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MARCO TEÓRICO

1. PRUEBAS AFECTIVAS

Se realizan con personas no seleccionadas ni entrenadas, las que constituyen


los denominados jueces afectivos. Los mismos en la mayoría de los casos se
escogen atendiendo a que sean consumidores reales o potenciales del
producto que se evalúa, pudiendo tener en cuenta situaciones económicas,
demográficas, entre otros aspectos. (Manfugás, 2007)

Las pruebas afectivas se emplean en condiciones similares a las que


normalmente se utilizan al consumir el producto, de ahí que puedan llevarse a
cabo en supermercados, escuelas, plazas, etc. (Manfugás, 2007)

Los resultados que de las mismas se obtienen siempre permitirán conocer la


aceptación, rechazo, preferencia o nivel de agrado de uno o varios productos
por lo que es importante que las personas entiendan la necesidad de emitir
respuestas lo más reales posibles. (Manfugás, 2007)

El cuestionario a emplear es otro elemento que debe ser analizado con rigor,
para evitar que este introduzca errores en los resultados obtenidos. El mismo
no debe ser muy extenso para evitar fatiga en los jueces o rechazo a realizar la
prueba, además debe ser fácil de responder, redactarse de manera clara con
preguntas de fácil comprensión y con impresión legible. (Manfugás, 2007)

1.1. Pruebas de preferencia.


Se trata de conocer si el juez prefiere una muestra sobre otra. Se presentan
dos muestras y se le pregunta al juez cual prefiere. Se incluye en el
cuestionario un apartado de observaciones para que el juez explique, si lo
desea, en que basa su elección. Los resultados se evalúan mediante tablas de
significación estadística. (CSIC-UAM-CIAL, 2011)

1.2. Pruebas de grado de satisfacción.


Se aplican cuando el número de muestras es mayor que 2 o cuando se desea
obtener mayor información sobre el producto. Se utilizan escalas hedónicas
(miden sensaciones agradables y desagradables) que pueden ser verbales
o gráficas. (CSIC-UAM-CIAL, 2011)

1.2.1. Escalas hedónicas verbales. Los jueces describen la sensación que les
produce la muestra entre las posibilidades que se le ofrecen en la escala.
La escala más simple es de los tres puntos: Me gusta, ni me gusta ni me
disgusta, me disgusta. La más empleada es la de nueve puntos que se
puntúa (sin que la puntuación aparezca en el cuestionario) de la siguiente
manera:
1.2.2. Escalas hedónicas gráficas. La descripción verbal se sustituye por la
elección que los jueces realizan para cada muestra en una escala gráfica
(caritas, fotografías) con puntuaciones equivalentes a las de la escala
verbal.

Los valores numéricos obtenidos por el total de los jueces para cada muestra
pueden ser tratados como si se tratase de una dimensión física y representada
gráficamente o sometidos a análisis estadístico (análisis de la varianza, análisis
de regresión, etc.). (CSIC-UAM-CIAL, 2011)

1.3. Pruebas de aceptación.


Mide el deseo de una persona de adquirir un producto, además de su
preferencia por él y su grado de satisfacción. Se realizan mediante
cuestionarios complejos que contienen preguntas sobre el nivel socio-
económico cultural del juez, además de la pregunta sobre su disposición a
adquirir el producto evaluado. (CSIC-UAM-CIAL, 2011)

BIBLIOGRAFIA

CSIC-UAM-CIAL. (2011). CURSO DE ANÁLISIS SENSORIAL DE ALIMENTOS. Recuperado el 25 de


noviembre de 2017, de DIGITAL.CSIC:
http://digital.csic.es/bitstream/10261/63961/1/358508.pdf.

Manfugás, J. E. (2007). Evaluación Sensorial de los Alimentos. (R. G. Morales, Ed.) La Habana,
Cuba: Universitaria.

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