Está en la página 1de 6

Derecho Penal Parte Especial. Cátedra “C” Titular: Dr. Gonzalo Javier Molina.

La Parte Especial del Derecho Penal.

Unidad 1.

La división del derecho penal en parte general y

parte especial.

El Derecho Penal.

El derecho penal es la parte del derecho compuesta por el conjunto de normas dotadas de sanción retributiva, que
constituyen el ámbito de punibilidad.

La determinación del ámbito de lo punible la hizo el legislador a través de un catálogo descriptivo de acciones
típicas sancionadas con una pena, y que constituye nuestra legislación penal.

La Norma Penal.

El legislador describe en la normativa penal las conductas que adquieren relevancia en el mundo jurídico y les
impone a quienes las desplieguen una sanción en forma abstracta, correspondiendo a los jueces la tarea de
individualizarla en cada caso concreto.

Control Social.

La norma define al comportamiento desviado como delictivo, la sanción es la reacción generada por aquella
conducta y el proceso penal asegura su aplicación siguiendo los procedimientos que garantizan la imparcialidad y
razonabilidad de la decisión del órgano judicial.

División.

La división metodológica del derecho penal en parte general y parte especial, se corresponde con la división del
Código Penal argentino en el libro primero (Disposiciones Generales), y libro segundo (De los delitos).

Parte General.

El contenido de la parte general del derecho penal, se corresponde con el estudio de los principios aplicables y los
componentes genéricos de todas las figuras delictivas contenidas en la parte especial del código penal.

Parte Especial.

En la parte especial del derecho penal, se desarrollan las problemáticas que presentan cada una de las figuras
penales contenidas en el Libro Segundo del Código Penal y en las leyes especiales complementarias.

Relaciones entre ambas.

Los preceptos contenidos en la parte general, son de aplicación a cada una de las figuras penales de la parte
especial.

Los conceptos de acción, tipicidad, antijuridicidad y culpabilidad sólo tienen sentido en relación a una figura penal
en particular, ya que no se trata de categorías abstractas.

Principios Constitucionales Penales.

Legalidad. Reserva. Culpabilidad.

1
Principios Constitucionales Penales.

Principio de Legalidad.

Principio de Reserva.

Principio de Culpabilidad.

Principio de Legalidad.

Está contemplado en el artículo 18 de la Constitución Nacional, y establece que ningún hecho puede ser merecedor
de pena ni juzgado como delito, sin una ley que lo haya contemplado previamente como tal.

Es el pilar fundamental del suprasistema de garantías, al establecer los límites al poder punitivo del Estado.

Principio de Legalidad.

Suele expresarse en la máxima nullum crimen, nulla poena sine lege. Tanto el delito como la pena deben estar
determinados en la ley previa.

No es posible reprochar el hecho a su autor si éste no tuvo, al menos, la posibilidad de conocer la criminalidad de
su acción.

Principio de Legalidad.

Una sanción penal se habrá aplicado con arreglo a este principio, si está establecida en una ley previa (exclusión de
la aplicación retroactiva de las leyes penales) y escrita (se excluye el derecho consuetudinario), que reúna las
condiciones de una ley cierta (se excluyen las cláusulas generales), interpretada como una ley estricta (se prohíbe la
extensión analógica de la ley penal).

Fundamentos.

El Principio de Legalidad halla su razón de ser en el hecho de que no es posible reprochar el hecho a su autor, si
éste no tuvo, al menos, la posibilidad de comprender la criminalidad de su acto, lo que presupone la posibilidad de
conocer el carácter penalmente relevante del mismo.

Ley Previa.

El Principio de Legalidad prohíbe la aplicación retroactiva de la ley penal, ya que las mismas rigen siempre para el
futuro. Principio que cede sólo en caso que la ley penal sea más benigna para el imputado.

Es una condición necesaria para la seguridad jurídica, la posibilidad de todos los ciudadanos de conocer con
antelación cuáles son las conductas conminadas con una pena.

Ley Escrita.

En derecho penal, a diferencia de otras ramas del derecho, está excluido el derecho consuetudinario (la
costumbre). La ley formal es la única fuente del derecho penal.

En el derecho penal no hay lagunas, todo lo que no está prohibido está permitido.

Ley Cierta.

El legislador debe evitar las fórmulas vagas o imprecisas en la descripción de las conductas prohibidas. La ley penal
debe precisar lo más acabadamente posible la acción considerada como delito.

2
La especificación de las prohibiciones y las sanciones previstas para su violación hacen al requisito de certeza de la
ley.

Ley Estricta.

Esta exigencia implica la prohibición absoluta de aplicar la analogía en el derecho penal. Este principio sólo cede en
caso de que dicha analogía se realice in bonam partem (en virtud de la cual se mejora la situación del imputado).

