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SEMINARIO DE TITULACIÓN

LA VISIÓN AYUUK DE DOS TAKMÄ’YËTY (ABUELAS) A TRAVÉS DE SU


MEMORIA ORAL

Presentan

Elena García Ortega1

Donají Quintas Arista2

Lic. Comunicación para el Desarrollo Social

Asesora:

Mtra. Ana Lilia Salazar Zarco3

15/05/2017

San Juan Jaltepec de Candayoc Cotzocón Mixe, Oaxaca.

1
elena.g arcia@isia.ed u.m x
2
donaji.quintas@isia.edu.mx
3
zarcoal@gmail.com
Contenido

Contenido.....................................................................................................................................................1
Introducción ................................................................................................................................................. 4
Capítulo I. Ja’a jamyajtsën mo ja’a jikyajtën: de la memoria a la vida ..................................... 12
Sobre la Memoria ...................................................................................................................... 12
Sobre la Oralidad ...................................................................................................................... 13
Sobre la Memoria oral .............................................................................................................. 14
Capítulo II. Construcción de la feminidad Ayuuk .......................................................................... 16
2.1 Los Ayuuk Ja’ay .................................................................................................................. 16
2.2 Feminidad ............................................................................................................................ 19
2.2 Salud reproductiva.............................................................................................................. 20
2.3 Trabajo doméstico .............................................................................................................. 23
2.4 Educación: visión de una generación.............................................................................. 24
Capítulo III. La vida de la mujer en el entramado comunitario ................................................... 27
3.1 La vida en comunidad ........................................................................................................ 27
3.2 La mujer en la organización social .................................................................................. 28
3.3 La mujer en la organización política local ....................................................................... 29
Capítulo IV: La construcción de la visión de la mujer a través de la espiritualidad y
religiosidad Ayuuk ................................................................................................................................. 33
4.1 Espiritualidad y religiosidad Ayuuk .................................................................................. 33
4.2 La salud, la medicina tradicional y las mujeres ............................................................. 35
CONCLUSIONES ..................................................................................................................................... 38
BIBLIOGRAFÍA ......................................................................................................................................... 42
ANEXOS .................................................................................................................................................... 45

1
“Las mujeres somos la mitad de todo”

Julieta Paredes (2010:12)

2
Resumen

El propósito de la investigación es recuperar la memoria oral de dos takmä’yëty para


visibilizar la visión femenina Ayuuk, como parte de nuestras memorias y construcciones.
Para ello, nos centraremos en las categorías como; construcción de la feminidad Ayuuk,
la vida de la mujer en el entramado comunitario y la construcción de la visión de la mujer
a través de la espiritualidad.

Comprendiendo que son sujetos que transmiten sus memorias entre los diferentes
espacios donde viven y conviven, por ello el enfoque de la investigación es cualitativa,
está orientada a sus vivencias personales y sociales, rescatando aquellas experiencias,
relatos y vivencias, construcciones del pasado que algunas han sido cambiados por
las generaciones actuales. No se trata de cambiar radicalmente las formas de vida, se
pretende visibilizar la diferentes visones, conocer las convergencias y diferencias entre
una y otra y de ese modo cuestionar lo que somos.

Palabras claves: visión, mujer, takmä’yëty, memoria, oralidad, memoria oral.

3
Introducción

El lenguaje construye el mundo. En este proceso, la oralidad juega un papel


transcendental, pues es quien permite que el conocimiento, los saberes y las visiones
del mundo no se pierdan a través del tiempo, ayuda a configurar la memoria de cada
individuo o comunidad.

En las comunidades indígenas es imprescindible, puesto que desde tiempos


inmemorables la oralidad ha sido la herramienta más antigua para comunicar, construir
la visión y transmitir la memoria oral a través de mitos, tradiciones, mundo sobrenatural,
medicina tradicional o bien a través de las mismas vivencias cotidianas. Dicho de otra
manera, la memoria y la oralidad van siempre de la mano, no se puede transmitir algo
que no se conoce, que no se ha vivido y la memoria de una persona o de una comunidad
no se puede preservar y conservar si no hay oralidad.

Jóvenes, niños, niñas, mujeres y hombres conforman la comunidad, cada quien


configura el entramado comunitario. Sin embargo, en la sociedad, las relaciones
diferenciadas entre hombres y mujeres son comunes. Leyendo la historia, recordemos
las distintas luchas y movimientos que se gestaron para tratar de combatir estas
relaciones, porque la voz de la mujer siempre había sido considerada inferior a la del
hombre. Se puede ver las luchas por conseguir el voto, a la educación, tener un empleo,
por mencionar algunas.

Esto no escapa dentro del entramado social que existe en las comunidades,
específicamente en la región Ayuuk (popularmente conocidos como los mixes4), en la
mayoría de las comunidades, se vive esta situación. Las mujeres, en algunos contextos
no son consideradas en las asambleas comunitarias que son la base primordial para la
toma de decisiones, o para tomar un cargo político dentro de las mismas. En algunas
comunidades las mujeres se les dan cargos como comités en las diferentes instituciones
educativas o en los centros de salud, y algunas llegan a conformar el cabildo como
regidoras o secretarias aunque estos son muy recientes. Por mencionar el caso de
Tikyo’om (Ayutla), Xäämkëjxm (Tlahuitoltepec) quienes ya han elegido como presidenta
municipal a una mujer.

4
La palabra mixe es de origen náhuatl. La raíz sustantiva mix [miʃ] del náhuatl significa ‘nube’. Se dice también que la palabra
mixes pudo haber surgido de la dificultad de los españoles de pronunciar mixy. Sin embargo, los pueblos ayuuk no nos
autonombramos así, nos nombramos en nuestras propias lenguas Ayuuk Ja’ay (Vázsquez, 2001).
http://www.mexico.sil.org/es/publicaciones/confusion-de-nomenclatura/confusion-mixe-mixteco.

4
Haciendo referencia lo que dice Vásquez García (2008, p. 21) “la participación de las
mujeres en los cargos comunitarios es un fenómeno reciente y es diverso, hay mujeres
que en algunas comunidades han asumido cargos que en un principio solo eran
ocupados por los hombres”.

Naturalmente, en varias comunidades las participaciones o las decisiones de las mujeres


dentro del hogar o de la comunidad no se les han otorgado tanta relevancia. De esta
forma, la voz femenina de algunas comunidades Ayuuk es constantemente invisibilizada,
las mujeres siendo parte de la misma historia, de la misma comunidad, tienen memoria
que necesita ser reconocida y valorizada.

Para ello, es necesario crear herramientas que permitan el resguardo de dichas


memorias a través de la oralidad y, que al mismo tiempo, visibilice las voces y visiones
de las mujeres, tomando como base principal la voz de las täkma’yëty, pues son ellas y
ellos quienes con lo vivido tienen una memoria individual y colectiva más significativa.
Por otro lado, los medios de comunicación juegan un papel importante en el proceso de
resguardo de la memoria, puesto que cuenta con herramientas que pueden hacer más
fácil este proceso.

¿Qué tanto de lo que soy, de la manera como veo y comprendo el mundo es herencia
de la oralidad? Cuestiona en su artículo Cáceres R. Domínguez (2011, p. 4). Por ello, la
oralidad se hace indispensable en la construcción de la memoria personal y colectiva y,
por lo tanto, da identidad.

Las comunidades Ayuuk cuentan con una amplia gama de tradiciones orales, que son
transmitidas de generación en generación, sin embargo el proceso globalizador ha ido
interrumpiendo esta forma de comunicación. Como menciona Domínguez (2011, p.16).
“…así la manera como nos relacionamos con la realidad y nuestro perene interés por
interpretarla es un acto de comunicación”

Por otro lado, esa oralidad en el contexto Ayuuk es un proceso de comunicación que se
da en dos espacios. Por un lado, la oralidad transmitido en la casa, en la familia dada la
mayoría de las veces por las to’oxtyëjkëty (mujeres), específicamente por las takmä’yëty
(abuelas) y, por el otro, es dada en las organizaciones políticas y luchas territoriales,
compartido por los jëëtyëjkëty (hombres).

Las memorias son parte importante de una persona o colectividad. Para las comunidades
indígenas y específicamente para las comunidades Ayuuk, la memoria y oralidad han

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permitido que las lenguas y muchas tradiciones heredades de los ancestros aún se
mantenga. Sin embargo, para que esto ocurra es necesario que hombres y mujeres
compartan un pasado y a partir de ello un presente y un futuro. Pero ¿Qué ocurre cuando
al momento de recuperar estas memorias a través de la oralidad pocas veces se toman
en cuenta la de las mujeres?

La reconstrucción de las memorias es en su mayoría privada de un grupo social como


en el caso de las takma’yëty. Si desde el pasado estas voces no son reconstruidas y
valorizadas, el presente y el futuro estarán inmersos en relaciones diferenciadas.

Existen distintas narrativas históricas que son construidos desde la tradición oral
masculina, resaltando su participación en los diferentes sucesos históricos. Por lo tanto,
la oralidad construido por la voz de los hombres son los más comunes. Ya que muchas
investigaciones encaminadas a la reconstrucción o fortalecimiento de la tradición oral en
diferentes culturas, basados en cuentos, mitos, leyendas y sucesos históricos, se han
trabajado desde la visión masculina. A continuación se mencionan algunos ejemplos.

La investigación de Yrraestro Orrin N. (2012), enfocada a la tradición oral de San Mateo


del Mar de la cultura Ikoots, siendo uno de sus objetivos específicos recopilar y transcribir
en ombeayiüts los principales cuentos, mitos y leyendas de la comunidad de San Mateo
del Mar. Está sustentada a través de la oralidad de seis señores mayores de 60 años.

De la misma manera se revisaron otras dos investigaciones que fueron realizadas en la


comunidad de San Juan Bosco Chuxnaban, de la cultura Ayuuk.

En el 2010 Cuauhtémoc Salvador Canseco, realizó una investigación con el tema


“Narrativas históricas de Chuxnaban Mixe, contadas desde las vivencias de cinco
ancianos originarios de la comunidad”. Los datos obtenidos son: la fundación de la
comunidad, sistema de gobierno local, la religión, tierra y territorio, comunicación y
educación.

Asimismo, Agustín Rodríguez Bulfrano en su investigación realizada en el 2008, tuvo


como objetivo general recopilar y sistematizar las narraciones de la tradición oral: mitos,
leyendas, cuentos e historia oral. Para recabar la información sobre la historia oral de
Chuxnaban, se recurrió a un grupo focal con seis ancianos de la misma comunidad.

De igual manera estas dos investigaciones solo consideraron la oralidad en la voz de los
ancianos.

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Por otra parte, se hizo una revisión de literatura, donde se pretendió buscar bibliografías
relacionadas con la oralidad femenina. Existe una tesis del contexto Ayuuk de Carolina
María Vásquez García titulada relaciones de género en el sistema de cargos:
Tlahuitoltepec, Mixe, realizado en enero 2008. Teniendo como objetivo general “ofrecer
un panorama de las condiciones en las que se encuentran las mujeres mixes, su papel
en la vida comunitaria y los espacios en que algunas mujeres se han incorporado”

Dicha investigación ha sido un referente importante para la construcción de este


documento, ya que en la comunidad Ayuuk, las mujeres indígenas han enfrentado retos
para la apertura de espacios y la participación en la política.

Sánchez, Gonzalo y Wills, Emma María (2011, p.45) señala que “las memorias tienen
género, son distintos los énfasis, las huellas que escogen relatar hombres y mujeres; hay
censuras que operan para ellos y ellas, y asimetrías de poder que también atraviesan su
construcción”.

En el mundo Ayuuk es habitual observar que la participación de las mujeres en el ámbito


social, cultural y religioso juegan un papel activo, debido a que son las que generan la
vida comunitaria, las que organizan el trabajo para alimentar a su familia y en la
comunidad en las fiestas patronales. Con ello, se afirma lo que señala Carolina M.
Vásquez (2008, p.30) “las mujeres siempre están presentes en cualquier momento de la
vida del pueblo mixe, en cada contexto marcan una historia, que siempre ha tenido y
tiene los elementos con los cuales se identifican y comparten las mujeres: es la
cosmovisión del pueblo ayuujk, que se manifiesta en las fiestas patronales de cada
comunidad”

Sin embargo, en la organización política, en la mayoría de las comunidades del mundo


Ayuuk es notoria que la participación de ellas es escasa, por lo general, no tienen el
mismo valor que el de un comunero. Siguiendo con la misma autora dice que “en la
familia, el status que juega cada género y edad, se manifiesta en la conducta y en las
formas de ejercer el papel que se le otorga; por lo general en la región mixe las mujeres
tienen un status inferior al de los hombres” (Vásquez, 2006, p. 33).

Cuando no se toma en cuenta la voz de las mujeres en su totalidad, la reconstrucción de


la memoria histórica no es plural, por lo tanto, la transmisión de la cultura y la tradición
se conforma de relaciones diferenciadas, porque el lenguaje no las incluye y no explica
su realidad. Realidad, que dificulta la visibilización de la visión femenina, y esto puede

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llevar a lo que Gladys Tzul (2016) llama “relaciones diferenciadas”, ya que, el trabajo
que ellas realizan es tomado como trabajo de segunda o “no importante” a diferencia del
trabajo o las acciones que el hombre realiza, las cuales, adquieren mayor privilegio.

Julieta Paredes (2010, p. 43) menciona que este “ tiempo es para los hombres donde
ellos son privilegiados, con el tiempo importante, y otro es el tiempo para las mujeres
donde las mujeres viven un tiempo no importante y por eso el tiempo de las mujeres es
succionado por el de los hombres”

No se trata de que las mujeres Ayuuk salgan al espacio público, si no que ellas tengan
la posibilidad de elegir participar o no, o que puedan elegir los espacios en los que
participar, y, que al mismo tiempo que estos espacios y su trabajo sean considerado igual
de importante que la del hombre y, sobre todo, que no sean violentadas de ninguna
forma.

