Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
com
Sitio oficial
Me referiré a “la gran misión” que nos encargó Cristo, según los cuatro
Evangelios.
Mi idea no es hacer un estudio extenso, pero sí quisiera subrayar los
aspectos esenciales, de acuerdo con la carga profética que el Señor
puso en mi corazón.
Evangelio de Mateo
Y si nosotros vamos a algún lugar con la idea de plantar una iglesia tal
vez tengamos una visión distorsionada de lo que ella es (por ejemplo,
pensar en conseguir un salón, un terreno, construir un edificio, alquilar un
lugar, poner sonido, micrófonos, púlpito, sillas, teclado, música o un
Evangelio de Marcos
Evangelio de Lucas
Evangelio de Juan
Jesús dice:
“Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador. Todo pámpano que
en mí no lleva fruto, lo quitará; y todo aquel que lleva fruto, lo limpiará,
para que lleve más fruto. Ya vosotros estáis limpios por la palabra que os
he hablado. Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no
puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco
vosotros, si no permanecéis en mí. Yo soy la vid, vosotros los pámpanos;
el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque
separados de mí nada podéis hacer. El que en mí no permanece, será
Y las alegorías continúan: “Así como una rama no puede dar fruto
(uvas) si no está en la parra (porque la rama nació de la parra y fue
creada para estar unida a ella), ustedes tampoco. Ustedes nacieron de
mí, por eso deben permanecer en mí y yo en ustedes. Y si permanecen
en mí llevarán mucho fruto”.
Hay árboles que fueron plantados para dar sombra; otros son muy
bonitos, decorativos, pero no dan fruto. Otros fueron plantados porque
su madera es buena.
Cada uno fue plantado y cultivado para un fin determinado.
“No me eligieron ustedes a mí, sino que yo los elegí a ustedes y los he
puesto, los he plantado en mí (nos escogió en él antes de la fundación
del mundo) para que sean santos y lleven fruto que permanezca”.
Normalmente, los árboles dan fruto una vez al año. Hay algunos, como
los limoneros, que dan en las cuatro estaciones; pero en general dan
nuevos frutos cada año, y en abundancia.