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Friedrich Ratzel (Karlsruhe, 30 de agosto 1844 - Ammerland, 9 de agosto1904),

fue un geógrafoalemán fundador de la Geografía humana o antropogeografía.

Biografía

Estudió geografía en las universidades de Leipzig y Múnich. Realizó viajes por


Europa (1869) y América (1872-1875). Si bien no fundó la geopolítica (el primero
en hablar de este término fue Rudolf Kjellén) fue uno de sus mayores exponentes.
Influido por las ideas de Darwin y por tesis deterministas del siglo XIX, reflexionó
sobre las relaciones existentes entre espacio geográfico y población, e intentó
relacionar la historia universal con las leyes naturales. Del mismo modo Ratzel
jugó un importante papel en la antropología evolucionista, contraponiéndolo a la
idea de que las poblaciones necesitan difundir sus rasgos culturales más allá de
su ambiente original y que, a su vez, los contactos con otros pueblos permiten el
desarrollo.

Ratzel enfrenta el evolucionismo al difusionismo, concluyendo el intercambio como


motor del progreso.

Friedich Ratzel es considerado generalmente como fundador de la geografía


moderna (geografía política), concebida ya como una disciplina sistemática dentro
del ámbito de la geografía humana, con un objetivo específico y diferenciado de su
análisis.

Ratzel se encuentra inmerso en la corriente de pensamiento positivista imperante


en su tiempo dentro del panorama general de las ciencias, del que no puede
sustraerse; de otra, su propia vida se sitúa en un contexto histórico concreto, el de
la Alemania bismarckiana que acaba de realizar su unificación y, en un ámbito
más amplio, el de la Europa de finales del siglo XIX, donde la exaltación de los
sentimientos nacionalistas y los intereses imperialistas cifrados en la expansión
colonial ultramarina parecen guiar el acontecer político.

Su actitud positivista que conduce a la transferencia de conceptos y teorías de


las ciencias naturales a las ciencias humanas, puede encontrarse en su utilización
de conceptos biológicos en la interpretación de hechos de la geografía política,
como la comparación del estado como un organismo vivo, compuesto por una
serie de órganos o elementos cada uno de los cuales cumple una determinada
función y sometido a un proceso evolutivo constante en el que pueden distinguirse
varias fases, desde el nacimiento hasta la madurez, el declive y, finalmente, la
desaparición.

La influencia directa de la biología evolucionista también está presente en la obra


del geógrafo alemán, plasmándose en su concepción de la vida del estado como
un proceso de lucha constante por la supervivencia, que conduce a una selección
natural. Este planteamiento está precisamente en la base de su conocida noción
de “espacio vital” o Lebensraum.

La tendencia a ocupar espacios cada vez mayores está en la base del progreso
mismo y, por ello, «a medida que el territorio de los estados se hace mayor, no es
sólo el número de kilómetros cuadrados lo que crece, sino también su fuerza
colectiva, su riqueza, su poder y, finalmente, su duración».

La obra de Ratzel viene a ofrecer, en cierto modo, una justificación teórica a la


política imperialista, de expansión, sobre la base de argumentos investidos del
prestigio que por entonces gozaban las ciencias biológicas. Su teoría del espacio
vital fue aprovechada en Alemania por el Tercer Reich para apoyar su política
expansionista siendo su principal ideólogo Karl Haushofer. La derrota alemana en
la Segunda Guerra Mundial desacreditó por un tiempo la geopolítica, la cual ha
vuelto a recuperar su interés.

Su influencia es más que visible en la Alemania de entreguerras, vinculado al auge


de la geopolítica, heredera en buena medida de los postulados ratzelianos.

Las obras más importantes de Ratzel fueron Antropogeografía (1891) y Geografía


Política (1897).

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