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Curso 2023-2024

Prof.: Isabel Muguruza Roca

LITERATURA ESPAÑOLA:
TEXTOS DEL SIGLO DE ORO
TEMA I. TEXTOS NARRATIVOS DEL SIGLO DE ORO
1.2. CERVANTES Y LA REINVENCIÓN DE LA
NOVELA CORTA: LAS NOVELAS EJEMPLARES

Lectura y comentario de Novelas ejemplares


seleccionadas:
 “El amante liberal”
 “El casamiento engañoso”
 “Coloquio de los perros”

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LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
La novella como género europeo
Tres momentos principales en la constitución y desarrollo del género en Europa

Boccaccio, Primer desarrollo del Siglo XVII:


El Decamerón género: siglos XV (finales)- La Novelas ejemplares y
(1354-55) XVI la renovación del género
Precedentes:
- Provenzales: Vidas ITALIA: ESPAÑA
y razós de trovadores Los novellieri Novela cortesana y novela
- Los fablieux (Bandello, Giraldi barroca:
franceses Cinthio, Straparola) Zayas, Castillo Solórzano,
- Facecias y dichos Tirso de Molina, etc.
folclóricos FRANCIA
- Colecciones de - Les cent nouvelles
exempla (cuento
FRANCIA
nouvelles (1486) Scarron (Nouvelles tragi-
oriental) Margarita de Navarra, comiques), Sorel, Mdme.
- Il novelino (siglo L’Heptameron (1558) Lafayette
XIII)
ESPAÑA
- Joan Timoneda, El
Patrañuelo
- Novelas insertas

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LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
La novella como género europeo
CARACTERÍSTICAS BÁSICAS DE LA NOVELA BOCCACCIANA

 1. Brevedad: argumento acelerado, progresivo hacia un punto


culminante o elemento punta (pointe), sin distorsiones retóricas ni narrativas
que no sean necesarias para el avance del argumento hacia ese elemento
punta.
 2. Marco narrativo (cornice): las sucesivas novelas se inscriben en una
narración superior que les sirve de marco y a la que pertenecen los personajes
que las narran (narraciones de segundo grado)
 3. Ejemplaridad y pretensión de veracidad (en relación con el marco
narrativo y más o menos marcada según los casos). Generalmente la
ejemplaridad (o finalidad moral) es solo una máscara para justificar la
escritura (o bien se queda solo en el marco narrativo)

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LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
La novella como género europeo
TRADICIONES MEDIEVALES Y FORMULACIONES DEL MARCO
NARRATIVO O CORNICE
1. El relato de cuentos para prorrogar una sentencia de muerte (Las mil y una
noches, y parte del Sendebar)
2. El maestro que responde con los cuentos a las preguntas que el discípulo le
va haciendo, procedimiento característicamente oriental (parte del Calila e
Dimna; el Disciplina clericalis, y el Conde Lucanor)
3. Relación de cuentos para entretener un viaje o una espera: Cuentos de
Canterbury, Decamerón, Heptamerón; es el modelo principal de la novela
corta boccacciana, tarda en desarrollarse y es más propio de occidente.
4. Variante de la anterior y propia ya del siglo XVII: reunión festiva; la
novelas se presentan como actos de puro entretenimiento en un contexto
festivo o de ocio: María de Zayas, Tirso de Molina (las novelas pueden
formar parte de otras actividades recreativas: comedias, poemas...)

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LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
La novella como género europeo
SOBRE EL TÉMINO NOVELLA / NOVELA
 Diminutivo de nova = ‘novedad’, ‘noticia’
 Origen provenzal: se llamaban novas y novelas las razós de los trovadores (s. XIII)
 Del provenzal pasa a Italia para designar relatos breves en prosa insertos como ejemplos (Francesco
da Barberino, 1318)  Boccaccio, para designar los cuentos del Decamerón (alterna novella y
cuento), y a partir de él se identifica con el género.
 Francia: en pleno uso en el s. XV: Cent nouvelles nouvelles (pero la traducción de Bandello prefiere
histoires)
 Resistencia al uso del término en castellano: carácter peyorativo, ligado a ‘fábula’, ‘mentira’, o bien
a ‘relato licencioso’.
 Usos imprecisos durante el siglo XV  Siervo libre de amor: “Aquí acaba la novela”
 Siglo XVI: aparece con más frecuencia pero sin llegar a designar al género
 Usado como ‘fábula mentirosa’: Gutierre de Cetina : “Digo verdad, no son novelas”
 Como narración oral: Nebrija la define como ‘conseja para contar’ y novelero (‘contador de novelas’)
 Sentido siempre como italianismo  Juan de Valdés, Diálogo de la lengua: “de la lengua italiana deseo
poderme aprovechar para la lengua castellana de estos vocablos: [... novela, novelar [... ]”; “También
cuento es equívoco, porque decimos cuento de lanza y cuento de maravedís y cuento por novela”.

