Está en la página 1de 10

Economía 2016 - ll

Oferta y demanda:
La ley de la oferta y demanda es un modelo económico básico postulado para la
formación de precios de mercado de los bienes dentro de la escuela neoclásica y otras
afines, usándose para explicar una gran variedad de fenómenos y procesos tanto macro
como microeconómicos. Además, sirve como base para otras teorías y modelos
económicos.
Formulación Básica:
El modelo se basa en la relación entre el precio de un bien y las ventas del mismo y
asume que en un mercado de competencia perfecta, el precio de mercado se
establecerá en un punto —llamado punto de equilibrio— en el cual se produce
un vaciamiento del mercado, es decir, todo lo producido se vende y no queda demanda
no satisfecha. El postulado de la oferta y la demanda implica tres leyes:
1. Cuando, al precio corriente, la demanda excede la oferta, aumenta el precio.
Inversamente, cuando la oferta excede la demanda, disminuye el precio.
2. Un aumento en el precio disminuye, más tarde o más temprano, la demanda y
aumenta la oferta. Inversamente, una disminución en el precio aumenta, más tarde o
más temprano, la demanda y disminuye la oferta.
3. El precio tiende al nivel en el cual la demanda iguala la oferta.
En Orígenes del modelo:
A pesar de que el modelo es generalmente
atribuido a Alfred Marshall (debido a que ese autor
formalizó, analizó y extendió su aplicación), el
origen del concepto es anterior.
La expresión ‘oferta y demanda’ fue acuñada
por James Denham-Steuart en su obra Estudio de
los principios de la economía política, publicada
en 1767. Adam Smith usó esta frase en su libro
de 1776 La riqueza de las naciones, y David
Ricardo, en su libro Principios de política
económica e impositiva de 1817, tituló un capítulo "Influencia de la demanda y la oferta
en el precio".
En La riqueza de las naciones, Smith asume, en general, que la demanda es
relativamente fija en el plazo corto y mediano (dependiendo últimamente de la cantidad
de personas), y que, consecuentemente, es únicamente la oferta la que hace que el
precio suba o baje. Conviene recordar que en aquellos tiempos las empresas eran
pequeñas, y solo podían contribuir, cada una, fraccionalmente a satisfacer la demanda.
Esto, junto a la existencia de libre competencia, hacía que los precios de mercados
disminuyeran al máximo posible, tendiendo al costo de producción, el que, a su vez,
depende de consideraciones técnicas, no de la demanda.
Economía 2016 - ll

David Ricardo va aún más lejos afirmando: «Por abundante que sea la demanda, nunca
puede elevar permanentemente el precio de una mercancía sobre los gastos de su
producción, incluyendo en ese gasto la ganancia de los productores. Parece natural por
lo tanto buscar la causa de la variación del precio permanente en los gastos de
producción. Disminúyase esos y (el precio de) la mercadería debe finalmente decaer,
auméntense y seguramente subirán. ¿Qué tiene todo eso que ver con la demanda?».
Durante los últimos años del siglo XIX surgió la escuela de pensamiento marginal. Este
campo fue iniciado por Stanley Jevons, Carl Menger y León Walras. La idea principal es
que el precio se establecía a partir de la demanda: los consumidores solo pagan lo que
consideran adecuado por la utilidad que perciben recibirán de los bienes, cualquiera sea
el costo de producción. Esto fue un cambio sustancial respecto a las ideas de Adam
Smith sobre la determinación del precio de venta.

"Tijeras de Marshall". P = precio. Q = cantidad producida. D (línea azul) = demanda. S (línea


roja) = oferta.

