and identity in a time of globalization
Stacy B. Schaefer.......................................................................................................... 145

OTROS ARTÍCULOS DE INVESTIGACIÓN Y PRODUCCIÓN INTELECTUAL

Evaluación del extracto del trompeto (Bocconia frutescens L.) En el manejo de


problemas fitosanitarios de interés agrícola
Javier Arcila Castro, Norbey Valencia Pascuas, María Elena Bernal Vera, Elmer
Castaño ....................................................................................................................... 175

cult.drog. Manizales Colombia Año 11 N° 13 pp. 406 enero - diciembre 2006 ISSN 0122-8455
Descripción fitoquímica del jazmín de noche (Cestrum nocturnum L.)
Yamileth Cuartas Betancur, Elmer Castaño Ramírez.................................................. 211

Aztralia: virtudes del misterio en el cáliz de colores (Brugmansia sp.)


William Torres.............................................................................................................. 227

El borrachero, pasado y presente en Colombia: mitos, creencias, prácticas y


usos en sociedades indígenas, rurales y urbanas
Jorge Ronderos Valderrama........................................................................................251

Drogas psicoactivas reportadas como consumidas en el Eje Cafetero y léxico


asociado a ellas, en un estudio de percepciones
William Mejía Ochoa................................................................................................... 273

Droga drogue  (narcótico)


Elmer Castaño Ramírez, María Elena Bernal Vera..................................................... 325

Bibliography - brugmansia
Jim A. Bauml............................................................................................................ 339

RESEÑAS DE ALGUNAS PONENCIAS DEL SIMPOSIO COLOMBIANO INTERNACIONAL


CULTURA Y DROGA UNA MIRADA HACIA ADENTRO

La madurez de los pueblos y la función de ciertas drogas psicoactivas


Josep M. Fericgla..........................................................................................................353

Sin droga, no hay cultura


Jonathan Ott.................................................................................................................361

Factores agregados de la droga


Jaime Escobar Herrera................................................................................................ 363

Efectos a largo plazo del consumo crónico de yagé sobre personalidad, la


psicopatología y las funciones neuropsicológicas
José C. Bouso............................................................................................................... 367

6
Uso de ayahuasca en psicoterapia. Un estudio cualitativo en Londres
Inglaterra
Manuel Villaescusa...................................................................................................... 369

Shamans and plant sacraments: maintaining indigenous traditions and identity


in a globalized world
Stacy B. Schaefer.......................................................................................................... 371

Biocultura y construccion del concepto de realidad


Joaquín A. Muñoz Mendoza......................................................................................... 373

EXPERIENCIAS ETNOMEDICINALES Y TERAPÉUTICAS EN EL SIMPOSIO


COLOMBIANO INTERNACIONAL CULTURA Y DROGA UNA MIRADA HACIA
ADENTRO

Uso cultural de la coca


Sierra Nevada de Santa Marta
María Nohemy Londoño............................................................................................... 379

Asoparupa (asociación de parteras unidas del pacífico). Buenaventura - Valle


del Cauca..................................................................................................................... 383

Chakra vidya: escuela de formación y desarrollo humano. Pereira–


Risaralda..................................................................................................................... 385

Yagé terapéutico. Bogotá - Cundinamarca............................................................... 389

Orientaciones para los autores.................................................................................. 393

7
EDITORIAL

LAS COSAS NO SON COMO SON…1

...Las cosas no son como son, y de hecho, incluso cuando son como son no lo son... sean lo
que sean las cosas, incluso cuando son y no son lo que son, son tu responsabilidad.
Humberto Maturana
Biólogo, Chileno 2

Quiero iniciar estas palabras de bienvenida a los participantes y asistentes a este


Simposio, recordando a la educadora SIMA NISIS quien se plantea algunas
preguntas que cómo educadores debiéramos hacernos, acerca de nuestro estar
en el mundo y nuestro hacer y en este interrogante, colocar temas sobre las
emociones, el lenguaje, el amor y la vida. ¡Cuánta relación existe entre los
anteriores conceptos y los mundos de las drogas en la historia humana, tanto
los sagrados como los profanos, los constructivos como los destructivos, los
inteligentes como los ignorantes…!

También recordar los principios sobre la ética que nos comparte el lósofo
Fernando Savater:

Coraje para vivir, tolerancia para convivir y prudencia para sobrevivir.

Llegamos a este momento en nuestra Universidad, después de un camino que


supera la década, de aprendizaje y conocimiento sobre el tema de las drogas
1 Palabras de Bienvenida al Simposio Colombiano e Internacional Cultura y Droga: Una Mirada hacia adentro,
leídas durante el acto de instalación por el coordinado académico de la Maestría y del Simposio, el día 4 de Mayo de
2006, en el Teatro 8 de Junio de la Universidad de Caldas. El título se toma del epígrafe.
2 Maturana H. El Sentido de lo Humano. Dolmen Editores. Bogotá. Pág. 155. Título tomado de una carta y un texto
didáctico en el cual se alude a la teoría de Maturana acerca de que no hay diferencias entre percepción e ilusión
colocándose entre paréntesis la teoría de la objetividad, en el marco de una supuesta historia familiar en la vida
de Maturana en torno a un suceso que se relaciona con un encuentro entre la madre de Maturana y Auer en Chile.
“Conversación acerca de Carl Auer: Geist or Ghost”, 1990, Gunthard Weber und Fritz B. Simon, eds. Págs. 193-194,
(Extracto).

9
tan complejo y profundo, polémico infortunadamente confuso en nuestra
sociedad colombiana y el mundo contemporáneo, lo que ha generado temor
e incertidumbre, confusión y de paso complejas situaciones de sufrimiento
humano.

El sólo término “droga” ha sido deformado y hoy tiene diferentes signicados


en el lenguaje popular, por efecto del prohibicionismo dominante. Tenemos
como ambición y es que este Simposio que vincula a cientícos de alta categoría
mundial, a investigadores y académicos de nuestras universidades que venimos
trabajando en el tema por varios lustros y a médicos y médicas indígenas y
afrocolombianas contribuya a correr límites a la ignorancia.

Recordemos en este abrebocas, la denición original del término droga en el


primer diccionario de la lengua Castellana, conocido como de Autoridades
del siglo XVI.

Droga. C.f. Cualquier género de especies como inciensos, goma, benjuí y otras
varias especies aromáticas, simples o compuestas. También se comprenden
en esta palabra otros varios géneros de cosas como maná, xalapa, ruibarbo,
bermellón, cardenilla, añil, X.C. LAT. Aromata, Arum. Vel pharmacium,
i. Recop. Lib 3. Tit 16. 1.2 “mandamos que se visiten las drogas que los
mercaderes venden por junto”. Pellic. Argen. Part.2 f. 94. Hallarás quién no
tema comer las más amargas drogas para conservar la vida.

Así especies naturales diversas, entre ellas las plantas medicinales y las
“mágicas” de la Botánica Oculta de aquella época, como las denominaba
el Divino Paracelso, eran denominadas drogas. Hoy el léxico “la droga” ha
desvirtuado el término original, al enmarcar exclusivamente a drogas que
se han prohibido y se siguen prohibiendo, con base en argumentaciones
e intereses contradictorios de diversa índole y cuya prohibición y guerra
declarada, en lugar de resolver los problemas de salud que causan y en que se
sustenta el prohibicionismo, ha creado un enorme mercado económico, por
el cual compiten maas altamente organizadas, para llegar a los millones de

10
consumidores que compulsivamente las demandan. El marco del contexto
histórico político y económico, moral y social, cultural, hoy también ambiental,
es complejo y problemático. El mercado, especialmente de la cocaína, la heroína
y las drogas sintéticas asociadas a diversos consumos compulsivos y sin control
(abusivos la gran mayoría y en combinación con drogas lícitas, especialmente
alcohol y cigarrillos en contextos y ambientes culturales y subculturales
diversos propios del modo de vida urbano y supuestamente moderno) y muy
restringidos consumos electivos y terapéuticos en algunos casos, constituye
una estructura económica y nanciera considerada necesaria en la actualidad.
El gran negocio que esta economía ilícita representa, ha creado los mayores
factores de corrupción conocidos en las sociedades modernas, asociados al
control del dinero en poder de estructuras de poder maosas internacionales,
que han desestructurado y desestabilizado los procesos de la construcción
de la democracia moderna, amenazan las soberanías nacionales mediante el
nanciamiento de complejos conictos político-militares, el avance y práctica
de los derechos humanos y de manera especial las condiciones de libertad y
seguridad para la vida tranquila y creativa en sociedad.

Para nuestro grupo de investigación, Cultura y Droga, este término sigue


siendo el léxico genérico más adecuado que incluye cualquier tipo de sustancia
naturales, semisintética o sintética que han usado históricamente las sociedades
humanas para resolver problemas médicos y en general de la salud, pero
igualmente susceptibles de causar daño en contextos delictivos.

Pero independiente de esto en sí mismas las drogas ofrecen un alto potencial


para el conocimiento cientíco de la siología y neurosiología humana, el
comportamiento individual y colectivo y las pautas culturales que las rigen. Es
un escenario y campo de conocimiento propicio para el trabajo multidisciplinario
y la comprensión de las realidades humanas y sociales.

Nuestro enfoque de aproximación ha sido el de cultura y desde las culturas


pero fundamentado en las ciencias tanto humanas y sociales como las naturales,
reconociendo y valorando el conocimiento ancestral indígena y popular e ir

11
construyendo poco a poco un conocimiento interdisciplinario. La maestría que
presentamos en el marco de este Simposio será un espacio académico propicio
para construir sociedad desde la Universidad. Y como dice el lema del himno
de la Universidad de Caldas “ irradiando la luz del conocimiento”.

Hemos recorrido ya trece años en este proceso. Este Simposio –su organización
es una tarea más, eso sí de alta exigencia– nos ha permitido en buena parte
recoger cosecha para sembrar las nuevas semillas para el futuro, que esperamos
sigan germinando en los cultivos de nuestro grupo y taller germinal y la revista
Cultura y Droga de la Universidad de Caldas. Pero de manera especial eleven
su calidad y excelencia cientíca con la propuesta académica e institucional
de la Maestría Culturas y Droga para América Latina, aprobada por el Consejo
Superior Universitario mediante Acuerdo 11, de agosto del 2004. Ya recibimos,
en septiembre de 2005 la visita de pares académicos para obtener el registro
calicado y cuyo concepto preliminar presentado ante el Consejo Directivo
de la Universidad, lo evaluamos como positivo en su momento. Tenemos
previsto iniciar una vez se cumplan los trámites académicos y administrativos
requeridos para la primera cohorte.

En este contexto fue que desde el año anterior pensamos esta idea de realizar
un Simposio y al nal lo hemos concretado.

¿Por qué un Simposio y no un Seminario o Taller? Nos acogemos estrictamente


a la denición actual de este término:

simposio (del gr. «sympósion», festín)


 Reunión menos importante y numerosa que un *congreso en que
se tratan por personas especializadas diversos temas sobre una
determinada cuestión.
 Reunión de escritos sobre cierta cuestión, de diversos autores.
Originariamente se refería el término a:
1 m. *Banquete o reunión que celebraban los griegos en que se

12
bebía, había generalmente acompañamiento de música y canto
y se conversaba sobre alguna materia. (Puede ilustrar sobre su
signicado el diálogo de Platón titulado «El Banquete»).

Este evento es resultado de haber concretado y gracias a la acumulación de


energía humana de varios años, generada por cientos de compañeros que en
este proceso nos han acompañado. A muchos debemos reconocimiento por su
esfuerzo. Unos pocos hemos estado participando de manera permanente en
el proceso.

Hoy quiero agradecer de manera especial a quienes han venido a concretar y


hacer realidad este evento: a los conferencistas extranjeros y colombianos, a
los expertos que nos compartirán experiencias relacionadas con este tema y a
todos quienes están presentes para compartir sus conocimientos cientícos y
reexiones humanas y críticas.

De manera especial quiero resaltar la compañía y esfuerzo del equipo


organizador que conformamos para este evento. Ha sido una experiencia
de trabajo entre académicos y administrativos, que nos ha permitido ganar
humana y profesionalmente. Ha sido para todo el equipo, graticante. En
especial resaltar el apoyo de la Rectoría y de las Vicerrectorías de Proyección,
Investigaciones y Postgrados, y Administrativa. Fundamental ha sido el apoyo
del Consejo de Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales. A todos muchas
gracias. Pedir disculpas por los inconvenientes que se han presentado, en
especial con algunos de nuestros invitados.

Quiero destacar de manera especial el apoyo recibido de la Gobernación de


Caldas, del despacho del Sr. Gobernador y la Secretaría de Gobierno para
este evento. A la Industria Licorera de Caldas, a la Universidad de Manizales,
al ICETEX, a la Societat de Etnopsicología Aplicada i Studis Cognitius
de Barcelona, España, y a la Fundación Eduard Seler de San Luis Potosí,
México.

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Espero que este evento universitario contribuya en nuestro medio local y
regional a una educación y formación sobre el tema que abordamos, con una
exigente fundamentación cientíca y con aproximaciones respetuosas, frente
a los conocimientos prácticos ancestrales y populares sobre las drogas y sus
implicaciones en la vida humana. Nos lo garantiza la presencia de desatacados
cientícos extranjeros de España, México, Uruguay y Estados Unidos y
colombianos, entre ellos algunos de nuestra región. Igualmente contribuirá
este Simposio que denominamos Una mirada hacia adentro de las drogas,
a conocer directamente de las tradiciones del uso de plantas medicinales y
sagradas de dos pueblos indígenas: el yagé de los camëntsas del Alto Putumayo
y el ayo de los Koguis de la Sierra Nevada. Igualmente las que realizan las
comunidades afrodescendientes de la Costa Pacíca con la partería tradicional,
que integra prácticas culturales de origen incierto mediante sobos, baños, cantos
y arrullos y preparados de pomadas y bebidas con plantas medicinales como:
aniz, zaragoza, cidrón, borrachero, guaco y bebidas con base en el biche,
como el Pipilongo.

Este espacio académico y universitario será un medio de conocimiento


entre personas de diversos países y culturas, de diferente condición social,
de diferentes disciplinas, ocios y profesiones, un espacio como el que se
requiere para las sociedades humanas de hoy. Un espacio para la construcción
de espacios de convivencia con base en el conocimiento y el respeto a las
diferencias culturales de comunidades y sociedades para construir capacidades
que nos brinden condiciones de creatividad y desarrollo del ingenio para
la innovación. Construir espacios libres, respetuosos e igualitarios para la
expresión y diferenciados por la especialidad y la experiencia. Todo ello en lo
que el citado cientíco al inicio de estas palabras, reseña como lo fundamental
para la educación:

Convivir para conocer y tener capacidad de aceptacion y condiciones de creatividad.

Y agrega:

Las personas no somos guales. Lo que usted oye de lo que yo digo tiene que ver con usted

14
y no conmigo. Lo que corrientemente se dice, sin embargo, es que uno conoce captando lo
externo. Pero en el sentido estricto, eso no puede pasar dado que somos sistemas determinados
estructuralmente. El mundo en que vivimos es un mundo de distinta clase del que uno
corrientemente piensa. No es un mundo de objetos independientemente de nosotros o de lo
que hacemos, no es un mundo de cosas externas que uno capta en el acto de observar, sino
que es un mundo que surge de la dinámica de nuestro operar como seres humanos (Entrevista
1 de Paula Escobar. Op. Cit. Pág. 31)

Muchas Gracias.

Universidad de Caldas, Mayo 4 de 2006


JORGE RONDEROS VALDERRAMA
PROFESOR TITULAR UNIVERSIDAD DE CALDAS

15
ARTÍCULOS CONFERENCISTAS DEL SIMPOSIO
COLOMBIANO INTERNACIONAL CULTURA Y DROGA
UNA MIRADA HACIA ADENTRO
UNA APROXIMACIÓN FILOGENÉTICA PARA LA COMPRENSIÓN DEL USO
DE DROGAS POR EL HOMO SAPIENS SAPIENS
JORGE EDUARDO DUQUE PARRA
UNA APROXIMACIÓN FILOGENÉTICA PARA LA COMPRENSIÓN DEL
USO DE DROGAS POR EL HOMO SAPIENS SAPIENS

JORGE EDUARDO DUQUE PARRA1*


B. SC, M. SC, PH. D
PROFESOR DE ANATOMÍA Y NEUROANATOMÍA
DEPARTAMENTO DE CIENCIAS BÁSICAS. PROGRAMA DE MEDICINA. UNIVERSIDAD DE CALDAS.
jduqueparra@yahoo.com.mx

Recibido: 14 de agosto de 2006


Aceptado: 5 de septiembre de 2006

RESUMEN

El presente trabajo eslabona varios elementos neurobiológicos tomando la


logenia como elemento conector de la evolución, para proponer a manera
de aproximación, que el Homo sapiens sapiens posee una serie de elementos
naturales encefálicos que pueden interactuar de forma natural con drogas y
modicar sus estados mentales. Esto corresponde a una constante logenética
evolutiva que predispone la actividad neurobiológica del ser humano y otras
especies por inducción de drogas.

Palabras clave: Filogenia, drogas, evolución.

ABSTRACT

A PHYLOGENETIC APPROXIMATION FOR THE


UNDERSTANDING OF THE DRUG USAGE BY THE HOMO
SAPIENS SAPIENS

*
Profesor de Fisiología. Departamento de Ciencias Básicas Biológicas. Universidad
Autónoma de Manizales.

23
Jorge Eduardo Duque Parra

The present work links several neurobiological elements, taking phylogenetics


as the connecting element of evolution, to propose an approximation towards
the fact that Homo sapiens sapiens possesses a series of natural encephalic
traits that can naturally interact with drugs and modify the mental states. This
corresponds to a phylogenetic evolutionary constant of the human being and
other species due to the intake of drugs.

Key words: Phylogenetics, drugs, evolution.

JUSTIFICACIÓN

Es muy difícil concebir en la contemporaneidad, la tradición cultural aislada


de la ciencia y por consiguiente del conocimiento que esta genera, ya que la
ciencia en dúo armónico con la cultura como elemento de las humanidades,
ocupa un sitio muy notorio del pensamiento abstracto y de la vida cotidiana
del Homo sapien sapiens. Por lo tanto, este trabajo pretende contribuir a
fundamentar desde elementos de la neurociencia, la cultura y tradición ligada
con el uso de drogas.

ANTECEDENTES

Uno de los factores principales de la activación del estado psicológico de una


persona, es su grado de excitación nerviosa (Sánchez, 2005). Dicho estado de
activación psicológica se puede modicar por el uso de drogas, de las que se
sabe que el estado adictivo, inicia con profundos cambios emocionales, así,
las “revelaciones” alcanzadas en las experiencias con yagé y otros enteógenos
suelen ser “representaciones” mentales cargadas de imágenes en el ser
humano (Marulanda y Rico, 2003). Los psicofármacos como el MDMA (3-4-
metilen-dioxi-metanfetamina) y similares, afectan al consumidor ya que éste
se siente placentero, en paz consigo mismo y con el mundo, y de pronto, le
parecen simpáticos y amigables los otros participantes que momentos antes le
parecían indiferentes (Castelnuovo, 2006). Para que ello suceda, se requiere

24
Una aproximación logenética para la comprensión del uso de drogas por el Homo sapiens sapiens

necesariamente de una actividad neuro-glial que en múltiples textos y artículos


de neurociencia se asume impropiamente por actividad neuronal únicamente.
Esta actividad neuro-glial está presente en al menos los mamíferos, incluido
el Homo sapiens sapiens.

Consecuentemente, el grado de activación del estado psicológico es


necesariamente dependiente del sistema nervioso e involucra dos sistemas,
uno inespecíco en el sistema nervioso central: la formación reticular que en la
mayoría de sus redes de conexión utiliza el neurotransmisor acetilcolina; otro
sistema más especíco, el sistema límbico en donde se adquiere la tonalidad
afectiva luego del procesamiento de la información sensorial por la corteza
cerebral (Mora, 2005). Este sistema comprende un conjunto complejo de
estructuras neuro-gliales situadas en las regiones medio-basales del cerebro
(Guyton y Hall, 2001) y utiliza entre otros neurotransmisores la dopamina. Este
neurotransmisor, se hace susceptible de ser inuido por la nicotina, la cual, en
dosis bajas estimula las neuronas (Sánchez, 2005) y puede ser asumida como
droga, consumida por millones de personas de manera habitual en el mundo
entero.

La nicotina es un alcaloide natural derivado de la hoja del Nicotina tabacum


(Tabaco), su principal compuesto adictivo es un potente modulador de la
actividad del sistema nervioso central y uno de los pocos agonistas colinérgicos
que atraviesan la barrera hematoencefálica (Vásquez, 2004) que afecta la
inervación colinérgica, la cual es amplia e incluye una gran diversidad de
núcleos como el putamen, caudado, pálido y subtalámico, además, afecta
la corteza cerebral. Las neuronas colinérgicas proporcionan un 30% de la
acetilcolina en ratas y en humanos, el núcleo basal de Meynert es altamente
colinérgico, aunque lo es más el hipocampo y la corteza entorrinal (Artigas,
1998) necesarias para procesamientos cerebrales asociados con memoria
anterograda y funciones mentales “superiores”.

La dispar concentración de receptores nicotínicos en la corteza límbica y sus


diferentes niveles de sensibilidad a la nicotina, conlleva a que esta sustancia

25
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 21 - 38
Jorge Eduardo Duque Parra

ejerza efectos distintos en el sistema limbico y en la corteza cerebral (Sánchez,


2005), pues la nicotina incrementa el flujo de iones y la liberación de
neurotransmisores, aumenta la actividad de diversos sistemas neuro-gliales y
evoca una variedad de estados conductuales. Así que los efectos importantes de
la nicotina sobre el cerebro, la médula espinal y el sistema nervioso autónomo,
se median por receptores colinérgicos nicotínicos neuronales (Vásquez, 2004),
identicados en el ser humano.

Además de la nicotina, otras sustancias como los canabinoides inuencian la


actividad psicológica que trasciende en la expresión cultural. Hay compuestos de
origen vegetal como el 9-THC, 8-THC y canabidiol, y compuestos de origen
endógeno en organismos animales, como la anandamida y el 2-araquidonil-
glicerol. Todos ellos con acción sobre los receptores a canabinoides (Uxmal,
2005). Uno de los principales canabinoides, el 9-tetrahidrocannabinol
(9-THC), por sus propiedades hidrofóbicas y alta solubilidad en lípidos
de la membrana celular, actúa sobre endocanabinoides que se producen
principalmente en el hipocampo, el tálamo, el cuerpo estriado, la corteza
cerebral, el puente, el cerebelo y la médula espinal (Uxmal, 2005), modicando
la conducta de base funcionalmente correspondiente respectivamente con la ya
citada memoria anterograda, las sensaciones y conciencia, la motricidad, los
procesos cognitivos, la audición, el equilibrio y los actos reejos.

De los receptores para los canabinoides, se han descrito los CB1 y CB2,
acoplados a proteínas G, las cuales activan mecanismo intracelulares que
llevan a cascadas metabólicas en las células, modicando sus condiciones
intracelulares, reejadas en cambios conductuales si se trata de las neuronas y
las glias en el encéfalo. Los CB1 son los más abundantes en el cerebro, hecho
que indica un papel funcional altamente relevante en una gran diversidad de
circuitos y sistemas neuronales (Di Marzo, 2005).

Un poco ampliado el mecanismo de acción de los receptores canabinoides es


como sigue: la unión de los canabinoides a sus receptores desencadena una
cascada de segundos mensajeros intracelulares, activando inicialmente una

26
Una aproximación logenética para la comprensión del uso de drogas por el Homo sapiens sapiens

proteína G que modula la actividad de la adenilato ciclasa, la cual, a su vez,


regula los niveles de adenosín monofosfato cíclico (AMPc), que a su vez modula
la actividad de la proteína cinasa A (PKA) (Howlett, 2002), la que nalmente
activa cinasas y lleva a la fosforilación de diversas proteínas, incluyendo
canales iónicos, proteínas de vesículas sinápticas, proteínas que regulan la
transcripción genética y enzimas (Uxmal, 2005). Sin estas modicaciones, las
neuronas postsinápticas no generarían nuevos potenciales de acción o impulsos
nerviosos requeridos para la modicación conductual del ser humano.

Los canabinoides endógenos no son exclusivos del cerebro de los vertebrados


superiores, pues algunas plantas producen estas substancias, afectando aspectos
vegetativos como el apetito que algunas personas tienen por el chocolate
y que puede deberse a que el cacao contiene pequeñas concentraciones de
anandamida y 2-araquidonil-glicina, que también están presentes en muy bajas
concentraciones en la leche materna (Uxmal, 2005). Por consiguiente, deben
actuar sobre los receptores del encéfalo de sus hijos lactantes afectando de
alguna manera su conducta.

En el adulto, el uso de la Cannabis sativa afecta la condición psicológica,


mediando su efecto por el 9 tetrahidrocanabinol THC (Self, 1999) y
produciendo efectos de dependencia a la droga, pues su interrupción en el
consumo después de cierto tiempo, genera síndrome de abstinencia agudo, ya
que los canabinoides son lipofílicos y se almacenan en el tejido graso (Navarro,
1999) de la persona. Nuestro encéfalo posee receptores para los canabinoides.
Estos ligandos moleculares endógenos del encéfalo, son la anandamida y
el 2-araquidoil-glicerol (Navarro, 1999). Los receptores canabinoides CB1
están ampliamente distribuidos en el cerebro como en el núcleo estriado,
también es abundante en el complejo amigdaloide (Herkenham et al., 1991)
del lóbulo temporal y su localización es variada en regiones relacionadas con
respuestas emocionales (Kandel y col., 1997). La forma de acción sobre las
células nerviosas, es activando en ellas, un receptor asociado con la nombrada
proteína G. Esto no sucede únicamente en el ser humano, pues la anandamida
se ha identicado en el cerebro de ratas (Self, 1999) y conductualmente

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cult.drog. No. 13, 2006, págs. 21 - 38
Jorge Eduardo Duque Parra

produce en los primeros ansiedad, aspecto que parece correlacionarse muy


estrechamente con otros mamíferos, pues se ha sugerido por diversos estudios,
que la administración sistémica de canabinoides también produce ansiedad en
roedores (Felder and Galss, 1998).

Otra forma de acción sobre la conducta por acción sobre el encéfalo, la ejerce
la cocaína la cual genera euforia bloqueando los receptores de neuronas que
normalmente absorben exceso de dopamina, lo que lleva a que más dopamina
permanezca libre para excitar las regiones del encéfalo afectando el estado de
ánimo. Se sabe que después de una dosis de cocaína no hay casi dopamina
bloqueada, estando toda libre para actuar sobre el tejido nervioso. La cocaína
por lo tanto, aumenta la dopamina, bloqueando el mecanismo para que el
encéfalo elimine dicho exceso y también actúa bloqueando la recuperación
de la noradrenalina y la serotonina (Carter, 1998).

Finalmente se anota que el encéfalo puede ser inuenciado también por el


uso del alcohol modicando obviamente la conducta. Ha sido utilizado por la
sociedad desde hace largo tiempo y en terapéutica se intentó su uso al menos
por ETA Hoffmann quién recurrió a esta sustancia para presumiblemente
estimular sus facultades intelectuales, excitar sus quimeras y ver a través
de este microscopio mágico todas las cosas que hasta entonces le habían
permanecido ocultas (Wittkop-Mènardeau, 1968). Como su consumo produce
subidas en la dopamina (Carter, 1998), esta alteración de la producción de
este neurotransmisor, afecta la actividad neuro-glial y lleva obviamente a
modicaciones conductuales.

En general, las drogas que causan adicción provocan cambios en los receptores
y alteran los niveles de varios neurotransmisores como la dopamina, serotonina,
endornas y noradrenalina. Otros ejemplos son el éxtasis que provoca un notable
vaciado de la reserva de serotonina encefálica (Castelnuovo, 2006), afectando
por consiguiente los receptores de la serotonina que se encuentran en diversas
partes del encéfalo, como el caso del receptor 5 HT3 que está presente en alta
densidad en el área postrema, región relacionada con el control del vómito;

28
Una aproximación logenética para la comprensión del uso de drogas por el Homo sapiens sapiens

también este receptor está presente en alta densidad en el hipocampo (Artigas,


1998), por ello necesariamente el éxtasis afecta la actividad rememorativa.

El LSD y el peyote también afectan la serotonina, estimulando la producción,


generando euforia y afecto actuando sobre la corteza prefrontal en especial,
provocando respuestas químicas asociadas con la emoción, dominios
biorreguladores y sociales (Damasio, 2004), pues la serotonina interviene en
la comunicación entre áreas cerebrales como las citadas, que condicionan el
equilibrio emocional de la mente. La intoxicación con estas sustancias lleva a
secuelas habituales relacionadas con la alteración de la memoria. La NDMA
por ejemplo, lleva al consumidor a un mundo en el que todos se sienten abiertos
a los demás, este efecto psicotrópico se produce, por una intensa inundación
de serotonina que abastece entre otros los centros emocionales del sistema
límbico (Castelnuovo, 2006).

DROGAS Y ANIMALES NO HUMANOS

En el libro “Animales que se drogan” de Giorgio Samorini citado por


Castaño Ramírez, se anota que al menos nueve especies de animales se
drogan, además de que el fenómeno droga es un fenómeno natural, aunque
desconocido políticamente (Castaño, 2003). Más aún, se desconocen los
fundamentos etológicos y usualmente se piensa que los animales carecen de
proceso cerebrales, grados de racionalidad y conductas de pánico, como las
que presentan las crías de animales abandonadas por sus madres, pues estas
protestan de inmediato y son presas de pánico. ¿Qué esperar entonces del
concepto evolutivo asociado con sustancias psico-activas? Se sabe que en los
animales, los momentos en que estos comprenden de alguna forma que sus
esperanzas no se verán cumplidas por el abandono, sus neuronas mesencefálicas
del área tegmental ventral reducen la liberación de dopamina, llevándola a
estado desánimo (Fisher, 2005).

Las drogas por lo tanto, deben afectar también la actividad cerebral que regula
la conducta animal, ya que al menos desde las pruebas conductuales como la de

29
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 21 - 38
Jorge Eduardo Duque Parra

la trampa de los falsos contornos (como en el caso del triángulo de Kanizsa),


pues muchas especies como las abejas, los gatos, los chimpancés, los papiones,
aves, caballos y los humanos entre otros, caemos en dicha trampa. Unos de
estos falsos contornos, son los que se generan al observar dicho triángulo. En
esta interpretación encefálica, hay neuronas de las áreas visuales secundarias
del cortex cerebral de monos que responden siempre con más intensidad cada
vez que contemplan contornos verdaderos como falsos. En las aves, más del
90% de las neuronas de la protuberancia visual correspondiente con las áreas
visuales 1 y 2 de los seres humanos, también lo hacen. Quizás se trate de una
herramienta de revelado destinada a desenmascarar las formas camuadas o
mimetizadas para obtener ventajas en la lucha por la supervivencia (Nieder,
2006) durante la evolución.

ELEMENTOS SOBRE EVOLUCIÓN

Aunque a nivel académico, la importancia que se da a la evolución es


prácticamente nula, se ha resaltado reiterativamente la frase de Theodosius
Dobzhansky enunciada durante el Congreso anual de profesores de biología en
Estados Unidos de Norteamérica en 1973, que “Nada tiene sentido en biología
excepto bajo el prisma de la evolución” (Soler, 2003). Esto se vislumbra, al notar
que las especies vivientes cambian a través del tiempo y están emparentadas
entre sí debido a que descienden de antepasados comunes (Ayala, 2003), por lo
que una buena logenia permite distinguir las homologías de las convergencias
evolutivas aparecidas en distintos linajes (Baguna, 2003). También, cuanto
más cerca de nosotros se encuentra un organismo en el “árbol” de la vida,
más fácil nos resulta percibir su parentesco, de allí que sintamos un fuerte
vínculo con los seres vivos que más se nos parecen, y que este vínculo sea
más débil cuanto más dieren de nosotros (Schopf, 2000), pero al parecer
el vínculo logenético con receptores para drogas es un lazo que nos acerca
enormemente y, puesto que la selección natural, con su constante invención
o reinvención de formas y estrategias, ha trabajado a lo largo de millones de
años para incrementar las posibilidades de supervivencia de los diversos grupos
(Janis, 1993) de animales, utilizando entre ellas, las de uso de sustancias que

30
Una aproximación logenética para la comprensión del uso de drogas por el Homo sapiens sapiens

modican su conducta. En estas formas y estrategias se incluyó obviamente


el encéfalo con sus neuronas y glias.

El mundo está sometido a un conjunto de leyes, como las que determinan la


liberación de neurotransmisores, que conservan su continuidad desde extensos
períodos del tiempo evolutivo (Vélez, 1998), hasta llegar al Homo sapiens
sapiens, que ha logrado por adaptaciones neurobiológicas, comprender y
manipular gran parte del mundo y su cultura, pues estas adaptaciones sólo se
puede denir con relación al ambiente (Schopf, 2000), necesariamente entre
estas las asociadas con el uso de sustancias que modican la actividad del
sistema nervioso central. A pesar del cambio implicado en el proceso evolutivo,
hay elementos que se conservan, generando similitud entre las diversas especies,
dicha similitud se puede explicar entre los pasos ontogenético y logenético
(Vélez, 1998), si consideramos que una parte importante del cambio evolutivo
se debe a modicaciones en las estructuras ya existentes (Vélez, 1998; Schopf,
2000) más que a la adición de nuevas (Vélez, 1998), por ejemplo la existencia
de receptores canabinoides endógenos en ratas y seres humanos que obedecen a
jerarquías temporales en la evolución de las diversas especies de mamíferos.

De lo anterior se deduce que la evolución es notablemente conservadora


(Schopf, 2000), pues por lo regular, modica lo existente sin rediseñarlo. Esto
se asimila muy bien si se comparan por ejemplo las características químicas de
diversas sustancias que afectan la conducta como es el caso de las anfetaminas,
la serotonina y otras. Así la conservación estructural y funcional de los genes
que participan en las fases esenciales de la formación del sistema nervioso y
por ende de neuro-receptores, demuestran que el rediseño de estructuras se
debe más a la modicación de los genes correspondientes que a la adición de
nuevos genes que puedan transformar lo viejo en nuevo (Vélez, 1998).

Los resultados de la historia evolutiva están desperdigados a nuestro alrededor,


pero nosotros no podemos observar directamente los principios que los
produjeron. Nos queda pues desarrollar criterios para inferir aquellos procesos
que no podemos ver, a partir de aquellos resultados –fósiles– que han quedado
preservados. Si deseamos inferir los sucesos debemos buscar pistas en el propio

31
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 21 - 38
Jorge Eduardo Duque Parra

objeto, pues la ciencia de los objetos históricos pretende explicar el pasado,


buscando los principios y las regularidades que subyacen a la unicidad de cada
especie (Gould, 1995). Así, para poder reconstruir la historia logenética,
incluida, la del uso de sustancias que modican la conducta en las diversas
especies, se requiere una serie de evidencias corroborativas y del análisis de
algunos sistemas de caracteres.

Además la comparación química, la evolución podría ser deducida por


comparación entre grupos taxonómicos existentes (Baker and Guilland, 1996).
Pero, el proceso histórico de dicha descendencia no es algo que podamos
observar directamente, sólo, como puede ser deducido (Schwoerbel, 1986).
Como parte de la naturaleza que es exquisita y diversa, cualquier teoría que
explique dicha historia, ha de reejar esas cualidades (Leith, 1987). No es de
extrañar por lo tanto, que por lo menos durante los últimos 250 años, los biólogos
hayan intentado unir la historia del desarrollo de un individuo (ontogenia) a
la historia genealógica del mismo (logenia) (Northcutt, 2001). Esto, porque
la evolución no “avanza” hacia una meta concreta, sino que “actúa” de una
manera oportunista, tendiendo siempre a establecer un equilibrio perfecto entre
los seres vivos y su medio circundante (Schwoerbel, 1986).

Otros elementos para el análisis evolutivo del uso de drogas por los seres vivos,
son los correspondientes a la descripción de fósiles, lo cual es generalmente
un proceso relativamente sencillo (Tattersall and Schwartz, 2002) en la
reconstrucción de la neurobiología de los organismos extinguidos hace largo
tiempo. Esto se ha logrado en dinosaurios, pero la tarea es desalentadora,
especialmente a la luz de la expectativa de que el cerebro (Charig, 1986;
Rogers, 1999) y las conductas que éste dicta mediadas por actividad de
neurotransmisores asociados con la ingesta de drogas, no se fosilizan (Stringer
and Stringer, 1993; Rogers, 1999; Plomin et al., 1984).

Afortunadamente, algunos productos de la conducta pueden ser estudiados


a partir de restos fósiles, siendo posible inferir ésta. Por ejemplo, la de los
progenitores del ser humano por los restos de enterramientos, herramientas y
artefactos culturales que se han encontrado de muchos cráneos de Homo erectus

32
Una aproximación logenética para la comprensión del uso de drogas por el Homo sapiens sapiens

que tienen grandes perforaciones craneales, aspecto sugerente de una muerte


violenta (Plomin et al., 1984). Y, aunque es improbable en términos generales
que los tejidos blandos y el comportamiento se fosilicen, sí pueden dejar
ciertos rasgos que se aprenden a interpretar (Stringer and Stringer, 1993) o una
conducta que puede deducirse de fósiles (Kardong, 1999). Infortunadamente,
los fósiles de los circuitos dopaminérgicos y serotoninérgicos en el sistema
límbico, los receptores opiáceos y otros no existen.

La información genética también aporta claves de la evolución del uso de


drogas por el cerebro, porque la comparación de los genomas en todos los
seres vivientes revela una remarcable unidad (Koonin et al., 2000). Los
sistemas encefálicos relacionados con el uso y abuso de drogas que hoy día
se reconocen, no han sido creados de una vez para siempre; por el contrario,
se han ido constituyendo en niveles diferentes, a través de etapas sucesivas,
gracias a una sucesión de acontecimientos que articularon poco a poco los
diversos elementos. Estos elementos, se han dispuesto y renovado sin cesar
en un sistema encefálico complejizado al menos profundamente en el caso del
Homo sapiens sapiens.

ALGO DE GENÉTICA

Los órganos incluido el encéfalo, son consecuencia del efecto que ejerce el
pasado evolutivo sobre los caracteres que observamos en las especies actuales y
que se conoce como lastre logenético (Zamora, 2003), por lo que actualmente
se acepta, con bastante seguridad, que la mayor parte de los los animales
poseen esencialmente los mismos genes (Soler, 2003). Este lastre involucra un
número de genes, entre ellos los Homeobox, expresados durante el desarrollo
del cerebro de ratones y otros vertebrados incluido el Homo sapiens sapiens
(Boncinelli, 2000; Simeone et al., 1992), anbios (Pannese, 1998) y peces
(Morita, 1995). Particularmente Emx1 y Emx2 se activan para formar las
capas cerebrales (Boncinelli, 2000) de los lóbulos cerebrales y determinantes
neurobiológicos de la actividad conductual. Se sabe que toda la información
necesaria para construir el organismo humano incluido su cerebro, está

33
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 21 - 38
Jorge Eduardo Duque Parra

contenida en los genes, los cuales se expresan en la construcción de proteínas.


Con base en esto, parecería que un organismo vivo debiera formarse de una
forma determinística casi rígida, pero no es así, pues hay una innidad de
interacciones con el medio ambiente siempre cambiante, es sólo el juego de
la interacción genes-medio ambiente y la selección especíca en cada paso,
lo que da lugar al individuo concreto que luego se desarrolla a lo largo de la
vida (Mora, 2005). Darse cuenta de que existen mecanismos biológicos tras el
comportamiento humano –y animal– más sublime, no implica una reducción
simplista a la maquinaria fundamental de la neurobiología. En cualquier
caso, la explicación parcial de la complejidad por algo menos complejo no
signica degradación, pues los seres humanos somos organismos que llegamos
diseñados a la vida con mecanismos automáticos de supervivencia, y a los
que la educación y la aculturación añaden un conjunto de estrategias para la
toma de decisiones que son socialmente permisibles y deseables que, a su
vez, aumentan la supervivencia, mejoran de forma notable la calidad de dicha
supervivencia y sirven de base para construir una persona. Al nacer, el cerebro
humano llega dotado de impulsos e instintos que incluyen no sólo los pertrechos
siológicos para regular el metabolismo, sino, además, dispositivos básicos
para habérselas con la cognición y el comportamiento sociales (Damasio, 2004)
como el relacionado con el uso de sustancias psico-activas.

NORMAS Y DESCONOCIMIENTO

La sociedad ha inventado una serie de normas que limitan las expresiones


de los diversos seres humanos, pero, por falta de una seria vinculación y
conocimientos sobre el sustrato neurobiológico implicado en la tradición
cultural, los dirigentes que aprueban las normas sociales a manera de leyes y
se sumergen en el respaldo de la alteración del ujo de divisas entre países,
caen en el error de desconocer el peso neurobiológico. Existe por lo tanto
un serio distanciamiento que permite vislumbrar errores muy serios sobre la
incongruencia de las normas en el uso de drogas y su investigación, para valorar
más adecuadamente el uso de drogas por diversas culturas.

El reconocimiento de que existen patrones de evolución que nos afectan como

34
Una aproximación logenética para la comprensión del uso de drogas por el Homo sapiens sapiens

seres biológicos, debe replantear las creencias sociales en torno al uso de drogas
por el Homo sapiens sapiens, pues lo social no puede castrar el pedido de lo
natural ya que estaríamos regresando en el tiempo, a épocas en que imperaba
el mito sobre la realidad.

A MANERA DE CONCLUSIÓN

Las células encefálicas poseen receptores para diversas sustancias exoóenas que
han recibido la denominación de drogas, pero que a la luz de la evolución son
más bien sustancias emparentadas neurobiologicamente con nuestro sistema
nervioso, no son por lo tanto tan ajenas a nuestra actividad, pues existen
ligandos para ellas, que determinan inuencias al estado de conciencia del
ser humano y por consecuencia su conducta. Este mecanismo se encuentra
presente también en otras especies. Este vínculo morfológico y siológico
necesariamente ha evolucionado a lo largo de millones de años, denotando una
base neurobiológica asociada estrechamente con el uso de drogas por nuestra
especie, no necesariamente debido a presiones de tipo cultural. Por lo tanto,
la actividad cultural del ser humano no surge de interacciones extracorpóreas,
sino de elementos de base que se activan en mayor o menor grado, dependientes
de las inuencias del entorno biológico y cultural.

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38
VARIANTES GENÉTICAS Y METABOLISMO DE LOS OPIÁCEOS, LOS
OPIOIDES Y LA COCAÍNA

JOSÉ HENRY OSORIO


VARIANTES GENÉTICAS Y METABOLISMO DE LOS OPIÁCEOS, LOS
OPIOIDES Y LA COCAÍNA

JOSÉ HENRY OSORIO


DVM, BSC, DEA, MSC, MMB, MPHIL, PH.D
DEPARTAMENTO DE CIENCIAS BÁSICAS DE LA SALUD
LABORATORIO DE ENFERMEDADES METABÓLICAS.
UNIVERSIDAD DE CALDAS
josheno@yahoo.com

Recibido: 28 de agosto de 2006


Aceptado: 13 de septiembre de 2006

RESUMEN

Algunas variantes en los genes que codican proteínas involucradas en el


metabolismo o biotransformación de drogas de abuso, pueden afectar la
vulnerabilidad a desarrollar una adicción; y otras variantes relacionadas con
el metabolismo de los opiáceos y la cocaína, han sido identicadas y pueden
estar asociadas con la vulnerabilidad a desarrollar o afectar el tratamiento de
las enfermedades adictivas. Esta revisión está enfocada sobre los opiáceos, los
opioides y la cocaína, mencionando algunas variantes genéticas que pueden
alterar su metabolismo.

Palabras clave: metabolismo, opiáceos, opioides, cocaína.

ABSTRACT

GENETIC VARIATION AND METABOLISM OF OPIATES, OPIOIDS AND


COCAINE

Some variants of protein encoding genes involved in the metabolism or

41
José Henry Osorio

biotransformation of abusive drugs may affect the vulnerability of developing


an addiction. Other variants related to the metabolism of opiates and cocaine
have been identied and may be associated with the vulnerability of developing
or affecting the treatment of addictive diseases. This revision is focussed on
opiates, opioids and cocaine mentioning some genetic variants that can alter
their metabolism.

Key words: Metabolism, opiate, opioides, cocaine.

INTRODUCCIÓN

Los opiáceos son drogas derivadas del opio e incluyen la morna y la codeína,
así como sus congéneres (heroína y oxicodona), y otros derivados semisintéticos
de tebaína (Bond et al., 1998). Los opioides sin embargo, consisten en todas
las drogas agonistas con actividad similar a la morna, tanto naturales como
sintéticas (Bowen et al., 1978).

Lo efectos iniciales de los opiáceos son mediados a través del sistema endógeno
opioides. Aunque existen tres clases de receptores opioides ( ,
y ), los
opiáceos abusados interactúan primariamente con los receptores opioides 
(MOR) (Bohn et al., 2000; Crowley et al., 2003; Becker et al., 2000). Estos
receptores modulan diversos sistemas siológicos, incluyendo respuestas al
dolor, respuesta al estrés, motilidad gastrointestinal y función inmune. Los
ligandos edógenos para MOR son la proteína de 31 residuos de aminoácidos
-endorna y las pequeñas moléculas de encefalina (Becker et al., 2002;
Berrettini et al., 1994; Dole et al., 1966).

Mediante la inhibición de neuronas GABAérgicas, la estimulación del


MOR, también resulta en desinhibición de las vías centrales mesolímbicas-
mesocorticales de la dopamina (Asarían et al., 1996; Nart et al., 2003). La
administración repetida y la abstinencia de los opiáceos, interrumpe estas vías
y da como resultado, los efectos siológicos y de conducta de la adicción a los
opiáceos (Li et al., 1993, 2000, 2002).

42
Variantes genéticas y metabolismo de los opiáceos, los opioides y la cocaína

La cocaína actúa principalmente mediante inhibición de los transportadores


presinápticos de la dopamina, así como de los transportadores de la serotonina
y la norepinefrina (Ling et al., 1998; Lima et al., 2002; Li et al., 2003). Niveles
incrementados de dopamina sináptica y por lo tanto del receptor de unión de la
dopamina, posteriores a la administración de cocaína, son el mecanismo clave a
través del cual el efecto de la cocaína es reforzado (Comings et al., 1994; Chen
et al., 2002; Carrol et al., 1993; 2004). La cocaína además modula el sistema
endógeno opioide, especialmente MOR, los receptores opioides  (KOR) y
preprodinorna (Arnsten et al., 2000A. 2000b, Sivam, 1989; Spangler et al.,
1996; Zubieta, 1996; Yasuda et al., 1993).

METABOLISMO Y BIOTRANSFORMACIÓN DE OPIÁCEOS Y OTROS OPIOIDES

Morna y Heroína: la morna, un alcaloide fenantreno, todavía hoy se deriva


del extracto lechoso del Papaver somniferum, debido a la dicultad para su
producción sintética. La morna comprende aproximadamente el 10% del
extracto de opio de la planta. La diacetilmorna (heroína) fue sintetizada
por primera vez en 1874 y luego comercializada como heroína por Bayer
en 1898 (Xu et al., 2002; Yuferov et al., 2004). La heroína es una pro-droga
lipídica soluble, que ejerce solamente su efecto después de metabolizarse
a 6-monoacetilmorna (6-MAM) y morna (Yakovlev et al., 1993; Zhu et
al., 1995; Yuferov et al., 1999). La heroína tiene poca biodisponibilidad vía
oral y sufre metabolismo completo, con remoción sanguínea mayor que el
límite superior del ujo sanguíneo hepático, indicando factores metabólicos
extrahepáticos (Kitanaka et al., 1998; Kling et al., 2000).

La heroína es metabolizada a 6-MAM y luego a morna mediante hidrólisis


de los enlaces éster, catalizada por tres esterasas: pseudocolinesterasa,
carboxilesterasa-1 humana (hCE-1) y carboxilesterasa-2 humana (hCE-2) (Loh
et al., 1998; Lotsch et al., 2002).

En humanos la heroína es metabolizada mediante hidrólisis del grupo 3-acetil

43
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 39 - 54
José Henry Osorio

y covertida en 6-MAM en el hígado, por hCE-1 y hCE-2, en el suero por la


pseudocolinestaerasa y además no enzimáticamente en el suero. Mientras
que las tres enzimas catalizan rápidamente la hidrólisis de heroína a 6-MAM,
sólo hCE-2 cataliza la hidrólisis de 6-MAM a morna, con alta eciencia
(Kamendulis et al., 1996; Lawford et al., 2000).

La morna sufre glucuronidación por la uridinadifosfato glucuronosiltransferasas


(UDP glucuronosiltransferasas) dando el metabolito inactivo morna-3-glucorónido
(M3G) y en menor cantidad, el agonista MOR M6G (Johnson et al., 2000).

Durante el análisis de 5 personas presentando síndrome de Gilbert, caracterizado


por una glucuronidación deciente debido a un polimorsmo en el gen que
codica UDP-glucuronosiltransferasa (UGT) 1A1, no se mostró alteración en el
metabolismo de la morna o diferencia alguna en la concentración plasmática
versus tiempo para M6G y M3G, cuando se compararon con controles (Skarke
et al., 2003b).

Una región promotora SNP (C-161T) en el gen que codica UGT 2B7
(UGT2B7), ha sido identicada en individuos con bajas tasas de glucuronidación
y sujetos con este SNP muestran relaciones reducidas M6G/morna; debido a
que este SNP fue encontrado en desequilibrio con el no-sinónimo C802T SNP
((His268Tyr) en el exón 2, no queda claro todavía cuál de estos dos SNP es la
variante funcional (Sawyer et al., 2003).

Otros estudios han, además, identicado un promotor o polimorsmos en la


región que codica UGT2B7, sin embargo, ninguno altera la remoción de la
morna o la formación y remoción de M6G y M3G (Holthe et al., 2002, 2003;
Duguayet al., 2004; Skarke et al., 2003a). Se hacen necesarios más estudios
para identicar polimorsmos funcionales y su efecto sobre el metabolismo
de la morna, además para determinar si existen factores siológicos o
farmacológicos que contribuyan a la adicción a la morna o a la analgesia.
Codeína: la mayoría de los opiáceos (diferentes de la morna y la heroína),

44
Variantes genéticas y metabolismo de los opiáceos, los opioides y la cocaína

son metabolizados por enzimas P450. Mientras una porción de la codeína sufre
glucuronidación, esta es además odemetilada, lo mismo que sus congéneres
oxicodona e hidroxicodona, hacia el metabolito más potente y activo, la morna
(oximorfona e hidromorfona a oxicodona e hidrocodona, respectivamente) por
CYP2D6. Más de 60 variantes (incluyendo duplicación de genes, deleciones,
splicing alternativo, inserciones y deleciones con cambios en el marco de
lectura, y SNPs impartiendo substituciones de aminoácidos) de el gen CYP2D6
han sido identicadas (Howard et al., 2002).

Algunas de estas variantes incrementan el metabolismo de estas drogas hacia


sus metabolitos más potentes, mientras otros, disminuyen el metabolismo. La
potencia analgésica y la responsabilidad del abuso de las medicaciones con
opioides, puede por lo tanto estar inuenciada por variantes en este gen (Sindrup
et al., 1991, 1993; Kathiramalainathan et al., 2000; Tyndale et al., 1997).

La inhibición farmacológica de CYP2D6 con uoxetina o quinidina, lo cual


reduce signicativamente la formación de morna, seguido de la administración
de codeína (Kathiramalainathan et al., 2000; Romach et al., 2000), ha fallado
sin embargo, para reducir la ingestión diaria de codeína en un pequeño grupo
de adictos a la codeína (Fernández et al., 2002).

El efecto de los alelos CYP2D6 resultando en metabolismo bajo comparado


con metabolismo ultrarrápido, ha sido investigado en sujetos sostenidos con
metadona. Aunque el metabolismo de la metadona es primariamente mediado
por CYP3A4, los investigadores encontraron una disminución signicativa en
las concentraciones de metadona para la relación dosis/peso, en metabolizadores
ultrarrápidos, pero esto no parece inuir en el resultado del tratamiento
comparado con el grupo de metabolizadores bajos (Eap et al., 2001).

Metadona, Levo- -acetilmetadol, y Buprenorfine: los medicamentos


estándar utilizados en el tratamiento de la adicción a los opiáceos,
metadona, LAAM y buprenorfina son todos metabolizados primariamente
por CYP3A4 (Nath et al., 1999).

45
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 39 - 54
José Henry Osorio

El uso concomitante de medicamentos que inducen (ej. rifampin, fenitioina) o


inhiben (ej. Fluoxetina, cimetidina, saquinavir) CYP3A4, pueden resultar en
síndrome de abstinencia o sedación, respectivamente. Los polimorsmos que
afectan la función de CYP3A4 pueden similarmente inuir sobre la ecacia
de estos fármacos. Cerca de 20 variantes de CYP3A4 han sido identicadas
(http://www.imm.ki.se/ CYPalleles/cyp3a4.htm), y dos estudios que utilizaron
constructores celulares, han identificado variantes que incrementan o
disminuyen la función de CYP3A4 y alteran el metabolismo de la testosterona
(un CYP3A4 substrato) (Dai et al., 2001; Eiselt et al., 2001).
Los efectos funcionales de otras variantes CYP3A4, no han sido determinados
y no hay reportes acerca de las posibles modicaciones del metabolismo de los
medicamentos usados en el tratamiento de enfermedades adictivas.

METABOLISMO Y BIOTRANSFORMACIÓN DE LA COCAÍNA

La cocaína es un alcaloide extraído de las hojas de Erythroxylon coca. Similar a


la heroína, el metabolismo de la cocaína es catalizado por pseudocolinestarasa,
hCE-1 y hCE-2. La hidrólisis de la cocaína para producir ecgonina metil éster,
es catalizada por la pseudocolinestarasa y hCE-2. La ecgonina metil éster es
entonces hidrolizada no-enzimáticamente. hCE-1 cataliza la transestericación
de cocaína a cocaetileno, un metabolito tóxico, en presencia de etanol y además
su hidrólisis a benzoilecgonina, el principal metabolito excretado en la orina.
El cocaetileno puede ser posteriormente hidrolizado por hCE-1 y hCE-2,
produciendo benzoilecgonina o ecgonina etil éster, respectivamente (Dean et
al., 1991; Brzezinski et al., 1994; Laizure et al., 2003).

La variación fenotípica en la pseudocolinesterasa está asociada con apnea


prolongada en pacientes que reciben el relajante muscular succinilcolina
durante cirugía. El número dibucaína, un método para medir la actividad de
la pseudocolinesterasa, ha sido utilizado por muchos años, para identicar
fenotipos atípicos de esta enzima, responsables de la disminución o incluso
ausencia completa de actividad de la misma (Kalow and Genest, 1957; Kalow
and Staron, 1957).

46
Variantes genéticas y metabolismo de los opiáceos, los opioides y la cocaína

Diferentes variantes genéticas han sido identificadas y señaladas como


responsables para algunas de estas anormalidades fenotípicas (McGuire et al.,
1989; Nogueira et al., 1990A. 1990b; Maekawa et al., 1997).

En 1980 Lockridge y colaboradores presentaron el estudio de una persona


identicada que presentaba un fenotipo inactivo para esta enzima, la cual no
hidrolizaba la heroína, mientras que suero de un paciente con un fenotipo
atípico, parcialmente activo, hidrolizaba la heroína, pero de manera menos
eciente que la enzima típica.

La actividad de diferentes variantes humanas de colinestarasa ha sido examinada


(Xie et al., 1999). Una colinesterasa atípica (Asp70Gly) tiene 10 veces menos
eciencia en la unión a la cocaína y 10 veces menos eciencia en la actividad
catalítica (kcat/Km). Aunque esta evidencia sugiere la posibilidad de que
las respuestas individuales a la heroína y la cocaína pueden ser mediadas en
parte por mayor o menor capacidad metabólica, las variaciones determinadas
genéticamente en la actividad de la colinesterasa o en la actividad de la
carboxilesterasa, no han sido investigadas en personas con enfermedades
adictivas.

CONCLUSIÓN

La vulnerabilidad a padecer enfermedades adictivas y la ecacia de su posible


tratamiento, pueden estar directamente relacionadas con una o varias proteínas
responsables de su metabolismo, sin embargo estas proteínas pueden estar
alteradas ante la presencia de variantes en los genes que codican para las
mismas. Es necesario desarrollar más investigación en el campo de la fármaco
genética como alternativa diagnóstica y terapéutica.

47
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 39 - 54
José Henry Osorio

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YAGÉ: ¿UN ADAPTÓGENO BIOLÓGICO ESPECÍFICO?

JOSÉ CARLOS BOUSO SAIZ


YAGÉ: ¿UN ADAPTÓGENO BIOLÓGICO ESPECÍFICO?

JOSÉ CARLOS BOUSO SAIZ


PSICÓLOGO ESPECIALISTA EN PSICOLOGÍA CLÍNICA
SOCIEDAD DE ETNOPSICOLOGÍA APLICADA Y ESTUDIOS COGNITIVOS (SD’EA), ESPAÑA
jcbouso@gmail.com

Recibido: 2 de agosto de 2006


Aceptado: 5 de septiembre de 2006

RESUMEN

En el hipocampo se produce una continua proliferación celular y neurogénesis


durante todo el período vital. Debido a la importancia del hipocampo en
la modulación activa de los procesos emocionales y cognitivos, se ha
especulado que la neurogénesis hipocampal responde a un mecanismo cerebral
neuroadaptativo de adecuación a los ambientes cambiantes. Por otra parte,
está demostrado que la activación farmacológica de los receptores 5-HT1A y
5-HT2A, que son los receptores cerebrales principales sobre los que actúa el
yagé, inducen neurogénesis en algunas áreas concretas del sistema nervioso
central, principalmente en el hipocampo. En este artículo se especula sobre
la posibilidad de que el consumo continuado de yagé favorezca la adaptación
cultural de los individuos a su medio no tanto debido a las visiones inducidas
por el yagé como por los mecanismos biológicos subyacentes que desencadena
su consumo.

Palabras clave: Yagé, hipocampo, neurogénesis, receptores 5-HT1A/2ª.

ABSTRACT

YAGÉ: A BIOLOGICAL SPECIFIC ADAPTOGEN?

In the hippocampus a continuous cellular proliferation and neurogenesis


are produced during the whole vital period. Due to the importance of the
hippocampus in the active modulation of the emotional and cognitive processes,

57
José Carlos Bouso Saiz

it has been speculated that the hippocampal neurogenesis responds to a cerebral


neuroadaptive mechanism to adjust to changing environments. Additionally,
it has been demonstrated that the pharmacological activation of the -HT1A
and 5-HT2A receptors, which are the principal cerebral receptors on which
the yagé acts upon, induce neurogenesis in some concrete areas of the central
nervous system, principally in the hippocampus. This article speculates on the
possibility that a continuous intake of yagé can benet the cultural adaptation
of individuals to their environment, not so much due to the visions it creates,
but because of the underlying biological mechanisms that its consumption
creates.

Key words: Yage, hippocampus, neurogenesis, 5-HT1A/2A receptors.

INTRODUCCIÓN

El hipocampo es una estructura cerebral con forma de caballito de mar (de


ahí su nombre) situada en la superficie media del lóbulo temporal. La lesión
del hipocampo (por ejemplo, por cirugía para el tratamiento de epilepsias
resistentes a tratamientos convencionales) impide que se consoliden en la
memoria a largo plazo nuevos contenidos y por tanto que se realicen nuevos
aprendizajes, de lo que se infiere que el hipocampo juega un papel esencial en
la modulación de los procesos cognitivos, sobre todo en los relacionados con la
memoria episódica y declarativa. Las lesiones en el hipocampo, sin embargo,
no afectan a la memoria procedimental, lo que indica que el hipocampo tiene
un papel relevante en la gestión de procesos cognitivos activos (conscientes).
Aunque en el pasado al hipocampo se le relacionó exclusivamente con su
implicación en tareas cognitivas, actualmente está completamente aceptado
su papel esencial en la modulación de procesos emocionales consistentes
en codificar las experiencias vitales de acuerdo a su contenido emocional
significativo (LeDoux, 2002). De hecho, se ha demostrado que los pacientes
con depresión mayor y con trastorno de estrés postraumático tienen el tamaño
del hipocampo significativamente más reducido que el de los controles

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Yagé: ¿un adaptógeno biológico especíco?

normales, lo cual podría explicar algunas de las alteraciones tanto emocionales


como cognitivas propias de los pacientes con estos trastornos mentales (véase
más abajo). El hipocampo parece pues jugar un papel importante no sólo
en los trastornos neurológicos y/o neurodegenerativos (como la epilepsia
del lóbulo temporal o la enfermedad de Alzheimer), sino también en los
trastornos mentales relacionados con el espectro de las alteraciones del estado
de ánimo (como la depresión mayor) y de la ansiedad (como el trastorno de
estrés postraumático).

No obstante todo el conocimiento acumulado que se tiene en la actualidad


acerca del hipocampo, aún se está muy lejos de conocer en toda su extensión
y profundidad sus funciones más específicas. De todas ellas, sin duda las
más intrigantes son las relacionadas con las consecuencias funcionales
de su neurogénesis. Se ha demostrado que en diversas especies animales,
incluyendo la humana, el hipocampo es la única estructura cerebral en la
que consistentemente se produce una proliferación celular que deriva en la
formación de nuevas neuronas, si bien la funcionalidad concreta de este proceso
de neurogénesis no pasa en la actualidad del terreno de la especulación, en
parte por las limitaciones de los modelos existentes para estudiar el fenómeno
tanto en animales como en humanos (Wiskott et al., 2006). En los epígrafes
siguientes se describirá el conocimiento actual que se tiene sobre el proceso
interno de la proliferación celular y la neurogénesis en el hipocampo de los
mamíferos, las condiciones ambientales, conductuales y farmacológicas que se
han encontrado que lo favorecen y/o lo bloquean, se discutirán las limitaciones
de los modelos actuales para conocer en profundidad sus consecuencias
funcionales, y se propondrá un modelo alternativo basado en las acciones
del yagé (ayahuasca) para profundizar en el fenómeno, concluyendo con una
serie de especulaciones al respecto.

MECANISMOS NEUROGENÉSICOS

Si bien ya en 1965 se sugirió la formación de nuevas neuronas en el cerebro


de ratas adultas (Altman y Das, 1965), no fue hasta los años 90 cuando se

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José Carlos Bouso Saiz

comprobó que este proceso se producía también en el cerebro humano adulto


(Eriksson et al., 1998). Hasta el momento, se ha demostrado consistentemente
la proliferación celular en dos zonas cerebrales humanas: el hipocampo y la
zona subventricular de los lóbulos laterales, aunque en la actualidad algunos
datos experimentales parecen indicar que también este proceso podría ocurrir
en algunas áreas de la corteza cerebral (Gould et al., 1999). Solamente en
el hipocampo esta proliferación celular da lugar a la formación de nuevas
neuronas, si bien a día de hoy se desconoce en gran medida su funcionalidad
específica más allá de su posible papel en la intervención en el procesamiento
de la memoria y del aprendizaje (Mancheño y Jiménez, 2005). La proliferación
celular de la zona subventricular de los lóbulos laterales, rica en células madre
con características de astrocitos, daría lugar a la génesis de interneuronas en
el bulbo olfatorio. Por su parte, las células madre del hipocampo residen en la
zona subgranular del giro dentado y derivan en neuronas maduras que migran
hacia la capa celular granular, donde se diferencian, siendo morfológica y
fisiológicamente idénticas a las células granulares adultas, si bien las células
jóvenes son más plásticas que las adultas y establecen conexiones sinápticas
con mayor rapidez. La neurogénesis en el cerebro adulto ocurre únicamente
en el nivel de las células granulares del giro dentado, no en las regiones
CA3, CA1, córtex entorrinal o el subiculum, las otras estructuras de que se
compone la formación hipocampal. La tasa de supervivencia de las células
que proliferan en neuronas parece limitarse a un porcentaje de entre el 25 y el
75% en función de la especie estudiada y de la edad del organismo, factores
de los que depende también su vida media, que para el ser humano puede estar
entre 1 y 2 años. Si bien en otras estructuras esta limitada tasa de proliferación
y supervivencia pudiera tener repercusiones funcionales muy discretas, en el
giro dentado, donde los axones son, aunque robustos, escasos, un pequeño
porcentaje de nuevas neuronas puede suponer una importante diferencia
de cara a optimizar el sistema de procesamiento de la nueva información
compleja proveniente del medio (Kempermann et al., 2004).

En investigación animal se ha demostrado que ciertas condiciones ambientales,


conductuales y farmacológicas promueven y/o detienen la proliferación

60
Yagé: ¿un adaptógeno biológico especíco?

celular y la neurogénesis en el giro dentado del hipocampo. Así, se ha


observado que cuando se somete a animales de investigación a situaciones
de estrés ambiental (Gould, 1999), como por ejemplo la exposición a olores
de depredadores, la exposición ante residentes intrusos, experiencias de
subordinación, o a situaciones de indefensión aprendida (Malberg y Duman,
2003) se produce un bloqueo en la proliferación celular y en la neurogénesis; lo
mismo ocurre también tras la administración crónica de determinadas drogas
psicoactivas (Duman et al., 2001), como la morfina o los fármacos agonistas
de los receptores NMDA. Por su parte, se ha demostrado, también en modelos
animales, que condiciones ambientales como el ejercicio físico voluntario
o el enriquecimiento estimular ambiental incrementan tanto la tasa de
proliferación celular como la neurogénesis en el giro dentado del hipocampo.
Sin embargo, los modelos animales en los que más consistentemente se
ha encontrado el fenómeno de proliferación celular y neurogénesis son de
tipo farmacológico, sobre todo cuando se han utilizado fármacos de acción
selectivamente serotoninérgica (Kempermann, 2002a), lo cual, por otra parte,
está ayudando a comprender y esclarecer el mecanismo de acción terapéutico
de este tipo de fármacos.

