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JULIO RODOLFO COMADIRA

HÉCTOR JORGE ESCOLA


JULIO PABLO COMADIRA
(COORDINADOR, COLABORADOR Y ACTUALIZADOR)

Curso de Derecho
Administrativo
Tomo II

4l|pAbeledoPerrot'
CAPÍTULO XXll

R E S P O N S A B I L I D A D D E L ESTADO^

I. I N T R O D U C C I Ó N

E l p r i n c i p i o de j u r i d i c i d a d , al que nos hemos referido antes, no


sería más que una ilusión, la expresión esperanzada de juristas voca-
cionales, la explicación ingenua o hipócrita de los docentes en derecho
a d m i n i s t r a t i v o o, en t o d o caso, la aspiración siempre i n c u m p l i d a de
una c o m u n i d a d ávida de creer en la República, si la responsabilidad
del Estado y de los funcionarios n o operaran c o m o garantía de la j u -
ridicidad.
La vigencia efectiva de la responsabilidad del Estado c o n s t r u i d a ,
por supuesto, desde ima perspectiva equilibrada, es, pues, esencial para
que el Estado de derecho sea una realidad efectiva y no u n a q u i m e r a .
En esa inteligencia, la responsabilidad del Estado constituye una
de las garantías sustanciales que i n t e g r a n el e q u i l i b r a d o c o n t e n i d o
actual del régimen exorbitante del derecho a d m i n i s t r a t i v o .

II. E V O L U C I Ó N D E LAS IDEAS A C E R C A D E LA RESPONSABILIDAD


DEL ESTADO

La aceptación de la responsabilidad del Estado, c o m o resultado de


su p r o p i a actividad, es una concepción que se puede estimar m oder n a;
D u g u i t ha sostenido que esta idea sólo últimamente ha penetrado en
la conciencia jurídica del h o m b r e c i v i l i z a d o , l o que no q u i t a que en
muchas legislaciones privadas, a u n en las más avanzadas, sus aplica-
ciones todavía sean extremadamente l i m i t a d a s .
D u r a n t e muchísimo t i e m p o , prevaleció la noción de que el Estado
era irresponsable, n o concibiéndose que alguien p u d i e r a pretender

' Es a u t o r d e los p u n t o s 1, IV, V, V I y XII Julio R o d o l f o C o m a d i r a y d e los p u n t o s 11,111,


V I I I , IX, X y XI, Héctor Jorge Escola, a c t u a l i z a d o s p o r Julio R o d o l f o C o m a d i r a . Es a u t o r
d e l p u n t o V i l , J u l i o Pablo C o m a d i r a .
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1504 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A .

ilegales o injustos de los f u n c i o n a r i o s y empleados públicos, que cau-


responsabilizarlo con m o t i v o de los perjuicios que le hubieran resul-
sahan perjuicios a los administrados, justificaban que los perjudicados
tado de una actividad estatal. Esa irresponsabihdad n o fue sino u n
p u d i e r a n reclamar la correspondiente indemnización.
resultado o u n c o r o l a r i o necesario de la idea de soberanía, ya que el
soberano - f u e r a quien fuese- era omnipotente, gozaba de infalibihdad De t a l m o d o , si el Estado continúa siendo irresponsable, sus agen-
y sus decisiones no podían causar verdadero perjuicio. tes dejan de serlo, previéndose, correlativamente, t o d o u n orden penal,
a veces m u y severo, para t r a t a r de asegurar, también p o r esa vía, que
En Grecia, ya fuera bajo los regímenes monárquicos, aristocráticos
los agentes públicos c u m p l i e r a n debidamente sus funciones.
o democráticos, el soberano de t u r n o sólo respondía ante la d i v i n i d a d ,
L a responsabihdad de esos agentes, n o obstante, n o era a m p h a ,
de la que aparecía como una emanación.
sino, al c o n t r a r i o , l i m i t a d a a ciertos casos de d o l o o culpa grave y
En R o m a , durante la p r i m e r a época, la irresponsabilidad del Es-
t a m p o c o existían medios jurídicos simples y directos que p e r m i t i e r a n
tado fue también t o t a l y nunca se llegó a pensar que los perjuicios
al p a r t i c u l a r lograr la reparación de los perjuicios sufridos.
ocasionados por el Estado o por sus agentes p u d i e r a n dar lugar a una
indemnización a favor de quien los hubiere sufrido. Ese avance se completa, más t a r d e , cuando se acepta no sólo la
posible r e s p o n s a b i l i d a d de los f u n c i o n a r i o s y empleados públicos,
M á s tarde se reconocieron ciertos casos de responsabihdad de los
cada vez más extendida, sino también la p r o p i a responsabilidad del
agentes estatales, pero sin atribuirles a los damnificados los medios
Estado, p o r aquellos mismos hechos y actos, así c o m o p o r ios suyos
aptos para hacerla efectiva.
p r o p i o s , a u n en el caso de que estos últimos h u b i e r a n sido legales y
El desarrollo de la teoría del Fisco permitió concretar algunos avan-
fundados.
ces hacia la formalización de la responsabilidad del Estado, pero sin
que de ninguna manera se llegara a aceptar, de f o r m a sistemática y or- E l advenimiento del Estado de derecho, c o n u n Estado sometido y
gánica, esa posible responsabilidad, ya que el soberano, que ejercía y regido p o r el derecho que él m i s m o ha estatuido, aclara y simpUfica la
representaba la soberanía, no podía ser, c o m o t a l , responsabilizado. comprensión de la necesidad de la responsabilidad del Estado, que no
puede ser excluido de ella, sin dejar, p o r ello, de ser soberano. Su poder,
Durante toda la larga etapa medieval, la situación se m a n t u v o sin
para ser válido y aceptable, debe ser jurídico y, c o m o t a l , l i m i t a d o y
reales variantes: los monarcas y los príncipes f u n d a b a n su poder en
ceñido a respetar el justo derecho de todos sus habitantes.
el derecho d i v i n o y el Estado desmembrado en su numerosos feudos,
no respondía por los desmanes y las tropelías que se cometían en su Nace así la responsabilidad a m p l i a y directa del Estado, generada
nombre, y los reyes y los príncipes estaban amparados p o r los privile- p o r su sola a c t i v i d a d , y sin que sea preciso, para obtener la compen-
gios y las inmunidades que les correspondían dentro de la estructura sación o la indemnización pertinente, que se demuestre que ha me-
púbhca y social establecida. diado culpa del Estado o de sus agentes. Bastará, pues, l a a c t i v i d a d
del Estado, la ausencia de responsabilidad personal del p e r j u d i c a d o
La teoría de la "impecabiUdad o i n f a l i b i h d a d del soberano" t a m -
y la existencia del perjuicio para que el Estado pueda ser constreñido
poco contribuyó a mejorar las cosas, pues en su v i r t u d se debía re-
a indemnizar.
conocer que el soberano siempre elegía bien a sus representantes, sin
que se pudiera presumir que la acción de estos llegara a constituirse Sea, pues, a título directo, sea c o n carácter supletorio, sea de cual-
en fuente de algún daño y, p o r t a n t o , de alguna responsabilidad. El quier otra manera, la responsabihdad del Estado ha sido ya consagra-
rey, en efecto, nunca podía errar o equivocarse. da de manera general y no debe dejar de reconocerse que este p r o b l e -
m a , de índole netamente jurídica, n o dejará de estar i n f l u i d o p o r las
Esta concepción de la soberanía, de raíz teológica, que obligaba
soluciones de carácter político que en cada país se h a y a n a d o p t a d o ,
a considerar al monarca como omnipotente y omnisapiente, fue poco a
c o n las cuales el sistema jurídico y su aplicación i n d i v i d u a l habrán de
poco resquebrajándose ante la evidencia, cada vez más palmaria, de
ser siempre congruentes.
que el rey y el príncipe no eran representantes de origen d i v i n o y la
de que, por o t r o lado, no sólo no l o sabían t o d o , sino que frecuente- La expropiación es siempre citada c o m o una de las primeras for-
mente erraban y se equivocaban en sus decisiones. mas de esa responsabilidad del Estado: legalmente calificada, fundada
en fines de u t i l i d a d pública, debe ser previamente i n d e m n i z a d a . L a
Ese resquebrajamiento de una soberanía irresponsable, vigente
conducta regular del Estado, c o m o se ve, no deja de hacer procedente
incluso con posterioridad al advenimiento de la Revolución Francesa
la indemnización de los perjuicios que el p a r t i c u l a r e x p r o p i a d o tiene
de 1789, permitió ir v i s l u m b r a n d o el nacimiento de una efectiva res-
que soportar o b l i g a t o r i a m e n t e .
ponsabihdad del Estado, mediante el reconocimiento de que los actos
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U n resabio de las tendencias que abogaban p o r la irresponsa-


el Estado debe asumir la responsabilidad emergente de la actividad
b i l i d a d absoluta o relativa del Estado, fue la necesidad de la venia
de aquéllos, c o m o si fuera p r o p i a , frente a los perjuicios que se hayan
legislativa para poder demandar a éste cuando actuaba en el ámbito
ocasionado a los particulares.
del derecho político, que fue consagrada en nuestro país, en el orden
nacional, p o r la ley 3 9 5 2 , y dejada sin efecto c o n la sanción de la
3. Teoría de ia expropiación
ley 11.634, o c u r r i d a en 1932.
La teoría de la expropiación, que encontró su expositor en C o n -
III. EL F U N D A M E N T O D E LA R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO.
solo, explica la responsabilidad del Estado p o r una extensión o ge-
DISTINTOS CRITERIOS
neralización de los p r i n c i p i o s que rigen en materia de expropiación,
según los cuales si la p r o p i e d a d de los particulares debe ceder ante las
1 . Teoría de ia representación
exigencias de la u t i l i d a d pública, ello no i m p i d e que deba ser debida-
mente i n d e m n i z a d a .
Esta teoría, basada en p r i n c i p i o s y n o r m a s p r o p i o s del derecho
D e l m i s m o m o d o , si la a c t i v i d a d del Estado, en el l o g r o de sus
p r i v a d o o, más especialmente, del derecho c i v i l , se f u n d a en el p o s t u -
cometidos, perjudica a los particulares, es n a t u r a l que el Estado tenga
lado de que el representado responde p o r los actos c u m p l i d o s p o r su
que responder p o r dichos perjuicios, pues los administrados no tienen
representante. En ese sentido, el Estado aparece c o m o el representado
por qué verse sacrificados al interés general. La falta de indemniza-
y sus agentes públicos, c o m o los representantes, resultando la respon-
ción implicaría una abierta violación al derecho de p r o p i e d a d de los
sabihdad del p r i m e r o de los cartabones que c o n f i g u r a n la culpa in
i n d i v i d u o s afectados p o r el actuar estatal y es indiferente que el daño
eligendo o in vigilando.
resultante provenga de una a c t i v i d a d regular o irregular del Estado o
Esta teoría, que parecía plausible cuando se trataba de actos c u m -
de sus agentes. D i c h a violación sólo queda salvada mediante la razo-
plidos por el agente público con culpa o neghgencia, pues generaba
nable indemnización oblada al perjudicado, la cual debe ser absorbida
su directa responsabilidad, n o resultaba útil, en c a m b i o , cuando los
p o r el Estado.
perjuicios ocasionados p o r el accionar del Estado se habían p r o d u c i d o
sin culpa de aquél, que había actuado regularmente, o cuando había Si bien la directa aplicación de los p r i n c i p i o s propios del i n s t i t u -
t o e x p r o p i a t o r i o n o resulta factible en relación con los supuestos de
h a b i d o culpa concurrente del agente y del p r o p i o Estado.
responsabilidad del Estado, n o es menos cierto que la teoría elabora-
Por lo demás, la misma m a t e r i a l i d a d de la teoría fue atacada so-
da p o r Consolo, que n o pretende una i d e n t i d a d sino u n paralelismo
bre la base de que era manifiestamente falso que el Estado designara
entre ambas situaciones jurídicas, explica con sólido f u n d a m e n t o la
a sus representantes, pues en reafidad éstos eran designados p o r otros
existencia de la responsabilidad estatal.
agentes, y así sucesivamente, elección en la cual el Estado, verdadera-
mente, había estado ausente.
4 . Teoría de ia igualdad o proporcionalidad
Pero, indudablemente, la crítica más aguda, y que da por tierra
de ios cargos públicos
con esta teoría, es aquella según la que las relaciones entre el Estado y
sus agentes públicos n o es una relación de derecho p r i v a d o y fundada
El art. 13 de la Declaración de ios Derechos del H o m b r e y del C i u -
en él, sino una vinculación de derecho público, regida p o r p r i n c i p i o s dadano, consagrada p o r la Revolución Francesa en 1789, estableció el
esenciales, • como ya se ha visto en este Curso. p r i n c i p i o , lógico y razonable, de que unos ciudadanos no deben sufrir
más que otros las cargas impuestas en interés de todos, que fue luego
2. Teoría organicista recogido p o r nuestra Constitución nacional, al disponer en su art. 16
que la " i g u a l d a d es la base del impuesto y de las cargas p ú b l i c a s " .
A l g u n a vinculación c o n la anterior tiene la llamada "teoría or-
Ese g r a n p r i n c i p i o d i o m o t i v o a Teissier para sostener que unos
ganicista", según la cual los agentes públicos actúan c o m o órganos
administrados n o deben soportar o sufrir más que otros las cargas
del Estado, haciéndolo a n o m b r e de éste y c o m o componentes de él,
impuestas en interés c o m ú n , en v i r t u d de la a c t i v i d a d del Estado,
de suerte que t o d o l o que ellos hagan se debe suponer hecho p o r el
razón p o r la cual los daños excepcionales o los accidentes resultantes
Estado, que sólo quiere y actúa p o r sus órganos. Es de t a l m o d o c ó m o
a ciertos particulares deben ser repartidos entre todos, p o r medio de
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el f u n d a m e n t o de la obligación de resarcir al d a m n i f i c a d o , es decir, de


Ia debida indemnización afrontada p o r la colectividad, o sea, p o r el
la responsabihdad del Estado ( M a r i e n h o f f ) .
m i s m o Estado.
N o obstante la justicia intrínseca de su afirmación, Teissier se creyó
en la necesidad de l i m i t a r l a o atemperarla c o n u n segundo p r i n c i p i o , 6. Teoría de la equidad
según el cual los administrados deben soportar necesariamente, sin n i n -
gún derecho a indemnización, los perjuicios resultantes de los actos del Para los sostenedores de esta posición, el fundamento de la respon-
Estado, cumplidos en el ejercicio legítimo y regular de sus potestades sabilidad del Estado está en la e q u i d a d , en cuya v i r t u d el Estado estará
y facultades como poder público, y los que deriven del c u m p l i m i e n t o obhgado a i n d e m n i z a r a los particulares, siempre que haya o b t e n i d o
n o r m a l de los servicios públicos de interés general. alguna ventaja, con d e t r i m e n t o excepcional de éstos ( M a y e r ) .
Según este c r i t e r i o , para que la reparación p a t r i m o n i a l proceda,
Semejante limitación, se ha d i c h o c o n razón, carente de t o d o
es menester que se reúnan las siguientes condiciones: a) la existencia
f u n d a m e n t o lógico y jurídico, resta eficacia a esta teoría al restringir
de u n daño causado p o r la Administración Pública; b) que ese daño
desmesuradamente su campo de aplicación (Reiriz).
contradiga la equidad, al recaer sobre u n i n d i v i d u o de manera injusta
y desigual; y c) u n sacrificio especial de ese i n d i v i d u o que i m p h q u e u n
5. Teoría del seguro contra riesgos sociales
pasaje de valores semejantes al que se produce en el enriquecimiento
sin causa.
Fundándose en u n criterio objetivo del riesgo, que no exige culpa
n i ilegalidad, D u g u i t basó la obligación de indemnizar los perjuicios
7. Teoría del enriquecimiento sin causa
causados a ciertos administrados p o r el accionar estatal, en la existen-
cia de u n seguro contra los riesgos sociales provenientes del funcionario
Esta teoría, elaborada p r i n c i p a l m e n t e p o r H a u r i o u , sostiene que
de los servicios públicos.
el p r i n c i p i o de justicia sobre el c u a l se f u n d a la obligación del Estado
La postura de D u g u i t p r o c u r a salvar, del mejor m o d o posible, su
de resarcir los daños y perjuicios que ocasione, es el r o l del enrique-
reiterada negación de la personalidad del Estado, l o cual lo llevó a des-
c i m i e n t o sin causa, de cuya aplicación resultará que la indemnización
conocer la existencia de una i m p u t a b i l i d a d del Estado por sus propios
será debida: 1) cuando el p e r j u i c i o s u f r i d o p o r el a d m i n i s t r a d o corres-
actos, reemplazándola por la simple determinación del p a t r i m o n i o que
ponda a u n enriquecimiento del p a t r i m o n i o administrativo y 2) cuando
debe afrontar los riesgos del accionar de aquél.
t a l enriquecimiento sea sin causa, l o que ocurrirá cuando resulte del
El Estado es, así, y en cierto m o d o , asegurador de esos riesgos ejercicio, p o r la Administración Pública, de u n derecho exorbitante
sociales, es decir, de los riesgos resultantes de la actividad social, que del derecho común, c o m o es el derecho de expropiación, el de trabajos
se traducen p o r la intervención del Estado. públicos, el de legislar, etcétera.
Esta teoría, c o m o sus mismos p a r t i d a r i o s l o aceptaron, se vincula
C o m o se comprende, el c a m p o de acción de esta teoría, al igual
c o n la idea de la igualdad o p r o p o r c i o n a l i d a d del repartimiento de las
que el de la anterior, es m u y r e d u c i d o y ninguna de ellas suministra
cargas públicas.
una base suficiente y cierta, específica del derecho público, para u n
Si el Estado debe actuar, para beneficio de toda la c o m u n i d a d , p r o b l e m a que se v i n c u l a c o n el f u n c i o n a m i e n t o del Estado c o m o t a l y
y si su accionar i m p o r t a u n riesgo, pues puede perjudicar a algunos sus resultados frente a los derechos p r i v a d o s de los particulares.
administrados, es n a t u r a l que los perjuicios ocasionados deban ser
I g u a l crítica merece la d o c t r i n a o teoría de la estricta justicia, que
reparados convenientemente, cubriéndolos el Estado, c o m o repre-
sustentó entre nosotros Sarria, ya que la invocación de alguno de los
sentante de esa c o m u n i d a d , asumiendo el cargo de efectuar la debida
grandes p r i n c i p i o s del m u n d o jurídico no es suficiente, p o r sí m i s m a ,
distribución de ese riesgo mediante el pago de la indemnización co-
para explicar el porqué de la responsabilidad del Estado. L o m i s m o
rrespondiente.
cabe decir de la d o c t r i n a de la s o l i d a r i d a d h u m a n a , sustentada por
La jurisprudencia francesa ha hecho aplicación de este f u n d a - A l t a m i r a , la de la regla implícita de lógica jurídica o la del bien común
m e n t o , aunque no con la a p t i t u d que h u b i e r a sido de desear, si bien la p r o p i c i a d a p o r A l t a m i r a Gigena.
responsabilidad sobre la base del riesgo tiende a generalizarse.
Se le ha c r i t i c a d o , a su vez, que si los riesgos sociales existen,
pueden ser la causa de los daños y perjuicios ocasionados, pero nunca
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8. Criterio de Héctor Jorge Escola perjuicios, p o r razones resultantes del o r d e n a m i e n t o jurídico p o s i t i v o


existente, p a r a alcanzar una adecuada y p r o p o r c i o n a l distribución de
Pensamos que el g r a n p r i n c i p i o de la responsabilidad del Estado, las cargas púbhcas, p o r m o t i v o s de s o h d a r i d a d y de estricta justicia.
sustraído de t o d a cuestión inherente a la posible culpa o falta existente La c o m p l e j i d a d de la responsabilidad del Estado se traduce en la
en su accionar e, incluso, a su misma legalidad, y que se ofrece, por complejidad de los fundamentos que a y u d a r o n a construir e imponerla,
ende, c o m o u n supuesto de responsabilidad objetiva, no resulta n i se y n i n g u n o de ellos puede ser dejado de lado, a nuestro j u i c i o , pues están
f u n d a en u n c r i t e r i o único y exclusivo. vinculados y relacionados, a veces de manera m u y nítida.
A l c o n t r a r i o , la evolución habida desde la absoluta irresponsabi-
hdad hasta la responsabihdad plena se p r o d u j o al influjo de muchos IV. FUNDAMENTO GENERAL DE LA RESPONSABILIDAD
factores de progreso, n o todos jurídicos, y que f u e r o n f o r m a n d o , final- DEL ESTADO
mente, la conciencia de que esa responsabihdad era inexcusable.
L a a c t i v i d a d del Estado está siempre orientada al l o g r o de fina- L a obhgación del Estado de responder p o r los perjuicios que cause,
lidades dirigidas a la obtención del bienestar general, c o m o la fija el sea que ellos resulten de su accionar ilícito o lícito, deriva, c o m o ya
Preámbulo de nuestra Constitución N a c i o n a l , que no sólo beneficien enseñara el q u e r i d o maestro argentino M a r i e n h o f f , del complejo de
a toda la colectividad, sino también a cada uno de sus componentes. p r i n c i p i o s que i n s p i r a n y d a n sentido al Estado de derecho.
Esa a c t i v i d a d del Estado, p o r su m i s m a índole, puede ocasionar L a j u r i s p r u d e n c i a de la Corte Suprema de Justicia de la N a c i ó n
perjuicios a u n o o a varios administrados, que deben soportarlos por- c o n f i r m a de algún m o d o esta concepción, p o r q u e sus fallos revelan
que aquel bienestar general l o exige, sin que sea válido que puedan invocaciones conjuntas o alternadas a las ideas de justicia, legalidad,
pretender hacer prevalecer su interés p a r t i c u l a r p o r sobre el interés e q u i d a d , i n v i o l a b i h d a d de la p r o p i e d a d o i g u a l d a d ante las cargas
público. públicas.
N o interesa, a estos fines, si el accionar del Estado o de sus agen- D e n t r o del m a r c o de esos p r i n c i p i o s , son especialmente destaca-
tes públicos ha sido el debido o n o , si ha sido legítimo o regular, si ha bles, £( nuestro j u i c i o , las cláusulas constitucionales que reconocen el
mediado culpa que les sea i m p u t a b l e . derecho de p r o p i e d a d (art. 14) y garantizan.su i n v i o l a b i h d a d (art. 17),
Sea c o m o fuere, existe siempre u n riesgo de sufrir perjuicios de así c o m o las que consagran la igualdad ante las cargas púbhcas (art. 16)
esa clase, p o r el hecho de que la a c t i v i d a d del Estado debe cumplirse y los p r i n c i p i o s de l i b e r t a d (art. 19) y de r a z o n a b i l i d a d (art. 28), dis-
y es necesaria. posiciones ellas que gravitarán c o n j u n t a o a l t e r n a t i v a m e n t e según
El Estado de derecho que con nuestra organización constitucional las especies de responsabihdad de que se trate, t a l c o m o se verá más
hemos adoptado y cuyos principios y postulados rigen y o b l i g a n al adelante.
p r o p i o Estado en salvaguarda de los derechos e intereses de cada uno Siempre hemos pensado que, en definitiva, t o d a responsabilidad
de sus habitantes, sin dejar de tener en m i r a la prevalencia del interés p r i v a d a o pública remite su f u n d a m e n t o m e d i a t o a la Constitución y
público, i m p o n e necesariamente que el Estado sea responsabilizado al Estado de derecho democrático y republicano que ella i n s t r u m e n t a ,
p o r el resultado perjudicial de los actos que c u m p l a , que incidan sobre constituyendo las leyes formales - e l Código C i v i l , p o r ejemplo, en la
los particulares y que pueda ser o b l i g a d o a resarcir tales perjuicios en esfera del derecho p r i v a d o - la reglamentación en ese nivel, es decir, en
la medida en que sea justo y razonable. el p l a n o legal f o r m a l , de p r i n c i p i o s que, en rigor, la trascienden.
Surge así u n cuadro completo, que comienza p o r estar influido por El C ó d i g o C i v i l ha sido pirimero en el t i e m p o y el derecho a d m i -
los grandes esquemas de nuestra organización político-jurídica, que n i s t r a t i v o reconoce respecto de él una elaboración tardía. L o señalaba
niega la existencia de u n Estado o m n í m o d o y de poderes i l i m i t a d o s , ya en 1936 André H a u r i o u respecto de Francia. Por eso, acudir a sus
que reconoce la existencia de u n bienestar general que debe alcanzarse previsiones para resolver situaciones relativas a la responsabilidad
también p o r el actuar del Estado, el cual puede i m p o n e r sacrificios o del Estado se explica históricamente en los tiempos e m b r i o n a r i o s de
derivar en daños y perjuicios que recaigan sobre uno o varios a d m i - éste.
nistrados y que no sirven, sin embargo, para i m p e d i r t a l accionar. Esta En la a c t u a h d a d , sólo se justifica cuando se trata de v a l o r a r nor-
posibihdad, este riesgo, dentro del Estado de derecho que nos rige, mas que, más allá de su locahzación f o r m a l en aquél, i m p o r t a n , en
hace necesario que el Estado tenga la obligación de reparar daños y realidad, la recepción de p r i n c i p i o s generales del derecho, de normas
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1512 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A .