Es de admitir que para el íntegro acatamiento de este proceso se requiere que


to’oxtyëjkëty-jëtyëkëty (mujeres-hombres) tengan los mismos valores simbólicos,
favoreciendo así el lazo comunitario. Dicho de otra forma, to’oxtyëjkëty-jëëtyëkëty deben
tener el conocimiento de que ambos son la base primordial para el fortalecimiento y
enriquecimiento de la vida comunal, en el entendido que somos iguales; situación que
en algunos espacios y momentos de la realidad no se presentan. De todo esto se deriva
el siguiente cuestionamiento que dará forma a esta investigación ¿Cómo recuperar la
visión femenina Ayuuk? A partir de lo anterior nos preguntamos en un nivel teórico-
práctico acerca de lo siguiente:

¿Es visible a través de la oralidad de las takmä’yëty? ¿Cuál es la relación entre memoria
y oralidad? ¿Existe realmente dicha relación en el contexto del mundo Ayuuk? ¿Qué
herramientas pueden ayudar a recuperar la memoria de cada takmä’yëty? ¿Qué grado
de influencia puede ejercer la oralidad y memoria de las takmä’yëty en los espacios
públicos? Mediante estas preguntas se construirán los instrumentos metodológicos que
guiarán el resultado y producto final.

El propósito de este trabajo, es que las takmä’yëty expresen sus pensamientos y


sentimientos a propia voz acerca de las diferentes realidades que han vivido en la
comunidad. Pues como dice Paredes (2010, p. 53) “Las mujeres tenemos nuestro propio
ojo y nuestra propia perspectiva de las cosas, somos otra mirada del mundo, una mirada

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revolucionaria porque somos la mitad más oprimida de la comunidad”. Por ello es
fundamental que la visión femenina sea visibilizada en todos los aspectos.

La propuesta de esta investigación es visibilizar, a través de un material audiovisual


(corto-documental), ya que las takmä’yëty forman parte de la comunidad para el bien
común, por tal motivo debe existir una igualdad de participación, con la intención de que
se visibilice la complementariedad. Tzul (2016, p. 24) menciona que “las mujeres y los
hombres producen estructuras de gobierno para compartir, defender y recuperar los
medios materiales para la reproducción de la vida humana”.

Estas expresiones, como las memorias orales, son también propias de las takmä’yëty,
memorias que enlazan las formas de vida del antes y del hoy. Además la memoria nos
habla de dónde venimos, de los problemas, de las luchas. Los saberes de nuestras
takmä’yëty, son una riqueza de conocimientos que hay que difundir y con el cual hay
que recuperar y visibilizar sus propias memorias orales, historias y en general su visión.
Es por eso que esta investigación dará pie a que las mujeres y las comunidades Ayuuk
reconozcan la importancia que tienen sus trabajos no solo en la familia sino también
dentro de la comunidad, siendo que el trabajo de las mujeres es el núcleo social, de ahí
es donde empieza la construcción y el lazo social para la reproducción de la vida material
de la comunidad.

En tal medida se plantearon como objetivo general: Recuperar la memoria oral de dos
takmä’yëty para visibilizar la visión femenina Ayuuk, para llegar a ello se diseñaron tres
objetivos específicos: a) recopilar la memoria oral de dos takmä’yëty de la parte media
de la región Ayuuk, Nëpä’äm-Santiago Atitlán y Tsuxk Nëpä’äm -San Juan Bosco
Chuxnaban, b) analizar el discurso oral de las dos takmä’yëty y c) sintetizar en un corto
documental la memoria oral de una generación de takmä’yëty para visibilizar la visión
femenina del mundo Ayuuk.

En este sentido será una investigación esencialmente cualitativa porque postula que la
realidad se define a través de las interpretaciones de los participantes en la investigación
respecto a sus propias realidades. Hernández, Fernández y Baptista, (2010). Utilizando
el diseño etnográfico y narrativo. Desarrollando en tres etapas.

1. Recopilación de las memorias orales de dos takmä’yëty de comunidades diferentes.


Esta primera etapa se realizó en dos momentos:

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1) Hubo un primer acercamiento con las takmä’yëty, con el fin de darles a
conocer los objetivos de la investigación y, sobre todo, convivir con ellas en
un tiempo aproximado de dos días para generar confianza entre el
investigador y el sujeto. Para ello se hizo uso del instrumento de diario de
campo.

2) Se recuperó la memoria oral a través de una conversación, para ello se


utilizó como instrumento la entrevista semi-estructurada, con tinte a
profundidad que permitió rescatar las historias personales, anécdotas,
vivencias, visiones a propia voz, además las preguntas semi-estructuradas
fueron las bases para la construcción del guion (corto documental), de igual
manera se hizo un acercamiento informal, observando y filmando su
cotidianidad. El objetivo de esta propuesta fue activar el recuerdo de ellas
a partir de las preguntas.

2. Análisis del discurso

Esta etapa se ejecutó en tres fases:

1) Transcripción de las entrevistas.- La transcripción se realizó por cada takmä’ay


al español.

2) Categorización transversal.- En este apartado los discursos de cada takmä’ay


se agruparon en las categorías correspondientes.

3) Interpretación descriptiva.- Se interpretó los discursos orales de las


takmä’yëty.

3. Creación de un documental (10 min)

Es el producto de la investigación, se filmaron las entrevistas de cada takmä’yëty:

Las entrevistas para el documental fueron en Ayuuk. En la postproducción se trabajaron


los subtítulos en español, en algunas escenas se acompañó con música de fondo y en
otras el sonido fue natural.

El documental como producto final está dirigido para todo público con la intención de
visibilizar la visión de las takmä’yëty, pretendiendo dejar como reflexión la forma en cómo
se fueron formando su visiones y que a su vez van construyendo. Al mismo tiempo se

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entienda que su oralidad está llena de símbolos y significados que configuran la
comunidad y a la persona misma.

Regresando al documento, está estructurado en cuatro capítulos. En el primer capítulo


se hizo una revisión bibliográfica sobre la memoria, oralidad y memoria oral, analizando
conceptos con diferentes autores para entender como estos elementos se entrelazan y
están presentes en la vida de cada persona recordando las vivencias del pasado y del
presente.

En el segundo capítulo se desarrolla la construcción de la feminidad partiendo desde las


visiones de las takmä’yëty, que han tenido una trayectoria de vida dentro de la
comunidad, desde sus vivencias, las formas de ver y entender el mundo, y lo más
importante la construcción de ser mujer.

En el tercer capítulo se desarrolla las participaciones de las mujeres en el espacio social-


político, analizando como son las participaciones o “roles” que juegan mujeres y hombres
dentro de la comunidad, teniendo presente que ambos son los que hacen o construyen
el entramado comunitario.

En el último capítulo encontraras los elementos que integran la visión de la mujer a partir
de la espiritualidad, como otro de los elementos culturales que ellas realizan y que forma
parte de su herencia oral.

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Capítulo I. Ja’a jamyajtsën mo ja’a jikyajtën: de la memoria a la vida
Porque somos lo que nos transmitieron de forma tácita o
explicita, porque somos cada recuerdo, cada experiencia, cada
vivencia, cada esperanza, cada sueño, cada sentir, cada amar,
cada luchar, cada resistir.
Ma. Virginia Rojas Quiroga

En este capítulo se hizo la revisión bibliográfica de diferentes autores como; Walter J.


Ong, Fabiola Carrillo, Jenny Gonzáles, entre otras. Tomando en cuenta las categorías
principales de análisis: memoria, oralidad y memoria oral.

Sobre la Memoria

Para comenzar este apartado debemos considerar antes que nada la noción de la
memoria ya que la recopilación de los datos parte de dicha categoría. Existen muchos
autores que dan sus puntos de vista desde sus conocimientos, experiencias o contextos.
Deseamos dar una propia definición desde la cultura Ayuuk y posteriormente reforzar
con aportaciones de otros autores.

El concepto memoria traducida en la lengua Ayuuk es jamyajtsën; jaamyëp interpretada


en palabras como: lo que ya pasó, aquellas, antes. Myajtsën es recordar; entonces
memoria es recordar el pasado, el antes. Peppino (2005, p. 7) señala que “La memoria
es todo aquello que una persona recuerda o, también, se refiere a la capacidad de
recordar. Se relaciona con el proceso de aprender, de almacenar información y de
recordarla”

Por consiguiente, la memoria es la raíz de la historia, puesto que es una narrativa en la


que se construye el pasado a partir de los recuerdos de diversas personas, para
interpretar sucesos que acontecieron y encontrar sentido a lo que las personas dicen o
no. En sí, la memoria oral se refiere a la producción y uso de fuentes orales para la
construcción y reconstrucción histórica. Cual integra a otros sectores que no son
tomados en cuenta a la memoria tradicional, que, por ejemplo, en el caso de la cultura
Ayuuk están los jóvenes, sobre todo las mujeres.

Por lo tanto, la memoria está basada en la memoria individual pero construida mediante
la memoria colectiva, ya que cuando una persona recuerda los hechos y los
acontecimientos vividos, nunca está sola en el suceso, para recordarlo siempre debe
haber otras personas, como también los tiempos y espacios, además estos recuerdos,

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experiencias de aquellos tiempos para ser memorables y resguardados siempre deben
ser contados o compartidos en una colectividad o en el contexto social sin exclusión
alguna.

Argumentando con lo que dice Halbwachs, M (1991 p.7) “la memoria colectiva o memoria
social se auxilia con la memoria individual dado que después de todo la historia de
nuestra vida forma parte de la historia en general, y, no representa el pasado bajo una
forma resumida y esquemática, mientras que la memoria de nuestra vida aparece en un
contexto más continúo y denso”. Por lo tanto, la memoria se edifica a través de la
memoria individual y se desarrolla de manera colectiva.

Sobre la Oralidad

Además, esta memoria se transmite por dos formas principalmente, vía oral o vía escrita.
La oralidad es un elemento primordial en las culturas, ya que, a través del habla, se
fueron transmitiendo las diferentes experiencias, conocimientos y saberes de generación
en generación. Carrillo (2006, p. 11) menciona que es el “conjunto de saberes y formas
de comprender y ver el mundo expresados en el habla, en la palabra que se transmite a
lo largo del tiempo, del espacio y de generaciones. Remite al acto de comunicar”

A través de ello se construye la memoria social. Estos dos elementos son piezas
fundamentales para mantener viva, de generación en generación, la historia y la lengua.
Por otra, parte se convierten en una práctica social preservando una significación
simbólica y cultural compartida por la colectividad y sociedad. Así mismo, la oralidad es
utilizada para compartir historias, para enseñar las normas de comportamiento, las
formas de organización política, económica, social y cultural/religioso dentro de una
comunidad.

Cabe resaltar en cuanto a lo cultural o religioso, la oralidad remite a las formas de ver y
comprender el mundo; por ejemplo, la relación humanidad-naturaleza, el respeto a la
madre tierra mediante los rituales, como lo comenta Ong (1987, p. 78) “la fuerza de la
palabra oral, para interiorizar se relaciona de una manera especial con lo sagrado, con
las preocupaciones fundamentales de la existencia. En la mayoría de las religiones, la
palabra hablada es parte integral de la vida ritual y devota”.

De igual manera, en este elemento cultural también se encuentran las raíces de la


identidad, los usos y costumbres, las creencias y sobre todo el valor de la lengua; es
decir, la oralidad a través de las lenguas originarias, mismo que las abuelas, abuelos,

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madres, padres continúan formando a sus hijos (as) transmitiéndoles lenguaje, cultura,
visón del mundo mediante las tradiciones orales propias, también la persistencia y la
cohesión en lo social, familiar o colectivo.

Como se había mencionado anteriormente, la oralidad también es empleada para


transmitir, memorias e historias, para instruir las normas de comportamiento de un grupo,
las formas de organización social y religiosa para la cohesión o el equilibrio social como
de mujeres y hombres. Así,

La oralidad es la expresión de ese mundo de significaciones y sentidos que es


la cultura, siendo un lenguaje netamente humano sirve de vehículo para
perpetuar sucesos que tuvieron lugar importante en el pueblo formando parte de
su memoria colectiva, es una tradición que va a la par de los medios de registro
que buscan archivar los recuerdos en soportes que pretenden evitar el olvido,
no obstante, el trabajo de los pueblos originalmente de cultura solo oral, debe
estar focalizado a la conservación de su tradición oral ya que dejar en la
responsabilidad de los soportes externos, la preservación de la memoria,
conlleva, sin lugar a dudas, a que los ancianos y ancianas, por no contar los
mitos, las leyendas, los acontecimientos, estén olvidándolos, no quedando nada
que contar para, incluso, ser plasmados en la memoria petrificada de las letras.
La palabra, como en los comienzos de la creación, según la mitología, continúa
siendo el principio y el fin de las memorias. (Gonzales, 2012, p.13).

La oralidad al igual que la memoria histórica, se tienden a través de la colectividad como


menciona Carillo (2016, p. 19) “la oralidad nos transmite el saber, no de un individuo sino
de una comunidad, no vivencias personales sino una herencia que se ha hecho colectivo
con el tiempo. El entorno comunitario y sociocultural es lo que le da sentido a la
información”, es decir, que a través de ella se recuperan las prácticas con las que un
grupo social se identifica.

Sobre la Memoria oral

La memoria oral como sustento de la memoria histórica de los pueblos originarios ha


sido un medio importante, ya que, es el único sistema en la cual se transmite oralmente
ideas, tradiciones, conocimientos, percepciones, valores, de una generación a otra en el
contexto social.