Se ha demostrado que la depleción serotoninérgica inducida tanto por la


inhibición de la síntesis de serotonina (5-HT) como por la lesión selectiva
de las neuronas que la contienen disminuye la neurogénesis en el giro
dentado del hipocampo (Brezun y Daszuta, 1999) y este mismo fenómeno
se ha observado cuando se han bloqueado los receptores serotoninérgicos
5-HT1A (Jacobs et al., 1998). El fenómeno inverso se ha encontrado cuando
se ha administrado fluoxetina, un fármaco ampliamente utilizado para el
tratamiento de la depresión que inhibe selectivamente la recaptación de
serotonina (Jacobs, 2002; Gould, 1999; Malberg et al., 2000; Duman et al.,
2001), lo cual ha demostrado que, aparte de que la fluoxetina ejerce su acción
principalmente actuando como agonista de los receptores 5-HT1A, estos
receptores cerebrales están implicados en la neurogénesis del hipocampo en
el cerebro adulto y que el bloqueo de la neurogénesis inducida mediante estrés
ambiental utilizando un paradigma de indefensión aprendida puede revertirse

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con fluoxetina (Malberg y Duman, 2003). Se ha encontrado también que la tasa


de supervivencia de las nuevas neuronas aparecidas tras el tratamiento crónico
con fluoxetina es del 75% en el cerebro adulto de la rata (Malrberg y Duman,
2003). Estos descubrimientos han permitido esclarecer el papel que juegan
los fármacos antidepresivos en la recuperación de la depresión. La hipótesis
que prevalecía antes de que este conjunto de datos apareciera se conoce como
hipótesis monoaminérgica y entendía la depresión como un disbalance en las
concentraciones de monoaminas cerebrales, fundamentalmente serotonina.
Sin embargo, esta hipótesis no explicaba satisfactoriamente el hecho de que
los efectos terapéuticos de los fármacos antidepresivos tardaran en aparecer
entre 3 y 6 semanas después del inicio del tratamiento teniendo en cuenta
que una sola dosis es ya capaz de producir incrementos significativos en
las concentraciones cerebrales de serotonina. Los resultados previamente
descritos explican mejor éste hasta ahora desconcertante fenómeno: el
tiempo que tardan los fármacos antidepresivos en ejercer efectos terapéuticos
es precisamente el tiempo que tardan las células madre del giro dentado en
proliferar y diferenciarse como neuronas por lo que los efectos antidepresivos
de los fármacos tipo fluoxetina pueden obedecer no tanto directamente a un
incremento de la seroronina cerebral, como a los efectos indirectos de dicho
incremento en el incremento de la neurogénesis hipocampal (Jacobs, 2001).
Esta hipótesis ha obtenido respaldo experimental en el único estudio en el que
se ha estudiado específicamente la relación entre la neurogénesis hipocampal
y los comportamientos de tipo depresivo en un modelo de investigación
animal (Santarelli et al., 2003). Por último, este conjunto de datos parece
ser coherente con algunas de las pruebas que se tienen provenientes de la
investigación en humanos.

La ansiedad y la depresión son trastornos psicológicos que están estrechamente


relacionados. Se sabe que en los organismos sometidos a situaciones
continuadas de estrés se produce una activación del eje hipotálamo-
pituitario adrenal (HPA) que promueve una alta liberación de hormonas
corticoesteroides como el cortisol, que frenan la proliferación celular y la
neurogénesis hipocampal pudiendo incluso llegar a producir neurotoxicidad

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Yagé: ¿un adaptógeno biológico especíco?

(Saplosky, 1996). De hecho, se han realizado estudios en humanos, utilizando


Resonancia Magnética, en los que se ha encontrado que los pacientes con
depresión mayor tienen un volumen hipocampal menor que el de los sujetos
controles, que dicha reducción correlaciona positivamente con el tiempo que
dura el trastorno (Sheline, 2000) y que parece ser reversible con la remisión
de los síntomas (Frodl et al., 2002). Un menor volumen hipocampal también
se ha encontrado en pacientes con trastorno de estrés postraumático (Bremner
et al., 1995), si bien las relaciones de causalidad están confusas ya que el
volumen del hipocampo es estadísticamente similar entre pares de gemelos
con o sin dicho trastorno (Gilbertson et al., 2002), lo cual sugiere por otra parte
que un volumen hipocampal reducido puede predisponer a sufrir este tipo de
trastorno psicológico. Estos hallazgos podrían explicar algunos de los déficits
cognitivos y emocionales que sufren este tipo de pacientes. Por otra parte, la
demostrada eficacia de los fármacos antidepresivos de acción serotoninérgica
para tratar este tipo de trastornos así como el tiempo medio que tardan en
ejercer sus acciones terapéuticas son coherentes igualmente con la hipótesis
de que en algunos de los síntomas cognitivos y emocionales del espectro de
los trastornos de la depresión y la ansiedad hay una alteración estructural en el
hipocampo y que la recuperación puede que deba pasar necesariamente por la
regeneración de las células dañadas para lo cual el tratamiento con fármacos
de acción agonista serotoninérgica parece ser la opción terapéutica más eficaz
(Ebmeier et al., 2006).

EL YAGÉ COMO POSIBLE INDUCTOR DE NEUROGÉNESIS

Los datos presentados hasta el momento provenientes de la investigación


animal arrojan conclusiones muy interesantes acerca del papel del
hipocampo en la modulación del comportamiento. El hecho de que estresores
ambientales inducidos experimentalmente, la destrucción del giro dentado
mediante radiación por rayos X, o la desactivación de los receptores 5-HT1A
hipocampales bien por medio farmacológicos bien en ratones clonados
carentes de dicho receptor, induzcan un bloqueo en la neurogénesis que se
relaciona con alteraciones comportamentales, sugiere que el hipocampo juega

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un papel esencial a la hora de adaptar al organismo a las situaciones cambiantes


del entorno. Por otra parte, el hecho de que tanto un ambiente estimular
enriquecido como el ejercicio físico voluntario incrementen el proceso de
neurogénesis indica de nuevo que una adecuada organización y codificación
de los nuevos estímulos ambientales requiere de una reorganización en las
redes neuronales encargadas de su adecuado procesamiento. Sin embargo, los
modelos animales tienen la limitación intrínseca de no poder arrojar resultados
acerca de la función adaptativa de dicho proceso ante requerimientos
ambientales complejos debido a que los animales no disponen de un acceso
libre y arbitrario a distintos estímulos de significación biológica, como los
que se dan en su medio natural, por lo que la extrapolación de estos datos
resulta necesariamente limitada a la hora de entender en profundidad el papel
del hipocampo en los procesos de adaptación activa de los organismos a sus
medios naturales y por lo tanto en comprender en profundidad la funcionalidad
específica de la neurogénesis hipocampal. El modelo animal se enfrenta con
su mayor dificultad a la hora de extrapolar sus resultados al contexto natural
en los modelos farmacológicos: el incremento de la neurogénesis inducido
por medio de fármacos serotoninérgicos es muy difícil de estudiar en un
laboratorio debido a que el medio es siempre estable por lo que las nuevas
neuronas no tienen forma de poder expresarse funcionalmente, de ahí que
la única investigación farmacológica realizada hasta el momento se haya
centrado en estudiar los efectos deletéreos del bloqueo de la neurogénesis y
no tanto los efectos adapatativos de su expresión positiva. Paradójicamente,
son precisamente los modelos farmacológicos los más interesantes de cara
a entender dicha funcionalidad, ya que son los que con mayor precisión
nos permiten entender las estructuras cerebrales subyacentes a dicho
proceso al activarlas selectivamente, por lo que la estrategia más adecuada
para, por una parte entender las funciones de la neurogénesis hipocampal
en contextos naturales complejos, y por otra, para comprender mejor sus
mecanismos biológicos implicados, debe pasar necesariamente por diseñar
modelos farmacológicos en los que a los organismos se les permita expresar
arbitrariamente la funcionalidad de la neurogénesis dentro de ambientes
estimularmente ricos. Aún en el caso de que este tipo de estudios se realizaran

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Yagé: ¿un adaptógeno biológico especíco?

en el futuro, seguirían existiendo numerosas limitaciones a la hora de


extrapolar la especificidad funcional del modelo animal al cerebro humano
adulto, donde tanto su estructura como el medio en el que se desenvuelve son
mucho más complejos.

Pero antes de presentar un modelo humano a priori ideal para investigar la


funcionalidad de la neurogénesis hipocampal es necesario primero tener un
modelo teórico del funcionamiento del hipocampo. El equipo de Kempermann
ha propuesto un modelo heurístico (Kempermann, 2002b; Kempermann y
Kronenberg, 2003; Kempermann et al., 2004), que posteriormente fue puesto
a prueba utilizando un modelo computacional (Wiskott et al., 2006), que
establece la hipótesis de que el giro dentado del hipocampo es la estructura
encargada de codificar las claves provenientes del ambiente antes de que
sean enviadas a los depósitos de la memoria a largo plazo. Al ser el giro
dentado la estructura encargada de codificar la información estimular y estar
estructuralmente compuesto por unas fibras neuronales escasas pero robustas,
resulta biológicamente a la vez más económico y funcional generar nuevas
neuronas más que establecer nuevas conexiones, ya que de esta forma las
neuronas antiguas permiten mantener la información sobre los códigos de los
estímulos ya conocidos mientras que las nuevas neuronas hacen posible la
codificación de los nuevos, de tal forma que puedan integrarse sin interferencias
en el sistema. El resto de estructuras hipocampales no necesitan pues generar
nuevas células nerviosas para mantener la estabilidad del sistema ya que
su funcionamiento no se basa en la comunicación con estructuras externas
al hipocampo, sino en su intercomunicación interna, para lo cual es más
eficiente establecer nuevas conexiones en lugar de generar nuevas neuronas,
lo cual por otra parte sería contraproducente ya que dificultaría la integración
de la información. Por último, el hecho de que con la edad disminuya la
neurogénesis puede implicar que a medida que el organismo envejece
también se enfrenta cada vez menos a nuevos retos ambientales por lo que las
estructuras antiguas siguen siendo útiles para manejarse adecuadamente en su
medio sin necesidad de generar una alta tasa de neurogénesis.

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En definitiva, el giro dentado del hipocampo es la estructura de que se sirve


nuestro cerebro para adaptarse activamente al medio y la neurogénesis es la
forma que tiene de hacerlo eficientemente. La alta plasticidad neuronal del
hipocampo puede ser debida a que es una estructura cerebral densamente
poblada de fibras serotoninérgicas y presenta además una rica diversidad de
receptores serotoninérgicos. El sistema serotoninérgico evolucionó como un
sistema de regulación general que se modifica a sí mismo en respuesta a
los estímulos externos, por lo que presenta una plasticidad especial incluso
en el cerebro adulto (Azmitia, 1999). No es de extrañar por tanto que sean
precisamente algunos receptores serotoninérgicos los responsables de
inducir neurogénesis hipocampal. Como ya hemos visto, la activación de
los receptores 5-HT1A induce consistentemente proliferación celular que se
deriva en una alta tasa de neurogénesis, la cual se correlaciona con la remisión
de síntomas depresivos en modelos animales (Santarelli et al., 2003); este
mismo receptor es responsable también, junto con los 5-HT2A, del proceso
de proliferación celular en el giro dentado del hipocampo (Banasr et al.,
2004). El modelo ideal pues para poder comprender en toda su profundidad
y especificidad la funcionalidad de la neurogénesis hipocampal en el cerebro
humano adulto sería aquél en el que sujetos normales tuvieran por iniciativa
propia crónicamente activados los receptores cerebrales encargados de inducir
neurogénesis dentro de un contexto ambiental complejo y normalizado. Este
modelo ideal es posible encontrarlo en la realidad social.

El yagé es un té psicoactivo que se obtiene de la combinación de dos tipos de


compuestos farmacológicos presentes en diversas fuentes vegetales como son
la Banisteriopsis caapi y la Psychotria viridis, la primera rica en alcaloides
harmalínicos como harmina, harmalina, tetrahidroharmina (THH), harmol y
harmanol (Yritia et al., 2002) y la segunda rica en dimetiltriptamina (DMT).
Los alcaloides harmalínicos pertenecen a la categoría farmacológica de las
betacarbolinas, compuestos que actúan en el organismo como inhibidores de
la enzima monoaminooxidasa (MAO). La DMT es una sustancia con actividad
agonista específica sobre los receptores serotoninérgicos 5-HT1A, 5-HT2A y
5-HT2C (Glennon et al., 2000). La DMT no es bioactiva por vía oral debido

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Yagé: ¿un adaptógeno biológico especíco?

a que la MAO la desactiva en el nivel hepático y gastrointestinal (Riba et al.,


2003), pero esto no ocurre si se combina con un IMAO, como es el caso de
las betacarbolinas (Ott, 2006), Los indios nativos de la cuenca amazónica
descubrieron este proceso en un pasado remoto y desde entonces el yagé
es consumido con fines rituales por la mayoría de los pueblos amazónicos
(Shultches y Hofmann, 1980). De hecho, todo el sistema mitológico de
estos pueblos está basado en las visiones que obtienen tras ingerir este té de
propiedades alucinógenas, que también consumen cuando tienen que tomar
decisiones importantes, o antes de salir a cazar para visualizar previamente
dónde se encontrarán las presas; este fenómeno ha llevado a pensar a
algunos antropólogos que las visiones que induce la ayahuasca les sirven a
estos pueblos para realizar continuas readaptaciones culturales frente a los
aspectos cambiantes de su medio ambiente, sirviéndoles como “adaptógenos
inespecíficos” (Fericgla, 1994). Pero el consumo de yagé actualmente no es
exclusivo de pueblos amazónicos sino que su consumo ritual se ha expandido
entre los núcleos urbanos de muchos países tanto sudamericanos como del
resto del mundo, bien en forma de iglesias ayahuasqueras, bien en contextos
terapéuticos y/o de búsqueda espiritual (Ott, 2006; Labate, 2004; Ronderos,
2003; Metzner, 1999).

El yagé tiene además una singularidad respecto al resto de compuestos


alucinógenos con actividad agonista serotoninérgica, y es que la DMT, que
es el alcaloide responsable de sus efectos psicoactivos, no induce tolerancia
(Strasmann et al., 1996). Esta singularidad es de suma importancia de cara
a estudiar el papel de los receptores 5-HT1A y 5-HT2A en la proliferación
celular y neurogénesis hipocampal, ya que la tolerancia a los efectos de los
alucinógenos viene definida por una regulación a la baja de dichos receptores,
quedando funcionalmente desactivados; la no aparición de tolerancia inducida
por DMT indica pues que dichos receptores se encuentran activados a pesar
de los consumos continuados, lo cual indicaría que cada vez que se consume
ayahuasca los receptores encargados de inducir proliferación celular y
neurogénesis se activan. Algunos miembros de las iglesias ayahuasqueras
incluso toman dosis no alucinógenas de yagé a diario porque afirman que

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les hace sentirse emocionalmente bien, a la vez que dicen no manifestar


efectos secundarios. Datos provenientes de ensayos clínicos hacen pensar que
incluso dosis no alucinógenas de yagé podrían estar activando los receptores
5-HT1A: cuando en el laboratorio se administró a un grupo de voluntarios
sanos una dosis no psicoactiva de DMT combinada con pindolol, un fármaco
antagonista de los receptores 5-HT1A, se indujeron efectos psicoactivos de
una magnitud de entre 2 y 3 veces mayor que cuando se administró sólo
la dosis no psicoactiva (Strassman, 1996), lo cual indica que los receptores
5-HT1A juegan un papel importante en la farmacología de la ayahuasca
fundamentalmente contrarrestando la acción de los receptores responsables de
los efectos subjetivos, los 5-HT2A. Este mecanismo de acción parece indicar
además que tanto los receptores 5-HT1A como los 5-HT2A son activados por
el yagé incluso cuando se toman dosis no psicoactivas.

Existen muy pocos estudios en los que se han investigado los efectos
neuropsicológicos y psicopatológicos del consumo crónico de ayahuasca y todos
ellos se han realizado entre miembros de iglesias brasileñas ayahuasqueras. En
el primer estudio de este tipo se encontró que los consumidores de ayahuasca,
con un consumo mínimo de 10 años, no cumplían con ningún criterio
diagnóstico de trastorno metal (evaluado mediante la CIDI) y obtuvieron
mejores puntuaciones en una prueba de memorial verbal (el Test de Aprendizaje
Auditivo-Verbal WHO-UCLA) (Grob et al., 1996). En un estudio realizado
en adolescentes de esa misma iglesia en el que participaron 40 sujetos y 40
controles se encontraron diferencias significativamente menores en ansiedad,
somatización y problemas atencionales en el grupo ayahuasca (Da Silveira et
al., 2005) aunque no se produjeron diferencias en variables neuropsicológicas
(Doering-Silveira et al., 2005). En un último estudio, desarrollado por nuestro
equipo de investigación con una muestra de 61 miembros de otra iglesia
brasileña frente a 60 controles se encontraron unos índices de psicopatología
(evaluados con el SCL-90-R) estadísticamente inferiores en el grupo
ayahuasca, así como un mejor rendimiento en una prueba de flexibilidad
cognitiva (el WCST) y en otra de resistencia a la interferencia proveniente de
estímulos externos (el test de Stroop) (datos no publicados). Si bien ninguno

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Yagé: ¿un adaptógeno biológico especíco?

de estos estudios estaba originalmente pensado para evaluar específicamente


funciones hipocampales, una posible interpretación de los resultados podría
realizarse con base a la acción de los receptores 5-HT1A/2A sobre el proceso
de neurogénesis del giro dentado del hipocampo, aunque esta explicación
no pasa del mero terreno especulativo. Si esta hipótesis fuera correcta, las
explicaciones tradicionalmente esbozadas tanto para explicar la adaptación
de los pueblos amazónicos a su medio ambiente como el mejor rendimiento
neuropsicológico y menores índices de psicopatología encontrados en los
consumidores de ayahuasca en contextos religiosos, basadas en el papel de
las visiones inducidas por la ayahuasca para autorregular el comportamiento,
deberían ser revisadas, ya que probablemente esa autorregulación vendría
motivada menos por la importancia de las visiones como por el papel
neuromodulador de los receptores seronotinérgicos que activa la ayahuasca.
Sería por tanto interesante que los futuros estudios con consumidores crónicos
de ayahuasca se centraran en investigar específicamente el rendimiento en
tareas relacionadas con la actividad del hipocampo, la estrategia más adecuada
posible hoy día para investigar la funcionalidad de la proliferación celular y
neurogénesis del giro dentado de dicha estructura.

CONCLUSIONES

Debido a que en la patología de muchas enfermedades neurológicas, como


por ejemplo el Alzheimer y las epilepsias del lóbulo temporal, así como
trastornos mentales con amplios índices de prevalencia, como la depresión
y los trastornos de ansiedad, el hipocampo juega un papel crucial, el conocer
con mayor profundidad su funcionamiento tanto en el nivel neurobiológico
como comportamental podrá servir para abordar de manera más eficiente este
tipo de enfermedades de amplio impacto social. De ahí que si el yagé, bien
consumido a diario a dosis no psicoactivas, bien consumido regularmente de
forma ritualizada a dosis psicoactivas demostrara inducir neurogénesis y esa
neurogénesis se acompañara de efectos psicológicos positivos a largo plazo,
el ahorro en gasto farmacéutico para el tratamiento de muchos trastornos
mentales y neurológicos sería incalculable. El impacto económico de este

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fenómeno tendría, por otra parte, una desafortunada repercusión negativa


para la industria farmacéutica.

Por otra parte, el impacto científico de esta hipótesis redundaría en un mejor


entendimiento del proceso de evolución de la especie humana al comprenderse
mejor los mecanismos implicados en la adaptación de los organismos a
su medio. Otra repercusión importante afectaría al campo de las ciencias
sociales, ya que si los mecanismos de adaptación cultural a los ambientes
cambiantes responden más a causas neurobiológicas que psicológicas, las
explicaciones tradicionales que entienden los procesos adaptativos de los
individuos como consecuencia de la influencia que tienen las cosmovisiones
peculiares sobre el comportamiento individual deberían revisarse, ya que los
resultados indicarían que las cosmovisiones no pasan de ser un mero producto
de procesos neurobiológicos complejos.

Si bien estas hipótesis son atrevidas, altamente especulativas y sin duda


cuestionables, lo que sin duda no lo es tanto es el planteamiento de un
posible papel neurogenésico del yagé. Profundizar en esta hipótesis supone
investigar la funcionalidad de la neurogénesis hipocampal partiendo de un
modelo naturalista basado en humanos, lo cual supone una superación de
las limitaciones propias de los modelos animales. Debido a que el consumo
de yagé se ha expandido por todo el mundo, en la actualidad se puede
disponer de un número suficientemente importante de sujetos que cotidiana y
voluntariamente activa sus receptores serotoninérgicos encargados de inducir
neurogénesis, por lo que serían sujetos ideales para investigar en profundidad
cuáles son las consecuencias funcionales de dicho proceso, del cual hasta el
momento existe un profundo vacío debido precisamente a la limitación de los
modelos desarrollados hasta el día de hoy.

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Yagé: ¿un adaptógeno biológico especíco?

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DROGAS Y ECONOMÍA UNA REFLEXIÓN PARA COLOMBIA

EDGARD DAVID SERRANO MOYA


DROGAS Y ECONOMÍA UNA REFLEXIÓN PARA COLOMBIA

EDGARD DAVID SERRANO MOYA


PH.D EN CIENCIAS ECONÓMICAS. PROFESOR TITULAR DEL DEPARTAMENTO DE ECONOMÍA Y
ADMINISTRACIÓN. FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES
UNIVERSIDAD DE CALDAS
edserrano2001@yahoo.com

Recibido: 20 de julio de 2006


Aceptado: 4 de agosto de 2006

“Todos los presidentes de los Estados Unidos, desde Nixon, se han


comprometido en una guerra contra las drogas ilegales: cocaína,
heroína, hachís y demás. Y cada presidente, sin excepción, ha perdido
dicha guerra. La explicación no está en una falta de esfuerzo de hecho,
considero que ha habido demasiado esfuerzo, sino más bien en una
propiedad básica de la demanda por drogas y en los efectos de tratar
de reducir el consumo de un bien como éste por medio del castigo a las
personas involucradas en su comercio” (Becker et al., 2006).

RESUMEN

Dos aspectos son sustanciales en esta exposición, el análisis económico de


la producción, tráco y consumo de las “drogas” requiere de una mirada
microeconómica que explique los mecanismos que operan en cada una de
estas etapas, las consecuencias para la sociedad se pueden analizar desde la
macroeconomía, en tanto estas actividades involucran en los agregados unas
dimensiones que por su tamaño económico y el uso de los factores involucrados
desbordan otros mercados formales, desde este análisis se mira el impacto de
una política de persecución como solución. Las consecuencias que genera
la represión y el castigo de actividades de mercado ilegales, como todas las
experiencias del pasado en torno a las prohibiciones, a la producción, consumo y
traco de drogas siempre ha generado más producción, tráco y costos sociales,
recordemos la historia del alcohol en Estados Unidos. La historia demuestra
desde los datos que el castigo no reduce el consumo en términos generales, en

77
Edgard David Serrano Moya

Becker et al. (2006), siguiendo un modelo de crimen y castigo con las ideas
convencionales de la economía neoclásica “la expectativa del castigo eleva el
precio que los proveedores de drogas necesitan recibir para estar dispuestos a
asumir el riesgo considerable que envuelve el negocio de las drogas”, el precio
aumenta pues la oferta se reduce y la demanda por el tipo de bien es elástica, y
la perspectiva del mayor precio desalienta la compra y el consumo de drogas
ilegales, como sucede con los bienes y servicios legales. Mientras más duro
se libra la guerra, mayor es la expectativa de castigo, mayor el precio de las
drogas en la calle y en general menor el consumo de drogas, esta hipótesis la
queremos discutir desde los aspectos microeconómicos y macroeconómicos
que pueden describir el mercado de las drogas.

Palabras clave: consumo de drogas, economía y drogas, guerra contra las


drogas.

ABSTRACT

DRUGS AND ECONOMY: A REFLECTION FOR COLOMBIA

Two aspects are substantial in this presentation, the economic analysis of


the production, trafc and consumption of “drugs” require a microeconomic
glance that explains the mechanisms that operate in each of these stages. The
consequences for society can be analyzed from the macroeconomic point of
view, since these activities involve dimensions that due to their economic
size and the use of the involved factors overow other formal markets. This
analysis aims to observe the impact of a policy of persecution as a solution.
The consequences that generate the repression and the punishment of illegal
market activities, as all the past experiences around prohibitions of the
production, consumption and trafc of drugs have always generated more
production, trafc and social costs, let’s remember the history of alcohol in the
United States. History demonstrates that the punishment does not reduce the
consumption in general terms, in Becker et al. (2006), following a model of
crime and punishment with the conventional ideas of the neoclassic economy

78
Drogas y economía una reexión para Colombia

“the expectation of punishment elevates the price that the drug suppliers need
to receive to be willing to assume the considerable risk that surrounds the drug
business”. The price increases since the supply is reduced and the demand by the
type of good is elastic, and the perspective of the greater price discourages the
purchase and the consumption of illegal drugs, as it happens with legal goods
and services. While stricter is the war against drugs, greater is the expectation
of punishment, greater is price of drugs on the street and in general, less is the
drug consumption. This hypothesis will be discussed from the microeconomic
and macroeconomic aspects that can describe the drug market.

Key words: Drug consumption, economy and drugs, war against drugs.

1. MICROECONOMÍA, PRODUCCIÓN, TRÁFICO Y CONSUMO.

Un análisis económico de las actividades relacionadas con el tráco ilegal de las


“drogas”, utilizando los instrumentos que la teoría neoclásica ha desarrollado,
permite entender algunos elementos del problema en torno a su estructura
económica y al poder de este mercado ilícito. En general el uso del modelo
de demanda y oferta de drogas ilegales, entrega elementos para sintetizar el
problema que encierran todas estas actividades categorizadas como ilegales.
1.1 LA PRODUCCIÓN

Aspectos como la producción y el consumo de las drogas muestran una serie de


mercados segmentados en las diferentes etapas de todo el proceso. En el caso
particular de la pasta de coca, como el de la base de opiáceos, se encuentra que
el proceso productivo no es homogéneo, lo que reviste diferentes implicaciones
según el ámbito que se analice. Los pequeños productores, que son por lo
general quienes cultivan tienen características de economía campesina, distintas
de las que ofrecen grandes productores con escalas de producción que se pueden
asimilar a las de cultivos agrícolas clasicados como de gran capital.
Una característica definitiva en esta distinción es la racionalidad de la
producción, es diferente el cultivo en contextos culturales como el de los
indígenas o el de la reproducción campesina, y otra el de una economía de
escala con estructuras militares que deenden la producción y procesamiento
de grandes cantidades de pasta de coca o de cocaína.

79
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 75 - 91
Edgard David Serrano Moya

Otro aspecto importante se relaciona con la aplicación de la fumigación, en el


terreno del cultivador de coca o amapola, que además intercala cultivos ilícitos
con sembrados de papa, café, yuca o plátano. Es fácilmente deducible que la
estrategia campesina de sembrar intercaladamente cultivos ilícitos con lícitos
es intencional, pero lo anterior no legitima al Estado para aplicar una medida
punitiva sumaria, como es la fumigación generalizada. (Rueda, 2004).
En este proceso un grave error frente a la erradicación y control policial es
mirar a ambos productores como iguales, por lo general el peso de la ley recae
sobre estos pequeños cultivadores, los más fáciles de encontrar y controlar, lo
que genera serios problemas sociales.
Otro problema es el relacionado con la producción de cocaína como tal,
el proceso de renamiento requiere de una infraestructura, tecnología y
conocimiento que implica grandes inversiones que son controladas o por
grupos subversivos, en Sudamérica, el Sudeste Asiático o ciertos países de
Oriente Medio.
1.2 EL CONSUMO

En una mirada positiva, desprendiéndome de la carga moralista que el tema


suscita, el problema del consumo que ahora lo comentaremos desde las
conductas adictivas, lleva a la conguración de una demanda por un producto
que se considera ilegal, y a una oferta por la existencia de esta demanda. Me
separo de la lógica ofertista en que opera la ‘ley de Say” –la oferta crea la
demanda– y me coloco en el plano en el que ésta se produce como consecuencia
de una demanda.
Parto de una pregunta importante: ¿Cómo analizar el comportamiento
individual del consumo en sociedades liberales? ¿Acaso no es una contradicción
perseguir a los consumidores? Las adicciones son costosas socialmente, en
la historia reciente de las sociedades liberales son “… una fuente enorme de
gastos, sufrimientos y despilfarro, que ilustran dramáticamente las patologías
que encontramos en los centros urbanos de Estados Unidos y de otros países”.
Desde la microeconomía, es importante mirar si la adicción es una conducta
racional o irracional (Elster, 1997).
Entre los fenómenos más conocidos denominados adicciones Elster (1997)
tipifica “… el alcoholismo, el abuso de drogas como heroína, cocaína,
sedantes, anfetamina y los barbitúricos, el tabaquismo, el comer en exceso y
la dependencia del juego”, aquí el juego como dependencia es “… la única

80
Drogas y economía una reexión para Colombia

adicción que no se basa en la ingesta de una determinada sustancia”. El trabajo


de Goldstein citado por Elster (2001) clasica en su libro adicción a siete tipos
de drogas: nicotina, alcohol y relacionados-barbitúricos (valium), opiáceos,
psicoestimulantes (cocaína, anfetamina), cannabis (marihuana, hachís), cafeína,
alucinógenos (mezcalina, LSD, éxtasis, etc.).

La adicción se puede considerar como “cualquier experiencia potente” pero es


preferible argumentar que las conductas se consideran adictivas, si satisfacen
por lo menos uno de los siguientes criterios, hay tolerancia, pero también
abstinencia, las personas incurren o desean abandonar un hábito, no pueden
hacerlo y reinciden, euforia y placer, ansias, bloqueo lucha por el autocontrol,
deseo e incapacidad para dejarlo, negación (Elster, 1997 y 2001). Además no
toda adicción química tiene los mismos mecanismos causales (Elster, 2001).

La tolerancia física, que se genera en la ingesta recurrente implica en el futuro


mayores dosis para obtener el mismo grado de satisfacción que se obtuvo
en el pasado. En cuanto a la abstinencia la interrupción del hábito produce
una disminución de la satisfacción, por debajo del nivel previo a la conducta
adictiva, la abstinencia genera síntomas con reacciones físicas y sicológicas en
las personas consumidoras, que les impiden en circunstancias de tratamiento
abandonar fácilmente la adicción.

La incapacidad para abandonar un hábito se relaciona con el anhelo vehemente


y la abstinencia, querer abandonar un hábito depende en gran medida de las
preferencias temporales y del grado de aversión al riesgo (Elster, 1997), pues
las primeras denen lo que el individuo quiere y la segunda determina de un
lado hasta dónde el individuo asume la abstinencia, pues el consumo de algo
que le hace daño no está en el imaginario del adicto. Desde esta perspectiva
de la adicción y desde los problemas de salud pública que implica las políticas
de prohibición, represión no tiene sentido.

Debido al fenómeno de la tolerancia, uno debe consumir cada vez más para
obtener el efecto deseado. Como consecuencias se tiene que se incrementan

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Edgard David Serrano Moya

los efectos secundarios (daño corporal o problemas económicos) y las dosis


más altas producen síntomas de abstinencia más agudos después de haber
abandonado la adicción. El temor a experimentar los síntomas de abstinencia
produce la incapacidad de abandonar el hábito (o por lo menos, lo diculta).

La racionalidad implícita en los modelos clásicos de comportamiento, como


el de la hipótesis de racionalidad económica, no son sucientes para explicar
las adicciones (Elster, 1997). Es evidente que el modelo de mercado y el
mecanismo de precios se quedan cortos frente a la conducta de elección de
un individuo ante un bien que genera adicción, las preferencias bien denidas
de una persona.

El modelo en particular no explica por qué motivo algunas personas comen,


beben, fuman y juegan moderadamente, mientras que otras lo hacen en forma
excesiva. Tampoco explica por qué algunas personas no beben, ni fuman
ni juegan. El modelo estándar debe complementarse con otros elementos
explicativos, además existen modelos no estándar que presentan mecanismos
completamente distintos.

Desde la economía el enfoque intencional-racional de Becker y Murphy (1988)


que se mira desde las teorías de la elección para explicar “adicción racional”
desborda el enfoque de mercado; sostienen que en determinadas circunstancias,
las personas preeren deliberadamente la adicción a la no adicción, conociendo
muy bien las consecuencias que les acarreará el convertirse en adictos, las
personas ignoran cuál es su tipo (no se conocen en su comportamiento) y
algunos “se ven atrapados porque juegan con la idea de que no pertenecen
al tipo de personas que se deja atrapar”, pero este enfoque no contempla que
la misma adicción puede interferir en el proceso de elección, lo que genera
un comportamiento irracional en el proceso, inducida por las drogas, las
preferencias en la mejor situación se invierten (Elster, 2001).

Analicemos este testimonio de cocainómanos tomado de Elster (2001, citando


a Gawin,1991):

82
Drogas y economía una reexión para Colombia

“Los adictos a la cocaína dicen que prácticamente todos sus pensamientos


se centran en la cocaína durante los atracones; pierden completamente
su signicado comer, dormir, el dinero, los seres amados, la propia
responsabilidad y la misma supervivencia”.

Las motivaciones del consumo implican situaciones totalmente alejadas de la


lógica neoclásica, pero un aporte interesante de Elster (2001) está en su crítica
a si el consumo de drogas y en particular de cocaína tiene un comportamiento
elástico o no a los precios, en este sentido la ambigüedad de los resultados
empíricos, entre estos los de los modelos de Becker dejan mucho campo de
análisis en este sentido, pues coloca en duda los argumentos convencionales
del cientíco de Chicago en torno a la legalización.

Los modelos intencional-irracional suponen que las personas actúan


intencionalmente, aunque no en forma racional, cuando adoptan conductas
adictivas.

Estos dos aspectos van en contravía de la lógica convencional sobre el


consumo e independientemente de su validez no son tomados en cuenta
frente a las consecuencias que las prácticas sociales frente al consumo y el
rechazo de éste por parte de sociedades represivas generan.

El modelo denominado en la literatura especializada funcional-con


mecanismos proviene de la interacción entre las ciencias sociales y
biológicas, este plantea al refuerzo (aquí no opera la selección) como un
elemento importante en la elección de la persona “el refuerzo inconsciente
da por resultado una conducta aún más resistente al abandono del hábito
que la producida por una recompensa coherente” (Elster, 1997). La teoría
del refuerzo pone el acento en el patrón temporal de las recompensas y en el
mayor interés de una recompensa altamente satisfactoria en el corto plazo.

Funcional-sin mecanismos. El abuso de las drogas, el juego y la adicción en


general pueden afectar a cualquier tipo de personas y de funciones sociales.

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Edgard David Serrano Moya

Si bien por lo general señalan que esas conductas tienen varios benecios,
no llegan a demostrar cómo los benecios pueden mantener la conducta que
los ocasiona.

Causal-subintencional Para un autor como Elster “las conductas adictivas


se basan en la formación endógena de creencias, como el autoengaño o las
ilusiones” allí la adicción se oculta tras una imagen social en donde se cree
que se ha exagerado “en el daño que pueden ocasionar esas sustancias”
(Elster, 1997).

En esta situación las percepciones que tienen las personas sobre el futuro y
los efectos de una adicción en su salud pueden afectar su decisión de consumo
(Becker y Murphy, 1988) si los efectos de la adicción para la salud de la
persona son relativamente lejanos estos no inuirán en una decisión de dejar
de ingerir las sustancias (Ainslie citado por Elster, 2001). La adicción es el
resultado de una decisión racional basada en información fundamentada o
bien está moldeada por programas de refuerzo cuyo funcionamiento el agente
desconoce por completo. Cualquier teoría sobre las adicciones en las que
se ingieren sustancias (y quizás en las otras) deben contar con fundamentos
neurosiológicos.

En el caso de las drogas pesadas, el alcohol y la nicotina, los síntomas de


abstinencia se alivian inmediatamente al retomar la conducta adictiva y
constituyen la principal motivación para volver a ella.

2. ASPECTOS MACROECONÓMICOS EN LA PRODUCCIÓN, TRÁFICO Y CONSUMO

El valor de mercado de drogas es difícil de estimar, sin embargo para Naciones


Unidas el mercado de drogas en el año 2003 era de US $13 billones en la
producción, US $94 billones en las ventas y en US $322 billones el total de
lo que va de la producción al consumidor, se multiplica casi por 30 veces el
valor del mercado desde el inicio de la cadena productiva (World Drug Report,
2005). Esta es una cifra conservadora frente a los cálculos de $500 billones que

84
Drogas y economía una reexión para Colombia

se obtienen, cuando el cálculo se hace sobre la base de los precios máximos


de las drogas en el mercado norteamericano. Según la ocina del control
nacional de drogas (2001) en el año 2000 los norteamericanos gastaron $36
billones en cocaína, $10 billones en heroína, $5,4 billones en metanfetaminas,
$11 billones en marihuana y $2,4 billones en otras sustancias, cifras que son
discutidas igualmente1.

El aumento del valor se correlaciona con el aumento en el consumo, por lo


menos en la década de los noventa los estudiantes del grado 12 de secundaria
en Estados Unidos aumentaron el consumo de 29% en 1991 a 42% para 1997;
la información de la NHSDA indicaba un aumento en las tasas de consume
de adolescentes en el rango de 12 a 17 de un 13% en 1991 a 19% en 1997,
el problema es que un alto porcentaje de los entrevistados no respondió la
encuesta sesgando la información.

Pero el problema en Europa y en particular en Inglaterra ha crecido (The


Independent, 2006), estudios recientes han estimado que 65.000 niños
y adolescentes en el rango de 11 a 15 años en las escuelas de Inglaterra
respondieron haber tomado cocaína, el consumo de esta ha aumentado del 1%
en el grupo de edad referenciado en el año 2004 al 2% en 2005; de un total
de 320.000 adolescentes, 35.000 de ellos de 11 años dijeron haber recibido
ofertas de consumo de cocaína.

En el caso de la cocaína en Gran Bretaña, la disponibilidad y el bajo precio


alrededor de £50 y £60 por gramo, permite valorar un mercado de £ 3billones
al año. Para conseguir más consumidores jóvenes, los tracantes ahora venden
cocaína en paquetes de medio gramo a £25 (The independent, 2006).

1 Los resultados de un estudio considerado el más acertado sobre las cifras del mercado ilegal de drogas coloca las
cifras entre 45 y 280 billones de dólares. Francisco E. Thoumi. “The Numbers Game: Let’s All Guess the Size of the
Illegal Drug Industry”. Journal of Drug Issues, Vol. 35, No. 1, Winter 2005, p. 191.

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Edgard David Serrano Moya

2.1 ALGUNAS CIFRAS PARA COLOMBIA

El problema sustancial para un país como Colombia debe contextualizarse en


torno a la serie de elementos que en los últimos treinta años ha generado el
problema de la producción y traco de cocaína.

Colombia pasa de ser un importante exportador de marihuana a medidos de


los años setenta a ser el mayor exportador de cocaína en América Latina.
En 1995 del total de la producción mundial de pasta de coca Colombia
producía el 10%, actualmente el 90%. Luego de 4 años del Plan Colombia
el país continúa con los mismas 144.000 mil hectáreas sembradas de coca,
lo sorprendente es que luego de los programas de fumigación (140.000 ha)
y erradicación manual (más de 30.000 ha) en 2005, la productividad ha
aumentado (Rueda, 2006) con igual o menos hectáreas, pues los datos son
discutibles, por lo general subvalorados.

La búsqueda de disminuir a través de las políticas represivas la producción


lo único que ha generado es un desplazamiento intrarregional inicialmente
de los cultivos, luego interregional y además interpaíses, por otra parte lo
que se redujo en los noventa en Perú y en Bolivia se desplazo a Colombia,
ahora en el país los cultivos rotan de la Amazonía a los valles interandinos,
de estos a la zonas costeras y a la frontera con Venezuela.

El Plan Colombia ha costado para Estados unidos lo mismo que recibió el


país por remesas en 2005, US $4 mil millones de dólares, otra cifra por lo
menos igual ha puesto Colombia, para poner ésta en contexto lo que valen las
exportaciones de café de dos años, ó 4 veces las exportaciones de ores.

Se calcula de forma conservadora que al país entran 3 mil millones de


dólares año por el negocio, indudablemente algo va de las ganancias de los
productores a los tracantes.

Los datos entregan una realidad desbordante, luego de gastar miles de millones

86
Drogas y economía una reexión para Colombia

de dólares infructuosamente, el fracaso de la guerra contra las drogas es


evidente, el Plan Colombia ha sido un estruendoso fracaso luego de seis años,
lo que en las últimas semanas de abril llevó a la manifestación en diferentes
medios políticos (congreso de USA) y en los medios de comunicación, a
pronunciarse sobre el fracaso de la política emprendida y que por más de
treinta años ha adelantado USA.

3. LA GUERRA

¿Es la vía para la disminución del consumo de drogas? ¿Existe una mejor
manera de hacerlo que mediante estas guerras fracasadas? El trabajo de
Becker et al. (2006) ha sugerido que la legalización de las drogas, combinada
con un impuesto indirecto al consumo, sería una manera mucho más barata
y más efectiva para reducir su uso.

La guerra contra las drogas implica una serie de actividades en diversos


frentes que en últimas quiere detener a productores y distribuidores de
drogas para luego castigarlos severamente. La persecución a la producción
y la expectativa del castigo para productores y tracantes eleva el precio
de oferta pues los costos de asumir mayores riesgos son mayores. Con
mayores precios se desalienta la compra y el consumo de drogas ilegales,
como sucede con los bienes y servicios legales. Mientras más duro se libra
la guerra, mayor es la expectativa de castigo, mayor el precio de las drogas
en la calle y menor sería el consumo si tanto la demanda por drogas como
la oferta fueran elásticas a los precios.

La evidencia de varios estudios indica según Becker (2006) que la demanda


por drogas es por lo general bastante inelástica; esto es, un incremento de
10% en sus precios, reduce la demanda sólo en algo así como un 5%, lo que
signica una elasticidad de cerca de 0,5%. Esto implica que mientras los
precios de las drogas crecen, el gasto real en éstas se incrementa, en este
caso, en cerca de un 5% por cada incremento del precio del 10%. De manera
que si la guerra contra las drogas incrementa sus costos en por lo menos un

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200% el gasto genera precios mas altos. Pero ni el consumo ni la producción


disminuyen como se ha manifestado en las cifras ya expuestas.

LA GUERRA EN CIFRAS

Detenidos por tráfico en Colombia 1990-2004 186.189

Colombianos detenidos en el exterior 10.113


2004
por narcotráfico
2.151
Correos humanos 1998-2004
158.350
Cultivos de coca en Región Andina 2004 hectáreas
86.300
Cultivos ilícitos en Colombia 2004 hectáreas
11.227
Laboratorios destruidos 1990-2005
1.012
Pistas destruidas 1990-2004
781.181
Erradicación de cultivos de coca 1994-2004
360
Extradiciones aprobadas 1999-2004
En 1970 era
de 20,5 en
Tasas de homicidio por 100.000
1990 de 89,5
habitantes en Colombia y en 1995 de
65,0
4.000 millones
Guerra contra la droga por año
de dólares al
(según Plan Colombia)
año
Fuente: Dirección Nacional de Estupefacientes.

Sobre los resultados de la guerra puede verse, según Rueda (2004), que la
reducción en el 2003 fue inferior en 66% al 2002 y menor a la de los últimos
tres años, existe una relación inversa entre la reducción de hectáreas de cultivos

88
Drogas y economía una reexión para Colombia

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91
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 75 - 91
CONTROL SOCIAL Y POLÍTICA CRIMINAL EN DROGAS

JOSÉ M. BORRERO NAVIA


CONTROL SOCIAL Y POLÍTICA CRIMINAL EN DROGAS

JOSÉ M. BORRERO NAVIA


JD., LLM
CENTRO DE ASISTENCIA LEGAL
AMBIENTAL, CELA, CALI, COLOMBIA
PROFESOR MAESTRÍA CULTURA Y DROGA
borrero@uniweb.net.co
www.joseborrero.com

Recibido: 5 de septiembre de 2006


Aceptado: 3 de octubre de 2006

RESUMEN

Esta conferencia presenta un panorama de los mecanismos de control social,


con énfasis en aquellos dispuestos para el control de las conductas desviadas.
A renglón seguido examina los juicios de valor implicados en el proceso
de criminalización (cultural y político) que concluye tipificando conductas
como antijurídicas y culpables, declaradas como lesivas de bienes jurídicos
protegidos. Pondera las ventajas y desventajas del sistema penal frente a
las conductas desviadas y/o delictivas inherentes al “negocio de la droga”.
Enseguida estimula una reflexión sobre la complejidad cultural comprometida
en la prohibición de las drogas o substancias alteradoras de la conciencia.
Describe la nocividad de las drogas como performativa y no ontológica.
Hace un balance de las consecuencias políticas, culturales y ambientales de
la prohibición en su contexto punitivo. Finalmente propone un ideario de
política pública en materia de drogas que comience por retirar su control
del sistema penal y le instale en una estrategia de tolerancia, educación y el
desarrollo de una cultura en drogas.

Palabras clave: drogas, control social, política criminal, política pública,


prohibicionismo, criminalización.

95
José M. Borrero Navia

ABSTRACT

SOCIAL CONTROL AND CRIMINAL DRUG POLICY

This conference presents an overview of the social control mechanisms,


with emphasis in those directed towards the control of diverted conducts.
Afterwards, it examines the value judgments implied in the criminalization
process (cultural and political) that concludes in the typification of conducts
as antilegal and guilty, declared as harmful to legally protected interests.
It weighs the advantages and disadvantages of the penal system regarding
the diverted and/or criminal conducts inherent to the “drug business”. The
article also stimulates a reflection on the cultural complexity jeopardized in
the prohibition of drugs or conscience altering substances. It describes the
harmfulness of drugs as being perfomative and non ontologic. In addition, the
text makes a balance of the political, cultural and environmental consequences
of the prohibition in its punitive context. Finally, it proposes several ideas
of public policy in the matter of drugs that begin with the removal of its
control from the penal system and to install it within a strategy of tolerance,
education and the development of a drug culture.

Key words: Drugs, social control, criminal policy, public policy,


prohibitionism, criminalization.

“…creemos que una solución al problema de la violencia en Colombia,


e incluso, de manera más general, al problema del contrato social en
Colombia, debe pasar por una solución al problema del narcotráco y
ésta, a su vez, debe pasar por un acuerdo internacional encaminado a la
legalización de la droga”.

Bonaventura de Sousa Santos y Mauricio García Villegas1

1 Bonaventura de Sousa Santos y Mauricio García Villegas, Caleidoscopio de las Justicias en


Colombia, Tomo II, 466. Bogotá, 2001.

96
Control social y política criminal en drogas

“La cruzada ha llegado lejos, y los gobiernos se han comprometido muy


profundamente en ella. Si los colegios médicos y las magistraturas osaran
hoy sugerir su irracionalidad, bastantes pensarían que esas corporaciones
les habían engañado sistemáticamente, creando un monstruo artificioso, o
bien –cosa más previsible– que habían sido comprados por el narcotráfico.
Pocos tendrían presente que eso implica el fin del narcotráfico mismo, y
quizás el principio de una era caracterizada por la cultura farmacológica,
donde todas las sustancias con acción sobre el psiquismo humano
podrían empezar a hacer cosas que merecen un régimen no dominado por
consideraciones de mera rentabilidad económica”.2
Antonio Escohotado

DE CONDUCTAS, NORMAS Y DELITOS

El delito no posee una ontología natural. Una conducta humana adquiere el


carácter de delito como resultado de una operación jurídico-política en la cual
concurre una miríada de fuerzas sociales, imaginarios, mentalidades e intereses
de toda índole. La realidad del delito es jurídico-política.

Cada sociedad decide en cada época cuáles intereses y derechos constituyen


bienes jurídicos valiosos que requieran de especial protección mediante un
régimen de sanciones para castigar vulneraciones u ofensas contra ellos. La
vida humana, la libertad o el medio ambiente son ejemplo de ese tipo de bienes
valiosos. Sin embargo, no siempre bienes universalmente valorados han sido los
únicos objetos de protección penal. En muchas oportunidades son prejuicios,
discriminaciones y equívocos juicios de valor, los factores decisivos en la
calicación de una conducta como delictiva. Así, por ejemplo, hace menos de
un siglo la delidad sexual de la mujer en el matrimonio era considerada un bien
muy preciado que merecía protección penal. De manera que el adulterio de la
mujer se castigaba con penas muy severas.

2 Antonio Escohotado, Historia de las Drogas, Volumen 3. Alianza Editorial, Madrid. 2004:
380.

97
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 93 - 120
José M. Borrero Navia

Las normas que regulan las diferentes actividades humanas no se cumplen ni


aplican axiomáticamente como ocurre con las leyes de la física mecánica. Por el
contrario, su cumplimiento y aplicación dependen en buena parte de los vaivenes
de la voluntad humana y, especialmente, del grado en que sus valores han sido
aceptados por los distintos actores sociales. Un Estado ideal de total complacencia
con las normas sólo tiene cabida en utopías totalitarias. Inclusive, en un Estado
tal tampoco sería previsible un cumplimiento absoluto de las normas por parte
de todos los miembros del grupo o sociedad. Con la voluntad humana de por
medio siempre estaremos avocados a un mayor o menor grado de desviación
y conicto. Lo cual es a todas luces mucho más saludable que el más piadoso
régimen totalitario.

Las normas deben cumplirse cuando su mandato resulta de un cierto grado de


consenso respecto de los valores que declara e instituye. En ciertos campos es
más fácil conseguir el consenso que en otros. Todos estamos de acuerdo en que
peatones, ciclistas y conductores de automotores, deben observar un mínimo
de reglas para garantizar en la ciudad el libre ejercicio de la movilidad a todos
y cada uno. Por ello estamos de acuerdo en observar las señales del tráco y
en respetar a los actores más vulnerables. Sin embargo, de este consenso no
resulta una completa observación de las reglas y la correspondiente inexistencia
de violaciones a las mismas. Por el contrario, todas las sociedades registran
un mayor o menor número de infracciones de tránsito, algunas de ellas con
consecuencias fatales. Estas infracciones ocurren en proporción directa a factores
relacionados con la infraestructura vial, tales como nivel de organización del
tráco, condiciones de la malla vial, señalización, o bien con factores culturales
tales como nivel de conocimiento y adopción de las reglas por parte de los
ciudadanos, grado de conciencia social y de sentimientos de solidaridad social
y respeto, entre otros.

Para asegurar la complacencia con las normas se adoptan estrategias de control


social. Estas estrategias comprenden procesos de socialización primaria y
secundaria desarrollados en el seno de la familia, la escuela, los grupos de anidad
por vecindad, edad, hobby u ocio, que propician en mayor o menor grado el

98
Control social y política criminal en drogas

consenso en torno a los valores expresados por las normas. Estas estrategias
también exhiben mecanismos para propiciar tolerancia y exibilidad en el manejo
de disensos, desviaciones y disidencias. De esta manera es viable asimilar las
infracciones y desviaciones en una ecología cultural evitando que la sociedad
resulte malograda por marejadas de graves conictos

A diferentes tipos de desviaciones o disensos corresponden distintos límites de


tolerancia y exibilidad, adoptados en el contexto de la constelación de normas
que las sociedades formulan o imponen a lo largo de su historia, sean culturales,
sociales, políticas o morales.

Todos los tipos de esta constelación normativa pueden clasicarse en dos grandes
grupos usando como indicador su pertenencia o no a un sistema coactivo de
implementación:

a) El primer grupo comprende todas las normas del derecho positivo en


un amplio rango que va desde aquellas que regulan el tráco urbano,
pasando por las tributarias, civiles, de familia o políticas hasta llegar a
las penales. Estas normas son obligatorias y su incumplimiento acarrea
sanciones para el infractor. Una tarifa punitiva para cada tipo de infracción
es aplicable dependiendo de la gravedad de la ofensa y del valor del bien
jurídico protegido.
b) En el segundo grupo se encuentran las normas no coactivas cuyo
cumplimento depende de juicios o decisiones inherentes al fuero íntimo
de cada persona, no susceptible de intrusión alguna. Es del gobierno de
nuestro fuero íntimo decidir la medida de la delidad sexual con nuestra
pareja o de la lealtad con nuestros amigos. La indelidad o la deslealtad
no son conductas punibles en el contexto del derecho positivo.

En el panorama del control social las conductas humanas pueden ser lícitas
o ilícitas, permitidas o prohibidas. Una conducta resulta prohibida en una
operación jurídico-política de naturaleza semejante a la de aquella que prescribe
el tipo de sanción aplicable a quien la desobedezca. Las lógicas que obran como

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cult.drog. No. 13, 2006, págs. 93 - 120
José M. Borrero Navia

fundamento de una prohibición son de diversa índole, a saber:

a) La decisión materializada en la prohibición de escribir letreros o dibujar


en las paredes parece fundarse en una determinada concepción estética
sobre las ciudades, el orden y la limpieza. Esta prohibición se encuentra
en los códigos de policía de muchos países, los cuáles tipifican su
desobediencia como una contravención que se castiga con multas y
penas de arresto conmutables. Desobedecida muchas veces en diversas
latitudes la prohibición resultó inocua para impedir que cientos de miles
de personas en todo el mundo, especialmente jóvenes, escribieran en
la paredes desafiando no sólo la prohibición sino los valores que la
prohijaron, dando nacimiento con su conducta a una nueva estética
ejemplarizada por los graffiti.

a. De distinta naturaleza es la decisión administrativa que restringe


la circulación de vehículos motorizados en las horas de mayor
congestión de acuerdo con el último número de la matrícula. Esta
prohibición busca reducir no sólo el número de automotores en
circulación sino los niveles de contaminación del aire. La lógica
que le anima se inspira en razones de salud pública y bienestar
ambiental.
b. Otra lógica asiste a la decisión que prohíbe la producción,
consumo y distribución de las drogas o substancias alteradoras
de la conciencia. Es tema de este texto escrutar las razones y
consecuencias de esta prohibición.

Continuando con este esquema fenomenológico podemos denir a la prohibición


de una conducta o actividad como la operación subsiguiente a un juicio de
valor que la encuentra nociva para intereses colectivos o bienes protegidos.
La prohibición de arrojar basuras en las calles o la de fumar en hospitales,
universidades y edicios públicos, están fundadas en razones de salud pública
y pretenden evitar los riesgos sanitarios inherentes a la acumulación de basuras
en las calles, así como proteger a las personas que, como fumadores pasivos,
podrían verse expuestas a los efectos carcinogénicos del humo del tabaco.

100
Control social y política criminal en drogas

Toda prohibición se justica como mecanismo para disuadir a los eventuales


infractores. Mediante la prohibición se pretende que un alto porcentaje de los
eventuales infractores sea disuadido por la expectativa de sanciones futuras.
Esta misma lógica alienta el establecimiento de sanciones para quienes incurren
en conductas delictivas.

LAS PROMESAS DE LA CRIMINALIZACIÓN

La prohibición puede tener como objeto una conducta criminal u otra no


criminal. El proceso mediante el cual una conducta es prohibida y tipicada
como criminal, es decir, declarada culpable, antijurídica y punible, se llama
criminalización. Tan pronto es criminalizada la conducta deviene en antijurídica,
porque es contraria al orden jurídico; culpable, porque materializa la mens rea
o voluntad del inculpado a título de dolo (intención de cometer el acto) o de
culpa (imprudencia, temeridad, negligencia); y, nalmente, punible porque
debe ser castigada.

La criminalización de conductas lesivas de bienes jurídicos protegidos y, por


ende, la imposición de sanciones penales, es un instrumento en las estrategias de
control social que la sociedad sólo aplica como último recurso –ultima ratio–.
En cualquier caso su utilización está sujeta a las siguientes condiciones:

a) Cuando no exista un mecanismo o sistema que represente menores


costos sociales para lograr el consenso en torno a una norma.
b) Cuando pueda preverse, con base en ciertos indicadores empíricos, que
la imposición del castigo producirá un benecio mayor a la sociedad
que su no imposición.
c) Cuando tanto la ley como la justicia puedan ser impartidas
igualitariamente, de manera que todas las acciones sean juzgadas con
la misma medida, y que los costos humanos por la aplicación de la ley
sean difundidos entre el mayor número de transgresores.

El sistema de justicia penal que administra las sanciones a los infractores

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cult.drog. No. 13, 2006, págs. 93 - 120
José M. Borrero Navia

pretende inuenciar la conducta humana en dirección de la conformidad con


las normas y, en consecuencia, busca reducir los conictos provocados por las
infracciones. Teóricamente el sistema debe conseguir, mediante un proceso de
socialización que podemos llamar terciario, que los miembros de la sociedad
más reacios al consenso en torno a los mandatos normativos ajusten su conducta
a los mismos, subsanando de esta manera los vacíos dejados por previas etapas
de socialización. Estas funciones debe cumplirlas con un mínimo de recursos
y costos sociales, ciñendo sus operaciones a principios básicos de respeto a la
dignidad humana, igualdad, legalidad, debido proceso, presunción de inocencia
y derecho de defensa.

De la criminalización se predican efectos socializadores sobre amplios sectores


de la población para rearmar los valores y restablecer el consenso en torno a
los mandatos legales. Se insiste en el poder disuasivo de las sanciones penales
para detener a los infractores y reducir el número de violaciones presentes y
futuras, a pesar de que “la realización efectiva de la función disuasiva de la pena
– prevención general negativa – no está empíricamente demostrada”.3

La experiencia ha demostrado que el sistema de justicia penal no es un mecanismo


adecuado para enfrentar ilegalismos incubados en el seno de graves injusticias
sociales, carencias culturales o discriminaciones, cuya mitigación o solución
corresponde a otros procedimientos y acciones de la sociedad en su conjunto. El
ejercicio de una “estrategia penal de frontera” para remediar tales conflictos pone
en práctica un ejercicio terrorista del poder de castigar que concluye prohijando
un mayor flujo de desviaciones e ilegalismos en la sociedad.

EL LADO OSCURO DE LA PROHIBICIÓN

Prohibido prohibir fue uno de los grafti que se pintaron en las paredes de
París en Mayo del 68, cuando la revolución fue encendida por pensamientos
disidentes que cobraron vida como si se tratara de un gran sueño tomándose
por asalto la realidad.
3 Baratta, Alessandro, 1986.

102
Control social y política criminal en drogas

Prohibir la prohibición es más que un sueño libertario cuando es necesario


ponderar en qué medida es razonable, o social, política y culturalmente viable
la decisión que prescribe una prohibición. En ocasiones la operación jurídico-
política que prohíbe una conducta resulta en un verdadero descalabro.
Entonces la prohibición concluye incubando una cultura criminal que florece
a expensas de la conducta prohibida. En lugar de operar como mecanismo
para disuadir a los eventuales infractores, la prohibición propicia un flujo de
conductas ilegales y delictivas que la burlan hasta hacerla inaplicable.

En estos casos la prohibición no erradica las conductas prohibidas ni las


reduce, sólo les cambia de ubicación social desterrándolas al espacio de las
ilicitudes, allí donde la operación jurídico-política que irracionalmente prohíbe
una conducta revela su papel más sobresaliente en la cogestión de un “ujo
perverso” de infracciones y crímenes. En contravía del argumento preventivo la
prohibición incrementa los costos sociales que teóricamente la sociedad debería
asumir tolerando la conducta que ha sido proscrita.

Éste es el caso de la prohibición de las drogas. Dando por cierto que el fundamento
del juicio de valor negativo sobre una conducta debe ser su nocividad, de manera
que al proscribirla se evite a la sociedad el daño que su práctica acarrearía, cuál es
entonces el fundamento para prohibir las drogas. Es decir, ¿dónde está el mal de
las substancias psicoactivas? Que la droga sea la expresión contemporánea del
mal, como dice Francisco Garrido Peña, la hace mala porque es mala, es decir
porque así ha sido denida. Su maldad no es ontológica, ni moral (al menos
en el sentido en que moralidad implica cierto grado de acuerdo, de diálogo,
de alteridad reconocida), sino sobrepuesta en virtud de una decisión político-
jurídica. Su maldad es prescrita, pregurada por la decisión que la prohíbe.

Drogas peligrosas son las drogas prohibidas, arma Escohotado.4 La


decisión jurídico-política que prohíbe las drogas es el fundamento de su
naturaleza farmacológica, en lugar de que esta última sea el fundamento de

4Antonio Escotado. Historia de las Drogas. Volumen 3, Alianza Editorial, Madrid, 2004:
121.

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cult.drog. No. 13, 2006, págs. 93 - 120
José M. Borrero Navia

su prohibición. En la misma dirección de esta lógica carrolliana, “la realidad


sociológica en materia de drogas es una consecuencia, y no una premisa, de
su status legal”.5

Las sociedades occidentales deben reconocer que las substancias psicoactivas


siempre han estado entre nosotros, siguen y van a continuar estándolo. No han
sido descubiertas y empleadas para hundir al ser humano, esclavizándole y
mutilando su dotación orgánica, sino para ayudarle a sobrellevar desafíos
vitales, mejorando su autocontrol y, en denitiva, su libertad y su dignidad
personal.6

Esto es particularmente cierto de las drogas transformadoras de la conciencia


que, como el ácido lisérgico y la mezcalina, abren la puerta a lo que podríamos
llamar el otro mundo de la mente. Sospecho, afirmaba Aldous Huxley7, que
están destinadas a desempeñar en la vida humana un papel por lo menos
tan importante como el que ha desempeñado hasta ahora el alcohol, e
incomparablemente más beneficioso.

La mezcalina y la LSD abren una puerta que da acceso a áreas de la mente que
habitualmente no conocemos, y donde es posible que encontremos experiencias
visionarias, a veces terribles, pero más menudo bellas y esclarecedoras (si
estamos física y sicológicamente sanos). También es posible que encontremos
una nueva forma de aprehensión, en la cual se trasciende de alguna manera
la relación corriente entre sujeto y objeto (...) Postulados tales como “Dios
es amor” son comprendidos con la totalidad del propio ser, y su veracidad
parece axiomática a pesar del dolor y la muerte. Esto se ve acompañado, por
una vehemente gratitud ante el privilegio de existir en este universo.8

Según Escohotado9 la historia enseña que ninguna droga desapareció o


dejó de consumirse debido a su prohibición. Enseña también que mientras
5 Ibídem, p. 353.
6 Escotado, Antonio. Sobria Ebriedad. El País, Madrid, España.
7 Aldous Huxley. Brave New World Revisited. Esquire. July 1956, at 57.
8 Smith, P.B. Chemical Glimpses of Reality. Ch. Thomas, Springeld 1972.
9 Antonio Escohotado. Historia de las Drogas. Volumen 3, Alianza Editorial, Madrid, 2004: 360.

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Control social y política criminal en drogas

subsista una prohibición hay mucha más tendencia a consumos irracionales.


No es siquiera sostenible, a nivel histórico, que la disponibilidad de una
droga aumente el número de adictos a ella; la Ley Seca puso en claro que los
alcohólicos no disminuyeron, y que sólo dejaron de beber –o redujeron su
consumo– parte de los bebedores moderados; esto es, quienes no necesitan un
régimen de abstinencia forzosa para controlarse.

En el caso de las drogas la prohibición es el crimen. Es la verdadera causa de


los delitos y conductas criminales asociadas a su producción, distribución y
consumo. La operación jurídico-política que establece la prohibición carece
de fundamento racional porque ha obedecido más a prejuicios ideológicos
o morales que a razones de salud pública, bienestar social o protección
ambiental. También porque es consecuencia de decisiones para favorecer
particulares intereses geopolíticos.

En estas circunstancias la prohibición es la matriz criminogénica de una


constelación de conductas delictivas que configuran el nicho criminal más
nocivo de la sociedad contemporánea. La prohibición incuba los delitos y
los multiplica como una cepa de bacterias, porque al poner fuera de la ley
las actividades de producción, distribución, y mercadeo de la sustancia
prohibida, en la práctica entrega su control exclusivo a mafias o bandas
ilegales. Gestadas en el mismo seno de la prohibición, las mafias terminan
detentando un exorbitante poder económico. Este poder es una puerta abierta
a la movilidad social y al protagonismo político que los mafiosos traspasan
en una carrera de corrupción y graves ofensas de toda laya contra los bienes
y valores más preciados de la sociedad.

MORAL Y JUSTICIA PENAL

El Derecho Penal contemporáneo renunció a las pretensiones de transformar


moralmente a los transgresores, de manera que propone tratarles con absoluta
asepsia moral, abandonando toda intención de reformarles en el sentido de
valores morales. El ciudadano, arma Ferrajoli, si bien tiene el deber jurídico

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cult.drog. No. 13, 2006, págs. 93 - 120
José M. Borrero Navia

de no cometer el hecho delictivo, tiene el derecho de ser interiormente malvado


y de seguir siendo lo que es.10

Se puede ser tan malvado como se quiera, siempre y cuando la voluntad


de hacer mal no se cristalice en una conducta que vulnere bienes jurídicos
protegidos por la sociedad. El anterior argumento, extremo si se quiere, no
mengua el papel que ha tenido un orden jurídico autónomo en la valoración
positiva del derecho a la diferencia y al libre desarrollo de la personalidad.
Lo mismo que en el proceso cultural para reconocer que la intimidad personal
es el límite de la intervención del derecho positivo y, por ende, del Estado.
Límite de la dignidad humana que totalitarismos de izquierda y de derecha,
ancados en la intolerancia, la mojigatería y la barbarie, han franqueado y
continúan haciéndolo.

