Johnson, Christine - Claire de Lune 01 PDF

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FORO PURPLE ROSE

Claire de Lune Christine Johnson
AGRADECIMIENTOS
Agradecemos a todas aquellas personas por las cuales con su interés,
colaboración y apoyo condicional se pudo sacar adelante a este proyecto.
También agradecemos a nuestros lectores por su leal apoyo, esto es por ustedes.
Traductoras: Correctoras: 1
; Genesis_480 (Moderadora) Ángeles Rangel: Responsable
; aya001 Silvery
; kuami Esmeralda38
; andre27xl Alice_Vampire
; paovalera Julia107
; Anaid Ivashkov
; Selune
; masi Recopilación:
Recopilación:
; playthekeys Ángeles Rangel
; Emii_Gregori
; ηịịị ღ
; Dham-Love Diseño:
Diseño
; Izzy masi
; aneka
; Silvery
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; ●•Marta...●•♥♥
; Trikini
; Veroniica
; Lost Angel
; Clo
FORO PURPLE ROSE

FORO PURPLE ROSE

INDICE
Sinopsis 4
Glosario de términos 5
Prólogo 6
Capítulo 1 7
3
Capítulo 2 17
Capítulo 3 26
Capítulo 4 38
Capítulo 5 49
Capítulo 6 58
Capítulo 7 69
Capítulo 8 78
Capítulo 9 87
Capítulo 10 94
Capítulo 11 105
Capítulo 12 113
Capítulo 13 122
Capítulo 14 131
Capítulo 15 139
Capítulo 16 145
Capítulo 17 153
Capítulo 18 161
Capítulo 19 169
Capítulo 20 176
Capítulo 21 190
Capítulo 22 201
Sobre la autora 207
FORO PURPLE ROSE

SINOPSIS
Hanover Falls no ha tenido problemas de hombres lobo en más de cien años.

Seattle, Copenhague, Osaka. Ellos sí han tenido muchos ataques. Pero cuando la
gente comienza a morir en la ciudad de Claire Benoit, el pánico se extiende más
rápido que un rumor en una reunión. En la decimosexta fiesta de cumpleaños
de Claire, lo único de lo que todos hablan es de las matanzas espantosas. Pero la 4
gran noticia en la mente de Claire es el hecho de que Michael Engle el dios del
fútbol de la secundaria e hijo del experto en licantropía mundial la ve. Y
coquetea con ella. Mucho. Esa noche, Claire descubre que ella es la última en
una larga línea de hombres lobo Benoit, y que contrariamente a la creencia
popular, todos los hombres lobo son mujeres. El código de la manada prohíbe
matar humanos, pero un hombre lobo indeseable ha estado rompiendo aquella
ley, amenazando la existencia de la nueva manada de Claire. Mientras la
manada lucha por encontrar a la werewolf asesina y Claire lucha con su
identidad de lobo, su corazón y su lealtad son separados en dos. Claire debe
mantener su nueva vida un secreto a todos, incluso de su mejor amiga... y sobre
todo de Michael, cuyo padre conduce la caza de werewolf… de quien Claire
está extremadamente y sin lugar a dudas cayendo de patas enamorada.
FORO PURPLE ROSE

GLOSARIO DE TERMINOS
Werewolf: Hombre lobo en inglés
Loup-garou: Hombre lobo en francés
Seule: Una loba sin manada, una sola
Alpha: El más sabio y valiente entre los miembros de la manada

5
Gardien: Palabra en francés que significa tutor.
Devianment: Iniciación.
Dumpster: Contenedor de basura.
The Juice Junction: Fuente de soda.
FORO PURPLE ROSE

Prólogo
Traducido por: Genesis_480
E
Corregido por: Ángeles Rangel
lla lo mato en la parte más oscura de la noche, antes de que el roció hubiera 6
cubierto la hierba.
Fue fácil. El vino hacia la ventana cuando golpeo ligeramente con sus garras contra ella. Era
exactamente lo que ella esperaba que hiciera. Deslizando hacia arriba el cuadrado de vidrio.
Sacando la cabeza para investigar. Como un idiota. Como presa.
Un idiota menos en el mundo. Ella lamio la sangre de su boca, los gruesos bigotes
deslizándose contra su lengua.
Él ni siquiera tuvo tiempo de gritar. No era diferente a ninguno de los otros. Sus ojos se
volvieron redondos como monedas. Sus mejillas se volvieron como carne de pescado blanca.
Era cuando sus bocas hacían ese O aterrorizado antes de que ella saltara.
Era el momento perfecto. La veían viniendo por ellos. Sabían lo que iba a pasar. Pero
ninguno de tuvo alguna oportunidad de emitir sonido alguno.
Excepto cuando sus cuellos chasquean. Eso hace ruido ella reflexiono.
Esperaba sentir más miedo, rompiendo reglas como esta. En vez de eso, descubrió que le
gustaba. El poder de decidir quién y donde. Dejando que sus instintos tomaran el control sin
preocuparle de las consecuencias.
Después de todo, no era a ella a la que iba culpar por matar a estos tristes muñecos de trapo
humanos. A ella no la atraparían… era demasiado buena, demasiado cuidadosa.
Era la otra que pagaría.
Mareada por el éxito, tentada por el cercano brillo de la venganza, ella desapareció de vuelta
en lo bosque.
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 1
Traducido por: Aya001, Kuami y DHAM-LOVE

E
7
l tranquilo reflejo de la superficie de la piscina se hizo añicos cuando los
tres chicos se tiraron en bomba a la vez. Brotaron gritos del grupo de
chicas a las que salpicaron.
—Claire ¡Esta es la mejor fiesta! —Dijo con entusiasmo Emily, mordisqueando una
patata frita.
Claire escudriñó el grupo del patio trasero. Chicas en bikini y chicos mojados en
bañador sentados en los bordes del mobiliario del patio, bebiendo soda y riendo.
Cualquiera vendrá a tu fiesta si tienes una piscina, pensó ella. Se rascó la palma de la
mano con el borde puntiagudo de la mesa y deseo que la picazón parara. Era como
la peor hiedra venenosa, solo que no había ningún bulto y no estaba rojo.
—Sí, supongo, —dijo ella. Claire conocía a casi toda esta gente desde la escuela
primaria, pero aparte de Emily, no había intimado con ninguno de ellos. Era el
Junio más caluroso desde 1910, y la enorme piscina de su patio había convertido a
Claire instantáneamente en alguien popular. Que tampoco quería decir mucho, más
de unos pocos en la fiesta se habían sorprendido al enterarse que era el cumpleaños
de Claire. Oh, bueno, supongo que aunque solo venga la gente para usar la piscina
es mejor que no tener a nadie. Sí. Esa soy yo, un vaso siempre medio lleno. Ella suspiró.
—¿Qué quieres decir, “supongo”? ¿No te estás divirtiendo? —La boca de Emily se
curvó, frunciéndose algo preocupada.
—No, quiero decir, si, es divertida. Simplemente que no conozco muy bien a
mucha de esta gente.
—Pero están aquí ¿Verdad? Y he oído que Yolanda decía que te echaba de menos
desde que se terminaron las clases. Le gustas a la gente, Claire. Sólo que te cuesta
creerlo.
Emily cogió otra patata—. ¿Así qué, realmente no has conseguido un coche, huh?
—No. Esperaba que Mamá sólo estuviera haciéndome creer que me estaba dejando
con las ganas, pero me ha regalado un par de pendientes de zafiros esta mañana, así
que creo que va en serio. —Claire rodo los ojos. No es que no pudieran permitirse
que ella tuviera su propio coche. Su madre sólo pensaba que no necesitaba uno.
FORO PURPLE ROSE

Las orejas de Claire picaban como si estuvieran ardiendo, como sus manos, y se
retiró el pelo castaño hacia atrás para poder rascárselas.
—¿Qué estás haciendo? —Preguntó Emily—. ¡Matthew está mirándote! ¡Actúa
normal!
Claire dejó caer las manos, notando un pequeño rubor en sus mejillas. Matthew
Engle le hizo un pequeño gesto con la mano, y rodó sus ojos en la dirección del
grupo que se estaba riendo sentado atrás de él. Ella le sonrió, y él le devolvió la
sonrisa. Una pequeña sacudida eléctrica le atravesó a la vez que él le indicaba que 8
se acercara. Además de ser uno de los dos chicos en todo el instituto que no eran un
imbécil inmaduro, era guapo. Realmente guapo. Convertir–tu–cerebro–en–gachas
guapo.
—No es que vaya a tener una oportunidad con él, de todas formas, —dijo Claire,
girándose otra vez hacia Emily.
—¡Por supuesto que sí! Eres inteligente, divertida, y te ves realmente increíble en
bikini. Definitivamente tienes que ir a hablar con él.
—Sólo si vienes conmigo.
—Oh, vale. Pero no me necesitas. Estarías bien por tu cuenta. —Emily cogió su
soda y tiró de Claire para ponerla de pie.
Claire tomo aire profundamente y caminó hacia Matthew.
—Hey. Wow, Claire, vaya manera de impresionarle con tu conversación.
—Buena fiesta, —dijo él.
Un gritó surgió del otro lado del circulo de tumbonas, dándole tiempo a Claire de
pensar algo medianamente inteligente que decir.
—¡Oh, ewwwww! Lo digo en serio, no quiero oír nada más. —Yolanda Adams se
pegó las manos a las orejas y se separó del grupo.
—¿Qué? —Preguntó Claire.
Dan Maxwell le lanzó una mirada. —¿El ultimo chico que fue asesinado por un
hombre lobo? Resulta que le aplastó el cráneo. Una de las otras enfermeras 1ER se
lo contó a mi madre. Su cerebro estaba rezumando por todas partes.
—Tío, cállate. —Dijo Matthew sacudiendo la cabeza—. ¿No has oído a Yollie
decir que no quería oír más sobre el tema?
—Claro, —dijo Emily—. Como si hubiera otra cosa de la que hablar en esta
ciudad.
1
Emergency room, sala de emergencias
FORO PURPLE ROSE

Los hombres lobos estaban en todas las noticias, sólo en el último mes, habían
matado a tres personas. Ya nadie salía cuando oscurecía. Los ataques de hombres
lobo eran el tipo de cosa que ocurría de vez en cuando en la Europa del Este,
quizás, o en el Japón rural, pero en los Estados Unidos se habían convertido en
algo tan raro como una epidemia de viruela bovina.
Emily se giró hacia Dan. —Incluso si Yolanda no quiere escuchar tus detalles
sangrientos, yo siempre estoy preparada para información interna—. Agarró un
puñado de galletitas saladas y se colocó al lado de Dan. Emily hacía que pareciera
9
tan fácil. Claire observó a su mejor amiga flirtear sin esfuerzo alguno con un chico
que ni siquiera era su tipo. Emily solamente se ponía seria cuando se trataba de
chicos que vestían mucho negro, se veían un poco desaliñados, y que les iba el arte.
Claire se giró hacia Matthew, deseando tener la confianza que Emily tenía
alrededor de los chicos. Miró el plato vacío que tenía él al lado.
—Así que, um, ¿Has probado ya la salsa? Lisbeth la hace casera.
—No, pero suena bien. Vamos, de todas formas, necesito otra bebida.
Matthew cogió la mano de Claire y tiró de ella hacia la mesa de comida. La presión
de su cálida piel contra su mano hizo que se sintiera mareada, incluso después de
que la soltara.
—¿Probablemente oirás suficiente sobre hombres lobo en casa, huh? Le preguntó
ella, rascándose el lóbulo de la oreja. Otra vez.
Él se encogió de hombros. —Mi padre se pasa demasiado tiempo en el laboratorio
y en la televisión, en realidad, no ha estado mucho por aquí. Se está muriendo por
entrar en los Investigadores Internacionales de Licantropía, ha estado consiguiendo
un montón de mierda de los medios sobre que él no está cualificado como los otros
miembros de la Agencia Federal de Protección Humana. Está convencido de que el
nuevo caso será su “gran oportunidad”. —Matthew sonaba irritado.
Claire alzó una ceja. El Dr. Engle lideraba la caza de hombres lobo en Hanover
Falls. Era parte de su trabajo para la FHPA, la agencia al completo se encargaba
de investigar todo sobre los hombres lobo y detener ataques a los humanos. Claire
le había visto en la TV un montón, en especial recientemente. Él siempre decía lo
mismo en las entrevistas: “Me siento honrado de poder ayudar a mi propio pueblo en estas
horas de necesidad. Hanover Falls es actualmente la principal prioridad de la FHPA, y me
aseguraré de que siga así hasta que la situación se resuelva”.
Entonces se ajustaba la corbata. Siempre, sin excepción. Le ponía los pelos de
punta a Claire.
—Mi madre no está mucho en casa, tampoco —concedió ella.
FORO PURPLE ROSE

Matthew la miró, con sus cálidos ojos marrones puestos en ella.

—Sí, tenía que hacer, esas grandes fotografías en Grecia, ¿No? —Le preguntó.
Claire cabeceó, asombrada de que él hubiese recordado. Su madre se pasaba una
semana de cada mes, normalmente más, de viaje por sus fotografías. Revistas de
viaje, editoriales de libros de arte, galerías, todos querían a Marie Benoit detrás de
la cámara. A Claire no le importaba todos esos viajes. Las cosas eran realmente
más fáciles, más relajadas, cuando su madre no estaba en casa.
—Bien, todo el mundo ¡Hora del pastel! —La madre de Claire llamó, metiendo la 10
cabeza por una de las puertas traseras.
Salió, sosteniendo la puerta para Lisbeth, la última en la larga línea de au pair2 que
se quedaban con Claire mientras su madre viajaba. Nadie aparte de ella había
durado más de un año, pero Lisbeth había estado con ellos desde que Claire tenía
trece años. Claire quería a Lisbeth, aunque deseaba que su madre comprendiera
que necesitaba a alguien todo el tiempo. Una cosa era estar allí por Lisbeth cuando
su madre estaba en un viaje largo, pero seguro que Claire tenía edad suficiente para
quedarse en casa sola por las tardes. Pero si su madre no pensaba que a los dieciséis
años tenías edad suficiente para poseer un coche, entonces probablemente no
escucharía las ideas de Claire sobre cuánta supervisión de Lisbeth necesitaba,
tampoco. Por lo menos contar con Lisbeth significa no tener que pedirle permiso a
su madre todo el tiempo y Lisbeth no era tan estricta.
Lisbeth caminó hacia el patio llevando un pastel del chocolate gigante con el “16
Feliz Cumpleaños Claire” glaseado blanco. Un anillo de velas ardía en la parte
superior.
Todo el mundo volvió a mirar a Claire, irrumpiendo en una versión a medias
desganada de —Feliz Cumpleaños—. Claire se obligó a que sonreír, a pesar de que
estaba completamente mortificada.
Claire se agachó y apagó las velas.
—Sí. —Claire asintió con la cabeza, incapaz de mirar hacia arriba, ya que su deseo
giraba totalmente en torno a él.
La puerta del patio golpeó abriéndose y Claire alzó la vista, aliviada por la
interrupción de la madre de Dan en el patio, llevando un bata de hospital
manchada sangre.
—¿Mamá? —Dan parecía desconcertado y molesto. Principalmente molesto.
2 Un joven extranjero que hace el trabajo doméstico para una familia a cambio de alojamiento y
comida y una oportunidad de aprender el idioma de la familia.
FORO PURPLE ROSE

—Recoge tus cosas —ella jadeó—. Nos vamos.

La madre de Claire dio un paso adelante. —Lo siento, ¿Es algo grave?
—Sí. La noticia acaba de llegar del despacho de la policía del hospital, alguien
piensa que vieron al hombre lobo en el borde del bosque. Esto bosque. —Hizo un
gesto más allá de la pared de ladrillos que rodeaba el patio trasero de los Benoit. La
mano le temblaba mientras señalaba—. A plena luz del día. La policía está
patrullando hasta que el pelotón FHPA venga. Lo siento, Señora Benoit, pero no
puedo dejar a Dan quedarse aquí. Es demasiado peligroso. —Miró al resto del 11
grupo—. Es demasiado peligroso para todos. Todos tendríamos que irnos, ahora.
En ese justo momento, varios teléfonos móviles comenzaron a sonar.
Emily miró a Claire, su teléfono estaba en el interior de su coche. —Está en las
noticias, —dijo entre dientes—. Mi madre es anormal.
Los Coches chirriaron más allá del camino serpenteante de la casa de los Benoit y
los invitados tomaron sus cosas. Claire se rascó las manos y se estremeció mientras
observaba y escuchaba a todos en la casa. Una mano la agarró fuertemente del
brazo y ella saltó. Matthew estaba detrás de ella. Una sonrisa se dibujó en su rostro
cuando se la llevó detrás de la casa de la piscina. Estaba tan cerca; Claire podía
sentir el calor de su piel.
—¿No tienes miedo?
—Nah. ¿Por qué debería tenerlo? La probabilidad de que el hombre lobo ataque a
plena luz del día, es prácticamente nula.
—Pero es por eso que todos estamos asustados como locos ¿Verdad? Porque si
realmente alguien vio un hombre–lobo durante el día ¿Podría significar que atacaría
antes de que oscurezca?
—¡Claire! Entra, por favor, —la madre de Claire llamó desde la puerta de atrás.
El hilo conductor de energía eléctrica que corría entre Claire y Matthew se
desvaneció.
¡Argh! ¡No!
Dio un paso atrás, metiendo un mechón de pelo de Claire detrás de su oreja.
—Mejor me voy, —dijo—. Lo pasamos muy bien. En realidad, estuvo realmente
genial.
Ella asintió con la cabeza. —M… Muy bien. —Le temblaba la voz—. Ten cuidado
hasta que llegues a casa.
—No te preocupes por mí, estaré bien. ¡Te llamaré más tarde! —Él sonrió y se
lanzó alrededor de la piscina de la casa.
FORO PURPLE ROSE

Claire se apoyó contra la pared, mareada de felicidad. ¡Oh mi dios! ¡Dijo que me
llamará! ¡Oh, Dios mío! Envolvió los brazos alrededor de su traje de baño húmedo y
se dio vuelta.
—Claire, —su madre la llamó desde la puerta—. Todo el mundo se está yendo.
¿Claire?
Después de la fiesta, Lisbeth estaba demasiado asustada a causa del hombre lobo
para hacer frente al desastre de fuera, pero, por supuesto, la madre de Claire estaba
demasiada preocupada por el desorden para dejarlo así. Ella misma lo limpió, con 12
los labios fruncidos, mientras que Lisbeth se escondía en la cocina lavando los
platos. Para la hora de la cena, la tensión en la casa era más gruesa que el glaseado
sobre el pastel de cumpleaños.
Claire se sentó en la isla de la cocina entre Lisbeth y su madre. Con los sándwiches
a medio comer delante de ellas, de carne asada para Claire y su madre, y uno
vegetariano con queso a la plancha para Lisbeth. La noticia estaba corriendo en
otra edición especial ampliada sobre el avistamiento del hombre lobo, que más o
menos solo le decía: “No sabemos nada, pero tan pronto como sepamos algo nuevo
lo comunicaremos. Mientras tanto, aquí está todo lo que sabemos, de nuevo”…
una y otra y otra vez, Claire lo ignoró, pero los ojos de su madre estaban pegados a
la pantalla, observando como un dibujante de la policía hacía una interpretación de
lo que ellos pensaron podría parecerse al lobo.
Lisbeth recogió los restos de su sándwich y de dio unos masajes en la parte de atrás
de su cuello quemado por el sol. —Estoy agotada. Voy a untarme algo de aloe y me
acostaré. —Anunció. Se agachó y besó a Claire en la cabeza—. Feliz cumpleaños
cariño. Dieciséis. Estupendo. —Suspiró—. Será mejor que darse prisa si encuentro
un chico que se arrastre frente a mis pies ó cuando empiece la universidad tu
madre no tendrá a nadie para cuidar de ti.
Parecía como si estuviera bromeando, pero Claire podía ver la preocupación de las
arrugadas esquinas de los ojos de Lisbeth.
Supongo que la cosa con el chico de su clase de yoga acabó fracasando.
—Nah, puedes venir conmigo y doblar mi ropa en el dormitorio. —Claire sacó la
lengua a Lisbeth. Junto a Claire, su madre soltó un bufido.
Lisbeth rodó los ojos—. Voy a dejarlo pasar porque es tu cumpleaños. —Se inclinó
hacia Claire—. Nos vemos por la mañana.
—¡Buenas noches! —Claire dejó de rascarse el dorso de las manos contra la parte
inferior de la encimera de granito. Deslizó un brazo alrededor de Lisbeth para darle
un rápido abrazo.
FORO PURPLE ROSE

Marie cortó otro trozo de su sándwich y asintió con la cabeza hacia Lisbeth sin
apartar los ojos de las noticias. Claire sintió ponerse tensa a Lisbeth a su lado, sólo
un poco, antes de que ella se volviera y saliera de la habitación.
Claire sacó un cubito de hielo de su vaso y lo sostuvo contra el picor en la oreja.
— ¿Todavía está enfadada con Lisbeth por lo de la de limpieza?
La mandíbula de su madre dejó de masticar y apartó la vista de la repetición de la
entrevista con el Dr. Engle. El pecho de Claire se encogió bajo la fuerza de los ojos
oscuros de su madre. 13
—No, por supuesto que no. Estoy enfadada con ese ignorante, pomposo charlatán.
Él es la razón por la que Lisbeth estaba demasiado asustada para poder limpiar
afuera antes. —Mordió su bocadillo y masticó furiosamente—. Se ha nombrado a sí
mismo juez, jurado y verdugo, probando con esa estúpida “cura” suya sin
confirmar, si esos sujetos son realmente hombres lobo. Arruinándoles la vida de
cualquier modo porque él tiene prisa por impresionar a un grupo de científicos
ocultándose detrás del gobierno para hacerlo ¡Me hace sentir enferma! —Tiró los
restos del sándwich de su plato y se acercó a la puerta de la cocina.
El padre de Matthew estaba trabajando en un medicamento que supuestamente
curaba la licantropía. De alguna manera sacaba la enfermedad del cerebro del
hombre lobo para que no pudiera transformarse. Durante una entrevista de
televisión Claire había oído hablar al Dr. Engle explicar cómo funcionaba, pero
había sido muy técnico y confuso, incluso el amable entrevistador parecía perdido.
Lo único que realmente entendió es que se tenía que administrar con la luna llena,
pero cuando estaban en forma humana. A nadie le importaba cómo funcionaba,
sólo importaba que lo hiciera. Una vez que el licántropo había sido tratado,
permanecía en forma humana, para siempre. Los licántropos austriacos en los que
lo había probado quedaron en estado de coma permanente. Todavía había unos
encerrados en el Centro de Investigación De la Universidad de Viena, pero casi
todo el mundo creía que era un castigo bien merecido por atacar humanos.
—Pero los ataques austriacos se detuvieron después de que inyecto a los licántropos
—señaló Claire. —Miró hacia la televisión. El Dr. Engle tenía el mismo cabello
rubio que Matthew, pero su rostro era más afilado en todos los planos y en todos
los ángulos.
Marie se agarró al marco de la puerta. Con la espalda rígida—. ¿Y tú asumes que
no hay otra explicación para eso? —Dijo sin girarse.
Claire tragó el mordisco de sándwich que se había metido en la boca. —Yo, uh, no
había pensado sobre eso. Supongo que podría haberla.
FORO PURPLE ROSE

—Eso, querida, es su trampa. Muchos caen en ella. Espero que no cometas el

mismo error. Voy a tomar un baño ahora. Por favor pon tus platos en el fregadero
cuando hayas acabado.
La mamá de Claire se deslizó unos cuantos pasos mientras Claire jugaba con la
corteza de su sándwich y escuchaba toda la basura sin sentido del periódico. Puntos
oscuros del tamaño de unos pinchazos surgieron en el dorso de sus manos. Se rasco
con los dientes de un tenedor de plástico.
Claire suspiró y fue penosamente arriba para encontrar la crema de cortisona. 14
Una mano sacudió su hombro.
—¡Claire, Claire!
Ella abrió un ojo
—Mrrrrhhhmmph —murmuró, mientras Lisbeth la sacudía de nuevo.
—Te traje una bandeja. Es casi medio día.
Claire apretó las sabanas sobre ella y se acurrucó más abajo en la cama. Escuchó a
Lisbeth caminar un par de pasos y esperó a que la puerta se cerrara, hundiéndose
en el sueño de nuevo. Que fue, hasta que las sabanas estuvieron sobre ella. Lisbeth
permaneció al final de la cama, con sus brazos llenos de cobijas y una sonrisa por
su rostro.
—Tú madre estará en casa en una hora, necesitas estar despierta y vestida para
entonces. Ella quiere llevarte de compras —Lisbeth se sentó al final de la cama y
tomó un triangulo de tostada del plato de Claire. Claire miró a Lisbeth examinarla
en busca de alguna señal de contaminación en los trazos de tocineta antes de darle
una mordida.
—Oye, ¡Pensé que eso era para mí! —Le dijo Claire y agarró la mitad de la tostada.
—Oye, tú también —Lisbeth le dio otro mordisco—. Está perfectamente cocinada.
Eres afortunada de que haya traído esto aquí, señorita. —Su cara se puso seria—.
Me imaginé que estarías cansada después de la conmoción de ayer. Lamento que tú
fiesta haya terminado de esa manera.
La promesa de llamada de Matthew hizo eco en la memoria de Claire. —En
realidad, pienso que terminó bastante bien—. Sí, bueno, por lo menos todos
vinieron, ¿no?
Lisbeth se arregló el cabello. —Eso es muy positivo de tu parte, Claire–osa. Tienes
que ir con el ritmo, ¿no?
Claire puso los ojos en blanco. —Oh por Dios, Lisbeth, nadie dice “ir con el
ritmo”. Suenas como algún hippie perdido. Y no me llames Claire–osa.
FORO PURPLE ROSE

Lisbeth se mordió el labio inferior pretendiendo estar herida. —Te traigo tú comida
a la cama, y todo lo que obtengo es abuso. Bien, estaré abajo. —Se levantó de la
cama.
Claire le lanzó una almohada a Lisbeth, que la esquivo expertamente y se rio
mientras salía de la habitación. —Tu mamá estará aquí en una hora. —Claire
suspiró. Nada como estar en el arroyo y llamar a alguien que apenas se acordaba de
que estabas viva.
Su mamá se había ido por mucho tiempo, e incluso cuando estaba en casa, Marie 15
pasaba la mayor parte del tiempo encerrada en su oscura habitación, o tomando
café mientras negociaba un salario si es posible más astronómico por su siguiente
trabajo. Pero sería peor salir de la cama si eso significaba ir de compras. Claire
cogió una pieza de tocineta y la mordisqueo, luego la puso de vuelta en el plato y
camino hacia el closet. Lanzó un par de shorts y de camisetas mientras se
apresuraba al baño para alistarse.
Corría la plancha a través de su cabello una última vez cuando una música apagada
empezó a flotar de su canasta de ropa.
—¡Mierda! —gritó Claire. Se lanzó sobre la pila de ropa sucia hasta que encontró
los pantalones que se había puesto en la mañana de ayer. Metiendo la mano en el
bolsillo, sacó su celular, mirando el identificador. Su corazón golpeaba mientras
contestaba el teléfono.
—¿Hola? —Se sonrojo de lo jadeante que sonaba.
—¿Claire? Lo siento, ¿todavía estabas dormida? —Preguntó Matthew.
—No, ya estoy despierta. Sólo que no podía encontrar mi teléfono. Oh, vaya manera
de empezar, Claire. Ahora pensará que eres una descabezada.
—Bien —se detuvo—. Así, que me estaba preguntado ¿Quieres venir más tarde?
Podemos salir por ahí o ver una película o algo.
Claire se mordió el labio para no gritar.
—Sí —dijo— eso suena bien. A Que, uh ¿A qué hora?
Ella celebró bailando alrededor de la habitación mientras hacían planes. Tan pronto
como hubieron colgado, corrió por las escaleras y se lanzó, descalza, por el piso de
mármol de la cocina.
—¡Lisbeth! —Llamó.
Una cabeza rubia se asomo por la esquina. —¿Qué? Es mejor que te alistes, tu
mamá estará aquí en cualquier minuto.
FORO PURPLE ROSE

—Tienes que llevarme a la casa de Matthew mas tarde ¿Bueno? Quiero decir,
puedo ir ¿Cierto? ¿A ver una película?
Lisbeth sonrió, pero una pequeña línea de preocupación apareció entre sus cejas. —
¿Matthew? ¿No es mayor que tú?
—Sólo por un año.
Lisbeth puso las manos en sus caderas y ladeó la cabeza hacia Claire. —¿No es
Piscis? Ellos no son muy compatibles con los Géminis, tú sabes.
16
Claire puso los ojos en blanco. —Oh por Dios. Suficiente con la basura astrológica.
Sólo, puedo ir ¿O qué?
—De acuerdo, puedes ir, pero cuando se ponga todo emocional, no digas que no te
advertí —Lisbeth sacudió la cabeza—. Ahora ve arriba y… —Se detuvo a mitad de
la oración —¿Oye, por qué tus manos están tan rojas?
Claire las escondió en sus bolsillos. Desde anoche, las ronchas se habían puesto
peor también estaban en sus orejas. El dobladillo áspero de sus jeans le había
rascado las muñecas y se sentía como el paraíso. —Pienso que es hiedra venenosa.
Ya me unté unas cuantas cosas.
La puerta trasera se abrió. La mamá de Claire entró en la casa, con sudor en su
cabello oscuro y satinado. —El clima afuera es abrasador, de nuevo —Miró a
Claire—. ¿Estás lista para ir de compras?
Claire asintió, besó a Lisbeth en la mejilla, y se apresuró al agradable interior del
Mercedes de su madre.
—Gracias por llevarme.
—Por supuesto —dijo su madre—. Tú cumpleaños dieciséis, es importante. Marca
un cambio. Debemos celebrar.
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 2
Traducido por: Emii_Gregori, ηịịị ღ y andre27xl

Corregido por: Silvery
T
17
res tiendas visitadas y llevaba cuatro grandes bolsas, Claire y su madre
se deslizaron dentro de uno de los restaurantes del centro comercial.
Era como la mayoría de los comedores, donde hay hamburguesas y
atún, pero con un poco de carne Angus negra, se servían en platos ultramodernos.
La camarera tomó su cuenta (dos hamburguesas con papas fritas) y se deslizó de
nuevo a la cocina.
Debajo de la mesa, Claire se rascó furiosa las manos.
—¿Tienes planes para esta semana? —preguntó su madre, tomando un vaso de té
helado.
Claire jugó con el pañuelo que había dejado la camarera al lado de su Coca Cola
Diet. Ella le había dicho a su madre acerca de ir con Matthew (no menos de cinco
veces desde que salieron de la casa, pero su mamá odiaba al Dr. Engle
completamente....) Lisbeth sólo le dirá si no lo hago. Claire tragó saliva.
—Voy con Matthew a ver una película —dijo con tanta naturalidad como pudo.
La camarera apareció junto a su mesa y deslizó dos platos frente de ellas. Su madre
miró la comida en silencio. Para detenerla de decir algo más, Claire le dio un
mordisco a la hamburguesa. No se atrevía a mirar la cara de su madre. En su lugar,
clavó los ojos en el pan de hamburguesa, mirando a los jugos que soltaba la carne
volviendo el pan de color rosa.
—Claire. —Su madre suspiró—. No creo que eso sea una muy buena idea. Los
Engles…
—¡Mamá! —La interrumpió Claire—. Matthew no es como papá, ¿de acuerdo? Ni
siquiera lo conoces. ¿Qué pasa con lo que dijiste anoche? Todo lo de “dar-a-las-
personas-una oportunidad” ¿eran puras palabras?
Su madre metió una papa frita en un plato pequeño de kétchup.
—Veo que te se sientes algo decidida sobre esto. Bueno, entonces, puedes ir esta
vez. Pero si ves al padre de Matthew, quiero que mantengas los ojos bien abiertos y
la boca cerrada. Y te advierto, debemos tener una grave discusión cuando llegues a
FORO PURPLE ROSE

casa. Ahora, come tu comida antes de que se enfríe. Tengo una película que
necesito hacer en la tarde, y el día se torna lejano.
Claire asintió con la cabeza y mordió su hamburguesa, sonriendo mientras
masticaba. En unas pocas horas, estaría con Matthew, y él era todo lo que
realmente importaba.
Emily salió de la cama de Claire, pateando las bolsas de compras que Claire había
arrojado en la parte superior de los cajones. Claire la había llamado al minuto en
que había entrado por la puerta, y tan pronto como Emily escuchó las palabras 18
"Matthew Engle" y "cita" en la misma frase, se apresuró. Claire había oído el coche
de Emily antes de que incluso colgara.
—Entonces, um, lo siento por la manera en que terminó tu fiesta. Eso fue horrible.
¿Estás bien?
—¿Estás bromeando? Estoy muy bien.
—Me di cuenta que Matthew te preguntaría cualquier cosa. ¿Quién hizo todo esto
posible, de todos modos?
—Matthew me sorprendió mientras todos los demás estaban corriendo él se quedó.
Y entonces llamó esta mañana y me pidió que viéramos una película en su casa.
Emily sonrió.
—Mira, te he dicho que las cosas se resolverían. Yo sabía que te gustaba, ¡lo sabía!
Oh, estoy tan emocionada por ti. —Sacó una botella de esmalte de uñas de color
rosa de la mesa de noche y la acercó a sus pies—. Entonces, ¿qué usaras?
—No sé —Claire se apoyó contra la puerta cerrada y golpeó una pila de zapatos—.
Tiene que ser algo con mangas largas, ya que tengo esta estúpida erupción en mis
manos que no quiero que vean. ¿Qué piensas?
—Tiene que ser algo sexy, pero no muy obvio. Quiero decir, debe hacerle sentir a él
qué quieres sin estar segura de lo que puedas tener, ¿verdad? Qué pasa con...
hmm...
Emily se armó de valor saltó de la cama y se dirigió al armario de Claire, hojeando
la ropa que colgaba cerca su espalda.
—¿Qué pasa con esto? —le tendió una camisa roja de cuello ovalado—. Se puede
usar con ese par de jeans que tienen el rasgón en la rodilla. Eso sería perfecto,
siempre y cuando no te mueras del calor.
—Eres un genio. Me había olvidado de esa camisa. Y no pienso mucho acerca de
morirme de calor en el sótano de los Engles. —Claire rebuscó en su armario
buscando sus pantalones vaqueros que estaban en una pila de ropa—. Otro consejo,
¿algún hechizo para citas o algo?
FORO PURPLE ROSE

—No mastiques chicle. Si trata de darte un beso, vas a tener que tragarlo, y se
puede poner algo difícil. Ten un poco de menta en el bolsillo y las puedes tomar si
es necesario.
—Mentas. Ok.
—Ah, y otra cosa...
—¿Sí? —Él no está muy actualizado, Claire. Es un chico lindo. Y tiene suerte de
que estas yendo a visitarlo. Relájate y pasa un buen rato, ¿vale?
19
Claire gimió.
—Lo intentaré, pero no estoy haciendo ningún tipo de promesa. Oye, la salida en
realidad es aproximadamente en una hora, por lo que…
—Entonces, ¿por qué sigo aquí? —La interrumpió Emily—. Termina de prepararte.
Yo ya me voy. Dios. Matthew Engle. ¿Me juras que me llamaras mañana?
—Claro que sí —Claire sonrió—. Te voy a dar el resumen completo.
Emily le dio un abrazo y bajó las escaleras. Claire entró en su cuarto de baño, y
tomó una ducha con la esperanza de calmarse. Emily mencionaba la posibilidad de
que Matthew la besaría y había empezado a ponerse nerviosa.
—¡Ay! ¡Mierda! —Claire saltó cuando la placa caliente de hierro le rozó el cuello.
Apartó la sección suave como la seda e inspeccionó los daños. Una marca pequeña
de color rosa en el cuello, no era tan malo. No es casi tan malo como los pinchazos
rojos que salpicaban sus manos. Por lo menos el cabello lo ocultaría. Sus manos
eran un problema totalmente distinto.
Claire tiró de la camisa roja que le había dado Emily. Los extremos de las mangas
llegaron casi hasta los nudillos, y se había recubierto la piel con corrector en polvo,
lo que hizo que picara peor, pero lucía mucho mejor. Si Matthew nota la estúpida
erupción, me muero.
—¿Claire? —La voz de Lisbeth hizo eco en el pasillo—. ¡Vamos a llegar tarde!
—¡Ya voy bajando! —Claire agarró su teléfono móvil, se sacudió el pelo por
encima de sus hombros, y se lamió los labios. Se apresuró en el vehículo. Lisbeth ya
estaba allí, vestida con una túnica púrpura brillante.
Las pulseras de plata tintineaban una contra otra en sus muñecas y sus labios
brillaban con el lápiz labial.
Claire la recorrió con la mirada.
—Estás vestida. Lisbeth tragó.
—Tengo algunos planes. Claire subió al coche.
FORO PURPLE ROSE

—Bien entonces, se toda misterios.

Un débil rubor rosa se esparció por sus mejillas.
—Tengo permitido tener una vida privada, sabes.
—Ok, ok. No arruines tu lápiz labial.
Cuando Lisbeth se detuvo en frente de la casa Engle, Claire intentó no darse cuenta
de que era más pequeña que la suya. Pero luego, otra vez, la mayoría de las casas
eran más pequeñas que la Benoit. A la madre de Claire le gustaba la privacidad 20
tanto como a Claire le gustaban las cosas lindas, y su enorme casa estaba ubicada
en varios de acres de tierra.
La casa de Matthew era la imagen de una casa normal con un lindo jardín en el
frente, marcos de las ventanas pintados, y un manchado vidrio redondo con una
cruz colgando en la mitad de la ventana delantera. Claire bajó del coche.
—Te recogeré a las nueve —dijo Lisbeth—. Y me refiero en punto ¡No quiero estar
afuera después del anochecer!
Matthew abrió la puerta antes de que ella pudiera tocar.
—Hey —dio un paso al lado y la animó a entrar en la casa—. Vamos entra.
—Gracias —dijo Claire.
—Mi padre hizo palomitas —Matthew hizo rodar sus ojos—. ¿Por qué no
agarramos un tazón y algunas sodas? Entonces podremos escapar al sótano.
—Claro —dijo Claire, bajándose las mangas sobre sus manos para cubrirse mejor.
Podía ver la cocina desde la puerta delantera, estaba lo suficientemente brillante
como para realizar una cirugía ahí.
El padre de Mathew estaba apoyado contra un mostrador en la cocina, secándose
las manos con una toalla de papel. Se veía igual que cuando estaba en las noticias,
sólo que no estaba usando una corbata, y las mangas de su camisa estaban
enrolladas hacia arriba.
—Tú debes ser Claire —alargó su húmeda mano en su dirección—, es un placer
conocerte.
Claire sacudió su mano tan rápido como pudo, entonces puso sus dedos (que le
picaban) tras su espalda.
—Tu madre es una fotógrafa notable —dijo el Dr. Engle.
—Sí, eso es cierto —dijo Claire. Algo sobre la mirada en sus ojos y la advertencia
de su madre: boca cerrada, ojos abiertos, la previnieron de decir algo más. Era como si
él estuviera diciendo una cosa pero quisiera decir otra, y Claire no podía descifrar
que era lo que él estaba pensando realmente.
FORO PURPLE ROSE

—Marie Benoit… una mujer tan fascinante. Única. Y muy franca, según recuerdo.
—Uh, supongo —Claire miró a Matthew. Él tiró de la puerta para abrir el
refrigerador y agarró dos latas de soda. Con el tazón de palomitas balanceado sobre
una de las latas frías, apuntó con su cabeza hacia las escaleras.
—Si no comenzamos con la película, no tendremos tiempo de verla antes del
anochecer —dijo Matthew—. Gracias por las palomitas papá. Yo, um, te haré
saber si necesitamos algo.
—Sí, has eso. 21
El Dr. Engle no despegó los ojos de Claire. Ella se estremeció bajo su mirada-sin-
pestañar y siguió abajo a Mathew por las alfombradas escaleras.
—No le prestes atención a mi padre. Sólo es así de raro.
—No es gran cosa —dijo Claire, mirando a la cantidad de libros alineados en las
paredes del sótano.
Los gruesos lomos de los libros estaban cubiertos con letras brillantes. Títulos como
Vivisección3 y la Condición Humana y Sensibilidad a las fases de la Luna brillaban
para ella en la tenue luz. Pasar todo tu tiempo leyendo esa clase de cosas volvería
raro a cualquiera.
—Tú padre está en serio involucrado en su trabajo, ¿eh?
—Sí, eso creo.
Claire miró a Mathew y levantó sus cejas. Él se había vuelto susceptible cuando el
tema de su padre había surgido en su fiesta también.
—¿Tema delicado?
—Algo así —Matthew se recostó su espalda en el sofá y abrió una de las latas de
soda—. Sólo se vuelve aburrido. Todos los otros ven sólo un lado de él. Sólo se
emocionan tanto porque está mucho en TV. Pero él no puede hablar de nada
excepto de su “cura”. No fue ni siquiera a uno de mis juegos de fútbol la temporada
pasada, ¿sabes?
—¿En serio? Eso apesta. —Matthew era un increíble medio campista. Claire había
escuchado a algunos diciendo que a él ya le habían ofrecido un puñado de becas
universitarias debido a esto.
3
Vivisección: Significa literalmente cortar en pedazos animales vivos, pero actualmente se ha
generalizado su uso como el término para todos los experimentos en animales vivos ya que muchos
experimentos con animales, como las pruebas de toxicidad, no implican procedimientos quirúrgicos.
FORO PURPLE ROSE

—Algunas veces pienso que es mejor, por lo menos para mí, cuando mi madre no
se da cuenta de que estoy, como si no estuviera ahí.
Matthew la miró, sorprendido.
Claire tragó saliva.
—Me refiero, ahí es cuando las cosas parecen normales. Lisbeth y yo sólo, estamos.
Pero cuando mamá está en casa, todo es sobre ella y lo que ella necesita para
trabajar o lo que ella quiere comer y Lisbeth caminando en puntillas alrededor de la
casa como si ella se estuviera escondiendo de un ladrón o algo. 22
—Huh. En realidad, eso tiene sentido. Mi madre y yo estamos de la misma forma

cuando papá está en casa, se trata de no molestarlo. Prácticamente no podemos
respirar sin interrumpir sus procesos de pensamiento o lo que sea. Nunca lo había
pensado de esa manera, pero tienes toda la razón.
La intrigante mirada en sus ojos hizo sudar las palmas de Claire. Tragó.
—Por supuesto, mi padre no está fuera de la ciudad como tu madre. Me refiero,
trata con ataques de hombres lobo alrededor de todo el mundo, pero mayormente
sólo lo hace a través del teléfono en su laboratorio, consultando con otros
gobiernos, científicos y cosas, intentando que lo dejen probar su cura. A él se le está
haciendo más fácil convencer a la gente de cosas ahora que está en la FHPA. De
cualquier forma, suficiente sobre mi papá. Él no es ni la mitad de interesante que
tú. Matthew arrastró las palomitas más cerca del sofá y puso una de las sodas en el
lado del tazón que quedaba junto a Claire.
Sus palabras enviaron una repentina ola de calor a través de ella que le hizo más
difícil hablar. Claire se hundió en el sofá, dejando la mitad de un cojín entre ella y
Matthew. Lo suficientemente cerca para que la alcanzase, pero no lo
suficientemente cerca como para parecer desesperada.
Matthew le mostró la caja de un DVD.
—¿Está bien? —Era algún tipo de película de acción. La cubierta mostraba un
coche deportivo en medio de una explosión. Claire asintió. A ella no le importaba
lo que vieran (estaba hipersensible sólo por el hecho de tener a Matthew sentado a
su lado). Tan casualmente como pudo, Claire dejó su mano, palma arriba, en el
cojín entre ellos. La áspera cubierta de fábrica se sentía bien contra el dorso de su
mano que picaba. Matthew se acomodó como si él sólo estuviera cambiando de
posición, pero cuando se recostó nuevamente, estaba por lo menos seis pulgadas
más cerca de Claire de lo que había estado antes. Su brazo estaba extendido a
través de la parte posterior del sofá, detrás de Claire, pero definitivamente no
tocándola.
La respiración de Claire se cortó, y Matthew la miró.
FORO PURPLE ROSE

Ella quería moverse más cerca, tocarlo. ¿Pero no se suponía que era él quien tenía
que hacer el primer movimiento? Oh por Dios, esto es tan estúpido. A mí no me importa
quién se supone que debe comenzar las cosas. Claire se deslizó y se recostó en Matthew.
Él se tensó un poco y el corazón de Claire se congeló en su pecho. Oh, mierda,
mierda, mierda, mierda. Comenzó a sentarse, para alejarse.
—De ninguna manera —Matthew envolvió su brazo firmemente alrededor de su
hombro. Claire no pensaba que él pudiera ver la enorme sonrisa que se extendió
por su cara. Punto uno para la rompe–reglas.
23
Mientras los coches corrían en la televisión y las sirenas de los policías resonaban
desde el sonido surround, Mathew trazó un patrón en el hombro de Claire con los
dedos de sus manos, lo que la hizo temblar en una forma que no era para nada de
frío. La película (que no había estado viendo, de todos modos) se convirtió en un
borrón de imágenes en la pantalla. Todo en lo que se podía enfocar era en el toque
de Mathew.
Cuando los créditos saltaron a la pantalla, Mathew volvió la cabeza hacia ella.
—¿Claire? —preguntó. Su cara estaba a centímetros de la de ella. En la tenue luz,
sus ojos brillaron.
—¿Esto está bien? —Su voz era baja, implorante.
Claire tragó fuertemente.
—Está muy bien —susurró.
—Bien. —Se inclinó hacia ella, su boca suspendida lo suficientemente cerca de ella
como para que pudiera sentir el calor de su piel.
La puerta crujió al abrirse en la cima de las escaleras. Claire se apartó de Mathew,
pero él atrapó su mano, manteniéndola cerca. La mirada de frustración dolorida en
su rostro era tan obvia que Claire tuvo que reprimir una risita tonta.
—¿Claire? —La llamó el padre de Mathew—. Tu… eeee, alguien está aquí
llevarte—. Ya vamos para allá —Mathew gritó de vuelta. Miró a Claire, y una lenta
sonrisa se esparció cruzando su bronceado rostro—. Este es el único día en el mes
que ha estado en casa. La próxima vez, estará fastidiando a algún reportero, en vez
de a nosotros.
—Eso suena... mejor. ¡Próxima vez! Dijo ¡la próxima vez!
—O podemos estar en mi casa. Lisbeth no es, como, sobreprotectora, o algo por el
estilo. Mathew miró la puerta abierta y suspiró. La alcanzó y trazó la línea de su
quijada con su pulgar.
—Te llamaré, ¿de acuerdo?
FORO PURPLE ROSE

Claire flotó hacia el coche.

—Te dije a las nueve en punto —dijo Lisbeth—. El sol ya está oculto. —Claire
miró las rayas de rosa y naranja esparcidas a lo largo del cielo como fuego.
—Lo sé —suspiró—. ¿No es hermoso?
Lisbeth resopló.
—Ahh, joven amor —se burló.
—Así que, ¿cómo estuvieron tus planes? —Claire lanzó una mirada significativa 24
hacia Lisbeth.
—Exitosos. —Lisbeth se sacudió un pedazo de hoja muerta de su manga. Una
pequeña sonrisa se torció en las esquinas de su boca. Obviamente no iba a decir
nada más sobre ello.
—Bueno, bien por ti. Señorita “yo-tengo-una-vida-privada”. —Claire rodó sus ojos
y aumentó el volumen del estéreo del coche. Apretó sus manos contra el material
del asiento del coche, y deseó que ya estuvieran en casa.
Más tarde esa noche, Claire rodaba y se removía en su cama. Sus oídos y la parte
de atrás de sus manos la estaban volviendo loca, aún cuando Lisbeth las había
cubierto con loción de Calamina después de cenar. Dormitó irregularmente,
despertándose al comienzo cuando la puerta de su cuarto se abrió. Su madre se
acercó sigilosamente, cerrando la puerta tras ella. Claire se sentó en la cama y
observó la enorme melena de fino cabello negro que estaba colgando suelto y
salvaje alrededor de la cara de su madre. Su madre nunca usaba su cabello
aplacado, siempre arriba en un elegante moño, así no le estorbaría cuando
trabajara. —Estás despierta —dijo su madre a la vez que se recostaba en la cama.
Claire asintió.
—Supongo que bebí mucha Coca Cola Diet —dijo—. Y tengo picazón.
—Su madre sonrió, tomó las manos de Claire, y las presionó contra sus frías
palmas. —Había olvidado lo de la picazón —dijo con voz lejana.
Claire se erizó.
—Tú… ¿qué?
Su madre soltó su mano y se acomodó el cabello hacia atrás.
—Oh, chérie, no estoy segura de por dónde comenzar. —Su madre resopló,
mirando fuera de la ventana a la gran expansión de luz de luna que se esparcía por
fuera más abajo—. Ahora que tienes dieciséis, las cosas… las cosas van a comenzar
a cambiar. Yo… yo he estado esperando un largo tiempo para discutir esto contigo.
FORO PURPLE ROSE

Claire sintió la sangre caliente corriendo hacia sus mejillas. Oh, Dios, pensó, quiere
tener La Charla. Ew. De todas maneras ¿qué piensa que sucedió con Mathew? —Mamá,
está bien —farfulló—. Ya hicimos todo esto en clase de Salud. Los ojos de su
madre se abrieron enormemente.
—¿Qué? ¿Cómo? Oh. Oh. —Comenzó a reír—. No, Claire, eso... eso no es a lo que
me refería.
Claire llevó sus rodillas hasta su pecho y envolvió sus brazos alrededor de sus
piernas. 25
—¿Qué es, entonces?
Su madre se inclinó en uno de los grandes postes tallados al final de su cama y
acomodó el cuello de su camisa. Claire observó a su madre. Una medianoche,
madre e hija, la charla estaba muy lejos del comportamiento de su madre. Algo
definitivamente estaba por venir.
Su madre suspiró.
—Nuestra familia no es como las otras familias. Tu historia, tu linaje, es algo de lo
que quiero que estés orgullosa.
—¿Qué, por qué eres francesa? —Claire luchó por no reír—. Creo que podríamos
comenzar a celebrar el día de la Bastilla.
—A eso no es a lo que me refiero. —La voz de su madre estaba tensa. Cerró sus
ojos y tomó un respiro profundo. Hombre, es fácil estresarla, pensó Claire.
—Vienes de una larga línea de mujeres orgullosas. Mujeres que han sobrevivido,
quienes han pasado un secreto de madre a hija. —Torció la sábana alrededor de sus
dedos. Los ojos de su madre revolotearon hasta encontrar los de Claire.
—Como yo, como tu abuela antes que yo, y su madre antes de ella, somos lo que
llamamos loup-garou (Hombres-lobo).
Claire inclinó la cabeza hacia un lado. Odiaba cuando su madre hablaba en francés.
—Una mujer-lobo, chérie. Tú y yo somos mujeres-lobo.
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 3
Traducido por: Izzy, Aneka, Genesis__480 y Silvery

C laire abrió la boca, y después la cerró con un chasquido, cuando se

lanzó de la cama hacia la puerta.
Ella está loca, pensó. No es verdad, no puede ser.
26
Su madre la cogió por el brazo y la giró hacia ella, sus ojos grises brillaban...
—Claire, se que esta noticia es difícil de asimilar, pero es la verdad. Esa es la razón
por la que tus manos y orejas te han estado picando, es el principio de tu
transformación.
Claire cayó en la alfombra, se hizo un ovillo y se cubrió los oídos con las manos.
―¡Estas completamente loca! ¡Estas equivocada! no hay manera de que me este
convirtiendo en lobo. Lo sabría. Me hubiera dado cuenta.
Hundió las uñas en el lóbulo de sus orejas tan fuerte que sus ojos lagrimearon por el
dolor.
—Quería contártelo todo desde hace tiempo, pero nadie puede saberlo antes de su
dieciséis cumpleaños, respira profundo Claire, respira... todo estará bien. —Claire
inhaló bruscamente.
—Simplemente no es cierto. Lobos. Ellos matan personas y yo, yo no quiero
lastimar a nadie. —Su voz se quebró
—Shhhhhhhhh —le advirtió su madre— no debes despertar a Lisbeth. Ella levanto
a Claire del suelo y la dejó con facilidad en la cama. ¿Cómo es que ella es lo
suficientemente fuerte como para levantarme?
Los dientes de Claire castañearon.
—¿Por qué nosotras no?, tiene que ser alguien, piénsalo Claire. ¿Por qué piensas
que tenemos una pareja? Alguien que cuide de ti cuando no estoy aquí, algunas
veces estoy fuera por trabajo, pero a veces me voy por otras razones, una verdad
esconde otra, sé que esto es duro de aceptar, lo sé, me acuerdo.
—Pero yo no quiero lastimar a nadie, no quiero lastimar a nadie. —Murmuro
Claire, con las rodillas apretadas contra el pecho—. Las noticias de la televisión no
FORO PURPLE ROSE

siempre son ciertas, Claire, nosotros cazamos a otros animales, si, pero eso sólo lo
hacen los hombres, matar humanos por deporte no está permitido
—Entonces ¿Por qué todo el mundo dice que los lobos matan personas? —La
desafió Claire.
Los labios de su madre se apretaron en una línea fina. —Uno de nuestra especie se
sale de nuestras leyes, de la misma manera que los humanos las rompen cuando
cometen asesinato, pero esa no es nuestra naturaleza. No es nuestro camino. Esos
hombres-Lobo que matan humanos son rechazados por el resto de nosotros. 27
—No creo nada de esto. Si yo, si nosotros fuéramos lobos, tendrías que habérmelo
dicho antes.
—No, no debía. No podía, no está permitido que los niños se enteren, ellos no
entienden el peligro en el que están envueltos, son incapaces de guardar su
identidad. No revelar la verdad hasta que el niño comience la transformación, ha
sido una de nuestras tradiciones por muchas generaciones. Antes de que
comenzáramos a hacerlo de esta manera, muchos de nosotros fuimos atrapados y
asesinados.
Su madre se lanzo a las profundidades del armario y caminó a grandes zancadas
hacia el fondo. —Vístete —dijo —algo que sea oscuro, vamos a salir.
—¿Sa… sa... salir a do... dónde? —Tartamudeo Claire. Cogiendo los pantalones
que su madre le ofrecía.
Su madre se giró para enfrentarla. —Iremos al bosque, yo no le creí a mi madre
hasta que también lo vi. —Su voz se suavizó—. Te explicaré todo, cuando sea la
hora.
—¿Cuándo será eso? —Chillo Claire, el borde de su visión se estaba haciendo
borrosa —¿Me estás diciendo que iremos al bosque para que pueda convertirme en
lobo, pero no es el momento correcto para hablar de ello?
—No esta noche. Toma tres ciclos de luna a una nueva convertirse totalmente. Yo
pienso que debería transformarme. No tienes de que asustarte Claire, nada te
lastimará esta noche, te lo prometo.
—Necesitas confiar en mí ahora, y hacerlo exactamente como digo. —Ella
presionó una playera vieja en las manos de Claire —debemos apresurarnos. Se verá
mal si llegamos tarde.
Claire se puso la camiseta y bajó detrás de su madre. No estaba segura de que le
asustaba más, si la idea de que su madre se hubiera vuelto loca o la posibilidad de
que le estuviera diciendo la verdad.
FORO PURPLE ROSE

Salieron por la puerta lateral, deslizándose hacia la noche vacía, su madre se movía
rápido, como las sombras era todo lo que Claire podía hacer para continuar. Una
dolorosa punzada le dio en un costado.
Dios. No he visto a nadie moverse así de rápido
Cuando su madre hizo una repentina parada. Claire casi se estrella contra ella,
enfrente de ellas había un muro cubierto de hiedra, que separaba su tierra del
bosque.
—Aquí está la entrada. —Susurro Marie, señaló con la cabeza hacia lo alto del 28
muro—. Esa grieta en el tabique de ahí... marca el punto —ella se arrodilló y puso a
un lado la hiedra revelando un largo agujero entre los ladrillos. Se metió con
facilidad por la entrada oculta.
El bosque era negro como la tinta y Claire se detuvo dentro del muro de ladrillos
sin poder ver nada. Se sintió totalmente entumecida, no importaba que tanto
tratará, por más que se esforzaba, no podía moverse hacia adelante en la negrura.
Me pregunto si entraré en shock.
—No puedo ver nada, tal vez deba regresar.
—Tus ojos cambiarán pronto —dijo su madre. La cogió de la mano y empezó a
jalarla a través de los árboles. Hojas y ramas se quebraron bajo los pies de Claire
mientras caminaban rápidamente hacia el bosque. Algo se estrelló a través de la
maleza a la derecha de Claire, y su madre la jaló bruscamente detrás de un árbol,
dejándola en el musgoso suelo del bosque.
Claire se agacho detrás del árbol, su madre hizo un sonido de advertencia, un
gruñido que retumbo profundo en su garganta. Ella sonó como un animal.
—¿Que, que fue eso? —susurró Claire
Su madre siseó. —No lo sé. —Admitió—. Tal vez sea uno de los otros.
¿Los otros? antes de que Claire pudiera forzar a salir la pregunta de su boca, Marie la
puso sobre sus pies y echó a correr por el bosque, su mano era como una banda de
hierro alrededor de su muñeca.
Más adelante, en la parte más profunda del bosque, una tenue luz naranja brilló.
Claire pestañeo duro, tratando de ver a través de las densas ramas mientras corría.
Sus pulmones quemaban mientras trataba de respirar. Se acercaron a la luz, que
ondeaba y brillaba. Es fuego
Se dio cuenta Claire. Su piel se puso de gallina cuando vio a las cinco figuras
rodeándoles, sus sombras negras como el carbón con el brillo del fuego.
FORO PURPLE ROSE

Cinco de ellos. Oh dios. Ella tironeó de su mano para zafarse del agarre de su madre,
conmocionada y enferma por su repentina fuerza. Su madre gruñó en respuesta.
—¿Hay… hay seis de ustedes aquí en Hanover Falls?
Claire tartamudeo y tembló.
Su madre le tomó la cara entre las manos. —Siete, chérie. Hay siete de nosotros.
Ven. Te presentaré.
Claire entró sigilosamente al círculo, detrás de su madre, las cinco mujeres de ojos 29
afilados se sentaron alrededor del fuego y la miraron. Marie la empujó hacia atrás,
dentro de la cálida luz del brillante fuego.
—Ella es Claire —dijo ella. Marie se giró hacia la anciana sentada en el suelo cerca
de Claire—. Beatrice, te doy la bienvenida.
La vieja mujer sonrió, su cara agrietándose en una telaraña de arrugas debajo de
una nube de cabellos grises. —Marie, te doy la bienvenida —respondió. Sus ojos
brillantes se detuvieron en Claire.
—Feliz cumpleaños, pequeña Claire —añadió.
Claire la miró, aturdida. Era demasiado para ser asimilado de una vez. Ella todavía
no había visto nada que probara que su madre estuviera diciéndole la verdad. Que
ellas realmente eran lobos, pero la posibilidad hizo a sus piernas flaquear. Sintió el
codo de su madre hundirse en su costado. —Um. Gracias —le dijo a Beatrice,
quien se sentó con una sonrisa paciente en el rostro.
—¿Como sabe ella que es mi cumpleaños? —El codo de Marie se quedo hundido
en las costillas de Claire—. Yo, uh, yo te doy la bienvenida también, Beatrice.
La vieja mujer aplaudió con deleite. La madre de Claire se giró hacia una mujer
más joven, sentada con el brazo alrededor de Beatrice.
—Victoria es la hija de Beatrice —le dijo a Claire—. Victoria, yo te saludo.
Victoria sonrió manteniendo su cabello color fresa sobre un hombro.
—Marie, yo te saludo.
—Claire, también te saludo —sin pensarlo, Claire le devolvió la sonrisa calmada
por como de brillante y normal se veía Victoria—. Yo... yo te saludo —dijo Claire.
—Di su nombre —siseo su madre.
Claire respingó. —Te saludo también, Victoria. Lo siento
—No hay problema —dijo Victoria—. Hay mucho que aprender. Ya lo veras.
La madre de Claire la llevó alrededor para enfrentar a la siguiente mujer en el
círculo.
FORO PURPLE ROSE

Ella era pálida y flaca, con el pelo grueso, negro como el hierro
—Esta es Zahlia. Zahlia, yo te saludo.
—Y yo te saludo a ti, Marie —se humedeció los labios y asintió hacía Claire
—Claire, también te saludo.
—Yo te saludo, Zahlia, —dijo Claire, esta vez sin problemas.
Hicieron el mismo ritual con las últimas dos mujeres, Judith y Katherine, dos
mujeres de mediana edad quienes saludaron a Claire sin siquiera mirarla realmente. 30
La boca de Claire se puso seca de los nervios al mismo tiempo que la mandíbula le
dolía de lo apretaba que estaba. Era como desfilar delante de clientes importantes
de su madre... sus ojos desnataban sobre su política, pero era obvio que no podían
estar menos interesadas en conocerla.
No es como que yo haya pedido estar aquí.
La mujer de pelo grueso, negro como el hierro –Zahlia– atrapó la mirada de Claire
y miró intencionalmente a Judith y Katherine antes de torcer sus ojos. Claire luchó
para no colocar una sonrisa en su rostro. Está bien, así que no todos pensaban que
ella era solo una muda arrastrada por su madre.
Marie captó la vista de la divertida expresión en la cara de Claire y le dio una aguda
mirada
—Siéntate. —Su madre apuntó a un espacio abierto al lado de Victoria, la rubia—.
Y escucha.
Claire se hundió en la suciedad al lado de Victoria. Ella envolvió los brazos
alrededor de sus piernas y reprimió el deseo de correr hacia el bosque, ir a casa,
arrastrarse hacia la cama, y pretender que nada de esto había pasado.
Beatriz se paró arrastrando los pies cerca del fuego. Alzó los brazos y empezó a
cantar con una voz clara y juvenil que sorprendió a Claire. Esto no puede estar
pasando en serio. Tal vez es sólo un muy achispado sueño que estoy teniendo. Claire se
pellizcó la palma de la mano con las uñas de su mano izquierda. Maldición. No es un
sueño. Victoria se deslizó más cerca y agarró la mano de Claire, haciéndola dar un
salto.
—Estás bien, —susurró—. Estaba asustada también la primera vez. No te
preocupes.
La madre de Claire les envió una implacable mirada y Victoria se quedó callada.
Claire no pudo entender la mayoría del canto, y no parecía tener fin. Escuchó algo
sobre el viento y la Diosa, y oyó a Beatriz diciendo todos los nombres... excepto el
de Claire.
FORO PURPLE ROSE

—Cierra los ojos, —dijo Victoria —será más fácil.