El sustrato legal de esa p o s t u r a se ubicaba en la vieja redacción


de derecho p ú b h c o - c o m o ocurre c o n el a r t . 1112 dinámicamente
del art. 4 3 , C C i v . , que impedía demandar a las personas jurídicas.
interpretado como propone Cassagne-, de prescripciones privadas aph-
En 1933, el M á x i m o T r i b u n a l falla en la causa " D e v o t o " ^ donde
cables analógicamente al derecho a d m i n i s t r a t i v o (Reiriz) o i m p l i c a n ,
admite la responsabilidad indirecta y subjetiva del Estado con f u n -
lisa y llanamente, cláusulas de reenvío, c o m o sucede con el art. 2611^,
damento en los arts. 1109^ y 1113^, C C i v . Es decir, se acepta la p r o -
disposición esta cuya fuerza expansiva n o ha sido suficientemente
destacada p o r la d o c t r i n a . cedencia de las condenas en la m e d i d a en que quede demostrada la
c u l p a b i l i d a d del agente (elemento subjetivo), debiendo responder el
Por eso, a u n cuando las disposiciones del Código C i v i l se puedan
Estado en su carácter de " p r i n c i p a l " p o r los hechos de sus "depen-
considerar aplicables en la esfera del derecho a d m i n i s t r a t i v o con las
discriminaciones impuestas p o r la naturaleza de l o que constituye la dientes" - f u n c i o n a r i o s p ú b l i c o s - (responsabilidad indirecta).
sustancia de este último-^ la indagación acerca de la pertinencia de En 1938, la Corte Suprema dicta sentencia en el caso " F e r r o c a r r i l
t a l analogía resulta desde t o d o p u n t o de vista innecesaria cuando la O e s t e " ^ de donde se desprende u n c r i t e r i o objetivo de responsabih-
p r o p i a ley a d m i n i s t r a t i v a regula directamente los hechos materia del dad (falta de servicio, Cassagne), c o n cita en el art. 1 1 1 2 ' , C C i v . , y
caso ( " O C A " " ) . también indirecta, pues, nuevamente, se invoca el art. 1113 de aquel
Las circunstancias llevan, pues, a que, c o m o se dijo, la respon- cuerpo legal.
sabilidad del Estado deba hallar su f u n d a m e n t o mediato en la Cons- Es interesante destacar que, en esa o p o r t u n i d a d , el T r i b u n a l Su-
titución N a c i o n a l e inmediato en la legislación a d m i n i s t r a t i v a que la premo apuntó que no era de aplicación el viejo art. 43 del Código
reglamente en coherencia con los p r i n c i p i o s de aquélla; sin perjuicio de f o n d o t o d a vez que el Estado n o había o b r a d o c o m o persona de
de que estos principios deban operar de m o d o directo e i n m e d i a t o , derecho p r i v a d o sino c o m o persona de derecho público, no obstante
con exclusión de la legislación común, cuando aquella n o r m a t i v i d a d tratarse dé actos de gestión, extremo que autorizaba la responsabihdad
genérica o específica no exista. Bien entendido que, cuando nos referi- estatal.
mos a la legislación administrativa, a l u d i m o s a la legislación federal o , Finalmente, en la causa " V a d e l l " " (1984), nuestro más A l t o T r i -
p r o v i n c i a l , según sea el caso, habida cuenta del carácter local de esta bunahestablece la responsabilidad objetiva'y directa del Estado acep-
disciplina (Perrino). t a n d o la teoría orgánica de atribución de las conductas de sus agentes
y receptando expresamente el concepto de falta de servicio.
V. EVOLUCIÓN HISTÓRICA DE LA RESPONSABILIDAD
DEL ESTADO EN LA JURISPRUDENCIA ARGENTINA. ^ Corte Sup., 1 9 3 3 , "SA Tomás D e v o t o y compañía v: G o b i e r n o n a c i o n a l " . Fallos
DISTINTAS ETAPAS 169:111.
*> Art. 1 1 0 9 : " T o d o el q u e ejecuta u n h e c h o , q u e p o r su c u l p a o n e g l i g e n c i a o c a s i o n a
un daño a otro, está o b l i g a d o a la reparación d e l p e r j u i c i o . Esta obligación es regida por
En líneas generales, el derecho a d m i n i s t r a t i v o argentino siguió
las mismas d i s p o s i c i o n e s relativas a los d e l i t o s d e l d e r e c h o c i v i l . C u a n d o p o r efecto de
en su evolución las etapas recorridas p o r el derecho comparado en l o la s o l i d a r i d a d d e r i v a d a del h e c h o u n o d e los c o a u t o r e s h u b i e r e i n d e m n i z a d o una parte
relativo al reconocimiento de la responsabihdad estatal. m a y o r q u e la q u e le c o r r e s p o n d e , podrá ejercer la acción de r e i n t e g r o " .
Así, y luego de abandonada la idea de irresponsabihdad estatal ^ A r t . 1 1 1 3 : "La obligación del q u e ha c a u s a d o un daño se e x t i e n d e a los daños q u e
con sustento en la soberanía del Estado, hasta 1933, la Corte Suprema causaren los q u e están b a j o su d e p e n d e n c i a , o p o r las cosas d e q u e se sirve, o q u e tiene
a su c u i d a d o . En los supuestos d e daños causados c o n las cosas, el dueño o guardián,
admitía su procedencia ante los Uamadqs actos de gestión, excluyendo,
para e x i m i r s e de r e s p o n s a b i l i d a d , deberá d e m o s t r a r q u e d e su parte no h u b o c u l p a ; pero
de este modo,.los denominados actos de i m p e r i o . También se respon- si el daño h u b i e r e s i d o causado p o r el riesgo o v i c i o d e la cosa, sólo se eximirá total o
sabilizaba al Estado p o r sus i n c u m p l i m i e n t o s contractuales y en los p a r c i a l m e n t e de r e s p o n s a b i l i d a d a c r e d i t a n d o la cuspa d e la víctima o d e u n tercero por
casos en que una ley especial lo previera. q u i e n no d e b e r e s p o n d e r " .
8 Corte Sup., 3/10/1938, "Ferrocarril O e s t e " , Fallos 1 8 2 : 5 .

2 Art. 2 6 1 1 : "Las restricciones impuestas al d o m i n i o p r i v a d o sólo en el interés público, •5 A r t . 1 1 1 2 : "Los h e c h o s y las o m i s i o n e s d e los f u n c i o n a r i o s públicos en el e j e r c i c i o
son regidas p o r el derecho a d m i n i s t r a t i v o " . de sus f u n c i o n e s , p o r n o c u m p l i r sino d e u n a m a n e r a irregular las o b l i g a c i o n e s legales
q u e les están impuestas, son c o m p r e n d i d o s e n las d i s p o s i c i o n e s de este título".
3 Corte Sup., 1 9 4 0 , "Los Lagos", Fallos 1 9 0 : 1 4 2 .
C o r l e Sup., 1 9 8 4 , " V a d e l l , Jorge F e r n a n d o v. P r o v i n c i a d e Buenos A i r e s " , Fallos
" Corte Sup., 17/2/1998, "SA Organización C o o r d i n a d o r a A r g e n t i n a " , Fallos 321:1 7 4 ,
306:2030.
c o n s i d . 5°, ED 1 77-749, c o n nuestro c o m e n t a r i o .
1514 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N PÚBLICA.,
R E S P O N S A B I L I D A D DEL E S T A D O 1515

VI. ESPECIES D E RESPONSABILIDAD


omisión estatal. E l p r i n c i p i o del alterum non hederé tiene raíz cons-
t i t u c i o n a l , c o m o ha d i c h o la C o r t e Suprema con f u n d a m e n t o en la
En el derecho p r i v a d o , existen dos ámbitos de responsabilidad
segunda cláusula c i t a d a " .
c i v i l : el del i n c u m p l i m i e n t o contractual (responsabilidad contractual)
N o creemos, p o r o t r a parte, que, en esta hipótesis, corresponda
y el del acto ilícito (responsabilidad extracontractual), caracterizados
invocar la i g u a l d a d ante las cargas públicas t o d a vez que n o se puede
p o r regímenes n o r m a t i v o s distintos, los cuales, sin embargo, no afec-
considerar u n a carga pública la o b l i g a c i ó n de s o p o r t a r conductas
tan la trascendencia del daño c o m o elemento c o m ú n y tipificante del
dañosas ilegítimas del Estado y, además, p o r q u e , de ser así, bastaría
fenómeno resarcitorio.
para justificar la ilegalidad su distribución i g u a l i t a r i a .
Este criterio de clasificación de la responsabihdad que prioriza,
c o m o base de la sistematización, la existencia, o n o , de u n vínculo
7.2. La falta, de servicio como factor de atribución
obligacional específico p o r sobre el que resulta la a n t i j u r i d i c i d a d o en ¡a responsabilidad por actividad ilegítima
j u r i d i c i d a d de la actividad, se justifica en esa r a m a del derecho porque
en éste, el presupuesto general de aquélla sigue siendo, c o m o regla, • Ya hemos visto que a partir de la causa "Vadell" e! Máximo Tribunal
la antijuridicidad - a u n q u e sea de fuente o b j e t i v a - sin que, por otra adhiere a la teoría de la responsabilidad directa y objetiva del Estado, junto
parte, el vasto campo del ejercicio regular de los derechos genere res- con la teoría del órgano, y recepta el concepto de falta de servicio.
ponsabihdad, a u n cuando cause daños. • En casos posteriores, la Corte reiteró expresamente que la responsa-
Ese temperamento no es admisible, en c a m b i o , en el derecho pú- bilidad por actividad ilícita extracontractual del Estado por el hecho de
blico, pues a u n cuando el ejercicio de las competencias p o r el Estado sus agentes no es indirecta ni basada en la culpabilidad, pues cuando se
n o es, p o r lo regular, fuente de indemnización para los particulares, trata de un servicio público que el Estado presta a la comunidad, aquél
al poseer aquél c o m o competencia general la potestad de sacrificar responde directamente por la falta de una regular prestación. Es decir
que, aun cuando la falta sea derivada del hecho de los agentes, existe una
derechos subjetivos de c o n t e n i d o p a t r i m o n i a l p o r razones de bien
imputación directa al titular del servicio, de modo que la actividad de los
común y, con ello, la correlativa p o s i b i l i d a d de comprometer respon-
órganos, funcionarios o agentes del Estado, realizada para el desenvolvi-
sabilidad sin a n t i j u r i d i c i d a d , ésta deja de ser u n presupuesto general
' miento de los fines de las entidades de las que dependen, ha de ser consi-
de la responsabilidad.
derada propia de éste, el que debe responder de modo principal y directo
Es decir, en el derecho a d m i n i s t r a t i v o , corresponde privilegiar la por sus consecuencias dañosas^^.
índole lícita o ilícita de la actividad. • Esta idea objetiva de la falta de servicio, tanto por hechos como por
De ese m o d o , en el ámbito del derecho público la responsabilidad omisiones, encuentra su fundamento -señala la Corte- en la aplicación del
puede derivar tanto de la actividad lícita o legítima c o m o de la ilícita o art. 1112 del Código Civil y no requiere, como fundamento de derecho
ilegítúna y es posible distinguir, a su vez, dentro de cada esfera de actua- positivo, recurrir al art. 1113 del Código CiviP^.
ción, la responsabilidad de origen contractual o bien extracontractual.
Se advierte, pues, que se abandona c o m o la p r i n c i p a l clasificación, en " • C o r t e Sup., 5/8/1986, " L u i s F e d e r i c o Santa C o l o m a y o t r o s " . Fallos 3 0 8 : 1 1 6 0 .
éste, aquella que se emplea en el derecho p r i v a d o para distinguir entre
1^ • C o r t e Sup., 17/8/2010, " M o r r o w d e A l b a n e s i , V i v i a n a M a r í a y otros v Estado n a -
la responsabilidad contractual y la e x t r a c o n t r a c t u a l . cional - M i n i s t e r i o de Relaciones Ext., C o m e r c i o Internacional y C u l t o s/daños y p e r j u i c i o s " .
Fallos 3 3 3 : 1 4 0 4 , c o n s i d . 8°; i d . , 2 0 / 1 0 / 2 0 0 9 , "Parisi d e F r e z z i n i , Francisca v. L a b o r a t o r i o s
1 . Responsabilidad por actividad ilegítima Huilén y otros s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 3 2 : 2 3 2 8 , d e l d i c t a m e n de la P r o c u r a d o r a
Fiscal al q u e la C o r t e a d h i e r e ; i d . , 6/3/2007, " M o s c a , H u g o A r n a l d o v. Buenos A i r e s , Pro-
v i n c i a d e (Policía Bonaerense) y otros s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 3 0 : 5 6 3 , c o n s i d . 6°;
7.7. Fundamento
i d . , 28/4/1998, "Zacarías, C l a u d i o H . v. Córdoba, P r o v i n c i a d e y otros s/sumario", Fallos
3 2 1 : 1 1 2 4 , c o n s i d . 6°.
La responsabilidad del Estado p o r su a c t i v i d a d ilícita deriva su " • C o r t e Sup., 3 1 / 8 / 2 0 1 0 , "Bea, Héctor y o t r o v Estado n a c i o n a l Secretaría de
f u n d a m e n t o m e d i a t o de la i n v i o l a b i h d a d de la p r o p i e d a d (arts. 14 T u r i s m o s/daños y p e r j u i c i o s " , Fallos 3 3 3 : 1 6 2 3 , c o n s i d . 1 0 ; i d . , 17/8/2010, " M o r r o w
y 17, C N ) y del p r i n c i p i o de hbertad (art. 19, C N ) . C o m o es o b v i o , la de A l b a n e s i , V i v i a n a M a r í a y otros v. Estado n a c i o n a l - M i n i s t e r i o d e Relaciones Ext.,
ley f o r m a l n o es título idóneo para i m p o n e r la obligación de soportar C o m e r c i o I n t e r n a c i o n a l y C u l t o s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 3 3 : 1 4 0 4 , c o n s i d . 8°; i d . ,
12/8/2008, " R e y n o t B l a n c o , Salvador C a r l o s v. Santiago d e l Estero, P r o v i n c i a d e s/daños y
conductas dañosas ilegítimas aunque éstas provengan de la acción u p e r j u i c i o s " , Fallos 3 3 1 : 1 6 9 0 , c o n s i d . 6°. Y, además, en el ya c i t a d o caso " V a d e l l " , d e Fallos
R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO 1517
1516 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . ,

N o corresponde distinguir entre la afectación de derechos sub-


• Ahora bien, esta responsabilidad directa basada en la falta de servicio,
ha sido definida por el Alto Tribunal como una violación o anormalidad jetivos e intereses legítimos ( M a r i e n h o f f , a q u i e n sigue Cassagne),
frente a las obligaciones del servicio regular, la que entraña una apreciación m á x i m e c u a n d o , c o m o t u v i m o s o p o r t u n i d a d de destacar supra, esta
en concreto que toma en cuenta la naturaleza de la actividad, los medios clasificación, actualmente en nuestro derecho, no tiene razón de ser.
de que dispone el servicio, el lazo que une a la víctima con el servicio y el En definitiva, c o m o recuerda M e r t e h i k i a n con cita de la sentencia
grado de previsibilidad del daño^'*. de la Corte Suprema en la causa " R e v e s t e k " " , se comprende t o d a
• Es decir, no se trata de un juicio sobre la conducta de los agentes sino lesión a una situación jurídicamente p r o t e g i d a . Así, para hacer lugar
sobre la prestación del servicio y, por ello, la responsabihdad involucrada a su reparación, los tribunales deben constatar que el perjuicio sea
no es subjetiva, sino objetiva'^. cierto y actual^^, o f u t u r o aunque n o hipotético o conjetural. Por l o
• En definitiva, en la actualidad de nuestra jurisprudencia de la Corte, el demás, debe ser apreciable en d i n e r o y subsistir al m o m e n t o de la
factor de atribución en la responsabilidad del Estado por actividad ilícita
indemnización.
extracontractual es la falta de servicio contemplada en el art. 1112 del Có-
digo Civil. Se trata, entonces, de una responsabilidad directa y objetiva. Por o t r o l a d o , y en relación c o n la carga de la prueba del daño,
• En consecuencia, en la medida en que se configure una falta de servicio M e r t e h i k i a n destaca que se aplican aquí los preceptos generales en el
(factor de atribución, art. 1112 del Código Civil) y concurran los requisitos sentido de que le corresponde a q u i e n l o alega.
que luego se detallan, será procedente responsabilizar al Estado por su Finalmente, en relación c o n la inclusión del daño m o r a l c o m o
actividad ilícita extracontractual. r u b r o i n d e m n i z a b l e , M a r i e n h o f f a f i r m a que puede decirse que hay
u n a n i m i d a d en el sentido de reconocerlo. En efecto, ésta fue la solución
1.3. Requisitos adoptada p o r el A l t o T r i b u n a l en más de una o p o r t u n i d a d ^ ' .

Los recaudos que deben c o n c u r r i r para que sea procedente res- 7.3.2. La relación de causalidad
ponsabilizar al Estado p o r su a c t i v i d a d ilícita son:
a) el daño; Para que corresponda responsabilizar al Estado, M a r i e n h o f f des-
b) que medie una relación de causalidad directa e inmediata, o taca que debe existir entre él daño alegado y la conducta estatal una
directa y relevante, entre el accionar estatal y el perjuicio; relación directa e inmediata de Causa a, efecto. Y, en este sentido, re-
c) i m p u t a b i l i d a d jurídica del daño al Estado, resukante de la cuerda que es l o que en doctrina se d e n o m i n a "relación de causalidad"
recognoscibihdad exterior del acto, c o m o estatal. o " c a u s a c i ó n o causahdad adecuada".
Por su parte, Cassagne apuntó que, de l o que se trata es de indagar
7.3.7. El daño en la causa eficiente que o r i g i n a el daño, l o que responde al p r i n c i p i o
lógico de razón suficiente conforme al cual t o d o lo que es tiene su causa
Evidentemente, el daño es u n presupuesto esencial ( M a r i e n h o f f - en alguna razón (en el m i s m o sentido: M e r t e h i k i a n ) .
Perrino) para la procedencia de la responsabilidad. Sm daño o p e r j u i - La jurisprudencia del M á x i m o T r i b u n a l , en algunos casos en los
cio, no hay deber alguno de reparar.
que juzgó situaciones referidas a la a c t i v i d a d lícita del Estado, ha ca-
Se ha definido el daño, en sentido jurídico, c o m o la lesión a inte-
reses jurídicos patrimoniales o espirituales (Perrino).
Corte Sup., 15/8/1995, "Revestek SA v. B a n c o C e n t r a l " , Fallos 3 1 8 : 5 3 1 ; también
LL 1996-E-678.
3 0 6 : 2 0 3 0 . Ver, también, íd„ 1 7/7/2007, " S e c u r f i n SA v. Santa Fe, Provincia de s/daños y " Corte Sup., 19/9/1989, "Tejedurías M a g a l l a n e s " , Fallos 3 1 2 : 1 6 5 6 , también en LL
p e r j u i c i o s " . Fallos 3 3 0 : 3 4 4 7 . 1990-C-454; i d . , 21/3/1989, "Cadesa SA v. Estado n a c i o n a l ( A N A ) s/daños y p e r j u i c i o s " ,
• Corte Sup., 28/4/1998, "Zacarías, C l a u d i o H. v. Córdoba, Provincia de y otros Fallos 3 1 2 : 3 4 3 ; i d . , 15/8/1995, "Revestek", c i t .
s/sumario", Fallos 3 2 1 : 1 1 2 4 , c o n s i d . 6°. Y, l u e g o , reitera el c o n c e p t o en " M o r r o w de 1 " Corte Sup., 4/5/1995, " D e Gandía, Beatriz v. P r o v i n c i a de Buenos A i r e s " , Fallos
A l b a n e s i " , citada, c o n s i d . 9°. 3 1 8 : 8 4 5 , también LL 1996-D-79; i d . , 2 2 / 1 2 / 1 9 9 4 , "Brescia, Noemí Lujan v. Buenos Aires,
Provincia de y otros s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 1 7 : 1 9 2 1 ; i d . , 10/4/2003, " C o t h e i f , Clara
• Corte Sup., 17/8/2010, " M o r r o w d e A l b a n e s i , V i v i a n a María y otros v. Estado M a r t a v. Santa Fe, P r o v i n c i a de s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 2 6 : 1 2 6 9 ; i d . , 19/10/1995,
n a c i o n a l - M i n i s t e r i o de Relaciones Ext., C o m e r c i o I n t e r n a c i o n a l y C u l t o s/daños y per-
" B a d í n , Rubén y otros v. P r o v i n c i a de Buenos Aires s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 1 8 : 2 0 0 2 ,
j u i c i o s " . Fallos 3 3 3 : 1 4 0 4 , c o n s i d . 9°; i d . , 6/3/2007, " M o s c a , H u g o A r n a l d o v. Buenos
también en JA 1 995-IV-142; i d . , 9/11/2000, " F a b r o , Víctor y otra v. Río N e g r o , P r o v i n c i a
Aires, P r o v i n c i a d e (Policía Bonaerense) y otros s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 3 0 : 5 6 3 ,
de y otros s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 2 3 : 3 5 6 8 ; entre otros.
c o n s i d . 6°.
1518 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . RESPONSABILIDAD DEL ESTADO 1519

lificado la relación de causalidad c o m o directa e inmediata ( " G a l a n - Cabe, entonces, preguntar, ¿cuál es el límite de esa imputación?
t i " i ' ) o bien directa y relevante ( " G a r c í a " 2 0 ) . términos que, a nues- Ciertamente, n o puede c o i n c i d i r c o n el ejercicio regular de la compe-
t r o j u i c i o , son aplicables también a la responsabilidad p o r a c t i v i d a d tencia p o r q u e si así fuera, todos los actos viciados en ésta n o serían
ilícita. imputables. C o m o bien se ha señalado (Escola), cabe estar, en este
aspecto, a la recognoscibilidad e x t e r i o r del acto.
• En fecha más cercana, la Corte Suprema señaló que, para considerar
Por l o d i c h o , en consecuencia, y en t a n t o n i los concesionarios
que el Estado nacional o sus organismos o entidades son responsables por
n i los licenciatanos de servicios públicos son órganos del Estado, co-
falta de servicio, no basta con enumerar genéricamente una serie de actos y
conductas, sino que es preciso examinar cada uno de ellos desde el punto i n c i d i m o s en este aspecto con Perrino en que los daños causados p o r
de vista de su legitimidad y de su aptitud para constituirse en factor causal éstos no se pueden, en p r i n c i p i o , i m p u t a r al Estado.
del daño cuyo resarcimiento se reclama^'.
1.4. Alcance de la indemnización
13.3. La imputabilidad jurídica del daño al Estado
E n las hipótesis en que proceda responsabilizar al Estado p o r su
El perjuicio indemnizable debe ser jurídicamente i m p u t a b l e al Es- actividad ilegítima, la reparación de los perjuicios incluye t a n t o el daño
tado ( M a r i e n h o f f ) . N o hay que c o n f u n d i r este requisito, entonces, con emergente c o m o el l u c r o cesante y el d a ñ o m o r a l . N o existe, en este
lo atinente a la relación de causahdad o, si se quiere, la i m p u t a b i l i d a d caso, razón para apartarse de los p r i n c i p i o s p r o p i o s del derecho c i v i l .
material (Cassagne).
Es decir, una cuestión es la vinculada con la relación de causalidad 2. Responsabilidad por actividad lícita
entre los perjuicios y el hecho, acto u omisión y otra m u y distinta, la
2.1. Fundamento
imputación jurídica de ese hecho, acto u omisión al Estado.
^ En ese esquema, se advierte que el recaudo de la i m p u t a b i l i d a d En nuestra opinión,, e l f u n d a m e n t o > d e la responsabihdad del Es-
jurídica al Estado está estrechamente conectado con las teorías de la t a d o p o r su a c t i v i d a d lícita radica en las garantías de la p r o p i e d a d ,
a t r i b u i b i h d a d de las conductas a aquél, de las que nos hemos ocupado i g u a l d a d , h b e r t a d y r a z o n a b i l i d a d consagradas p o r la Constitución
antes. N a c i o n a l (arts. 1 4 , 1 7 , l é , 19 y 2 8 , respectivamente), conjuntamente
Recordemos, n o obstante, que el Estado es una persona jurídica consideradas.
pública y, c o m o t a l , los criterios de imputación a él referidos deben N o es p o r ello procedente acudir para explicar la situación de
guardar correlación con esa naturaleza. E n ese sentido, n o es dudoso r e s p o n s a b i l i d a d sin a n t i j u r i d i c i d a d c u a n d o p o r hipótesis n o exista
que, h o y en día, la a t r i b u i b i l i d a d de u n a conducta al Estado se basa n o r m a a d m i n i s t r a t i v a expresa, genérica o específica, a la aplicación
en la relación orgánica, esto es, en la consideración de que sus agentes analógica de las disposiciones civiles que reglamentan el derecho de
son órganos de aquél y no representantes n i m a n d a t a r i o s . p r o p i e d a d p r i v a d a y las relaciones que a p a r t i r de él se generan entre
Desde esa perspectiva, la persona física que expresa la " v o l u n - los particulares.
t a d " del Estado subsume su v o l u n t a d psicológica en la orgánica, de N o es, p o r eso, coherente, el r a z o n a m i e n t o de la Corte en la causa
m o d o que al actuar por y para la organización, en la cual se incrusta, "Laplacette"^^, en la que, después de afirmar, correctamente, que la
permite que ésta, p o r su intermedio, actúe ella misma de m o d o directo responsabihdad del Estado nace, en casos c o m o ese, de la garantía
(García Trevijano Fos). de la i n v i o l a b i h d a d de la p r o p i e d a d consagrada p o r los arts. 14 y 17,
El órgano i m p u t a , así, su actuación al Estado. C N , busca, en c a m b i o , inadecuadamente, el m o d o de efectiyizarlas en
ausencia de ley expresa, en los p r i n c i p i o s del derecho c o m ú n .
" Corte Sup., 13/3/1997, " C a l a n t i " , Fallos 3 1 0 : 2 8 2 4 . E l l o , p o r q u e c o m o en su m o m e n t o señaló Fleiner, de cita inexcu-
2" Corte Sup., 8/9/1992, "García, Ricardo M , v. Buenos Aires, Provincia d e " Fallos sable en esta materia, frente al Estado actuando c o n f o r m e a derecho
315:1892. f a l l a n todos los preceptos sobre actos ilícitos.
2' • Corte Sup., 26/9/2006, "Friar SA v. Estado n a c i o n a l - M i n i s t e r i o d e Economía
O b r a s y Servicios Públicos - Secretaría d e A g r i c u l t u r a , Ganadería y Pesca y SENASA 22 Corte Sup., 2 6 / 2 / 1 9 4 3 , " L a p l a c e t t e , Juan v. Buenos Aires, P r o v i n c i a d e " . Fallos
s/daños y perjuicios ( o r d i n a r i o ) " . Fallos 3 2 9 : 3 9 6 6 , c o n s i d . 6°. 1 9 5 : 6 6 , c o n s i d . 5°.
1520 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . ,
R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO 1521

