Park

La ciudad

La ciudad es un estado de ánimo, un conjunto de costumbres y tradiciones, actitudes

organizadas sentimientos inherentes a esas costumbres. Por lo que no es solo un
mecanismo físico y una construcción artificial.

La ciudad está implicada en los procesos vitales de la gente que la forma, es un producto
de la naturaleza, de la naturaleza humana.

La ciudad posee su propia cultura. Y esta puede ser estudiada desde la geografía y la
ecología.

En los límites de la comunidad urbana hay fuerzas que producen un agrupamiento

ordenado y característico de su población y de sus instituciones. La ecología urbana
intenta explicar lo que producen esas fuerzas de convergencia. Los medios de transporte
y comunicación son los principales factores de la organización ecológica de la ciudad. La
ciudad es también una unidad económica y está fundada en la división del trabajo. Así, la
ciudad constituye el hábitat natural del hombre civilizado, es un área cultural caracterizada
por un tipo culturar particular. Esta será la cultura del ciudadano.

La ciudad está arraigada en los hábitos y en las costumbres de las personas que la
habitan. También, la ciudad tendrá una estructura material y moral. Estas estructuras son
expresión de la naturaleza humana. La ciudad como respuesta a las necesidades de sus
habitantes, se impone a ellos.

La ciudad posee su propia vida, por lo que no es posible cambiar ni su estructura moral ni
la estructura física.

Los gustos personales, intereses profesionales y económicos tienden a segregar a la

población lo que posibilita que se pueda clasificar a las poblaciones de las grandes
ciudades.

Geografía física: hace hincapié en los inconvenientes naturales. Además, define que el
transporte y define el plano urbano. Además, define que mientras más población, la
simpatía, la rivalidad, las necesidades económicas controlarán la distribución de la
población. Cada barrio y sector adquiere parte de las cualidades y características de sus
habitantes. De esta manera, desde la expresión geográfica, se expresa la vecindad.

La vecindad, es lo más elemental y sencillo de la organización de la vida urbana, ya que

en este se generan sentimientos locales y se tiene un control sobre lo político. Aunque
existen barrios sufren aislamiento, ya que quedan fuera de los intereses más amplios de
la comunidad.

El vecindario tiene a perder su significado por la comunicación y el transporte puesto que

permite que las personas estén en más lugares en menos tiempo. En los Getthos, como
se generan por agrupación racial, se incrementa la intimidad y solidaridad.
La ciudad moderna es una plaza de comercio y debe su existencia al mercado que
alrededor se desarrolla. El mercado posibilita la competencia industrial y la división del
trabajo. Por lo que la economía monetaria es la libertad del trabajador.

La ciudad como el medio natural del hombre libre, es válido en la medida en que el
individuo encuentra oportunidad por la división del trabajo, así puede elegir su propia
vocación y desarrollar un talento particular. Por lo tanto, el éxito depende de centrarse en
una única tarea.

La organización social y económica está ahora fundada sobre los intereses profesionales
y el oficio. En la ciudad todo tiende a ser ocupación, lo que refleja que hasta el mendigo
pase a ser una vocación.

Por lo tanto, se tiende a especializarse y también en la racionalidad. Las ocupaciones y la

división del trabajo ya no producen grupos sociales, sino tipos profesionales. Lo anterior
produce organizaciones sindicales y unidades obreras, basadas en la misma profesión e
intereses comunes. Esto nueva forma de entender la unidad por intereses, difiere de la
forma asociativa del vecindario, la que estaba designada por la contigüidad y la relación
personal.

La división del trabajo puede ser estudiada en los tipos profesionales. En cada tipo
profesional hay experiencias personales que determinan cada grupo profesional y la
ciudad en su conjunto.

La división del trabajo y la organización social, hace que el individuo este sujeto a la
comunidad de la que es parte integrante. Se produce la solidaridad social basada en la
comunidad de intereses.

El dinero es el medio fundamental de la racionalización de los valores y de la sustitución

de los sentimientos por los interese.

En la organización de individuos y grupos en competencia se generará el equilibrio

inestable que siempre estará en un continuo reajuste.

La movilidad no solo depende del transporte, sino que también de la comunicación. La

despersonalización de las relaciones sociales tendrá relación con la movilidad de una
población en cuanto esta última es producida por el desarrollo intelectual, ya que mientras
más experiencia intelectual se tenga, mayor será la capacidad de abstracción que se
posea.

La concentración de población en las ciudades, los amplios mercados, la división del

trabajo, las tareas específicas han cambiado las condiciones materiales de la vida.

Los factores decisivos de los movimientos de masas y de las fluctuaciones de mercados

son psicológicos. Lo que produce que los que son participantes de los grupos, estén en
una inestabilidad, es decir, es una constante crisis. Y esta crisis responde al constante
movimiento de las comunidades. Asimismo, las grandes ciudades están en un equilibrio
inestable, es decir, en una constante crisis.

El control social surge de manera espontánea, como respuesta directa a las influencias
personales y a la opinión pública. Es más el resultado de una adaptación personal que la
expresión de un principio racional y abstracto.

El resultado de la crisis es pasar de un control basado en costumbre a un control que se

apoya en la ley positiva.