El acoso de los comportamientos no heterosexuales, o de las desviaciones


no patriarcales constituye un caso singular de la intromisión del Estado en la
intimidad personal. La fobia contra las diferencias en el compartimiento sexual
se hizo razón de Estado al extremo de prescribir sanciones criminales para
los homosexuales y las adúlteras. Mientras el adulterio masculino prosperaba
secreta o abiertamente, la indelidad de las mujeres era castigada con severidad.
Con una tarifa punitiva muy semejante eran castigados homosexuales y
travestidos, por cuanto sólo las perversiones patriarcales estaban permitidas.

Libre del acoso moral la humanidad futura tendrá derecho a sus propias
desviaciones. Porque en sentido jurídico-político ninguna moral es buena
consejera en el proceso de criminalizar conductas o establecer prohibiciones.
Mentalidades gobernadas por una moral que no titubea en confundir el bien
con el mal al extremo de convertir en santo a un criminal11, propician la
perversión del sistema legal poniéndole al servicio de prejuicios e ideologías,

10 Luigi Ferrajoli. Derecho y Razón. Madrid, Trotta, 1995: 223-4, citado por Fernando Toco-
ra, Principios Penales Sustantivos, Bogotá, Temis, 2002: 9.
11 No hago referencia al criminal arrepentido de la leyenda evangélica que deja atrás años
de pecado, sino a aquel delincuente que persiste en el camino del mal para incrementar su
poder.

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Control social y política criminal en drogas

o bien de pretensiones partidistas y de grupo. La prohibición de conductas


homosexuales o de disidencias ideológicas y políticas que prescribe sanciones
para sus infractores, es un ejemplo de perversión del sistema legal.

La prohibición de las drogas es otro caso ejemplar de perversión del sistema


legal. Sin fundamentos farmacológicos, ni sociológicos, ni culturales, la
prohibición hizo carrera desde el Convenio de 1971 con un espurio jurídico que
consagra el derecho/deber de los Estados para intervenir en la esfera íntima12.
Convirtiendo al consumidor de substancias psicoactivas en un desviado moral o
espiritual, léase delincuente o enfermo mental, a quien sólo le cabe la reclusión
en los panópticos del castigo o del tratamiento psiquiátrico, la prohibición alienta
el lado oscuro del imaginario contemporáneo con una nueva personicación
del mal. De paso pervierte al sistema penal comprometiéndole en una cruzada
moral. El papel que deben tener los fundamentos farmacológicos, sociológicos
o culturales en el proceso de construcción de normas de derecho positivo, es
ocupado por los prejuicios. De esta manera el derecho penal no es más derecho
positivo sino un adefesio punitivo para reeditar ordalías y juicios de Dios.

MALOS MUY BUENOS

El mal ha sido personicado en expresiones muy diversas. Luzbel, por ejemplo,


fue un ángel caído con un pasado bueno. También se registran casos milagrosos
de malos que se hicieron buenos. A la luz de estos ejemplos podemos armar
que la personicación del mal es una performance cultural para ayudarle a la
moral en sus buenos ocios con los asuntos humanos. Nada menos podríamos
decir de la personicación contemporánea del mal que hace de la droga el peor
enemigo del bien, en una operación seudo jurídica muy conveniente para la
buena marcha de la política internacional y de los negocios. La falta de este
enemigo malo podría ser fatal para la justicia criminal, las fuerzas especiales
de la policía, el sistema nanciero, la industria de armamentos, los estrategas
militares, los predicadores y, en particular, para la industria cinematográca
que sucumbiría sin el malo bien caracterizado contra quien dirigir toda la furia
de sus héroes de celuloide.
12 Escotado, Antonio. Historia de las Drogas. Volumen 3, Alianza Editorial, Madrid, 2004: 120.

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cult.drog. No. 13, 2006, págs. 93 - 120
José M. Borrero Navia

Los primeros malos que recuerdo fueron los indios de Norteamérica, aniquilados
por colonos blancos, rubios y apuestos al comando de John Wayne, héroe de los
Westerns que veíamos en el matinée de los domingos. Entonces no sabíamos
que esa tramoya peliculera aludía al etnocidio de que habían sido víctimas los
pueblos indígenas, despojados a sangre y fuego de sus territorios ancestrales
por colonizadores puritanos. De segundos vinieron los japoneses que realmente
lucían muy malos, a pesar de ser bajitos y enjutos. Afortunadamente siempre
eran vencidos por nuestros héroes rubios bajo las órdenes de Gary Cooper,
Burt Lancanster o Robert Mitchum, quienes después comenzaron a enamorarse
de lindas japonesitas que todavía siguen esperando su regreso. De todos los
malos los alemanes fueron los peores porque también eran blancos, altos, bien
armados y estaban aliados con los japoneses. Mi idea de los valores morales
sufrió una fuerte sacudida viendo una película –quizás leyendo un libro– sobre
Venusdorf, el campo de amor donde los nazis más corajudos encontraban el
reposo del guerrero en brazos de las más bellas mujeres de la raza aria. Que los
malos recibieran semejante graticación, que la maldad fuese recompensada,
resultaba inaceptable para mi inocencia.13

Después vinieron los comunistas, unos malos que ya estaban en la radio antes de
llegar al cine, humillados en cada entrega radiofónica por el invencible Capitán
Ojo de Águila, adalid de la libertad y la democracia no visto sino imaginado
por la ereza de sus acciones y su vozarrón de machote. Los comunistas
eran gordos y no parecían tan malos porque en lugar de matar se la pasaban
espiando para robarse mapas e inventos militares de la ciencia occidental que
siempre recuperaba James Bond, el Agente 007 con licencia para matar, de
quien recibieron las últimas palizas antes de aparecer en escena Gorbachov
compartiendo roles estelares junto a Ronald Reagan.

A finales de los setenta los malos salieron de las películas para andar sueltos
por las calles de las ciudades colombianas, sólo que esta vez no lo hicieron a
caballo sino en flamantes camperos y ostentosas camionetas, - narcotoyotas
les llamaba la gente.
13 Entonces no había leído a Bernard Shaw ni tampoco Justine del Marqués de Sade.

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Control social y política criminal en drogas

Era un decir que en Cali estos malos eran “muy buenos” porque no perpetraban
atentados terroristas, ni pretendían figurar en política, ni menos aún querían
usurpar su lugar a los políticos, como lo había hecho Pablo Escobar. Sus
métodos eran más eficientes, menos ruidosos. Sin mucha alharaca habían
asegurado el control casi absoluto, no sólo de la ciudad, sino del país, en
particular del país político. Todo el mundo sabía que buena parte de la
policía trabajaba para ellos, que sus legiones de abogados manipulaban con
destreza al aparato judicial, que controlaban medios de comunicación, que su
dinero circulaba en los bancos y cooperativas, algunos de los cuáles habían
comprado, que lavaban montones de dinero en la industria de la construcción
y la inversión en bienes raíces y, en fin, que los políticos se derretían por
contarse entre sus amigos y recibir su apoyo en las campañas electorales.

La bondad de estos malos nunca estuvo en duda, ni siquiera en los peores


momentos. Cuando empezaron a presentarse episodios que ponían al desnudo
la emergente subcultura de la violencia impuesta por los narcotraficantes,
verbigracia, el asesinato a plena luz del día del desprevenido conductor que al
bajarse de su automóvil para dar o pedir una explicación, había sido acribillado
a balazos sin mediar palabra, para “que aprendiera a respetar”, o del temerario
que en algún centro nocturno intentó oponer resistencia al requerimiento de
ceder su mujer, su hermana o su novia al “patrón que quiere bailar con ella”,
la gente nunca atribuyó los crímenes a los grandes capos, sino a segundones
anónimos.

Es cierto que estos malos muy buenos no mancillaron una sociedad de


recios principios distinguida por su respeto de la justicia en las esferas del
mérito intelectual basado en la voluntad, la inteligencia o la creatividad
personales, del liderazgo fundado en atributos, del reconocimiento social por
virtudes cívicas. Ellos no fueron los primeros en quebrantar las reglas de la
justicia usurpando los espacios de otras esferas con el poder de su dinero, ni
inauguraron en el país la corrupción, el clientelismo, el tráfico de influencias y
las genuflexiones ante el dinero de los poderosos que hicieron ricos y famosos
a los más invertebrados.

109
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 93 - 120
José M. Borrero Navia

Con el delito erigido por los malos del narcotráco en vía privilegiada para
generar riqueza, y por ende, poder social, colgamos como nunca del relativismo
moral, a merced de valores tambaleantes. La justicia quedó en el limbo,
avasallada por la ley del más fuerte que había regresado con nuevos bríos para
reinar sobre todo el cuerpo social, sometiendo a su violencia sin límites no
solo las mismas operaciones del narcotráco sino todas las relaciones sociales
y, en consecuencia, el tratamiento de conictos.

EL FRACASO DE LA GUERRA CONTRA LAS DROGAS

La justicia sigue en el limbo. Porque la “guerra contra las drogas” declarada por
Richard Nixon en 1971, mantenida por más de treinta años (administraciones
de Johnson, Reagan, Bush y Clinton) y exacerbada por G.W. Bush, continúa
regando su baño de sangre. Poco importa a sus mentores que sea un estruendoso
fracaso respecto de sus propósitos declarados.

El representante republicano Tom Campbell afirmaba14 que, después de


haber gastado un cuarto de trillón de dólares desde 1980, la guerra contra las
drogas es un fracaso: a partir de 1980 el número de muertes por sobredosis se
incrementó en un 540%, el encarcelamiento por delitos relacionados con la
droga aumentó diez veces15, y la heroína de las calles cuadruplicó su pureza.
En lugar de prevenir o controlar el tráco de drogas no-lícitas, o reducir las
conductas asociadas al itinerario criminal de su cultivo, producción, tráco
y mercadeo, el balance de esta guerra muestra que mientras Colombia ha
fumigado su territorio con sustancias nocivas para la salud de su población y su
patrimonio ambiental, la demanda sigue en auge en Estados Unidos. No obstante

14 Peter Preston. Prohibition creates the link between drugs and crime, Guardian Weekly,
septiembre 14-20, 2000, p. 14.
15 En 1990 el total de arrestos vinculados al consumo, venta, distribución, manufactura de
substancias ilícitas fue de 1’089.500, mientras que en 1996 creció a 1’128.647. En 1990,
el total de prisioneros federales encarcelados por delitos relacionados con la droga fue de
53,5%, mientras en 1995 se elevó a 59,9%. Hoy EE.UU. tiene, en comparación con los
países más industrializados del mundo, la mayor población de personas encarceladas por
conductas asociadas con el consumo, venta, distribución de substancias psicoactivas prohi-
bidas.

110
Control social y política criminal en drogas

las fabulosas sumas gastadas en controles policivos, paramilitares y judiciales,


la producción va en aumento16. El consumo no disminuye sino que aumenta, y
la producción, además de diversicarse, se ha más que duplicado.17

En 1995 Colombia producía el 10% de la cifra mundial de pasta de coca.


Actualmente produce el 90%. Al cabo de casi siete años de Plan Colombia
(acordado entre Clinton y Pastrana e incrementado por Bush y Uribe) el país
continúa con los mismas 144.000 mil hectáreas de coca. Fumigando con
herbicidas18 desde aviones gringos o colombianos el Plan pretendía reducir a la
mitad las operaciones de narcotráco para el año 2005. Sin embargo, después
de fumigar 140.000 hectáreas y erradicar manualmente más de 30.000 en 2005,
la producción ha aumentado (Rueda, 2006) con igual o menos hectáreas. En
1996 Colombia producía 300 toneladas, ahora produce 640.

Los Estados Unidos han gastado en el Plan Colombia US $4 mil millones de


dólares y otra cifra por lo menos igual ha puesto Colombia.19

El Plan Colombia ha incrementado el enfrentamiento interno, así como


las violaciones a los derechos humanos y al derecho humanitario. Las
propuestas de este Plan reinciden en la misma estrategia de estrangulamiento
económico y prohibicionismo más endeudamiento, más privatizaciones, más

16 La producción se ha duplicado a pesar de los 650.000 galones de glifosato aplicados en


Colombia entre 1992 y 1998 porque los cultivadores se han desplazado hacia sitios escondi-
dos, de la Amazonía principalmente, causando mayores daños ambientales con plantaciones
e instalaciones de renamiento. En 1981 Colombia tenía 25.000 hectáreas plantadas de ma-
rihuana y coca; en 2001, según la CIA, hay 120.000 hectáreas cultivadas, sólo de coca. En
1990 la producción de heroína era insignicante; en 1996 el país ya producía 63 toneladas
métricas, y hoy Colombia ha superado a México como principal abastecedor hemisférico de
heroína. Mientras en 1998 la producción colombiana de cocaína fue de 435 toneladas métri-
cas, en 1999 alcanzaba las 520 toneladas métricas.
17 Antonio Caballero. Sobre un Campo de Sangre. Revista Semana. Julio 3 de 2006.
18Estados Unidos presiona por la aplicación de herbicidas que superen la capacidad de des-
trucción del glifosato, como el Imazapyr, Hexaxinona y Tebuthiuron, distinguidos por su alta
persistencia en zonas de intensa precipitación pluvial.
19 Suma equivalente al monto que recibió el país por remesas en 2005, lo mismo que suman
las exportaciones de café de dos años, ó 4 veces las exportaciones de ores.

111
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 93 - 120
José M. Borrero Navia

militarización, más lesiones contra el patrimonio ecológico que irán de la


mano de más erradicación forzosa de cultivos, más violaciones a los derechos
humanos, más injerencia norteamericana, más conflictos en nombre de la paz,
la prosperidad y el fortalecimiento del Estado.20

Las operaciones de erradicación de los cultivos sólo han representado mayor


violencia, desarraigo cultural, devastación ecológica, depresión económica
y corrupción, así como más crímenes, desplazamientos y guerras intestinas
para los colombianos. Entretanto las ganancias de las multinacionales del
narcotráco21 han engrosado los bolsones de maosos y testaferros, previo
lavado, a pesar de todos los controles, en los sistemas nancieros de Estados
Unidos, El Caribe, Suiza, Brasil y Colombia, entre otros.

Los herbicidas utilizados para la erradicación química de los cultivos se


aplican contrariando normas técnicas. En consecuencia alcanzan viviendas de
campesinos, cultivos de pancoger –muchos de los cuáles se han establecido en
el marco de programas de sustitución de plantaciones de coca–, lo mismo que
fuentes de agua, pastos y semovientes22. Nadie escucha las repetidas quejas de
los campesinos que padecen las consecuencias de la fumigación indiscriminada
arruinando sus cultivos de hortalizas, frutales, plátanos, maíz y yuca.23
20 OIDHACO. Ocina Internacional de Derechos Humanos Acción Colombia Bruselas. fe-
brero 2000.
21Se calcula de forma conservadora que al país entran 3 mil millones de dólares año por el
negocio.
22 Un caso ha sido la fumigación aérea intensiva contra los cultivos de coca en el departamento
del Putumayo. Según la Defensoría del Pueblo, se fumigaron incluso proyectos de Desarrollo
Alternativo y de cooperación internacional y hasta cultivos lícitos de comunidades indígenas y
campesinas que ya habían rmado “cartas de intención o de compromiso” para la erradicación
manual voluntaria. La aspersión del herbicida ‘glifosato’ –señala el informe ocial– aumentó la
deforestación del piedemonte amazónico, destruyó cultivos de alimentos y plantas medicinales,
afectó estanques piscícolas, incrementó migraciones de animales silvestres, produjo daños sobre
los cuerpos de agua, redujo la seguridad alimentaria, incrementó el costo de la vida y produjo
desplazamiento forzoso de la población hacia otros departamentos y hacia el Ecuador.
23 Por que existe una gran hipocresía en el ámbito internacional. A América Latina se la
obliga a sustituir cultivos ilícitos que son altamente rentables, sin darle acceso a los merca-
dos para sus productos legales. El proteccionismo es cada vez mayor en los Estados Unidos

112
Control social y política criminal en drogas

También se fumigan bosques andinos ubicados entre los 1.000 y los 4.000
msnm, donde se encuentran bosques de niebla y páramos invaluables, de
tiempo atrás afectados por tala asociada a colonización y cultivos de amapola,
ecosistemas que podrían padecer aun mayores impactos provocados por
una guerra biológica24 contra las plantaciones de amapola. En donde se
realizan operaciones conjuntas contra la guerrilla y antinarcóticos hay lugar a
desplazamientos de la población civil que conducen a mayores traumatismos
sociales, económicos y culturales tanto en las ciudades y zonas pobladas como
en el campo donde buscan refugio los desplazados.

Una consecuencia extrema del prohibicionismo ha sido el permiso para


fumigar las plantaciones que se encuentran en áreas de los Parques Nacionales
Naturales de Colombia, en el marco de los programas de erradicación de
“cultivos de uso ilícito”. Mediante Resolución 0015 de agosto 5 de 2005 el
Consejo Nacional de Estupefacientes autorizó la aspersión con el herbicida
glifosato de estos cultivos en los Parques Nacionales. Son impredecibles las
consecuencias ambientales de esta decisión.

La “guerra contra las drogas” no ha erradicado los cultivos de uso ilícito.


Sólo ha conseguido moverlos de una frontera a otra en desplazamientos de
tipo intrarregional, interregional e internacional. En los noventa los cultivos
se movieron de Perú y Bolivia a Colombia, en donde se desplazan desde
la Amazonía a los valles interandinos, y de éstos a la zonas costeras y a la
frontera con Venezuela.

En esta guerra hemos inmolado a miles de ciudadanos, jueces, periodistas,


magistrados, líderes políticos, candidatos presidenciales, ministros,

y Europa. Los subsidios domésticos de Washington para sus productores agropecuarios han
aumentando a $ 28.000 millones anuales, y en el Viejo Continente han llegado a $ 150.000
millones anuales. Declaración del canciller de Argentina, Rodríguez Giavarini, a su regreso
de una visita ocial a Bolivia. La Nación, Exterior, 10-26-00, Buenos Aires.
24 A este respecto se conoce la existencia del hongo Pleospora Papaverácea que con auspi-
cios de Naciones Unidas (UNDCP), se ensaya en Uzbekistán a n de extender su aplicación
a otros sitios del mundo donde se produzca opio.

113
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 93 - 120
José M. Borrero Navia

procuradores; arruinado nuestro excepcional patrimonio ambiental con talas y


agrotóxicos; y en n, hemos visto al crimen coronarse de éxito en la política,
los negocios, las relaciones sociales y la mentalidad colectiva. Tras siete años
de Plan Colombia sufrimos condiciones cada vez más graves de injusticia
social, desigualdad de oportunidades, inseguridad, desempleo25, además de
conictos armados. Dos millones de desplazados por la violencia buscan refugio
en campos y ciudades mientras una gran mayoría de nuestros conciudadanos
no puede ir más allá de los límites que trazan diariamente la confusión y el
miedo.

LAS UTILIDADES DE LA “GUERRA”

Bacon recomendaba a los ingleses en el siglo XVII propiciar guerras porque


eran métodos “lucrativos y restaurativos” para asegurar la hegemonía política
y la concentración de riqueza.

Bacon estaba en lo cierto. La guerra contra las drogas ha sido una lucrativa
inversión para Estados Unidos. Con ella han justicado su intervención militar
y política en los asuntos internos de América Latina y El Caribe, garantizando
la continuidad de un hábito inveterado de su política exterior: El presidente
Wilson envió a “Black Jack” Pershing a perseguir a Pancho Villa en México y a
los Marines a bombardear Veracruz. Harding y Coolidge enviaron los Marines
a Latinoamérica para “patrullar” y “vigilar” rebeliones. Las fuerzas armadas
norteamericanas han entrado y salido continuamente de Haití y República
Dominicana. Los asesinatos de Sandino, Jacobo Arbens y Salvador Allende, para
citar sólo algunos, ilustran la agenda de Estados Unidos en América Latina.

25 Colombia no sólo presenta la tasa de desempleo más alta de América Latina sino una de las
peores del mundo, dijo el Secretario Ejecutivo de la Comisión Económica para América Lati-
na, CEPAL, José Antonio Ocampo, al presentar el balance económico y social de los últimos
10 años en la región. “Ningún otro país en el hemisferio alcanza las tasas de desocupación
que se presentan en Colombia”, sostuvo Ocampo. La tasa de desempleo supera el 20% y las
propuestas del Gobierno para disminuirla agravan las precarias condiciones de los trabaja-
dores. El número de desempleados en las siete principales ciudades asciende a 1’461.000. El
Tiempo, Bogotá, Colombia, febrero 20, 2001.

114
Control social y política criminal en drogas

La “guerra contra las drogas” sirvió de excusa al gobierno Reagan-Bush


para invadir Panamá, humillar al pueblo panameño y capturar como vulgar
narcotracante al mismo General Noriega que había estado en la nómina de
la CIA durante 12 años, recibiendo doscientos mil dólares anuales por su
cooperación.

A la sombra de la “guerra contra las drogas” Estados Unidos han intervenido,


directa e indirectamente, en los asuntos internos de Colombia. El Plan
Colombia 26 es un eficiente instrumento de intervención para militarizar el
conflicto colombiano haciéndole parte de la tenebrosa agenda de la “lucha
contra el terrorismo”, versión made in USA de la carrera armamentista y la
barbarie.

EL DERECHO SOBERANO A DISPONER DE SÍ MISMO

Consumir o no substancias psicoactivas es una decisión que debe dejarse a la libre


elección personal. Todo ser humano es soberano para disponer de sí mismo y de
su cuerpo como lo crea más ajustado a la lógica de sus deseos, valores o creencias.
Éste es el verdadero sentido de la libertad. Aunque a menudo no tengamos en
cuenta la connotación jurídica de nuestras decisiones cotidianas, diariamente
ejercemos el derecho a disponer libremente de nuestro cuerpo cuando, por
ejemplo, comemos alimentos con altos contenidos de grasas saturadas y glucosa
o decidimos abstenernos de ellos, cuando hacemos ejercicio físico u optamos
por el sedentarismo, cuando bebemos o no licores hasta intoxicarnos los viernes
en la noche, cuando fumamos o preferimos no hacerlo.
26 El Presidente de la Comisión de Desarrollo y Cooperación de la Unión Europea, Joaquim
Miranda, condenó este Plan por su carácter eminentemente militar. Y también porque no
ha sido el fruto de un proceso de concertación; –al contrario ha encontrado una oposición
generalizada, dentro y fuera del país–; porque desconoce por completo el fenómeno del pa-
ramilitarismo; y por lo tanto porque es el proceso de negociación mismo que está poniendo
en peligro. Además porque este plan, centrándose en la eliminación del cultivo y del tráco
de droga, a través de ataques a productores y especialmente por medio de fumigaciones
químicas y biológicas, no sólo pone en peligro la rica diversidad biológica colombiana, sino
que tenderá a acentuar el drama de los desplazados, que se verán obligados a refugiarse en
países vecinos.

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José M. Borrero Navia

Elegimos algunas de estas opciones muchas veces a sabiendas de los daños27


que podemos causar a nuestro organismo, induciendo colestericemia,
arteriosclerosis, enfermedades coronarias, cirrosis, hipoglicemia, diabetes
y otras dolencias, sin mencionar las disfunciones familiares, laborales o
económicas y los altos costos para la salud pública y la sociedad en su conjunto.
Sabemos que la ingesta de dietas con exceso de grasas saturadas y glucosa
provoca mayores costos sociales que los eventualmente asociados al consumo
de marihuana, cocaína o heroína. La ley, sin embargo, no dice nada al respecto
porque la sociedad ha decidido asumir esos costos como lo viene haciendo con
el alcohol y el tabaco. La ley tampoco obliga a abandonar las grasas saturadas
ni penaliza a quienes las comen. No tenemos noticia de iniciativas legislativas
al respecto ni de una “guerra contra la grasa” iniciada por el gobierno de
Estados Unidos para reducir su alto índice de enfermedades coronarias, quizás
él más alto del mundo, inducido por la dieta de sus habitantes.

En el campo de los biocidas (herbicidas, pesticidas, funguicidas) la ley tampoco


hace cuanto debiera. Son conocidos los efectos carcinogénicos y mutagénicos
de las trazas de biocidas en la salud humana y los estragos que ocasionan a
la biodiversidad, contaminando alimentos, aguas y suelos. Lejos de prohibir
radicalmente su aplicación, la legislación propicia una política de control
blando permitiendo que millones de seres humanos en todo el mundo consuman
“libremente” alimentos contaminados con biocidas. La manufactura de estos
venenos no está tipicada como delito, sus empresarios no están en la cárcel
ni sus laboratorios han sido incendiados para escarmiento público.

Allí donde la ley debiera ser dura, paradójicamente es blanda. O llega tarde,
cuando ya no hay remedio ni hace falta. Baudrillard piensa que el Derecho
siempre llega tarde28. Solo cuando los bienes maravillosos de la vida y la
naturaleza han desaparecido o están a punto de extinguirse, el derecho aparece
para sancionar su desaparición.
27 En acápites siguientes cito estadísticas sobre el número de muertes causadas directa o in-
directamente por el consumo de alcohol y tabaco. Sabemos que el daño provocado por estas
substancias es innitamente mayor al asociado al consumo de substancias prohibidas como
la marihuana, la cocaína y la heroína.
28 Jean Baudrillard. La Ilusión del Fin. Anagrama, Barcelona, 1997, p. 123.

116
Control social y política criminal en drogas

DESPENALIZACIÓN DE LA DOSIS PERSONAL

El derecho soberano a disponer de sí mismo, consagrado por la Constitución


Nacional de Colombia (1991) como derecho fundamental al libre desarrollo de
la personalidad, ha sido objeto de especial reconocimiento en la jurisprudencia
constitucional. En una sentencia histórica29 la Corte Constitucional normalizó
el consumo de drogas en dosis personal, declarando inexequibles los artículos
51 y 87 del Estatuto Nacional de Estupefacientes, Ley 30 de 1986, que
prescribían sanciones de arresto y multa para los tenedores o consumidores,
lo mismo que reclusión en establecimiento psiquiátrico para los adictos.

De esta sentencia que despenaliza la dosis personal30 deseo destacar las


siguientes consideraciones de fondo:

I. RECONOCER Y GARANTIZAR EL LIBRE DESARROLLO DE LA PERSONALIDAD

“Cuando el Estado resuelve reconocer la autonomía de la persona, lo que


ha decidido, ni más ni menos, es constatar el ámbito que le corresponde
como sujeto ético: dejarla que decida sobre lo más radicalmente humano,
sobre lo bueno y lo malo, sobre el sentido de su existencia. Si la persona
resuelve, por ejemplo, dedicar su vida a la graticación hedonista, no injerir
en esa decisión mientras esa forma de vida, en concreto, no en abstracto,
no se traduzca en daño para otro. Podemos no compartir ese ideal de
vida, puede no compartirlo el gobernante, pero eso no lo hace ilegítimo.
Son las consecuencias que se siguen de asumir la libertad como principio
rector dentro de una sociedad que, por ese camino, se propone alcanzar la
justicia”.
29 Sentencia C 221 de mayo 5, 1994. Magistrado Ponente Carlos Gaviria Díaz.
30 Dosis de uso personal, de acuerdo con el ESTATUTO NACIONAL DE ESTUPEFACIEN-
TES (Artículo 2º, literal j, “es la cantidad de estupefaciente que una persona porta o conserva
para su propio consumo”.
“Es dosis para uso personal la cantidad de marihuana que no exceda de veinte (20) gramos,
la de hachís que no exceda de cinco (5) gramos; de cocaína o cualquier sustancia base de
cocaína la que no exceda de un (1) gramo, y de metacualona la que no exceda de dos (2)
gramos”.

117
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José M. Borrero Navia

“Reconocer y garantizar el libre desarrollo de la personalidad, pero jándole


como límites el capricho del legislador, es un truco ilusorio para negar lo
que se arma. Equivale a esto: “Usted es libre para elegir, pero sólo para
elegir lo bueno y qué es lo bueno, se lo dice el Estado”.
“Y no se diga que todo lo que el legislador hace lo hace en función del interés
común, porque, al revés, el interés común resulta de observar rigurosamente
las pautas básicas que se han establecido para la prosecución de una sociedad
justa. En otros términos: que las personas sean libres y autónomas para
elegir su forma de vida mientras ésta no interera con la autonomía de las
otras, es parte vital del interés común en una sociedad personalista, como
la que ha pretendido congurar la Carta Política que hoy nos rige”.

“Si el derecho al libre desarrollo de la personalidad tiene algún sentido


dentro de nuestro sistema, es preciso concluir que, por las razones anotadas,
las normas que hacen del consumo de droga un delito, son claramente
inconstitucionales”.

II. LIBERTAD, EDUCACIÓN Y DROGA

“Cabe entonces preguntar: ¿qué puede hacer el Estado, si encuentra


indeseable el consumo de narcóticos y estupefacientes y juzga deseable
evitarlo, sin vulnerar la libertad de las personas? Cree la Corte que la única
vía adecuada y compatible con los principios que el propio Estado se ha
comprometido a respetar y a promover, consiste en brindar al conglomerado
que constituye su pueblo, las posibilidades de educarse. ¿Conduce dicha
vía a la nalidad indicada? No necesariamente, ni es de eso de lo que se
trata en primer término. Se trata de que cada persona elija su forma de
vida responsablemente, y para lograr ese objetivo, es preciso remover el
obstáculo mayor y denitivo: la ignorancia. Sin compartir completamente
la doctrina socrática de que el único mal que aqueja a los hombres es la
ignorancia, porque cuando conocemos la verdad conocemos el bien y
cuando conocemos el bien no podemos menos que seguirlo, sí es preciso
admitir que el conocimiento es un presupuesto esencial de la elección
libre y si la elección, cualquiera que ella sea, tiene esa connotación, no
hay alternativa distinta a respetarla, siempre que satisfaga las condiciones
que a través de esta sentencia varias veces se han indicado, a saber: que no
resulte atentatoria de la órbita de la libertad de los demás y que, por ende,
si se juzga dañina, sólo afecte a quien líbremente la toma”.
“ (...) Si, en una hipótesis meramente teórica –que la Corte no propicia

118
Control social y política criminal en drogas

ni juzga deseable– una sociedad de hombres educados y libres resuelve


vivir narcotizada, nada ético hay que oponer a esa decisión. Pero si dichos
supuestos se dan, es altamente probable que tal cosa no ocurra. La educación
tiene por destinatario, idéntico sujeto que el derecho: el hombre libre. Los
shocks eléctricos, los cortes quirúrgicos y los tratamientos químicos no
educan, inducen conductas irresistibles y, en esa medida, niegan brutalmente
la condición moral del hombre, que es lo único que nos distingue de los
animales”.

“No puede, pues, un Estado respetuoso de la dignidad humana, de la


autonomía personal y el libre desarrollo de la personalidad, escamotear
su obligación irrenunciable de educar, y sustituir a ella la represión como
forma de controlar el consumo de sustancias que se juzgan nocivas para la
persona individualmente considerada y, eventualmente, para la comunidad
a la que necesariamente se halla integrada”.

III. DROGARSE NO ES UNA ENFERMEDAD INVOLUNTARIA

“Bajo el tratamiento de ciertas conductas que se juzgan desviadas, como


enfermedades, se esconde el más feroz poder represivo, tanto más censurable
cuanto más se presenta como una actitud paternal (casi amorosa) frente al
disidente. La reclusión en establecimientos psiquiátricos o similares, ha
sido desde hace mucho, un vitando mecanismo usado por los regímenes
totalitarios para “curar” a los heterodoxos. Y las sociedades contemporáneas
se han empeñado en tratar a los drogadictos como heterodoxos, pero
heterodoxos enfermos a quienes hay que hacerles ver el mundo como lo
ven los gobernantes”.

“Sobre el punto anota Thomas Szasz31, con su habitual agudeza: “El hecho
de drogarse no es una enfermedad involuntaria, es una manera totalmente
deliberada de afrontar la dicultad de vivir, la enfermedad de vivir. Pero
como no sabemos curar la enfermedad de vivir, preferimos ‘tratar’ al
drogadicto”.

CAPUT MORTUM

A guisa de conclusión buena parte de cuanto quisiera añadir a este texto


se encuentra en la sentencia de la Corte Constitucional C 225, de la cual
31Entrevista concedida a Guy Sorman, en Los verdaderos pensadores de nuestro tiempo.
Seix Barral, 1992.

119
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José M. Borrero Navia

he trascrito algunos apartes. Allende los alcances jurídicos de este fallo


excepcional los colombianos debemos formular con urgencia una política
pública en materia de drogas que comience por retirar del sistema penal el
control de conductas relativas al transporte, almacenamiento, producción,
elaboración, distribución, venta y otras similares de estupefacientes que, al
tenor del Estatuto Nacional de Estupefacientes, siguen siendo penalizadas.

Este debe ser el siguiente paso luego de haber conseguido la despenalización


de la dosis personal. Es probable que la Convención de Viena de 1988, suscrita
por Colombia, y ratificada mediante Ley 67 de 1993, constituya una barrera
jurídica difícil de sortear dadas las condiciones del escenario internacional
contemporáneo. Sin embargo esta realidad jurídica no es inamovible. Por el
contrario, los proyectos de su remoción deben hacer parte integral de nuestra
agenda para propiciar un cambio cultural en materia de drogas.

En este orden de ideas el segundo propósito de una política pública al respecto


debe orientarse a promover el conocimiento de las drogas en sus verdaderas
dimensiones farmacológica, sociológica y cultural. Este conocimiento
permitirá redimirlas del estigma moral y de su condena irracional.

120
EL CONCEPTO “DROGAS”:
DESINFORMACIÓN EN SOCIEDADES CONSUMIDORAS PERIFÉRICAS

DANILO ANTÓN
EL CONCEPTO “DROGAS”:
DESINFORMACIÓN EN SOCIEDADES CONSUMIDORAS PERIFÉRICAS

DANILO ANTÓN1*
DOCTOR EN GEOGRAFÍA
CONSULTOR INDEPENDIENTE BASADO EN MONTEVIDEO, URUGUAY
danton@chasque.net

Recibido: 5 de septiembre de 2006


Aceptado: 22 de octubre de 2006

RESUMEN

La utilización inadecuada de la terminología es una causa principal de la


desinformación generalizada en el tema de las drogas. Este fenómeno se da
con gran intensidad en algunas sociedades periféricas, con poca experiencia
en la producción o consumo de sustancias psicoactivas, como es el caso del
Uruguay. En el país se ha creado una atmósfera favorable a la prohibición
indiscriminada de cualquier sustancia que sea catalogada como “droga” por el
discurso oficial y los medios de comunicación. Algunos intentos de cambiar
el enfoque por parte de algunos funcionarios de los sucesivos gobiernos y
organizaciones de la sociedad civil tuvieron algún éxito pero no lograron
modificar ni la legislación vigente, ni los procedimientos policiales, cuya
aplicación tiene consecuencias opuestas a las deseadas y termina promoviendo
sustancias de mayor toxicidad y conductas sociales problemáticas en la
juventud.

Palabras clave: drogas, terminología, desinformación.

*
Autor del libro “PUEBLOS, DROGAS Y SERPIENTES”, 2002. San José 1018 ap. 203
Montevideo, Uruguay. (598-2) 9004439.

123
Danilo Antón

ABSTRACT

THE CONCEPT OF “DRUGS”:


DISINFORMATION IN PERIPHERAL CONSUMING SOCIETIES

The inadequate use of the terminology is a main cause of the generalized


disinformation regarding drugs. This phenomenon occurs with great intensity
in some peripheral societies, with little experience in the production or
consumption of psychoactive substances, as the case of Uruguay. In the country
a favorable atmosphere has been created to the indiscriminate prohibition of
any substance that is catalogued as a “drug” by the ofcial speech and mass
media. Some attempts to change the approach of some civil employees of the
successive governments and organizations of civil society were somewhat
successful, but they didn’t modify the effective legislation, nor the police
procedures, whose application has consequences opposed to those wanted,
and ends up promoting substances of greater toxicity and problematic social
conducts in teenagers.

Key words: Drugs, terminology, disinformation.

INTRODUCCIÓN

Según Galeno, la droga (el fármaco) vence al cuerpo, mientras que el alimento
es vencido por el cuerpo2. Ese poder de las “drogas” de “vencer al cuerpo”,
en el sentido de apoderarse de aspectos de la voluntad, o más precisamente,
de modicar los estados de conciencia, ha teñido desde siempre su visión
histórica.

En la cultura represora y prohibicionista, no importa que la persona se “someta”


voluntariamente a esa “pérdida” transitoria del autocontrol, el hecho es visto

2 Ref. de Antonio Escotado. Historia General de las Drogas. Espasa, pág.13.

124
El concepto “drogas”: desinformación en sociedades consumidoras periféricas

como un ejercicio de libertad interior intolerable para quienes, ostentando


posiciones de autoridad, son adictos al control, desnudando sus propias
inseguridades y anfractuosidades morales.

ALGUNAS PRECISIONES ETIMOLÓGICAS

Ya desde el comienzo resulta arduo, incluso imposible, denir “la droga” en


forma rigurosa. Si bien las precisiones etimológicas aportan poco, vale la pena
consignarlas como una curiosidad histórica.

La propia palabra “droga” en español, italiano y portugués, “drogue” en francés,


“drug” en inglés y “droge” en alemán, se utiliza en Europa desde el siglo XIV
(cerca 1327). Probablemente proviene del francés antiguo “drouge”, tal vez
del “holandés medio3” del “bajo alemán medio”4 “droge-vate” o “barriles
secos”, equivalente a “mercaderías secas”, seguramente porque las medicinas
consistían sobre todo de hierbas secas.

Se la asocia con venenos desde el siglo XVI y con narcóticos u opiatos desde
1883, la palabra droguería (lugar donde se expenden drogas, en lugar de botica
o farmacia) se usa desde principios del siglo XIX5.

CUESTIONES DE TERMINOLOGÍA

Uno de los principales problemas del tema de las drogas es la inadecuada


y arbitraria utilización de la terminología, demostrativa de la ignorancia
generalizada que existe en la materia.

En la cultura contemporánea hay costumbre de hablar de “alucinógenos”


reriéndose a todas las plantas psicoactivas. En realidad, la mayoría de
3 Holandés medio era el idioma holandés que se hablaba en el período que va desde 1100 a
1500 de la era común.
4 El bajo alemán medio era el alemán que se hablaba en el período que va desde 1100 al
1500.
5 Ref. Online etymology dictionary, www.etymonline.com

125
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 121 - 144
Danilo Antón

los compuestos catalogados como drogas o declarados ilegales no son


alucinógenos.

También se usa frecuentemente la expresión “narcóticos”. Contradictoriamentre,


la palabra se aplica a muchas sustancias cuyo efecto es precisamente el contrario,
como es el caso de la cocaína, que como se sabe es un estimulante del sistema
nervioso central y de narcótico no tiene nada. Las palabras derivadas, como
“narco” o “narcotracantes” referidas a los tracantes o a la comercialización
de cocaína, son igualmente inadecuadas.

Otro término utilizado comúnmente, de signicado bastante impreciso, es


“estupefacientes” (sustancias que producen estupor). El vocablo “estupor” tiene
dos sentidos principales: a) asombro y b) adormecimiento, insensibilidad. Desde
ese punto de vista puede decirse que hay numerosos fármacos que producen
“estupor” en cualquiera de los dos sentidos, la mayoría de los cuales pueden
ser utilizados legalmente.

La expresión “droga” es también muy general e inadecuada para designar los


compuestos ilegales. En farmacología botánica se llama droga simplemente
a la parte de la planta que se usa. En sentido genérico se utiliza droga como
sinónimo de “fármaco”, una sustancia con efectos biológicos sobre el cuerpo
cuyas características e intensidad varían con las dosis. En el primer caso podría
ser también llamada “medicina” y en el segundo caso “veneno”. En los hechos,
ninguna sustancia es medicina o veneno, tan sólo las dosis lo son.

En cuanto a la calidad de “adictivas” atribuida a ciertas sustancias prohibidas,


es totalmente inapropiado. Muchas de las “drogas” ilícitas no son adictivas,
mientras que existe un gran número de productos legales que producen fuertes
adicciones.

En denitiva, el vocabulario del prohibicionismo es sistemáticamente impreciso


y contradictorio. Las únicas razones que determinan la designación de una
sustancia como droga ilícita son de tipo histórico-cultural y se reeren a

126
El concepto “drogas”: desinformación en sociedades consumidoras periféricas

calicaciones irracionales promovidas por sectores dogmáticos más allá de


toda lógica cientíca.

En los hechos, para poder referirse al tema en forma objetiva, se requiere


tener en cuenta la relatividad de los usos y efectos de las diversas sustancia
psicoactivas. Solamente de esa manera se logrará la precisión conceptual
necesaria para enfocar el tema en forma dialogada y razonable.

EL CONCEPTO DE “DROGA”

Semánticamente, el vocablo “droga” se reere a sustancias que producen algún


efecto sobre la siología humana, en especial sobre la esfera psíquica.

Su utilización se relaciona con los principios básicos en que se sustentan las


éticas de cada grupo social. A través de ella se pueden identicar los controles
que experimentan los individuos en el manejo íntimo de sus sensaciones y
emociones, así como la dependencia social de los poderes globales e históricos
que determinan cada momento histórico.

La imprecisión de los términos no es óbice para su uso indiscriminado por


parte de las autoridades políticas y policiales y en los órganos de prensa que
informan sobre el tema.

La construcción del imaginario social sobre las drogas está estrechamente


relacionada con la arquitectura ideológica de los grupos sociales.

La idea de “droga” oscila en las fronteras entre la libertad y la opresión, entre


el ser y el deber ser, entre la independencia y la moralidad, y que emerge, desde
el punto de vista antropológico, desde las propias raíces de la especie.

Estos orígenes humanos profundos son, generalmente, negados por las élites,
que procuran de esa forma extender el control de las personas al plano de la
conciencia.

127
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 121 - 144
Danilo Antón

Desde este punto de vista podemos armar que el concepto de droga ocia de
“espejo” de los recovecos más oscuros del alma social. De alguna forma reeja
el contenido visceral de las búsquedas y desencuentros de los seres humanos
en los límites de sus intelectos y sentimientos.6

ANTECEDENTES HISTÓRICOS

Los países del cono sur de América, y más particularmente el territorio de lo


que hoy es la República Oriental del Uruguay, se constituyeron a través de un
proceso de colonización genocida destructivo de lo nativo y reproductor de
las categorías europeas.

Las principales sustancias psicoactivas utilizadas por las sociedades indígenas


de la región uruguaya (minuanes, charrúas, guaraníes, chanáes) eran el tabaco,
la yerba mate, la chicha de maíz, y probablemente otras sustancias naturales
(p.ej., se menciona el posible uso psicoactivo y ceremonial de los brotes de
ceibo y las raíces de achiras, entre otros).

En el caso del tabaco, al igual que en el resto de América, su utilización estaba


vinculada con nes ceremoniales y embriagantes. Todavía hoy se le consume
con ese n en las comunidades guaraníes y otras. La yerba mate era consumida
como vomitivo y probablemente como alucinógeno débil.

La sociedad criolla fue abandonando las prácticas ceremoniales de las


poblaciones aborígenes. El consumo de tabaco continuó pero se le despojó
de su marco ritual y el consumo de la yerba mate fue transformado en una
especie de infusión. La chicha de maíz fue dejada de lado incorporándose otros
embriagantes importados por los europeos incluyendo bebidas fermentadas
6 En la construcción social del concepto de droga ver entre otros: Harry Levine (1978): El
descubrimiento de la Adicción; Howard Becker (1953): Becoming a Marijuana User; David
Musto (1973); y el trabajo de Peter Cohen en la Universidad de Ámsterdam (el sitio web
Cedro -www.cedro.uva.nl- contiene artículos tanto en ingles como en español que pueden
ser útiles para apoyar la mirada del autor). En la de-construcción del termino pharmakon,
ver Jacques Derrida: La Farmacia de Platón. Por ultimo, Tomas Szaz: ‘Nuestro Derecho a las
Drogas’. (Nota del editor).

128
El concepto “drogas”: desinformación en sociedades consumidoras periféricas

(vinos de uva y cervezas) y destiladas (aguardientes).

El consumo de canabis, cocaína y los derivados opiáceos empezó tardíamente


en la segunda mitad del siglo XX. Fue en ese momento que comenzó a
desarrollarse un concepto de droga en el país.

En estas sociedades la idea de “droga” se construyó a partir de una adaptación


bastante mecánica y supercial de los conceptos utilizados en los países
“centrales” (Europa y Estados Unidos).

En este trabajo tomaremos el caso del Uruguay, pero consideramos que podría
aplicarse igualmente a las sociedades urbanas de Argentina, Chile y otros países
de América Latina donde llegaríamos probablemente a resultados similares.

LA POSICIÓN DEL ESTADO Y EL ESTEREOTIPO SOCIAL

El Estado uruguayo ha seguido generalmente en forma disciplinada las


concepciones prohibicionistas de las élites de Estados Unidos y otros países
centrales, que a su vez fueron trasladadas casi literalmente a las resoluciones
acordadas sobre el tema en las organizaciones internacionales.

Estas reglas y disposiciones así como su aplicación concreta en el país se


basaron durante las últimas décadas en la convicción de que “la droga es un
serio problema” y de que el problema es particularmente grave con aquellas
“drogas” que han sido declaradas ilegales: principalmente la marihuana y la
cocaína, en menor grado la heroína y la morna (cuyo consumo es relativamente
pequeño en Uruguay), y recientemente éxtasis y pasta base.

De acuerdo a esta posición losóca represiva la solución al “problema” es


preferentemente policial, aunque también se considera necesario desarrollar
políticas para el tratamiento de los adictos, reputados verdaderos enfermos
tanto desde el punto de vista social como siológico y que por tanto deben ser
“tratados” y “curados”.

129
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 121 - 144
Danilo Antón

Durante la administración del Dr. Jorge Batlle del 2000 al 2005 en Uruguay
hubo un intento de reenfocar las políticas en esta materia, tanto por parte
del presidente como de su Prosecretario y Presidente de la Junta Nacional
de Drogas, Dr. Leonardo Costa. Estos funcionarios políticos estaban a favor
de la legalización gradual de las drogas ilícitas para disminuir su valor de
mercado y de alguna manera se procuró poner énfasis sobre otros consumos
que se consideraban más graves. Las estrategias se orientaron a combatir los
consumos problemáticos, enfocándose en el alcohol y el tabaquismo, así como
en sus consecuencias sanitarias y sociales.

Estas políticas fueron implementadas solamente en parte, porque otros jerarcas


del Gobierno, en particular del Ministerio del Interior y de las Jefaturas de
Policía, continuaron las prácticas represivas y policiales, ignorando en los
hechos el discurso presidencial.

En la administración actual del Dr. Tabaré Vázquez (2005-2010) se continuó


en cierta medida con las estrategias anteriores, aunque con un discurso menos
explícito. Se insiste especialmente en un enfoque combinado represivo-
educativo y de atención social de los adictos (ver más adelante).

ESTEREOTIPOS SOCIALES

El estereotipo social está vinculado a los informes televisivos y periodísticos, los


acontecimientos policiales que son divulgados por la prensa, los comunicados
de las agencias internacionales y, en particular, las políticas y enfoques
gubernamentales sobre el tema.

La utilización indiscriminada de términos como narcóticos, estupefacientes,


alucinógenos, narcotracantes, drogadicto, intoxicación, etc., ha llevado a que
el imaginario social se esquematice en el análisis del problema.

La prensa recibe las noticias de las capturas de “narcotracantes” y de las


conscaciones de “drogas” como éxitos importantes, e incluso en ocasión

130
El concepto “drogas”: desinformación en sociedades consumidoras periféricas

reciente las sustancias conscadas fueron “quemadas” públicamente por el


Ministerio del Interior en forma prácticamente ceremonial.

El resultado es una visión maniqueísta, donde la droga aparece como una


encarnación moderna del mal que amenaza a la sociedad en todas partes.

ASPECTOS LEGALES Y REPRESIVOS

Una forma efectiva de conocer la conceptualización de la droga en una sociedad


dada, más allá de los discursos, es describir las leyes y procedimientos aplicados
en la práctica con relación al consumo, tenencia y comercialización de las
sustancias clasicadas como “drogas”.

Desde el punto de vista legal las políticas fundamentalmente represivas del


Estado uruguayo se basan en la Ley 14.294 de octubre de 1974 aprobada durante
el período dictatorial, que es la que regula el control del consumo y tenencia
de drogas ilícitas, y dispone medidas contra su comercio.

Esta ley establece: El que fuere sorprendido consumiendo sustancias


estupefacientes o usando indebidamente psicofármacos o en circunstancias que
hagan presumir que acaba de hacerlo, portando estupefacientes para su uso
personal, deberá ser puesto a disposición del Juzgado Letrado de Instrucción
de Turno, a n de que éste ordene un examen del detenido por el médico de la
Comisión Nacional de Lucha contra las Toxicomanías y por el médico forense,
quienes deberán producir su informe dentro de las veinticuatro horas. Si del
examen resultare tratarse de un drogadicto, el juez impondrá el tratamiento
en un establecimiento público o privado o en forma ambulatoria, pero siempre
sujeto a los controles médicos que establezca la referida Comisión Nacional.

Según el Director de Coordinación Ejecutiva del Ministerio del Interior,


inspector principal Carlos Miguel Goró7 en declaraciones a la Radio El
7 Entrevistado por el periodista Emiliano Cotelo de Radio El Espectador, Montevideo el 12
de agosto de 2004.

131
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 121 - 144
Danilo Antón

Espectador en agosto del 2004, el procedimiento empleado es el siguiente:

La Policía detiene a las personas que están fumando, las somete al juez; éste
dispone que sea chada o no, puede disponer el procesamiento de acuerdo a
la cantidad de droga que tenga aunque la persona diga que sea para consumo,
porque el consumidor si lleva medio quilo de marihuana ya no es para consumo
propio, aunque él lo diga. Es muy amplia la gama de trabajos en este sentido
y luego es chado en el Departamento de Toxicología para su curación...

Si bien no está penado el consumo, sí están penadas La venta y la tenencia;


eso queda librado al criterio del juez actuante... se trata de ver qué medidas
curativas se pueden llevar a cabo sobre esa persona que se presume que es
enferma, al ser consumidora es enferma.

Esa persona (supuestamente “enferma” según Goró) permanece en condición


de detenida, en cualquier dependencia policial de toda la República Oriental
del Uruguay. No hay ningún ámbito especial donde deba estar detenida.

Señala Goró mostrando su punto de vista sobre el tema:

Primero que nada los que no son consumidores repiten el consumo de los
pequeños consumidores al ver la impunidad con que actúan. No sé si me
entiende: si un estudiante ve que hay otro fumando, dice: yo voy a fumar
también, porque no pasa nada.

Y luego sigue: Otra de las causas: genera un aumento del delito, porque en
este caso especíco la pasta base genera una alta adicción, lo cual genera a
su vez un alto gasto. ¿Qué hace esto? Produce un mercado especial para el
delito porque estos elementos tienen que nutrirse de dinero para comprar su
mercadería.

Y finalmente continúa Goró: cada quien sabe cuál es su medida de


responsabilidad ante el consumo. Es lo que quería decirle: si yo detengo a

132
El concepto “drogas”: desinformación en sociedades consumidoras periféricas

equis persona y resulta que esa equis persona ha estado detenida veinticinco
veces en distintas comisarías, en distintos puntos del país, estamos ante un
consumidor que se va a transformar mañana en un tracante. Usted puede
corroborar esto en la Dirección Nacional de Drogas: los consumidores de hoy
son los tracantes de mañana. Esto es así, no son simplemente palabras, es
algo comprobado, porque el consumidor de hoy cuando termina de venderle la
licuadora, el microondas a la madre, tiene que entrar a vender él para poder
obtener la droga. Es un potencial tracante en el día de mañana.

El reportero pregunta: Esa última expresión suya es más compartible que


la primera; en que sea un potencial tracante estamos de acuerdo, pero no
todos los consumidores terminan en tracantes. A lo que responde Goró No,
algunos terminan en lugares peores, lamentablemente. Y luego completa: la
droga lleva a la destrucción. Lo que se intenta preservar es casualmente la
salud del individuo, sacarlo de la droga.

Paralelamente, se informa en los diarios que la pasta base de cocaína se


ha adueñado del mercado ilegal de drogas. Según fuentes de la Dirección
General de Represión al Tráco Ilícito de Drogas, esta peligrosa sustancia
que, recuerden, tiene efectos terribles sobre los consumidores, ha desplazado
a la marihuana cuyo precio ha aumentado y ha relegado incluso a la cocaína
a consumidores de alto poder adquisitivo (Diario El País, Montevideo,
11/8/2004).

La inquietud por este fenómeno, por este cambio en la tendencia de consumo, se


desarrolla porque las autoridades policiales vinculan buena parte de los hechos
de violencia registrados en los últimos tiempos a acciones protagonizadas
justamente por adictos a la pasta base.

LA SITUACIÓN ACTUAL EN LA JUVENTUD URUGUAYA

Al margen de todos los conceptos y preconceptos que se manejan a nivel


social y político, las visiones catastrócas que sostienen que el agelo de la
droga acosa a la mayor parte de los jóvenes, los datos de las investigaciones

133
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 121 - 144
Danilo Antón

recientes muestran que la realidad es bastante diferente. La encuesta reciente


a la cual nos referimos más adelante, sobre jóvenes que cursan la Enseñanza
Secundaria en el Uruguay urbano, ilustra la situación a nivel de los institutos
de enseñanza pública del país.

Es importante aclarar que los datos serían diferentes a los que se obtendrían
con jóvenes de igual edad que han abandonado sus estudios, en particular los
jóvenes provenientes de familias que habitan asentamientos y tugurios.

Sin embargo, los datos disponibles permiten hacerse una idea de la situación
de la mayor parte de la juventud uruguaya (más de la mitad de la población
joven del Uruguay está enrolada en cursos de Secundaria pública).

En primer lugar, el consumo de las drogas más mencionadas (p.ej., cocaína,


pasta base) no parece tan catastróca ni alarmante como se plantea en la
población considerada. Aún considerando que la información proporcionada
por los encuestados fue dedigna (puede haber ciertas dudas de que lo sea)
se debe hacer notar que en un total de más de 8.000 jóvenes tan sólo 2,5 %
consumieron alguna vez cocaína (o sea unos 200 estudiantes), seguramente la
cifra de consumidores regulares es sensiblemente menor (probablemente no
más de diez o veinte), mientras que la pasta base fue consumida alguna vez
por un centenar de jóvenes, de los cuales, probablemente la gran mayoría no
desarrollaron hábito.

Cifras aún menores se obtienen con el crack, la morna y la heroína.

La única sustancia ilegal que muestra un nivel relativamente elevado y creciente


de consumo es la marihuana, los datos de la encuesta no muestran problemas
adictivos mayores en la población considerada.

Muy diferente es la situación del consumo de las drogas llamadas “legales” (el
alcohol y el tabaco). Cuando se analizan las cifras de consumo se comprueba
que la principal droga consumida por los jóvenes de Secundaria (edades 14 a

134
El concepto “drogas”: desinformación en sociedades consumidoras periféricas

20 años aproximadamente) es el alcohol con porcentajes de consumo reciente


de más de 50% y 12,7 años de edad de inicio. Se obtienen porcentajes algo
menores con el consumo de tabaco, con alrededor de 30% de consumidores y
una edad de inicio de 13,3 años.

Entre las sustancias ilegales la marihuana es la que se consume por mayor


cantidad de jóvenes (11,9 % la consumieron alguna vez).

Los encuestados que consumieron alguna vez cocaína son aún menos, apenas
2,5 %, mientras que las cifras de consumidores de pasta base apenas rebasan
el 1,2 % y los de crack 0,2%.

0,9 % de los jóvenes manifestaron haber consumido hachís alguna vez.

Mucho menor es el consumo de hachís (0,9% lo consumieron alguna vez), de


heroína (0,2%), opio (0,2 %) y morna (0,3 %), éxtasis (0,7%) y alucinógenos
(0,7%).

Las edades de inicio declaradas para estas sustancias variaron entre 14,3 y
15,7 años.

Tabla Comparativa de Prevalencia*


2003-2005 En porcentajes
Últimos 12 Últimos 39
Alguna vez Edad de inicio
meses meses
Sustancia 2003 2005 2003 2005 2003 2005 2003 2005
Tabaco 56,0 52,3 40,8 35,1 30,2 24,8 13,3 13,3
Alcohol 81,6 80,0 70,3 67,7 55,9 51,4 12,7 12,8
Marihuana 11,9 12,8 8,4 9,4 4,3 5,9 14,9 15,0
Solventes 2,7 3,0 1,4 1,6 0,5 0,6 13,9 14,3
Hachís 1,0 0,9 0,3 s/d 0,2 s/d 14,7 15,6
Alucinógenos 1,7 1,4 0,7 s/d 0,2 s/d 14,9 15,0
Heroína 0,5 0,2 0,3 s/d 0,2 s/d 13,8 15,0
Opio 0,6 0,2 0,2 s/d 0,1 s/d 13,9 14,8
Morna 0,5 0,3 0,2 s/d 0,1 s/d 13,9 14,3
Cocaína 3,1 2,5 1,7 1,5 0,8 0,5 15,0 15,3
Pasta base 1,2 1,2 0,7 0,6 0,2 0,2 15,1 14,8
* II Encuesta Nacional sobre Consumo de Drogas en Enseñanza Media. Resumen Preliminar. Abril 2006; Junta
Nacional de Drogas del Uruguay. Investigador Principal: Lic. Héctor Suárez.

135
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 121 - 144
Danilo Antón

Crack 0,8 0,2 0,3 s/d 0,2 s/d 14,7 14,8


Éxtasis 0,9 0,7 0,3 s/d 0,1 s/d 15,0 15,7

Muestra realizada entre el 25 de septiembre y 28 de octubre de 2005, 8.033


estudiantes en 368 aulas, 117 centros de enseñanza del Uruguay, país urbano,
2º año ciclo básico, 1º y 3er año del bachillerato.

PORCENTAJES DE ALUMNOS QUE EXPERIMENTARON CON MARIHUANA EN CADA NIVEL

Nivel 2º Ciclo Básico 1º Bachillerato 3º Bachillerato


Género Varones Mujeres Varones Mujeres Varones Mujeres
Porcentaje 5 4 18,6 13,4 30,3 21,4

Porcentajes de alumnos que consumen tabaco en cada nivel

Nivel 2º Ciclo Básico 1º Bachillerato 3º Bachillerato


Género Varones Mujeres Varones Mujeres Varones Mujeres
Porcentaje 9 15 22 35 32 38

EL CONCEPTO DE DROGA: EL PUNTO DE VISTA DE LA IGLESIA CATÓLICA

El tema de la droga ha sido históricamente una preocupación de la Iglesia


desde tiempos remotos. En las últimas décadas se ha notado una preocupación
por el tema que procura salirse de los estereotipos más transitados, e incluso,
en algunos casos, abstenerse de apoyar enfoques represivos8.

En un documento elaborado por el Pontificio Consejo para la Familia el 8 de


mayo de 1992: De la desesperación a la esperanza9 se resaltan varios puntos
importantes que mencionaremos a continuación.

8 Lo anterior, cultural e históricamente resulta novedoso sobre este tema. Este punto es bas-
tante original y sugiere explorarse para análisis sobre el tema en los diferentes países a nivel
latinoamericano por ejemplo. (Nota del editor).
9 De la desesperación a la esperanza; Familia y tóxico-dependencia; Biblioteca Electrónica
Cristiana, 2001; www.multimedios.org/docs/d000438

136
El concepto “drogas”: desinformación en sociedades consumidoras periféricas

En particular se señala que:

El problema principal del adicto, no es la droga, sino la falta de sentido


positivo de la vida. Esto radica en la crisis de valores y la falta de armonía
interior de las personas, esto ocasiona un ánimo inmotivado e indiferente, que
desencadena en un desequilibrio interior moral y espiritual del que resulta
un carácter inmaduro y débil.
Las crisis familiares, la falta de comunicación, la competitividad, el
consumismo, el egoísmo, etc., son factores que guardan importante relación
con la drogadicción.
La respuesta al problema, es la recuperación de los valores cristianos y
humanos que ofrece la Iglesia.
Es necesario llevar al drogadicto al descubrimiento o al redescubrimiento
de la propia dignidad de hombre, ayudarle a conseguir que resuciten y
crezcan como sujeto activo aquellos recursos personales que la droga había
sepultado.
La responsabilidad de la familia es fundamental ante la drogadicción.
Los rehabilitados, pueden ser de gran ayuda para los programas de
rehabilitación, ya que son testimonios creíbles para otros.

Esta posición complementada por el catecismo “El Respeto de la Salud”10 y


otros documentos muestran que hay una tendencia dentro del catolicismo a
enfocar el problema de la drogadicción sin demonizarlo (como solía ocurrir
en los tiempos de la Inquisición), procurando analizar las causas, los motivos
que inducen a las personas a recurrir a las drogas como escape de la vida que
llevan.

Se proponen posibles soluciones al “problema”, especialmente procurando


prevenirlo a través del fomento y recuperación de los valores humanos,
religiosos y morales.

LA IGLESIA CATÓLICA URUGUAYA

10 Ver Anexo.

137
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 121 - 144
Danilo Antón

En el caso del Uruguay la Iglesia Católica ha mostrado una posición


ambigua.

Por un lado se reafirma la idea de que es necesario recuperar valores en forma


preventiva y por otro se reclama una acción más decidida de las autoridades
policiales en el combate a la venta de drogas.

En el editorial del quincenario Entre Todos, vocero oficial del Arzobispado de


Montevideo11 se asegura que es posible cortar el suministro de estupefacientes
porque en todos los barrios los vecinos conocen las puertas de ventas, en
especial a menores. En esa publicación la Iglesia asegura que los menores
tienen un fácil acceso a la pasta base de cocaína y la marihuana y que se
deben adoptar medidas urgentes para frenar el consumo de drogas. Agregó
que muchas acciones delictivas sobre todo de los menores se realizan con el
objetivo de conseguir dinero para comprar drogas.

NUEVAS VISIONES DEL TEMA

Existen nuevas visiones sobre el tema de las drogas que permiten alentar
esperanzas de que se dejen de lado los enfoques represivos que caracterizaron
y aún caracterizan las estrategias estatales y sociales para considerar el tema.

La organización no gubernamental “El Abrojo” es un importante centro


de investigación y desarrollo de prácticas apropiadas para la atenuación y
eliminación de las situaciones conictivas.

“El Abrojo” no habla del “problema de las drogas” sino del uso problemático de
las drogas. Este último concepto hace alusión a los usos que pueden provocar
daños en la salud física o psíquica, en las relaciones sociales y en el área de
las relaciones con el Estado y la ley.

El uso problemático tiene lugar sobre todo en los consumidores dependientes,


11 Quincenario “Entre Todos” del Arzobispado de Montevideo, Primera Quincena de Febrero
del 2005.

138
El concepto “drogas”: desinformación en sociedades consumidoras periféricas

aunque no así en la mayoría de los consumos experimentales, ocasionales o


regulares.12

Se puede definir este uso problemático como el uso no estructurado por un


sistema de creencias y rituales (aunque puedan existir usos estructurados que
también sean problemáticos).

Desde el punto de vista socio-antropológico, se señala en los documentos de


“El Abrojo”, cada cultura define lo que es un uso legitimado o no legitimado
de las drogas según sus parámetros de referencia. Desde ese punto de vista
se afirma que el concepto de Uso Problemático... no tiene un carácter
ético–moral sino que resulta de los conocimientos obtenidos a través de las
investigaciones y perspectivas de las socio-antropología, la pedagogía, las
disciplinas médico-toxicológicas y la psicología.

UN EJEMPLO DE UN ENFOQUE INFORMATIVO Y PREVENTIVO

El 22 y 23 de abril del 2006 se realizó en Montevideo el recital de la banda


musical No te va a gustar con mucho éxito en la juventud uruguaya donde
asistieron unas 30.000 personas. Presumiendo que debido a la concentración
de multitudes podía existir “consumo problemático” de drogas, la ONG “El
Abrojo”, junto con la Intendencia Municipal de Montevideo y la Junta Nacional
de Drogas, aplicó el Programa Consumo Cuidado, que consiste en una serie
de actividades itinerantes para ser implementadas en estas, conciertos y otras
actividades públicas.

El Programa diseñado para promover el ejercicio de conductas responsables


tiene como objetivo proporcionar información sobre el tema acompañado de
una intervención médica y socioeducativa.

En esta oportunidad se instaló una carpa donde se brindó información y


12Si bien el autor explica la diferencia entre ‘problema de drogas’ vs. “Usos problemáti-
cos”, dicha armación se beneciaria con una explicación mas exhaustiva de las diferencias
entre estos dos términos. (Nota del editor).

139
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Danilo Antón

apoyo a los jóvenes sobre el consumo de drogas y se repartieron folletos y


preservativos. Se informó sobre los riesgos toxicológicos y sociales así como
las precauciones que deben adoptar quienes han decidido consumirla. Obras
Sanitarias del Estado instaló dos canillas de agua para que los jóvenes pudieran
saciar su sed con agua en vez de alcohol.