Es cierto que, como recuerdan algunos civilistas (Mosset Iturras-


p o r parte i m p o r t a n t e de la d o c t r i n a c i v i l c o m o causal de justificación
pe - Boffi Boggero), el derecho civil también reconoce la existencia de
(Mosset Iturraspe) p o r q u e cuando se ejerce u n derecho, la conducta
actos lícitos generadores del deber de reparar, p e r o n o l o es menos
que se desarrolla es una a c t i v i d a d en sí misma lícita.
que los f u n d a m e n t o s y las circunstancias que los j u s t i f i c a n son, en
Y decimos que la situación se aproxima p o r dos razones.
verdad, diferentes. M á s a u n : de acuerdo c o n alguna d o c t r i n a , estas
Én p r i m e r lugar, porque en el derecho c i v i l , el ejercicio regular de
situaciones se desplazan del ámbito de la responsabilidad civil (López u n derecho n o c o m p r o m e t e responsabilidad alguna; mientras que en
Cabana). el derecho a d m i n i s t r a t i v o , esa idea es predicable sólo en principio por-
Nuestro lúcido codificador c i v i l ya l o avizoró en el siglo X I X al que, c o m o ha d i c h o la C o r t e , el ejercicio p o r el Estado de sus poderes
contemplar en el art. 2 6 1 1 que las restricciones impuestas al d o m i n i o p r o p i o s n o constituye, normalmente, fuente de indemnización para
p r i v a d o sólo en el interés público son regidas p o r el derecho adminis- los particulares^-^", la cual, cuando se genera, responde, precisamente,
t r a t i v o . Esta disposición legal civil de reenvío recoge, a nuestro j u i c i o , a p r i n c i p i o s púbhcos'constitucionales.
u n p r i n c i p i o que trasciende la esfera específica de las restricciones y Y, en segundo término, p o r q u e en el campo del derecho público,
límites al d o m i n i o y se expande a t o d o el á m b i t o de los sacrificios a la el ejercicio de la competencia n o constituye, en verdad, u n derecho
propiedad por razones de interés público. en el sentido técnico p r i v a d o del término sino, c o n f o r m e ha enseñado
En el derecho civil se acude, para evidenciar la responsabilidad sin la d o c t r i n a itahana, una potestad, esto es, una atribución-deber cuyo
antijuridicidad, a las causas de justificación, entre las cuales se incluye, sentido radica en la satisfacción de u n interés ajeno (Santi R o m a n o ) .
a veces, el ejercicio regular de los derechos. C u a n d o el Estado desarrolla, pues, una actividad lícita dañosa,
Pero, ¿qué causal de justificación se deberá aplicar al Estado para ejerce regularmente su competencia, la cual es obligatoria e irrenuncia-
legitimar su actuación cuando e x p r o p i a , revoca actos o contratos p o r ble, de m o d o que si no l o hiciera, podría, eventualmente, configurarse
razones de o p o r t u n i d a d , mérito o conveniencia; cambia su política u n supuesto de responsabilidad ilegítima por omisión, sin perjuicio
económica o genera perjuicios a causa de obras públicas? de las concurrentes res,ponsabilidades políticas, administrativas, dis-
N i n g u n a de las causales de justificación del derecho c i v i l exphcan ciplinarias, p a t r i m o n i a l e s y, en su'caso, penales de los funcionarios
satisfactoriamente la situación que se genera cuando el Estado sacrifica pertinentes. ' / - •
derechos subjetivos de contenido p a t r i m o n i a l p o r razones de interés
público (Comadira), porque cuando el Estado así procede, no necesita 2.2. Requisitos
para legitimarse de la concurrencia de causales de justificación. Su
actuación es, en esos casos, intrínsecamente legítima aunque resulte E n los supuestos de responsabilidad del Estado p o r actividad legí-
dañosa. t i m a , además de los tres requisitos correspondientes al comportamiento
Por eso sí acierta la Corte en el citado caso " L a p l a c e t t e " , al sos- ilícito, se ha considerado que deben c o n c u r r i r :
tener que en ausencia de ley expresa, procede indagar la solución en a) ausencia del deber jurídico de soportar el daño;
los principios generales del derecho y en las disposiciones que rigen b) existencia de u n sacrificio especial en el afectado.
situaciones análogas de acuerdo con l o dispuesto p o r el art. 16, CCiv., A s i m i s m o , hay que destacar que, según la doctrina que se despren-
n o siendo otras, en la especie, que las contempladas en la Ley de E x p r o - dería de algunos p r o n u n c i a m i e n t o s del M á x i m o T r i b u n a l , la relación
piaciones, paradigma de la actuación lícita dañosa, idea esta recogida, de causalidad debería ser, además de directa e inmediata, exclusiva.
en lo sustancial, en las causas " M o t o r Once"^^ y "Petruccelli"^''. En las líneas que siguen, entonces, nos referiremos brevemente a
Si la actuación lícita del Estado que causa daños debiera asimilarse esta última exigencia y a los requisitos recién mencionados.
o aproximarse a algún supuesto del derecho c i v i l , él debería ser el del
ejercicio regular de los derechos, el cual, con razón, n o es considerado

23 Corte Sup., 9/5/1989, " M o t o r O n c e SA v. M u n i c i p a l i d a d d e la C i u d a d de Buenos


A i r e s " , Fallos 3 1 2 : 6 5 9 .
25 C o r t e Sup., 29/5/1964, "Suñe, E d u a r d o v. Segba", Fallos 2 5 8 : 3 2 2 ; i d . , 9/8/1983,
21 Corte Sup., 13/6/1989, " P e t r u c c e l l i , Fidel R y otra v. M u n i c i p a l i d a d d e Buenos
" W i n k l e r , luán L. v. G o b i e r n o de la N a c i ó n " , Fallos 3 0 5 : 1 0 4 5 ; i d . , 13/10/1994, " R o m á n
A i r e s " , Fallos 3 1 2 : 9 5 6 , también en LL 1990-A-469.
SAC V. Estado n a c i o n a l / M ° de Educ. y J u s t " , Fallos 3 1 7 : 1 2 3 2 y JA 1995-1-266.
R E S P O N S A B I L I D A D DEL E S T A D O 1523
1522 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . ,

2.2.7. La exclusividad en la relación de causalidad 2.2.2. Ausencia del deber jurídico de soportar el daño

Este requisito aparece en la causa " C o l u m b i a " ^ ' e implica, a nues-


En ciertos supuestos de responsabilidad estatal p o r actividad lí-
t r o m o d o de ver, una confusión conceptual.
cita, se ha requerido el carácter directo, inmediato y exclusivo de la
En efecto, si p o r daño entendemos el perjuicio susceptible de apre-
relación de causalidad^''.
ciación pecuniaria - c o m o l o define el Código C i v i l en el art. 1 0 6 8 - , n o
En rigor, es cuestionable que se exija la exclusividad en la relación
es dudoso que él n o debe ser s o p o r t a d o p o r el p a r t i c u l a r t a m p o c o en
de causahdad pues n o se llega a comprender cuáles son las razones que
la responsabilidad p o r actividad ilícita; y, siendo así, n o se comprende,
m i n a n el fundamento de la responsabilidad estatal para reparar aquella
entonces, p o r qué se enuncia esta circunstancia c o m o elemento p r o p i o
porción del daño a t r i b u i b l e a l Estado y en la que el p a r t i c u l a r o u n
de la responsabilidad p o r a c t i v i d a d lícita.
tercero no t u v i e r o n interferencia. Es decir, los mismos argumentos que
L o que sucede, en nuestra opinión, es que el concepto que debe ser
llevan a indemnizar a l p a r t i c u l a r en los eventos de exclusiva respon-
aprehendido no es, en reahdad, el del deber de soportar el daño - e n el
sabilidad estatal p o r actividad legítima son los que i m p o n e n idéntico
sentido i n d i c a d o - sino, en t o d o caso, el de la obhgación de soportar,
temperamento respecto del porcentaje de los perjuicios generados de
o n o , la conducta dañosa, es decir, el acto, omisión o hecho generador
esa f o r m a ( C o m a d i r a [ h . ] ) .
del p e r j u i c i o . N o se debe c o n f u n d i r la conducta que o r i g i n a el daño
Desde o t r o ángulo, se ha indicado la necesidad de que, tratándose
con el daño m i s m o .
de responsabihdad p o r actividad lícita del Estado, el requisito en aná-
Por ejemplo: el contratista no tiene la obligación de tolerar el acto
hsis se debe ponderar c o n suma prudencia^'', propiciándose, incluso,
rescisorio ilegítimo, m o t i v o p o r el cual si éste se emite y lo daña, debe
u n criterio restrictivo^^.
ser i n d e m n i z a d o . Sí tiene, en c a m b i o , el deber de aceptar la decisión
Desde nuestro p u n t o de vista, n o existe razón para extremar en el
revocatoria p o r o p o r t u n i d a d , mérito o conveniencia porque n o sería
caso la valoración de la causahdad, pues en el derecho administrativo,
coherente que al ejercicio de una potestad no le correspondiera el deber
a diferencia de l o que sucede en el derecho p r i v a d o , la admisión de
p i i b l i c o de a d m i t i r el acto que la instrumenta ( G a r r i d o Falla), con arre-
la responsabilidad sin a n t i j u r i d i c i d a d n o es excepcional, sino, simple-
glo a la indemnización que, en ese siipuesto, garantiza la Constitución
mente, una alternativa n o r m a l en el contenido de las competencias
N a c i o n a l y reconoce la L N P A . ' .'
del Estado.
El e x p r o p i a d o se puede resistir al despojo estatal de su p r o p i e d a d ,
La presunta " s e v e r i d a d " del derecho a d m i n i s t r a t i v o n o debería
pero no a la ley expropiatoria válida y, consecuentemente, a la entrega
hallar, a l menos aquí, u n ejemplo.
de la cosa, m o t i v o p o r el cual podría decirse - s i n que esto i m p o r t e , por
En suma, habría que, en nuestro entender, graduar la responsabi-
supuesto, considerar la expropiación c o m o una compraventa f o r z o -
l i d a d , pero no e x c l u i r l a , en función de la injerencia del a d m i n i s t r a d o ,
sa- que, de algtin m o d o , aquél tiene, c o m o señala el art. 1324, inc. 1°,
en particular, o de cualquier o t r o hecho eximente parcial de responsa-
CCiv., la necesidad jurídica de " v e n d e r " .
b i l i d a d p a t r i m o n i a l , sin acudir, p o r l o demás, a u n criterio restrictivo
Por l o d i c h o , en el supuesto de l a responsabihdad derivada de
al evaluar la relación de causahdad.
actuación ilícita, debería consignarse c o m o presupuesto c o m p r e n d i d o
en la a n t i j u r i d i c i d a d la inexistencia del deber de soportar la conducta
dañosa, mientras que en el caso de la responsabilidad p o r actividad
lícita, correspondería enunciar, p o r el c o n t r a r i o , la obligación de so-
p o r t a r aquella conducta.

Corte Sup., 31/10/1989, "Ledesma SA Agrícola Industrial v. Estado n a c i o n a l ( M ° 2.2.3. El sacrificio especial
d e Economía)", Fallos 3 1 2 : 2 0 2 2 ; también, para algunos, "Revestek", cit.
2 ' C o r t e Sup., 25/8/1988, " O s v a l d o C a r v a l l o s a v. M u n i c i p a l i d a d d e la C i u d a d d e Este r e q u i s i t o que i m p o r t a en r e a h d a d el verdadero f a c t o r de
Buenos A i r e s " , Fallos 3 1 1 : 1 6 6 8 .
atribución gravitante en el caso, i n d i c a en su formulación que el daño
28 D i s i d e n c i a d e Barra en " P r a d a " (Corte Sup., 16/6/1993, "Prada, Iván Roberto v.
Buenos Aires, P r o v i n c i a d e s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 1 6 : 1 4 6 5 ) y d e Fayt en " C a c h a u "
(id., 1 6/6/1993, " C a c h a u , O s c a r José v. Buenos Aires, P r o v i n c i a de s/daños y p e r j u i c i o s " . 2 ' Corte Sup., 2/8/2000, " C o l u m b i a Cía. F i n a n c i e r a v. Estado n a c i o n a l ( M i n . de Eco-
Fallos 3 1 6 : 1 3 3 5 ) , línea c o m p a r t i d a p o r T a w i l y M u r a t o r i o . nomía)", Fallos 3 2 3 : 1 8 9 7 .
1524 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . ,
RESPONSABILIDAD DEL ESTADO 1525

para ser indemnizado debe ser sufrido p o r una persona en particular


debe referir al s u f r i m i e n t o del p e r j u i c i o de manera desigual y despro-
o u n número determinado de ellas ( M a r i e n h o f f ) .
porcionada respecto del c o n j u n t o social ( L i m a y Sama).
Entre nosotros, su exigencia aparece, c o m o lo puntualiza M a -
E n definitiva, el daño se deberá i n d e m n i z a r si él, p o r sus carac-
rienhoff, en la m a y o r parte de la d o c t r i n a - r e s u l t a n d o de la j u r i s p r u -
terísticas, constituye una afectación irrazonable de la p r o p i e d a d p o r
dencia de la Corte en los casos " G r a t y " ^ " , " L o s Pinos"^', " M o t o r
i m p o n e r u n sacrificio superior al exigible igualitariamente a raíz de la
O n c e " 3 2 , " G a r c í a " 3 3 , " C o l u m b i a ' ' ^ " , "Buenos Aires E x i m p o r t " ^ ' y
vida en c o m u n i d a d . El reconocimiento de la responsabilidad del Estado
"Azzetti''^*^- y se vincula, en nuestra opinión, con la ubicación del
por a c t i v i d a d lícita no puede conducir, sin embargo, a garantizar la
f u n d a m e n t o de esta responsabilidad en la garantía constitucional de
obtención de ventajas económicas conjeturales n i a la neutralización
igualdad ante las cargas públicas, habida cuenta que con la singulari-
de la a c t i v i d a d del Estado en la prosecución de sus fines esenciales
dad o p a r t i c u l a r i d a d del daño, se comprometería esa igualdad si él no
("Manzr"*o, "Toll""', "Columbia"42).
se generahzara a través de la indemnización.
C l a r o está que la valoración de la existencia del sacrificio i n d e m -
M a r i e n h o f f ha sido en nuestro país q u i e n siempre cuestionó este
nizable se debe considerar p r e d e t e r m i n a d a cuando la ley i m p o n e la
f u n d a m e n t o . Además de vincular la idea c o n sistemas consthucionales
indemnización excluyendo, en esos casos y en ese aspecto, la valoración
distintos del nuestro, señaló lo inaceptable, a su j u i c i o , de no a d m i t i r
j u d i c i a l , c o m o ocurre con la expropiación (arts. 10 y ss., ley 2 1 . 4 9 9 )
la indemnización cuando el daño sea general, sin perjuicio de destacar
y la revocación p o r razones de o p o r t u n i d a d , mérito o conveniencia
que, en realidad, es casi imposible que una ley, p o r ejemplo, afecte en
(art. 18, L N P A ) , sin perjuicio de los límites que la p r o p i a legislación
f o r m a universal a todos los habitantes.
impone.
Desde nuestro p u n t o de vista, el recaudo en examen se debería
De lo hasta ahora expuesto se desprende que, a nuestro j u i c i o , la
referir a la razonabihdad^^ del perjuicio experimentado p o r el a d m i -
responsabihdad del Estado p o r su actuación lícita exigiría la conver-
nistrado, apreciable, en cada caso, en función de la p r o p o r c i o n a h d a d
gencia de c u a t r o recaudos: d a ñ o , causalidad, i m p u t a b i l i d a d y o b l i -
que aquél guarde con la cuota n o r m a l de sacrificios que supone la vida
en comunidad^^. gación de s o p o r t a r la c o n d u c t a d a ñ o s a , debiendo valorarse c o m o
f a c t o r de a t r i b u c i ó n a la i f r a z o n a b i l i d á d que se generaría si n o se
A la luz de esta perspectiva, la reparación no procedería cuando el
indemnizara el p e r j u i c i o , valorada,' e s a ' i r r a z o n a b i l i d a d , en relación
perjuicio fuera consecuencia n o r m a l y necesaria de la actividad lícita
con las exigencias de sacrificios i g u a l i t a r i o s impuestos p o r la v i d a en
desarrollada^'; p o r eso bien se dice que la "especialidad" del daño se
c o m u n i d a d ; y ello, con independencia de considerar p r e d e t e r m i n a d o
legalmente eí p e r j u i c i o cuando exista una n o r m a expresa que así l o
3» Corte S u p „ 18/3/1938, "Establecimientos A m e r i c a n o s Graty SA v, N a c i ó n " , Fallos
180:107. imponga.
Corte Sup., 22/12/1975, "Corporación Inversora Los Pinos SA v. M u n i c i p a l i d a d de
la C i u d a d d e Buenos A i r e s " , Fallos 2 9 3 : 5 1 7 .
2.3. Alcance de la indemnización^^
" Corte Sup., 9/5/1989, " M o t o r O n c e SA v. M u n i c i p a l i d a d d e la C i u d a d de Buenos
A i r e s " Fallos 3 1 2 : 6 5 9 .
33 Corte Sup., 8/9/1992, "García, Ricardo M . v. Buenos Aires, Provincia d e " . Fallos
Para nosotros, cuando la Constitución contempla el derecho de
315:1892. p r o p i e d a d , verdadero derecho n a t u r a l que el Estado n o crea sino que
" Corte Sup., 2/8/2000, " C o i u m b i a Cía. Financiera v. Estado n a c i o n a l " , cit. simplemente reconoce y garantiza, p r o c u r a asegurar que, c u a n d o él es
35 C o r t e Sup., 30/3/1993, " B u e n o s Aires E x i m p o r t SA v. Estado n a c i o n a l " . Fallos afectado, el d a m n i f i c a d o reciba u n a indemnización justa, pero difiere
316:397. la determinación del contenido de ésta a la reglamentación legal.
3' Corte Sup., 10/12/1998, " A z z e t t i , Eduardo N. v. Estado n a c i o n a l - Estado M a y o r
General del Ejército", Fallos 3 1 2 : 3 3 6 3 .
"O Corte Sup., 13/5/1997, " M a n z i , Carlos v. M i n i s t e r i o de Economía", Fallos 3 2 0 : 9 5 5
3 ' C o r t e Sup., 3 1 / 1 0 / 1 9 8 9 , " L e d e s m a SA Agrícola I n d u s t r i a l v. Estado n a c i o n a l " . (consids. 1 0 , in fine, y 1 1 , /n fine).
Fallos 3 1 2 : 2 0 2 2 .
1' Corte Sup., 25/8/1998, " T o l l , E n r i q u e y otros v. Asociación de O b r a s Sociales y
3" Corte Sup., 8/9/1992, " G a r c í a , Ricardo M . v. Buenos Aires, Provincia d e " . Fallos o t r a " , Fallos 3 2 1 : 2 3 4 5 ( c o n s i d , 9°).
3 1 5 : 1 8 9 2 , c o n s i d . 5°.
" 2 Corte Sup., 2/8/2000, " C o l u m b i a Cía. Financiera v. Estado n a c i o n a l " , c i t . ( c o n s i d .
Corte Sup., 13/10/1994, " R o m á n SAC v. Estado n a c i o n a l - M i n i s t e r i o de Educación
15).
y Justicia", Fallos 31 7:1232.
"•3 A m p l i a r este tema en los estudios c o m p l e m e n t a r i o s de este capítulo.
1526 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . . , R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO 1527