Analogía es trasladar una regla, dada en la ley para un supuesto de hecho, a otro supuesto de hecho no regulado
en la ley pero similar a aquél.

Principio de Reserva.

Está contenido en el artículo 19 de la Constitución Nacional y representa un límite a la injerencia estatal en el


ámbito de las acciones privadas de los hombres que de ningún modo afecten derechos de terceros. Lo cual, por
mandato constitucional, debe quedar exento de la autoridad de los magistrados.

Principio de Lesividad.

En el orden jurídico argentino, no puede haber delito sin un bien jurídico ajeno afectado, sea éste individual o
colectivo.

Una de las consecuencias es la impunidad de las autolesiones, que no pueden ser consideradas delictivas por no
afectar derechos de terceros.

Según este principio, el daño objetivo externo es la base de la responsabilidad penal.

Principio de Lesividad.

El Estado no podría tipificar como delitos conductas que sólo afectan a la moral privada ni que sólo constituyan un
perjuicio para quienes las realicen.

Al Estado le está vedada la imposición de una moral a sus ciudadanos. No puede valerse del derecho penal para
imponer modelos de vida a sus habitantes.

Derecho Penal de Ultima Ratio.

La calificación de una conducta como delictiva, debe ser la última instancia a la que debe recurrir el Estado, cuando
han fracasado o han resultado deficientes otras respuestas no punitivas.

La remisión al sistema penal de una situación conflictiva debe ser excepcional. Deben agotarse los recursos de las
demás ramas del derecho (civil, administrativo, etc.).

Derecho Penal de Ultima Ratio.

La búsqueda de otras alternativas a la imposición de una pena, es consecuencia del carácter estigmatizante de la
misma. Este sistema es propio de un derecho penal de mínima intervención.

Principio de Culpabilidad.

El Principio de Culpabilidad del Derecho Penal material presupone la garantía de que nadie puede ser considerado
culpable, ni, por ende, penado, si no estuvo personalmente a su alcance, con el empleo de una capacidad
razonable, evitar el hecho ilícito (culpabilidad como evitabilidad).

Principio de Culpabilidad.

La responsabilidad penal es personal: se responde por lo que uno mismo hace, no por lo que hace otro.
3
Dicha responsabilidad personal de basa en el libre albedrío del individuo, en virtud del cual, es él quien decide
delinquir o no delinquir.

Limita la medida de la pena por la medida de la culpabilidad.

Principio de Culpabilidad.

No hay delito sin culpa. Se excluye la responsabilidad objetiva del Derecho Civil. En derecho penal una persona es
responsable sólo por lo que ha hecho y en la medida en que lo haya hecho.

Tiene manifestación respecto de la entidad de la sanción. Debe existir proporcionalidad entre el injusto cometido y
la magnitud de la pena aplicable. A mayor ilicitud, mayor sanción punitiva.

Derecho Penal de acto vs. Derecho Penal de autor.

La pena presupone una infracción a la norma, la cual debe identificar un hecho, no una clase de autor (ser vago o
maleante). Esto implica una decisión en contra de una posición como la del antiguo positivismo criminológico: no es
legítimo ir en busca de un “tipo de autor”; es condición de la reacción penal “un hecho típico”.

Derecho Penal de acto.

La definición de delito está ligada a la comisión de un hecho, ya sea considerado como infracción de deberes ético-
sociales o una conducta socialmente dañosa porque lesiona o pone en peligro bienes jurídicamente protegidos.

Considera secundarias las características personales de su autor, que sólo se podrán tomar en cuenta para la
individualización judicial de la pena.

Derecho Penal de autor.

Sostiene una concepción según la cual el hecho sólo tiene un valor sintomático de la personalidad peligrosa de su
autor, que es lo reprochable y debe ser corregida.

El derecho penal de autor y el de peligrosidad coinciden cuando parten de una concepción determinista o biológica
del hombre, que le niega la libre determinación para elegir entre el bien y el mal y lo sancionan por su modo de ser,
por su mal carácter o su vida desordenada.

Principio de Culpabilidad.

La esencia del principio de culpabilidad no reside en el carácter del autor, ni en su conducta de vida, sino en la
posibilidad de haber actuado de otra manera en el caso concreto.

Reafirma el principio del Derecho penal del hecho, pues está en juego la evitabilidad del hecho para el sujeto
imputado, no la evitabilidad que habría podido resultar si hubiera conducido su vida y desarrollado su personalidad
de manera más plausible.

Principio de Proporcionalidad.

Toda reacción del derecho criminal (sea pena o medida de seguridad) debe guardar relación con la gravedad del
hecho y los fines de la pena.

La pena no puede exceder los límites de la culpabilidad.

Las penas deben guardar relación con el daño social causado por el delito. Toda regulación del Estado debe ser
razonable.