MOVIMIENTOS RECIENTES CONTRA EL PROHIBICIONISMO

El movimiento anti-prohibicionista se ha desarrollado en sectores reducidos de


la sociedad uruguaya y en particular se ha concentrado en algunas actividades
esporádicas para promover la legalización de la marihuana. Existe un
Movimiento Marihuana Libre que ha llevado a cabo movilizaciones en la capital
del país. El 8 de mayo de 2005, en el Día Internacional de la Legalización de la
Marihuana se realizó un acto en el Parque Rodó de Montevideo con presencia de
tamboriles y payasos y participación de unas 500 personas. Había personas de
todos los estratos sociales, jóvenes, adultos, mujeres y hombres bajo banderas
dibujadas con el símbolo popular de cannabis. Una periodista del diario La
República de Montevideo13 describió el acto de esta forma:

El acto transcurrió alegremente, bajo cánticos, música reggae que fue bajando
al sonar de los tambores afro-uruguayos, gente que llegaba y se enteraba
en el momento y otros que en pequeños grupos fumaban tranquilamente. No
hubo guardia policial visible en ningún momento, pero sí muchos medios de
prensa, en particular de televisión, los que iban de un lugar a otro buscando
testimonios para sus respectivos programas.

Las declaraciones de algunos de los participantes, que en todos los casos


prerieron permanecer en el anonimato, fueron ilustrativos de la opinión de
un sector de la población uruguaya.

Uno de los participantes expresaba: Pienso que toda la política antidroga está
enormemente distorsionada y que en denitiva está regulada por el negocio,
y adaptado del artículo de Daniela Fassanello del diario La República del 8 de
13Sintetizado
mayo del 2005.

140
El concepto “drogas”: desinformación en sociedades consumidoras periféricas

sea el negocio de los grupos que distribuyen, sea las combinaciones con las
autoridades equis que controlen. Pero el hecho es que se ha promovido la
pasta base, los chicos están siendo destruidos y sin embargo hay una total
seca de marihuana, la cual es totalmente benéca, hay todo tipo de estudios
médicos y químicos en relación a los efectos y no hay nada que indique que
tenga contra indicaciones.
Se da como medicina en Inglaterra, en California y en muchos otros lugares
del mundo a parte de otra serie de países donde el hachís, como la marihuana
forman parte de un consumo muy tradicional como en todo el norte de África
y naciones árabes.

Es muy urgente crear un movimiento y empezar, sobre todo ahora con el nuevo
gobierno, a ver si resulta más exible o más receptivo una racionalización
denitiva del consumo de drogas. Es completamente irracional que sea ilegal,
está permitido el alcohol y el cigarro que son causantes de cáncer, y en cambio
no se puede fumar marihuana que es una droga benéca y una opción que
mucha gente elige.

Una mujer dio su testimonio: Hace 30 años que fumo marihuana, padecí
todo lo que se puede padecer en manos de la policía en este país, sin ninguna
información y sin ninguna consideración, o sea allanamientos, capucha, todo...
hace años. Mi marido fue el primer procesado por marihuana en Uruguay
y estuvo preso sin que hubiera legislación que lo permitiera, tuve que poner
mucho dinero para salvar la situación y no es justo. Fumo marihuana no como
un vicio, no es una adicción y no es lo que se supone que es la drogadicción.

Consideró que lo que es necesario en nuestro país es la educación sobre este


tipo de temas porque un milico te ve fumando y sos un delincuente de lo peor,
tienen que enseñarles que es otra cosa. El fumar marihuana no cambia nada
en ti, uno sigue siendo lo que es.

CONCLUSIONES

141
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 121 - 144
Danilo Antón

Como en otras partes del mundo, la globalización se ha instalado en el


Uruguay.

La cultura uruguaya se ha visto modicada por prácticas de conducta y sistemas


de valores divulgados por los medios de comunicación de masas.

En ese marco, como parte de losofías hedonistas, de escape o de rebelión,


que se han hecho comunes en el mundo, se expandió el consumo de sustancias
psicoactivas. Esto ocurrió más particularmente en la juventud.

Al mismo tiempo, y por imperio de las autoridades de los países centrales,


en particular de Estados Unidos, y en alguna medida de las organizaciones
internacionales, a menudo controladas por esta potencia, se establecieron listas
repetitivas y arbitrarias de las sustancias que debían considerarse “ilegales”.

Sin ningún espíritu crítico los sucesivos gobiernos uruguayos reprodujeron la


lista de “lo prohibido”, y así numerosas sustancias fueron también proscriptas
en el país (las mismas que en otros naciones de la región, y por supuesto en
Estados Unidos).

Estas sustancias se transformaron en objetivos principales de la policía y de


las instituciones ociales. Al igual que en otras partes se incluyeron en “lo
prohibido” sustancias relativamente inocuas e incluso beneciosas en ciertas
circunstancias, como el canabis, gastándose mucha energía y dilapidándose
recursos para lograr su eliminación.

Como suele suceder, la campaña represiva tuvo un efecto contrario e incluso


opuesto al buscado. Canabis continuó disponible en el mercado pero debido
a su creciente escasez los precios subieron y las adulteraciones se hicieron
más frecuentes. Para compensar este décit los tracantes comenzaron a
introducir “pasta base” de cocaína, generalmente “estirada” o mezclada con
otras sustancias, con precios algo menores, y efectos siológicos y sociales
mucho peores.

142
El concepto “drogas”: desinformación en sociedades consumidoras periféricas

Las versiones policiales y periodísticas han presentado y aún dan una imagen
de consumo generalizado de “drogas” sin diferenciar mayormente los diferentes
tipos de sustancias. En la visión maniquea de esta cultura impuesta, la pasta
base o marihuana son igualmente perversas, drogas que inevitablemente
terminan llevando a la perdición a los jóvenes y a través de ellos a la sociedad
en su conjunto.
Este torpe e irracional enfoque ha producido varias consecuencias
principales:

1) Un exagerado énfasis en las sustancias ilícitas que eclipsó los daños


provocados por algunas sustancias lícitas que pueden ser muchísimo
mayores tanto en sus efectos siológicos como sociales. El caso más
ilustrativo son las bebidas alcohólicas, en especial las destiladas.
2) Hubo un pequeño incremento del consumo de sustancias ilícitas,
particularmente marihuana y pasta base.
3) Aumentaron las adulteraciones y por lo tanto los impactos toxicológicos
en los consumidores de dichas sustancias.
4) Aumentaron los precios de las sustancias y por tanto las ganancias de
los tracantes
5) De esa manera se logró estimular el tráco e indirectamente el consumo
en ciertos sectores de la población (particularmente los jóvenes).

El balance de las estrategias prohibicionistas fue claramente negativo.

Si bien el consumo se mantuvo dentro de ciertos niveles (como lo muestran


las encuestas) no se debió a las políticas represivas sino a diversos factores de
desarrollo social que promovieron otras actividades en los jóvenes (p.ej., las
“movidas” culturales, incluyendo la proliferación de las cuerdas de tambores
afro-uruguayos, la expansión de los deportes de playa, etc.).

Hubo intentos para cambiar el enfoque tanto a nivel de las autoridades como de
la sociedad civil que tuvieron variado éxito. Todavía queda mucho por hacer,
en particular para reconstruir un imaginario colectivo en donde las drogas no

143
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 121 - 144
Danilo Antón

sean un problema sino tan sólo un elemento más en la compleja trama de las
sociedades contemporáneas.

ANEXO
El respeto de la salud14

2288 La vida y la salud física son bienes preciosos conados por Dios. Debemos
cuidar de ellos racionalmente teniendo en cuenta las necesidades de los demás
y el bien común.

El cuidado de la salud de los ciudadanos requiere la ayuda de la sociedad


para lograr las condiciones de existencia que permiten crecer y llegar a la
madurez: alimento y vestido, vivienda, cuidados de la salud, enseñanza básica,
empleo y asistencia social.

2289 La moral exige el respeto de la vida corporal, pero no hace de ella un


valor absoluto. Se opone a una concepción neopagana que tiende a promover el
culto del cuerpo, a sacricar todo a él, a idolatrar la perfección física y el éxito
deportivo. Semejante concepción, por la selección que opera entre los fuertes
y los débiles, puede conducir a la perversión de las relaciones humanas.

2290 La virtud de la templanza conduce a evitar toda clase de excesos, el abuso


de la comida, del alcohol, del tabaco y de las medicinas. Quienes en estado
de embriaguez, o por ación inmoderada de velocidad, ponen en peligro la
seguridad de los demás y la suya propia en las carreteras, en el mar o en el
aire, se hacen gravemente culpables.

2291 El uso de la droga inige muy graves daños a la salud y a la vida humana.
Fuera de los casos en que se recurre a ello por prescripciones estrictamente
terapéuticas, es una falta grave. La producción clandestina y el tráco de
drogas son prácticas escandalosas; constituyen una cooperación directa,
porque incitan a ellas, a prácticas gravemente contrarias a la ley moral.

14 Catecismode la Iglesia Católica, Tercera Parte, La vida en Cristo, Segunda Sección, Los
Diez Mandamientos, Capítulo Segundo “Amarás a tu prójimo como a tí mismo”; Artículo 5,
El Quinto Mandamiento: No Matarás; http://www.vatican.va/archive/catechism_sp

144
SHAMANS, PEYOTE, AND COCA SACRAMENTS: A PATH THAT
MAINTAINS INDIGENOUS TRADITIONS AND IDENTITY IN A TIME OF
GLOBALIZATION

STACY B. SCHAEFER
SHAMANS, PEYOTE, AND COCA SACRAMENTS: A PATH THAT
MAINTAINS INDIGENOUS TRADITIONS AND IDENTITY IN A TIME OF
GLOBALIZATION

STACY B. SCHAEFER
PH.D. ASSOCIATE PROFESSOR AND CHAIR OF THE ANTHROPOLOGY DEPARTMENT
CALIFORNIA STATE UNIVERSITY, CHICO
sschafer@csuchico.edu

Recibido: 26 de julio de 2006


Aceptado: 9 de agosto de 2006

ABSTRACT

This paper examines the unique relationship between shamans and the special
psychoactive plants valued in their cultures. The use of Peyote (Lophophora
williamsii) in Huichol Indian culture of Mexico, and coca (Erythroxyum coca
var. coca) in the indigenous cultures of San Pedro de Atacama in northern
Chile and the Aymaras of the La Paz region of Bolivia are the focus of this
discussion. This paper discusses the central roles the shamans and these plants
play in traditional beliefs and practices as well as therapeutic aspects of these
plants and the ways that they have come to symbolize Indian identity in a time
of globalization.

Key words: shamans, peyote, coca, indigenous people, globalization, Bolivia,


México.

RESUMEN

CHAMANES Y LOS SACRAMENTOS DE PEYOTE Y COCA: UN CAMINO


QUE MANTIENE TRADICIONES E IDENTIDAD INDÍGENA EN LA ÉPOCA
DE GLOBALIZACIÓN

Este escrito examina la relación única entre los chamanes y las plantas
psicodélicas especiales valoradas en sus culturas. El uso del Peyote (Lophophora

147
Stacy B. Schaefer

williamsii) entre la cultura indígena Huichol de México, y la coca (Erythroxyum


coca var. coca) en las culturas indígenas de San Pedro de Atacama en el norte
de Chile y los Aymaras de la región de La Paz en Bolivia son el centro de esta
discusión. Este texto trata los papeles centrales que los chamanes y estas plantas
juegan en las creencias y prácticas tradicionales, al igual que los aspectos
terapéuticos de estas plantas y las maneras en que han llegado a simbolizar la
identidad indígena en el tiempo de la globalización.

Palabras clave: Chaman, peyote, coca, indígenas, globalización, Bolivia,


México.

HISTORY OF PEYOTE AND COCA SACRAMENTS

Peyote and coca leaves have been revered as plant sacraments for thousands
of years. Strands of dried peyote in archaeological sites in Northern Mexico
and Southern Texas, funerary sculptures, and Spanish chronicles attest to the
importance of peyote and its ritual use from around 5000 B.C. (Furst, 1989;
Boyd and Dering, 1996). Spanish missionaries describe peyote use among the
Aztecs and other indigenous groups, referring to it as the “root of the devil”.
In colonial Mexico, the Catholic church held inquisitions, punishing those
who were suspected of consuming peyote in “idolatrous” practices. Despite
the prohibition and punishment for peyote use, some indigenous peoples made
clandestin pilgrimages to the central desert region to harvest this sacred cactus
to bring back to their families and communities who found refuge far away in
the sierras far to the west. Few of the indigenous cultures who have historically
revered peyote continue to do so. The Huichol Indians are the only remaining
indigenous people who annually make the pilgrimage to the peyote desert
and continue to use peyote in their religious beliefs and practices. For many
Huichols, peyote enables them to enter into a deep, profound relationship with
the natural and supernatural worlds, and is a catalyst for nding meaning and
purpose in their lives. In Mexico, Huichol culture and peyote are integrally
linked.

148
Shamans, peyote, and coca sacraments: a path that maintains indigenous ...

The ritual use of coca leaves has an equally long history in the Andean region
of South America. The radioimmunoassay of a cocaine metabolite in human
hair of mummies (Cartmell, 1991) and dental evidence of coca chewing indicate
that prehistoric cultures in Northern Chile (Langsjoen, 1996) and coastal
Peru (Inriati and Buikstra, 2001) consumed coca leaves. Stone and ceramic
sculptures from the pre-Colombian Chavin and Mochica cultures dating back
4.000 years depict anthropomorphic gures chewing coca. (Morales. 1989:14)
The most detailed documentation of indigenous use of coca comes from early
Spanish chroniclers in Peru. At the time of Spanish contact, the Inca elite had
a well-established system of trade and tribute which included coca cultivation
by indigenous people in the more tropical lowlands where certain types of coca
plants ourish. Initially the Spanish clergy condemned the use of coca for the
same reasons their brethren in Mexico had admonished the use of peyote; these
plants and the core beliefs and rituals that surrounded them were considered
heathenistic forms of devil worship. Eventually, Spanish colonizers began to
see the virtues of coca use in that it induced more work in the Indian laborers.
Soon Spaniards took it upon themselves to oversee the cultivation of coca
plantations to supply Indians with the stimulating leaves. Due to Spanish
control of coca production and exchange, coca leaves became more widely
available to Andean peasants than they had under the hierarchical structure
of the Inca empire. Over the centuries, coca and its use continue to have a
preeminent role in the spiritual, social, and physiological well being of many
indigenous peoples in the Andes. In essence, chewing coca is synonymous
with being Indian (Allen).

P E Y O T E A N D C O C A A L K A L O I D S , H U M A N N E U R O C H E M I S T RY, A N D
PSYCHOINTEGRATORS

Specic plants recognized by indigenous peoples as sacred commonly have


unique qualities or characteristics. This is certainly true for peyote and coca
leaves which produce specic alkaloids that interact with the neurochemistry
of the human brain, evoking an altered sense of being.

149
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 145 - 172
Stacy B. Schaefer

Peyote, a spineless, low-growing cactus, contains over sixty alkaloids.


Mescaline (3,4,5-trimethoxy-phenethylamine) is the alkaloid most responsible
for peyote’s vision-producing effects. Mescaline interacts with the brain’s
naturally-occurring neurotransmitters: norepinephrine, serotonin, and
dopamine. Chemically it most closely resembles norepinephine. As for coca,
while it is not necessarily considered a vision-producing plant, chewing coca
leaves (especially if combined with calcium or bicarbonate) has a stimulating
effect that is reected in feelings of greater vigor and strength. The effects can
also produce a clearer mental state, and bring on feelings of well-being. The
alkaloid most notably experienced in chewing the coca leaf is cocaine, which
also closely resembles dopamine and norepinephine, but does not appear to
interact with the serotonin system in the same way as does the vision producing
mescaline present in peyote. The cocaine content in the leaves is extremely
low ranging from 0.1% to 0.9%, (www.erowid.org/plants/coca/coca_botany.
shtml) or higher (http://www.druglibrary.org/Schaffer/GovPubs/cocccp.htm)
compared to 50 to 90% of the cocaine alkaloid when extracted from the leaf and
chemically processed into powder (Allen, 2002). Coca chewing involves slow
mastication of the leaves releasing the alkaloids into the saliva and eventually
through the digestive system into the bloodstream to reach the brain. This brings
on a very different experience as opposed to snifng or injecting much higher
concentrations cocaine into the body. Indigenous peoples see no relationship
between their sacred coca leaves and manufactured powdered cocaine.

Both peyote and coca leaves can be considered psychointegrator plants, a


concept developed by Michael Winkleman (1996). Pyschointegrator plants,
as proposed by Winkleman, have a therapeutic effect on brain systems and
consciousness. To paraphrase Winkleman and his reference to the work of
MacLean (1990), there are three kinds of brain systems function in human
beings: the R-complex or reptilian brain, the paleomammalian brain, and the
neomammalian brain associated with the neocortex. The R-complex typically
manages the cognition required for the body’s behavioral routines, and is
characterized by regulating large amounts of dopamine. The paleomammalian
brain is comprised of the limbic system and serves as an integrating agent

150
Shamans, peyote, and coca sacraments: a path that maintains indigenous ...

for emotion and memory and for processing sensory and motor functions.
It plays a crucial role in engendering feelings of attachment, emotional
security, and identity, and functions as a link between the R-complex and the
frontal cortex. The neo-cortex, which surrounds the brain, houses the vast
majority of neurons in the human central nervous system (Hooper and Teresi,
1986). Psychointegrative plants function to integrate all three brain systems’
processes.

Psychointegrator plants, such as peyote and coca, can serve to evoke the
processing of important memories and emotions, and are instrumental in helping
people integrate those parts of their unconscious mind into a more holistic
understanding of themselves and the world around them. These experiences
enable individuals to discover a greater sense of certainty and meaning in life,
framed within the cosmological constructs of their culture. In this manner,
psychointegrator plants facilitate the healing and union of the body, the mind,
the soul, and the psyche (Schaefer, 2005a).

HEALING ASPECTS OF PEYOTE AND COCA

There are many levels of healing that occur with the use of peyote and coca
leaves in traditional indigenous cultures. Both peyote and coca leaves enable
people to endure physical hardships. They act as stimulants that assuage
hunger, thirst, and fatigue. Peyote has antibiotic qualities, alleviates stomach
discomfort, dulls physical pain, and is sometimes used in childbirth to quicken
the delivery and reduce the loss of blood (Schaefer, 1996d). Masticating coca
leaves or consuming them as tea can slightly increase the heart rate, which
in turn, produces a mild vasoconstriction in the extremeties. The physical
effects brought on by coca leaf consumption can help maintain the body’s core
temperature and can offset the symptoms of dizziness, nausea, and headaches
caused by high altitude and depleted oxygen. Coca consumption has unique,
benecial qualities that enable people to physically adapt to the high altitudes
and harsh cold climate of the Andes (Allen, 2002). The author can attest to

151
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 145 - 172
Stacy B. Schaefer

the benecial qualities of coca leaves in adjusting to the high altitudes where
many Andean people live. Coca leaves are also nutritional. Scientic studies
show that in the high Andean puna where the people live almost exclusively on
potatoes, coca provides Vitamins A, B, calcium, iron and phosphorous. Coca
leaves chewed with calcium carbonate provide Vitamin C. Another salutary
quality of coca use is that chewing coca leaves after meals most likely regulates
the body metabolism, a very important function in people who subsist on a
diet rich in carbohydrates (Allen, 2002).

Shamans in these indigenous communities recognize the healing powers of


these sacred plants and holistically integrate this knowledge into their practices
that require botanical, medicinal, pharmacological, psychological, and esoteric
understanding of the natural, human, and supernatural landscapes that surround
them. Shamans act as healers and counselors, they purify individuals, interpret
and divine dreams, visions, and omens that appear for their patients. They are
experts in these plant sacraments, advise on the quantities and admixtures to be
used, are experienced in navigating the terrain opened by these mind-altering
plant life forms, and facilitate the communication process with the divine.
The empirical information I have gained through ethnographic eldwork on
the importance of shamans, their relationship with sacred plants, and the vital
roles they play as specialists in Huichol, Atacameño and Aymara communities
are further elaborated in the following sections.

HUICHOL SHAMANS AND PEYOTE SACRAMENTS

For the last 30 years I have been carrying out long term eldwork among the
Huichol Indians of Mexico in the community of San Andrés Cohamiata in the
remote Sierra Madre mountain range slightly south of the Tropic of Cancer.
Due to the rugged terrain of their homelands. Huichol people have maintained
many aspects of their culture that date to Pre-Colombian times, including
the pilgrimage to collect the vision-producing peyote cactus that inhabits the
desert in the Mexican State of San Luis Potosí. Huichol beliefs and traditions

152
Shamans, peyote, and coca sacraments: a path that maintains indigenous ...

lie in the hands of the shamans. In Huichol creation myths, the rst gods were
shamans. This oral tradition speaks of the major role of the shaman to lead
the pilgrimage to the peyote desert. Huichols who make this arduous journey
enter into sacred time to retrace the steps of their ancestor gods and recreate
the world year after year.

Before a shaman leads a pilgrimage to the desert, he or she must undergo an


initiation that includes ve or more years of training. Some children are believed
destined from birth to be shamans; a child or baby’s actions may indicate to
family shamans and elders it is destined to follow this path. The manner in
which the child’s destiny may manifest can vary. A child who shows an afnity
for peyote is looked upon as having the calling to become a shaman and will
be encouraged to follow this path.

Making the pilgrimage to the peyote desert is not an absolute prerequisite for
the shamanic training; however, this journey through sacred time and space in
the Huichol universe and the experiences gained from ingesting peyote over the
course of the apprenticeship are intrinsic to the learning process of becoming
a shaman. Often the guiding shaman will select specic peyote tops for the
apprentice to consume; afterwards the initiate will describe the experience,
and the shaman will interpret its meaning and what course of action, if any,
should be taken.

One shaman, Rafael Pisano, describes his rst peyote experience:

“The rst time I ate peyote I ate a small amount to see if it would
being me luck… then I felt this way… some animals appeared, they
were like dinosaurs, and a big snake; they were all huge, really big! I
was surprised to see them…they asked me what I was thinking, what
I was feeling”.

“Well, at that time I lost myself [traveling with the peyote]… [The
creatures told him] ‘we will clean [purify] you’. And they cleaned me

153
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 145 - 172
Stacy B. Schaefer

with their tongues. Their tongues were enormous! They cleaned me all
over. Then a light like a star appeared, it came from other there, where
the sun rises. First they cleaned me, then the light fell all around me
and cleaned me all over. Then I appeared like a bright light, a really
beautiful light… then they took me… up to the sky”.

Another Huichol pilgrim described a peyote experience in which she saw peyote
turn into a deer. She said she realized the deer was talking to her when she
and the deer looked each other directly in the eye. Such profound images and
symbols that appear to Huichol pilgrims with the ingestion of peyote reafrm
to them the truth their beliefs hold, and they make very real the profound
importance of their rituals and ceremonies to uphold this shared ideology and
cultural identity (Schaefer, 1996b).

HUICHOLS, SHAMANS, PEYOTE AND GLOBALIZATION

Ironically, globalization has functioned to reafrm the intimate link between


peyote and Huichol identity. Mexican military checkpoints to deter drug
trafcking and the spread of social discontent from antigovernment groups
have only strengthened the resolve of some Huichols to continue to practice
their peyote traditions. Peyote use among indigenous peoples in Mexico is
technically illegal because of conicting national and international laws and
treaties (1). On more than several occasions, entire groups of pilgrims have been
incarcerated (women and children included) and charged by the authorities for
transporting and intent to sell illegal drugs. Some Huichol pilgrims have also
been questioned about possible ties to the Zapatista movement.

The North American Free Trade Agreement (NAFTA; Tratado de Libre


Comercio), has opened the borders between Mexico and the U.S. to a greater
ow of goods and people. Indigenous peoples in the United States have
investigated the harvesting or purchasing of peyote for their Native American
Church ceremonies because of the growing number of members and the

154
Shamans, peyote, and coca sacraments: a path that maintains indigenous ...

shortage of the peyote supply on the U.S. side of the border. Because the use
of peyote is essentially illegal even for Huichols, and because it is classied
as a schedule 1 drug as well as an internationally protected cactus, members
of the Native American Church have not been successful in obtaining peyote
as a free trade item from Mexico.

On the other side of the continuum, the Mexican government has appropriated
Huichol culture and its symbols, including peyote, to attract international
tourism. Now, in addition to promoting peyote-inspired art, ofcials who work
in the government department of Indian affairs encourage Huichols to reenact
parts of their ceremonies, including peyote ceremonies, to crowds of tourists
in the resort town of Puerto Vallarta and the regional government center of
Mezquitic, Jalisco. Of course, shamans are at the center of these ceremonies
and act as Huichol ambassadors with tourists, many of whom are intently
curious about peyote and its use.

CHILE: ATACAMEÑOS AND COCA LEAVES

My research in San Pedro de Atacama is more recent. Much of the success of


this eldwork is due to the generosity and guidance of Dr. Constatino Manuel
Torres and Donna Torres who have been working in this community for close
to thirty years, and to my husband, Dr. Jim Bauml, an ethnobotanist who has
accompanied me and worked collaboratively with me in these travels. To date
my research includes four visits to San Pedro de Atacama, beginning in the
summer of 2003.

San Pedro de Atacama is situated 23 degrees south latitude at an altitude of


2390 meters above sea level. Its location near the Tropic of Capricorn, makes
it the southern hemisphere counterpart to the Huichol peyote desert which lies
close to the Tropic of Cancer. Like the peyote desert, San Pedro de Atacama is
surrounded by dormant volcanoes, however the Atacama desert is at a much
higher altitude and has the reputation of being the driest desert in the world.

155
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 145 - 172
Stacy B. Schaefer

Peyote does not grow here, nor do San Pedro cactus (Trichocereus spp.) or
coca, for that matter. The life-giving features of this vast desert are the river
systems that ow from the snowpack of the volcanoes and create a small oasis.
This oasis is near the contemporary political boundaries of Bolivia to the north,
Argentina to the east, and Peru to the northwest.

Since pre-Colombian times, llama caravans carrying exotic goods passed


through the oasis of San Pedro de Atacama (also the name of the town) which
served as a center for regional and long-distance trade (Llagostera, 2004).
Archaeological excavations have uncovered mummy bundles dating from l200-
1100 A.D. that contain the remains of the deceased along with well-preserved
artifacts (2). When Spaniards arrived in this region, they encountered mines
of precious copper, tin and other desireable metals. Quickly they appropriated
the land, treated the indigenous people with cruelty and forced those who
survived into submission with assimilative practices. In spite of this violent
history, some of the native inhabitants of this region continue to identify with
their Indian heritage.

Atacameños, who are descendents of these ancient indigenous people, still


reside in San Pedro de Atacama and the nearby countryside. Strands of hair
from mummies pertaining to pre-Columbian cultures north west of the San
Pedro desert, indicate that coca was in use. It is highly probable that coca leaves
held sacred meaning to the ancestors of these Atacameños as they do today
in ceremonies, rituals, social reciprocal exchange, as medicinal remedies, as
offerings, and in divination practices. The coca trade in ancient times came
from the coca growing areas of the lowlands of Bolivia, Peru, and the highlands
of Argentina (Allen, 2002). While llama caravans may have brought coca
leaves from these far lowlands to San Pedro de Atacama, today coca leaves,
or molantor in Kunza the language spoken by Atacameños, are transported
clandestinely. Coca is illegal in Chile but the nearby porous borders of Bolivia
allow for Atacameños to acquire this precious cargo and use it much in the
same ways as their ancestors, the original inhabitants of San Pedro de Atacama
(Álvarez, 1996: 42) (Gómez and Suárez, 2004: 27).

156
Shamans, peyote, and coca sacraments: a path that maintains indigenous ...

I was introduced to Atacameño coca traditions and the role of the shaman, yatiri,
in association with a sacred miniature bag called chuspa, which is woven to
carry the sacred coca leaves. One of the few traditional Atacameño weavers
in this region, Evangelista Sosa, agreed to discuss her weaving knowledge
with me (3). I was particularly drawn to the chuspa because it is traditionally
made on a backstrap loom (a traditional weaving system that was a focus of
my eldwork among the Huichol Indians). When I discussed the anatomy of
the chuspa I learned that the tassels at the bottom of the bag are called ores,
and that these same kinds of tassels are attached to the ears of their llamas in
the ceremony, oramiento de las llamas, which coincides with the mating and
birthing season of llamas in early January. Also during this ceremony, there
is a ritual exchange of chuspas, coca, and coca offerings. I was eager to see
the chuspas in use, in the context of the oramiento ceremony. Evangelista
graciously invited me and Jim Bauml to attend. We accepted her invitation,
and in January, 2005, we took part in the oramiento ceremony sponsored by
her godson.

The ceremony was held high up in the puna, near a salt lake called Tara, over
13000 feet above sea level. When we arrived we found the extended family
had herded close to two hundred llamas into a stone corral. A table altar was
one of the focal points, it was covered with a tablecloth and a number of textile
bundles made up of sacred carrying cloths (inkuñas) that enveloped dyed raw
wool, multi-colored tassels, and mounds of coca leaves. Also on the table were
bottles that held alcohol, a bell, and cups. The ceremony commenced with the
burning of a desert shrub, coa, which provided a fragrant incense-like smoke.
The host gave an elegant speech thanking everyone for coming and explaining
the reason for the ceremony to keep these traditions alive and to pass them
down from one generation to the next. He took some coca leaves from the
chuspa that he wore around his neck and gathered some coca leaves from one
of the bundles on the table. Holding these leaves in his hand, he circled them
around the cups, and then along the rim of the cups he passed the coca in the
four cardinal points and placed the leaves inside the cups. Others followed
after him, some also sprinkled coca leaves on top of the bundles on the table.

157
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 145 - 172
Stacy B. Schaefer

The ofciating shaman anointed the sacred earth, Pachamama, with alcohol
and then ung more alcohol to symbolically anoint the herd of llamas in the
corral. Coca leaves were scattered on the ground at either end of the table altar.
We learned that the left hand held coca leaves for Pachamama; the right hand
held coca leaves for the spirit of the ancestors.

Several members ofciated as the musicians played guitar, charango, drum, and
accordion, and sang throughout the ceremony. While the music was playing, the
people ritually exchanged their chuspas and partook of the coca leaves inside
them. A mat was placed on the ground in front of the altar and four strong,
fertile llamas, two white and two brown, were brought to sit down upon it. The
two llamas in the center were male and female and were to be ritually married.
A male llama to the side of the groom, and a female llama to the side of the
bride held the ritual role of padrino and madrina to the couple.

The shaman oversaw that the men held the llamas in place while the women
tied colored wool to the fur on the llamas’ backs and necks. Then the women
attached multicolored tassels to their ears by inserting a large sewing needle
into their ears and pulling the thread of the tassels through and tying them in
place. The ears of some of the llamas bled from this procedure. Then the shaman
prayed over the four llamas, blessed them by anointing them with alcohol, and
scattering coca leaves over them. When the principal llamas were released
back into the corral, the family members danced to the music, and shared in
the alcohol offered to them. The shaman anointed everyone’s check with the
blood that had owed from the llamas’ ears when the tassels were attached,
and the sponsor of the ceremony put coca leaves into the mouths of all the
participants. Throughout the day and into the following day, the participants
in groups of two gathered the llamas and together attached the colorful tassels
to their ears. There was also much merriment, music, singing, drinking, and
the sharing of coca.

When all the llamas had bright new tassels in their ears, a mound that replicated
the distant mountain on the horizon was created in the center of the coral with

158
Shamans, peyote, and coca sacraments: a path that maintains indigenous ...

the earth from the ground mixed with the blood of a llama that was sacriced.
Coca leaves were scattered on top of it. The creation of this microcosmic
image of the sacred mountain, and the offerings that were left to it mirrored the
actions of some of the members who later climbed to the top of the mountain,
Offerings or pagos, were left with white corn, coca leaves and fat from the
chest of the llama. At the end of the ceremony each chuspa is tied up inside the
sacred carrying cloth and safely stored until the next year when the ceremony
will hopefully include even more llamas because of the success of this year’s
oramiento.

On several occasions during the oramiento ceremony, both the sponsor and
the shaman impressed upon me that coca is part of Pachamama, and that this
ceremony is to honor her and ask that she look after the family, that she look
after the llamas so they will be healthy and multiply. It was brought to my
attention that this ceremony really is effective in increasing the number of
llamas in the herd. This host started off with few llamas, but year after year
their numbers grew exponentially. This year he has around 200 llama, next
year it could be 400. They emphatically communicated to me the overall
importance of this ceremony, so that their children, their children’s children,
and future generations of children will continue the traditions and retain a
proud indigenous cultural identity as an Atacameño. Ensuring that the future
generations of the family keep their cultural heritage strong, also means that
Pachamama will be appeased and look over them, their ancestors, and the
animated world around them.

The role of the shaman is to be a religious specialist, healer, and botanist; he


ofciates over the ceremony and communicates on behalf of the participants
to Pachamama and the ancestors. He blesses the earth and the llamas with coca
leaves and alcohol, he also oversees the ceremonial use of coca leaves and the
bonding that takes place between the people through ritual exchange and the
euphoric affect that is brought on by chewing the leaves. The immense amount
of physical stamina required to successfully carry out this ceremony in such a
high altitude is greatly facilitated by coca use.

159
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 145 - 172
Stacy B. Schaefer

ATACAMEÑOS, COCA, AND GLOBALIZATION

Despite centuries of exploitation, and attempted extermination by Spaniards


and the repressive, assimilating programs put forth by the national government
of Chile, particularly during the Pinochet regime, and the continued illegal
status of coca, it is impressive to see in the 21st century the perseverance of
ceremonies such as oramiento. Underlying the resiliency of some Atacameños
and their cherished traditions are the shaman and the vital importance of several
key elements – coca, llamas, and Pachamama. Globalization has strengthened
Atacameño identity. Greater contact and commerce with Bolivia brings more
coca into their communities and stimulates the exchange of ideas, including
the legal status of coca in Bolivia, and the interaction Atacameños have with
traveling shamans for this country situated on their northern border. With the
blessings offered by the shamans in prayer and sacred coca leaves, Pachama
looks over the fertility of their llamas, which now means they will be able to sell
the surplus of their camelids to markets in Chile, Argentina, and to middlemen
who sell them to the U.S.

LA PAZ, BOLIVIA: AYMARAS AND COCA LEAVES

Following the trail of sacred weavings, coca and shamans has led me to the
La Paz region of Bolivia. After all, I had learned that the coca leaves used by
Atacameños come from Bolivia where there continues to be a rich weaving
tradition, too. And Bolivian shamans were known far and wide for their powers
as religious specialists – some even traveling through San Pedro de Atacama
region to heal and divine for those in need. At the airport El Alto above La
Paz the elevation is 4050 meters, while central La Paz lies at a dizzying 3631
meters above sea level. Near the bustling city of La Paz is the ancient site of
Tihuanaco, a vast empire that dominated Bolivia and inuenced cultures in
southern Peru and northern Chile (including San Pedro de Atacama) from
100-1000 A.D. (Kolata, 1986).

160
Shamans, peyote, and coca sacraments: a path that maintains indigenous ...

The following information is based on preliminary eldwork that Jim Bauml


and I carried out in January and July, 2006. With the assistance of Michael
Moretti and his wife Ximena who live in the city of La Paz, we were able
to travel to two Aymara communities, the ayllu of Chálla on Isla del Sol in
Lake Titicaca, and the ayllu of Pirapi in the region of Achiri, south of the city
of La Paz. Unlike Chile, the use of coca leaves here is legal. The leaves for
domestic use are grown primarily in the middle-elevation zone in the Chapare
region and are transported to La Paz and further south for sale. On our way
to these villages we were able to buy coca leaves to share, as it is an expected
and much appreciated gift in these Aymara communities. In Chálla, our host,
Esteban Quelima, was the mayor of the ayllu. Upon arriving to his home, we
provided him with a gift of coca leaves and a small bag of bicarbonate. He was
very grateful for the gift and immediately opened up the bag, held some coca
leaves in the air and prayed over them as an offering. Then he instructed us to
chew coca with him. This was a ritual way of getting to know each other. He
explained that we bring new, different energy to the ayllu, it is important for
him to know us via chewing coca together and talking for a while. He said that
if the coca leaves were sweet it would be a good visit. Fortunately for us, the
coca leaves were what he considered to be sweet. He also instructed us on the
proper way to chew coca, to take a certain number of the leaves in our hand,
fold them together, and stick them into one side of the mouth along with a small
amount of bicarbonate. Do not chew on the leaves, but moisten them with your
saliva, gently place them between your upper and lower teeth and slightly bite
down to soften them, then suck the juices that accumulate in the mouth from
the coca and the saliva. The effects of the coca make the participants talkative
and sociable. We learned that our host’s nephew is a shaman who divines with
coca leaves and is an effective healer.

On our way to Pirapi our host, Jaime Chambi, indicated that we needed to
stop along the way at several sacred spots to leave offerings to Pachamama
by anointing the ground with alcohol and gently scattering coca leaves from
our hands onto the earth. Pirapi is located at the base of an extensive mountain
dotted throughout with chulpas, stone towers built in pre-Colombian times

161
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 145 - 172
Stacy B. Schaefer

presumably by the ancestors of this village, as burial chambers and possibly to


store food. The villagers were cautious in their dealings with outsiders because
a number of the chulpas had been looted by people who were not from there.
After inviting us for a meal, a well known older shaman divined for us using
coca leaves we had brought as a gift. The shaman had a sacred carrying cloth
(inkuña) in he placed on his lap and opened up to reveal loose coca leaves. He
had me ask a question and sifted the leaves gently through his ngers, letting
them fall onto the textile. All of them fell with the inside of the leaves facing up.
Some leaves has holes in them. The shaman commented that the holes are eyes
and that, look, look, they were looking up at me. The answer to my question
was afrmative, things would go well for me with my new responsibilities at
the university where I work.

The shaman continued to divine coca leaves for Jim, Michael, and other
villagers. When it came time for us to return to La Paz, a highly unusual storm
approached that brought torrential rain, hail, and snow. We tried our best to
drive the dirt road from the village to the highway which was better maintained,
but our vehicle was caught in the ash ood of water that appeared seemingly
out of nowhere. Stuck in the mud, with water up to the doors of the vehicle,
we had to abandon it and make our way back in the mud and icy water to the
village. The older shaman scolded us saying that the coca leaves had told him
we should not leave, we should stay the night. And that is what we did.

On our second visit to Pirapi was in July, 2006, when the weather is tranquil
and more predictable. This time we wanted to explore the chulpas on the
mountainside. Our host, Jaime, indicated upon our arrival to his village that
we must rst show respect to the elders. We joined everyone in the community
house. The mayor of the village was there holding his staff of power. Since this
was a much more serious request, it required that we sit and chew coca leaves
with everybody and talk. After much discussion and handshaking we were given
permission to hike up to the chulpas. With the altitude and the strenuous hike we
needed to replenish the coca leaves in our mouths frequently. They were most
denitely effective in adapting to the thin air and the strenuous exercise.

162
Shamans, peyote, and coca sacraments: a path that maintains indigenous ...

The initial experiences I have had in Bolivia with shamans and the use of coca
conrm to me that, as in San Pedro de Atacama, chewing coca together provides
people with a sense of unity and solidarity. It is an important element that,
through divination, allows shamans to communicate with Pachamama and the
ancestors. Leaving coca as offerings raties a relationship between the people,
the earth and the mountains, all of which are considered alive and animate.

BOLIVIA, COCA AND GLOBALIZATION

Coca is synonymous with being Indian. While in Boliva, I was able to witness
this and, through the media, was able to view the powerful symbol coca has
become for the Indian population with the democratic election of Evo Morales,
the rst Indian ever to hold the presidential position in South America. Morales,
an Aymara Indian, is well aware of the vital importance of coca in indigenous
communities. He began is ascent to the presidency as a coca farmer and then as
a leader in forming the coca growers union that opposed the U.S. backed coca-
eradication program which, in many ways, parallels Plan Colombia. Morales
and the coca growers union were instrumental in legalizing coca in Bolivia.
There were two inaugural ceremonies for Morales that were broadcast via the
media into the homes of many people – indigenous, national, and international.
One of the ceremonies took place at the government palace in La Paz, the
other in the ancient site of Tihuanaco. In Tihuanaco he was dressed in clothing
reminiscent of the formal attire of past rulers, held a staff of power from pre-
Colombian times, and most importantly, he wore a large necklace of coca leaves
around his neck to symbolize his Indian identity and his accomplishments in
helping legalize coca in Bolivia.

CONCLUSION

The role of the shamans and the importance of plant sacraments in the cultural
traditions of indigenous communities are indeed inuenced by globalization.

163
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 145 - 172
Stacy B. Schaefer

The increasing ow of trade, nance, culture, people, and ideas brought by
sophisticated technology, communication and travel under the worldwide
spread of neoliberal capitalism has reached indigenous people in their local
communities. As a consequence, many of these people have greater awareness
of other indigenous peoples and communicate with them across borders in what
has been termed a larger globalized indigenous village. Through the efforts
of Evo Morales and the strength of the Indian rights movement in Bolivia,
local communities are networking transnationally with Indian communities
throughout the Americas. Coca, as a symbol of Indian identity, helps unify
Andean people throughout South America, for they share many of the same
struggles, the same hopes, and destiny. Likewise, peyote is a symbol of Indian
identity for many people in North America. Indians in the United States and
Canada who are members of the Native American Church now seek out Huichols
and peyote in Mexico. It is becoming more common for Huichols who enter the
United States to meet and sometimes participate in Native American Church
peyote ceremonies. In this time of globalization, shamans are major players
in these transnational exchanges, as they keep the traditions and knowledge
of their plant sacraments alive and well in a transforming world.

NOTES

1. The 1971 UN Convention on Psychotropic Substances ratied in Mexico


was based on the United States’ Comprehensive Drug Abuse Prevention and
Control Act of 1970 in which peyote was classied as a schedule one drug
along with other ‘hallucinogens’ and potentially addictive drugs. Unlike the
United States’ 1970 Drug Act, the 1971 UN Convention does not have a clause
that addresses the special rights of indigenous people to use peyote in their
religious ceremonies. The wording on the UN Convention is vague, it merely
states that there are diverse indigenous groups that use wild plants, some of
which may contain psychohtropic substances.

A further UN Convention ratified by the Mexican government and the

164
Shamans, peyote, and coca sacraments: a path that maintains indigenous ...

International Labour Organization decrees that the values, social, cultural,


religious and spiritual practices of indigenous peoples should be safeguarded
and protected.

An additional piece of legislations, Article 4 in the Mexican Constitution, states


that the law protects and promotes the development of indigenous languages,
cultures, customs, and so forth. Unclear as these bodies of legislation may be,
other Mexican drug laws such s the Federal Penal Code and the General Law
of Health, specically state that peyote use is illegal in Mexico for everyone
(Rajsbaum, 1996; Schaefer, 1998).

2. See Torres (1987, 2006) for detailed information on Anadenanthera and the
iconography of the snuff trays found buried with some mummy bundles in
San Pedro de Atacama.

3. I have extensively studied backstrap loom weaving, its technology symbolism,


and religious meaning among Huichol women (Schaefer, 2002). Evangelista
was fascinated with my backstrap loom and the information I shared with her
about Huichol weaving and was eager to talk with me about her experiences
as a weaver.

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168
OTROS ARTÍCULOS DE INVESTIGACIÓN
Y PRODUCCIÓN INTELECTUAL
EVALUACIÓN DEL EXTRACTO DEL TROMPETO
(Bocconia frutescens L.) EN EL MANEJO DE PROBLEMAS
FITOSANITARIOS DE INTERÉS AGRÍCOLA.

JAVIER ARCILA CASTRO


NORBEY VALENCIA PASCUAS
MARÍA ELENA BERNAL VERA
ELMER CASTAÑO RAMIREZ
EVALUACIÓN DEL EXTRACTO DEL TROMPETO
(Bocconia frutescens L.) EN EL MANEJO DE PROBLEMAS
FITOSANITARIOS DE INTERÉS AGRÍCOLA.

JAVIER ARCILA CASTRO


NORBEY VALENCIA PASCUAS
MARÍA ELENA BERNAL VERA*
ELMER CASTAÑO RAMIREZ1*
INGENIEROS AGRÓNOMOS
culturaydroga@ucaldas.edu.co

Recibido: 14 de agosto de 2006


Aceptado: 29 de agosto de 2006

RESUMEN

Este trabajo se realizó bajo condiciones de laboratorio de la Universidad


de Caldas para determinar los efectos del extracto de trompeto (Bocconia
frutescens L.), sobre el control de patógenos de importancia económica en la
agricultura como Botrytis cinerea y Colletotrichum musae (Berk & Curt.) von
Arx., e insectos trips y ádos. Se probó el extracto etanólico obtenido a través
del método Soxhlet a partir de tres partes de la planta (hoja, tallos y frutos).
Los patógenos se aislaron y cultivaron y se replicaron cinco veces para los
tratamientos utilizando concentraciones de 25% y 50%; las variables evaluadas
fueron: tamaño de la colonia, esporulación y desarrollo del tubo germinativo.
El ensayo para los insectos se realizó con poblaciones determinando número
y estado de desarrollo de ádos y trips, para lo cual se tomaron fragmentos
de hojas afectadas de tomate de árbol y granadilla respectivamente. Los
fragmentos fueron asperjados con los extractos de las partes evaluadas de la
planta en concentraciones de 35% y 65%. Se determinó la población de insectos,
tomando el registro de la población y número de individuos por estado. Los
extractos etanólicos de la planta B. frutecens, ejercieron efecto inhibitorio
sobre el crecimiento de las colonias de B. ash-grey y C. musae. En cuanto a
los insectos la aplicación de los extractos en las concentraciones evaluadas
*
Profesores Universidad de Caldas. Manizales Colombia e-mail: elmercr@ucaldas.edu.co.

177
Javier Arcila Castro, Norbey Valencia Pascuas, María Elena Bernal Vera, Elmer Castaño

presentó un efecto inhibitorio importante en el incremento de las poblaciones


de trips y ádos.

Palabras clave: trompeto (Bocconia frutescens L.), extractos, etanólicos,


biocidas, tosanitarios, agrícola.

ABSTRACT

EVALUATION OF THE EXTRACT OF PARROTWEED (Bocconia frutescens


L.) IN THE MANAGEMENT OF FITOSANATARY PROBLEMS OF
AGRICULTURAL INTEREST

This work was carried out under laboratory conditions at the Universidad
de Caldas in order to determine the effects of the extract of the parrotweed
(Bocconia frutescens L.), on the control of pathogens of economic importance
in agriculture like Botrytis cinerea and Colletotrichum musae (Berk & Curt.)
von Arx., and trip insects and aphids. The obtained ethanolic extract through
the Soxhlet method was tested from three parts of the plant (leaf, stems and
fruits). The pathogens were isolated and cultivated in concentrations of 25%
and 50%, as well as being duplicated ve times for the treatments. The variables
evaluated were: size of the colony, spore production and development of the
germinative tubes. The test for the insects was carried out with populations
having a determined number and state of development of aphids and trips,
on fragments from affected leaves of tomato tree and passion fruit. The
fragments were sprinkled with the extracts of the evaluated parts of the plant
in concentrations of 35% and 65%. The population of insects was determined,
taking the record of the population and number of individuals by state. The
ethanolic extracts of the B. frutecens, exerted inhibiting effect on the growth
of the colonies of B. ash-grey and C. musae. In insects the application of
the extracts presented an important inhibiting effect of the increase of the
populations of trips and aphids.

178
Evaluación del extracto del trompeto (Bocconia frutescens L.)...

por toda la zona andina, Meta y Putumayo. Crece en una amplia variedad de
suelos con elevaciones promedio de 2150 m (Quijandría, 2002).
En Hawai se ha reportado como una especie invasora de rápida expansión en
la isla, ocasionando el desplazamiento de la ora nativa, convirtiéndola en
una planta indeseada por lo cual se han realizado numerosos estudios para
describir métodos de manejo y dentro de los cuales el control biológico no ha
ofrecido resultados, al no conocérsele enemigos naturales (Hawai’i Department
of Agricultura, 1992).

FOTOQUÍMICA

En hojas y ores se han detectado alcaloides, además de saponinas y triterpenos;


en tallos, alcaloides y triterpenos. La presencia de alcaloides, saponinas y
triterpenos puede dar indicio de la actividad biológica, ya que los alcaloides
presentan tal actividad y las papaveraceae han proporcionado alcaloides
antimicrobianos y otros de acción narcotizante. Se conoce que algunas
saponinas y triterpenos son activos (Sánchez, 2000).

B. frutescens está siendo estudiada ampliamente en medicina humana debido al


contenido de alcaloides con propiedades potencialmente explotables para estos
nes. De la planta Bocconia frutescens se han aislado seis alcaloides: uno resultó
ser nuevo, el compuesto BE2, del que se identicó una bencilisoquinolina,
(1-[2’-hidroximetilen-3’, 4’-metílendioxibenciliden]-2-metil-6, 7-dímetoxi-3,
4-tetrahidroisoquinolina); el compuesto BHO resultó ser la cheleritrina;
BH1, la 8-hídroxicheleritrina nuevo en la planta-BH3, la dihidromarcapina
nuevo en la planta, BC1, la angolina o 8-metoxidihidrocheleritrina; BC2, la
nor-sanguinarina-BC3 (también denominado BE1) aislado tanto del extracto
clorofórmico como del etanólico fue identicado como la 8-metoxisanguinarina,
conocida como N-metilpancorina, nueva en la planta, a este complejo de
alcaloides se le ha denominado como Bocconina, al cual se le reconocen
propiedades analgésicas semejantes a los de la morna (Díaz, 2000).

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cult.drog. No. 13, 2006, págs. 175 - 210
Javier Arcila Castro, Norbey Valencia Pascuas, María Elena Bernal Vera, Elmer Castaño

LOS ALCALOIDES

Desde tiempos antiguos el ser humano viene utilizando las substancias que
la naturaleza le ofrece como medicinas, venenos o pociones mágicas; pero es
sólo recientemente cuando el hombre adquiere un conocimiento preciso de las
estructuras químicas de estos productos naturales.

Los numerosos productos aislados de la naturaleza hasta hoy se pueden clasicar


de varios modos atendiendo a diferentes criterios: al origen biogenético, las
características químicas, la fuente natural de que se obtienen o a su actividad
farmacológica. De los distintos grupos que se pueden hacer atendiendo las
características químicas uno de los más importantes es el de los alcaloides.

Los alcaloides son compuestos nitrogenados que proceden principalmente de


metabolismo secundario de las plantas, aunque también son aislados a partir
de mamíferos, peces, microorganismos, etc. La importancia de los alcaloides
se debe tanto a su abundancia y la diversidad estructural que presentan, como
a la variedad de rutas biogenéticas que los originan y las actividades biológicas
que poseen.

Los alcaloides isoquinolínicos constituyen uno de los grupos de alcaloides


más importantes en el cual están englobados todos los productos naturales que
contienen en su estructura un sistema heterocíclico de tipo isoquinolina.

Figura 3. Sistema heterocíclico básico de los alcaloides isoquinolínicos.

Las estructuras que presentan estos alcaloides (Fig. 3) son muy variadas
y según las estructuras que posean conforman distintos grupos:

184
Evaluación del extracto del trompeto (Bocconia frutescens L.)...

bencilisoquinolinas, protoberberinas, homoprotoberberinas, etc. Por otra parte,


las isoindolobenzazepinas aunque no incorporan una unidad isoquinolínica
en su estructura, se les consideran pertenecientes al grupo de los alcaloides
isoquinolínicos por su posible conexión biogenética con éstos (Rodríguez,
1998).

EXTRACTOS VEGETALES

La extracción y el empleo de algunas de las sustancias que intervienen como


mecanismo de defensa, pueden ser de gran ayuda para los agricultores, sobre
todo en aquellos casos de mayor complejidad, donde el control de plagas y
enfermedades requieren manejos alternativos.

Se cree que gran parte del efecto de los extractos de plantas sobre las
enfermedades, más que deberse a algún tipo de toxicidad directa, se produce
por el fortalecimiento estructural de la planta, incrementando su resistencia
a la penetración de los micelios de los hongos y a los ataques de insectos
chupadores como los pulgones, o bien estimulando un desarrollo vigoroso
para superar un ataque. La cola de caballo contiene una saponina tóxica para
los hongos llamada equisetonina y ácido silícico que favorece la estructura de
la planta. Por lo general no hay una única sustancia responsable, sino que es
una interacción compleja entre una gama de agentes (Lampkin, 1998).

Lampkin arma que los extractos pueden actuar como repelentes de los
insectos, tal es el caso del ajenjo, el ají, el ajo o pueden ser directamente tóxicos
como el pelitre, el neem. Las sustancias repelentes pueden ser utilizadas en
forma preventiva o asociadas con polvo de roca o extractos de ruibarbo y
ortiga que tienen un efecto irritante. En Suiza se realizaron algunos ensayos
sobre tratamientos alternativos de desinfección de semillas para el control de
Septoria y Fusarium en trigo; se encontró que el extracto de cola de caballo era
comparable a las desinfecciones de semillas con preparados a base de mercurio,
en parte debido a un efecto depresor del crecimiento. La cola de caballo eliminó
completamente la Septoria, lo que no se consiguió con ningún otro tratamiento

185
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 175 - 210
Javier Arcila Castro, Norbey Valencia Pascuas, María Elena Bernal Vera, Elmer Castaño

de desinfección. Los resultados que se obtienen son muy variables y esto se


relaciona con que muchos de los compuestos son aromáticos, o solubles al agua,
o son degradados rápidamente por la luz solar, por lo que no pueden aplicarse
con éxito al aire libre ya que desaparecen muy rápidamente.

La calidad y concentración de las sustancias activas pueden llegar a variar


hasta 500% de una estación a otra o con la localización de la planta, edad
y madurez del material vegetal con que se prepara el extracto. La sustancia
activa se encuentra a menudo concentrada en una parte especíca de la planta,
aunque frecuentemente y por razones comerciales, se emplee toda la planta.
Otra causa de la variabilidad incluye el hecho de que la sustancia activa suele
estar ligada a un azúcar y necesita ser separada por una enzima antes de
activarse y el secado rápido impide o reduce este proceso, por lo tanto baja su
efectividad. Dejar las plantas en remojo también puede destruir la sustancia o
dejarla escapar (Lampkin, 1998).

Según Lampkin (1998) los extractos pueden actuar contra insectos beneciosos
y microorganismos no patógenos, incluidos los antagonistas. Los preparados
que afectan a microorganismos de la supercie de las hojas pueden resultar
beneficiosos porque retrasan el proceso de envejecimiento de la hoja,
favoreciendo un incremento de la producción, pero también pueden ocasionar
daño ya que los antagonistas se ven afectados de forma adversa, permitiendo en
algunos casos que se recupere el patógeno y se desarrolle sin control. A pesar
de encontrar dicultades en el uso de preparados de plantas hay extractos que
han mostrado ser efectivos de forma segura, incluso preparados por el agricultor
sin disponer de mayor equipamiento, un ejemplo lo constituye la lengua de
vaca (Rumex sp.), cuyo difícil control como maleza se debe en gran parte a
su resistencia a prácticamente todo tipo de patógenos y plagas de insectos, lo
que parece indicar que tiene un mecanismo de defensa particularmente bien
desarrollado.

El Instituto Suizo para la Investigación en Agricultura Biológica realizó


experiencias con Rumex sp. para comprobar su ecacia contra las enfermedades

186
Evaluación del extracto del trompeto (Bocconia frutescens L.)...

criptogámicas. El extracto de Rumex sp. mostró ser la más efectiva de 40


sustancias diferentes ensayadas en el laboratorio contra el oidio en pepinos
y manzanas, y era comparable al azufre y al fungicida comercial Bayletón
(Lampkin, 1998).

Es importante al momento de realizar un control de plagas o enfermedades, dar


preferencia a los métodos alternativos de control, en particular al conocimiento
del ciclo vital de las plagas para actuar sobre este último cuando sea posible.

INSECTICIDAS NATURALES A PARTIR DE EXTRACTOS VEGETALES

A partir de la necesidad de encontrar una nueva alternativa natural para el


control de insectos plagas y reemplazar así los pesticidas sintéticos, aparecen
los insecticidas botánicos ofreciendo seguridad para el medio ambiente y una
eciente opción agronómica.

Muchas plantas son capaces de sintetizar metabolitos secundarios que poseen


propiedades biológicas con importancia contra insectos plagas. La selección
de plantas que contengan metabolitos secundarios capaces de ser utilizados
como insecticidas naturales deben ser de fácil cultivo y con principios activos
potentes, con alta estabilidad química y de óptima producción (Silva, 2002).

Los principales compuestos aislados de plantas usadas desde hace mucho


tiempo para nes insecticidas son: la rotenona, extraída de una planta llamada
derris (Derris elliptica y Lonchocarpus utilis, Fam. Leguminosae), es un
avonoide que se extrae de las raíces de estas plantas. De la primera se puede
obtener 13% de rotenona mientras que de la segunda 5%. Derris es nativa de los
trópicos orientales, mientras que Lonchocarpus es del Hemisferio Occidental.
Este compuesto es un insecticida de contacto e ingestión, y repelente. Su
modo de acción implica una inhibición del transporte de electrones a nivel de
mitocondrias bloqueando la fosforilación del ADP a ATP. Por esto se dice que
actúa inhibiendo el metabolismo del insecto. Los síntomas que presentan los
insectos intoxicados con rotenona son: disminución del consumo de oxígeno,
depresión en la respiración y ataxia, que provocan convulsiones y conducen

187
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 175 - 210
Javier Arcila Castro, Norbey Valencia Pascuas, María Elena Bernal Vera, Elmer Castaño

nalmente a la parálisis y muerte del insecto por paro respiratorio (Silva,


2002).

Los áfidos y los trips concentran gran atención de esfuerzos científicos y


técnicos para su manejo, dada su amplia distribución en el mundo y su carácter
polífago, además de conformar un grupo importante de vectores transmisores
de virus. Así mismo Colletotrichum musae (Berk & Curt.) von Arx. y Botrytis
cinerea Pers., son patógenos de importancia por afectar el cultivo de musáceas
de gran interés económico para Colombia como es el caso del plátano,
banano y heliconias y en el caso de Botrytis por su gran variedad de especies
cultivadas, representa una parte significativa de los costos de producción por
efectos de su control químico (Quijandría, 2002).
La importancia de los problemas enunciados en el párrafo anterior y la
oportunidad de aprovechar las características fotoquímicas del trompeto,
llevaron a los autores del trabajo a valuar el efecto del extracto obtenido de
diferentes partes de plantas de trompeto sobre insectos (trips y ádos) y hongos
(Colletotrichum musae (Berk & Curt.) von Arx. y Botrytis cinerea) como
acercamiento inicial para la determinación de su aprovechamiento y desarrollo
como alternativa de manejo agrario. Se constituye así este trabajo en un primer
paso de análisis para su aprovechamiento en la producción de insumos para la
obtención de “biocidas y la protección de cultivos”.

METODOLOGÍA

COLECCIÓN DEL MATERIAL VEGETAL

El material vegetal de Bocconia frutescens, fue recolectado en el Jardín Botánico


de la Universidad de Caldas, ubicado a 2100 msnm, con una temperatura de
21ºC y una humedad relativa (HR) de 65%. Las muestras se tomaron de plantas
en fase reproductiva y de más tres años de edad. El material fue sometido a
congelamiento (0 ºc, durante 24 horas) para inducir la lisis celular y de esta
forma facilitar la extracción de sus contenidos.

188
Evaluación del extracto del trompeto (Bocconia frutescens L.)...

y 50% impide el desarrollo normal del crecimiento del micelio en C. musae,


mostrando una inhibición en un 100%, y en el caso de B. cinerea los extractos
de tallo y frutos al 50% afectan notablemente el desarrollo del micelio, sin
llegar a impedirlo en su totalidad. El crecimiento micelial es una de las mejores
formas para determinar la eciencia del control sobre los micopatógenos, pues
es así como realiza la colonización de los hospederos.

En cuanto a la esporulación de los hongos, en las Tablas 2 y 4 se rearma la


acción del extracto sobre C. musae y B. cinerea dado que muestra un efecto
inhibitorio en la producción de conidias para ambos patógenos en cada una
de sus dosis, mientras que en los testigos hay una producción considerable de
estas estructuras reproductivas.

La determinación de la variable cualitativa “desarrollo de tubos germinativos”


permite reforzar la tesis formulada, en la cual el efecto del extracto de tallo
al 25% y 50% inhibe la germinación de las conidias y por ende el desarrollo
de los tubos germinativos en ambos hongos; para los tratamientos con los
extractos de hojas se observa un efecto favorable en la germinación de las
conidias y el desarrollo de los tubos germinativos, los cuales muestran un
mayor crecimiento que el testigo, lo anterior se puede deber a las bajas
concentraciones de los metabolitos con actividad biológica y a la presencia de
otras substancias presentes en el extracto de la planta que en lugar de inhibir
estimulan el crecimiento, ofreciendo nutrientes.

Lo anterior conrma la actividad antimicrobiana de B. frutecens descrita por


muchos autores, la que ha sido atribuida a varios de sus metabolitos secundarios
como saponinas, triterpenos y especialmente a su complejo de alcaloides
(Bocconina) (Sánchez, 2004), ofreciendo la oportunidad de usarlos para el
manejo de enfermedades de importancia agrícola.

INSECTOS

Quijandría, (2002) Portela (2006) y Díaz (2000) reportan el uso de los extractos

205
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Javier Arcila Castro, Norbey Valencia Pascuas, María Elena Bernal Vera, Elmer Castaño

de B. frutecens como insecticida y acaricida de forma empírica por algunas


comunidades indígenas y campesinas.

En los tratamientos propuestos en este ensayo para ádos y trips, el efecto


insecticida sobre la mortalidad de estos artrópodos no constituyó diferencias
signicativas dado que no causó la muerte de los individuos. El efecto de los
tratamientos merece especial relevancia sobre la variable número de individuos,
pues al hacer inferencias sobre las Tablas 5 y 6 se observa un aumento de la
población del testigo frente a la aplicación de los extractos; pues en el caso
de los trips es posible la presencia de huevos y su eclosión al transcurrir unas
horas y debido a ello la presencia de ninfas que contribuyeron al aumento de
la población.

Según Vélez (1997), un ádo adulto produce en promedio 4,3 ninfas/adulto/


día, lo cual explica el aumento de la población, ya que en cada uno de los
tratamientos estaban presentes adultos que pudieron contribuir a su aumento.
La tasa de reproducción se vio afectada con la aplicación de los extractos, los
que mantuvieron la población inicial afectando su reproducción y desarrollo.
La variable mortalidad de los individuos, no muestra signicancia estadística
lo que permite inferir la no efectividad de los extractos como biocidas.

CONCLUSIONES

Los extractos etanólicos de la planta B. frutecens, ejercieron efecto inhibitorio


sobre el crecimiento de las colonias de B. cinerea en los tratamientos con tallos
al 50%, y frutos al 50% y para C. musae, en los tratamientos con extractos de
tallos al 50% y 25%.

Los ensayos muestran mayor susceptibilidad de C. musae al extracto de la


planta, respecto a B. cinerea sobre las variables evaluadas.

El extracto obtenido del tallo en concentración de 50% mostró el control más

206
Evaluación del extracto del trompeto (Bocconia frutescens L.)...

signicativo en los dos patógenos (B. cinerea y C. musae), para todas las
variables evaluadas, crecimiento micelial, esporulación y desarrollo de tubos
germinativos.

El mejor control realizado por los extractos de tallos se puede deber a sus
mayores concentraciones de metabolitos secundarios con propiedades
antimicrobianas.

Las concentraciones de los extractos evaluadas no mataron las poblaciónes pero


sí presentaron un efecto inhibitorio importante en el incremento de poblaciones
de trips y ádos, donde uno de los efectos de la aplicación de los tratamientos
está dirigido a la inhibición del cambio de estado de estos insectos.

Los resultados de este ensayo del control ejercido del extracto de B. frutescens
sobre B. cinerea y C. musae apuntan a un efecto fungicida.

RECOMENDACIONES

Determinar la parte de la planta con las mayores concentraciones de los


metabolitos secundarios de interés para el control de patógenos de acuerdo
con las características ambientales (temperatura, humedad relativa,
precipitación).

Realizar ensayos sobre otros hongos e insectos para determinar la especicidad


del control efectuado por el extracto de B. frutescens.

Realizar pruebas en campo del control de los extractos de tallo y frutos para
los patógenos e insectos propuestos en este estudio.

Realizar pruebas aisladas de los metabolitos secundarios (alcaloides, triterpenos


y saponinas) sobre el control de los patógenos para determinar su incidencia.

207
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Javier Arcila Castro, Norbey Valencia Pascuas, María Elena Bernal Vera, Elmer Castaño

Realizar pruebas en bacterias topatógenas con estos extractos.

Comparar el control efectuado de los extractos de tallos y frutos frente a


controles químicos de los patógenos propuestos.

Determinar a través de diferentes concentraciones (menores a las que ofrecieron


control) de los extractos sobre los patógenos evaluados, la dosis mínima
inhibitoria.

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210
DESCRIPCIÓN FITOQUÍMICA DEL JAZMÍN DE NOCHE
(Cestrum nocturnum L.)

YAMILETH CUARTAS BETANCUR


ELMER CASTAÑO RAMÍREZ
DESCRIPCIÓN FITOQUÍMICA DEL JAZMÍN DE NOCHE
(Cestrum nocturnum L.)