Por t a l m o t i v o , compete al ámbito de la reglamentación legal, en L a respuesta es positiva p o r q u e el i n s t i t u t o e x p r o p i a t o r i o c o n -


su variado contenido p i i b l i c o o p r i v a d o , determinar el alcance de la sagrado p o r la Constitución ha sido reglamentado legalmente y la
reparación debida cuando el derecho constitucionalmente reconocido expropiación es, sin d u d a , u n p a r a d i g m a conceptual de la actuación
y garantizado es v i o l a d o o, en su caso, sacrificado lícitamente. estatal lícita generadora de obligación i n d e m n i z a t o r i a .
N o es ocioso recordar, en este aspecto, que el art. 14, C N , ase- L a reglamentación legal de la expropiación y del concepto que le
gura a todos los habitantes de la N a c i ó n el goce de los derechos que da f u n d a m e n t o -sacrificio de derechos patrimoniales p o r razones de
enuncia, entre ellos, el de usar y disponer de la p r o p i e d a d , c o n f o r m e bien c o m ú n - está, así, destinada a tener en este aspecto, c o m o enseñó
con las leyes que reglamenten su ejercicio. Y que el art. 17, al consa- M a r i e n h o f f , una fuerza expansiva suficiente c o m o para considerar
grar la i n v i o l a b i l i d a d de la p r o p i e d a d , remite, en definitiva, su posible i n c l u i d a en ella, genéricamente, t o d o supuesto de responsabilidad
privación al f u n d a m e n t o que brinde la ley, a la cual también atribuye estatal p o r a c t i v i d a d lícita.
la calificación de u t i l i d a d pública de la expropiación, sin definir el La Ley de Expropiaciones actual, coherente con las anteriores,
contenido de la previa indemnización que requiere. excluye de la indemnización el lucro cesante, c o m o lo hacen, en general,
Por su l a d o , la Convención Americana sobre Derechos H u m a n o s las leyes provinciales de expropiación.
(Pacto de San J o s é de Costa Rica) determina en su art. 2 1 , inc. 2 ° , que La aphcación de la Ley de Expropiaciones se objeta, sin embargo,
ninguna persona puede ser p r i v a d a de sus bienes, excepto mediante el desde dos ángulos.
pago de mdemnización justa, por razones de u t i l i d a d pública o de i n - Por u n l a d o , y en relación concretamente con la revocación por
terés social y en los casos y según las formas establecidas por la ley. o p o r t u n i d a d , mérito o conveniencia, se ha expresado que aquella
El quantum, pues, de la indemnización n o se identifica en el plano n o r m a n o puede ser extendida p o r q u e la expropiación supone una
constitucional, necesariamente, con la reparación integral, en el caso, restricción c o n s t i t u c i o n a l al derecho de p r o p i e d a d mediante una ley
con la inclusión del l u c r o cesante. del Congreso v a l o r a t i v a d é l a u t i l i d a d pública del bien sujeto a de-
Si la protección constitucional de la p r o p i e d a d requiriera siempre sapropio. L o dijo la mayoría de la Corte Suprema al resolver respec-
y en t o d o caso la reparación integral del d a ñ o , sería inconstitucional t o de una revocación de aquella índole, de u n c o n t r a t o a d m i n i s t r a -
cualquier n o r m a legal o interpretación d o c t r i n a r i a - i n c l u s o c i v i l - que tivo'*''. • , '
l i m i t a r a ese alcance en cualquier supuesto. Este argumento parece suponer que, en razón de la garantía f o r m a l
implicada en la ley, sólo con f u n d a m e n t o directo, i n m e d i a t o y espe-
Sería, p o r ejemplo, en ese sentido, inaceptable el art. 1069, CCiv.,
cífico en ésta se puede revocar p o r m o t i v o s de o p o r t u n i d a d , mérito
en tanto autoriza al juez para que, en el caso de los actos ilícitos, atenúe
o conveniencia u n acto o c o n t r a t o a d m i n i s t r a t i v o . Y ya M a r i e n h o f f
la indemnización en atención a la situación p a t r i m o n i a l del deudor,
señaló que de la Constitución y de la interpretación que de ella ha he-
excepto el caso de d o l o . .4
cho la C o r t e , únicamente se desprende la exigencia de que tal clase de
Por eso, se i m p o n e aceptar que es razonable que en ciertos casos,
sacrificios n o se disponga graciosamente y sin responsabilidad para el
la reparación justa abarque, en l o que aquí interesa, t a n t o el daño
Estado ( M a r i e n h o f f ) .
emergente c o m o el l u c r o cesante; y que en otros, en cambio, la tutela
Por o t r o l a d o , se afirma que la aplicación del p r i n c i p i o que surge
justa pueda quedar l i m i t a d a .
de la Ley de Expropiaciones i m p o r t a limitar, por analogía, la protec-
A h o r a bien, en el derecho c i v i l n o existe una n o r m a t i v a que en
ción del derecho c o n s t i t u c i o n a l a la reparación i n t e g r a l , entendida
f o r m a expresa y sistemática regule el alcance de la indemnización en
ésta c o m o reparación comprensiva, siempre y en todo caso, de todo
los excepcionales casos en que ella procede c o m o derivación de la el daño (Barra).
actividad lícita.
Pero esta posición i m p l i c a , a su vez, p a r t i r de una afirmación, a
Y si se t o m a , p o r ejemplo, el caso del estado de necesidad, se puede nuestro j u i c i o , i n d e m o s t r a d a : el o t o r g a m i e n t o de ese derecho en el
decir que, más allá de los fundamentos que se expongan para justificar plano c o n s t i t u c i o n a l ; demostración que, de darse, implicaría a t r i b u i r
la indemnización, hay u n pensamiento u n i f o r m e en que ésta debe ser a la Constitución ei r e c o n o c i m i e n t o de u n derecho absoluto y, por
l i m i t a d a y n o plena (Compagnucci de Caso).
¿Cuál es la situación en el p l a n o administrativo? ¿Existe alguna <" Corte Sup., 20/9/1984, " E d u a r d o Sánchez G r a n e l O b r a s d e Ingeniería SA v. D i r e c -
legislación específica sobre el tema? ción N a c i o n a l d e V i a l i d a d " , Fallos 3 0 6 : 1 4 0 9 , ( c o n s i d . 8°, del v o t o m a y o r i t a r i o ) .
1528 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . . . 1529
R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO

t a n t o , el acogimiento de una concepción antisocial c o m o calificó la situación en los casos de a c t i v i d a d u n i l a t e r a l pues mientras en algunos
Corte Suprema los derechos así concebidos'*-^
se ha fijado u n temperamento restringido"'', en otros se ha a d m i t i d o
La determinación del contenido i n d e m n i z a t o r i o compete, pues, al
una reparación a m p h a ' " .
legislador. Y éste l o ha hecho en la Ley de Expropiaciones. Y ya vimos
que en el Código C i v i l no existe n o r m a alguna que regule la situación • Sin embargo, en fecha reciente, la Corte ha admitido la posibilidad
del daño lícito provocado p o r el Estado. Es más, consideramos que de la indemnización plena -contrariamente a lo sostenido en el t e x t o - en
de aplicarse aquel Código, se debería excluir la indemnización habida los casos de responsabilidad por actividad lícita o legítima en el ya men-
cuenta que, en él, el ejercicio regular de los derechos no genera obliga- cionado caso "El Jacaranda"-'" -donde se había revocado la adjudicación
ción reparatoria. O , en t o d o caso, también en su ámbito la reparación de una licencia- y, más cerca en el tiempo, en "Zonas Francas Santa Cruz
debería ser l i m i t a d a . SA"^' -como consecuencia de la revocación por razones de oportunidad,
El derecho público p o s i t i v o se nutrió, a la h o r a de determinar los
alcances de la indemnización debida p o r el Estado a causa de su activi- "8 Corte Sup., 22/12/1975, "Corporación Inversora Los Pinos S A v . M u n i c i p a l i d a d d e
la C i u d a d de Buenos Aires", Fallos 2 9 3 : 6 1 7 ; i d . , 15/5/1979, "Cantón, M a r i o E, v. G o b i e r n o
dad estatal lícita dañosa, de la fuerza expansiva del criterio fijado por
n a c i o n a l " . Fallos 3 0 1 : 4 0 3 ; i d . , 9/5/1989, " M o t o r O n c e SA v. M u n i c i p a l i d a d d e Buenos
la Ley de Expropiaciones, es decir, excluyendo el l u c r o cesante''*. A i r e s " , Fallos 3 1 2 : 6 5 9 ,
En l o que se refiere a la j u r i s p r u d e n c i a , n o es posible a f i r m a r " C o r t e Sup,, 23/1 1/1989, "Jucalán Forestal A g r o p e c u a r i a SA", Fallos 3 1 2 : 2 0 2 2 ;
que de ella se derive una conclusión clara e inequívoca. Se puede, sí, íd„ 16/6/1993, " C a c h a u , Oscar J, v, B u e n o s Aires, P r o v i n c i a d e " . Fallos 3 1 6 : 1 3 3 6 ; íd„
sostener la existencia de una tendencia a reconocer la indemnización 1 6 / 6 / 1 9 9 3 , " P r a d a , Iván R o b e r t o v, B u e n o s A i r e s , P r o v i n c i a d e " . Fallos 3 1 6 : 1 4 6 5 ;
id„ 16/6/1993, "Estancias Marré SAIAF e Y v. P r o v i n c i a d e Córdoba, La Pampa y Buenos
amplia cuando se trata de actividad contractual"'^, siendo oscilante la
A i r e s " , Fallos 3 1 6 : 1 4 2 8 .

5° • Corte Sup., 28/7/2005, "El Jacaranda SA v. Estado n a c i o n a l s/juicios d e c o n o c i -


"5 Corte Sup., 28/4/1922, " E r c o l a n o , Agustín v. Lanteri de Renshaw, Julieta", Fallos
m i e n t o " . Fallos 3 2 8 : 2 6 5 4 , pubücado también en EDA del 30/9/2005, En la citada causa, la
1 3 6 : 1 6 1 ; i d . , 27/6/1962, "Partido O b r e r o - Capital Federal", Fallos 2 5 3 : 1 3 3 ; id., 15/10/1962,
actora impugnó la v a l i d e z de u n acto a d m i n i s t r a t i v o q u e revocó la adjudicación a su favor,
"Font, Jaime y otros v. Estancias y Carnicerías C a l l i " , Fallos 2 5 4 : 5 6 ; i d . , 26/5/1974, "Bru-
tras u n c o n c u r s o público, de una licencia d e explotación d e una estación de radiodifusión,
nella v d a . de Weiser, Edda L. v. Fisco n a c i o n a l ( D G I ) " , Fallos 2 8 9 : 6 7 .
c o n f u n d a m e n t o en razones de interés público. Asirriismo, reclamó el resarcimiento integral
Se p u e d e n citar c o m o e j e m p l o s el art. 5°, ley 1 2 . 9 1 0 , h o y sin eficacia (en los casos d e los daños y p e r j u i c i o s sufridos. La C o r t e S u p r e m a consideró q u e la revocación de la
d e la paralización d e o b r a s y rescisión contractual); ley 1 3 . 0 6 4 d e Obras Públicas (arts. 3 0 adjudicación f u e válida v sostuvo q u e , en p a s o d e haberse p r o d u c i d o daños, d e b e n ser
y 3 8 , in fine); el entonces vigente R e g l a m e n t o de C o n t r a t a c i o n e s del Estado ( a p r o b a d o a t e n d i d o s en el c a m p o d e la r e s p o n s a b i l i d a d d e l Estado por su obrar lícito. En esa línea,
p o r dec. 5 7 2 0 / 1 9 7 2 , r e g l a m e n t a r i o del art. 61 d e ia d e r o g a d a Ley de C o n t a b i l i d a d ) y, expresó q u e " l a extensión del r e s a r c i m i e n t o d e b e atender las características particulares
a c t u a l m e n t e , el decreto delegado 1023/2001 al p r e c e p t u a r en su art. 12, i n c . a), último de cada situación. En el sub lite, y en t a n t o el daño resarcible satisfaga los requisitos
párrafo, q u e la revocación, modificación o sustitución de contratos p o r razones d e o p o r - e n u n c i a d o s en el c o n s i d e r a n d o p r e c e d e n t e , n o hay, c o m o p r i n c i p i o , f u n d a m e n t o para
t u n i d a d , mérito o c o n v e n i e n c i a , n o generará d e r e c h o a indemnización en c o n c e p t o de l i m i t a r l o al daño e m e r g e n t e c o n exclusión d e l l u c r o cesante, esto es, d e las ventajas e c o -
l u c r o cesante; también la ley 1 6 . 9 7 0 , de Defensa N a c i o n a l , consignó, en su m o m e n t o , nómicas esperadas d e a c u e r d o a p r o b a b i l i d a d e s objetivas estrictamente c o m p r o b a d a s "
al regular requisiciones militares, la i m p r o c e d e n c i a del p a g o del l u c r o cesante (art. 3 7 , (con cita de los precedentes "Sánchez G r a n e l " , Fallos 3 0 6 : 1 4 0 9 , y " C a c h a u , O s c a r José
in fine) y, ahora, la ley 2 3 . 5 5 4 , q u e sustituyó aquélla, r e p r o d u c e igual p r i n c i p i o (art. 3 5 ) . V, P r o v i n c i a d e Buenos A i r e s " , Fallos 3 1 6 : 1 3 3 5 ) , D e todos m o d o s , en el caso rechazó la
A s i m i s m o , esta ley establece en su art. 2 6 q u e c u a n d o se r e v o q u e n p o r razones de o p o r - pretensión de la actora de r e s a r c i m i e n t o p o r l u c r o cesante, p o r ausencia d e p r u e b a al
t u n i d a d , mérito o c o n v e n i e n c i a contratos del sector público n a c i o n a l , ya sean de obra, respecto. Por su parte, la D r a . Elena 1. H i g h t o n d e N o l a s c o votó en d i s i d e n c i a y sostuvo
d e servicio, de suministros o de consultoría, la indemnización q u e c o r r e s p o n d a abonar al q u e la r e s p o n s a b i l i d a d d e l Estado por o b r a r a d m i n i s t r a t i v o lícito genera la obligación d e
contratista n o incluirá el pago de l u c r o cesante ni gastos i m p r o d u c t i v o s . Y, s i g u i e n d o esta resarcir e x c l u s i v a m e n t e el daño e m e r g e n t e , p o r aplicación analógica d e l o d i s p u e s t o en
m i s m a línea, la ley 2 5 . 4 5 3 - d e n o m i n a d a d e déficit cero-, en su art. 1 1 , d e t e r m i n a q u e los el art. 10 de la Ley d e E x p r o p i a c i o n e s 2 1 , 4 9 9 , siendo, por tanto, i m p r o c e d e n t e , el r e c o -
contratos d e ejecución afectados por las r e d u c c i o n e s dispuestas en el art. 3 4 , ley 2 4 . 1 5 6 , n o c i m i e n t o d e l l u c r o cesante,
podrán revocarse p o r razones d e o p o r t u n i d a d , mérito o c o n v e n i e n c i a en el caso d e q u e
los contratistas o proveedores no a c e p t e n la reducción d e la contraprestación a cargo del 51 • C o r t e Sup,, 9/6/2009, " Z o n a s Francas Santa C r u z SA v. Estado n a c i o n a l - PEN -
sector público n a c i o n a l , siendo d e aplicación, en ese caso, lo dispuesto p o r el art. 2 6 , D t o , 1 5 8 3 / 1 9 9 6 s/daños y p e r j u i c i o s " , c o n v o t o en d i s i d e n c i a d e l D r a . Elena I, FHighton d e
ley 2 5 . 3 4 4 (dice este último artículo: " C u a n d o se r e v o q u e n p o r razones de o p o r t u n i d a d , Nolasco. Sin p e r j u i c i o d e l o d i c h o , la Corte rechazó la indemnización del l u c r o cesante p o r
mérito o c o n v e n i e n c i a contratos del sector público n a c i o n a l , ya sean d e obra, d e servicios, estimar q u e n o había sido a c r e d i t a d o c o n el g r a d o d e certeza necesario para q u e p r o c e d a
d e suministros o d e consultoría, la indemnización q u e c o r r e s p o n d a abonar al contratista su reparación. En c u a n t o a los h e c h o s d e l caso, relata la sentencia q u e el d e c . 5 2 0 / 1 9 9 5
n o incluirá el pago de lucro cesante ni gastos i m p r o d u c t i v o s " ) . del Poder Ejecutivo n a c i o n a l había a u t o r i z a d o la venta al p o r m e n o r de mercaderías d e
o r i g e n e x t r a n j e r o provenientes d e las z o n a s francas d e Río G a l l e g o s y Caleta O l i v i a , en
Corte Sup., 20/9/1984, " E d u a r d o Sánchez G r a n e l O b r a s d e Ingeniería SA", Fallos diversas l o c a l i d a d e s de la p r o v i n c i a de Santa C r u z . Por ello, el actor se presentó en la
306:1409. licitación pública c o n v o c a d a por la p r o v i n c i a d e Santa C r u z para el e s t a b l e c i m i e n t o y
R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO 1531
1530 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . .

nos entre los que, en nuestro país, la Constitución distribuye el poder. Es


mérito o conveniencia de un decreto que había establecido un determinado decir, tanto el Poder Ejecutivo como el Legislativo y el JudiciaF^ (Canda),
régimen jurídico-. a los que cabe agregar los denominados órganos extrapoderes, son po-
tenciales sujetos pasivos de una pretensión resarcitoria por las omisiones
Vil. RESPONSABILIDAD DEL ESTADO POR OMISIÓN cometidas. Y, en esta línea, también debemos recordar lo dicho al inicio
de esta obra sobre los criterios para delimitar las tres clásicas funciones
1 . Concepto. Requisitos. Cuestiones del Estado: administrativa, legislativa y judicial. Por ello, en el marco del
criterio mixto delineado en su momento, podemos afirmar que la omisión
• La responsabilidad del Estado puede resultar comprometida no sólo estatal puede ser administrativa, judicial o legislativa, independientemente
por su acción ilegítima, sino también por su omisión antijurídica. del Poder que la ejecute.
• Lo concerniente al tema de la responsabilidad del Estado por omisión • A su vez, la omisión generadora de la responsabihdad estatal por
se trata, por cierto, de una cuestión compleja y que, hasta el momento, no
omisión puede corresponder no sólo a una actividad reglada, sino tam-
cuenta con una delimitación precisa de sus contornos ni un tratamiento
bién discrecional, pues, como enseña Gómez Puente, deviene contraria
uniforme en la jurisprudencia.
al principio de irrenunciabilidad de la competencia y, en consecuencia,
• N o obstante, para comenzar con su estudio y a modo de aproximación ilegal, toda omisión de ejercicio carente de fundamentación objetiva. Es
general, podemos afirmar que la responsabilidad por omisión en el ámbito
que, si lo que se persigue es la sumisión absoluta del Estado al principio
del derecho administrativo tiene lugar, a nuestro juicio, cuando un poder
de juridicidad, esas omisiones, entonces, también deben ser controladas en
público, en ejercicio de alguna de las funciones estatales, omite la reali-
su razonabilidad y, en su caso, indemnizados los perjuicios que provoquen
zación en forma total o adecuada de la conducta a la que se encontraba
en el evento de que concurran los demás requisitos para la procedencia de
obligado y ésta era determinante para impedir el daño producido, siendo
la responsabihdad del Estado por omisión^^.
fácticamente posible su realización en las condiciones debidas.
• En un sentido similar, Canda afirma que "existirá responsabilidad • A su vez, al analizar la omisión en el marco de las funciones estata-
estatal por omisión cuando el Estado, en ejercicio de las funciones que le les, un elemento fundamental es evaluar .si estamos en presencia de un
son propias, omita antijurídicamente la realización de actos o hechos que, deber jurídico u obligación de medio o de resultado. Es que, como señala
de haberse llevado a cabo, hubieren resultado razonablemente idóneos Cassagne, "el Estado no puede siempre asegurar con eficacia y eficiencia
para evitar el daño efectivamente sucedido". la prestación de todos los servicios y medios adecuados para impedir los
• En ese esquema, los requisitos que hacen procedente la responsabilidad daños que sufren los ciudadanos cuando conducen automóviles y cruzan
del Estado por omisión antijurídica son: las rutas o autopistas, cuando son asaltados en los comercios o en sus ca-
a) poder público en ejercicio de alguna de las funciones del Estado; sas, cuando requieren medicamentos imprescindibles para su curación, o
b) omisión en forma total o adecuada de la conducta debida; como cuando se reclaman las obras de saneamiento ambiental necesarias
c) antijuridicidad de la omisión; para mejorar la salud de la población".
d) relación de causalidad; • Por ello, es de capital importancia esclarecer con precisión el tipo
e) daño; de deber a cargo de la Administración para evitar, por un lado, la irres-
f) posibilidad fáctica de haber cumplido con la conducta debida. ponsabilidad total por sus omisiones y, por el otro, su conversión en un
• En primer lugar, hay que señalar que la posibilidad de incurrir en asegurador contra todo riesgo.
responsabilidad por omisión no es exclusiva de ninguno de los tres órga- • Así ocurre, v. gr., con el poder de policía de seguridad (al que nos
referiremos en especial más adelante). Si se lo clasificara como obligación
la explotación de las dos zonas francas m e n c i o n a d a s . Así, ganó la licitación, celebró el de resultado, el Estado debería responder por todos los daños sufridos
contrato y comenzó a c u m p l i r c o n sus obligaciones. Sin emlDargo, luego, el Poder Ejecutivo por los habitantes. Esta conclusión, amén de ser contraria a la idea que
n a c i o n a l dispuso, p o r el dec. 1583/1996, dejar sin efecto el dec. 5 2 0 / 1 9 9 5 . Esta m o d i f i -
cación n o r m a t i v a , alegaba el actor, alteró s u s t a n c i a l m e n t e las c o n d i c i o n e s económicas
tenidas en cuenta p o r su empresa al m o m e n t o d e presentarse en la licitación. Ante las " • Así, p o r e j e m p l o , en C o r t e Sup., 4/5/1995, " D e Candía, Beatriz v. P r o v i n c i a de
nuevas circunstancias, señaló q u e el c u m p l i m i e n t o del c o n t r a t o hubiera resultado ruinoso Buenos A i r e s " , Fallos 3 1 8 : 8 4 5 . Ver, también, i d . , 31/10/2006, " T o r t o r e l l i , M a r i o Nicolás
para su parte por l o q u e , entonces, comunicó a la p r o v i n c i a d e Santa Cruz su decisión d e V. Buenos Aires, P r o v i n c i a de y otros s/daños y p e r j u i c i o s " , Fallos 3 2 9 : 4 8 2 6 .
resolver el c o n t r a t o . En ese escenario, el actor a d u j o la n u l i d a d e i n c o n s t i t u c i o n a l i d a d del
53 • En esa i n t e l i g e n c i a , p o r e j e m p l o , en las causas "Sykes" (C. N a c . Cont. A d m .
dec. 1583/93 y señaló q u e , a u n en el evento d e q u e se declarara la v a l i d e z del decreto,
Fed., sala 4°, 2/7/1985, "Sykes, V i o l e t a y otros v. B a n c o Central d e la República A r g e n t i n a
tenía d e r e c h o a o b t e n e r una indemnización por los p e r j u i c i o s sufridos c o n f u n d a m e n t o en
s / c o b r o d e dólares") y " M e n é n d e z " (id., sala 1 ' , 30/5/1990, " M e n é n d e z SAIC y A v . BCRA
la responsabilidad d e l Estado p o r su a c t i v i d a d lícita. La Corte entendió q u e había m e d i a d o
s/cobro", LL 1 9 9 0 - D - 4 1 3 ) .
una revocación p o r razones de o p o r t u n i d a d , mérito o c o n v e n i e n c i a .
1532 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A , . R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO 1533

se expondrá luego sobre la imposibilidad material como limitante de la • En ese orden de ideas,,entonces, los alcances hmitados de la concepción
responsabilidad estatal por omisión, es, cuanto menos, disvaliosa. tradicional del principio de legalidad como autorización, insusceptible de
• En cuanto a la omisión -segundo elemento o requisito-, se han ensaya- superar los inconvenientes de las omisiones, se completa con la idea de la
do distintas clasificaciones para referirse a ella (Nieto García - Canda). N o juridicidad como encargo o deber.
obstante, y siguiendo, en lo fundamental, a Gómez Puente, es posible cla- • Así las cosas, fluye naturalmente la identificación de la inactividad
sificar la inactividad estatal en formal o material; la primera se refiere a la como contraria al principio de juridicidad que encarga o establece el deber
omisión en el dictado de una declaración jurídica debida (actos administra- de la ejecución.
tivos, reglamentos, etc.) y la segunda, a la omisión o falta de realización de • Por lo demás, y en esta misma orientación, no es posible soslayar que
una actividad técnica, material o fisica. A su vez, por nuestra parte, agre- en nuestro derecho público nacional, como se explicó en otro capítulo,
gamos, como subespecies dentro de cada una de las clases de inactividad la competencia se caracteriza por la obligatoriedad de su ejercicio (cfr
señaladas, la omisión total o absoluta, por un lado, o parcial o relativa^'', art. 3°, LNPA).
por el otro (las que Canda identifica, respectivamente, con las nociones de • En conclusión, la inactividad administrativa o, en general, la omisión
omisión simple y comisión por omisión). Estatal, es subversora del Estado de derecho cuando repugna a la juridi-
• En tercer lugar, una de las cuestiones centrales consiste, como mencio- cidad, comprendida ésta como encargo o deber.
namos, en determinar en cada caso concreto si el Estado tenía la obligación • Dicho lo anterior, corresponde entrar en el análisis del fundamento
de realizar la actividad por cuya omisión se pretende responsabilizarlo; es normativo de la responsabilidad del Estado por omisión.
decir, si la omisión es antijurídica. • Destacamos, en primer término, que no existe, en el derecho público
• Sobre este punto, en nuestro derecho, se discute cuál es la norma argentino, una norma específica que regule la temática aquí abordada.
jurídica apHcable a las hipótesis de responsabilidad estatal omisiva, si su • Por ello, algunos autores entienden que resulta de aplicación analógi-
carácter es subjetivo u objetivo y, concretamente, cuál debe ser alcance de ca, en general, el art. 1074^^ (Marienhoff - Cassagne - Mertehikian - Barra-
la obligación legal que se infringe. za - Lamoglia). Salvo, aclaran algunos, supuestos específicos como los
• Sin embargo, antes de comenzar con el tratamiento de esas cuestio- referentes a los hechos u oínisiones de los funcionarios públicos en el
nes, es indispensable volver aquí sobre el concepto del principio de juri- ejercicio de sus funciones, por no cumplir sino de una manera irregular
dicidad como encargo o deber - a l que se aludió antes- superador de la las obligaciones legales., que le están impuestas,, en cuyo caso regiría el
idea del principio de legalidad como mera autorización o presupuesto art. 1112, CCiv. (Marienhoff - Cassagne). Desde otra perspectiva, se sos-
para actuar. tiene que la regulación aplicable está dada por el art. 1112, CCiv. (Can-
• Es que, como explica Gómez Puente, "debe darse un nuevo paso en da - Perrino - Gambier). Finalmeríte, en la jurisprudencia, encontramos
el principio de legalidad a tenor de la nueva realidad constitucional, de sentencias en las que se alude a una irregular prestación del servicio^* y
manera que la legalidad no sirva tan sólo como título activo de la acción expresamente se cita el art. IIIV^.
pública que legitime jurídicamente la intervención sobre la esfera de inte-
rés individual, sino también como título de sujeción que los destinatarios
55 « A r t . 1 0 7 4 : "Toda persona q u e p o r c u a l q u i e r omisión hubiese o c a s i o n a d o un
de la actuación administrativa pueden hacer valer frente a la omisión de p e r j u i c i o a o t r o , será responsable s o l a m e n t e c u a n d o una disposición d e la ley le impusiere
ésta, cuando de ello dependa la indemnidad de su esfera de interés indi- la obligación d e c u m p l i r el h e c h o o m i t i d o " .
vidual o se descuide el interés social y en la medida que así resulte de la
5^ • En "Zacarías", la Corte Suprema d e Justicia d e la Nación define la falta d e servicio
ley. Se trataría, pues, no tanto de que la Administración sólo pueda hacer c o m o " u n a violación o a n o r m a l i d a d frente a las o b l i g a c i o n e s d e l s e r v i c i o regular, l o c u a l
aquello que le autoriza la ley, como de que tenga que hacerlo si la falta de entraña u n a apreciación en c o n c r e t o q u e t o m a en c u e n t a la naturaleza d e la a c t i v i d a d ,
actuación administrativa obstaculiza en cualquier modo el interés público los m e d i o s de q u e d i s p o n e el servicio, el l a z o q u e u n e a la víctima c o n el s e r v i c i o y el
definido por ley". grado de p r e v i s i b i l i d a d del daño (Répertoire de la responsabilité de la puissance publi-
que, D a l l o z , Faute de service, n r o . 1 7 8 ) " , C o r t e Sup., 28/4/1998, "Zacarías, C l a u d i o H .
V. Córdoba, P r o v i n c i a d e y otros s/sumario". Fallos 3 2 1 : 1 1 2 4 .
^ i • En este último sentido, piénsese, p o r e j e m p l o , en el caso "Torres", f a l l a d o por • También se refieren a una irregular prestación d e l s e r v i c i o i d . , 19/10/1995, " B a d í n ,
el Superior Tribunal de la p r o v i n c i a de M e n d o z a , En esa o p o r t u n i d a d , no se debatía la Rubén y otros v. P r o v i n c i a de Buenos A i r e s s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 1 8 : 2 0 0 2 ; i d . ,
omisión total de la p r o v i n c i a en construir defensas para detener el aluvión sino q u e , antes 10/4/2003, " G o t h e l f , C l a r a M a r t a v, Santa Fe, P r o v i n c i a de s/daños y p e r j u i c i o s " Fallos
b i e n , el agravio se centraba en q u e las obras realizadas eran insuficientes y por e l l o m i s - 3 2 6 : 1 2 6 9 ; entre otros,
m o p u d i e r o n ser vencidas. Se advierte, pues, q u e la omisión p r o v i n c i a l no fue total sino
5' • Corte Sup,, 1 7/7/2007, " S e c u r f i n SA v, Santa Fe, P r o v i n c i a d e s/daños y p e r j u i -
parcial o relativa (Sup, Corte Just, M e n d o z a , 4/4/1989, "Torres, Francisco v. P r o v i n c i a de
c i o s " . Fallos 3 3 0 : 3 4 4 7 , c o n s i d , 5°, entre otros. Ver, también, las citas más a b a j o de "Bea",
M e n d o z a " , LL 1989-C-512),
" M o r r o w de Albanesi" y "Reynot",
1534 R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO 1535
C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . . .

• Por cierto, el debate podría no exceder las especulaciones meramen- razón para apartarse de este criterio y aplicar a la especie (responsabili-
te teóricas, salvo que se siguiera a Mertehikian en el sentido que si el dad del estado por sus omisiones ilícitas), con las salvedades pertinen-
art. 1074 es el aplicable, la abstención u omisión que atribuya responsa- tes, el régimen del género (responsabilidad estatal derivada de ilícitos
bilidad debe ser cometida con dolo, culpa o negligencia en las condiciones extracontractuales).
de los arts. 512, 902 y 1109, CCiv., mientras que si, en cambio, la solu- • En definitiva, en el estado actual de las cosas, lo trascendente no es
ción proviene de la disposición del art. 1112 y se acepta que ésta encierra la aplicación de uno u otro artículo que, por lo demás, no condiciona al
una noción objetiva de falta de servicio, la indagación de la conducta del operador jurídico en cuestiones posteriores, sino el sometimiento, o no, de
agente que se abstiene de actuar carece de relevancia, en principio, salvo la responsabilidad estatal por omisión a los principios de la responsabilidad
para responsabilizar también al agente. O, como mencionan Comadira del Estado derivada de ilícitos extracontractuales.
y Canda al comentar el fallo "Wellcome"'^, analizar la responsabihdad • En cuanto al carácter objetivo o subjetivo de la responsabilidad, la dis-
estatal por omisión desde la óptica del art. 1112 reviste trascendencia toda cusión, ciertamente, no es neutra en el plano de los hechos. Así, la adopción
vez que significa la aplicación de las mismas pautas seguidas por la Corte de la postura subjetiva supone cargar sobre las espaldas de los administra-
para responsabilizar al Estado por su obrar ilícito. dos la prueba de la culpa, extremo que, en la mayoría de los casos, es de
• Por nuestra parte, no creemos que necesariamente se siga de la adop- dificultosa acreditación con el consiguiente riesgo de dejar desprotegidas
ción de una u otra teoría la respuesta a la problemática de los factores de situaciones que merecen indemnización (Lamoglia). A su vez, la postura
atribución relativa al carácter subjetivo u objetivo de la responsabihdad. objetiva es potencialmente productora de u n Estado asegurador contra
Así parece confirmarlo la doctrina que, no obstante sugerir la aplicación todo riesgo si no se conjuga, en el decir de Nieto, con un contrabalance
del art. 1074 del Código de fondo, se enrola en la postura de la responsa- técnico o, nos permitimos sugerir, si no se formula una teoría de la res-
bilidad objetiva (Marienhoff - Cassagne). ponsabilidad por omisión unitaria, coherente y realista que combine todos
• Para concluir del modo en que lo hace, Mertehikian argumenta que, sus elementos.
si es el art. 1074 el aplicable, y a falta de norma legal que prevea una • En nuestro derecho, la tesis de la responsabilidad subjetiva ha sido
solución contraria, no se alcanza a percibir por qué debería prescindirse sostenida, entre otros, por Hu;tchinson y Mertehikian. Según esta teoría,
de la noción de dolo, culpa o negligencia si es el Estado el causante de la para que sea procedente un reclamo indemnizatorio contra el Estado por
abstención dañosa. una omisión antijurídica, será menester que su inactividad sea culposa o
• A nuestro juicio, este razonamiento soslaya que la aplicación de las dolosa; es decir, será necesario indagar en la subjetividad del funcionario
normas y los principios del derecho civil en el derecho administrativo no para responsabilizar no solamente a éste sino también al Estado**. Por el
es, en principio, directa sino analógica, realizando, siempre, las discri- contrario, para la tesis objetiva, no es preciso probar la culpa del funcio-
minaciones que impone la substancia de esta última rama jurídica'' (en nario ni bucear en su subjetividad para responsabilizar al Estado por sus
contra: Cuadros, con la teoría de "la pertinencia normativa"). Por ello, aun omisiones antijurídicas (Marienhoff - Tawil).
prescindiendo del art. 1112 y encuadrando el problema en el art. 1074, • A nuestro juicio, si el seguimiento de la doctrina de la responsabilidad
sería posible inscribirse en la teoría objetiva de la responsabilidad estatal subjetiva obedece, fundamentalmente, al temor de ilimitar la responsabili-
por omisión. dad del Estado por sus omisiones, creemos que el remedio podría perfilarse
• Ahora bien, desde nuestro punto de vista, es el art. 1112, CCiv., el desde otro ángulo sin necesidad de acudir a aquella teoría; en concre-
que rige la responsabilidad del Estado por sus omisiones antijurídicas. En to, desde una definición de la responsabilidad por omisión que contemple
efecto, lo relevante es el encuadre de la responsabilidad estatal por omisión todos sus elementos y los conjugue adecuadamente.
como una especie de responsabilidad ilícita extracontractual.
• Siendo ello así, y teniendo en cuenta que, actualmente, la doctrina de
Secretaría d e T u r i s m o s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 3 3 : 1 6 2 3 , c o n s i d . 1 0 ; i d . , 17/8/2010,
nuestro Máximo Tribunal fundamenta la responsabihdad del Estado por " M o r r o w de A l b a n e s i , V i v i a n a María y otros v. Estado n a c i o n a l - M i n i s t e r i o de Relaciones
sus hechos ilícitos en el art. 1112 del Código común*", no encontramos E x t , C o m e r c i o I n t e r n a c i o n a l y C u l t o s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 3 3 : 1 4 0 4 , c o n s i d . 8°; i d . ,
12/8/2008, " R e y n o t B l a n c o , Salvador Carlos v. Santiago d e l Estero, P r o v i n c i a d e s/daños
y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 3 1 : 1 6 9 0 , c o n s i d . 6°.
58 • C. N a c . C o n t A d m . Fed., sala 1 " , 6/6/1995, " W e l l c o m e A r g e n t i n a L i m i t e d v.
Estado n a c i o n a l " , LL 1996-A-600. • Esta línea f u e seguida por la C o r t e en el caso " O d o l " (Corte Sup., 11/5/1982,
" O d o ! SAIC V. Estado n a c i o n a l s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 0 4 : 6 5 1 , en especial, c o n s i d . 8°)
• Cfr. Corte Sup., 30/6/1941, " G a n a d e r a Los Lagos SA v. Nación A r g e n t i n a " , Fallos
y por la Cámara N a c i o n a l C o n t e n c i o s o A d m i n i s t r a t i v o Federal en las causas "Sykes" (sala
190:142.
4 ^ 2/7/1985, "Sykes, V i o l e t a y otros v. B a n c o C e n t r a l d e la República A r g e n t i n a s/cobro
w • Cfr. Corte Sup., 1 8/12/1984, " V a d e l l , Jorge F. v. Provincia de Buenos Aires", Fallos d e dólares") y " M e n é n d e z " (sala 1», 30/5/1990, " M e n é n d e z SAIC y A v. BCRA s/cobro",
3 0 6 : 2 0 3 0 . Y, más recientemente, ver id., 31/8/2010, "Bea, Héctor y otro v. Estado n a c i o n a l LL 1 9 9 0 - D - 4 1 3 ) .
1536 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . . R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO 1537

• Así las cosas, somos de la opinión de que la responsabilidad estatal • En cuarto lugar, para que proceda la responsabilidad del Estado por
derivada de su inactividad es de carácter objetivo*^. Esto así, en atención omisión, se requiere la existencia de una relación de causalidad entre ésta
a que se trata de un supuesto de responsabilidad del Estado por ilicitud y el daño. Se aplican, aquí, en general, las consideraciones volcadas su-
extracontractual y le resultan aplicables, en consecuencia, sus principios pra sobre la relación de causalidad en la responsabilidad del Estado por
rectores elaborados por la jurisprudencia del más Alto Tribunal y la doc- su actuación ilegítima. Sin perjuicio de ello, destacamos que acreditar la
trina científica. En efecto, no advertimos ninguna razón para postular la relación de causalidad en el campo de la responsabilidad por omisión i m -
aplicación de regímenes jurídicos distintos a los hechos y a las omisiones plica demostrar que, si hubiera tenido lugar la acción omitida, se hubiera
ilegítimas. Siendo ambos supuestos de ilegitimidad y no percibiendo dife- evitado total o parcialmente el daño producido. Por lo demás, la relación
rencias esenciales entre las omisiones y los hechos, o los daños que de ellos de causalidad debería ser, como se dijo, directa e inmediata aunque no, a
se siguen, no parecería razonable una dispar regulación en lo referente a nuestro juicio y contrariamente a lo resuelto por el más Alto Tribunal en
la subjetividad u objetividad de la responsabihdad. algunos pronunciamientos sobre responsabilidad por actuación legítima^^,
• Desde otro ángulo - y siempre dentro del análisis de la antijuridicidad exclusiva (en contra: Tawil).
de la omisión-, se plantea la necesidad de precisar el alcance o la exten- • En cuanto al daño - q u i n t o requisito-, resultan aplicables las ideas
sión que debe tener la obhgación legal de actuar que se infringe. Dicho desarroUadas al tratar la responsabilidad del Estado por actividad ilícita,
en otros términos, ¿la obligación de actuar debe ser expresa o puede ser a donde remitimos. Recordamos, simplemente, que el daño resarcible en la
implícita? responsabilidad estatal por su inactividad es el perjuicio cierto y actual o
• Para responder a ese interrogante, es menester acudir a los criterios futuro, aunque no meramente hipotético o conjetural, apreciable en dinero
para determinar el alcance de las competencias de los órganos estatales*^, y subsistente al momento de la reparación, comprensivo tanto del daño
emergente como del lucro cesante, incluyendo el daño moral.
juntamente con la visión del principio de juridicidad propuesta en esta obra
• Por último, como ha señalado Perrino, la inactividad administrativa
y el carácter obligatorio, también aludido antes, de la competencia.
requiere como condición que la actividad que la Administración omitió
• Y, en ese sentido, creemos que si el Estado está en condiciones de
desarroUar fuera materialmente posible, pues -con cita de N i e t o - el derecho
evitar el daño y es competente para ello, debe hacerlo para no incurrir
se detiene ante las puertas de lo imposible. En esta misma línea, Gómez
en responsabilidad por omisión. De este modo, entonces, se superaría la
Puente incluye como elemento o. condición .para delimitar los supuestos
discusión sobre si la obligación legal de actuar debe ser expresa o implícita,
de inactividad administrativa aldeber legal de contenido posible; es decir,
genérica o concreta*''.
la posibilidad real o efectiva de llevar a cabo la conducta constitutiva del
contenido del deber jurídico. ,
82 C r i t e r i o este sostenido p o r la Corte en " S e c u r f i n " c u a n d o sostiene: " l a responsabi- • Es que, en efecto, no resulta coherente, en nuestro entender, pretender
l i d a d de la p r o v i n c i a por la acción defectuosa d e Registro de la P r o p i e d a d I n m u e b l e , al
responsabilizar al Estado por los dáñOs seguidos de una omisión cuando le
c u m p l i r las funciones estatales q u e le son propias, se enrola dentro d e la idea objetiva d e la
falta de servicio - p o r acción o por omisión- y traduce u n a responsabilidad extracontractual
resultaba materialmente imposible su realización. N o es correcto exigirle
del Estado en el ámbito del d e r e c h o público, c o n f u n d a m e n t o en el art. 1 1 1 2 del Código a ninguna persona y, entre éstas, al Estado, una conducta que exceda sus
C i v i l " (Corte Sup., 17/7/2007, " S e c u r f i n SA v. Santa Fe, P r o v i n c i a d e s/daños y p e r j u i c i o s " . posibihdades de realización y, con mayor razón, responsabilizarla de las
Fallos 3 3 0 : 3 4 4 7 , c o n s i d . 5°). Ver, también, i d . , 20/10/2009, "Parisi d e Frezzini, Francisca consecuencias.
v. Laboratorios Huilén y otros s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 3 2 : 2 3 2 8 .

83 • En síntesis, ya se d i j o q u e el a l c a n c e d e la c o m p e t e n c i a de u n órgano o ente c o n s e c u e n c i a s general izabies d e la decisión a t o m a r " (Corte Sup., 6/3/2007, " M o s c a ,
estatal se d e b e determinar sobre la base de los siguientes e l e m e n t o s : en p r i m e r lugar, el H u g o A r n a l d o v. Buenos Aires, P r o v i n c i a d e [Policía Bonaerense] y otros s/daños y per-
texto expreso d e la norma; en segundo, el c o n t e n i d o r a z o n a b l e m e n t e implícito inferible d e j u i c i o s " . Fallos 3 3 0 : 5 6 3 , c o n s i d . 6°. En la m i s m a línea. Corte Sup., 20/10/2009, "Parisi de
ese texto expreso y, en tercer término, los poderes inherentes derivables d e la naturaleza Frezzini, Francisca v. Laboratorios Huilén y otros s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 3 2 : 2 3 2 8 ,
o esencia del órgano o ente d e q u e se trate, interpretados, los dos últimos elementos, a del d i c t a m e n d e la P r o c u r a d o r a Fiscal a l q u e la C o r t e adhiere.
la luz del p r i n c i p i o de la e s p e c i a l i d a d .
85 • Corte Sup., 15/8/1995, "Revestek SA v. B a n c o Central d e la República A r g e n t i n a
8'' • D e todos m o d o s , la Corte señaló q u e en m a t e r i a d e responsabilidad del Estado y o t r o s/ o r d i n a r i o " . Fallos 3 1 8 : 1 5 3 1 , c o n s i d . 6°; i d . , 31/10/1989, "Ledesma SA Agrícola
por omisión " c o r r e s p o n d e d i s t i n g u i r entre los casos d e o m i s i o n e s a mandatos expresos y Industrial v. Estado n a c i o n a l ( M ° d e Economía) s/nulidad d e resolución". Fallos 3 1 2 : 2 0 2 2 ,
d e t e r m i n a d o s en una regla de derecho, en los q u e p u e d e identificarse una clara falta del c o n s i d . 1 5 . D e t o d o s m o d o s , destacamos q u e en causas v i n c u l a d a s c o n la responsabilidad
servicio, de aquellos otros casos en los q u e el Estado está o b l i g a d o a c u m p l i r una serie de de Estado por omisión antijurídica, la C o r t e h i z o lugar a pretensiones i n d e m n i z a t o r i a s sin
objetivos fijados p o r la ley sólo d e u n m o d o general e i n d e t e r m i n a d o , c o m o propósitos a atender al requisito d e la e x c l u s i v i d a d en la relación causal. (Cfr.: i d . , 19/10/1995, " B a d í n ,
lograr en la m e j o r m e d i d a p o s i b l e " . Y agregó q u e "La determinación de la responsabili- Rubén y otros v P r o v i n c i a d e Buenos A i r e s s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 1 8 : 2 0 0 2 ; i d . ,
d a d c i v i l del Estado por omisión d e m a n d a t o s jurídicos i n d e t e r m i n a d o s debe ser m o t i v o 1/12/1992, "Pose, José D a n i e l v. P r o v i n c i a d e l C h u b u t y otra s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos
d e u n j u i c i o estricto y basado en la ponderación d e los bienes jurídicos protegidos y las 3 1 5 : 2 8 3 4 , entre otros).
1538 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A .
R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO 1539
• N o se trata esta propuesta de legitimar las omisiones estatales si-
• De esta forma, entonces, adquiere rango constitucional, en nuestra
no de comprender el juego dialéctico entre realidad y derecho. En palabras
opinión, el principio de la imposibilidad fáctica como limitante de lo jurí-
de Gómez Puente, no se persigue encontrar una cláusula excusatoria de
dico en la procedencia de la responsabilidad del Estado por omisión.
los deberes legales, sino de asegurar la conexión del ordenamiento jurí-
dico con la realidad; reconocer el influjo normativo de lo fáctico sobre el
propio ordenamiento jurídico, cuya función transformadora de la reahdad 2. Algunos casos de responsabilidad del Estado por omisión
y cuya imperatividad tienen límites materiales o naturales, de imposible
• Por cierto, los supuestos en los que el Estado puede incurrir en omi-
superación.
siones antijurídicas en el marco de sus funciones son muy variados. Por
• Así, sentencias que reconozcan indemnizaciones por omisiones inevi- ello, una enunciación y análisis de todos los casos excedería con creces los
tables materialmente para el Estado conspirarían contra la igualdad y los márgenes del capítulo.
principios de la justicia distributiva. Supondrían una irrealidad que, bajo la
• N o obstante mencionamos - y sin pequicio de que luego nos referire-
aparente satisfacción de la justicia en el caso concreto, subvertirían el Esta-
mos a algunos supuestos en particular- que se ha discutido la responsa-
do de derecho minando la consecución del bien común en forma igualitaria.
bilidad del Estado por omisión en materia de seguridad carcelaria (vgr.:
A su vez, socavarían la confianza en el Estado generando falsas expectativas
"Badín"^^ "Vergnano de Rodríguez"^*, "Gothelf"^^ "Manzoni"^^)^ j g .
y, por ende, injustificados reclamos, únicamente susceptibles de adecuada
guridad aeroportuaria y transporte (v.gr.: "Fabro"^", "Coco"'''), sanitaria
atención en un contexto ajeno a las limitaciones fácticas imperantes en
y atención médica (v.gr.: "Brescia"''*, "Schauman"^'^, "Cohen"^*), poder
cada tiempo y lugar (en similar sentido: Gómez Puente).
de policía financiero (las ya citadas causas de Cámara "Sykes" y " M e -
• N o obstante, es claro, en nuestro entender, que la situación de impo- néndez"), seguridad en espectáculos públicos (v.gr.: "Zacarías"^', " M o s -
sibilidad no debe ser culpable ni reprochable al Estado. Dicho en otros
términos, si es el propio Estado quien se pone en la situación de impotencia,
nivel i n t e r n o c o m o m e d i a n t e la cooperación i n t e r n a c i o n a l , e s p e c i a l m e n t e económica y
no podrá alegar a ésta como causal para no responder por su omisión.
técnica, para lograr progresivamente la p l e n a e f e c t i v i d a d d e los d e r e c h o s q u e se derivan
• Lo dicho hasta aquí, a nuestro juicio, encontraría sustento positivo en d e las n o r m a s económicas, s o c i a l e s y sobre e d u c a c i ó n , c i e n c i a y c u l t u r a , c o n t e n i d a s en
el art. 75, inc. 22, de la Norma Fundamental, que otorgó jerarquía cons- ia Carta de la Organización d e los Estados A m e r i c a n o s , r e f o r m a d a p o r el P r o t o c o l o de
titucional a ciertos tratados de derechos humanos y que, en su articulado, Buenos Aires, en la medida dé los recursos disponibles, p o r vía legislativa u otros m e d i o s
además dé reconocer los derechos, se refieren igualmente "a la medida de j u d i c i a l e s " (destacado p r o p i o ) . .' , ; ,,

los recursos disponibles"** o al "nivel que permitan los recursos púbhcos ™ • Corte Sup., 19/10/1995, " B a d í n , Rubén y otros v. P r o v i n c i a d e Buenos Aires
y los de la comunidad"*'' o a "la organización y los recursos de cada Es- s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 1 8 : 2 0 0 2 . '
t a d o " * ' o " a l disfrute del más alto nivel posible"*'.
" • C o r t e Sup., 28/5/2002, " V e r g n a n o de-Rodríguez, Susana Beatriz v. Buenos Aires,
P r o v i n c i a de y otro s/daños y p e r j u i c i o s " , Fallos 3 2 5 : 1 2 7 7 .

