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expresión vital y la
imaginación exponencial
Antiguamente se creía que había que olvidar todo para crear, con el paso del
tiempo las pérdidas emocionales se convertían en anhelos inconscientes. Al
final de los días, el autoconsuelo es una necesidad relacional, una prioridad por
crear otro significante más profundo e interminable, aquel que compense la
omnipresente búsqueda del amor materno. Siendo consciente lo inconsciente,
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Sindéresis puede entenderse como hábito que contiene los primeros principios prácticos, que son los
preceptos de la ley natural, entre ellos los que se encuentran el principio de conservación del individuo.
los enlaces neuronales determinan, no solo una genética emocional, sino que
desnudan al subconsciente intuitivo. Valga expresar entonces que nuestra
mente regresa del pasado inconsciente al presente consciente a través de un
imaginario subconsciente, es decir, de un hipotético futuro exponencial.
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Para Marx la libertad es posible en tanto que el hombre es capaz personalmente de establecer un
espacio sin necesidad entre estímulo y respuesta, proyectando al exterior la conciencia al cambiar el
foco de interés y de ponderación., así como de superar los condicionamientos internos.
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Henri Bergson dice que la fabulación o “función fabuladora” es, una reacción de la naturaleza contra el
poder disolvente de la inteligencia, o sea un instrumento del desarrollo voluntario o espontáneo de las
imágenes y el grado de conciencia en su uso.
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Sandoval López, Orestes. Máscaras de la conciencia crítica.
es inconformista por naturaleza, no divaga ni relativiza, ya que es
insustancialmente verificable. Una red sináptica difícilmente programable
adquiere sentido si se desmarca de la unidad: cuerpo y conciencia.
Por muchas estructuras yoicas que nos brotasen, la persona sólo alcanzará
a relacionarse con su ecosistema por medio de la actividad perceptual y
simbólica5. La liberación inconsciente no presupone alejarse cada vez que
representamos la realidad6, sino que es una capacidad activa, selectiva e
históricamente progresiva. La traducción de lo real mismo se vale de recursos
que van más allá de lo puramente racional7. Quizás no haya mística más
próxima que la condición prelógica de la imaginación, tal que nos
diversificamos a través de sus imágenes.
5
Lacan J. Seminario I, Edición Paidos, 1992, p. 213
6
Ernst Cassirer: El lenguaje, el mito, el arte y la religión constituyen parte de este universo, forman los
diversos hilos que tejen la red simbólica, la urdimbre complicada de la experiencia humana (...) la razón
es un término verdaderamente inadecuado para abarcar las formas de la vida cultural en toda su
riqueza y diversidad, pero todas esas formas son simbólicas. Por lo tanto, en lugar de definir al hombre
como un animal racional lo definiremos como un animal simbólico. De es te modo podemos designar su
diferencia específica y podemos comprender el nuevo camino abierto al hombre: el camino de la
civilización.
7
Ernst Cassirer. Antropología filosófica. Introducción a una filosofía de la cultura. Fondo de Cultura
Económica. Colección Popular, México, p. 47