Este modelo fue criticado más tarde por Alfred Marshall en su Principios de
economía. Marshall re-introduce a la visión marginalista, a través de la metáfora
conocida como las tijeras de Marshall, la consideración del efecto de la oferta,
formalizando el modelo de la oferta y la demanda.
Podríamos con la misma sensatez discutir acerca de si es la hoja superior o la inferior de
una tijera la que corta un pedazo de papel que si el valor está controlado por la utilidad
o por el costo de producción.
Desde finales del siglo XIX, esta teoría de la oferta y la demanda se ha mantenido
prácticamente inamovible. La mayoría de los estudios posteriores se han centrado en
buscar adecuar el modelo a situaciones más reales, incorporando aspectos tales como
los costes de transacción, la racionalidad limitada o incluso el principio de no
racionalidad, etc. basados en la percepción que es el caso que la situación real del
mercado corresponde a una de competencia imperfecta.
Por ejemplo –desde las primeras décadas del siglo XX– una variedad de autores, tales
como Joan Robinson, Edward Hastings Chamberlin; Heinrich Freiherr von
Stackelberg, Jan Tinbergen, Wassily Leontief, etc., introdujeron una serie de
adecuaciones o modificaciones parciales a la formalización de Marshall.
(ver oligopolio y oligopsonio, Teoría de la Competencia monopolística, Competencia de
Stackelberg; Teorema de la telaraña, etc.)
Economía 2016 - ll

Teoría fundamental:
Excedente de los consumidores y los productores en el
punto desequilibrio para las curvas de oferta y
demanda.

El modelo establece que en un mercado libre, la


cantidad de productos ofrecidos por los
productores y la cantidad de productos
demandados por los consumidores dependen del
precio de mercado del producto. La ley de la
oferta indica que la oferta es directamente
proporcional al precio; cuanto más alto sea el
precio del producto, más unidades se ofrecerán a
la venta. Por el contrario, la ley de la demanda indica que la demanda es inversamente
proporcional al precio; cuanto más alto sea el precio, menos demandarán los
consumidores. Por tanto, la oferta y la demanda hacen variar el precio del bien.
Según la ley de la oferta y la demanda, y asumiendo esa competencia perfecta, el precio
de un bien se sitúa en la intersección de las curvas de oferta y demanda. Si el precio de
un bien está demasiado bajo y los consumidores demandan más de lo que los
productores pueden poner en el mercado, se produce una situación de escasez, y por
tanto los consumidores estarán dispuestos a pagar más. Los productores subirán los
precios hasta que se alcance el nivel al cual los consumidores no estén dispuestos a
comprar más si sigue subiendo el precio. En la situación inversa, si el precio de un bien
es demasiado alto y los consumidores no están dispuestos a pagarlo, la tendencia será
a que baje el precio, hasta que se llegue al nivel al cual los consumidores acepten el
precio y se pueda vender todo lo que se produce mejor.
La curva de oferta
La segunda ley enunciada (ver II arriba) establece
que, ante un aumento en el precio de un bien, y
asumiendo un mercado competitivo, la cantidad
ofrecida de ese bien va a ser mayor; es decir, los
productores de bienes y servicios aumentarán la
producción. Esto es generalmente referido como
“Ley de la oferta”.

Curva de oferta típica.


Lo anterior es conceptualizado en la curva de oferta, que es la representación gráfica de
la relación –o elasticidad– existente entre el precio de un bien y la cantidad ofrecida del
mismo.
Economía 2016 - ll

La pendiente de esta curva determina cómo aumenta o disminuye la cantidad ofrecida


