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CASO DE MARBURY

VS MADISON
REFERENCIA:

Uno de los principales hitos del llamado


constitucionalismo que ocurrió en los EE. UU fue el caso
“MARBURY VS MADISON “una verdadera confrontación
jurídica entre los “padres” de los Estados Unidos. Para
entender este hecho debemos saber que el problema
nace cuando William Marbury no recibió su nombramiento
como Juez de paz nombrado por el presidente Adams y
ratificado por el Senado, siendo motivo para realizar
la demanda contra James Madison quien, en su
condición de secretario de Estado era responsable de
enviarle su designación.
ANALISIS:
En el caso de Marbury vs. Madison la Corte
Suprema no solo afianzó el valor de la
Constitución, sino también afirmó su propia
legitimidad y poder (de hecho, al revisar la historia
de diferentes tribunales constitucionales, se
constata que sus decisiones iniciales, o también
las de ruptura, son decisivas para su fortalecer su
legitimidad). En este mismo sentido es que el caso
Marbury, con el paso del tiempo, se ha
consolidado como la “sentencia símbolo” de la
judicial review (o del modelo de “control difuso de
constitucionalidad”), relegando a otras decisiones
más bien lamentables de la Supreme Court (como
la del caso Dred Scott vs. Sandford), en las que
también se declaró la inconstitucionalidad de
normas legales, pero que no abonaron a su
engrandecimiento.
Lo más importante para la historia del
constitucionalismo, es
que, aunque existen antecedentes previos (y
tal vez el Bonham Case, resuelto por el
juez Edward Coke en Inglaterra, en 1610, sea
el más conocido) esta es la primera vez
en que de manera expresa se somete al poder
político –ni más ni menos que a una ley del
Congreso al valor normativo de la
Constitución (Constitución, además, en
sentido moderno: es decir, escrita y dada por
“el pueblo”).
La referencia de hoy al poder normativo de la
Constitución no genera ninguna resistencia, la última
aportación de Marbury a Marbury. Madison que
mencionamos. Ante ello, consideramos necesario llamar
la atención sobre que este valor genuinamente jurídico de
la Constitución es muy reciente en los países de tradición
legis centrista (o de Civil Law) como el nuestro, y que el
asunto resulta todavía más nuevo si nos referimos a la
aplicación efectiva de la norma magna por parte de los
jueces, quienes han sido considerados hasta no hace
mucho como una especie de “poder nulo” frente al poder
político.

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