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Decamerón
Las Cient novellas de micer Juan
Bocacio florentino poeta elocuente,
en las cuales se hallarán notables
exemplos y muy elegante estilo
(Valladolid, 1539)

Primera traducción impresa: Sevilla


1496.

En ella se basan las ediciones


posteriores hasta 1559:

Toledo 1524,
Valladolid 1539,
Medina del Campo 1543,
Valladolid 1550)

Decamerón italiano expurgado:


1573

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LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
La novella como género europeo
LA NOVELA ITALIANA EN ESPAÑA: LA IMPORTANCIA DE LAS
TRADUCCIONES
 Straparola de Caravaggio, Giovani Francesco, Le piacevoli notti (Venecia, tomo I,1550
y tomo II, 1553)  Honesto y agradable entretenimiento de damas y galanes
compuesto por el señor Joan Francisco Caruacho (…) y traduzido de lengua toscana
en la nuestra vulgar por Francisco Truchado, Bilbao, 1580 (I), 1583 (II).
 Ludovico Guicciardini, L’hore di recreatione (Amberes, 1568)  Horas de
recreación, trad. Vicente de Millis, Bilbao, 1586;  Primera parte de los ratos de
recreación, trad. Jerónimo de Mondragón, Zaragoza, 1588.
 Giraldi Cinzio, Giambattista, Gli Hecatommithi (Mondovi, 1565)  Primera parte de
las cien novelas, trad. Luis Gaitán de Vozmediano, Toledo, 1590.
 Matteo Bandello, Novelle (4 libros: 1554-1573)  XVIII Histoires tragiques extraictes
des oeuvres italiennes de Bandel, trad. Pierre Boaistuau y Françoise de Belleforest,
1560  Historias trágicas exemplares, trad. Vicente de Millis, Salamanca, 1589.

(Ninguna de la traducciones incorpora en sus títulos el término novela)


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LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
NOVELA: GÉNERO Y VOCABLO EN LOS SIGLOS XVI Y XVII
 Joan Timoneda, El Patrañuelo (Valencia, 1567)
https://www.cervantesvirtual.com/obra/el-patranuelo--0/
Epístola al amantísimo lector
Como la presente obra sea para no más de algún pasatiempo y recreo humano, discreto lector, no
te des a entender que lo que en el presente libro se contiene sea todo verdad, que lo más es fingido
y compuesto de nuestro pobre saber y bajo entendimiento; y, por más aviso, el nombre de él te
manifiesta clara y distintamente lo que puede ser, porque Patrañuelo deriva de patraña, y patraña
no es otra cosa sino una fingida traza, tan lindamente amplificada y compuesta, que parece que
trae alguna apariencia de verdad.
Y así, semejantes marañas las intitula mi lengua natural valenciana rondalles, y la toscana novelas,
que quiere decir: «Tú, trabajador, pues no velas, yo te desvelaré con algunos graciosos y asesados
cuentos, con tal que los sepas contar como aquí van relatados, para que no pierdan aquel asiento
ilustre y gracia con que fueron compuestos.» Vale.

 Timoneda recopilador de materiales ajenos  obras de material folclórico y de la


tradición oral: Sobremesa y alivio de caminantes (1563), Buen aviso o portacuentos
(1564).