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La tradición oral en los pueblos originarios se sustenta, primeramente en ancianos y
ancianas, porque en ellos y ellas se encuentran presente las experiencias y los
acontecimientos narrados, de igual manera para la recopilación de historias, cuentos,
mitos, leyendas, medicina tradicional, entre otros más elementos contados por ellas y
ellos. Como acota Maurice Halbwachs citado por Jenny González Muñoz (2012) “las
historias contadas por ancianos y ancianas, quienes como dice, son los guardianes de
la tradición, ya que en ellos reposa una buena parte de la memoria colectiva, muchas
veces, incluso porque son testigos de los hechos contados” Maurice Halbwachs, cita
Muñoz (2012).

La memoria oral es un elemento primordial en la cultura Ayuuk, gracias a ello aún sigue
sobreviviendo y reviviendo las visiones del mundo Ayuuk, como las tradiciones, medicina
tradicional, mundo sobrenatural y principalmente las ceremonias que se realizan en los
cerros sagrados, aunque estos elementos han tenido procesos de transformación con el
paso del tiempo.

Hay que recordar que la memoria individual y la memoria colectiva fortalecen la memoria
oral, las experiencias y los acontecimientos vividos la recrean y al mismo tiempo
construyen la visión de cada persona. Sin embargo, la modernidad y el proceso
globalizador del capitalismo han llevado nuevas formas de comunicación a las
comunidades, esto hace una importante modificación en la visión de las personas y sus
formas de vida.

Uno de los objetivos de esta investigación no sólo es conocer la visión ayuuk de las
täkma’yëty, si no, aproximarse a la definición de conceptos y variables para explicar las
relaciones y condiciones de ellas y las generaciones actuales.

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Capítulo II. Construcción de la feminidad Ayuuk

“No basta ni siquiera descubrir lo que somos, hay que inventarnos”.

Rosario Castellanos

2.1 Los Ayuuk Ja’ay

El territorio Ayuuk, está ubicado al noreste de la capital del estado de Oaxaca, se


compone de cerca de 290 comunidades y localidades asentadas dentro de 19
municipios, ocupando una extensión aproximada de 6,000 km². Torres Cisneros (2004).

Actualmente el territorio Ayuuk se divide en tres partes, popularmente conocidas como


mixe alta, mixe media y mixe baja. En la parte alta se encuentran los municipios;
Xäämkëjxm-Tlahuitoltepec, Tikyo’om-Ayutla, Jikyo’päjkm-Cacalotepec, Tepantlali,
Poxkëjxm-Tepuxtepec, Anykyo’päjkm-Totontepec, Tëknë’ëm-Tamazulapam y
Eptskyëjxm -Mixistlán, y en la parte media están los municipios Tsiinkupa’ajkm-
Ocotepec, Nëpa’am -Atitlán, Napookm-Alotepec, Kënkë’ëm-Juquila Mixe, Munytsä’ämp-
Camotlán, Mikyëjxm- Zacatepec, Konä’ätsm-Quetzaltepec e uku’pajkm-Ixcuintepec, y
Mazatlán, Kotsoko’om-Cotzocón y Guichicovi, se encuentran en la parte baja. Cada una
de estos municipios cuenta con agencias, localidades y rancherías.

En términos de la división política, el territorio mixe limita, al noreste, con los distritos
de Villa Alta; al norte, con Choapan y con el Estado de Veracruz; al sur, con el Distrito
de Yautepec, y al sureste, con los Distrito de Tehuantepec y Juchitán.

Las dos comunidades donde se llevó a cabo esta investigación son la comunidad
Nëpä’äm-Santiago Atitlán y Tsuxk Nëpä’äm -San Juan Bosco Chuxnaban pertenecientes
a la Mixe media.

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Ilustración 1: Mapa de la región Ayuuk

Fuente: elaboración propia

El nombre de Atitlán significa" entre el agua", deriva de Atl-agua y Tlán-entre. El nombre


de Santiago es en honor de uno de los discípulos de Jesucristo. En la lengua originaria,
Nëpä’äm significa Nëë- Agua y Pä’äm- Orilla, es decir “a la orilla del Agua”. El municipio
cuenta con una superficie de 82.93 km², que representa el 0.09% de la superficie total
del Estado.

Se localiza en la región de la Sierra Norte, pertenece al Distrito Mixe. Se ubica en las


coordenadas 17° 06' de latitud norte y 95° 57' de longitud oeste, a una altitud de 1,520
metros sobre el nivel del mar.

Colinda al norte con Distrito Santiago Zacatepec, al sur con los municipios de
Tamazulapam del Espíritu Santo, Asunción Cacalotepec y Santa María Alotepec; al
oeste con Santa María Tlahuitoltepec y al este con Santa María Alotepec. Su distancia
aproximada a la capital del Estado es de 317 kilómetros.

17
San Juan Bosco Chuxnabán es una agencia municipal que pertenece al municipio de
San Miguel Quetzaltepec. Chuxnabán es una palabra binomio entre Ayuuk-Español, que
significa ―orilla del río verde. La palabra <chux>: su interpretación a la lengua Ayuuk
es; tsuxk, que traducido al español es: verde, la palabra <na>: su interpretación a la
lengua Ayuuk es; nëë, que traducido al español es: agua o río, la palabra <nabán>: su
interpretación a la lengua Ayuuk es; pä’äm, que traducido al español es: orilla
Ayuuk (o mixe). Entonces, la interpretación como en Ayuuk – español significa;
Tsuxknëëpä’äm= Chuxnabán a la “Orilla del río verde”

La comunidad se encuentra entre los 12° 02´ de latitud norte y los 14° 01´ de longitud
oeste. La altitud es de 580 metros sobre el nivel del mar,

Colindan al norte y al este con los municipios San Juan Cotzocón, San Miguel
Quetzaltepec y la agencia Santa Cruz Condoy; al oeste con los terrenos del municipio
Santa María Alotepec; al suroeste con los terrenos de la agencia Estancia de Morelos;
al sur con San Isidro Huayapam, agencia municipal de Alotepec; al sureste con los
terrenos de Santa Cruz Ocotal.

Según la tradición oral, la palabra “mixes” es una derivación del vocablo mixy (varon-
hombre), al que se le agregó al plural “es”. Otros piensan, que la palabra mixes pudo
haber surgido de la dificultad de los españoles de pronunciar mixy (Vásquez, 2001;
Vásquez García 2008)

Los Ayuuk letrados históricamente nos reconocemos como Ayuuk Ja’ay que significa
“gente de la palabra florida” o “gente de la palabra y del cerro sagrado”, cada comunidad
de la región Ayuuk se definen de acuerdo al nombre de sus comunidades y variantes,
por ejemplo; a los de Xäämkëjxmëtë les conocen como Xäämkëjxmëtë ja’ay, Alotepec-
Nääpookmëtë Ja’ay, Jaltpec-Ëxkätsmëtë Ja’ay5, sucesivamente.

Sin embrago, las täkma’yëty consideran que “ser Ayuuk Ja’ay significa vivir en
comunidades, en las montañas, así nos llaman las personas de fuera, nos ven como si
fuéramos animalitos, pero no es así, vivimos aquí porque aquí nacimos. Todos somos
iguales, no hay diferencias, solo es una forma de vestir y hablar solo eso” (Ortega
Camacho Emilia, 2017, 21 de marzo. Entrevista)6.

5
Variante de Santiago Atitlán-Nëpa’am
6
Entrevistada 1, de la comunidad Nëpa’am. 21 de Marzo 2017.

18
2.2 Feminidad

Tratar de definir la feminidad de la mujer Ayuuk, es un aspecto muy complejo, para ello
se ha revisado la bibliografía correspondiente para acercarse a la definición y encontrar
los elementos que la integran.

En este sentido, “cada cultura tiene una visión simbólica de lo femenino-masculino y en


la construcción “socio-cultural” de la mujer y del hombre hay una trama de significaciones
e interrelaciones desde lo sobre-natural y lo cultural; la perspectiva de género desde una
visión indígena, nos permite desglosar esta construcción, que se manifiesta en los
hechos socio-culturales” (Vásquez 2008, p.15) por lo tanto el término feminidad estará
contextualizado en la investigación y relacionado con el género.

La feminidad es una construcción social, la mujer y el hombre son determinados


primeramente por su sexo biológico (genitales), una vez definidos, se les atribuye ciertas
premisas o condiciones de lo que significa “ser mujer” “ser hombre”, incluso los valores
y las actividades para cada género son distintos, así se va construyendo a la mujer
conforme va creciendo, según su contexto. La feminidad por tanto ya está determinada
por muchos años en el mundo.

El impedimento del acceso a la educación, que se dio no solamente en contextos rurales,


si no también urbanos ha costado años de lucha. Si bien, en muchas comunidades Ayuuk
el acceso a la educación para cualquier persona fue limitado, los únicos que podían tener
cierta oportunidad eran las familias que económicamente podían o contaban con una
escuela cercana, pero en dichas familias se elegía casi siempre a los hombres.

La visión de cada comunidad Ayuuk determina las relaciones de género, el


comportamiento y papel que cada persona juega dentro de la comunidad. En este sentido
se habla de condiciones genéricas establecidas para la mujer. Su “rol” dentro del trabajo
doméstico, la salud reproductiva en donde la capacidad de elegir la maternidad en
ocasiones es restringida.

El papel que cumplen dentro del entramado comunal, cuando se habla de


participaciones comunitarias social-políticas y tradiciones. La desvalorización del
trabajo de la mujer y las relaciones diferenciadas entre hombres y mujeres ha provocado
la restricción en algunos espacios participativos, es decir, cuando algunas no tienen la
posibilidad de tomar cierto tipo de decisiones comunitarias.

19
Otro elemento cultural es la medicina tradicional, conocimiento y saber que se
transmiten, ha tenido una ruptura dentro la comunidad con la introducción de la medicina
occidental.

La participación y el trabajo de la mujer en las comunidades Ayuuk son fundamentales


para mantener el entramado comunal. La identidad de la mujer Ayuuk se va conformando
desde la infancia, con formas de ser y trabajos que le son asignados desde casa y en la
comunidad, como menciona Paloma Bonfil (2002)

“Las niñas de los pueblos indios adquieren a lo largo de su infancia, no solo


los conocimientos y habilidades que les permitirán manejarse y ser aceptadas
en el conocimiento de los roles que de ellas se esperan en la edad adulta, sino
también los conocimientos y códigos tradicionales que les harán posible, ya
adultas, inculcar en las siguientes generaciones los valores asignados a las
tareas y desempeños de cada género. Lo anterior se traduce por un lado, en
la preservación y revitalización de los fundamentos culturales de los pueblos
indígenas; pero por otro lado, resulta también en la reproducción de las
relaciones sociales asimétricas entre los miembros de uno y otro género
desde la infancia” (Bonfil, 2002: 24).

Cabe mencionar que una persona forma su identidad a partir del contexto social en
donde se desenvuelve, fundamentando con lo que dice Daniel R. Sánchez (2010) “la
cosmovisión se aprende del ambiente en el cual la persona crece. Como parte del
proceso de la inculturación, el recién nacido comienza a aprender no sólo el idioma y las
costumbres sino también las suposiciones, premisas y conceptos básicos de sus padres,
familiares y comunidad”. Por lo que la pregunta central que guio la investigación, para
llegar a una conclusión y tener una definición más concreta fue ¿Cuál es la visión de la
mujer Ayuuk y como se da dicho proceso de construcción?

2.2 Salud reproductiva

Si cada mujer tiene su propia visión del mundo, por lo tanto, hay tantas visiones como
mujeres y entre la visión del mundo de nuestras madres-abuelas y las de hijas-nietas
existe una coyuntura generacional.

Pensar en la definición de una mujer es pensar en su sexo bilógico, en su ser madre,


ama de casa, cuidadora; pensándola siempre en la etapa de reproducción. Difícilmente
se piensa a la mujer siendo niña o adulta mayor (täkma’äy). Porque las construcciones

20
sociales para cada género nos remiten a la edad de reproducción, y, esto ocurre también
con el hombre. Por ello, esta investigación se enfocó en la visión de dos täkma’yëty.

La capacidad de elección estaba bastante limitada en generaciones anteriores, la


maternidad o la elección de la pareja no era decidida por ellas “a mí nunca me dijeron
como es la vida en pareja, ni cómo cuidarme. Nunca me decían nada de eso, mi mamá
ni en cuenta. La única que me hablaba era mi abuela [täkma’ay] Magdalena, me decía
que me cuidara mucho el día que comenzará a menstruar…Tuve mucha suerte con mi
menstruación porque me llego a los 18 años, por ello le agradezco mucho a Dios”
(Entrevistada 1).

La maternidad como finalidad es una idea fuertemente arraigada desde generaciones


atrás. Es una construcción social, puesto que dicha condición genérica se va
transmitiendo no solo de madre a hija, sino también de toda la sociedad hacia la mujer.
“La maternidad es comúnmente considerada por la mayoría de las personas como un
hecho natural o dado, que realiza y completa a la mujer, fructifica el amor de la pareja y
concretiza el triunfo de la vida ante la muerte al trascender en los hijos. Es también una
función considerada instintiva y fundante tanto de la identidad femenina, como del orden
social de género” (Yanina Avila Gozales. Pag: 55)

Aunque la maternidad nunca fue elección “yo nunca pensé lo que quería en el futuro,
antes estás decisiones no se platicaban en familia.” (Bulfrano Felipe7, 2017, 23 de marzo.
Entrevistada 2). Muchas madres se sienten felices con sus hijos e hijas, cuidar de ellos
y verlos crecer es un orgullo “ser madre significa para mí un orgullo, una felicidad. Me
siento feliz con mis hijos, porque si algún día necesito ayuda sé que estarán ahí, nunca
planee ser madre, antes había mucha ignorancia sobre estas cosas, ahora hay cambio,
por la educación que se le da a la juventud” (Entrevistada 2).