YAMILETH CUARTAS BETANCUR


INGENIERA AGRÓNOMO
ELMER CASTAÑO RAMÍREZ
INGENIERO AGRÓNOMO- PROFESOR TITULAR UNIVERSIDAD DE CALDAS, MANIZALES COLOMBIA
desrural@ucaldas.edu.co

Recibido: 18 de septiembre de 2006


Aceptado: 11 de octubre de 2006

RESUMEN

El objetivo de este trabajo es describir los contenidos de sustancias toquímicas


del Cestrum nocturnum L.; para tal n se utilizó una metodología documental
analítica con la extracción en laboratorio de los contenidos químicos. Esta
planta, perteneciente a la familia solanácea, contiene una concentración
relativamente alta de alcaloides, básicamente nicotina, atropina, escopolamina
e hiosciamina, lo que puede propiciar efectos alucinógenos.

Palabras clave: Cestrum nocturnum L., solanaceae, plantas sicoactivas,


nicotina, toquímica, escopolamina, atropina, hiosciamina.

ABSTRACT

PHOTOCHEMICAL DESCRIPTION OF THE NIGHT JASMINE


(Cestrum nocturnum L.)

The objective of this work is to describe the contents of the phitochemical


substance of Cestrum nocturnum L. For said purpose, an analytical documentary
methodology was used with the laboratory extraction of its chemical contents.

213
Yamileth Cuartas Betancur, Elmer Castaño Ramírez

This solanaceae family plant contains a relatively high concentration of


alkaloids, basically nicotine, atropine, escopolamine and hiosciamine, which
can cause hallucinogenic effects.

Key words: Cestrum nocturnum L., solanaceae, psicoactive drugs, nicotine,


phitochemistry, escopolamine, atropine, hiosciamine.

INTRODUCCIÓN

Cestrum nocturnum L., llamado comúnmente dama de noche, jazmín de noche,


galán de noche, cestro o zorrillo, pertenece a la familia solanáceae y se hace
atractiva por su agradable olor.

La toxicidad de las especies del género Cestrum, es conocida desde la


antigüedad, atribuyéndosele principios de naturaleza alcaloídica o glicosídica,
y es precisamente por el desconocimiento generalizado sobre el Cestrum
nocturnum L., que se decidió realizar esta investigación (durante el año 2006)
donde se describen los contenidos de sustancias fitoquímicas en esta especie
de jazmín.

El uso de plantas de aplicación sicoactiva ha formado parte de la experiencia


humana por milenios, pero solo hace poco tiempo las sociedades occidentales
han tomado conciencia del significado que ellas han tenido tanto en la
formación de pueblos primitivos como en las culturas avanzadas; de hecho,
los últimos veinte años han alcanzado un vertiginoso crecimiento en el
interés por los principios químicos como los que se encuentran en el Cestrum
nocturnum L., su valor y uso en sociedades como la colombiana.

METODOLOGÍA

Se realizó un proceso de extracción de principios químicos en el Laboratorio de

214
Descripción toquímica del jazmín de noche (Cestrum nocturnum L.)

Procesos Agroindustriales de la Universidad de Caldas a partir de tallos, hojas,


ores y frutos de la planta de jazmín de noche (Cestrum nocturnum L.) así:

ADECUACIÓN DE MATERIA PRIMA Y EXTRACCIÓN DE ESCOPOLAMINA

Se congelaron las muestras a 4 ºC para que se formaran unas agujas en la


membrana celular y así ocasionaran rompimientos, los cuales permiten la
liberación de los distintos componentes toquímicos y hacen más fácil la
extracción. Se pesaron 50 g de cada parte de la planta, luego la extracción fue
realizada por el método Soxhlet, por el cual se recirculó 5 veces en un tiempo
total de 2 horas a una temperatura de 60 ºC. La relación solvente/sólido utilizada
fue de 6/1 (p/p). Este solvente fue utilizado debido a la alta solubilidad de los
compuestos fenólicos presentes en las partes de esta planta. Para cada uno de
las extracciones, el solvente fue separado del extracto mediante destilación
bajo vacío utilizando un equipo rotavapor BUCHI R110 para los extractos en
alcohol y agua; a temperatura de 50 ºC se obtuvieron nuevamente 800 ml de
alcohol-agua. Posteriormente se sometió cada extracto a un almacenamiento
en refrigeración, tapado y rotulado.

ADECUACIÓN DE MATERIA PRIMA Y EXTRACCIÓN DE ATROPINA Y HIOSCIAMINA

Se congeló la muestra de 100 gramos de hojas, luego se picó namente y se puso


a hervir en 500 ml de agua durante 15 minutos y se le adicionaron 10 gramos
de ácido tartárico. Se ltró y el líquido se concentró a 100 ml. Se repitió la
evaporación a una temperatura constante de 50 grados centígrados con 100 ml
de etanol y el extracto alcohólico de color pardo se concentró hasta obtener una
consistencia cipurosa (jarabe). Se le adicionaron 100 ml de éter y se agitó para
quitarle los materiales colorantes. Dicho éter se destiló y se recogió la misma
cantidad aplicada. Se adicionaron 10 gramos de KOH al 5% y 50 ml de agua sin
dejarla mucho tiempo en la solución alcalina. Los extractos etéreos recogidos se
destilaron hasta la mitad, y el residuo semisólido y traslúcido, de color amarillo
pardo, se disolvió en ácido sulfúrico muy diluido 1 p.p.m. y se ltró.1
1 Metodología proporcionada por el ingeniero químico Luis Flórez Espinosa, Profesor Universidad de Caldas. In-
édita. Según comunicación personal, mayo/2006.

215
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 211 - 226
Yamileth Cuartas Betancur, Elmer Castaño Ramírez

Después de descomponer los sulfatos se adicionaron 20 gramos de bicarbonato


de sodio al 10% y se tomó la atropina con éter o cloroformo, 10 ml al 10%.
Se puso a evaporar para formar los cristales y se recristalizó en alcohol de la
siguiente forma: se disolvió en alcohol, se añadió agua hasta que empezó a
enturbiase, se reañadió alcohol hasta que volvió a disolverse todo, se evaporó a
temperatura ambiente, esta operación se repitió varias veces hasta que resultaron
los cristales brillantes.

ADECUACIÓN DE MATERIA PRIMA Y EXTRACCIÓN DE SAPONINAS

El proceso de extracción y puricación se hizo de la misma forma que para


la escopolamina. Se realizó la prueba de Liebermann-Burchard. Después se
sometió a cromatografía de capa na para determinar qué saponinas estaban
incluidas en la puricación del extracto y por hidrólisis se obtuvieron las
sapogeninas que hacen parte de la toquímica del jazmín de noche (Cestrum
nocturnum L.).

ADECUACIÓN DE MATERIA PRIMA Y EXTRACCIÓN DE NICOTINA

En un vaso de precipitado de 1 L se colocaron desde el día anterior 100 g.


de hojas congeladas y picadas en trozos y 500 ml de agua destilada. Al día
siguiente, se agitó durante 15 minutos la mezcla preparada. Se ltró la mezcla
con bomba de vacío. Se recibió el ltrado, en un balón colocado en un baño
de hielo para evitar la descomposición de la nicotina. Con el ltrado dentro de
un baño de hielo se añadió lentamente y con agitación 15 ml de la solución de
NaOH al 20%. Se transrió el ltrado alcalino a un embudo de separación de
1 litro y se realizó una extracción con 100 ml de éter etílico. Se separó la fase
acuosa y se guardó para una extracción posterior. Cuando la parte superior de
la fase etérea está emulsionada, se decanta cuidadosamente éter hacia un vaso
seco. Se repitió el procedimiento de extracción 3 veces más, usando 30 ml de
éter etílico. Se reunieron las tres fases etéreas y se desechó la fase acuosa. Se
separó la solución etérea en tres fracciones de 50 ml cada una y se calentó
suavemente con un baño maría a 30 grados centígrados. A medida que el éter

216
Descripción toquímica del jazmín de noche (Cestrum nocturnum L.)

se evaporó la solución etérea se enfrió. Cuando el volumen se redujo a 15


ml, se añadió otra fracción del extracto y reinició la evaporación. Se repitió
la misma operación con la última fracción. Continuó la evaporación hasta la
eliminación total del éter. Se añadieron 10 ml de agua y se agitó para disolver
el residuo. Se adicionaron 25 ml de etanol y se ltró a través de un embudo
pequeño provisto de un tapón de lana de vidrio. No se permitió que la lana de
vidrio tocase la piel. Se enjuagó con 5 ml de etanol en un erlenmeyer hasta que
una las soluciones estuviese clara. Se añadieron 40 ml de solución saturada de
ácido pícrico en metanol. Se ltró por gravedad. Cualquier otro precipitado
que aparecía en el erlenmeyer, después de la ltración, era ácido pícrico, no
se dejó secar y se desechó. Se dejaron secar los cristales y se halló su masa, se
determinó el punto de fusión y el porcentaje de nicotina en la muestra.

REVISIÓN DOCUMENTAL

Lo que un químico busca es el principio activo, la quintaesencia o quintaesenttia,


como Paracelso llamaba a los compuestos activos de las drogas de origen
vegetal. En 1923, Willstsetter sintetizó la cocaína, aislada por Niemann en
1860. A partir de 1971, Robinson empezó a estudiar la biogénesis de alcaloides,
pigmentos vegetales y otros productos de las plantas, mientras que otros
investigadores buscaron la relación entre las sustancias aisladas de los vegetales
y su clasicación taxonómica, sus condiciones de cultivo y otros factores
externos. Se sabe que muchos de los compuestos aislados, son productos de
la degradación o transposición que ocurren durante el aislamiento y se deben
a la inuencia de enzimas o agentes químicos extraños (Domínguez, 1973).

Relevancia en alcaloides

Conviene aclarar algunas cosas sobre los alcaloides, dado que fueron los que se
encontraron en mayor proporción en la química del Cestrum nocturnum L.:

Derivados de las pirrolidinas (C4 N): la higrina (del griego hygro, húmedo) y la
cuscohygrina son bases oleosas que se encuentran como alcaloides secundarios
acompañando a la cocaína en las hojas de coca.

217
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 211 - 226
Yamileth Cuartas Betancur, Elmer Castaño Ramírez

Derivados de la piperidina (C5 N): la piperina, un alcaloide del fruto de la


pimienta negra (Piper nigrum) que es una amida.

Alcaloides de núcleo pirídico: tienen como modelo funcional al de la piridina,


acompañado de cadenas laterales acíclicas y cíclicas. La piperina, un alcaloide
del fruto de la pimienta negra (Piper nigrum) que es una amida. Como ejemplos
están la nicotina, conina o cicutina, coniceina, piperina.

Alcaloides de núcleo tropánico: la cocaína, la atropina y la escopolamina,


son los miembros más importantes del grupo; derivan de la base fundamental
denominada tropano.

Alcaloides de núcleo quinolínico: se encuentran en estado natural en las


cortezas de varias plantas de la familia de las rubiáceas, genero Cinchona,
y se han llamado alcaloides de las quinas, por ser estos árboles los que los
contienen en mayor abundancia.

Alcaloides de núcleo isoquinolínico: los importantes son los pertenecientes


a las papaveráceas, que forman parte de los alcaloides del opio, y los de las
ranunculáceas. La papaverina es un alcaloide isoquinilínico, encontrado en el
opio, junto con morna, narcotina, codeína, papaverina y tebaína.

Alcaloides de núcleo fenantrénico: todos los alcaloides de este grupo se encuentran


en el opio y constituyen las principales fuentes en él, su actividad siológica es
muy notable, por lo cual han recibido numerosas aplicaciones terapéuticas; los
principales son la morna, la codeína, llamada también codeinota.

Alcaloides de núcleo indólico: se encuentran en plantas del género Strychnos


nuxvómica, y los principales alcaloides son estricnina, brucina y curarina.

Alcaloides de núcleo no definido: muchos son todavía los alcaloides cuya


constitución no ha podido precisarse en el estado actual de la química del
carbono, por muchas dicultades encontradas al pretender establecer su fórmula
desarrollada.

218
Descripción toquímica del jazmín de noche (Cestrum nocturnum L.)

DISTRIBUCIÓN BOTÁNICA DE LOS ALCALOIDES

Clases No. Genero/ Familias con No. de


Familias Especie Alcaloides Alcaloides
Lycopsida 3 4/1160 Lycopodiaceae 60
Psilotopsida 2 2/5 - -
Articulatae 1 1/30 Equisetaceae 4
23 245/9120 - -
Filicinee (helechos)
2 10/90 - -
Cycadopsida
6 42/490 Cephalotaxaceae 5
Coniferopsida Pinaceae 2
Taxopsida 1 2/8 Taxacetae 10
Chlamydospermae 3 3/80 Ephedraceae 6

Tabla 1. Distribución de alcaloides en pteridophyta y gymnospermas.

Familias Número de alcaloides encontrados


Apocynacea 250
Amaryllidacea 150
Liliacea 130
Leguminoseae 150
Ranunculacea 150
Papaveracea 100
Loganiacea 100
Rutacea 75
Rubiacea 60
Solanacea 65
Compuestas 60
Menispermacea 50
Magnoliacea 30
Lauracea 30

Tabla 2. Distribución de alcaloides en angiospermas. 2

2 Disponible: http://fbio.uh.cu/webfv/articulos/metabolismo%20secundario.doc.

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cult.drog. No. 13, 2006, págs. 211 - 226
Yamileth Cuartas Betancur, Elmer Castaño Ramírez

Saponinas

Una de las propiedades más conocida de las saponinas es la capacidad de formar


espuma, por agitación de sus soluciones. Esta propiedad ha sido utilizada para
su puricación, ya que la espuma contiene buena parte del heterópsido que
estaba en la solución, libre de impurezas solubles. La formación de espuma
puede ser modicada por la presencia de diversas sustancias: el alcohol, el éter,
el cloroformo; en una concentración suciente pueden suprimirla.

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

SAPONINA GITONINA DIGITONINA

(Gitogenina) (Digitogenina)
UBICACIÓN
% %
HOJAS 0,07 0,07
TALLOS 0,08 0,07
FLORES 0,09 0,9
FRUTOS 0,1 0,1

Tabla 3. Resultados de saponinas encontradas en jazmín de noche (Cestrum nocturnum L.).

Se usan en la química farmacéutica para crear medicamentos con base en


gitogenina y digitogenina, como mecanismos tonicadores del músculo
cardíaco hacen disminuir el pulso, favorecen la formación y la expulsión de la
orina y están indicadas para la curación de edemas. Se usan también en análisis
clínicos en laboratorio para la evaluación de existencia de hiperlipidemia y
de riesgo de enfermedades cardiovasculares como el colesterol.3 Hemolisa
glóbulos rojos en la sangre. Forma glicósidos con azúcares o sea, la saponina es
la sapogenina (agluión) unida al azúcar llamado digitogenina. Son hipotensoras.
La gitonina es antivírica, el erubósito B es hipotensora en conejos y perros,
3 Métodos de análisis en química clínica. Disponible en: www.siac.net.co/biota/bitstream/123456789/106/1/Ces-
trum.pdf

220
Descripción toquímica del jazmín de noche (Cestrum nocturnum L.)

antifúngica y factor de crecimiento en dosis elevadas. Incrementa la utilización


de la vitamina B1, es antibacteriana y extremadamente tóxica.

ALCALOIDE NICOTINA ATROPINA % HISCIAMINA ESCOPOLAMINA


% % %
UBICACIÓN
HOJAS 0,45 0,1 0,09 0,03
TALLOS 0,4 0,1 0,07 0,03
FLORES 0,1 0,1 0,08 0,05
FRUTOS 0,1 0,1 0,08 0,05

Tabla 4. Resultados de alcaloides encontrados en jazmín de noche (Cestrum nocturnum L.).

Nicotina

La nicotina está a menudo asociada con el vicio del fumador y es una de las
drogas toxicas más fuertes conocidas. La dosis letal es de 60 miligramos. Un
cigarrillo contiene 150 miligramos de nicotina, pero el fumador absorbe menos
del 10% de ella. El organismo, a su vez, la metaboliza rápidamente impidiendo
su acumulación en el cuerpo.

Identificación de peligros: tóxico por ingestión. Muy tóxico en contacto con


la piel. Tóxico para los organismos acuáticos, puede provocar a largo plazo
efectos negativos en el medio ambiente acuático.

Información toxicológica: toxicidad aguda. LD 50 (dérmica, conejo) 50 mg/


kg. LD 50(oral, rata) 50 mg/kg.

Tras inhalación de vapores causa irritación en las vías respiratorias. Al tener


contacto con la piel genera leves irritaciones. Presenta riesgo de absorción por
la piel. En contacto con los ojos origina leves irritaciones. Por ingesta tiene
una rápida absorción y ocasiona náuseas, vómito y descomposición. Tiene
efectos sistémicos sobre el sistema cardiovascular y en el nervioso central
induce ansiedad, espasmos, es amortiguador de la respiración, suscita colapso
y coma. El producto debe tratarse con cuidado especial.

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cult.drog. No. 13, 2006, págs. 211 - 226
Yamileth Cuartas Betancur, Elmer Castaño Ramírez

Atropina e hiosciamina

Esta planta perteneciente a la familia solanácea contiene una concentración


relativamente alta de alcaloides, básicamente nicotina, atropina, escopolamina
e hiosciamina, lo que puede propiciar efectos alucinógenos. La intoxicación es
seguida de una narcosis en que se presentan alucinaciones durante la transición
entre la conciencia y el sueño.

La atropina ha servido a los químicos como modelo para sintetizar muchos


compuestos alucinógenos. Sus efectos (y los efectos de la escopolamina)
difieren de aquellos que exhiben los alucinógenos naturales normales:
son extremadamente tóxicos. Quienes la utilizan no recuerdan nada de lo
experimentado durante la intoxicación, pierden todo sentido de la realidad y
caen en un profundo sueño parecido al delirio alcohólico.

Escopolamina

Funde a 59° y su poder rotatorio levogiro vale -33°. Es midriática como la


atropina, pero además ejerce un poder paralizante sobre el sistema nervioso.
Su acción se diferencia de la atropina en que no produce como esta un periodo
preliminar de excitaciones, y por esta causa se emplea como calmante asociado
con morna, para producir un estado de somnolencia y narcosis.4

Mecanismo de acción y formas de empleo: sus efectos comienzan entre los


15 y los 30 minutos y duran hasta 72, aunque cada vez con menor intensidad.
La escopolamina que contiene esta planta es un agente anticolinérgico que
actúa bloqueando los receptores colinérgicos en el cerebro. En función de
ello se deprimen los impulsos de las terminales nerviosas, o si la dosis ha sido
elevada se estimulan y posteriormente se deprimen.5
Usos terapéuticos: según reporta Richard Heffern en su libro Secrets of the
mind-altering plants of Mexico, se aplica externamente como un emplasto
caliente para aliviar el dolor de huesos fracturados y otras heridas superciales.
4 http://www.mind-surf.net/drogas/ oripondio.html.
5 Ibídem.

222
Descripción toquímica del jazmín de noche (Cestrum nocturnum L.)

También se usa por sus propiedades narcóticas, colocando ores debajo de la


almohada para inducir el sueño.
Dosificación: la dosis letal de la escopolamina se halla en 100 mg.
Efectos psicológicos y fisiológicos: sobre la escopolamina se sabe que no
es un visionario como un auténtico alucinógeno. Las alucinaciones no son
sólo visuales, sino también auditivas e incluso táctiles. Parecen tan reales
que a menudo se pierde el contacto con la realidad por completo y un
observador externo puede ver al sujeto intoxicado sosteniendo conversaciones
incoherentes con personas inexistentes o realizando acciones totalmente fuera
de contexto.
A nivel físico la escopolamina provoca disminución de secreción glandular, la
producción de saliva se suspende produciendo sequedad de boca, sed, dicultad
para deglutir y hablar, pupilas dilatadas con reacción lenta a la luz, visión
borrosa para objetos cercanos e incluso puede llegar a producirse una ceguera
transitoria; taquicardia acompañada, a veces, de hipertensión, enrojecimiento de
la piel por vasodilatación cutánea y disminución de la sudoración, e hipertermia
que puede llegar hasta 42 °C.6
Otros aspectos fitoquímicos agroindustriales encontrados en jazmín de
noche (Cestrum nocturnum L.)
Como insecticida natural: el primer insecticida natural apareció en el siglo
XVII cuando se demostró que la nicotina, obtenida de hojas de tabaco, mataba
a unos escarabajos que atacaban al ciruelo. En la actualidad se puede utilizar
en forma de purín para el control de plagas en la horticultura.

Como insecticida sintético o químico: se encuentran en el mercado un grupo


de insecticidas conocidos como neonicotinoides que son copias sintéticas o
derivadas de la estructura de la nicotina como son Imidacloprid, Thiacloprid,
Nitempiram, Acetamiprid y Thiamethoxam entre otros. (Silva et al., 2002).

Como sustituto: con los altos contenidos de nicotina pura en la planta se


6 Ibídem.

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cult.drog. No. 13, 2006, págs. 211 - 226
Yamileth Cuartas Betancur, Elmer Castaño Ramírez

podría pensar en emplear la planta como un sustituto de la hoja del tabaco, para
hacer la extracción de la nicotina. Y puede ser fuente industrial de alcaloides
tropánicos.

Como jabón: debido a su alto contenido de saponinas especialmente de


Gitonina y Digitonina entre otras.

Consumo como cigarro: las hojas de Cestrum nocturnum, se fuman como


sustituto de la marihuana o maconha entre los pueblos marinos, a lo largo
de las regiones costeras del sur de Brasil. Que sean o no verdaderamente
alucinógenos sus efectos no está aún muy claro. Se puede pensar que en estos
pueblos sustituyen la marihuana o maconha por jazmín de noche (Cestrum
nocturnum) por sus altos contenidos de nicotina, ya que este alcaloide se
encuentra en toda la planta pero en mayores proporciones en las hojas, con
45%. Puede ser psicoactivo por tener en su fitoquímica sustancias realmente
tóxicas y aun más, puede de igual forma ser alucinógeno por tener contenidos
en proporciones menores del alcaloide escopolamina, que hasta ahora es el
único alcaloide que crea efectos alucinógenos. Se desconoce si realmente las
saponinas gitonina y digitonina pueden ocasionar tal efecto, pero sí se sabe
que son extremadamente tóxicas.
El jazmín de noche se considera una planta tóxica porque produce glucósidos
digitogenina y gitonina, Desde el siglo XVI ya se conocía su toxicidad en
España. También se han realizado estudios en otros países como aporte a la
neurología y neurocirugía. Partiendo de la toquímica del jazmín de noche se
han hecho aportes como el siguiente: se analizó el efecto de la administración
aguda de los extractos de cloroformo y tolueno obtenidos a partir de las hojas
secas de Cestrum nocturnum L. sobre modelos de conducta exploratoria y
pruebas de analgesia, donde el propósito del trabajo fue iniciar la búsqueda
de los principios activos relacionados con los efectos sedante y analgésico de
la planta. (Buznego et al., 2005).
A pesar de que los alcaloides tropánicos: atropina, hiosciamina y escopolamina,
se presentan en la planta con menores proporciones, como fuente industrial se
podrían tener en cuenta como otras vías de acceso para la obtención de éste

224
Descripción toquímica del jazmín de noche (Cestrum nocturnum L.)

tipo de alcaloides; aunque se pueden realizar diversos procesos de síntesis, no


compiten con los de extracción.

Sobre la cuanticación de las saponinas, no se ha podido generalizar al


considerar agrupadamente las plantas que poseen cantidades semejantes de
saponinas, pues se encuentran en las especies más diversas. Los mayores
porcentajes en contenidos en Cestrum nocturnum L., se dan en las ores y
frutos7 como se corrobora en este trabajo donde los mayores contenidos de
gitonina y digitonina se encontraron en los frutos con 10% de contenido.

La información anterior muestra que una gran cantidad de sustancias que se


sintetizan, son importantes desde el punto de vista biológico y antropocéntrico. Si
bien es cierto que en algunos casos se encuentran en cantidades pequeñas, el uso
indiscriminado de ellas puede acarrear trastornos severos. Éste es el peligro que
se debe tener en cuenta en las prácticas terapéuticas de la medicina tradicional,
la cual debería apoyarse en estudios toquímicos que indiquen la naturaleza de
las sustancias contenidas en las llamadas plantas medicinales. También deben
apoyarse en estudios farmacológicos que demuestren su mecanismo de acción en
los diferentes órganos del cuerpo humano y en su acondicionamiento en forma de
preparados farmacéuticos con el n de poderlos dosicar.

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226
AZTRALIA:
VIRTUDES DEL MISTERIO EN EL CÁLIZ DE COLORES
(Brugmansia sp.)

WILLIAM TORRES
AZTRALIA:
VIRTUDES DEL MISTERIO EN EL CÁLIZ DE COLORES
(Brugmansia sp.)

WILLIAM TORRES
ANTROPÓLOGO UNIVERSIDAD NACIONAL
kajuyalitsamani@gmail.com

Recibido: 24 de julio de 2006


Aceptado: 9 de agosto de 2006

Para ti, Pequeña Águila Blanca:


Maestra del Cantar y el Danzar.

RESUMEN

Etnografía autobiográca del trayecto de vida del autor relacionada con la


Brugmansia sp., en la cual describe su camino de investigación y conocimiento
con taitas o chamanes, acerca de esta planta en diversos contextos culturales,
tanto urbanos como en culturas indígenas en Colombia y la experiencia
reveladora en que acuña el término de aztralia, para identicar esta planta
conocida popularmente como borrachero.

Palabras clave: Brugmansia sp., borrachero, aztralia, tabaco,


etnoliteratura.

ABSTRACT

AZTRALIA: VIRTUES OF THE MYSTERY OF ANGEL’S TRUMPETS


(Brugmansia sp.)

229
William Torres

Autobiographical ethnography of the life of the author related to Brugmansia


sp., that describes his path of research and knowledge with the taitas or shamans,
regarding this plant in diverse cultural contexts, urban as well as in indigenous
cultures of Colombia and the revelational experience in which it is called
aztralia, in order to identify this plant commonly known as angel’s trumpet.

Key words: Brugmansia sp., angel’s trumpet, aztralia, tobacco,


ethnoliterature.

En los años durante los cuales estuve recibiendo las enseñanzas de mi maestro,
el Abuelo Óscar Román, quien en su lengua uitoto lleva el nombre de enokayï
(“Mafafa Roja”), me indicó que por un tiempo, mientras viviera en Bogotá,
debería experimentar en el sueño y la vigilia con el alimento espiritual que
gentilmente nos dona el árbol del Cáliz de Colores. Me dijo: “Este es el árbol
sagrado que predomina en esta ciudad, y como éste es tu territorio, es importante
que experimentes este alimento sagrado para tu espíritu y entendimiento”.

El Abuelo Óscar me indicó que todos los días y durante seis meses, debería
coger el cogollo de las hojas tiernas que se encuentran en las puntas de las
ramas de este árbol sagrado, y junto con sus ores, preparar una cocción para
beber por pequeños sorbos durante todos los días. Así lo hice durante los seis
meses recomendados.

Mi cotidianidad uía alimentada por esta poderosa tizana, durante el día.


Mientras que en las noches, mis sueños se alimentaban con el aroma emanado
de las ores del Cáliz de Colores. El abuelo Óscar me había recomendado que
todos los días al atardecer, cuando el árbol está emanando todas sus virtudes
al Cosmos, pidiéndole permiso y contándole mi propósito, cogiera un cogollo
de hojas tiernas junto con dos, cuatro o cinco ores. El ramito del cogollo de
hojas tiernas y una de las ores, los dejaba toda la noche en un recipiente con
agua, para a la mañana siguiente proceder a hervirlos y luego de reposarlos
envasarlos en un frasquito de vidrio para, llevándolo en mi mochila, estar

230
Aztralia: virtudes del misterio en el cáliz de colores (Brugmansia sp.)

bebiendo de este elixir durante todo el día y realizar mi cotidianidad orientado


por él. Las ores, las colocaba en la cabecera de mi cama, con la abertura de
su cáliz orientado hacia el centro de la almohada, de tal modo que al colocar
mi cabeza en el centro de la almohada respirase toda la noche el dulce aroma
del Cáliz de Colores.

Las experiencias vividas durante esos seis meses son indescriptibles, en su


mayoría conforman un ámbito de lo indecible. Sólo narraré algunas dimensiones
de realidad factibles de decibilidad.

Los primeros días fueron experiencias muy suaves. Destellos de luminosidad


con colores suaves como translúcidas acuarelas, surgiendo fulgurantes aquí,
allá. Una sequedad en la boca y la garganta me obligaba a beber agua, pero al
beberla los efectos de la plantita disminuían o se detenían según la cantidad de
agua que bebiese. Pronto descubrí que lo más adecuado era juagar y humedecer
la boca y la garganta, sin beber el agua. De este modo los efectos continuaban.
Así fue aumentando la intensidad de la visión cromática en el aparente vacío,
llenándose cada vez más de colores luminosos, ya no sólo en el aparente espacio
vacío sino en torno a los cuerpos y objetos circundantes.

Las dimensiones espacio-temporales fueron adquiriendo una nueva


dimensionalidad. El tiempo se prolongaba en su multidimensionalidad única,
en el cual el pasado y el futuro uyendo en colores innitos siempre esquivaban
el presente. En una virtualidad innita entretejida en el espacio, desde la cual,
lo actual no era más que un pequeño punto de luz. Esto me exigía un esfuerzo
muy grande, puesto que al estar vivenciando la experiencia en la plenitud de
la cotidianidad, debía obligarme a adentrarme en esos pequeñitos puntos de
luz de lo actual y desde el cual, al mismo tiempo, permanecer en lo virtual
multidimensional. A cada instante esta experiencia se fue haciendo más y
más intensiva. Al adentrarme en esos pequeñitos puntos de luz de lo actual,
estos volvían a virtualizarse en un pasado-futuro espacializado al innito, al
tiempo que debía mantener el propósito rme de realizar con precisión todas
mis actividades de la cotidianidad en una ciudad como Bogotá, que cada vez la

231
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 227 - 249
William Torres

percibía más y más salvaje. De este modo la plantita me permitía nomadizarla,


viajándola a través de mis actos.

Durante el tiempo que duró esta experiencia, realizaba una labor docente
en la Universidad Distrital. Dos veces a la semana daba clases de dos horas
relacionadas con la cultura griega antigua, y otras dos sesiones de dos horas para
un seminario relacionado con el Lenguaje y las Palabras Chamánicas. Estos dos
cursos me exigían una preparación previa especial, a lo cual le dedicaba una
considerable cantidad de tiempo para la investigación, puesto que mi propósito
académico consistía en aportar un conocimiento nuevo en cada una de las
sesiones de los seminarios. Y en ello algo novedoso empezó a acontecer. Al leer
y al escribir, las líneas de las letras de los textos se abrían en dos, de un color
negro brillante y profundo. A cada unos de sus lados fulguraba un aura dorada
metálica con la misma intensidad del oro. Y en esa aura, al ritmo de la lectura
podía leer el pensamiento que el autor no había plasmado en la escritura, en
el pasado-futuro de su pensamiento, en el afuera del pensamiento del autor y
del mío, el cual plasmaba en la escritura que conformaba los pre-textos de mis
clases. Pre-textos que se tejían en nuevas textualidades de un pensar novedoso
que llegaba a mi visión en cada una de las sesiones de los seminarios. Esto hacía
que cada sesión de los seminarios fuese una visión expresada en la palabra y
en la voz entonada en el tema asignado. Y en la palabra y en la voz uyente
desde la visión, los estudiantes visionaban el tema escogido. Podía percibir las
preguntas que se conguraban en la mente de los estudiantes y de este modo
el tema uía hacia ese nuevo sesgo, de tal modo que cuando les proponía que
hicieran sus preguntas, los estudiantes comentaban que ya habían obtenido
las respuestas a sus preguntas. Algo interesante en estas sesiones de clase era
que a los estudiantes les era imposible tomar anotaciones porque cuando lo
intentaban hacer, perdían el hilo de la exposición que se iba desmadejando
en multiplicidad de sentidos y sensaciones. Esto me lo comentaron siempre
los asistentes, y que para ellos en cada sesión, el entendimiento que adquirían
era dimensionado en una visión continua que uía de las palabras y la voz
transpuestas en imágenes pensamiento en su entendimiento. Nunca les
comenté a los estudiantes del uso que hacía de la planta, aunque alguna vez

232
Aztralia: virtudes del misterio en el cáliz de colores (Brugmansia sp.)

me preguntaron qué era lo que bebía continuamente, de mi frasquito, durante


las clases. Les dije que era agua aromática.

Algo similar pero de una intensidad mucho más viva la propicié a un auditorio
mucho más amplio, en una conferencia que ofrecí en el Auditorio Camilo
Torres del Departamento de Sociología en la Universidad Nacional. Un grupo
de estudiantes de losofía de la Nacional organizó por esos mismos días un
seminario de losofía, al que invitaron como ponentes a diferentes profesores,
entre los cuales fui invitado. El tema que expuse fue “La Palabra de las Musas”
y versó sobre las palabras de expresión mitogónica en el éxtasis chamánico
propiciado por la Musas a Hesíodo. Dio la casualidad de que en esa época
existían muchísimos árboles de Brugmansia áurea en el campus universitario,
y justo ese día estaban en la plenitud de su oración. La conferencia debía
darse a las cinco de la tarde. Desde el medio día me dediqué a recoger todas
las ores blancas de el Cáliz de Colores. Recogí más de dos mil ores. Y con
ellas cubrí todos los espacios del auditorio. La mesa grande desde donde se
daría la conferencia, estaba completamente cubierta de campanas celestes.
Las ventanas se cubrían de ellas. En cada uno de los asientos había una or
sagrada. Y el auditorio quedó cerrado, impregnándose del dulce aroma de
embriaguez divina hasta el momento en que se abrió para el ingreso a la
conferencia. Al abrirse el auditorio, este aroma impregnó con su virtud a todo
el edicio. A medida que entraban los asistentes, cada uno tomó del asiento la
or correspondiente. Al iniciar la conferencia, les sugerí a los asistentes que
tomaran con su mano izquierda el Cáliz de Colores y lo mantuvieran durante
la conferencia muy cerca de su rostro para que estuvieran así todo el tiempo
respirando de este dulce aroma.

La conferencia fue una experiencia de éxtasis colectivo, en la cual destellaron


innidad de colores, congurándose la palabra-voz en visiones musáceas de
mitogonía arcaica. Al terminar la exposición no hubo preguntas, pero nadie
quería levantarse para salir. En el espacio continuaban danzando las Palabras
de las Musas donantes de visiones al enteogenizado auditorio. Poco a poco fue
disminuyendo la experiencia. La noche estaba plena de estrellas en el despejado

233
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 227 - 249
William Torres

cielo veraniego. Ya afuera, un grupo me rodeó. Por un rato no musitamos


palabras. Sólo un destello de luz indescriptible fulguraba en el encuentro de
nuestros ojos, en miradas cómplices. Después de un tiempo, una joven dijo:
“¿Qué nos hiciste? Nunca antes vi cómo las palabras conformaban visones tan
espléndidas. ¿O eran las visones quienes destellaban en colores y sonidos que
parecían palabras?”. Sonreímos, y cada quien tomó el rumbo de retorno con
una or áurea en su mano izquierda.

En la siguiente semana, el rector de aquel entonces mandó a cortar todos los


árboles de Brugamansia del campus universitario, porque todos los estudiantes
de la Universidad Nacional andaban embriagados con una or del Cáliz de
Colores en su mano izquierda. Ahora allí retoñan unos pocos.

Los días pasaban lentos, el tiempo y los espacios se prolongaban. Mi percepción


se intensicaba a cada instante. Podía prever con anticipación cualquier
acontecimiento en la inmediatez del punto de luz que conguraba cada instante
de la cotidianidad en el espacio salvaje de la ciudad. Así pude evitarle a muchos
transeúntes, accidentes que habían podido ser mortales con el tránsito alocado
de los autos.
Me aventuraba por rumbos desconocidos para mí de la ciudad. Y debí prestar
muchísima atención al caminar, porque a veces la expansión espacio-temporal
era tan fuerte que un auto que venía muy cerca de mí, era percibido a gran
distancia. Agudicé entonces más mi relación con los pequeños puntos de luz
que me introducían en lo actual.

Uno de esos días entré a una sala de la Biblioteca Luis Ángel Arango, para ver
una película de etnobotánica lmada en la selva amazónica. En un momento
la película mostró un frondoso árbol de toé1. Y del árbol surgió un destello y
resplandor de luz que se desplazó de la pantalla hacia todo el espacio de la
sala. Era un manto luminoso de color verde manzana muy claro. Yo estaba en
la primera la. De pronto penetró este color por mis ojos y vi el interior de mi
cuerpo impregnado de ese mismo color. El lme había desaparecido de mis
1 Toé es uno de los nombres con los cuales se designa en la selva amazónica a la Brugmansia
insignis.

234
Aztralia: virtudes del misterio en el cáliz de colores (Brugmansia sp.)

ojos, y sólo percibía el vapor suave como neblina de ese color que impregnaba
todo el espacio y el interior de mi cuerpo. Y de pronto, en ese color hubo un
destello de luz dorada que conguró la palabra AZTRALIA. Al tiempo percibí
que ese manto de neblina verde manzana suave, era el color en que se tornaba
la cocción de las hojas y las ores de el Cáliz de Colores, y que no era verde
manzana sino el verde de la clorola de las hojas del arbusto sagrado. Y escuché
unas palabras sin sonido de voz, la pura musicalidad de palabras de la planta
diciéndome: “AZTRALIA es la virtud de la visión y su propio devenir en las
palabras que has estado experimentando, y es el pensamiento del afuera de tus
pensamientos que impregna al entendimiento”.

No recuerdo haber visto más imágenes de la película que se proyectaba. De


pronto me vi que estaba en la calle frente a la Luis Ángel, y recordé que ese era
el último día de los seis meses que el abuelo enokayï me había recomendado
para experimentar con el Cáliz de Colores.

Estos seis meses no conforman mi primera experiencia con esta hermosa planta.
Unos años antes había tenido mi primera experiencia con el Toé (Brugmansia
insignis), conviviendo en un pueblo ticuna en el río Amacayacu, auente del
Amazonas. La aldea ticuna lleva el nombre de San Martín de Amacayacu. Allí
había ido para realizar una pequeña labor etnográca para el entonces Instituto
de Recursos Naturales (INDERENA), en el Parque Natural Amacayacu.

Desde mi llegada a esa fascinante aldea de los ticuna, me llamó la atención la


presencia de un nativo de nombre Remigio, a quien todos los ticuna le decían:
“el loco Remigio”. Un hombre fuerte de más de cincuenta años, sin familia,
quien jamás se había casado; siempre riéndose, siempre sonriente, siempre
disfrutando de tiempo libre y siempre dispuesto a colaborar con algún ocio
necesario para alguna de las familias necesitadas de alguna pequeña ayuda en
las labores domésticas. A cambio de estos pequeños favores, recibía alimentos
y así no tenía que preocuparse de esta urgente necesidad cotidiana. Un día
picaba un poco de leña para una familia. Otro, traía unos baldes de agua
del río para otra vivienda… Así obtenía su alimento, y disponía de mucho

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tiempo libre para andareguear por la selva, su pasión favorita. Siempre riendo,
siempre encontrando un motivo de burla, siempre haciendo un chiste. Siempre
considerado como “el loco” del pueblo. Siempre libre. Un auténtico anómalo.
Muy pronto hicimos amistad.

Un día me conó que su abuelo había sido un gran chamán ticuna. Y me conó
que su abuelo había heredado de sus tátara tatarabuelos una planta sagrada que
muchísimos años atrás había sido un bejuco y que, en ese momento, 300 años
después era un gigantesco árbol que se encontraba muy adentro en la oresta.
“Ahora es tan poderoso este árbol, que ya nadie puede usarlo. Y sólo yo se
dónde está”, me dijo. “Si quieres, mañana madrugamos para presentártelo”. Al
día siguiente caminamos selva adentro desde las tres de la mañana. Como a eso
de las once de la mañana llegamos a un paraje silencioso donde predominaba
un frondoso y gigantesco árbol. Me hizo sentar, recostando mi espalda al
tronco gigantesco del árbol, diciéndome que descansara ahí. Y en un abrir y
cerrar de ojos, Remigio ya no estaba por ningún lado. Pasé varias horas allí
sentado, sintiendo sensaciones extrañas de un inmenso poder que emanaban
de este árbol. Por momentos sentía que el gigante árbol me llevaba a otros
mundos indiscernibles que eran este mismo mundo, en un silencio inmaculado.
A veces me sentía otar en el aire circundante del follaje. A veces me sentía
observado por muchos seres misteriosos, y al voltear a verlos percibía leves
destellos de sombras que se camuaban sin ruido en el follaje. No sé cuánto
tiempo pasó. De pronto una burlesca carcajada me sacó del estupor, cuando en
ese momento pensaba: “El Loco me abandonó y no sé exactamente por dónde
podré regresar al pueblo”. Era la carcajada burlesca de mi amigo anómalo,
diciéndome: “Ya estabas asustándote. Nunca me fui. Todo el tiempo estuve
aquí parado observándote, pero no me veías. Mi abuelo me enseñó a hacerme
invisible en la selva. Este árbol en el que estuviste sentado todo el tiempo, es
el del que te hablé. Se llama ayahuasca. Nadie más lo conoce. Sólo yo y ahora
tú. Aquí vengo a sentarme, ahí donde estuviste sentado, y él me enseña y me
habla muchos secretos de la selva. Es tan poderoso que ya no se puede tomar
ayahuasca de él”. En ese momento yo no tenía la menor idea de las maravillas
que nos puede donar la ayahuasca.

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Aztralia: virtudes del misterio en el cáliz de colores (Brugmansia sp.)

Unos tres días después me dijo que al siguiente día iríamos de nuevo a la
selva para presentarme una amiga muy especial y que saldríamos a las cinco
de la mañana. Nos adentramos en la selva durante una hora y llegamos frente
a un hermoso arbusto. “Es mi amiga, salúdala con respeto. Puede darte un
buen regalo”, me dijo, señalándome el árbol. “Buenos días”, le dije. “Dale
la mano. Tócale esta rama”, me dijo, mientras él hacía lo mismo, mirándome
con su sonrisa traviesa. Yo estaba perplejo, mientras él acariciaba el árbol, y
con cariño le dijo: “Te presento a un amigo”. “Mírala -me decía- es bella y
generosa. Pídele un deseo y te lo dará”. No sabía qué pedirle y de pronto sentí
el deseo de volar. “Enséñame a volar”, le dije al árbol. “Ahora pídele permiso
y coge siete de estas hojas grandes”. Así lo hice. “Despídete, y vámonos sin
voltear a mirar”.

De regreso, me dijo que su amiga tiene el nombre de toé (Brugmansia insignis).


“Es muy poderosa”. Y me dio la enseñanza de cómo hacer para que se cumpliera
mi deseo: cuando llegáramos a la aldea, debía colocar las siete hojas sobre las
palmas tejidas del techo de la casa donde habitaba, para que recibieran la energía
del Sol. Allí debían estar las hojas todo el día, hasta el atardecer. Durante el día,
debía mantenerme con el rme propósito de aprender a volar. Y preferiblemente
debía almorzar algo muy suave, como un caldo de pescado no grasoso, y no
cenar. Al atardecer, antes de que se ocultara el Sol, debía recoger las siete hojas
y enrollarlas en forma de un tabaco. Me recomendó acostarme temprano, y
cuando estuviera en mi hamaca debía fumar la mitad de este tabaco, pidiéndole
al toé que me enseñara a volar. La otra mitad del tabaco debía colocarla debajo
de mi cabeza y quedarme así quieto a esperar el regalo.

Seguí todos sus consejos. A las ocho de la noche, fumé y coloqué debajo de
mi cabeza, a la altura del occipital, la mitad del tabaco no fumado de toé. De
pronto mi cuerpo se estremeció en un temblor súbito, y sentí, percibí y vi que
mi cuerpo era un colibrí que volaba en el espacio. Al mirar a la hamaca, allí no
estaba mi cuerpo. “Ahora estoy volando y soy un colibrí”, me dije. Revoloteé
un breve tiempo sobre el follaje y me di cuenta de que podía volar a donde
quisiera. Tomé la decisión de volar hasta Bogotá y visitar esa noche a una amiga.

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Y al tiempo pensé que Bogotá estaba a muchos kilómetros de distancia y que


volar en línea recta me tardaría mucho en llegar. En mi revolotear, observé
que esa era una noche de Luna llena, y de nuevo pensé: Esta misma Luna se
está viendo en Bogotá y en este mismo instante también está sobre Bogotá, de
modo que si subo volando en dirección a la Luna, muy pronto podré ver desde
arriba a Bogotá y descender allá fácil y brevemente. Así fue. Bajé directo a la
ventana de la alcoba de mi amiga. Ella dormía en su lecho. Como colibrí la
miraba desde el exterior del vidrio de la ventana y me pregunté cómo entrar. Al
hacerme esta pregunta, pasé por entre el vidrio, y ahora era mi cuerpo normal
el que caminaba suavemente para acercármele, y muy tenuemente le acaricié
el cabello. Con la levedad del sigilo, para no despertarla y acaso asustarla.
Atravesé de nuevo el vidrio. Mi cuerpo de nuevo era colibrí que remontaba el
vuelo, preguntándome dónde ir ahora. Del mismo modo subí por los rayos de
luz de la Luna para divisar mi pueblo e ir a visitar a mi mamá. Hice lo mismo,
un leve cariño en su cabeza para no despertarla.

Por el mismo sendero de la luz de la Luna, retorné a la selva para recorrerla


adentrándome por uno y otro sitio. Antes del amanecer, retorné a mi hamaca,
cuando mi guía, la Luna, ya se iba. Amanecí feliz. Desde niño, siempre anhelaba
volar. En la mañana, con una sonrisa cómplice nos saludamos con mi querido
amigo Remigio. El anómalo ticuna, a quien siempre le recuerdo con mucho
cariño en mi corazón.

Una semana más tarde, fui a Leticia y llamé por teléfono a mi amiga y a mi
mamá. Ellas me dijeron, sin que yo les mencionara nada al respecto, que una
semana antes habían tenido un sueño muy vívido en el que yo las visitaba y
les daba una caricia muy suave.

Varios años después, en 1996, orienté un seminario sobre Plantas Enteógenas


en la Maestría de Etnoliteratura de la Universidad de Nariño, en al ciudad de
Pasto. Con este motivo, realizamos con los estudiantes de esta maestría, una
pequeña investigación sobre el uso del oripondio, guanto o borrachero en
los alrededores de Pasto. A continuación, presento brevemente los resultados
obtenidos de esta indagación.

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Aztralia: virtudes del misterio en el cáliz de colores (Brugmansia sp.)

En la región del Bajo Putumayo, en el territorio siona, hace varios años,


los chamanes de este pueblo produjeron un injerto de ayahuasca (yagé,
banisteriopsis caapi) y borrachero. A esta variedad de ayahuasca, los chamanes
siona le dieron el nombre de bejí-i´kó (borrachero-yagé). Bejí es el nombre en
lengua siona para el borrachero. El abuelo Francisco Piaguaje (taita Pacho),
y los otros chamanes de su comunidad lo usan con frecuencia. Los efectos
enteógenos de este injerto son muy poderosos, propiciadores de visiones de
colores muy vivos. Su potencialidad curativa es maravillosa Y su uso es muy
frecuente en los procesos de aprendizaje chamanístico.

En el pueblo kofán, vecinos de los siona, a veces mezclan en la cocción de


ayahuasca pequeñitos fragmentos del tallo leñoso del borrachero. Un efecto
físico, tanto de la variedad bejí-yagé como de la ayahuasca cocinada con
borrachero, es que en el cuerpo del tomador se maniesta un gran sentimiento
de frío en el cuerpo, y la “borrachera” es muy fuerte.

El abuelo Querubín Queta, uno de los más sabios chamanes del pueblo kofán,
aconseja la preparación de un sahumerio especial contra los efectos de la
brujería, al mezclar copal (Hymenaea courbaril), tabaco y ores pulverizadas,
previamente secas, del borrachero de or blanca. Este sahumerio se utiliza en
las ceremonias de ayahuasca para curar a los enfermos que han sido atacados
con brujería, y se sahumeriza en general a los participantes de las ceremonias
de ayahuasca para prevenir los efectos nocivos de brujería.

Entre los pueblos camëntsá e inga del Valle de Sibundoy, los chamanes a veces
también añaden a la cocción de ayahuasca pequeñas partes del tallo leñoso,
hojas y ores del borrachero de or blanca, para incrementar el poder curativo
y visionario del enteógeno. Sin embargo, en esta región, el uso de esta mezcla
es un poco controvertida, puesto que algunos chamanes de prestigio, como es el
caso del taita Martín Ágreda, recomiendan evitar esta mixtura por considerarla
de alto riesgo por el contenido de escopolamina en el borrachero.

Un antiguo relato inga, relacionado con el origen del uso de la ayahuasca, da

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cuenta de la relación existente entre estas dos plantas sagradas. En él se narra


que cuando los primeros hombres utilizaron por primera vez la ayahuasca,
después de haber cortado los bejucos de esta liana para consumirlos, vieron
en su experiencia visionaria que los bejucos volvían a retoñar y crecer,
prolongándose hasta lo profundo del cielo, en donde la liana oreció. Las
ores de esta ayahuasca eran ores blancas de borrachero, y en ellas oreció
el Sol, quien hasta el momento no existía. De los rayos del Sol, bajaron a la
Tierra los chamanes ancestros ataviados con sus trajes ceremoniales y portando
los objetos sagrados utilizados ahora en las ceremonias de ayahuasca. Los
chamanes ancestros bajaron entonando los cantos sagrados de la ayahuasca,
cantos que eran acompañados de la música ancestral. Estos cantos y esta
música es la utilizada por los chamanes tradicionales en el Valle de Sibundoy.
Hasta ese momento, esos ancestros humanos que tomaron por primera vez la
ayahuasca, no habían adquirido aún la virtud del lenguaje humano y en esta
ocasión les fue donado por los chamanes ancestrales junto a los cantos y la
música ritual. Así mismo estos antiguos humanos no discernían los colores en
el mundo circundante, y con esta primera experiencia con la ayahuasca-or-
borrachero-sol aprendieron a discernir los colores del entorno.

El Valle de Sibundoy es conocido etnobotánicamente como un sitio privilegiado


en la Tierra por el conocimiento y uso de un número muy grande de especies
y variedades de borrachero. Taita Martín Ágreda me donó hace unos años una
variedad muy especial de esta planta. Su nombre en lengua inga (quechua) es
amaru borrachero (borrachero culebra), porque sus hojas crecen serpenteantes.
Su uso requiere de un cuidado muy especial. Siete hojas maduras se comen
crudas, después de ofrendar al árbol con tabaco y pedirle permiso para usarlas,
solicitándole el favor de la visión y la experiencia requerida. Se requiere la
presencia del chamán, quien consagrará las siete hojas y orientará la experiencia
del interesado. Es indispensable un espacio completamente silencioso,
porque cualquier sonido, por más leve que sea perturbará la conciencia del
experimentador. El chamán no consume la planta puesto que su labor consistirá
en cuidar atentamente a la persona que experimenta con ella, debido a que
quien consume la planta pierde por completo la noción de realidad de sus

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Aztralia: virtudes del misterio en el cáliz de colores (Brugmansia sp.)

actos y puede realizar acciones inverosímiles, como intentar subir por un muro
para caminar por el techo de la casa, o trepar por un árbol grande. Actos que
podrían ser factibles de accidentes graves. Debido a esto, si en la experiencia
hay varios consumidores de esta planta, se requiere la presencia de un cuidador
por cada consumidor. Durante la experiencia, es posible que el consumidor
cuente secretos muy íntimos de su vida y de sus actos, por lo cual se escoge
muy bien a los cuidadores para evitar que los secretos contados trasciendan en
chismes. Cuenta taita Martín que hasta hace pocos años, se les daba a comer
una hojita de amaru borrachero a los niños que habían hecho travesuras y no
querían contar la verdad. Al interrogar a los niños, después de consumida la
hojita, éstos contaban la verdad y de este modo se podía conocer al culpable
de la travesura.

En la vereda María Tisoy de Doña Yacu (Señora del Agua) del municipio
de Santiago, territorio inga del Valle de Sibundoy, vive el taita Francisco
Tisoy Potosoy, quien es un gran conocedor de las virtudes de la ayahuasca y
del borrachero, en especial del andaquí borrachero o salamangue. También
conocido como monchira borrachero, porque sus hojas asemejan el cuerpo de
las monchiras (gusanos peludos). Para el taita Francisco Tisoy, el salamangue
es masculino-femenino al mismo tiempo, y es considerado como la planta de
máximo poder entre las que se pueden cultivar próximas a las viviendas, porque
su uso permite conocer las virtudes y propiedades curativas de otras plantas de
poder y medicinales, mediante las visones que otorga al consumirse las hojas
en números pares: dos, tres, cuatro y hasta doce pares de hojas de salamangue.
Mascándolas o acompañadas de toma de ayahuasca. En su visión también
se pueden manifestar los dueños de la planta, sus espíritus protectores. Los
cuales tienen la virtud de cerrar el cuerpo contra las malas energías, volviendo
al aprendiz resistente, para que las pueda contrarrestar, así como a las malas
intenciones, pensamientos y pruebas negativas.

Al salamangue se le conoce como andaquí borrachero, porque era la planta


preferida del antiguo pueblo andaquí. “Cuando el taita Francisco Tisoy tenía
ocho años, empezó a usarla bajo el cuidado de su propio abuelo. Cuando

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cumplió los catorce años, su abuelo le entregó doce pares de hojas para que las
consumiera solo. El joven Francisco se dirigió al trabajadero que tenía el abuelo,
al lado de la montaña y se las comió de tres en tres. Era muy temprano en el día,
pero al instante llegó la noche con sus abismos, y emergió la luz que lo llevó
a los connes de los misterios, en visiones de jardines de plantas medicinales.
Se alimentó del hielo y el fuego de la Luna. Se enfrentó a perros negros con
rostros de hombres. Aprendió el secreto del venado y danzó el baile circular
de las polillas que dibujan con sus patas la forma del tiempo en luces verdes
y azules. Regresó a los cuatro días. No tenía hambre. Explicó que ese día no
deseaba comer nada, porque los espíritus de la plantita lo habían alimentado
con cuantas frutas y manjares que él les había pedido”2.

El taita Juan Bautista Ágreda, chamán camëntsá, hijo de taita Martín Ágreda,
me conó una experiencia muy particular con el borrachero. Alguna vez leyó
en un libro sobre plantas medicinales y misteriosas, que cuando el borrachero
está en su oración se puede hacer un pacto de alianza con él. Con una espina
se pincha el tronco del árbol hasta hacerle sangrar su savia y al tiempo se pincha
el dedo del corazón de la mano izquierda hasta hacerlo sangrar. Se unen las
dos sangres, la del dedo y la del tronco del árbol, para unir los espíritus de los
pactantes. Luego se cogen pares de hojas del árbol y se comen pidiéndole el
favor al borrachero de hacerlo invisible. Taita Juan realizó este ritual y pudo
constatar que efectivamente se volvió invisible por todo un día, estuvo cerca
de otras personas y entró a sitios donde había gente que nunca lo vieron ni
sintieron.

En el informe de investigación realizado por Oswaldo Ruiz, para el Seminario


de Plantas Enteógenas de la Maestría de Etnoliteratura de la Universidad
de Nariño, realizado en el año 1996, el estudiante anota: “El elemental del
borrachero, es todo un mago; es neptuniano y tiene poderes terribles. Visto
clarividentemente, este elemental parece un niño de 12 años de edad, y tiene en
sus manos la vara del mago. Todo árbol de borrachero tiene su correspondiente
elemental, el que debe ser utilizado por quienes deseen salir conscientemente
2 Informe de investigación al Seminario Plantas de Enteógenas de la Maestría de Etnolitera-
tura (Universidad de Nariño) presentado por Alfredo Ortiz. Febrero 26 de 1996.

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Aztralia: virtudes del misterio en el cáliz de colores (Brugmansia sp.)

en cuerpo astral. Se utiliza el elemental de este árbol para enseñar a discípulos a


salir en cuerpo astral. Se toma una vara del mismo con la que se traza alrededor
de él, un círculo bien amplio en el suelo; machaca las ores del árbol y unta el
zumo en el cerebro del discípulo. El discípulo acostado en su lecho, se adormece
y se le da las órdenes al elemental para que lo saque fuera del cuerpo físico.
Estas órdenes van acompañadas del mantra que tiene el borrachero. Luego se
ordena al elemental así: “Cuando yo te llame, concurrirás siempre. Yo necesito
que me saques en cuerpo astral, siempre que te lo ordene”. Posteriormente se
pincha el discípulo con un aller en un dedo de su mano y con un cuchillo
hará en el árbol una incisión en la cual depositará su sangre, quedando de esta
manera formalizado el pacto con el genio del borrachero. Luego, el discípulo
corta uno de sus cabellos y lo cuelga del árbol. Toma algunos pétalos de las
ores, los deposita en una bolsita y los cuelga a su cuello como talismán. Desde
este momento el discípulo tiene bajo su servicio a este humilde elemental, que
concurrirá siempre a su llamado. Cuando el discípulo quiere salir en cuerpo
astral, se adormece en su lecho pronunciando el mantram del árbol y con la
mente concentrada en ese genio elemental, llamándolo mentalmente, rogándole
que lo saque en cuerpo astral; y en ese estado de transición entre la vigilia y
el sueño, el elemental del borrachero lo sacará de su cuerpo físico, llevándolo
a lugares por él anhelados. Cuando el discípulo quiere volverse invisible,
pronuncia el mantram del elemental de este árbol; llama a su servidor y le
ruega que le haga invisible, lo que será un hecho”. Esta información, le fue
donada a Oswaldo Ruiz por un mago blanco de la ciudad de Pasto, quien le
exigió mantener en secreto su nombre.

Por los caminos veredales, en las cercas de las ncas, en los potreros y huertas
de las casas campesinas de los Andes nariñenses, abundan árboles y arbustos
del Cáliz de Colores: blancas, amarillas, blancoamarillas, rosadas, rojas,
rojiamarillas y verdirrojas, son los colores de sus ores. Son muy variados los
usos medicinales y agrícolas conocidos por los campesinos nariñenses, legados
por los pueblos nativos Pasto y Quillasinga.

Se acostumbra a sembrarlo junto a las viviendas para contrarrestar los malecios,

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las envidias y prevenir los robos. “El oripondio blanco o amarillo es buena
planta, sirve para curar y hacer el bien. Antes nos robaban mucho, hasta la
ropa, pero un día a mi esposo un señor le aconsejó que sembrara alrededor de
la casa oripondio o guanto blanco, y cierto, jamás nos volvieron a robar. Por
la noche, cuando está enorado da fragancia y eso es bueno, saca lo malo de
la casa”, comenta la señora Rosa María Yaqueno de la vereda San Antonio de
Obonuco (Pasto, Nariño)3. Es en un gran protector del espíritu de los habitantes.
Para limpiar las casas de energías negativas, se acostumbra a barrerlas los
días martes y viernes con una escoba hecha con ramas del borrachero. Don
Victoriano Jojoa, curandero mestizo de la vereda San Antonio de Obonuco
(Pasto, Nariño), cura el mal aire, limpiando el cuerpo del paciente con un ramo
hecho de ores de borrachero blanco (llamado guamuco) y con hojas de la planta
conocida como gallinazo, al tiempo que le sopla el cuerpo con aguardiente. La
señora Luz Jojoa, partera y curandera, quien vive en la vereda el Barbero del
corregimiento de La Laguna de Pasto, utiliza el borrachero para limpiar a las
personas a quienes les han cogido el rastro y les han hecho malecios; se les
baña con agua a la cual previamente se le ha sumergido la or del borrachero
blanco. Ella también recomienda majar el oripondio con la planta seguidora
y hacer un riego dentro y fuera de la vivienda, los días martes y miércoles,
para atraer la buena suerte.

Don Moisés Pinza, curandero mestizo de Mocondino (Pasto, Nariño), utiliza


el oripondio blanco, al que le da el nombre de Corneta del Ángel “porque su
regente es el Arcángel Gabriel”. Cuando se presenta un paciente con malecio,
don Moisés toma tres ores del borrachero diciendo la siguiente oración: “Por
el poder de la Santísima Trinidad, sagrado elemental te pido que me ayudes
a sacar todos los males de mi cuerpo”. Procede a sumergirlas en agua, y con
esta agua realiza un baño para el embrujado, al tiempo que reza: “Yo te pido
en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo”4. En el municipio de
3 “El oripondio, borrachero y guamuca”, informe de investigación de Martha Lucía Azaín
al Seminario Plantas Enteógenas, Maestría en Etnoliteratura (Universidad de Nariño). Pasto,
febrero de 1996.
4 “Corneta del Ángel o oripondio – guamuco”, informe de investigación de Myriam Gema
Rodríguez al Seminario Plantas Enteógenas, Maestría en Etnoliteratura (Universidad de Na-
riño). Pasto, febrero de 1996.

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Aztralia: virtudes del misterio en el cáliz de colores (Brugmansia sp.)

Imués (Nariño), los curanderos recomiendan hacer cigarros con las hojas
de borrachero para fumar y soplarse el cuerpo, de este modo se previenen y
alejan las pestes y los malos espíritus. Otros médicos tradicionales de Nariño
recomiendan mezclar las hojas y ores de borrachero con altamiza, ruda y
chundur en aguardiente para soplar y curar el cuerpo de pacientes con mal
aire, malhecho y el espanto de los niños.

Es muy común tener un árbol de oripondio como gallinero para evitar el


achaque de las gallinas. Si no se hace esto, y les da achaque a las gallinas, se
les da zumo de hojas de borrachero exprimidas para curarlas. Sembrado en
las esquinas de las ncas, previene y cura de pestes a los animales. Quienes se
dedican a la cacería, alimentan a sus perros de presa con la comida mezclada
con hojas y ores del borrachero blanco para agudizar su instinto cazador.
Cuando hay plantas de cultivo que no dan fruto, se siembra borrachero blanco
junto a las plantas y de inmediato se producen excelentes cosechas. Las hojas
del borrachero se las unta al cuerpo de las ovejas recién trasquiladas para que
les crezca más rápido y aumente la lana. Con las hojas y ores de borrachero
se fumigan las plantas cultivadas, como excelente insecticida.

En Sibundoy (Putumayo) se comenta que a los enemigos se les da a beber


chicha de maíz mezclada con hojas de borrachero para causar daños cerebrales
irreversibles. En la Comunidad de Chacapamba (Nariño), a los hombres que
engañaban a sus novias, estas les daban tomas de borrachero para enloquecerlos.
Y las mujeres que descubren a sus maridos en el agrante delito de adulterio,
les preparaban un delicioso cuy aderezado con borrachero y la planta conocida
como chamico, lo cual les produce ceguera permanente.

Cuando en los vecindarios hay perros demasiado bravos, que muerden


continuamente a la gente, las heridas de estas mordeduras se curan machacando
la or de borrachero de or amarilla, mezclada con sal y ají y aplicándola en la
herida. Las mordeduras se curan de inmediato y el perro muere al instante.

Para las hinchazones de la garganta, se sancochan las ores en orines de niño y

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se colocan emplastos. Para las hinchazones de los senos en mujeres lactantes,


se hace una pomada de las hojas de oripondio en unto (manteca) de marrano
y se aplica en los senos. Para las hinchazones por dolor de muelas, se hace un
ungüento de hojas de borrachero en aceite de almendras y se aplica en la parte
afectada. Para el dolor de muelas se soasa en la candela la or y se aplica en la
parte afectada. Cuando se hincha la cara, auchar (asar al rescoldo) pétalos de
las ores con orina de bebé (o en alcohol) y aplicar los pétalos en la mejilla.
Para las inamaciones en general, se preparan tres ores en infusión por diez
minutos y se aplica esta infusión con todo y ores por cinco minutos en la
parte afectada. Se pueden tratar también, calentando alcohol y remojando en
él las ores para aplicarlas en la parte inamada. Para inamaciones de la
cara y el cuello, se soasan las ores en aguardiente y se colocan emplastos.
Para la hinchazón rojiza de los dedos de los pies, se hierve alcohol, y luego
se colocan las ores blancas en el alcohol caliente, después se colocan en la
parte afectada. También se hierven las ores con el pecíolo y con ello se baña
la parte afectada. Las inamaciones producidas por golpes se frotan con las
hojas y ores del oripondio soasadas y mezcladas en aceite de oliva.

Contra las hinchazones, picadura de moscos y mordedura de culebras, se soasan


las ores de guamuca (borrachero de or roja y amarillo) y de oripondio
(borrachero de or blanca), al calor del rescoldo, estas ores sueltan una
especie de miel, la cual se frota en la parte afectada, y se cubre con las ores
soasadas.

Cualquier tipo de heridas se puede tratar con emplastos de hojas de


borrachero.

El insomnio se cura colocando ores de borrachero debajo de la almohada,


esto mismo permite tener sueños maravillosos.

Cuando los niños están pasados de frío, se cogen ores amarillas de borrachero,
se colocan sobre un ladrillo previamente calentado en un fogón de carbón y
sobre él se sienta al niño o se le hace recibir el vapor. De este modo se previene

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Aztralia: virtudes del misterio en el cáliz de colores (Brugmansia sp.)

el hecho de orinarse en la cama. Para esto también se recomienda disolver hojas


y ores de oripondio en vela de cebo caliente y colocársela en el ombligo a
los niños.

En el Valle de Sibundoy se conoce una variedad de borrachero de ores rojas,


cuyo nombre es guin, de sus ores y hojas machacadas se extrae un zumo que
se usa como abortivo.

Los dolores fuertes de cabeza se tratan aplicando emplastos de hojas de


borrachero blanco.