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LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
NOVELA: GÉNERO Y VOCABLO EN LOS SIGLOS XVI Y XVII
LAS NOVELAS EJEMPLARES Y LA APUESTA DE CERVANTES
Y así, te digo otra vez, lector amable, que de estas novelas que te ofrezco, en ningún modo podrás hacer pepitoria, porque no
tienen pies, ni cabeza, ni entrañas, ni cosa que les parezca; quiero decir que los requiebros amorosos que en algunas hallarás,
son tan honestos, y tan medidos con la razón y discurso cristiano, que no podrán mover a mal pensamiento al descuidado o
cuidadoso que las leyere.
Heles dado nombre de ejemplares, y si bien lo miras, no hay ninguna de quien no se pueda sacar algún ejemplo provechoso; y si
no fuera por no alargar este sujeto, quizá te mostrara el sabroso y honesto fruto que se podría sacar, así de todas juntas como de
cada una de por sí. Mi intento ha sido poner en la plaza de nuestra república una mesa de trucos, donde cada uno pueda llegar a
entretenerse, sin daño de barras; digo, sin daño del alma ni del cuerpo, porque los ejercicios honestos y agradables antes
aprovechan que dañan. Sí, que no siempre se está en los templos, no siempre se ocupan los oratorios, no siempre se asiste a los
negocios, por calificados que sean. Horas hay de recreación, donde el afligido espíritu descanse. [...]. Una cosa me atreveré a
decirte: que si por algún modo alcanzara que la lección destas novelas pudiera inducir a quien las leyera a algún mal deseo o
pensamiento, antes me cortara la mano con que las escribí que sacarlas en público. Mi edad no está ya para burlarse con la otra
vida, que al cincuenta y cinco de los años gano por nueve más y por la mano.
A esto se aplicó mi ingenio, por aquí me lleva mi inclinación, y más, que me doy a entender, y es así, que yo soy el primero que he
novelado en lengua castellana, que las muchas novelas que en ella andan impresas todas son traducidas de lenguas extranjeras,
y éstas son mías propias, no imitadas ni hurtadas: mi ingenio las engendró, y las parió mi pluma, y van creciendo en los brazos de
la estampa. Tras ellas, si la vida no me deja, te ofrezco los Trabajos de Persiles, libro que se atreve a competir con Heliodoro, si
ya por atrevido no sale con las manos en la cabeza; y primero verás, y con brevedad dilatadas, las hazañas de don Quijote y
donaires de Sancho Panza, y luego las Semanas del jardín. Mucho prometo con fuerzas tan pocas como las mías, pero ¿quién
pondrá rienda a los deseos? Sólo esto quiero que consideres: que, pues yo he tenido osadía de dirigir estas novelas al gran
Conde de Lemos, algún misterio tienen escondido que las levanta.
No más, sino que Dios te guarde y a mí me dé paciencia para llevar bien el mal que han de decir de mí más de cuatro sotiles y
almidonados. Vale.
https://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/novelas-ejemplares--0/html/
LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
NOVELA: GÉNERO Y VOCABLO EN LOS SIGLOS XVI Y XVII

EL GÉNERO Y EL TÉRMINO DESPUÉS DE CERVANTES


 Gonzalo de Céspedes y Meneses, Historias peregrinas y ejemplares (Zaragoza, 1623)
 Lope de Vega: dedicatoria a Marcia Leonarda en “Las fortunas de Diana” (inserta en La
Filomena,1621) (Novelas a Marcia Leonarda): (
https://www.cervantesvirtual.com/obra/las-fortunas-de-diana--0/)
No he dejado de obedecer a vuestra merced por ingratitud, sino por temor de no acertar a servirla;
porque mandarme que escriba una novela ha sido novedad para mí, que aunque es verdad que en el Arcadia y
Peregrino hay alguna parte de este género y estilo, más usado de italianos y franceses que de españoles, con
todo eso, es grande la diferencia y más humilde el modo.
En tiempo menos discreto que el de ahora, aunque de más hombres sabios, llamaban a las novelas
cuentos. Estos se sabían de memoria y nunca, que yo me acuerde, los vi escritos, porque se reducían sus
fábulas a una manera de libros que parecían historias y se llamaban en lenguaje puro castellano caballerías,
como si dijésemos «hechos grandes de caballeros valerosos». Fueron en esto los españoles ingeniosísimos,
porque en la invención ninguna nación del mundo les ha hecho ventaja, como se ve en tantos Esplandianes,
Febos, Palmerines, Lisuartes, Florambelos, Esferamundos y el celebrado Amadís, padre de toda esta máquina
que compuso una dama portuguesa. El Boyardo, el Ariosto y otros siguieron este género, si bien en verso; y
aunque en España también se intenta, por no dejar de intentarlo todo, también hay libros de novelas, de ellas
traducidas de italianos y de ellas propias en que no le faltó gracia y estilo a Miguel Cervantes. Confieso que
son libros de grande entretenimiento y que podrían ser ejemplares, como algunas de las Historias trágicas del
Bandello, pero habían de escribirlos hombres científicos, o por lo menos grandes cortesanos, gente que halla
en los desengaños notables sentencias y aforismos.
Yo, que nunca pensé que el novelar entrara en mi pensamiento, me veo embarazado entre su gusto
de vuestra merced y mi obediencia; pero por no faltar a la obligación y porque no parezca negligencia,
habiendo hallado tantas invenciones para mil comedias, con su buena licencia de los que las escriben, serviré
a vuestra merced con esta, que por lo menos yo sé que no la ha oído, ni es traducida de otra lengua, diciendo
LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
NOVELA: GÉNERO Y VOCABLO EN LOS SIGLOS XVI Y XVII