Por otra parte, es importante mencionar que en la comunidad o fuera de ella, la mujer es
valorada desde los y las otras, “otras personas valoran mi trabajo, se refleja mucho en
mis hijos, mucha gente me dice, realmente estás cuidando a tus hijos, ahí los tienes a
pesar de todo, nunca los abandonas. Pero también dicen, el hombre te está sustentando,
no te hace falta nada.” (Entrevistada 1)

7
Entrevistada 2, Tsuxk Nëpa’am, 23 de marzo 2017

21
La maternidad coloca a las mujeres en una posición social diferente, su trabajo de mujer
“cuidadora” se tiene que ver reflejada en sus descendientes, si sus hijos e hijas se “portan
bien” son trabajadores y respetuosos, ellas son “buenas madres”. Con ello obtienen
reconocimiento, valor social y también poder y dominio. A través de su condición de
madre se abren otros aspectos a los que antes no accedía y que la fortalecen. Así que
la imagen de la mujer como desposeída, pasiva y débil, se conjuga con la imagen de la
madre fuerte, activa y dominante.

Anteriormente la planificación familiar y los programas de gobierno sobre estos temas no


se llevaban a cabo en comunidades Ayuuk, actualmente las entrevistadas consideran
estos programas como una “bondad”, ya que las mujeres pueden decidir cuándo y
cuantos hijos e hijas quieren tener. “Hoy en día la idea de planificar a la familia depende
de cada persona, ya que mucha gente piensa que tener muchos hijos implica gastos,
pero, están matando vidas” (Entrevistada 1)

Pero al mismo tiempo, consideran que los medicamentos que consumen para evitar
quedar embarazadas envenena y enferma los cuerpos de quien las consume. Por ello y
por las creencias que sus ancestras les inculcaron piensan que es mejor tener hijos e
hijas hasta donde el cuerpo lo permita. “Cuando toman algún medicamento, por ejemplo
hay mujeres que no tienen muchos hijos y están enfermas, en cambio yo me siento bien.
Lo mejor sería que no utilizarán ningún medicamento y tuvieran hijos hasta dónde Dios
les conceda” (Entrevistada 1).

Como mencionaba anteriormente la elección de la pareja no lo decidía la mujer,


simplemente la familia era quien decidía y hablaba con los padres de la joven para
casarse, “yo me junté a los 20 años, no fue mi decisión, mi mamá fue quien le dijo a las
papás de mi esposo que su hijo se tenía que juntar conmigo, no quería juntarme con él,
le tenía miedo porque mi abuela [täkma’ay] me decía, el día en que te juntes tu esposo
ya no te dejara salir, puede ser que te golpee, y le tienes que obedecer” (Entrevistada 1).

En cambio en la actualidad ya hay decisiones de elección de pareja “Hoy en día la


juventud o los hijos son los que se ponen de acuerdo o se hacen pareja. Antes no era
así, cuando yo crecí, mis papás fueron los que dieron el sí, a la persona con la que me
iba a juntar” (Entrevista 2)

El quebrantamiento de estas visiones con las de otras generaciones tiene diferentes


causas. Los contextos, los cambios sociales y culturales van construyendo nuevas

22
feminidades. Durante las narraciones las täkma’yëty recurrían constantemente a la
comparación de antes y ahora, la vida de sus hijas respecto a las suyas, “hoy la vida es
muy feliz, hay muchas campañas sobre el cuidado o la prevención del embarazo. Antes
no había nada, es más, la persona se ponía feliz si se juntaba con una niña de 15 años,
decían que se había encontrado una “virgen pura”. No se daban cuenta que la mandaban
a sufrir” (Entrevistada 1).

2.3 Trabajo doméstico

Menciona Vásquez (2008) que el papel de las mujeres en la familia es un elemento


importante para la construcción de la identidad femenina, porque de allí se observa el
papel que se les adjudica (las normas, las obligaciones, los oficios).

Desde casa aprehendemos el “rol” que nos corresponde en la sociedad y en la familia.


Formas de pensar y ser que en la mayoría de los casos la madre inculca, aprender a
preparar comida y cuidar del hogar es una enseñanza fundamental y se vuelve como
una actividad diaria “nosotras sabemos que nos hace falta, si hay nixtamal, si hay que
lavar ropa, barrer, un sinfín de actividades, es mucho, aunque a veces no se ve lo que
hacemos, no se refleja nuestro trabajo, por eso a veces los hombres nos dicen, “yo no
sé qué hiciste”, pero es porque no notan el trabajo, como sucede con la comida. Y, es
que nuestro trabajo son los mismos todos los días, con eso te acuestas y con eso mismo
te levantas” (Entrevistada 1).

La valoración del trabajo de las mujeres Ayuuk, es reconocida por los demás a través de
los hijos e hijas o a través de sus esposos “el trabajo que yo realizo es importante y es
valorada, cuando mi esposo llega, se da cuenta que la casa y los trastes están limpios,
pide su comida, el café, la comida, las tortillas ya están preparadas” (Entrevistada 2).

Así mismo, ellas valoran su trabajo porque saben que implica esfuerzo y es cansado
“trabajar en la cocina es más fuerte que el trabajo de un hombre, porque me tengo que
levantar de madrugada a preparar la comida, para que mi esposo salga a trabajar.
Cuando termino en la cocina, tengo que darles de comer a mis animalitos” (Entrevistada
1).

Pero para otras mujeres el trabajo en casa implica menos esfuerzo que el realizado en
el campo por los hombres, “el trabajo de la casa, es igual a cualquier otro trabajo.
Aunque, con respecto al trabajo que realiza el hombre no es igual, la quema, la roza, la

23
tumba y luego la siembra, es más cansado, trabajan bajo el sol y la lluvia. El trabajo de
nosotras es menos” (Entrevistada 2).

La costumbre a sus actividades y a su vida cotidiana provoca que se sientan felices con
lo que realizan, “me gusta mi trabajo, me siento feliz con lo que realizo todos los días,
con mis pollitos, tenemos nuestras cosechas, con eso pasamos tranquilamente la vida,
ya me acostumbre, porque mi forma de vivir siempre ha sido así, desde que nací y hasta
que empecé a formar mi propia familia” (Entrevistada 1). La cría de pollos, es una
actividad que la mayoría de las mujeres, no solo de la región Ayuuk, realizan.

La feminización del cuidado de animales para la venta y el autoconsumo es parte


fundamental de la autogestión económica de las mujeres “desde que estaba niña me
dedicaba a la cría de pollos, era mi fuente de ingreso, así me enseño mi mamá…”.
(Entrevistada 1). A demás de ser una actividad que se transmitía de madres a hijas.

Las mujeres no solo cuidan y trabajan dentro de la casa y en el campo, también son
gestoras de la economía familiar, no es solo el hombre quien busca el dinero para el
sustento de la familia, “[…] aunque mi esposo a veces no trabaja o no tiene dinero yo ya
sé cómo ganar dinero, ya no es necesario pedirle. Yo si voy al campo a traer leña y maíz”
(Entrevistada 1). Frente a esta acción las mujeres dejan de tener un papel pasivo a la
espera del sustento familiar.

Para muchas otras mujeres el trabajo en casa es combinado con las actividades en el
campo. Siendo actividades pesadas muchas otras optan por no trabajar en el campo y
solo dedicarse al hogar “en la actualidad las mujeres casi ya no van a trabajar al campo,
pienso que eso está bien, porque es muy pesado ir al campo, en la milpa, traer leña lo
que sea, es muy cansado y aparte de regreso seguir trabajando en la cocina, hacer
tortillas, todo lo que tenga que ver en la cocina, por eso muchas personas se enferman,
el cuerpo se cansa también” (Entrevistada 2)

2.4 Educación: visión de una generación

Existen dos tipos de educación, la educación que se da en casa conocida como


educación informal y la educación que se recibe en las escuelas (formal) este fenómeno
es parte del proceso de construcción del conocimiento, la identidad, formas de pensar,
pero sobre todo, la forma de como vemos y pensamos el mundo.

24
En todo el proceso de narración de la memoria oral de las täkma’yëty frecuentemente se
recurre a la educación, vista como un espacio no sólo de socialización y comunicación,
si no como herramienta de cambio “mi hija está estudiando pero yo no quiero que trabaje
como ama de casa, no quiero que se queme las manos haciendo tortillas, mejor que
trabaje de su profesión y gane su dinero para poder vivir, no quiero que pase por el
mismo camino que yo pasé, viví en esa circunstancias porque pagué mi ignorancia, no
fui a la escuela. Todos los conocimientos aprendidos, se pueden aplicar más en las
ciudades” (Entrevistada 1). Estudiar para dejar de vivir en una comunidad, dejar el campo
y tener una mejor vida.

Desde estas visiones la escuela muestra un espacio de cambio social, cultural e


ideológico que interviene en la vida de las mujeres. No tener estudios implica entonces
dedicarse a la cocina, trabajar en el campo.

“Las que no estudiaron, pues que se dediquen a la casa, barrer,


trapear, preparar la comida, hacer las tortillas, igual considero que el
trabajo no es tan cansado, no necesariamente tienen que trabajar en
el campo” (Entrevistada 2).

“Creo que los que estudiaron no es necesario que trabajen así, no


tendrán ninguna necesidad de sufrir en la cocina, digo sufrir porque
estamos siempre en el fogón, día a día, quemándonos” (Entrevistada
1)

Sin embargo, la educación institucionalizada, en sus inicios eran oportunidades que sólo
los hombres podían tener “soy la única mujer de los hijos, tengo un hermano mayor que
si estudió, él es maestro, a él si lo mandaron a la escuela porque es hombre, yo no fui
por ser mujer y porque tenía que ayudar a mi mamá” (Entrevistada 2).

Hoy en día en varios países del mundo esto aún sigue siendo un problema, muchas
mujeres no pueden asistir a la escuela, como anteriormente ocurría, muchas abuelas,
madres y hermanas no tuvieron la oportunidad porque se pensaba y aun se piensa en
algunos lugares que la mujer tiene que dedicarse solo a los quehaceres del hogar, al
cuidado de la familia “no estudié, llegué solo a tercer grado de primaria, tuve que
obedecer a mi mamá, porque ella me decía que había trabajo que hacer en la casa,
barrer, lavar. Lo aprendí todo desde pequeña, lo hice por obediencia. Yo si quise ir a la
escuela, pero no se pudo” (Entrevistada 2).

25
Todos los procesos sociales, incluidos la escuela, son fenómenos que influyen en la
construcción de la visión de cada generación “a veces pienso que si hubiese estudiado,
estaría con mis hijos aventurándome con ellos, pero no se pudo y me pone triste. Ellos
son el motivo de mi vida, si son felices soy feliz, mi vida fue diferente a las suyas, pero
me resigné a esta vida” (Entrevistada 1).

Nuestra generación tiene oportunidades de realizar una carrera, los aprendizajes que
adquirimos en las escuelas ayudan ampliar nuestros conocimientos y visiones, conocer
otras formas de pensar y ser, nos pone a repensarnos y reinventarnos “creo es muy
importante que mi hija estudie, le agradezco mucho a Dios. Estoy orgullosa de ella y de
que las mujeres que estudien” (Entrevistada 1).

Pero la forma de como vemos y pensamos el mundo no sólo se da con este fenómeno,
desde la niñez, en casa, con nuestras madres, quienes dentro de su condición genérica
se encargan del cuidado de los hijos e hijas se convierten en nuestras primeras guías
“cuando los vocales pasaban de casa en casa para invitarnos a la escuela, mi mamá nos
escondía. Ella pensaba que nosotras debíamos aprender actividades de la casa, porque
de eso vamos a vivir, mi madre situaba nuestras vidas a ser “amas de casa”. En cambio
hoy les digo a mis hijos que salgan, que conozcan, que se vayan” (Entrevistada 1)

En muchas comunidades Ayuuk la escuela aporta grandes cambios en las relaciones de


género, no sólo en la familia sino también en la comunidad “las mujeres que van a la
escuela, es porque los padres quieren a sus hijas por eso las mandan a estudiar, yo creo
que a mí mis padres no me quisieron, no pensaron algo bueno para mí, por eso hoy no
sé nada” (Entrevistada 2).

Como menciona Carolina M. Vásquez (2008, p.78) […] ha permitido abrir diferentes
espacios de participación en la comunidad, mostrando así las incidencias en la vida de
las mujeres en los diferentes contextos y generaciones.

26
Capítulo III. La vida de la mujer en el entramado comunitario

El trayecto de la mujer como participante en la comunidad, se ido integrando con el


tiempo y espacio. Las participaciones de las mujeres de esta generación han sido más
pasivas que activas. Sus participaciones se reflejan a través de sus esposos, familiares.
Con el paso del tiempo empezaron a participar en los espacios públicos.

3.1 La vida en comunidad

La vida comunitaria se manifiesta en las relaciones sociales que se producen en ella.


Dice Silvia Federici, acerca de lo común: “Comunidad no es una realidad cerrada,
como un grupo de personas unidas por intereses exclusivos, que los separa de los
otros como las comunidades basadas en la identidad o la religión. Comunidad es
un tipo de relación social”. (Federici, 2013; 73) citada por Gladys Tzul.

Existen diversas formas de definir la vida en comunidad, el contexto y las vivencias de


cada persona determinan el significado de vivir en ella “la vida en comunidad es más
bonita que en las ciudades porque en las ciudades todo tiene un precio, en la comunidad
se vive con más tranquilidad, muchas cosas son baratas, por ejemplo el agua es gratis”
(Entrevistada 2).

La comunidad es un espacio donde se vive plena y tranquilamente, ya que, las personas


cuentan con espacios parar criar ganados de traspatio y terrenos donde trabajar para
sembrar y cosechar alimentos de autoconsumo y venta.