Claire Cerró los ojos y se inclinó hacia delante, descansando su frente en las
rodillas. El crujir del fuego llenó sus oídos. Un suave gemido se corrió por el
círculo. Cambió y creció hasta que se convirtió en un aullido no, pensó Claire, seis
aullidos. Abrió los ojos con su frente todavía en las rodillas. En el suelo a su lado,
vio dos patas marrones, más grandes que las de cualquier perro, en el sitio exacto
en el que los pies calzados con sandalias de Victoria estaban. Una fría, nariz
mojada le dio un pequeño golpe en la oreja de Claire.
31
Claire levantó la cabeza y saltó cuando vio al enorme, moreno y moteado lobo que
estaba delante de ella.
Un gemido ansioso sacudió la garganta del lobo, en algún lugar sobre la cabeza de
Claire
Ya está bien. Se acabó.
Como un lobo. Victoria era más grande que el San Bernardo de Yolanda Adams,
casi del tamaño de un pony. Todos sabían que los hombres lobos eran más largos
que un lobo normal, pero Claire no había comprendido lo grandes que realmente
eran.
Claire se dio la vuelta. En el espacio donde se encontraba su madre estaba un lobo
de color gris plateado. Era un poco más alta y oscura que los dos lobos que estaban
a su lado, quienes deberían ser Judith y Katherine.
—¿Mamá? —Se quejó ella
¿Si, Claire? Los labios del lobo plateado se quedaron cerrados, aun cuando la voz de
la madre de Claire sonara en sus oídos. Claire parpadeó.
¿Estoy... leyendo tu mente? ¿Los hombres lobos tenemos EPS?
No exactamente, —dijo su madre, olfateando el aire. Estas leyendo el lenguaje de mi
cuerpo, igual que yo lo estoy haciendo contigo. Y tú… Puedes oler mis cambios químicos que
vienen con el cambio de emociones. Tu solo estas traduciéndolo dentro de tu cabeza, así como
yo lo hago desde el inglés al francés. Es parte de los sentidos de los mayores sentidos que vas a
tener de ahora en adelante... aún cuando estés en tu forma humana.
Un bajo gruñido los interrumpió.
Ya es tarde. Es tiempo de cazar. La piel negra de Zahlia brillaba contra las sombras de
la tierra oscura de del bosque. Ella era enorme del mismo tamaño que el de Marie,
con brillantes ojos claros.
La mamá de Claire lo notó. Zahlia tiene razón. Claire, debes permanecer aquí con Beatriz.
Nosotros regresaremos lo más rápido posible.
FORO PURPLE ROSE

—Pero —empezó a protestar Claire, pero Zahlia intervino.

Oh, Marie, ¿por qué no la dejas venir con nosotros? Así ella puede empezar a aprender.
La mamá de Claire le dio a Zahlia una mirada que podía congelar a un rayo. Tú
sabes que el entrenamiento no comienza hasta después de que una transformación esté
completa.
Judith olfateó. Beatriz debes tomar la decisión. Y me está entrando hambre.
Zahlia encogió el pelaje oscuro de sus hombros, inclinando su cabeza ligeramente a 32
un lado en un gesto que claramente decía lo que tú quieras.
Todos se giraron en dirección a Beatriz
Marie tiene razón. Beatriz dijo alto y todavía en el espacio que estaba al lado del
fuego. Este no es el momento correcto. Vayan, los cinco de ustedes, y cacen. Claire y yo los
esperaremos aquí.
Los cinco hombres lobos salieron disparados al bosque. Claire miró a Beatrice,
quien en su forma de lobo se veía casi igual a la de Victoria, sólo que era más
delgada, y de pelaje blanco con el hocico y las orejas rayadas. Sus costillas se
notaban.
Beatrice se acercó con pasos quedos y se recargó en sus ancas junto a Claire,
levantó el brazo de Claire y lo puso sobre su cuello. Lagrimas fluyeron de los ojos
de Claire, y Beatrice presionó su flanco más cerca de la pierna de Claire.
Todo estará bien, pequeña. Tu madre... después de que termines tu transformación, será
capaz de explicarte mejor las cosas. Yo sé que es difícil de creerlo, pero ella esta tan nerviosa y
tiene tanto miedo como tú, tal vez más. Cuando Victoria tuvo su cambio yo estaba muy
orgullosa, pero al mismo tiempo mi corazón se rompió por ella. Nuestra vida... es una
maravilla, pero también es una pesada carga para llevar, y Marie lo sabe. ¿Tu madre te dijo
que ella es segunda después de mí?
Claire negó con la cabeza
Algún día ella será la Alfa de nuestra manada. Debes confiar en ella, Claire. Ella sabe
nuestras costumbres... lo que está haciendo. Las cosas estarán bien, de verdad.
Claire enterró la cabeza en el suave pelaje del hombro de Beatrice. Su respiración
salía en cortos y rotos jadeos. Si esto es lo que tengo que ser, las cosas no estarán
bien, quiero irme a casa, pensó ella. Yo sólo quiero irme a casa, quiero irme a casa.
¿Y cómo diablos ella no pudo decirme esto en dieciséis jodidos años?
Antes de que sus lágrimas pudieran empezar a fluir en serio, ella escuchó un
extraño sonido, como si algo pesado fuera traído a través de los bosques.
—¿Qué está pasando?
FORO PURPLE ROSE

Es la caza, —Beatrice comenzó a levantarse.

Victoria salió al claro primero que las otras.
Espero que tengas hambre, dijo ella cabeceando en una parte del cuello de Beatrice. ¡Tenemos
una cabra!
Claire volteó a tiempo para ver a su madre y a Katherine arrastrar un enorme
venado hacia el claro. El pelaje plateado en el pecho de su madre estaba manchado
con sangre. El cabrío pateó una vez, lanzando una gran pata salvaje en dirección a
Katherine. 33
—¡Oh! —Claire gritó—, Oh... Ni siquiera está muerto. —Ella se escabulló y

recargó contra el tronco de un árbol.
Zahlia sujetó sus garras contra el cuello del venado hasta que permaneció quieto.
Los seis lobos se reunieron alrededor del animal. Claire cerró los ojos y trató de
bloquear el sonido que escondía al rasgar al venado y masticarlo.
Hubo un suave yip que sonó familiar, de alguna manera. Claire miró arriba y se
encogió.
Su madre ladeo su cabeza hacia un lado. ¿Estás bien?
Muy a su pesar, Claire miró hacia las otras Hombres-lobo agachadas alrededor del
venado mutilado. Sus heridas brillaban a la luz del fuego. Para su horror, Claire
sintió una ola de hambre vibrar en su estómago. De su boca fluyó la saliva y tragó
fuertemente.
La madre de Claire parpadeo hacia ella. ¿Quieres que te traiga? Sus oídos se
levantaron en dirección a Claire. Tus dientes... dijo tus dientes humanos... no
funcionarán.
Claire sacudió la cabeza. A pesar de su boca húmeda, no podía comer eso. No lo
haría. No soy un animal, pensó. Se obligó a mirar a otro lado, bajando la vista hacia
sus manos. La sola visión de sus manos la hizo jadear. Un abrigo de piel sedosa, del
color de una nube de tormenta cubría el dorso de sus manos. Lentamente, alcanzó
y peinó el mismo tipo de piel que encontró en el contorno de las orejas. Habían
perdido su habitual forma de conchas.
Estaban planas, más afiladas. Un inhumano lamento silbó a través de sus dientes.
La madre de Claire se acercó al lado de ella y se sentó sobre sus piernas. Marie
sacudió la cabeza lentamente hasta que casi estuvieron cara a cara.
El hambre será más y más fuerte para ti, y traerá más cambios cada vez que se produzca.
Cada mes, tu transformación será más completa. En tres lunas llenas, Beatrice te llamará en
la ceremonia también. Ese es el camino de nuestro mundo. Cuanto antes lo aceptes, más
fáciles serán las cosas.
FORO PURPLE ROSE

La barbilla de Claire tembló. Presionó sus palmas contra los ojos, reprimiendo las
lágrimas, y sacudió la cabeza. La capa de pelo de la parte de atrás de sus palmas era
como una manta. Su piel de debajo se notaba caliente, blandita. Oyó a su madre
suspirar y pisar suavemente a través del claro, de vuelta al ciervo.
Mientras los otros comían, Claire se acuclilló contra un árbol e ignoró los gruñidos
que venían de su estómago. Cerró los ojos y esperó mientras los minutos se
arrastraban. Finalmente, Beatrice permaneció de pie al lado de los restos del fuego
y lanzó un extraño, y gorgoteante aullido. Cuando el sonido se apagó, como
34
hicieron las llamas, y puesto que la luna se había ocultado detrás de las copas de los
árboles, el claro había quedado en la oscuridad.
Judith y Katherine se marcharon a casa juntas, todavía con sus formas lobunas.
Beatrice se deslizó silenciosamente hacia los árboles mientras Victoria y Marie
arrastraban los restos del ciervo dentro del profundo bosque. Cuando se iban, Claire
notó un hocico dándole golpecitos. Levantó la vista alrededor, y unos ojos
moteados de dorado la miraban fijamente.
Ese tipo de mirada parece como si estuvieras enloquecida. Zahlia se tambaleó al lado de
Claire y flexionó sus piernas, lamiendo la sangre que salpicaba su piel.
Claire se encogió de hombros.
Bueno, no es algo de lo que estar avergonzada. Tu madre de verdad es elegante y todo eso,
pero espera un montón de todo el mundo. De ti, especialmente. Sólo porque ella piense que
esto es normal no significa que lo hagas, ¿sabes?
Claire asintió con la cabeza, apretó los dientes abriéndolos solo un poco.
La boca de Zahlia se abrió en una sonrisa lobuna.
Cuando mi madre me arrastró a los bosques en mi decimosexto cumpleaños, me entró
totalmente el pánico y a mitad de camino corrí hacia la interestatal antes de que Beatrice
diera conmigo. Y entonces no hablé con mi madre durante casi un mes. El hecho de que estás
aquí y no llorando a través del bosque como una lunática llorica me dice que lo estás haciendo
condenadamente genial.
—¿Cuánto tiempo te llevó conseguir que esto no te volviera loca? —susurró Claire.
Un año, ¿quizás? Supongo que es diferente para cada persona. Tengo diecinueve años y todo
esto parece más normal que lo que fue ser humana. Así que, sabes, hay esperanza.
Claire consiguió esbozar una pequeña sonrisa.
—¿Y dónde está tu madre?
Zahlia miró a la hoguera.
FORO PURPLE ROSE

Se fue. Es una larga historia. En fin. La Manada... todo va sobre la tradición y las normas y
la historia, ¿correcto? Pero a veces todo eso no te da lo que de verdad necesitas. Así que...
déjame saber si necesitas algo, ¿de acuerdo?
—Umm, vale. Gracias. —Claire pudo escuchar la confusión en su propia voz. No
sabía de qué estaba hablando Zahlia, pero era obvio que estaba tratando de sé
agradable.
Victoria y Marie se deslizaron de nuevo al claro. Claire pudo ver la sorpresa y la
desconfianza que cruzó la expresión de su madre cuando vio a Zahlia sentada con 35
ella, pero no podría decir qué estaba pensando su madre. Era como si Marie lo
hubiera bloqueado intencionadamente, de algún modo.
—Claire, es hora de irse —dijo su madre.
Claire asintió y se puso de pié rígidamente. Por fin. Se estaba muriendo por salir de
allí, por irse a casa. La madre de Claire sacudió su piel plateada y suspiró. Su forma
brilló y se flexionó, trozos de piel aparecieron sobre su pellejo. Claire intentó mirar
a otro lado, pero una horrible fascinación mantuvo sus ojos pegados a su madre.
Hasta que se dio cuenta de que su madre estaba desnuda. Las mejillas de Claire
enrojecieron y ella se giró. Por el rabillo del ojo, vio a su madre flexionar un pálido
y elegante brazo y agarrar un manojo de hierba de debajo de un arbusto. En un
instante, se había vestido y retorcido su pelo oscuro en su habitual moño ceñido.
La hoguera pasaba por encima de la altura de su madre, con la frente pálida y la
nariz recta. Era la cara que Claire siempre había conocido, la que todavía parecía la
cara de su madre. Clarie se rascó la parte de atrás de la mano, sorprendida y
aliviada cuando sus uñas se clavaron a través de la mullida piel sin pelo. Habían
vuelta a la normalidad, ambas.
—Gracias a Dios —susurró—. ¡Volví a cambiar!
Su madre se recostó a su lado.
—De ahora en adelante, en realidad deberás decir “Gracias a la Diosa”, cariño. Y
todavía no eres capaz de cambiar por ti misma. —La sonrisa bajita y crepitante de
su madre desapareció en la maleza—. Tan impaciente. Te empujé a cambiar con mi
propia transformación. Las madres pueden hacer eso para sus niñas, es una
protección. Para volver a cambiar, debes mantener el aliento y sentirte a ti misma
empujando, como si pusieras tu piel de lobo debajo de tu piel humana, como si
embutieras una alfombra dentro de un cajón. Pero habrá tiempo para aprender eso
más tarde, después de que hayas completado tu devianment, tu “iniciación”. Por
ahora, debes aprender a esperar.
Detrás de su madre, Claire vio a Zahlia poner los ojos en blanco mientras se
ajustaba el cuello de la camisa.
FORO PURPLE ROSE

Marie continuó:
—Lo más importante, Claire, es que nunca debes decir nada acerca de quién eres.
A nadie. Obviamente.
Claire se encrespó. No le había dado a su madre ninguna razón para tratarla como
a una chica de dieciséis años.
—No soy retrasada. No voy a echar a correr y postearlo en Internet.
Marie frunció los labios. 36
—Se han cometido errores antes. Sólo intento mantenerte a salvo.
Clarie miró aturdida a su madre.
—Tienes sangre en la barbilla —dijo.
Su madre se restregó la manga de la camisa por la barbilla.
—Pareces preocupada. ¿Estás bien?
¿Estar bien? ¿Estaba bien? Una llamarada de enfado se revolvió en el interior de
Claire. Su madre acababa de volver su mundo completamente patas arriba y no
entendía por qué Claire podría estar trastornada. ¿Hablaba en serio?
Marie esperó, con los brazos cruzados delante de ella.
—Yo, eh... no pensé en la ropa —tartamudeó Claire finalmente.
Su madre asintió.
—Una siempre debe quitarse la primera vestimenta antes de ponerse la segunda,
¿sí? Esto es lo mismo —se paró— sólo que diferente —se encogió de hombros—.
Un cuerpo es sólo un cuerpo. Ahora. Vámonos. Claire se arrastró por el bosque
detrás de su madre. Avanzaron lentamente de regreso a través del agujero del
muro, corriendo furtivamente de nuevo por el jardín, y después estuvieron a salvo
en el interior de la casa. Su madre giró el pestillo de la puerta de la cocina y se
volteó hacia Claire.
—Ve arriba y pon tus ropas donde Lisbeth no las encuentre. Después debes
ducharte e ir directamente a la cama. Mañana hablaremos más. —Volvió a colocar
un pelo que se le había escapado del moño—. Lo hiciste bien esta noche, Claire.
Estoy orgullosa de ti.
Claire miró cuando su madre se escabulló en las escaleras de atrás. Suspiró.
Cuando era pequeña, había deseado que su madre estuviera con ella más tiempo,
que pudieran pasar más tiempo juntas. Esto no era lo que había tenido en mente. Y
lo que era peor, no parecía haber ninguna otra forma de salir de esto. El
sentimiento repentino de estar atrapada se envolvía alrededor de Claire tan
apretadamente que tenía dificultades para coger aire. Se obligó a no pensar, para
FORO PURPLE ROSE

subir andando las escaleras un paso cada vez y meterse en la ducha como si nada
fuera mal.
Cuando se hubo lavado el olor de la hoguera y recogido sus mugrientas ropas,
Claire se arrastró hasta la cama. El cielo estaba ya veteado de rosa, con la luz antes
del amanecer, y cayó en un sueño exhausto tan pronto como tiró de la colcha por
encima de sus hombros.
37
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 4
Traducido por: cuketa_lluminosa – anaid – andre27xl

Corregido por: alice_vampire
E
38
ra la única casa sin el porche encendido, la única con suficiente oscuridad para
ocultarse. Ella había esperado tener aún de los vecinos Engles, no sólo alguien
quién vive en la misma calle. Aun así, sería suficiente para hacer rechinar los
dientes, sacudir algunos huesos… despertarlos. Ella se pregunto si se darían cuenta si se
llevaba un recuerdo. La casa se sentía fresca en ella cuando presionó el lado. En el interior,
todo el mundo estaba dormido.
Abrió la mandíbula y emitió un sonido tan alto y fino que sólo un perro, el que ella podía oler
durmiendo a los pies de la cama, podría oírlo. El ladrido fue repentino, frenético, asustadizo.
Ella lo amortiguó con gusto. Perros. Lo suficiente inteligentes como para tener miedo, pero tan
estúpidos como para atraer a los humanos a sus afilados dientes.
Ella se acurrucó junto a la puerta trasera, cuando se abrió con un chirrido, observó el estúpido
perro salir disparado al patio. Vio al humano que salió detrás. Entonces ella saltó... El cuerpo
de él agarró la puerta fuertemente. Ella lo rodeó y le retorció el cuello.
―¿Claire? Es hora de despertar, vamos, dormilona.
El recuerdo de la noche anterior burbujeó en la superficie de la mente de Claire, y
su corazón se hundió antes de que hubiese abierto los ojos. Bienvenido a Mi Vida
Como un Monstruo, Día Uno. Tragó fuerte.
―¿Te encuentras bien? ―Lisbeth frunció el ceño―. Te ves como… verde.
―Estoy bien. No pude dormir muy bien ―mintió Claire.
―No puedes engañarme, ya que dormiste hasta medio día. De todos modos, tu
madre, se pregunta si querrías encontrarte con ella en su cuarto oscuro.
La boca de Claire se abrió. A nadie le estaba permitido ir al cuarto oscuro de Marie.
Nunca. Ni siquiera a Claire.
Lisbeth se encogió de hombros. ―Es una sorpresa para mí también.
―Sí, gracias por despertarme. ―Claire se estiró.
Lisbeth se dirigió al armario de Claire. ―Estoy haciendo la colada de negro, voy a
coger algunas de tus cosas para llenarla.
FORO PURPLE ROSE

―¡No! ―Claire saltó, arrojando la sabana. Había escondido sus ropas llenas de
humo bajo una gran pila de bolsas de compras, pero Lisbeth tenía un olfato de
sabueso.
Lisbeth se puso una mano en la cadera y se quedo mirándola. ―¿Qué? ¿Por qué?
—Claire respiró hondo―. No creo tener nada de ropa oscura sucia, eso es todo. De
todos modos, yo debería empezar a hacer mi colada, ¿no? Quiero decir, tengo
dieciséis años, no necesito que alguien lave mis camisetas.
Una pequeña arruga de sospecha creció en las cejas de Lisbeth. ―¿Estás segura que 39
no hay algo entre tu ropa que no quieres que encuentre?
Claire tragó saliva. Caminó hacia el armario y tiró de la canasta de ropa sucia. Con
su talón cerró la puerta.
―¿Quieres registrar mis bolsillos? Bien. No hay nada hay Lisbeth, no puedo creer
que o confíes en mi ―ella estaba tan herida que su voz tembló. Le tendió la canasta
a Lisbeth.
―Está bien ―dijo Lisbeth poniendo las manos en alto como un criminal rendido,
dejando a Claire la canasta―. Lo siento. Después de tres años de planchar tejidos
arrugados y etiquetas de Coca Cola Light de tus pantalones tejanos, me encantaría
un descanso. Sólo me parecía muy repentino, eso es todo. Voy a estar viendo las
noticias si necesitas ayuda.
Eso ha estado demasiado cerca. Tan pronto como ella salga he de encontrar un lugar mejor…
Algo en la voz de Lisbeth detuvo a Claire. ―¿Las noticias? ¿Está pasando algo?
Lisbeth miro a Claire, con los ojos asustados y tristes. ―Ha habido otro… ataque
anoche. Tres puertas estaban abiertas en la casa Engles. Ese, monstruo mató a un
chico por la puerta trasera y luego se coló en la casa y mató a su esposa. ―ella negó
con la cabeza―. Por mi vida que no sé porque la gente no permanece en el interior
con las puertas y ventanas cerradas como la Ciudad nos dijo. En fin. Ha sido la
noticia durante toda la mañana. La policía no sabe qué hacer, y el 4FHPA sólo
sigue diciendo que hay una “investigación en curso”, sea lo que signifique eso.
Cuando pienso en lo cerca que estábamos ayer… estábamos directos en su camino.
Sólo espero que capturen pronto a esa cosa.
Claire miro la puerta durante un largo rato después de que Lisbeth saliera. ¿Cómo
podía haber habido otro ataque? ¿Quién podría haberlo hecho?
No podía haber sido ninguno de la manada. Estábamos todos juntos anoche. Claire agarró
unos pantalones cortos del vestidor. En su cómoda, su teléfono parpadeó. Cogió el
teléfono y miró la pantalla. Matthew. Su pulgar sobre el botón de Enviar. ¿Qué voy a
4
Federal Human Protection Agency
FORO PURPLE ROSE

decirles?— Sí, estoy bien ¿alegre de que fue tu vecino y no tú? Tuve una gran noche, y
adivina qué, soy un hombre lobo... ¡Oh Dios mío, no me extraña que mi madre odie a su
padre tanto! El raro de Dr. Engle cazándola.
La alerta de mensaje de voz parpadeó, y entonces el teléfono se oscureció en su
mano. Por supuesto, Emily probablemente llamaría en cualquier momento,
buscando detalles de su cita con Matthew. Claire dejó caer el teléfono de vuelta a su
cómoda y se puso la ropa, echándose el cabello hacia atrás en una cola
desordenada. Por los menos las orejas le habían dejado de picar. Estaban tan
40
suaves, rosadas y normales como habían estado días antes de su decimosexto
cumpleaños. Lo que hacía que todo lo que había visto la noche anterior pareciese
aún más un mal sueño.
Se apresuro a ir a la sala, se dirigió a la escalera trasera que conducía al sótano y al
cuarto oscuro.
Claire llamó a la puerta de grueso roble tan suavemente como pudo. Su madre
apareció, con el pelo peinado hacia atrás en su habitual moño. Una minúscula
habitación, parecida a un armario, fue todo lo que Claire podía ver detrás de su
madre y otra puerta, esta vez pintada de negro como las paredes y el techo. Arriba,
una bombilla roja brillaba tenue, como en advertencia.
―Entra ―dijo su madre y volvió hacia la minúscula sala―. Y cierra la puerta tras
de ti.
Claire entró cerca de su madre e hizo como su tuviese frío. La habitación era tan
pequeña que el pomo de la puerta quedó en su espalda, clavándose en su espina. Su
madre la condujo a una gran habitación, iluminada en su totalidad por la misma
luz rubí. La fila de mesas de metal se alineaba en las paredes. Los estantes de fierro
sostenían botes y jarras de productos químicos tan familiares, el olor de su madre.
Algunas madres llevan Chanel, la madre de Claire iba con el aroma de los
componentes de revelado.
Claire se giró despacio, mirando la enorme sala. El equipamiento de la cámara
tapado detrás de ella. Lentes y maletas, las correas de la cámara, trípodes, y por
supuesto, las propias cámaras, en un estuche de espuma gris.
Marie señalo un taburete. ―Puedes sentarte.
Claire se sentó en el borde del asiento y dejó un pie caer apoyado sobre el piso. Un
millón de preguntas a todo se le acumulaban en la cabeza, pero entrar en el cuarto
oscuro era como entrar en un país donde ella no conociera ninguna de las
costumbres. Si decía algo incorrecto, o preguntaba la cosa equivocada, podía ser
expulsada. El silencio de apoderó de ella, rodeándola. Se sentía atrapada.
FORO PURPLE ROSE

Su madre romo un par de pinzas y giró una hoja de brillante papel hacia abajo
dentro del cuenco del primer químico. ―¿Supongo que Lisbeth ya te ha contado
que le pasó anoche… a los vecinos Engles?
―Sí ―Claire tragó saliva.
Marie suspiró y dejó las tenazas de nuevo en la mesa con un ruido que hizo saltar a
Claire.
―Nuestra manada, nosotros hemos estado tratando de encontrar la causa de esas
horribles muertes. Pero no podemos exponernos mientras lo hacemos. La búsqueda 41
se hace… difícil. Y cuanto más tiempo pasen estas cosas, más peligrosas se vuelven
nuestras vidas. La charla constante de esas “personas”, ―ella escupió la palabra―.
En la televisión… lo hace todo peor.
Claire estaba segura que por “personas” su madre se refería al Dr. Engle.
―Esta no es la primera vez que nuestra especie ha sido amenazada. Vamos
averiguar quién, o qué, está causando esto. No necesitas preocuparte por esto.
Averiguaremos quién... o qué está causando esto. No necesitas preocuparte a ti
misma con esto.
¿Hay alguna otra cosa que te estés preguntando? ¿Tienes preguntas?
—Así que, ¿Lisbeth realmente no sabe nada sobre esto?
Marie sacudió su cabeza bruscamente. —Claro que no. Lisbeth sabe que yo tengo
un trabajo que me lleva lejos inesperadamente, un trabajo de horario extraño,
extrañas idas y venidas. No te podía dejar sola cuando estaba lejos en los bosques,
no más de lo que pude cuando fui a Dubai. Lisbeth... llenó los espacios. Sé que
debe ser duro para ti ocultarle esto a ella, pero debes encontrar una manera de
hacerlo.
La realidad de la situación golpeó a Claire. Era como ser golpeada en el pecho.
Contuvo la humedad que se asomaba por las esquinas de sus ojos. Ella odiaba
mentirle a Lisbeth. Y ahora iba a tener que hacerlo, muchísimo. La furia fluyó a
través de ella, secando las lágrimas que se aferraban a su mascarilla de pestañas.
—Has estado escondiendo esto a ella, de nosotros, por años. —La voz de Claire
tembló.
Marie se encogió—. Sabes que no soy cercana a nadie. Lo encuentro más fácil de
esa manera. No lo hace todo el mundo. Pero las mujeres lobo y los humanos, no
fuimos hechos para ser amigos, Claire. Creo que las cosas van mejor para aquellos
que recuerdan eso —se volteó, alcanzando otra jarra de fluido.
Claire apretó los puños.
FORO PURPLE ROSE

—¿Cómo puedes actuar como si no fuese gran cosa? Primero me dices que soy una,
que ni si quiera soy humana. Y ahora quieres que le mienta a todos, ¿y no me debe
importar?
—No me gusta ese tono. Sé que ha sido una sorpresa para ti...
—Bueno, esa es la declaración del siglo. —Las palabras salieron llenas de
sarcasmo.
—¡Suficiente! —la calma exterior de Marie finalmente cedió—. Esta no es una
sentencia a muerte. Es un honor. Y si no puedes parar de hablar descaradamente el 42
suficiente tiempo como para que podamos discutir esto, esta conversación está
terminada.
—¡Bien! —Claire se resbaló del taburete con un golpe—. Entonces, me iré de tu
loco “espacio” —con un portazo salió del cuarto oscuro y furiosa subió hacia su
cuarto. Tomó el primer traje de baño que encontró y corrió hacia la piscina,
lanzándose en el lado profundo. El sabor del agua clorada apartó el sabor de
lágrimas saladas de su boca, y comenzó a nadar, golpeando furiosamente el agua.
Fue y vino cruzando la piscina, hasta que perdió la cuenta de cuantas vueltas había
completado. Nadó hasta que los brazos le dolieron, hasta que el cansancio
lentamente se fue llevando la rabia que brillaba en su pecho.
Cuando Claire finalmente escaló fuera de la piscina, sus piernas temblaron.
Colapsó, goteando, en una de las sillas de la sala y se quedó allí sufriendo.
Eventualmente su respiración se ralentizó y se sumergió en una pequeña siesta.
Sintió una mano caliente que la despertó.
—¿Claire? —Claire abrió un ojo. Era su mamá.
—¿Qué? —sonó más hosca de lo que realmente quería.
—Quiero disculparme. Estoy tan acostumbrada a las cosas que todo parece bien.
Debí estar más preparada para tu reacción. Lo siento.
Claire se retorció—. No quise molestarme contigo. Pero estoy molesta.
—Lo sé. Y estoy segura de que tienes muchas preguntas.
Claire asintió, apoyándose en el tejido del sillón de la sala. —.Así que, ¿hay otros,
ya sabes, como nosotros, cerca de aquí?
Su madre jugueteó con su reloj. —No. No hay otras manadas cerca. De hecho,
Judith y Katherine vienen desde Rochert cada luna, porque somos las más cercanas
FORO PURPLE ROSE

a ellas. Ocasionalmente, podemos sentir a esa une seule5, una loba sin manada, que
ha pasado por aquí. Pero raramente se quedan más de unos pocos días.
Todas las imágenes de la noche anterior pasaron por la mente de Claire. La
memoria del brazo de Mathew abrazándola por los hombros envió una oleada de
calor a través de ella. También envió una pregunta viajando a través de su boca.
—Así que, ¿cómo es que no hay hombres lobos en nuestra, uh, manada?
La cabeza de su madre se irguió. —Oh, chérie6, pensé que te había explicado —
suspiró y se inclinó sobre la mesa del patio—. No hay machos en nuestra especie. 43
En ningún lado. Nunca ha habido. Todos los hombres lobos son mujeres.
Los ojos de Claire se abrieron con sorpresa. —Pero, los han atrapado antes. ¡Yo los
he visto! Esos hombres lobos australianos en los que el Dr. Engle probó su cura
eran lobos machos.
Su madre sacudió la cabeza tristemente. —Inocentes, todos ellos. Todo el mundo
está tan ansioso de creer en una cura que creen sus afirmaciones. ¿Te has dado
cuenta de que no tiene fotos de sus “pacientes” en la forma de lobos? Tiene
evidencia de un diente malformado, de pechos con suficiente pelo que parecen
sarnosos. —Suspiró—. Los hombres mortales malinterpretan los síntomas. Hacen
malos diagnósticos. La gente espera tal fuerza, tal... bestialidad por ser el campo de
los machos. Esta ignorancia nos ha ayudado a mantenernos la mayoría del tiempo,
ocultas por muchas generaciones.
—Pero entonces ¿cómo hacemos?, quiero decir... —Claire sintió el calor de su
sangre correr hasta su nuca, arrastrarse hasta sus mejillas, besar la línea de su
cabello. Observó las ondas en la superficie de la piscina, incapaz de encontrar la
mirada de su madre—. Las mujeres lobos deben, eh, reproducirse, ¿de alguna
manera?
Su madre rió. —No estés avergonzada. Es una pregunta normal, una que yo le hice
a mi propia madre. Nos emparejamos con hombres humanos.
Claire se retorció incómodamente en su silla cuando su madre dijo la palabra
emparejarse, Su madre suspiró. —Es una debilidad. Porque necesitamos a los
hombres para crear otra generación, debemos vivir cerca de ellos. Crea un gran
riesgo para nosotras. Nuestras, eh, relaciones son de poca duración. Es la manera
más segura.
5 une seule: una sola

6
Chérie: querida
FORO PURPLE ROSE

El corazón de Claire dio un vuelco en su pecho. Tomó toda su fuerza de voluntad

al hacer la siguiente pregunta. —Así que, ¿mi padre...? —las historias volaron por
su cabeza. Toda su vida, su madre le había dicho que su padre había sido un
hombre amable, un científico, muerto en un accidente de avión dos meses antes de
que Claire naciera—. Por eso debo disculparme. Tenía que explicarlo de alguna
manera. Conocí a tu padre sólo por algunas semanas, pero por los valores, las
creencias del mundo humano... La profundidad de nuestra relación... Era mentira.
En este mundo las mujeres lobo estamos obligadas a mentir a lo grande, Claire.
Más que la mayoría de los humanos. Lo siento mucho. 44
El estómago de Claire se retorció, y trató de tragar de vuelta la bilis que había

llenado su boca. Se retorció hasta los pies.
— ¿Estás bien, chérie? Te ves pálida.
—Creo que voy a enfermarme. —Claire corrió dentro de la casa. Tropezó en un
baño de poco uso. Encorvada sobre el baño, Claire descansó. Todas las mentiras
que su madre le había dicho se hilaron en su cabeza. Que no había fotos de su
padre porque no soportaba ser fotografiado. Que su familia lo había desheredado, y
no hablarían con Claire ni con su madre. Nada de eso había sido nunca verdad. El
vacío en su corazón cada Día del Padre, el pequeño dolor que sentía cada vez que
veía al padre de Emily jugando con ella, todo había sido por nada.
La realidad se asentó a su alrededor como una jaula. La piel gris de seda en la parte
trasera de sus manos la noche pasada, la sangre caliente de una caza fresca, esa era
su identidad. Y, realmente, siempre lo había sido. Claire inclinó su cabeza sobre el
frío mármol de las paredes del baño. Nada de lo que había creído de su vida había
sido nunca verdad. Así que cuando estuve con Mathew la noche pasada, ¿era eso otra
mentira?
Todavía temblando, Claire subió de vuelta la larga escalera hacia su cuarto. Cayó
sobre el pequeño banco frente a su peinadora y miró el espejo. La loca, asustada
mirada en sus ojos la hizo sentir más como un animal. El cual soy, se recordó a sí
misma. Soy una mujer lobo. No podía obtener suficiente aire. Su corazón se aceleró
a medida que trataba de llenar sus pulmones. El sudor mojó su frente y resbaló por
sus manos. El dolor que había sentido ayer volvió peor que nunca y se miró en el
espejo, horrorizada de ver pelaje lentamente hallando su camino fuera de su piel,
cubriendo sus orejas y la parte trasera de sus manos.
—Oh, no. No, no, no —gimió Claire.
Esto no puede estar pasando. ¡No es ni siquiera de noche! La furia surgió a través
de Claire a medida que veía el grueso pelaje. No dejare que esto pase. No me
importa la familia en la que nací, no voy a hacer esto. Saltó a sus pies, golpeando el
banco. Su madre nunca se había aparecido para cenar cubierta en pelaje, debe
FORO PURPLE ROSE

haber algo que no le haya dicho a Claire- alguna forma de esconderlo. ¿Cómo
podía dejar de lado el hecho de que podría transformarme al alzar en una loca
cubierta de pelaje? ¡Ya no es luna llena! Oh mi Dios, esto me va a pasar todo el
tiempo, ¿verdad? Bien. Voy a bajar de nuevo y a hacer que me diga exactamente lo
que tengo que hacer.
Claire se giró y se encaminó a la puerta.
—Claire? —Lisbeth golpeó gentilmente—. ¿Está todo bien allí?
Maldición. Claire miró el picaporte de la puerta. Destrabada. ¡Maldición!—. Uh, si 45
Lisbeth. Simplemente tiré algo. —Claire se apuró a entrar en el baño, ansiosa por
poner otra puerta de por medio entre ellas.
—Está bien, si estás segura. —Lisbeth sonaba dudosa.
—Sip, simplemente estoy entrando a la ducha, —Claire gritó, cerrando la puerta
del baño después de pasar cerrando con llave. Se dejó caer contra la pared, aliviada.
Tomó una respiración profunda, y pensó en lo que su madre le dijo la noche
anterior que tenía que empujarse a sí misma a su forma humana, como metiendo el
pelaje de vuelta bajo su piel.
Cerró los ojos y trató de concentrarse. Después de unos segundos, abrió un parpado
y miró sus manos, que todavía estaban cubiertas en pelaje. ¡No está funcionando!
La mirada de Claire cayó en la rasuradora al borde de la bañera. Dije que estaba
por ducharme. Después de todo, tal vez no sea una mentirosa tan grande.
Rasurar los pelos de sus manos fue fácil, pero sus orejas todavía tenían manchones
oscuros cuando terminó. Si se dejaba el pelo suelto parecían lo suficientemente
normales. Claire recogió las matas húmedas de pelo en papel higiénico y la tiró al
cesto de basura. Se miró en el espejo. No está perfecto, pero es mejor que nada.
Claire bajó las escaleras, buscando a su madre. En su camino hacia el cuarto oscuro
se cruzó con Lisbeth, sosteniendo la ropa para lavar. Se le cayó la ropa, que aterrizó
en el piso. Sobre todo había una remera de Lisbeth, salpicada de manchas oscuras.
Lisbeth parpadeó dos veces y después miró a Claire. —Espero que estas manchas
de vino se salgan con el lavado. —Levantó las ropas y las presionó contra su pecho.
¿Vino? Claire se preguntó. Lisbeth nunca toma.
—Entonces —Lisbeth dijo despreocupadamente—. ¿Te vas a enfrentar la tormenta
en el castillo?
—En realidad voy a hablar con mamá.
—Ahora mismo no lo lograras. Se acaba de ir para encontrarse con unos clientes
potenciales, dijo que no iba a volver hasta tarde.
FORO PURPLE ROSE

—¿Qué? ¿Cómo se pudo haber ido cuando acabo de…? —Claire apenas se paró a
tiempo. No contarle a Lisbeth lo que estaba pasando le resultó más complicado de
lo que esperaba.
—Cuando acabas de… —Lisbeth la instó a continuar.
—No importa. —Claire se giró y se dirigió de vuelta a arriba. Solo voy a esperar
hasta que vuelva a casa. Puedo ser paciente. Y tan pronto como entre, haré que me
cuente todo lo que omitió, como evitar cómo convertirse en lobo en medio de una
tarde ajetreada. 46
—Eh, ¿Claire? —Lisbeth la llamó.
—¿Si? —Tus orejas se ven raras. ¿Te volvió el sarpullido? Tal vez debería llamar al
Dr. Abramowitz y conseguirte una cita.
Las manos de Claire se deslizaron hasta sus orejas para cubrir las marcas. —No es
nada. Me queme con la planchita.
Lisbeth frunció el ceño. —Oh, bueno. —No sonaba convencida.
Claire corrió hacia arriba y cerró de un portazo la puerta de su dormitorio. El
celular al borde de su cómoda llamó su atención. La pantalla brillaba para ella,
cuatro mensajes nuevos. Claire abrió su teléfono y marcó rápidamente el número
del correo de voz. El primer mensaje era de Matthew. Su voz se escuchaba cortada,
y Claire escuchó otras voces y autos de fondo.
—Solo quería asegurarme de que habías llegado bien a casa por, bueno. Por lo que
pasó en lo de los vecinos anoche. Llámame, ¿sí?
Claire borró el mensaje. Los otros dos mensajes eran de Emily. Le ordenaba que le
diera detalles de la noche anterior, que habían visto, si había funcionado el look, ¿se
habían besado? Claire se moría por hablar con Emily pero no de Matthew. Quería
contarle a su mejor amiga que su mamá le había arruinado la vida anoche. Pero
recordó la mortalmente seria mirada de su madre cuando le dijo que no dijera nada.
Y tampoco sabía cómo se iba a tomar Emily ese tipo de noticias. Claire suspiró y
borró los mensajes de Emily. El último mensaje estaba vacío. Claire revisó la lista
de llamadas perdidas, era Matthew, de nuevo.
No había forma de que hablara con Matthew justo ahora. A pesar de que estuviera
preocupado, a pesar de que mandaba una pequeña ola de felicidad por su cuerpo el
pensar que él la había llamado... dos veces sólo para ver como estaba. El teléfono
vibró en su mano y Claire miró la pantalla, Emily. Claire cerró los ojos y contestó
la llamada, dejándose caer en su cama desecha. Se preparó a sí misma para el
interrogatorio de Emily.
—¿Hola? —Claire trató que su voz sonara normal.
FORO PURPLE ROSE

—Hey. —La voz de Emily no tenía su usual excitación. Sonaba más bien
deprimida.
—¿Estás bien? —preguntó Claire.
—Realmente no. —La voz de Emily tembló—. Mamá y papá enloquecieron por lo
de los vecinos de los Engles. Están hablando de mandarme con la tía Masie hasta
que empiecen las clases. A la estúpida “granja”. Estoy tan, tan cabreada ahora
mismo. Creo que ni siquiera hay señal para el teléfono allá. Dios mío, Claire, me
voy a “morir” si me mandan allá por lo que queda del verano. 47
Si la mandan lejos, por lo menos no tendré que pensar en una forma de esconderle
esto. Su mejor amiga estaba a punto de irse y su primer pensamiento era “genial”.
La culpa tapó la garganta de Claire. Se ahogaba cuando intentaba hablar—. Emily,
eso es horrible. Sé que tus padres son un poco paranoicos, pero esto se pasa de los
límites.
—Lo sé. Juro por Dios Claire, que ellos están “tratando” de arruinar mi vida. —El
pensamiento de Emily yéndose le dolía a Claire.
Nunca había estado separada de su mejor amiga por más de una semana. Ahora
tendrían que pasar todo el verano separadas si no encontraban una forma de
detener a los padres de Emily de ir a tal extremo.
—Emily respira. Solo están preocupados por lo que les paso a los vecinos de
Matthew. Mi, mi mamá también está totalmente aterrada. Eso no es una mentira
en realidad, ¿verdad? Ella dijo que la manada está preocupada por lo que está
pasando….
Claire nunca le había escondido nada tan grande como esto a Emily. Y apestaba.
—Dios mío, ¡ni siquiera te pregunte sobre ayer! ¿Qué pasó? ¿Cómo fue? ¿Te besó?
Claire se mordió el labio. Realmente no quería hablar sobre Matthew, pero no
podía mentirle sobre todo a Emily. —Casi. Lo hubiese hecho si su padre no nos
hubiese interrumpido.
—Dios mío, ¿no te había dicho yo que le gustabas? ¿Te enojaste mucho con su
papá?
—No tanto como Matthew pareció estarlo, —Claire admitió. El recuerdo de la
frustración de Matthew la hizo sonreír.
—Bueno, será la próxima. Porque habrá una próxima vez, ¿verdad? ¿Hablaste con
él hoy? Quiero decir ¿te llamó?
—Uh, si, me llamó, pero no le devolví la llamada. Me desperté hace un rato, y mi
mamá quiso hablar conmigo y otras cosas.
FORO PURPLE ROSE

—Entonces ¿por qué estás hablando conmigo todavía? ¡Corta el teléfono y llámalo!
De todas formas tengo que ir a rogarles a mis padres que entren en razón. Llámame
después, ¿sí? ¿Y quieres que salgamos mañana?
—Seguro, mañana suena genial, —dijo Claire—. Te llamaré. Buena suerte con tus
padres.
Emily gruñó y cortó sin decir adiós. Claire se miró al espejo y se quedó congelada.
Es por mi culpa. Los padres de Emily la mandarán lejos porque me tienen miedo a mí…
48
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 5
Traducido por: paovalera, Dham-Love y ηịịị ღ

Corregido por: Julia107
Y
—¿Hola?
a era bien entrada la noche cuando Claire se decidió a llamar a
Matthew.
49
—Um, hola, Matthew.

—¡Claire! —sonó aliviado de escuchar su voz—. ¿Estás bien?
—Sí, estoy bien. Siento mucho lo de tus vecinos. Las cosas deben haber estado
bastante locas por allá hoy, ¿huh? —Esperaba que pensara que sonaba vacilante
porque estaba molesta por los asesinatos.
—Totalmente. Mi papa está hiperactivo y si los nuevos chicos no están en nuestra
sala familiar, lo policías si están. Él no cree que haya sido una coincidencia que
nuestros vecinos hayan sido atacados, entonces lo está tomando en un tono más
personal de lo usual. Mamá y yo sólo estamos tratando de apartarnos de su camino.
Claire giró la cabeza. Se sentó en la orilla de su cama y respiro profundamente.
—¿Claire? —Sí, estoy aquí. Entonces, ¿tu papá cree que esto fue como un aviso o
algo así?
—Supongo. Quizás lo tomó más como una burla. Como si “eso” creyera que jamás
será atrapado, que mi papá nunca lo atrapará. —Él sonrió—. Fue como ondear una
capa roja frente a un toro. Está más determinado que nunca a encontrar el lobo. Y
luego podrá usar una cura, como Superman salvando su ciudad natal, ¿sabes?
Claire soltó una risita. —¿Quieres que nos veamos en el club mañana? Hace mucho
calor como para hacer algo que no sea nadar de todas maneras.
El pensar en ver a Matthew en su traje de baño en la piscina del Country Club hizo
que los dedos de Claire temblaran. Tragó fuerte.
—No, no puedo. Tengo que estar libre mañana para Emily, en caso de que se tenga
que marchar. —No sonó como una buena excusa, ni siquiera para Claire, pero no
había manera de poder verlo, no ahora. No cuando me podría convertir sin aviso.
—Quizás algún otro día —agregó, antes de poder detenerse.
FORO PURPLE ROSE

—Oh, claro.
—Escucha, debo irme, pero… um, espero que las cosas mejoren pronto, ¿ok?
—Está bien, gracias.
Claire pudo oír la confusión en su voz. ¡Esto es tan injusto! Matthew Engle está
interesado en mí y su papá lo está arruinando todo. Bueno, eso y el hecho de que yo soy una
mujer-lobo. No hay manera de que lo pueda ver hasta que no sea capaz de mantener a raya
mi basura de mujer lobo. Su cabeza palpitaba. Podía ser tan sarcástica como quisiera,
pero todavía era verdad, y era una mierda. 50
—Ok, bien, uh hablaremos pronto.

—Okey —dijo él, con su voz un poco más alegre.
Colgaron el teléfono y Claire se quedó mirándolo en su mano.
Sólo tendría que evitarlo por un tiempo, eso es todo, hasta que pudiese manejar
mejor lo que estaba pasando.
Esa noche, Claire se mantuvo despierta unas horas, esperando a su madre. Ni bien
Marie llegó a casa, Claire fue a confrontarla. Hacerla explicarle por qué la piel le
había cambiado de esa manera, y como evitar que le volviese a ocurrir. Ella
escuchó atentamente buscando el sonido del Mercedes, pero nunca llegó.
Observó las últimas noticias, y luego “The late show”. Con cada minuto que
transcurría, se ponía más y más molesta. Era tan común que su madre
desapareciera en momentos como ese. Y Claire no sabía cómo encontrar a otra de
las mujeres que había visto la noche anterior. Cuando la repetición de las noticias
comenzó, observó la hora, 2 a.m. Se deshizo de las sábanas y caminó hacia su
habitación. La puerta retumbó al cerrarse. Asomó la cabeza y miró por el pasillo.
La puerta de Lisbeth estaba cerrada y Claire pudo escuchar sus ronquidos más
fuertes de lo normal.
Fue a la cocina y abrió el refrigerador. Sacó un plato de carne que había sobrado de
la cena.
—¿Todavía despierta chèrie? —La voz de su madre salió del oscuro comedor,
haciendo que Claire saltara. El plato de comida casi se le cae de la mano, apenas y
pudo mantenerlo.
—Jesús, no hagas eso. ¿Cuándo llegaste a casa? Ni siquiera te escuche llegar. Dios.
—El corazón de Claire palpitó fuertemente en su pecho, y el olor de la adrenalina
en su cuerpo hizo que sus ojos se humedecieran—. ¿Por qué puedo oler eso?
—No hay Dios, Claire. Pensé que te había explicado eso.
FORO PURPLE ROSE

—Es solo una forma de decir, Mamá. —Ella olfateó el aire mientras su corazón se
desaceleraba. En la oscuridad su madre sonrió de manera aprobatoria.
—Tu sentido del olfato se está desarrollando, eso es bueno.
—Algo que olvidaste mencionarme, supongo. —murmuró Claire.
Su madre se tensó. —¿Hay algún problema?
—Oh, no, ninguno. —Claire no podía ocultar el sarcasmo en su voz—. No sólo soy
un monstruo de la naturaleza, sino que no lo soy sólo una vez al mes. Podría 51
convertirme en cualquier segundo. Probablemente me convierta del todo en
invierno. La cosa es que eso podría ser realmente incómodo, sobre todo si estoy
rodeada de personas. Hombre, no puedo esperar a ver cuál es la próxima cosa
súper-fabulosa que me ocurrirá. —Las lágrimas se asomaron por sus ojos, haciendo
que la comida frente a ella se viera empañada. Sabía que se metería en problemas
por hablarle a su madre de esa manera, pero en ese momento realmente no le
importaba.
¿Cómo podrían empeorar las cosas de todas maneras? ¿Qué va a hacer, castigarme?
Una mirada de sorpresa cruzó el rostro de su madre. —Es muy inusual que te debas
transformar así. La mayoría de los que son tan nuevos como tú no tienen la
habilidad para cambiar por ellos mismos. Ellos necesitan la fuerza de la luna llena
para hacerlo.
—Entonces, ¿Soy extraña incluso para un monstruo? Genial.
—No eres un monstruo, Claire. Quédate quieta —Marie puso una mano
firmemente sobre el hombro de Claire—. Debemos transformarnos en luna llena.
La Diosa, la que nos creó, hace nuestra naturaleza tan fuerte en esas noches que
debemos revelarla. Pero una vez que un licántropo madura sus poderes, ella es
capaz de cambiar en cualquier momento.
Debajo del agarre de su madre, la piel de Claire se tensionó, se tiró, haciendo a sus
sentidos embotarse.
—Ahora. Regresa a tu forma humana —dijo su madre.
Claire todavía podía oler la sorpresa de su madre. Podía escuchar el zumbido del
filamento de la bombilla sobre el fregadero.
—Si soy humana, ¿Por qué todavía puedo oler y escuchar tanto?
—Porque eres un licántropo de verdad, Claire. Ésta piel es sólo un disfraz. Has
pasado la primera luna de tu transformación y de ahora en adelante, tus sentidos y
tu fuerza, siempre serán más sensibles e intensos que los de los humanos. Incluso
aunque parezcas igual que los demás. Entiendo que esto es nuevo, y que no es fácil,
pero debes tratar de ser paciente.
FORO PURPLE ROSE

—¡Paciente! Me dejaste sola, luciendo como Grizzly Adams. ¿Se suponía que debía
andar por ahí viéndome de esa manera hasta que llegaras a casa? ¡No sabía cómo
librarme de eso! ¿Qué si Lisbeth me hubiera visto?
—No es como el cabello normal. Es una marca de la Diosa, y ningún invento
humano puede removerlo permanentemente. Ni siquiera una rasuradora —Un
rastro de diversión se dibujo en las palabras de su madre.
—¿Cómo sabías? —Claire cruzó los brazos.
—No me imaginaba que te hubieras transformado en humana por ti misma ésta 52
tarde, Y —ella admitió—, podía oler tu vergüenza y también la espuma para
rasurar. Es un regalo, Claire. Lo que somos. Y tan pronto como tu transformación
esté completa, aprenderás lo que necesitas saber, cómo hacer todo lo que podemos
hacer. Mientras tanto, no hay necesidad de sentir pánico. Lo que pasó hoy es poco
probable que pase de nuevo. Era probable porque todavía estábamos cerca a la luna
llena.
—Oh, sí, no sientas pánico. No hay problema. Sólo mantendré un poco de crema
depilatoria en mi bolso —Claire dijo—. ¿Hay algo más que debería cargar? ¿Una
lima para mis garras? ¿Un cepillo para perros?
—Es suficiente —dijo Marie cortantemente—. Te he dicho que aprenderás lo que
necesitas, y en el momento preciso. Hemos estado entrenando Nuevos durante
muchas generaciones. Nuestras tradiciones, nuestros métodos, no son sin razón.
Claire frunció el ceño.
Su madre la miró cuidadosamente. —Yo sé que es difícil para ti ahora.
—¿En serio? Porque ten por seguro que no es así como estás actuando.
—Claire, detente. Creo que deberías ir a la cama ahora. Cuando estés
completamente transformada, estarás mejor preparada para aprender. Hasta
entonces, debes ser paciente, y cuidadosa. Esa es la mejor manera de protegerte a ti
misma, de mantener a todo esto, seguro. —Su madre se movió sin hacer ruido por
la cocina y hacia las escaleras—. Se pondrá más fácil, Claire. Debes confiar en mí.
Sin siquiera decir buenas noches, su mamá se deslizó por las escaleras, dejando a
Claire sola en la cocina.
Claire empujó el plato con las sobras de nuevo hacia el refrigerador, su apetito se
había ido. Miró a través del césped, con la mirada viajando por la pared de ladrillos
hasta el final de la propiedad. El espeso bosque más allá de la pared se temblaba por
la brisa nocturna.
Si su madre no iba a enseñarle nada, entonces tal vez podría descubrir las cosas por
sí misma. Después de todo, nadie había dicho que ella no debía hacer nada, sólo
FORO PURPLE ROSE

que no le mostrarían cómo hacerlos todavía. Se reclinó sobre el mostrador,

pensando. Era tan seguro como el demonio que no se sintió como si fuera la luna lo
que la hizo cambiar hoy. Cuando el pelaje había aparecido, ella había estado
pensando sobre ser un licántropo. Eso pudo haber sido lo que disparo el cambio.
Tal vez su mamá no le estaba dando el crédito suficiente. Tal vez ella se podría
transformar por sí sola, si tenía la oportunidad de intentar.
Bien, no hay momento como el presente para empezar.
Sólo necesitaba un lugar para practicar donde su mamá o Lisbeth no pudieran 53
llegar hacia ella. Algún lugar grande y privado.
Algún lugar como el bosque. Fuera, la humedad presionaba sobre el rostro de
Claire como un pañuelo húmedo. Una gota de sudor aparecía en la parte trasera de
su cuello. Se giró para ver hacia su casa. Las ventanas todavía estaban oscuras.
Un cálido respiro de aire le hizo cosquillas en la oreja y se sacudió, sentándose de
cuclillas por puro instinto. El espacio donde Claire había estado apenas hace un
momento estaba vacío. Ella parpadeó mirando los jardines libres, sorprendida de
que rápido se había movido.
Desde dentro de la casa de la piscina, podía escuchar el débil susurro del ventilador
en el techo. Mierda. Lo había dejado prendido de nuevo. Si Lisbeth lo veía, se
escandalizaría de cuanta energía había desperdiciado Claire. Se apresuró hacia el
pequeño edificio, y luego se detuvo cerca. Un chillido se escapó de su boca antes de
que lo pudiera detener.
Oh por Dios, ¿Puedo escuchar desde el otro lado de la casa?
Ella había sabido que su audición estaba mejor que antes, pero esto era
descabellado.
Dándose cuenta de que había hecho un ruido, miró otra vez hacia la casa. Todas
las luces estaban aún apagadas.
Claire se apresuró a través del césped, preguntándose si su madre ya se había dado
cuenta que no estaba, si es que estaba a punto de venir y detenerla. Los nervios en
las puntas de sus dedos hormigueaban en coordinación con su respiración mientras
avanzaba de puntillas en el jardín. Con cada paso el olor de la hierba siendo
aplastaba bajo sus pies flotaba a su nariz, cargada con la afilada esencia de
fertilizantes químicos. Cuando ella fácilmente pasó a través de la abertura en la
pared de ladrillos, el más natural, y menos uniforme olor del bosque se derramó a
través de ella como agua fría, y suspiró con alivio.
Su nariz se movió. Podía oler todo. La ardilla oculta en el abeto. La tierra seca y las
piñas de los pinos en el suelo del bosque. Y… su madre. Ella podía oler a su madre.
FORO PURPLE ROSE

Mierda. Claire se agachó bajo las ramas bajas del árbol perenne a su lado y sostuvo
su aliento ¿Cómo podía ella no haberse dado cuenta que su madre la había seguido?
Ella esperó, congelada, su corazón golpeando contra sus costillas. La ardilla sobre
ella se alejó a través de los árboles y Claire dejó salir su aliento.
Cuando respiró otra vez, se dio cuenta que la esencia era tenue y vieja.
Oh mi Dios. ¡Es de ayer! ¡Puedo oler por donde caminó ayer!
Se deslizó fuera de su escondite y trató de sacudirse la tensión de sus hombros.
54
Tomó una respiración profunda. Si iba a estar atrapada así, ella iba a aprender
cómo demonios controlarlo.
Se enfocó en los apenas visibles troncos de árboles en frente de ella. Brillaban un
poquito, como tinta en papel negro. Huh. ¿Puedo ver en la oscuridad? Eso es… útil.
Intentó concentrarse, para recordar la sensación en sus manos y orejas de cuando se
había transformado antes.
La gruesa piel peluda cubriendo sus manos y orejas era tan fuerte en la mente de
Claire que bien podrían ya estar sobre ella. Una ola de mareo se cernió sobre ella.
Incapaz de mantener su balance, ella se estiró para alcanzar el árbol más cercano,
pero no juzgó bien la distancia, y aterrizó fuerte sobre sus rodillas con los puños
vacíos y su cabeza dando vueltas. Su estómago adolorido y sus pulmones
quemaban, como si alguien le hubiera dado un puñetazo en el estómago.
Tan rápido como el sentimiento había llegado, se fue. Levantó una temblorosa y
peluda mano y golpeó su oído. La sedosa piel se deslizó bajo la punta de sus dedos.
Recién lo afeité esta tarde… pero demonios, se siente como si nunca lo hubiera siquiera
tocado.
Aun así, no era horror lo que sintió cuando miró su piel esta vez, fue alivio. Lo hice.
Puedo controlarlo. Oh, gracias Dios, Uh, Diosa, puedo controlarlo.
El éxito resplandeció en el pecho de Claire como un diamante. Se revisó para ver si
había cualquier diferencia con cómo ella había estado la noche anterior, pero todo
se veía igual. Orejas peludas, manos peludas, y apariencia humana en cualquier
otro sitio.
Pero todavía, ella necesitaba se capaz de cambiar de vuelta. Y había hecho eso
antes sólo con la ayuda de su madre. Ahora tenía que aprender cómo hacerlo por sí
sola.
Se sentó, doblando las piernas bajo ella, determinada a no ser golpeada por la
fuerza de volverse humana, de la forma en que había sido cuando intentó
convertirse en lobo. Absorbió un profundo aliento en sus pulmones, olfateando un
ciervo en algún lugar a su derecha, en la profundidad del bosque. La sorpresa de la
FORO PURPLE ROSE

esencia tan clara y tan lejana rompió su concentración, y dejó salir la respiración
con un silencioso oh.
Claire se volvió de cara a un denso grupo de árboles. Podía ver las ranuras
individuales en la corteza de cada árbol. La afilada, almizclada esencia de una
asustada cierva se desprendía entre las ramas. Estaba definitivamente ahí.
Claire apretó sus puños. Un deseo de cazar se extendió por su pecho. Expulsó todo
lo demás. Apenas podía resistirse a deslizarse entre los árboles, siguiendo la esencia
de la cierva. Su estómago gruñó. 55
Se forzó a regresar al suelo. Sin planearlo, se había levantado en cuatro patas, lista
para correr. ¿Qué demonios estoy haciendo? Ella sacudió su cabeza, aclarándola, y
tomó otra profunda respiración. Si ella estaba hambrienta, iría a casa y tomaría un
bocadillo como una persona normal. Jesús. Estaba a punto de lanzarme a perseguir a un
ciervo…
La cosa más importante ahora era devolverse a su piel. Devolverse a ser ella era
difícil, pero contuvo el aliento y se enfocó en ser normal, estar con Emily, pasando
el tiempo con Lisbeth, escuchándola reírse por algo que ella dijo.
—…justo ahora, no… no puedo. ¡Piensa lo sospechoso que eso se vería! La voz de
Lisbeth resonó en sus oídos, y Claire lanzó un grito apagado, abriendo los ojos y
mirando salvajemente hacia los árboles a su alrededor. Había sonado algo hueco,
como un teléfono con mala conexión, pero no había estado en su cabeza. No era el
mismo eco de la voz de Lisbeth que Claire oía cuando dejaba el agua corriendo
mientras cepillaba sus dientes, o cuando tiraba la ropa limpia en una pila en el
suelo.
Ella en realidad había oído a Lisbeth. Hablando. Aquí.
¿Qué demonios?
Claire cerró los ojos otra vez. ¿Había ella hecho que eso ocurriera, de algún modo?
Ella había estado enfocada en escuchar la voz de Lisbeth. Mantuvo el sonido de la
voz de Lisbeth fija en su mente. Se sentía estúpido de cierta forma, pero entonces,
eso había pasado antes.
—¡Tú sabes que yo no quería que las cosas resultaran de esta forma! Pero es
demasiado tarde. No puedo volver y cambiar…
La excitación se extendió a través de Claire y su concentración titubeó. La voz de
Lisbeth se había ido otra vez, pero no le importó. Ella podía oírla.
Inmediatamente, se preguntó si podría funcionar en cualquier otro. Ella intentó
pensar en Emily de la misma forma en que había pensado en Lisbeth. Envolvió los
FORO PURPLE ROSE

brazos alrededor de sus rodillas y escuchó fuertemente. Nada ocurrió. Bueno,

estaba en la mitad de la noche, Emily estaba probablemente dormida.
—Oh. Mierda. —Su voz sonó fuerte en el tranquilo bosque.
Si Claire no podía oír a nadie a menos que estuvieran diciendo algo, entonces eso
significaba que Lisbeth estaba despierta, lo que puso a Claire a una chequeada-de-
cama lejos de estar en grandes problemas. ¿Pero con quién en la Tierra estaba
hablando Lisbeth a esta hora, de cualquier forma?
Oh, Dios, ¿Qué si hubiera estado con mamá? Ok. Este no es momento para entrar en pánico. 56
Todo lo que tengo que hacer es cambiarme de vuelta y volver a casa. No puede ser tan difícil
transformarme. No puede serlo.
Claire presionó las manos cubiertas de pelo contra sus ojos. Se enfocó en la
memoria de su piel, suave como un huevo, que había usado cada día por dieciséis
años. Ella lo quería, quería volver a ser normal. A ser humana.
Ese sentimiento de estar volviendo a su piel fue claustrofóbico, como intentar entrar
en un vestido demasiado pequeño. El olor del ciervo se desvaneció y ya no podía
ver tan claro. Los árboles eran sólo sombras en la oscura noche. No se sentía como
usualmente lo hacía. Estar en su cuerpo no se sentía mejor que ser un lobo. Era
igual de incómodo, sólo que de una forma distinta. Las lágrimas se acumularon en
sus ojos.
¿Cómo podría cualquiera acostumbrarse a esto? Su respiración se detuvo dolorosamente,
y sus pulmones se sintieron lentos y pesados en su pecho. Tal vez era por esto que
su madre estaba siempre tan apartada. Tal vez eso lo hacía más fácil.
Una lágrima se deslizó por la mejilla de Claire y ella la quitó. No tenía tiempo para
esto ahora. Una vez que estuviera en casa con Lisbeth sosteniéndola, tendría todo
el tiempo del mundo para llorar.
Claire se puso de pie. Sus músculos adoloridos y su estómago gruñendo. Mientras
se apresuraba hacia la casa, escuchó con sus aburridos oídos humanos a los
pequeños pops y cracks de las cosas diminutas que se rompían y crujían bajo sus
pies. Cuando se deslizó de vuelta a través de la pared hacia su propio césped, el
dolor en su pecho disminuyó. Las luces estaban apagadas, Lisbeth debía de haber
terminado su conversación y haber vuelto a la cama. La casa estaba en silencio.
El ventilador del techo aun zumbando en la casa de la piscina. Claire se movió
sigilosamente y lo apagó. Seguramente si Lisbeth hubiera descubierto que ella no
estaba, hubiera habido luces. Ruido.
Claire se había escapado y se había salido con la suya. Alivio se extendió por ella,
llevándose la tristeza que había sentido en los bosques. Una sonrisa se extendió por
su cara.
FORO PURPLE ROSE

Se deslizó en la silenciosa casa y caminó hacia el refrigerador. Si Lisbeth la oía en

la cocina, ¿a quién le importaba? Ella tenía permitido tener un tentempié de
medianoche si se le antojaba. Claire sacó el plato de sobrantes de carne, tomó una
pequeña rebanada de bistec del plato, y lo puso en su boca. Antes de que pudiera
detenerse, pensó cuanto mejor hubiera estado el sabor del ciervo.
57
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 6
Traducido por: Anaid Ivashkov, Izzy y ηịịị ღ

E
58
l bostezo podía haberle roto la mandíbula. Agrietado sus pulmones. El
agotamiento anillaba sus pensamientos como si fuera humo, haciendo
todo confuso y borroso. La mañana había llegado demasiado rápido.
Había sido demasiado para una noche de caza para la comida, y luego acechar al
más joven, la flamante loba nueva. Rastrearla mientras tropezaba por el bosque
como si fuera humana. Se había ido a casa tan orgullosa de sí misma. Bastante
tonta como para pensar que porque las luces estaban apagadas, no había sido vista.
Atrapada.
Demasiado joven y estúpida como para pensar que podía haber otros ojos
observándola.
El teléfono sonó a 15 centímetros de la oreja de Claire. ¿Quién diablos llamaba a las –
abrió un ojo y se fijó en el reloj– 9:33 de la mañana?
Tan pronto como le llegó al correo de voz, el teléfono empezó a sonar de nuevo. El
número de Emily titilaba en la pantalla.
—Jesús Dios, Emily, es demasiado temprano. Más vale que algo este mal.
Se escuchó cómo se sorbía los mocos del otro lado de la línea.
—Bueno, sí lo hay. Están decididos a muerte a enviarme lejos la semana que viene,
Claire. A la granja. —Emily más que decir las últimas palabras, las lloró—. ¿Estás
despierta? ¿Puedo ir? Si tengo que ver a mi mamá otro segundo, voy a enloquecer.
¡Estoy tan enojada!
Claire se restregó los ojos con las manos. —Waw. Quiero decir, claro que puedes
venir. Lo siento Em, no estoy del todo despierta. Aunque eso es muy, muy, muy
malo.
—Eres la mejor. Estaré allí en unos minutos.
Claire se estiró y se levantó de la cama. Vagó por el piso de abajo, buscando a
Lisbeth. Había una nota atrapada bajo una taza de café.
“Osita Clarie”
FORO PURPLE ROSE

“¡Buenos días! No te olvides de que voy a estar todo el día en el retiro de yoga y
que mamá fue a pasar el día en Chicago. Si vas a algún lado, déjame un mensaje en
el correo de voz, ¿sí?
Te veo como a las seis.
Con amor, Lisbeth”.
¿Un día entero sin que nadie revisara sobre su hombro? Eso estaba mejor que bien
para Claire.
59
Puso un poco de café en la máquina y se sentó mientras este se hacía, mirando por
la ventana. La noche anterior había sido tan bizarra, pero en una forma mucho
mejor que la anterior a esa. Por lo menos ahora no se sentía tan fuera de control,
como si se debiera estar de brazos cruzados y esperar que todo estuviera bien. Si de
la nada empezara a crecerle pelo, podría solucionarlo. Diablos, si pensara que
alguien estaba hablando de ella, podría escuchar.
Hum.
¿Podría hacer eso en su cuerpo normal, o tenía que estar transformada?
Claire se concentró de la misma forma en que lo hizo la noche anterior, tratando de
nuevo escuchar a Emily.
No pasó nada. Claire no podía escuchar nada excepto el café burbujeando en lo que
se terminaba de hacer.
Pensó en transformarse e intentarlo de nuevo. No había nadie en casa, y no era
como si alguien fuera a llegar pronto le tomaría a Emily otros 15 minutos conducir
hasta aquí.
Claire decidió intentarlo.
Justo cuando estaba cerrando los ojos, golpearon la puerta.
—¿Claire? —La voz de Emily llegaba con eco por los pisos de mármol de la
entrada.
Mierda.
—¡En la cocina! —la llamó Claire, regañándose internamente para no intentar
hacer algo como eso de nuevo. ¿Cómo le habría explicado a Emily, si ella hubiera
llegado y la hubiese visto cubierta de pelo? Para disimular su nerviosismo, Claire se
levantó para servirse una taza de café.
Emily entró en la cocina. —Hola. Gracias por levantarte temprano por mí.
—Sin problemas. Debes haber conducido como alma salida del infierno para llegar
aquí tan rápido, —dijo Claire, enfocándose en llenar su taza al nivel exacto. Su
mano todavía temblaba.
FORO PURPLE ROSE

—Sí, es que tenía que salir de la pesadilla que es mi casa.