El sarampión se cura bañando a los niños con ores y ramas de borrachero


blanco y amarillo, previamente cocinadas.

La sinusitis se puede tratar colocando en la frente emplastos de hojas y ores


de borrachero blanco impregnadas de aguardiente.

Las hojas de borrachero se secan a la sombra, una vez secas se pulverizan


y si se cocinan seis cucharadas de este polvo en un litro de agua y con él se
frotan constantemente las piernas afectadas por venas várices, se obtiene la
curación.

De la misma manera, las hojas secas del borrachero en un lugar oscuro, se


pulverizan y se ponen a las brasas. Al aspirar este humo por la nariz, las
personas afectadas de asma se curan. Los asmáticos también pueden fumar
las hojas secas.

El reumatismo se puede tratar moliendo hojas y semillas frescas de oripondio,


luego se hierven por cinco minutos en aceite de cocina. Se obtiene así un unto
para frotar las partes reumáticas.

Para la artritis se prepara una pomada al mezclar las hojas pulverizadas de


borrachero, previamente secadas a la sombra, con tabaco y sebo de ganado.
Se frota con ella las partes afectadas.

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En el Valle de Sibundoy, se conoce también una variedad de borrachero


nombrado quinde borrachero, de ores blancoamarillas. En lengua quichua,
quinde es el nombre del colibrí. Y existe otra variedad de nombre monchira
borrachero, el cual comparte con el oripondio la característica de tener ores
blancas acampanadas, pero se distingue de él porque sus hojas son afelpadas
como lo es en su cuerpo una variedad de gusanos que recibe el nombre de
monchira o munchira. Don Pedro Juajibioy, etnobotánico camëntsá, quien en
vida fue el principal informante de R. E. Schultes sobre los borracheros del
Valle de Sibundoy, nos informó cuando lo vistamos en su Jardín Botánico, con
motivo de una práctica de campo del Seminario de Plantas Enteógenas que
hemos mencionado, que la parálisis se puede curar del siguiente modo: en la
noche se baña el cuerpo con hojas y ores de quinde borrachero cocinadas con
las siguientes plantas: pacunga, limoncillo, ruda y altamiza. Luego se aplica
y fricciona el cuerpo con una pomada hecha con monchira borrachero y sebo
de oveja. Estos baños y fricciones se hacen dos o tres veces por semana. Y se
cocinan 35 gramos de monchira borrachero en un litro de agua, hasta reducirlo
a una taza. Se le da a tomar al paciente esta taza endulzada con miel de abeja.
Este es un tratamiento que se debe hacer por un tiempo bastante prolongado.
Decía don Pedro que de este modo él “puso a caminar a más de un paralítico”.
Don Pedro Juajibioy tenía en su jardín catorce variedades diferentes del Cáliz
de Colores, la mayoría de las cuales no tenían aún la clasicación botánica.

En general, todos los tratamientos medicinales con las diversas variedades del
Cáliz de Colores, requieren de un cuidado especial, como es el de no bañarse
al otro día después de los baños y/o fricciones, debido a que estas sustancias
son muy calientes.

Los guambianos, pueblo nativo del departamento del Cauca, conocen una
variedad de borrachero, la Brugmansia vulcanicola, a la cual le dan el nombre
de yas. El espíritu protector que habita en ella es el del Águila “que llega con el
viento y desaparece”. Si alguien se queda por un tiempo junto al árbol, vivirá la
experiencia de “olvidar todo, sintiéndose como si estuviera en alas del espíritu
del yas (…) Si es una mujer (…) al descansar a la sombra del árbol, soñará

248
Aztralia: virtudes del misterio en el cáliz de colores (Brugmansia sp.)

con hombres de la tribu de los paez, luego, una gura será depositada en su
vientre y nacerá seis meses después como semillas del árbol”5. Experimentar
el vuelo sagrado que propicia el Cáliz de Colores, nos permite vivir el olvido
del enraizamiento a cualquier identidad, vivenciarnos en devenir ave y disfrutar
las maravillosas virtudes del misterio. La mujer dará a luz las semillas del
árbol, quien como la Madre Tierra donará en este hijo virtudes curativas. La
curación es su misterio. Un don de la Madre Tierra, entregada por el Águila.
Mensajera de los mundos.

Kajuyali Tsamani.

5 Schultes y Hofmann. Las Plantas de los Dioses. Orígenes del uso de los alucinógenos, p.
140. Nueva edición, revisada por Christian Rätsch. México: Fondo de Cultura Económica,
2000.

249
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 227 - 249
EL BORRACHERO, PASADO Y PRESENTE EN COLOMBIA: MITOS,
CREENCIAS, PRÁCTICAS Y USOS EN SOCIEDADES INDÍGENAS,
RURALES Y URBANAS

JORGE RONDEROS VALDERRAMA


El borrachero, pasado y presente en Colombia: mitos, creencias, prácticas ...

para mútiples situaciones. Es el caso de los cofanes y sionas o los shuar en el


Ecuador. La conocen y la usan por tradiciones milenarias de sus pueblos.

Desde nuestro enfoque conceptual de la línea de investigación y para este taller,


traer como invitado especial al “borrachero” solo tiene un propósito: atraer
la atención para investigar sobre sus potencialidades, para reconocerlo en sus
relaciones con las sociedades humanas, en sus usos culturales y aprender hoy
de estas realidades. También para protegerlo de la ignorancia y los miedos,
especialmente en las sociedades occidentales urbanas, que ven en él una
amenaza y un mal que hay que extirpar.

Precisemos ahora el concepto de cultura para comunicarnos mejor entre


lo asistentes a este seminario. Es un término y concepto con abundante
acepciones.

Comencemos por una denición que también nos ha servido de guía en el


proceso de nuestro trabajo sobre drogas. Es del sociólogo y antropólogo
argentino-mexicano, Néstor García Canclini:

Cultura: “Producción de fenómenos que contribuyen mediante


la representación o reelaboración simbólica a las estructuras
materiales, a comprender, reproducir o transformar el sistema
social, es decir todas las prácticas e instituciones dedicadas a la
administración de, renovación y reestructuración del sentido”
(García Canclini Néstor, 1986).

¿Culturalmente el borrachero qué formas de representación y reelaboración


simbólica adopta en nuestras sociedades y culturas? Las prácticas culturales con
el borrachero, ¿qué sentidos adquieren en la reproducción de saberes y procesos
de socialización en las tradiciones? ¿En la actualidad qué formas simbólicas
tiene y qué prácticas se están realizando? ¿Quiénes? ¿Dónde? ¿Para qué? Sobre
el tema que abordamos ¿qué fenómenos humanos y sociales surgen y existen
en relación con el borrachero? Y un interrogante, ¿por qué este nombre tan
común y generalizado, “borrachero”, para referirse a la planta?

257
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 251 - 272
Jorge Ronderos Valderrama

Una acepción en nuestro medio urbano de lo que emborracha, hace perder


la conciencia y el recuerdo. En contextos culturales indígenas como los
mencionados, emborracharse signica mirar y ver espíritus y también permite
“sanar”.

Desde luego que los efectos visuales y de percepción en los humanos que
están bajo el efecto del borrachero nada tienen que ver con los producidas por
las bebidas alcohólicas. Lo cierto es que es “borrachera” de real respeto y que
genera sin duda temor. Difícilmente quien por curiosidad ha estado bajo sus
efectos vuelve a repetirla. Tales experiencias con el borrachero requieren en su
comprensión, contextualizarse culturalmente en sus prácticas. Y conocimientos
tanto tradicionales e indígenas y populares como cientícos. En nuestro caso
atraer la atención cientíca tanto de la medicina y otras disciplinas como la
farmacología y la toxicología. Las neurociencias para explicar y comprender
el funcionamiento de la mente y el cerebro humano. Por supuesto que de las
ciencias humanas y sociales en torno a prácticas sociales. Las ciencias son un
recurso cultural fundamental para explicar las dinámicas socioculturales y los
cambios de personalidad.

Recordemos para ilustrar una definición de cultura de un clásico de la


antropología, Edward Tylor:

“LA CULTURA o civilización, en sentido etnográco amplio, es aquel todo


complejo que incluye el conocimiento, las creencias, el arte, la moral, el
derecho, las costumbres y cualquier otros hábitos y capacidades adquiridos
por el hombre en cuanto miembro de la sociedad”.

¿Y en este contexto cuáles son las creencias? ¿Cuáles las costumbres y los
hábitos con el borrachero? ¿Qué pueden aportar las ciencias en general sobre
este tema? Los conocimientos, el arte, las construcciones morales que existen o
se van creando, cómo lo asume el derecho y demás. ¿Qué puentes interculturales
este campo de conocimiento, la planta y sus usos, podrían sugerirnos?

258
El borrachero, pasado y presente en Colombia: mitos, creencias, prácticas ...

• BORRACHERO-MAICOA-TOÉ-CAMPANILLA-FLORIPONDIO–
HUANTO – HUACACACHA – UHUACA - “PLANTA DE LA TUMBA”–
TONGA–TROMPETA DE ÁNGEL.

De acuerdo a sus propiedades, características y usos medicinales existen


denominaciones del borrachero en lenguas indígenas. Recordemos estas:

• BUYES: (B. aurea). Reumatismo.


• BIANGÓN: Cazadores. Hojas y ores. Perros.
• ARMARÓN: Hoja en forma de lengua.
• SALAMÁN: Hojas atroadas. Reumatismo. Alucinógena.
• QUINDÉ MUNCHICORA: Irregularidad hojas. Vermífugo. Vomitivas.
Supurantes.

Floripondio, curiosa denominación usada para denominar a hombres con


comportamientos y conductas afeminadas, sean o no homosexuales. Quindé o
quindo reere a una variedad de borrachero de gran potencia usado con nes
chamánicos.

Para los mamos de la Sierra de Santa Marta, las plantas en general son las
hermanas mayores, en tanto ellas enseñan a los hermanos menores. En general
las plantas son maestras.

El borrachero en la medicina tradicional indígena es una planta maestra y


curadora. Pero no una planta cualquiera. Es una planta de mucho respeto y que
solo pueden manipularla y usarla los sabedores, es decir los chamanes. Han
sido los taitas del Valle de Sibundoy a quienes se les reconoce como quizá los
mayores sabedores sobre ellas. Pero es un conocimiento en extinción.

Acerca de su uso asociado al yagé, Carlos Pinzón anota:


“Aquello que introduce variaciones en las visiones, según lo
expresa el curaca Miguel es la datura que se mezcle con el yagé:
“hay un tipo de borrachero para mezclar con el yagé y traer la

261
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 251 - 272
Jorge Ronderos Valderrama

‘pinta’ que se desee; el yagecito solo no produce buenas pintas”.


Se reconocen tres clases principales de datura utilizadas: Datura
candida, D. sanguinea y D. andres. Recientemente, Schultes
(1977) ha reclasificado otras de las llamadas daturas como
pertenecientes al género brugmansiae, un alucinógeno” (Pinzón
Carlos E: 1992).
En este valle situado al sureste de Colombia, en los Andes del Macizo
Colombiano, según expertos es el lugar de donde es su procedencia originaria,
debido a la gran cantidad de variedades de brugmansias que allí se han
identicado y sus usos medico muy antiguo. Esta es una apreciación de R.E.
Shultes. Entre las diferentes variedades se destaca en la etnobotánica camënta,
los borracheros andaquí, el silvestre y el mchtcuai.

…Han tenido gran dominio de la botánica de la tierra fría y con


ello especialmente de las brugmansias, que han sabido aprovechar
en sus intercambios con los curacas del bajo Putumayo, entre
ellos inganos, sionas y cofanes, preferentemente” (RONDEROS
V. Usos y Redes Culturales del Yagé en la Zona Cafetera. Tesis
de doctorado. 2005).

No hay que olvidar que las drogas ante todo son un dispositivo de socialización,
y de esto no se excluyen las brugmansias. Se recuerda el uso cotidiano entre
los familiares en casa del chamán, que toman esta bebida en dosicaciones
bajas, simplemente para sentirse mejor en un medio ambiente tan especial
como el amazónico. Que además lo ofrece al visitante que llegue a su casa.
Un pasaje lo ilustra:

“Luego al acercarse la noche, uno de los jóvenes llevó una totuma


más pequeña, que el chamán aceptó indiferente. Bebió y devolvió
la totuma vacía. Cuando esta llegó llena, a manos de Shultes,
observó los adornos rituales en torno al borde y el aguado líquido
de un ocre verdosos que contenía. Estaba a punto de ver cuando
sintió la mano del coronel en la muñeca.

262
El borrachero, pasado y presente en Colombia: mitos, creencias, prácticas ...

–Creo que es va’u –dijo en voz baja. Se inclinó luego y susurró al


oído de Schultes. El chamán se esforzó por entender. Schultes se
apartó del coronel y, con la mayor cortesía que pudo demostrar,
le devolvió la totuma al joven. Al recobrar la calma, se dio cuenta
de que había estado a punto de beber una infusión de borrachero,
la más peligrosa de todas las plantas alucinógenas, y de que
ahora estaba viviendo con una gente que tomaba la droga con la
tranquilidad de un inglés que toma té” (Davis W.,2004: 204).

La anterior descripción reeja bien los contrastes culturales. En especial, el


temor del forastero del uso de la planta y la naturalidad y manejo ancestral de
la bebida simplemente como una bebida para compartir.

¿DATURAS? ¿BRUGMANSIAS?

Inicialmente para la botánica las brugmansias se consideraron del género


Datura. Hoy se aceptan que pertenecen a géneros diferentes a pesar de cierta
similitud morfológica y efectos toxicológicos. La inicial diferenciación era el
carácter arbóreo de la Brugmansia distinto al de la planta de la Datura.

Para algunas comunidades no todo borrachero es propiamente una brugmansia


como aquí la entendemos. Los usos son muy disímiles pues van desde ser
aplicados sus principios contra el reumatismo, hasta ser usados para aumentar
el potencial de capacidad de perros de cacería.

Las deniciones del borrachero también varían en los diccionarios:

Borrachero: arbusto de ores grandes y olorosas.


Borracho: ebrio-embriagado.

Estas deniciones son claras:

263
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 251 - 272
Jorge Ronderos Valderrama

• Arbusto de Am. Mer. De la familia de las solanáceas de unos cuatro


metros de altura, muy ramosos de hojas grandes, vellosas y aovadas,
flores blancas de forma tubular y fruto drupáceo. Despide olor
desagradable de día y grato y narcótico de noche y comido el fruto
causa delirio. (M. Moliner)

• Drupa: fruto de mesocarpio carnosos y endorcapio leñoso en sola


semilla. (M. Moliner)

• Borrachero (Datura arborea y Datura sanguinea) m. Árbol o arbusto


solanáceo de Sudamérica, de ores llamativas, alargadas, en forma
de trompeta, blancas o rosadas; toda la planta es venenosa, rica en
alcaloides y con propiedades narcóticas y alucinógenas. Ô Floripondio.
Þ *Planta. (M. Moliner).

Según Schulttes y Hoffman son muy pocas las comunidades occidentales que no
hayan usado por lo menos un alcaloide de poder en sus ceremonias religiosas.
Y las brugmansias han sido y son consideradas como una de las fuentes más
poderosas de poder, proveniente de un poderoso alcaloide que permite tener
visiones y sueños.

“Pocas son las culturas ancestrales que en el hemisferio occidental


no hayan usado al menos un alucinógeno en sus ceremonias mágico
religiosas” (Schultes & Hofmann).

Los shuar que viven en el oriente amazónico ecuatoriano, consideran que el


mundo que se ve y vive cotidianamente no es el real: el verdadero es el de las
visiones o los sueños. Siguiendo a Fericgla, este autor hace referencia de que
en esta comunidad, a los niños se les da a tomar yagé a los 2-3 días de nacidos.
A los 6-7 meses de edad se les da a beber una toma de brugmansias y a los
dos o tres días de haber tomado, los niños se tienen en pie y caminan. A los 10
años los niños de esta comunidad tienen un retiro y en él reciben de su padre
consejos importantes para vida bajo los efectos del borrachero.

264
El borrachero, pasado y presente en Colombia: mitos, creencias, prácticas ...

Esto también puede ser un antecedente de considerar esta planta como la


planta de los muertos. Es importante destacar que en obras de cerámica, piedra
y orfebrería prehispánicas, se encuentran vestigios de guras que engalanan
estatuaria y piezas con formas similares a los oripondios o trompetas de ángel.
En varias culturas ancestrales, la presencia del borrachero se dejó explicita en
la estatuaria o en manifestaciones diversas con materiales bien distintos.

Desde épocas antiguas hasta hoy la planta genera temor. Se le tiene, digamos,
respeto. Sus efectos toxicológicos conocidos por las alucinaciones, el
desasosiego, la pérdida de memoria y un comportamiento de gran excitación se
han registrado por quienes se dan cuenta de los efectos, lo cual ha contribuido a
reforzar un sentimiento de temor por la planta. Las vivencias y visiones resultan
ser realmente escabrosas. En Manizales se recuerda el caso de un comandante
de policía que quería con sus policías exterminar la presencia de la planta. La
maestra y botánica Mélida Restrepo, le dijo en aquella ocasión, que debía hacer
tal tarea de eliminación en todos los Andes suramericanos. Personalmente, en un
trabajo de epidemiología de una especialización de medicina que revise sobre
este tema, frente al problema de niños intoxicados que llegaban al hospital,
la autora convenía en recomendar un procedimiento análogo al del jefe de
policía indicado, para evitar los casos de intoxicación. De hecho está planta
esta amenazada por la ignorancia y el temor. Hay que investigar, por ejemplo
el mundo vegetal y en general biótico, asociado a la planta.

Entre los toxicólogos, se recuerda el diagnóstico de una madre con su hijo


intoxicado de borrachero. Hoy gura como un caso de leyenda y un cuento
que describe bastante bien algunos de los efectos de la intoxicación con
borrachero: “ciego como el murciélago, rojo como la zanahoria, seco como
un palo y loco como un conejo”. Descripción que dice bastante bien de los
efectos de la intoxicación.

Las formas de consumo son variadas y van desde tomas líquidas, infusiones,
hasta sus emplastos o simplemente como orero y colocación de las ores en
sitios cercanos a la cama para dormir. Las abuelas yerbateras del Sibundoy nos

267
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 251 - 272
Jorge Ronderos Valderrama

han relato que las ores pueden colocarse debajo de la almohada, envueltas
en un periódico, permiten soñar. Tales sueños traen mensajes que debemos
mirar con atención. Las hojas con agua, simplemente, permiten liberar sus
alcaloides. Cocinándose una determinada cantidad de hojas, por largo rato,
se extrae nalmente una colada de gran poder, para ser bebida en ciertas
ceremonias chamánicas. Igualmente sus semillas se ingieren acompañándose
de otras bebidas o solamente estas hasta que produzcan un efecto.

En 2002 en el trabajo de campo realizado cerca de Manizales, un obrero


de unos 35 años, relataba que en una ocasión había consumido unas siete
semillas. Que al rato se había visto fuera de su casa como un enano, frente a
grandes y gigantescos insectos, unas moscas que con sus dedos él las seguía.
Sus dedos parecían de caucho, se alargaban y perseguían la mosca. Decía que
esta experiencia había sido terroríca. Nunca sintió tanto temor y pánico como
aquella vez bajo un efecto. Se había prometido a sí mismo nunca repetir. Lo
había hecho por pura curiosidad. Cuando me relató este caso, se refería a un
hecho ocurrido hacía cerca de siete años. Aceptaba ser un fumador habitual
de marihuana y en términos generales sano y cumplidor de sus obligaciones.
Al comparar la traba o borrachera de la experiencia con semillas de cacao
o borrachero, dijo que en nada tenía que ver por ejemplo con una borrachera
de alcohol o una traba con marihuana. No pensaba, según me relató, volver a
repetirla en su vida. Tal es el efecto y la vivencia, el recuerdo de pánico que
puede dejar la experiencia de esta planta de poder.

Si algo debe alentar la investigación y el interés por las brugmansias, son sus
potenciales usos terapéuticos de prácticas ancestrales. Investigar sobre la mente
y el comportamiento humano. Sus alcaloides, en especial la escopolamina,
resultan de gran atractivo e interés cientíco para explicar el funcionamiento
de la mente. Este alcaloide lamentablemente se ha relacionado como creencia
y verdad absoluta, al delito que se congura en la vida urbana con el uso
de la “burundanga”. De allí que la planta esté asociada directamente con la
criminalidad. Esta es una asociación ligera y las evidencias comprobadas no
tienen, relativamente hablando, un peso como para rearmar por parte de

268
El borrachero, pasado y presente en Colombia: mitos, creencias, prácticas ...

autoridades de sanidad, que la solución sea erradicar las plantas de borrachero


en donde se les encuentre. De hecho lo que hoy se arme entre autoridades
policiales y jueces, es que el uso dominante para estos nes criminales, es con
drogas psiquiátricas.4 Los medios de comunicación tan dados al escándalo en
la noticias han contribuido en crear el miedo y también ha informar sobre la
complejidad del asunto. Exámenes toxicológicos muestran que el contenido
de muchas intoxicaciones, asociadas inicialmente a la planta, no resultan
serlo. Recientemente se a divulgado (El Tiempo, Bogotá, Agosto 25 de 2006)5
que casos relacionados con atracos o “paseos millonarios” con personas
para esquilmarles sus joyas o extraer dinero con sus tarjetas, inicialmente
consideradas como intoxicadas por escopolamina extraído del borrachero
(burundanga), resultaron ser, después del análisis de las pruebas toxicológicas
de las víctimas, que se trataba de uso de medicamentos psiquiátricos. La
misma policía a través de la SIJIN hoy tiene evidencias de que el uso es de
benzodiazepinas, especialmente el Lorazepan, una droga realmente peor que
la “burundanga”.6 De hecho estas drogas son más efectivas y resultan más
prácticas para el criminal, en tanto la reacción de una persona con escopolamina
extraída del borrachero no resulta a veces calmada sino por el contrario agresiva.
Lo otro es que por las características de su extracción “artesanal”, la dosis
no es controlable en el evento, y perfectamente el asunto resulté contrario a
4 Manizales, en su área urbana tiene una gran riqueza vegetal con esta planta. Urge realizar
una acción ambiental para protegerla y también suministrar la información adecuada a las
autoridades, a los vecinos, en los colegios sobre el cuidado y riesgo de la planta, es decir
propiciar una domesticación y convivencia.
5 ...a una persona parecida a la víctima para saquear sus tarjetas de crédito y sus cuentas ban-
carias. Una banda dedicada al paseo millonario secuestró por más de 24 horas a su víctima y,
no contenta con ello, le buscó un doble para ir a centros comerciales y sacar con sus tarjetas
de crédito ropa y electrodomésticos. Cuatro personas fueron detenidas durante el operativo.
En el segundo piso de la vivienda, las autoridades encontraron a la víctima, aún adormecida
por la cantidad de sedantes que le habían suministrado. El hombre de 27 años de edad ingresó
al lugar con dos mujeres que conoció un día antes en un bar en Bogotá. “Y fue v... Canal
RCN - Bogotá, Colombia - Agosto 25 de 2006.
6 “Droga peor que la burundanga”, tituló Noticias 24 horas el 11 de Noviembre de 2006.
Como en esta se anuncia, un juez de la república condenó a una banda de atracadores por el
uso de estos procedimientos, con la advertencia de que no es droga prohibida. En: http/:www.
noticias24.com. Bogotá. Nov 11 de 2006.

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cult.drog. No. 13, 2006, págs. 251 - 272
Jorge Ronderos Valderrama

las pretensiones del delincuente. Hay que matizar. De hecho tampoco es la


escopolamina estrictamente o el medicamento psiquiátrico que se use, la causa
del hecho criminal: sí lo es, la intención y el motivo del delincuente, que usa el
poder de las plantas o de la droga psiquiátrica o lo que sea, para sus provechos
personales y delincuenciales.

El borrachero, es culturalmente una planta a la cual, tanto en las culturas


indígenas tradicionales como en los imaginarios populares urbanos, se le tiene
respeto y miedo. Respeto cuando se conoce y se sabe usar como remedio o como
medio chamanístico para adivinar y “ver” como en el caso de los camëntsas,
ingas, guambianos o nasas. Pero también se le tiene miedo cuando se desconoce
su uso y en ocasiones se han apreciado sus efectos por usos indebidos asociados
a la curiosidad o fortuitos casos de accidentalidad. Pero es un hecho que si
se le conoce y sabe usarse por tradición en su cultura, es una planta cuya
droga puede resultar positiva, al actuar como un remedio. El conocimiento
tradicional chamánico domina su uso. En las sociedades occidentales urbanas
actuales, caso Manizales, se le teme y se le desconoce. Esencialmente se
tiene la creencia de que es una planta de la cual se extrae la escopolamina,
sustancia que se acepta, es utilizada con nes criminales. Al respecto hay que
estudiar el tema, pues en los usos que se conocen, no existen bases cientícas
para fundamentar la armación de que sea la escopolamina, y que se entiende
erróneamente como borrachero, estrictamente hablando, la sustancia usada
en el acto criminal, con lo cual tampoco podría armarse que la culpa es de la
planta y consecuentemente la solución sea fumigar o erradicar y acabar con
las plantas, como algunas autoridades policiales lo han propuesto.

Su simbología asociada a la muerte, a las tumbas, resulta un tema simbólico y


cultural de interés actual para la investigación. Igual las prácticas mágicas que
aún se conservan y son orientadas por chamanes de algunas culturas. Acercarse
al mundo rural occidental es un campo de interés, pero también lo es con las
sociedades indígenas. Pero aun más, quizá investigar sus potenciales botánicos
y bioquímicos pueda descifrar sus efectos psicomiméticos y neurosiológicos
en el comportamiento humano.

270
El borrachero, pasado y presente en Colombia: mitos, creencias, prácticas ...

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272
DROGAS PSICOACTIVAS REPORTADAS COMO CONSUMIDAS
EN EL EJE CAFETERO Y LÉXICO ASOCIADO A ELLAS, EN UN
ESTUDIO DE PERCEPCIONES

WILLIAM MEJÍA OCHOA


DROGAS PSICOACTIVAS REPORTADAS COMO CONSUMIDAS EN EL
EJE CAFETERO Y LÉXICO ASOCIADO A ELLAS, EN UN ESTUDIO DE
PERCEPCIONES1*

WILLIAM MEJÍA OCHOA


RED DE UNIVERSIDADES PÚBLICAS DEL EJE CAFETERO ALMA MATER
GRUPO DE INVESTIGACIÓN CULTURA Y DROGA, UNIVERSIDAD DE CALDAS
wmejia8a@yahoo.com

Recibido: 25 de julio de 2006


Aceptado: 1 de septiembre de 2006

RESUMEN

El presente artículo se fundamenta en un estudio descriptivo y exploratorio,


sobre percepción del consumo de drogas en el Eje Cafetero, con base de un
formulario de percepciones. Incluye referencias a los consumidores, condiciones
sociales de uso, producción e importancia económica, se destacan los términos
y expresiones léxicas relacionados con las sustancias, sin consideración de la
frecuencia con que hayan sido reportados, lo cual puede conducir a inclusiones
correspondientes a ámbitos muy locales o hasta comunitarios, pero no por eso
menos interesantes. Se presentan como referencia ilustrativa las descripciones
farmacológicas y farmacocinéticas de las algunas de las drogas que se conocen
en la bibliografía consultada.

Palabras clave: drogas psicoactivas, percepciones, consumo, Eje Cafetero,


léxicos.
*
El presente artículo es parte de un capítulo escrito por el autor para un informe, elaborado
en compañía de Ángela María Gómez, acerca de los resultados de un trabajo de autoría con-
junta: Mejía, William y Gómez Ángela M. (2005). “Hechos y percepciones sobre fenómenos
de drogas en el Eje Cafetero”. Informe nal de experiencia piloto de diagnóstico sobre prob-
lemática de drogas, objeto del Convenio 067 de 2005, presentado a: UNODC – Ministerio
de la Protección Social, Programa para la descentralización del plan de drogas. Proyecto AD/
COL/99/C-81. Red de Universidades Públicas del Eje Cafetero ALMA MATER, Pereira,
septiembre 21 de 2006.

275
William Mejía Ochoa

ABSTRACT

PSYCHOACTIVE DRUGS REPORTED AS CONSUMED IN THE


COFFEE AREA, AND LEXICAL USAGE ASSOCIATED TO THEM,
IN A STUDY OF PERCEPTIONS

The present article is based on a descriptive and exploratory study, on the


perception of the drug consumption in the Coffee Area, based on a survey of
perceptions. It includes references to the consumers, social conditions of the
usage, production and economic importance. The lexical terms and expressions
related to the substances are outlined, without considering the frequency with
which they have been reported, which can lead to inclusions corresponding to
very local scopes or even communitarian, but for that reason no less interesting.
The pharmacological and pharmacokinetic descriptions of some of the drugs
appear as an illustrative reference that is seen in the consulted bibliography.

Key words: Psychoactive drugs, perceptions, consumption, Coffee Area,


lexical.

1. ASPECTOS TÉCNICOS Y METODOLÓGICOS DEL ESTUDIO Y ALGUNAS


CONSIDERACIONES PRELIMINARES.
En Colombia, el tema de las drogas hace parte de nuestra cotidianidad y,
como en muchos otros asuntos, principalmente por el inujo de los medios
de comunicación y de intereses de distinto tipo, a veces extranacionales, se
han formado sobre él opiniones y supuestos que se aceptan como generales
y ciertos.
Con el ánimo de tener un conocimiento más preciso acerca de la situación y
recoger el sentir social respecto a ella en la región del Eje Cafetero, el Sistema
de Información de Drogas del Eje Cafetero (SIDEC), diseñó el formulario de
“Percepciones y conocimientos sobre consumo de drogas en comunidades
especícas”, dentro de una búsqueda de procedimientos para diagnósticos

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Drogas psicoactivas reportadas como consumidas en el Eje Cafetero y léxico asociado a ellas...

rápidos y económicos acerca de un tema que es objeto de preocupación


constante y cuya investigación periódica es costosa.
Como prueba y como mecanismo de sensibilización entre las comunidades, el
mencionado instrumento se aplicó, entre el año 2005 y 2006, en 240 grupos
(conformados por cerca de 2000 personas) de los departamentos de Caldas,
Quindío y Risaralda, así como del municipio de Cartago (Valle), seleccionados
en función, principalmente, de la accesibilidad y la colaboración institucional
lograda, dentro de la cual debe destacarse la de la Secretaría de Educación
de Pereira y de sus jefes de núcleo, a través de quienes se llegó a cerca de 80
grupos urbanos y rurales de sus ámbitos de trabajo, constituidos principalmente
por estudiantes, pero también por docentes, directivos educativos, líderes
comunitarios y personas del común, situación que, debe tenerse en cuenta,
introdujo un sesgo importante hacia la situación de Pereira y en particular de
sus estudiantes de secundaria.
Aquí se pasa revista a las sustancias reportadas por los grupos entrevistados
por el SIDEC, que fueron las mismas por las que se preguntó en los estudios
de Rumbos, aunque en el primer caso se dejaron renglones adicionales en el
listado ofrecido, para el reporte de otras no mencionadas, opción que fue poco
o nada utilizada, lo que no signica que no se informen consumos distintos a
los sugeridos en el instrumento, como se evidencia con algunas anotaciones
sobre el uso de sustancias “nuevas”, a las que se hará referencia, ante la carencia
de datos más precisos.
Particularmente, se muestran los datos obtenidos a través de las siguientes
preguntas:
• Según su conocimiento, ¿cuáles de las siguientes drogas se consumen en
la comunidad analizada? (la lista presentada incluía 13 sustancias o grupos
de ellas).
• Según su conocimiento, ordene las drogas que se consumen en la comunidad
analizada por orden de importancia (1 la que tiene más consumidores).
• ¿Qué tendencia hubo durante el período analizado en cuanto al consumo
de cada droga? (las alternativas ofrecidas fueron: gran aumento, cierto

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William Mejía Ochoa

aumento, estable, cierto descenso y gran descenso).


• ¿Conocen de casos de consumo no terapéutico de drogas por inyección
dentro de la comunidad analizada? En caso armativo, ¿de qué tipo de
drogas?
• De cada 100 hombres de la comunidad analizada, mayores de 14 años
y menores de 65, ¿cuántos creen que hayan consumido cada una de las
siguientes drogas (la misma lista aludida atrás), por lo menos una vez en
los últimos 12 meses? Si la comunidad analizada es de niños(as) o jóvenes,
hacer el cálculo respecto a todos los hombres de ella. Nota: se entiende que
las cifras dadas aquí son apenas la idea que ustedes tienen al respecto y
que ellas carecen de sustento o validez estadística. En caso de que el dato
suministrado provenga de algún estudio, por favor informarlo.
• La misma pregunta anterior referida a las mujeres.
• Dentro de la comunidad analizada, ¿se observó la existencia de nuevas
drogas o de nuevas características de consumo? En caso armativo, ¿qué
drogas o características nuevas de consumo se observaron?
Los resultados de las preguntas anteriores, no constituyen otra cosa distinta
que percepciones, que pueden coincidir o no, en sus volúmenes y proporciones
con la realidad de las respectivas comunidades, dependiendo del nivel de
conocimiento de los grupos entrevistados sobre el asunto y de su capacidad
de cálculo para estimar los porcentajes.
Considerando la confusión usual en todo lo tiene que ver con el tema, se
incluyen las deniciones de las sustancias consumidas, así como algunas notas
sobre sus efectos, provenientes, unas y otras, de fuentes que se presumen serias,
renunciando el autor a la realización de glosas sobre un tema en el cual no
tienen formación especial.
De las sustancias reportadas se presentan, también, algunas referencias a
sus consumidores y condiciones sociales de uso, así como los términos y
expresiones relacionados con ellas e informados en los mismos formularios,
sin consideración de la frecuencia con que hayan sido reportados, lo cual

278
Drogas psicoactivas reportadas como consumidas en el Eje Cafetero y léxico asociado a ellas...

puede conducir a inclusiones correspondientes a ámbitos muy locales o hasta


comunitarios, pero no por eso menos interesantes. El léxico referido se resalta
en cursiva negrita, generalmente junto a la mención de características de las
sustancias, usos o efectos, con los cuales se consideran asociados, buscando así
un acercamiento etimológico. Debe tenerse en cuenta que algunos términos se
aplican a varias sustancias o situaciones relacionadas con ellas, como también
que uno mismo es usado por distintos grupos con signicados diferentes.
Finalmente, cuando se dispone de ella, se ofrece, también, información en torno
a circunstancias de producción o distribución de las sustancias, así como a su
signicado económico.
Para nalizar una aclaración: aunque a través del texto el término droga(s)
se reere mayoritariamente a Sustancias Psicoactivas o SPAs (entre las que
se considera, inclusive, el alcohol y el tabaco), de las cuales se considera
sinónimo, hay momentos en los que se emplea en la acepción más popular
y restringida, de sustancias prohibidas, especialmente cuando se transcriben
resultados del sondeo o notas de prensa. No obstante, consideramos que tal
situación no tiene consecuencias importantes y que no inducirá confusión en
la persona que lea.

1.1 LAS MOTIVACIONES DEL CONSUMO


La explicación de los motivos de uso de las drogas en la región están por fuera
de las pretensiones y posibilidades de este trabajo; no obstante, se presentan
(Recuadro 1), clasicadas a posteriori, las respuestas que se dieron en los
formularios del SIDEC a la pregunta sobre las circunstancias o hechos a
los cuales se asocia en las comunidades el consumo de las sustancias. Tales
respuestas seguramente constituyen una mezcla de percepción de situaciones
cercanas o aun de la situación de los mismos individuos que participaron en
el sondeo, así como de “discurso social”, posiblemente la repetición de algún
concepto escuchado y hasta de pretensiones de dar gusto a quien dirigió la
recolección de la información, diciendo lo que se supone que el quisiera oír y
lograr así su aprobación.

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o Estados de ánimo negativos: depresión, angustia, tristeza, nervios, problemas,


desamor, ansiedad, aburrimiento, estrés.
o Soporte para la realización de otras actividades: laborales, académicas, deportivas,
consumo alcohólico, baile, sexo, ejercicio de la prostitución.
o Recreación: celebrar, divertirse, gusto, alegría.
o Carencias afectivas: desatención paterna, baja autoestima, soledad.
o Situaciones asociadas a la pobreza: hambre, frío, falta de oportunidades, ignorancia.
o Presión de pares.
o Experimentación.
o Cultura.
o Dormir (solucionar problemas de insomnio).
o Adicción o costumbre.

Recuadro 1. Circunstancias, supuestamente causales, del consumo de sustancias psicoactivas, declaradas por quienes
diligenciaron los formularios del SIDEC.

No obstante, aun con tales limitaciones, la información presentada da cuenta,


cuando menos, de la variedad de imaginarios y representaciones sociales
(coincidentes o no con la realidad) en torno al uso de drogas en la comunidad
y muestra una enorme complejidad en el asunto, con una variedad de
“justicaciones”, que hacen muy difícil cualquier intervención.
Vistas las motivaciones anteriores, es fácil comprender las ocasiones de
consumo informadas en el mismo ejercicio, algunas de ellas posiblemente
producto más del prejuicio que de la experiencia o la observación (al igual
que en el caso de las motivaciones), presentadas en el Recuadro 2, ordenadas
según frecuencia de aparición en los formularios. Del contenido de los dos
recuadros mencionados, se desprende que, sin considerar el tipo de sustancia,
siempre habrá un motivo y un espacio socialmente aceptado para el consumo
de algún psicoactivo.

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Drogas psicoactivas reportadas como consumidas en el Eje Cafetero y léxico asociado a ellas...

Pereira?”, la opción “parranderos”2 obtuvo la mayor frecuencia, con el 49%


(CES, 2005). Teniendo en cuenta que se trató de una autodefinición, pues la
población encuestada fue la gente de la ciudad, es claro que ser parrandero
entraña un motivo de orgullo y que está por encima, incluso, de la percepción
que tienen los visitantes cuando en otra encuesta el 79% de una muestra
representativa de ellos respondió que la amabilidad de sus gentes era el
activo turístico más importante de la ciudad, mientras sólo el 1% hizo alguna
referencia a la parranda (Mejía, 2005).
También es sintomático que, en el mismo trabajo del CES, los pereiranos(as)
hayan incluido dentro de los apenas 14 lugares identificados como dignos de
mostrar a un turista en su primera salida, dos sitios tradicionales de consumo
alcohólico: El Páramo y El Pavo. Situación que, casi con seguridad, se repetiría
en la totalidad de ciudades y municipios de la región y quién sabe en cuántos
del mundo no musulmán.
El alcohol etílico (etanol) es el principal ingrediente psicoactivo dentro de
muchos otros constituyentes que pueden tener las bebidas a las que les da
su nombre. Las cervezas y vinos son preparados por fermentación; bajo
condiciones normales tienen una concentración alcohólica de no más de
14%. La cerveza es producida a partir de cereales, principalmente cebada, a
menudo con la agregación de lúpulos. Los vinos se obtienen de frutos y bayas,
especialmente uvas. En la producción de licores, a la fermentación sigue la
destilación, la mezcla fermentada se hierve y el etanol se recolecta casi puro
como un condensado. Los licores se diferencian por su materia prima; mientras,
por ejemplo, la del vodka son cereales o papas y la del whisky centeno o maíz,
la del ron y el aguardiente es la caña de azúcar. El alcohol también puede ser
sintetizado químicamente, por ejemplo a partir del petróleo, pero raramente
es usado para producir bebidas (WHO, 1994).
En el Eje Cafetero se consumen habitualmente tanto bebidas fermentadas como
destiladas; entre éstas últimas la de mayor demanda es la cerveza, de la cual
han existido fábricas, desde hace algunos decenios. En Pereira, por ejemplo,

2 El alcohol está indisolublemente ligado al concepto de parranda, en una parranda puede


faltar el baile pero no el licor.

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a principios del siglo XX se reportan las cervecerías Costeña y Cuervo en el


directorio general del municipio (Echeverri, 1921: 120), mientras que se tiene
noticia de que en Apía se estableció en 1910 la fábrica de Cerveza Negra,
seguida de la de la cerveza dulce Calmarían (Naranjo, s.f.: 63).
Varios términos para denominar la cerveza fueron encontrados: fría (condición
ideal de consumo; “nada más maluco que una cerveza al clima”, dijo alguien);
amarga (su sabor); negra (referencia al color oscuro de la bebida o de su
envase); pechiblanca (¿alusión a su espuma?); cebada (procedencia); birra
(cerveza en italiano o ¿relación con beer, su nombre en inglés?); chela (¡qué
chabocha es la chevecha que che chuve a la cabecha…!, dice una canción
popular) y pola (de clara estirpe cundiboyacense).
Con relación a los destilados, debe anotarse que hacen parte de la cultura
paisa el aguardiente y el ron, productos bandera de la Industria Licorera de
Caldas, que durante mucho tiempo tuvo el monopolio regional para tales
licores; producidos a partir de la caña de azúcar y vendidos originalmente en
botella de vidrio (aunque hoy también en caja de cartón y envase plástico),
tales destilados dan origen a denominaciones informadas en el trabajo como
caña y cañazo y botello. Con respecto a estos licores, transcribimos una nota
que da cuenta de su pasada producción dispersa en varias fábricas dentro
de lo que era el Viejo Caldas (Caldas, Quindío y Risaralda actuales) y la
importancia que la misma tenía para las regiones:
Es el “Sacatín” quizá la primera industria que se monta en el
Distrito. Las Rentas Departamentales, hacia principios del siglo,
ubican algunos sacatines geográficamente distribuidos. El de Apía
cubre los municipios y caseríos y circunvecinos del Occidente;
inicialmente comienza a fabricar el anisado o aguardiente amarillo,
que en barriles de roble es despachado a los diversos pueblos de la
zona señalada; viene después la producción del tan conocido para los
apianos “Ron Común”, cuya fórmula es adoptada años más tarde por
la Industria Licorera de Caldas para la fabricación del “Ron Viejo
de Caldas”. El comercio y la demanda de los productos prospera y
fuera de los anteriores se comienza a fabricar el “Anís del Mono”,

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Drogas psicoactivas reportadas como consumidas en el Eje Cafetero y léxico asociado a ellas...

el “Pipermint” (menta), el Agua de Murray y otros. Por cerca de


cuarenta años funciona este Sacatín, hasta que la producción de
licores es centralizada en la capital (Naranjo, s.f.: 63).
A pesar de la tradición, los licores de Caldas han ido siendo desplazados en la
región por otros de su mismo tipo procedentes de departamentos diferentes,
en especial por el aguardiente antioqueño, detrás del cual debió llegar la
denominación de guaro (huaro, guarilaque), común hoy en la región como
genérico del aguardiente, sin que lo fuera hace unos veinte años, cuando ya
se usaba ampliamente en Antioquia. Al antioqueño también sería atribuible el
término de niquelado, como una referencia a su etiqueta brillante (metalizada),
característica introducida, quizás, en él antes que en otras marcas.
Como competencia de los tradicionales aguardiente y ron de Caldas,
también han entrado los llamados “aperitivos” (licores con menor contenido
alcohólico) y los “tragos largos” como whisky y vodka, cada uno dentro de
segmentos específicos de población: “…El consumidor de hoy busca licores
menos fuertes, que duren más o que al menos no hagan tanto daño al día
siguiente, coinciden en afirmar algunas fuentes del sector. Por eso, las licoreras
recurrieron en los últimos años al lanzamiento de productos novedosos que el
mercado apenas comienza a asimilar, como los aguardientes ‘sin azúcar’, ‘ice’
y ‘light’, que prometen a las mujeres no engordar y al público en general, un
despertar sin guayabo” (Cambio, http://www.cambio.com.co/html/economia/
artículos/3939/).
Entre la gama de bebidas alcohólicas de uso en la región, especialmente por
parte de grupos poblacionales especícos, también se encuentran algunas de
producción artesanal, es el caso del guarapo, producto de la fermentación
del jugo de caña y la chicha, de ancestro indígena y originalmente obtenida,
también por fermentación, a partir del maíz (aún utilizado para ello por los
emberas de la región), pero también de cáscara de piña, como la que se vende
fría en el sector de Cerritos, cercano a Pereira, más para refrescarse que para
embriagarse, igual que ocurría con la que se elaboraba, a partir de harina de
trigo, y se expendía en el mismo municipio, según se desprende de una crónica
referida a los “mercados de antaño”:

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En los toldos de chicha y de bebidas frescas Moisés, Rubén y Colegurre


se disputaban la clientela con sus gritos extravagantes. Cuando el calor
estaba en su na solían gritar: “¡Arrímense montañeros a la chicha
subidota que se acaba y no se vende! ¡Aquí encuentran la famosa
horchata de arroz, el sirope y la deliciosa agua de moras! ¡Arrímense
viejitos pechilanudos!”… Si a sus gritos no acudía la clientela y el calor
arreciaba, los barriles con chicha subidora constituían un verdadero
peligro. La madera empezaba a ensancharse y por las junturas de las
duelas empezaban a salir “chilguetes” de chicha disparados como
saetas… Era entonces cuando Moisés daba la “prueba”, más que
por propaganda por evitar el peligro, pues si eso no hacía, el barril,
por más zunchado que estuviera, empezaba a “moverse solo”, listo a
estallar si no le sacaban su endemoniado contenido. ¡El bicarbonato
y la harina de trigo, estimulados por el azúcar, en fermento constante,
se encontraban incómodos en tan estrecha cárcel!... (Sánchez, 1936:
124).3
El chirrinchi, chirrinche o tapetusa (en alusión a la tusa de maíz usada
con frecuencia para tapa de su envase), aguardiente artesanal conocido
en otras partes (Chocó, por ejemplo) por el nombre de biche, es destilado
clandestinamente a partir de la caña y aún se consume conociendo su origen
en algunas regiones campesinas, por ejemplo, la zona indígena de Caldas
(principalmente de Riosucio y Supía), donde también se le conoce como
pelaguache, agua endemoniada, champaña india y chicha. En ocasiones,
los nombres de las bebidas artesanales son aplicados, también, a los licores
industriales que, adicionalmente, muchas veces, son falsificados con destilados
domésticos.
Por último, dentro de la categoría de artesanales, en algunos casos semi
industrializadas, producidas y consumidas en la región, cabe mencionar,
algunos vinos, por ejemplo los de café y naranja u otras frutas.
Aunque, como su nombre lo indica, las bebidas alcohólicas se hacen para

3 Una narración semejante, referida al Aranzazu de la misma época, pero con la chicha ex-
plotando al momento de la salida de misa, escuchó uno de los autores hace muchos años.

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ser ingeridas (de ahí los términos de trago, chorro, agüita, chupa/e, tinto),
se reportaron casos de absorción por vía anal o vaginal, mediante el uso de
tampones empapados en licor, por parte de adolescentes, como mecanismo
de ocultamiento del consumo, al evitar el olor de la sustancia en el aliento
(tufo).
El alcohol es un sedante hipnótico, sus efectos, dependiendo de la cantidad
consumida, pueden incluir, desde alteración funcional apenas perceptible,
hasta confusión mental significativa que se traduce, incluso, en dificultades
relativas para mantener el equilibrio, pasando por una sensación de euforia, así
como un incremento de la interacción social, desinhibición, seria alteración
del autocontrol y de la capacidad valorativa del sujeto, importante descenso de
la ejecución psicomotora y compromiso parcial de la articulación del habla.
Los efectos posteriores al consumo o resaca, conocidos como guayabo,
incluyen múltiples síntomas, entre los que se cuentan: dolor de cabeza, mareo,
náuseas, sed, sudoración, temblores y depresión.
Algunas de las consecuencias sugieren explicaciones para otros términos:
embellecedor (el alcohol facilita el emparejamiento al permitir encontrar
belleza en contertulios/as escasos/as de ella); shakira (¿hace “cantar”?,
¿”los borrachos siempre dicen la verdad”?); llorón (episodios depresivos) y
tumbapelos (¿?).
La intoxicación etílica puede terminar en envenenamiento y hasta en muerte
(venenoso y yomemato se le dice también al aguardiente); el uso intenso
por períodos largos puede generar dependencia y una amplia variedad de
desórdenes físicos y mentales.
En poblaciones marginales, particularmente reclusos e indigentes, se ingieren,
por su bajo costo o por ser lo único disponible, alcoholes medicinales o
industriales, una de cuyas preparaciones con leche condensada y gaseosa
se conoce como chamberlain, aunque en otra época era común referirse a
ella como pipo y a quien la consumía pipero. No obstante que los alcoholes
usados para base de esta bebida pueden ser de tipo etílico, los agentes que
les son agregados para impotabilizarlos (pretendiendo con ello que no sean

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consumidos) tienen otra naturaleza; tal es el caso del metanol, altamente


tóxico, que, dependiendo de la cantidad ingerida, puede producir reducción o
pérdida de la visión (efectos éste al que alude la denominación déjemeciego
del aguardiente), coma y muerte.
En general, la comunidad demuestra tener un buen conocimiento sobre los
diferentes niveles de intoxicación y de los efectos físicos y psicológicos
asociados. Prueba de ello son los múltiples términos y expresiones con los
que popularmente se hace referencia a los consumos, consumidores y estados,
de los cuales se presenta la colección acopiada en la región en la Tabla 2.

Términos Nivel de consumo o intoxicación


Bajo Medio o no definido Alto
Prenderse, Beber, beba, tomar, Emborracharse,
entonarse, chupar, enfarrarse, caerse, perderse,
Consumo
copetonearse, embriagarse, enlagunarse,
rascarse (rasca). rumbear. alcoholizarse.
Prendido
Borrachera, perra,
(adjetivo),
caído, jincho
prendida Tomado, enfarrado,
(adjetivo), jincha
(sustantivo), farra, rumbeado,
(sustantivo),
prendo (adjetivo embriagado,
Estado perdido,
y sustantivo), embriaguez, ebrio,
enlagunado,
entonado, caliente, mareado,
llevado, loco,
rascado, copetón, volteado.
alcoholizado,
chapeto, chaveto,
alcohólico.
tuado (tufeado).
Borracho,
borrachín, caneca,
Bebedor, tomador,
pipero, pernicia,
Consumidor tomatrago, chobarro,
guayaboeterno,
chirrinchero.
cantinalhombro,
bebetodo.

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Drogas psicoactivas reportadas como consumidas en el Eje Cafetero y léxico asociado a ellas...

Tener perra, tener


la perra encima,
estar con perra,
estar con la jincha
Estar prendido
Estar en lunada. encima, caerse de
Expresiones o prendo, tener
la perra, jincho de
prendo.
la perra, perderse
de la perra, tenerla
viva, estar llevado
de la perra.
Fuente: Sondeo SIDEC.
Tabla 2. Términos informados en el Eje Cafetero con relación a distintos niveles de consumo e intoxicación
alcohólica.

Observando la legislación colombiana respecto a la producción y


comercialización de bebidas alcohólicas y tabaco, se podría decir que contiene
elemento básicos interpretables hoy como de avanzada para enfrentar la
problemática de las drogas, pero que, en la práctica, por sus motivaciones
exclusivamente alcabaleras, de llenar las arcas públicas, originadas en la misma
colonia y mantenidas durante toda la república, tienen efectos perversos sobre
la sociedad y el consumo.
En principio, se trata de un esquema que, a juicio nuestro, posee las bases de
una política pública acertada:
o No criminalización del consumo y reglamentación del comercio
y expendio: localización de establecimientos, normas sanitarias,
horarios, prohibición de expendio a menores, etc., que permiten
un control sobre las condiciones de consumo y la calidad de las
sustancias consumidas, ofreciéndole cierta seguridad al consumidor
y la posibilidad de identificación del mismo para hacerlo objeto de
medidas de prevención y tratamiento.
o Monopolio parcial de la producción, que se da en el caso de las
bebidas destiladas, a cargo de las administraciones departamentales,
muchas de las cuales tienen sus industrias licoreras, como ocurre

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en Caldas. De esta manera, el Estado se apropia de parte de las


utilidades del negocio, que deberían ser dedicadas exclusivamente
a la prevención y tratamiento del consumo.
o Impuesto al consumo, que unido al impuesto del valor agregado,
constituye un mecanismo que desincentiva el consumo.
No obstante, la actuación del Estado, con la misma lógica de los productores
de otros SPA, donde el norte está marcado por la obtención de utilidades,
tiene entonces, como ya se dijo, efectos perversos, que incentivan el consumo
y dejan sin atención a las víctimas del mal uso del tabaco (que casi siempre
termina siéndolo por su enorme poder adictivo) y del alcohol.
Los gravámenes al alcohol y el tabaco, que no se aplican ni a la prevención
ni al tratamiento, se convirtieron en fuente básica de financiación de los
departamentos, a quienes los cede la nación, particularmente con destino a
la salud y la educación, y que se ven ambas afectadas de manera enorme
por todos los esfuerzos que hacen sector privado y público para incentivar el
consumo, así se diga lo contrario. De ello es muestra clara, que no requiere
comentarios, la información de prensa transcrita en el Recuadro 3, acerca de
la preocupación de empresarios y gobernantes por la baja en las ventas (léase
consumo) del aguardiente en la región.

La Patria, agosto 22 de 2005


Un nuevo revuelo se generó ayer frente al caso de la caída en las ventas de la
Industria Licorera de Caldas (ILC), después de que el Gerente de la destilera,
Manuel Alberto Soto Salazar, se defendió de los cuestionamientos hechos por
la pérdida del mercado nacional, mientras que, por ejemplo, los licores de
Antioquia continúan creciendo en Pereira y Armenia.
Luego de las declaraciones entregadas ayer por Soto Salazar, en rueda de
prensa, la propia comercializadora en Risaralda, Cristal Escobar y Arias y
la ex Gobernadora de ese departamento, Elsa Gladys Cifuentes, criticaron la
posición del actual Gerente. El representante de la ILC reiteró lo expresado a
LA PATRIA, y que se publicó el sábado pasado, en el sentido de que esa caída

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Drogas psicoactivas reportadas como consumidas en el Eje Cafetero y léxico asociado a ellas...

en las ventas se debe a que en esas regiones a los distribuidores los nombraron
de forma directa los departamentos y no la ILC, frente a lo cual la destilería
no puede hacer algo. Frente a ello consideró necesario contratar un segundo
distribuidor alterno en Risaralda y Quindío, porque los actuales cuentan con
inconsistencias que no permiten que los licores de Caldas puedan crecer en
esa región. Para el Gerente no es lógico que haya unas 500 mil botellas en
la Licorera vendidas, pero el distribuidor Cristal Escobar y Arias ni siquiera
las retire y, por ende, no se le puede pagar al Departamento de Risaralda una
suma a favor por 5 mil millones de pesos de Impuesto al Consumo, que tampoco
puede reclamar, debido a la autonomía que le da el contrato al distribuidor.
“Ha acudido a estrategias que nos parecen fuera de ética comercial. Por
ejemplo se vino con un pedido de 550 mil botellas de ron forrado (empacado
en iraca), porque sabe que no las hay, cuando en la historia de la ILC se han
vendido 6 mil botellas de ron forrado”.
De acuerdo con el Gerente, aunque Escobar y Arias redujo su cuota de ventas
de 3 millones de unidades a 2 millones 100 mil unidades, ahora la nueva
pretensión es reducir en 1 millón más sus ventas, ya que el Departamento tiene
planeado la incursión de licores de otras regiones. “No se justica porque en
Manizales y Villamaría este año se van a vender 2 millones 300 mil unidades,
entonces cómo es que Pereira y Dosquebradas, en una conurbación de 800 mil
habitantes, pueden vender sino 2 millones. Por eso si van a reducir en un millón
de unidades más que lo hagan, pero que me den la posibilidad de que monte
otro distribuidor, porque soy capaz de vender 2,5 millones de botellas más. El
todo es que no me corten el paso, ni la posibilidad de crecer” anotó.
De acuerdo con la gerencia comercial de la destilería el panorama es
complicado en las dos regiones vecinas, ya que en Risaralda de una meta de
2 millones 100 mil unidades, este año solo se están vendiendo unas 350 mil
botellas, más las 500 mil pedidas que el distribuidor no ha reclamado. En el
caso del Quindío de una cuota de 1 millón 600 mil botellas, en lo corrido del
año se han comprado solo 150 mil botellas, mientras que la empresa sigue
maniatada porque no existe un vínculo comercial, ni contractual. A la pregunta
de por qué hasta ahora se prenden las alarmas, indicó que esto lo hacen desde
el año pasado, aunque en el 2004 cumplió con las compras, pero fue en este

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período cuando no volvió a comprar.


Recuadro 3. Revuelo por baja en ventas de Industria Licorera de Caldas en
Quindío y Risaralda.

Para tener una idea de lo que representa para las finanzas públicas de la región
el negocio del consumo alcohólico, considérese que la Industria Licorera de
Caldas (propiedad departamental) ocupó durante el año 2004 el tercer puesto
entre las empresas del país dedicadas a la producción y comercialización
de bebidas alcohólicas (excluyendo cerveza), con un volumen de ventas de
37,9 millones de dólares y una participación en el sector de 10,8%, en el que
mostró el mayor crecimiento durante el mismo año, con una tasa de 60,2%
(PROEXPORT, 2005).
De otro lado, las transferencias hechas por la nación al sector salud de los
departamentos de la región por concepto del IVA a bebidas alcohólicas (Tabla
3), alcanzaron la suma de 23.088 millones de pesos en 2003, equivalentes al
5,5% del total transferido a los departamentos durante ese año.

Caldas Quindío Risaralda Total


Licores nacionales 8.637 2.074 6.408 17.119
Vinos, aperitivos y
144 14 374 532
similares
Licores importados 40 28 185 253
Cervezas 2.017 1.411 1.755 5.184
Total 10.839 3.527 8.722 23.088
Fuente: cuadro elaborado a partir de información disponible en el sitio Web de la
Superintendencia Nacional de Salud, División de Licores y Cervezas.

Tabla 3. Transferencias al sector salud IVA de cervezas, licores, vinos, aperitivos y similares, 2003
(en millones de pesos).

Finalmente, los datos de los impuestos al consumo de las bebidas alcohólicas


y del tabaco (Tabla 4), reconrman la importancia de esos consumos (y de los
ingresos que generan) en las nanzas de los departamentos, en las que representan
68,4% de todos los ingresos tributarios de los tres departamentos juntos y 25,2%
de la totalidad de ingresos corrientes de los mismos (Acuerdo 2005, a, b y c).

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Drogas psicoactivas reportadas como consumidas en el Eje Cafetero y léxico asociado a ellas...

Concepto Caldas Quindío Risaralda Total


Cigarrillos 9.812 5.096 9.512 24.420
Cerveza 11.036 8.117 11.913 31.066
Licores 42.929 8.159 21.041 72.129
Total 63.777 21.372 42.466 127.615
Fuente: elaborado por los autores a partir de los Informes de Coyuntura
Económica Regional, Departamentos de Caldas, Quindío y Risaralda, Segundo
semestre de 2004. Anexo C.

Tabla 4. Ingresos tributarios de los departamentos por bebidas alcohólicas y


tabaco, 2004 (en millones de pesos).

2.2. TABACO Y OTROS ESTIMULANTES


Con referencia al sistema nervioso central, se denomina estimulantes a los
agentes que activan, mejoran o incrementan la actividad neural. Incluyen las
anfetaminas, cocaína, cafeína y otras xantinas, nicotina y algunos supresores
sintéticos del apetito. Otras sustancias tienen acciones estimulantes que
no constituyen su efecto primario, pero que pueden hacerse manifiestas
en altas dosis o después del uso crónico; entre ellas hay antidepresivos,
anticolinérgicos y ciertos opioides. A los estimulantes se les atribuye la
capacidad de contrarrestar la fatiga física y mental; usados con moderación,
alivian el malestar e incrementan el estado de alerta. Los estimulantes pueden
generar un incremento de síntomas que sugieren intoxicación, incluyendo
taquicardia, dilatación de la pupila, elevación de la presión sanguínea,
hiperreflexia, sudoración, escalofrío, náuseas o vómito y comportamiento
anormal como agresividad, grandiosidad, hipervigilancia, agitación y
deterioro del juicio. El mal uso crónico comúnmente induce cambios en la
personalidad y el comportamiento, irritabilidad, agresividad y recelo. La
cesación del consumo, después del uso prolongado o intenso, puede producir
un síndrome de abstinencia con sentimientos depresivos, fatiga, trastornos del
sueño e incremento de fantasías.
Como drogas de abuso, los estimulantes son usados frecuentemente para
producir una sensación de vitalidad, mejorar la autoestima y el desempeño
físico y mental, incrementar la actividad, reducir el apetito y lograr vigilias

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William Mejía Ochoa

prolongadas. Se consumen oralmente, sorbidos por la nariz, fumados o


inyectados. Puede desarrollarse tolerancia pronto y ocurrir tanto dependencia
física como psicológica.
Los efectos físicos colaterales de consumos durante períodos prolongados
o dosis altas incluyen mareo, temblores, dolor de cabeza, enrojecimiento de
piel, dolor en el pecho con palpitaciones, sudoración, vómitos y calambres
abdominales. En sobredosis, a menos que haya atención médica, ocurren fiebres
altas, convulsiones y paro cardiovascular, que puede preceder a la muerte.
Los efectos psicológicos abarcan: agitación, hostilidad, pánico, agresión y
tendencias suicidas u homicidas; paranoia, algunas veces acompañada de
alucinaciones auditivas o visuales, puede también ocurrir (WHO, 1994).
2.3. NICOTINA Y TABACO
La nicotina es un alcaloide y constituye la principal sustancia psicoactiva del
tabaco (Nicotiana Tabacum), planta americana de la familia de las solanáceas.
Tiene efectos tanto estimulantes como relajantes. Produce condición de alerta
y en algunos individuos incrementa la capacidad para centrar la atención,
mientras en otros reduce la ansiedad y la irritabilidad (WHO, 1994).
En la región, los departamentos de Quindío y Risaralda (Tabla 5) contribuyen
con el 2,1% de la variedad “rubio”, producida en Colombia, generalmente
por contratos o mandatos de producción otorgados directamente por empresas
como Coltabaco y Protabaco, entre otras, aliadas a la federación Nacional
de Productores de Tabaco (Fedetabaco), los cuales cubren la asistencia técnica
del cultivo, la nanciación de insumos y mano de obra (DANE, s.f.).

Departamento Hectáreas Toneladas


Quindío 140 224
Risaralda 50 80
Total Nacional 8850 16044
Fuente: DANE s.f.
Tabla 5. Producción de tabaco rubio, según departamentos, 2003.

En el Eje Cafetero el uso del tabaco fumado es de vieja data y ha estado unido
al del café y el aguardiente; “tinto sin cigarrillo no sabe a nada”, dicen algunos;

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Drogas psicoactivas reportadas como consumidas en el Eje Cafetero y léxico asociado a ellas...

otras formas de utilización, como sorberlo en polvo (rapé), son prácticamente


inexistentes. Al igual que el aguardiente, la elaboración y comercialización
de tabaco se cuenta dentro de las actividades económicas importantes de la
región; por ejemplo, para los años 20 había en Pereira tantas agencias de tabaco
como de sal (Echeverri 1921: 121), mientras en la pequeña población de Apía
se destaca para mediados del siglo la existencia de una fábrica de cigarros y
del “Tabaco Común” (Naranjo, s.f.).
La presentación predominante es el cigarrillo, picado de hojas secas de tabaco
envueltas cilíndricamente en un papelillo. De menor consumo y reducida casi
exclusivamente a zonas campesinas, es la presentación en tabaco, consistente
en el enrollamiento de las hojas, también secas, sobre sí mismas, siendo una
variedad de ella, caracterizada por su delgadez, la calilla, término encontrado
en el estudio para referirse también a los cigarrillos.
La palabra cigarro, cuya denición precisa hace referencia a los tabacos, se
aplica también, en el lenguaje coloquial, al cigarrillo, al igual que otros términos
que parecen desprendidos de ella: garro, gairo, magarro.
Regionalmente se usa el vocablo pucho, al igual que en otras partes, para
nombrar la colilla o resto del cigarrillo, pero también aludiendo al mismo
cigarrillo. Según el Diccionario de la Real Academia, el término procede del
quechua puchu, que signica sobrante.
Sobre el consumo de picadura de tabaco (generalmente aromatizada y
distribuida en bolsas) en pipa, puede decirse que es marginal y asociada a
círculos intelectuales. Viejos consumidores de ella cuentan de una época en
la que era usual enviar las pipas a las cárceles para que fueran “curadas” por
un interno, quien lo hacía a cambio del suministro de la picadura requerida en
el proceso. Alguna relación con esta modalidad de consumo del tabaco puede
tener el término de pipeta, reportado como sinónimo de cigarrillo.
La nicotina contenida en el humo del tabaco es rápidamente absorbida a través de
los pulmones y llega en segundos al cerebro; el organismo desarrolla considerable
tolerancia y dependencia a ella; a causa de su rápido metabolismo, los niveles de
nicotina en el cerebro caen rápidamente y el fumador experimenta deseos de un
nuevo cigarrillo 30 ó 40 minutos después de haber terminado el último.