Por otro lado, existe la creencia de que los que no tuvieron la oportunidad de estudiar
son los que deben estar y trabajar en la comunidad, porque vivir en ella no implica saber
leer ni escribir, a diferencia de vivir en la ciudad, “vivir en el rancho es muy bonito, en la
ciudad es algo complicado, pero si saben leer, escribir y tienen un buen trabajo es bonito,
pero si no considero que es mejor en una comunidad, se puede criar pollo, perros,
cerdos, trabajar en el campo, sembrar, limpiar, todo lo que tenga que ver con el campo”
(Entrevistada 1)

Floriberto Díaz (2004, p.367) habla de la comunidad como “una serie de relaciones,
primero entre la gente y el espacio, y en segundo término, entre las personas. Para
estas relaciones existen reglas, interpretadas a partir de la propia naturaleza y definidas
con las experiencias de las generaciones”.

27
Lo elementos que integran una comunidad son: fiestas, trabajo comunitario, las formas
de organización social, política y económica, en cada elemento o espacio se aprecia la
participación de hombres y mujeres.

Las relaciones sociales en las sociedades comunales se estructuran básicamente


para regular el uso de lo que se comparte para habitar y compartir de la vida en
territorio comunal donde mujeres, hombres, niñas y niños relacionados y conectados
por un entramado comunal que trabaja cooperativa y gozosamente para producir
las condiciones materiales para la vida cotidiana. El argumento de Federici que, antes
que la producción del capital, está la reproducción de la vida.

3.2 La mujer en la organización social

De esta forma la reproducción de la vida comienza esencialmente en el hogar, desde la


preparación de la comida, el cuidado de la familia, y todas las formas que permiten que
las participaciones que se dan en la trama comunal se mantengan. Por ello, la
participación de las mujeres es significativa.

Los espacios comúnmente ocupados por las mujeres han sido de acuerdo a su condición
de género “los hombres son los que van al tequio, yo sólo me encargo de preparar la
comida, cuando se van lejos, por ejemplo cuando es la apertura de la colindancia yo me
tengo que levantar a las 3 de la mañana, para que toda la comida esté lista. De esta
forma ambos participamos en el tequio” (Entrevistada 1).

Dentro de esta asignación de roles está claro que hombres y mujeres sostienen la
comunidad. En la organización social, las mujeres comúnmente participan en los tequios
y fiestas comunitarias de distintas maneras “dentro de la comunidad mi participación es
muy importante y primordial, porque vivo en ella y porque es obedecer a la comunidad.
Todas las mujeres nos reunimos para trabajar, y eso es bueno” (Entrevistada 1).

Pero no solo participan en la elaboración de la comida, también van a barrer y limpiar las
calles, chapear y levantar basura. Esta última forma de participación es reciente puesto
que se da a partir de programas del gobierno, como el apoyo del “programa prospera”,
“el trabajo colectivo o el tequio son importantes porque se está obedeciendo a las
autoridades, cuando se trata del programa prospera yo si voy, cuando vamos a barrer,
pensándolo bien creo que es un tequio también porque vamos todas las mujeres, se le
nombra igual como un tequio pero no es igual porque lo que realizan los hombres es más
pesado” (Entrevistada 2)

28
El papel protagónico que las mujeres tienen en la preparación de la comida, no solo se
nota en casa o en los tequios también en las mayordomías, en los alférez, los velorios y
eventos sociales como: bodas, cumpleaños, bautizos etc. Pero principalmente en las
fiestas comunitarias, donde ellas se encargan desde la organización hasta la preparación
de la comida.

“Mi participación en la comunidad es a partir de la limpieza en general,


en la fiesta comunitaria participan los hombres, pero también mi
participación se percibe en la elaboración de la comida, yo me pongo
de acuerdo con mis ayudantes, para ver lo que se va a preparar en el
desayuno y en la cena. Ellas me ayudan sin nada a cambio, solo
convivimos y si hay comida eso le damos. No se paga ni nada”
(Entrevistada 1)

Es importante mencionar también como la llegada de las nuevas sectas religiosas


cambia o modifican las formas de ver y participar en la comunidad, “salgo muy poco a
ayudar cuando son fiestas. Antes iba ayudar mucho, ayudaba a preparar la comida, traer
el nixtamal para hacer las tortillas, antes pensaba que era importante ayudar, ahora
pienso que ya no es importante. Ahora que estoy en la otra religión participo pocas veces.
Donde definitivamente participo es en los velorios” (Entrevistada 2).

Para muchas personas, el servicio y la ayuda en las fiestas comunitarias dejan de ser
importante, ya que no se sienten parte de ellas. Por lo tanto las participaciones se
vuelven escasas.

3.3 La mujer en la organización política local

Anteriormente, no se visibilizaba la participación de las mujeres en los espacios políticos,


porque no participaban en las asambleas ni en la toma de decisiones. El esposo,
llegando a la casa, le compartía a la esposa los puntos que se trataron y las decisiones
que se tomaron a cabo. Ellas daban su punto de vista al respecto y el hombre lo llevaba
a la próxima asamblea. En la actualidad esto sigue funcionando así, aunque no en todas
las familias. Cabe decir que, algunas mujeres no consideran esto como participación
política.

Por otra parte, si el esposo se le asigna un cargo político, solo a él es quien le reconocen
ante la comunidad como autoridad “nosotros participamos en la comunidad cuando mi
esposo fue topil, comité, vocal, regidor, y en bienes comunales 2 veces, hablo de ambos

29
porque yo también participo cuando le doy de comer, no precisamente tengo que ir a las
oficinas. Nunca he tenido un cargo político como tal, a mí sí me gustaría” (Entrevistada
1). Al momento de la transición del poder solo se menciona su nombre y el cargo que va
a ejercer, no se menciona el nombre de la mujer. Esta situación en algunas comunidades
sigue permaneciendo.

Con el paso del tiempo y a pasos lentos la participación de las mujeres va siendo cada
vez mayores, como bien se sabe, en algunas comunidades Ayuuk las mujeres ya son
consideradas en las asambleas aunque sus propuestas no se han tomado muy en
cuenta, “participo en las asambleas cuando es aquí nada más. También voy cuando es
la asamblea general, escuchan las participaciones de mis compañeras, es aceptable,
aunque a veces algunas dicen incoherencias y otras dicen la verdad, son escuchadas
porque ya formamos parte de la asamblea, además se dice que la participación de la
mujer tiene el mismo valor o más al de un hombre. Esto comenzó hace 4 o 5 años”
(Entrevistada 1).

El reconocimiento de la participación de las mujeres en los espacios políticos, se da


gracias a los diferentes programas gubernamentales, es ahí, donde las mujeres
empiezan a participar, además la consideración que existe una igualdad es dada a partir
de la misma.

Sin embargo, en algunas comunidades la participación de las mujeres no son tan


frecuentes, es decir, solo son convocadas en casos necesarios, misma que la comunidad
está acostumbrado ver solo la participación de los hombres y/o las mujeres mismas
consideran que les quita tiempo al ir a las asambleas “sí, voy a la asamblea cuando
anuncian que también tienen que ir las mujeres, si no pues no voy. Normalmente las
participaciones de las mujeres se dan en el nombramiento de las nuevas autoridades,
el fin de año. Está bien que nosotras las mujeres no participemos, porque es tedioso
esperar y estar sentada, además el trabajo en la casa se atrasa, queda pendiente, es
mejor que no vaya” ( Entrevistada 2)

En la mayoría de los casos, las mujeres que han empezado a tener cargos dentro del
sistema político local, han sido cargos que no necesariamente son participaciones
políticas puesto que incide la formación de género donde se experimenta diferentes tipos
de trabajo y acceso a los espacios. “Las mujeres dan su servicio en la escuela, primaria,
secundaria, y en el albergue” (Entrevista 1). Trabajos que son consideradas para
mujeres: cuidado y crianza.

30
Cabe mencionar, en otros casos las mujeres también se han incorporado a estos
espacios en ausencia y representación de sus esposos “a las mujeres las nombran
porque sus esposos están trabajando fuera, de esta manera cubren a su esposo más no
dan el servicio por ellas mismas, el servicio es por los dos” (Entrevistada 1).

Son casos excepcionales de las mujeres que han formado parte de la jerarquía
organizacional “sé que en otras comunidades como Xäämkëjxm-Tlahui hay una mujer
como presidenta, en Mikyëjxm-Zacatepec está de presidenta una mujer que es de esta
comunidad Nëpa’am-Atitlán, se llama Austreberta” (Entrevistada 1). En otras
comunidades las participaciones de la mujeres en este ámbito son muy recientes “en
este año están participando dos mujeres como regidoras, las nombraron y si voté por
ellas, llevan 2 años trabajando” (entrevistada 1).

En cuanto al acceso que han empezado a tener las mujeres, por lo general existe
obstáculos como la presión social ejercidas tanto por los hombres como las mismas
mujeres de la comunidad “opino que hombres y mujeres trabajarían bien, pero considero
que los hombres más, porque a veces las mujeres no tienen tanto conocimiento como
los hombres” (Entrevistada 1).

Otro de los obstáculos es que las mismas no opinan en las asambleas o algunas que
dan su punto de vista consideran que no están en lo correcto “cuando voy yo no participo,
solo en el pase de lista respondo. Hay compañeras que si participan. A veces no le dan
importancia a su participación porque no responden lo que se está planteando”.

La reproducción de este sesgo cultural refuerza las tendencias de desigualdad,


pensando que las mujeres son menos inteligentes que los hombres. Estas ideas tienden
al mismo tiempo desvalorizar la partición de las mujeres en ámbito político local “si
nombraran a una mujer si votaría por ella pienso que las mujeres trabajarían bien.
Considero si todas en el cabildo fueran mujeres trabajarían bien, porque no tomarían. Y
si fueran hombres y mujeres, estaría bueno, aunque siempre va ver alguien que sepa
más que uno” (Entrevistada 2)

Así mismo influye también la parte educativa para este tipo de participación, es decir, si
una mujer tiene alguna profesión se piensa que va ejercer bien “me da mucho gusto que
las mujeres sean autoridades, porque también saben, tienen estudios. En Tëknë’ëm -
Tamazulapam ha habido mujeres de tesorera y secretaria y está muy bien, además la
comunidad ya está acostumbrada a que las mujeres participen”.

31
Por lo tanto, las mujeres que desempeñan un cargo dentro de la comunidad la mayoría
viven una presión mayor que los hombres por que están inmersas en una sociedad
prejuiciada que duda de sus capacidades para el desempeño de este tipo de trabajo,
empezando por sus opiniones dentro de las asambleas y en el cargo que ejerce. Siempre
están en observación y a pruebas, porque de ellas depende si se sigue nombrando otras
mujeres.

32
Capítulo IV: La construcción de la visión de la mujer a través de la espiritualidad y
religiosidad Ayuuk

La visión cósmica de la vida es estar conectado con el entorno y todo lo


que hay en el entorno tiene vida, por lo que adquiere un valor sagrado:
encontramos tierra, cerros, planicies, cuevas, plantas, animales, piedras,
agua, aire, luna, sol, estrellas. La espiritualidad nace de esta visión y
concepción en la que todos los seres que hay en la Madre Naturaleza
tienen vida y se interrelacionan. La espiritualidad está ligada al sentido
comunitario, donde los seres se interrelacionan y se complementan

Silvia Marcos, pag.190

Indudablemente en la visión de cada persona está implícita la espiritualidad y


religiosidad. En el transcurso de nuestras vidas nosotras vamos adquiriendo creencias,
la forma en como creemos y vivimos el mundo es espiritualidad. Menciona (Sylvia
Marcos, p. 174) que “A través del cristal de la espiritualidad indígena, podemos adentrar
nuestra mirada en la cosmovisión que abraza, abarcadora, los mundos de la mujer
indígena.”

Esta conceptualización ha tenido muchos debates durante la historia. Durante la primera


cumbre sobre espiritualidad indígena, muchas mujeres se pronunciaron y trataron de dar
una definición a la espiritualidad. Dentro de la espiritualidad indígena, la relación con el
mundo sobrenatural se entiende de manera radicalmente distinta.

La espiritualidad Ayuuk tiene distintos componentes, la fiesta, los cerros, las creencias
en lo sobre natural, los rituales, la manera de como creemos el mundo.

4.1 Espiritualidad y religiosidad Ayuuk

Como mencionaba anteriormente, la espiritualidad fundamenta la visión de las


takmä’yëty y las personas en general.

Durante la narración oral, las takmä’yëty recordaban frecuentemente las prácticas que
sus ancestras realizaban, los rituales en los cerros sagrados, ofrendas y sacrificios, las
limpias realizadas por xëëmapyë [Chaman] para curar el cuerpo y el alma. Incluso las
historias donde evidentemente hablaban de las deidades Ayuuk, y la vida a través de los

33
nahuales: “Creo en los nahuales. Nuestros ancestros dicen que desde que nacemos lo
tenemos, y si lastiman a nuestros nahuales nos podemos morir, pero nadie sabe cuál es
nuestro nahual” (Entrevistada 2).

Sin embargo esta sincrética religiosidad, expresada en las diversas creencias, produce
cambios y a ritmos acelerados en las tradiciones transformaciones que transgreden y
provocan efectos en las identidades y las tradiciones étnicas (Parker Gumucio. pag.89).

Porque para otras personas las creencias en los nahuales, por ejemplo, son cuestiones
que anteriormente daban identidad a cada individuo, creencias sobrenaturales que se
respetaban, ahora en muchos casos los nahuales no forman parte de la visión takma’ay
“En realidad no creo en los nahuales. Las personas narran de ellos, mis abuelos me
decían, “tenemos nuestros nahuales, seres que nos cuidan”. También mis padres desde
que era niña me platicaban de Koonk anääw [truenos], que estaban en las montañas. En
la actualidad, casi nadie lo menciona, hoy dicen que Dios hizo aparte a los humanos y
aparte los animales. Ya no sé a quién creer” (Entrevistada 1).