Claire se dio vuelta para ofrecerle café. Los ojos de Emily estaban rojos e
hinchados, y sus labios se veían pálidos.
—¿Quieres una taza?
Emily negó con la cabeza y fue hacia el refrigerador. Sacó una Coca-Cola Light y la
abrió. —¿Qué voy a hacer? Si tengo que pasar lo que queda del verano en la granja,
¡me voy a perder todo! No voy a saber nada para cuando empiecen las clases que lo
mismo daría si me mandan para siempre. 60
Claire tomó un gran sorbo de su café y trató de alejar el sentimiento de que era su
culpa que Emily estuviera tan triste.
No hice nada malo. Solo porque soy… lo que soy, no es mi culpa.
—Ya se nos va a ocurrir algo Em. Seriamente. ¿Qué has intentado?
Emily señaló con los dedos. —Les prometí que no saldría de la casa de noche, que
dejaría prendido el GPS de mi celular todo el tiempo, y que no iría a ningún lado
sola. Lo que es el equivalente de auto– encarcelarme todo el verano. Pero
prácticamente nadie puede salir de noche, así que no me perdería de mucho. Y por
lo menos estaría aquí. ¡Pero no me escuchan! —Emily se dejó caer en uno de los
taburetes de la barra y suspiró—. De todas formas no sé porque piensan que esa
estúpida granja es más segura que aquí. Quiero decir, hay muchas menos personas
allí. Si algo nos ataca en la granja, yo seré una de las tres elecciones que tendrá.
¿No es eso estadística básica?
Claire sonrió por la lógica de su mejor amiga y se sentó al lado de Emily.
—Bueno, eso es todo lo que puedes hacer, ¿verdad? Quiero decir, a menos que jures
quedarte en tu cuarto todo el tiempo, que sería tan malo como que te manden a
casa de tu tía.
Emily apoyó su cabeza en la mesa. —No me estás ayudando Claire.
La culpa inundó a Claire como un derrame de petróleo. Tal vez no lo estaba
intentando lo suficiente. Había una pequeña parte del cerebro de Claire que
susurraba que sería más fácil mentirle a Emily a través de un teléfono. Y que Emily
no iba aparecer a mitad de su cambio nocturno mientras estuviera en la granja.
—Tal vez las cosas se calmarán. Si yo estuviera en tu lugar, me la jugaría por “la
granja también es peligrosa”. Asústalos sobre que estarás tan lejos, que no podrán
controlarte. ¿Puedes arreglar con tu tía algún toque de queda locamente tarde o
algo por el estilo?
—Huh, no es tan malo realmente. No puedo decir nada más o ellos sabrán que
estoy intentando salir, pero esto debe funcionar.
FORO PURPLE ROSE

Claire mordisqueo una cutícula. —Vale la pena, mínimo.

—Sí, ok, así que aquí estoy, siendo completamente madura. ¿Qué hay de nuevo
contigo, eh?
Claire paro la carcajada solo una milésima de segundo antes de que escapara de su
boca. —Uhm, no, no mucho
Emily negó con la cabeza. —Eso “no” es verdad, Claire no intentes mentirme.
La boca de Claire se secó, resistió la urgencia de darle golpecitos a sus oídos para 61
asegurarse que Emily no había visto nada que le hiciera sospechar. ¿Ella podría
saber o decir que Claire escondía algo?
—Uhm no lo hago —tratando de ganar tiempo, Claire fue por su taza y se sirvió
más café, incluso cuando su estómago gruño en protesta.
—¡Oh vamos! Matthew Engle, ¿Que está pasando con eso, eh? —una sonrisa
jugaba en el borde de los labios de Emily.
—Oh. Oh — la adrenalina fluyendo por los dedos del brazo izquierdo de Claire.
Ok. Matthew, ella podía hablar de él, Dios. Esconderle cosas a Emily era duro.
Ellos vinieron con una solución para el problema de Emily. Claire podría utilizar el
mismo tipo de ayuda, de mucha ayuda realmente—. Sip, Matthew es sólo… es
realmente raro, ¿sabes? no creo que tengamos mucho en común, pero tuvimos un
momento agradable la otra noche, es muy fácil hablar con él.
—¿Y? ¿Lo veras de nuevo? —Emily no se veía cercana a la depresión ahora que
estaban hablando de chicos.
—Probablemente, el quería que nos viéramos hoy, pero tú y yo tenemos planes así
que lo deje para después.
El horror brillo en los ojos de Emily. —Oh Dios. Claire, estas completamente
chiflada, ¿Por qué hiciste eso?
Claire se encogió de hombros. —Quiero decir, el realmente me gusta, pero no estoy
segura de si es una buena idea que lo siga viendo. Tan pronto como las palabras
dejaron su boca, Claire se dio cuenta de que había sido un poco demasiado honesta
con Emily, no estaba acostumbrada a reprimirse alrededor de su mejor amiga.
Emily la miro atónita. —¿Qué en la tierra no sería buena idea? tú le has gustado
desde siempre, el obviamente te gusta, ¿Cuál es el problema?
Claire tomo otro sorbo de café, tal vez le podría consultar a Emily sobre esto
siempre y cuando ella fuera muy, muy cuidadosa.
—Bien. —Dejó su taza en el mostrador—. Quiero decir, yo sé que me gusta ahora
pero ¿y si.... y si el llegara a conocerme, a la verdadera yo... y odia lo que ve? Eso lo
FORO PURPLE ROSE

arruinaría todo, y quiero decir, realmente todo. ¿No sería mejor si detenemos las
cosas, antes de que se vayan a la mierda?
—Claire, se seria. Tú eres la real, por eso es que odias coquetear, es por lo que te
sientes incomoda en las fiestas, tú no sabes cómo fingir ser otra persona, créeme, si
le gustas ahora, y lo hace, no te vas a aparecer un día de estos con una descomunal
nueva personalidad que le impresione tanto como para huir de ti.
Claire se froto los ojos, Emily no tenía idea de lo equivocada que estaba y no había
manera de decirle la verdad. 62
—No estoy segura de ello, Em, pero aprecio la charla animada.
—Te sentirás mejor cuando lo veas otra vez. Sabes, ¿por qué no le llamas y le dices
que te he cancelado? y ves si el aún quiere salir.
Claire negó con la cabeza. —Le llamaré después, tal vez. Justo ahora quiero ir a dar
una vuelta por la piscina, ¿te interesa?
Emily suspiró. —Por supuesto, si voy a ser exiliada a la granja, quiero todo el
tiempo que pueda contigo, antes de que me vaya, pero sigo pensando que eres una
chiflada, y tengo que estar de regreso en casa para el almuerzo así que sólo tengo
poco tiempo.
—Genial, vamos a cambiarnos.
Por el resto de las dos horas siguientes, Emily habló hasta por los codos y la luz del
sol brillando sobre la superficie del agua mantuvo a Claire distraída. Silenciosa, su
mente seguía preguntándose sobre lo que había sucedido en el bosque la noche
anterior, ¿Qué otra cosa podía hacer aparte de escuchar a gente hablando a
kilómetros de distancia, y cazar? Ella deseo que alguien le preguntara, alguien que
le hablara.
—Holaaaaaaaaaa. —Emily agitó la mano recién pintada, delante de la cara de
Claire, el brillante químico olía bastante fuerte como para sacarla de sus
pensamientos mientras Emily decía con voz irritada—. ¿Siquiera estas
escuchándome?
—Um, no realmente. Lo siento, me distraje.
Emily busco la cara de Claire. —Estas pensando en Matthew, ¿verdad?
—Siip —la mentira se deslizó por su lengua como mármol—. Lo siento.
—No te preocupes, yo también me distraje. —Emily revisó su teléfono—. Ya me
tengo que ir de todas maneras. La última cosa que necesito es darles a mis padres
alguna otra razón, para no escucharme, ¿no crees?
Claire asintió. —Llámame y déjame saber cómo van las cosas ¿Ok?
FORO PURPLE ROSE

—Por supuesto. —Emily suspiró y se puso sus sandalias—. Serán un par de días
difíciles.
Si, ni que lo digas
Claire se quedó en la alberca después de que Emily se fue, las copas de los árboles
estaban inmóviles en el denso aire caliente. Su Cerebro se sentía frito. Con corto
circuito por tanto pensar y por el calor, se levantó y pensó qué quizá una rápida
nadada le aclararía la cabeza
Antes de que ella si quiera pudiera dar un paso hacia el agua cristalina, su móvil 63
sonó.
Un número desconocido brillo en la pantalla
—¿Hola?
—Hola Claire, me alegra haberte encontrado. —La voz le era familiar, pero
irreconocible.
—Oh perdona pero ¿Quién es?
Una risa suave hizo eco en la otra línea. —Es Zahlia. Lo siento debí decirte.
—Oh mi Dios, no está bien, me alegra que llamaras, en realidad estoy realmente
agradecida de que llamaras. —Claire se sentó en el caliente borde de la piscina y
metió los pies al agua.
—Supuse que tendrías algunas preguntas y escuche que tu madre se fue a Chicago,
no es como si a ella le gustara responder de todos modos.
—Sip, ¿Por qué es eso, exactamente?
—Tú madre es sólo muy… tradicional. Así que… ¿Ha estado todo bien?
Por primera vez Claire sintió que algo apretó con fuerza su flojo esternón.
―Realmente todo es bastante tenebroso, pero creo que he supuesto algunas cosas.
—Ella escuchó el orgullo deslizarse en su voz mientras admitía eso, pero no podía
detenerse—. Yo… yo estuve intentando cambiar, ya sabes, en el bosque.
—Bien. ¿Funcionó?
—Si funcionó. Pero la parte extraña es que mientras estaba intentándolo, escuche la
voz de Lisbeth hablar y estaba fuera de nuestra casa, ¿eso es normal?
Hubo una pausa en la otra línea. —No, todo el mundo puede hacerlo, pero
escuchar a larga distancia es uno de los dones más comunes.
—Así que sólo puedo escuchar la mitad de la conversación, ¿Tú puedes escuchar a
más de una persona a la vez? ¿Tienes que ser realmente un lobo para hacerlo?
FORO PURPLE ROSE

—No lo puedo hacer muy bien, pero creo que Beatrice puede escuchar a varias
personas al mismo tiempo. Estoy segura que es cuestión de práctica, y si, incluso
aunque tengas sentidos desarrollados todo el tiempo. Tienes que estar en tu
verdadera forma para hacer uso de ellos.
—Ok, supongo que eso tiene sentido.
—Así que… dijiste que habías estado en el bosque. ¿Sabe tú madre que estás
intentando estas cosas?
Un pequeño aleteo de pánico se agito dentro de Claire. 64
—Uhm no. No vas a decirle, ¿verdad?

Zahlia se echó a reír. —Nop, no lo hare, ella nunca lo aprobaría, y no estoy de
acuerdo con ella en eso. ¿Por qué desperdiciar estos tres meses? Serás una mejor
miembro de la manada si sabes lo que estarás haciendo cuando tú transformación
este completa.
—Ok, bueno.
—Así que escucha, tendrás mi número en tú móvil ahora, y si necesitas cualquier
cosa me lo dejas saber. Aún recuerdo lo difíciles que fueron los primeros meses.
—Sip, te llamaré.
—Lo esperaré con ansias.
Claire colgó y balanceo los pies contra la resistencia del agua, haciendo ondear y
burbujear la superficie. Si ella tuviera a alguien que en realidad pudiera ayudarla…
que realmente pudiera ayudarla, a diferencia de Emily, entonces tal vez pudiera
pasar por todo esto después de todo. Con una sacudida de su muñeca, Claire arrojó
el teléfono a la amortiguada cubierta de la silla tras de ello y se sumergió en la fría y
tranquila piscina.
La conversación con Zahlia y unas buenas vueltas por la piscina calmaron a Claire
lo suficiente como para pensar que llamar a Matthew era una buena idea.
—¿Hola?
—Um, hola Matthew. Es Claire. ¿Cómo estás?
—Estoy completamente aburrido. En serio. Está demasiado caluroso para ir a
correr y mi papá se está alistando para alguna clase de reunión importante, así que
tiene tomado el control de la casa. Estoy pensando seriamente en hacer mi tarea de
lectura de verano. Es así de malo.
Claire se rió. —Debe ser realmente malo si estás pensando en hacer la tarea.
FORO PURPLE ROSE

—Sí, es espantoso. Pero, A Separate Peace7 se ve en realidad algo interesante. Y es

corto.
Claire se estiró, riendo. Ella había pensado que él era inteligente no en un sentido
“nerd”, ni de club de ajedrez, sino que una especie de silenciosa inteligencia. A ella
le gustaba eso. Le gustaba un montón.
—Bueno, Emily me retuvo alrededor de la hora de almuerzo y tú no me oíste
recurrir a la trigonometría, —bromeó ella.
—Hey, hey, hey, no tan rápido. Yo no dije “nada” sobre hacer matemáticas. — 65
Contestó de vuelta. Claire podía oírlo sonriendo ampliamente—. Así que, ¿quieres
rescatarme de mi aburrimiento antes de que comience a hacer algo productivo? Yo
podría recogerte, ¿tal vez podríamos ir por un batido o algo?
Claire dudó. Había muchas razones para decir no, cómo el hecho de que su papá
estaba intentando cazar a su familia, que a ella tal vez se le escapara alguna cosa.
Pero era tan fácil hablarle. Y él era tan lindo.
—Seguro, —dijo ella, intentando silenciar la parte de su cerebro que estaba
segunda-dudando incluso mientras ella aceptaba ir—. Eso suena divertido.
—¡Genial! ¿En media hora más está bien para ti?
—Perfecto. —Claire ya iba por la mitad de las escaleras, escaneando mentalmente
el contenido de su armario—. Te veo entonces.
Mientras se estaba vistiendo, Claire llamó a Lisbeth y le dejó un mensaje. Se puso
un poco de maquillaje y los aretes de zafiros que su madre la había dado para su
cumpleaños.
Bonitos, pero no tan buenos como un auto.
Suspiró y bajó las escaleras para esperar a Matthew.
El exterior del auto de Matthew estaba cubierto por una delgada capa de polvo –
casi los de todo el mundo estaban así, debido a que la sequía había sido tan
drástica– pero Claire estaba sorprendida de encontrar que el interior estaba
verdaderamente limpio. Sin latas de soda rodando por el piso, sin camisetas de
futbol atascadas detrás de los asientos.
—¿Qué? —Preguntó el, claramente divertido por el asombro su cara.
7
A Separate Peace: Una paz sólo nuestra (John Knowles) Durante la Segunda Guerra Mundial, un
grupo de estudiantes comienza el curso en un colegio privado de Nueva Inglaterra. Gene, un chico
quieto y obediente, conoce allí a Finny, un compañero atlético y rebelde que despierta en él
sentimientos encontrados. La compleja relación que a partir de entonces se establece entre ambos es
el nudo en torno al cual se desarrolla una historia de amistad en la cual laten de forma inequívoca lo
mejor y lo peor del ser humano, las cuerdas inevitables que se han de pulsar para pasar, a menudo a
un alto precio, a la madurez.
FORO PURPLE ROSE

Demonios. Tengo que ser un poco menos fijona que eso si quiero que esto
funcione.
—N… nada. Es sólo… Yo no esperaba que tu auto estuviera tan, um…, ella
titubeó.
—¿Limpio? —Completó él, saliendo hacia la calle.
—Sí.
Matthew se encogió de hombros. —Una vez arruiné un jersey realmente caro… 66
estaba detrás del asiento y tiré una lata de soda ahí atrás. Resultó que, la lata de
soda no estaba tan vacía. Desde esa vez, soy bastante bueno en mantenerlo limpio.
Claire pensó sobre el montón de ropa en su piso y las cubiertas hechas un nido en
su deshecha cama. Tal vez ellos no eran tan parecidos como había pensado en un
principio.
—Mi habitación es otra historia, —dijo Matthew—. Normalmente es un desastre.
Claire contuvo la risa que burbujeó en su pecho—. El mío está bastante mal la
mayor parte del tiempo también.
Llegaron al The Juice Junction y se quedaron estudiando el menú.
—¿Estás lista? —preguntó Matthew, poniendo la mano en la parte baja de su
espalda. Su toque mandó una ola de fuego a través de ella y Claire tragó
duramente. Ella logró asentir.
Ellos consiguieron sus bebidas… Mango Tango para Claire y explosión de fresa
para Matthew, y se sentaron en una pegajosa mesa alta. Claire sorbió el dulce,
helado derretido, intentando ordenar su cabeza de vuelta.
Su espalda aún hormigueaba donde Matthew la había tocado, y el recuerdo de su
casi beso en su sofá era extremadamente distractor.
—Así que, ¿qué otra cosa hay de nuevo? —Matthew hizo bola el papel de su bebida
y la metió en su bolsillo.
Claire se encogió de hombros. —Los padres de Emily están aterrados sobre el
hombre lobo. La van a enviar a la granja de su tío por el resto del verano. Que es
por lo que ella está aterrada.
—Eso apesta. Quiero decir, los asesinatos son horribles, pero aún así.
—Sí, bueno, todos están entrando en pánico sobre eso, ¿cierto? —Claire contuvo el
aliento. Si había una cosa sobre la que ella no debería estar hablando era acerca de
esto. Pero de algún modo, no podía resistir el no saber lo que él sentía. Si él era de
la misma clase de fanático de lo que su papá era, probablemente estaría mejor
buscando la salida justo ahora.
FORO PURPLE ROSE

—Matthew suspiró—. Sí. Yo no lo hago. Toda la cosa me pone algo tenso.

Claire inclinó su cabeza a un lado. —¿Tenso cómo?
Matthew jugó con su pajilla. —Esto no es algo… con mi papá siendo quien es, es
difícil para mí hablar de esto, ¿sabes? Él no aprueba exactamente lo que yo pienso.
Claire resopló. —Confía en mí, tengo una dosis extra de padres desaprobadores yo
misma.
Él la miró, sus ojos cafés cálidos y serios a la luz de la tarde. —Yo confío en ti, en 67
realidad. —Él suspiró y se movió en su asiento. Sus rodillas se presionaron juntas
bajo la mesa y el aliento de Claire se cortó—. Supongo que, para mí, es muy similar
a lo que hace que no me guste la pena de muerte.
—Yo… ok, vas a tener que explicarme eso.
—Bueno, no es que no haya algunos crímenes por los que valga la pena la muerte.
Es sólo que… algunas veces ellos encuentran evidencia que dice que las personas
condenadas a muerte son inocentes. Así que tendrás que imaginar que algunas de
las personas que ellos han ejecutado eran inocentes.
Claire asintió. Ella había oído eso antes.
—Bueno, ¿qué pasa si ocurriera lo mismo con los hombres lobos? Qué tal si esos en
coma, los que papá está “curando” ¿qué ocurriría si algunos de ellos fueran los
equivocados también?
Claire estaba intentando no tiritar. —¿Pero no son todos los hombres lobos
asesinos? —susurró ella. ¿Era posible que él pudiera estar en completo desacuerdo
con su papá? ¿Qué él pudiera entenderlo en realidad?
Matthew levantó una ceja hacia ella. —Yo no pienso que eso tenga sentido. Quiero
decir, los osos pueden matar a la gente, pero no todos lo hacen, ¿no es cierto? ¿O
los leones? Tú escuchas sobre leones volviéndose comedores de gente, pero no
todos ellos lo hacen. De cualquier forma. Es sólo una teoría. Y mi papá se vuelve
endemoniadamente molesto cuando comienza a hablar de ella.
Claire estaba bailando en su interior. Luchó por mantener su rostro con expresión
interesada pero no extasiada. —Bueno, tiene sentido para mí, —dijo ella.
Él encontró sus ojos, y ella pudo oler una ola de alivio provenir de él, perfumado de
limpieza, como hierba fresca.
—Tú realmente no eres como todos los demás, ¿no es así? —Preguntó él.
Claire tragó duramente, sin estar cien por ciento segura de lo que él quería decir. Se
encogió de hombros—. Me gusta pensar por mí misma, eso es todo, —dijo ella. Lo
FORO PURPLE ROSE

que técnicamente no era una mentira, incluso si estaba a millas de distancia de toda
la verdad.
Ella intentó tomar otro sorbo de su batido y quedó sorprendida de encontrar que ya
se lo había terminado. Matthew entrechocó su pajilla contra su propio vaso vacío.
—¿Quieres otro? —Preguntó él.
Claire sacudió la cabeza. —Probablemente es mejor que regrese, de cualquier
forma. Si logramos ganar a Lisbeth en llegar a casa, tú podrías lograr escapar sin
que ella lea tú horóscopo. 68
Matthew se puso de pie sonriendo abiertamente. —No lo haré… eso podría ser
bastante interesante.
Claire rodó sus ojos. —Pierde su atractivo luego de la quinceava vez, créeme.
Mientras los dos caminaban hacia el auto, Matthew deslizó su mano en la de ella.
Aunque incluso el pensar en su toque enviaba pequeños shocks eléctricos a través
de Claire con cada paso, se sentía totalmente natural al mismo tiempo… cómo si
ellos hubieran estado tomándose de las manos durante meses.
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 7
Traducido por: andre27xl, Madelaine y playthekeys

E
69
n el bosque, la luz del sol se colaba entre la maleza. Las hojas se balanceaban
y se volteaban. Detrás de ella, podía escuchar a un estúpido pequeño animal
escabulléndose por la base de un árbol. Su estómago gruñó, pero no era el
momento para una merienda. Tenía cosas más importantes que hacer. Planes que hacer.
Intranquila por la espera, lamió un punto invisible de polvo de su rodilla y observó mientras el
pedazo húmedo de pelaje brillaba al sol.
Finalmente, hubo una ráfaga de movimiento en la zona abierta del parque bajo su punto de
ventaja. El hombre caminó en la expansión gramínea, sus muslos moviéndose y sus gordos y
acolchados hombros, enfocados en caminar sobre el desigual cielo. La boca se le hizo agua y se
levantó en cuclillas, rozando una rama baja y colgante. Mientras sus músculos se juntaban
para moverse, el hombre estaba acompañado por dos mujeres y otro hombre, gritándole que
esperase. Un tercer hombre estaba disperso en el claro detrás de ellos, cargando un bolso
gigante.
Demonios. Demasiados. Todos habían olvidado el tan llamado “día de observación de las
mujeres lobo”. El cual no había hecho ella. Había querido probar que podía matar a la luz del
día, quitar la falsa seguridad del sol, pero estaba llamado al fracaso.
Manteniendo el temblor de frustración y decepción que vibraba en su pecho en un suspiro, se
hundió en el suelo del bosque. El ángulo de luz contra los árboles incrementaba su frustración.
Se había quedado sin tiempo, la habían esperado de vuelta, pronto. Qué desperdicio. Sin
embargo, quizás tendría tiempo mañana para intentarlo de nuevo.
Cuando Mathew y Claire se detuvieron en frente de la casa de Claire, era sólo un poco después
de las cinco y media. La nota de Lisbeth decía que estaría de vuelta alrededor de las seis, así
que tenían cerca de media hora antes de que regresara. Media hora en una casa vacía.
—¿Qui… quieres entrar? —preguntó Claire.
Mathew se giró en su asiento para estar frente a ella. Alcanzó y metió un mechón
de su cabello tras su oreja, y Claire tomó un respiro. La esencia de Mathew llenó su
nariz, y ella resistió la necesidad de suspirar.
—Quiero entrar más que cualquier otra cosa —dijo él, y el áspero tono de su voz le
dijo a Claire que lo decía en serio—, pero no creo que a Lisbeth le gustaría volver a
casa y encontrarme aquí. Y de verdad quiero agradarle a Lisbeth, porque espero
FORO PURPLE ROSE

estar en los alrededores mucho más tiempo, y sería mucho más fácil si ella lo
aprueba.
Claire se rindió con un suspiro.
—Tienes razón.
—Sin embargo, aún tenemos algunos minutos. —Mathew tomó su rostro con sus
calientes manos y se inclinó cerca. Claire parpadeó, pero cuando sus labios rozaron
los suyos, los ojos de ella se cerraron. Su boca era gentil pero insistente. Los labios
de ella se separaron y las manos de Mathew se deslizaron por sus hombros, 70
atrayéndola más cerca. La felicidad que burbujeaba en su pecho cuando sus brazos
se deslizaron alrededor de ella no era nada comparado a lo que Claire alguna vez
hubiera experimentado. Después de los últimos días, cuando se había sentido
incómoda en cualquier lado, en cualquier forma, finalmente había encontrado un
lugar donde todo se sentía bien.
Parecieron sólo segundos después cuando Claire oyó el coche de Lisbeth
acercándose por el largo camino de grava. Se alejó de Mathew, arreglando su
cabello y tomando un respiro profundo.
—¿Pasa algo malo? —La preocupada mirada en su rostro la hizo querer besarlo de
nuevo. —Escucho un coche acercándose —explicó ella.
—¿De verdad? —él miró por su ventana. Unos segundos después, el retumbar de
las ruedas sobre la grava se hizo más fuerte y el coche de Lisbeth apareció a la vista.
—Wow. Supongo que no estaba prestando suficiente atención.
O yo no estaba prestando suficiente atención. Dios, estaba tan concentrada en besarlo
que no pensé en oír algo como eso antes de que él pudiera.
Claire le dio un codazo en su rodilla.
—No me escuchaste quejarme —dijo ella.
—Así que, ¿quieres que me quede cerca y diga hola?
Claire negó con la cabeza.
—Quizás la próxima vez. —Abrió la puerta y salió al calor—. Hablaré contigo
pronto, ¿de acuerdo?
—Cuento con ello —le sonrió.
Mathew condujo pasando a Lisbeth, saludándola con la mano cuando pasó.
Lisbeth salió de su coche, viéndose fuera de sí. Sacó su morral de yoga fuera del
asiento de pasajeros y caminó hacia Claire.
—Así que, ¿cómo estuvo tu cita? —El tono de voz burlón de Lisbeth pareció sin
entusiasmo.
Claire sintió sus mejillas sonrojarse.
FORO PURPLE ROSE

—Estuvo bien —dijo ella, levantando su quijada. Tenía permitido tener citas.
Había llamado a Lisbeth para hacerle saber a dónde iba. No había razón para que
Lisbeth armara un problema de ello— ¿Cómo estuvo tu trabajo de compras?
Lisbeth observó su bolso y una expresión indescifrable se reflejó en su cara.
—Estuvo bastante bien. Mañana tendré una úlcera como nunca, te apuesto lo que
quieras. —Se dio la vuelta para caminar hacia la casa. Había una hoja seca en la
parte trasera de su cabello y Claire se la quitó.
—¿Estabas haciendo yoga fuera? —preguntó ella. 71
—Um, una caminata de meditación, sí. Estaba caluroso en Hades. ¿Por qué?
Claire levantó la hoja.
—Esto estaba en tu cabello.
—Oh. —Lisbeth rozó una mano sobre su cabello. —Bueno, gracias.
—No hay problema. Así que, ¿qué hay de cenar?
Lisbeth gimió.
—Cualquier cosa que pueda ser entregada. Sólo quiero tomar una ducha y
encontrar un lugar suave para sentarme por unas horas. ¿Está bien para ti?
—Claro. Lo que sea. —Mientras Lisbeth no la interrogara sobre Mathew, a Claire
no le podía importar menos. Las dos se dirigieron dentro, y Claire dibujó una línea
recta a la gaveta de la cocina donde guardaban los menús de entregas. Aún cuando
estaba bastante segura de que el sentimiento retorcido en su estómago tenía más
que ver con Mathew que con tener hambre, Claire buscó el menú del Palacio de
China y escuchó el sonido distante del repiqueteo de la ducha. Afuera, el susurro de
la brisa a través de las copas de los árboles la llamaba, agudizando el hambre en su
estómago y trayendo consigo el deseo de correr.
Claire miró los árboles y deseó que trotar alrededor del vecindario la satisficiera. De
alguna forma, sabía que no lo haría.
Lisbeth fue a la cama cuando apenas comenzaba a oscurecer fuera. Claire trató de
llamar a Emily (quería saber si sus padres ya habían recuperado el juicio) pero fue
directo al buzón de mensajes. Claire se tumbó en el sofá. Paseó por los canales de
televisión hasta que no pudo soportar los pinchazos de intranquilidad en sus
piernas por más tiempo. Tenía que salir...
Lisbeth se fue a la cama cuando empezaba anochecer afuera. Claire trató de llamar
a Emily. Quería saber si sus padres ya estaban bien, pero fue directa al buzón de
voz.
Claire se recostó en el sofá. Empezó a cambiar los canales de televisión hasta que
no pudo aguantar los pinchazos de inquietud que sentía en las rodillas. Tenía que
salir de su casa. Se estaba muriendo por entrar a bosque, de estirar sus piernas y
FORO PURPLE ROSE

correr, ver lo que podía hacer. Tal vez si podía controlar las cosas de mujer lobo, tal
vez podría concentrarse en algo normal otra vez. Eran después de las 10 cuando se
salió hasta el jardín trasero y se deslizó por la abertura del muro. Sabía que era
arriesgado escaparse dos noches seguidas, pero con Lisbeth durmiendo como si
estuviera muerta y su madre aun en Chicago, era una idea demasiado buena para
malgastarla.
El bosque se veía menos raro esa noche. Los invisibles tejidos de los arboles se
veían familiares, y el aroma de la hojas y de la suciedad olían a paraíso. Fue fácil
encontrar el lugar en donde practicó la noche anterior, las dos piezas de troncos. 72
Claire se sentó en el suelo y dejó salir la piel deslizándose sobre sus manos y
cicatrices. Esperó que viniera.
Incluso con sus ojos cerrados, Claire sabía que estaba transformada, el sonido de
grillos y mosquitos era de repente el doble de fuerte. Sus sentidos tal vez estaban un
poco más desarrollados que los de una persona normal pero en la forma de lobo era
mucho más. Todo se veía más cercano a ella. Podía sentir la textura del suelo el
algodón de sus pantalones. Debería empezar a quitármelos antes de la
transformación. Uno de estos días me va a crecer la cola y atravesarlos.
La idea de tener una cola la hacía sentir rara, así que tomó una larga respiración.
La esencia del bosque era lo suficientemente fuerte para hacerla marearse.
Inclinándose hacia delante, Claire recostó su cabeza en el suelo y cerrando sus ojos,
tratando de aclimatarse a este mundo en donde nada se escondía. Tal vez deba
tomarme esto más despacio.
Sintió una punzada de decepción en el estómago. Como ya lo había hecho,
esperaba que el cambio fuera más fácil. En vez de lo incómodo que había sido
anoche.
Cuando dejó de sentirse mareada, y se sentó de nuevo, ya había más pelaje en la
piel de sus brazos. Sintió sus oídos y era más largos. Sus pies se habían
transformado también. Aunque, pensó, seguía siendo en su mayoría humana. Se
paró, y empezó a caminar más adentro del bosque, pensando si podría encontrar el
claro cuando conoció a las demás.
Claire miró al cielo. No quería practicar en el lago porque se sentía expuesta aun en
lo más profundo del bosque. Sería mejor caminar de nuevo hacia los arboles.
Estaba caminando hacia los árboles cuando de repente se giró y miró. Cuando se
volvía hacia los arboles una voz habló detrás de ella.
—No te asustes —dijo.
Claire retrocedió y decidió esconderse detrás de los arboles. Su boca estaba abierta,
un instinto primitivo guardaba su grito en los pulmones. Si gritaba la encontrarían.
Una figura delgada salió de entre los árboles, caminada hacia ella.
FORO PURPLE ROSE

—Claire —la llamó Zahlia, sus rasgos pálidos saliendo de los árboles. Claire salió
de donde estaba escondida.
—¡Dios! Me asustaste — respiró.
—Lo siento —Zahlia se dirigió hacia donde estaba ella— No quise hacerlo.
—No, está bien. Así que hola.
—Hola a ti también. ¿Qué te trae al claro cuando aún no es luna llena? ¿Tu madre
está por aquí? —preguntó Zahlia.
73
Claire se encogió.
—No, sólo soy yo. Me sentía fuera de práctica, así que vine hacia el bosque para
tratar de mejorar, supongo. Y por supuesto que no le diré a mi madre que estuviste
por aquí. Y normalmente soy la única que viene aquí, aparte de cuando nos
reunimos. Es un buen lugar para pensar.
Claire se sentó en frente de Zahlia.
—Sí. Puedo ver eso. No parece un buen lugar para practicar después de todo.
—¿De verdad? —Preguntó Zahlia— Si no quieres ser vista en tu forma, significa
que tus instintos son fuertes. Y cuanto más fuertes sean tus instintos, es más fácil
aprender, para ser bueno en las cosas que podemos ser.
—Oh. Bueno, está bien —ser buena en ser mujer lobo era mejor que todo ¿no?
—Te ves con calor —Zahlia sonrió— Hay una forma de arreglar eso ¿sabes?
—Eh no. ¿Qué quieres decir? —Claire se enderezó .El sudor deslizándose por su
espina hasta la parte baja de su espalda.
—Cierra los ojos y piensa en algo frio. Nieve, hielo, no importa qué.
Pensó en los copos que se deslizaban por su ventana cada invierno y llegaban hasta
su cabeza. La manera en la que la estremecían y cómo temblaban sus dientes…
—¿Ya pensaste en algo? —preguntó Zahlia.
Claire asintió.
—Está bien, aquí es cuando viene el truco. Tienes que hacer que la idea fluya a
través de ti y mantenla ahí.
El aire frío se deslizó sobre su pelaje sorprendiéndola. Mierda. El calor se fue.
Zahlia se rió.
—No hemos terminado aún. Tienes que mantenerte concentrada. Este sólo era el
primer paso. ¿Por qué no lo intentas otra vez?
Claire apretó sus ojos e hizo que el frío la rodeara, haciéndola temblar un poco.
FORO PURPLE ROSE

—Genial —susurró Zahlia—. Ahora tienes que dejarlo entrar. Mantenlo en tu piel,
como te mantienes en tu forma de lobo interna oculta.
Claire sintió el frío bajo su piel. Era como la sacudida de saltar en agua helada en
un día caluroso... sorpresa y alivio al mismo tiempo, y el más pequeño borde de
dolor que desapareció mientras su cuerpo se ajustaba al cambio. Abrió los ojos y
miró a Zahlia con incredulidad.
—Eso es increíble —susurró.
Zahlia asintió con la cabeza. 74
—Me encanta ese, sobre todo. Realmente es muy útil cuando vas de caza...
mantiene a la temperatura lejos de ser una distracción. Vamos, muévete un poco...
inténtalo.
Claire corrió un poco en el bosque, experimentando. Y hacía una hora, incluso un
corto tramo la había dejado jadeante y agotada. Ahora, el calor de su esfuerzo fue
alejado por el frío en su interior. Claire dejó escapar un aullido de placer. Podía
correr por millas, por horas, así. Sin el aire espeso presionando sobre ella, se llenó
de nuevas energías. Era un hormigueo través de ella, y se estremeció feliz mientras
hacía su camino de vuelta al claro.
—Así que... ¿puedo hacer esto para permanecer caliente, también?
—Por supuesto. Puedes mantener ya sea calor o frío por debajo de tu piel, pero sólo
como lobo. En tu forma humana, tienes que escuchar al hombre del tiempo, como
cualquier otra persona. Te dará calor y frío como al resto de los humanos.
Claire asintió con la cabeza, agradecida.
—Muchas gracias por enseñarme eso. Es sólo que... es bueno tener estas cosas
extra, ¿sabes? Como que ayuda a compensar todo lo demás.
Zahlia rodeó sus brazos alrededor de sus piernas y miró a Claire.
—Ser un lobo no es una maldición, Claire. Es duro, pero tiene más ventajas que
inconvenientes, te lo prometo. Espera a la primera vez que salgas a cazar con la
manada entera. Es increíble... como si estuvieras en todas partes, y totalmente
imparable. Los humanos no llegan a sentirse así. La Diosa nos ha dado sólo a
nosotras ese honor.
Claire se pasó una mano por la frente.
—Sí, está bien. —No estaba realmente convencida de todo sobre el honor-de-la
caza y sin embargo... todavía lo habría cambiado si podía ser normal otra vez. Ella
respiró hondo—. Entonces, ¿qué otra cosa podemos hacer?
—Oh, un montón de cosas, siempre y cuando estés en tu verdadera forma. El fuego
hace lo que quieras. Algunos de nosotros podemos abrir cerraduras con nuestros
pensamientos. Cosas como esa.
FORO PURPLE ROSE

La boca de Claire se abrió. Bueno, eso es mucho mejor que simplemente ser
capaces de cazar en la temporada baja.
—¿Cuando puedo aprender?
—Muy pronto. —Zahlia se puso de pie y se sacudió la suciedad de sus
pantalones—. Me tengo que ir si me voy a poder arrastrar el trasero de la cama
mañana en la mañana.
—Oh... lo siento. Usé todo tu tiempo de pensar, ¿eh?
Zahlia le sonrió. 75
— ¿Estás bromeando? Estoy feliz de poder ayudar. Ojalá pudiera quedarme más
tiempo, mostrarte algunas cosas más. De verdad, Claire, tan pronto como domines
todo esto, más rápido te darás cuenta de que tu antigua vida no es algo por lo que
llorar, que ser humano es aburrido.
—Tal vez. —Claire se encogió de hombros. La mayoría de los seres humanos que
conocía parecía que tenían vidas mucho más simples que la suya. Había algo que
decir sobre eso.
Zahlia se echó a reír.
—Dale un poco de tiempo, es algo nuevo. Si lo deseas, podemos hacer frente a la
próxima semana, trabajando en algunas cosas.
—Eso sería realmente una gran idea. Me gustaría eso.
—Bien. Tendrás un tiempo más fácil para llegar a casa si te quedas en tu verdadera
forma. El rastro de olor será más fácil de seguir. —Zahlia saltó por encima del
registro de donde había estado sentada y se dirigió hasta el borde del claro—. Nos
vemos la próxima semana.
—Sí —dijo Claire, en dirección a la ruta de acceso fácil que la había llevado por el
bosque —Gracias.
Sólo unos pocos metros en el bosque, Claire comenzó a cansarse. Con cada árbol
que pasaba aumentaba la fatiga, como si hubiera terminado la sesión de ejercicios
más difíciles de su vida y la adrenalina se hubiera desvanecido definitivamente. La
vista de su lugar de prácticas envió una ola de alivio a través de ella, y casi se acostó
y se durmió en el acto.
En su lugar, Claire se obligó a transformar. Se deslizó de nuevo por el césped y en
la casa, se dio la ducha más rápida en la historia de la ducha, y cayó en cama con el
pelo aún mojado.
El repique incesante de las ollas y sartenes se abrió camino en el sueño, despertando
a Claire. Se quedó parpadeando hacia el reloj de la mesilla de noche. No eran más
que las 11,30, por el amor de Dios. ¿Lisbeth tenía que hacer de verdad tanto ruido
en la cocina?
FORO PURPLE ROSE

Aún medio dormida, Claire tropezó en el cuarto de baño y se quedó mirando la

masa de pelo enredado enmarcando la cara. Eso es lo que le pasaba por no haberlo
secado antes de acostarse.
Mientras se arreglaba el lío de enredos, Claire llamó a Emily.
—Hola —Emily respondió con su voz triste.
—Oye, tú. ¿Cómo estuvieron las cosas con tus padres anoche?
—Ugh. Quiero decir, ugh. No escucharon nada. Y mi madre quiere ir de compras
conmigo más tarde... 76
—Bueno, eso puede ser bueno, ¿verdad? ¿Algún tiempo para hablar? —la
interrumpió Claire.
—No me dejaste terminar. Me llevará de compras por equipaje. ¡Equipaje! Como si
me fuera a algún tipo de crucero de señora vieja o algo así.
Claire se estremeció.
—Oh. Ouch. ¿Tal vez no encontrarás nada que te guste?
—Ah. No creo que eso vaya a detenerlos, pero buen intento. ¿Y tú? ¿Hiciste algo
divertido ayer?
—En realidad, sí, Matthew y yo fuimos a The Juice Junction.
—¿En serio? Eso es increíble. ¿Cómo estuvo? ¿De qué hablaron? ¿Te besó?
—Um, ya sabes... hablamos sobre cosas al azar.
Cosas que no puedo contar, eso es todo. Emily mataría para escuchar los detalles
de la conversación, pero Claire le había prometido a Matthew que ella no diría
nada. Y lo había dicho de verdad.
—Muy bien, hablaron —Emily bromeó con impaciencia—. Pero ¿qué pasa con los
besos? Vamos, tú sabes que estoy viviendo vicariamente a través de tu vida amorosa
en este momento.
—Sí, nos besamos —dijo Claire, hormigueando con el recuerdo de eso—. Y sí, fue
increíble. Pero eso es todo lo que diré.
—Muy bien, puedo pillar una indirecta. Voy a cambiar de tema. Así que, eh...
¿nada más emocionante pasó ayer?
Una imagen de los árboles parpadeando delante de ella mientras corría por el
bosque se vino a la mente de Claire.
—No, no realmente. —Dios, estaba empezando a sentir que no había nada de qué
hablar con Emily. Era extraño e incómodo e hizo que Claire quisiera colgar el
teléfono—. Escucha, tengo que ir abajo para el almuerzo antes de que Lisbeth se
enfade. ¿Me llamas más tarde?
FORO PURPLE ROSE

—Sí, claro —Emily suspiró—. Te diré todo sobre mis fabulosas maletas a juego.
Después de que había colgado, Claire se quedó mirando el teléfono en la mano y
dejó escapar un suspiro largo y lento. Los amigos no se suponía que se mintieran el
uno al otro, pero ¿qué otra opción tenía?
77
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 8
Traducido por: Emii_Gregori, por: MASI y Aya001

E
78
l teléfono de Claire comenzó a sonar cuando masticaba el último
bocado de su tostada mientras el número de Matthew destellaba en la
pantalla. Dado que su horario de práctica de fútbol había cambiado y
Lisbeth no quería salir de noche, había pasado casi una semana desde que lo había
visto, aunque hablaban regularmente. Tragó, hizo una mueca de dolor, y contestó.
—¿Hola?
—¡Hola, Claire!
—¡Hey!, Matthew, ¿qué pasa?
—No mucho, realmente. Memorizando algunos juegos y cuadrangulares,
sobretodo, ya que la práctica de esta tarde se canceló.
—¿En serio? Eso debe ser frustrante, ¿no? —Pensó Claire. ¿El tenía una tarde libre?
—No mucho, me da tiempo de verte… excepto que… —hizo una pausa.
—¿Excepto qué?
—Bueno, veras, la cosa es que mi papá programó un acto para esta tarde, y tengo
que ir, pero realmente quiero salir contigo.
—Claire vaciló. Ella moría por ver a Matthew, ¿pero en una reunión con el Dr.
Engle?
—Escucha, quisiera verte para cenar y ver una película, pero… —él vaciló.
—¿Por qué no? Nunca he estado a una reunión antes, —dijo ella. ¿Y nadie sabe que
soy un hombre lobo, verdad?
— ¡Genial!, te recogeré a las dos y media.
Había más personas de las que Claire esperaba. Colocaron sillas plegables y mesas
con galletas y grandes botellas de agua que brillaban bajo el sol. Los niños corrían
entre la multitud, sus camisetas estaban adornadas con la silueta de un lobo
aullando, que en parte ocultaba una enorme X roja. Algunas de las personas
alrededor de las mesas portaban carteles con la misma imagen, otros tenían carteles
que decían “APOYAR LA P.A.C. NUEVAMENTE”. La cabeza le daba vueltas y
estaba empezando a sudar, ansiosa porque el acto comenzara ya.
FORO PURPLE ROSE

Un hombre mayor luciendo una gorra de beisbol sudorosa apoyo su mano en el

hombro de Matthew. —¡Hey! He visto tu foto en el periódico, eres el hijo del Dr.
Engle ¿no? Debes estar orgulloso de él.
—Oh, sí —Matthew tartamudeó, ruborizándose y varias personas voltearon a verlo
algo curiosas—. El ha estado trabajando duro en todo esto.
Claire no podía dejar de reír ya que Matthew se sintió algo incomodo con tanta
atención por parte de los admiradores de su padre.
—Es un buen hombre el Dr. Engle. Tenemos suerte de tenerlo. —El hombre vio a 79
alguien detrás de Matthew—. ¡Hey, Jim! ¿Necesitas una mano con el resto de los
carteles?
Matthew tomó la mano de Claire y la llevó lejos de la multitud. —Uff, nunca se
detienen, —se quejó. Bajó un poco la voz—. No es como si detuviera el hambre en
el mundo. Solo trata de conseguir personas que lo apoyen en las Investigaciones
Internacionales de la Licantropía ya que están perdiendo interés en el caso.
Así que el Dr. Engle no los tiene deslumbrados a todos, después de todo.
En la parte de adelante, la multitud se agrupó. Alguien había colocado banderas
rojas y azules. El Dr. Engle estaba en su podio, arreglándose el cabello, moviendo
el cuello de lado a lado. Golpeó el micrófono y una corriente de de chillidos se oyó
en los altavoces. Salían gemidos de la multitud, pero todos dejaron de hablar y se
volvieron hacia el escenario.
—Quiero darles las gracias a todos por venir y apoyarnos —el sol se reflejaba en sus
dientes cada vez que hablaba—. Sé que todos quieren volver hacia el aire
acondicionado, así que lo hare algo corto. Nosotros aquí en Hanover Falls hemos
estado viviendo mucho tiempo bajo muchas amenazas. Los ciudadanos de nuestra
comunidad no se merecen que sus actividades se interrumpan por estar bajo el
temor de que algo podría estar acechándonos fuera de nuestras ventanas. No es
justo, y yo haré que esto no suceda más.
Incluso desde el fondo de la multitud. Claire podía ver que las manos del Dr. Engle
se volvían blancas ya que las mantenía las apretando los bordes del podio.
A su alrededor, las personas algo tensas tiraban adelante como flores hacia el sol.
Porque ellos me quieren muerta y el asegura que tiene absolutamente toda la razón. La
realidad golpeo a Claire como una bofetada. Ni siquiera les importa que sea verdad y es
que tienen miedo y están locos, y alguien tiene que pagar por ello.
Se obligó a mirar hacia Matthew. No tenía la misma rabia y tensión que se
observaba en los demás. Pero tampoco miraba disgustado a su padre. Él lleva
escuchando esto por diecisiete años. Se recordó Claire. Es probablemente inmune a
ello por ahora.
FORO PURPLE ROSE

El Dr. Engle se inclinó hacia el micrófono, y su voz hizo eco entre la multitud—.
Todo terminará hoy. Éste es el comienzo de una nueva era. Es para mí un gran
placer anunciar la nueva formación del P.A.C, la Acción Protectora del Consejo.
Este grupo es un hecho gracias a todo el trabajo de la comunidad y de la policía
local. Su cooperación nos permitirá que tomemos todas las medidas a nuestro
alcance para capturar a la bestia que nos acecha.
Claire se estremeció, se alegró de que él no supiera hasta que punto eran precisas
sus palabras.
80
—Cualquier persona que deseé ofrecer sus servicios, los necesitaremos a todos,
desde los que pueden llenar sobres hasta aquellos que estén capacitados y sean
experimentados cazadores —Claire suspiro—. Pueden inscribirse antes de irse.
Cuento con cada uno de ustedes para ello. Gracias y buena suerte.
La multitud comenzó a aplaudir. Agitaban sus carteles y silbaban. La mesa en
donde debían inscribirse estaba rodeada de personas. Claire miró fijamente, incapaz
de apartar la mirada de la multitud de personas que uno tras otro firmaban por el
privilegio de matar a un hombre lobo.
Matthew deslizó el brazo por sus hombros. —No estarás pensando en unírteles,
¿verdad? —Preguntó
Una risa ahogada salió de la boca de Claire. —Uh, no —Camina derecha, Claire—.
Pero tu padre es muy buen orador. Todo el mundo parece realmente emocionado.
Le odio, pero bueno, él puede embaucar a un grupo de imbéciles, está bien.
Matthew puso en blanco los ojos. —En cierto modo pierde su atracción cuando tú
le has oído practicar frente al espejo del baño durante dos días. Vamos, si no
salimos de aquí pronto, me quedaré atascado estrechando manos durante la
próxima hora. —Guió a Claire hacia los coches. Con dedos temblorosos, ella abrió
la puerta, se deslizó dentro del coche caliente como un horno, y apoyó su cabeza
contra el asiento.
Esta es la peor cita en la que he estado.
El coche de Matthew no pudo enfriarse lo suficientemente rápido para Claire entre
el calor y el pánico, se sentía débil.
—Pareces sofocada —La voz de Matthew sonaba preocupada—. ¿Por qué no
vamos a tomar un helado? ¿Para refrescarnos un poco?
—¿Puedo pedirte que sea la próxima vez? —Odiaba como sonaba su voz de
temblorosa—. Ahora sólo quiero ir a casa y tomar una ducha. Y tal vez descansar
un rato. —La necesidad de llegar a casa, para ordenar lo que acababa de ver, era
demasiado fuerte como para ignorarlo.
—Lo siento mucho, Claire.
FORO PURPLE ROSE

Matthew giró las rejillas del aire acondicionado de su lado del coche hacia ella.
Dado que ellas todavía estaban soplando aire caliente, no le hizo mucho bien, pero
fue muy dulce de su parte.
—Nunca debí haberte mantenido con este calor, de pie, rodeados de un montón de
imbéciles que se creen superiores.
Ella se inclinó y tomó su mano. —Me gustó estar allí contigo. —Las dos últimas
palabras fueron verdaderas.
Matthew se detuvo delante de su casa. —¿Quieres te acompañe dentro? 81
Ella sacudió la cabeza. —Estaré bien. Gracias por traerme.
Él se inclinó y la besó, sólo una rápida y ligera presión de su boca contra la suya. —
Llámame más tarde y déjame saber cómo estás.
—Lo haré. —Claire se deslizó fuera del coche y entró en la casa.
Se arrastró escaleras arriba, agotada por el calor y el gran choque de la adrenalina
que había sentido en la manifestación. Empujó la puerta de su habitación y se
encogió al ver a su madre sentada en su cama.
—¿Qué estás haciendo aquí? —Claire pensó en el periódico escondido bajo su
colchón, y la camisa –la que había cogido del armario de su madre sin permiso–
que estaba manchada hecha un bulto en el último cajón de su tocador. Había
secretos escondidos por todo su cuarto. Si ella ha estado husmeando por aquí, moriré.
La madre de Claire apretó sus labios. —Estoy esperándote, obviamente.
—¿No podías sólo haber esperado en la cocina? —Se quejó Claire. Atravesó la
habitación y se sentó en el banco de frente de su tocador.
—No, quiero hablar contigo, y no es una conversación para la que quiera tener
audiencia. —Su madre miró fijamente hacia la puerta.
Claire se levantó para cerrarla, poniendo los ojos en blanco una vez que estuvo de
espaldas a su madre. Volvió a sentarse en el banco y esperó con tristeza. Marie
miraba a Claire como una manzana que sospechara estaba caliente.
—¿Te divertiste en la manifestación?
Claire se apoyó contra el tocador que estaba detrás de ella. —Me divertí mucho con
Matthew, —dijo con cuidado.
—Me imagino que su padre se entregó enteramente al discurso. — Marie
jugueteaba con la correa de su reloj, enderezándolo contra su muñeca.
—Sí —se estremeció Claire—. Creo que se podría decir eso. Está formando una
especie de escuadrón de exterminio de hombres lobos. La gente no podía cantar
más fuerte y firme. Era una locura.
FORO PURPLE ROSE

Su madre dejó escapar un largo suspiro. —Supuse que sería algo así. Es bueno que
tú fueras. Así sabes de primera mano lo que la gente piensa de nosotras, lo que ellos
nos harían a cualquiera de nosotras si fuéramos descubiertas.
—Sé cómo mantener la boca cerrada. —Resopló Claire—. No tengo deseo de morir
y no soy idiota. Dios.
—Diosa, —corrigió su madre.
—Lo que sea. Bien. —Claire cruzó los brazos frente a su pecho, dispuesta a dar su
mamá la satisfacción de oír lo que fuera a decir. 82
—No estoy tratando de empezar una discusión contigo, Claire. Por favor. Esto es
importante, y necesito que me escuches.
Claire alzó la mano hacia un lado. —Te estoy escuchando.
—Muy bien. La mayoría de nosotras tenemos una relación con un ser humano en
algún momento que va más allá de la reproducción. No suelen durar mucho
tiempo. Hay demasiadas cosas que ocultar, y son dichas demasiadas mentiras. Sin
embargo, está permitido. La necesidad de compañía es comprensible.
Claire tragó saliva fuertemente. Yo realmente no creo que quiera saber a dónde va
esto.
—Mamá…
Su madre levantó una mano, silenciándola. —Sin embargo, Matthew Engle no es
sólo cualquier humano. Su padre es un peligro para nosotras. Y tú estás en un
momento muy vulnerable de tu transición. Es una mala combinación, además,
entraña riesgos. Debido a esto, tengo que prohibirte que lo veas. Tú puedes
encontrar a otro chico para salir, pero a partir de este momento, Matthew está fuera
de cuestión.
Claire la miró fijamente. —Tienes que estar bromeando.
Marie se puso de pie y se alisó la camisa. —No bromearía sobre esto. Yo soy tu
madre y harás lo que te digo.
El hielo en la voz de su madre hizo a Claire ponerse rígida. Su madre se dirigió a la
puerta.
—Huele como si la cena estuviese casi lista. Te veré abajo.
Claire le sacó la lengua a la puerta cerrada, atravesó la habitación, y giró la pequeña
cerradura del pomo de la puerta. No quería que su madre volviera a aparecer para
hacer cualquier adición a sus nuevas "reglas".
Claire suspiró y abrió la puerta.
No es que una pequeña cerradura fuera a mantener a un hombre lobo fuera. Las palabras
giraban en su mente, formándose un nuevo pensamiento. No es como si pueda
mantener uno, además.
FORO PURPLE ROSE

Su madre no se fiaba de Matthew porque ella no lo conocía. Pero Claire lo conocía.