de un bien ante una disminución o un aumento del precio del mismo. Se
denomina elasticidad precio de la oferta al grado de variación de la cantidad ofrecida a
una modificación en el precio. Esta va desde una respuesta totalmente inelástica (línea
vertical) significando que la producción no responde a cambios en precios a una
totalmente elástica (línea horizontal), significando qué cambios en la producción son
mayores qué cambios en los precios.
Las determinantes de esa elasticidad incluyen: facilidad o no de adquirir Insumos.
Existencia o no de capacidad excesiva de producción y/o inventarios acumulados.
Complejidad del proceso de producción, o relativa dificultad de implementar
extensiones o modificaciones a ese proceso, incluyendo el tiempo y costo necesario para
implementar esas modificaciones. Consideraciones más generales acerca de la posición
de la empresa en relación al mercado, incluyendo posible conveniencia de simplemente
tomar ventaja del aumento de precios, etc.
Debido a que la oferta es proporcional al precio, las curvas de oferta son, generalmente
pero no siempre, crecientes.
Además, y debido a la ley de los rendimientos decrecientes, la pendiente de una curva
de oferta suele ser decreciente (es decir, suele ser una función cóncava), aunque no
necesariamente. Un ejemplo es la curva de oferta del mercado laboral. Generalmente,
cuando el salario de un trabajador aumenta, éste está dispuesto a ofrecer un mayor
número de horas de trabajo, debido a que un sueldo más elevado incrementa la utilidad
marginal del trabajo (e incrementa el coste de oportunidad de no trabajar). Pero cuando
dicha remuneración alcanza ciertos niveles, el trabajador puede experimentar la ley de
los rendimientos decrecientes en relación con su paga. La cantidad de dinero que está
ganando hará que otro aumento de sueldo tenga poco valor para él. Por tanto, a partir
de ese punto podría dedicar menos horas al trabajo a medida que aumente el salario,
decidiendo invertir su tiempo en ocio. Encontramos un ejemplo de esto en los sueldos
de los miembros de los Consejo de administración. Mientras es relativamente fácil
motivar a trabajadores manuales o profesionales a trabajar horas extras, es difícil
motivar a los miembros de esos consejos, cuyas “horas de trabajo” generalmente van
desde una reunión (matinal o de tarde) una vez al mes a cinco o seis, o incluso una o dos
veces al año, con salarios que van desde, para empresas pequeñas, “un salario de
retención” de entre 5000 a 10 000 dólares anuales y “bonos de asistencia” entre 500 y
2000 por cada reunión que se asista, más “reembolsa miento” por "gastos de viaje",
etc, a salarios tales los 250 000 libras esterlinas anuales (el menor entre los directores
del grupo bancario Barclays), el cual, sin embargo, es aumentado por “pago de buen
manejo” (performance related pay) a 10,7 millones de libras esterlinas anuales, eso, sin
contar una variedad de bonus por "lograr objetivos", ganancias en "opciones" de
acciones, etc. Es fácil ver como remuneraciones a ese nivel no producen la motivación
necesaria para desempeñar funciones con la debida atención, lo que terminó con
la Crisis económica de 2008-2011.
Economía 2016 - ll

Este tipo de curvas de oferta ha sido observado también en otros mercados, como el
del petróleo: después del récord del precio provocado por la crisis de 1973, los EE. UU.
Disminuyeron su producción de petróleo.
La curva de la demanda
La curva de demanda representa la relación entre
la cantidad de un bien o conjunto de bienes y
servicios que los consumidores desean y están
dispuestos a comprar en relación al precio del
mismo, suponiendo que el resto de los factores se
mantienen constantes. La curva de demanda es
por lo general decreciente, es decir, a mayor
precio, los consumidores comprarán menos. Esto
es generalmente conocido como la “ley de la
demanda”.

Curva típica de demanda.

Los determinantes de la demanda de un individuo son el precio del bien, el nivel de


renta, los gustos personales, el precio de los bienes sustitutivos, y el precio de los bienes
complementarios.
La pendiente y forma de la curva de la demanda representa la Elasticidad precio de la
demanda, con extremos en una línea vertical (demanda inelástica, representando el
caso en el cual el cambio en la demanda es menor que el cambio en los precios) y una
línea horizontal, o demanda elástica, con cambios en demanda superiores a los cambios
en los precios (por ejemplo, en un mercado perfectamente competitivo, el aumento de
precios por una empresa puede llevar a que esa empresa pierda todo sus ventas)
Como se ha dicho antes, la curva de demanda es casi siempre decreciente. Pero hay
algunos ejemplos de bienes que tienen curvas de demanda crecientes. Un bien cuya
curva de demanda es creciente se conoce ya sea como un bien de Veblen o bien de lujo;
o como un bien de Giffen o un bien inferior. El ejemplo clásico de estos últimos,
proveído por Alfred Marshall son los alimentos básicos, cuya demanda viene definida
por la pobreza, que no permite a sus consumidores consumir comida de mejor calidad.
Según aumenta los precios ya sea de alimentos o generales, los consumidores no se
pueden permitir adquirir otros tipos de alimentos, por lo que tienen que aumentar su
consumo de alimentos básicos.
Economía 2016 - ll