Es importante hacer mención en este apartado los cambios que produjo la colonización
española; ya que, no solo fue territorial si no también religioso, en el siglo XVI la
evangelización fue radical y violenta. Desde ese momento la espiritualidad ancestral fue
transformándose, algunas prácticas fueron extinguiéndose y otras más fueron
adaptándose a las distintas formas de expresar la espiritualidad. Como sucede con los
cerros, lugares sagrados en donde muchas personas se trasladan a realizar ofrendas y
pedir bendiciones. “Existen dos tipos de cerros, el cerro santo dónde van los evangélicos
y el cerro sagrado donde realizan sacrificios, se adora el koonk anääw, y los evangélicos
adoran al Dios. Es una forma de pedir bendiciones” (Entrevista 1).

Muchas deidades mesoamericanas fueron cambiadas por dioses cristianos o fueron


ocultadas bajo dichas figuras “en suma, el culto a los santos patronos, que conforma la
columna vertebral de la religiosidad indocristiana, es una combinación característica de
las complejas negociaciones culturales que han marcado la historia indígena tras la
conquista. Por un lado, los santos continúan la tradición prehispánica de los dioses
tutelares, pues cumplen el mismo papel de símbolo y encarnación de la identidad
comunitaria, pero por el otro su efectividad y su poder dependen precisamente del hecho
de que son diferentes de los antiguos dioses, de que son extranjeros, güeros y
poderosos, y por ello pueden dar a los indígenas algo del poder y la fuerza que perteneció
a los conquistadores.” (Federico Navarrete 2017, p.7).

34
El catolicismo no fue la única religión, en años posteriores religiones protestantes
llegaron a muchas partes del país. Que a diferencia del catolicismo que trataba de
acercarse a las formas ancestrales de expresar la espiritualidad, estas últimas no.

Todo esto fue un factor importante en el cambio de paradigmas y creencias. Para muchas
personas, no solo de las comunidades Ayuuk, si no de muchas otras, los rituales y la
expresión espiritual ancestral deja de tener importancia. “Nosotros ya no hacemos el
ritual. Antes mis papás si lo hacían, cuando tenía 5 o 6 años, por ejemplo en mis
cumpleaños, ellos invitaban al chaman, mataban pollos, me echaban la sangre bajo de
mis pies, en mis manos y en mi cabeza. Para muchas personas hacer el ritual es muy
importante, porque se ayudan con el sacrificio” (Entrevistada 2).

“Para mí el ritual no es tan importante, para mis abuelos y mis


padres estas prácticas eran muy importantes, ahora no es tan
necesario hacer sacrificios, lo más importante es ir a rezar en
el campo, en el lugar del trabajo para agradecer a la madre
tierra por las bendiciones” (Entrevistada 1).

No obstante “En el imaginario colectivo de los pueblos indígenas latinoamericanos del


siglo XXI, una parte de las enseñanzas, creencias y sabiduría de sus ancestros continúa
ofreciendo un sentido, una visión abrasadora, una forma de entender la naturaleza y la
sociedad, la curación y la salvación, que es diferente de la racionalidad del cristianismo
occidental”. (Parker Gumucio, Pag. 90)

4.2 La salud, la medicina tradicional y las mujeres

La medicina tradicional y las formas de curación de las mujeres Ayuuk, son elementos
importantes que integran la visión de las abuelas Ayuuk desde la espiritualidad. La
medicina tradicional, son técnicas que prevalecen hasta nuestros días a pesar de la
colonización. Porque está presente además en la religiosidad Ayuuk ancestral. Por
ejemplo, hay enfermedades que son curadas con limpias y ofrendas en los cerros.

Los conocimientos en la medicina tradicional aún prevalecen a pesar de la inminente


llegada de la medicina occidental. Nuestras madres, abuelas, dentro de su condición
genérica se encargan del cuidado de la familia. Podemos observarlo en nuestra propia
historia. El rol prominente de las mujeres curanderas reflejaba una visión del mundo en
el cual los poderes y todos los aspectos de la vida femenina formaban parte de la

35
sociedad en modo fundamental. Aún más, los registros de los siglos XVI y XVII sugieren
que había más mujeres que hombres practicando las artes curativas en los tiempos
precolombinos. (Silvya Marcos. Pag. 198).

La transmisión de saberes ha permitido que estas prácticas curativas se sigan utilizando.


Transmisión que comúnmente se da de madre a hijas o de abuelas a madres. “Todo esto
(conocimientos en medicina tradicional) me lo enseño mi abuela Gregoria, mi abuela
Magdalena. Yo conozco todas la plantas, curativas, me encargo de cuidar y curar a mis
hijos, mi esposo no sabe mucho de eso, antes solo salía a tomar y no se preocupaba
tanto. Mi abuela era la que me sugería como curar a mis hijas. Ellas sabían todo”
(Entrevistada 1).

En la visión de nuestras abuelas el uso de la medicina tradicional sobre la medicina


alópata es mejor, “Confío más en las plantas medicinales, conozco la hoja de guayaba
en té, sirve para el dolor de estómago (joot pa’am), para el hinchazón se utiliza la sábila.
Lo aprendí de mi mamá, si lo ocupo hasta en la actualidad. Y comparto con otras
personas” (Entrevistada 2).

La globalización y la ciencia médica reconoce como mejor la medicina alópata o


convencional, el sistema la vuelve universal, por lo tanto en centros de salud o en
hospitales se ha homogenizado. Aunque el gobierno no encamine políticas públicas para
el rescato y valoración de la medicina tradicional, las personas pero sobre todo las
abuelas resisten a este cambio

“Creo que la medicina natural es mejor que las que se compran.


Yo casi no voy a las clínica, ahorita he ido porque me dicen que
tengo presión alta, azúcar, pero no me curan, siempre me dan
pastillas, siempre, cada mes que voy siempre con lo mismo.
Quién sabe si lo cura o no, nunca lo tomo, ahí están guardadas.
Igual cuando me aliviaba, todos mis hijos nacieron en casa, sí,
me enfermaba unas dos, tres, hasta cuatro días, me aguantaba
el dolor día y noche, a veces llegaba la preocupación porque no
había medicamentos, solo estaban las parteras....no sacaba a
mis hijos insisto no había donde llevarlos, cuando se enfermaban
de vómito o de diarrea los curaba con hierba dulce y con raíces,
los hervía y se los daba a mis hijos en té y los curaba.

36
Entrevistada 1” “En cambio, cuando compro, medicamentos
siento que no me quita el dolor, al contrario si se toma una taza
de té natural me curo rápido, y los medicamentos tardan en
curarlo y a veces ni lo cura.” Entrevistada 2

Actualmente las visiones y creencias en la medicina tratan de ser compartidas a sus


descendientes, tarea que no es fácil, ya que la medicina occidental ha sido impuesta en
todos los espacios de salud. “Cuando me enfermo, hasta ahorita ocupo estas plantas.
En cambio mis nietos ya no, su mamá corren al centro de salud, al doctor. Cuando yo
les digo que curen a sus hijos con plantas medicinales, que nosotros así nos curábamos,
ellos se molestan y me dicen “solo de estas plantas me hablas, eso ya no sirve”. En las
pláticas los promotores nos dicen que hay que ir en la clínica”, lo que provoca la pérdida
de las plantas medicinales. Mis hijos ya no lo creen por lo mismo porque ya hay doctores”
(Entrevistada 1).

37
CONCLUSIONES

Realizar esta investigación no sólo es recurrir a las memorias de las abuelas, sino
también es cuestionar nuestro pasado y presente. En el capítulo uno surge una primera
reflexión del papel que juega la memoria, oralidad y memoria oral en la construcción de
la visión de cada persona.

La memoria nos hace recordar y saber quiénes somos, de dónde venimos y hacia dónde
vamos. La memoria individual esta intrínsecamente ligada a la memoria colectiva, porque
cuando una persona recuerda su historia nunca está sola, hacer memoria no solo nos
permite descubrirnos o entendernos, nos permite cambiar, reflexionar, cuestionar y
reinventar lo que somos. La memoria es recordar, y, muchas veces es transmitida a los
demás, ya sea por vía oral o escrita. Específicamente la oralidad ha sido la herramienta
más antigua que utilizaban nuestros antepasados, y que aún sigue siendo utilizada de
manera eficaz en nuestras culturas.

En ese sentido la memoria y oralidad van de la mano. La oralidad como principio y fin de
las memorias necesita recurrir a esta última para funcionar como herramienta de
fortalecimiento de las lenguas, las tradiciones, la cultura, la construcción de la identidad
y las visiones. El acto de recurrir a la memoria y transmitirla de manera oral se le conoce
como memoria oral, a través de este proceso nos vamos construyendo como persona y
comunidad, porque no solo fortalece y preserva los modos de ser, también a través de
ella se comunican y transmiten valores, preceptos, y conocimientos de una generación
a otra. De esta forma se dan las condiciones genéricas, nos vamos construyendo de
acuerdo a lo que se nos transmite, lo que vemos y percibimos en casa y fuera de ella.

Abordar la visión de las dos takma’yety indica un acercamiento a estos procesos. Para
conocer la visión de las abuelas fue fundamental considerar ¿Qué significa ser mujer?
Pregunta que es desarrollada en el capítulo dos, en ella hacemos la reflexión sobre la
construcción de género como construcción social. No se nace mujer se llaga una a serlo
decía Simone de Bauvuir en 1948. En este sentido es importante reflexionar como las
condiciones de género influyen en las visiones. La construcción de la feminidad está
marcada no solo desde la familia, sino también desde toda una sociedad, quien a su vez
trasmite los roles y condiciones genéricas a través del lenguaje y las acciones.

38
Por ello, hay tantas visiones como mujeres, si bien la cultura-sociedad, nos van
construyendo, no todo indica que tengamos las misma visiones, nos reinventamos al
momento de conocernos. Las condiciones de cada generación son parte de estos
procesos de cambios.

Las condiciones de vida de nuestras madres-abuelas fueron distintas, por ejemplo; la


capacidad de elegir la maternidad o asistir a la escuela estaba limitada, “juntarse” era la
única elección para varias mujeres de esas generaciones. En el transcurso de la historia
las mujeres hemos ocupado un lugar inferior al de los hombres, pero se ha luchado para
reconocer nuestros derechos y tener las mismas condiciones de vida y oportunidades.
Ahora muchas de sus hijas-nietas tenemos la capacidad de elegir nuestra vida. Si bien
muchos puntos de nuestras visiones convergen otras difieren.

Indudablemente al abordar estos cuestionamientos, como investigadoras pertenecientes


a un género, a una cultura, a una etnia, fuimos al mismo tiempo sujetas de la propia
investigación, cuestionar nuestra realidad nos atraviesa. No se trata de demostrar, cuales
son las visiones correctas, se trata más bien de visibilizar las visiones que existen,
reconocernos en las diferencias y acompañarnos, aprender de ellas, reflexionarla nos
permite conocernos y reinventarnos.

Desde mi posicionamiento como mujer Ayuuk, he definido como persona que tiene su
propia cultura, su propia visión, formas de ser, pero que estos no me hace diferente a
los demás, es decir, muchas veces estas definiciones se confunden a partir de ella se
genera la desigualdad social. Ser mujer es que seas respetada-valorada, que haya
libertades de elección, valorada, no sufrir ninguna violencia, sin importar cultura, clase
social y raza.

En el capítulo tres se hace una reflexión sobre la vida en comunidad en relación con la
participación social-política de las mujeres como; en tequios, fiestas, en las asambleas
comunitarias y en las organizaciones políticas locales. Esta reflexión parte desde cómo
se dan las relaciones de género de mujeres y hombres en estos espacios, sabiendo que
ambas forman parte del entramado comunitario y de la visión.

Entendiendo pues que el entramado comunal son relaciones sociales de “compartencia”,


nunca armónica, sino de tensiones y contradicciones, operan cooperativamente con
objetivos múltiples, siempre concretos, distintos y renovados, tienden a satisfacer o a

39
ampliar las necesidades básicas de la vida social y por tanto individual. Gutiérrez Aguilar
y Salazar Lohman (2015 p. 22).

De acuerdo con la información obtenida de las entrevistadas, la participación de las


mujeres en las dos comunidades se refleja más en lo social, es decir, las mujeres siempre
están presentes en las fiestas comunitarias en la preparación de la comida, su
participación en ella es activa, por lo tanto, las mujeres han estado en espacios en el
ámbito familiar y doméstico, mientras que los hombres son vistos en la vida pública.

Con el paso del tiempo, las generaciones han ido modificando estas vidas, hoy se puede
ver la participación de mujeres en algunas comunidades, sin embargo, esto no está del
todo, es decir, los espacios que se han abierto para las mujeres son muy pocas, recientes
y exclusivos. Además no hay igual reconocimiento y valoración de ambos sexos.

En la mayoría de casos, la incorporación de las mujeres en los espacios, su participación


es en ausencia y representación de sus esposos, es decir, la participación de las mujeres
es reconocida a través de ellos. Por lo general, esta participación se limita a espacios
muy específicos; en educación, salud y muy pocas en administración.

Para que la integración de las mujeres sea más amplia la vía es la educación, es decir,
las mujeres que tienen alguna profesión tienen mayor posibilidades de formar parte del
sistema del gobierno local. Esta propuesta, a la vez es cuestionable, debido a que las
mujeres se sienten incapaces de dirigir la comunidad o se consideran menos inteligentes
que los hombres, por lo tanto, consideran que la educación es la única salida, cuestiones
que obstaculizan la participación e integración de las mujeres, así mismo siempre están
observadas o cuestionadas ya sea por las mismas mujeres o por los hombres.

En el capítulo cuatro concluimos que la espiritualidad y religiosidad Ayuuk conforman la


visión de las takmä’yëty, la espiritualidad como forma de vivir y ver el mundo está
sustentada por tradiciones que desde generaciones atrás se vienen realizando, rituales-
ofrendas, creencias en lo sobre natural y la medicina tradicional o ancestral.