Y ya que su madre estaba fuera tanto tiempo, ella nunca sabría si Claire veía a
Matthew o no. Al menos, siempre y cuando Claire fuera muy, muy cuidadosa.
Claire estaba todavía durmiendo cuando Matthew llamó a la mañana siguiente.
Ella sacó su teléfono móvil de debajo de un cojín a su lado y miró el reloj.
—¿Hola? —Se aclaró la garganta. Dios, sonaba como una anciana de ochenta años
de edad con el mal hábito del Malboro.
—¿Todavía estás dormida? —dijo Matthew medio en broma. 83
—No soy una persona madrugadora, demándame, — se quejó Claire.
—Los pleitos no son realmente mi estilo. ¿Qué tal si te llevo a comer en su lugar?
Claire se mordió el labio. Cuando estaba con Matthew era el único tiempo en que
ella se sentía realmente bien. Pero tendría que asegurarse de que podía salir y
regresar, sin que su madre lo supiera.
Mierda.
—Dame un segundo. —Metió el teléfono bajo la almohada y se dirigió a la
puerta—. ¿Mamá? —Gritó hacia abajo de las escaleras.
—Se marchó hace una hora, no volverá a casa hasta la cena —dijo Lisbeth en
respuesta—. ¿Necesitas algo?
—Um, no.
Claire se arrastró de vuelta a la cama con una sonrisa en el rostro. Con su mamá
fuera, ella apenas tenía que moverse alrededor de Lisbeth, lo cual no sería
demasiado difícil. Sacó el teléfono de debajo de la almohada. —Sí, almorzar suena
bien.
—Estaré allí en una hora, ¿de acuerdo?
—Está bien —aceptó Claire, luchando por salir de la cama. Apagó su teléfono y se
dirigió a la ducha.
Cuando bajó las escaleras, le dijo a Lisbeth que iba a dar una vuelta con un amigo.
Lo cual no era mentira.
Los ojos de Lisbeth se iluminaron, no era la reacción que Claire había esperado. —
Si no me necesitas para hacerte la comida, entonces me voy a practicar mis
estiramientos frontales durante un ratito.
—Ooooh, emocionante —bromeó Claire, tratando de ocultar el hecho de que ella
estaba dando saltos por dentro. Esto era fácil. Demasiado fácil. No había esperado que
Lisbeth estuviera tan emocionada por deshacerse de ella.
Justo a tiempo, Matthew se detuvo delante de la casa y tocó el claxon. Claire se
estremeció, esperando que Lisbeth no lo hubiera oído. Ella había visto el coche de
FORO PURPLE ROSE

Matthew antes, y si se asomaba por la ventana para ver quién era, la suerte de
Claire habría terminado.
En los seis segundos que le tomó a Claire cruzar la calzada, diminutas gotas de
sudor se habían formado ya en su frente.
Prácticamente se tiró en el fresco interior del coche.
Matthew sonrió y subió el aire acondicionado aún más. —¿Esta insoportable ahí
fuera, huh?
—Oh dios mío, es de locos. —Claire se inclinó sobre el frio aire y suspiro—. Así 84
que, Hola.
—Hola, a ti también. —la sonrisa de Matthew se amplió—. ¿Tienes hambre?
—Siempre. —Claire se reclinó en su asiento, girándose para mirar hacia su casa.
No había visto a Lisbeth rondando ninguna de las ventanas. Hasta ahora bien.
—Sí, entiendo ese sentimiento. —Matthew se giró hacia el volante—. ¿Te parece
bien Louie?
—Por supuesto. —Su hambre se disipo con la mención de Louie. El comedor
siempre estaba lleno de gente del colegio. Pretender que era normal delante de
Matthew no era difícil, pero la idea de estar rodeada de gente que conocía, la
necesidad de ocultar lo que ella era en realidad le hacía querer hundirse en el
asiento del coche y desaparecer.
Pero ya estaba cambiando en mi fiesta de cumpleaños, y nadie se dio cuenta de nada. Por
supuesto, es mucho más fácil mantener un secreto si no sabes cuál es.
Para ocultar sus nervios, Claire revolvió entre el montón de CD que Matthew había
metido tras el estéreo del coche. Sujeto un disco—. ¿Te importa?
Matthew le echó un vistazo. —¿Estás de broma? Ese es mi grupo favorito ahora
mismo.
Claire le sonrió y puso el disco. Cuando se volvió a echar atrás, Matthew se estiró y
coloco su mano sobre la de ella como si fuera la cosa más natural de este mundo. El
hormigueo que la recorrió a gran velocidad hizo le retener la respiración.
La tercera canción apenas empezaba cuando llegaron al estacionamiento. Claire
tomó aire profundamente.
—¿Estás bien? —Matthew le acarició el dorso de la mano con su pulgar.
—Solo que no quiero apartarme del aire acondicionado, —mintió ella—. Puedo
ayudar con eso, —Matthew abrió la puerta frontal—. Entra. Yo aparcaré y estaré
allí en un momento.
—Oh, uh, gracias. —Claire salió él se había parado tan cerca de la entrada de
cristal que tenía que tener cuidado de no golpearla con la puerta del coche.
FORO PURPLE ROSE

Entró en Louie y se estremeció. No era por la ráfaga de aire frio era porque casi
cada persona que estaba en el restaurante había volteado para mirarla. Todos
siempre miraban cuando alguien entraba en Louie, para ver si era gente que
conocían, pero el escrutinio hizo que el pánico repicara en el pecho de Claire. La
multitud en la congregación no le había molestado después de todo, nadie allí sabía
quién era. De pie frente a una sala llena de gentes que estaban clasificando su
estatus social mientras ella miraba era totalmente diferente.
Un par de personas le saludaron y se forzó a sonreír. Matthew entró tras ella. Se
sintió aliviada cuando él colocó un brazo sobre sus hombros y la guió hacia una 85
cabina. Varias personas se sorprendieron al verlos a los dos juntos, lo que solo
incremento el deseo de Claire de deslizarse bajo la mesa.
Nunca había sido descabelladamente popular. Ser el centro de tanta atención le
hubiera resultado incomodo el año pasado, también. Pero al menos entonces
pensaba que era de la misma especie que los demás. Ella miró con el ceño fruncido
el menú.
La camarera apareció y golpeo el bolígrafo con su libreta de pedidos—. ¿Están
listos?
Cuando pidieron y estuvieron solos de nuevo, Matthew se inclinó hacia atrás
contra el banco acolchado y puso el brazo sobre la parte de arriba. Se le veía
cómodo, familiar. Se veía como si perteneciera allí.
A través del comedor, una mesa de chicas que Claire reconoció del grupo de
porristas miraron fijamente a ella y Matthew. Se las veía horrorizadas.
Con el pulso cayéndole pesadamente sobre los dedos, Claire alcanzó y tocó el
borde de sus orejas, comprobando si tenía pelo.
Su piel era suave.
Oh dios mío. No me están mirando porque saben lo que soy. Actúan así porque Matthew está
aquí conmigo.
Claire se hurgó las cutículas bajo la mesa y echó una mirada alrededor del
comedor. Las porristas no eran las únicas mirando. Cerca del fondo de la sala,
Claire vio a Yolanda Adams. Claire no le había visto desde su cumpleaños.
Yolanda alzó una mano y saludó a Claire, sonriendo. Claire le devolvió la sonrisa,
sintiéndose aliviada y patética al mismo tiempo.
—Así que, uh, ¿Cómo va el futbol? —Era la única pregunta en la que pudo pensar
Claire. ¡Patética, patética, patética! Jugueteo con el papel de su pajita, rompiéndolo en
pequeños trocitos.
Matthew se encogió de hombros. —No mucho, realmente. El entrenador canceló
nuestro dos-en-un-día. Supongo que la junta de educación pensaría que íbamos a
pillar una insolación o algo. Estoy algo preocupado con eso, en realidad. Si no
FORO PURPLE ROSE

tenemos un entrenamiento serio pronto, vamos a apestar cuando empiece la

temporada.
Claire dio un respingo. —Lo siento, pero yo, um… ¿cuándo empieza la temporada
otra vez, exactamente?
—Dos días después de que empiece el colegio. ¿Por qué deberías sentirlo?
Claire se encogió de hombros. —Sólo que parece ser algo que ya debería saber. —
Matthew estiró su mano a través de la mesa y apretó la mano de ella. Los
murmullos en algunas mesas surgieron—. No hay razón por la que tú deberías 86
saber eso. ¿Te ha dicho alguien alguna vez que eres demasiado dura contigo
misma? Aunque, seriamente… —Matthew atrapó su mirada —significaría mucho
para mí si pudieras venir al partido inaugural.
Los latidos de Claire hicieron eco en sus oídos—. No me lo perdería por nada, —
susurró.
La camarera apareció de la nada y dejó los platos entre ellos. Claire acercó uno de
los platos, cogió la hamburguesa, y le dio un bocado.
Una pequeña arruga de preocupación apareció entre las cejas de Matthew—. ¿Estás
bien? Pareces estar muy callada hoy.
—Sí, estoy bien, —dijo Claire—. Solo un poco cansada, supongo.
Oh, y mi madre dijo que no podía verte más y también estoy segura que Kate-Marie Brown
nos hizo una foto con su móvil.
La camarera trajo la cuenta el momento en el que la última patata frita desapareció
de sus platos. Claire se dispuso a coger el dinero que llevaba en su bolsillo trasero,
pero Matthew cogió el recibo antes de que ella pudiera hacerlo.
—Ni por casualidad, —él sonrió y sacudió la cabeza.
Claire se movió incómoda. —Matthew, puedo pagar mi parte.
—Estoy seguro que puedes. Pero esto es una cita, y yo pago.
—¿No es una cita si yo pago? —Claire le disparó, arqueándole una ceja.
Él lo consideró. —No estoy seguro. —Entonces sonrió—. Lo pensaré durante un
rato mientras voy a pagar esto. —Se deslizó fuera de la cabina y caminó hacia la
caja registradora.
Claire sacó un pedazo de chicle de su bolsillo y se dirigió a la puerta del frente. Las
miradas que le perforaban la espalda no le molestaban. Déjales que miren. Podía
pretender ser una chica normal, ¿cierto? ¿Cómo lo llamaban? ¿Esconderse en plena
luz del día? Supongo que voy a tener que hacerme realmente buena en esto.
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 9
Traducido por: silvery, ●• Marta...●• ♥♥

Corregido por: alice_vampire
L
87
os olores que venían del Dumpster eran casi demasiado para ser un oso. La
comida desperdiciada y podrida. El plástico tóxico de las bolsas de basura. El
aroma amargo de una botella de algo que debe haber sido tirado antes de que
estuviera vacío. Aún así, es el mejor lugar para esconderse, en la oscura esquina del valle, pero
lo suficientemente cerca de la puerta de atrás del edificio de apartamentos para tener un fácil
acceso. Respiró lentamente, ignorando el hedor, y obligándose a estar quieta.
Los suburbios eran demasiado sencillos, pero éste, un exclusivo edificio en el centro de la
ciudad, donde los idiotas se sentían a salvo, éste era perfecto. Estaba incluso mejor que una
matanza en plena luz del día.
Dos mujeres llevaban unos tacones imposibles y demasiado perfume que se deslizaba por el
callejón y se metía por la puerta de atrás del edificio, discutiendo sobre de quién era turno de
limpiar el baño. Se tensó, de nuevo comprobando el ángulo de la cámara de seguridad por
encima de la puerta.
Finalmente, vio las farolas al final del callejón iluminar su pelo rubio. Parecía desgreñado
después de un largo día, caminando por el callejón hacia el edificio. Se paró enfrente de la
puerta, dando golpecitos a los bolsillos de su abrigo como si buscara una llave.
Ella pegó un salto vacilando y cerró sus fauces alrededor de su cuello, aplastando su tráquea
antes de que ni siquiera pensara en gritar.
Unos días después Claire había estado en casa de Louie con Matthew, el editor del
Hanover Falls Point hallado muerto. Cada canal de televisión vociferaba la
historia, y en papel se habían dedicado por completo las portadas para él. Había
sido joven, guapo e importante, lo que había hecho que todo el mundo estuviera
incluso más disgustado con su asesinato que con otros.
Claire encontró a Lisbeth en el mostrador de la cocina, mirando el periódico. —
Emily llamó, dijo que no habías contestado en tu móvil.
—No suelo contestar el teléfono cuando estoy durmiendo —apuntó Claire—. ¿Qué
quería? —Quería verte en la cafetería de la Cuarta. Si quieres ir, puedo llevarte
como en una hora o así.
—Eso sería genial. —Claire agarró el mando a distancia, ya cansada de las noticias
repetitivas, pero Lisbeth se lo arrebató.
FORO PURPLE ROSE

—Sólo es trágico —dijo Lisbeth, bebiendo a sorbos su té. Había círculos oscuros
debajo de sus ojos y el ceño de su rostro la hacía parecer cansada.
—¿El editor? —preguntó Claire, esperando a sentarse en el límite del mostrador.
—¡Por supuesto que el editor! —Estalló Lisbeth—. Y no te sientes en el borde del
mostrador. Ya sabes que tu madre odia que hagas eso.
Claire se bajó de vuelta al suelo.
—Vale. Geez. Si hubiera sabido que estabas tan tensa no habría dicho nada. A todo
esto, ¿dónde está mi madre? 88
—Viéndose con un cliente potencial. Estará de vuelta más tarde después de comer.
Y tienes razón. Estoy tensa. No dormí muy bien la pasada noche. —Lisbeth
caminó alrededor de Claire y dejó su taza de té en el fregadero—. Quizás iré a
hacer algunos ejercicios de respiración y a ver si puedo controlarme un poquito
mejor —lanzó a Claire una sonrisa forzada—. Te veo en media hora, ¿de acuerdo?
¿Nos marcharemos después de eso?
—Claro. —Claire jugueteó con el mando a distancia y apuntó a la televisión,
preguntándose cómo lo estaba haciendo Matthew. Si Lisbeth estaba así de
estresada, el Dr. Engle debía de haberse vuelto enloquecidamente nuclear—.
Diviértete respirando y eso.
Claire se sentó en una de las pequeñas mesas en la cafetería en frente de la ventana,
sorbiendo un café de moca y esperando a Emily. La tienda estaba casi vacía. Claire
cerró los ojos e inclinó la cabeza contra la ventana, disfrutando del silencio. La
campanilla de encima de la puerta tintineó y Claire abrió los ojos, esperando ver a
Emily. En vez de eso, entró Victoria. Miró a Claire, la reconoció y entonces pasó
un flash de alerta por su cara en una rápida sucesión.
—Um, hey —dijo Claire con cuidado.
—Hey. Me alegro de verte, Claire. Ha pasado un tiempo —Victoria sonrió, pero su
voz era reservada. Asintió al mostrador—. ¿Vienes a menudo por aquí?
—Bastante. Sip. Estoy esperando a una amiga —Claire se retorció en su asiento.
Era como escapar de uno de sus profesores o algo así. No sabía qué decir, todo lo
que sabía acerca de Victoria era un secreto. Claire no podía preguntar exactamente
por sus trastornos a la hora de acicalarse el pelaje en un lugar público.
Victoria asintió.
—Bien, sería mejor que me vaya. Dale a tu madre un saludo de mi parte.
La puerta se abrió y Emily entró volando en la cafetería, con las llaves del coche en
una mano y su teléfono en la otra.
Claire saludó a Emily con la mano, y después se volvió de nuevo hacia Victoria.
—Se lo diré.
FORO PURPLE ROSE

Victoria le lanzó una sonrisa diminuta y se dirigió a la barra.

Emily se tambaleó hasta la silla que había enfrente de Claire.
—¿Quién es esa? —mantuvo la voz baja, pero Claire sabía que Victoria podía
oírlas.
—Alguien que conoce mi madre —Claire se encogió de hombros. Por el rabillo del
ojo, vio a la mirada de Victoria por encima y hacerle un rápido asentimiento de
aprobación—. Así que, ¿qué ocurre? Tu mensaje de esta mañana era… peculiar.
—Lo siento. No soy exactamente libre para hablar. Mi madre ha estado más cerca 89
de mí que mi maldita sombra desde que decidieron.
La palabra hizo que la boca de Claire se secara. —¿Decidieron? —Se acabó Claire.
Mis padres me van a llevar a casa de mi tía mañana. Pensé que los convencería de
que me dejaran quedarme, pero después de lo que pasó a ese tal Dave McKinney,
están totalmente atemorizados.
Claire se reclinó de vuelta a su asiento, con la tensión anudada en sus hombros.
—Wow, yo… wow ¿Crees que podrías calmarlos de nuevo?
Emily deja salir una amarga y ahogada risa.
—No hay manera. Ambos tenían esa mirada en sus caras cuando me lo dijeron, la
que significa que no les importa estar equivocados, que lo van a hacer de todas
formas—. Sí, entiendo ese parecer —suspiró Claire—. Y bueno, ¿qué vas a hacer?
Victoria pasó por su lado, con una taza de café de papel en cada mano. Parpadeó a
Claire por encima de la cabeza de Emily.
Distraída, Claire movió los dedos en un saludo diminuto.
—Supongo que voy a hacer la maleta —gimoteó Emily—. ¿Vendrás a ayudarme?
—Por supuesto. —Claire alejó su bebida, se sentía demasiado mal por la marcha de
Emily como para acabarla. E incluso peor que eso era el hecho de que en el fondo,
se sentía un poco aliviada. Será mucho más fácil esconderle cosas a Emily si está a cientos
de millas de aquí. Hacía que Claire se sintiera mal pensar cosas como esa… incluso si
fueran verdad.
Pasó una mano por su pelo y se obligó a mirar a la cara resignada de Emily.
—Así que, ¿cuándo vamos a preparar las maletas? Necesito llamar a Lisbeth y
contárselo.
—Ahora, si puedes. —Emily miró por encima de la barra—. Será mejor que
consiga una taza de café civilizado mientras todavía pueda.
Claire cogió el teléfono y llamó a Lisbeth.
Emily sostuvo un top de lentejuelas con el dibujo de un tanque y lo miró con pesar.
FORO PURPLE ROSE

—No puedo imaginar qué simple razón habré tenido para llevar puesto esto en la
granja. Tú estarías bien con él. ¿Querrías que te lo dejara prestado mientras estoy
fuera?
—Claro —dijo Claire, dejando la revista que había estado ojeando—. Gracias.
—No hay problema. Estoy segura de que a Matthew le encantará.
Claire volvió los ojos y Emily dobló una camiseta y se la lanzó.
—¿Qué? —Sonrió Claire—. Sólo creo que las lentejuelas pueden ser como…
arañantes en lo que a Matthew se refiere. 90
—Ooooooooh. —Los ojos de Emily se iluminaron—. ¿Me estás diciendo que has
hecho algo más que besarte con él?
Claire sintió que se sonrojaba. Nunca había tenido un novio de verdad antes, y
aunque siempre había estado dispuesta a escuchar jugada a jugada las sesiones de
descifrado de Emily, en realidad no se sentía con ánimos de contarle a Emily todo
sobre ella y Matthew.
—No, uh —Claire se detuvo.
—Oh vamos, nosotras nos decimos todo ¿no?
Claire se estremeció. Eso solía ser verdad. Ahora, de repente, ella no le decía nada
a Emily. No quería hablar de Matthew y no tenía permitido hablar sobre ser un
hombre lobo. Tener tantos secretos con su mejor amiga, se sentía totalmente
extraño, pero ¿qué alternativa tenía?
—Bueno —admitió Claire— Es increíble besando —era todo lo que podía decir, sin
sentirse asqueada por ello.
—¿El no es uno de esos chicos que mete su lengua en tu garganta?
Claire se retorció. —Um, no…
—Bueno, eso es bueno, Jesús, ¿Recuerdas el años pasado a Darren?
La vergüenza de Claire se desvaneció. —Oh si, el que se encargo de lamer tus
dientes.
Emily asintió con la cabeza y se estremeció. —Sí, Dios, nunca debería haber salido
con él después de ese primer beso. Quiero decir en serio, ¿por qué no me detuviste?
Claire se recostó contra las almohadas. Ahora estaban de vuelta en terreno seguro,
Sujeto–racional.
Solo tengo que mantenerla hablando sobre sí misma eso es todo. Como, para el resto de
nuestra amistad.
Claire reordenó los montones de ropa de Emily que eran como una mezcla de sus
dos últimas relaciones. Se sentía totalmente falsa... como un presentador de tv
FORO PURPLE ROSE

tratando de hacer hablar a un famoso pero al menos Emily se veía feliz. Eso era
algo. Más o menos.
Esa tarde, Claire yacía sobre su cama totalmente hecha, completamente exhausta.
Había pasado el resto de la tarde haciendo ruidos simpáticos, mientras Emily
llenaba sus maletas con sus cosas y ventilaba acerca de sus padres. Había sido un
gran alivio cuando por fin Lisbeth fue a buscarla, sobre todo porque Isabel se
encontraba de un estado de ánimo mucho mejor.
El teléfono móvil de Claire sonó, y ella cerró los ojos esperando que fuera
91
Matthew. Rut no era. Era Zahlia.
—¿Hola? —Claire respondió mientras se sentaba.
—Hey, Claire. Soy yo. ¿Es mal momento?
—No, no estoy ocupada. ¿Qué pasa?
—Me preguntaba si aun ibas a ir a la práctica de esta noche. No queda mucho hasta
la próxima luna llena, ya sabes. Si está bien para ti, yo pensaba que nos podíamos
reunir en el claro, ¿a eso de las once?
Claire comenzó a calcular en su cabeza. No funcionaría. Tendría que estar lista
para ir a las diez y media y no había ninguna posibilidad de que su madre estuviera
durmiendo a esa hora. Y ella no tenía precisamente pensado decirle a su madre
donde iba. —En realidad es un poco temprano. ¿A medianoche, vale?
Zahlia se echo a reír. —Supongo que Marie aún no está demasiado interesada en
descubrir cosas antes de lo previsto.
—En cierto modo, yo no le he dicho nada al respecto, —admitió Claire.
—Eso es probablemente algo inteligente. Ella se marcharía lejos, y entonces tú
estarías atascada esperando, hasta que te transformaras completamente antes de
poder perseguir incluso tu propia cola.
Claire parpadeó. —Um, ¿cuando se recibe una cola? —su voz sonó ahogada.
—No lo sé. Tal vez esta luna, tal vez la próxima. Yo lo estaba usando como un
ejemplo.
—Oh. Eso suena, eh... interesante. Sí, bueno, te veré en el claro, entonces.
—Suena bien. —Zahlia colgó sin despedirse.
Claire se apoyó en un tronco de árbol en bruto, todavía en su forma de lobo, y
jadeaba en la oscuridad del bosque.
Ni siquiera podía empezar a oler el rastro que había estado siguiendo, ella había
perdido el venado. Una vez más. Detrás de Claire. Zahlia removió sus pies.
—Parece que está teniendo problemas para concentrarse.
FORO PURPLE ROSE

Al sonido de la voz humana de Zahlia, Claire saltó. No había esperado que ya

hubiera revertido su transformación. Claire se dejó caer contra la corteza, agotada.
Habían estado buscando durante horas, pero Claire no había alcanzado más de una
ardilla.
—Lo sé. —La miseria en la voz de su vergüenza— Lo siento.
Zahlia tiró de los pantalones cortos y camiseta sin mangas, que para correr había
estado llevando a través de los bosques. —¿Por qué lo sientes? Todavía eres nueva
en todo esto. Eso es todo el punto, debes practicar. Lo harás mejor, te lo prometo. 92
Sólo se necesita alguien que le ayude. Eso es lo que hacen los amigos, ¿no?
Claire pensó en Emily, su mejor amiga en el mundo entero. Quién no podía
ayudarla porque ella no tenía ni idea de lo que realmente estaba pasando. Toda una
vida de no poder decirle a nadie toda la verdad sobre Claire, era deprimente como
el infierno.
—¿Estás bien? —Zahlia se acercó más.
Claire se encogió de hombros. —Supongo. —Se mordió el labio—. Es duro.
Zahlia ladeó la cabeza hacia un lado. —NO estamos hablando de caza más,
¿verdad?
Claire negó con la cabeza.
Zahlia se encogió de hombros y se sentó.
—Te prometo que esto se pondrá mejor. Este es el momento en que tienes el
guardar secretos.
—simplemente no puedo creer que ningún ser humano sepa nada, ¿sabes?
—Bueno —titubeó Zahlia—. Hay de vez en cuando un ser humano que sabe.
La emoción se deslizó hasta la columna vertebral de Claire. —¿En serio?
—Es muy raro, pero a veces cada mucho tiempo, se dan unas extrañas
circunstancias y revelamos las identidades a un ser humano. Tal vez porque
necesitamos algo de ellos o porque nos descubren accidentalmente. Si están
dispuestos se convierten, en protectores del secreto, Guardianes. No he conocido
ninguno todavía, pero si existen. Creo que su tátara–abuela o alguna de ellas tenían
un gardien en su propiedad de Francia. Pero no estoy segura, deberías preguntarle a
tu madre sobre ello.
Claire aplastó una hoja seca entre los dedos hasta convertirla en polvo, pensando:
—Por lo tanto, eran ellos, ¿amigos de ella?
Zahlia negó con la cabeza. —Eso sería poco probable, demasiado arriesgado para
todos. Además, ¿que tenían en común aparte del secreto? Quiero decir un gardien
del secreto es humano. Así que, ¿a quién es que tú deseas decírselo?
FORO PURPLE ROSE

Claire parpadeó, sorprendida. —¿Cómo lo sabes?

—Porque todo el mundo se siente así al principio.
—Sí. Supongo que tiene sentido. No se pero parece que todo esto sería mucho más
sencillo si pudiera hablar sobre ello a mi mejor amiga. —Dijo Claire empujada por
una ola de emoción. Que la hacía sentir opresión en el pecho.
—Tú sabes que no puedes, ¿no? No funciona de esa manera, y además piensa
Claire, como cargar con este secreto te hace sentir aparte de los beneficios y
capacidades que vienen con él. 93
Claire no pudo detener por más tiempo las lágrimas.
—Hey, no llores. Vamos, piensa en ello. Además del hecho de que está prohibido,
que sería un enorme riesgo para nosotros. ¿De verdad quieres que tu mejor amiga
sufra, como tú estás sufriendo? No solo sería peligroso, Claire. Sería
tremendamente egoísta.
La mandíbula de Claire se tensó, y su voz era un poco más que un susurro. —Yo
no lo había pensado de esa forma —se pasó una mano por sus ojos cansados—.
¿Podemos dejar de cazar, por esta noche? Estoy totalmente agotada.
Zahlia se puso en pie y se estiró. —Bien por mí, en realidad estoy bastante cansada,
también. ¿Quieres que corra hasta casa contigo?
Claire negó con la cabeza. —No, lo tengo. Pero gracias por reunirte conmigo,
hablar y por todo.
Zahlia le apretó el hombro. —Tuve un buen momento. Tú piensas por ti misma,
Claire, y eso me gusta. Me gusta mucho.
El cumplido hizo que algo en el pecho de Claire se calentara.
—Te llamare pronto.
Zahlia se transformó en el acto, su piel oscura se mezclo con el ambiente de
alrededor. Claire recogió los pantalones cortos y la parte de arriba que había
quedado y se los entrego al lobo, que los sujeto con la boca y agito la cola en un
símbolo de gracias y se fue hacia el bosque.
Claire se volvió y salió cojeando hacia casa, agotada en todos los sentidos de la
palabra.
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 10
Traducido por: Emii_Gregori, Masi y Aya001

C
94
uando Matthew llamó al día siguiente y sugirió ir al mini–golf, Claire
saltó ante la posibilidad de una distracción. Matthew pareció algo
sorprendido cuando ella le dijo que no la recogiera, pero accedió
encontrarla allí.
Su madre iba a estar toda la tarde mirando unos lentes nuevos para la cámara.
Claire sólo le dijo a Lisbeth que se encontraría con algunos amigos, y ella de mala
gana estuvo de acuerdo con llevarla. A pesar del calor, el estacionamiento “Tiro al
Hoyo” estaba repleto de parejas y familias, Lisbeth estaba centrada en no golpear a
nadie, y no tenía calma para analizar con quien se encontraría Claire. Además, ni
siquiera podía ver la parte delantera del aparcamiento.
Claire se apoyó en el mango de su palo de golf y observó como Matthew golpeaba
ligeramente la bola a través de las láminas del molino de viento. Ella se cubrió los
ojos con las manos.
—Otro hoyo en uno —murmuró Claire, marcándolo en la tarjeta de puntuación—.
Si el fútbol no es lo tuyo, tal vez deberías entrar en el equipo de golf
Matthew sonrió. —De ninguna manera ¿has visto a los tipos del equipo de golf?
hombre, hablan como tensos. De todos modos, soy hábil en el golf en miniatura.
Pero en realidad soy una mierda en esto.
—Lo dudo —Claire le devolvió la sonrisa. Se apoyó contra la valla que los rodeaba
y esperó a que la familia que estaba delante terminara el hoyo safari–temático que
venía luego. Claire ahogo un bostezo.
—¿Despierta hasta tarde? —preguntó Matthew.
Claire buscó en su voz para ver si en su pregunta había algo más que una simple
charla, pero no había nada. Se obligo a relajarse. —Sí, algo así… Yo estaba
mirando algo y perdí la noción del tiempo —una afirmación verdadera. Hasta
ahora, todo bien.
—¿Era Late Show? —Preguntó Matthew, secándose el sudor de la frente.
—Uh, no, era algo en TiVo —Claire cambio de posición inquietantemente.
—¿Una película?
FORO PURPLE ROSE

Ella se podría decir que él estaba solamente charlando, pero no quería mentir más
de lo necesario sobre aquello que era complicado de recordar. Era más fácil
cambiar de tema. —¿Qué me perdí en Late Show?
—Ah, hombre, tenían al tipo más gracioso. Hizo una rutina completa sobre la
diferencia entre los chicos y sus perros…
—¿Cuál es la diferencia entre los chicos y sus perros? —interrumpió Claire, ansiosa
por comenzar un nuevo tema.
—Ok, ¿sabes que los perros siempre utilizan sus patas para rascarse detrás de las 95
orejas?
Claire asiente, luego hizo una mueca cuando Matthew comenzaba a cuestionarse.
—Bueno —el admitió—, era más divertido cuando el comediante lo hizo.
Ella rodó los ojos. —Sí, bueno, eres afortunado de que no me gustes por tu
habilidad de hacer bromas.
—Tengo suerte de que te guste, punto. —Él se echó a reír envolviendo su mano con
la de ella.
Claire se incomodó, segura de que él se alejaría ya que su palma estaba húmeda,
pero pareció no importarle.
Sería tan agradable ser capaz de controlar la temperatura aún cuando no estuviera
convertida en un lobo. Ella estaba empezando a odiar la sensación pegajosa de la
piel humana, odiaba la constante preocupación de cómo el calor la hacía verse,
pero no le quedaba otra, al menos hasta que pudieran volver al coche de Matthew
con aire acondicionado.
Con los dedos entrelazados se dirigieron al siguiente hoyo. Matthew se inclinó y le
dio un beso rápido antes de poner la bola en el desgastado césped artificial. —
Ahora —él anunció—, prepárate para sorprenderte.
Claire dio un paso atrás para darle algo de espacio. Tenía la sensación de ser
normal. Estar con Matthew siempre la hacía sentirse así. Una burbuja de felicidad
creció en su pecho. Ella se recordó a sí misma que Emily se iba a la casa de su tía
esa misma tarde. Pero no hacia ninguna diferencia en su estado de ánimo. ¿Cómo
podría? Matthew el chico más hermoso que ella haya visto la acababa de besar
enfrente de muchas personas.
—¡Engle! —la voz hizo eco desde la colina detrás de Claire y Matthew. Matthew se
inclinó sobre la valla, buscándola entre la multitud.
—Doug! ¿Qué pasa? —gritó Matthew.
—¿Vienes a mi fiesta?
—Si, por supuesto.
—¡Genial!, ¿traerás a Claire?
FORO PURPLE ROSE

Claire miró por encima de la valla. Doug, a quien reconoció del equipo de fútbol,
hizo un gesto hacia ella.
—Hey, Claire —la sonrisa en su rostro parecía amigable.
—Eh, Doug —dijo ella, incapaz de mantener la felicidad en su voz.
Matthew se volvió para mirarla. —No te molesta, ¿verdad? Es a una semana del
viernes. Podemos ir una hora, y luego irnos a hacer lo nuestro.
—Sí, claro suena bien —escondió una mueca de dolor. Tenía que haber una forma
de llegar sin que su madre se enterara. 96
Matthew se recostó sobre la valla. —Estaremos allí.

La pareja detrás de ellos comenzó a impacientarse, y Claire apresuró a Matthew
hasta el siguiente hoyo. Ellos pasaron la media hora haciendo bromas sobre el golf
y engañando a la tarjeta de puntuación.
Era la mejor tarde que había pasado Claire con alguien en mucho tiempo y ella
todavía estaba pensativa cuando Matthew llego a su calle.
—Um, ¿por qué no me dejas aquí y tú sigues hasta tu casa? —sugirió Claire.
Matthew se volvió hacia ella. —¿Por qué no te dejo en tu casa? Es un camino muy
largo y no hay ninguna razón por la que tengas que caminar tanto.
—Um, sólo que podría ser más fácil, es todo. —Podía ver el buzón del correo
adelante. Si él la dejaba en la entrada y Lisbeth veía el coche, Claire estaría muerta.
Se retorció en su asiento.
Matthew frenó suavemente, moviendo el coche fuera de la carretera y frente a la
calle de Claire.
—Está bien, nena, ¿Qué pasa allá? En serio. —Se volvió para enfrentarse a ella.
Claire puso las manos sobre su regazo. Ella quería hacer algo, decirle que el camino
de la entrada estaba siendo repavimentado o que Lisbeth tenía la peste. Pero
cuando abrió la boca, lo único que podía pensar era en la verdad.
—Es mi mamá —suspiró—. Ella me dijo algo como que no quería verme contigo
nunca más.
Matthew abrió los ojos. —Pero, ¿Por qué? Ella ni siquiera me conoce, a excepción
en tu fiesta de cumpleaños.
Claire bajó la vista y observó a la palanca de cambio entra ellos. Tenía miedo de
que si lo miraba, ella terminaría diciéndolo todo.
—Oh, dios mío —susurró Matthew y Claire volvió la mirada hacia él—. Es mi
papá ¿verdad? Ella está asustada de mi papá, supone que estar conmigo te pone en
peligro.
Esta tan cerca de la verdad que Claire casi se ríe. Se mordió el labio y asintió.
FORO PURPLE ROSE

—Sí, eso es más o menos —dijo ella, aliviada de no estar mintiendo, aunque
Matthew no supiera qué clase de peligro representaba su padre para Claire.
Matthew suspiró. —Así que es por eso que no me dejabas recogerte.
Claire asintió. —¿Estás molesto?
Matthew le puso una mano en la mejilla. —Claro que no. Nuestros padres, no son
nuestros problemas. No quiero que te metas en problemas por esto, sin embargo…
Claire se inclinó, más cerca de él, respirando su olor a jabón y al sol. — Pienso que
vale la pena meterme en problemas un poco más —dijo ella cerrando sus ojos. 97
Cuando Matthew habló, su boca estaba tan cerca de la suya, que ella podía sentir la
vibración de sus palabras contra sus labios. —Entonces nosotros seremos muy, muy
cuidadosos.
Claire habría dicho algo de estar de acuerdo, pero su boca estaba demasiado
ocupada. El beso la consumió, expulsando fuera cada pensamiento que no fuera de
Matthew. Ellos se apretaban cada vez más juntos, y Claire se estremecía mientras
sus dedos trazaban un camino hacia debajo de su espalda y alrededor de su cintura.
La palanca de cambios estaba obstruyendo incómodamente su camino, y cuando
Claire intentó desplazarse lejos de ella, Matthew paró, apoyando su frente contra la
suya.
—Ok, es plena luz del día y nosotros estamos en un lado de la carretera —dijo él
con voz forzada.
—Es una carretera muy privada —jadeó Claire.
Él se rió, con una lenta y ronca risa, que fue directa al corazón de Claire. —Sin
embargo, esta es probablemente una muy mala idea. —Él la besó otra vez, sus
labios bajando hacia el borde de su mandíbula—. ¿Puedes realmente encontrar el
camino para ir a la fiesta de Doug? —Su voz estaba llena de preocupación—. Yo
no quiero convencerte para que hagas algo con lo que estás incomoda.
—No me lo perdería por nada del mundo —ella susurró.
—Está bien —él se enderezó y le sonrió—. Entonces sal fuera de mi coche antes de
que nos atrapen, y te llamaré más tarde.
Claire abrió la puerta, plenamente consciente de que tenía una ridícula sonrisa en
su cara, y no la preocupaba en absoluto. —Eso suena fabuloso.
Mientras caminaba hacia la resplandeciente y calurosa entrada, Claire oyó al coche
alejarse. Cuando abrió la puerta de entrada, Lisbeth miró hacia arriba desde el sofá,
donde estaba ordenado una pila de papeles.
—Oh, no oí ningún coche —dijo ella, la sorpresa cruzando su cara.
Claire se encogió de hombros, no confiando en ella misma para decir alguna cosa.
FORO PURPLE ROSE

—Así que, ¿Te divertiste? —preguntó Lisbeth.

—Sí, nosotros nos lo pasamos muy bien. Pero hacía demasiado calor. Voy a ir a
nadar, si no te importa.
—Está bien. Podría unirme a ti en cuanto termine con esto. —Lisbeth regresó a sus
papeles y Claire fue como flotando por las escaleras. Ella casi no había tenido que
decirle a Lisbeth una total mentira… Era sólo cuestión de hacer ver a la gente sólo
un lado de la verdad, eso era todo.
Claire estaba tendida a los pies de su cama, haciendo zapping entre los canales, 98
cuando alguien llamó a su puerta. Su pelo estaba todavía húmedo por la natación, y
el olor químico del cloro le producía cosquillas en la nariz. —Pasa —Claire dijo
pensando que era Lisbeth.
La puerta se abrió y su madre entró. Ella cerró la puerta detrás de ella. Claire tragó
fuerte.
—Hola —dijo ella, intentando sonar natural.
—Tenemos que hablar —Ella se sentó en el banco de en frente del tocador de
Claire.
Oh, mierda.
Claire se incorporó y se abrazó a sí misma.
—Has visto a Matthew otra vez, ¿verdad? —El brillo duro de sus ojos hacía que
Claire se estremeciera.
—¿Por qué dices eso?
Su madre enderezó los puños de su camisa. —Este no es momento para juegos. Sé
que saliste de la casa ayer por la noche. Tú no regresaste a tu habitación hasta
después de las cuatro de la mañana. Explícate.
El alivio se precipitó a través de Claire. Bien. Esto lo podría manejar.
—Tienes razón. Yo no estaba aquí. Pero yo no estaba con Matthew.
Su madre clavó los ojos en ella, esperando.
—Yo estaba con Zahlia, ella estaba ayudándome, practicando conmigo para que yo
esté preparada para la próxima luna. Llámala y compruébalo si no me crees. —
Claire cruzó sus brazos delante de ella.
Su madre apretó los labios. Claire podía decir que ella estaba furiosa, pero también
podía oler confusión, brillante y casi eléctrica, viniendo de ella.
—¿Tú estabas practicando? Pero si tú todavía no has completado tu
transformación. ¿Qué estarías practicando?
Claire se encogió de hombros. —Cazando, un poco. Y algunas otras cosas que ella
me mostraba como hacer. No es gran cosa, mamá. No iba a decírselo a nadie más
FORO PURPLE ROSE

tampoco, pero no quiero parecer una idiota cuando me transforme, y eso es

exactamente lo que ocurrirá si no sé cómo hacer las cosas.
—Te dije que yo te enseñaría cuando fuera el momento adecuado. Deberías
haberme escuchado. Zahlia no es el tipo de influencia por la que tú te deberías
haber orientado para tu transformación. Quiero que te veas menos con ella. Yo no
puedo ordenártelo, sólo Beatrice puede hacer eso. Pero estoy preocupada de que
ustedes dos hayan crecido demasiado cercanas. Esto no es sólo sobre ti, ¿entiendes?
Si tus relaciones llegan a convertirse en demasiado cercanas, es un riesgo para la
manada. Cuanto más nos asociamos con otra persona fuera del grupo de la 99
manada, hay más posibilidades de ser descubierto.
Claire frunció el ceño. —Bien, me encontré con Victoria cuando estaba con Emily
en la cafetería y ella no actuó como si yo fuera una extraña o algo similar.
Marie apretó su mandíbula. —¿Por qué no me lo dijiste antes? ¿Qué ocurrió? ¿Qué
le dijiste?
Cada pregunta arañaba contra los nervios de Claire. Ella estaba realmente cansada
de la versión personal de su madre de la Inquisición.
—No pensé que fuera algo importante. Ella dijo hola, yo dije hola. Le conté a
Emily que Victoria era alguien que conocía, lo que no fue precisamente ir muy
lejos, ya que tú sabes todo más o menos. Victoria no actuó como si yo hubiera
metido la pata, así que no sé porque te alteras así.
—Yo no estoy alterada, como tú tan elocuentemente dices. Estoy intentando
protegerte. Cualquier interacción de la manada en el mundo humano es una
ocasión para tener precaución. ¿Qué pasaría si alguien de arriba supiera algo? Si
ellos llegaran a sospechar, podrían informar al FHPA. Y eso sería desastroso. ¿Lo
ves? Esto es por lo que yo no creo que debieras ser tan amiga de Zahlia. Es
demasiado fácil cometer un error.
Claire estrechó sus ojos. —¿Pero… qué me dices sobre Victoria y Beatrice? Ellas
son muy cercanas.
Su madre se rió suavemente y se apoyó sobre el poste de la cama. —Eso es verdad,
pero es que ellas son madre e hija.
—¿Por qué la madre de cada una no forma parte de la manada? Quiero decir, tú y
yo estamos emparentadas, Victoria es hija de Beatrice, pero Zahlia, Judith y
Katherine, están ellas solas.
—Judith y Katherine, se mudaron aquí hace años, después de que sus propias
madres murieran, las manadas de sus áreas eran demasiado pequeñas para que
pudieran sobrevivir. La madre de Zahlia solía pertenecer a nuestra manada. —La
madre de Claire retorció el brazalete astillado en su muñeca, sus cejas se hundieron
hacia abajo sobre sus ojos—. Su madre era la segunda al mando de Beatrice en
nuestra manada, y Zahlia estaba por derecho detrás de ella. Pero entonces… bueno,
FORO PURPLE ROSE

algo ocurrió, y ella dejó la manada para convertirse en un lobo solitario, un seule.
Zahlia también pagó por la deshonra de su madre perdiendo su propia posición. Yo
me convertí en la segunda al mando.
Claire parpadeó ante la sorpresa —Wow, ella nunca me ha contado nada de eso.
—Imagino que hay muchas cosas que Zahlia no te ha contado. Lo cual sería una
razón más para que mantuvieras las distancias respecto de ella.
—Pero ella es la única que ha contestado a mis malditas preguntas. ¡Yo no puedo
hacer esto por mí misma, y tú nunca quieres ayudarme! Quiero decir, Victoria tiene 100
a Beatrice, pero yo… —Claire cerró la boca, dejando en el aire el resto de la frase.
—Nosotras nunca hemos sido tan cercanas ¿verdad? —Una mirada nostálgica
cruzó la cara de Marie.
Claire se encogió de hombros, bajó la mirada hacia sus manos. —Supongo que no.
—Es difícil, criar a otro mientras este siempre se esconde, tienes razón, yo soy tu
madre y lo creas o no, quiero ayudarte. Pero sólo cuando sea el momento
adecuado, Claire. Y en este preciso momento, la mejor ayuda que puedo ofrecerte
es avisarte de que pongas distancia entre tú y Zahlia.
—Pero no es una orden.
—No por ahora, pero si tengo que ir a Beatrice, iré. Entonces, ¿Te unirás a Lisbeth
y a mí para la cena de esta noche?
—Sí, supongo.
—Bien, te veré entonces.
Su madre dejó la habitación y Claire se giró sobre su estómago, hundiendo su cara
en el edredón. Algunas veces ella realmente, realmente odiaba a su madre.
Justo antes de la cena, el coche de Emily se detuvo en la casa. Claire bajo corriendo
las escaleras para encontrarse con ella. —¡Estás aquí! Pensé que iba a tener que
despedirme por teléfono.
Emily sonrió. —Les dije que si no podía venir a verte yo iba a hacer algo horrible.
—¿Cómo qué?
—No lo sé —Emily se encogió de hombros—. Ellos no preguntaron. Están
demasiado alterados para ser lógicos en este momento. Sin embargo, sólo puedo
quedarme un minuto.
Las lágrimas llenaron los ojos de Claire y se sorbió la nariz. —No puedo creerme
que realmente te vayas a ir.
Emily miró para arriba hacia el techo y parpadeó. —No es que quiera. Oh Dios
mío, no voy a llorar. Tengo puesto demasiado rímel para empezar a llorar.
FORO PURPLE ROSE

Claire apretó fuertemente sus ojos, luchando por controlarse. —Quiero decir, que
ey, no es como si nosotras no fuéramos a hablar ¿No?
—Les hice a mis padres cambiar mi tarifa de teléfono por tarifa plana —dijo Emily
orgullosamente—. Ok, tengo que irme. Sólo vine a darte un abrazo.
Claire rodeó con sus brazos a su mejor amiga ¿Cómo de diferente sería ella una vez
que Emily regresará?
¿Qué pasaba si las cosas nunca fueran otra vez como en este momento?
—Ey, dije un abrazo, no quebrarme las costillas —dijo Emily, enderezándose y 101
forzando una sonrisa—. Llámame, ¿vale?
—Lo haré.
—Así que…
—No lo digas. Sólo vete.
—Sí, tienes razón. Mejor así. —Emily se puso sus gafas de sol y se dirigió hacia el
coche.
Claire la vio irse. Un nudo en su garganta haciéndose cada vez más grande a cada
paso que Emily daba.
No quería mirarla alejarse. Tomando los escalones de dos en dos, Claire huyó por
ellos a su habitación, donde podía desmoronarse en privado.
Tres días después, Claire de pie en su habitación, estaba colocando ropa sucia en
montones. Conseguiría salir de su cama para la tarde, ya que había estado
encerrada en casa durante casi setenta y dos horas, intentando hacer que su madre
sospechara menos. Lisbeth había estado tan emocionada de verla cuando aún era
por la mañana, que había hecho tortitas.
Sonó el teléfono y Claire miro la pantalla. Mierda.
—¿Hola? —se abrazó a sí misma.
—Muchas gracias —resopló Emily.
—¿Disculpa? —como siempre, Emily iba tan rápido que Claire no podía seguirle.
—Bueno, deberías. ¡He estado aquí atrapada durante casi una maldita semana y no
me has llamado ni una vez! ¿Qué tipo de mejor amiga eres tú?
Claire dio un respingo. —Lo siento. Se me pasó el tiempo, supongo. Las cosas han
estado un poco alocadas por aquí.
—Gracias por restregármelo. Tú estás en medio de toda la emoción, y yo aquí
atrapada en un campo de vacas sin conexión a Internet.
Justo en medio de toda la emoción. Tío, no tenía ni idea de lo cerca que estaba de
la verdad.
FORO PURPLE ROSE

—¿Está muy mal, huh? —pregunto Claire.

—Oh, Dios Mío, ellos tienen el almanaque de los granjeros en la mesa de café,
como si fuera la maldita Biblia o algo así. Mi tía cocina cosas con manteca de
cerdo, Claire. Manteca de cerdo. ¿Tú sabes lo que es eso? Y esta mañana —ella
gimoteó—, había un ratón en el baño.
Emily sonaba tan patética, pero Claire no pudo evitar pensar lo pequeños que
realmente eran los problemas de su mejor amiga. Emily no se había convertido en
un animal. Nadie le estaba dando caza. Y el mayor secreto de todos los que tenía
102
era el hecho de que tenía un paquete de cigarrillos escondido en el bolsillo de una
vieja bata de baño.
No importaba lo mucho que Claire quería sentirse mal por Emily, los celos la roían
por dentro, comiéndose cualquier habitación que pudiera tener para la simpatía.
—¿Claire? ¿Hola? ¿Estás ahí? ¡Maldita sea!
—No, quiero decir, sí, estoy aquí. Todavía tienes señal.
—Gracias a Dios. Tengo que sentarme encima de la mesa de la cocina y estirarme
hacia la ventana para conseguir dos estúpidas barras.
Probablemente tendré que ir a un jodido quiropráctico si mis padres se deciden
alguna vez a dejarme volver a casa.
—¿Alguna oportunidad de que eso ocurra? —preguntó Claire.
—No lo creo —gimió Emily—. No hasta que cojan al hombre lobo, de todas
formas. Lo juro, odio esa cosa incluso más que el Dr. Engle.
Claire se hundió contra el poste de la cama. No sabe lo que está diciendo. Si lo
supiera, no se sentiría de esa forma en absoluto. Claire luchó contra el impulso de
contarle a Emily que es lo que estaba pasando.
Lo único que se lo impedía eran los recuerdos del último año, cuando Emily
arruinó dos fiestas sorpresas separadas porque no se podía mantener callada.
—Así que, ¿hay algo sobre estar viviendo con tus tíos que no apeste? —preguntó
Claire, ansiosa por dejar el tema.
—Bueno —evadió Emily—, podría haber una pequeña cosa.
—¿Esa cosa podría tener dos piernas y un hoyuelo?
—Si por las dos piernas, no en lo del hoyuelo —admitió Emily—. Su nombre es
Dan… no sé, Claire, él es tan… sano. Es atractivo y divertido y nos conocimos
porque en realidad abrió la puerta para mí, pero… es tan raro. Quiero decir, cuando
salimos a cenar ayer noche, tomó leche con su cena. Leche entera. Y llama a su tío
“señor”. Sólo no sé si es mi tipo.
—¿Pero te gusta?—preguntó Claire.
FORO PURPLE ROSE

—Sí, me gusta —suspiró Emily.

Aunque hacia días que no hablaba con Emily, los siguientes veinte minutos
pasaron volando. Escuchando a su amiga debatir sobre los pros y contras de liarse
con un chico que no sabía quién era 8Chagall y no se había perforado nada iba más
allá de lo que cualquier cosa tenía que ver con Claire, que no podía pensar en que
decir. Que era especialmente extraño, ya que las dos habían tenido esa misma
conversación cada vez que a Emily le gustaba un chico nuevo. Claire no se había
sentido tan anormal desde la primera noche que se transformó, y empezó a
pasearse por la habitación, intentando librarse de ese sentimiento. 103
—Claire, tengo que irme. Mi tía quiere poner la mesa, y estoy sentada encima de
ella.
Claire cerró los ojos en un silencioso gracias. —Lo siento, em. Mantenme
informada, ¿de acuerdo?
—Sí, sí, sí.
Emily colgó y Claire se dejó caer en la cama, la tensión escapándose de su cuerpo.
Suspiró y se sentó para acabar de colocar su ropa sucia. No importaba cuanto
deseara que las cosas fueran normales de nuevo, simplemente no iba a pasar.
Casi paso una semana, y Hanover Falls respiraba un colectivo alivio. Nadie más
había sido asesinado. Había pasado casi un mes desde la muerte del editor, y en las
noticias nocturnas se pasaron la mayor parte del tiempo hablando de la sin
precedentes ola de calor a la vez que cubrían las muertes sin resolver.
Desde su discusión sobre Zahlia, Claire había estado evitando a su madre todo lo
posible, pretendiendo que las cosas estaban bien, pero esa misma tarde, mientras
Lisbeth estaba en el supermercado, Marie la detuvo en la cocina.
—Tenemos que hablar, chérie.
—Hey, hace años desde que salí de la estúpida casa, mucho menos desde que he
visto alguien que no quieres que vea. No he hecho nada malo.
—No he dicho que lo hayas hecho, Claire. No hay razón para saltar a conclusiones.
—Entonces, ¿Qué pasa?—pregunto Claire. Estaba ansiosa por salir de la cocina y
de la minuciosa mirada de su madre.
Su madre se sentó en la 9isla.
—Sabes que noche es el próximo martes, ¿no?
El corazón de Claire se aceleró. —Es luna llena.
8 Chagall: Pintor francés de origen bielorruso.

9 Isla: se refiere al grupo de encimeras del centro de algunas cocinas. Dándole un aspecto de isla.
FORO PURPLE ROSE

—Sí. Y quiero prepararte un poco para la reunión. Será… un poco diferente a como
es normalmente. —Su madre cogió una goma del pelo de la encimera de granito y
la empezó a estirar entre sus dedos—. Es momento de que nuestra manada se
expanda. Victoria ha tenido… —se aclaró la garganta—, ella ha encontrado a un
hombre. Está embarazada. Sabremos este domingo si ella tendrá Uno Nuevo —la
madre de Claire se apretó un hombro.
—¿Qué quiere decir? Si está embarazada, tendrá un bebé, ¿verdad? —Claire asomó
el labio inferior en confusión.
104
La preocupación pareció aumentar en el rabillo de los ojos de su madre —No
necesariamente. Si está embarazada de un hombre, el feto podría no soportar el
estrés de su transformación, y podría interrumpir el embarazo.
—Quieres decir… —Claire dejo la pregunta en el aire.
—Si es un niño macho, entonces Victoria perderá al bebe. Si es Uno Nuevo lo que
lleva en su útero, entonces su embarazo proseguirá. —Su madre retorció la goma
elástica en sus dedos.
—¿Cuánto tiempo toma después de que ella cambie? Si es un niño, quiero decir.
—Empieza inmediatamente.
La boca de Claire se abrió. Jesús. La idea de tener que ver a Victoria perder a su
bebé le provoco una espiral de arcadas. Intento cubrir su shock. —Así que, ¿Qué
diferencia hay si es una niña? ¿Cómo lo sabe su cuerpo?
Su madre se encogió de hombros. —No podemos estar seguras. Nuestras leyendas
dicen que la Diosa sabe y protege Su propio Nonato. Pero quizás es hormonal,
químico.
Claire pensó durante un momento. —Todo el mundo… quiero decir, ¿todos
tenemos que tener un bebe? ¿A la larga?
Su madre sacudió la cabeza. —No. Muchas de nosotras tenemos un hijo. Pero no
todas. La Diosa tiene Sus propios planes para cada una de nosotras.
El conjunto de la boca de su madre y la rigidez de sus hombros le dijo a Claire que
el tópico estaba fuera de la conversación.
—Bien, gracias por decírmelo, creo. Victoria debe estar muy nerviosa, ¿huh?
—Estoy segura de que lo está. Bueno. Tengo trabajo que hacer. Intenta no dejar un
enorme desorden para Lisbeth aquí, ¿hmm? —se deslizó del taburete y se dirigió a
las escaleras.
Claire se inclinó sobre la nevera y suspiró. Las cosas simplemente se estaban
poniendo cada vez mejor.
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 11
Traducido por: ●• Marta...●• ♥♥, Masi y Aya001

L
105
a mañana siguiente. Claire encuentro a Lisbeth fuera de la piscina,
tomando el sol con un libro sin abrir en la mesa junto a ella. Cuando
Claire se sentó a su lado, Lisbeth levantó sus gafas de sol.
—Hey, ¿qué pasa?
Claire vaciló, con la esperanza de que su nuevo método de contar gran parte de la
verdad tanto como le permitiera trabajarla de nuevo. —No mucho. Bien, algo,
realmente. Me invitaron a la fiesta del viernes por la noche en la casa de Doug
Kingman y quería saber si podías llevarme.
Lisbeth la miro de reojo. —Ese nombre me suena familiar.
—Él fue al colegio conmigo. No pasamos mucho tiempo junto el año pasado
pero… —Claire se calmó
—¿Pero? —Lisbeth levantó las cejas y sonrió—. Oohh! Te gusta ¿no?
Claire no pudo evitar una sonrisa. Lisbeth le acababa de dar la tapadera perfecta.
—Um, si —dijo Claire, con la esperanza, de que sonase como una confesión. Y no
era como si a ella no le gustase Doug, es que no lo conocía también.
—Matthew-schmatthew, —Lisbeth se rió—. No ha llegado hasta más allá que él
en ningún momento, ¿huh?
Claire se encogió de hombros. Si decía algo, haría sospechar a Lisbeth.
—¿Pero, puedes llevarme a la fiesta?
—Sí, puedo hacerlo. ¿A qué hora comienza?
—A las siete y media —una sonrisa se extendió por la cara de Claire.
—¿Acabara antes de que oscurezca? —Lisbeth frunció el ceño.
—Bien… no, pero, Lisbeth, habrá miles de personas allí. Y nosotros vamos a estar
dentro. Voy a estar tan segura allí como lo estaría aquí.
Lisbeth suspiró. —Okay. No me gusta, pero mientras tú aceptes ser cuidadosa,
supongo que todo está bien conmigo.
FORO PURPLE ROSE

—Seré cuidadosa —Claire prometió. Se puso de pie y medio saltó hacia la puerta.
Tan pronto como llego a su cuarto, cogió su móvil y llamo a Matthew. Salto el
buzón de voz, y Claire se dio cuenta de que él probablemente estuviera en la
práctica de fútbol.
—Hey —dijo —soy yo. ¿Adivina qué? ¡Le dije a Lisbeth que me dejara ir a donde
Doug! Ella me dejara a las siete y media. Buenas noticias, ¿eh? De todos modos,
solo quería llamar y decirte que nos vemos allí.
106
Colgó el teléfono y se dirigió al armario, preguntándose qué diablos iba a ponerse.
El suave sonido de ramas al romperse se traslado a través del bosque por delante de ella. ¿Es
que ese tonto nunca va aprender a moverse en silencio? Sus propios pies no hacen ruido
mientras se mueven a través de los arboles, cada vez más y más cerca del final del bosque. Ella
se detuvo y se doblo hacia atrás. El rastro del olor la golpeo como una bofetada en la cara.
Apestada a determinación, penetrante de alguna manera, parecido al amoniaco. El rico
almizcle de presunción irrumpía a través de ello, mezclándose desagradablemente con el
primer olor. Ella se permitió a sí misma un pequeño, victorioso sonido, una respiración casi
inaudible que dejo salir. Estúpida, perra egoísta. Ella merecía lo que le sucediera.
En la noche del viernes, Lisbeth se detuvo en la entrada de Doug, que estaba llena
de coches. También estaba llena la mitad de la calle. Claire tragó saliva. Había
estado tan emocionada por ver a Matthew que realmente no se había parado a
pensar en el resto de personas que habría. A pesar de que las cosas habían ido bien
en el restaurante aun la ponía increíblemente nerviosa entrar en una habitación
llena de gente increíblemente popular.
—Bien, ¿vas a ir o no? —Se burlo Lisbeth.
—Si, por supuesto. —Claire abrió la puerta y se deslizó hacia afuera. Si ella se
retiraba ahora Lisbeth podría sospechar. Solamente tendría que esperar que nadie
se burlara de su entrada.
—Te recogeré a las once —avisó Lisbeth.
—Estaré lista —Claire cerró la puerta, alisó su pelo, y se acercó a la casa. Ella había
estado allí una vez, pero había tanto ruido que nadie la escuchó. Después de un par
de respiraciones profundas, abrió la puerta y entró. La sala de estar estaba repleta
de personas reunidas en pequeños grupos. En la esquina, un lector de CDs. al lado
de una mesa con botellas de soda, patatas y pretzels. Claire vaciló en el vestíbulo
de entrada y tomó otra respiración profunda. El olor de alcohol barato tiñó el aire,
y Claire sospechó que no todos tenían soda en sus tazas de plástico.
A través del espacio, Kate–Marie Brown mantuvo la vista en Claire y rizó su labio.
Ella se dio la vuelta para susurrarle algo a la muchacha rubia a su lado, y Claire
sintió el tartamudeo del corazón en su pecho
FORO PURPLE ROSE

Bien, entonces esto era definitivamente un error. Sabías lo que pensaba cuando
estábamos en el minigolf, porque yo realmente, realmente no pertenezco aquí.
Un brazo caliente la rodeo de su cintura y la tiró contra un cuerpo familiar.
—¡Eh!, —espera. Matthew murmuró en su oreja—. He estado muriendo por
tenerte aquí.
Claire se giró sobre sí misma, mirando sus ojos chispeantes. —Es realmente bueno
verte, también. —Sintiendo cada palabra.
Ella no debería estar preocupada por Kate-Marie o por cualquier otra. Ellas eran 107
sólo humanos… ¿verdad? Claire se quedó sin aliento, sorprendida por su propio
pensamiento.
Matthew frunció el ceño, dándose cuenta del repentino cambio en su humor. —
¿Estás bien?
—Estoy bien. Un poco sedienta, quizás.
—Entonces, déjame conseguirte algo de beber. ¿Lo quieres preparado o sin
preparar? —Él dio un paso hacia la mesas de las copas, y levantó las cejas hacia
ella.
—Algo ligero y sin preparar, por favor. —Esperaba que su respuesta no hiciera que
él pensara que ella era una total idiota. Entonces, de nuevo, él no olía como si
hubiera estado bebiendo, y ella había estado lo suficientemente cerca para poder
decirlo.
—No hay problema. Estaré de vuelta en seguida.
Matthew se abrió camino a través del cuarto, deteniéndose para dar una palmada
en la espalda a un par de chicos y para saludar a un grupo de chicas que lo miraban
fijamente. Las chicas prácticamente tropezaron entre ellas coqueteando con él, y los
celos se apoderaron de Claire, apretándole las costillas hasta que no pudo respirar.
Su autocontrol se le estaba escapando, y el pánico se elevó en su pecho. Podía
sentir a su lobo empujando contra la capa demasiado fina de su piel humana. ¿Qué
pasaría si ella cambiaba sin querer, de la forma que lo hizo en su habitación ese
primer día?
Se obligó a abrir las manos. El dorso de sus manos todavía estaba suave. Sólo
porque su corazón temblara contra sus costillas no era razón para dejar salir al
monstruo fuera de ella.
Los olores a su alrededor se intensificaron repentinamente, el deseo de huir se hizo
demasiado fuerte como para ignorarlo. Tenía que encontrar algún lugar para
calmarse, algún lugar lejos de todas estas personas. Mientras Matthew estaba de
espaldas a ella,
FORO PURPLE ROSE

Claire salió de la habitación y se dirigió al pasillo. Abrió la primera de las puertas,

entró y suspiró con alivio. Estaba vacía. Y decorada con princesas. Había
encontrado la habitación de la niñera de Doug. Cerró la puerta detrás de ella y se
sentó en el borde de la cama.
Después de unas cuantas respiraciones profundas, la bruma de pánico empezó a
despejarse. Claire se levantó y se pasó una mano por el pelo. Unos segundos más, y
estaría preparada para volver allí.
La puerta se abrió y Matthew asomó la cabeza hacia dentro. Él tenía una copa en
108
cada mano.
—Hey… Me estaba preguntado dónde habías ido. ¿Todo bien?
El calor se precipitó a las mejillas de Claire. Lo último que quería era que Matthew
supiera que estaba asustada. Quería mentirle, para decirle que se había confundido
de camino para ir al baño.
Claire se encogió de hombros. —Sólo era un poco claustrofóbico estar allí.
Necesitaba un poco de aire.
Matthew entró en la habitación y dejó las bebidas en la mesilla de noche. Él estaba
de pie tan cerca de ella, que Claire tragó fuertemente.
—¿Así qué, te sientes mejor?
—No realmente. —Admitió. Maldición, ¿por qué era tan duro mentirle?
—Entonces, vayámonos de aquí —susurró Matthew.
El pulso de Claire se aceleró, y una pequeña sensación de anticipación estalló en su
interior.
—¿De verdad? —Preguntó.
Él se inclinó. —De hecho, lo que realmente quiero es pasar tiempo contigo. Sólo
contigo. Y puesto que no hemos tenido un montón de oportunidades para hacer
eso, quizás deberíamos aprovechar lo que tenemos, ¿sabes?
Claire asintió con la cabeza. La mitad de ella estaba saltando arriba y abajo de
alegría emocionada, pero la otra mitad estaba preocupada—. ¿No va a aparecer
extraño si nos vamos?
—Nah —dijo él—. La mayoría de ellos se ha tomado ya tres copas. No notarán ni
si el sofá se está quemando.
Él tenía razón, Claire no había pensado realmente sobre eso.
— Así qué, ¿Cómo es que tú no estás bebiendo? —La pregunta se le escapó antes de
que ella pudiera pararse a pensar cómo iba a sonar. Se mordió la punta de la lengua
y se contrajo de dolor.
FORO PURPLE ROSE