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En los usuarios de nicotina que han llegado a ser físicamente dependientes el


síndrome de abstinencia se genera unas pocas horas después de la última dosis:
deseos de fumar, irritabilidad, ansiedad, hambre, dicultad para concentrarse,
incremento del apetito, reducción del ritmo cardíaco y algunas veces dolor de
cabeza y disturbios del sueño. La ansiedad alcanza su pico a las 24 horas y
a partir de allí declina a través de varias semanas, aunque puede ser evocada
por estímulos asociados con los hábitos previos de fumar. Los productos de
tabaco contienen muchos otros componentes, además de la nicotina y su uso
sostenido puede ocasionar cáncer en los pulmones, la cabeza o la garganta,
enfermedad cardíaca, bronquitis crónica, ensema y otros desórdenes físicos
(WHO, 1994). Sobre tales posibles consecuencias parece haber más o menos
conocimiento dentro de las comunidades, como lo sugieren los términos de
cáncer y canceroso con los que algunos se reeren al cigarrillo
Como sinónimos de cigarrillo fueron reportados también los vocablos ábaco
y sisas (¿zizas?), acerca de cuya etimología no se tiene comentario.
2.4. CAFEÍNA
La cafeína es una xantina, es un estimulante suave del sistema nervioso
central, vasodilatador y diurético. Se encuentra en muchas medicinas y en
alimentos y bebidas de consumo cotidiano y plena aceptación social como el
café, chocolate, cola y otras bebidas ligeras y té, en algunos casos con otras
xantinas como la teofilina o la teobromina (WHO, 1994).
En el caso del café la situación es tal que, además de ser hoy el segundo
producto de exportación, el tinto, la infusión preparada con su grano, es
considerada la bebida nacional y el ícono de la marca “Café de Colombia”
es uno de los emblemas comerciales de mayor recordación en el globo.
Adicionalmente, debe recordarse que la región que constituye el marco del
presente documento (el Eje Cafetero) debe su nombre al mismo producto.
Tales situaciones hacen que, a pesar de reconocerse los efectos negativos para
la salud que su abuso puede ocasionar, a nadie se le ocurre considerarla dentro
del grupo de las “drogas”, como tampoco se hace en este estudio.
En forma relativamente reciente se han venido comercializando libremente
en el país y en la región, con el respaldo de publicidad llamativa y dirigida en

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Drogas psicoactivas reportadas como consumidas en el Eje Cafetero y léxico asociado a ellas...

especial al mercado juvenil, las llamadas bebidas energizantes, cuyo principal


componente activo parece ser la cafeína y sobre las cuales poco o nada se
comenta.
Sobredosis agudas o crónicas (ingestas diarias de 500 mg. o más de cafeína),
con resultados tóxicos, se denominan cafeinismo. Los síntomas incluyen
agitación, insomnio, rubor facial, espasmos musculares, taquicardia,
desórdenes gastrointestinales, incluyendo dolor abdominal, apresuramiento o
confusión de pensamiento y habla, y en ocasiones exacerbación de ansiedad,
estados de pánico, depresión o esquizofrenia preexistentes (WHO, 1994).
A diferencia de los anteriores (cafeína, nicotina), otros estimulantes son
objeto de control y prohibición, aunque algunos de ellos están disponibles
en el comercio para uso médico, pues dosis terapéuticas pueden producir
optimismo, alegría, insomnio prolongado (para tratamientos de narcolepsia)
y pérdida de apetito (en tratamientos de obesidad). A ellos se hará referencia
a continuación.
2.5. MARIHUANA
Como se vio atrás, la marihuana ocupa, de acuerdo al sondeo de percepciones,
el tercer lugar en importancia entre las sustancias psicoactivas acerca de las
cuales se indagó. La marihuana es una mezcla de la parte superior (hojas, tallo,
semillas y ores), seca y desmenuzada, de la planta de cáñamo o Cannabis
sativa (denominación botánica). La amplitud del léxico de uso regional
relacionado con la sustancia, apenas comparable al referido al alcohol, es un
indicador de su importancia.
El cáñamo, que crece silvestre en la mayoría de las regiones tropicales y
templadas del mundo, era cultivado por la fortaleza de la bra de su tallo, antes
del advenimiento de las bras sintéticas. La Cannabis contiene compuestos
químicos llamados cannabinoides que son exclusivos de la planta, uno de
ellos es el delta-9-tetrahidrocannabinol (THC) y se le responsabiliza de la
mayoría de sus efectos psicoactivos. Algunos cannabinoides, incluido el THC
sintético (dronabinol), son usados terapéuticamente para tratar el glaucoma, así
como la náusea y vómito causados por los tratamientos del cáncer mediante

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quimioterapia y para estimular el apetito en pacientes con SIDA. El término


“marihuana” procede de México y fue originalmente aplicado a un tabaco
barato (marijuana), ocasionalmente mezclado con Cannabis y ha llegado a
ser de uso general para denominar la Cannabis en muchos países. El término
hashish, en una época usado con el mismo propósito en áreas del Mediterráneo
Oriental, es ahora aplicado a la resina o aceite de Cannabis (WHO, 1994: 22),
cuyo consumo no se reportó en los formularios aplicados en la región, como
tampoco ocurrió con la utilización del nombre, aunque los términos greda y
pegajoso, que sugieren viscosidad, inducen a pensar en el consumo de la resina
mencionada. El origen vegetal de la sustancia explicaría otras denominaciones:
hierba (yerba), verde, cilantro, leño, mata, naturaleza, tamal (quizás en
alusión a la hoja donde se envuelve este alimento).

Marihuana, mariguana, bareto(a), cacho, cachis, cannabis, hierba/yerba,


criollo(a), vigo, moño, pata, pase, porro, marimba, verde, ganya, maracachafa,
helado/helado de la risa, chirosa/ chirusa, cordillera, vitamina, yoi/yoin,
yoes, varillo, varillito, cigarrillo (de campeones, ecológico, natural), varita,
bungue/bunquer/burkey, canela, canillo, chester, chocolatoso, cilantro, cohete,
cripy, emporro, gallina, greda, leño, mariajuana, mata, medicina, mochito,
naturaleza, pernil, pisca, plon, pollo, pringonazo, ranger, roleto, ruma, tamal,
toque, yesca, yunque, canillo, pegajoso, dosis, viento rápido, rey, trespisos,
chuzca, armao, totacito, chicharra, cuero, pegao, mary jay, doble piso.
Recuadro 4. Términos usados en el Eje Cafetero para designar la marihuana.

La Cannabis es usualmente fumada, aunque se tuvo noticia durante el trabajo


de campo de su utilización en alimentos preparados como tortas, en ocasiones
comercializados en establecimientos educativos. Sus efectos se sienten en minutos
y alcanzan su pico entre los 10 y 30 minutos, y pueden persistir por dos o tres
horas y lo sentido a menudo depende de la experiencia y expectativas del usuario,
así como de la actividad de la droga en sí misma. Bajas dosis tienden a inducir
una sensación de bienestar y un estado de relajación y ensueño, que puede estar
acompañado de una agudización de los sentidos de la visión, olfato, gusto y oído,
así como por sutiles alteraciones en la formación y expresión del pensamiento.

300
Drogas psicoactivas reportadas como consumidas en el Eje Cafetero y léxico asociado a ellas...

Consumo o acción de consumir


Verbos: fumar, meter, trabarse, torcerse, cabecearse, cranearse, elevarse, volar, viajar,
biscaniar, soplar (más utilizado respecto al consumo de basuco), turriarse.
Expresiones verbales: darse en la cabeza, darse en la torre, viajar a la luna, montarse en
el video, montarse en la película, meterse los planes, ponerse las chanclas, tomarse el té,
ver estrellitas.
Sustantivos: plones, plincito.
Consumidores
Uso general (descriptivos): marihuana, bareto, baretero, chusquero, marimbero.
Peyorativos: marihuanero, drogadicto, vicioso.
Estados
Sin referencia a grado de intoxicación
Uso general: traba, trabado, torcido, bareto, baretiado, torcido, elevado, calderiado, en
las nubes, ennubado, en el cielo, en la luna, relajado, soyado, montado en el video (o en
la película), pringo, viaje, piolo, enrumbado.
Peyorativos: enmarihuanado, marihuanado.
Sugieren alto grado de intoxicación o experiencias desagradables
Demente, loco, locura, loquita, llevado, perdido, zombi, embobado, pepo (más usado
respecto al consumo de “pepas”), trinado, turra, paniquiado (estado de pánico, paranoia).
Otras expresiones
Amurado (con ansias de consumo).
Pisquiado, pisquiao (con olor a marihuana).
Se la fumó verde (referencia a alguien, generalmente no consumidor, que actúa de
manera inusual).
Fuente: Sondeo SIDEC.
Tabla 6. Términos coleccionados en el Eje Cafetero con respecto al consumo de marihuana, sus consumidores y
los estados generados por ella, 2004.

Dosis más fuertes intensican las reacciones. Los individuos pueden experimentar
rápidas uctuaciones emocionales, fragmentación de los pensamientos con
asociaciones alteradas, así como alteraciones en la percepción de la autoidentidad,
fallas de memoria y falta de atención, a pesar de la ilusión de alta alerta. Dosis
altas pueden ocasionar distorsión de imagen, pérdida de identidad, fantasías y
alucinaciones. Otros signos de intoxicación pueden incluir ansiedad excesiva, recelo
o ideas paranoides en algunos y euforia o apatía en otros, enrojecimiento de los
ojos, incremento del apetito, boca seca y taquicardia. Este estado de intoxicación
puede no ser notorio para el observador. Sin embargo, accidentes de conducción,
ocupacionales o domésticos pueden resultar de una distorsión de las relaciones

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de espacio y tiempo (sensación de lento transcurrir) y de coordinación


inadecuada (WHO, 1994).
Algunas de las denominaciones de la sustancia encontradas en la región
sugieren relación con los efectos descritos o con la rapidez con la que se
presentan y evolución de los síntomas: helado de la risa, medicina, vitamina,
pringosazo, viento rápido y trespisos. También sugieren esa relación varios
de los términos empleados para describir la acción de consumir o los estados
alcanzados, como se muestra en la Tabla 6.
En el Eje Cafetero, como en muchas otras partes, la marihuana casi siempre
se consume fumada, en cigarrillos enrollados a mano, en un papel disponible
comercialmente conocido como “cuero”, aunque también son utilizados otros
papeles, dentro de ellos el “de biblia”. Otros de los términos hallados para
identicarla parecen asociarse con tal forma de consumo o con la analogía
de su forma alargada: cigarrillo (de campeones, ecológico, natural), armao
(armado), yesca (de fácil encendido), bareta4 (incluido en el Diccionario de
la Real Academia como sinónimo de mariguana) o bareto, vigo (¿de viga?),
varillo, varillito, varita, cohete.
Dado el olor característico e intenso que genera la combustión de la marihuana,
conocido como pisca (y utilizado, también, para la misma sustancia), hay
quienes realizan preparaciones, con productos naturales o esencias (se tuvo
reporte de chocolate, canela y coco) que lo encubran, a ello hacen referencia
las denominaciones de chocolatoso y canela.
Usados en la región Usados en Estados Unidos
Marihuana Marijuana
Ganya Ganga, gange, ganja, ghana
Cripy Cripple, cryppie, krippy
Yoi, yoin, yoes Joint
Yesca Yesca, yesco, llesca
Fua Fu
Marimba Marimba
Mary Jay Jay
Fuentes: Sondeo SIDEC y UNDCP 2004.
Tabla 7. Términos callejeros semejantes encontrados en la región y en Estados Unidos para referirse a la
marihuana o a un cigarrillo de ella.
4 Vareta se llama en varias partes de Colombia a una pieza de madera larga y delgada, usada en
el armazón de los techos de las viviendas, aunque la ortografía aceptada por la RAE sugiere un
origen distinto.

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Drogas psicoactivas reportadas como consumidas en el Eje Cafetero y léxico asociado a ellas...

2.6.1. BASUCO
La pasta de coca o pasta base es el producto del primer paso en el proceso de
extracción de la cocaína de las hojas de coca, realizado generalmente por los
mismos productores de la hoja; solamente es necesaria la utilización de cemento
o cualquiera otra sal alcalina, gasolina u otro combustible, ácido sulfúrico
o amoníaco. Es de color pardo, sabor amargo y olor fuerte característico y
contiene principalmente alcaloides de coca e impurezas de los componentes
usados durante la producción, lo que le conere una alta toxicidad.
Una fracción de la pasta de coca producida no continúa su proceso hasta la
obtención de la cocaína, sino que es orientada, bajo el nombre de basuco5
(basucao dicen algunos), al mercado interno de consumo, en el cual, buscando
mayores benecios para los tracantes, es mezclada con harinas de diverso
tipo (maíz, plátano, trigo) y polvillo de tiza o ladrillo u otros elementos y
adquiere una presentación de polvo blanco-grisáceo, pardusco o amarillento,
características éstas que explican las denominaciones de ladrillo, cafecito,
raspao/raspón y eventualmente la de cholao (refresco elaborado a partir de
hielo raspado).
El basuco se fuma, mezclado con marihuana o tabaco, en pipa (pipa, pipazo)
o en el mismo cigarrillo utilizado para la obtención de la picadura, forma a
la que se pueden asociar otros nombres: güitoto/huitoto (¿referencia étnica
a los cigarrillos Pielroja?), calillo (variedad de tabaco ya mencionada),
maduro (nombre de un plátano en la región, ¿referencia a su forma o a la
harina con la que la mezclan?), lías (¿relacionado con el verbo liar, envolver
un cigarrillo?).
La sustancia se expende en dosis personales (papeleta), que en número de
100 conforman una bomba. Con la presentación de la papeleta podrían estar
asociados ficho y tamal, que también hace pensar el último en la “revoltura”
de sustancias que constituye el polvo o a la de éste con el tabaco y la
marihuana.
5 Se opta por la grafía basuco, por presumir el vocablo derivado de base (pasta base), más que
una referencia al arma llamada bazuca, que haría alusión a su poder psicoactivo. Vale la pena
comentar que al mercado estadounidense llegó tanto basuco (en español), como bazooca
(ONDCP, 2004).

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Siguiendo las fases del consumo de basuco presentadas por Rodríguez (s.f.),
además de comprender los riesgos del mismo, puede suponerse el origen de
otros de los términos con los que es conocido en la región:
o Euforia: se experimenta a los pocos segundos después de su consumo y
dura de cuatro a cinco minutos. Se caracteriza por excitación placentera,
hiperactividad, hipersexualidad, disminución del sueño y del apetito. A
tal hiperactividad o “acelere” estarían referidos los nombres chumajer,
ferrari, carro y carrazo (darse un carrazo), como a la rapidez o
posibilidad de la “subida” lo estarían escalera, angelita y anyelito.
o Disforia: se presenta cuando termina la euforia anterior y se
maniesta por angustia marcada (susto), deseo de volver a fumar
(estar amurado, se denomina tal ansiedad), tristeza (tristito), apatía,
agresividad, indiferencia sexual. Para superar esas vivencias negativas y
desagradables, el consumidor vuelve a sumergirse en el consumo y crea
un círculo vicioso de ansiedad y excitación, que en forma progresiva
lo convierte en adicto.
o Alucinosis: aparece si se continúa en el consumo o por dosis altas y
puede durar horas o días. Se caracteriza por alucinaciones visuales,
olfatorias, táctiles o auditivas, tendencia a huir, agresividad, indiferencia
sexual.
o Psicosis: este efecto puede durar semanas, pero disminuye o
desaparece cuando se suspende la droga por un tiempo. Se maniesta
por alucinaciones, ilusiones paranoides, ideas de persecución,
hipervigilancia, insomnio, agresividad, intento de suicidio, homicidio
y muerte (ponelocos, viaje sin regreso).
Otros vocablos usados para nombrar el basuco en la región y sobre cuya
etimología quedan pendientes los comentarios son: mono, surrungo, suso, coso
(común hace unas décadas para designar el cigarrillo de marihuana), gallina,
tarro y bichas.
El deterioro físico de quien regularmente consume basuco es evidente:
problemas en la piel, poca resistencia a las enfermedades, tos crónica, crisis

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Drogas psicoactivas reportadas como consumidas en el Eje Cafetero y léxico asociado a ellas...

asmática, complicaciones intestinales, problemas hepáticos... Otros efectos


físicos provocados por el consumo de basuco son la pérdida de peso y la
caída de los dientes por la acumulación de sulfuro de plomo en las encías. La
persona adicta al basuco cambia drásticamente su comportamiento, disminuye
su capacidad de concentración y memoria; sus estados de ánimo se modican
bruscamente; hay fatalismo ante cualquier problema y un sentimiento obsesivo
de culpa. El deseo del consumo lleva al adicto a mentir, endeudarse o a cometer
delitos, con un desinterés progresivo por todo lo que le rodea (Rodríguez, s.f.).

2.6.2. COCAÍNA
La pasta de coca generalmente es adquirida a los campesinos para su posterior
transformación en los complejos de cristalización (laboratorios) a base de
cocaína y luego a cocaína clorhidrato. Algunos de tales complejos se localizan
en el Eje Cafetero, según se desprende de los datos, que se muestran más
adelante, de las entidades de control sobre la destrucción de instalaciones de
tal tipo, y en ellos se procesa no sólo pasta producida en la misma región, sino
también y quizás principalmente, la adquirida en otras zonas del país.
La cocaína fue usada comúnmente como anestésico local en cirugías
odontológicas, oftalmológicas y otorrinolaringológicas, a causa de su fuerte
acción vaso constrictora, que ayuda a reducir el sangrado local. A principios
del siglo XX se convirtió en el ingrediente principal de la mayoría de los
tónicos y elíxires que se crearon para tratar numerosas enfermedades y que se
promocionaban como panaceas.
La cocaína, más conocida en la calle como coca o perico/a (hay quienes dicen
que porque vuelve a las personas tan locuaces como el animalito aludido, al
que también puede referirse quico o kico), es un poderoso estimulante del
sistema nervioso central, usado sin prescripción médica para producir euforia
o insomnio (milagrosa); su uso repetido genera dependencia y convierte al
usuario en “periquero”.
La cocaína usualmente se vende como un polvo blanco, presentación a la que se
asocian muchos de los nombres coleccionados: polvo, polvozo, polvazo, polvito,

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polvo blanco, polvo mágico, polvo de ángel, talco, blanca(o), blanquita y


nieve. Con frecuencia es adulterada (mezclao) con azúcares (lactosa), harinas
(harina, mandarina, maizena), anestésicos locales como la procaína o con
otros estimulantes como las anfetaminas (¿químico?).
El polvo es sorbido por la nariz, de donde debe derivarse huele (hueler, la
acción, y huelengue o güelillo, el consumidor) y quizás fua (¿onomatopeya del
sonido producido al sorber?). Para ello es usual extender la sustancia en líneas,
sobre una supercie plana, desde donde se aspira (pase), pudiéndose ayudar
en el procedimiento de colocación de la sustancia con una navaja, cucharilla
(palada) o elemento semejante. Otro procedimiento común es verter la cantidad
a consumir sobre el dorso de la mano, que se lleva a la nariz.

Los efectos aparecen en un lapso de 1 a 3 minutos y duran alrededor de 30


minutos, durante los cuales el consumidor está periqueado o arañado. Algunos
consumidores gustan de inyectársela por vía intravenosa, según se informó en cerca
del 2% de los formularios del SIDEC; también puede ser ingerida con alcohol,
a cuyo consumo está muy asociada, inclusive como mecanismo de “aguante”
(supuestamente contrarresta sus efectos), propósito con el que, en trabajo anterior, se
encontró que era suministrada por una banda de proxenetas en Manizales, buscando
que las colegialas de su red pudieran consumir alcohol con sus clientes y retornar
a sus hogares sin los síntomas delatores (Mejía y Martínez, 2002).
La administración repetida de cocaína es típicamente seguida de un estado
donde la euforia da paso a la aprehensión, profunda depresión, somnolencia
e inercia. Reacciones tóxicas agudas ocurren tanto en experimentadores
como en abusadores crónicos. Ellas incluyen delirios de pánico, hiperpirexia,
hipertensión, arritmias cardíacas, infarto del miocardio, colapso cardiovascular,
ataques, estados epilépticos y muerte. Secuelas neuropsiquiátricas también
posibles son: síndrome sicótico con sentimientos paranoides, alucinaciones
auditivas y visuales e ideas obsesivas (WHO, 1994).
La posibilidad de un consumo discreto, ante la ausencia de olores u otras
circunstancias delatoras, que sí tiene, por ejemplo, la marihuana, hacen que
la cocaína (y otras sustancias) puedan consumirse prácticamente en cualquier

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parte, a pesar de su carácter prohibido. De hecho, se reportaron consumos en


los colegios y en los propios salones de clase, así como en sitios de recreo,
discotecas, estas y escenarios deportivos, siendo utilizada en estos últimos,
inclusive, para dopaje.
Otros vocablos aplicados a la cocaína en la región, según la información
suministrada en los formularios del SIDEC, son: joaco, juaco, joaquín, pérez
o joaquín pérez, juana, bicha, suzuki, tita, viaje, yesca, viola, hueso.

2.6.3. CRACK
El crack es una cocaína alcaloidal, de apariencia amorfa, color blanco o beige
y consistencia dura (roca, roquitas, piedra), obtenida a partir del clorhidrato de
cocaína, razón por la cual algunos la consideran un devolverse en el proceso
(patrasiado6). Su nombre proviene del sonido de craqueo que produce al
calentarse.
Para los consumidores tiene la ventaja de ser consumida en forma de vapores
que se desprenden al calentarse, lo cual garantiza una mayor absorción, con
efectos más intensos que la cocaína convencional y acción casi inmediata
(en un lapso de 4 a 10 segundos), con un repentino e intenso “acelere” y un
sentimiento, igualmente intenso, de euforia o de desaparición de la ansiedad,
junto con sentimientos exagerados de conanza y autoestima. Tras el placer,
que dura entre 2 y 20 minutos, llega un “bajón” brusco, que se convierte en
disforia e impulsa al usuario a la repetición del consumo, buscando retornar al
“alto”, situación que hace al crack, como al basuco, especialmente adictivo.
Entre los efectos no buscados se presentan fallas de juicio que hacen al
usuario propenso a ejecutar actividades irresponsables, ilegales o peligrosas,
sin considerar las consecuencias; el habla se torna acelerada y puede llegar
a ser deshilvanada e incoherente. El uso regular del crack puede provocar
alucinaciones y entrañar comportamientos violentos, episodios paranoides e
ideación suicida: su uso continuo desencadena efectos rápidos sobre el cerebro,
graves alteraciones de las vías respiratorias y paradas respiratorias y/o cardíacas,
pudiendo entrañar la muerte (Pascual, 2001).
6 Termino divulgado en artículo de Jonathan Ott. Revista Cultura y Droga No 12.

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Por no haberse preguntado de manera especíca respecto al crack dentro de los


grandes estudios sobre uso de SPA que se han hecho en Colombia, en los cuales
se supone que aparece como parte del consumo de cocaína, no se dispone de
mediciones al respecto. En la indagación del SIDEC sí fue incluido y como se
dijo atrás, 12% de los grupos que respondieron el formulario armaron conocer
sobre su presencia en las comunidades analizadas.

3. OPIO, OPIOIDES Y OPIÁCEOS

El opio es el jugo o látex extraído, mediante una incisión poco profunda, de las
cápsulas del fruto de la adormidera, de la familia de las papaveráceas, conocida
entre nosotros como amapola. Al desecarlo (estado en el cual puede fumarse),
se da inicio a un proceso donde se pueden extraer los más de 20 alcaloides
activos que contiene, entre los que destacan: morna (de Morfeo, dios del
sueño en la mitología griega), codeína, noscapina, papaverina y tebaína. A
partir de la morna base (que contiene codeína) o del clorhidrato de morna,
se produce la heroína base, de la cual se obtienen varios productos, siendo los
más notorios la heroína marrón y la blanca (Álvarez y Farré, 2005).

Municipio Hectáreas
Pácora 1
Salamina 4
Marulanda 2
Samaná 1
Total 8
Fuente: Policía Nacional DIRAN
Tabla 9. Cultivos de amapola detectados en el Eje Cafetero, por municipio, 2002.

Ocialmente, apenas se ha informado sobre la existencia de 8 hectáreas de


amapola en el Eje Cafetero (erradicadas posteriormente), detectadas en noviembre
del año 2002 en 4 municipios del departamento de Caldas (Tabla 9).
Aunque muchas veces se utilizan de forma intercambiable, los términos opioide
y opiáceo tienen signicados distintos. Así, en el término opioide se incluye a

310
Drogas psicoactivas reportadas como consumidas en el Eje Cafetero y léxico asociado a ellas...

cualquier sustancia endógena o exógena que presenta anidad con los receptores
opioides (que se encuentran en el cerebro, la médula espinal y otras partes del
cuerpo), es decir, que se une a ellos de forma especíca. El término opiáceo se
reere a las sustancias obtenidas del opio. La palabra narcótico proviene del
griego narkos y signica adormecimiento o torpeza y aunque se utilizó para
denominar a los opiáceos, está más extendido su empleo en el ámbito policial
y jurídico para referirse a las drogas de abuso, por lo que no parece adecuado
utilizarla (Álvarez y Farré, 2005: 23).
En contraste con los productos derivados del opio, los opioides sintéticos son
producidos enteramente en laboratorio, algunos con el propósito especíco
de alimentar el mercado de abuso de drogas y otros con nes eminentemente
médicos, como en el caso de los fármacos que se han desarrollado con las
propiedades analgésicas de la morna, pero sin los consecuentes peligros de
tolerancia y dependencia (http://www.dea.gov/concern/concern.htm).
Durante el trabajo del SIDEC se conoció del consumo no terapéutico de drogas
inyectadas en apenas cerca del 8% de los formularios del SIDEC, la mayoría
de los casos referidos a la heroína, aunque también fueron mencionadas la
morfina, el ácido (¿LSD?) y la xilocaína (lidocaína), anestésico local sobre
cuya razón de uso no se encuentra aparente explicación, por no tener efectos
psicoactivos. La heroína usada se presume de la variedad blanca, que es la
producida en el país y es la apta para usarse por vía intravenosa, dada su
mayor solubilidad, respecto a la marrón.
La heroína es 5 veces más potente que la morfina y sus efectos, que
aparecen más rápidamente, se describen como los de un síndrome psíquico
caracterizado por euforia, sensación de tranquilidad y aumento de la energía
vital, supresión del hambre y las preocupaciones, estado placentero cercano
al sueño, analgesia y eliminación de los componentes emocionales del dolor,
apatía e indiferencia y distanciamiento de la realidad ambiental, disminución
de la actividad física, dificultad para la concentración, cierto hedonismo y
labilidad emocional (Osorio, 2006).
Uno de los más significativos efectos del uso de la heroína es la adicción.
Una vez que ocurre la tolerancia, llegan a ser necesarias dosis más altas

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para alcanzar los efectos deseados y se desarrolla dependencia física.


El uso crónico puede causar colapso de venas, infecciones cardíacas,
enfermedad del hígado, complicaciones pulmonares y varios tipos de
neumonía. Puede causar depresión del sistema nervioso central, confusión
mental y reducción del ritmo respiratorio y respiración poco profunda,
convulsiones, y hasta la muerte en casos de sobredosis (ONDCP, 2003).
Los consumos inyectados, además de los riesgos propios de las mismas
sustancias, conllevan el peligro adicional de contraer VIH, hepatitis A
y C y otros virus, principalmente por el intercambio de jeringas y agujas.
Afortunadamente, la difusión de tales prácticas en la región es baja, como
lo sugieren el nivel de conocimiento encontrado y referido atrás y la baja
prevalencia de uso de la heroína, idea que es reforzada por la escasez de
términos encontrada para referirse a las sustancias objeto de ellas: mientras
respecto a la heroína apenas fueron informados, con muy baja frecuencia, los
nombres de el polvo y H (hache), para la morfina no hubo reporte alguno.

4. INHALABLES: “PEGA” Y “POPPER”

Los inhalables son un grupo de diversas sustancias, que incluye solventes


volátiles, gases y nitritos, que son inhalados para producir efectos intoxicantes
similares al alcohol. Estas sustancias se encuentran en productos de uso
doméstico o industrial como pegantes, combustibles, productos de limpieza
y pinturas. Su accesibilidad, facilidad de transporte y ocultación, bajo costo y
estatus legal, hacen de ellas sustancias de frecuente abuso entre niños y niñas,
de hecho, en el Eje Cafetero, al igual que en otras partes del país, su consumo
tiende a asociarse con los niños de la calle.
Aunque se ha conocido el uso de gasolina como inhalable, la sustancia más
difundida, desde varios años atrás en la región, es el pegante, conocido también
como pega, pegado y cemento, o por algunos de sus nombres comerciales
más comunes: solución amarilla, sacol y bóxer, de donde se han derivado los
términos aplicados a los usuarios o a quienes están bajo su efecto, de pegatero,
pegatudo, pego y ensacolado. También apareció, con cierta frecuencia, el
término de gale, que parece estar asociado a la galería, el deprimido sector de

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Drogas psicoactivas reportadas como consumidas en el Eje Cafetero y léxico asociado a ellas...

Pereira, ya erradicado, que era centro de la distribución y consumo del pegante


en “dosis” empacadas en bolsas plásticas.
Recientemente se ha observado el consumo del “popper”, al que algún medio de
comunicación ha llamado “el bóxer de los niños ricos” (El Tiempo, noviembre 19
de 2005), por tratarse de una sustancia de mayor costo y de uso entre población
de estrato social superior al de la usuaria del pegante. Su componente activo es
el amil nitrito y se arma que debe su nombre al sonido (“pop”) producido al
romper las ampollas de vidrio con el vasodilatador que lo contenía y a partir
del cual se inició su uso. Dentro del trabajo de campo, particularmente en la
aplicación de los formularios de conocimiento y percepción, se supo del uso
de la sustancia, a pesar de que no se preguntaba, como no se ha hecho en los
estudios nacionales, especícamente sobre él; se informó de su presentación
en frascos de vidrio y envases spray.
El diario La Patria de Manizales ha llamado ya la atención del uso creciente
en esa ciudad: …en la calle abunda el bazuco y también se cuentan el éxtasis
o los poppers que son otro tipo de alucinógenos y sobre los cuales este Diario
ya ha hecho publicaciones denunciando que son comunes en las sitios in de
rumba (Álvaro Segura López, La Patria, 14 de mayo de 2006).
La inhalación (oler, hueler, soplar, chupar, aspirar, meter) se hace
directamente desde el envase abierto que lo contiene o mediante el uso de un
trapo que se empapa en la sustancia. Alternativamente, el recipiente abierto
o el trapo empapado pueden ser colocados en una bolsa donde los vapores
puedan concentrarse antes de ser inhalados. En apariencia, la forma más usual
de uso de la chupa (otro nombre con el que se conoce el mismo pegante), es la
inhalación desde la misma bolsa plástica en la cual los expendedores preparan
las dosis para su distribución.
Los inhalables deprimen el sistema nervioso central, produciendo reducción del
ritmo respiratorio y de la presión sanguínea. Los usuarios reportan distorsión
en la percepción del tiempo y el espacio, lo que explica algunos de los términos
relacionados con su consumo que se coleccionaron durante el trabajo, varios
de los cuales, se aplican, también, con respecto al de otras sustancias: trabado,
sollado, estar en su propio mundo, ir al cielo, elevarse al cielo, estar en las

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nubes, viajar, buena aspiración.


Los efectos inmediatos son: mareo, somnolencia, pérdida del equilibrio,
descoordinación al moverse, apariencia de estar borracho, temblores
nos, abertura de las piernas al caminar, alteración de la memoria, falta de
concentración, distracción fácil, lentitud de movimientos, el lenguaje se torna
lento y entrecortado e incoherente. Puede seguir un estado de excitación
(eufórico, emocionarse), tensión muscular, aprensión, agitación, fácil
irritabilidad, cambios en la presión arterial y ritmo cardiaco, así como nausea,
vómito y pérdida del apetito, variaciones éstas con las que seguramente está
relacionada la expresión de el sube y baja, con la que algunos informantes
se rerieron al consumo de pegante. Se presentan alteraciones de conducta
y personalidad, puede haber enojo y escalar en la violencia física y/o verbal
(volverse loco, estar loco).
Llaman la atención las denominaciones encontradas de galocha para el pegante,
engalocharse para su inhalación y engalochado con la que se hace referencia
a quien está bajo los efectos de él, por su coincidencia con el adjetivo castizo,
pero no usado en la región, galocho(a), denido por el Diccionario de la Real
Academia, en lo que parece ser la acepción que motiva su uso en el caso
considerado, como “de mala vida”, cuando se aplica a una persona, o dejado,
desdichado, abatido, cuando se usa coloquialmente.
El empleo repetido o crónico deja daño permanente en el organismo: temblores,
descoordinación, mal equilibrio, reducción de la memoria e inteligencia, estados
de depresión o psicosis, infartos cerebrales, trastornos del lenguaje, epilepsia,
perturbaciones de la sensibilidad y movimiento en las extremidades, daño de
hígado y riñones, leucemia, bronquitis crónica, ceguera, sordera, daño cerebral
permanente, problemas respiratorios crónicos (http://www.inhalants.org).

5. ÉXTASIS
Las metanfetaminas, de las cuales hace parte el éxtasis(metilendioximetanfetamina
o MDMA) , fueron empleadas inicialmente con fines terapéuticos, en
tratamientos de control de peso, narcolepsia y depresión. Hoy, como drogas de
abuso, parecen tener un empleo creciente, incluso en la región, según la poca

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Drogas psicoactivas reportadas como consumidas en el Eje Cafetero y léxico asociado a ellas...

información relacionada con su consumo y las incautaciones de la sustancia


(que se verán más adelante).
Su capacidad para reducir las inhibiciones, promover euforia, sentimientos
de cercanía y empatía e incrementar la sensualidad han contribuido a su
popularidad como “droga de esta” por los adolescentes y los adultos jóvenes
que frecuentan las estas rave o tecno, supuestamente, según las percepciones
declaradas en el sondeo del SIDEC, con mayor extensión entre las mujeres.
Como denominaciones de la sustancia en la región se encontraron las siguientes:
pepa, tacha, medicamento, dulce, bola y goloso.
Los efectos subjetivos incluyen: euforia, incremento de la energía, motivación
sensual (sexual), “necesidad” de ser tocado (abrazado por ejemplo) y necesidad
de estimulación, También mejora los sentidos con algunos cambios en
percepción y mejoramiento de las sensaciones táctiles (DEA, 2004). Entre otros
efectos orgánicos básicos se tienen: taquicardia, hipertensión, broncodilatación,
insomnio, aumento del estado de alerta (Gómez, s.f.).
El abuso del MDMA puede causar daño físico y psicológico. Los efectos
psicológicos asociados incluyen confusión, ansiedad, depresión y paranoia. Estos
efectos pueden durar semanas después de la ingestión de la droga. Altas dosis
pueden interferir con la capacidad de regulación de la temperatura corporal, lo
que puede conducir a hipertermia y daño renal, hepático y falla cardiovascular.
Efectos adicionales del abuso son: temblores, apretado involuntario de los dientes,
calambres musculares y visión borrosa (DEA, 2004).
Se produce en pastillas hasta con el 95% de pureza, pero en Colombia lo
distribuyen al consumidor en concentraciones de 40-50% cortado con otras
metanfetaminas o sustancias activas del tipo efredina o cafeína y excipientes
como lactosa, glucosa, almidón, manitol, sorbitol, talco, sacarosa, sulfato de
magnesia, etc.; sin embargo, no es raro encontrar droga que venden como
éxtasis elaborada con benzodiazepinas (rohipnol o ativan) o diferentes
sustancias totalmente ajenas a las metanfetaminas (Gómez, s.f.).
Las pastillas, que pueden ser de diferentes colores, reciben nombres particulares
definidos, casi siempre, por la imagen que sobre ellas tienen generalmente

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grabadas, como marca de fábrica; entre las encontradas en la región están:


picachu, play boy, mickey mouse, carita feliz y superman.

6. “PEPAS”

Los fármacos de abuso presentados bajo la forma de pastillas, diferentes


al éxtasis (aunque a veces éste también) tienden a ser más conocidos en la
región y en otras partes, por el común de la gente, como “pepas”, de donde
se desprenden pepero (usuario), empepado (persona bajo los efectos de ellas)
y pepo (aplicada tanto al usuario, como al efecto, estar pepo). No obstante,
también reciben otros nombres, especialmente por parte de sus usuarios,
entre los cuales están: piola, cuesca(o), pepa, relajante, pata, patica, fruta,
proveedor y pela. En poblaciones especiales, por ejemplo la de niños(as) con
antecedentes de explotación sexual o en condición de riesgo en Pereira y La
Virginia, se han medido prevalencias tan altas como 21% en la vida, 16% en
el último año y 8% en el último mes (Mejía, 2006: 45).
Comprenden un conjunto amplio y diverso de sustancias, en muchos casos ni siquiera
identicadas por el consumidor, sobre todo el ocasional y menos por la comunidad.
Adicionalmente, la falsicación y el engaño de la que tracantes hacen víctimas a sus
clientes, conduce a que, la más de las veces, hasta los usuarios consuetudinarios no
tengan certeza sobre lo que ingieren. Los identicados en el trabajo por ser motivo
de uso no terapéutico fueron las benzodiazepinas y la metacualona, a los cuales se
hace referencia a continuación.

7. “TRANQUILIZANTES MENORES” (BENZODIAZEPINAS)


Las benzodiazepinas, mal llamadas “tranquilizantes menores”, son drogas
sintéticas producidas con fines terapéuticos pero frecuentemente usadas sin
prescripción médica, en muchas ocasiones con abuso (por lo que una treintena
de ellas es objeto de control), dada su capacidad para reducir la ansiedad
y producir sueño, lo cual no hacen a través de la depresión del sistema
nervioso central, sino actuando en el cerebro sobre el principal inhibidor de la
neurotransmisión (GABA), potencializando su acción (WHO, 1994: 19).

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Drogas psicoactivas reportadas como consumidas en el Eje Cafetero y léxico asociado a ellas...

Las benzodiazepinas identificadas en el Eje Cafetero como de mayor uso


no terapéutico son: diazepam (Valium), lorazepam (Ativan), flunitrazepam
(Rohipnol), clonazepam (Rivotril), las dos últimas conocidas también como
Roche, nombre del laboratorio que las fabrica.
Según el contenido de uno de los formularios del sondeo SIDEC, por lo menos
una de tales drogas es ingerida con alcohol: “…hay una pepa, la roche, que
se toma con alcohol, se escucha frecuentemente que se la toman con cerveza,
expresan que produce alegría y el efecto dura más cuando se tome con licor,
sienten que se enloquecen, disfrutan más la rumba”. El efecto descrito es
coincidente con lo manifestado por el laboratorio fabricante, cuando éste dice,
en su sitio web, que “el uso concurrente de RIVOTRIL y otras medicaciones
de acción central puede producir potenciación mutua de efectos. Esto se
cumple especialmente en presencia del alcohol”, lo cual podría generar “los
síntomas de sobredosis o intoxicación (que) varían mucho de una persona a
otra, según la edad, el peso corporal y la respuesta individual. Ellas van desde
cansancio y cefaleas leves hasta ataxia, somnolencia y estupor, y finalmente
coma con depresión respiratoria”.
El consumo de benzodiazepinas puede producir dependencia. Este riesgo es
mayor con el uso prolongado, las dosis altas y en los pacientes predispuestos,
a saber, con antecedentes de alcoholismo, abuso de fármacos, trastornos
graves de la personalidad u otro tipo de trastornos psiquiátricos. En general
debe evitarse la suspensión abrupta para prevenir los síntomas de abstinencia.
Se recomienda una suspensión gradual del tratamiento, reduciendo
escalonadamente la dosis (Rosestein, 1993; Productos Roche, Q.F.S.A.).

7.1. MÁNDRAX (metacualona)

La metacualona fue desarrollada en 1955 en la India, como parte de un


programa en busca de drogas antimaláricas; es un derivado de la quinazolina
(o quinazolona). Se considera, también un tranquilizante, pero de naturaleza y
efectos farmacológicos diversos a los de las benzodiazepinas acabadas de ver.
Dados sus efectos de sedante hipnótico con un patrón similar a barbitúricos de

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acción rápida, como el fenobarbital, fue usada como un sustituto seguro de éstos,
aunque no es químicamente similar con ellos. La experiencia demostró, sin
embargo, que su propensión adictiva y la severidad de los síntomas del síndrome
de supresión eran semejantes a los de los barbitúricos; tales situaciones y su
abuso entre los jóvenes condujeron a que en Estados Unidos entrara a la lista
de sustancias controladas y a que en países como Hungría, Francia y Polonia se
prohibiera su fabricación desde la década de los 80 (Ionescu-Pioggia, 1988).
La metacualona, conocida en la región como mándrax, una marca de fábrica,
se consume por vía oral, con una baja prevalencia, aunque en otras partes se
hace, también, por inyección intravenosa. Los efectos buscados por el usuario
son sensación de descanso, relajación muscular, euforia y desinhibición
afectiva, pero puede delirar y tener alucinaciones cuando es asociado al
alcohol. A corto plazo, puede generar falta de coordinación motora, alteración
de las percepciones subjetivas, estado depresivo o al contrario, un estado
de nerviosismo extremo. A medio y largo plazo puede ocasionar temblores,
episodios amnésicos, degradación intelectual, trastornos de personalidad.
La metacualona provoca una dependencia física y psíquica. Una ingestión
altamente tóxica conduce a un estado de coma agitado y vómitos (http://www.
secffaa.mil.do/drogas/hipnoticos.htm).

8. OTRAS SUSTANCIAS PSICOACTIVAS REPORTADAS

Niveles de consumo semejantes, o aun superiores, a los de la metacualona, pero


igualmente bajos, aunque superiores a los nacionales, han sido encontradas en
la región en otras tres sustancias psicoactivas: hongos, ácidos y anfetaminas,
la última de las cuales no apareció reportada en el sondeo del SIDEC.
Los vacíos respecto a las reales sustancias consumidas se acentúan, al no
saber los tipos especícos efectivamente consumidos de cada una de las tres
sustancias. El ácido, por ejemplo, se supone LSD, poderoso alucinógeno
sintético, pero no hay ninguna conrmación sobre ello, razón por la cual no
se hacen anotaciones en torno a él, a pesar de la literatura disponible.
Con relación a los hongos, el SIDEC encontró las denominaciones de setas

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y sombrillas, que dan cuenta de la imagen de su forma, y los términos


aguapanelero y aguapaneleado, referidos al consumidor, haciendo relación
al acompañamiento de la ingestión que algunos hacen con la bebida regional
denominada aguapanela.
De manera marginal, se tuvo también conocimiento acerca del uso de la
burundanga o amansalocos, proveniente del fruto del cacao sabanero o
borrachero que, en asocio de algún tranquilizante, parece ser empleada como
medio para colocar en condiciones de indefensión a posibles víctimas de
robos o delitos sexuales, haciendo parte de lo que hoy, por tal motivo, tiende
a llamarse drogas predadoras.
Finalmente, vale la pena comentar acerca del reciente y en apariencia
creciente consumo de yagé, pócima medicinal consumida en grupos de
estudiantes universitarios y profesionales, comerciantes, técnicos, amas de
casa, pensionados, sin distingo social o nivel educativo, en algunos casos
en el marco de movimientos de la “nueva era”, como remedio para la salud
y sanación y en otros como experimentación vivencial, usualmente en el
marco ritual de ceremonias dirigidas por chamanes indígenas y que organizan
aprendices blancos o mestizos de ellos. Su emergencia exótica, culturalmente
en la región, hace parte de un fenómeno general urbano en el país y otros
países latinoamericanos como europeos. Este fenómeno ha atraído la atención
de investigadores del grupo de investigación Cultura y Droga (Ronderos V.
Jorge 2000, 2002, 2003). En el marco de este estudio se pudo constatar la
presencia de este fenómeno cultural en las ciudades capitales del Eje Cafetero:
Manizales, Armenia y Pereira, y otras cabeceras municipales de la región, como
Cartago (Valle del Cauca), Calarcá (Quindío) y Neira, Chinchiná y Palestina
en Caldas.

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DROGA DROGUE  (NARCÓTICO)

ELMER CASTAÑO RAMÍREZ


MARÍA ELENA BERNAL VERA
DROGA DROGUE  (NARCÓTICO)

ELMER CASTAÑO RAMÍREZ


MARÍA ELENA BERNAL VERA
PROFESOR UNIVERSIDAD DE CALDAS
DEPARTAMENTO DE DESARROLLO RURAL
desrural@ucaldas.edu.co

Recibido: 21 de julio de 2006


Aceptado: 16 de agosto de 2006

RESUMEN

Análisis documental desde las perspectivas: histórica, relacional con otras


nociones, cambios evolutivos y de intencionalidades discursivas sobre el
concepto “droga”.

Palabra clave: Concepto droga, narcótico, historia de drogas, nociones de


drogas.

ABSTRACT

DRUG  (NARCOTIC)

Documentary analysis from different perspectives such as: the historical,


relational with other notions, evolutionary changes and speech intentionality
on the concept of “drug”.

Key words: drug concept, narcotic, history of drugs, notions on drugs.

RESUMÉ

Analyse documentaire dans les perspectives: historique, relationnel avec


d’autres notions, changements évolutifs et d’intentionnalité du discours sur
le concept “drogue”.

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Elmer Castaño Ramírez, María Elena Bernal Vera

Mots clef: Concept drogue, narcotique, histoire drogues, notions drogues.

INTRODUCCIÓN

La pregunta de inicio es, ¿a qué sector de la realidad corresponde el concepto


“droga”? ¿Existe sólo en el pensamiento o se encuentra también en la realidad?
¿Es éste un concepto cientíco, o es sólo patrimonio de los medios de publicidad
y los sistemas de represión del Estado? ¿Deberían usarse otros términos en el
ámbito de las ciencias?

Según los nominalistas, los nombres de los objetos individuales (drogas en


plural, tal o cual droga), son los que nos sirven para identicar las cosas que
existen, mientras el universal (“droga”) incluye los conceptos mediante los
cuales lo pensamos. En esta discusión medieval, las cosas reales solo son
expresiones de la esencia y por ello se asumía que solo existía la esencia en las
cosas reales, no obstante, la interpretación del universal se da como signicado,
idea, modelo eterno de lo que se ha producido naturalmente.

Si asumimos el mundo como materia y lenguaje con signicado, en este sentido


el lenguaje se separa del signicado y es allí donde reside el sentido de los
universales como la palabra “droga”, que sólo reside en el lenguaje como
signicado conjunto de las cosas llamadas drogas particulares. De ahí que la
mayoría de los conictos se resolverían si se establece que las mismas palabras
tienen distintos signicados en contextos diferentes.

Los conceptos adquieren signicado en relación con otros conceptos, pero


solo se determinan dentro del discurso del cual hacen parte, esto es lo que
ocurre cuando se trata de discursos con signicados diferentes que entran en
contradicción, donde cada uno pretende tener igual validez.

En esencia, el universal “droga” como concepto, es conocimiento y se convierte


en una forma inteligible que se obtiene mediando la razón y la investigación y,
desde esa perspectiva, adquiere el estatus de objeto para ser estudiado. Aquí,

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Droga drogue  (narcótico)

en este término, se reúnen una cantidad de fenómenos singulares con mayor o


menor amplitud, pero que precisamente son los que le dan la gran capacidad
de abarque al término universal “droga” así utilizado1.

CAMBIOS EN EL CONCEPTO “DROGA” A LO LARGO DE LA HISTORIA

La palabra “droga” tiene su origen en el francés “drogue” que signicaba:


extracto esencial de la naturaleza (en general vegetal) que, introducido en un
organismo vivo, puede modicar una o varias de sus funciones. Danilo Antón2
lo reere como proveniente del francés antiguo “drouge”, del holandés o alemán
que se hablaba entre 1100 y 1500 con la acepción droge-vate o barriles secos,
mercancías secas, haciendo referencia a que todas las medicinas provenían de
hierbas secas. Se vincula con su origen en el griego “ ” (narkoun)
traducido al español como “narcótico” (sustancia para adormecer o sedar) y
al francés como “stupéant” españolizado como “estupefaciente” con similar
acepción (que deja estupefacto, quieto). Todos estos signicados en el uso
publicitario, al incluirle el sentido moral, adquieren el término genérico
utilizado en el inglés “drug”, perdiendo la nitidez farmacológica como inductora
de sueño y sedación.

La otra palabra griega “ ” (farmakon) que se usaba como remedio
y veneno en esa sociedad, se acerca más al concepto de fármaco, término tan
incluyente como el de “drogue” en la acepción francesa, apropiada por los
alemanes como “droge” y llevada al castellano, italiano y portugués como
“droga”.
El concepto droga se asocia desde el siglo XVl con venenos, con narcóticos y
con opiáceos desde 1883, y la palabra “droguería” (lugar donde se expenden

1 Esta discusión se rearma con el documento de TECLA J. A. La teoría del conocimiento


y el problema de los universales en la edad media. Ed. Taller abierto: Méjico. (1990). pp.
94-104.
2 Anton D. El concepto drogas. Desinformación en sociedades consumidoras periféricas.
En: Simposio Colombiano e Internacional Cultura y droga: Una mirada hacia adentro Mayo
4 al 6 de 2006. Universidad de Caldas. pp. 27-28.

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Elmer Castaño Ramírez, María Elena Bernal Vera

drogas, en lugar de botica o farmacia) desde el siglo XlX. En farmacología


botánica se aplica la palabra “droga” como la parte de la planta que se usa.

Otros términos que se relacionan serían:

Remedio: asociado con poción o brebaje reparador de funciones normales o


corrector de disfunciones.

Psicofármaco: unión de dos palabras que relacionan la psiché (de los


griegos, ánima de los latinos, alma en español) con un tratamiento químico
(farmakon).

Psicoactivo (Psychoactive): nombre de origen reciente, que igualmente une


dos palabras que relacionan la psiché con pócimas o mecanismos que inducen
actividad cerebral nueva.
Psicótropo: nominación reciente para la generación de movimiento y tendencia
a la psiché y que ha cambiado hacia cualquiera modicación química de la
conciencia.

Enteógeno: es un vocablo acuñado en 1976 por A. Hofman, J. Ott y C. Ruck3


compuesto de las raíces “en-theos-gen” (que despierta a dios dentro de uno),
y actualmente hace relación a las sustancias ancestralmente utilizadas para
acercarse a los dioses o para despertar la experiencia de la divinidad en mí.

Medicamento: son brebajes, pócimas y bebedizos (actualmente cualquier


sustancia) de uso médico.

Narcoléptico: palabra compuesta que relaciona los narcóticos, arriba


mencionados, con los cambios de estado cerebral.

El uso indiscriminado de los términos, nos acerca a una polisemia internacional


que mezcla, de acuerdo con los intereses, las deniciones, suprimiendo del
3 Hofman A., Ott J. y Ruck C. citados por Fericgla, J. M. El arduo problema de la termino-
logía. En: Revista Cultura y Droga Año 5 No. 5, En-Jun 2000. p. 14.

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Droga drogue  (narcótico)

lenguaje de las ciencias, aquellos sentidos que resultan polémicos en las


perspectivas políticas, económicas, morales o culturales; lujo del que no se
pueden excluir las ciencias sociales.

LA ECOLOGÍA DE LA PALABRA “DROGA”

Las relaciones del la palabra “droga” han evolucionado desde su estado


originario hasta nuestros días, a partir de las conexiones que con ella se quieran
establecer. Las relaciones son múltiples, lo que le otorga complejidad al término
“droga” y por ello es importante caracterizarla de acuerdo con los atributos
que actualmente se le coneren.

Démosle una revisión genérica desde las perspectivas médica, política,


sociológica, policiva, económica, cultural, sin pretensiones de llegar a un tratado
completo pero sí ejemplarizante sobre los accidentes y atributos formales del
término y su importancia modelar como eje de estudio universitario.
Para la medicina: una definición moderna de droga la trae la Enciclopedia
Encarta y la transcribe el Licenciado J. N. Ramírez Z.4, como sustancia con
efectos sobre el sistema nervioso central (psicotropa) que crea adicción,
taquifilaxia (es la necesidad de consumir dosis cada vez mayores para
conseguir los mismos efectos) y cuadros de abstinencia. Como desde
la perspectiva médica, esta definición liga el concepto “droga” con la
psiquiatría, la clasificación puede puntualizarse desde los efectos así:
psicodélicos o deliriógenas (generan delirio), psicotizantes (que producen
psicosis), psicodislépticos (que abren la psique), esquizógenos (que provocan
esquizofrenia), psicomiméticos (que mimetizan la psicosis), psicohórmicos
(que despiertan la psique), psicocímicos (que actúan como fermento
espiritual) y muchos otros que se pueden incluir, todos como psicotropos de
acuerdo con J. M. Fericgla5 apoyado en el psiquiatra J. Obiols. Si se quisiera,
los enteógenos cabrían en esta clasificación. A cada una de esas tipologías

4 Ramírez Z., J. N. Tóxicos. virgo_sapuri@yahoo.com.mx. 22/ 08/ 06/ 4:40 p.m.


5 Fericgla, J. M. Op. cit. P. 11.

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le cabe una subclasificación como la que refiere Fericgla6 desde L. Lewin


para éstos últimos (enteógenos) que se suelen confundir permanentemente
con el término “droga” así: agentes de ilusión sensorial, anodinos del espíritu
(drogas euforizantes), embriagantes, sustancias para dormir, estimulantes,
neurolépticos o depresivos, holorénicos (término acuñado por J. M. Fericgla7
en 1989 para sustancias que favorecen efectos de conciencia global).
Psicoactivas: este término es clasicado desde la perspectiva política en 1953
cuando A. Porot8 las clasica como las adictivas y las que causan hábitos
familiares, para excluir tabaco, café, té, alcohol y somníferos de las sustancias
que deben ser perseguidas. Aquí cabe la clasicación en duras y blandas, casi
con iguales propósitos de políticas prohibicionistas. De la misma manera se
podría incluir la clasicación de drogas teóricas (que no son drogas desde el
punto de vista social) y las farmacodinámicas.

Desde la mira social cabrían aquellas con el estereotipo de “droga” y que pueden
clasicarse de acuerdo con: 1) El “problema social” que se causa con ellas como
motivador, e incluyen las sustancias: fetiche9 (que se consideran amenaza), las
de caracterización individual (por el uso autodestructivo individual en quienes
tienen la compulsión de su uso), las reprensibles (fustigadas socialmente) y las
de oposición social. Desde la perspectiva 2) La “solución social”, igualmente
cabría una clasicación en: adaptógenas (que ayudan a la adaptación social),
los enteógenos (arriba descritos y que son contributivas de los rituales), las
sustancias de opción laboral (que son usadas para la supervivencia en ambientes
hostiles de trabajo y sirven de paliativo frente al abuso laboral), las de aceptación
social y los psicolíticos (término forjado desde los usos clínicos e impulsado
desde 1967 por Leurner como curación mediante psicotropos10).
Al margen de las sustancias y desde la perspectiva de los usuarios cabe la
clasicación propuesta por J. M. Fericgla11 como farmacólos o drogólos
6 Ibíd. P. 13.
7 Ibíd. p. 20
8 Ibíd. p. 8
9 ADEF. Asociación de empleados de farmacia Argentina. Drogas como problema social
www.adef.org.ar/prevencion2.htm. 22 08 06 4:21 p.m.
10 FERICGLA, J. M Op. Cit. p. 11
11 Ibíd. pp. 17-18

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Droga drogue  (narcótico)

(quienes piensan que ninguna sustancia puede cambiar la realidad, sino ampliar
la que existe) y farmacófobos o drogófobos (quienes consideran cualquier
uso de drogas como perversión, corrupción o pecado). Igualmente se puede
incluir otra categoría aquí como son las que trae el mismo autor a partir de E.
Junger: psiconaut
Edas (aplicable a navegantes dentro de la mente mediados por sustancias o no).

En la categoría prohibicionista (policiva) solo caben las: legales (naturales


o socialmente aceptadas en su comercialización o su consumo), ilegales
(socialmente no aceptado su comercio mediante normas) y reprensibles (dignas
de represión por las acciones del consumidor bajo sus efectos).

La visión económica puede incluir varios niveles como: 1. el de los recursos


(toquímicos, etnobotánicos), 2. Desde el sistema impositivo (tributarios,
no contribuyentes), 3. Desde los negocios (rentable, no rentable, no
negocio) 4. Desde la localización (nacional, internacional, local), 5. Desde
el mercado (drogas complementarias, sustitutas, de intercambio, de uso e
instrumentales),

Desde la cultura se pueden incluir codicaciones como: enteógenos, ritualística


(utilizadas en ceremonias de muy diversas culturas formas y momentos),
curativa (aplicadas con usos terapéuticos), holorénicas, socializantes (utilizadas
como facilitadoras de relaciones), liberadoras (contribuyen a descubrir
la inmensidad de la psique), esclavizantes (en general mezclas de drogas
tonicantes o activadoras y otras que embotan y obnubilan el pensamiento12),
lúdicas ( aplicadas en juegos), dignicantes (con usos de acuerdo con clases
sociales), consuetudinarias (de usos habituales), supersticiosas (con aplicaciones
mágicas o fetichistas).

Quedan otros análisis de historia natural de las drogas por hacer, que incluyan
las perspectivas religiosa y ética, química, y otras acciones médicas como
aquellas de acción neural, de acción anestésica, de acción siológica, pero con
lo mostrado hasta aquí se da una dimensión del concepto “droga” como una
12 Ibíd. pp. 19

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unidad conceptual que se construye a partir de proposiciones como átomos


conceptuales conformados en un todo como un contexto teórico, con una gran
fecundidad de análisis, sin tomar en cuenta que, además, el contexto “droga”
dispensa un conjunto de relaciones, funciones, proposiciones, y atributos
necesarios de ser estudiadas en profundidad para dimensionarlas y darles un
sentido teórico y práctico desde la interdisciplinariedad que el caso amerita.

PROCESOS EVOLUTIVOS DEL CONCEPTO “DROGA”


Kramer y Cameron redactaron para la OMS en 1975 el Manual sobre la
dependencia de las drogas. En él sintetizaron una serie de definiciones que
constituyen todavía una referencia obligada a la hora de definir las sustancias
que se consideran “droga”. Dicho manual da la siguiente definición: “droga”
es toda sustancia que, introducida en el organismo vivo, puede modificar una
o más funciones de éste” (p. 13)”. Los propios autores dicen que se trata
de un “concepto intencionadamente amplio” y lo delimitan con otros como
“farmacodependencia”, “droga causante de dependencia”, “tolerancia” y
“síndrome de abstinencia”.

Sin embargo, toda esta terminología no llega a definir qué es droga” y se limita
a establecer un marco de referencia que permite clasificar como “droga” una
serie de sustancias a las que previamente se les ha asignado tal categoría.
La causa de esta dificultad o incapacidad para definir “droga” proviene
precisamente del hecho de que si una sustancia es “droga” o no, se decide
por elementos socioculturales más que por sus características farmacológicas.
Las sustancias clasificadas como “droga” lo son, porque la sociedad las ha
codificado culturalmente como tales, entrando, además, en contacto con ellas
y usándolas precisamente para conseguir los efectos que de ellas se esperan.

La investigación farmacológica y bioquímica, mostrando las propiedades y los


efectos de determinadas sustancias sobre el organismo, puede señalar cuáles
son drogas teóricas o potenciales, pero para que dichas sustancias adquieran
el estatus de drogas han de ser codificadas culturalmente como tales.

Esta visión se ejemplifica con un informe de 1977 dedicado al alcohol, donde la

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Droga drogue  (narcótico)

OMS sustituyó el concepto de alcoholismo por el de síndrome de dependencia


al alcohol y lo definía de la manera siguiente: “Es un estado de cambio en el
comportamiento de un individuo, que incluye, además de una alteración que
se manifiesta por el consumo franco de bebidas alcohólicas, una continuidad
de este consumo de manera no aprobada en su ambiente sociocultural, a pesar
de las dolorosas consecuencias directas que puede sufrir, como enfermedades
físicas, rechazo por parte de su familia, perjuicios económicos y sanciones
penales...(dándose también) un estado de alteración subjetiva, en el que se
deteriora el dominio de la persona dependiente sobre su forma de beber.
Existe la urgencia de ingerir alcohol y se pone de manifiesto una importancia
fundamental del alcohol, en la que el planeamiento de las ocasiones de
beber puede tener preferencia sobre el de otras actividades. Además de estos
cambios se observa un estado de alteración psicológica con signos y síntomas
de privación del alcohol, ingestión de bebidas alcohólicas para lograr alivio
y aumento de la tolerancia”. Por lo tanto y según esta definición, para que
una sustancia pueda ser considerada como “droga”, es preciso que haya
provocado en alguno de sus usuarios un síndrome de dependencia, percibido
como tal por el propio usuario, por los de su entorno o por la sociedad. La
aparición de un síndrome de dependencia se suele subordinar a las propiedades
farmacológicas de la sustancia al interactuar con un organismo vivo y a la
propensión compulsiva del individuo hacia su consumo13.

Este planteamiento tiene dos importantes implicaciones: • La primera, que hay


muchas sustancias que son “drogas teóricas”, es decir, que si fueran usadas
podrían provocar síndrome de dependencia, pero tales “drogas teóricas” no
son drogas desde un punto de vista social y no tienen ni deberían tener, por
razones preventivas, otro interés que el de la investigación toxicológica. •
La segunda, que no son las propiedades farmacodinámicas de una sustancia
las que determinan su inclusión en la categoría de droga sino el hecho de
que fustigue síndromes de dependencia reales y observables en individuos

13 Apartes tomados y adaptados del portal interinstitucional de servicios sociales de la comu-


nidad autónoma vasca Euskadi y drogas 2000, psicofármacos y drogas ilegales, Observatorio
Vasco de Drogodependencias, 2001 CAPITULO 5 PSICOFARMACOS Y DROGAS ILEGA-
LES www.gizarte.net/drogodependencias/datos/introduccion.pdf 23 08 06 4:21 p.m. p.1

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Elmer Castaño Ramírez, María Elena Bernal Vera

concretos y en nuestro entorno sociocultural.

A decenas de millones de personas que consumen en estado natural o en


productos concentrados: heroína, hachís y cocaína, según el programa
Internacional de las Naciones Unidas para el control de las drogas14, les
evocan actualmente el concepto “droga”. Igualmente en el imaginario de
toda la sociedad occidental el término ya ha sido adoptado con toda su carga
política, social, económica, de ahí la necesidad de abordaje del vocablo que
ya está inmerso en la cultura y por ello debe ser objeto de análisis académico
sin mas sinonimias ni encubrimientos del lenguaje desde las ciencias.

LA INTENCIONALIDAD DISCURSIVA DE “DROGA” COMO CONCEPTO.

Hacer gurar el concepto “droga” agregándole el artículo denido (“la droga”)


genera una visión premoderna que lleva a percibir y generar miedos y por
ende a la necesidad de exorcizarla como el pecado. El entorno que rodea
este señalamiento conduce a hacer expresos prejuicios de toda índole, como
especial sustitución moderna de la maldad con sus nuevas representaciones y
con las cuales, se genera un entorno de desconanza. “La droga” conlleva una
dramática carga cultural, susceptible de una urgente censura, mas cercana a
jarle posturas como herejía que se deben combatir como la peste. Este efecto
demonizante concede institucionalidad a una renovada intolerancia y da soporte
a los ejercicios de violencia, dando un nuevo estatus de jerarquía lógica a las
decisiones de persecución en todos los niveles a todo aquel que se le acerque,
así sea desde la academia.
Frente al mundo global, Vargas, R.15 trae a Richard Rorty en su conferencia
pronunciada ante el foro “Einstein” en Berlín en Marzo de 2004 donde señala,
al hablar sobre la legitimidad de la nueva guerra contra enemigos abstractos

14La distribución anual en los años noventa era de 8 millones de consumidores para opiá-
ceos, 13.3 millones para cocaína y 141.2 millones para Cannabis de acuerdo con Special
session on the World drug problem, New Cork, 8-10 June 1998 hoja informativa No. 2
1998 p2 referenciada por COURTWRIGHT D. Las drogas y la formación del mundo mo-
derno. Breve historia de las sustancias adictivas: paidós México 2001 p. 59
15VARGAS, R Narcotráco, guerra y política antidrogas Ed. Acción Andina 2005 p.14

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Droga drogue  (narcótico)

como el terrorismo y su aliado cercano “la droga”, de un sentimiento cada


vez mas generalizado y acentuado por “los políticos quienes, en nombre de
evitar nuevos atentados, se sienten provocados para superarse unos a otros
en dureza y en la toma de medidas de mayor alcance. Se trataría incluso de
medidas que pondrían n al estado de derecho. Y la rabia que se siente cuando
el sufrimiento anónimo lo inige la acción humana y no las fuerzas de la
naturaleza, hará que la opinión pública acepte dichas medidas. El resultado
sería una catarata de medidas que iniciarían un cambio en las condiciones
sociales y políticas de la vida occidental. Los jueces y los tribunales perderían
su independencia y los mandos militares recibirían de la noche a la mañana
una autoridad que antes solo tenían los funcionarios electos. Los medios de
comunicación a su vez, se verían obligados a ahogar las protestas contra los
acuerdos gubernamentales.” Todo esto concluye en los países del norte en un
absolutismo ilustrado y en el sur en una creciente pérdida de autonomía.

Es a partir de todo esto que se instrumentaliza el uso privado de la violencia y


se agrava el cuadro de la complejidad del problema del concepto “droga” que
se quiere abordar desde la Universidad de Caldas para ser teorizado, evaluando
el resto de sus complejidades y anexidades como el narcotráco y la guerrilla
con sus factores adicionales indicidentes, los cultivos llamados “ilícitos”, el
problema ambiental y toda la carga política que el término retrotrae.

Finalmente, es por esa caracterización sociológica, política, económica,


cultural, que el término y por ende concepto “droga”, no puede ser excluido
de la nominación del postgrado (Maestría en cultura y “droga” para América
Latina) ni de las ciencias sociales y debe necesariamente permanecer ligado
a la interdisciplinariedad de una maestría como la propuesta desde la sede
de los señalamientos, COLOMBIA, y sugerida en la Universidad de Caldas,
Departamento de Antropología y sociología.