Por otra parte se reflexiona los cambios que tienen esta espiritualidad y religiosidad
desde la colonización. Hoy en día, las tradiciones religiosas y espirituales tienen una
importante influencia tanto de la religión católica como de las religiones protestantes, lo
que origina una transformación en la visión e identidad. En este sentido las creencias
ancestrales dejan de tener importancia y se originan conflictos personales sobre lo que
se debe o no creer.

40
La medicina tradicional ha tenido considerables cambios por los mismos procesos
transformadores. La medicina alópata o actual, siendo parte de la ciencia hegemónica
se ha instaurado en todos los espacios médicos estatales. Sin embargo, muchas mujeres
y hombres, en su mayoría de la edad adulta aún conservan estas formas de “sanación”,
confían más en la medicina ancestral que en la actual.

Paralelamente a esto, es Importante mencionar que en esta transmisión de


conocimientos, las abuelas juegan un papel importante, como una condición genérica las
mujeres son encargadas del cuidado de la familia por lo ello, son ellas las que
comúnmente tienen mayor conocimiento sobre las plantas medicinales. Son las abuelas
y bisabuelas quienes trasmiten los conocimientos a sus hijas, quienes más adelante se
encargaran del cuidado de su familia y de la comunidad.

Pero en la actualidad esto ya no sucede así, aunque las abuelas y madres enseñen a
sus descendientes sus conocimientos médicos, las generaciones actuales confían más
en la medicina alópata, por ello y por la poca importancia que se le otorga a la medicina
tradicional en las políticas públicas, los conocimientos médicos naturales se encuentran
actualmente en crisis y decadencia.

41
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Por qué los indígenas aceptaron el catolicismo | Letras Libres:


http://www.letraslibres.com/mexico/por-que-los-indigenas-aceptaron-el-catolicismo
por Federico Navarrete. Publicación 3/5/2017.

44
ANEXOS

Guionistas: Elena García Ortega


Donají Quintas Arista
Título del documental: Emilia

Objetivo del documental: Visibilizar la memoria oral de una


generación de mujeres, para entender la forma en cómo viven y ven
el mundo desde su ser mujer.

Sinopsis

Emilia es una mujer que vive en la región Ayuuk, su forma de vida,


está marcada por la historia de sus ancestras y ancestros. De esta
forma, vamos entendiendo como es su visión del mundo, algunas veces
volviendo al pasado y otras veces percibiendo la nostalgia de
tiempos modernos. Esta es la historia de la generación de una
abuela Ayuuk que a través de su memoria nos regala vida.

GUIÓN DOCUMENTAL.

La memoria oral de la visión ayuuk de Emilia (takmä’yëty)

Segundo corte

CORTE A

Fade in
FONDO NEGRO
Aparece una dedicatoria.

EN NEGROS APARECE:
Título: De la memoria a la vida (ayuuk)

1. MAPA REGIÓN AYUUK. ZOOM AL MUNICIPIO SANTIAGO ATITLÁN.


MÚSICA (A)._ El mapa se va desvaneciendo, a medida que
aparezca la siguiente toma.

45
2.- EXT. TOMA DE CERROS, RIOS Y LA COMUNIDAD AGUA DE CAÑA ATITLÁN
.
3.- EXT. DÍA. CAMINO.
Una señora camina hacia la cámara mientras se presenta.
VOZ EN OFF
Me llamo Emilia Ortega Camacho, No
hablo ninguna otra lengua solo el
Ayuuk. Soy ama de casa.

CORTE B

FONDO NEGRO

APARCE EL TITULO:
Feminidad.
(Salud reproductiva, trabajo doméstico, educación)

4.- EXT. DÍA. TOMAS DE EMILIA Y CONTEXTO COMUNIDAD.

Entrevistada 1. Empieza hablar sobre que significa ser mujer o


mujer mixe. Sigue narrando pero con escenas de su persona.
MUSICA (C)
Ser mixe significa vivir en
comunidades, en las montañas, así
nos llaman las personas de fuera,
nos ven como si fuéramos
animalitos, pero no es así, vivimos
aquí porque aquí nacimos. Todos
somos iguales, no hay diferencias,
solo es una forma de vestir y
hablar solo eso.

5.- EXT. DÍA. ENTREVISTADA UNO. Tomas de su cotidianidad

46
Empieza hablar sobre el trabajo doméstico, la salud
reproductiva y acceso a la educación. La música de fondo va
disminuyendo

Para mí, ser mamá es hermoso, tener


a mis hijos me hace sentir feliz,
porque estoy con ellos conviviendo,
platicando, riendo. Tengo 8 hijos,
10 nietos. A mis hijos e hijas las
eduqué enseñándoles a trabajar,
hacer comida, barrer. De esta forma
comenzaron a darse cuenta lo que
querían ya sea estar en la casa o
estudiar, era mi esposo quien
siempre les decía que tenían que
aprender a estudiar y a trabajar en
el campo y en la casa.

6.- EXT. DÍA. ENTREVISTADA UNO. SENTADA


A mí nunca me dijeron como es la
vida en pareja, ni cómo cuidarme.
Hoy en día la idea de planificar a
la familia depende de cada persona,
ya que mucha gente piensa que tener
muchos hijos implica gastos, pero,
están matando vidas, cuanto toman
algún medicamento, por ejemplo hay
mujeres que no tienen muchos hijos
y están enfermas, en cambio yo me
siento bien. Lo mejor sería que no
utilizarán ningún medicamento y
tuvieran hijos hasta dónde Dios les
conceda.

47
Los hombres nunca dicen “yo puedo
cuidar a nuestros hijos” porque
ellos salen a trabajan.

7.- EXT. DIA. COTIDIANIDAD.- Entrevistada 1 VOZ EN OFF.- Tomas


con sus quehaceres cotidianos.
Soy ama de casa, me dedico a
preparar la comida, lavar la ropa,
también cuido pollos para mí eso es
importante porque los vendo, y me
genera ingresos económicos. Siempre
he hecho eso.
Trabajar en la cocina es más fuerte
que el trabajo de un hombre, porque
me tengo que levantar de madrugada
a preparar la comida, para que mi
esposo salga a trabajar. Cuando
termino en la cocina, tengo que
darles de comer a mis animalitos.
mi trabajo es “más o menos”
valorado, pero yo si valoro mi
trabajo porque sé que trabajé todo
el día. Otras personas también
valoran mi trabajo, se refleja
mucho en mis hijos, mucha gente me
dice, “realmente estás cuidando a
tus hijos, ahí lo tienes a pesar de
todo, nunca los abandonas”. Pero
también dicen, el hombre te está
sustentando, no te hace falta nada.

8.-EXT. DÍA. ENTREVISTADA UNO. SENTADA


Me gusta mi trabajo, me siento feliz
con lo que realizo todos los días,
con mis pollitos, tenemos nuestras

48
cosechas, con eso pasamos
tranquilamente la vida, ya me
acostumbre, porque mi forma de vivir
siempre ha sido así, desde que nací
y hasta que empecé a formar mi
propia familia.
Desde que estaba niña me dedicaba a
la cria de pollos, era mi fuente de
ingreso, así me enseño mi mamá,
ahora aunque mi esposo a veces no
trabaja o no tiene dinero yo ya sé
cómo ganar dinero, ya no es
necesario pedirle. Ahorita mi esposo
les dice a nuestros hij@s, “vamos a
sembrar frijoles, a limpiar maíz
para que aprendan. Si aprenden a
trabajar en el campo algún día van
a poder enseñarle a sus esposos,
cuando ellos no sepan trabajar”. Yo
si voy al campo a traer leña y maíz.
Nosotras sabemos que nos hace falta,
si hay nixtamal, si hay que lavar
ropa, barrer, un sinfín de
actividades, es mucho, aunque a
veces no se ve lo que hacemos, no se
refleja nuestro trabajo, por eso a
veces los hombres nos dicen, “yo no
sé qué hiciste”, porque no notan el
trabajo, como sucede con la comida.
Y, es que nuestro trabajo son los
mismos todos los días, con eso te
acuestas y con eso mismo te
levantas.

49
7.- EXT. DIA. COTIDIANIDAD.- Entrevistada 1 VOZ EN OFF.- Tomas con
sus quehaceres cotidianos.

Mi hija está estudiando pero yo no


quiero que trabaje como ama de
casa, no quiero que se queme las
manos haciendo tortillas, mejor que
trabaje de su profesión y gane su
dinero para poder vivir, no quiero
que pase por el mismo camino que yo
pasé, viví en esa circunstancias
porque pagué mi ignorancia, no fui
a la escuela. Cuando los vocales
pasaban de casa en casa para
invitarnos a la escuela, mi mamá
nos escondía. Ella pensaba que
nosotras debíamos aprender
actividades de la casa, porque de
eso va a vivir, mi madre situaba
nuestras vidas a ser “amas de
casa”. En cambio hoy les digo a mis
hijos que salgan, que conozcan, que
se vayan.
Por eso creo que los que estudiaron
no es necesario que trabajen así,
no tendrán ninguna necesidad de
sufrir en la cocina, digo sufrir
porque estamos siempre en el fogón,
día a día, quemándonos.

10.-EXT. DÍA. ENTREVISTADA UNO. SENTADA


Cuando me llegó la menstruación
tuve que hacer mis propias toallas
porque antes no había. Tuve mucha
suerte con mi menstruación porque

50
me llego a los 18 años, por ello le
agradezco mucho a Dios.
Nunca me decían nada de eso, mi
mamá ni en cuenta. La única que me
hablaba era mi abuela Magdalena, me
decía que me cuidara mucho el día
que comenzará a menstruar.
Hoy la vida es muy feliz, hay
muchas campañas sobre el cuidado o
la prevención del embarazo. Antes
no había nada, es más la persona se
ponía feliz si se juntaba con una
niña de 15 años, decían que se
había encontrado una “virgen pura”.
No se daban cuenta que la mandaban
a sufrir.
Yo me junté a los 20 años, no fue
mi decisión, mi mamá fue quien le
dijo a las papás de mi esposo que
su hijo se tenía que juntar
conmigo, no quería juntarme con él,
le tenía miedo porque mi abuela me
decía, el día en que te juntes tu
esposo ya no te dejara salir, puede
ser que te golpee, y le tienes que
obedecer.

CORTE C
MUSICA D- FONDO NEGRO
APARCE EL TITULO:
Espiritualidad
(Mitos, medicina tradicional, mundo sobrenatural)

11.- EXT. DIA. COMUNIDAD

51
Tomas de la comunidad y rio Atitlan, iglesia, y oración con
audios de las mismas escenas y música de fondo.

12.- EXT. DIA. EMILIA. TOMAS A DETALLE.VOZ EN OFF. Entrevistada


numero 1 hablando sobre mitos, medicina tradicional, mundo
sobrenatural. En lo que va narrando la voz no cambia pero la
siguiente escena cambia:
Para mí el ritual no es tan
importante, para mis abuelos y mis
padres estas prácticas eran muy
importantes, ahora no es tan
necesario hacer sacrificios, lo más
importante es ir a rezar en el
campo, en el lugar del trabajo para
agradecer a la madre tierra por las
bendiciones.
Existen dos tipos de cerros, el
cerro santo dónde van los
evangélicos y el cerro sagrado donde
realizan sacrificios, se adora el
koong anääw, y los evangélicos
adoran al Dios. Es una forma de
pedir bendiciones.
En realidad no creo en los nahuales.
Las personas narran de ellos, mis
abuelos me decían, “tenemos nuestros
nahuales, seres que nos cuidan”.
También mis padres desde que era
niña me platicaban de Koonk anääw,
que estaban en las montañas. En la
actualidad, casi nadie lo menciona,
hoy dicen que Dios hizo aparte a los
humanos y aparte los animales. Ya
no sé a quién creer.

52
10.- EXT. DIA. ENTREVISTA._ Los planos a detalle van
difuminándose hasta llegar a la verdadera entrevista, la
entrevistada de Atitlan sentada frente a la entrevistadora.
Algunas veces se difuminara para dar paso a tomas de plantas
medicinales.
Creo que la medicina natural es
mejor que las que se compran. Yo
casi no voy a las clínica, ahorita
he ido porque me dicen que tengo
presión alta, azúcar, pero no me
curan, siempre me dan pastillas,
siempre, cada mes que voy siempre
con lo mismo. Quién sabe si lo cura
o no, nunca lo tomo, ahí están
guardadas. Igual cuando me
aliviaba, todos mis hijos nacieron
en casa, sí, me enfermaba unas dos,
tres, hasta cuatro días, me
aguantaba el dolor día y noche, a
veces llegaba la preocupación porque
no había medicamentos, solo estaban
las parteras....no sacaba a mis
hijos insisto no había donde
llevarlos, cuando se enfermaban de
vómito o de diarrea los curaba con
hierba dulce y con raíces, los
hervía y se los daba a mis hijos en
té y los curaba.
Todo esto me lo enseño mi abuela
Gregoria, mi abuela Magdalena. Yo
conozco todas la plantas, curativas,
me encargo de cuidar y curar a mis
hijos, mi esposo no sabe mucho de
eso, antes solo salía a tomar y no
se preocupaba tanto. Mi abuela era

53
la que me sugería como curar a mis
hijas. Ellas sabían todo. Cuando me
enfermo, hasta ahorita ocupo estas
plantas. En cambio mis nietos ya no,
su mamá corren al centro de salud,
al doctor. Cuando yo les digo que
curen a sus hijos con plantas
medicinales, que nosotros así nos
curábamos, ellos se molestan y me
dicen “solo de estas plantas me
hablas, eso ya no sirve”. En las
pláticas los promotores nos dicen
que hay que ir en la clínica”, lo
que provoca la pérdida de las
plantas medicinales. Mis hijos ya no
lo creen por lo mismo porque ya hay
doctores.