Matthew se encogió de hombros. —Demasiado arriesgado. Si me pillan bebiendo,

estoy fuera del equipo de futbol. Y eso significa que no hay becas, ni equipo de
universidad. Yo terminaría yendo a la universidad pública y viviendo con mis
padres. Y eso no es definitivamente parte de mi plan.
Él le sonrió.
—Vamos —dijo, cogiendo su mano libre—. Salgamos de aquí.
Se dirigieron por el pasillo y atravesaron el salón. Claire estaba tan tensa que la
parte posterior de su cuello era prácticamente una placa sólida. Podía sentir a todos 109
examinándola, juzgándola. Matthew los encaminó hacia la puerta principal sin
darse cuenta de ello.
Una vez que estuvieron en el vestíbulo vacío, ambos se escabulleron por la puerta
principal hacia la semioscuridad, y Claire estaba bastante segura de que nadie los
había visto.
La noche estaba tranquila después de los gritos y la música de la fiesta. Estaban
solos. Realmente solos.
—Gracias por el rescate. Así que, um… ¿Dónde vamos a ir? —Preguntó mientras
caminaban hacia el coche de Matthew.
—Donde tú quieras —le respondió Matthew, tirando de ella para acercarla.
—¿Qué te parece en la cafetería qué está en Fourth Street? ¿La que está al lado de la
librería? Emily y yo quedábamos allí muchas veces. —Tan pronto como lo dijo,
Claire recordó que la última vez que ella estuvo allí, se había encontrado con
Victoria. Joder. ¿Qué pasaba si ella estaba allí otra vez?
Matthew le sonrió. —Eso suena genial.
Había muy pocos coches fuera, la gente realmente se quedaba en casa después del
anochecer en estos días. Cuando llegaron a Fourth Street, Claire pudo ver que la
pequeña línea de negocios estaban a oscuras, la cafetería incluida. Matthew
condujo más despacio, mientras pasaban. Un pedazo de papel de color rosa
brillante había sido pegado en el interior de la puerta de cristal de la tienda.
—Temporalmente Horarios Nuevos, —leyó Claire—, diez a.m. a seis p.m.
—¿Puedes ver eso desde aquí? —La voz de Matthew era incrédula—. Necesito que
me comprueben la vista.
Oops. Mierda.
—Está más cerca de mi lado del coche. —Ofreció Claire—. No pensé en ello está
más cerca.
Hubo un ligero movimiento en la parte más alejada de la fila de comercios. Claire
parpadeo hacia allí cuando el coche de Matthew se acercó. Era una persona.
FORO PURPLE ROSE

Oh, Dios. No era solo una persona. Era Lisbeth. Estaba caminando por la acera.
Claire no pudo imaginarse porque estaría allí cuando todo estaba cerrado. Lisbeth
se giró para ver el coche de Matthew acercándose.
Claire se deslizó hacia abajo en su asiento tan rápido que sus rodillas se chocaron
con la guantera.
—¿Claire? —Matthew sonaba sorprendido, y el olor de preocupación llenó el
coche.
—¡Es Lisbeth! Siseó Claire—. Solo sigue conduciendo y dime cuando no puedas 110
verla más, ¿vale?
—Oh, mierda. —Matthew aceleró un poco, y Claire siguió encogida en su asiento.
Sus piernas empezaron a dolerle por estar apretujadas en una extraña posición. En
su bolsillo trasero, el móvil de Claire empezó a sonar. Consiguió sacarlo al mismo
tiempo que Matthew giraba por una esquina. El número de Lisbeth estaba brillando
en el identificador de llamadas.
—Noooo, —gimió Claire.
—No contestes, —sugirió Matthew.
—Se pondrá furiosa, —dijo Claire. Pero si respondía en el silencioso coche, Lisbeth
sabría que no estaba en la fiesta. Estaba jodida.
—Espera quince minutos y envíale un mensaje. —Sugirió Matthew—. Dile que no
podías oír el teléfono porque había mucho ruido… demasiado fuerte para hablar.
Claire lamió sus labios y asintió. Lisbeth se iba a enfadar, pero probablemente se
tragaría eso. El teléfono en su mano pitó cuando el mensaje llego a su buzón de
voz, tomando la decisión por ella.
—Puedes hacerlo ahora, —dijo Matthew—. Estamos lo suficientemente lejos.
Claire se deslizó de nuevo en su asiento. —¿Crees que me habrá visto?
Matthew sacudió la cabeza. —Creo que probablemente me vio a mí y sospechó,
¿sabes?
Claire reclinó la cabeza en el asiento. —Lo siento mucho, Matthew. Si mi madre
no se estuviera comportando de forma tan estúpida sobre esto… ugh. Solo siento
tener que hacerte ir a hurtadillas por ahí, supongo.
Matthew se encogió de hombros. —Mira, preferiría ser honesto sobre todo esto,
también, pero mi padre ha fastidiado suficientes cosas en mi vida que lo entiendo
perfectamente. ¿Y quién sabe? Quizás cambie de idea cuando todo este asunto de
hombres lobo se calme.
—Seriamente lo dudo. Mi madre no cambia de idea.
FORO PURPLE ROSE

—Bueno, de todas formas. —Matthew se detuvo en un semáforo rojo. Se estiró y

tocó su cara, su mano trazando el perfil de su mandíbula—. Merece la pena, de
cualquier manera.
Condujeron alrededor durante un rato, asombrándose de que todo estuviera
realmente cerrado de noche. Matthew no parecía estar nervioso sobre estar fuera
después de que oscureciera, cosa que sorprendió a Claire.
—¿No estás preocupado por los hombres lobo? —Preguntó ella.
—Bueno, estamos en un coche, —señaló él—. Así que seremos más rápidos que el 111
hombre lobo. Pero lo más importante, creo que las probabilidades de que estemos
en el sitio equivocado en el momento equivocado son realmente bajas. No iría a dar
un paseo ahora mismo, ¿pero una vuelta en coche por la ciudad? Nop. No estoy
nervioso por eso. Y de todas formas, estas aquí, lo que significa que tampoco debes
estar aterrorizada, ¿verdad?
Un pequeño shock atravesó a Claire. En realidad no consideró que él le devolviera
la pregunta. —Um, no, no lo estoy. Por la misma razón que has dicho, en realidad.
Oh, ¡mierda! —Miró el reloj—. Sera mejor que le envíe el mensaje a Lisbeth.
Lisbeth estaba cabreada, pero parecía creer que Claire estaba todavía en casa de
Doug. Claire se sentía mal por mentirle, pero, razonó, no lo estaría haciendo si su
madre entrara en razón. Tal como estaban las cosas, no tenía otra opción.
Como nada estaba abierto, siguieron conduciendo sin rumbo alrededor de la
ciudad, hablando de todo y nada al mismo tiempo. Cuando terminaron en el
bloque de Doug, Claire miro el reloj. Faltaba un cuarto de hora para las once.
¿Cómo se había pasado tanto tiempo tan rápido? Desde la calle, la música
procedente del interior era solo un susurro bajo. Claire se reclinó sobre el asiento y
suspiró. Ella realmente, de verdad no quería entrar y enfrentarse a todos, incluso si
Matthew estaba con ella.
Él se inclinó y la besó. Claire pudo sentirle sonriendo.
—Venga, —dijo él—. Vayamos a ver quién sigue consciente allí dentro.
—Okay, —susurró, todavía sentía un ligero hormigueo por la sensación de sus
labios sobre los de ella.
Si Matthew estaba con ella, no iba a estar tan mal. Y solo eran quince minutos,
¿cierto? Los dos anduvieron por el césped del frente y entraron en la casa. Todavía
había pequeños grupos de gente esparcidos por el salón familiar, pero sus
conversaciones eran altas, y había un par de personas inconscientes en los sofás.
Claire permaneció cerca de las ventanas, buscando el coche de Lisbeth. Lo último
que necesitaba era a Lisbeth viniendo a la casa, se vería metida en doce tipos de
problemas diferentes seguro. Cuando apareció el coche, Claire corrió al pasillo
principal.
FORO PURPLE ROSE

—Te llamare más tarde, —dijo ella, cuando Matthew le dio un beso de despedida.
—Hey, ¡Engle! —La tenue llamada llego de algún lugar del comedor—. ¡Trae aquí
tu culo necesitamos un cuarto para el póker!
Matthew se rio y se encaminó de vuelta a la fiesta cuando Claire abrió la puerta y
atravesó el oscuro césped. Se deslizó dentro del coche de Lisbeth.
—Ahora me creo que no podías oír el teléfono, si la música es tan alta aquí fuera,
¡debe ser ensordecedora ahí dentro! —Lisbeth sacudió la cabeza—. Así que, ¿te has
divertido? 112
Claire suspiró—. No lo sé. Algo así, creo. —Era la verdad. El tiempo que había
pasado con Matthew había sido increíble, pero el resto de la fiesta había sido una
tortura.
—¿Y qué pasa con Doug? —Pregunto Lisbeth, su voz sonaba con significado.
Claire se encogió de hombros. Miró hacia Lisbeth, preguntándose qué es lo que
había estado haciendo en Fourth Street. —Así que, ¿Qué has estado haciendo
mientras me fui? ¿Algo divertido? —Preguntó.
—Nah, —dijo Lisbeth—. Fui a casa a leer durante un rato. Eso es fue todo.
—Oh. —Claire se giró para mirar por la ventana. Todo estaba fuera de lugar esa
noche. Lisbeth le estaba mintiendo. Claire había mentido a casi todo el mundo. Y
Matthew ¿Cómo podía salir con alguien que era el centro de atención cuando ella
estaba siempre intentando esconderse?
Se dejó caer en el asiento y se preguntó si quizás su madre tenía razón, aunque sus
razones fueran equivocadas. El pensamiento hizo que su estómago le pesara como
una bola de bolos, pero quizás era realmente imposible para ella y Matthew estar
juntos. ¿Qué pasaba si solo conseguía hacerle miserable?
Pero de nuevo, quizás ella solo tenía que dejar que él tomara sus propias decisiones
sobre como quería pasar su tiempo. Él fue el que sugirió que se marcharan, solo
ellos dos. Era posible que solo estuviera siendo hipersensible. Exagerando.
Claire se reclinó sobre el cristal y suspiró. Las cosas serían mucho más simples si no
le gustara tanto. O si solo fuera una humana normal, como todo el mundo.
Pero no, tenía que ser una mujer lobo. Solo jodidamente increíble.
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 12
Traducido por: MASI, Aya001 y Trikini

L
113
os próximos días se prolongaron eternamente. Todo en lo que Claire

podía pensar era en que cada hora que pasaba la acercaba a la luna
llena del martes por la noche.
Para cuando el sol se puso detrás de los árboles el lunes, Claire se paseaba en su
cuarto, preguntándose por qué Matthew no le había devuelto la llamada,
preocupándose por lo que la noche siguiente sería. Estaba tan tensa que sus dientes
le dolían. Tenía que entrar en el bosque. Tal vez si era capaz de correr durante un
tiempo, podría practicar un poco, tal vez entonces se sentiría mejor con todo.
Cuando todos se habían ido a la cama, Claire salió de la casa. Salir a hurtadillas no
era tan temible como lo había sido antes. Sabía dónde estaba cada escalera
chirriante, y lo lejos que podía abrir la puerta de atrás antes de que chirriara. En
poco tiempo, Claire estaba en el pequeño claro que había empezado a considerar
como suyo, no tan grande como donde se reunía la manada, pero aún así, era lo
suficientemente grande como para practicar un poco. Lamentó no haber llamado a
Zahlia. Hubiera sido bueno tener a alguien para pasar el rato mientras ella
practicaba. El aroma de las agujas de pino le hizo cosquillas en la nariz cuando se
inclinó para quitarse los zapatos. Olía bien. Confortable.
Cuando sus calcetines estuvieron cubiertos por una rama baja, Claire se extendió
hasta la cabeza y rodó de lado a lado. Sus pies habían cambiado tanto que cuando
estaba en su forma de lobo sus zapatos no encajaban. Además, podía correr más
rápido sin ellos. Sería más fácil huir si oía que algo venía.
Y, de todos modos, nosotros éramos las cosas más temibles por aquí. Eso es una cosa buena
acerca de ser un hombre lobo, supongo. No tienes que tener miedo de otras muchas cosas.
Claire pensó en el papá de Matthew. Las cosas de las que ella tenía miedo ahora
eran un infierno mucho más aterrador, en realidad. Negó con la cabeza para
despejarse y se obligó a concentrarse.
El cambio se produjo más rápido esta vez. Claire se acurrucó en el suelo durante un
minuto, esperando a que el torrente de adrenalina de la transformación pasara. A
pesar de que podía transformarse más rápido, aún parecía más o menos lo mismo
que le pareció esa primera noche, mayormente humana. Tragó saliva, pensando en
FORO PURPLE ROSE

la reunión de la noche siguiente. ¿Cómo de diferente se vería ella en veinticuatro

horas?
Cuando el pulso se había reducido finalmente después del estrés del cambio, Claire
levantó su nariz y olfateó. El bosque olía mucho mejor cuando estaba en su forma
de lobo. Más complejo. El nerviosismo que había sentido toda la tarde todavía
estaba presente en su pecho, y Claire quería dejarse ir en el bosque, estaba
determinada a salir corriendo.
Después de tres carreras hacia el sitio de reunión y vuelta, sus costillas se sentían
114
pesadas. Yacía en el suelo debajo de uno de los pinos y se forzaba a sí misma a
hacer respiraciones profundas. Se sentía genial; exhausta, pero genial.
Claire cerró los ojos y se puso a pensar en Matthew.
—No, hombre, ya es demasiado tarde. La llamaré mañana. No quiero que ella
piense que soy un idiota totalmente desconsiderado.
La voz la hizo saltar. Se sacudió ella misma, se dio cuenta que debía de haberle
estado escuchando, del mismo modo que había hecho con Lisbeth. Claire cerró los
ojos y se concentró en su voz.
—Sí, ves, simplemente no hay manera, te estoy diciendo eso.
Hubo una pausa.
—Porque me gusta. Mucho. Nunca he conocido a nadie como ella antes, y yo no
voy a meter la pata por hablar contigo acerca de eso. —Matthew parecía
exasperado.
Claire rodó sobre sus pies y bailó alrededor de un pequeño círculo. Él estaba
hablando de ella. Tenía que estar haciéndolo. Pero no podía oír más. Mierda.
Perdió su concentración.
Se sentó de nuevo y trató de escucharle otra vez, esforzándose por mantenerse
concentrada en su voz cálida y rica, pero no servía de nada. O había dejado de
hablar o era que necesitaba más práctica.
Claire suspiró y se obligó a cambiar de nuevo a su forma humana. Podría dejarlo
también mientras seguía adelante, de todos modos. Las palabras de Matthew le
habían creado un pequeño punto de calor en el vientre que estuvo candente durante
todo el camino de regreso a casa.
Cuando la oscuridad cayó el martes, Claire se sorprendió al descubrir que estaba
más aliviada que otra cosa. Cualquier cosa que fuera a suceder, por lo menos ella
ya podría dejar de sentirse tan ansiosa al respecto.
Lisbeth llamó a su puerta.
— ¿Sí?
FORO PURPLE ROSE

Su cabeza rubia asomó por la puerta. Estaba vestida para el yoga, pero Claire se dio
cuenta de que llevaba unos aretes de color turquesa, y el olor de la loción corporal
de lavanda flotaba en la habitación.
—Me voy a clase. Estaré de regreso sobre las diez, ¿de acuerdo?
Claire la miró sorprendida.
—¿Tienen yoga por la noche?
—Es sólo por esta noche. Una cosa especial, algo así.
115
—Oh, bien, Diviértete, entonces.
Lisbeth cerró la puerta detrás de ella. El olor de alguna emoción se quedó en la
habitación, pero todavía quedaba mucha esencia del olor de la loción corporal de
lavanda por lo que Claire no podía decir lo qué Lisbeth había sentido.
Ella miró la habitación vacía y suspiró. Su madre se había encerrado en el cuarto
oscuro después de la cena, y no había nada que hacer sino esperar. Los reality
shows y los anuncios de la televisión resonaban detrás de ella, pero Claire se quedó
mirando las sombras sobre el césped, mientras se alargaban. Podía sentir la picazón
de debajo de su piel.
Un par de horas después Lisbeth trotó por las escaleras para anunciar que estaba en
casa y se iba a la cama, Claire oyó el suave golpe de su madre. Se arrastraron por
las escaleras hasta la puerta trasera en silencio. Cuando estaban ocultas de forma
segura en la espesura del bosque, la madre de Claire se volvió hacia ella.
—Claire, esta es tu segunda luna. Sabes que el cambio será más completo para ti
esta vez, ¿verdad?
Ella asintió con la cabeza.
—¿Cuánta diferencia habrá? —susurró.
Su madre se encogió de hombros.
—Es único para cada una de nosotras. En tu próxima luna vas a cambiar
totalmente, pero esta vez, no hay manera de saberlo con certeza. —Miró hacia el
bosque, escuchando—. ¿Estás lista?
Claire asintió con la cabeza nerviosamente y siguió a su madre alejándose por los
árboles. Con el tiempo, la luz del fuego brilló en la distancia; se estaban acercando.
Claire podía ver a Beatrice, a Victoria, a Judith, y a Katherine ya en el claro.
Cuando ella y su madre llegaron al círculo de árboles, Victoria levantó la
vista hacia ellas, su cara pintada con aprensión. Echó sus brazos
alrededor de la madre de Claire.
—Marie, yo te saludo. —La voz de Victoria se estremeció. Abrazó a Claire y la
saludó—. Fue un gusto verte en la cafetería, te manejaste a la perfección, ya sabes.
FORO PURPLE ROSE

—Oh, um, gracias. Fue bueno verte, también.

Judith y Katherine observaron directamente con sus ojos a Claire de la misma
manera que la habían mirado la última vez. Era como si fuera medio transparente
para ellas. Luchó contra el impulso de poner los ojos en blanco.
Claire escaneó los árboles para ver si estaba Zahlia. Las sombras estaban vacías y
en silencio.
Se volvió a Beatrice. La ansiedad estiraba las arrugas alrededor de los ojos de la
mujer mayor. 116
Una vez que se habían saludado las unas a las otras, Victoria olfateó el aire.
—¿Dónde está Zahlia? No puede llegar tarde, ¡no esta noche entre todas las noches!
Beatrice se levantó poco a poco del tronco donde había estado sentada y se quedó
junto al fuego.
—Vamos a tener que comenzar sin ella, me temo.
Claire se colocó alrededor del borde de la hoguera con las demás. La idea de
transformarse enfrente de todos enviaba agujas de pánico disparándose a través de
las extremidades de Claire, a pesar de que ella ya lo había hecho una vez antes.
Deseaba que Zahlia estuviera allí, se sentiría mucho más cómoda. Su preocupación
se convirtió inmediatamente en culpa. No le parecía bien preocuparse por su
aspecto. Victoria podría perder a su criatura en cualquier momento.
Beatrice levantó sus manos rugosas y cogió aire.
Antes de que pudiera empezar el canto, un enorme lobo negro corrió en el bosque,
con sus labios salpicados de espuma blanca y su pelaje estropeado con ramitas y
hojas. Zahlia había llegado.
Claire observó a la vez que Zahlia se forzó a volver a su piel humana. Se quedó a
cuatro patas en el suelo del bosque, con sus costillas agitándose y su pelo negro
empapado en sudor. Sin molestarse en saludar a nadie formalmente, levantó la
cabeza y miro a Beatrice.
—No estamos solas en el bosque. Hay un seule, una solitaria, la olí de camino
hacia aquí, y cuando me acerqué, corrió. Se fue hacia el este, hacia la ciudad. —
Zahlia se levantó sobre sus pies, todavía jadeante, con sus ojos salvajes.
Claire sintió su madre cambiar a una postura tensa. Victoria se veía desgarrada,
mordió su labio y sus manos se curvaron en puños a sus costados. Solo Beatrice
permaneció en calma.
—¿Qué significa que ella está aquí? —preguntó Claire tentativamente.
—Un lobo sin una manada es raro pero no inaudito —dijo su madre con voz
apagada—. Normalmente están asustados, o son peligrosos. Algunas veces las dos.
FORO PURPLE ROSE

—Por supuesto —dijo Zahlia, su voz todavía entrecortada—. Pero esta vez, puede
ser más que eso. Puede ser la que ha estado matando humanos en la ciudad.
Debemos atraparla, interrogarla. No podemos dejar escapar esto sin hacer nada.
—¿Y vamos a cazarla con qué fin? —preguntó Judith, con las manos en sus
caderas—. ¿Forzarla a unirse a nosotros? ¿Pedirle que se vaya? ¿Matarla?
—No creo que Zahlia nos estuviera sugiriendo que nos lanzáramos al bosque sin un
plan. —Katherine frunció los labios—. Pero este no parece el mejor momento para
estrategias.
117
Beatrice miró fijamente al fuego durante un momento, sus manos alzadas, entonces
cerró sus blanquecinos ojos.
—Esta ceremonia no puede retrasarse. Nosotras determinamos el destino del hijo
de Victoria, y entonces rastrearemos a la extraña.
El aroma de disgusto, amargo casi chamuscado, emanó de Zahlia a la vez que se
colocaba en su lugar.
—Hey, Claire —murmuró—. ¿Está todo bien?
Claire asintió y su madre lanzó una mirada envenenada a Zahlia. Beatriz empezó a
cantar. Las demás se dejaron llevar por el trance del ritmo de las palabras, y el
fuego en el centro del círculo empezó a cambiar.
Las llamas ya no fluctuaban aleatoriamente. En su lugar, empezaron a
arremolinarse de forma lenta, constante, separándose para revelar los troncos de
debajo, y volviendo a juntarse, cada vez alzándose más y más alto. Cuando el
cántico de Beatrice llegó a una cima de frenesí el fuego se elevó lo suficiente para
quemar las ramas de los árboles. A través del claro, Claire vio a su madre, brillando
cuando su forma empezó a alterarse.
Claire se apresuró a desvestirse, tropezando cuando intentó quitarse de un tirón su
pantalón de chándal demasiado rápido. Por favor no dejes que nadie se haya dado cuenta
de eso. Debería haber practicado la parte de la ropa, también. Su vergüenza se
evaporó cuando empezó a cambiar.
La transformación le arrebató el aire a Claire. Sintió su demasiado ajustada piel
deshacerse rápido y más completamente de lo que había pasado nunca. El pelo
estalló por todo su cuerpo, y sus manos y pies tomaron una apariencia deformada y
estrecha. Sus brazos y piernas estaban atrapados en algún lugar entre humano y
animal, y con un sobresalto, Claire se dio cuenta de que el repentino peso en su
parte trasera era una gruesa cola.
Nadie prestó atención al hecho de que estaba incompleta, todas miraban fijamente
a Victoria. El lobo avellana se sentó frente al fuego con sus ojos cerrados.
Nadie respiró.
Nadie se movió.
FORO PURPLE ROSE

¡Oh! Victoria aspiró una fuerte bocanada y enseño los dientes. El dolor se abalanzó
sobre el grupo como un pájaro de alas negras.
Oh, no…no lo es…Quiero decir, ¡estoy bien! ¡No hay dolor! Oh, es una niña. Victoria dejó
escapar un suspiro. Su lengua colgó de su boca y empezó a jadear. Oh, gracias,
gracias, gracias. Se balanceaba adelante y atrás una y otra vez con alivio.
Beatrice echó hacia atrás su cabeza gris y aulló de alegría. La madre de Claire y
Zahlia inmediatamente le siguieron, con Judith y Katherine llegando unos
segundos después. Las cinco lobas rodeando a Victoria, dando cabezazos contra
118
ella y empujando su costado con el hocico. El brillante pelaje cubrió cada
centímetro de sus pieles y sus afilados dientes encajaban perfectamente en sus
mandíbulas. Ninguna de sus patas tenían puntas con uñas humanas pintadas de
rosa. Pero las de Claire sí.
Ella se quedó atrás, avergonzada por su medio cambiada apariencia y las
simpáticas lagrimas que se escurrían por sus mejillas.
Oh, Diosa, se me ve horrible. Sintió la gruesa cuerda de músculo de su cola curvarse
bajo su cuerpo de vergüenza. Claire echó atrás la cabeza, con un extraño lamento,
un gemido canino. Un olor de frustración, picante y agudo, le hizo levantar la vista
de vuelta al grupo.
La madre de Claire le miró y bajo las orejas lo más que podía.
No seas grosera, chérie. Ven y felicita a Victoria.
Oh, quítate de encima, Marie. Zahlia resopló y sacudió la cabeza. Como si alguna de
nosotras hubiera tenido que lidiar con tanto en su segunda luna. Dale un minuto.
¡No tienes derecho a decirme qué esperar de mi hija! Las orejas de la madre de Claire
estaban colocadas planas contra su cráneo.
Parar ya, vosotras dos, no es momento de discutir. Victoria miró a Claire. ¡Ven a celebrar!
Buena Diosa, te ves maravillosa. Deberías haberme visto en mi segunda luna, mi pelo era tan
desigual, ¡parecía como si tuviera sarna! Tu pelaje esta todo en su sitio... ¡eso es tan
afortunado! Tengo tanta suerte. Rodó sobre su espalda y se retorció contra el
polvoriento suelo. Se le veía maníacamente feliz. ¿Puedes creértelo? ¡Voy a tener un
bebe!
Claire se escabulló de donde Victoria con sus torpes extremidades mientras que las
demás regresaban a sus lugares alrededor del fuego, aún ladrando y lamentándose
en la celebración.
Arrastraba su cola por el suelo, capturando ramitas perdidas mientras caminaba.
Con su media cambiada cabeza, Claire chocó con el hombro de Victoria lo más
suavemente que pudo.
¡Sólo piensa que, Victoria pellizcó las orejas peludas de Claire, en nueve meses, habrá ocho de
nosotros!
FORO PURPLE ROSE

Las palabras de Victoria enviaron un escalofrío de inquietud a través del grupo,

distrayendo a Claire. Se volvió hacia su madre, curiosa, pero antes de que ella
pudiera formularle una pregunta, su madre negó con su cabeza de pelaje liso a
Claire, muy ligeramente.
Beatrice mantuvo su mandíbula cerrada y se sentó cuidadosamente en frente del
fuego. Victoria, ve a casa y duerme un poco. El resto de nosotros va a seguir a Alma.
¿Por qué? Me siento muy bien. Voy a ayudar en el rastreo. Victoria se levantó, moviendo
alegremente la cola detrás de ella.
119
Por supuesto que no. Si esta Alma es suficientemente peligrosa como para matar a seres
humanos, entonces no dudará en atacar a uno de nosotros si tratamos de impedírselo.
Estaremos poniendo la vida de tu bebé en peligro innecesario. Sé que puedes hacer un
seguimiento. Pero esta noche no lo harás. Quiero que te asegures, Claire, de llegar a casa con
seguridad, y entonces quiero te vayas a descansar. La autoridad que sonó al mando de
Beatrice era inconfundible, y Victoria bajó la cabeza, curvando su cola por debajo
de su cuerpo. Beatrice miró con ojos lechosos a Claire.
¿Sabes cuál es tu salida del bosque?
La inclinación de la cabeza de la viejo loba le dijo a Claire que ésta era más un
mando que una pregunta. La media cambiada nariz de Claire olisqueó el camino
que ella y su madre había tomado por el bosque antes. Miró a su madre y su
estómago se tambaleó ante la idea de ir a casa sin ella. ¿Qué pasa si algo le ocurre
mientras ellos están buscando al Alma? ¿Y si ésta ataca a su madre? ¿O a Zahlia?
La idea de que uno de ellos se lastime (o algo peor) la hizo sentir mal.
¿No puedo ir yo también? Su media-humana voz sonaba extraña en el claro. Detrás de
ella, Katherine dejó escapar un bufido irritado.
El oído de Beatriz se contrajo. En la próxima luna, serás capaz de ir con nosotros. Pero al
estar semicambiada nos dificultas mucho más de lo que nos ayudaría. Lo siento, Claire.
Claire abrió la boca para protestar, pero la voz de Marie le llenó la cabeza,
deteniéndola. Nuestra manada ha sobrevivido sin ti durante dieciséis años, Claire. Esta
noche no será diferente. Vete a casa y espérame.
—Está bien —susurró Claire.
Zahlia inclinó la cabeza hacia un lado en un gesto de “no puedes-ganarles-a-todas-
ellas”. Entonces las cinco lobas se giraron y desaparecieron entre los árboles como
el humo, contorsionando sus narices con anticipación. Claire miró a Victoria.
Victoria apretó las orejas hacia atrás hasta que fueron completamente contra su
cabeza. El miedo cruzó su rostro mientras escaneaba los árboles. Con sólo mirarla,
oliendo su aroma penetrante y húmedo en la brisa, Claire sabía que Victoria estaba
de pronto aterrorizada de ir a través de los bosques, que su embarazo la hizo sentir
vulnerable. —Voy a estar bien por mi cuenta si lo que queremos es ir a casa —dijo
Claire.
FORO PURPLE ROSE

Victoria se lamió los labios. —No. Beatrice me dijo que te lleve a casa. Tenemos que
escucharla a ella, Claire. Ella es nuestra alfa, su palabra es ley. Voy a estar bien. Tener cerca
a una violenta Alma me pone nerviosa. Nunca había pensado sobre eso de esa manera, antes
de que mi madre me prohíba ir, pero ella tiene razón. Tengo que proteger a este bebé.
—Si estás segura... —Claire dudó. Sabía que Beatrice debía ser obedecida, pero
odiaba hacer que Victoria permaneciera en el bosque por más tiempo de lo que
tenía que hacerlo.
Va a estar bien. En realidad, siempre y cuando no estemos cazándola, ella no va a querer 120
molestarnos. Estaremos a salvo, lo prometo. Vamos.
Antes de que pudiera deducir de nuevo, agarró a Claire por la ropa con su media
cambiada boca, se giró y corrió hacia los árboles. Cada vez que una rama se
agrietada en la distancia, la cabeza de Victoria se erguía, lejos del olor que Claire y
su madre habían dejado a su paso, y sus orejas giraban hacia atrás y adelante, a la
escucha de cualquier signo del Alma.
Victoria estaba tan nerviosa que Claire empezó a estar nerviosa, también. Lo que
necesitaba era distraerse.
—Así que es realmente grande sobre el bebé, ¿eh?
Victoria se quejó. Lo es. Mientras que puedo mantenerla a salvo, será maravilloso.
Claire hizo una mueca. Había estado esperando más una reacción de No-puedo-
esperar-a-comprar-ropa-de-bebé.
Lo siento, lo sé. Estoy siendo susceptible.
—Está bien. Hey, gracias por decir que lo hice bien en la cafetería. Creo que mamá
secretamente creía que realmente salté y grité por lo contenta que estaba de ver a
otro hombre lobo.
Victoria dejó escapar una especie de ruido. Estoy segura de que Marie no quiere ser tan
dura contigo. No te quiere ver en el dolor de cometer errores, ¿entiendes?
—Sí. Quizá. O quizá no.
Un día entenderás. El comienzo es duro para todos. Victoria cogió el ritmo, y Claire
luchó para mantenerse al ritmo con ella. En el momento que Claire lo logró, ya
estaba al borde del bosque, estaba jadeando por el esfuerzo. Le llevó dos intentos
volver a ser humana.
Claire volvió a mirar a Victoria.
—Anda con cuidado a casa.
Victoria ladeó la cabeza y tiró de las orejas, pero desde que Claire estaba en su
forma humana, no podía entender lo que la loba de color pardo dorado decía. Con
un gesto, Claire se deslizó por la abertura en la pared y se apretó contra el ladrillo
FORO PURPLE ROSE

cubiertas de hiedra. El alivio se le inundó, había llegado a casa, por lo menos. Todo
lo que quedaba por hacer era volver a sumergirse en la casa y esperar a su madre
para unirse a ella.
Claire se sentó en la cocina a oscuras, miró el reloj del microondas y se preguntó
qué diablos estaba pasando en el bosque. Pasó una hora, luego dos. Agotada, Claire
puso su cabeza sobre la mesa y se quedó mirando los números de color verde que
brillan con los ojos pesados.
Una mano cálida sacudió el hombro y Claire se despertó, confundida.
121
—Qué… —Ssshh —la advirtió su madre—. No despiertes a Lisbeth. Tenemos que
meterte a la cama, criatura. Ya casi amanece.
Claire miró por la ventana el cielo gris.
—¿La encontraste? –susurró
Marie negó con la cabeza, sus labios apretados en una línea delgada.
—No, el camino estaba claro, y nos separamos de su pista, pero se acercó
demasiado a la ciudad como para buscar más lejos. No sabremos lo que pasará
hasta que la ciudad despierte. —Se pasó una mano por los ojos—. Vete a dormir,
Claire. —Su voz estaba llena de cansancio—. Estas cosas todavía estarán aquí para
resolverlas en la mañana, y nos reuniremos con la manada en un par de noches a
partir de ahora para discutir qué se debe hacer.
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 13
Traducido por: flochi, playthekey

L a luz de la luna brillaba contra su piel desnuda mientras corría entre los
bosques celebrando. Los había confundido a todos ellos conduciéndolos a una
búsqueda inútil hasta que uno a uno fueron renunciando. Estúpidas
manadas con sus estúpidas reglas y estúpidas lealtades. Ninguno de ellos sabía lo que
realmente significaba ser un lobo. Ninguno de ellos sabía cómo tratar a los humanos como los
122
juguetes que realmente eran.

No había tenido intención de matar a alguien esta noche, pero estaba todavía emocionada por
la persecución. Y ese imbécil se había mostrado tan ansioso por ver que era el ruido del
exterior. Sosteniendo esa arma como si pudiera ayudarlo. Ella gritó con alegría, el sonido
rebotando en los árboles a su alrededor. Su dedo no pudo siquiera moverse sobre el gatillo.
Ahora que sabía que todos ellos eran unos idiotas, era el momento de dar el siguiente paso...
tiempo para atraer a quien ella odiaba más en la trampa que había puesto tan perfectamente.
Para hacerlo funcionar, solo necesitaba que ese hombrecito codicioso, el Dr. Engle, se enojara
bastante para tomar el asunto en sus propias manos. Y cuando él hubiera capturado a su
enemigo, echar la culpa de tantas muertes sobre sus hombros... bueno. Ella no tendría que
preocuparse más por ese lobo en particular otra vez.
Claire estaba en la cama, mirando el alba rosado atravesar el cielo. No había
manera de que pudiera volver a dormir... no después de todo lo que había pasado.
Cuando Claire escuchó a Lisbeth haciendo ruido en la cocina, se deslizó fuera de la
cama.
Lisbeth estaba frente a la cocina, revolviendo una sartén de tofu y pimientos. En la
mesa de la cocina, Marie sentada frente a un plato de tocino mustio, su mano
envolviendo una enorme taza de café. Miraba la televisión con los ojos lagañosos.
—¡Buenos días, Claire! —Chilló Lisbeth—. Te levantaste temprano. ¿Quieres un
poco de jugo? Hoy le puse un poco de jengibre le da un toque extra, pienso yo. —
Lisbeth le tendió una jarra de repugnante aspecto a lodo verde. El olor a pasto y
espinacas golpeó a Claire como una bofetada. Hombre, está realmente alegre esta
mañana…
Claire sacudió la cabeza y dio un traspié sobre la cafetera. Se sirvió una enorme
taza llena y le arrojó dos cucharadas llenas de azúcar. Una vez que el primer sorbo
había quemado en el camino a su garganta, la voz de las nuevas noticias penetró en
el agotamiento de Claire...
FORO PURPLE ROSE

—La policía dice que el asesinato más reciente, sucedido más al norte, indica que el
hombre lobo se ha trasladado a los densos bosques del norte de la Carretera 34. La
víctima masculina se encontraba al aire libre, con un arma de fuego cerca. Se les
recuerda a los ciudadanos que no dejen sus hogares después de que oscurezca por
ninguna razón. Las actividades sospechosas deben ser reportadas a la policía, o al
Concejo de Acciones preventivas, encabezado por el Dr. Charles Engle. Ellos
pueden ser contactados llamando al 555-0194. Ahora, vayamos con Angie por un
control del clima —¿Angie?
Claire se volteó para mirar a su madre. El café se derramó por un lado de la taza. 123
La seule. Ella realmente estaba matando a las personas, y todavía estaba en los
bosques. La manada no la había atrapado, y había matado a ese pobre hombre.
Quizás si ellos tuvieran más ayuda –si yo hubiera estado ahí– tal vez hubieran sido capaces de
encontrarla. Dejó la taza de café con demasiada fuerza sobre la encimera.
—No me importa si quieres beber ese veneno, Claire, pero por Dios Santo, no lo
derrames por todas partes, ¿bien? —Lisbeth clavó un tenedor en su tofu.
Marie miró a Claire a los ojos y movió los labios—. Después.
—¿Hola?
—Hola, Claire. —la voz de Matthew estaba más silenciosa de lo normal.
—¿Qué pasa? —En su mente apareció fugazmente la fiesta. Ellos no habían
hablado mucho en los días desde entonces... quizás ella tenía razón. Tal vez, él se
había decepcionado porque ella no fuera exactamente del tipo mariposa social.
Él asintió—. Es mi papá.
Al menos no soy yo. Maldición, ¿qué me había hecho pensar eso, de todos modos? Debo ser la
persona más narcisista sobre el planeta.
— ¿Qué hay con él?
—Se está volviendo loco. Y me refiero a loco. Ese chico que fue asesinado anoche
lo dejó al límite. Ha estado despotricando toda la mañana sobre cómo el FHPA y el
Concejo de Acciones preventivas se suponía que ambos estaban patrullando, y aún
así pasó. De repente, él es héroe de acción de la situación. Sigue diciendo que es la
última línea de defensa, y fue llamado por todos los demás para una gran reunión
de estrategia mañana. Me está enloqueciendo con todo este asunto de salvar al
mundo. Se trata de él consiguiendo entrar en el estúpido Investigaciones
Internacionales de Licantropía para poder demostrar que es digno de su lugar en el
FHPA, de todas maneras.
Claire cerró los ojos. Si el papá de Matthew había decidido hacer algo drástico, eso
pondría a toda la manada en peligro. Forzó a sus hombros a relajarse, enfocarse en
sonar normal.
FORO PURPLE ROSE

—Eso es realmente malo. ¿Quieres ir a algún lugar esta tarde? ¿Apartarte de la

demencia por un rato? —Su mamá y Lisbeth estarían en casa. Sería difícil salir a
escondidas sin que la atraparan, pero encontraría la manera.
Matthew rio amargamente—. Me gustaría eso más que nada en el mundo. Pero
aparentemente, voy a recoger a algún experto de rastreo en el aeropuerto esta tarde.
Órdenes de papá.
—Oh, Matthew, lo siento tanto.
—Sí, yo también. Supongo que ambos estamos a merced de nuestros padres en 124
estos días, ¿huh?
—Sip. Pero me alegra que solo tu papá se sienta frustrado. —las palabras salieron
de la boca de Claire antes de poder detenerlas.
—¿Qué quieres decir? ¿Quién más podría estar frustrado?
—Um... solo pensé... No hemos hablado mucho desde el viernes, y... —ella
suspiró—. No soy exactamente tan popular como tú. No voy a muchas grandes
fiestas pensé que quizás estabas deseando que fuera más como el resto de tus
amigos. Que me gustaran más ese tipo de cosas.
No es que no supiera cuan diferente soy en realidad de ellos, pero aún así. Dios, desearía
poder contarle todo.
El silencio en el otro extremo del teléfono la hizo revolverse en su silla, y luchó
para mantener la boca cerrada.
—Claire.
La voz de Matthew estaba muy, muy tranquila, y pudo sentir el primer cosquilleo
de lágrimas detrás de sus párpados.
—No puedo creer que hayas pensado eso por un solo segundo.
—Bueno... —Su garganta se cerró antes de que pudiera decir nada más.
—Pasar tiempo contigo es mucho mejor que emborracharse a ciegas con un grupo
de gente que sólo se preocupan por cuántos goles puedo anotar, o cómo se ve mi
ropa... Ni siquiera puedo decirte lo mejor que es. Tú eres más interesante que
cualquier persona en esa fiesta por mucho.
—Simplemente no quiero alejarte de tus amigos ni nada.
—No lo haces. Créeme, realmente no lo haces. No más preocupaciones acerca de
este tipo de cosas, ¿de acuerdo? —Su voz era suave.
—Está bien. —Claire luchó para mantener su voz pareja. Su voz era tan sincera, no
cabía duda de que quería decir cada palabra. Ella luchó para no inhalar en el
teléfono—. Buena suerte esta tarde.
—Gracias, la voy a necesitar. Hablaré contigo pronto, ¿de acuerdo?
FORO PURPLE ROSE

—Sí, está bien.

Claire colgó y se dejó caer sobre la alfombra. Se había acostumbrado tanto a que la
verdad era la peor cosa que decir. Pero de alguna manera con Matthew, siempre
parecía estar bien.
Será mejor que no te pongas demasiado cómoda con esa idea. Ella suspiró y se levantó. A
veces parecía como si nunca conseguiría comprender todo esto.
Mientras Claire y su madre caminaban hacia el bosque un par de noches más tarde,
su madre le transmitió una advertencia poniendo una mano en el brazo de Claire. 125
—Tienes permitido venir a la reunión de esta tarde, pero debes entender algo.
Hasta que tu transformación se complete completa, no tendrás ninguna injerencia
en nuestros trabajos. Beatrice siempre tiene la última palabra en el curso que
tomamos, pero el resto de nuestra manada tiene permitido expresar su opinión.
Excepto tú. Por lo que a ti te refiere, esto es estrictamente una experiencia de
aprendizaje. —La ansiedad apretó la voz de su madre como una cuerda de guitarra.
—Sí, está bien. —Claire pasó de un pie al otro. No es como si tuviera algo que
añadir, de todos modos. ¿Por qué se asusta por esto?
—Bien.
Claire podía oler el alivio de su madre, limpio y afilado.
—Lo que haces en nuestra manada... se refleja en mí también. Tus errores pueden
afectar mi estado. No quiero dar mi posición en la manada a Zahlia. ¿Estoy siendo
clara?
Claire asintió con la cabeza y trató de ignorar el dolor de cabeza que floreció detrás
de sus ojos. Así que si me equivoco, nos lastimo a las dos. Sí, nada de presión allí.
Las sombras a su alrededor parecían más oscuras que de costumbre.
—Um, ¿mamá?
Su madre se volvió hacia ella, con falta de paciencia pellizcándose los labios.
—Me preguntaba... Victoria dijo la otra noche que la seule no sería peligrosa si no
se le caza. ¿Es eso cierto?
—Yo no diría que no es peligrosa. Pero creo que su deseo de permanecer oculta,
que la dejen sola, le impediría atacar a un lobo que no la estaba siguiendo. No
necesitas preocuparte.
Su madre dejó de hablar mientras el claro apareció ante ellas. Beatrice se puso en
cuclillas cerca del fuego, viendo cómo Victoria ajustaba los troncos.
—Claire, yo te saludo. —Los ojos de Beatrice le brillaban con anticipación.
—Beatrice, yo te saludo, —Claire respondió sin problemas. Se volvió hacia
Victoria, cuya amplia sonrisa era contagiosa—. Victoria, yo te saludo, —dijo ella,
FORO PURPLE ROSE

con felicidad verdadera. La madre de Claire puso una mano sobre su hombro y la
apretó con aprecio.
Hasta ahora, todo bien.

Zahlia, Judith, y Katherine llegaron casi al mismo tiempo, y saludos fueron
ofrecidos. Zahlia se dirigió a Beatrice y mostró a la mujer de más edad el lado de su
cuello pálido. Claire sintió la presentación en su postura. Zahlia abrió la boca para
hablar, pero la mamá de Claire se apresuró a hacerlo primero.
126
—Debemos transformarnos antes de discutir la cuestión. Será más fácil, y hay
menos oportunidad de que nos oigan de esa manera. —La madre de Claire escaneó
el bosque a su alrededor con sus ojos expertos de fotógrafa.
Zahlia miró desde su lugar junto al fuego—. Eso no es justo para Claire. Tú sabes
que ella no puede transformarse totalmente. Además, si somos descubiertas en el
bosque, vamos a tener problemas más grandes que ser escuchadas.
—Claire no está autorizada a participar en nuestro debate de esta noche... y todavía
será capaz de oírnos, aunque esté parcialmente transformada. —La madre de Claire
parecía irritada.
—Marie tiene razón, —dijo Judith—. Desde que Claire no va a ser de ayuda,
tenemos que hacer lo mejor para todos los demás.
Claire se cruzó de brazos. Estaba contenta de que Zahlia hubiera dado la cara por
ella, pero que todos hablaran acerca de ella como si no estuviera aún allí la hizo
sentirse como una niña de cinco años de edad que había sido atrapada coloreando
en las paredes.
Todos miraron a Beatrice.
—Claire, —dijo lentamente—. Lo siento, pero tu madre tiene razón. Debemos
permanecer ocultas como sea posible, y es más fácil hacerlo en nuestra forma de
lobo. Vamos a transformarnos.
La madre de Claire se mostró complacida de que Beatrice se había aliado con ella.
Zahlia se puso rígida y se acercó para sentarse junto a Claire.
—Sólo quería decir que siento que vayan a mantenerte amordazada esta noche.
En el borde de la luz del fuego, la madre de Claire acechaba de un lado a otro con
impaciencia.
Sin esperar a que respondiera Claire, Zahlia se levantó y fue a arrodillarse delante
de Beatrice. Con el dedo, dibujó un mapa aproximado en la tierra de los caminos
donde había seguido al seule.
La madre de Claire lanzó una mirada exasperada a la parte posterior de la cabeza
de Zahlia.
FORO PURPLE ROSE

—Tal vez, —sugirió, con voz agria como un limón—, ¿podríamos hablar de tus
resultados como grupo, Zahlia?
La ira se deslizó por el rostro de Zahlia mientras ella se volvió hacia la mamá de
Claire—. En esto no mandas, Marie. Cuida tu lugar.
—Simplemente estoy preguntando por qué estamos esperando, Zahlia.
La restricción fresca de su madre hizo que la explosión de Zahlia pareciera infantil.
La madre de Claire había utilizado el mismo movimiento en ella un montón de
veces, y era terrible. 127
—Yo sólo estaba tratando de dibujar un mapa antes de empezar. Para reducir la
confusión.
—No está mal, Marie, —dijo Katherine—. Necesitamos saber dónde estamos
buscando.
—¡Basta! —La voz de Beatrice era firme—. Zahlia tiene razón... el mapa es
importante, y no hemos perdido el tiempo haciendo que lo dibujara.
La madre de Claire respiró profundamente y se sentó cerca del fuego—.
Ciertamente, Beatrice.
Claire se escabulló hacia atrás hasta que estuvo en línea con las otras mujeres, y su
madre le lanzó una rápida mirada que claramente decía ten cuidado.
Ella realmente no confía en mí en absoluto. Claire mordió una cutícula lastimada y se
concentró en ocultar los sentimientos amargos que se arrastraban a través de su
cara.
—Bueno, —resopló Zahlia—. Yo no tenía intención de causar un retraso. —Se
acomodó en el lado derecho de Beatrice, completando el círculo—. Estaré
encantada de discutir nuestras estrategias cuando que estén listas.
Ella se volvió hacia Beatrice y bajó la cabeza... tan baja que Claire podía ver la
fuerte separación en su pelo oscuro.
Beatrice se puso de pie y levantó las dos manos. Empezó a cantar, y un silencio
cayó sobre las mujeres mientras se transformaban.
Cuando Claire miró alrededor de la fogata a los seis lobos, una ola de celos
calientes rodaron a través de ella. La atrapó con la guardia baja. Se había
acostumbrado a la idea de que ella no era como cualquier otra persona... que iba a
cambiar... pero nunca se había encontrado a sí misma queriendo ser un lobo de esta
manera. Claire se cruzó de brazos frente a su pecho, los puños apretados cubiertos
de pelo debajo de sus axilas. No hacían el anhelo que le dolía en las costillas menos
intenso, pero al menos ella no se sentía como si estuviera a punto de romperse.
Zahlia miró en su dirección, y Claire leyó la simpatía en el movimiento rápido de
las orejas cubiertas de pelo oscuro. Claire se encorvó frente al fuego, tratando de
FORO PURPLE ROSE

ocultar sus pensamientos. Ella sabía que las otras podían leer su lenguaje corporal
como un subtítulo de noticias en la parte inferior de una pantalla de televisión, y lo
odiaba.
Beatrice dio un ladrido rugoso, y los otros lobos se volvieron hacia ella, listas para
comenzar.
A pesar de la fanfarronería de Zahlia, ella realmente no tenía mucha información
sobre la seule. Nadie sabía de dónde venía el lobo solitario ni dónde se escondía.
Claire se sorprendió cuando Victoria se quejó de que la seule no se había
128
presentado a la manada.
Quiero decir, sé que los seules no siguen exactamente las reglas, pero vamos. Si ella no va a
irse, debe al menos tener la cortesía para hacernos saber cuánto tiempo tiene pensado quedarse
aquí... y por qué. El lobo de color arena marrón negó con la cabeza una vez, como si
estuviera tratando de aclararlo.
Si está cazando humanos, supongo que ella cree que no la recibiríamos con gran calidez. La
madre de Claire se quedó muy quieta, la confianza brotando de su mirada fija.
Debemos sacarla a la fuerza, o buscarla y enfrentarnos a ella. Ella no hará nada... nos
corresponde a nosotros resolver la situación. Creo que con todas buscándola, podemos
encontrarla esta noche y terminar las cosas antes de que se nos salgan aún más de las manos.
¡Yo ya había sugerido eso, Marie! Zahlia dio un gemido agitado. Es por eso que yo estaba
caminando por la maleza mucho después de que el resto de ustedes se habían ido a casa la
noche de la luna llena. ¡No puedes actuar como si nadie más hubiera pensado en esa idea! Soy
la mejor rastreadora aquí... no hay razón para que el resto de ustedes estén fuera confundiendo
el camino.
El lobo negro comenzó a jadear, y Claire se preguntó si se estaba imaginando el
ligero olor de pánico... delgado y cortante... que parecía flotar a partir de la piel de
Zahlia.
Envíame, Zahlia pidió, inclinando la cabeza baja hacia el lobo gris a su lado. Voy a
encontrarla por ti, te lo juro. Yo no necesito ayuda de la manada para esto. Será mejor si yo
me voy sola.
No. Nosotras actuamos como un grupo... ya lo sabes. La madre de Claire puso las orejas
hacia atrás. Todas debemos buscarla.
De acuerdo. Los ojos de Judith brillaron a la luz del fuego. No puedes cubrir toda el área
sola, Zahlia. Y puesto que Katherine y yo vivimos en la dirección opuesta, no hay razón para
que nosotras no busquemos por la parte del bosque. No eres la única rastreadora decente entre
nosotros.
Victoria se acostó en el suelo, ocultando su nariz entre sus patas. Obviamente, ella
no iba a buscar a un seule alocada... no mientras estuviera embarazada.
Beatrice se puso de pie, las garras de sus cuatro cavando en la tierra.
FORO PURPLE ROSE

No voy a obligar a nadie a participar en esto... especialmente teniendo en cuenta que dos de
las nuestras son incapaces de hacerlo. Miró a Claire. Tampoco voy a impedir a nadie de
trabajar junto a Zahlia, si así lo desean.
Un suave gruñido rodó en la garganta del lobo negro.
Iré contigo esta noche, Zahlia. Juntas, podemos cubrir más terreno. La madre de Claire se
puso de pie, haciendo caso omiso de la irritación de Zahlia.
También nosotras, Katherine se presionó contra Judith, que movió las orejas estando
de acuerdo. 129
Bien. Creo que yo sólo serviría para retrasar, y puedo ver que Victoria no sería útil, tampoco.
La decepción en la postura de Beatrice era débil, pero estaba allí. El lobo color
arena sumergió la cabeza. Nos aseguraremos de que Claire llegue a casa bien, y luego
regresaremos a nuestra casa.
Claire se quedó boquiabierta. Realmente iban a dividirse y buscar en el bosque por
algún tipo de lobo solitario loco asesino en serie.
Oh, Dios mío.
—Esperen... —La voz humana de Claire sonaba extraña incluso para ella, ya que
se hizo eco en los árboles que rodeaban el claro.
Todos los lobos se volvieron hacia ella, sorprendidos de que había hablado. La
mirada de cuchillos afilados de Marie detuvo al resto de la oración de salir de la
boca de Claire. El pánico revoloteaba en el pecho de Claire como un gorrión. Su
madre le había dicho que guardara silencio, y ni siquiera pudo hacer eso. Mierda.
—No importa, lo siento, —Claire murmuró, mirando hacia el suelo. Ella no podía
sostener la mirada decepcionada de su madre. Por supuesto. Tenía que meter la pata
justo en el final.
¿Estás lista para irnos? La voz de Beatrice era amable pero firme.
Claire asintió con la cabeza.
Entonces puedes guiar el camino, y te seguiremos.
Claire asintió de nuevo, su piel llena de vergüenza. Sus ojos se llenaron y antes de
que comenzara a llorar, Claire dio media vuelta y salió corriendo por el bosque, sus
pies golpeando el camino, ahora familiar, de vuelta a su casa. Ella podía oír a
Victoria y Beatrice detrás de ella, siguiéndola pero sin entrometerse.
Cuando Claire llegó a la orilla de la pared de su patio, oyó a Victoria dar un yip
tranquilo antes de que los dos lobos se volvieran y la dejaran sola.
Claire se detuvo y se apoyó en los ladrillos frescos y desiguales. Las lágrimas
saladas picaban sus mejillas y le dio la bienvenida a la molestia. Quería castigarse
por ser tan estúpida, por hacer algo que pudiera dañar a su madre.
FORO PURPLE ROSE

E hice exactamente lo que ella me dijo que no hiciera. Todo lo que tenía que hacer era
mantener mi maldita boca cerrada, y ni siquiera pude hacer eso bien. ¿Cómo pude ser tan
idiota?
Cuando su llanto había disminuido lo suficiente para que pudiera ver de nuevo,
Claire se deslizó por el agujero y se fue a casa a esperar a su madre. Se metió en la
casa, lavando sin ganas las rayas de llanto que tenía en la cara. A pesar de que
estaba segura de que no sería capaz de dormir, Claire se metió a la cama. Estuvo
allí y se quedó mirando el techo. Finalmente, su agotamiento se impuso, y se quedó
dormida. 130
Cuando se despertó, la luz del sol se filtraba por la ventana, y su cuello estaba tieso
de estar en la misma posición durante mucho tiempo. En la sala, Claire podía oír a
su madre y Lisbeth hablando, pero no podía entender lo que decían.
Se oyó un golpe suave en la puerta antes de que su madre se asomara. Líneas
apretadas rodeaban su boca y círculos oscuros se curvaban debajo de sus ojos.
Marie miró hacia atrás a la habitación de Lisbeth antes de que empezara a hablar.
—Cuando te levantes, ¿podrías venir a mi cuarto oscuro, chérie? Me gustaría saber
tu opinión sobre algo.
Su voz cambió la configuración de los latidos del corazón de Claire a pánico.
Claire se deslizó de la cama—. Déjame cepillarme el pelo, y estaré abajo.
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 14
Traducido por andre27xl - PLAYTHEKEYS

Corregido por Alice_vampire
C
131
laire estaba a punto de terminar de hacerse una cola de caballo en el
cabello cuando el teléfono sonó. Era Emily.
En serio no tenía tiempo para esto ahora.
Aún cuando estaba desesperada por lo que su madre tenía que decir, Claire no
podía ignorar la culpa que se vertía a través de ella, espesa y pegajosa como la miel.
Tomó el teléfono.
—¿Aló?
—Oh por Dios Claire seriamente estoy teniendo la peor semana de todas, —Emily
gimió. La conexión era vacilante por la estática.
—Inclínate más hacia la ventana, —le dio instrucciónes Claire—. No te estoy
escuchando.
—Disculpa. Pero nunca adivinarás lo que Dan hizo.
—¿Dan? —Claire ajustó su cola de caballo frente al espejo.
—¿El chico? ¿Sr. Saludable? Vamos, Claire. —Emily sonaba herida.
—Cierto, disculpa, ¿qué pasó?
—Trató de darme su maldito anillo de clases la noche pasada. ¿Puedes creerlo?
Claire frunció el ceño ante su reflejo en el espejo, confundida e inquieta. Era miedo
quería preocuparse acerca de los problemas de chicos de Emily, pero ella sólo... no
lo hacía. —Eso es algo de 1986 de él, ¿huh?
—¡Es peor que eso! Sólo hemos estado saliendo por un par de semanas, quiero
decir, apenas y hemos ya sabes, tonteado por ahí, y está tratando de... como,
reclamarme o algo. Me asustó totalmente, y luego cuando no lo tomé, él realmente
se rompió en mil pedazos. Dios. Esa era la parte buena de estar atascada en este
hoyo del infierno y ahora todo está arruinado.
—Eso apesta. Em. —Claire observó su reloj.
—¿Qué voy a hacer ahora? —Lloriqueó Emily.
FORO PURPLE ROSE

—No te pongas nerviosa. Pensaremos en algo. Escucha, odio totalmente hacerte

esto, pero mi mamá me está esperando para hablar con ella. ¿Puedo llamarte de
vuelta en un par de horas y lo resolveremos entonces?
Emily hizo un sonido de disgusto. —Bien, déjame sola con mi miseria. Quizás vaya
a preguntarle a las estúpidas gallinas que piensan que debo hacer.
—Emily, —protestó Claire.
—No, está bien, —cedió Emily—. Sólo estoy molesta. Ve a hablar con tu madre y
llámame cuando termines. Voy a comer un poco de chocolate o algo. 132
Tan pronto como colgó, Claire dejó el teléfono y se dirigió a la puerta. Si la peor cosa
que me hubiera pasado en todo el verano fuera que un guapo chico granjero tratara de darme
una joya, estaría totalmente feliz.
Claire ignoró a los celos que se enroscaban alrededor de su cuello como una
serpiente y abrió la puerta del cuarto oscuro.
Las cosas iban mal. Claire lo supo sin que su madre dijera una sola palabra. La
mesa enfrente de su madre sostenía cuatro cámaras, cuidadosamente acomodadas.
No había cintas en la mesa. No había huellas. Tras ella, el monitor de la
computadora relucía a través de su protector de pantalla, ninguna foto digital
llenaba la pantalla. Su madre sólo estaba sentada allí, sus ojos envueltos en ojeras
mirando el vacío. Nunca hacía eso.
—¿Mamá? Tú, uh, ¿querías verme?
—Sí Claire, no quiero asustarte innecesariamente, especialmente en tan...
vulnerable momento de tu transformación. Pero de verdad no veo manera de
ocultarte esto.
Claire se sentó en uno de los taburetes que rodeaban la mesa, su corazón brincando
de arriba hacia abajo en su pecho.
—Tengo pocas pruebas, sólo suposiciones, pero volví afuera la noche anterior sola
luego de que regresaras a la cama, y lo que encontré... Claire, estamos en un peligro
mucho mayor del que hubiéramos pensado. Hasta que sepa de seguro que estoy en
lo correcto, no diré nada más. Sería injusto. Pero debes ser muy cuidadosa, Claire.
Ya no estoy segura de en quién –o en qué– confiar. Por favor, debes prometerme no
salir de noche sin mí hasta que te diga. —Su madre tomó la mandíbula de Claire
entre sus largos dedos—. Prométemelo.
Claire asintió. —De acuerdo. Pero, mamá, lo que... —Un sonido agudo apenas
perceptible interrumpió a Claire en mitad de la frase.
Su madre miró el teléfono en su cadera y frunció el ceño. —Lo discutiremos más
tarde, chérie. Necesito contestar esta llamada. Voy a salir más tarde para buscar más
pruebas, y Lisbeth estará haciendo algunos recados por mí. Si llega a casa antes que
FORO PURPLE ROSE

yo, llámame inmediatamente. —Marie se giró hacia su ordenador y levantó el

teléfono hacia su oído—. Habla Marie.
Claire salió del cuarto oscuro mientras su madre hacía planes acerca de una cacería
en Turquía. Su madre realmente no le había dicho nada. Bueno, al menos las cosas
están de vuelta a la normalidad de alguna manera. De todas formas, ¿por qué demonios
le importa si Lisbeth llega a casa primero que ella? Con una última mirada hacia
atrás, Claire se alejó del cuarto oscuro y fue derecho hacia arriba.
En su cuarto, el teléfono la observaba acusadoramente. Mathew era a la única
133
persona con la cual Claire se sentía con ánimos para hablar, pero le había
prometido a Emily que le devolvería la llamada.
Claire suspiró y marcó el número de Emily.
—Hey, gracias por llamar de vuelta. —Emily sonaba genuinamente agradecida.
No hay problema. Resulta que, aparentemente, estoy en peligro mortal, pero seguro,
resolvamos un problema de chicos. Huh. ¿Todavía puedo estar en peligro mortal si no soy
realmente humana? Claire sacudió la cabeza.
—¿Entonces? ¿Qué voy a hacer con Dan? —preguntó Emily.
Claire quería decirle a Emily que estaba siendo ridícula, que debería estar
agradecida de que esto fuera la peor cosa que le hubiera pasado, pero eso no era
justo. Nada de esto era culpa de Emily. Soy la anormal aquí. Claire se esforzó en
imaginar que le habría dicho a Emily si esto hubiera sucedido el verano pasado.
—No creo que debas hacer nada. Quiero decir, ¿o lo supera o no, sabes? No vale la
pena estresarse por eso. Si tiene algo de células cerebrales, se dará cuenta de que
está actuando como un idiota y volverá arrastrándose de vuelta a tí. Si no, bueno,
tus padres no te pueden dejar ahí por siempre, ¿correcto?
Emily suspiró. —Ya es como si hubiera estado aquí por años, pero supongo que
estás en lo correcto. Sólo estoy molesta. Quiero decir, demasiado para un
revestimiento de lujo, ¿sabes?
Claire oyó el sonido de una lata de soda siendo abierta. Emily era la peor adicta a
Cola de Dieta que conocía, y ese pequeño sonido la hizo extrañarla más que nunca.
—Desearía que estuvieras en casa, —dijo Claire—. Todo es más divertido cuando
estás.
—¿Cómo qué? ¿Qué has estado haciendo sin mí? Dios, Claire ¡te extraño tanto! En
serio, quiero escuchar que ha pasado contigo.
—No mucho, de verdad. Y, este, en cierto modo necesito realizar otra llamada.
Claire moría de ganas de hablar con Matthew. Era mucho más fácil que hablar
con Emily. Hizo a Claire retorcerse a darse cuenta eso, pero era verdad.
—¿Matthew? —Emily chilló.
FORO PURPLE ROSE

—Sí, y realmente no quiero hablar de eso ahora.