Intrascendencia de la pena.

4
Sólo es legítimo aplicar pena conforme a la culpabilidad del autor. La pena que trasciende al sujeto responsable del
delito afectando a terceros inocentes será una pena ilegítima.

Por esta razón, el Código Penal Argentino contempla como un supuesto de extinción de la acción penal, la muerte
del imputado (art. 59 inc. 1).

Bien Jurídico.

Noción. Función Teleológica del Bien Jurídico.

Noción.

La noción de bien jurídico emana del artículo 19 de la Constitución Nacional, que exige como presupuesto de la
sanción que se haya afectado a un bien jurídico determinado.

La imposición de una pena tendría como presupuesto la producción de un perjuicio a terceros.

Bien Jurídico.

Roxin define a los bienes jurídicos como circunstancias dadas o finalidades que son útiles para el individuo y para su
libre desarrollo en el marco de un sistema social global estructurado sobre la base de esa concepción de los fines o
para el funcionamiento propio del sistema.

El bien jurídico marca un límite a la potestad punitiva del Estado.

No protegen ni lesionan bienes jurídicos:

Conminaciones penales arbitrarias.

Finalidades puramente ideológicas (Ideologías, creencias políticas, filosóficas).

Las meras inmoralidades.

Expresión de opiniones y cualquier clase de conducta que tienda hacia la desigualdad humana.

Bien jurídico y objeto de la acción.

El bien jurídico debe distinguirse del objeto concreto de la acción. En el delito de homicidio, el bien jurídico es la
vida humana independiente, el objeto sobre el cual recae la acción, es el cuerpo de la víctima.

En la acción de hurto, el bien jurídico protegido es la propiedad o la posesión, y el objeto de la acción es la cosa
mueble total o parcialmente ajena hurtada.

Carácter fragmentario.

El derecho penal selecciona una serie de conductas contrarias a derecho y las conmina con una pena. Esto es, las
define a partir del bien jurídico protegido.

La ley penal se limita a seleccionar algunas conductas que lesionan bienes jurídicos y las tipifican.

Sólo las circunstancias de mayor valor son elevadas a la categoría de bien jurídico.

Funciones del Bien Jurídico.

Función dogmática: la violación de la norma se explica como la lesión o puesta en peligro de bienes jurídicos.

Función sistemática: en el ámbito de la clasificación de tipos penales mediante diferentes jerarquías de las
infracciones contenidas en la parte especial.
5
Función interpretativa: pone de relieve la importancia del bien jurídico en la interpretación de los tipos penales en
particular.

Metodología del Código Penal.

La Parte Especial del Código Penal clasifica a las figuras penales utilizando como criterio rector al bien jurídico
protegido en cada una de ellas.

Actualmente, se divide en trece títulos.

Metodología.

Se sostiene que los títulos de la parte especial están ordenados en una relación jerárquica en relación al bien
jurídico tutelado: comienza por los delitos contra la vida, ya que es el bien jurídico considerado como más valioso
en relación a los demás (integridad física, estado civil, propiedad, etc.)

Delitos de lesión y de puesta en peligro.

Clasificación.

Tipos de lesión.

Son delitos que exigen, para su configuración típica, una efectiva lesión al bien jurídico protegido por la norma.

En el delito de homicidio, se produce una lesión a la vida humana independiente. En el delito de lesiones, a la
integridad física de las personas. Por su parte, el delito de abuso sexual se configura con la lesión a la integridad
sexual de la víctima.

Tipos de puesta en peligro.

Los delitos de peligro se dividen a su vez, en delito de peligro concreto y delitos de peligro abstracto. Cuando el
tipo penal requiere para su configuración que el bien jurídico haya corrido un efectivo riesgo, estaremos en
presencia de un delito de peligro concreto.

Las tentativas idóneas en general, son delitos de peligro concreto, porque el bien tutelado corre efectivo riesgo de
lesión.

Tipos de peligro abstracto.

Son aquellos que captan conductas que normalmente son riesgosas para determinado bien jurídico.
Comportamientos que, estadísticamente, con frecuencia comportan un riesgo para el bien. Tales acciones ya son
prohibidas en su realización por esa sola razón, independientemente de si en el caso en particular generan o no un
peligro concreto para el bien objeto de tutela penal.

Las tentativas inidóneas son de peligro abstracto, puesto que el bien jurídico no corre efectivo riesgo.

Constitucionalidad.

La constitucionalidad de los delitos de peligro abstracto se ve cuestionada en la actualidad, por las reflexiones en
torno al bien jurídico protegido.

Por mandato constitucional, el presupuesto de las sanciones penales es el perjuicio a terceros, y esta clase de
delitos ni siquiera pone en peligro los bienes ajenos. Por ello se argumenta que van en contradicción con el
suprasistema de garantías.

También podría gustarte