CORTE D
FONDO NEGRO

APARCE EL TITULO:
Participación comunitaria
(Tradiciones)

MUSICA (E)
13._ EXT. DIA. COMUNIDAD-RIO.
15.- EXT. DIA. COMUNIDAD FIESTA
Voz en off del anuncio de la fiesta del pueblo, tomas y escenas
de las señoras preparando comida, participando activamente en la
fiesta, la entrevistada ayudando, bailando, se siente la
algarabía de la fiesta.

VOZ EN OFF

54
Entrevistada numero 1 hablando sobre tradiciones y participación
comunitaria.

Vivir en el rancho es muy bonito, en


la ciudad es algo complicado, pero
si saben leer, escribir y tienen un
buen trabajo es bonito, pero si no
considero que es mejor en una
comunidad, se puede criar pollo,
perros, cerdos, trabajar en el
campo, sembrar, limpiar, todo lo que
tenga que ver con el campo. Todos
los conocimientos aprendidos, se
pueden aplicar más en las ciudades.
Mi participación en la comunidad es
a partir de la limpieza en general,
en la fiesta comunitaria participan
más los hombres, pero también mi
participación se percibe en la
elaboración de la comida, yo me
pongo de acuerdo con mis ayudantes,
para ver lo que se va a preparar en
el desayuno. Ellas me ayudan sin
nada a cambio, solo convivimos y si
hay comida eso le damos. No se paga
ni nada.
14.- EXT. DIA. ENTREVISTADA 1._La entrevistada 1 sentada, con
expresión alegre hablando sobre participación.
Dentro de la comunidad mi
participación es muy importante y
primordial, porque vivo en ella y
porque es obedecer a la comunidad.
Todas las mujeres nos reunimos para
trabajar, y eso es bueno. Los
hombres son los que van al tequio,

55
yo solo me encargo de preparar la
comida, cuando se van lejos, por
ejemplo cuando es la apertura de la
colindancia yo me tengo que levantar
a las 3 de la mañana, para que toda
la comida esté lista. De esta forma
ambos participamos en el tequio.
Participo en las asambleas cuando es
aquí nada más. también voy cuando es
la asamblea general, escuchan las
participaciones de mis compañeras,
es aceptable, aunque a veces algunas
dicen incoherencias y otras dicen la
verdad, son escuchadas porque ya
formamos parte de la asamblea,
además se dice que la participación
de la mujer tiene el mismo valor al
de un hombre. Esto comenzó hace 4
o 5 años.
Opino que hombres y mujeres
trabajarían bien, pero considero que
los hombres más, porque a veces las
mujeres no tienen tanto conocimiento
como los hombres.
En este año están participando dos
mujeres como regidoras, las
nombraron y si voté por ellas,
llevamos 2 años trabajando.
A las mujeres las nombran porque sus
esposos están trabajando fuera, de
esta manera cubren a su esposo más
no dan el servicio por ellas mismas,
el servicio es por los dos.
Nosotros participamos en la
comunidad cuando mi esposo fue

56
topil, comité, vocal, regidor, y en
bienes comunales 2 veces, hablo de
ambos porque yo también participo
cuando le doy de comer, no
precisamente tengo que ir a las
oficinas.
Nunca he tenido un cargo político
como tal, a mí sí me gustaría. Las
mujeres dan su servicio en la
escuela, primaria, secundaria, y en
el albergue. Sé que en otras
comunidades como Tlahui hay una
mujer como presidenta, en Zacatepec
esta de presidenta una mujer que es
de esta comunidad Atitlán, se llama
Austreberta.

CORTE E FINAL

MUSICA E cierre
15.- EXT.DIA.CAMINO ATITLAN
La señora alejándose de la cámara, la música de fondo (e)
continua hasta que la imagen va oscureciéndose.
Creo es muy importante que mi hija
estudie, le agradezco mucho a Dios.
Estoy orgullosa de ella y de que
las mujeres estudien.
A veces pienso que si hubiese
estudiado, estaría con mis hijos
aventurándome con ellos, pero no se
pudo y me pone triste.
Ellos son el motivo de mi vida, si
son felices soy feliz, mi vida fue
diferente a las suyas, pero me
resigné a esta vida.

57
FONDO NEGRO
Se escribe en ella una frase final, para dar reflexión sobre el
documental.

16.- CREDITOS.
FIN

ENTREVISTAS

Objetivo General: Recuperar la memoria oral de dos takmä’yëty para visibilizar la visión
femenina Ayuuk.
¿Cómo te llamas?
¿Te gusta tu nombre?
¿Por qué te llamas así?
¿Sabe hablar otra lengua? sí ¿A los cuantos años aprendiste? no ¿Qué piensa de la pérdida
de la lengua?
¿Conoce la historia de Condoy y Tajëw?
¿Podría contármela?
¿Qué significado tiene para usted el Rey condoy?
¿Qué significado tiene para usted Tajëw?
¿Qué otros mitos, cuentos, leyendas o historias de te sabes?

¿Usted les cuenta estas historias a sus hijos u otras personas? ¿Por qué?
¿Participa o participó en la fiesta de la comunidad?
¿Cómo es su participación en las fiestas?
¿Es importante su participación?
¿Cómo se organizan (trabajo, comida, etc)?
¿Qué significado tiene para usted los rituales?
¿Practicas rituales? ¿Por qué?
¿Cuáles?
¿En qué momentos y quien las realiza?
¿Consideras que el cerro sagrado es importante para la vida de la comunidad? si/no ¿porque?
¿Por qué se le llama cerro sagrado?
¿Cuáles son las enfermedades más comunes que se pueden curar con limpias o rituales?
¿Cuándo se enferma como se cura?
¿Quién le enseñó a curarse de esa forma?
¿Actualmente se sigue curando de esa forma? (Si) (No) ¿Por qué?
¿Les enseña estas prácticas a otras personas?
¿Qué piensa de la medicina occidental?

58
¿Crees en los nahuales?
¿Qué significado tienen para usted los nahuales?
¿A qué te dedicas?
¿Te gusta lo que haces? Si/no ¿Por qué?
¿Crees que la mujer solo se debe dedicar al trabajo en casa?
¿Consideras que lo que realizas durante el día es un trabajo?
¿En tu familia valoran lo que realizas?
¿Quién más valora el trabajo que realizas?
¿El trabajo que realizas tiene el mismo valor al trabajo que realiza un hombre?
¿Qué piensas del tequio o trabajo colaborativo?
¿Participas en los tequios? Sí ¿Cómo? No ¿Por qué?
¿Qué piensas de la vida de las mujeres y hombres dentro de la comunidad hoy en día?
¿Participas en las asambleas comunitarias? si
¿La asamblea toma en cuenta su participación? (Si) (No) ¿porque?
¿Qué participaciones has tenido o tienes dentro de la comunidad (social, político, cultural)?
¿Has tenido algún cargo político dentro de la comunidad?
¿Le gustaría tener un cargo o haberlo tenido?
¿Conoce a una mujer que haya tomado un cargo en la agencia o en otros espacios dentro de tu
comunidad o en la región Ayuuk? ¿Qué piensas sobre eso?
¿Para usted, su participación dentro de la comunidad es importante? ¿Por qué?

¿Consideras que tu participación es igual a la de un hombre?


¿Qué grado de estudios tienes?
¿Qué te decía tu familia acerca de estudiar?
¿Te hubiera gustado estudiar o seguir estudiando?
¿Qué piensas que la mujer asista a la escuela?
¿Qué significa para usted ser mujer ayuuk?
¿Qué significa para usted ser mamá?
¿Siempre quiso ser mamá?
¿Usted decidió tener hijos?
¿Cuántos hijos tienes?
¿Cómo tuvo a sus hijos?
¿Cómo educas a tus hijos?
¿Qué significa ser abuela?
Qué te decía tu familia acerca de: casarte, ser mujer, tener relaciones sexuales, planificar tu
familia

Tii mxëëw?
Mtsëjkyëp mxëëjë?
Tiko tuun xëëw ajtmpä?
Mtëk jajtypy winkpë ayuuk xkäjpxëtya? Nääk nëty mjëmët ko ojts xtukjäty? Wi’ix mij m’ok
jënäny ko tyam ta n’aawn n’ayuukëm ta kyotëkonyë?

59
Mnäjajëp ta’a käjpxy matyäkyë tapë kontoy ëts tajëwë?
Oyts waan xtukmëmätyäkëtya?
Tii nyëkëjy mëët mijts ja’a wintsën kontoy?
Tii nyëkëjy mëët mijts ja’a tajëëw?
Tii winpë jä’ä kajpxy matyäkyë mnäjäwëp, ok winpë jä’ä äp mätyäkyë?
Ëts mijts mtëkmëmatyakpyë tyäpë kajpxy matyäkyë tyäpë äp mätyäkyë yë m’uunk m’anäkë
ëts wink jäyë?
Ko xëë tyunyë mtimpy tijë, mnëjxp putëkëpë?
Tii tu’un mtiimpy ok mo mputëkë?
Kopkpëkyë mtunk jaa xwotyë?
Wiix mnätyëknëpëkëytë ja’a tu’un anämkë?
Tii nyëkëj mëët mijts ko ja’ay kyop mëyo’oytyë?
Mtiimpy tu’unkpë? tikoompë?
Mëtipëty costumbrë mtiimpy?
Wëna xtuntë ëts pën mjanëmatyëp?
Täpë kopk mo jä’äy y’otyën kopkpëky yë’ja mëtpë ja’a nääx kajpnë? tikoompë?
Tiko jä’äy tu’untijmpëtë kopk këjxm ok wä’äts kopk?
Mëtipë ja’a pä’äm ayo’on yäj tsoyëp mëptë ja ä’äy ujts ëts mëtipë mëtpë ja’a tunk kopk?
Ëts mijts ko mpëkyë wiix mnayajk tsëkyëyë?
Pën oj tu’un mtëknëijxëyë ëts tu’un mtsokëty?
Tyämpäät näytu’un m’nayajktsëkyëyë? tikoompë?
Mtëk nëë ijxëpë tyatunkpë tu’unënë winkëtypyë jäyë? pën?
Wiix mijts m’ok jënääny mëtpë täpë tsooy mëtipë yajk jipyën ok mëtipë tsoyëpë yajktëpën?
Mëpëjkypy ko täp ë ntsokëmë?
Mëët mijts tii nyëkëj täätë tsook?
Ëts mijts titu’un mtunkajtypyë?
Mtsëjkpy tii tuun mtimpyë? Tiikopë?
Mijts mwënanpëtuunë ko to’oxytyëkëty tëkotyën jëyë tyuntëty?
Mëtipë ja’a pä’äm ayo’on yäj tsoyëp mëptë ja ä’äy ujts ëts mëtipë mëtpë ja’a tunk kopk?
Taatë mtuunk yajk mëjpëmpë mjënoty mtëkotyë?
Pënëty myëjpëmpy taapë mtuunk?
Taatë tuunk mëtipe mijts mtimpyën tëknäxyë mëtë jëtyëktunënë?
Wiix mijts m’ok jënääny mëtpë täpë komuny tyunën?
Mkomuny tyumpë? Wiix? Tikoompë?
Wiix mijts m'ëkjënaty ok x'ëkwënmay ja'a jykyajtën ja'a jëtyëjk ëts ja'a to'ojxy tyëjk?
Mnëjkxpy ko kajpn juntë tyunyë?
Ja'a kajpn tyimp kuëntë ko mnëjkx juntë ok ko jäp mkajpxy?
Tii tëxtuny mnäxoty mkajpnoty ok tyäm mtym tijë?
Të jë'na mkotunkajtyë ya mkäjpnotyë?
Mtsëjkpyë ëtsëxy ojts mkotunajtyë ok këx mkotunajtyë?
Mijxy y'ajxpyë tuuk toxytyëkë yä mnäxoty mkajpnoty mëtipë të kyotunkajnë ok mo
wintsowëtë ayuuk kajpnoty? Wiix mijts m'ok jënäny ko kyotunkatë ja'a toxtyëjk jayëty?

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Mët mijts ja'a mtunën m'ajkën kopkpëky ya mnäxoty mkäjpnotyë?
Mijts mjënmyapyë tuunë ko m'ääw m'ayuuk, m'tunën m'pëjkën tëk näxy ¨tsowpäjtty ëxtëm
tuuk ja'a jëtyëjk jyajënë?
Moopät të m'ëx peky, moopët m'ëxpëjkën tëjyajkëpxy?
Wiix ijty miajknëmë mëtpë ko n'ëxpëjmëty ëëts toxytyëjkjaay?
Mijts ojts xtsëky ëtsëxy m'ëxpëkyë okëxy m'ëxpëjkatëtyë?
Wiix mijts m'ok jënääny ko toxytyëjk nyëjkxtë ëxpëjpë?
Wiix nyëkëjy o wiix mnayjyawëyë ko n'ayuuktoxtyëjk ajtëmë ok ko yä'ntsënayëmë mujts
kajp noty?
Tii nyëkëjy ko u'unk änääk yajk mëëtajnë ok wiix yënë ko u'unk änääk yajk mëëtajnë ?
Mjënmëpy ity ëts u'unk xmëtätëtyä?
Ko m'u'unk xmëtajnë mijts oj këëm xjënmayë?
M'nakë mu'unk m'anääk?
Mo m'u'unk ojts xpajty?
Wiix m'u'unk xänëmy xkuëntë äty?
Tii nyëkëjy ko jäm 'äp 'ok yajk mëëtajnë ok wiix mnäy jyawëyë??
Wiix ijty miajknëmë ok miajk tuknëmäpy ijtyë ko: wiix ntojtx tyëkajtëm, jëtyëjk n'atsomëty,
jëtyëjk nmët ijmëty, nakywëntëajtëmeëty pën nmëtajtëmë ok kyajk?

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