—Está bien, pero en serio, Claire, si no consigo algunos detalles pronto me voy a
volver loca.
—Lo sé, lo sé. Hablaremos más tarde, ¿de acuerdo?
—Saludaré a las vacas por ti.
Claire podía escuchar a Emily riendo mientras colgaba. Al menos ella está de mejor
humor. Negó con la cabeza mientras le marcaba a Matthew.
134
—¿Hola? —su voz rasposa tomó a Claire por sorpresa.
—Matthew, hola... ¿estás bien? —ella chilló. Oh, muy sofisticado, Claire.
—Sí, ya sé que sueno a mierda. Desde que papá planeó su reunión de hoy, el
teléfono ha estado sonando sin parar. —Parecía agotado.
—Entonces, ¿cómo es que estás atrapado contestándolo?
Matthew lanzó un suspiro. —Todos están arriba, en la estúpida “Habitación de
Guerra” de papá, tratando de averiguar dónde se deben poner las trampas.
El corazón de Claire tartamudeó contra sus costillas. —¿T... trampas?
—Sí, ¿para el hombre lobo? Es su nuevo plan. Ellos van a intentar que las pongan
antes de que oscurezca... piensan que el hombre lobo puede estar siguiendo la
cobertura de la prensa, por lo que intentan mantenerlo súper secreto —hizo una
pausa—. Uy. Uh, no digas nada de eso, ¿de acuerdo?
—No hay problema. —La mentira fue fácil. Demasiado fácil. La voz de su madre
hizo eco en su cabeza. Este mundo... nos impulsa a mentir mucho, Claire. Más que la
mayoría—. Entonces, ¿estarás jugando al secretario todo el día? —le preguntó.
—Nah. Habré terminado muy pronto. ¿Puedes pasar el rato conmigo?
—Sí... —el recuerdo de los ojos penetrantes del Dr. Engle hicieron que el
cerebro de lobo de Claire se sacudiera—. Mamá y Lisbeth se habrán ido esta tarde,
y va a hacer demasiado calor otra vez. ¿Tal vez podrías venir y que pasáramos el
rato en la piscina?
—Me suena bien.
Claire cerró su teléfono. Que Matthew estuviera aquí era probablemente un riesgo
mayor que el que debería tomar. Pero entre la memoria de la sonrisa tibia y torcida
de Matthew, y su madre negándose a hablarle, otra vez... tal vez no era tan mala
idea después de todo. Y su madre le había dicho que ella no quería que estuviera
sola más de lo necesario, ¿verdad?
Unas horas más tarde Claire estaba sentada en la cocina con Lisbeth mientras
componía una lista de compras enorme.
Su madre apareció en el vestíbulo, llamando a Claire con un dedo largo.
FORO PURPLE ROSE

—Claire, ¿puedo hablar contigo un momento? —las líneas afiladas grabada en la

frente de su madre eran una mala señal. Claire se deslizó de su silla.
—Ya vuelvo, —musitó a Lisbeth. Claire siguió a su madre a la sala—. ¿Qué
sucede?
Su madre frunció el ceño. —Voy a salir. Creo que tengo una idea de qu... —se
detuvo, sus ojos fijos en la cocina, donde Lisbeth estaba golpeando las puertas del
armario un poco demasiado obvio—. En lo que respecta a nuestra conversación
anterior.
135
La boca de Claire se le secó. No podía permitir que su madre fuera rondando por
todo el bosque mientras el padre de Matthew y sus ayudantes ponían trampas,
sobre todo si estaba en su forma de lobo. Y probablemente lo estaría, puesto que era
la mejor
manera de ocultar su identidad.
—Mamá, necesito hablar contigo primero, ¿de acuerdo? Vamos, umm, ¿podemos ir
a hablar a mi cuarto o algo así?
Marie negó con la cabeza. —No tengo tiempo, chérie. Hablaremos cuando
regrese. Puede ser un poco más tarde de lo habitual. Y no importa lo que pase, no
debes salir de esta casa hasta que yo te diga que es posible.
La mirada cerrada que Claire conocía demasiado bien se deslizó por los ojos de su
madre. Antes de que pudiera decir nada, su madre se volvió y se encaminó por el
pasillo con velocidad antinatural. Velocidad de lobo.
—¡Mamá!
Marie se volvió, su rostro una máscara de irritación. —¡Ahora no, Claire! —su voz
era un gruñido, el comando claro—. Más tarde —no fue una petición... se trataba
de una orden de un miembro de la manada de más alto rango.
—Simplemente... ten cuidado, —farfulló Claire, lanzando su mirada a la puerta de
la cocina—. Hay cosas peligrosas... por ahí. —como iban las advertencia, fue
bastante mala, pero entre la insistencia de su madre y Lisbeth flotando en la cocina,
era lo mejor que Claire pudo hacer. Si realmente su madre tenía la intención de
transformarse y buscar en el bosque, entonces ella estaba tomando un riesgo
enorme.
Lisbeth se fue unos minutos más tarde, viéndose distraída e irritada.
Claire se sentó en la casa vacía y esperó a Matthew, preguntándose si era posible
que el tiempo pasara más despacio.
–Hola.
La sonrisa de Matthew le pegó como una ráfaga de aire tropical. Lo mismo hizo el
aire real... la ola de calor no daba señales de disminuir pronto.
FORO PURPLE ROSE

—Ay, está horrible allá afuera. —Claire le indicó hacia la casa—. ¿Listo para la
piscina?
Matthew ondeó la toalla enrollada en su mano. —Absolutamente.
—Genial. Sólo necesito ponerme el traje. —Claire dejó a Matthew en la cocina y
se lanzó a ponerse su traje de baño lo más rápido que pudo.
Diez minutos más tarde, flotaban en las sillas de la piscina con el sol cayendo a
plomo sobre ellos. Claire no dejaba de mirar por las ventanas de la cocina, con la
esperanza de ver a su madre mirándola... aunque ello significaría ser atrapada con 136
Matthew. Ella estaba lo suficiente preocupada como para no importarle.
—Esto es el paraíso, —anunció Matthew.
Claire miró las gotas de agua brillando en su pecho.
—¿Estás bien? —Matthew preguntó—. Pareces un poco distraída.
—Lo siento, creo que lo estoy, un poco. Mi madre y yo tuvimos algunas rarezas
esta mañana, y no puedo con ello. —Eso era decir poco. Pero ella no podía decir
exactamente que estaba preocupada por lo que podría suceder si su madre se
encontraba a su padre en el bosque. Tal vez ni siquiera esté ahí. Ella no dijo con
exactitud a dónde iba...
Claire suspiró y se mordió el labio.
Matthew se deslizó de su silla de piscina en el agua y nadó hacia ella. —Parece que
ha sido un día de malos padres por todos lados. —Le tomó las manos y suavemente
la llevó de su silla flotante—. ¿Hay algo que pueda hacer?
Claire se inclinó hacia su pecho. —¿Distraerme? —sugirió.
Sonrió.
—Eso puede arreglarse. —Se inclinó y la besó, apretando sus brazos alrededor de
ella. Claire sintió las dos partes de sí misma alzarse, empezando a luchar. El ser
humano en ella disfrutaba del contacto de su boca suave, dándole la bienvenida a la
presión de sus manos contra sus hombros. El resto de Claire... el lobo... quería irse
por su cuenta, a pensar en lo que podía hacer por su madre. Ella no sabía a qué
lado escuchar... no sabía qué voz era el ángel en su hombro, y cuál era el diablo.
Traté de advertirle... No hay nada que pueda hacer al respecto ahora mismo, de todos modos.
A pesar de su ansiedad, Claire cayó en la familiaridad del ser humano, y rodeó con
sus brazos la espalda caliente de Matthew.
Mucho antes de que el sol amenazara con hundirse, Matthew sugirió que habían
abusado de su suerte lo suficiente por un día. Después de que su coche desapareció
por el camino, Claire salió a la escalinata y se sentó. Envolvió los brazos alrededor
de sus piernas y se quedó mirando los árboles en la distancia, tiritando a pesar del
calor. Por favor, que esté bien. Por favor.
FORO PURPLE ROSE

La oscuridad cayó, y la madre de Claire todavía no había vuelto a casa. Ella no

podía soportar la espera. Algo había salido mal. Claire podía sentirlo. Tenía que
hablar con Beatrice.
El teléfono estaba caliente en su mano sudorosa. Después de una búsqueda
rápida en Internet para encontrar el número, marcó, y luego miró a los dígitos
brillar intensamente en la pequeña pantalla. Todo lo que tenía que hacer era pulsar
ENVIAR. Claire cerró los ojos y apretó el botón.
El timbre sonó una sola vez antes de que Victoria respondiera. —¿Hola?
137
—¿Victoria? soy Claire. Oye, realmente tengo que hablar con Beatrice.
—¿Por teléfono?
La consternación en la voz de Victoria envió duda deslizándose a través del
estómago de Claire como una serpiente.
—Um, sí. Es una especie de urgencia. ¿Está ahí?
—No, no está. ¿Qué diablos está pasando?
La voz de Claire se tambaleó cuando contestó. —Mamá se fue, Victoria. Creo que
fue a buscar algo en el bosque... la seule, supongo... pero el doctor Engle puso
trampas por ahí, y si ella ha sido capturada... —Claire no pudo terminar la frase.
Las palabras eran demasiado horribles para decir—. Tenemos que buscarla. Puede
ser que necesite ayuda.
—Claire, no hay razón para pensar mal de nada. Tu madre probablemente sólo
quiere
capturar al seule antes que Zahlia lo haga. Estoy segura de que está bien. Marie es
una mujer muy capaz... y es una loba incluso más capaz.
La mandíbula de Claire se tensó con incredulidad. —¿Crees que esto es sólo acerca
de su deseo de vencer Zahlia?
—Probablemente. Sé que eres demasiado nueva para saber todo esto, pero tu mamá
y Zahlia no son precisamente las mejores amigas. —Victoria vaciló.
—Muy bien, así que no se aman, Victoria, realmente pienso que mi mamá podría
estar en problemas...
—Claire, —dijo Victoria, interrumpiéndola—. Tu madre está bien. Confía en mí.
Ve a
ver una película o algo así, y trata de relajarte. Hablaré contigo más tarde.
—Bien. —Claire colgó el teléfono. Si iban a tratarla así... como si fuera sólo una
novata estúpida... entonces tal vez iría a preguntarle a alguien que pensara que era
capaz de hacer algo.
Llamó a Zahlia, pero fue directamente al buzón de voz.
FORO PURPLE ROSE

—Hola, soy yo, Claire. ¿Me puedes llamar tan pronto como oigas esto, por favor?
Gracias. Claire colgó el teléfono y empezó a caminar en el césped oscuro, deseando
desesperadamente que hubiera una respuesta fácil a una sola de las preguntas que
giraba en su mente.
138
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 15
Traducido por: andre27xl y florchi
L
isbeth llegó a casa unos pocos minutos luego de que las primeras 139
estrellas comenzaran a ser vistas.
—¿Claire? —Lisbeth asomó su cabeza en la sala.
—¿Si?—. Voy a poner algunos filetes de carne en la parrilla. ¿Está tu madre en
casa?
—Uhm, no, no está aquí. —Claire retorció sus pies, animándose a apurarse e
inventar una razón lógica de que su madre no hubiera vuelto.
—De acuerdo. —La voz de Lisbeth era lenta y profunda en sospecha. —Bueno,
¿dónde está?
—Ella, eh, llamó y dijo que tenía que viajar rápido a Denver. Algo acerca de un
problema de último minuto.
Lisbeth cruzó sus brazos. —¿Desde cuándo tu madre tiene un cliente en Denver?
Nunca lo ha mencionado.
El sudor erizó la frente de Claire. Ten calma, ten calma, ten calma. Se encogió de
hombros. —No sé. Sabes que no me dice nada. Así que, um, desde que ella no está,
supongo que podemos adelantarnos y comer cuando sea. —Claire trató de pasar a
Lisbeth.
El apretón de Lisbeth en su hombro sorprendió a Claire. —No tan rápido. Quiero
saber qué está pasando. Qué está realmente pasando. Has estado merodeando por
semanas, durmiendo a todas horas del día, ya no me dices nada. Y tu madre no es
mejor. Cuando mencioné que estaba preocupada por ti, sólo me ignoró. Sé que no
estamos realmente relacionadas, pero las amo, y estoy preocupada. Por favor,
Claire, háblame.
Claire miró a Lisbeth, recordando todas las horas que había pasado con ella,
ayudándola con la tarea, enseñándola a tejer, escuchándola cuando se quejaba de
los chicos y la escuela y su madre. Ella confiaba en Lisbeth y quería
desesperadamente decirle qué estaba pasando. Quizás ambas podrían descifrar qué
hacer, cómo encontrar a su madre. Las palabras brillaban en la punta de su lengua,
pero nunca pudo realmente decirlas.
FORO PURPLE ROSE

—Claire, por favor. —Lisbeth apretó su brazo, sin molestarse en esconder su

desesperación—. Puedes confiar en mí, quiero decir, ¿qué, piensas que soy la mujer
lobo o algo?
Lo dijo como un chiste, pudo notar Claire, pero el secreto se consumía y secaba en
la boca de Claire como una hoja en otoño. Quizás Lisbeth no fuese una mujer lobo,
pero definitivamente le estaba ocultando algo a Claire. Y eso significaba que
Lisbeth no confiaba totalmente en ella. Así que, ¿por qué debería Claire confiar en
ella? Cuando miró de vuelta a la mujer que la había cuidado por tantos años, las
mentiras brotaron fuera tan fácil como si hubieran abierto un grifo. 140
—Lisbeth, nada está pasando. De verdad. Mamá se fue por una cosa al azar del
trabajo, justo como siempre lo ha hecho. No es como si nos hubiese dado una
tonelada de avisos, así que no veo cual es el gran problema esta vez. Y hablo
contigo honestamente. Sólo porque no te digo cada pequeña cosa de mi vida social
no significa que no me gustes o algo. No es como si me dijeras todo acerca de tu
vida.
Lisbeth se sonrojó y dejó caer el brazo de Claire. Bingo. Sabe que estoy en lo correcto
acerca de eso.
—De acuerdo. Disculpa. Sólo, sólo vayamos a comer.
—Suena bien. Estoy hambrienta. —Claire observó los hombros de Lisbeth caer
derrotados. Una lluvia de culpa calló crepitando familiarmente sobre ella. —Quizás
después de cenar podríamos ver TV o algo —añadió.
—¡Eso estaría bien! —Lisbeth se animó ante la sugerencia—. Mejor voy a buscar la
carne a la parrilla.
Cuando dejó la habitación, Claire llamó a su madre. No tenía sentido que su madre
quisiera saber cuando Lisbeth estaba en casa, pero de todas maneras... La llamada
fue al buzón de mensajes y el corazón de Claire se hundió. Su mal presentimiento
acerca de todo esto ahora se había vuelto realmente terrible.
Después de cenar Claire se sentó acurrucada en el sofá con Lisbeth. Mordió sus
cutículas y trató de verse como si estuviera prestándole atención a las comedias que
resonaban en la pantalla. Si algo hubiese pasado, si hubiese sido atrapada, las noticias
interrumpirían esta porquería. El pensamiento sólo la tranquilizó a medias. Si su
madre hubiese corrido a la seule, las noticias no sabrían de ello, o en realidad, ¿lo
harían?
Horas después, Lisbeth se levantó y estiró. —Ugh, eso es más de lo que puedo
tomar del mercado masivo de los medios por esta noche. Voy a la cama, Claire–
osita. ¿Seguro estás bien?
—Sí, estoy bien. Y no me llames así.
FORO PURPLE ROSE

Lisbeth se rió por lo bajo y se dirigió a la ducha. Claire caminó hacia la ventana y
miró fuera hacia el oscuro césped, deseando que su madre viniera galopando a
través de la grama. El deseo de escabullirse al oscuro bosque era tan fuerte que los
huesos de Claire dolían. No podía parar de imaginar a su madre, atrapada en
alguna clase de horrible trampa o destrozada por la seule. Pero no importaba cuán
fuerte quisiera ir, Claire no pudo sólo ignorar una orden del miembro más antiguo
de la manada. Alguna primitiva compulsión a obedecer emanó de lo profundo de
su cerebro de lobo, dejándola encerrada en la muy vacía casa. Cuando escuchó a
Lisbeth cerrar su puerta, Claire se dirigió arriba y miró los árboles desde la ventana 141
de su habitación.
Por las tres noches, Claire continuó con la vigilia. Le dio a Lisbeth falsos mensajes
de Marie, y deseó desesperadamente que Beatrice hubiera decidido hacer algo.
Para el momento en que el sol se apoderó del horizonte después de la tercera
noche, Claire había colapsado en su asiento de la ventana, asustada y cansada.
Cuando los primeros rayos tocaron la cara de Claire, una fiera determinación se
hinchó dentro de ella. ¿Por qué debería ser la pequeña buena escucha que se
suponía tenía que ser? No la estaba llevando a ningún lado y no estaba ayudando a
su madre.
—Al diablo con la orden de la manada. Al diablo con la orden de mi madre. Si está muerta
—Claire forzó su mente a pensar en la palabra—, no hará ninguna diferencia, de todas
maneras.
Claire se volteó hacia su computadora y miró la dirección de Victoria. Estaba a
medio camino cruzando el pueblo, pero no había manera de que pudiera pedirle a
Lisbeth que la llevara allá. Claire tamborileó sus dedos al borde del teclado. Era
como tambalearse en el borde de un risco. Sabía que podía saltar, que debería
saltar, pero la parte animal de su cerebro le gritaba que no lo hiciera, que no se
pusiera en peligro tan tontamente.
Los músculos de Claire se torcieron con indecisión. Irse. Quedarse. Irse. Quedarse. De
acuerdo, voy definitivamente. Pero si mamá está bien, va a estar endemoniadamente
disgustada conmigo. Mierda.
Afuera, el bosque esperaba, usando una temprana neblina matutina como un traje
de gala. El papá de Mathew probablemente ya estaría fuera, revisando sus trampas
nuevamente. La idea conmocionó a Claire hasta la médula. Tenía que ir, si él no
iba a desperdiciar el tiempo, ella tampoco lo haría.
Después de garabatear una nota falsa a Lisbeth acerca de dónde iba, y soplar el
polvo del casco de su bicicleta, Claire se fue a través del inclinado camino.
Esto es tan estúpido. Si hubiera recibido un auto en mi cumpleaños como cualquier otro a sus
dieciséis años, podría estar con el aire acondicionado.
FORO PURPLE ROSE

Para el momento en que llegó al camino de entrada de Victoria, su remera estaba

mojada por el sudor, y el olor del miedo y el agotamiento se extendía por la tela
húmeda. Claire tocó el timbre, y después miró su reloj. Santa mierda. ¿Cómo llegué
aquí en veinte minutos? ¡Debería haberle tomado una hora de viaje hasta aquí! Tendría que
tener más cuidado. Cuando estaba asustada, era demasiado fácil hacer las cosas
más rápido de lo que un humano normal podría.
Victoria abrió la puerta.
—Oh, Claire, debería haber adivinado que vendrías. —Empujó a Claire dentro con
142
su mano libre. En la esquina del cuarto, Beatrice alzó la vista de su tejido.
—Lo siento —jadeó Claire—. Es sólo que… mi madre aún no ha llegado a casa.
Ya sé que dijiste que no era la gran cosa, pero creo que está buscando la seule. Si
está herida, si algo le pasó… tenemos que encontrarla.
Beatrice miró en dirección de la TV. El titulas de las NOTICIAS DE ÚLTIMO
MOMENTO se desplazaba por la pantalla. —Has… ¿no has visto las noticias? —
dijo ella, sus ojos fijos en el cuadrado de hilos tono pastel sobe su regazo—.
Claire… tu madre ha sido atrapada. Lo siento tanto.
—¿Atrapada? —la palabra bramó en la garganta de Claire mientras lo decía,
asfixiándola—. Si. Me temo que sólo es cuestión de tiempo antes de que la obliguen
a revelar su identidad, y entonces el Dr. Engle le administrará su “cura”.
Las manos de Beatrice temblaban mientras decía las palabras, y eso fue lo último
que notó Claire antes que el suelo se arremolinara en su encuentro y todo se
volviera oscuro.
—¡Claire, Claire! Despierta.
Los dedos que pellizcaban su mejilla eran gentiles, pero Claire abofeteó la mano
apartándola de su rostro sin pensar. Los ojos de Beatrice brillaban con
preocupación.
—Lo siento —dijo Claire, agachando instintivamente su cabeza. La anciana inhaló
y se dio la vuelta. Claire había sido perdonada, esta vez—. Entonces, ¿qué vamos a
hacer?
—Debes ir a casa, y debes esperar. —Beatrice se sentó de Nuevo en su silla y
recogió las agujas de tejer—. Una vez que tengamos una mejor idea de lo que el Dr.
Engle planea hacer, la manada se reunirá para discutir nuestro siguiente
movimiento.
Claire se puso de pie. Sus rodillas aún débiles tambaleándose, y se agarró de la
parte de atrás del sofá para apoyarse. Era sólo la ira ardiente, creciendo por su
espina como un relámpago que la mantenía vertical. —Ellos… ellos tienen a mi
madre. —la voz de Claire vaciló. Se forzó a mirar el rostro del familiar y hermoso
FORO PURPLE ROSE

lobo en la pantalla del TV. Su madre paseaba en la diminuta jaula donde la tenían,
sus orejas aplastadas contra su cabeza.
Claire miró a Beatrice con incredulidad. —¡Tienen a mi madre! Ya todos saben lo
que ellos planean hacerle… ¡ellos le darán su maldita “cura” en luna llena! Cuanto
más esperemos, menos chances tenemos de conseguir sacarla. Esperando la
matarán.
Beatrice no alzó la vista. —El tiempo gastado en planificar no se pierde. Y además,
no estamos seguros de qué efectos los experimentos del Dr. Engle tengan en un
143
hombre lobo real. Incluso si no fuéramos capaces de rescatarla, lo que es probable,
teniendo en cuenta el tipo de seguridad que el Dr. Engle está usando, es todavía
posible que tu madre pueda sobrevivir su tratamiento. Debemos tomarnos tiempo
para explorar todas nuestras opciones. —Tomó una profunda inhalación y se
encontró con la mirada de Claire. Lágrimas brillaban en las esquinas de sus ojos—.
Por favor, debes saber que esta no es una decisión que he tomado a la ligera, joven.
La seguridad de nuestra manada está primero que todo lo demás. Si eso significa el
sacrificio de uno, entonces debemos aceptarlo incluso aunque duela. No voy a
arriesgar el futuro de todos por el bien de tu madre —dijo ella, acariciando la manta
que estaba haciendo—. Y tu madre haría lo mismo, tomaría la misma decisión, si
estuviera en mis zapatos.
Claire miró a Victoria, esperando que hablara, esperando que hiciera cambiar de
opinión a Beatrice. Victoria se apoyó contra la pared, sus hombros estaban
encorvados, cada músculo de su cuerpo inclinado hacia su parte media,
protegiendo el diminuto bebé que crecía ahí.
Están asustadas. Están asustadas por el bebé y van a dejar que el Dr. Engle destruya a mi
madre.
—No es la manada lo que te importa en absoluto, ¿no? —espetó ella—. Tienen
miedo por sí mismas y sólo van dejar que ellos tengan a mi madre debido a eso. —
Claire miró duro a Victoria—. ¿Qué harías si fuera Beatrice, tu propia madre, a
quien ellos capturaron?
—Se cuán difícil es esto para ti, Claire. Marie es como una hermana para mí —la
voz de Victoria se quebró—. Pero sólo porque tu madre hizo algo que sabía que no
era seguro, no significa que ella querría que el resto de nosotros nos arriesgáramos.
Estoy segura de eso.
Un gruñido quedó en la garganta de Claire ante las palabras de Victoria. ¿Cómo se
atrevía a sugerir que Marie había actuado irresponsablemente? —Mi madre estaba
tratando de salvarnos, y arriesgó su propia vida para hacerlo. Si ustedes son
demasiado “débiles” —escupió la palabra— para ayudarme, encontraré ayuda en
otro lugar. Estoy segura que Zahlia lo hará.
El ojo izquierdo de Beatrice se movió nerviosamente cuando Claire mencionó al
lobo oscuro, y Claire supo que había tocado un nervio.
FORO PURPLE ROSE

—Zahlia puede ser valiente, pero también es leal a la manada —Beatrice dijo
suavemente—. Incluso si no me obedecieras, pensaría dos veces antes de pedirle
ayuda.
Perra manipuladora. Claire giró y se dirigió a la puerta principal. —No estoy
interesada en tomar lecciones de lealtad de alguien que obviamente no conoce del
tema.
Claire dio un portazo lo bastante fuerte para hacer sonar las bisagras y se subió
sobre su bicicleta. El casco quedó tirado en la hierba como una tortuga patas arriba.
144
Estaba protegida por la velocidad y la fuerza que bombeaban a través de ella en su
camino por la ciudad, y los sentidos en aumento que significaba que podía escuchar
a los autos viniendo a larga distancia antes de que pudiera verlos, podía oler a las
personas sobre la acera antes que deambularan delante de ella. Los cascos eran para
los humanos. Claire era un loup–garou (hombre lobo en francés).
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 16
Traducido por: elamela, playthekeys y Selune
L
Corregido por: esmeralda38
145
a mirada que Lisbeth le dio a Claire cuando irrumpió en la cocina fue
de preocupación.
—¿Dónde diablos has estado? ¿Has perdido la cabeza, montando en este tiempo?
Hay una advertencia de calor fuera, por el amor de Dios. Y estas morada. ¿Pensaste
siquiera en llevarte agua contigo? — Lisbeth no esperó a que respondiera. Le
empujó un enorme vaso a Claire—. Siéntate en este instante y bébete esto. ¿Y si
hubieras tenido un golpe de calor? ¡Tu madre nunca me lo perdonaría, Claire!
Las palabras salieron automáticamente. —Lo siento. Yo…
—Puedes disculparte luego. Bébete esto y luego, ve a tomar una ducha fría. —
Lisbeth tiró bruscamente una taza de té al mostrador, derramando la hierbabuena
del agua en el suelo. Mientras estaba limpiándolo y murmurando algo sobre el
trabajo de seguridad bajo su cuidado, Claire se tomó el agua y se escabulló
escaleras arriba.
Cerró la puerta de su habitación y luego entró en el cuarto de baño y abrió la
ducha, dejando correr el agua fría sobre sus hombros. Claire estuvo de pie bajo el
chorro helado, sintiendo la rabia en sus tripas haciendo un nudo más y más
apretado hasta que fue una pequeña bola de rabia azul y blanco.
Trató de llamar a Zahlia, pero su buzón de voz saltó. Bueno, todo lo que tenía que
hacer era encontrar su dirección e ir hacia allí.
No era tan fácil averiguar dónde vivía Zahlia como lo había sido al localizar a
Beatrice y a Victoria. Cuando al fin Claire tuvo una dirección, un apartamento en
una parte imprecisa de la ciudad, su pelo se había secado. Estaba demasiado lejos
para ir en bicicleta. Tendría que tomar el autobús. Claire echo un puñado de
monedas en su bolsillo. Siempre preparada, ¿verdad? Tan casualmente como pudo,
Claire bajó las escaleras y rebuscó en la cocina algo para desayunar.
Lisbeth estaba de pie en el umbral de la puerta, ceñuda. —Espero que no tengas
planes para hoy, señorita, porque no vas a salir de esta casa hasta que tu madre
regrese de su viaje.
Sus palabras trajeron un torrente de bilis a la boca de Claire. ¿Cómo se suponía que
su madre volviera a casa si no podía salir de la casa?
FORO PURPLE ROSE

—Lo siento —dijo.

—No es suficiente esta vez. Además del hecho de que me asustaste casi hasta la
muerte, tenía algo de lo que realmente necesitaba encargarme esta mañana, pero
estaba demasiado ocupada esperándote para ir a ninguna parte. Tienes dieciséis
años ahora. Lo suficientemente mayor para empezar a tomar en consideración a
otras personas de vez en cuando.
Claire agachó su cabeza. —No sabía que tenías planes. No tenías que esperarme.
Soy lo suficientemente mayor para dejarme en la casa y llegar a ella sola.
146
Lisbeth suspiró. —Ese no es el asunto aquí. Ahora, me voy a ir a ver si hay alguna
noticia de ese monstruo que capturaron la última noche, pero estaré vigilándote,
Claire. Y tendrás que estar mejor donde espero que estés, cada segundo, ¿has
comprendido?
Lisbeth era generalmente tan zen con las cosas, meditando sobre los problemas y
viniendo con lo que le gustaba llamar “soluciones agradables”. Claire abrió su
boca, dispuesta a disculparse de nuevo, y se detuvo. El olor que lleno sus fosas
nasales era inconfundible. Por debajo de la ira de Lisbeth, olía a miedo.
La boca de Claire chasqueo al cerrarse cuando captó la manera en que Lisbeth
estaba de pie, los brazos cruzados sobre su pecho, los puños apretados. Realmente
estaba asustada porque me fui. Mierda. Sé que lo fastidie todo a lo grande. Claire
automáticamente torció su cabeza a un lado, dejando al descubierto un poco su
cuello. Lisbeth no podía saber los signos de sumisión de la manera en que otro lobo
lo haría, pero no podía dañarla. —Realmente lo siento, Lisbeth. Si estás de
acuerdo, sólo iré escaleras arriba y comeré en mi cuarto.
—Bien. — Lisbeth descruzo los brazos—. Pero no dejes migajas sobre la alfombra.
Acabo de limpiar, y no voy a volver a pasar la aspiradora por esa pocilga que
llamas cuarto. —Claire podía ver su ira desapareciendo—. Tendré cuidado.
Todo lo que tengo que hacer es esperar. Solo un día o dos. Luego, iré a buscar a Zahlia.
Fiel a su palabra, Lisbeth comprobó a Claire cada par de horas, incluso ajustó la
alarma de su reloj para que poder hacer unas pocas comprobaciones de la cama en
mitad de la noche. Claire se sacudió bajo sus sabanas, sintiendo la frustración de
estar atrapada, enjaulada.
Dos días llenos de preocupación más tarde, Claire y Lisbeth comían una silenciosa
cena juntas en la cocina. Lisbeth se sentó pegada a las noticias, que no era nada
más que imágenes de Marie paseando en su jaula, mezcladas con las declaraciones
del doctor Engle sobre el “gran progreso” que estaban haciendo y un ocasional
informe del tiempo, sólo para poder mencionar la sequía de nuevo. Claire no podía
esperar más. Tenía que ir a encontrar a Zahlia. La única buena noticia fue que con
el Dr. Engle anunciando que el hombre lobo había sido capturado, no debería
FORO PURPLE ROSE

haber mucha gente afuera de noche, así que nadie se daría cuenta de ella en su
bicicleta.
Cuando finalmente escucho los ronquidos procedentes del cuarto de Lisbeth, Claire
se coló y apagó la alarma de Lisbeth, y luego se deslizo fuera de la casa de la misma
forma que había hecho casi todas las otras noches durante las últimas semanas.
Una soledad que Claire no solía sentir se deslizó a través de ella. Podía sentir un
aullido construyéndose en su interior, el impulso que expresaba sus sentimientos
era casi demasiado fuerte para alejarla.
147
Beatrice y Victoria, de su propia manada, se habían negado a ayudarla a encontrar
a su madre. El pensamiento llenó la boca de Claire con el amargo sabor de la bilis.
Escondió su bicicleta detrás de algunos arbustos a pocos bloques de la parada de
autobús más cercana y esperó, luchando por no llorar. Cuando el autobús llegó al
fin, Claire entro y se sentó en el borde de uno de los duros asientos de plástico,
mirando los postes de las paradas, poniéndose más furiosa mirando hacia afuera.
En el momento en que llegó a casa de Zahlia, estaba brillando de rabia.
Alambres oxidados colgaban del timbre de fuera del edificio de apartamentos de
Zahlia. Claire tiró de la grasienta asa de la puerta del vestíbulo. Se abrió fácilmente.
Dentro, las luces fluorescentes parpadeaban y zumbaban sobre su cabeza. Se
estremeció. La casa de Beatrice y Victoria no había sido precisamente glamurosa,
pero esto era un paso hacia la condena. No tenía ni idea de que Zahlia vivía en un
lugar como este.
Claire tomó las desvencijadas escaleras de tres en tres hasta que llegó al quinto piso.
Golpeó en la puerta del apartamento 503 y esperó. Al final del pasillo, dos personas
se gritaron entre sí en una lengua que Claire no comprendió. Cuando oyó el sonido
de cristales rotos, volvió a llamar. La corriente de peligro, el sitio olía a miedo y
malicia y desesperación, era imposible de soportar en sus intensificados sentidos.
La próxima luna llena estaba a un poco más de dos semanas de distancia y con
cada noche que pasaba, Claire podía sentir su transformación volviéndose más
completa.
Todo a su alrededor presionándola más duro, llenando su cerebro de tanta
información, le dolía la cabeza. Dónde estaba Zahlia? El pelo en la parte posterior
del cuello de Claire se erizó. ¿Y si también le había pasado algo a ella? Alargó la
mano y trató de abrir la puerta. Bloqueada. Pero no había cerrojo, estaba sólo el
endeble botón de contacto de la cerradura, no dejándola pasar. Claire dudó sólo un
segundo antes de patear duro a la puerta. La puerta se abrió con un estallido
satisfactorio y Claire dijo una silenciosa oración de agradecimiento.
El contraste de la oscuridad, la entrada con aroma a orina hizo a Claire doblarse en
dos. En el interior, el apartamento estaba inmaculado. Casi no había muebles: un
duro sofá de dos plazas, una mesa de café de cristal, y un pequeño televisor. Las
paredes estaban desnudas, y la única cosa en la encimera de la cocina era una
FORO PURPLE ROSE

cafetera de aspecto expresivo. Parecía antinatural, de alguna manera. Parecía que

alguien había puesto juntas las cosas, que había asumido, que la gente tenía en sus
casa pero con todos los detalles mal.
—¿Hola? —Llamó Claire en voz baja—. ¿Zahlia? ¿Hay alguien aquí?
No hubo respuesta: Claire caminó un poco más en el apartamento. Un pequeño
pasillo abría a la combinación de living/cocina. Dos puertas estaban abiertas, los
cuartos detrás de ellas oscuros, pero había una puerta cerrada al final del pasillo.
Un rayo de luz brilló por debajo de ella. El corazón de Claire aleteó en su pecho e
148
instintivamente se puso en cuclillas. Se escabulló por el pasillo.
La primera puerta que pasó era un diminuto cuarto de baño. La cortina de ducha
colgaba perfectamente recta, toallas cuidadosamente colgadas encima del
travesaño. En la habitación contigua estaban un pequeño escritorio y una silla de
madera. Sólo había visto en el apartamento entero cosas no genéricas. Un girasol
marchito se había clavado en una pared, y un pequeño enano de jardín estaba
sentado en la mesa con la pintura descascarada y pelada como si hubiera estado
fuera durante años.
En el suelo había un maletín de hombre con las iniciales DRM bordadas en el
borde. Tres piedras redondas se sentaban encima de él en una ordenada fila.
Claire caminaba por el pasillo y se paró frente a la última puerta, reuniendo el
valor para hacerlo. Por favor Diosa deja que esté durmiendo ahí.
—¿Zahlia? —susurró, crujiendo la puerta al abrir. Cuando no hubo respuesta,
Claire empujó hasta el final. La luz del techo brilló sobre una pequeña cama con
una colcha descolorida, levantada tensamente sobre la almohada. No había
cabecero, en su lugar colgaba una fotografía enorme. Estaba granulada de ampliarla
tanto. La chica de la foto impresionaba por su parecido con Zahlia, excepto que su
cabello era gris y tenía las mejillas redondas Su madre. La idea le vino a Claire a la
cabeza automáticamente. Antes de que pudiera procesarla, la nariz le tembló.
En el centro de la cama, un perrito blanco yacía acurrucado, con los ojos bien
cerrados. El perro estaba muerto. Claire podía olerlo.
Sin mirar atrás, Claire salió disparada del apartamento y llorando bajó por las
escaleras. Lo que estaba pasando con Zahlia, no era algo bueno. Fuera del edificio,
se apoyó en los sucios ladrillos y tomó respiraciones profundas del aire perfumado
de la basura, tratando de calmarse. Al otro lado de la calle, un par de chicos
vestidos con ropas oscuras, sus sombreros jalados bajos sobre su cara, la
observaban.
Cuando el autobús se detuvo en la esquina, Claire tiró su cambio justo con una
sacudida de manos, que puso nerviosa a la mujer que subió detrás de ella. Cuando
el autobús hizo la parada más cercana a la casa de Claire, prácticamente se arrastró
fuera. Era casi la una de la madrugada y Claire estaba exhausta. No importa cuánto
FORO PURPLE ROSE

quería rescatar a su madre, no había nada que Claire pudiera hacer hasta la
mañana. La ciudad pudo haberse relajado con la detención de su madre, pero
Claire no. En algún lugar la seule todavía estaba ahí fuera, y Claire no tenía ganas
de correr con ella a solas. Claire no podía quitarse de su mente la imagen del
apartamento de Zahlia, esperaba que el lobo negro no hubiera ido a buscar al lobo
extraño sola.
Claire se deslizó de nuevo en la casa. Arriba, los ronquidos de Lisbeth resonaron
como una sierra circular. Claire dejó caer los hombros con alivio. Por lo menos no
estoy en más líos. Con un poco de suerte, Lisbeth pensaría que sólo había olvidado 149
girar su alarma a encendido. Claire colapsó en su cama y se quedó dormida,
envuelta en la culpa porque se acostó en su cómoda cama mientras que su madre
estaba en una jaula en algún lugar. Durante toda la noche, soñó con perros
muertos, hombres que buscan sospechosos y jaulas. Montones y montones de
jaulas.
A pesar de su cansancio, el sol despertó a Claire poco después del amanecer. Se
sentía más descansada de lo que esperaba. Su madre no necesitaba dormir mucho,
siempre trabajando hasta tarde en su cuarto oscuro, y luego levantándose temprano
para prepararse para una sesión o ir a una reunión. Tal vez era parte de toda esta
cosa de hombre lobo. Si consigo que salga, Claire se contuvo. No, cuando consiga que
salga, voy a preguntarle.
Ella se deslizó de la cama, cogió su teléfono, y bajó. Incluso ahora, entrar en el
cuarto oscuro e su madre sin invitación hizo que las palmas de Claire sudasen. El
frío, y el tenue olor a Marie en el aire. Claire se deslizó en uno de los taburetes
frente a la mesa de trabajo y apoyó la cabeza entre las manos. Su celular sonó y
Claire saltó.
—¿Hola?—. Hola —la voz de Matthew estaba ronca, pero la emoción era evidente
en él—. Espero no llamar demasiado pronto
Al escuchar su voz, se iluminó la oscuridad de su pecho, sólo un poco.
—No, estoy levantada, —dijo, tratando de mantener su voz normal. Una parte de
ella quería seguir adelante, y echar abajo todo lo que le decían. Pero su padre
actualmente tenía a su madre. Si Matthew se alarmaba, podría acudir a su padre. Y
Claire no podía correr ese riesgo.
—Guay. Entonces, escucha, desde que las cosas son, ya sabes, seguras de nuevo,
me preguntaba si querías salir esta noche.
La sola idea de verlo la hizo a Claire sentirse más tranquila, hizo más fácil que
pensara. Y si Mateo sabía algo acerca de dónde estaba su madre, entonces tenía que
hacer todo lo posible para conseguir esa información.
—Eso sería genial. ¿Qué quieres hacer?
FORO PURPLE ROSE

—Estaba pensando que podríamos ir al parque Greenway, ¿quizá hacer un

picnic?—. Eso suena divertido. ¿Me puedes recoger?
—Um, seguro. ¿Está bien para todo el mundo? —Claire luchó para mantener su
nivel de voz—. Mi madre no está aquí hoy. Va a estar bien.
¿Y a quien le importaba, de todas formas? Su madre no estaba ahí para castigarla si
se enteraba. Y Lisbeth probablemente la dejaría ir si ella dijo que iba a salir con
Doug Kingman, después de todo.
Ellos aclararon los horarios y Claire colgó el teléfono antes de que su máscara de 150
soy sólo una chica normal de dieciséis años de edad se agrietara.
Las cosa son seguras él había dicho. Las cosas no van a ser nunca seguras para mí, no con
un monstruo como su padre en libertad.
Claire echó una última mirada alrededor del cuarto oscuro, antes de subir a ver si
Lisbeth estaba despierta. Su mirada se paseó sobre el ordenador de su madre y se
paró en seco. Si Marie Benoit era excesivamente obsesiva sobre alguna cosa, eso
era su equipo fotográfico.
Todo tenía un lugar en el cuarto oscuro, y si no estaba en su mano, estaba en su
lugar asignado. En la casa de alguien más, las dos cámaras sentadas en la mesa de
al lado de la computadora se verían bastante inocentes, pero la vista hizo
estremecer a Claire. Una de las cámaras estaba volteada, aún enchufada a la
computadora. Claire la recogió y la prendió. La tarjeta de memoria estaba vacía...
las fotos que habían estado allí, su madre las había subido ya y luego las eliminó de
la cámara.
No pudiendo creer lo que estaba haciendo, Claire se deslizó en la silla delante del
monitor y movió el ratón. En la pantalla, una caja gris apareció. ESTOS
ARCHIVOS ESTÁN PROTEGIDOS POR CONTRASEÑA. POR FAVOR
INGRESE LA CONTRASEÑA. Claire se mordió el labio. Bueno, podría resolver
esto. Comenzó con las palabras obvias, como “contraseña”, “imágenes”. Ninguna
sirvió. Claire había hecho su camino a través de artistas favoritos de su madre,
alimentos, y hoteles antes de que ella contuviera el aliento y tratara la única cosa
que seguía dando vueltas en el fondo de su mente... la contraseña que nadie podría
adivinar.
Con las manos temblorosas, escribió: loup–garou. CONTRASEÑA NO VÁLIDA,
el equipo anunció.
Bueno, mierda. Si eso no funcionaba, a Claire no se le ocurría qué otra cosa podría
funcionar. Con un profundo suspiro, apagó el monitor y se dirigió hacia las
escaleras para convencer a Lisbeth de que le cocinara su desayuno.
Claire comió tan despacio como pudo, obligándose a sí misma para no ver la hora.
Cuando había aclarado meticulosamente su plato y lo puso en la lavadora de
platos, asegurándose de que estuviera en la dirección correcta, finalmente echó una
FORO PURPLE ROSE

mirada al reloj. Su corazón se encogió al ver los números. ¿Cómo podrían ser sólo
las diez cuarenta y cinco? ¡Matthew no iba a recogerla hasta las ocho! Si no podía
encontrar algo para distraerse de la tensión que enredaba sus omóplatos como alas,
estaría loca mucho antes de que él llegara a la puerta. Se dirigió a la sala de estar,
esperando poder encontrar algo soporífero en la televisión.
Después de obligarse a sí misma a ver dos películas malas y un infomercial, Claire
caminó arriba a su cuarto y miró a su alrededor. Cogió el teléfono y llamó a Emily.
Tal vez habría más drama con el chico de campo que pudieran diseccionar, o un
encuentro con un ratón del cual Emily podría hablarle. Cualquier distracción sería 151
una buena distracción.
—¡Estaba a punto de llamarte! —Emily comenzó a hablar sin siquiera decir “hola”.
—¿Ah, sí? —Claire hizo a un lado una pila de ropa y se dejó caer en su sillón.
—Quiero decir, ¿puedes creerlo? Es una noticia totalmente increíble, ¿verdad? No
he sido capaz de encontrar a papá y mamá todavía, pero estoy exigiendo que me
regresen tan pronto como sea humanamente posible.
Claire abrió la boca, pero no le salían las palabras. Por supuesto que Emily volvería
a casa, ahora que todo el mundo pensaba que la situación de los lobos había
terminado. Con todo lo que estaba pasando, Claire no había pensado realmente en
ello.
—Eso es... eso es genial, Em.
—Bueno, no te rompas una uña celebrando, ni nada. —Emily sopló.
Claire cerró los ojos. —Lo siento, es una noticia fantástica Em... ¡de verdad! —Se
obligó a sonar entusiasta. Es una noticia fantástica. O al menos, debería serlo. ¿Por
qué no estoy emocionada? Si ella estaba siendo completamente honesta, Claire deseaba un
poco que Emily se quedara con su tía y su tío... al menos hasta que Claire arreglara
las cosas con su madre.
¿Cómo puedo sentir eso por mi mejor amiga?
—Entonces, ¿ya empacaste? Le preguntó.
—Todo menos mi cepillo de dientes, —anunció con orgullo Emily—. Y le he dado
a Dan el “discurso de gracias por los recuerdos” también.
—Wow. ¿Y cómo lo tomó?
—Ugh. Digamos que hubo un montón de lágrimas implicadas, y ninguna de ellas
fueron mías. En fin. Voy a llamar a mamá otra vez y ver si está fuera de su reunión
todavía. Te haré saber tan pronto como algo sea definitivo, ¿de acuerdo?
—No puedo esperar, —dijo Claire, Emily estaba dispuesta a creerle—. Buena
suerte con tu mamá.
FORO PURPLE ROSE

—No la necesito, —le aseguró Emily—, pero gracias de todos modos. ¡Hasta
pronto!
Claire colgó y se quedó mirando el teléfono en su mano. Tener a Emily cerca sólo
iba a hacer las cosas más complicadas de lo que ya eran. Estaba empezando a ver lo
que su madre quiso decir cuando dijo que era muy difícil ser amiga de un humano.
Disgustada consigo misma, Claire se metió en la ducha, esperando que la hiciera
sentir menos viscosa.
El agua caliente se acabó antes de que pudiera calmarse por completo. Claire se 152
secó, se puso una camisa, y pasó un peine por el pelo. Suspiró, deseando que se
tratara de una cita regular. Si fuera normal, estaría preguntándose si podía usar un
sostén más bonito, o si sus pantalones estaban demasiado apretados alrededor de
los muslos. En cambio, lo único que podía pensar era en averiguar cómo llegar a su
madre. Claire echó el cepillo para el cabello hacia abajo sobre un mueble. Era tan
injusto. Es un tipo realmente genial, y tengo la intención de usarlo en la peor forma posible.
Fabuloso. Estoy segura de que las niñas normales humanas siempre están tratando de obtener
información secreta de sus novios. Sí, apuesto a que ocurre todo el maldito tiempo.
Claire tomó su opinión de sí misma del suelo y se puso un poco de brillo de labios.
Se puso unos aros de plata en las orejas. La ironía trajo una pequeña sonrisa a sus
labios. Cualquiera que haya sido el hombre lobo que había convencido a los seres
humanos que la plata los mataría, hace tantos siglos, había creado una historia
impresionante.
Claire miró el reloj brillando en su mesita de noche. Seis en punto. Claire se miró
en el espejo, tratando de parecer la chica emocionada, enamorada que había sido
hace dos meses y medio. Los ojos que le devolvieron la mirada eran demasiado
ansiosos, demasiado calculadores. Sólo hago lo que tengo que hacer para salvar a mi
madre. No es como si fuera a hacerle daño. Vamos Claire, esfuérzate más. Obligó a sus
labios a formar una sonrisa, pero no importaba lo mucho que se esforzara, con los
ojos se delataba. Eran demasiado lobos, y no lo suficientemente humanos.
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 17
Traducido por elamela, Selune y playthekeys

Corregido por Silvery
C laire estaba de pie en el vestíbulo, con una mano en la puerta, esperando

que Lisbeth no mirara muy de cerca al chico de detrás del volante del
coche.
—Muy bien, aquí está el trato. Quiero que pases un buen rato, pero no me hagas
153
lamentar el hecho de que te estoy permitiendo salir de casa. Y si no estás en casa a

las diez... bueno... sólo, sólo estate en casa a las diez. —Lisbeth puso sus manos en
sus caderas, tratando de parecer severa.
Claire resistió la tentación de poner los ojos en blanco. Ni siquiera podía pensar en
algo con lo que amenazarme.
—No te preocupes, Lisbeth, estaré de vuelta en un rato.
Claire salió rápidamente por la puerta, prácticamente cerrándola de golpe detrás de
ella. Miró hacia Matthew mientras se metía en el coche junto a él. El sol se
atrapaba en su pelo, y cuando se volvió y le sonrió, se despertó el mismo
sentimiento de mariposas en su vientre que siempre tenía. Claire podía oler la
excitación y el nerviosismo saliendo de su piel. Debajo estaba el olor de su deseo,
dulce como un melocotón.
Concéntrate, Claire. Necesitas conocer lo que sabe.
Cada segundo que pasaba, llevaba a su madre más cerca de la punta de la aguja del
Dr. Engle. Claire odiaba todo este secreto, toda la mierda de agente doble. Quería
simplemente preguntarle sobre esto, decirle lo que necesitaba saber. Confiaba en
ella, ¿verdad?
Pero luego querría saber por qué le estaba preguntando. Y simplemente tendría que
empezar a mentir sobre todo eso de nuevo. Y podría tener sospechosas y dejarle de
hablar. O peor, decírselo a su padre.
—¿Estás bien?—preguntó—. Pareces un poco distraída esta noche.
—Lo siento —dijo Claire—. Supongo que es sólo que, eh, es raro ver a todos los
otros coches y a la gente con el sol poniéndose.
Matthew asintió con la cabeza.
FORO PURPLE ROSE

—Sí. Todo el mundo está volviendo a disfrutar del largo y caluroso verano, gracias
al servicio a la comunidad de mi padre. —Una pequeña risa áspera salió de él—.
Lo que sea.
Las orejas de Claire se levantaron.
—¿Lo que sea? —¿Qué quiso decir con eso?
Matthew se detuvo en una plaza de aparcamiento en el borde del parque y apagó el
coche.
—¿Qué quieres decir? —preguntó Claire suavemente. 154
Matthew dejó escapar un gran suspiro que llenó el coche con el olor de su
confusión e ira.
—Es solo que… ¿sabes, cuando te dije que no estaba seguro de lo que mi padre
estaba haciendo? ¿Que no estaba seguro de que estaba en lo correcto?
Claire se sentó helada, tan inmóvil como un animal que sabe que está siendo
cazado. Se obligó a dar un fuerte asentimiento. Claire trató de recobrarse lo
suficiente para mantener su voz sin temblar.
—No sé realmente mucho sobre hombres lobo. Sin ofender, pero no sé por qué
debería tomar la palabra de tu padre de que son la cosa más horrible que ha habido,
¿sabes?
Una mentira, dos mentiras; una mentira roja, una mentira azul.
Matthew la miró fijamente, un brillo feliz filtrándose en sus ojos y suavizando su
olor.
—No me ofendes —susurró.
—Entonces —Claire se meció al abrir su puerta y salió del coche como si estuvieran
teniendo la conversación más normal en el mundo—. ¿Qué está pasando
realmente? ¿Haciéndote la pregunta de tu padre otra vez?
Matthew agarró una enorme nevera de la parte trasera del coche y la puso sobre el
suelo.
—Si te lo digo… Claire no podrías decírselo a nadie, quiero decir, si mi padre se
enterara, estaría muerto.
Claire se encontró con su mirada con los ojos fijos.
—Soy muy, muy buena guardando secretos.
Y eso es más verdad de lo que nunca sabrás.
Suspiró y se pasó una mano por su pelo desordenado. El cielo de detrás de él
resplandecía con la última luz del día.
FORO PURPLE ROSE

—Muy bien. Comamos mientras hablamos, creo que es mejor con el estómago
lleno.
—Claro. Aquí, te ayudaré con eso. —Claire agarró el asa de la nevera y la levantó
con él.
Las cejas de Matthew se dispararon con sorpresa.
—Wow. Eres muy fuerte. —Él y Claire se sonrojaron al mismo tiempo.
—He estado haciendo mucha natación…
155
—Sí, no quería decir que parecías débil, o otra cosa.
Se sonrieron el uno al otro.
—Olvídalo —dijo Claire. Colocaron la nevera cerca del centro del campo—. Me
muero de hambre —dijo, ansiosa por cambiar de tema.
—Eso es bueno, empaqueté suficiente comida para un ejército. — Abrió la tapa y le
lanzó una manta.
Claire la extendió en el suelo mientras Matthew desempaquetaba la nevera.
Cuando estaban cada uno con su segundo muslo de pollo, Claire no pudo
soportarlo más.
—¿Y? —Preguntó, despojando la carne de los huesos con sus dientes—. ¿Cuál es el
asunto con tu padre?
Matthew clavó su tenedor en un recipiente de ensalada de patatas. Las primeras
estrellas brillaban arriba y la creciente oscuridad oculto su expresión.
—Bueno, ¿ya sabes cómo son manteniendo a los hombres lobo en el laboratorio
hasta que puedan darle una cura?
Claire suprimió un escalofrío.
—¿Sí?
—Muy bien, de verdad, me matará si se entera de esto. —Torció una servilleta de
papel en sus manos.
—Matthew. No se lo diré a nadie. Te lo prometo.
Levantó la vista hacia ella.
—Lo sé. Confío en ti. Está bien. —Respiró hondo.
—Ordené un asalto al laboratorio una noche. Tenía curiosidad, ¿sabes? Y no es
como si hubiera sido herido por esa cosa de la jaula que es más fuerte que Fort
Knox. De todos modos cuando entre allí, el lobo, estaba llorando. Como si,
realmente, realmente estuviera llorando.
Una sensación de desgarramiento rasgaba a través del pecho de Claire. Luchó por
respirar.
FORO PURPLE ROSE

Matthew se ocultó, como si no pudiera dejar de contar la historia ahora que

finalmente había comenzado. Claire podía oír en su voz cuanto había estado
sufriendo por contárselo a alguien.
—Así que me sentí mal por todo eso de repente, y… la mirada en sus ojos,
simplemente no creí que pudiera haber matado a alguien. Sé que era estúpido, pero
no estaba pensando en ser herido, y sólo me ordené a meter mi mano a través de los
barrotes y acariciarlo. Y fue la cosa más rara, Claire. —La miró fijamente por
debajo de su peludo flequillo.
156
—Coloco su cabeza en mi mano y gimió y… fue horrible. Sólo podía sentir lo solo
y lo asustado y, no sé, lo suave que era. Quiero decir, no como un humano, o
cualquier cosa, pero no más peligroso que cualquier otro animal, ¿sabes? Sé que
parece una locura, y no te culparía si no me creyeras, pero sólo podía decir que no
había matado a nadie. O, si lo hizo, realmente no quería hacer eso. —Se inclinó y
encendió la linterna que se mantenía en la esquina de la manta.
Claire se secó apresuradamente las lágrimas de las comisuras de sus ojos.
Matthew se la quedó mirando. Parecía sorprendido.
—Yo… yo lo siento por ella, eso es todo — tartamudeó ella. Verdad número dos.
—Sí. Yo sólo quiero que mi padre…no sé. Es tan freaky, desesperado por conseguir
que cada persona le pueda tomar en serio, por demostrar que pertenece a la FHPA.
Pero me gustaría que investigase más antes de dar su curación. La forma en que
este hombre lobo está, estoy más convencido que nunca de que está equivocado. Sé
que ellos han hecho un montón de cosas terribles, mi padre tiene un billón de libros
sobre eso, ¿verdad? Pero, quiero decir, tal vez no todos son así. Y su cura les deja
medio vivos, a lo mejor. No creo que este hombre lobo se merezca que yo crea que
es el que ha hecho todas estas cosas horribles.
—Entonces, ¿quién crees que lo ha hecho? —La cuestión salió antes de que Claire
pudiera detenerla. La idea había persistido en ella todo el día. No podía dejar de
preguntarse de quién eran los crímenes que su madre estaba pagando.
Matthew se acercó un poco más—. Tal vez hay más hombres lobo por ahí de los
que la gente cree.
La adrenalina inundó las venas de Claire tan rápido que los pelos de sus brazos se
erizaron. Estaba demasiado cerca de la verdad. Demasiado cerca.
—¿Qué te hace pensar eso? —susurró.
—Vi algo una vez, mi padre dejó algunos informes clasificados sobre el escritorio
del ordenador. Cosas del Gobierno. Tenía curiosidad, quiero decir, todo lo que
tenga TOP SECRET estampado en ello…
Claire asintió con la cabeza.
FORO PURPLE ROSE

—Así que, los documentos decían dos veces que después de capturado el hombre
lobo y de que mi padre lo curara, los asesinatos no se detuvieron. El gobierno lo
encubrió para que la gente no sucumbiera al pánico, quiero decir, si la gente
pensaba que había manadas de hombres lobo vagando, alucinarían.
—Wow, eso es… eso es realmente sorprendente —dijo Claire, impresionada.
Realmente sorprendente que tu padre sepa que no está en lo cierto, pero todavía nos tortura de
todos modos.
—Sí, me sorprendió como el demonio. Fue entonces cuando realmente empecé a
157
preguntarme acerca de las cosas que mi padre hace. Siempre trabaja muy
estrechamente con el gobierno del país, lo que le está ayudando, lo que hizo incluso
antes de designarlo a la FHPA. Tal vez se trata más de PR que de ninguna otra
cosa, ¿sabes? Quiero decir, ¿y si ha habido más hombres lobos como este, los
realmente discretos, y están tomando la culpa de algún otro asesino? Sólo para que
nosotros, los seres humanos podamos sentirnos a salvo y con superioridad moral.
Miró hacia el bosque.
—A lo mejor hay otro hombre lobo que ha estado matando a la gente aquí. Eso es
lo que pienso, de todos modos.
—Pero si piensas eso, ¿cómo es que no tienes miedo de estar aquí de noche? —
Matthew pasó la punta de los dedos por su mano—. Todo el mundo está fuera,
también, ¿verdad? Porque mi padre dice que es seguro. No voy a esconderme en
casa para siempre. No puedo. Supongo que, simplemente, no creo que sea mi turno
todavía.
Claire no estaba segura de qué decir.
—¿Crees que estoy loco? —preguntó finalmente.
Ella negó con la cabeza.
—No —susurró—. Creo que eres el único cuerdo por ahí. —Las lágrimas brotaron
de sus ojos, y Claire no creía que podría parar de llorar si Matthew se quedaba
mirándola de esa manera aliviado—. Yo, uh… necesito agarrar algo de mi bolso.
Me vuelvo, ¿vale? —Sin esperar respuesta, Claire se revolvió fuera de la manta y se
dirigió hacia el coche, más firmemente de pie que cualquier ser humano jamás
podría haber estado en la reciente noche oscura. Luchó por controlar las lágrimas
que corrían por sus mejillas.
Esto no era en absoluto el tipo de “información” que había esperando oír de
Matthew. Claire había conocido a su madre, debía de estar aterrada, sola, pero
confirmarlo como que casi la rompió.
Abrió la puerta del coche e hizo una demostración de hurgar en su bolso, mientras
trataba de dar sentido a los pensamientos girando en su cabeza. Tal vez podría
conseguir algo más de información de Matthew. Tal vez en realidad podía
FORO PURPLE ROSE

ayudarla, aunque él sólo podría entrar en el laboratorio, donde mantenían a su

madre, y ahorraría a Claire una enorme cantidad de energía y tiempo. La emoción
tatareaba bajo la piel; la adrenalina alcanzó su tristeza y se secó los ojos. Podía
hacer esto. Incluso sin Breatice y Victoria, podría salvar a su madre. Era sólo una
cuestión de cómo.
Claire cerró su bolso y lo arrojó al suelo. Cerró la puerta del coche y se volvió para
regresar a Matthew y en ese segundo exacto, oyó el primer gruñido detrás de ella.
Los ojos de Claire estaban aún ciegos por la luz interior del coche. Todo lo que
podía ver era una figura oscura tejiendo entre los árboles en el borde del bosque. 158
Otro gruñido resonó. La amenaza había sido publicada con una voz muy familiar,
y el flash de reconocimiento se disparó a través de Claire como un incendio y un
electrochoque.
Era Zhalia. Detrás de ella, Matthew se arrodilló en el centro de la manta, centrado
en conseguir alimento de nuevo en el refrigerador. El coche se interponía entre él y
el lobo en el otro lado de la carretera, así que incluso si miraba hacia arriba, no
podía ver nada.
Claire enfiló hacia el lado opuesto del coche y se agachó detrás de él, confundida y
asustada. Lo que haría que Zhalia apareciese delante de Matthew, tenía que ser
grave.
En el borde del bosque Zhalia vaciló. Claire no podía entender lo que quería
Zhalia, y no tenía mucho tiempo antes de que Matthew viniera a buscarla.
Claire se quitó la ropa y se transformó. Su verdadera naturaleza destrozó su disfraz
humano, y Claire estaba a la sombra del coche de Matthew, sorprendida por la
forma mucho más completa que estaba de su cambio. Había esperado que la
transformación fuera la misma que había sido en la última luna llena, pero parecía
todo un hombre lobo. Aún así, podía sentir que algo faltaba, podría decir que su
fuerza y sus sentidos no habían llegado aún a pleno potencial.
¿Zhalia, que está pasando? ¡Matthew nos verá! Era la primera vez que Claire tenía la
necesidad de comunicarse de esa manera con el resto de los lobos, ya que con la
boca de lobo era imposible hablar.
Se sentía tan natural como al hablar, y la confianza de Claire creció.
Ten cuidado, joven. La advertencia de Zahlia hizo eco de los árboles. Claire puso las
orejas aplastadas contra su cabeza. Esperaba que Matthew no hubiera oído eso. Se
daría cuenta de que no estaba en cualquier momento... tenía que volver a su cuerpo
humano. Zahlia dio un paso adelante, acechándola.
¿De qué estás hablando? Estoy tratando de salvar a mi madre. ¡Si Matthew te ve, va a
arruinar todo! ¿Por qué no me llamaste de nuevo? ¿No podemos hablar más tarde? Claire
podía oler sus propios miedos y frustraciones. Su confusión. La hacía oler débil.
FORO PURPLE ROSE