• Así, el Pacto d e San José d e Costa Rica, en su art. 2 6 , u b i c a d o en el Capítulo III '2 « C o r t e Sup., 10/4/2003, " G o t h e l f , C l a r a M a r t a v. Santa Fe, P r o v i n c i a d e s/daños
relativo a los d e r e c h o s económicos, sociales y c u l t u r a l e s , d i s p o n e , al tratar del " d e s a r r o - y p e r j u i c i o s " , Fallos 3 2 5 : 1 2 6 9 .
llo p r o g r e s i v o " , q u e " l o s Estados Partes se c o m p r o m e t e n a a d o p t a r p r o v i d e n c i a s , tanto a
'3 • Corte Sup., 23/12/2004, " M a n z o n i , Juan Carlos y López, N o r m a María v. G o -
b i e r n o d e la P r o v i n c i a d e J u j u y " , Fallos 3 2 7 : 5 8 5 7 .
8 ' • En tal sentido, la Declaración A m e r i c a n a d e los D e r e c h o s y Deberes del H o m b r e
d i s p o n e q u e " t o d a persona t i e n e d e r e c h o a q u e su salud sea preservada p o r m e d i d a s s a n i - " • Corte Sup., 9/11/2000, " F a b r o , Víctor y otra v. Río N e g r o , P r o v i n c i a d e y otros
tarias y sociales, relativas a la alimentación, el vestido, la v i v i e n d a y la asistencia médica, s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 2 3 : 3 5 6 8 ,
c o r r e s p o n d i e n t e s al nivel que permitan los recursos públicos y los de la comunidad" (la
^5 * C o r t e Sup., 29/6/2004, " C o c o , Fabián A l e j a n d r o v. Buenos Aires, P r o v i n c i a d e
cursiva fuera del o r i g i n a l ) .
y otros s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 2 7 : 2 7 2 2 .
*8 • En la Declaración U n i v e r s a l d e D e r e c h o s H u m a n o s , se m e n c i o n a q u e " t o d a
'<> • Corte Sup., 2 2 / 1 2 / 1 9 9 4 , " B r e s c i a , N o e m í Lujan v. Buenos Aires, P r o v i n c i a d e y
persona, c o m o m i e m b r o de l a s o c i e d a d , tiene d e r e c h o a la seguridad social, y a o b t e -
otros s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 1 7 : 1 9 2 1 .
ner, m e d i a n t e el esfuerzo n a c i o n a l y la cooperación i n t e r n a c i o n a l , habida cuenta de la
organización y los recursos de cada Estado, la satisfacción d e los d e r e c h o s económicos, ''' • Corte Sup., 6/7/1999, " S c h a u m a n d e Scaiola, M a r t h a Susana v. P r o v i n c i a de
sociales y culturales, indispensables a su d i g n i d a d y el l i b r e d e s a r r o l l o de su p e r s o n a l i d a d " Santa C r u z y o t r o s/daños y p e r j u i c i o s " , Fallos 3 2 3 : 1 3 9 3 .
(la bastardilla es agregada).
• Corte Sup., 30/5/2006, " C o h é n , Eliazar v. Río Negro, Provincia d e y otros s/daños
*' • En el Pacto I n t e r n a c i o n a l d e D e r e c h o s Económicos, Sociales y Culturales, se y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 2 9 : 2 0 8 8 .
dispone q u e "los Estados Partes en el presente Pacto r e c o n o c e n el d e r e c h o de toda persona
al disfrute del más alto nivel posible de salud física y m e n t a l " . • C o r t e Sup., 28/4/1998, "Zacarías, C l a u d i o H . v. P r o v i n c i a de Córdoba y o t r o s " .
Fallos 3 2 1 : 1 1 2 4 .
1540 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . , R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO 1541

ca"'"), en la realización de obras ("Torres"** y "Santarelli" ambos de lidad en un evento en el cual ninguno de sus órganos o dependencias tuvo
la Suprema Corte de Mendoza, "Iturbe"'^), del Poder Judicial ("De Gan- parte, toda vez que no parece razonable pretender que su responsabilidad
día"'", "Tortorelli"''), vinculadas con situaciones de guerra ("Assmuss"), general en orden a la prevención de los delitos pueda llegar a involucrarla
en relación con deberes regístrales (el clásico "Vadell"'*, "Decker"'^, " V i - a tal extremo en las consecuencias dañosas que ellos produzcan con motivo
c e n t e " " , "Securfin""), falta de mantenimiento y señalización en rutas de hechos extraños a su intervención directa..."'^.
("Cebollero"'"), entre otras hipótesis y casos. • Así, en el caso "Juárez", el Máximo Tribunal particulariza esa doc-
trina para las omisiones en el ejercicio del deber de seguridad policial al
2.7. Omisiones en el ejercicio del poder de policía de seguridad sostener que "...como regla, no es razonable asignar al deber genérico de
y, en particular, policial 'defender contra las vías de hecho la vida, la libertad y la propiedad de las
personas' -a que alude el art. 8°, ley 21.965- un alcance de tal amplitud
• La Corte, desde antiguo, tiene dicho, en materia de responsabilidad en orden a la responsabilidad del Estado por la prevención de los delitos
del Estado, que "quien contrae la obligación de prestar un servicio lo debe que heve a la absurda consecuencia de convertir al Estado nacional en
realizar en condiciones adecuadas para llenar el fin para el que ha sido responsable de las consecuencias dañosas de cualquier delito, extraño
establecido, siendo responsable de los perjuicios que causare su incumph- a su intervención directa y competencia (doctrina de Fallos 312:2138,
miento o irregular ejecución"'*. consid. 5 " , y 3 1 3 : 1 6 3 6 ) " « .
• Y, específicamente en lo relativo al poder de policía de seguridad, ya es • Esta misma idea relacionada con en el deber de seguridad policial ya
clásica su afirmación de que "el ejercicio del poder de policía de seguridad la había postulado en el caso " C ó r d o b a " ' " y "López Casanegra"".
que corresponde al Estado no resulta suficiente para atribuirle responsabi- • Ahora bien, el precedente citado en líltimo lugar presenta particular
interés pues, en una consideración que no reprodujo en "Juárez", sostuvo
que era oportuno "recordar que la pretensión de ser indemnizado sobre
*° • Corte Sup., 6/3/2007, " M o s c a , H u g o A r n a l d o v. Buenos Aires, P r o v i n c i a d e
tales bases requiere dar cumplimiento a la carga de individualizar del modo
(Policía Bonaerense) y otros s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 3 0 : 5 6 3 .
más claro y concreto que las circunstancias del caso hicieran posible cuál
• Sup. Corte Just. M e n d o z a , 4/4/1989, "Torres, Francisco v. Provincia de M e n d o - ha sido la actividad que específicamente se reputa como irregular, vale
z a " , LL 1989-C-512.
decir, describir de manera objetiva.-en qhé ha consistido la irregularidad
" • Sup. Corte Just M e n d o z a , 26/6/1991, "Santarelli, V i c e n t e y otros v. D e p a r t a m e n t o queda sustento al reclamo, sin que basté al'efecto con hacer referencia a
General d e Irrigación", LL 1991-E-210. una secuencia genérica de hechos y actos (Fallos 317:1233, consid. 8°), y
• Corte Sup., 12/8/2003, " I t u r b e , N o r a del C a r m e n y otra v. Córdoba, P r o v i n c i a que "En este sentido, los actores no acreditaron por qué razones concre-
d e s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 2 6 : 2 7 4 9 . tas sus bienes debían ser custodiados por la Policía Federal Argentina o
Gendarmería Nacional, si existía una orden para así hacerlo, en su caso
" I • Corte Sup., 4/5/1995, " D e Gandía, Beatriz v. P r o v i n c i a de Buenos A i r e s " , LL
1996-D-79; Fallos 3 1 8 : 8 4 5 . cuáles fueron sus fundamentos, como tampoco quién la impartió y recibió,
o si fue irregularmente incumphda"'*.
85 • Corte Sup., 31/10/2006, " T o r t o r e l l i , M a r i o Nicolás v. Buenos Aires, Provincia de
y otros s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 2 9 : 4 8 2 6 .

8 ' • Corte Sup., 18/12/1984, " V a d e l l , jorge Fernando v. P r o v i n c i a de Buenos A i r e s " , • Cfr. C o r t e Sup., 7/11/1989, " R u i z , M i r t h a Edith y otros v. Buenos Aires, Provincia
Fallos 3 0 6 : 2 0 3 0 . d e s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 1 2 : 2 1 3 8 , c o n s i d . 5; entre m u c h o s otros hasta la a c t u a l i -
d a d : i d . , 6/3/2007, " M o s c a , H u g o A r n a l d o v, B u e n o s Aires, P r o v i n c i a d e (Policía B o n a e -
" • Corte Sup., 25/3/2003, " D e c k e r , G u i l l e r m o Ángel v. Buenos Aires, P r o v i n c i a de rense) y otros s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 3 0 : 5 6 3 ; i d . , 5/5/2007, " C l e l a n d , G u i l l e r m o
s/sumario". Fallos 3 2 6 : 9 6 4 . Federico v. C o s t i l l a , Raúl O r l a n d o y o t r a " . Fallos 3 3 0 : 2 5 7 0 , v o t o del Dr. L o r e n z e t t i ; i d . ,
6/5/2008, "Ferrell, Patrick Martín v. Buenos Aires, P r o v i n c i a d e y otros s/daños y p e r j u i -
88 • Corte Sup., 30/9/2003, " V i c e n t e , A d r i a n a Elizabeth v. Buenos Aires, P r o v i n c i a
c i o s " , c o n s i d . 1 7 , entre otros.
d e y otros s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 2 5 : 4 0 0 3 .

8 ' • Corte Sup., 1 7/7/2007, " S e c u r f i n SA v. Santa Fe, P r o v i n c i a de s/daños y p e r j u i - 93 * C o n s i d . 6°.


c i o s " . Fallos 3 3 0 : 3 4 4 7 . • Corte Sup., 22/3/2005, "Córdoba, R a m o n a A n a R e m i g i a y o t r o v. Buenos Aires,
' " • Corte Sup., 11/6/2003, " C e b o l l e r o , A n t o n i o Rafael y otros v. Córdoba, P r o v i n c i a P r o v i n c i a d e s/beneficio d e litigar sin gastos". Fallos 3 2 8 : 4 9 4 , c o n remisión ai d i c t a m e n
de s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 2 6 : 1 9 1 0 . del p r o c u r a d o r g e n e r a l .

' 1 • Corte Sup., 3/10/1938, "Ferrocarril O e s t e " , Fallos 1 8 2 : 5 ; entre m u c h o s otros '5 • Corte Sup., 1 5/8/2006, "López Casanegra, A n t o n i o y otra v. Santiago del Estero,
hasta la actualidad (v.gr.: i d . , 12/8/2008, " R e y n o t B l a n c o , Salvador Carlos v. Santiago d e l P r o v i n c i a de y o t r o s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 2 9 : 3 1 6 8 , c o n s i d . 4°,
Estero, Provincia de s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 3 1 : 1 6 9 0 ) . 98 • C o n s i d . 6°.
1542 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . . 1543
R E S P O N S A B I L I D A D DEL E S T A D O

• En definitiva, y como conclusión de este punto, es claro que para la • La Corte, luego de recordar que el ejercicio del poder de policía de
Corte no es suficiente para responsabilizar al Estado por falta de servicio la seguridad que corresponde al Estado no resulta suficiente para atribuirle
mera invocación de un deber genérico de seguridad policial. Sin embargo, la responsabilidad en un evento en que no tuvo parte, agregó que "la eventual
generalidad de ese deber se especificaría comprometiendo, eventualmente, responsabilidad que genere la existencia de animales suehos en la ruta debe
la responsabilidad del Estado por omisión, si se acreditaran razones concre- atribuirse, en virtud de lo dispuesto en el art. 1124, a su propietario, quien
tas por las que los bienes o las personas deben ser custodiados, si existe una en el caso no ha sido demandado""^. Por tal motivo, rechaza la acción
orden para así hacerlo, indicando, en su caso, cuáles son sus fundamentos, contra la provincia.
quién la impartió y recibió o si fue irregularmente incumplida. • En vinculación con la empresa concesionaria, concluye, en lo funda-
mental, que tampoco podía responsabilizársela pues ésta no puede asumir
2.2. Responsabilidad del Estado por omisión frente al usuario, por la delegación de funciones propia de la concesión,
por animales sueltos en rutas derechos o deberes mayores a los que correspondían al concédeme, máxime
si se advierte que, conforme a los términos del Reglamento de Explotación,
• En materia de responsabihdad del Estado por omisión como conse- las funciones de policía de seguridad y de tránsito debían ser ejercidas por
cuencia de animales sueltos en rutas, corresponde citar, en primer lugar, la la autoridad pública. En resumen, si no procede responsabilizar a la pro-
causa " R u i z " En esa ocasión, la Corte, al igual que como vimos en el vincia, con mayor razón no podrá hacérselo respecto de la concesionaria,
acápite anterior, señaló que el ejercicio del poder de policía de seguridad quien, como delegado del Estado provincial, no puede asumir mayores
que corresponde al Estado no resulta suficiente para atribuirle responsabi- responsabilidades que el delegante.
hdad en un evento en el cual ninguno de sus órganos o dependencias tuvo • Análogos argumentos a los vertidos en la causa "Colavita" se reiteran,
parte, toda vez que no parece razonable pretender que su responsabilidad luego, en la sentencia de la Corte en la causa "Expreso Hada"*°^.
general en orden a la prevención de los delitos pueda llegar a involucrarla • Sin embargo, en fecha más reciente, el Alto Tribunal hace un giro
a tal extremo en las consecuencias dañosas que ellos produzcan con motivo parcial en su jurisprudencia en el caso "Bianchi"*"".
de hechos extraños a su intervención directa'*. Por esta razón, en el caso, el • Así, por un lado, mantiene su idea de4a insuficiencia de la invocación
Alto Tribunal rechazó la demanda por daños y perjuicios entablada contra genérica del poder de póhcía de seguridad para responsabilizar al Estado
la provincia de Buenos Aires como consecuencia de la muerte de una perso- por una omisión, aunque, en el paso, agrjega que no se había identificado
na a raíz de la colisión de su vehículo con un caballo suelto en la Ruta 36. siquiera mínimamente -carga que teñía el actor- cuál era el deber de
• Idéndco temperamento adoptó el Tribunal al fallar en la causa seguridad específico incumplido, señalando su objeto y fundamento nor-
" S a r r o " ' ' y en "Bertinat"*"", donde se debatía la responsabihdad provin- mativo, definiendo su alcance y grado de exigibilidad, y explicando cómo
cial por un accidente causado por animales sueltos en los caminos. se configuró su inobservancia. '
• En esos supuestos, la eventual responsabilidad, afirmó la Corte, sería • Pero, por el otro, admite, a diferencia de lo resuelto en "Colavita", la
del dueño o guardián del animal. posibilidad de responsabilizar al concesionario de la ruta con fundamento
• A su vez, el Máximo Tribunal vuelve sobre la cuestión en el caso en el incumplimiento de deberes propios, entre los cuales figuran -bajo
"Colavita"*"*, donde se evalúa no sólo la responsabilidad del Estado -en ciertas circunstancias*"-'- los atinentes a la previsión y evitación de la pre-
el caso, la provincia de Buenos Aires- sino también la del concesionario.
'"í • Consid. r.
5' • C o r t e Sup., 7/11/1969, " R u i z , M i r t h a E. y o t r o v. P r o v i n c i a de Buenos A i r e s " ,
1" ^ C o r t e Sup., 2 8 / 5 / 2 0 0 2 , "Expreso H a d a SRL v. San Luis, P r o v i n c i a d e y otros
Fallos 3 1 2 : 2 1 3 8 ; LL 1990-C-429, c o n nota d e B u s t a m a n t e A i s i n a .
s/cobro d e pesos". Fallos 3 2 5 : 1 2 6 5 .
^ • C o r t e Sup., 1 9 / 1 1 / 2 0 0 2 , "Santillán, R a m ó n E u s t a q u i o C a y e t a n o v Ferrovías
™ • C o r t e Sup., 7/11/2006, " B i a n c h i , Isabel d e l C a r m e n Pereyra d e v. Buenos Aires,
SAC s/daños y p e r j u i c i o s (acc. tráns. c/les. o m u e r t e ) " . Fallos 3 2 5 : 3 0 2 3 , q u e a d h i e r e a l o
P r o v i n c i a d e y C a m i n o d e l Atlántico SA y/o q u i e n p u e d a resultar dueño y/o guardián de
d i c t a m i n a d o p o r el p r o c u r a d o r general d e la N a c i ó n .
los a n i m a l e s causantes d e l a c c i d e n t e s/daños y p e r j u i c i o s " , Fallos 3 2 9 : 4 9 4 4 .
'9 • Corte Sup., 27/12/1990, "Sarro, A n t o n i o y otros v. Organización C o o r d i n a d o r a
^"^ • En este s e n t i d o , la C o r t e señala q u e " . . . l a a p u n t a d a p r e v i s i b i l i d a d d e los riesgos
A r g e n t i n a y otros". Fallos 3 1 3 : 1 6 3 6 .
q u e adjetiva a la obligación d e s e g u r i d a d a c a r g o d e l c o n c e s i o n a r i o p u e d e variar d e u n
• Corte Sup., 7/3/2000, "Bertinat, Pablo Jorge y otros v. Buenos Aires, Provincia supuesto a o t r o , pues n o todas las c o n c e s i o n e s viales t i e n e n las mismas características
d e y o t r o s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 2 3 : 3 0 5 . operativas, ni idénticos flujos d e tránsito, extensión l i n e a l , c o n d i c i o n e s geográficas, grados
de p e l i g r o s i d a d o s i n i e s t r a l i d a d c o n o c i d o s y p o n d e r a d o s , etc. En m u c h o s casos, podrá
™ • Corte Sup., 7/3/2000, " C o l a v i t a , Salvador y o t r o v. P r o v i n c i a d e Buenos Aires establecerse u n d e b e r d e previsión en atención al art. 9 0 2 d e l Código C i v i l q u e n o p u e d e
y otros s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 2 3 : 3 1 8 . ser e x i g i d o en otros, l o c u a l vendrá j u s t i f i c a d o p o r las c i r c u n s t a n c i a s p r o p i a s de cada
1544 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . , R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO 1545

senda de animales. Para así concluir, entre otros fundamentos'"'', tiene en del 30/11/1923, "petmitió al Consejo de Estado admitir por primera vez
cuenta que la relación que se estableció entre el concesionario y el usuario que cuando la Administración se abstiene legalmente de actuar ella puede
de la ruta -acontecimiento que ocurrió antes de la vigencia de la Ley de comprometer su responsabilidad en la medida en que el perjuicio que
Defensa del Consumidor- era contractual - p o r lo que el fundamento de la causa no pueda mirarse como 'una carga que incumbe normalmente' a la
responsabilidad radicaba en los art. 512 y 902, CCiv., la que, en términos víctima" (Paillet).
del derecho hoy vigente, sería de consumo. N o obstante, la Corte aclara • En esa misma línea, se ha afirmado que se compromete la responsa-
que la responsabihdad del concesionario no es exclusiva ni excluyeme de
bilidad de la Administración "sans faute" cuando por morivos de interés
la del dueño del animal.
general ella no toma las disposiciones que debería normalmente adoptar
• En resumen, frente a daños causados por animales sueltos en rutas, Así, se postula que ello ocurre en tres hipótesis (Long, Weil, Braibant,
para la Corte, en principio, no es posible responsabilizar al Estado por Devolvé y Genevois):
omisión, correspondiéndole la responsabilidad al dueño del animal y, en
a) la falta de ejecución de una decisión de la justicia'"';
su caso, si se dan las pautas expresadas en "Bianchi", al concesionario
de la ruta. b) la falta de reestahlecimiento del orden piiblico'"';
c) la falta de aplicación de una decisión administrativa'*".
• En nuestro derecho. Canda aventura que en un estadio posterior de
2.3. ¿Responsabilidad del Estado por omisión lícita?
desarrollo, acabará por admitirse la responsabilidad del Estado por omisión
lícita en la medida en que la omisión se funde en una causa de justificación
• Este tema no suele ser abordado por la doctrina o, si se refieren a
válida y exija de quien la padezca un sacrificio especial que no tenga el
ella, por lo general, lo hacen para descartar su viabilidad jurídica por en-
deber de soportar. Por su lado, Mellid la aceptaría si aquélla obedeciera
tender que se trataría de una contradicción lógica insalvable (así: Gómez
Puente). a un estado de necesidad, a efectos de evitar un mal mayor o por razones
• En Francia, la responsabilidad del Estado por omisión lícita parece de interés público.
tener carta de ciudadanía. Allí se sostuvo que la sentencia "Couitéas"'"^,
s o l i c i t a d o a las a u t o r i d a d e s c o m p e t e n t e s la ejecución de a q u e l l a decisión j u r i s d i c c i o n a l
pero, sin e m b a r g o , el G o b i e r n o francés s i e m p r e le negó la ayuda de la fuerza m i l i t a r - q u e
situación, siendo n o t o r i o q u e n o p u e d e ser igual el t r a t a m i e n t o de la responsabilidad del
se c o n s i d e r a b a i n d l s p e n s a b l e p a r a ejecutar la^mediíjia- c o n f u n d a m e n t o en los graves d i s -
c o n c e s i o n a r i o v i a l d e una autopista urbana, q u e la d e l c o n c e s i o n a r i o de una ruta inter-
t u r b i o s q u e ocasionaría la expulsión d e íós n u m e r o s o s indígenas naturales d e esas tierras
urbana, ni la del c o n c e s i o n a r i o d e una carretera en z o n a rural, q u e la del c o n c e s i o n a r i o
q u e se c o n s i d e r a b a n ocupantes legítimos desde t i e m p o s i n m e m o r i a l e s . Es decir, Couitéas
de una ruta en z o n a desértica. C o m o c o n s e c u e n c i a d e e l l o , i n c u m b e al j u e z hacer las
no podía obtener del G o b i e r n o francés - q u e a r g u m e n t a b a razones d e peligro para el o r d e n
d i s c r i m i n a c i o n e s c o r r e s p o n d i e n t e s para evitar fallos q u e resulten de f o r m u l a c i o n e s abs-
y la s e g u r i d a d - la ejecución d e u n a s e n t e n c i a q u e le reconocía el d e r e c h o d e p r o p i e d a d
tractas y genéricas" (consid. 4°, párr. 2°).
sobre u n c a m p o y a e x p u l s a r a q u i e n e s l o o c u p a b a n . Por e l l o , el C o n s e j o d e Estado sos-
• Específicamente, señaló " Q u e el supuesto p a r t i c u l a r de accidentes o c u r r i d o s t u v o , en síntesis, q u e si b i e n ia parte g a r a n t i z a d a p o r u n a sentencia está en su d e r e c h o a
c o n ocasión d e l paso de a n i m a l e s p o r rutas c o n c e s i o n a d a s , es c l a r a m e n t e p r e v i s i b l e contar c o n la f u e r z a pública para la ejecución d e l título q u e le f u e o t o r g a d o , el G o b i e r n o
para un prestador d e servicios c o n c e s i o n a d o s . La e x i s t e n c i a de animales en la zona y la t i e n e el deber d e a p r e c i a r las c o n d i c i o n e s d e esa ejecución y d e denegar el a u x i l i o d e la
o c u r r e n c i a de accidentes anteriores del m i s m o t i p o , c o n s t i t u y e n datos q u e un prestador fuerza a r m a d a c u a n d o estime q u e existe p e l i g r o para el o r d e n y la seguridad; p e r o , en este
r a c i o n a l y r a z o n a b l e no puede ignorar. Es el prestador d e l servicio q u i e n está en m e j o r caso, si el p e r j u i c i o q u e resulta de esa negativa se p r o l o n g a p o r c i e r t o t i e m p o , n o p u e d e
posición para recolectar información sobre la circulación d e los animales y sus riesgos, constituir una carga q u e n o r m a l m e n t e d e b a soportar el interesado, de m o d o tal q u e c o m -
y, p o r el c o n t r a r i o , el usuario es q u i e n está en una posición desventajosa para obtener pete al j u e z d e t e r m i n a r el límite a p a r t i r del c u a l d e b e ser soportada p o r la c o l e c t i v i d a d .
esos datos, lo q u e sólo podría hacer a un altísimo costo. Es c l a r o entonces q u e la carga
« Tal el caso antes c i t a d o "Couitéas" relativo a la falta d e c o n c u r s o d e la fuerza
de autoinformación y el d e b e r d e t r a n s m i t i r l a al usuario d e m o d o o p o r t u n o y eficaz, pesa
pública para asegurar u n a decisión de la Justicia c o n t r a u n particular. Esta j u r i s p r u d e n c i a
sobre el prestador del servicio. El deber de información al usuario no puede ser c u m p l i -
es receptada en el actual art. 1 6 , ley 9 1 - 6 5 0 d e l 9/7/1991, en v i r t u d del cual el Estado
d o c o n u n cartel f i j o , cuyos avisos son i n d e p e n d i e n t e s d e la o c u r r e n c i a del h e c h o , sino
d e b e prestar su c o n c u r s o para la ejecución d e las sentencias y d e otros títulos e j e c u t o r i o s
q u e requiere una notificación frente a casos c o n c r e t o s . Esta carga de autoinformación
y, su negativa a h a c e r l o genera el d e r e c h o a reparación (Art. 1 6 : "L'Etat est tenu de préter
i m p o r t a también el deber de a d o p t a r medidas concretas frente a riesgos reales de m o d o
son concours á l'exécution des jugements et des autres titres exécutoires. Le refus de l'Etat
p r e v e n t i v o . También en este caso p u e d e constatarse fácilmente q u e es el prestador d e l
de préter son concours ouvre droit á réparation").
s e r v i c i o q u i e n está en m e j o r posición para t o m a r m e d i d a s d e prevención genéricas al
m e n o r c o s t o " (consid. 5°). • Se trataría d e supuestos en los q u e la policía se abstiene d e actuar en caso de
perturbación del o r d e n público c o n f u n d a m e n t o en la idea d e q u e la intervención d e la
• En el caso, p o r demás interesante, el T r i b u n a l de Sousse en su s e n t e n c i a d e l
fuerza pública, lejos d e reestablecer el o r d e n , p u e d e agravar los desórdenes.
13/2/1908, había o r d e n a d o la conservación de la posesión q u e ejercía el actor sobre unas
parcelas d e tierra d e l c a m p o T a b i a - e l - H o u b i r a (Túnez), para l o cual le había r e c o n o c i d o • Se v i n c u l a c o n las hipótesis en las q u e la Administración n o a p l i c a u n a regla-
el d e r e c h o d e e x p u l s a r a t o d o s los o c u p a n t e s . A h o r a b i e n , Couitéas varias veces había mentación.
1546 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . , 1547
R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO

• Por nuestra parte, creemos que, al menos, parece dudoso tener que • De tal forma, es plenamente aplicable la doctrina de la Corte Supre-
acudir al concepto de "estado de necesidad". En efecto, la cuestión en es- ma de Justicia de la Nación en el sentido de que "...cuando la actividad
tudio remite, en definitiva, a la potestad del Estado para sacrificar derechos lícita de la autoridad administrativa, aunque inspirada en propósitos de
subjetivos patrimoniales por causas de interés público y, en este sentido, se interés colectivo, se constituye en causa eficiente de un perjuicio para los
ha dicho que cuando "...el Estado así procede no necesita para legitimarse particulares -cuyo derecho se sacrifica por aquel interés general-, esos
de la concurrencia de causales de justificación. Su actuación es, en esos daños deben ser atendidos en el campo de la responsabilidad del Estado
casos, intrínsicamente legítima aunque resulte dañosa" (Comadira). por su obrar lícito"***.
• En tal sentido, es pertinente plantearnos la hipótesis de una manifesta- • Subyacen, en el fondo, las elementales razones de solidaridad y justicia
ción popular, en el marco de una grave crisis social, económica, financiera, social que impregnan y conforman nuestro Estado de derecho.
política e institucional, en la que algunos participantes provocan serios • Así, para que sea procedente la responsabihdad del Estado por omi-
destrozos y, finalmente, el incendio de la casa de un particular, mientras sión hcita**^, deberían concurrir, en principio, los mismos requisitos que
son observados por los efectivos pohciales y de gendarmería apostados en nuestro Máximo Tribunal ha exigido para responsabilizar a aquél por su
el lugar quienes, en ningún momento, intervienen ni procuran dispersar a actividad legítima (daño, relación de causalidad, imputación jurídica del
los culpables de los ataques. daño al Estado, ausencia del deber jurídico de soportar el daño, sacrificio
• Si el Estado argumentara que las fuerzas de seguridad tenían la orden especial, todos ellos en los términos y con las salvedades antes estudiadas)
expresa de no intervenir pues, de lo contrario, se hubiera generado entre y, la comprobación, al igual que en la responsabilidad por omisión antiju-
los participantes de la manifestación un mayor malestar y agresividad que rídica, de que era fácticamente posible realizar la conducta omitida.
hubiera derivado en un aumento del número de quienes causaban destro- • En relación con la cuestión del quantum de la indemnización, se re-
zos, mayores daños para muchas otras viviendas y, muy probablemente, produce, aquí, el debate planteado en torno a la procedencia de incluir, o
víctimas fatales, entendemos que, razonablemente -acreditados tales ex- no, el lucro cesante en la reparación cuando ésta es debida por el Estado
tremos-, podría considerarse que la omisión de intervenir fue legítima. a causa de su accionar lícito,. Según lo explicado supra, tratándose de un
• Ahora bien, ¿es justo que, en este caso, sólo el titular de la propiedad supuesto de responsabilidad del Estado por razones de legitimidad, tendría
destruida o incendiada deba soportar todos los daños? plena vigencia el concepto legal expropiatorio cuya fuerza expansiva lleva
• Estas situaciones, entonces, nos llevan a pensar que no es factible re- a excluir, en principio, el lucro cesante.
chazar, sin más, las hipótesis de responsabilidad del Estado por omisión • En suma, creemos que el déhate sobre lá responsabilidad del Estado
lícita. por omisiones lícitas no está cerrado y existen, al menos desde nuestra
• Ciertamente, hay una omisión pues, siendo competente y resultando perspectiva, fundadas razones para admitirla.
fácticamente posible la realización de la conducta que podría haber evitado
el daño en el ejemplo mencionado - l a protección del inmueble del particu- VII!. RESPONSABILIDAD EXTRACONTRACTUAL DEL ESTADO
lar-, el Estado se abstiene de actuar. Esto es, la omisión está configurada
POR A C T O S LEGISLATIVOS
por la inactividad del Estado no obstante la competencia para actuar y la
posibilidad real de ejecutar la conducta omitida. Está claro que, si hubieren
A c t u a l m e n t e se acepta, de manera general, la p o s i b i h d a d de que
sido otras las circunstancias, debería haber actuado.
el Estado sea responsabilizado p o r la sanción de n o r m a s legales y
• Y creemos que tampoco podría dudarse, en principio, de la legahdad
de la omisión. que pueda ser o b l i g a d o a i n d e m n i z a r los daños y perjuicios que con
• En esa línea, en consecuencia, podríamos concluir que también ciertas ocasión de esa a c t i v i d a d legislativa resulten a los particulares.
omisiones comprometen la responsabilidad del Estado por su actividad E n el pasado se negaba r o t u n d a m e n t e que existiera una respon-
lícita o legítima -omisiva, en el caso-. sabilidad e x t r a c o n t r a c t u a l del Estado p o r actos de ese t i p o , especial-
• Es decii; se trataría de supuestos que se inscribirían en el marco de la mente, p o r q u e la actividad legislativa es u n típico exponente de la
potestad estatal de sacrificar derechos subjetivos de contenido patrimo- soberanía, debiendo los subditos soportar los posibles perjuicios que
nial por razones de bien común. Y que, con fundamento en la garantía
de la inviolabilidad de la propiedad, la igualdad ante las cargas púbhcas
• Corte Sup., 19/9/1989, "Tejedurías M a g a l l a n e s SA v. Administración N a c i o n a l
y la razonabilidad, consagradas sabiamente por nuestros constituyentes
d e A d u a n a s " , Fallos 3 1 2 : 1 6 5 6 , c o n s i d . 10 y sus citas.
en la Norma Fundamental (arts. 14, 17, 16 y 28), exigen ser reparados
en los mismos términos que las demás hipótesis de daños provocados por " 2 « U n v e z , c l a r o está, d e t e r m i n a d o q u e en el caso existió u n a " o m i s i ó n " , en el
sentido d e q u e el Estado tenía c o m p e t e n c i a para actuar y, n o obstante, se abstuvo d e
la actividad legítima del Estado.
hacerlo.
1548 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . , R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO 1549

les p u d i e r a n resultar, c o m o algo inherente y p r o p i o de su condición de una r e f o r m a c o n s t i t u c i o n a l - q u e d a n d o e x c l u i d o , en c a m b i o , el


de sometimiento a dicha soberanía. acto o r i g i n a r i o p o r el cual se establece la p r i m e r a Constitución, luego
Se decía, en t a l sentido, que el legislador no está sujeto a la ley, m o d i f i c a d a - , puesto que la r e f o r m a c o n s t i t u c i o n a l n o puede p r i v a r a
sino que se halla p o r encima de ella; sus funciones son, por eso, siempre los habitantes del país de derechos esenciales que les habían sido reco-
legales, a l o que se añadía que al ser la ley expresión de la v o l u n t a d nocidos originariamente y el Estado debe asumir la responsabilidad de
general, incluía también la del p r o p i o d a m n i f i c a d o , que de t a l m o d o compensar, si así ocurriera, los perjuicios ocasionados ( M a r i e n h o f f ) .
n o podía f u n d a r ningún t i p o de reclamo. El f u n d a m e n t o de esta responsabihdad p o r actos legislativos es el
Sin embargo, poco a poco la d o c t r i n a fue evolucionando hacia m i s m o que el reconocido respecto de la responsabilidad extracontrac-
el reconocimiento de una t o t a l responsabihdad, y así D u g u i t , al desa- t u a l del Estado en general, p o r lo que resulta innecesario reiterarlo y
rroUar su teoría del seguro social, explicó que ésta cubría también los nos r e m i t i m o s , en consecuencia, a l o allí expuesto.
riesgos resukantes de la aplicación de una ley, a d m i t i e n d o , en conse- Las situaciones que se pueden suscitar en relación c o n la n o r m a
cuencia, la responsabilidad del Estado p o r su a c t i v i d a d legislativa. legal que ha p r o d u c i d o el perjuicio de los administrados, y en atención
En Francia, y hasta 1938, no se reconocía la posible existencia de a su reparación, han sido agrupadas en tres posibilidades:
esa responsabihdad; pero en ese año, en el p r o n u n c i a m i e n t o dictado a) que la p r o p i a ley lesiva reconozca el derecho a una i n d e m n i -
en el caso de la "Société la Fleurette", el Consejo de Estado señaló que zación;
una prohibición legal que perjudicaba a dicha sociedad, impidiéndole b) que la ley lesiva no contenga n i n g u n a disposición de esa clase
seguir fabricando y vendiendo u n o de sus p r o d u c t o s , constituía una y guarde silencio sobre la indemnización de los perjuicios; y
exigencia de interés general cuyas consecuencias debían ser soporta- c) que la ley en cuestión niegue expresamente el derecho al re-
das por la colectividad t o d a , de manera que la empresa referida tenía sarcimiento.
derecho a obtener que el Estado le pagara una indemnización, p o r los Si la ley admite el derecho a una indemnización, es o b v i o que ésta
perjuicios que debía sufrir, máxime cuando su p r o d u c t o no había sido procederá y podrá reclamarse, incluso ^judicialmente, d e n t r o de los
declarado n o c i v o . términos y las modalidades que h a y a n sido establecidos.
Esa evolución se ha concretado,,finalmente, en el hecho de que la Más recientemente, se ha planteado lá posibilidad, dependiendo de
m a y o r parte de la d o c t r i n a se ha volcado a reconocer, al menos tácita- las circunstancias de cada caso y de la medida del resarcimiento estable-
mente, que el Estado puede ser responsabihzado extracontractualmente cido normativamente, de impugna'r la constitucionalidad de la limitación
p o r los perjuicios que sufran los administrados p o r actos legislativos resarcitoria (Bianchi).
que hayan sido sancionados.
Si la ley lesiva ha guardado silencio sobre esta materia, la i n d e m -
D e n t r o de esa corriente, no se distingue si la ley en cuestión es
nización será viable y exigible, si se d a n las condiciones que h a n sido
o n o constitucionalmente váhda, aunque es innegable que cuando la
reconocidas para dar lugar a la responsabihdad e x t r a c o n t r a c t u a l del
ley carece de esa vahdez, la responsabihdad estatal surge c o m o más
Estado, a las que ya nos hemos r e f e r i d o . La jurisprudencia tendrá u n
clara y evidente.
r o l i m p o r t a n t e en cuanto a la afirmación de tales principios, relativos a
Esta última circunstancia ha llevado a Bianchi a sostener que cuando la salvaguarda y mantenimiento del Estado de derecho y la supremacía
se habla de responsabihdad del Estado por actividad legislativa, habitual- de la Constitución.
mente se referencia un supuesto de responsabilidad por acto lícito; de allí Si la ley lesiva, finalmente, niega el derecho a una indemnización,
considera que es una subespecie de ésta, pues, afirma, la responsabilidad
ésta procederá igualmente p o r aplicación de los p r i n c i p i o s generales
emergente del dictado de una norma que es declarada, inconstitucional no
aceptados en la materia; pero el a d m i n i s t r a d o deberá, además, deman-
es más que un supuesto común de responsabilidad por acto ilícito.
dar la invalidez de la ley en cuestión en cuanto niega la indemnización
T a m p o c o se diferencia si el acto legal es una ley f o r m a l o una como v i o l a t o r i a de alguno de los principios constitucionales que fueran
ley m a t e r i a l , ya que a los fines de sus efectos, ambas categorías están aplicables al caso.
equiparadas. El perjuicio indemnizable, p a r a ser resarcible, deberá r e u n i r las
A u n q u e con mayores limitaciones, algunos autores reconocen que condiciones que hemos p u n t u a l i z a d o a l tratar los requisitos que deben
la responsabihdad del Estado, en este c a m p o , también puede resultar concurrir para que sea procedente responsabilizar al Estado.
1550 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N PÚBLICA... R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO 1551

C o n referencia a la responsabilidad del Estado p o r actos legislati- Posteriormente, fue confirmada esta posición, aunque se restringió la
vos, se acentúa la exigencia d o c t r i n a l de que ella debe individualizarse, procedencia de la responsabihdad estatal a través del endurecimiento de
respecto de una persona o u n g r u p o de personas, lo que significa que la exigencia de los recaudos para su configuración (Mertehikian). En efecto,
debe ser especial y no universal, a lo que ciertos expositores añaden en la causa "Ledesma""'', comprobado el perjuicio y la actividad lícita
la condición de que debe ser e x t r a o r d i n a r i o o, al menos, a n o r m a l , del Estado, se denegó la indemnización toda vez que los daños no eran
directa y exclusivamente causados por la actividad normativa cuestionada.
excediendo el nivel de aquellos sacrificios que son asumidos p o r la
En el mismo sentido se inscribe el fallo recaído en la causa " C o l u m b i a " " ' ,
población, comúnmente, frente a la a c t i v i d a d legislativa estatal.
en el cual se exigió, para la procedencia de la responsabilidad estatal por
Se ha dicho, con razón, que la p o s i b i l i d a d de u n perjuicio general su actividad lícita, la existencia de un sacrificio especial y la ausencia
no tiene p o r qué excluir, desde el p u n t o de vista jurídico, la necesidad del deber jurídico de soportar el daño. En el mismo orden de ideas, en
de la reparación, ya que la "generalidad del agravio no cubre n i pur- los casos "Buenos Aires E x i m p o r t " " ' , "Revestek"*^" y "Cirlafín"*^*, la
ga la a n t i j u r i d i c i d a d del c o m p o r t a m i e n t o l e s i v o " ( M a r i e n h o f f ) , aun Corte rechazó las pretensiones indemnizatorias por considerar que no se
cuando esa generalidad pueda llegar a i n f l u i r en la determinación del encontraban cumplidos los mencionados requisitos para la procedencia
m o n t o del resarcimiento. de la responsabilidad estatal por su actividad lícita.
• N o obstante, más cerca en el tiempo, la Corte sostuvo que, en materia
A nuestro juicio, en los casos en que se pretenda responsabilizar al de responsabilidad del Estado por su actividad lícita, corresponde aclarar
Estado por su actividad normativa lícita, lo que debe considerarse, más que, como regla, las consecuencias necesarias y normales del ejercicio del
que el "sacrificio especial", es la razonabilidad del perjuicio experimentado poder de policía de salubridad o sanitaria no dan lugar a indemnización. De
por el administrado ponderado, en cada caso, de acuerdo con la propor- tal manera, agregó que si, en ese caso, la prohibición de exportar y la falta
cionalidad que guarde con la cuota normal de sacrificios que supone la de expedición de los certificados de aptitud sanitaria constituían medidas
vida en comunidad. Ver, entonces, lo que dijimos al tratar el requisito del no sólo razonables sino indispensables ante la situación descripta, la actora
"sacrificio especial" para la procedencia de la responsabilidad del Estado nada podía reclamar al respecto. Y, en esta línea, agregó que "En nuestro
por su actividad lícita. derecho no existe norma o construcción jurisprudencial alguna que, tal
como sucede en el Reino de;España, .obligue a la Administración Pública
La jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia de la Nación no a indemnizar todo perjuicio ocasionado por,el funcionamiento normal o
ha sido favorable al reconocimiento de la responsabilidad del Estado anormal de los servicios públicos n i , pot tanto, a resarcir los perjuicios
p o r la sanción de actos legislativos lesivos y sólo en m u y contadas derivados de las medidas regular y razonablemente adoptadas en ejercicio
oportunidades y sobre la base de determinadas condiciones, ha hecho del poder de policía de salubridad. Pues, si el Estado tuviera que pagar por
lugar a su reconocimiento. cada uno de los cambios y nuevas exigencias derivadas del desarrollo de la
D e n t r o de esa posición, el A l t o T r i b u n a l ha rechazado la recla- legislación general en la materia, sería imposible gobernar"*-^.
mación del resarcimiento cuando el perjuicio sufrido p o r el damnifica- La C o r t e Suprema ha a d m i t i d o la responsabihdad del Estado
d o demandante n o ha sido excepcional n i afecta a u n i n d i v i d u o o a u n cuando los daños y perjuicios h a n resultado del c u m p l i m i e n t o de u n
grupo de mdividuos en f o r m a desigual, en beneficio de la comunidad*"^
admitiéndola, en cambio, cuando de la actividad legislativa se p r o d u j o Corte Sup., 31/10/1989, " L e d e s m a " , Fallos 3 1 2 : 2 0 2 2 .
u n enriquecimiento sin causa de la Administración P ú b h c a " " .
C o r t e Sup., 19/5/1992, " C o l u m b i a " , Fallos 3 1 5 : 1 0 2 6 .

Sin embargo, en los casos " C a n t ó n " ' * ' y " W i n k l e r " " * , la Corte reco- C o r t e Sup., 30/3/1993, " B u e n o s A i r e s E x i m p o r t " , Fallos 3 1 6 : 3 9 7 .

noció el derecho a indemnización cuando el hecho generador del perjuicio '20 Corte Sup., 15/8/1995, "Revestek", Fallos 3 1 8 : 1 5 3 1 .
fue el ejercicio lícito, por parte del Estado, de potestades normativas. '21 Corte Sup., 15/8/1995, "Cirlafín", ED 1 6 6 - 2 5 7 .

'22 « C o r t e Sup., 2 6 / 9 / 2 0 0 6 , "Friar SA v. Estado n a c i o n a l - M i n i s t e r i o d e Economía


" 3 C o r t e Sup., 1 9 3 8 , " E s t a b l e c i m i e n t o s A m e r i c a n o s G r a t y SA v. N a c i ó n " , Fallos O b r a s y S e r v i c i o s Públicos - Secretaría d e A g r i c u l t u r a , Ganadería y Pesca y SENASA
180:107. s/daños y p e r j u i c i o s ( o r d i n a r i o ) " . Fallos 3 2 9 : 3 9 6 6 , c o n s i d . 8°. En el caso, cabe aclarar
q u e la prohibición de e x p o r t a r carnes había sido dispuesta por el Servicio d e Sanidad
C o r t e Sup., 1 9 5 9 , "Asociación Escuela Popular G e r m a n a - A r g e n t i n a Belgrano v.
A n i m a l c o m o m e d i d a d e policía sanitaria. Es decir q u e , si b i e n n o se trataba de u n a ley
G o b i e r n o d e la N a c i ó n " , Fal los 2 4 5 : 1 4 5 .
en sentido f o r m a l , c r e e m o s q u e las c o n c l u s i o n e s podrían extenderse a los supuestos de
" 5 Corte Sup., 15/5/1979, " C a n t ó n " , Fallos 3 0 1 : 4 0 3 . r e s p o n s a b i l i d a d d e l Estado p o r a c t o legislativo, máxime t e n i e n d o en cuenta la expresión
" 8 C o r t e Sup., 9/8/1983, " W i n k l e r " , Fallos 3 0 5 : 1 0 4 5 . final del considerando transcripto.
1552 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . , R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO 1553

decreto-ley, luego declarado inconstitucional por violar la igualdad ante responsabilidad del Estado por error judicial difieren de aquellos necesa-
la ley 123, o cuando se originan en u n decreto del Poder Ejecutivo, luego rios para responsabilizar al Estado por el irregular, defectuoso o anormal
declarado inconstitucional p o r violar la libre circulación el derecho de funcionamiento de la administración de justicia.
propiedad y la libertad de comercio e industria'^". En efecto, para el primer caso, es insoslayable la acreditación de la
existencia de una sentencia revisora que declare ilegítimo el acto y lo
En el mismo sentido, Mertehikian señala el caso "Cima, Corina Ga- deje sin efecto, perdiendo éste, de ese modo, su carácter de verdad legal,
bardini d e " " ' , en el cual se hizo lugar a los daños y perjuicios provocados mientras que, en el segundo, es necesaria la concurrencia de los extremos
por una ley de la provincia de Corrientes declarada inconstitucional. configurativos de la doctrina de la falta de servicio (Mertehikian).
Es de esperar que el reconocimiento de la responsabilidad ex- El p r o b l e m a ya fue conocido en la antigüedad, y t a n t o en Grecia
tracontractual del Estado p o r los perjuicios resultantes a los a d m i - c o m o en R o m a , en algunos casos especiales, se llegó a a d m i t i r una
nistrados de su a c t i v i d a d legislativa vaya acentuándose en nuestra c o m p e n s a c i ó n o resarcimiento p o r el e r r o r j u d i c i a l . E n el derecho
jurisprudencia y asentándose en los fundamentos doctrinales que han r o m a n o - n o debe o l v i d a r s e - , uno de los supuestos en que procedía la
sido anahzados.
in integrum restitutio era el error j u d i c i a l .
E n las monarquías absolutas, fue casi imposible pensar en una
iX. RESPONSABILIDAD EXTRACONTRACTUAL DEL ESTADO
posible responsabihdad del Estado p o r el acto j u d i c i a l , ya que siendo
POR ACTOS JUDICIALES
los soberanos de origen d i v i n o , m a l podían errar y equivocarse en el
dictado de esos actos.
La responsabilidad extracontractual del Estado, como resultado
del c u m p l i m i e n t o de su función judicial, es la que más dificultades ha En el derecho francés, se recogen algunos actos n o r m a t i v o s ais-
originado y la que más controversias ha suscitado, tanto en su plan- lados que reconocían las consecuencias del error j u d i c i a l , en ciertos
teamiento d o c t r i n a l c o m o en su aplicación práctica. supuestos. L a Revolución Francesa de 1789, que t a n t o innovó en otros
Se circunscribe, por u n lado, a los actos jurisdiccionales cumplidos aspectos, sólo consideró el p r o b l e m a de fnanera p a r c i a l y aislada, sin
p o r los órganos integrantes del Poder Judicial, tanto nacional c o m o l o - llegar a n i n g u n a sistematización razonable; en 1895 se dictó una ley
cal, y su manifestación más clara es, tal vez, el error judicial p r o d u c i d o que otorgó a los condenados en sede penal, y posteriormente absuel-
en la jurisdicción penal, que tiene lugar cuando se produce la condena tos p o r revisión, el derecho a reclamar del Estado una indemnización,
c o m o culpable a quien es realmente inocente, verdadera tragedia que fijada en relación c o n el t i e m p o de'encarcelamiento y el daño s u f r i d o
el más simple sentido jurídico rechaza c o m o inadmisible y de la que el p o r el condenado p o r t a l error.
famoso caso " D r e y f u s " ha sido y es ejemplo típico. La responsabihdad del Estado p o r sus actos judiciales, que se
acepta sin discusión en la esfera penal, n o ha suscitado i g u a l a p o y o
En este punto, es común que la doctrina distinga entre responsabilidad
in iudicando y responsabilidad in procedendo. La primera se caracteriza cuando se la pretende extender a los actos judiciales que resuelven
por la existencia de un error judicial que se traduce y origina una senten- cuestiones civiles, comerciales o de cualquier o t r a clase.
cia injusta, e implica una violación al deber de todo magistrado a dictar Se alega, al respecto, que en esos procesos el c o n t r o l de la causa
sus resoluciones conforme a derecho (Mertehikian - Tawil). La segunda, corresponde a las partes y el Estado actúa c o m o u n tercero que resuelve
en cambio, reconoce como causa del daño el defectuoso o anormal fun- una contienda p a t r i m o n i a l entre dos partes interesadas.
cionamiento judicial que se verifica durante la sustanciación del proceso Esas razones, sin embargo, n o parecen suficientes c o m o para ex-
(Mertehikian - Tawil). cluir la procedencia de aqueha responsabihdad, ya que el Estado, al
Se ha sostenido en doctrina que, a la luz de los fallos de nuestro
desarrollar ese c o m e t i d o , cumple u n a función que le es t a n inherente
Máximo Tribunal, los requisitos que se exigen para la configuración de la
c o m o la de a d m i n i s t r a r o legislar.
T a m p o c o puede invocarse, en ese sentido, la fuerza de la cosa
Corte Sup., 1 9 5 5 , "Corporación C e m e n t e r a A r g e n t i n a , SA v. Provincia de M e n -
d o z a " , Fallos 2 5 2 : 2 2 . juzgada, ya que si la revisión de una sentencia firme procede, si es a d -
" 1 Corte Sup., 1 9 5 2 , "Acuña H n o s . y Cía. SRL v. Prov. de Santiago del Estero", Fallos
m i t i d a por el derecho, y la revisión pone de manifiesto, p o r una nueva
252:39. sentencia, la existencia del error j u d i c i a l , la responsabihdad del Estado
Corte Sup., 15/3/1977, " C i m a , C o r i n a G a b a r d i n i d e " . Fallos 3 0 1 : 4 0 3 . surge claramente, sin que pueda sustentarse que l o que ha sido m a l
1554 R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO 1555
C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . .

juzgado debe prevalecer o excluir el resarcimiento que corresponde Actualmente, dos tratados internacionales mencionados expresamente
al d a m n i f i c a d o . en el art. 75, inc. 22, C N , se ocupan de la cuestión relativa al reconoci-
miento de responsabilidad estatal por error judicial. En efecto, el art. 10,
De cualquier manera, la extensión de la responsabiUdad estatal Convención Americana sobre Derechos Humanos (Pacto de San José de
p o r actos judiciales debe ser constreñida a sus límites naturales, sin Costa Rica), establece que "Toda persona tiene derecho a ser indemniza-
o l v i d a r que la a c t i v i d a d judicial corrientemente puede i r r o g a r a los da conforme a la ley en caso de haber sido condenada en sentencia firme
particulares, ya sean partes o terceros, molestias y perjuicios que, si por error judicial". Por su parte, el Pacto de Derechos Civiles y Políticos
n o exceden l o razonable, tienen que ser soportados p o r esas perso- preceptúa, en su art. 9°, inc. 5°, que "Toda persona que haya sido ilegal-
nas, sin que p u e d a n alegar derecho a u n resarcimiento, c o m o si fuera mente detenida o presa, tendrá el derecho efectivo a obtener reparación" y,
u n resultado n o querido p o r la ley, pero inevitable. Así ocurre, p o r luego, en el art. 14, inc. 6°, que "Cuando una sentencia condenatoria firme
ejemplo, con q u i e n es p r i v a d o de su l i b e r t a d d u r a n t e la tramitación de haya sido ulteriormente revocada, o el condenado haya sido indultado por
haberse producido o descubierto un hecho plenamente probatorio de la
u n proceso penal, que finalmente concluye p o r el reconocimiento de
comisión de un error judicial, la persona deberá ser indemnizada, conforme
su inocencia. Esa privación de l i b e r t a d n o genera derecho a i n d e m n i -
a la ley, a menos que se demuestre que le es imputable en todo o en parte
zación y debe ser soportada p o r quien la haya sufrido. N o obstante, el no haberse revelado oportunamente el hecho desconocido".
n o puede dejar de reconocerse que existen opiniones contrarias a ese
criterio (Waline). En el orden p r o v i n c i a l , en c a m b i o , los códigos de p r o c e d i m i e n t o
Es indiferente que el error j u d i c i a l se haya p r o d u c i d o c o m o u n penal de C ó r d o b a , Santiago del Estero, La R i o j a , Jujuy, M e n d o z a , Ca-
resultado inevitable de la f a l i b i l i d a d de los juicios y las decisiones tamarca. Salta, Corrientes y La Pampa, contienen previsiones según las
humanas. El juzgador ha puesto en juego todos sus conocimientos, cuales las víctimas de errores judiciales en materia penal tienen derecho
t o d a su atención y diligencia, pero - n o o b s t a n t e - ha errado. Q u i e n ha a reclamar una indemnización del Estado por los daños causados p o r
debido soportar las consecuencias dañosas tiene igualmente derecho la condena y su ejecución.
a ser resarcido de tales perjuicios. En el orden civil o comercial, los errores judiciales producirán per-
juicios principalmente en la esfera p a t r i m o n i a l de quienes h a n s u f r i d o
C u a n d o ha h a b i d o d o l o o culpa del juzgador, la situación es a u n
el error j u d i c i a l , aun cuándo taííibíén pueden recaer sobre la esfera
más simple, pues la responsabihdad estatal resultará de una inadecuada
m o r a l de ellos. E n el campo penal la situación se invierte, puesto que
o ilícita actuación de u n órgano del Estado en el c u m p l i m i e n t o de sus
funciones. si pueden existir perjuicios patrimoniales, derivados del hecho de la
privación de la hbertad, los mayores daños serán los morales.
V o l u n t a r i o o i n v o l u n t a r i o , el error j u d i c i a l que produce conse-
cuencias dañosas impone la reparación, respondiendo el Estado p o r Es ilustrativo en este aspecto el fallo de la Corte en la causa " R o s a " " ' ,
los perjuicios causados ( A l t a m i r a Gigena). en la cual cambió su criterio anterior y reconoció el derecho a obtener la
reparación de los perjuicios sufridos por la indebida prolongación de
Contrariamente a l o que se ha sostenido, esta responsabilidad del
la medida cautelar de prisión preventiva de un individuo que luego fuera
Estado no requiere, para poder hacerla efectiva, la existencia de una
absuelto por el delito del que se lo acusaba e hizo lugar, únicamente, a la
n o r m a legal que la autorice o establezca. Fluye c o m o una consecuen- indemnización del daño moral. Las razones esgrimidas por la Corte para
cia necesaria de los principios inherentes a la existencia del Estado de esto último fueron: el carácter resarcitorio de este rubro, la índole del hecho
derecho instaurado p o r nuestra Constitución N a c i o n a l . generador de la responsabilidad, la entidad de ios sufrimientos espirituales
En nuestro país, en el orden n a c i o n a l , no existe n o r m a legal algu- causados y la circunstancia de que el reconocimiento de este tipo de daño
na que reconozca la existencia de la responsabilidad extracontractual no tiene necesariamente que guardar relación con el daño material por no
del Estado p o r sus actos judiciales y que estatuya lá existencia de una ser accesorio de éste (Mertehikian).
reparación justa y adecuada para quien ha sido víctima de u n error • N o obstante, en " P o u l e r " " ' señaló que, como principio general, la
j u d i c i a l . T a l vez la única que ha considerado la cuestión es la prevista absolución posterior del procesado no convierte en ilegítima la prisión
p o r el art. 515, inc. 4 ° , CCiv., que prevé c o m o obligaciones naturales,
entre otras, las que no han l o g r a d o hacerse reconocer en u n j u i c i o " 6 Corte Sup., 1/11/1999, "Rosa", Fallos 3 2 2 : 2 6 8 3 .

que se ha p e r d i d o " p o r error o mahcia d e l j u e z " (el autor escribió esta • C o r t e Sup., 8/5/2007, " P o u l e r , E. R. v. Estado N a c . - M i n i s t e r i o d e j u s t i c i a
afirmación en el año 1984). s/daños y p e r j u i c i o s " . Fallos 3 3 0 : 2 1 1 2 , c o n s i d . 4 ° . En la m i s m a línea, i d . , 23/3/2010,
1556 R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO 1557
C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A .

preventiva dispuesta en el curso de un proceso, pues sólo debe significarse X. C A S O S ESPECIALES DE RESPONSABILIDAD DEL ESTADO
como error judicial aquella sentencia que resulta contradictoria con los
hechos probados en la causa y las disposiciones legales congruentes al caso. 1. Guerra
En esta línea, agregó que la privación de la libertad durante el proceso no
debe ser automáticamente reconocida a consecuencia de la absolución, L a guerra, de la cual se ha d i c h o que constituye la prosecución de
sino cuando el auto de prisión preventiva se encuentre infundado o se la política del Estado por otros medios, es una posibilidad nunca desea-
revele irracional. En tal sentido, añadió que, en sintonía con la extensa da, pero siempre posible, que en nuestros días constituye u n fenómeno
tradición jurisprudencial del Tribunal en la materia, cabía afirmar que en de una índole t a l y de unas consecuencias t a n tremendas, que l o hace
tanto el auto de prisión preventiva puesto en crisis encontraba sustento
aparecer c o m o verdaderamente excepcional y e x t r a o r d i n a r i o .
lógico suficiente en las constancias de la causa, no procedía la pretensión
Pero, de cualquier manera, la guerra y sus secuelas n o están fuera
de reparación esgrimida por el actor
de nuestra Constitución N a c i o n a l , sino que ésta ha sido plasmada
Para que proceda la responsabilidad del Estado por acto j u d i - para regir t a n t o en los t i e m p o s de paz y n o r m a h d a d c o m o en los
cial, además de las condiciones que h a n sido expuestas al tratar los convulsionados y trágicos de la guerra, durante la cual los p r i n c i p i o s
requisitos para responsabilizar al Estado, debe darse la condición de constitucionales y sus garantías se atemperan o cesan t e m p o r a l m e n t e ,
que el acto judicial erróneo haya sido dejado sin efecto o corregido pero nunca desaparecen n i dejan de tener v i g e n c i a " ^ .
p o r o t r o acto j u d i c i a l , dentro de l o que al respecto disponga el orden Esta conclusión general reviste especial i m p o r t a n c i a para poder
n o r m a t i v o aplicable. enfocar adecuadamente los problemas a que seguidamente hemos de
referirnos.
La Corte Suprema de Justicia de la Nación en la causa " V i g n o n i " " ' ,
D u r a n t e la guerra t o t a l , que es el m o d o c o m o la guerra se lleva a
fijó su criterio rector en materia de responsabilidad del Estado por error
cabo actualmente, los particulares que se h a l l a n en el teatro de opera-
judicial al exigir la existencia de una sentencia revisora que declare ilegíti-
mo el acto y lo deje sin efecto, perdiendo éste, de ese modo, su carácter de ciones en que el conflicto se desenvuelve o que de cualquier m o d o son
verdad legal. En ese caso, se trató de una cuestión de naturaleza penal. afectados p o r las operaciones bélicas pueden sufrir y frecuentemente
Posteriormente, el Alto Tribunal extendió su doctrina a las causas de sufren daños y perjuicios,,a veces m u y graves,, que pueden p r o v e n i r
índole civil. En efecto, al fallar en los autos " R o m á n " " ' , en donde el actor t a n t o de las Fuerzas A r m a d a s enemigas c o m o de las Fuerzas A r m a d a s
demandaba al Estado nacional con el objeto de que le indemnizara los nacionales o p r o p i a s . ,
daños y perjuicios que le provocó la prohibición de uso de una máquina En el p r i m e r supuesto - d a ñ o s y perjuicios causados p o r el ene-
dispuesta por la justicia en lo penal económico en el curso de un sumario m i g o - , la irresponsabilidad del Estado -se entiende del Estado p r o -
instruido por contrabando que luego fue dejada sin efecto por el sobresei- p i o - es absoluta y éste n o responde, n i está jurídicamente o b l i g a d o
miento definitivo del imputado, señaló que la mera revocación o anulación a responder, p o r esos perjuicios, que los habitantes deben soportar
de resoluciones judiciales no otorga el derecho de solicitar indemnización
c o m o una consecuencia inevitable. Resulta excesivo, a nuestro j u i c i o ,
toda vez que, a su entender, sólo puede hablarse de error judicial cuando
el criterio de quienes sustentan la p o s i b i l i d a d de esa responsabilidad
ha sido provocado de modo irreparable por una decisión de los órganos
de administración de justicia y cuyas consecuencias perjudiciales-no han cuando la actuación bélica del enemigo n o revista las condiciones del
logrado hacerse cesar por efecto de los medios procesales ordinariamente caso f o r t u i t o o la fuerza mayor.
previstos a ese fin. Asimismo, con cita expresa de " V i g n o n i " , indicó que Ello no q u i t a que p o r aplicación de u n p r i n c i p i o de s o l i d a r i d a d
su exisrencia debe ser declarada por un nuevo pronunciamiento judicial social, sea c o m ú n que el Estado disponga, en esos casos, el pago de
-recaído en los casos en que resulta posible intentar válidamente la re- indemnizaciones o ayudas pecuniarias a f a v o r de los afectados p o r las
visión de la sentencia- mediante el cual se determinen la naturaleza y la operaciones de guerra enemigas; pero esas reparaciones n o tienen el
gravedad del yerro. carácter de una obligación jurídica n i puede exigirse que se acuerden
n i discutirse su m o n t o . E n tales supuestos, en efecto, n o se justifica n i
"Putallaz, Víctor O r l a n d o v. Estado n a c i o n a l - M i n i s t e r i o d e Justicia d e la N a c i ó n " , Fallos existe una indemnización legal.
333:273.
" 6 Corte Sup., 14/6/1988, " V i g n o n i " , Fallos 3 1 1 : 1 0 0 7 . ™ C o r t e Sup., 14/12/1927, " C o m p a ñ í a A z u c a r e r a T u c u m a n a v P r o v i n c i a d e T u c u -
Corte Sup., 13/10/1994, " R o m á n " , Fallos 3 1 7 : 1 2 3 3 . mán". Fallos 1 5 0 : 1 5 0 .
1558 C O N T R O L J U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . RESPONSABILIDAD DEL ESTADO 1559

Diferente es la situación que se presenta cuando los daños y perjui- Por l o expuesto, cabe c o n c l u i r que los poderes de guerra deben
cios son causados p o r el Estado p r o p i o , p o r hechos de guerra llevados ser ejercidos d e n t r o de los límites previstos p o r la Constitución N a -
a cabo para sostener el ataque al enemigo o la defensa de los que éste c i o n a l , de suerte que si su ejercicio regular y razonable no originara
lleve a cabo. responsabilidad para el Estado, ella aparecerá cuando tales límites sean
Particular consideración tiene, en este sentido, la situación de la excedidos, v i o l a n d o l o que nuestra Carta F u n d a m e n t a l ha establecido
propiedad enemiga, es decir, de la que pertenece al Estado enemigo o para la paz y para la guerra (Reiriz).
a sus subditos.
La Corte Suprema de Justicia de la N a c i ó n ha declarado, en este 2. Revolución y motines
sentido, que con relación a la p r o p i e d a d enemiga, las garantías consti-
tucionales ceden y dejan de tener aplicación, quedando esa p r o p i e d a d C o n respecto a los daños causados a los particulares durante el
sin las prerrogativas que nuestra C a r t a M a g n a o t o r g a a t o d a o t r a transcurso de revoluciones o m o t i n e s , la jurisprudencia ha declarado
f o r m a de p r o p i e d a d . Es p o r ello que el Estado puede incautarse direc- la i r r e s p o n s a b i l i d a d del Estado, de m o d o que la reparación o la i n -
tamente de esa p r o p i e d a d , sin necesidad de r e c u r r i r a la intervención demnización de ellos sólo procederá cuando una ley expresamente la
de los tribunales de justicia y sin que tenga que asumir f o r m a alguna de haya dispuesto o c u a n d o el hecho dañoso sea i m p u t a b l e al Estado,
responsabihdad, sin p e r j u i c i o del derecho de los afectados para hacer p o r n o haber o b r a d o c o n la debida diligencia t o m a n d o las medidas
valer, c o n c l u i d o el c o n f l i c t o , los derechos que consideren agraviados, de prevención que h u b i e r a n resultado procedentes.
para llevarlos a sus justos límites^^i. E n numerosas ocasiones, diversas leyes han otorgado tales repa-
Este c r i t e r i o j u r i s p r u d e n c i a l ha merecido f u n d a d a s objeciones, raciones o indemnizaciones. Así ocurrió c o n la ley 12.220, en ocasión
n o sólo p o r q u e , c o m o se ha d i c h o , los p r i n c i p i o s y las garantías de los hechos acaecidos el 6 y el 8 de septiembre de 1930; con la
constitucionales rigen en t i e m p o de paz y en t i e m p o de guerra, c o n ley 14.414, c o n m o t i v o de los hechos revplucionarios del l é de j u n i o
las limitaciones que resulten de la p r o p i a Constitución o de la ley, de 1955; c o n el dec.-ley 9 9 7 4 / 1 9 é 2 , al producirse los hechos sedicio-
tanto a favor de los argentinos como de los extranjeros, sino porque, sos del mes de septiembre de ese a ñ o ; y cpn la ley 18.156, que t u v o en
además, el ejercicio de los poderes de guerra debe ser c u m p l i d o con cuenta los hechos p r o d u c i d o s el 6 y el 9'de a b r i l de 1963.
f u n d a m e n t o legal y de manera regular y r a z o n a b l e , de m o d o que Nuestra jurisprudencia se ha tnostrado c o n t r a r i a a la admisión
t o d o exceso lesivo generaría la responsabihdad del Estado, a u n en de la responsabilidad e x t r a c o n t r a c t u a l del Estado c o m o resultado de
estos casos, p o r los perjuicios que h u b i e r a n p o d i d o resultar de tales hechos de esa naturaleza y n o existe t e x t o legal que expresamente la
actos*32. autorice o a d m i t a .
C o n respecto a la p r o p i e d a d de los argentinos y demás personas C o m o se advierte, el Estado ha aceptado c o n c u r r i r a paliar los
de otras nacionalidades, no pertenecientes a la del país o países con- daños y perjuicios sufridos p o r los particulares durante revoluciones
siderados o declarados enemigos, la responsabilidad e x t r a c o n t r a c t u a l o motines, pero ello n o ha significado que se haya reconocido la res-
del Estado p o r los daños ocasionados con m o t i v o del ejercicio de sus ponsabihdad jurídica de a f r o n t a r su indemnización o reparación, como
poderes de guerra aparece con toda p l e n i t u d , en t a n t o y en cuanto una consecuencia necesaria, resultante de los principios generales de
dichos daños c o n s t i t u y a n o resulten de la trasgresión o violación de nuestro o r d e n a m i e n t o c o n s t i t u c i o n a l .
principios y garantías establecidas p o r la Constitución N a c i o n a l , que
estén vigentes, o p o r las leyes dictadas en su consecuencia, p o r las XI. CONTIENDAS Y JURISDICCIÓN EN MATERIA
mismas razones y fundamentos que d a n lugar, en general, a la respon- DE RESPONSABILIDAD EXTRACONTRACTUAL DEL ESTADO
sabihdad extracontractual del Estado.
La existencia de la responsabihdad extracontractual del Estado
Corte Sup., 9/6/1948, " M e r c k Q u í m i c a A r g e n t i n a SA v. N a c i ó n A r g e n t i n a " , Fallos da lugar, c o m o es n a t u r a l , a conflictos y contiendas entre los p a r t i -
2 1 1 : 1 6 2 ; i d . , 1 9 5 9 , "Asociación Escuela Popular G e r m a n a A r g e n t i n a Belgrano v. G o b i e r n o
culares, que pretenden que se les reconozca su derecho a una justa
d e la N a c i ó n " , Fallos 2 4 5 : 1 4 6 .
indemnización, y el Estado, que puede entender que tales reclamos
1 " Corte Sup., 1 9 6 0 , "Cía. de Electricidad del Sud A r g e n t i n o , SA v. Prov. de Buenos
A i r e s " , Fallos 2 4 6 : 1 4 5 .
no proceden.
C O N T R O L l U D I C I A L DE LA A D M I N I S T R A C I Ó N P Ú B L I C A . . R E S P O N S A B I L I D A D DEL ESTADO 1561
1560

El derecho de los particulares a ser indemnizados p o r el Estado, N o obstante el debate anterior, la C o r t e Suprema de Justicia de la
en v i r t u d de su responsabihdad extracontractual de derecho púbhco, Nación ha zanjado la discusión a f i r m a n d o que el plazo es de dos años
constituye u n derecho público subjetivo, regido por el derecho a d m i - de acuerdo c o n l o dispuesto en el art . 4 0 3 7 del Código Civil*^^.
nistrativo. E n consecuencia, todos los conflictos y cuestiones que se Finalmente, c o m o criterio general, y sin perjuicio de la casuística
susciten en esta materia deben ser sometidos y resueltos por la justicia elaborada p o r la jurisprudencia, hay que decir que el plazo de pres-
en lo contencioso a d m i n i s t r a t i v o o p o r la que tenga a t r i b u i d a esta cripción comienza a computarse desde el m o m e n t o en que se produce
competencia. el daño o desde que el afectado t o m a c o n o c i m i e n t o de aquél"-''. Sin
Esta conclusión es aphcable t a n t o en lo que se refiere a la respon- perjuicio de ello, téngase en cuenta l o expuesto en el capítulo refe-
sabihdad del Estado p o r hechos o actos de la Administración Púlolica r i d o a los " P r i n c i p i o s jurídicos del c o n t r o l j u d i c i a l " en relación con
c o m o en lo atinente a la que resulte p o r actos legislativos o judiciales, la caducidad del plazo para i m p u g n a r los actos administrativos y la
excepto que u n texto legal expreso disponga l o c o n t r a r i o . p o s i b i l i d a d de demandar los daños de ellos derivados.
En otros países, la competencia para entender en los casos atinen-
tes a responsabilidad del Estado por actos judiciales se halla controver- XIII. ESTUDIOS COMPLEMENTARIOS AL CAPÍTULO XXII
t i d a , pero tales discrepancias nacen, más que de posiciones doctrinales
objetivas, de situaciones específicas imperantes en aquéllos. 1 . La responsabilidad del Estado por su actividad lícita o legítima.
Principio de juridicidad y responsabilidad del Estado'3*
Respecto de la necesidad de entablar la reclamación administrativa
previa a la demanda contra el Estado, deberá estarse a l o que resuelven
La causa final del Estado es el bien com ú n. Por m i parte, adhiero
al respecto las leyes de p r ocedim iento a d m i n i s t r a t i v o , vigentes en la
a la idea que concibe a éste c o m o el c o n j u n t o de condiciones de la vida
N a c i ó n o en las provincias, y debe tenerse en cuenta que la tendencia
social que hace posible a asociaciones e i n d i v i d u o s el l o g r o más pleno
d o c t r i n a l se afirma en el sentido de que t a l reclamación, p o r versar
y más fácil de su p r o p i a perfección. Si esto es así, en u n Estado de de-
sobre una petición de daños y perjuicios al Estado, n o es, en p r i n c i p i o ,
recho democrático y r e p u b l i c a n o , la.sumisión de éste a la j u r i d i c i d a d
necesaria.
es una condición indispensable p a r a ' l a .gestión justa de aquel bien.
XII. PRESCRIPCIÓN La sujeción del Estado al o r d e n a m i e n t o jurídico es una idea que
se expresa n o r m a l m e n t e con el p r i n c i p i o de legalidad, al cual, p o r m i
Se discute en doctrina cuál es el término correspondiente, pues n o parte, prefiero designar c o m o p r i n c i p i o de j u r i d i c i d a d toda vez que
existe en el ámbito del derecho púbhco nacional una norma expresa éste n o m i n a mejor el fenómeno que se intenta describir.
que lo determine. El sometimiento del Estado al derecho no implica, en efecto, sólo
Así, para Cassagne, es de aplicación el art. 4 0 2 3 , CCiv., que es- la subordinación a la ley f o r m a l - c o m o podría hacer pensar, quizás, la
tablece u n plazo de diez años para las acciones personales por deudas locución legalidad-, sino a t o d o el orden jurídico, desde los principios
exigibles y para las acciones de n u h d a d . Rechaza la subsunción de la generales del derecho hasta los precedentes en cuyo seguimiento esté
responsabilidad extracontractual del Estado en el art. 4 0 3 7 , que pre- comprometida la garantía de igualdad, pasando, desde luego, p o r la
ceptúa u n término de dos años, por considerar que regula la responsa- Constitución N a c i o n a l , los tratados internacionales, las leyes formales,
bilidad c i v i l , basada esta, p r i m o r d i a l m e n t e , en la i l i c i t u d subjetiva y n o los reglamentos y ciertos contratos admiiústrativos.
vinculada con la idea de i l e g i t i m i d a d objetiva p r o p i a de la p r i m e r a .
Desde o t r o ángulo, se ha sostenido que es de aplicación l o dispues- " 1 Corte Sup., 2/3/1978, " C i p o l l i n i , Juan S i l v a n o v. Dirección N a c i o n a l de V i a l i d a d
y otra s/sumario". Fallos 3 0 0 : 1 4 3 ; i d . , 4/6/1985, " H o t e l e r a Rio d e la Plata SACI v. Buenos
t o en el art. 4 0 3 7 , CCiv.^^s, v i r t u d del cual prescribe a los dos años la
Aires, P r o v i n c i a des/restitución d e dólares". Fallos 3 0 7 : 8 2 1 ; • i d . , 2 4 / 5 / 2 0 1 1 , " D i s t r i b u i -
acción p o r responsabihdad c i v i l e x t r a c o n t r a c t u a l . Es que, en el f o n d o , dora Q u i m i c a SA v. Estado n a c i o n a l s/acción d e c l a r a t i v a " .
para este caso, lo relevante es el carácter contractual o extracontractual '35 • Corte Sup., 2 4 / 5 / 2 0 1 1 , " D i s t r i b u i d o r a Q u i m i c a S A v . Estado n a c i o n a l s/acción
de la responsabilidad, n o así su carácter objetivo o subjetivo. d e c l a r a t i v a " ; entre otros.
'38 C o n f e r e n c i a dictada en el Instituto d e D e r e c h o A d m i n i s t r a t i v o de la A c a d e m i a
" 3 Ar t. 4 0 3 7 : "Prescríbese p o r dos años, la acción de responsabilidad c i v i l extra- N a c i o n a l d e D e r e c h o y Cie n c ia s Sociales, d i r i g i d o p o r el Dr. Juan Carlos Cassagne, el
30/10/2001 (EDA 2 0 0 1 / 2 0 0 2 , 7 5 6 ) .
contractual".

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