Cambios en la demanda y cantidad demandada:


El gráfico muestra un incremento de la demanda
desde D1 hasta D2, provocando un aumento del
precio y de la cantidad producida.
El precio de un producto del mercado está
determinado por un equilibrio entre la oferta (lo
que se está dispuesto a producir a un precio
determinado) y la demanda (lo que se desea
comprar a un precio determinado). El gráfico
muestra un incremento de la demanda desde D1
hasta D2, provocando un aumento del precio y de
la cantidad producida relativas.
Cuando más gente desea algo, la cantidad exigida en todos los precios tenderá a
aumentar. Esto es un aumento en la demanda. La demanda creciente se puede
representar en el gráfico como la curva a la derecha, porque en cada punto del precio,
se exige una mayor cantidad.
Este aumento en demanda hace que la curva inicial D1 se desplace a la nueva curva D2.
Esto sube el precio de equilibrio de P1 al P2. Esto levanta la cantidad del equilibrio de
Q1 a Q2. Inversamente, si la demanda disminuye, pasa lo contrario, se va de la curva D2
a D1. La demanda es lo que desea el consumidor, cuando sube la demanda aumentan
los precios. EJ: la demanda de helados en un día común y corriente puede ser 40
unidades, pero en día de calor la demanda de helados puede ser 100, esto es porque
hay más personas que desean consumir helados debido al calor, aun cuando el precio
del helado no ha variado. Pero como aumenta la demanda de helados lo más probable
es que este suba su precio.
La cantidad demandada es lo que se está dispuesto a consumir a un precio determinado
EJ: si se tienen 30 dólares y el helado vale 15 dólares, la cantidad demandada a ese
precio será de dos helados, pero, si el precio del helado disminuye a 10 dólares ahora
habrá un aumento en la cantidad demandada ya que ahora se podrán consumir tres
helados (uno más que antes): la cantidad demanda aumentó porque disminuyó el
precio.
Resumiendo: si baja la demanda, bajan los precios y, por lo tanto aumenta la cantidad
demandada. De forma contraria, si aumenta la demanda suben los precios y disminuye
la cantidad demandada.
Ejemplo: oferta y demanda en una economía de 6 personas:
El modelo de oferta y demanda se puede estudiar mediante individuos que interactúan
en un mercado. Supóngase una economía simplificada en la que participan los seis
individuos siguientes:
Economía 2016 - ll

Alicia está dispuesta a pagar 10 euros por una


habitación.
Fernando está dispuesto a pagar 20 euros por una
habitación.
Cristina está dispuesta a pagar 30 euros por una
habitación.
Nuestra empresa está dispuesta a ofrecer una
habitación por 5 euros
Hoteles Place está dispuesta a ofrecer una habitación por 15 euros
Hoteles Master está dispuesto a ofrecer una habitación por 25 euros.
Hay muchas transacciones posibles que agradarían a las dos personas implicadas, pero
no todas ellas sucederán. Por ejemplo, hoteles Place y Master estarían interesados en
hacer su negocio a cualquier precio entre 25 y 30. Si el precio fuese superior a 30, Cristina
no estaría interesada, ya que es un precio demasiado alto. Si el precio bajara de 25,
entonces sería Hoteles Master al que no le satisfaría la transacción. Sin embargo, Cristina
descubrirá que hay otros productores en el mercado que están dispuestos a vender por
debajo de 25, con lo cual no negociará con Fernando. En un mercado eficiente, cada
vendedor percibirá el precio más alto posible, y cada comprador pagará el precio más
bajo posible.
Imagínese que Cristina y hoteles Master están discutiendo sobre el precio. Hoteles
Master ofrece un alquiler por 25. Antes de que Cristina lo acepte, hoteles Place lo ofrece
por 24. Fernando no está dispuesto a vender a 24, así que se retira. En ese instante,
nuestra empresa se ofrece por 12. Place obviamente no va a vender a ese precio, con lo
que parece que la venta está decidida. Sin embargo, aparece Fernando y ofrece 14, pero
sólo una persona está dispuesta a vender a ese precio (nuestra empresa). Cristina se
entera y como no quiere perder esta gran oportunidad, ofrece 16 a nuestra empresa por
habitación. Ahora Place también está dispuesta a vender, con lo cual tenemos dos
compradores y dos vendedores a ese precio (nótese que podría haberse establecido
cualquier precio entre 15 y 20). Aquí parece que los cuatro están de acuerdo. Pero ¿qué
ocurre con Hoteles Master y Alicia? Ambos no están dispuestos a negociar entre ellos,
debido a que Alicia sólo está dispuesta a pagar 10 y hoteles Master no desea aceptar
nada por debajo de 25. Alicia no puede mejorar las ofertas de Fernando y Cristina para
comprar a nuestra empresa, con lo cual Alicia no puede negociar con ellos. Master no
puede rebajar el precio de venta tanto como nuestra empresa u hoteles Place, con lo
cual ahora ya no puede negociar con Cristina. En otras palabras, se ha logrado un punto
de equilibrio.
Economía 2016 - ll

