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QUEVEDO Y LO GROTESCO

Análisis de la obra “Gracias y desgracias del ojo del culo”


Para este ensayo interesa la categoría estética de lo grotesco (o nociones de ella)
en la obra del escritor español del siglo de Oro, Francisco de Quevedo (1580-
1645): “Gracias y desgracias del ojo del culo”, escrita entre 1620 y 1626.
Recomiendo la lectura previa de la obra para una mejor compresión de este
ensayo.
Lo grotesco se concibe como categoría estética por primera vez en el texto
de “Arlequín o la defensa de lo grotesco-cómico” (1761).
Esta categoría, comprende lo real con lo fantástico, la unión de lo alto con lo
bajo, lo natural y lo sobrenatural, lo material y corporal. Representa la ruptura de
los límites y la monstruosidad. La unión de lo humano con lo animal.
En el libro “La cultura popular en la Edad Media y en el Renacimiento”
(1941), se relaciona el “realismo grotesco” con la comicidad de una tradición
popular cuyos vestigios estarían presentes en sus fiestas y ritos carnavalescos. (Bajtín,
1941)
Con las ideas mencionadas, además de algunas que se irán agregando, se
llevará acabo dicho análisis.
A partir del título “Gracias y desgracias del ojo del culo”, así como parte de
la dedicatoria: “Dirigidas a Doña JUANA MUCHA, MONTON DE CARNE, Mujer
gorda por arrobas”, Quevedo ya muestra la denigración del cuerpo físico humano,
además, las imágenes que presenta son hipertrofiadas y hacen referencia a las
consecuencias que se obtienen debido a los abusos de las necesidades naturales
(comer).
Por otra parte, al hacer una detallada descripción del mencionado “ojo del
culo” tal como de los miembros genitales que hay a su alrededor, se alude al
principio de lo “alto y lo bajo”. Ello tiene un sentido topográfico, lo alto
representaría la cabeza; y lo bajo, el trasero, los órganos genitales y el vientre.
Este texto se encuentra rebajado (cerca de la tierra) por el simple hecho de ser un
culo el protagonista de la obra, pero ello no sólo posee un significado negativo,
también es positivo al representar un “nacimiento”, pues se entra en comunión con la
tierra mediante la parte inferior del cuerpo (degradación), en aquellos órganos
donde se da, asimismo, la concepción.
Después de exponer algunos aspectos por los cuales se debe considerar al
ojo del culo por encima de los ojos de la cara, Quevedo al mencionar las acciones
de peer y cagar así como los diferentes usos que se le da a la mierda, demuestra
que el cuerpo grotesco no sirve sólo para satisfacerse así mismo, también, todo lo
que expulsa puede ser para el bien de otras cosas (abono para las plantas), así, el
cuerpo no está aislado. Se encuentra en relación con otros cuerpos y otros seres,
forma un todo (“principio de la vida material y corporal”), además, no es perfecto ni
mucho menos acabado. Por el hecho de expulsar sustancias fuera de sí, se está
abriendo al mundo exterior y con ello traspasa sus propios límites.
Es interesante cómo mediante el orifico que posee el culo (ano) se franquean
los límites del cuerpo. Sin embargo, este suceso no es exclusivo del trasero. Hay un
énfasis en todas las partes del cuerpo que posean orificio: oreja, nariz, boca
abierta, etc. para llevar a cabo la abertura del mundo. Igualmente, mediante
actividades que conlleven el uso de dichas partes del cuerpo, (en este caso cagar y
echarse pedos) atraviesan sus propias fronteras.
“El cuerpo revela su esencia como principio en crecimiento que traspasa sus
propios límites”. Bajtín, (1941, p. 25)

Conclusión
Este texto no sólo realza imágenes desagradables y toscas a pensar, también
después de contemplarlas en su totalidad, da risa. Es decir, las ideas presentadas en
ellas son tan absurdas que lo único que se puede hacer es reírse. Esto es lo que
relacionaba Bajtín con el mencionado realismo grotesco. Aquél a pesar de poseer lo
insólito y desproporcionado, está incluido dentro él la comicidad de lo disparatado.
Esta obra se escribió antes de tener a lo grotesco como categoría formal en
el arte, sin embargo, Quevedo tuvo muy buenas nociones de ello al transformar un
tema tan poco hablado en algo jocoso y ameno.

Bibliografía
Bajtin, M. M., Forcat, J., & Conroy, C. (1974). La cultura popular en la Edad Media y
Renacimiento. Barcelona: Barral.

De Quevedo, Francisco. (n.d). Gracias y desgracias del ojo del culo. Madrid: Daniel
Lebrato (1996).Padilla. Libros. Editores & Libreros. Obtenido el 09 de junio de 2015, de
http://www.sisabianovenia.com/LoLeido/Ficcion/QuevedoGracias.htm

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