Zahlia, contra el viento, atrapó el olor, también. Dio un saltito, saltando al interior
del prado. En el mismo instante, Matthew llamó.
—¿Claire? ¿Todo bien ahí?
Zahlia se aprovechó de la distracción de Claire y se abalanzó hacia ella.
Tú. Mantente fuera de esto. Zahlia gruñó, y se acercó aún más, golpeando a Claire en
el vehículo. Tu madre ha hecho más de su cuota de errores, y estás siguiendo sus pasos. Si
no te alejas, estaré más que dispuesta a dejar que ese chico pague tus errores.
Claire se agachó bajo el hombro adolorido en el que se había estrellado contra la 159
rueda. Un rumor gutural rompió contra su garganta, y a pesar de su confusión se
puso tensa y se paró, dispuesta a defenderse.
Zahlia, ¿qué está pasando contigo? Estoy tratando de pedir tu ayuda. ¿Por qué estás tan
enojada? ¡No lo entiendo!
Zahlia se enfrentó a Claire. Jadeaba con anticipación, con su aliento caliente
lavando la cara de Claire. Se olía el olor picante de la furia.
Te estoy ayudando al no aplastarte aquí y ahora. Considérate advertida. Zahlia dio la
vuelta y corrió hacia el bosque.
Agazapada detrás de la mayor parte metálica del automóvil, Claire se apretó de
nuevo en su forma humana y se puso su ropa. Mantuvo un ojo sorprendido en el
bosque, mientras se puso de pie. Le temblaban las manos.
¿Qué demonios ha pasado?
El lobo que acababa de amenazarla no se parecía en nada a la persona... la amiga...
en la que Claire había confiado tanto. Había estado segura de que Zahlia la
entendería, que querría ayudar.
Y amenazó a Matthew, también. Mierda.
—¿Matthew? —gritó, corriendo de vuelta a la manta donde estaba acostado boca
arriba en el pálido resplandor de la linterna.
—Sí, ¿estás bien? Te fuiste un tiempo. Me estaba empezando a preocupar.
—Lo siento. No pude encontrar lo que estaba buscando.
Claire se quedó mirando los árboles, creyendo ver a Zahlia al acecho en cada
sombra.
Ella se inclinó y lo besó.
–Claire —susurró.
Claire le interrumpió con otro beso antes de que pudiera decir nada más.
—Salgamos de aquí —murmuró contra sus labios. Ella miró por encima del
hombro a los bosques, preguntándose dónde estaba Zahlia. ¿Se había ido? Claire
FORO PURPLE ROSE

escaneó los árboles. No había ojos brillando en la luz de la linterna, pero el lobo
negro era una maestra en esconderse de su presa.
—Claro, no hay problema.
Juntos arrugaron la manta y se dirigieron hacia el coche. El regreso a casa estaba en
silencio, con Matthew concentrándose en las carreteras oscuras y Claire explorando
el piso a cada lado, en busca de lobos. Era demasiado pronto para presionarlo más
sobre ir al laboratorio. Lo sabía. Lo olía. Pero de todos modos, las palabras "por
favor, llévame a ver a mi madre" estaban dispuestas a saltar de su boca, y luchó
160
para mantenerlas adentro.
—Ahora tú eres la que parece callada —dijo Matthew.
Claire se encogió de hombros. Sí, si supieras lo duro que estaba trabajando para
permanecer callada.
—Un poco, creo. Oye, eh, ¿estás ocupado mañana por la noche?
—Sí... tengo práctica de fútbol hasta tarde. Y no estoy libre otra vez hasta el
sábado.
Claire se tragó su decepción. El sábado parecía estar a un año de distancia.
—Está bien —dijo al fin—. El sábado suena muy bien.
Matthew se iluminó como una cerilla prendida.
—¡Genial! Tengo práctica de fútbol hasta las cinco, pero después de eso, soy todo
tuyo. ¿Había algo especial que querías hacer? —Le apretó la mano.
—No lo sé. Vamos a ver cómo va. —Claire apretó a su vez.
Ese es el eufemismo del año.
La sensación de su mano, caliente contra la suya, envió una cintita de excitación
deslizándose entre sus omóplatos.
Cuando la besó de buenas noches, la culpa y el deseo y la sensación de estar muy
involucrada con Matthew giro en su interior. Todo sería mucho más fácil si ella en
realidad no se preocupara por él, si él no hubiera admitido que pensaba que su
padre estaba equivocado.
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 18
Traducido por: elamela, SOS por: Sera y cuketa_lluminosa

C laire entró a hurtadillas en la casa y encontró a Lisbeth en el sofá,

acurrucada alrededor de un enorme tazón de helado. —Estoy en casa y
no llego tarde, y voy a ir a darme una ducha ahora, ¿de acuerdo?
Lisbeth entrecerró los ojos. —No has estado fumando, ¿verdad?
161
—¿Eh?
—Bueno, estas apresurándote para darte una ducha... —dijo Lisbeth
intencionadamente. Durante un segundo, Claire se sintió como si tuviera otros
dieciséis años en la tierra.
—Lisbeth, eso es absurdo. Hace calor afuera. Tengo sudor. Quiero darme una
ducha. ¡No fumo! Dios... Demonios, —añadió en silencio.
—Bueno, bueno. Es mejor que no. Quiero decir, las toxinas que ponen en esos
cigarros de la muerte... —Arrugó su nariz.
Claire rodó sus ojos y se marchó escaleras arriba hasta su cuarto de baño. Se quitó
su camisa, examinando la contusión de sus costillas cuando Zahlia se había
estrellado contra ella. ¿Por qué Zahlia habría amenazado con atacar a Matthew?
Podría haber sido su idea de venganza, el hijo del Dr. Engle a cambio de Marie. –
Un ojo por ojo– el tipo de cosas. Pero entonces, ¿por qué habría cargado contra
Claire así? Y su apartamento espeluznante... Claire no podía dar sentido a todo eso,
pero lo que sea que estuviera pasando con Zahlia, necesitaba ser detenida antes de
que fuera capturada también. O antes de que mate a un humano. Su teléfono sonó
y Claire lo volteó al abrirlo sin siquiera mirar la pantalla.
—¿Hola? —¡Claaaaaaaire! ¿Adivina qué? ¡Vuelvo a casa!
Era Emily. Una muy emocionada Emily.
—Yo… ¿realmente? ¿Ya?
—Sé que dije que llamaría, pero cuando hablé con mi mamá, dijo que vendría
directa a por mí, y luego mi batería murió, de todos modos, la larga historia corta,
¡Regreso! ¡Y con tiempo para las pruebas del club de teatro, también! Me muero
absolutamente por verte, Claire. Estaré en casa el viernes. ¿Cuándo podemos estar
juntas? ¿Qué tal el sábado?
FORO PURPLE ROSE

Claire sintió una media sonrisa crispada en su boca. Podía imaginarlo, a Emily
tendiéndose en la cama de Claire, pintándose las uñas de su pie, rebuscando entre
el armario de Claire para probarse cualquier cosa nueva que encontrara allí. Excepto
que no puedo dejarla entrar en mi armario, no con las cosas que tengo escondidas allí. Las
manchas de sangre de su búsqueda que se había negado a enseñar de dos camisas y
un par de pantalones. Estaban arrugados en la esquina trasera de su armario, pero
Emily los encontraría.
Y no puedo precisamente tratar de encontrar a mamá y darme una pedicura al mismo
tiempo. Maldita sea. 162
No había manera de que pudiera quedarse con Emily. En un momento, Claire
comprendió por qué su madre nunca había tenido ningún amigo de verdad. Sus
vidas eran muy diferentes, y dolía demasiado tener que arrojarlo constantemente a
tu cara así.
—Ojalá pudiera, pero tengo planes con Matthew —Por lo menos no era una
mentira.
—Hey, ¡eso es fantástico! Lo estáis volviendo muy serio, ¿eh?
—Sí, lo estamos haciendo en realidad.
—Muy bien, entonces te dejaré libre el gancho el sábado con una condición:
Quiero. Detalles. Y quiero decir, como, detalles de bóxers o concisos. —Había un
filo malvado en la voz de Emily—. ¿Cuándo puedo verte?
—Um, en realidad, mi teléfono está a punto de morir y estoy totalmente agotada,
pero te llamaré, ¿de acuerdo?
—Oh, eh, claro. —Emily parecía decepcionada y Claire se sintió responsable.
Claire colgó y se dejó caer en su cama. La verdad de quién era, lo que era, se cernió
sobre ella como un paraguas de plomo. Su madre le había dicho una y otra vez que
se encerraría, que Claire se convertiría como una ostra. La verdad, cariño, el secreto, es
como un grano de arena. Debes mantenerlo dentro de la forma en que una ostra lo hace,
puliéndolo una y otra vez hasta que se convierta en una joya que te hace más fuerte, más
valiosa, aunque nadie pueda verlo en tu interior. Sólo dolerá al principio.
Pero no soy una maldita ostra Madre. Esta verdad era mucho más grande que un grano
de arena, y crecía cada día. Claire podía sentirse esforzándose en el borde,
extendiéndose hasta el punto de explotar por el esfuerzo de mantenerlo contenido.
Por lo que se sentía como doce millones de veces, se sentía como que ser un
hombre lobo la hacía superior para tener la certeza de que su condición era una
maldición. Se acurrucó en su edredón. Fuera de la ventana, la luna se elevaba,
pálida contra el cielo oscuro. Se estaba quedando sin tiempo, en sólo unas semanas
la luna estaría llena, y el Dr. Engle llevaría a su madre lejos de ella para siempre.
Claire presionó un puño contra su boca para amortiguar sus gemidos y dejó que las
lágrimas rodaran por sus mejillas. Estaba tan sola que dolía eso.
FORO PURPLE ROSE

Horas más tarde, Claire se enrolló en sus sabanas y cerró sus ojos hinchados.
Durmió a ratos. Las pesadillas la sacudían una y otra vez.
Poco después de que finalmente amaneciera, Claire tropezó bajando a la cocina y
se hizo una taza de café. Envolvió sus manos alrededor de la taza caliente y se
paseó por el tranquilo pasillo.
Sin quererlo exactamente, acabó delante del cuarto oscuro de su madre. Incluso
con Marie sentada en una jaula en el laboratorio del Dr. Engle, Claire no podía
llevarse a sí misma a romper la regla de oro sobre comida o bebida en el espacio de
163
trabajo de su madre. La pantalla del ordenador la miraba a través de la habitación,
como un ojo gigante. Claire se sentó enfrente de ella y se detuvo en el mismo
archivo en el que intentó meterse el día anterior.
Echaba de menos a su madre. Terriblemente. Me pregunto si me echa tanto de
menos a mí. Claire se quedó mirando la pantalla de contraseña en la pantalla, justo
cuando una idea se deslizó en su cabeza. ¿Era posible?
Lentamente, escribió las letras en el campo en blanco y tocó INTRO. El archivo se
abrió inmediatamente. Todas las palabras que había intentado antes, y nunca pensó
que su madre hubiera usado el nombre de su propia hija. La contraseña era Claire,
después de todo.
Claire parpadeó para retirarse las lágrimas que se habían reunido en la esquina de
sus ojos y se concentró en la imagen del bosque de noche que había aparecido en la
pantalla. No era como el trabajo habitual de su madre, la foto parecía precipitada,
no profesional. Claire dejó la presentación correr, entrecerrando los ojos hacia la
pantalla. Parecía como si su madre hubiera estado en los bosques, haciendo
fotografías desde detrás de la cortina protectora de pinos. Había algo más allá de la
línea de árboles, pero era difícil distinguirlo. Las fotografías habían sido tomadas
sin flash, pero su madre había estado usando obviamente una velocidad de
obturación lenta para que así lo que fuera que estaba dirigiendo el objetivo
apareciera en la foto.
Pero su sujeto se había estado moviendo.
Claire se quedó mirando la mancha borrosa enfrente de ella. Una sacudida de
reconocimiento se disparó a través de ella y Claire gimió. Había visto imágenes de
esa misma casa antes. Era donde el hombre había sido asesinado; enfrente de la
casa había una mancha borrosa en penumbra. Oh, Dios. Mamá lo vio ocurrir, ¡estaba
fotografiando toda la cosa! Las imágenes se oscurecían y se afilaban mientras Marie
intentaba conseguir una foto más clara del conflicto enfrente de la casa. Claire sólo
podía distinguir la forma indistinta de un lobo muy oscuro. Mientras las
diapositivas parpadeaban hacia el cuerpo del hombre de repente destacó tan claro
como los ladrillos de su casa. Estaba tumbado perfectamente quieto, su torso
mutilado horrible contra las alegres margaritas que crecían tras él. Al lado de su
víctima, el lobo se difuminaba conforme se alejaba del cuerpo. Las dos últimas
FORO PURPLE ROSE

fotos mostraban claramente al lobo. Al principio se quedó mirando la confusión

enfrente de ella, pero su espalda estaba hacia la cámara. La siguiente foto la
mostraba en la puerta de atrás del hombre, su cara casi oculta por uno de los
girasoles que crecían al lado de la verja.
Una oscura barbilla lupina y unos pocos relucientes dientes eran claramente
visibles debajo de una de las flores, pero eso era todo. Claire vio las dos fotografías
reproducirse una y otra vez, su frustración elevándose con cada destello de la
pantalla. Algo parecía tan familiar de las imágenes, especialmente la última.
Claire se quedó mirando el girasol, bloqueando la cara con su centro demasiado 164
grande y la franja de pétalos. Nunca le había gustado en realidad esa flor en
particular. Eran cursis, de alguna forma. La imagen del girasol en el apartamento
de Zahlia le vino a la mente.
Zahlia nunca le había parecido alguien que tuviera alrededor girasoles.
Espera… ¿Por qué…?
Oh, mierda.
Quizás era una coincidencia. Podía ser una coincidencia.
Claire se sentó congelada frente al ordenador, recordando las otras cosas en la
pequeña y rara oficina de Zahlia. Con su estómago agitándose, abrió Internet y
buscó el nombre del editor que había sido asesinado.
El motor de búsqueda lo encontró inmediatamente. Dave McKinney. El expediente
en el suelo de la oficina de Zahlia, las iniciales en él habían sido DRM. Claire se
apartó del escritorio, su manos cerradas en puños tan fuertemente que sus uñas le
cortaban en la palma.
El perro. El que estaba sobre la cama de Zahlia. Uno de los perros de la víctima
había desaparecido cuando habían sido asesinados.
Había sido Zahlia. Ella mató a cada una de esas pobres personas.
Claire se volvió y vomitó sobre el suelo del cuarto oscuro.
Cuando dejó de tener nauseas, Claire apagó el monitor y puso su cabeza sobre el
escritorio. ¿Cómo podía haber matado Zahlia a toda esa gente? El mismo lobo,
quien la había ayudado cuando nadie lo hizo, practicaba con ella en los bosques.
¿Cómo podía ser tan salvaje? Oh, Dios, y había amenazado a Matthew.
Después de que Claire limpiara el desorden del suelo, cogió el teléfono y marcó el
móvil de Matthew.
—¿Hola? —El sueño espesaba su voz, pero Claire estaba más centrada en el hecho
de que él todavía estaba respirando.
FORO PURPLE ROSE

Ella miró al pequeño reloj en el ordenador. No eran ni las ocho en punto todavía.
—Oh, mierda, no me di cuenta de que era tan temprano, Matthew, lo siento… Te
llamaré, es decir, ¿por qué no me llamas más tarde?
—No, Claire, está bien. En serio. Los reporteros empiezan a llamar a mi papá a las
ocho de todos modos. No puedo dormir con el teléfono de casa sonando así.
Prefiero levantarme para ti que para el Daily Herald.
Claire se sonrojó.
—Hey, ¿todavía quieres hacer algo el sábado por la noche? 165
—Sí, eso sería genial.
Aunque lo que tengo en mente no es probablemente lo que estás planeando.
—Genial. Escucha, debería ducharme antes de que los reporteros empiecen a tirar
abajo la puerta principal. ¿Te va bien a las 6 en punto?
La idea de Matthew duchándose le dificultaba a Claire concentrarse en su
respuesta. —Claro. Tendré a Lisbeth llevándome de camino a yoga.
Claire intentó concentrarse en el pensamiento de ver a Matthew, en lugar de insistir
en el hecho de que estaría mintiéndole todo el tiempo.
El sábado, Claire tenía a Lisbeth dejándola a dos manzanas de la casa de los Engle,
enfrente de la casa de Yolanda Adam. Por suerte, Lisbeth estaba llegando lo
suficientemente tarde que no quería esperar a ver si Claire se metía en la casa antes
de que se alejara conduciendo.
Una vez que el coche estaba fuera de vista, Claire se acercó a la casa de los Engle.
Mientras paseaba frente al camino delantero de dio cuenta de los macizos de flores
estaban salpicados aquí y allí con pequeñas estatuas.
Gnomos de jardín. Exactamente como el que había sobre el escritorio de Zahlia. La
rabia que llenó a Claire la detuvo, pegando sus pies al camino de hormigón
agrietado. Zahlia no sólo había amenazado a Matthew. Había estado aquí.
Vigilando. Planeando. Claire luchaba por controlarse, para abrir la mandíbula. Ya
llegaba tarde. Si Matthew la veía así, podía echar a perder toda la noche. Ya
trataría con Zahlia más tarde. Siempre que ella y Matthew estuvieran juntos, se
aseguraría de que ningún lobo pudiera acercarse la distancia a él.
Lo que tengo en mente no es probablemente lo que esté planeando llevar a cabo, sin embargo.
Claire dio un par de respiraciones profundas y se acercó a la puerta, que había
quedado entreabierta. Eran las seis y cuarto cuando Claire entró en la cocina de los
Engles. En la mesa, Matthew y su papá estaban sentados comiendo sándwiches y lo
que olía Claire como sopa enlatada. El Dr. Engle le sonrió con demasiados dientes
y saludó a una silla vacía.
FORO PURPLE ROSE

—Claire, bienvenida. Por favor, siéntate y toma un bocado con nosotros —Era
evidente que estaba tratando de ser hospitalario, pero todavía se escurría de Claire.
Hice lo suficiente para tres, pero la Sra. Engle no se encuentra bien. La mirada en
el rostro de Matthew, dijo que ella había interrumpido algo, la expresión del Dr.
Engle, dijo estaba contento de que ella lo hubiese hecho. Claire se deslizó en la
silla.
—Ya he comido, gracias. —Debajo de la mesa, apretó los puños. El impulso de
estrangular al idiota egoísta hasta que admitiese que estaba equivocado sobre la
166
madre de ella era más de lo que podía soportar. El esfuerzo por controlarse dolía
hasta los huesos.
—Podemos irnos tan pronto como haya terminado. —La voz de Matthew era
ácida. Empujó un trozo grande de sándwich en su boca y masticó como si quisiera
hacerle daño. Claire miró de Matthew al Dr. Engle.
—Ah, en realidad.... —el Dr. Engle agitó su sopa, centrándose en los fideos en
forma de letras que flotaban en la superficie—. Canal Seis estará aquí en unos
minutos. Les gustaría un miembro de la familia para estar en la historia, y creo que
es un buen ángulo.
—Tenía la esperanza de que tu madre pudiese participar, pero esa obviamente no
es una posibilidad. No tomará mucho tiempo, Yo sólo necesito unos pocos minutos
de ti, y entonces tú y Claire podéis iros. Estoy seguro de que Claire no le importa
esperar un poco, ¿verdad? —Volvió su sonrisa de piraña hacia ella De nuevo, y
Claire sintió que su labio caía en respuesta.
Yo sé cómo jugar contigo.
Cambió a una sonrisa boba y ladeó la cabeza hacia un lado. —Oh, doctor Engle,
yo no podría decirle. Lo que Matthew quiera estará bien conmigo.
Sonrió y se lamió los labios. —¿Ves? ¡Qué de ayuda es ella! Así que, está arreglado.
Harás la entrevista.
Matthew lanzó su corteza del sándwich de vuelta en el plato y se limpió la boca con
el dorso de la mano. —Claro, lo haré. —Le lanzó a Claire una pequeña mirada.
—Pero sabes lo que voy a decirles.
—Wha, ahora. Matthew. Pensé que habíamos terminado de “discutir” el
tema. —La mirada en los ojos del Dr. Engle heló a Claire. La furia de la propia
superioridad llegaba como hielo.
—Tienes razón. He terminado de discutir sobre esto. Estás equivocado sobre el
hombre lobo, Papá. Tú no vas a escucharme y yo no voy a escucharte. Pero estoy
seguro de que las miles de personas que verán el Canal Seis esta noche estarán muy
interesadas en escuchar lo que tengo que decir. Y apuesto a que alguien de
Investigadores de Licantropía estarán viéndolo también.
FORO PURPLE ROSE

El Dr. Engle se puso de pie. —No voy a tolerar que defiendas a esas criaturas sin
alma, un segundo más. No tienen derecho a vivir entre los humanos, es un error,
una mutación. ¡Nunca deberían haber existido, en absoluto!
El gruñido se levantó en la garganta de Claire antes de que pudiera detenerlo, —
usted no sabe lo que está hablando. —Se levantó y se encaró con él.
La boca de Matthew se abrió.
El Dr. Engle se echó a reír, con fuerza. —Por supuesto que no. Yo sólo soy uno de
los investigadores más innovadores de licantropía en la nación. Soy parte de la 167
Agencia Federal de Protección de Humanos. ¿Por qué iba yo a saber de lo que
estoy hablando? —Levantó la vista hacia el techo como si pudiera encontrar
la paciencia en su suave y extensa blancura.
Claire se mordió el labio. Oh, mierda. Realmente debería haber mantenido la boca
cerrada. ¿Y si se da cuenta de que mi mamá es el lobo que capturó? Por debajo de sus
párpados, examinó su rostro. Estaba lleno de rabia, pero no sospecha.
—Y tú, —El Dr. Engle se dirigió a Matthew—, harías bien en recordar que nunca
es aconsejable morder la mano que te alimenta —arrojó su servilleta sobre la
mesa—. Ahora, si me disculpan, tengo que ir a prepararme para el equipo de
noticias. Él salió de la habitación, y Claire oyó un portazo en otra parte de la casa.
Matthew apartó el plato. —Dios, yo siento que es como imbécil. —Miró a
Claire—. No puedo creer que te enfrentaras a él de esa forma. Todos los demás sólo
compran su basura sin ni siquiera pensar en ello.
La admiración brillaba en sus ojos.
—La desconfianza de los compradores, ¿no? —Claire sonrió. Esta noche iba a ser
su noche. Matthew estaba tan furioso con su padre que ella estaba segura de poder
convencerlo de que le mostrara donde estaba el laboratorio. Una vez que supiese
cómo llegar, todo lo que tenía que hacer era encontrar la manera de escabullirse
con su madre sin ser vista.
Tal vez una vez que consiguiese traer de vuelta a su madre ellas podrían comenzar
su propia manada, sólo los dos de ellos. Dejar a Beatriz y Victoria limpiar el
desorden que Zahlia había hecho. Su madre no debería tener que colarse por ahí
haciendo el trabajo que su Alfa estaba demasiado asustada para hacer. Esa era la
única razón por la que había quedado atrapada, después de todo. Si Beatrice
hubiese mantenido controlada a Zahlia, su madre nunca habría sido capturada.
—¿Lista para irnos? —Matthew preguntó.
Claire asintió, ella parpadeó con fuerza, despejando su cabeza, y siguió a Matthew
hasta el coche.
Condujeron sin rumbo mientras que Matthew despotricaba de su padre. Los
sentidos de Claire tensos mientras seguía su olor, su expresión, la forma en que
FORO PURPLE ROSE

mantenía su cuerpo. Con cuidado, ella alimentó su rabia, con pequeños

comentarios y gestos casi imperceptibles. Lo último que quería era que le gritara
que ella lo estaba incitando.
—¡Es ridículo! —Golpeó el volante con la mano—. Es decir, tú deberías ver ese
lobo Claire. Es la cosa más dulce, sé que es un animal, pero, maldita sea, ¡no hay
nada malo en ello!
Su aumento de adrenalina fue lo suficientemente fuerte para ser doloroso. Este era
el momento.
168
—Me gustaría verlo —dijo en voz baja—. Si realmente es tan dulce como dices...
Una imagen de su madre rasgando un ciervo muerto recientemente pasó por la
cabeza. Bueno, ella es agradable donde la gente está preocupada, por lo menos.
Matthew se volvió hacia ella, con ojos encendidos. —¡Puedes!
El júbilo saltó a través de Claire. —¿En serio? —Ella mantuvo la emoción en su voz
lo más escondida que pudo.
—Sí. Papá estará ocupado con los medios de comunicación durante horas, y nadie
va al laboratorio por la noche, de todos modos. —Su cara se puso seria—, tienes
que jurarme que nunca le dirás a nadie que te llevé.
—Por supuesto —dijo Claire.
—Está bien —volvió a agarrar el volante con determinación—. Sólo nos llevará
unos diez minutos llegar allí, mi padre... resopló —odia los largos desplazamientos.
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 19
Traducido por: Darkgirl

Corregido por: Alice_Vampire
E l edificio parecía exactamente igual al del otro lado, un tramo largo de

bloques de concreto, puntuados, con puertas de metal corrugado, lejos
una señal de luz anunciaba por la carretera: AUTO-ALMACENAJE,
PRIMER MES ¡GRATIS! Claire, miró a Matthew. En la misteriosa luz de las
lámparas de mercurio, su rosto parecía pintado.
169
—¿Por qué estamos aquí? ¿El laboratorio de tu papá no está en algún lugar? ella
mantuvo su voz en un susurro.
Matthew sacudió su cabeza. —El tiene dos laboratorios. Ese es el que muestra.
Mantuvo el hombre–lobo ahí, el tiempo suficiente para que los nuevos grupos lo
pudieran observar, pero entonces él y sus técnicos de laboratorio lo trajeron aquí.
Es aquí donde hace actualmente todos sus experimentos y cosas. Nadie sabe acerca
de esto excepto él y sus técnicos. Mamá y yo, obviamente.
Claire tembló ante el pensamiento de lo que debía pasar en ese edificio si el Dr.
Engle necesitaba mantenerlo en secreto. Los dos se apoyaron en la húmeda pared
de piedra, esperando, observando. En un lado, la carretera pasaba una cinta de
concreto, pero el otro lado estaba bordeado por un bosquecillo, de arboles al final
de una finca. Mostrando su camino de vuelta, después sería más fácil de lo que
Claire había esperado.
—Nadie va a encontrarnos, espiando ¿verdad?
Matthew sacudió su cabeza. —Es sábado, todos salen a las cinco el sábado y no
regresan hasta las ocho en punto el lunes, Mi papá siempre está diciendo como el
sábado es un día para trabajar y descansar.
Tenían muchos días por delante antes que la dejaran salir. Pero todo lo que pudo
decir fue. —Oh, está bien.
Era casi imposible ser paciente cuando su madre estaba tan cerca. Ella tenía que
hacer algo para detener el cosquilleo en sus miembros. —¿Así que cual puerta es?
La esquina de la boca de Matthew se curvó. —Todas ellas. Él todo el edificio es de
él, rentó todo este camino hasta el final, no creo que a los propietarios les importe
lo que hace.
La boca de Claire se abrió cuando hizo un rápido cálculo.
El laboratorio, estaba cerca a un gran bloque de ciudad.
FORO PURPLE ROSE

—Está bien, creo que esta todo claro. Tenemos que bajar a la quinta puerta. En esa
el candado está roto, pero nadie lo sabe. Cuando diga vamos, corremos.
—Entendido —el aliento de Claire se aceleró e inclinó sus rodillas.
—Vamos —Matthew susurró y comenzó a correr. Él no era competencia para un
hombre–lobo, pero las horas de entrenamiento de futbol se mostraban en la forma
en que corría. Para un humano, era rápido.
Él miró de vuelta a Claire con sorpresa y una mano en la manija de la puerta. —
Deberías entrar a las carreras —dijo desgarrando el metal con un giro—. Eres 170
terriblemente rápida.
No tienes idea.
Claire hizo una mueca a sí misma cuando se deslizaron dentro del laboratorio y
tenía la sensación de su madre observándola.
En la oscuridad, los instrumentos brillaban como estrellas, ningún papel llenaba los
contadores, ninguna foto escolar junto a los monitores de los computadores, estaba
tan desnudo y sin alma, como lo había estado el apartamento de Zahlia. Claire hizo
una mueca ante el recuerdo del perro acostado en la cama del lobo negro.
—No quiero prender la luz —Matthew susurró—. Solo por si acaso, ¿puedes
manejarte en la oscuridad?
Claire ignoró un urgente resoplido. Su sentido de la vista era suficientemente
bueno, como para leer las marcas del equipamiento del laboratorio. —Sí, estaré
bien —dijo ella. Podía oler a su madre en una parte alejada hacia el norte
finalizando el laboratorio. Has un esfuerzo por parecer humana, Claire.
—¿Así que mm, donde está la jaula?
Matthew tomó su mano y Claire maldijo el pequeño temblor que se disparo por su
brazo. No es el momento. Estoy aquí para encontrar a mi madre. Puedo ignorar
mis hormonas. Lo repitió como si fuera un mantra, mientras impulsaba su torpeza
a través del laboratorio. Se enfocó tanto. De pie contra su padre, como si eso, fuera
difícil para que ella recordara, que él podía salir corriendo y gritar si supiera lo que
realmente era.
El aliento de Claire se aceleró un poco, cuando vio las barras plateadas de la jaula
al final del laboratorio.
Matthew miró sobre su hombro hacia ella. —¿Asustada? —no había burla en su
voz, solo preocupación.
Claire sacudió su cabeza. —Sólo uh, tratando de no tropezar.
La jaula apareció completa ante su vista y Claire luchó para no lloriquear.
Su madre, acostada, curvada en la esquina de la jaula, con su nariz metida debajo
de su cola. Su miseria brillaba como un aura.
FORO PURPLE ROSE

Sin pensarlo, Claire tomó unos rápidos pasos hacia el hombre–lobo plateado.
Un fuerte brazo atrapó a Claire por el pecho. —Tranquila —Matthew susurró—.
No quiero que te estrelles.
Claire asintió y se forzó a moverse más despacio. En su forma humana no podía
comunicarse con su madre en silencio. Marie levantó su cabeza y se fijó donde
estaba Claire un minuto antes que se colocara frente a la jaula y presionara su
costado contra las barras. Ignorando el jadeo asombrado de Matthew, Claire se
arrodillo y presionó su frente contra la suave piel del cuello de su madre.
171
El lobo gimió, demasiado suave para que un humano pudiera oírlo. Calientes
lágrimas se filtraron a través de los ojos de Claire y cayeron sobre la piel de su
madre.
Claire acarició el muslo de su madre, sintiendo los huesos debajo. Por encima de
todo el Dr. Engels no la estaba alimentando lo suficiente.
—Lo siento —ella susurró. Matthew estaba solo a unos pasos de distancias, así que
era difícil estar lo suficientemente callada para que él no oyera, y había tanto que
Claire quería decir—. Voy a sacarte antes de luna llena —murmuró, luchando
contra el peso de su tristeza.
Los zapatos de Matthew chirriaron en el linóleo, cuando finalmente llegó a la jaula.
—Realmente no te asustas por nada ¿verdad?
Claire lo miró. —No estoy asustada de este lobo —ella dijo—. No pudo creer que
alguien piense que está bien tratarla así.
Claire confundió el asombro que cruzo a través de la cara de Matthew cuando ella
giro hacia él. El está sorprendido porque estoy llorando.
—Como... ¿Cómo sabes que es una hembra? —él se arrodilló frente a ella.
Oh, Mierda.
—Creo... creo que lo oí en televisión —Claire balbuceó. Las orejas de su madre, se
levantaron y Claire sintió los músculos en el lado del lobo ondulaban en
preocupación.
—¿De verdad? —Matthew cuidadosamente corrió sus dedos sobre la espalda del
lobo—. Huh, papá realmente querrá mantener este secreto. Estará mega
sorprendido, si logra salir.
—Oh —Claire dijo—. Tal vez me confundí, creo que lo oí, pero quizás debí haber
entendido. ¡Cambia el tema, cambia el tema!
—¿Um, cuantas veces la has visitado? —Hablar de su madre de esta manera,
cuando estaba lo suficientemente cerca para tocarla hacia a Claire sentir nauseas.
—Unas pocas veces —Matthew dijo—. Me tomó un tiempo encontrar el coraje,
para acercarme así, aunque —mientras el acariciaba el lobo, Claire hizo lo mejor
FORO PURPLE ROSE

con su vista, tratando de encontrar una manera de sacar a su madre de la jaula. Las
barras eran solidas, tan solidas que podrían herir a un hombre–lobo en su plenitud.
Obviamente, o sino mamá ya estaría libre. Ellos deben tener una llave en algún lugar.
La mamá de Claire empezó a dar un resoplido, y Claire pudo oler el hambre en su
aliento. —¿Hay carne por aquí? —preguntó a Matthew.
—¿Quieres... quieres alimentarla?
—Ella luce hambrienta —Claire usó la palabra “Ella” cuidadosamente.
172
Tan pronto como pudiera conseguir que Matthew viera que el animal enfrente de él
no era una cosa, sino una criatura que sentía y pensaba, era mucho mejor.
Matthew presionó los labios.
—Hay comida en el refrigerador, pero mi padre dice que si los alimentamos
demasiado pueden llegar a una lujuria de sangre, y no serán capaz de controlarlos.
—¿Crees que hay una probabilidad de que se equivoque sobre eso también? —Clare
se le quedó mirando atentamente—. Matthew, la está matando de hambre. —Se
levantó y caminó hacia el frigorífico. Déjale pensar en eso durante un minuto. Dentro
del inmaculado frigorífico, había probetas y botellas en el estante de arriba, pero los
dos estantes de abajo estaban llenos de paquetes tamaño familiar de perritos
calientes. Perritos calientes baratos, notó Claire con disgusto. Se inclinó y agarró
cuatro paquetes de comida del estante de abajo. Después sacó los otros paquetes
hacia delante, ni siquiera parecía que nada faltara.
Claire se apresuró de vuelta a la jaula y se arrodilló delante de ella. Matthew la
miraba extrañamente mientras le quitaba los envoltorios de plástico y deslizaba la
carne por las barras. Su olor la golpeó como una bofetada, no era mejor que la
comida para perros. Su madre pasó lentamente los perritos calientes a la parte de
atrás de la jaula y lo engulló. Un silbido de alivio escapó a través de su nariz
mientas comía enviaba desesperación que angustiaba a Claire. No podía dejar a su
madre aquí ni un minuto más, no con lo que el Dr. Engle la estaba haciendo
soportar.
Claire miró a Matthew, su paciencia desgastándose. —¿Qué? —Había más picazón
en la pregunta de lo que ella pretendía mostrar.
Se inclinó hacia atrás. —Lo siento. Es sólo… No esperaba que nadie entendiera
porque no odiaba eso, quiero decir, la odiaba. Pero tú pareces sentirte incluso más
apenada por ella de lo que yo lo hago. Sólo estoy sorprendido, eso es todo.
Claire se pasó una mano por la frente. En serio tenía que ser más cuidadosa. —Me
dijiste que no era peligrosa —dijo ella—. Y confío en ti —nerviosa, Claire se volvió
a hacer una bola con los perritos calientes. Es la verdad. Confío en él.
La mano caliente de Matthew le apartó el pelo de la cara y se inclinó hacia ella. Por
el rabillo del ojo, Claire vio a su madre ladear la cabeza hacia ellos. Antes de que él
FORO PURPLE ROSE

pudiera besarla, Claire esquivó la cabeza hacia el lado y le dio un corto abrazo. De
ninguna manera iba a besar a nadie enfrente de mi madre.
—Es tarde —susurró—. Deberíamos volver a casa antes de que Lisbeth me mate.
—Oh, sí, tienes razón.
Claire podía sentir su confusión a través del movimiento de los músculos de su
espalda.
—Gracias por traerme —susurró ella. Claire se apartó de él y ambos miraron al
lobo enjaulado. 173
—Volveremos pronto —dijo Matthew.

Claire no podía decir si estaba hablándole a ella o a su madre. Él miraba detrás,
hacia la puerta. Claire dudó. Se quedó mirando los ojos salpicados de oro de su
madre.
—Estate preparada —articuló Claire—. Voy a volver a por ti.
El lobo plateado parpadeó y movió la cola una vez.
Antes de que él pudiera darse cuenta de su indecisión, Claire siguió a Matthew de
vuelta a través del laberinto de los equipos. ¡Si sólo fuera capaz de encontrar una
llave! No importa. La encontraré la próxima vez, incluso si eso significa que tengo que
destrozar este lugar. Lo que no sería una mala idea, de todas formas.
Afuera, Claire tomó respiraciones profundas del aire nocturno. El olor del
desinfectante del laboratorio persistía en su nariz. Se giró hacia Matthew. —Ojala
todo el mundo pudiera ver esto.
De repente él parecía incómodo. —Sí, pero no podemos decírselo a nadie, ¿de
acuerdo? Es decir, ojala hubiera algo que pudiéramos hacer sobre ello, pero nadie
va a creernos en contra de mi padre, ¿ya lo sabes?
Claire abrió la boca, lista para discrepar, cuando algo se movió al final lejano del
edificio. Parpadeó y se preguntó si las sombras estaban jugándole trucos en sus
ojos. La luz de seguridad no mostraba nada salvo una amplia extensión de
hormigón y una valla de cadenas.
Pero entonces, fuera lo que fuera que había ahí afuera se retorció de nuevo y un par
de ojos amarillos brillaron en la oscuridad. Zahlia corrió hacia la valla, su negrura
separada de las sombras de los arboles. Estaba viniendo por ellos.
Claire siempre había oído a la gente decir que ciertas cosas pasan a cámara lenta,
(un accidente de coche, una mala caída, el momento antes de que el cristal se haga
pedazos contra el suelo). Cada paso que Zahlia daba se registraba en la mente de
Claire como una fotografía. Casi podía oír el chasquido del obturador. Matthew
estaba de espaldas a Zahlia. No la veía venir. Antes de que Claire tomara su
decisión, tuvo tiempo de registrar dos pensamientos separados: si me ve cambiar, su
FORO PURPLE ROSE

padre me matará. Era el segundo pensamiento el más fuerte. No él, no ahora. El

momento en que esas cuatro palabras fluyeron a través de su mente, Claire se
deshizo de su ropa y estalló en su verdadera forma. Por favor, rogó, no dejes que me
haya visto desnuda.
Sin mirar hacia su cara, Claire aventó a Matthew contra el hueco de la puerta del
laboratorio y pasó por delante de él. Zahlia saltó la valla con un salto y se posó en
la zona de luz azulada. Su cabeza se agachó y echó sus orejas para atrás.
Claire imitó la postura de Zahlia mientras un bajo gruñido de advertencia resonaba
174
en su garganta. Intentaba decirle a Zahlia que parara, pero Zahlia actuaba como si
no entendiera. Sus hombros se encorvaron bajo su oscuro pelaje.
El coste de entrometerse es más alto de lo que pensabas que sería, La Joven. No me pararás.
No puedes. Zahlia gruñó, enseñando sus dientes.
Claire negó con la cabeza y gimoteó mientras el ruido llenaba sus sentidos. Ese
momento de distracción era todo lo que Zahlia necesitaba. Detrás de Claire,
Matthew dejó salir un jadeo mientras Zahlia embistió contra ella.
Claire se agachó y resistió mientras Zahlia la alcanzaba. El lobo negro voló sobre la
espalda de Claire y aterrizó fuerte en la calzada, pero no antes de que se las
arreglara para agarrar el extremo del cuerpo de Claire en sus dientes. Claire se dio
la vuelta antes de que Zahlia pudiera atacar de nuevo. Sangre de su oreja raída
goteaba en el suelo por debajo de ella.
Zahlia miró a Matthew, agazapado en la puerta. Tú primero, dijo, enseñándole los
dientes a Claire. Luego él.
Claire se estrelló contra el costado de Zahlia, sus dientes queriendo morder el cuello
oscuro de Zahlia. Claire giró su cabeza en el último momento, y Claire se quedó
con la boca llena de pelaje. La calzada se precipitó al hocico de Claire mientras
Zahlia se salía de su agarre. Claire se puso bajo sus hombros y giró fuerte. Las
garras de Zahlia cayeron donde los ojos de Claire habían estado sólo un momento
antes. Saltando a sus pies, Claire saltó fuerte y cayó sobre Zahlia, golpeándola
contra el suelo. Hubo un ruido conforme el aire salía corriendo de los pulmones de
Zahlia. Sin aliento, Zahlia rodó sobre su espalda. Antes de que pudiera clavar sus
dientes sobre el suave vientre de Claire, Claire redujo el hocico de Zahlia con su
pata.
El lobo oscuro lanzó un aullido. Sangre se derramaba de su nariz y corría a sus
ojos. Claire miró a Zahlia, ciega e indefensa, con su garganta expuesta. Ella vaciló,
incapaz de completar la matanza. Sin pensar, Claire cerró su mandíbula alrededor
de la pata delantera de Zahlia. Oyó los huesos romperse bajo sus dientes. Zahlia
gritó de dolor.
Claire oyó un ruido metálico detrás de ella y se dio la vuelta a tiempo para ver la
puerta del laboratorio cerrarse. Matthew se había atrincherado por si mismo dentro
FORO PURPLE ROSE

del laboratorio. Bien. Cuando ella se giró de nuevo para hacer frente a Zahlia, el
lobo negro estaba ya a medio camino hacia la puerta abierta. Cojeaba, con tres
piernas y cubierta de sangre.
El regocijo inundó a Claire. Había detenido a Zahlia, al menos por un momento.
Zahlia no atacaría a nadie con una pata destrozada, no podría.
Mamá sabrá que hacer. Las endorfinas que subían a través de Claire, empezaba a
desvanecerse. Su oreja palpitaba donde Zahlia la había mordido, pero no era nada
comparado con el dolor de darse cuenta de que Mathew la había visto
175
transformarse.
¿Y ahora qué debía hacer?
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 20
Traducido por: paovalera, florchi y DaRkGirL

E
176
l primer instinto de Claire fue esconderse. Esperar a que Matthew
dejara el laboratorio y luego buscar la manera de liberar a su madre.
Pero si ella pudiese hablar con él, razonar con él, quizás entonces él no
le diría a su padre lo ella era, quizás él no la odiaría.
El dolor surgió en ella cuando se forzó a si misma a volver al cuerpo humano.
Claire miró alrededor cuando tiró de su camisa en su carro averiado. Mantuvo un
brazo envuelto sobre sus costillas y empujó la puerta hacia el laboratorio. Estaba
bloqueada.
—¿Matthew? —ella llamó—. Por favor, déjame entrar. ¡Te lo puedo explicar!
Golpear la puerta de metal le provocó que un calambre se extendiera por su brazo.
Ella estuvo muy concentrada mientras peleaba con Zahlia para notar sus heridas,
pero ahora su dolor estaba en todo su cuerpo, gritando por captar su atención.
—¿Matthew? —Ella intentó de nuevo—. Por favor, déjame entrar. Todo estará
bien, te lo prometo. Yo... yo no te haré daño. Yo no te haría daño. Por favor, sólo
déjame entrar. —La voz de Claire estaba entrecortada y las lágrimas se abrieron
paso por sus mejillas.
Dentro, ella podía escuchar como arrastraban unos muebles por el piso.
—¡Sólo vete! —La voz de Matthew sonó llena de pánico.
—Matthew, no iré a ninguna parte hasta que no me escuches. Lo podemos hacer a
través de la puerta si quieres, pero tenemos que hablar. —Ahora estaba susurrando,
hipando entre palabras. Su cabeza le dolía y la sangre por su cuello se había vuelto
pegajosa—. Por favor. Sólo lo hice para salvarte, Matthew. No sabía que más
hacer... ¡ella te hubiese matado!
Claire lo escuchó acercarse a la puerta.
—¿Cómo... cómo todo este tiempo, lo sabías y no me lo dijiste? —La voz de
Matthew se escucho más fuerte, a pesar de su tartamudeo—. ¿Cómo pudiste?
—Exacto —Claire lloró—. ¿Cómo te podría haber dicho? Matthew, tu papá mata
hombres lobo para ganarse la vida. ¿Qué esperabas que hiciera?
—Los cura —Matthew murmuró desde dentro del laboratorio—. Él... maldita sea.
FORO PURPLE ROSE

Claire dejó escapar un sollozo. Él no entendía... lo había perdido. Sólo se rebeló a

sí misma para salvarlo, y ahora lo había arruinado todo. ¿Qué pasaría si le decía a
su padre? El Dr. Engle la mataría a ella y su madre.
Ella escuchó algo pesado siendo removido al otro lado de la puerta. Se escuchó
también el clic de la puerta siendo abierto, lo que la sorprendió haciendo que saltara
hacia atrás. Lentamente, Matthew abrió un poco la puerta. —Oh por dios, Claire,
¡estas sangrando! —él abrió la puerta completamente.
—Sí —dijo ella rudamente—. Lo sé.
177
El trató de tocarla, pero su mano comenzó a temblar.
—Siento mucho que vieras eso, —ella murmuró —pero no podía dejar que te
matara. —Cuidadosamente, ella dio un paso hacia adelante y alcanzo su mano—.
Déjame...
—No, ¡espera! —Matthew la interrumpió, volviéndose al laboratorio. Su pie se
enredó con unas piezas de metal detrás de él y se cayó.
—¡Matthew, yo no te haré daño! —Claire se arrodilló—. Déjame ayudarte.
—No me toques. Tú... tú eres una de ellos.
—Si te quisiera herir, ¿no crees que ya lo habría hecho? Tú estabas en lo cierto. Hay
más hombres lobo alrededor de los que piensas, pero la mayoría de nosotros somos
totalmente pacíficos. Zahlia está loca, Matthew pero yo no soy así. Tienes que
creerme.
El se levantó, sacudiendo su cabeza. —¿Por qué te creería si has estado
mintiéndome todo este tiempo? La única razón por la que no me heriste fue para
que encontraras este lugar... para poder ver al otro lobo.
Las mejillas de Claire se calentaron.
—Estoy en lo cierto, ¿verdad? —las esencias de lágrimas y rabia corrieron por su
piel.
—Matthew, tu no entiendes —ella lo miró. El se acerco más a la puerta. Sus
músculos tensos, listos para correr.
—¿Qué es lo que no entiendo?
—El lobo que capturó tu papá... es mi madre.
Matthew se tensó.
—Por favor. Matthew. Te estoy diciendo la verdad. Piensa en ello. Las cosas entre
nosotros empezaron antes de que mi madre fuera atrapada. Necesitaba... necesito
tú ayuda, eso es verdad, pero sólo porque tú eres el único que ve las cosas como
son. ¿No me trajiste hasta aquí para ver como estos “monstruos” son gentiles? —
Claire señaló una celda al final en una esquina—. Somos lobos, eso es verdad. No
hay nada que pueda hacer para evitarlo, créeme, ya lo hubiera hecho. ¿Crees que
FORO PURPLE ROSE

quiero ser así? ¿Saber que cada mes, tengo que convertirme en algo que todos en el
planeta quieren muerto? ¿Crees que quiero ser la causa de sus pesadillas? Yo no
pedí esto Matthew, pero estoy haciendo lo mejor que puedo. También mi madre.
Ella nunca ha herido a nadie. Ella no le haría daño a nadie. Por favor. Si nos
puedes ayudar, no le digas nada a tu padre. —Claire respiró profundo, y jugo su
última carta—. Te salve la vida, y lo haría de nuevo. No me hagas arrepentirme.
Matthew se quedo mirándola. Negó con la cabeza, una, dos veces, y luego
desapareció en la noche, fuera del laboratorio. Claire lo miró partir, por dentro se
retorcía del dolor y el miedo. En la esquina trasera del laboratorio, su madre gimió, 178
y la determinación se asentó en Claire como el rocío de la mañana en el césped.
Antes de que hiciera cualquier cosa, iba a sacar a su madre fuera de esa maldita
jaula, con piernas temblorosas, caminó hacia adelante.
Claire estaba sorprendida al ver el cuerpo de una mujer y no de un lobo
esperándola. Su madre estaba en el piso, esperando por ella en su forma humana,
muy delgada.
¿Por qué se transformó?
—¿Dónde está la llave? —Claire preguntó.
—Dans le congélateur, —su madre susurró.
No podía recordar el español. Claire se dio cuenta de lo mal que estaban las cosas.
—Mamá, yo...
Se levantó a si misma sosteniendo el peso en su codo —Congelador, —gimió.
Claire miró por todo el laboratorio y finalmente abrió la puerta del congelador.
Dentro había una botella de vodka, tres bandejas de cubos de hielo, y un tazón de
cerámica con una llave plateada dentro. El metal congelado hirió sus dedos cuando
la intento tomar. Luego vio una bata blanca de laboratorio y la uso para tomar la
llave, sólo pasó un momento antes de que pudiera abrir la jaula, lo hizo tan rápido
que casi parte la llave en dos. La puerta se abrió y Claire entró en la celda.
Gentilmente cubrió a su madre con el abrigo. Claire se arrodilló y levantó la cabeza
de su madre posándola en su regazo. Acarició su cabello grasoso y descuidado. —
Todo está bien —murmuro—. Vamos a salir de aquí.
Marie abrió sus los y miró hacia Claire. —Deberías haberme dejado —ella
murmuró.
—¿Qué? —La mano de Claire se detuvo en media caricia.
—Sería más seguro para ti... para la manada. No sería la primera loba en la historia
que se sacrifica para salvar el resto. —Ella cerró sus ojos y una expresión de dolor
se cruzó por su rostro. Cuando su mirada se encontró con la de Claire de nuevo, no
había resentimiento en ella—. Pero estoy agradecida de que no me dejaras chérie.
Debiste hacerlo, pero estoy agradecida de que no lo hicieras.
FORO PURPLE ROSE

Las lágrimas llenaron los ojos de Claire y luchó por retenerlas. —Nunca te dejaría
—murmuro ferozmente—. Nunca.
En alguna parte del laboratorio una maquina chirrió, recordándole a Claire dónde
estaban. —¿Puedes caminar? De verdad tenemos que salir de aquí.
—Por eso me transforme. Debes ayudarme, pero si, puedo caminar.
La madre de Claire se levantó cuidadosamente, apoyándose en Claire. Ella la
ayudó a abotonarse el abrigo. La tela colgaba por los hombros delgados de su
madre, pero al menos estaba cubierta. Con sus brazos entrelazados, Claire y su 179
madre salieron lentamente del laboratorio, deteniéndose para devolver la llave al
congelador. Se dirigieron a la seguridad del bosque. Cada segundo que pasaba,
hacía que a Claire se le congelara la sangre por la ansiedad. Estaba segura que el
Dr. Engle y su milicia anti–hombres lobos aparecerían en cualquier momento, listo
para matarlas a ambas.
Cuando llegaron al refugio de los árboles, Claire bajó a su madre sobre el tronco de
un árbol de fresno caído para descansar. Marie se sentó con sus manos sobre las
rodillas, respirando en bocanadas profundas el aire claro de la noche. Claire olfateó
la brisa. No había rastro de Zahlia, pero ella no podía mirar más allá de las sombras
cambiantes en el bosque.
—¿Qué? —Marie la miró sospechosamente.
Claire escogió la corteza debajo de ella. —Me tiene preocupada que Zahlia esté ahí
fuera.
—Esa perra —gruñó ella—. Escuché su ataque afuera del laboratorio esta noche.
Claire dudó. —No entiendo la razón de Zahlia para hacerlo. ¿Por qué ella mataría
a esas personas? ¿Por qué después vino tras mí y Matthew?
Su madre intentó hablar. —Zahlia siempre ha querido estar segunda en el mando
de nuestra manada. Y estaba preparada para hacerlo. Pero luego la madre de
Zahlia… pensó que había encontrado evidencia que mostraba que nuestra clase
casaba humanos una vez al año, como tributo a la Diosa. Beatrice estuvo de
acuerdo conmigo cuando dije que la madre de Zahlia lo único que estaba haciendo
era buscar una laguna en nuestras leyes con el fin de satisfacer sus horribles
apetitos. La madre de Zahlia dejó la manda antes que pudiera ser disciplinada.
Debido a su madre, Zahlia perdió su oportunidad en el poder. Siempre sintió que
mí fue culpa.
—Creo que esta fue su idea de venganza. Pensó que si me atrapaban, y culpaban de
asesinar a humanos inocentes, entonces sería capaz de tomar mi lugar —hizo una
mueca—. Casi funcionó. Pero nunca contó con que te metieras en el camino,
asumo que ése es el por qué te atacó. Después de todo, arruinaste sus planes.
Claire tocó su boca, recordando la sensación de la pata de Zahlia entre sus dientes.
FORO PURPLE ROSE

—Cuando peleamos, yo… yo la lastimé bastante. No creo que pueda acercarse

sigilosamente a nosotras esta noche.
—Espero que no —gimió Marie—. No creo que esté lo bastante fuerte para pelear
con ella, y tú ya te has herido esta noche.
—Tenemos que volver a casa —dijo Claire alentadora—. Podemos empacar
algunas cosas e ir directo al aeropuerto, irnos y nunca volver. Dejar que Beatrice
trate con Zahlía. —No es que ella lo vaya a hacer, pero ya no es mi problema.
Claire se esforzó para no pensar en el hecho que dejar Hanover Falls significaría
180
dejar a Matthew y a Emily, también.
La expresión en el rostro de su madre la hizo parecer como una mujer vieja. —
Claire, no podemos. Es nuestra responsabilidad ayudar a la manada. Tan pronto
lleguemos a casa, necesitamos contactar con los otros. Una vez que podamos
organizar una reunión, la manada puede determinar el castigo para Zahlia.
También debemos lidiar con Matthew. Él sabe. Y a menos que podamos
asegurarnos que él mantendrá nuestro secreto… bueno. Debe ser tenido en cuenta
de una u otra manera antes que podamos irnos. Si él le dice a su padre, entonces no
habrá lugar en donde tú y yo podamos estar a salvo.
—¿Qué quieres decir con “tenido en cuenta”? —se atragantó Claire.
El delgado corte en los labios de su madre fue toda la respuesta que Claire
necesitaba.
—¡¿Estás… estás hablando de matarlo?! —dijo sin aliento.
Su madre se encogió de hombros sin certeza. —Tal vez. Pero sólo como último
recurso, sólo para proteger a nuestra manada. Está permitido en nuestras leyes… y
también en las leyes del hombre. Puede existir otro modo. En nuestras tradiciones,
hay algo llamado un gardien, un guarda–secretos.
—Sí, sé de eso, Zahlia me lo dijo —Claire se estremeció cuando dijo el nombre de
Zahlia.
Los labios de su madre se apretaron con desaprobación. Ella asintió. —Es mi
esperanza que él se convierta en uno. Los humanos a lo largo de nuestra historia
que han conocido nuestras identidades sin revelarlas se ofrecen a la protección de la
manada a cambio de su silencio. Podrías estar pidiéndole a Matthew que lleve una
carga verdaderamente pesada, Claire. —Los ojos de su madre quemaron afiebrados
y su mirada hizo que Claire retuviera el aliento—. Podría ser una difícil elección
por hacer. Pero es el único modo. Lo siento cherie. Ahora sugiero que sigamos,
antes que tome una opción sin saber las que tiene. Cada momento que nos
retrasamos sólo incrementa la oportunidad de que él ya le haya dicho a su padre lo
que ha visto.
FORO PURPLE ROSE

Claire se arrodilló en la suave alfombra de agujas de pino, sus pulmones quemando

con un grito al que no pudo darle voz, mientras su madre se levantaba y cojeaba
más profundo dentro del bosque.
A pesar de los dolores en su vientre, Claire se apresuró detrás de su madre. Entre
más profundo iban, más nerviosa se ponía Claire. Cada ramita que se partía en la
distancia, cada susurro de plumas de aves en la distancia la sobresaltaba, segura de
que era Zahlia. Les llevó más tiempo llegar a la casa de lo que Claire había
pensado. En el momento en que se deslizaron en el patio, Claire estaba temblando
con el pensamiento de lo que tenía que decirle a Matthew. 181
Se adelantó y se asomó en la ventana. Una luz quemada en la cocina, pero ninguna
señal de Lisbeth. Claire metió a su madre en la casa y ambas se arrastraron a las
escaleras. Una nota clavada en la puerta atrapó la mirada de Claire.
“Osito–Claire, lamento si no estoy aquí cuando llegues a casa. Algunos planes de
último minuto surgieron, y decidí afrontarlos. ¡Espero que esté bien! Estaré en casa
alrededor de la una, llama al celular si necesitas algo. ¡Espero que te hayas
divertido! –L”.
¿Ella estará de vuelta a la una? Mierda.
Ya eran las once. Si no se iba pronto, Lisbeth estaría en casa antes que Claire
pudiera volver.
Claire metió a su madre en la cama y a continuación corrió a su habitación,
rasgando la nota de la puerta mientras se iba. Consiguió limpiar tan rápido como
pudo con sus costillas adoloridas. El champú que frotó por su cabello ardió cuando
pasó sobre su oreja. En el borde de la pileta, su teléfono la iluminaba, Emily había
llamado cuatro veces. Claire lo alcanzó con una mano enjabonada y lo apagó.
Lidiaría con Emily más tarde. Mañana. En algún momento cercano. Hombre,
realmente apesto como amiga.
Claire serpenteó su brazo de vuelta en la ducha y lavó la suciedad debajo de sus
uñas maltratadas. Cuando estuvo lo suficientemente limpia como para no parecer
terrorífica, Claire de deslizó en la habitación de su madre.
Su madre tenía el edredón de seda hasta la barbilla, su frágil cuerpo apenas hacía
bulto bajo las sábanas.
—¿Mamá?
—¿Si, Claire? —su madre luchó para mantener los ojos abiertos.
—¿Quieres algo? Tengo que ir… a hablar… bueno. Tú sabes.
—Gracias, pero estaré bien. Por favor dile a Lisbeth, er…—su madre dudó.
—Le dejaré una nota diciendo que volaste a casa porque estabas enferma. Eso es
suficiente verdad. Probablemente subirá aquí a molestarte para que bebas alguna
bebida de algún milagroso té o sopa o algo parecido.
FORO PURPLE ROSE

—Eso estará bien. Sé cómo manejar a Lisbeth —un rastro de humor tiñó la voz de
su madre.
Claire sonrió. —Estoy segura que sí.
—Sé cuidadosa ahí fuera. ¿Y Claire?
Claire ladeó la cabeza.
—Gracias. Por todo. No muchas criaturas, humanas o lobos, habrían hecho lo que
tú hiciste esta noche.
182
Claire se despidió de Marie con gratitud, pero no pudo evitar sonreír. —Eres mi
madre —dijo ella—. Por supuesto que lo haría.
Claire salió del cuarto y se deslizó silenciosamente por las escaleras. Le dejó una
nota a Lisbeth sobre la mesa en su mejor imitación de la escritura de su mamá.
Luego Claire salió caminando en la noche, cuadrando los hombros contra el peso
de lo que estaba a punto de hacer.
Todas las ventanas menos una de la casa de Engles estaba oscura. Matthew estaba
levantado. Si sus padres estaban dormidos cuando llegó a casa, había una
posibilidad de que no hubiera hablado con su papá, de que el Dr. Engle no lo
supiera todavía.
Claire recogió un puñado de guijarros lisos debajo de un manzano silvestre. Los
lanzó contra el cristal con cuidado. Tan tensa como estaba, sería demasiado fácil
lanzar los guijarros lo bastante fuerte para romper la ventana. El rostro de Matthew
apareció en la ventana cuando la cuarta piedra golpeó la ventana.
Saltó del cristal para ponerse fuera de la vista y Claire maldijo en voz baja.
Esperó hasta que se asomó de nuevo, y luego le hizo señas frenéticamente.
Matthew alzó la ventana unos pocos centímetros. —¿Claire? ¿Qué estás haciendo
aquí?
—Tenemos que hablar. Siento haberte mentido antes. En serio lo siento. Pero si no
me escuchas ahora, ambos lo vamos a lamentar.
Él se cruzó de brazos sobre el pecho. —¿Hablas en serio? ¿Por qué debería creerte
ahora? ¿Puedes darme una sola razón para confiar en ti?
Las aletas de la nariz de Claire llamearon y luchó para controlar su temperamento.
—De acuerdo. Me lo merecía. Entiendo que estés enfadado, Matthew, pero esto es
serio. Mi madre me mandó aquí —Tiene razón. Soy una mentirosa, pero no ésta
vez.
—No me importa si te mandó el Papa. Necesito algo de espacio. Tengo que pensar.
Y es tarde. Me voy a la cama, y tú deberías irte a casa.
—Me iré ahora, si quieres. Pero déjame hablar contigo antes de que… antes de que
hagas nada, ¿de acuerdo? Mañana, quizás, ¿después de que hayas tenido algún
FORO PURPLE ROSE

tiempo para pensar en las cosas? —Claire odiaba el gimoteo que se deslizó en su
voz, pero no podía pararlo.
Matthew suspiró y apoyó su cabeza contra el marco de la ventana. —Bien. Nos
encontraremos mañana por la noche en Greenway Park, en el lugar donde tuvimos
nuestro picnic. Estoy practicando con un par de porteros hasta las ocho y media.
Estaré ahí a las nueve.
Claire dejó salir un largo suspiro. Greenway Park sería bastante expuesto, ¿y quién
sabía lo curada que estaría Zahlia mañana por la noche? Aun así, no estaba en
183
posición de discutir. —Impresionante. Es perfecto. Gracias, Matthew, no sabes
cuánto…
Él la interrumpió. —Vete a casa, Claire. Me encontraré contigo mañana. —Cerró la
ventana, y la mirada de Claire se precipitó sobre la otra ventana oscurecida en el
segundo piso. Estaban a oscuras. Matthew no había despertado a sus padres.
Claire se escabulló hacia las oscuras sombras del patio trasero y observó su ventana
hasta que apagó la luz. Comprobó su reloj, 12:18. Si se daba prisa, todavía podía
llegar a casa antes que Lisbeth.
Cuando llegó a casa, las luces estaban apagadas. Lo conseguí. Claire se apresuró a
entrar y comprobar a su madre dormida. El agotamiento trepaba sobre ella como
una araña y sus heridas palpitaban al ritmo de su corazón. Tomó un par de
analgésicos y se tiró a la cama. A pesar de todo lo que había pasado, Claire durmió
como un muerto, inmóvil y sin sueños.
Tarde después de mediodía, Claire se deslizó a la habitación de su madre.
—Ah, Claire. ¿Cómo te sientes?
Su madre parecía más como sí misma, todavía pálida y severamente delgada, pero
mejor.
Claire se encogió de hombros. —Me duele la oreja, y las costillas, pero todo lo
demás está bastante mejor. Mientras no salgamos corriendo de Advil, creo que
estaré bien.
—Me alegro de oírlo. Acabo de hablar con Beatrice, y nos vamos a reunir más
temprano esta noche, justo después de anochecer. Eso debería darnos tiempo para
hacer un plan y después tomar medidas antes de por la mañana.
—¿Esta noche? —Claire se frotó los ojos—. Mierda.
—¿Qué?
Claire se sentó duramente en la silla de aspecto delicado cerca de la cama de su
madre.
—Matthew estaba demasiado furioso para hablarme anoche. Pero dijo que nos
reuniríamos en el parque esta noche, y prometió no hacer nada hasta que le hubiera
FORO PURPLE ROSE

dicho… bueno, ya sabes, lo que tengo que decirle. Debería estar ahí alrededor de
las nueve en punto.
—La sincronización será mala. —Su madre se recostó contra un montón de
almohadas—. Pero hablar con él es tan importante como tratar con Zahlia. Me
aseguraré de que seas capaz de reunirte con él.
Claire se lamió los labios. —¿Sabe Beatrice sobre la… cosa de Matthew?
—Ella es el Alfa, tenía que decírselo. Ella es la única que realmente puede dar
permiso para crear un gardien de secretos, y es su deber informar al resto de la 184
manada.
Claire se retorció en su asiento. —¿Está enfadada?
Marie se giró, sus oscuros ojos buscando la cara de Claire. —Entiende tus actos. Sé
que ella cree que puedes convencer a Matthew para que acepte este nuevo rol —
dudó—. ¿Estás segura que confías en él? ¿Estás segura de que su padre no está de
camino hacia aquí ahora?
—No tengo otra opción que confiar en él. Él podría prometer ser un gardien, y aún
así contarlo. La única diferencia es que después de esta noche, sabrá que le pasaría
si lo hace.
—Cierto. —Su madre suspiró—. Odio tener miedo, y creo que lo tendré por algún
tiempo.
—Lo siento. Sé que si no hubiera cambiado delante de él así, estaríamos seguras —
Claire bajó la cabeza.
—Sí. Y él estaría muerto. —Su madre puso un dedo bajo la barbilla de Claire y
levantó su cara—. Lo que hiciste nos puso en un peligro terrible, chérie. Pero lo
hiciste por la razón correcta. Salvar una vida es una cosa honorable, siempre. No
estoy enfadada contigo. Egoístamente, estoy asustada, pero no estoy furiosa.
—Gracias. —Claire se inclinó hacia delante hasta que su cabeza estuvo presionada
contra el hombro de su madre. Había estado tan cerca de perderla. Su madre
envolvió sus delgados brazos alrededor de Claire.
—Quiero que tengas cuidado esta noche, chérie. Habrá más de una cosa ahí afuera a
la que le gustaría hacerte daño.
Claire asintió contra la clavícula de su madre.
—Bien. Ahora. Ve a prepararte. Parecerá menos sospechoso si nos vamos por
separado. Nos encontraremos en la otra parte del muro en dos horas.
—De acuerdo. —Claire se salió del abrazo de su madre y fue hacia su habitación.
Cuando era casi la hora de irse, se lavó los dientes, se metió en una sudadera,
dejando su pelo suelto para esconder su oreja herida de Lisbeth. Salió de la puerta
FORO PURPLE ROSE

tan rápido como pudo, fingiendo que su dolor de cabeza se había ido e iba en bici a
casa de Emily para una sesión de atracones de brownies.
Claire montó por el camino de entrada, dando vueltas por el lado opuesto de su
propiedad, donde escondió la bicicleta en una zona de arbustos de hoja perenne. Se
metió a escondidas atrás a lo largo de la pared de ladrillo, observando la casa en
busca de cualquier signo de Lisbeth. Cuando alcanzó el agujero familiar, Claire
prácticamente se sumergió a través de la hiedra hacia el bosque. Se las arregló para
pararse justo antes de que se topara con toda su fuerza contra su madre.
185
—Estaba empezando a preguntarme dónde estabas —dijo Marie.
—Lo siento. Tenía que esconder mi bicicleta. La próxima vez apareceré con una
historia para Lisbeth que no implique tantos accesorios.
Su madre se rio, pero su cara rápidamente volvió a su habitual expresión seria. Las
dos se pusieron en camino a través de los ya oscuros bosques.
Llegaron al claro, donde Beatrice y Victoria ya estaban esperando. Judith y
Katherine aparecieron antes de que Claire incluso se hubiera instalado en el suelo.
—Bueno, sólo nos falta Zahlia —dijo Beatrice—. No espero que venga, pero si no
lo hace, está desobedeciendo una orden directa mía —Su voz era estricta—.
Empezaremos sin encender el fuego esta noche, es demasiado temprano. Y no es
una buena noche para mandar señales innecesarias.
Claire miró a los árboles a su alrededor, preguntándose quién más podía estar ahí
afuera. Le echó una ojeada a su reloj. Sólo tenía media hora antes de la hora en que
se suponía que se encontraría con Matthew.
—Así que, ¿Qué haremos? —preguntó Judith.
—Encontrarla. —Marie envolvió sus brazos a su alrededor—. Y luego traerla de
vuelta.
Beatrice asintió. —Exactamente. Una vez hayamos oído lo que tenga que decir por
sí misma, que defensa ofrece por sus actos, luego decidiré si debería ser desterrada
de la manada y enviada a vivir fuera de los límites de nuestro territorio, o si su
castigo debe ser… más severo. —Beatrice se levantó—. ¿Hay alguna pregunta?
La idea de volver a ver a Zahlia le daba escalofríos a Claire.
—¿Y sobre Claire? —Preguntó Judith—. Todavía no ha cambiado totalmente.
¿Qué papel puede tener?
Claire se puso rígida, preguntándose si alguien mencionaría a Matthew.
—Su transformación está casi completada, y por lo que Marie me contó, Claire ya
se ha demostrado a sí misma a la manada. Nos ayudará a buscar esta noche, lo cual
es incluso más importante porque Victoria no nos ayudará. No arriesgaré al niño
que está por nacer.
FORO PURPLE ROSE

Victoria miró miserablemente los restos carbonizados de su último fuego.