Curvas discretas de oferta y demanda:


Se puede dibujar un gráfico con sendas curvas de oferta y demanda a partir de estos
datos.
La demanda sería:
Una persona está dispuesta a pagar 30 euros (Cristina).
Dos personas están dispuestas a pagar 20 euros (Cristina y Fernando).
Tres personas están dispuestas a pagar 10 euros (Cristina, Fernando y Alicia).
La oferta sería:
Una persona está dispuesta a alquilar por 5 euros (nuestra empresa).
Dos personas están dispuestas a alquilar por 15 euros (nuestra empresa y hoteles Place).
Tres personas están dispuestas a alquilar por 25 euros (nuestra empresa, hoteles Place
y hoteles Master).
La oferta y la demanda coinciden cuando la cantidad negociada son dos habitaciones y
el precio se establece entre 15 y 20. Tanto si nuestra empresa vende a Cristina, y Place
a Fernando, o bien si nuestra empresa vende a Fernando, y Place vende a Cristina, se
podrá llegar a un acuerdo. Sin embargo el precio exacto acordado no puede
determinarse. Esta es la única limitación de este modelo simplificado. Si se traslada este
ejemplo a un mercado de competencia perfecta, con suficientes participantes, entonces
el precio sí que se podría establecer de forma exacta. Por ejemplo, si la última
transacción se hizo entre alguien que estaba dispuesto a vender a 15.50 y alguien
dispuesto a pagar 15.51, entonces el precio podría determinarse con una precisión de
un céntimo. Cuantos más participantes entren en el mercado, más probable será que se
encuentre un precio lo más cercano al punto de equilibrio.
Esta simplificación muestra como el precio de equilibrio y la cantidad pueden
determinarse fácilmente mediante una situación fácil de entender. Los resultados son
similares a los que se obtienen cuando se considera que el número de participantes es
ilimitado y otros supuestos establecidos por los mercados de competencia perfecta.
Generalizaciones:

El modelo anteriormente descrito sólo describe un mercado perfectamente competitivo


con un único producto. En una economía real existen numerosos productos algunos de
los cuales son bienes complementarios entre sí, otros son bienes sustitutivos entre sí,
etc. Además es necesario incorporar al modelo la renta disponible de los consumidores.
En un modelo con n productos no existe una curva de demanda sino que debe hablarse
de una hipersuperficie (2n-1)-dimensional que representa la demanda conjunta de
bienes y los posibles conjuntos de indiferencia. Por otra parte deberán
existir hipersuperficies que representen las ofertas de cada uno de los productos. Todas
Economía 2016 - ll

estas hipersuperficies bajo hipótesis similares a las planteadas para un mercado de un