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BIBLIOGRAPHY - BRUGMANSIA

JIM A. BAUML
BIBLIOGRAPHY - BRUGMANSIA SP

JIM A. BAUML
SENIOR BIOLOGIST
LOS ANGELES ARBORETUM AND BOTANIC GARDEN
arbolito@aol.com

Brugmansia (Solanaceae) is a genus of shrubs and tree-like shrubs native to


South America. This bibliography on Brugmansia is based primarily on the
landmark doctoral dissertation by Tommie Earl Lockwood titled “A Taxonomic
Revision of Brugmansia (Solanaceae)”. It was competed 1973 at Harvard
University under acclaimed ethnobotanist Richard Evans Schultes. Another
primary source of information was Jonathan Ott’s Pharmacotheon, 2nd Edition,
densied (1996).

This monograph, as with many Harvard University Ph.D. dissertations, has


been largely inaccessible. Only portions of the work were published before
Lockwood’s untimely death in an automobile accident in Mexico near the
end of April, 1975 [Fulling, Edmund H., Taxon, 24(5/6): 580] while an
Assistant Professor at the University of Illinois, Urbana. However, a copy of
his dissertation was obtained through interlibrary loan, and I scanned, edited,
and updated the bibliography.

Brugmansia remains an important element in human cultures due to its tropane


alkaloids that have medicinal and psychoactive properties. Along with Datura,
Solandra, and other members of the Solanceae, or Nightshade family, it has
found a niche among indigenous societies and even contemporary “Western”
groups. Horticultural interest in Brugmansia continues to grow with active
breeding and collecting evidenced on web sites listed in the bibliography.

341
Jim A. Bauml

Several Brugmansias are native to Colombia, and the Sibundoy Valley is home
to a number of named cultivated varieties (cultivars) used in shamanic practices.
It is most appropriated that this bibliography be made more widely available in
Colombia. Hopefully students and other researchers will continue to study this
important genus and supplement the body of information assembled here.

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RESEÑAS DE ALGUNAS PONENCIAS DEL SIMPOSIO
COLOMBIANO INTERNACIONAL CULTURA Y DROGA
UNA MIRADA HACIA ADENTRO
LA MADUREZ DE LOS PUEBLOS Y LA FUNCIÓN DE CIERTAS
DROGAS PSICOACTIVAS1*

JOSEP Mª FERICGLA
DOCTOR EN ANTROPOLOGÍA
PRESIDENTE SOCIETAT D’ETNOPSICOLOGIA APLICADA I ESTUDIS COGNITIUS
BARCELONA, ESPAÑA
info@etnopsico.org

Forma parte de la naturaleza humana sentir una necesidad innata de vivir


experiencias trascedentes que den sentido, plenitud y orientación a su
existencia cotidiana. Como cualquier otra necesidad humana, la intensidad
con que se experimenta varía considerablemente de una edad a otra, de un
sujeto a otro y de un pueblo a otro. Es sabido que ni la necesidad de comer,
de mantener relaciones sexuales o el gregarismo es experimentado igual por
un anciano que por un joven, o por un individuo u otro. También la necesidad
innata de vivir experiencias trascendentes se maniesta de distinta forma
según sea el estilo o modo cognitivo dominante en los diversos individuos,
pueblos o periodos de la historia conocida.

En algunos contextos culturales, la necesidad de vivir experiencias trascendentes


aparece dentro de las prácticas chamánicas, como sucede en los pueblos
animistas. En otros contextos etnográcos, dentro de sistemas rituales como en
los de posesión en el África negra, en procesos autopoyéticos, en los métodos
y doctrinas extáticas tradicionales en el Oriente, en espacios de retiro religioso
como entre los místicos cristianos de la Edad Media y demás. Veamos algunas
necesidades universales en cuya satisfacción intervienen las drogas.

a) Forma parte del ser humano la necesidad de escapar a ratos de la presión


de la realidad cotidiana para descansar de ella. No me reero a una huida
* Conferencia inaugural del Congreso internacional Cultura y Droga, organizado por Universidad de Caldas y la Uni-
versidad Politécnica de Pereira, Colombia, los días 4 a 6 de mayo de 2006 en Manizales, Colombia. Se publica la I
parte. Fue publicado en forma completa En: http://www.visionchamanica.com/yage_EMC/fericglia.htm, con autori-
zación del autor y el director de la Revista Cultura y Droga, debido al interés, actualidad y oportunidad que ofreció el
director del portal.

353
Josep M. Fericgla

permanente fantaseando sobre la realidad de forma infantil o narcisista, sino


simplemente a descansar de la presión de la cotidianeidad para regresar a ella
con fuerza renovada.

b) Forma parte de la historia conocida del ser humano el intento permanente de


buscar recursos para ampliar su experiencia global de la realidad, especialmente
en referencia al gran olvido de dónde venimos antes de nacer y de la gran Nada
a la que regresamos después de la última expiración. De ahí que la experiencia
de la muerte ha estado siempre muy próxima al uso de drogas visionarias o
enteógenas que, según diversos pueblos, facilitan el contacto con el más allá,
con el espacio de los dioses y los antepasados. Para satisfacer esta necesidad
de ampliar la experiencia global de la realidad, además del consumo de ciertas
drogas, se han usado técnicas de exploración y comprensión del inconsciente,
sistemas de meditación liberadora del dualismo materialista y cerrado, múltiples
métodos de respiración catártica y, en las últimas décadas, la propia tecnología
de vanguardia y la física de las posibilidades están aportando recursos para
ampliar nuestra experiencia de la realidad.

c) Forma parte también de las necesidades básicas de los pueblos pequeños


y de las sociedades complejas el disponer de algún medio para desarrollar
y mantener la solidaridad social, frenando la tendencia entrópica natural en
todo colectivo. Por otro lado, las sociedades que han alcanzado cierto grado
de complejidad necesitan factores de apoyo a su expansión, sea por medio del
intercambio directo de productos o sea por medio de un intercambio indirecto,
como es el dinero.

d) Forma parte del ser humano, incluso del anacoreta solitario, la necesidad
de potenciar las relaciones interpersonales como espacio donde reafirmar su
identidad, como campo de intercambio afectivo y de educación emocional.

e) Forma parte del ser humano saludable la necesidad de vencer la fatiga como
estrategia para aumentar la productividad. Esto es válido también para los
pueblos cazadores recolectores, ya prácticamente extintos, puesto que el uso

354
La madurez de los pueblos y la función de ciertas drogas psicoactivas

de substancias para vencer la fatiga existía mucho antes de la aparición del


mercantilismo capitalista.

f) Forma parte del ser humano adulto tomar decisiones cruciales para sí mismo
y su grupo. Para ello necesita disponer de técnicas útiles que le apoyen en esta
actividad fundamental que genéricamente denominamos la toma de decisiones.
De ahí el desarrollo, ya arcaico en nuestra historia como especie, de métodos
predictivos tales como la lectura de huesos calcinados entre pueblos nativos
siberianos, el I Ching taoísta, los diversos sistemas calendarios egipcios,
aztecas, incas o agrícolas europeos que permitían la previsión, la búsqueda de
visiones oraculares por medio de sueños o por efecto de drogas y las técnicas
intuitivas. Todo ello hoy ha sido transformado en sistemas estadísticos de
previsión aproximativa y en el modo cognitivo heterogeneístico que surge
coincidente con las aportaciones de la moderna física cuántica o física de las
posibilidades.

Esta rama de la ciencia nos dice que nada de lo que creemos sobre la realidad
tal y como la describió la física clásica es cierto, pero no nos dice qué es la
realidad, y cuando el sujeto pregunta sobre la naturaleza de la realidad, en
cierta forma la física de las posibilidades le responde que es bastante adulto
para responder por sí mismo, dejando el acto mismo de la toma de decisiones
como un atractor o punto generador de realidades.

Para satisfacer estas múltiples necesidades que forman parte del ser
humano, hemos usado drogas psicoactivas de diversa familia química y
fenomenológica desde que hay registro de nuestra actividad como seres vivos
de la especie homo. No solo las hemos usado para intereses individuales,
sino que los psicotropos han sido un potente propulsor del comercio, de la
expansión política de los múltiples imperios y de las experiencias extáticas
más sublimes, fundamento del que han surgido los diversos textos sagrados
de la humanidad, los denominados Libros Revelados: la Torá judía de la
que evolucionó el texto místico del Zohar, las diversas Biblias cristianas,
las enseñanzas místicas contenidas en los Upanishad hindúes y los himnos

355
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 353 - 360
Josep M. Fericgla

sagrados conocidos como Rig-Veda, Sama-Veda y Yajur-Veda, compuestos


entre 1500 a.C. y 900 a.C. el Corán musulmán o las enseñanzas de Buda.
En este sentido, solo recordar que, para mencionar un ejemplo americano, el
tabaco es la verdadera droga americana, es una de las plantas de cultivo más
antiguo registrado por nuestros paleobotánicos y es uno de los especímenes
vegetales de mayor distribución geográfica en ambas américas. Antes del
contacto con los europeos, los nativos americanos consumían en contextos
altamente formalizados, diversas drogas, además del tabaco, para acceder al
mundo sobrenatural, para potenciar las relaciones interpersonales, para curar
dolencias, buscando la emoción extática y para estructurar sus sociedades
entorno de los ritos iniciáticos, a su vez tejidos alrededor del consumo de
psicotropos. No se conoce que los nativos americanos usaran drogas para
escapar de la rutina diaria en el sentido actual, ni para inducirse estados o
actitudes reflexivas.

En el mismo sentido se puede hablar de las uvas, principal fuente de alcohol por
fermentación, cuya distribución fue casi total en el Viejo Mundo allí donde el
clima lo permite, y ya desde los primeros registros de que disponemos anteriores
al neolítico. Cuando Noé, tras el universal Diluvio, salió de la arca bíblica, de
los primeros actos que realizó fue plantar vides para producir uva de la que
extraer el embriagante vino que tanto anhelaba y que, aunque completamente
desactivado de su función original, sigue siendo el elemento simbólico central
de la ceremonia católica de la Misa.

¿Cuál era la diferencia entre aquel consumo tradicional y el actual uso de los
psicotropos en nuestras sociedades? La principal diferencia era el imperativo
que existía, y existe aún en tales pueblos, que obligaba a jar unas reglas de
juego claras y rmes. Las drogas eran usadas para denir la posición social de
cada persona, para fomentar los lazos de pertinencia e incluso se usaban las
drogas para regular el propio acceso a ellas.

Por ejemplo, entre aztecas e incas, sólo el especialista religioso que se había
formado previa y arduamente en el arte de la interpretación religiosa estaba

356
La madurez de los pueblos y la función de ciertas drogas psicoactivas

autorizado a consumir psicotropos. En tales sociedades precolombinas, desde


este punto de vista probablemente más madura que las nuestras actuales, las
drogas estaban reguladas por restricciones consuetudinarias con un n claro:
conrmar el sistema social existente y los valores culturales prevalecientes.

Es de todos conocida la historia que siguió al contacto cultural americano:


las drogas de nueva introducción, principalmente las bebidas destiladas,
no estaban sujetas a limitaciones. Sin pautas razonables y experimentadas
que regularan su uso, las personas consumieron las nuevas drogas por
placer personal y como escape a la presión cotidiana que iba aumentando,
precisamente, a raíz del contacto con el mundo europeo, y sin conocer ni
reparar en posibles consecuencias. Eran maduros en el uso de sus psicotropos
tradicionales e inmaduros en el consumo de los de nueva llegada, lo
cual facilitó el camino a la imposición de nuevos valores. Es un proceso
equiparable al acaecido en el Occidente contemporáneo con la llegada, en
la década de los años 1960, de las que entonces eran las nuevas drogas:
LSD-25, mezcalina, marihuana, cocaína y derivados opiáceos. La principal
diferencia consistió en que el cristianismo primero, y la industrialización y
las Leyes más tarde, liquidaron el consumo maduro y experimentado de las
drogas europeas tradicionales, básicamente el alcohol y el opio y, en algunas
regiones del Viejo Mundo, la seta visionaria Amanita Muscaria, mandrágora,
tomatillo del diablo, beleño y otras. Al suprimir el consumo tradicional de
psicotropos, hicieron desaparecer también los conocimientos técnicos, rituales
y psicológicos que envolvían tal consumo y protegían a las personas de un
uso perjudicial o peligrosamente aventurero. Así pues, tras un primer contacto
con el mundo europeo y sus drogas etílicas producto de la destilación, los
indígenas americanos han regresado como han podido, todo hay que decirlo–
al consumo tradicional de sus drogas extáticas (peyote, ayahuasca, tabaco,
brugmansias) y esta práctica se está convirtiendo hoy en parte del núcleo de
resistencia a la desaparición de sus valores culturales tradicionales.

Desde una óptica de las superestructuras socioculturales, hay una relación


clara e indiscutible entre la calidad necesaria para completar ciertas tareas y la

357
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 353 - 360
Josep M. Fericgla

composición bioquímica de dietas que contengan drogas psicoactivas. Así por


ejemplo, la ingesta de substancias que aumentan o estimulan la sensibilidad
cortical, tales como la marihuana, hachís, opio, cocaína, nicotina y alcohol, se
preere laboralmente al consumo de substancias visionarias como son el peyote,
daturas y brugmansias, hongos psilocíbicos, ayahuasca o don Diego de día.

En este mismo sentido, también existe una marcada relación entre las formas
de subsistencia, la complejidad política y el consumo relativo de alguna droga
que actúa de inductor laboral. Me reero a las drogas usadas desde tiempos
inmemoriales para atraer y motivar a los individuos para que trabajen, esté
ello conforme a las Leyes vigentes o no. En la Colombia actual tenemos algún
ejemplo: el caso de la marihuana que se distribuye por parte de los contratistas
entre los peones que trabajan en los cafetales, y que constituye una de las
monedas de pago pactadas antes de empezar a trabajar. La marihuana que se
consume entre semana y, a veces, el bazuco para los nes de semana es una
estrategia de los contratistas para atraer a los recolectores.

También desde este mismo punto de vista superestructural, podemos armar


que, con frecuencia, las drogas han sido usadas para inducir y fomentar
el comercio en situaciones de contacto cultural. Por ejemplo, en aquellas
circunstancias en que el equilibrio de poder entre un Estado en expansión y
una población indígena es tal que es difícil motivar a los nativos trabajadores
para que suministren las cantidades adecuadas de bienes de consumo acordes
a los intereses del Estado. O, por ejemplo, las drogas también han sido y son
usadas para mantener una actividad laboral constante.

En su momento, también fueron especialmente útiles las drogas en el caso de


comerciantes aislados de Norteamérica o entre los caucheros repartidos por la
cuenca amazónica que operaban más allá de las fronteras de su propia sociedad.
Así mismo, fueron usadas en los contactos con pueblos cazadores recolectores
que no querían acatar las rígidas leyes de los Estados modernos para doblegar
su voluntad o atraerlos hacia los intereses del Estado.
Es casi una constante histórica el hecho de que antes del establecimiento
efectivo del control imperial o colonial sobre pueblos indígenas y sobre

358
La madurez de los pueblos y la función de ciertas drogas psicoactivas

territorios ocupados, solía y suele haber una distribución de psicotropos para


facilitar –o forzar directamente– el proceso de enculturación. Así por ejemplo,
ha sido característica de muchas situaciones fronterizas, desde los tiempos
antiguos a los modernos, el comercio de vino y más tarde de alcoholes destilados
para debilitar los lazos sociales de poblaciones bien integradas, acelerando con
ello un proceso entrópico.

De la misma manera, las guerras del opio entre Gran Bretaña y China fueron
provocadas, en buena parte, por la necesidad de los británicos de comercializar
una droga con gran demanda en China, el opio, que les permitiera pagar sus
importaciones masivas de té, pago que los chinos exigían originalmente en
plata. Una situación paralela y actual fue la distribución de heroína que, según
se arma en fuentes extraociales, el Estado español favoreció en el País
Vasco a nales de los años 1960 y hasta los 80 para minar las reivindicaciones
nacionalistas e independentistas de este pueblo frente a la hegemonía de un
Estado históricamente impuesto desde Castilla. De ahí, que según se arma
entre los propios vascos, el grupo terrorista ETA, durante años tuvo como uno
de sus objetivos eliminar tracantes de heroína que operaban en el País Vasco
para tratar de frenar la distribución de este opiáceo entre los jóvenes y, con
ello, el proceso de abandono de la militancia independentista en manos del
cuestionable bienestar que produce la heroína.

En cambio, una vez se ha institucionalizado el control sobre una sociedad y


se ha desarrollado plenamente la infraestructura del poder colonial o estatal,
las razones socioeconómicas para usar drogas pasan de estar focalizadas
en el propósito de obtener trabajadores y bienes comerciales, al propósito
de maximizar la producción de una forma tan eciente y barata como sea
posible. Esta segunda situación exige otro tipo y estilo de consumo y de
estupefaciente.

En general, esta segunda situación entraña un control más duro de la población


que la primera etapa, dirigida sólo a la obtención de mano de obra o de bienes
y asociada simplemente al establecimiento de alguna forma de comercio o de
intercambio laboral.

359
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 353 - 360
Josep M. Fericgla

El uso de alimentos con contenido psicoactivo para potenciar el trabajo, en


general presupone alguna forma de rígido control político directo o indirecto
sobre la población. Con este n, las drogas a menudo son una alternativa
conveniente al uso de la fuerza militar y, por tanto, suelen ser elegidas sobre
la fuerza bruta por su mayor ecacia, rentabilidad económica y facilidad de
empleo.

Diversos investigadores han sugerido que esta aplicación política y económica


de las drogas en la época moderna estuvo estrechamente relacionada con
la necesidad de disponer de mayores efectivos laborales para la industria
occidental, tanto como por las situaciones meramente coloniales.

La producción y suministro de productos laboral y económicamente tan


provechosos como el azúcar (por su gran contenido calórico), el té y el café
(por su preciada carga de cafeína), el tabaco o la coca (como energizantes
mentales) revolucionaron los hábitos cotidianos en Europa y América del
Norte. No es por accidente que en el comercio legal de fármacos, el alcohol
y el tabaco constituyan una inmensa fuente de ingresos para los gobiernos y
las corporaciones multinacionales, verdaderos gobiernos que imparten sus
órdenes desde la sombra, mientras que el comercio ilegal de cocaína renada y
productos opiáceos genere enormes sumas de dinero para tracantes, políticos,
banqueros y otras instituciones que protegen y albergan estas gigantescas
cantidades de dinero.

El ser humano busca el efecto de estas drogas energizantes y estimulantes como


mecanismo para combatir el cansancio, de ahí que fácilmente se conviertan en
herramienta de manipulación social en contextos donde el trabajo ha pasado de
ser una actividad de subsistencia a convertirse en una real maldición, en nuestro
caso maldición estatal –léase los impuestos desmedidos–, además de bíblica.

360
SIN DROGA, NO HAY CULTURA

JONATHAN OTT
QUÍMICO Y ETNOBOTÁNICO
PROFESOR INVITADO MAESTRÍAS CULTURAS Y DROGA
maestria.culturaydroga@ucaldas.edu.co

Serán unas divagaciones respecto al papel central de las así llamadas “drogas”
en todas las culturas. Como el Dr. Fericgla destacó, no es que cada cultura tenga
su droga, sino al revés. Cuando llegan tiempos de guerra y/o de hambruna, la
gente gasta su último centavo, no en alimentos ni tampoco en combustible,
sino en sus drogas favoritas. El negocio de drogas, por lo tanto, está a
prueba de depresiones económicas y desempleo, huracanes, tsunamis u otros
desastres naturales: entre más miseria y problemas de supervivencia tenga la
gente, más orece el negocio de bares y surtidores de otras drogas. ¿Por qué?

361
FACTORES AGREGADOS DE LA DROGA

JAIME ESCOBAR HERRERA


ING. AGRÓNOMO
SECRETARIO DE GOBIERNO DE LA GOBERNACIÓN DE CALDAS 2004-2007
jeherrera@gobernaciondecaldas.gov.co

En el interesante simposio sobre Cultura y Droga, se abordaron diferentes


temas que respondían al enfoque universal de esta manifestación, asociada a
la existencia del hombre.

Sobre lo clínico, terapéutico, lo artístico y lo social, dejaron su concepto


expertos, quienes expusieron una visión particular, sobre este tema tan
estrechamente impregnado en la sociedad actual.

Bajo una visión bien diferente, me correspondió mostrar el nocivo efecto de


la droga en nuestro país. Cultivos ilícitos asociados al conflicto armado y al
valor agregado de la guerra, como elemento determinante en los problemas
sociales. La incorporación de niños y niñas a los grupos ilegales armados,
los daños ecológicos, el desplazamiento forzado, el terrorismo, las minas
anti-persona y todos los efectos colaterales que se presentan sobre estas
poblaciones, casi siempre en un nivel de marginalidad muy alto.

Los programas de erradicación, fumigación y sustitución de cultivos ilícitos


tropiezan siempre con la desventajosa rentabilidad que ofrecen los cultivos
lícitos.

Los anti-valores en la percepción de la vida, los referentes culturales y sociales


dejan cicatrices difíciles de borrar. Las cifras de muertos alteran los indicadores
de un país, afectando la viabilidad de su crecimiento. El desarrollo, está sujeto
a la visión que se tiene en el extranjero de la seguridad nacional.

363
Jaime Escobar Herrera

Nuestro país, ha sufrido fenómenos que marcan perfiles bien particulares en


el campo social: confrontaciones partidistas, la violencia de las bananeras, la
originada por la bonanza marimbera y la guerra de las esmeraldas, pero nunca
con la dimensión, el alcance y los efectos devastadores del narcotráfico.
Primero como país productor, después como exportador y por último como
cultivador, productor, consumidor y exportador.

En esta última etapa explayó sus tentáculos en cada rincón de la población,


marcando la política y la economía sustancialmente (banca, comercio e
industria). Adicionalmente conformó un poderoso aparato armamentista para
defender sus intereses (guerrilla y paramilitarismo), recibiendo un tácito
reconocimiento y una cómplice aceptación por parte del colectivo nacional.

En esta ligera descripción, gravita este inmenso carrusel: LA DROGA con


sus efectos directos e indirectos tiene relación estrecha con la cotidianidad de
nuestras gentes.

Visto así como autoridad, extravío la mirada a lo diario; al jíbaro, al drogadicto,


al sicario, al guerrillero, al paramilitar, al policía y al soldado; al juez y al fiscal,
al banquero y al comerciante; encontrando la sutil pero devastadora acción
que está realizando la droga en la sociedad. Sin embargo en un contexto más
general, nos preguntamos: ¿quiénes son y dónde están quienes manipulan los
hilos de esta inmensa empresa criminal?

Colombia recibe injustamente el señalamiento consabido, pero urge una


actitud solidaria de todo país contribuyente con este flagelo. Desde paraísos
fiscales para lavar activos, hasta países productores de precursores para el
procesamiento de narcóticos.

Es responsabilidad de todos, pero quizás los tragos más amargos los está
sorbiendo nuestro pueblo. Por eso, permítanme con respeto hacer un llamado
a la comunidad internacional, para que miren nuestra nación como una tierra

364
Factores agregados de la droga

amable y de grandes posibilidades, no como la tierra estéril donde solo nacen


los componentes de esta mafia.

Ayer los narcóticos fueron usados por un segmento poblacional muy


pequeño, hoy han penetrado en todos los estamentos alcanzando un grave
posicionamiento en la juventud y la niñez; la adicción por las drogas está
intoxicando las generaciones del mañana, un riesgo o una realidad.

365
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 363- 365
EFECTOS A LARGO PLAZO DEL CONSUMO CRÓNICO DE YAGÉ
SOBRE PERSONALIDAD, LA PSICOPATOLOGÍA Y LAS FUNCIONES
NEUROPSICOLÓGICAS

JOSÉ CARLOS BOUSO SAIZ


PSICÓLOGO ESPECIALISTA EN PSICOLOGÍA CLÍNICA
PROFESOR UNIVERSIDAD AUTONOMA DE MADRID
FACULTAD DE PSICOLOGÍA DE LA U.A.M.
jcbouso@gmail.com

RESUMEN

La ayahuasca es un té psicoactivo de efectos enteogénicos originario de las


tribus que habitan en toda la cuenca amazónica. También es consumida por
un amplio número de religiones sincréticas de origen brasileño actualmente
expandidas por todo el mundo occidental. Los efectos neuropsicológicos y
psicopatológicos del consumo a largo plazo de ayahuasca han sido escasamente
investigados. En esta ponencia se presentarán los datos recogidos por nuestro
equipo de investigación proveniente de un amplio grupo de una de estas
religiones con un mínimo de 15 años de consumo de ayahuasca comparados
con un grupo de control de no consumidores. Los principales resultados indican
una menor incidencia de síntomas psicopatológicos y un mejor rendimiento
neuropsicológico en el grupo de consumidores de ayahuasca respecto al grupo
de control.

367
USO DE AYAHUASCA EN PSICOTERAPIA. UN ESTUDIO CUALITATIVO
EN LONDRES - INGLATERRA

MANUEL VILLAESCUSA
PSICÓLOGO
INVESTIGADOR SOCIETAT D’ETNOPSICOLOGIA APLICADA I STUDIS COGNITIUS
PROFESOR INVITADO MAESTRÍA CULTURAS Y DROGA
mvillaescusa@wanadoo.es

En esta conferencia presento tres trabajos de investigación sobre el uso de


ayahuasca en psicoterapia. El primer trabajo consiste en un estudio cualitativo
sobre las experiencias de los participantes a las ceremonias celebradas en
Londres por el Santo Daime, grupo religioso sincrético de origen brasileño
que usa ayahuasca en sus rituales. En este trabajo se analizan los aspectos
terapéuticos experimentados por los participantes, formulando una hipótesis
sobre los procesos que subyacen a los cambios positivos descritos por los
sujetos a raiz de su uso ritual de ayahuasca. El segundo trabajo describe mi
experiencia en un centro de terapia de toxicomanías en Amazonas, Brasil,
donde se usa ayahuasca como herramienta principal en el tratamiento. Presento
las distintas modalidades terapéuticas utilizadas en el centro y el proceso de
integración entre ellas: terapia de grupo e individual, trabajo psicocorporal
como yoga, tai chi y meditación y ceremonias de ayahuasca con frecuencia
semanal. El tercer trabajo trata sobre las experiencias de participantes españoles
en sesiones de ayahuasca con n psicoterapéutico fuera de un marco religioso o
chamánico tradicional. Se analizan los objetivos buscados o las problemáticas
presentadas por los participantes, las técnicas utilizadas en las sesiones, el tipo
de experiencias vividas y los resultados y cambios vitales obtenidos. Presento
una reexión sobre los distintos marcos teóricos que encuadran este trabajo, y
sobre el proceso de integración de técnicas chamánicas milenarias a la práctica
psicoterapéutica occidental contemporánea.

369
SHAMANS AND PLANT SACRAMENTS: MAINTAINING INDIGENOUS
TRADITIONS AND IDENTITY IN A GLOBALIZED WORLD

STACY B.SCHAEFER
PH.D. ASSOCIATE PROFESSOR AND CHAIR OF THE ANTHROPOLOGY DEPARTMENT
CALIFORNIA STATE UNIVERSITY, CHICO
sschafer@csuchico.edu

This paper examines the unique relationship shamans have with special
psychoactive plants valued in their cultures. In particular the use of peyote
(Lophophora williamsii) in Huichol Indian culture of Mexico, and coca
(Erythroxylim coca) in the indigenous cultures of San Pedro de Atacama in
Northern Chile, and Aymaras of the La Paz region of Bolivia will be discussed.
The central role the shamans and these plants play in traditional beliefs and
practices will be presented, as well as how these plants symbolize Indian
identity in a time of globalization.

Key words: shamans, indigenous cultures, coca, peyote

LOS CHAMANES Y SUS PLANTAS SACRAMENTALES: MANTENIENDO


LAS TRADICIONES E IDENTIDAD INDÍGENA EN LOS TIEMPOS
ACTUALES DE GLOBALIZACIÓN

Esta ponencia examina la relación única entre chamanes indígenas y las plantas
psicoactivas reconocidas en sus culturas. El enfoque en particular gira alrededor
del uso de peyote (Lophophora williamssi) en la cultura Huichola de México, y
coca (Erythroxylum coca) en las culturas indígenas de San Pedro de Atacama,
en el norte de Chile, y los Ayamaras de la región de La Paz, Bolivia. El papel
central de los chamanes y estas plantas en las creencias y ritos tradicionales
será discutido, tanto como el simbolismo de estas plantas en mantener una
identidad indígena en los tiempos actuales de globalización.

Palabras clave: chamanes, culturas indígenas, coca, peyote

371
BIOCULTURA Y CONSTRUCCIÓN DEL CONCEPTO DE REALIDAD1*

JOAQUÍN A. MUÑOZ MENDOZA


PH D. ESCUELA DE EDUCACIÓN SUPERIOR EN
CIENCIAS HISTÓRICAS Y ANTROPOLÓGICAS DE
SAN LUIS POTOSÍ/MÉXICO
joaquinmunoz@fundacioneduardseler.org

No creemos lo que vemos,


vemos lo que creemos.

PARTE I

Cuando Charles Darwin lanzó al conocimiento del mundo sus ideas al respecto
de la evolución de las especies y de la capacidad para sobrevivir de los seres
más aptos sobre los más débilesa, debió enfrentarse a conceptos profundamente
enraizados en la cultura del mundo europeo de la época, que no podían aceptar
estos postulados, en la medida en que implicaron la creación de enormes
abismos conceptuales entre la naciente y balbuceante ciencia y la poderosa
religión cristiana en cualquiera de sus vertientes.

Esta situación le supuso a instituciones eclesiásticas como la católica, un enorme


trauma que tan sólo puede haber tenido un antecedente de esa magnitud durante
el siglo XVI, cuando Américo Vespucio concretizó y anunciara el nacimiento de
una cuartaparteb del Mundo, hasta ese momento conceptualizado a partir de la
idea de la existencia de la Santísima Trinidad, constituída por tres naturalezas:
Dios-Padre, Dios-Hijo y Espíritu Santo. La constitución divina del Cosmos así
concebida, se proyectaba hacia diferentes ámbitos en los que el número tres
fundamentaba el todo esencial del Hombre: tres continentes (Europa, Asia y
África en ese orden); tres reyes magos (Melchor, Gaspar y Baltazar); y hasta
tres grandes monarquías (Carlos I en España, Francisco I en Francia y Enrique
VIII en Inglaterra), por lo que en consecuencia debían ser tres carabelas las de
Colón (La Pinta, La Niña y La Santamaría); y un muy amplio etc. De ahí la
*
Interesados en la versión completa comunicarse con el autor.

373
Joaquín A. Muñoz Mendoza

supuesta imposibilidad de la existencia de una Cuarta parte que hiciera añicos


toda la conguración cultural del mundo europeo de aquel tiempoc.

Una situación similar sufrieron las obras de Darwin. La época no podía soportar
la idea de descender de animales irracionales y no ser obra directa de la Voluntad
de Dios. Quizás por ello, Darwin no se preocupó demasiado por hacer hincapié en
las consecuencias lógicas que el desarrollo de sus teorías debería desprender, en
lo tocante a la evolución humana. Quizás el hecho de contradecir al mismísimo
Dios, era una idea sencillamente insoportable para la ciencia victoriana que se
desarrollaba inquieta, en la Inglaterra del siglo XIX.

Fuesen las razones que fuesen, el caso es que el pensamiento de Darwin


transcurrió en la posibilidad de crear un sistema que hiciese comprensible al
Hombre por un lado, parte de su papel en el planeta, mientras que por el otro,
abría una enorme senda epistemológica que explicaría la gigantesca variedad
vegetal y animal que existe en nuestro medio natural, así como la intrincada
red de particularidades familiares compartidas entre todas ellas.

En temporalidades muy amplias –de miles de millones de años –, las especies


irían evolucionando paulatinamente gracias a la fabulosa capacidad de
mezclas que entre ellas se darían, determinadas estas a su vez, por los cambios
que el entorno natural generara – cambios de clima, cataclismos, eventos
metereológicos, etc. – Estas mezclas corresponderían a la capacidad que la
probabilidad permite en la medida de la amplitud temporal, es decir, a más
tiempo transcurrido, más probabilidades de cambio se dan en las especies
gracias a su posibilidad dinámica. La selección natural de la que nos habla
Darwin, actúa en ese momento encuadrada por los diferentes escenarios, por
los diferentes espacios en que se desarrolla esta temporalidad, logrando así,
la capacidad de generación de innumerables tipos vivos interactuando hacia
adentro de su propia especie y recibiendo y provocando inujos de lo que le
rodea y hacia afuera, generando cambios casi imperceptibles pero residuales
en ese entorno, que están compensados con el desarrollo temporal.

374
Biocultura y construccion del concepto de realidad

Aquí, la evolución equilibrada entre las distintas especies existentes es quebrada


la mayoría de las veces, por eventos climatológicos que irrumpen en el entorno
físico generando cambios profundos pero que poseen el mismo carácter natural,
lo que fundamenta una precisa idea de lo que es la evolución bionatural. El
equilibrio biológico en el desarrollo natural es claro y distinto a cualquier otro
que se pudiese dar.

Es lógico pues pensar, que dentro de un Todo universal, la naturaleza “prevea”


este tipo de catástrofes para provocar cambios evolutivos o simplemente para
acelerar estos, ya sea ahora desapareciendo una especie que ha mostrado su
incapacidad de sobrevivencia y por ende su inviabilidad en ese medio, ya
sea después creando nuevos tipos de seres que actúen como cuñas en los ya
existentes.

De ello se desprende el que Darwin haya sido capaz de denir los poderes de
la evolución biológica, insertando en consecuencia al Hombre y su desarrollo
en ellos. El lósofo español Ortega y Gasset, en una interpretación claramente
darwinista del Ser humano resumiría la idea años más tarde al armar que:
-”El Hombre es él y sus circunstancias”d.

En efecto, Darwin identica un sistema biológico que le permite detectar los


cambios en la naturaleza de los seres vivos, pero jamás tomó en cuenta la
ingerencia humana en él. Igual que Ortega y Gasset confundirá el papel del
Hombre con el de cualquier animal al armar que aquel es él y su circunstancia,
cuando en realidad el Hombre es él y el control –o su intento– de esa “su”
circunstancia, Darwin no tomará en cuenta el papel del que-hacer humano en
relación con los cambios que provoca este en su entorno. Que-hacer humano
que se expresa a través de la Cultura.

La sobrevivencia del más apto propuesta por Darwin, en términos biológicos


no coincide necesariamente con los términos culturales. Por ejemplo, una
de las actividades más típicamente humana, la Guerra, privilegia a los más
débiles físicamente para que no participen en ella por su incapacidad natural

375
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 373- 376
Joaquín A. Muñoz Mendoza

para sobrevivirla, más sin embargo, utiliza a los especímenes más resistentes
para el combate, condenando a los más fuertes biológicamente a dejar paso a
los más débiles en estos términos.

Las sociedades humanas han creado a través de la Cultura, de la expresión de


sus actos y voluntades, una escala de valores que contradice por todo lo alto lo
que se manejaría como un esquema que podríamos llamar biológico-natural.
Contra éste, ha creado uno propio, el biológico-culturale, el cual abordaremos
más adelante.

a v. Darwin, Charles. La Evolución de las Especies. (1978). Buenos Aires: Ed. Aries.
b v. Muñoz Mendoza, Joaquín A. Américo Vespucio: 1492. Reivindicación de un Descubrimiento.
(1997). Cd. de San Luis Potosí; Fundación “Eduard Seler” para la Investigación Arqueológica y
Etnohistórica, A.C. Serie Etnohistoria n° 2; 120 pp. mps. e ils.
c v. O’Gorman O’Gorman, Edmundo. La Invención de América.
d v. Ortega y Gasset, Juan. La Rebelión de las Masas. (1972). Buenos Aires: Ed. Ariel.
e v. Muñoz Mendoza, Joaquín A. La Revolución Cultural. (1998). Cd. de San Luis Potosí;
Fundación “Eduard Seler”.

376
EXPERIENCIAS ETNOMEDICINALES Y TERAPÉUTICAS
EN EL SIMPOSIO COLOMBIANO INTERNACIONAL
CULTURA Y DROGA UNA MIRADA HACIA ADENTRO
USO CULTURAL DE LA COCA

MARÍA NOHEMY LONDOÑO CUARTAS


PROFESORA ASOCIADA UNIVERSIDAD DE CALDAS
GRUPO DE INVESTIGACIÓN CULTURA Y DROGA
maria.londono@ucaldas.edu.co

En el simposio Colombiano e Internacional Cultura y Droga: Una mirada


hacia dentro, realizado del 4 al 6 de mayo, el mamo arhuaco Norberto Crespo
Villafañe de Pueblo Bello, acompañado por su traductor Leonardo Zapata de
Nabusimake, realizó la presentación: Uso cultural de la coca, el 5 de mayo en
el Teatro 8 de Junio de la Universidad de Caldas.

Dicha presentación no ha sido escrita, razón por la cual el Comité Editorial


consideró oportuno difundir apartes del siguiente artículo que expresa la
percepción cultural de la Comunidad Indígena Arhuaca de la Sierra Nevada
de Santa Marta.

ARHUACOS: ÁYU Y CRISIS1. SIERRA NEVADA DE SANTA MARTA

MAMO ZAREY MAKU (KARMEN PÉREZ)


KANKURWA KASIGUA EN MOROTO

EL ÁYU (hoja de coca), es un elemento especial que nos fue asignado a los
indígenas. Este áyu lo hay en toda la naturaleza y existen distintas variedades
que se han sacado mediante injertos, para hacer la hoja más grande y que rinda
más en el gran negocio que la demanda de la sociedad blanca industrializada
ha creado.

Pero para el mamo, el áyu es una de las primeras plantas sagradas, es el


pensamiento, es el espíritu, es el eje, es todo, es la esencia misma de la
1Tratados e Historias Primitivas. Universo Arhuaco. Mamos Arhuacos de la Sierra Nevada
de Santa Marta. Compilación: Jesús Ortiz R. Ediciones Mestizas. Medellín Enero 2005.

379
María Nohemy Londoño

naturaleza para poder dialogar, para poder entrar en comunicación con otros
seres de otras dimensiones, para poder dirigirse al mundo entero, al universo;
poder comunicarnos de aquí a España “telefónicamente” por medio del éter
del áyu que se va formando. Esto es como el pensamiento, como el espíritu,
la esencia con que se transporta, se desplaza a otras dimensiones.

Esta es la función que cumple el áyu para el indígena, pero el bunachu ha


convertido nuestra planta sagrada en un negocio del que extrae la cocaína,
el bazuco y esto ha violado esa naturaleza sagrada del áyu que envenenará el
mundo entero, al blanco y tras el dinero producido, vendrán grandes crímenes,
asesinarán a gobernantes y a todo el mundo.

Por eso, nosotros los mamos nos preocupamos y queremos encontrar la manera
de regenerar al blanco mediante la toma de conciencia, que reconozca esa parte.
Pero mientras se siga creyendo que el producto extraído es para elevarse, para
estar contento, pero si nosotros mismos, porque se ha violado la esencia, el
espíritu del áyu que sirve de transporte, de vehículo para hacer los matrimonios,
los ritos del bautizo.

Para todo ritual se necesita áyu, para el agua, para todo ejercicio de los mamos
hace falta el áyu; toda persona que coma áyu tiene que hacerlo con el permiso
del mamo, pues de lo contrario está violando. Lo mismo sucede para comer
yua.
(…)
Las fumigaciones que por motivo de los llamados cultivos ilícitos ha hecho
el gobierno por orden gringa en nuestra Sierra Nevada, han causado grandes
perjuicios a nuestras sementeras y por lo tanto al espíritu del áyu, a los
alimentos, al agua, todo lo han contaminado.

Para utilizar el áyu, nosotros los mamos tenemos una autorización especial
para su siembra. Entonces, ¿por qué hoy se lo siembra sin esa autorización y
se lo cocina en calderos hechos de gringo, de blanco, si eso se tiene que hacer
en ollas especiales de barro? Esto se está violando y de ahí las consecuencias

380
Uso cultural de la coca

que se están viviendo de ebres, calenturas, paludismo, sida, cáncer por la


violación de tostar el áyu en calderos y todo el proceso que se sigue para sacar
la cocaína, por lo que el espíritu del áyu se está haciendo sentir acabando con
mucha gente, contaminando los ríos, todo por violar el espíritu de nuestra
planta sagrada, lo cual el hombre blanco no tiene en cuenta para analizar en su
crisis. Nosotros los mamos de la Sierra Nevada de Santa Marta no cultivamos
ni amapola, ni marihuana, ni borrachero y menos autorizamos a nuestros
indígenas que lo hagan, pues son las plantas que causan daño a la comunidad
si no se saben utilizar, lo mismo que el áyu que no se debe consumir sin el
permiso del mamo.

La producción que se hace del áyu por parte del blanco, es para su
comercialización en casi todo el mundo y eso es lo que está causando grandes
males y los que causará, porque hay que repetir que el áyu es para ritos
especiales y eso lo han violado, saliéndose del límite de su uso, no pidiendo
permiso, no haciendo el pagamento sino que el n es sacar polvo para hacer
plata, hacer capital, enriquecerse, y la prueba está en tantos crímenes y crisis
de distintos gobiernos y lo que seguirá.

Enero 1996.
Traducción e interpretación: mamo Bunchanawin.

381
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 379 - 381
ASOPARUPA (ASOCIACIÓN DE PARTERAS
UNIDAS DEL PACÍFICO)

Nombre institucional de la entidad:


Asociación de Parteras Unidas del Pacíco (Asoparupa).

Etnia o comunidad con quienes se relaciona:


Afrodescendientes.

Lugar de procedencia: Ciudad y Departamento:


Buenaventura (Valle).

Nombre contacto con la dirección física y electrónica y los teléfonos:


312-2898703 3167548165

Dirección:
Independencia 2 etapa, cra. 59 No. 7-21, Buenaventura.

Radio de cobertura: departamentos, municipios en los cuales desarrolle


actividades:
La asociación tiene radio de acción a nivel municipal con sus zonas rurales
apartadas uviales marítimas y carreteables.

La asociación se crea mediante personería jurídica No. 835.000.462- 9 el 3


de mayo de 1996.

Tema expuesto en el Simposio:


Forma tradicional de la utilización de las plantas por las parteras del Pacíco
en el embarazo.

1) ¿En qué consistió?


Ilustrar cómo por años generacionales nuestras comunidades afrodescendientes

383
han recurrido a las plantas para el cuidado natural de la salud utilizando plantas
medicinales, curativas y aromáticas; la razón fundamental, el difícil acceso a
las zonas donde está ubicada la mayor población, hace “imposible” que los
médicos lleguen a tiempo o que haya un servicio permanente de salud sobre
todo en las zonas rurales uviales y marítimas.

2) ¿Qué importancia?
Las plantas ocupan un lugar importante en nuestra cultura por que no solo se
le atribuyen benecios curativos sino también alimenticios que han logrado
mantener y sostener con estado de salud a nuestras comunidades, es por eso
que el estado de salud de una persona de las zonas rurales uviales por sus
métodos alimenticios es muy diferente a la de la ciudad, porque está más
expuesto a lo articial.
3) ¿Para qué? (benecios).
Para el caso que nos concierne del uso de las plantas en el embarazo, parto y
postparto, ha sido benecioso porque permite que a la mujer en el embarazo
se le den a tomar hiervas que le permiten aliviar dolores y malestares propios
del embarazo, además de ayudar a la dilatación cuando está próxima a salir
etc. Parto: hiervas que ayudan a dilatar con rapidez y a minimizar dolores del
parto, expulsar la placenta. Postparto: para el cuidado diario, la limpieza total
de la matriz, para producción de leche, para amamantar al bebe y alimentación
diaria.

Nombre completo de quienes asistieron al Simposio:


Rosmilda Quiñones Fajardo (Representante Legal). Carmen Rosa Aramburo
(Partera). Ana Bolena Rodriguez
(Apoyo Conferencia).

Población objetivo a la que atiende:


Embarazadas y de alto riesgo, principalmente en estados de vulnerabilidad.

Website: asoparupa.tripod.com (sin W).

384
CHAKRA VIDYA: ESCUELA DE FORMACIÓN
Y DESARROLLO HUMANO.
PEREIRA-RISARALDA

Nombre institucional de la entidad y/o programa medicinal y terapeutico sobre el


cual expusieron:
Escuela de Formación Humana y Pensamiento Orientado “Chakra Vidya”.
Terapias de medicina alternativa.

Etnia o comunidad con quienes se relaciona:


Comunidad Indígena Kamentsä, Valle del Sibundoy, Alto Putumayo.

Lugar de procedencia: Ciudad y Departamento:


Pereira (Risaralda).

Nombre contacto con la dirección física y electrónica y los teléfonos:


Hernando Arango, Cra. 10 No. 22-73, Tel. 3334316, 312 8314204. Claudia
Patricia Herrera, Tel. 3113038389.

chakravidya@yahoo.com. artemisa_88@yahoo.com

Radio de cobertura: departamentos, municipios en los cuales desarrolle


actividades:
Risaralda (Pereira). Antioquia (Medellín) Bolívar (Santa Marta). Valle
(Cali).

Año de iniciación:
1992.

Tema expuesto en el Simposio:


Título y una breve reseña del Tema
Medicina alternativa y el uso terapéutico del yagé en el ambiente urbano.

385
1) ¿En que consistió?
Se hizo una descripción sobre el trabajo realizado en la Escuela Chakra Vidya
como escuela de formación humana que integra dentro de su proceso de
aprendizaje y a nivel terapéutico el trabajo con el espíritu del yagé.

2) ¿Qué importancia?
Es esencial, porque es la única escuela de formación humana de este tipo en
el país. A nivel terapéutico el trabajo con el espíritu del yagé esencialmente
se realiza en dos dimensiones: una desde la escuela propiamente dicha con
los estudiantes, lo cual incide en sus procesos individuales de autosanación,
aprendizaje y autoconocimiento. Y el otro, mediante terapias realizadas a
pacientes y dirigidas por Hernando Arango y el Taita Floro. Esto permite
esencialmente un trabajo serio, permanente, continuo, con resultados medibles
y la posibilidad de hacer un seguimiento en la evolución de los procesos
terapéuticos de los estudiantes y los pacientes.

3) Para qué? (benecios)


Sanación individual y colectiva a nivel urbano. Reducción de costos
en comparación con otros tratamientos. Mayor efectividad que muchos
tratamientos de medicina occidental. Diálogo de saberes: medicina occidental
- medicina tradicional indígena.

Palabras clave: entre 3 y 6:


Yagé, chamanismo, terapias alternativas, conocimiento tradicional.

Nombre completo de quienes asistieron al Simposio:


Claudia Patricia Herrera Gaviria.

Población objetivo a la que atiende:


Población en general que requiera de un tratamiento.

Bibliografía o reseñas de sus publicaciones. Títulos, números, años,


editoriales etc.

386
Chakra vidya : escuela de formación y desarrollo humano. Pereira – Risaralda

Páginas web:
www.chamanismoancestral.org

Observaciones que estimen pertinente:


El objetivo esencial de la escuela es la formación de terapeutas capacitados
para conducir procesos de sanación integrales y holísticos. La Escuela se
caracteriza por ser INDEPENDIENTE, libre de dogmatismos, compromisos
religiosos, ideológicos, dogmáticos y políticos, lo cual deja la puerta abierta,
a personas con toda clase de expectativas espirituales y necesidades de
sanación y crecimiento. Un elemento esencial y fundamental para la Escuela
es el trabajo a través de terapias de sanación ancestral, mediante el yagé, este
trabajo ha sido inspirado por el Taita Florentino Agreda del Putumayo, y se
realiza mediante su autorización; igualmente la Escuela se ciñe esencialmente
a la línea del Taita Floro. ES IMPORTANTE RESALTAR IGUALMENTE
QUE LA ESCUELA POSEE ESENCIALMENTE DOS DIMENSIONES DE
FORMACIÓN: a nivel interno como escuela de formación, a nivel externo en
la consulta y atención de pacientes.

387
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 385 - 387
SEMINARIO-TALLER-RITUAL “YAGÉ TERAPÉUTICO”

Nombre institucional de la entidad y/o programa medicinal y terapeutico


sobre el cual expusieron:
Seminario-Taller-Ritual “Yagé Terapéutico”.

Etnia o comunidad con quienes se relaciona:


Nos relacionamos con indígenas kofanes, sionas, ingas (del bajo y del alto
Putumayo) y kamsás (del alto Putumayo).

Lugar de procedencia: Ciudad y Departamento:


Bogotá D. C.

Nombre contacto con la dirección física y electrónica y los teléfonos:


Ricardo Díaz Mayorga, Cra. 69 P Nº 75-21 Bogotá D. C., chamanic@
aolpremium.com, Tel. jo: 5435830, Tel. celular: 3107859658.

Radio de cobertura: departamentos, municipios en los cuales desarrolle


actividades:
Nuestra cobertura inicial fue la ciudad de Bogotá, pero con participantes de todo
el país. Hemos tenido participantes también del extranjero. Hoy día tenemos
programación permanente en la ciudad de Medellín.

Año de iniciación:
2000.

Tema expuesto en el Simposio:

Título y una breve reseña del Tema:


Expusimos en el Simposio la experiencia del Seminario-Taller-Ritual “Yagé
Terapéutico”.

1) ¿En qué consistió?

389
El Seminario–Taller–Ritual “Yagé Terapéutico” es una actividad intercultural
de conocimiento y práctica de la Medicina Tradicional Indígena del Putumayo,
realizada en condiciones que legitiman y hacen provechosa la experiencia
de purgarse con esta planta sagrada: un marco ritual, la dirección de un líder
experimentado, y la preparación de la persona que va a vivir esa experiencia.
Es un evento diseñado para participantes urbanos cuya parte ritual es manejada
por un Taita o Médico Tradicional Indígena oriundo del Putumayo. Al momento
del Simposio el taller tenía 49 ediciones realizadas desde el año 2000.

2) ¿Qué importancia?
El Taller “Yagé Terapéutico” ha logrado un reconocimiento por ser una
propuesta ordenada y coherente que tiene en cuenta la diferencia cultural entre
las comunidades indígenas en que se utiliza esta medicina, y la sociedad urbana,
industrial. El evento desarrolla una etapa de preparación, el ritual y una etapa
de elaboración de la experiencia.

3) ¿Para qué? (benecios).


La experiencia con el brebaje del yagé se enmarca dentro de las experiencias
denominadas como Estados Modicados de Conciencia, de los que se ha
documentado su benecio terapéutico, denominado, por ejemplo, por el
antropólogo norteamericano Michael Winkelman, psicointegración: o sea la
integración de diferentes niveles cognitivos: la psique, la mente signicante
y el espíritu.

Palabras clave: entre 3 y 6:


Yagé, ayahuasca, enteógenos, chamanismos, psicoterapia.

Nombre completo de quienes asistieron al Simposio:


Ricardo Díaz Mayorga.

Población objetivo a la que atiende:


Personas relacionadas con la temática de salud/enfermedad, y cualquier persona
que decida asumir la responsabilidad sobre su propia salud.

390
Yagé terapéutico. Bogotá - Cundinamarca

Bibliografía o reseñas de sus publicaciones. Títulos, números, años,


editoriales etc. Páginas web:
Revista “Visión Chamánica” Nº 1, Febrero de 1999; Nº 2, Febrero de 2000;
Nº 3, Diciembre de 2000. www.visionchamanica.com.

391
cult.drog. No. 13, 2006, págs. 389 - 391
ORIENTACIÓN PARA LOS COLABORADORES

REVISTA CULTURA Y DROGA

Publicación anual del Grupo de Investigación Cultura y Droga de la Universidad de


Caldas. Año inicio: 1994. Está adscrita al Departamento de Antropología y Sociología
de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la misma universidad.

Presenta artículos cientícos e información de actualidad sobre investigación y


desarrollo de conocimientos y experiencias referentes a las fuentes y aplicaciones
culturales de enteógenos y otras sustancias psicoactivas. Acoge artículos de diversas
disciplinas: sociales y humanas, naturales, médicas, artísticas, losócas y botánicas,
entre otras. Igualmente, conocimientos indígenas tradicionales. Se divulga por medio
de canje y actividades académicas o de divulgación de la Universidad. Opcionalmente
se comercializa.

La revista está en proceso de indexación, para lo cual se realizarán los ajustes


pertinentes. En este contexto, la revista fue priorizada por la Facultad de Ciencias
Jurídicas y Sociales y la Vicerrectoría de Investigaciones y Postgrados a través del
proyecto Revistas Cientícas.

OBJETIVOS

1. Publicar resultados sobre trabajos cientícos multidisciplinarios que realizan


investigadores sobre las fuentes y aplicaciones de psicótropos en distintas sociedades
y culturas, tanto del pasado histórico como contemporáneas.
2. Estimular a los investigadores a escribir y exponer ante las comunidades cientícas
interesadas en el tema, trabajos de investigación sobre drogas psicoactivas, los
usos y prácticas socioculturales, las potencialidades y riesgos neurosiológicos,
emocionales y comportamentales para la vida y la salud humana, las funciones de
las drogas como dispositivo de socialización y tensiones culturales, los fenómenos
ecológicos y ambientales actuales, las características bioquímicas, farmacológicas y
farmacocinéticas y las demás que aportan las ciencias.
3. Constituirse en foro permanente donde se someten a examen crítico las teorías e

393
hipótesis de los cientícos sobre la relación cultura y droga.
4. Servir de escenario para la divulgación de las actividades investigativas de la
Maestría Cultura y Droga para América Latina de la Universidad de Caldas.

CARACTERÍSTICAS

La Revista Cultura y Droga tiene dos características principales:

1. Revista primaria de investigación, por medio de la publicación de desarrollos y


resultados cientícos de procesos investigativos originales, con todos los detalles
necesarios para evaluar su validez.
2. Revista divulgativa de nuevos desarrollos en el campo cientíco, técnico, educativo
y cultural de las fuentes y usos de sustancias psicoactivas en contextos culturales,
por medio de artículos y notas breves de carácter general y no detallada.

PUBLICACIÓN DE ARTÍCULOS

Los manuscritos presentados por los autores se someterán al análisis de dos


especialistas. Su concepto será tenido en cuenta por el Comité Editorial quien será
responsable colegiadamente de su aprobación denitiva, sin que ello implique
compartir las opiniones expresadas por el autor.
ISSN (Número internacional normalizado para publicaciones seriadas): 0122-8455.
Formato: (160 x 210,5) según Norma 946, Icontec. Tipo letra: Arial 12.

TIPO DE ARTÍCULOS Y SECCIONES DE LA REVISTA

1. Artículos originales. Recuento comprensivo de un estudio teórico o experimental


en un proceso de investigación o experimentación que ha alcanzado su etapa nal.
Contiene los datos relevantes para que un lector, si lo desea, pueda repetir el proceso
y evaluar las conclusiones.
2. Notas técnicas. Artículo corto sobre resultados de investigación que hayan sido
publicados.

394
3. Comunicaciones breves. Informe preliminar de investigaciones o trabajos
experimentales de aplicación.
4. Estudios de casos. Presentación de experiencias que incluyan innovaciones con su
tratamiento metodológico.
5. Reseñas. Artículo especializado basado en revisiones bibliográcas, que incluye
valoración temática y cubre períodos históricos o el estado actual del tema.
6. Opiniones. Intercambio de opiniones e interpretaciones sobre los tópicos de la
revista.
7. Noticias. Información sobre eventos cientícos, seminarios, congresos, reseñas
de libros, otras publicaciones y cualquier tema que estimule la cooperación entre
autores, instituciones y corporaciones que trabajan sobre el tema.

PRESENTACIÓN DE ARTÍCULOS

1. Encabezamiento. Título corto y descriptivo (ocho palabras máximo, sin


abreviaturas ni siglas). Subtítulo, si es necesario para aclarar o completar el sentido
del título. Nombre(s) del(os) autor(es) y sus títulos académicos o cargos que indiquen
la autoridad en la materia.
2. Resumen. Presentación breve del propósito, metodología y resultados de la
investigación. Máximo 250 palabras. Va como primer párrafo, después del título y
los autores. En idioma original y con traducción al inglés.
3. Ilustraciones (tablas y guras). Se presentan en página aparte del texto, lo más
cerca posible de la parte del texto donde se mencionen. Numeradas consecutivamente
en arábigo llevan título breve en la parte superior de la ilustración. Si llevan notas se
colocan al pie. El texto debe remitir a la ilustración por su número.
4. Siglas. Deben ir precedidas de su forma completa, cuando aparezcan por primera
vez: Ej. Instituto Andino de Etnofarmacognosia, IADE.
5. Descriptores. Cuatro a seis palabras clave por las cuales se pueda indexar el
artículo.
6. Introducción (enunciado del problema, enfoque del autor, intentos anteriores de
solución, proceso seguido).
7. Descripción de metodología y resultados (ilustrados con tablas, cuadros, diagramas,
guras, cuando sea caso).
8. Discusión. Evaluación del autor de sus propios hallazgos, sus contribuciones,
diferencias con otros estudios similares.

395
9. Listado bibliográco. La revisión bibliográca debe incluirse en la introducción
o en sección aparte.
10. Contribuciones de otras personas o entidades, apoyos y agradecimientos de
cualquier tipo.

NOTAS Y CITAS

Las notas a pie de página deben dedicarse a adiciones, ampliaciones o complementos


a una idea, que se considera necesaria, y que de colocarse en el texto rompe la
secuencia lógica o la argumentación. Deben ser cortas.

Estas notas deben llamarse en el texto con asteriscos o símbolos similares, colocados
al nal de la palabra a la que se reeren. Las notas extensas deben recomponerse
como partes del artículo principal.

Las referencias bibliográcas van entre paréntesis indicando: Apellidos en mayúscula


del autor y letra inicial del nombre. Punto seguido y el año respectivo. Dos puntos y
el número de página. En la bibliografía, al nal del artículo, se identican los datos
complementarios de la cita.

Referencias posteriores a la primera se remiten a esta, señalando los datos variables,


por ej., página. Se utiliza el ibídem o el ibid, según el caso.

BIBLIOGRAFÍA

Libros: Autor. Título completo del libro (en cursiva). Número de edición. Editorial.
Lugar: año de publicación.

Artículos de revista: Autores (todos, apellido completo e iniciales de nombres).


Título del Artículo (en cursiva). Título de la revista. Volumen y número. Año de
publicación. Primera y última página del artículo.

Tesis: Nombre del autor. Título de la tesis. Tipo de tesis. Universidad y sede. Año de
terminación.

396
ORIENTATION FOR THE COLLABORATORS

CULTURA Y DROGA JOURNAL

Annual publication of the Research Group “Cultura y Droga” of the Universidad de


Caldas, Manizales, Colombia. Initiation year: 1994. Said journal is ascribed to the
Department of Anthropology and Sociology of the Faculty of Juridical and Social
Sciences from the same University.

It presents scientific articles and current information on research, development of


knowledge and experiences related to the sources and cultural applications of entheogens
and other psychoactive substances. Articles of diverse disciplines are welcomed, such as:
social and human sciences, natural, medical, artistic, philosophical, botanical, as well as
traditional indigenous knowledge and some others. The journal is disclosed by means
of exchange and academic activities or by means of popularization carried out by the
University. Optionally it is also marketed.

Cultura y Droga has begun the indexation process, for which the necessary adjustments
will be carried out. In this context, the journal was prioritized with this goal in mind
by the Faculty of Judicial and Social Sciences and the Vice-rectory of Research and
Graduate programs through the Scientific Journals project.

OBJECTIVES

1. To publish the results on multidisciplinary scientific works that researchers carry


out regarding the sources and applications of psychotropic substances in different
historical and contemporary societies and cultures.
2. To stimulate the writing process in the researchers, as well as presenting before
the interested scientific communities research works on psychoactive drugs;
socio—cultural uses and practices; the neurophysiologic, emotional and behavioral
potentialities and risks in the life and human health of the users; the functions of
the drugs as a socialization and cultural tensions device; the current ecological and
environmental phenomena; the biochemical, pharmacological and pharmacokinetic
characteristics, as well as others contributed by different fields.
3. To become a permanent forum in which the theories and the scientists’ hypothesis
on the relationship culture and drug undergo a critical exam.
4. To serve as a scenario for the popularization of the investigative activities of the
Master’s Cultura y Droga for Latin America of the Universidad de Caldas.

CHARACTERISTICS

The Cultura y Droga Journal has two main characteristics:

1. Primary research journal, by means of the publication of developments and


scientific results of original investigative processes, with all the necessary details to
evaluate their validity.
2. Revealing journal of new developments in the scientific, technician, educational
and cultural fields of the sources and uses of psychoactive substances in cultural
contexts, by means of articles and brief general notes.

PUBLICATION OF ARTICLES

Articles sent to the Cultura y Droga Journal should be originals. Their previous,
simultaneous or later publication in other journals should be informed in order to
make the appropriate annotations. The manuscripts presented by the authors will
undergo the analysis of two specialists. Their concept will be kept in mind by the
Editorial Committee who will be responsible of its definitive approval, without
implying that said Committee shares the opinions expressed by the author. Its sources
and applications should be inedited originals, except when dealing with adaptations
and translations. The author expressively authorizes the reproduction of the article
in digital archives and web pages belonging to the Universidad de Caldas, or others
authorized by the journal director.
ISSN (International Standard Serial Number): 0122-8455.
Format: (160 x 210.5) according to Norm 946, Icontec. Letter Type: Arial 12.

TYPE OF ARTICLES AND SECTIONS OF THE JOURNAL

1. Original articles. Comprehensive recount of a theoretical or experimental study in


a research process or experimentation that has reached its nal stage. They contain

398
the relevant data so that if a reader wishes to, he/she can repeat the process and
evaluate the conclusions.
2. Technical notes. Short articles on research results that have already been
published.
3. Brief communications. Preliminary Reports of researches or applied experimental
works.
4. Case studies. Presentation of experiences that include innovations with their
methodological treatment.
5. Reviews. Specialized articles based on bibliographical revisions that include
thematic valuation that cover historical periods or the current state of the topic.
6. Opinions. Exchange of opinions and interpretations on the topics covered by the
journal.
7. News. Information on scientic events, seminars, congresses, book reviews, other
publications and any other topic that stimulates the cooperation among authors,
institutions and corporations that work on the topic.

PRESENTATION OF ARTICLES

1. Heading. Short and descriptive title (eight words maximum, without abbreviations
nor initials). Subtitle, if it’s necessary to clarify or to complete the sense of the title...
Author(s) name(s) and their academic titles or positions that indicate their authority
on the matter. Author’s electronic mail.
2. Abstract. Brief presentation of the purpose, methodology and results of the research.
Maximum 250 words. It is the rst paragraph after the title and the authors. It should
be written in the original language of the article and with an English translation.
3. Illustrations (charts and gures). They should be presented in pages different
from the text, as close as possible to the part of the text where they are mentioned;
numbered consecutively in Arabic numbers; and they should have a brief title in the
upper part of the illustration. If they have notes, they should be placed at the bottom.
The text should remit to the illustration by its number.
4. Initials. They should be preceded by their complete form when they appear for the
rst time: E.g. Instituto Andino de Ethnopharmacognosia, IADE.
5. Keywords. Four to six passwords that can index the article.
6. Introduction (problem statement, the author’s focus, previous tries of solution,
executed process).
7. Methodology description and results (illustrated with charts, tables, diagrams,
gures, whenever possible).

399
8. Discussion. The author’s evaluation of his/her own discoveries, contributions, and
differences with other similar studies.
9. Bibliographical listing. The bibliographical revision should be included in the
introduction or in separate section.
10. Contributions of other people or entities, supports and acknowledgements of any type.

NOTES AND CITES

The foot notes should be devoted to additions, amplications or complements to an


idea that is considered necessary and that if they are placed in the text, they would
break the logical sequence or the argument. They should be short.

These notes should be marked in the text with asterisks or similar symbols, placed
at the end of the word to which they refer. Extensive notes should be integrated as
of the main article.

The bibliographical references are placed in parenthesis indicating author’s last


names in capitals and initial letter of the rst name, followed by a period and the
respective year, semicolon the page number. In the bibliography, at the end of the
article, the complementary data of the citing are identied.

Later references to the rst are remitted to the latter, pointing out the variable data,
for example the page number. Idem or ibid is used, according to each case.

BIBLIOGRAPHY

Books: Author. Complete title of the book (In italics). Edition Number. Editorial
Company. Place: publication year.

Journal articles. Authors (all, complete last name and rst name initials). Title of the
Article (In italics). Title of the journal. Volume and number. Publication year. First
and last page of the article.

Thesis. Name of the author. Title of the thesis. Thesis type. University and campus.
Termination year.

400
Revista Cultura y Droga

FORMATO DE SUSCRIPCIÓN
Vicerrectoría de Investigaciones y Postgrados
Universidad de Caldas. Calle 65 N° 26 - 10
A.A. 275 Manizales - Colombia
Tel: 8781500 ext. 12222
Fax: 8781500 ext. 12622
E-mail: revistascientificas@ucaldas.edu.co

Nombre / Name
Cédula / Identification number
Dirección / Address
Ciudad / City
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País / Country
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Profesión / Profession
Institución / Employer
E-mail
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Suscriptores Nacionales por un año: (1) Ejemplar: $10.000


Se debe consignar en Bancafe, cuenta de ahorros Nº 255050114, código 00HD005,
Promoción e Indexación de Publicaciones Científicas. Con envío posterior de copia de
recibo y hoja de suscripción al Fax: (576) 8781500 ext. 12622.

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Año/Year Volumen/Volume Número /Number Fecha / Date

401

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