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El enriquecimiento Ilegítimo.

DERECHO CLÁSICO OTORGÓ


DIVERSAS ACCIONES
1 Condictio indebiti soluti, esta acción se concedía a la persona que había entregado algo a otra pensando
que lo debía (pago de lo indebido), en el caso, por ejemplo, se que pagara cuando la obligación ya se
hubiera cumplido, como si otro hubiera pagado en su nombre, sin su consentimiento.

2 Condictio ob turpem causam, fue la acción para exigir la devolución de algún valor entregado en vista
de una causa deshonrosa para quien lo recibió, por ejemplo, el actor había entregado algo al demandado con
el fin de que no cometiera un delito.

3 Condictio causa data causa non secuta, esta acción servía para pedir la restitución de una cosa
entregada en virtud de un contrato innominado.

4 Condictio sine causa, se relacionaba con aquellas entregas que, aunque justificadas en el momento
mismo en que se efectuaron, posteriormente dieron lugar aun enriquecimiento ilegitimo como, por ejemplo,
si se hubiere constituido dote y el matrimonio no se pudo realizar por existir un impedimento.

5 Condictio furtiva, acción concedida a la víctima de un robo, para que le devuelvan la cosa robada o su
valor.
la Lex Rodhia de Iactu,

Esta ley regulaba el comercio marítimo y disponía que la pérdida


ocasionada por la echazón de mercancías fuera soportada
proporcionalmente por todos los interesados; el armador y los dueños de
las mercancías salvadas debían indemnizar a los propietarios de las
mercaderías que el capitán había ordenado arrojar, considerándose que el
origen de esta obligación era un cuasicontrato.
“DELITOS Y CUASIDELITOS”.
Del latín “delictum”, culpa, crimen, quebrantamiento de la Ley (diccionario de la Real
Academia Española de la Lengua).
Hecho ilícito castigado por la Ley; todo acto ilícito que es castigado con una pena
(Bonfante).

Lesión de bienes jurídicos ajenos, que por ministerio de Ley producen para el ofendido
el derecho a una sanción de tipo penal o al resarcimiento de los daños (Hors-Kumkel).

Los delitos se consideraban como actos contrarios al Derecho, que por provocar un
daño, eran castigados con una pena y con la obligación de reparar el perjuicio
ocasionado a la víctima.
 LAS LEYES
La sanctio consistente en la sanción o pena por violar la parte dispositiva de la
ley, constituía uno de los elementos que componían a las leyes rogatae, junto
con la praescriptio, consistente en la mención del magistrado que la había
propuesto a la asamblea de ciudadanos, y la rogatio que era el contenido
dispositivo de la
norma.
Si falta la sanctio, hablamos de una ley imperfecta; si la sanción consiste en un
castigo al transgresor, quedando intacto el resultado del acto violatorio, la lex
es minus quam perfecta (menos que perfecta) y si la sanción consiste en la
anulación del acto violatorio, se trata de una lex perfecta; como esta
terminología no se deriva del corpus iuris, nada se opone a que una ley cuya
sanctio combinaría el castigo del transgresor con la anulación de los resultados
del acto respectivo, se califique de lex plus quam perfecta (más que perfecta).
Los romanos distinguían desde sus primeros siglos dos
tipos de ilícitos: públicos y privados, según se trate
respectivamente de actos que ofendan al estado o a un
particular; los primeros castigados con pena pública
corporal o pecuniaria, reciben el nombre de “crimina”,
los segundos castigados con pena privada pecuniaria se
conocen bajo la denominación de “delicta o maleficia”.
 DELITOS PRIVADOS

Los delitos privados son los que causaban un daño particular y


solo indirectamente provocaban una perturbación social, se
perseguían a iniciativa de la víctima y daban lugar a una multa
privada a favor de ella; el Estado no hacía otra cosa que
reglamentar esta iniciativa del particular ofendido, ofreciendo el
camino procesal de la actio correspondiente, no consistían
necesariamente en actos dolosos, sino también culposos.
 Robo (furtum)

A) E1 robo (furtum), estaba configurado por todo acto que implicara un “aprovechamiento
doloso de una cosa, con el fin de obtener una ventaja, robándose la cosa misma, o su uso o
posesión” (paulo), el concepto de robo era muy amplio, abuso de confianza, estafa,
fraude; para que se configurara el delito de robo debían concurrir 2 elementos:
1 El carácter objetivo, el aprovechamiento ilegal.
2 El carácter subjetivo, la intención dolosa.
el robo daba lugar a dos acciones:
a) La acción penal, la actio furti, por la cual la víctima lograba la multa privada.
B) La acción rei persecutoria, para recuperar el objeto robado.
B) Daño en propiedad ajena (damnum iniuria datum), el acto realizado por una
persona, con o sin intención, y que ocasionara un perjuicio a otra.
En la Ley de las XII Tablas una ley posterior la Lex Aquilia
Para reparar el daño la actio Legis Aquiliae

C) Lesiones (iniuria), la palabra injuria se empleó en 2 sentidos:

1 sentido amplio, para designar a todo acto contrario a derecho.


2 sentido restringido, que aludía a todo acto que implicara una lesión física o
moral a la persona humana.
 Delitos Privados en el Derecho Honorario.
Rapiña (la vi bona rapta), se entendía un robo cometido con violencia;

Intimidación, violencia o miedo, consistía en un temor establecido por la amenaza de


un mal injusto, inmediato y grave.

Dolo, consiste en una conducta maliciosa y fraudulenta destinada a hacer incurrir a una
persona en el error o en el engaño;

Fraude de acreedores (fraus creditorum), consistía en un acto ilícito por el cual el


deudor buscaba realizar negocios perjudiciales con el propósito de disminuir su
patrimonio o para quedar insolvente, a fin de perjudicar al acreedor;

La violación de una sepultura


 LOS CUASIDELITOS.
Entre los principales cuasidelitos encontramos los siguientes:
Torpeza o deshonestidad judicial (si iudex litem suam fecerit), el juez que hacía suyo el
proceso, es decir, que dolosa o negligentemente dictaba una sentencia injusta, quedaba
obligado a pagar a la parte perjudicada una indemnización.
Effusum et deiectum, el habitante de una casa desde la cual se arrojara algo a la vía pública
ocasionando un daño, respondía por el doble del valor de éste.
Positum et suspensum, era responsable el habitante de una casa que colocara o suspendiera
algún objeto que con su caída pudiera causar un daño, la acción respectiva era una acción
popular y sancionaba un posible daño, ya que no era necesario que el perjuicio se hubiera
producido.
Responsabilidad de navieros, posaderos y dueños de establos (adversus nautas, caupones
stabularii), en caso de daños o robos, aun realizados por sus dependientes, se les obligaba a
pagar una indemnización.

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