Beatrice, dio un paso adelante.
—Ahora tratemos de terminar esto antes que la situación se ponga fea. Puedes
transformarte cuando quieras. Y por favor se cuidadosa, muy cuidadosa.
La mamá de Claire la saco del círculo antes que cualquiera de ellos comenzara a
cambiar.
—Se que necesitas encontrarte con Matthew. Iré contigo, tan pronto como pueda
—su madre comenzó a quitarse los zapatos. 186
—¿Cómo es que hoy nadie dijo nada sobre él? —la pregunta salió antes que Claire
pudiera detenerla.
Marie presiono los labios —Todos ya saben lo que paso. No hay necesidad de
discutirlo hasta que la situación esté resuelta. Esperemos que acceda a convertirse
en un gardien y en ese caso no habría nada mas de que hablar.
Claire tragó. Las palabras que su madre no había dicho corrieron rápidamente. Que
si se rehusaba, habría mucho sobre que hablar. Sólo tengo que convencerlo. Eso es todo.
No importa lo que cueste, tengo que encontrar una manera de convencerlo.
—Así que cuando estemos en el parque, um… —Claire pausó.
—Me quedare fuera del camino. Sé que mi presencia no ayudará. Me dará la
oportunidad de buscar en esa parte del bosque —Marie levantó la cabeza—. Y no
olvides llevar tu ropa contigo.
Cierto. Ropa. Claire, continuó sin emoción, el peso de lo que tenía que hacer,
presionaba tan fuerte que era difícil moverse.
—Se nos acaba el tiempo —Su madre dijo impaciente.
Claire asintió a sí misma —Lo siento, estoy lista cuando tu lo estés.
Al menos, creo, que lo estoy.
Las dos se transformaron y se internaron en la manada.
Cuando llegaron, un profundo dolor se estableció en las costillas de Claire y su
palpitante oreja herida. Ella arrojó la ropa que había traído y se giró hacia su
madre.
Seré tan rápida como pueda.
La cola de Marie se movió. Toma tu tiempo, esto es tan importante como encontrar a
Zahlia. Voy a ver que puedo encontrar en el bosque. Ella giró y se fue, dejando a Claire
sola.
A través de la última franja de árboles, Claire pudo ver a Matthew. El estaba
recostado contra su carro, su cabello aun mojado después de práctica. Antes que los
nervios pudieran apoderarse de ella, Claire cambio a su forma humana y se puso su
FORO PURPLE ROSE

ropa. Su camiseta tenía mancha de humedad en el frente, por haberla llevando en

su boca y esperaba que Matthew no lo notara.
Quitó las últimas agujas de pino de sus shorts, aliso su cabello, y atravesó los
árboles.
Matthew alcanzó a verla y se dirigió a través del claro, cerrando la distancia entre
ellos. Claire esta aliviada al ver que no había enojo en su expresión.
—Hola —ella dijo.
—Hola a ti —una sonrisa se formó en la esquina de su labio, fue rápida, pero estaba 187
ahí.
Cuando ella miró su boca, el ángulo de sus pómulos, la conciencia de lo que pudo
haber sido de Claire. Ellos pudieron haber estado juntos, haber ido a la graduación
y besarse en los corredores entre clases. Si ella fuera humana.
En vez de eso, estaban encontrándose aquí en la noche para hablar de mantener a
uno de ellos vivos. Lágrimas asomaron en sus ojos. —Matthew lo siento tanto —
ella dejó salir.
Él levantó una mano para detenerla. —Lo siento también, me asuste.
La boca de Claire se abrió, ella no había esperado una disculpa.
—Tienes razón. No estoy de acuerdo con mi papá, pero eso no significa que no me
alarmara al descubrir que alguien a quien conozco es un hombre–lobo. Algunas
cosas son un poco más difíciles de procesar cuando te golpean de cerca ¿sabes?
—Sí, tengo alguna experiencia con eso —Claire bufó. La primera noche que se
transformó flotó por su memoria, qué irreal había sido todo hace unos pocos meses
atrás. Matthew dio la vuelta y camino a través de los árboles. El pensamiento de
estar en los bosques donde su madre estaba, hizo sentir a Claire nerviosa, pero ella
lo siguió. Ellos caminaron en silencio a través del campo.
Cuando alcanzaron el borde del bosque, la ansiedad de Claire se desvaneció. Sería
realmente fácil hablar con él con la oscuridad de las sombras del bosque dándole un
lugar para esconderse. Y la única cosa que podía oler era un venado muerto,
profundamente en el bosque.
Su madre debió haber circulado por el otro camino. El hecho que Matthew no
dudara en tomar un paseo dentro del bosque con ella, le dio el coraje de abrir la
boca.
—Matthew —ella respiró—, no puedes creer lo mucho que no quiero decir lo que
tengo que decirte ahora —el movió su cabeza a un lado. Claire cruzó los brazos en
su pecho y miró el suelo, insegura sobre cómo empezar. Finalmente ella se lo dijo,
exactamente como su madre le había dicho.
FORO PURPLE ROSE

—La cosa es que si le dices a alguien lo que somos, mi madre y yo, luego el resto de
la manada vendrán tras de ti. Pero si no dices nada, diablos, si sólo pretendes que
nada de esto alguna vez pasó, la manada te defenderá. Para siempre, se llama ser
un gardian. —Ella lo miró.
—Realmente no te pediría que guardaras este, nuestro, secreto sólo por mi gusto.
Realmente no lo haría, pero no podría soportar si algo te pasara, por favor,
Matthew, sólo olvida que alguna vez me conociste, y te prometo que todo volverá a
la normalidad ¿de acuerdo?
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—Pero no quiero olvidarte —Matthew metió sus manos en los bolsillos delanteros
de su sudadera y la miró duramente, sus ojos ardieron en la débil luz de la recién
levantada luna.
—Podemos cambiar las cosas, Claire.
Claire trago fuertemente —Desearía que las cosas fueran distintas también, créeme.
—Ella miró las agujas de pino bajo sus pies.
—Pero… —la esencia de su madre, voló a través del claro. Claire levantó la mirada
y se congeló cuando su madre merodeaba dentro del claro.
Las costillas de Marie palpitaban y la piel en su cuello estaba elevada. Ella miró a
Claire, luego miró a otro lado, lo blanco de sus salvajes ojos, destelló en la cercana
oscuridad. Cerca a Claire, Matthew retrocedió.
Al menos no salió huyendo. Pensó Claire.
Su madre estaba claramente molesta, pero sin transformarse.
Claire no podía decirle lo que estaba pensando. Cambiar frente a Matthew parecía
un riesgo demasiado grande, él ya estaba en el borde y eso sólo lo presionaría más.
Antes que ella pudiera tomar una decisión, un fiero gruñido atravesó el claro y
Zahlia corrió a través de los árboles, favoreciendo su pata herida. Gruñendo, saltó
sobre la espalda de Marie, su pata delantera rasgando su hombro.
—¡Matthew tienes que esconderte! —Claire siseó.
Temerosa y furiosa, se transformó tan rápido que no tuvo tiempo de quitarse la
ropa. Jirones de ropa volaron en el suelo y detrás de ella, Matthew jadeó. Claire se
agachó, su estómago contra las ruinas.
Aun en la espalda de Marie, Zahlia descubrió su rostro, sus dientes perdidos en el
otro lado del lobo. Aun débil de su tiempo con el Dr. Engle, la madre de Claire
tropezó, su hocico raspando la tierra, cuando su pierna delantera cedió. Zahlia, se
deslizó, por el cambio de posición y Claire saltó.
La fuera del impacto de Claire golpeó al lobo negro, sacándolo del camino de su
madre, lanzándola al piso. Zahlia luchó por levantarse pero antes que pudiera
recuperar su posición, Claire mordió fuerte en la piel del cuello de Zahlia y la
arrastró tan pronto como pudo.
FORO PURPLE ROSE

Claire giró su cabeza, usando el impulso de su cuerpo y la fuera de su mandíbula

para alejar a Zahila de Matthew y su madre. Zahila golpeó un árbol con un ruido
sordo antes de caer al suelo en una pila.
Claire se apoyó nuevamente, lista para otro asalto, pero Zahlia estaba en el suelo
sin moverse. Estaba respirando, un gran gemido resonó en su garganta, pero no se
levantaba.
Algo en el bosque más allá de Zahlia captó la visión de Claire. La escasa luz de la
luna, que se colaba por los árboles, se deslizo a través del pelaje gris. Beatrice estaba
189
ahí, observando. Claire agacho la cabeza, tratando de ver a través del arbusto. ¿Por
qué Beatrice no llegaba al claro?
Claire, ladró, pidiendo al Alfa que las ayudara a lidiar con Zahlia.
En el bosque, no había nada salvo silencio. Una respuesta silenciosa, la segunda
vez que ladro, Claire entendió que Beatrice no iba a venir en su rescate.
Claire miró a Zahila. Parte de ella quería finalizar lo que había empezado, matar al
lobo que trató de matarla y a su madre. Para eliminar cualquier trato con Matthew,
o a los otros humanos que ella cuidaba. Pero ella no podía hacerlo. Cada vez que
sus músculos temblaban, el desesperado gemido de Zahila la detenía.
Detrás de ella, Claire oyó a Marie arrastrarse sobre el suelo. Claire se acercó para
enfrentar a su madre.
¿Estás bien?
Sin responder su madre, se alejó, rodeó a Claire terminando cerca de Zahlia. Los
ojos negros del lobo giraron y ella empezó a lamer su muslo.
La madre de Claire se situó sobre el cuerpo boca debajo de Zahlia, sus orejas y cola
se esforzaban por moverse.
Su cuello ha sido roto. Ella se inclinó cerca, brevemente resoplando, ante las orejas de
Zahlia cuando dirigió al lobo herido. Esta es una compasión que no mereces.
El gemido de Zahila se cortó cuando las fuertes mandíbulas de Marie se cerraron en
su tráquea, ahogándola. En sólo unos momentos, las costillas de Zahila dejaron de
moverse. Ella empezó a transformarse, pero antes de que volviera a su forma
humana, sus ojos se tornaron vidriosos e inmóviles.
Se había acabado, Zahlia estaba muerta.
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 21
Traducido por: veroniica, lost angel, Dham-Love y Clo
M
arie se tambaleó unos pasos lejos del cuerpo desnudo de Zahlia y se 190
desplomó sobre la alfombra de hojas muertas.
Claire se arrastró hacia su madre.
¿Estás bien? Ella olió la sangre que goteaba del hombro de su madre.
Yo... lo estaré....al final.... su madre jadeaba. Ve a buscar a Matthew.
Claire gimió. Oh, mierda. Matthew.
Empezó la transformación, y se dio cuenta una fracción de segundo después que
había arruinado su ropa. Claire tuvo un salto doloroso a medio–cambio y cayó a
unos metros en la oscuridad que cubría el bosque.
—¿Matthew? —Llamó, intentando ver el claro desde su escondite.
—¿Claire? —Él salió de detrás de un roble macizo. —¿Está… está muerta? ¿Estás
bien?
Claire sintió que sus rodillas se volvían como acuosas. Él quería saber si estaba
bien. Eso era algo bueno.
—Sí, ella está muerta. Y yo estoy casi bien del todo. ¿Tú?
—Tengo miedo de mi maldita mente. Honestamente, ¿Por qué te estás
escondiendo?
—Esto... no tengo nada de ropa conmigo.
—Oh. Bien. —Matthew bajó la cremallera de su sudadera y la puso sobre el
terreno—. No miraré. —Prometió, yendo lejos de ella.
Desnuda, Claire rápidamente se precipitó a través del claro y cogió la sudadera. Le
llegaba casi hasta las rodillas. —Está bien —dijo ella.
Matthew se dio la vuelta. —¿Qué hay sobre tu mamá? ¿Es tu mamá, verdad?
Claire asintió. —Zahlia la lastimó bastante cuando ella nos atacó. Ella estará bien.
Me parece. ¿Tú... tú me odias?
—No. ¿Por qué lo haría? Esa cosa, señaló a Zahlia, ese monstruo, lo odio. Pero tú
defendías a tu mamá. Y a mí. —Su voz temblaba, pero cuando miró a Claire, la
confianza brillaba en sus ojos.
FORO PURPLE ROSE

—Matthew. Yo no soy diferente de lo que era ella. —Claire metió profundamente

las manos en los bolsillos de la sudadera—. No soy una chica humana, ya lo sabes.
Si tú piensas que ella era un monstruo, entonces piensas que yo también lo soy.
Matthew puso una mano en su brazo. —Por supuesto que no. Tú acabas de
demostrar todo lo que yo sospechaba de los hombres lobo. Un monstruo no
salvaría a un ser humano. Me podrías haber empujado hacia allí fuera como una
distracción. Podrías haber dejado que tu madre se valiese por sí misma y que saliera
191
corriendo. En cambio, nos salvaste a ambos. ¿No podías matarla, ¿verdad?, —
preguntó serio.
Claire negó con la cabeza. —No, no podría. Tal vez hubiera sido mejor si lo
hubiera hecho. No sé. —Abrumada, Claire se balanceó sobre sus pies. Matthew
deslizó los brazos alrededor de ella, equilibrándola.
Claire se alejó de su agarre. —Esto es todo culpa mía. Tú estabas aquí fuera esta
noche, por mi culpa. Si no fuese un hombre lobo tú no habrías tenido que ver eso
para nada habrías estado aquí fuera. Lo siento yo te arrastré a todo esto. Lo siento,
lo siento tanto. Yo me tendría que haber mantenido alejada de ti.
—Sé que no eres humana. —Él la atrajo de nuevo y envolvió sus brazos alrededor
de ella con más fuerza—. Pero eso no significa que no seas una persona. Yo estaba
asustado. Lo admito. Pero no siento haber estado aquí. No siento saber quién eres
en realidad. Tú tampoco deberías. —Claire se inclinó hacia él, con la esperanza que
él no pudiese sentir su temblar—. ¿Mantendrás el secreto por nosotros? —susurró.
—Lo prometo. Y no para salvarme a mí mismo. Lo haré por ti. Yo tampoco soy un
monstruo.
—Gracias. De verdad, gracias. —Claire se calmó fuera de sus brazos y miró a
Zahlia, tendida en el suelo del bosque.
—¿Qué vamos a hacer con ella, um, su cuerpo? —preguntó Matthew. Claire podía
oler el agrio, verde olor de sus náuseas al mirar a Zahlia.
Claire se pasó una mano por la frente. —Creo que tengo una idea. Espera.
Se acercó a su madre, arrodillándose de lado del enorme lobo —¿Puedes llegar a
casa por tu cuenta?
Marie sopló y golpeó su cola contra el suelo dos veces. Incluso aunque estaba en su
forma humana, Claire sabía que su madre estaba diciendo que sí.
—Bien. No te preocupes. Yo me ocuparé de Zahlia. —Ella se volvió para hacer
frente a Matthew—. Muy bien, aquí está lo que pienso...
La manta de picnic estaba todavía arrugada en el maletero del coche de Matthew.
Los alegres cuadros rojos parecían inapropiadamente festivos envueltos en el
cuerpo de Zahlia, pero era mejor que dejar sangre por todo el coche. Mientras su
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madre cojeaba de camino a casa por el bosque, Claire cubrió como pudo la sangre
espesa que estaba en el suelo del bosque y recogió la tela de ropa hecha jirones que
había usado. Ella deseaba que su madre hubiera estado lo suficientemente bien
como para ayudarlos, pero era obvio que ir caminando a casa iba a drenar
cualquier fuerza que Marie hubiese tenido.
El recuerdo de Beatriz, escondiéndose en el bosque como una cobarde, distrajo a
Claire. Como Alfa, ella era la que debería haber matado a Zahlia. Ella era la que
debería haber lidiado con la evidencia. Claire parpadeó alejando la ira que le
nublaba la visión. Habría tiempo para pensar en eso más adelante. Ella se subió los 192
pantalones cortos demasiado grandes de fútbol que Matthew había encontrado para
ella en su coche y echó un último vistazo alrededor del claro. Estaba lo
suficientemente bien.
Matthew y ella pusieron al hombre lobo muerto en el maletero y se metieron en el
coche. Condujeron en silencio. Matthew había apagado el estéreo cuando entró al
coche. No parecía correcto escuchar música con Zahlia muerta en el maletero.
Cuando él volvió a la carretera que conducía al laboratorio de su padre, Matthew se
acercó y apretó la mano de CIaire.
—Esto es lo que hay que hacer.
—Sí —dijo Claire—, pero es duro todavía, ¿sabes?
—Sí. Lo sé. —Su voz era grave, y Claire estaba bastante segura de que él estaba
hablando de algo más que lo que estaban a punto de hacer con Zahlia. Matthew
aparcó el coche en las sombras al final de la instalación y abrió el maletero. Caminó
hacia la parte posterior del coche. Después de una respiración profunda, Matthew
metió la mano agarrando la manta, pero Claire lo detuvo.
—Yo puedo llevarla más rápido por mí misma, —dijo suavemente—. Yo dejaría
que ayudaras, pero si nos pillan... —Su voz se apagaba.
—Sería realmente malo —terminó Matthew
—Vale. Adelántate —Él se volvió pero no antes de que Claire viera el alivio que
cruzó su cara al saber que no tendría que tocar a Zahlia.
Claire enrolló sus brazos en torno al cuerpo y respiró con dificultad cuando el olor
de la muerte llenó su nariz. Estiró el cuello alejando su cabeza lo más lejos posible
de Zahlia y la movía fuera del tronco.
—Anda a abrir la puerta, —jadeó.
Cuando el desvanecido chirrido de la puerta de metal hizo eco en el edificio, Claire
corrió lo más rápido que pudo. Se arrojó a la oscuridad del laboratorio y estuvo
cerca de chocar con Matthew.
Claramente, él no había esperado que ella fuese tan rápida. Inhumanamente rápida.
La expresión choqueada en su cara hizo que a Claire le doliera el pecho. Ajustando
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el cuerpo envuelto en una manta en sus brazos, Claire pasó fácilmente el equipo de
laboratorio y se dirigió a la jaula. Matthew siguió junto a ella. Claire podía oír sus
casi silenciosos pasos. Con el fin de dejar a Zahlia en la jaula, Claire tuvo que
entrar también. Estar dentro de la verja hizo que la piel en su espalda se erizara.
Tan rápido como pudo, Claire dejó caer a Zahlia en el piso y volvió a salir de la
jaula. La vista del cuerpo de Zahlia yaciendo en el piso de concreto hizo que la
boca de Claire se secara.
No comiences a volverte loca ahora. Tiene que ser de esta forma. Mamá sería
capaz de hacer esto calmadamente. Todas estamos mucho más seguras con Zahlia 193
muerta, y cubriendo las pistas de mi madre con su cuerpo no la dañará más.
—¿Crees que tu padre llamará a la policía? —preguntó ella.
Matthew sacudió su cabeza. —Él piensa que los policías son idiotas. Y estaría
totalmente humillado si Lycanthropy Researchers International se encontrara con
su seguridad lo suficientemente comprometida para que alguien pudiese descubrir
su laboratorio real. Sin mencionar el gobierno… Incluso si se da cuenta que otra
mujer loba la mató, no hay manera de que pueda decirle a nadie sin perder su
credibilidad. Supongo que podría intentar encontrar la loba que hizo eso, pero papá
no va a llamar a la policía, y no va a ser capaz de encontrar a ninguna de ustedes
por sí mismo.
Claire confió en él. Tenía que hacerlo, especialmente considerando cuanta
confianza había puesto él en ella.
—Bien. —Fue más una respiración que una palabra.
Matthew miró lejos del cuerpo y dejó salir una larga exhalación. —Salgamos de
aquí.
Claire se apresuró sobre el congelador y tomó la llave del platillo. Miró el cuerpo de
Zahlia en la jaula. Después de un momento de silencio, Claire borró sus huellas
digitales de la puerta de la jaula y la llave con el dobladillo de la sudadera,
poniendo la llave de vuelta en su platillo en el congelador, y apurándose a salir del
laboratorio.
Matthew se deslizó en el asiento del conductor y apoyó su cabeza contra el
manubrio. Claire miró a la parte trasera de su cuello, el conjunto de sus hombros.
Ella podía ver qué era lo que acababan de hacer en la forma en que él se mantenía.
Y todo era su culpa.
—Lo siento, —susurró ella, y se maldijo a sí misma por estar llorando de nuevo—.
Desearía nunca haber… —Con su cabeza aún descansando contra el manubrio,
Matthew se dio vuelta a mirarla.
—No —dijo él—. No voy a permitir que digas eso. No me arrepiento de esto. Lo
admito, cuando al principio me fijé en ti, la primera vez que esperé que salieras
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conmigo, esto no era exactamente como imaginé que irían las cosas. Pero aún así
no lo cambiaría. —Él se apoyó a un lado y la besó.
Claire se retiró, apoyándose en la puerta junto a ella. —Matthew, estando conmigo
casi fuiste asesinado. Escucha, he deseado salir contigo desde que te vi por primera
vez, también. —Admitirlo la hizo sonrojar—. Pero después de todas las cosas
horribles a las que te has visto arrastrado por mí, por lo que soy… No quiero
arruinar tu vida. Y eso es exactamente lo que estoy haciendo. Así que pienso…
pienso que tal vez no deberíamos estar juntos. —Las palabras quemaron como
ácido en su boca. 194
Matthew se empujó hacia atrás y la miró. —Tú no estás arruinando mi vida. Yo
elegí estar aquí esta noche. ¿O no? Sé que eres una mujer–lobo, sé lo que eso
significa, y no me importa. Después de todas las cosas que han pasado, difícilmente
puedes decir que no sé en lo que me estoy metiendo. Entonces, dame una buena
razón por la que no podemos estar juntos.
Claire dudó.
—¿A menos que tú no quieras? —Él sonó sorprendido y un poco herido.
—¡No es eso! Es sólo… No sé qué va a pasar. No sé cómo van a ser las cosas desde
que yo soy… lo que soy. Tengo que esconderme, todo el tiempo, y mentir, a todo el
mundo y…
—Pero no a mí. No tienes que esconderte de mí y no tienes que mentirme porque
yo ya lo sé. Y te amo de todas formas. —Tomó su barbilla en sus manos y la
inclinó hacia arriba, atrapando su mirada con la de él—. No te estoy pidiendo que
te cases conmigo, Claire. ¿No podemos sólo arreglar las cosas a medida que
avancemos? ¿Ver qué pasa? ¿Ser una pareja?
La idea se estiró frente a Claire como un arroyo, brillando ante la posibilidad. Él
tenía razón, ya lo sabía todo. No había razón para no intentarlo. Y sólo con eso,
todos los sentimientos que había mantenido amarrados tan fuerte, estallaron fuera
de su agujero y llenaron su pecho.
—Yo también te amo, —dijo ella. Pero lo que realmente quería decir era sí.
La mañana siguiente, Claire se arrastró a la cama de su madre. —¿Mamá?
—¿Mmm? — Su madre entreabrió un ojo—. ¿Está hecho?
—Sí —Claire enterró la cara en la almohada, sobrecogida por el recuerdo. Ella
sintió a su madre sentarse cerca de ella.
—Dime qué pasó.
Claire le contó la historia completa, incluyendo la parte sobre haber visto a Beatrice
entre los árboles. La única cosa que no mencionó fue a la última conversación que
ella y Matthew tuvieron. Su madre entrecerró los ojos y miró a Claire.
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—Estás dejando algo fuera, ¿No?

—De acuerdo —Claire caminó fuera de la habitación. Se reclinó contra la puerta
cerrada por un momento, sintiendo algo que no había sentido en meses, esperando
que las cosas se solucionaran después de todo.
Impulsada por su optimismo, Claire convenció a Lisbeth que la llevara a la casa de
Emily. Ella quería ver a Emily, pero preferiblemente en algún sitio donde no
hubiera evidencia de ningún licántropo escondida en los armarios.
Claire caminó por el sendero, golpeó la puerta del frente de Emily, la abrió y metió 195
la cabeza.
—Holaaa —dijo ella —¿Hay alguien en casa?
—¿Claire? Espera un segundo. ¡Mierda! —La voz de Emily sonó desde las
escaleras, seguida por el sonido de unos cuantos ruidos—. Oh por Dios, ¡Estás
aquí! —Ella bajó volando las escaleras, con las botas de sus jeans mojadas, y apretó
a Claire en un fuerte abrazo.
—¿Está todo bien? —preguntó Claire, mientras los jeans de Emily le goteaban en
los dedos de los pies.
—¿Qué? Oh, sí. Me cayó un poco de acuarelas. ¡Me has sorprendido bastante!
Dios, he estado muriendo por verte.
El entusiasmo de Emily hizo sonreír a Claire.
—¿Entonces, tienes tiempo para hacer algo?
—Um, ¡por supuesto! ¿Te importa esperar mientras limpio la pintura? No tardara
mucho.
—Emm, hasta estoy dispuesta a ayudar. ¿Dónde está la limpiadora de alfombra?
Emily se giró y se dirigió a la cocina—. ¿Ya he mencionado que eres la mejor
amiga del mundo?
Claire la siguió, todavía sonriendo. Las cosas con Emily no serían nunca lo que
eran antes, pero tal vez podía hacer algo nuevo. Una amistad que era buena a su
manera, incluso aunque no fuera normal.
Esa tarde, las noticias locales interrumpieron el show de charla regular. Claire tuvo
que subirle el volumen. Arriba, Lisbeth tenía la música lo suficientemente fuerte
para que Claire pudiera escucharla en su habitación. La cámara mostró a un muy
pálido Dr. Engle, con su corbata torcida y su cabello hecho un desastre. Claire se
dio cuenta del edificio detrás de él no era el mismo laboratorio donde había puesto
prisionera a su madre.
—Damas y caballeros, gracias por venir hoy. Lamento decirles que cuando mis
colegas y yo llegamos esta mañana, encontramos al licántropo muerto. Estamos
trabajando para determinar la causa de muerte, aunque creemos que alguna clase
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de parásito, tal vez un nematodo, podría estar implicado. Por supuesto, estamos
profundamente tristes de que no fuimos capaces de curar esta, umm, criatura. Su
muerte representa un golpe para nuestra investigación y también para el pequeño
grupo de…
Claire apagó la televisión y camino hacia el closet. Amargura llegó hasta su
garganta. Ella podía probarla en su lengua como medicamentos. Ni siquiera le
habían dicho que habían matado a Zahlia. Ella había supuesto que no lo harían.
Después de todo, si el público pensaba que no podía mantener su “investigación” a
salvo, ¿Por qué habrían de confiarle el mantener los licántropos alejados? 196
Más de una semana después, Claire sacó el último par de pantalones de su repisa y
tiró de ellos. Encima de todo, tendría que lavar. Genial. El televisor estaba
encendido, y un nervioso Dr. Engle estaba siendo entrevistado una y otra vez
acerca de la mística muerte de “su” licántropo.
La puerta de su habitación se abrió y la mamá de Claire entro.
—¿Ya no tocas? —preguntó Claire, exasperada.
—Lo siento. No pensé que estarías levantada —Miró el televisor—. ¿Estás viendo
eso?
Claire asintió. —Sí. —Bajo su aliento, murmuró. —Que bastardo.
Su madre sonrió, su oído era lo suficientemente bueno para escuchar lo que Claire
había dicho—. La elección más cobarde es comúnmente la más fácil. Por lo menos
no habrá investigación por la policía, deberías estar agradecida por eso.
—Supongo —Claire tomó un montón de ropa y la tiró sobre su cama.
—Ésta noche nos reunimos —dijo su madre tranquilamente, mirando por encima
de su hombro para asegurarse que Lisbeth todavía estaba arriba—. Estoy ansiosa
por verlos a todos. Nos iremos a la medianoche y no un momento después. Por
favor está lista.
Claire dejó de clasificar la ropa en pilas y miró a su mamá. —Sí, lo estaré. Estaré
lista, quiero decir.
Una sonrisa apareció en el rostro de su mamá tan rápidamente que Claire no estaba
segura si la había visto del todo.
—Creo que disfrutaras esta reunión más de lo que crees. Pero debes confiar en mí.
Claire miró hacia la camiseta sucia en sus manos. —Yo confió en ti. Pero no confío
en Beatrice. No después de todo lo que pasó —Ella miró a su mamá—. Yo sé que
probablemente no debería decir cosas como esa, ya que ella es el Alfa y todo eso,
pero es verdad.
Su mamá asintió lentamente. —Lo entiendo. Pero no es culpa de Beatrice, Claire.
Me culpo a mí misma, si te hubiera enseñado antes, tal vez entenderías mejor
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nuestras formas, tal vez no hubieras estado sorprendida por la decisión de Beatrice.
—Ella suspiró—. Pero más que todo, culpo a Zahlia. Sus acciones estúpidas y
egoístas hirieron el vínculo de nuestro grupo. Tomará algún tiempo reconstruirlo —
Su madre estaba tranquila por el momento—. Aún así, creo que algo pasará esta
noche que te gustará.
—Si tú lo dices.
Su madre sonrió, y se deslizó hacia el corredor, cerrando la puerta detrás de ella.
Claire odiaba cuando su mamá se ponía toda misteriosa así como ahora. Cuando se 197
había enterado lo que su mamá era en verdad, que había estado viviendo una vida
oculta todos estos años, Claire pensó que tal vez eso lo explicaría. Ella pensó que
los pequeños comentarios en clave y los secretos se detendrían. Supongo que no.
Una de las pilas de ropa en frente de ella empezó a sonar, y Claire excavó a través
de la ropa hasta que encontró su celular.
—¿Hola?
—Hey, Claire. —La voz de Matthew fue inusualmente baja.
—¿Estás bien?
—Sí, mi papá está simplemente en un mega alboroto, y estoy intentando quedarme
fuera de su camino.
—Lo vi en la TV. Pensé que estaba en su laboratorio. ¿Dónde estás?
—Estoy con él. Finalmente movieron el cuerpo hoy, y él necesitaba ayuda. Él y su
técnico de laboratorio no eran lo suficientemente fuertes para moverla, y me
imaginé que si ayudaba, entonces no se vería sospechoso que encontraran mis
huellas digitales allí más tarde, o algo así.
—Inteligente.
—Gracias. De cualquier manera, me arrastró hasta su otro laboratorio para su
entrevista de última hora, y ya casi terminan con las preguntas, así que pensé en
llamar mientras tenía la oportunidad. Escucha, si puedo salir de aquí más tarde,
¿quieres hacer algo esta noche?
Claire suspiró. —Me gustaría poder, pero tengo que hacer algunas, uh, cosas de
chicas más tarde. Creo que mejor me quedo por aquí esta noche.
—¿Cosas de chicas? ¿Es así como lo llamamos ahora?
La burla en su voz calentó a Claire hasta los pies.
—¿Tienes una idea mejor? —lanzó de regreso.
—No. Oh, están terminando. Está bien, no esta noche, pero ¿mañana entonces?
—Sí, mañana está bien, —dijo ella.
FORO PURPLE ROSE

—Bien. Me tengo que ir. Te llamaré más tarde.

Cuando cerró el teléfono, Claire se sentó entre los montículos de ropa para lavar,
girando una y otra vez el teléfono en su mano, y sonrió para sí misma.
Claire llevó un canasto de ropa sucia a la planta baja y encontró a Lisbeth jalando
una carga de ropa de la secadora.
—Hey. —Claire volcó el canasto de ropa en la máquina de lavar vacía y agarró el
detergente. Lisbeth sonrió pero no dijo nada. Algo respecto a sus ojos también se
veía raro—. ¿Estás bien? 198
—Sí, estoy bien—. Lisbeth sacó un par de jeans de la pila y comenzó a doblarlos.
Claire vaciló. Estaba pasando algo. —¿Estás segura?
Lisbeth suspiró. —Sí. Creo que es tiempo que te cuente. ¿Recuerdas a Mark, el
chico que conocí hace algún tiempo, el de yoga?
Claire asintió.
—Bien, nos hemos estado viendo. Mucho. Y se está convirtiendo en algo bastante
serio. Quiere que me mude con él.
Todo cayó en su lugar y Claire sintió que se le caía la mandíbula. Las llamadas en
la noche, las extrañas excursiones después del anochecer, Lisbeth tenía un novio
secreto. El deleite fluyó a través de Claire. Si Lisbeth se mudaba con él, todos
estarían felices. Ella tendría más libertad. Lisbeth finalmente tendría una vida
propia. Y quizás su mamá se vería forzada a comprarle un coche nuevo después de
todo. Era perfecto.
—Entonces, ¿por qué te ves tan preocupada? ¿No quieres vivir con él?
—¡Por supuesto que quiero! Simplemente estoy… he estado inquieta por ti. Sé que
ya no eres una niña, pero siento como si te estuviera abandonando.
Claire revoleó los ojos. —Vamos. No estarías abandonándome. Quiero decir, ya
estoy lavando mi ropa, ¿correcto? Y además, todavía podríamos pasar el rato.
Lisbeth se vio aliviada. —Por supuesto. Quiero decir, todavía trabajaría aquí, si tu
mamá me lo permite. Simplemente no viviría aquí.
Claire agarró su canasto vacío. —Deberías hacer lo que quieras, yo voy a estar bien.
En serio. —Ella se quedó mirando severamente a Lisbeth, intentando que
entendiera que hablaba en serio—. Deberías ir a hablar con mamá.
Lisbeth mostró una amplia sonrisa. —Tal vez lo haga.
A la media noche exacta, Claire se encontró con su mamá en el vestíbulo.
—Ah, gracias por llegar a tiempo, —susurró su mamá. Su rostro lucía agotado.
Al principio Claire pensó que era porque estaba tan delgada por su tiempo en la
jaula, pero había algo más. Estudió a su madre por el rabillo del ojo. Ella estaba
FORO PURPLE ROSE

nerviosa. La comprensión alarmó a Claire. ¿Por qué su madre estaría nerviosa

ahora? ¿Teme que yo vaya a estropearlo, o algo así?
—Entonces, ¿qué está ocurriendo esta noche? —murmuró Claire.
—No te lo voy a contar. Pero no es nada por lo que debas preocuparte, si es eso lo
que te estás preguntando.
—Entonces, ¿por qué estás tan tensa?
Su madre se detuvo y miró fijamente a Claire. —Madre mía, chérie, has alcanzado
tu potencial. No tenía ni idea de que te habías vuelto tan observadora. 199
El cumplido resplandeció en el pecho de Claire, pero cruzó los brazos, a la espera.

—Aún así, no te lo digo. —Su madre abrió la puerta trasera y salió al patio—. ¿De
seguro tienes veinte minutos de paciencia en esa joven alma tuya?
Claire intentó relajarse, pero la ida de ver a Beatrice le ponía la piel de gallina. No
importaba lo que dijera su madre acerca de las leyes y tradiciones de los hombres
lobos, Claire aun pensaba que Beatrice se había equivocado. Ella ni siquiera había
escuchado antes de tomar su decisión. No le había importado que Claire pudiera
tener un camino mejor o más información. Simplemente había tomado el camino
fácil y seguro, de asesinato–de–madre, fuera de todo el asunto.
Y ahora Claire estaba a punto de someterse a ella. De nuevo. Apretó los dientes y
trató de enfocarse en permanecer cerca de su madre mientras se abrían camino
hacia el claro.
Corrieron juntas a través del bosque, y el aroma de la hierba en crecimiento, la
esencia de la tierra y la noche llenaron la nariz de Claire. La luna colgaba llena en
lo alto, la barriga se hinchaba con luz. Una diminuta descarga de excitación
estremeció la piel de Claire, apartando un poco los sentimientos malos. Esta vez
sería capaz de cambiar completamente. Sería capaz de unirse a la caza. Y sería un
miembro hecho y derecho de la manada, capaz de decir lo que quisiera. La
anticipación de ello le hacía hormiguear los dedos de los pies.
Claire y su madre habían trotado todo el camino hasta el claro antes de que Claire
se diera cuenta que algo estaba fuera de lugar. No había ninguna hoguera. Miró a
su madre, con la pregunta lista en sus labios.
—Esta noche, nosotras llegamos primero. —Su madre comenzó a traer vegetación
muerta del bosque y la apiló en el centro del claro con asombrosa velocidad, aún
para un hombre lobo. Dejó caer un tercer leño sobre la pila que había hecho cerca
de las ramas ligeras de encendido antes de mirar a Claire y ponerse una mano en la
cadera—. Podrías ayudar, ¿sabes?, —dijo.
—Oh, sí, perdón. —Clare reunió una brazada de ramitas y las puso sobre las ramas
listas para encender, a continuación de los grandes leños que su madre había
apilado. Marie se retiró una hoja del cabello y examinó el arreglo.
FORO PURPLE ROSE

—10Oui. C’ est parfait. Retrocede Claire, lo encenderé.

Claire retrocedió hasta el borde del claro y observó a su madre arrodillarse delante
de ella, de espaldas a Claire. Aun estaba tan delgada que los omóplatos le
sobresalían del dorso de la camiseta, como alas.
Su madre murmuraba un cántico en voz tan baja que ni siquiera Claire podía
escucharlo. Mientras el primer rizo de humo se levantaba de la madera, la madre de
Claire alzó las manos por encima de los leños y las giró en torno a ellos tres veces.
En la vuelta final, la primera llama saltó del centro de la hoguera, lamiendo las
200
ramitas cercanas.
Claire se frotó la nuca. Diablos. No puedo esperar a poder hacer eso.
Su madre se puso de pie y se sacudió la tierra de las rodillas. Miró la expresión en el
rostro de Claire. —Quizás, después que terminen las cosas esta noche, ¿te podría
enseñar a crear fuego?
Claire asintió, incapaz de detener la sonrisa que avanzaba por su cara. —Me
gustaría. Mucho.
—Bien. Bueno, entonces, estamos listas para los demás.
10
Oui. C’ est parfait. = Sí. Es perfecto.
FORO PURPLE ROSE

Capítulo 22
Traducido por: Lost Angel y cowdiem

J udith llegó. Seguida inmediatamente por Katherine. Judith mantuvo la

mirada de Claire mientras la saludaba y Katherine puso una cálida
mano en su hombro. Claire no podía decir si era porque había salvado a
su madre, o simplemente porque podía ser capaz ya de transformarse
completamente. No es que realmente importara, a ella no le importaba lo que
201
pensaran.
En el momento en que se escuchó a Beatrice y Victoria viniendo por el bosque, el
fuego encendió todo el claro con su cálido resplandor. Claire notó que los
pantalones de Victoria se veían apretados, su vientre ya estaba empezando a crecer.
Claire no miró el rostro de Beatriz. Ella no podía soportarlo, no del todo aún.
Cuando el resto de miembros de la manada se habían saludado unas a otras y
ubicado en círculo alrededor del fuego, Claire miró hacia el bosque. Podía sentir a
Zahlia perdida. Es que la manada no sólo había perdido un miembro, sino que
había sido tan totalmente traicionada, y esto hacía que Claire se sintiera enferma.
Los rostros de las otros eran graves a la luz del fuego, y Claire sabía que no era la
única pensando de esta manera.
Después de un momento, Beatrice habló. —Cuando una de las nuestras sufre una
muerte honorable, hay muchas maneras de llorarla. Zahlia no murió de ninguna
manera propia de una mujer lobo. En estas circunstancias, nos reuniremos, no
diciendo su nombre ni recordándola de ninguna manera por el resto de nuestro
tiempo, de modo que cuando nos vayamos, entonces será borrada también su
huella en este mundo.
La formalidad de sus palabras y lo categórico de su tono enfriaron a Claire.
Levantó la vista, sorprendida por lo diferente que sonaba Beatrice ahora, tan segura
y fuerte.
Ella estaba tan asustada del mundo humano. Era totalmente segura cuando estábamos
en el bosque, cuando se trata de cosas de hombre lobo. Pero cualquier cosa que implicara
humanos la vuelve loca.
Tenía sentido. Cuando Claire pensó en retrospectiva, Beatrice siempre había
parecido en control aquí, delante del fuego. Pero cada vez que algo de fuera del
bosque se acercaba, ella no era mejor que un conejo acorralado. Claire se lamió los
labios. Era tan obvio, ahora. Pero ¿cómo podría Beatrice dirigir una manada como
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esta? El mundo humano estaba a su alrededor, frotándose contra ellos. La

frustración se arrastró a través de ella.
Beatrice se acercó al fuego y le tendió la mano. Cuando estaban todos de pie con
sus dedos entrelazados, Beatrice bajó la cabeza por un momento.
—Este ha sido un momento difícil para nosotras, nuestros vínculos han sido
maltratados, nuestros lazos deshilachados. Tenemos que trabajar para
reconstruirlos. En el nombre de la diosa a partir de ahora esta manada será nueva.
Una sangre, una mente, y un solo ser. Renunciando a todas las otras lealtades, nos
202
comprometemos con nosotras mismas.
—Por la Diosa, —dijeron las demás, al unísono.
Claire lo susurró a media voz. Ella realmente no estaba segura de querer decir eso
en absoluto.
Claire miró hacia arriba y vio el rostro de su madre. Una arruga apareció entre sus
cejas y miró pensativa, seria. No tan segura de la celebración como Victoria y
Beatriz, ambas sonriendo. No tan aliviada como Katherine, o Judith. Algo sobre la
expresión de su madre hizo que Claire se sintiera infinitamente mejor. Su madre
sabía que las cosas no se borrarían con sólo decir algún estúpido voto.
—Ahora, —comenzó Beatriz—. Ha sido el mayor honor de mi vida liderar esta
manada. Pero las cosas han cambiado. Tal vez he sido un lobo por muchos años
pero ahora las mentes de los seres humanos ya no tienen sentido para mí. Cometí
un error al no tomar en cuenta los más… —hizo una pausa, mirando fijamente a
Claire—. Los aspectos únicos del secuestro de Marie. El mundo no es lo que era, y
no estoy demasiado orgullosa, ni demasiado soy tonta para admitirlo. He llamado a
más lunas de las que puedo contar, y ha llegado el momento para mí de detenerme.
María, por favor, un paso adelante.
La madre de Claire levantó su cabeza. Poco a poco, caminó hacia Beatrice y se
arrodilló delante de la mujer mayor, sus ojos brillaban. El latido del corazón de
Claire vibraba en sus oídos, las emociones crepitando a través de ella como un
rayo.
Beatrice sabía que había estado equivocada.
Y estaba tratando de arreglarlo.
Le parecía bastante obvio a Claire que su madre, el único miembro de la manada
en el que realmente confiaba, estaba a punto de convertirse en su Alpha. Y eso
haría que Claire sintiera un infierno entero mejor acerca de la promesa que acababa
de hacer.
Beatrice se inclinó y apretó una de las palmas lisas de Marie entre sus manos
ásperas y tiró de ella a sus pies.
FORO PURPLE ROSE

Durante un largo momento, las dos mujeres se quedaron mirando los ojos de la
otra. Fue Beatrice quien apartó la vista en primer lugar, volviendo la mirada hacia
el suelo. Poco a poco, ella se agachó hasta que ella estuvo de rodillas a los pies de la
madre de Claire. Giró la cabeza hacia un lado, mostrando su cuello arrugado,
sometiéndose a Marie. La madre de Claire puso una mano en la parte superior de
la cabeza de Beatrice y se quedaron de esa manera. Cuando la madre de Claire
quitó la mano, Beatrice agachó la cabeza y tomó una cadena de plata de alrededor
de su cuello. Colgando de ella había una luna creciente. La madre de Claire tomó el
collar de Beatrice y lo unió alrededor de su propio cuello. Luego se agachó para 203
levantar a la vieja mujer sobre sus pies.
Victoria, Katherine, y Judith estaban de rodillas, y Claire siguió a su líder por
instinto. A través de sus pestañas bajas, Claire ojeó a su madre. La sorpresa había
dejado su cara. Poder y orgullo a partes iguales fluían fuera de ella. La hacía
parecer tan salvaje y hermosa que Claire contuvo el aliento.
—Pueden levantarse. —La voz de su madre sonó fuerte y clara a través del claro.
Todo el mundo se puso de pie, las otras lucían sumisas y un poco nerviosas. Una
enorme sonrisa se extendió por el rostro de Claire.
—Ser Liderar una manada es un honor y una carga. Espero con interés el desafío, y
confío en gran medida en Beatrice para orientarme en estos primeros meses. Ella es
La Sage Femme ahora, nuestra voz de la experiencia, la guardiana de nuestra
historia. Espero reverencia por su posición de parte de todos los miembros de
nuestra manada.
Las otras bajaron la cabeza, reconociendo las primeras instrucciones de Marie
como Alfa. Cuando levantó la vista. La sonrisa de la madre de Claire se había
suavizado.
—Ahora, antes de transformarnos para preparar una cacería de celebración, hay
una cosa que más me gustaría hacer. —Ella se volvió y gesticuló a los árboles detrás
de ella.
Algo crujió en la maleza y Matthew salió de entre dos delgados árboles. Claire
abrió la boca y luego sintió un febril calor en sus mejillas cuando todo el mundo se
volvió para mirarla. ¿Cómo podría no haber olido que él estaba allí? Ella tomó una
olfateada tentativa y se dio cuenta de que no le había dado a su madre el crédito
suficiente. Claire no había captado su esencia, porque Matthew había estado
esperando contra el viento. Beatriz y Victoria estaban sonriéndole como dos niñas
en una fiesta sorpresa. Judith y Katherine parecían concentradas….
La madre de Claire puso una mano en el amplio hombro de Mathew, acercándolo
hasta que era parte del círculo. —Quisiera presentarles a Mathew Engle, nuestro
nuevo gardien (tutor). Él ha aceptado este rol y las dificultades que lo acompañan.
Está bajo nuestra protección ahora y no necesitan esconderse a sí mismos de él,
aunque será deber de todos tomar todas las precauciones que puedan.
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—Um, gracias, Marie. —Mathew cambió el peso de un pie a otro. Parecía

incómodo.
—¿Estás segura que es apropiado tener al hijo del Dr. Engle como el gardien del
secreto? —La duda era pesada en la voz de Judith.
—No podemos elegir todos nuestros roles en esta vida. —Las palabras de Marie
eran agudas como una espina—. Deberías ciertamente saber que lo que importa es
la lealtad que él ha expresado a nuestra manada. Deberás mostrar al menos tanta
preocupación por nuestras leyes como él ya lo ha hecho. ¿Está claro?
204
Judith asintió, bajando su mirada.
—Bien. Ahora, sugiero que Claire llevé a Mathew al camino. Cuando él este seguro
en su camino a casa, comenzaremos.
Mathew miró hacia Claire y sonrió. Repentinamente, él miró directamente hacia
ella. Claire lo miraba fijamente de pie en el tembloroso brillo del fuego, en medio
de la manada de licántropos, y sintió las piezas de su mundo juntarse. No era lo
que la mayoría de la gente consideraría normal, pero estaba bien. Ella podía ser
feliz, y eso era más “normal” de lo que la gente conseguía de todos modos.
Ella hizo un gesto con la cabeza en dirección al camino y Mathew la siguió,
mientras todos se reunían en torno a su madre, felicitándola en su nuevo estatus.
Cuando estaban seguramente escondidos por una gruesa pared de árboles, Claire
dejo de caminar. Mathew se detuvo también, mirándola con curiosidad. Claire
sonrió, se empino en sus pies y lo beso. —¡No puedo creer que no me dijiste que
ibas a venir! —Susurró.
—Tu madre me dijo que era un secreto, quería que fuera una sorpresa.
Claire hizo rodar sus ojos. —No siempre tienes que escuchar a mi madre, sabes.
—La verdad, —dijo Mathew solemnemente—, Creo que tengo que hacerlo. —Él
apretó la mano de ella.
—Sí, probablemente tienes razón sobre eso. —Claire suspiró.
—No estés triste, yo no lo estoy. —Él miró de vuelta hacia el escondido claro—.
Mejor sería que vuelvas, ¿uh?
—Sí. ¿Puedes encontrar tu camino a casa desde aquí?
—Seguro. Te llamaré mañana, ¿sí? Podemos encontrar un lugar para comer o algo.
Oh, y te llevaré el lunes, también.
—¿Llevarme dónde? —Claire preguntó, confundida.
—A la escuela. —Matthew parecía sorprendido—. Tú si sabes que la escuela
comienza el lunes, ¿cierto?
—Oh dios mío, no. —Ella lo miró—. ¿Qué? Como que he estado preocupada de
otras cosas ¿sabes?
FORO PURPLE ROSE

Matthew negó con la cabeza. —Sí, pero aun así.

—¿Claire? —la voz impaciente de su madre llamó suavemente.
—¡Ya voy! —Claire se giró de vuelta a Matthew, el cual dejó caer un rápido beso
en sus labios.
—Te habló mañana, —Él susurró, y se giró para avanzar por el camino, de vuelta a
la civilización. Claire lo miró irse, sonriendo mientras desaparecía entre los árboles.
En el claro, su madre estaba de pie esperando.
205
—Lo siento, —Claire dijo automáticamente—. ¿Dónde están todos?
—Nos están dando un minuto.
—Oh. —Claire bajó su cabeza—. ¿Estoy en problemas?”
—No, no. Pero quería asegurarme de que estuvieras bien antes de comenzar la
cacería. Te veías… un poco consternada, por todo.
—Bueno, tú también te veías muy sorprendida. —Claire trató de mantener la
acusación fuera de su voz, pero falló miserablemente.
Marie esperó silenciosamente.
—Fue sólo extraño, ¿sabes? —Claire pateó la tierra—. No estaba esperando que
Beatrice se… ¿retirara? Y luego Matthew aquí… fue sólo demasiado. Eso es todo.
—Entiendo. Y si hubiera sabido lo que Beatrice había planeado, no hubiera
mantenido la presencia de Matthew en secreto. Quería que fuera una sorpresa
agradable, ¿entiendes?
Claire asintió. —Sólo estoy… supongo que solo estoy cansada de los secretos, es
todo.
—Lo sé. Pero para nosotros, el tiempo de esconder las cosas ha finalizado. Estás
completamente transformada. Puedo comenzar a enseñarte muy pronto. Desde
ahora en adelante, las cosas tendrán más sentido para ti. Estoy segura de eso, pero
debes confiar en mí.
Claire miró a su madre, la certeza brillaba en sus ojos, y asintió. Escuchar a Zahlia
había sido el error más grande que había cometido alguna vez. Quizás era tiempo
de escuchar a su madre después de todo.
—Bien. Tendremos más tiempo para hablar después, pero ahora estoy ansiosa de
comenzar la cacería. —Ella les indicó a Beatrice, Katherine, Judith, y Victoria que
volvieran al círculo.
Cuando todos habían tomado sus lugares alrededor del fuego, Marie elevó sus
brazos y comenzó a cantar. Aunque las palabras siempre habían sonado fuertes
cuando Beatrice las decía, el poder en la voz más joven de Marie les daba más
FORO PURPLE ROSE

energía, y Claire tembló cuando el sonido la bañó. Cuando su madre les dio la
señal, todos explotaron en su verdadera forma.
Era la primera vez que la transformación de Claire había sido completa. Cada parte
de ella se sentía correcta, su sedoso pelaje que atrapaba el viento, las almohadillas
de sus pies contra la suave tierra, era perfecto. La sensación de liberación era tan
grande que Claire no pudo controlar el grito que se elevaba en ella. Lanzó su
cabeza hacia atrás y aulló. Alrededor de ella, pudo escuchar a los otros unirse y
llamar a la luna sobre ellos, a la tierra debajo, al bosque que los rodeaba
apretadamente. 206
Y ahora, la voz de su madre irrumpió en sus pensamientos: —¡Cazamos!
Corrieron dentro del bosque. El regocijo fluyó a través de Claire mientras corría
junto a los otros, su nariz estaba llena del aroma del fuego, los árboles y la
interminable noche estaba iluminada por la luna.
Todo estaba apenas comenzando, ella podía sentirlo. Ella podía olerlo. Y ella
quería seguir el camino completo hasta el final, donde sea que éste fuera.
FIN DEL LIBRO
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SOBRE LA AUTORA:
AUTORA
207
Crecí, me trasladé, y finalmente

inalmente llegué a casa en Indianápolis, Indiana.
Indiana Mientras
estaba en la "lejana" parte de esa aventura, viví en Chicago, Illinois, donde fui a la
Universidad DePaul y conocí a mi marido. Me gradué en Ciencias Políticas. Para
tener en cuenta, Cienciass Políticas es un grado totalmente inútil. Pero también es
totalmente fascinante y me encantó estudiarlo. Caigo en esa trampa muy a
menudo.. Me gradué con unos nueve millones de horas de crédito extra porque
siempre estaba tomando clases que parecían
parecía "interesante"" en lugar de las clases que
tenía que eran necesarias..
Después de la universidad,
rsidad, he vivido en Chicago durante varios años más con mi
marido. He trabajado en distintos puestos - algunos me gustaban,
gustaba algunos los
odiaba,, pero ninguno de ellos me sirvió como carrera. La escritura es diferente.
Para este trabajo, podría ser una
un ¡adicto
adicto al trabajo! De todos modos, después de
varios años más en Chicago, mi esposo y yo nos mudamos de regreso a
Indianápolis. (Nos cansamos de estar constantemente en busca de aparcamiento
aparc en
la calle en Lakeview.)
Ahora, vivo en una casa antigua,
antigua en un antiguo barrio con mi esposo e hijos. Tengo
muchos libros y una debilidad por los dulces.. Me encanta el yoga y la cocina, pero
yo no soy mucho una persona de películas. Me gusta ver el fútbol. Pero sobre todo,
me gusta hacer las cosas y escribirlas
es y que la gente los lea.. Entonces, eso es lo que
hago, y soy muy, muy afortunada de poder hacerlo.
~ Christine Johnson
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Hanover Falls no ha tenido problemas de hombres lobo en más de cien años.

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Werewolf: Hombre lobo en inglés

Loup-garou: Hombre lobo en francés

Seule: Una loba sin manada, una sola

Alpha: El más sabio y valiente entre los miembros de la manada

Dumpster: Contenedor de basura.

The Juice Junction: Fuente de soda.

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Traducido por: Genesis_480

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Traducido por: Aya001, Kuami y DHAM-LOVE

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Matthew la miró, con sus cálidos ojos marrones puestos en ella.

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—Recoge tus cosas —ella jadeó—. Nos vamos.

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—Eso, querida, es su trampa. Muchos caen en ella. Espero que no cometas el

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Traducido por: Emii_Gregori, ηịịị ღ y andre27xl

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—Bien entonces, se toda misterios.

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—Huh. En realidad, eso tiene sentido. Mi madre y yo estamos de la misma forma

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Claire flotó hacia el coche.

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Traducido por: Izzy, Aneka, Genesis__480 y Silvery

C laire abrió la boca, y después la cerró con un chasquido, cuando se

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—Cierra los ojos, —dijo Victoria —será más fácil.

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—Pero —empezó a protestar Claire, pero Zahlia intervino.

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Es la caza, —Beatrice comenzó a levantarse.

—¡Oh! —Claire gritó—, Oh... Ni siquiera está muerto. —Ella se escabulló y

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Traducido por: cuketa_lluminosa – anaid – andre27xl

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