producto se intersecarían en un único punto, que permitiría predecir los precios de
los productos y las cantidades consumidas de cada uno.
Existen modelos que incorporan el tiempo y asumen que no existe ajuste instantáneo
de la oferta y la demanda, dependiendo del modelo los precios pueden fluctuar pero no
está claro que bajo cualquier condición converjan a unos precios estables.
Oferta y demanda empresariales
La oferta de la empresa
El segundo elemento constitutivo de la fijación de los precios es la oferta de un bien. La
oferta es la cantidad de un bien económico que los productores pondrán en el mercado
(dado el nivel de precios y sus costes de producción). En la misma lógica de la demanda,
se puede asumir que los productores ofertarán mayor o menor cantidad de producto en
función de su precio: a mayor precio ofertarán más cantidad y menos a un precio más
reducido.
La elasticidad de la oferta indica el grado de respuesta de la cantidad ofrecida ante
cambios en el precio. Su factor condicionante más significativo es el tiempo, del cual se
establecen tres variantes:
En el corto plazo, la empresa no podrá reaccionar aumentando su producción ante las
subidas de los precios, ya que lo normal será que no disponga de los recursos necesarios.
En el medio plazo, quizá no podrá modificar su dimensión, pero sí conseguir una
utilización más intensiva de los recursos disponibles.
A largo plazo podrá modificar su dimensión, lo que le permitirá responder con mayores
producciones a los aumentos de precios.
Por consiguiente, a mayor período de tiempo, mayor será la elasticidad de la oferta.
Además del precio existen otros factores que influyen sobre la cantidad ofrecida: los
precios de los factores productivos, los costes de producción, el nivel tecnológico, la
existencia de productos sustitutivos, la organización del mercado, etc.
La demanda de la empresa
El concepto de demanda expresa qué cantidades de un bien está dispuesto a adquirir
un consumidor a los diferentes precios del mismo. En términos generales se puede
establecer que, a menor precio, la cantidad demandada aumentará.
Existen dos excepciones a este supuesto: los bienes de primera necesidad, cuya
demanda se verá muy poco afectada por el aumento del precio, y los bienes de lujo, que
se demandan sin tener en cuenta su precio. Se puede afirmar que, para los bienes
normales, la cantidad demandada guarda una relación específica con su precio:
aumenta cuando éste disminuye, y disminuye cuando el precio aumenta.
Economía 2016 - ll

La elasticidad de la demanda:
La cantidad demandada de un bien no siempre responde de forma igual a los cambios
en los precios. En unos casos, una pequeña modificación en el precio da lugar a una
alteración significativa en la cantidad demandada, mientras que en otras ocasiones
apenas si le afecta.
El concepto de elasticidad-precio de la demanda hace referencia a la sensibilidad de la
cantidad demandada ante las variaciones en el precio. En consecuencia, la demanda es
elástica si un cambio porcentual en el precio da lugar a un cambio porcentual mayor en
la cantidad demandada, inelástica si es menor y unitaria cuando ambas son iguales.
La elasticidad-precio de la demanda depende de las siguientes circunstancias:
- Del tipo de bien del que se trate. Un bien de primera necesidad tendrá una demanda
muy inelástica.
- De la existencia de bienes sustitutivos. La existencia de otros muchos bienes similares
hará a la demanda más elástica con relación a su precio.
- De la parte que representa el consumo de un bien en el total de la renta: la demanda
de un bien será más elástica cuanto mayor sea su participación en la renta.
- De la elasticidad-precio de la demanda, que no es igual en todos los puntos de la recta
de la demanda, sino que depende de la naturaleza del bien.
- Del tiempo considerado: cuanto mayor sea éste, mayor será la respuesta de la cantidad
demandada a los cambios en el precio. La cantidad demandada de un determinado bien
no depende únicamente de su precio. Habrán de tenerse en cuenta otros factores que
la condicionan, como el precio de los demás bienes, la renta y riqueza del consumidor,
los gustos y modas que afectan a sus deseos, los hábitos de consumo y mucho otros
factores coyunturales o subjetivos de distinta naturaleza.

También podría gustarte