EL GÉNERO Y EL TÉRMINO DESPUÉS DE CERVANTES


 Lope de Vega, La desdicha por la honra (publicada en La Circe, 1624), dedicatoria a Marcia
Leonarda
[...] en este género de escritura ha de haber una oficina de cuanto se viniere a la pluma, sin
disgusto de los oídos aunque lo sea de los preceptos. Porque ya de cosas altas, ya de humildes, ya
de episodios y paréntesis, ya de historias, ya de fábulas, ya de reprehensiones y ejemplos, ya de
versos y lugares de autores, pienso valerme para que ni sea tan grave el estilo que canse a los que
no saben, ni tan desnudo de algún arte que le remitan al polvo los que entienden. Demás que yo
he pensado que tienen las novelas los mismos preceptos que las comedias, cuyo fin es haber dado
su autor contento y gusto al pueblo, aunque se ahorque el arte; y esto, aunque va dicho al
descuido, fue opinión de Aristóteles.
 María de Zayas, Novelas amorosas y ejemplares (Zaragoza, 1637) [Honesto y entretenido sarao]
A Lisarda su sobrina, y a la hermosa Matilde mandó que después de inventar una airosa máscara
[...] después de haber danzado contasen dos maravillas (que con este nombre quiso desempalagar
al vulgo del de novelas; título tan enfadoso que ya en todas partes le aborrecen).
 María de Zayas, Desengaños amorosos. Segunda parte del sarao y entretenimiento honesto
(Zaragoza, 1647)
 Alonso del Castillo Solórzano, Tardes entretenidas (1625), de seis novelas, y con la tertulia como
motivo generador, Jornadas alegres (1626), con cinco novelas unidas por el viaje; y otras muchas
(Huerta de Valencia, Noches de placer, etc.).
 Salas Barbadillo: Corrección de vicios (1615, Don Diego de Noche (1623), ocho novelas cada una.
LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
SOBRE LA GÉNESIS DE LAS NOVELAS EJEMPALRES
Quijote, II, cap. 3
Una de las tachas que ponen a la tal historia -dijo el bachiller- es que su autor puso en ella una novela
intitulada El Curioso impertinente; no por mala ni por mal razonada, sino por no ser de aquel lugar, ni tiene
que ver con la historia de su merced del señor don Quijote.
Quijote, II, cap. 44
Dicen que en el propio original de esta historia se lee que, llegando Cide Hamete a escribir este capítulo, no
le tradujo su intérprete como él le había escrito, que fue un modo de queja que tuvo el moro de sí mismo,
por haber tomado entre manos una historia tan seca y tan limitada como esta de don Quijote, por parecerle
que siempre había de hablar de él y de Sancho, sin osar extenderse a otras digresiones y episodios más
graves y más entretenidos; y decía que el ir siempre atenido el entendimiento, la mano y la pluma a escribir
de un solo sujeto y hablar por las bocas de pocas personas era un trabajo incomportable, cuyo fruto no
redundaba en el de su autor, y que, por huir de este inconveniente, había usado en la primera parte del
artificio de algunas novelas, como fueron la del Curioso impertinente y la del Capitán cautivo, que están
como separadas de la historia, puesto que las demás que allí se cuentan son casos sucedidos al mismo don
Quijote, que no podían dejar de escribirse. También pensó, como él dice, que muchos, llevados de la
atención que piden las hazañas de don Quijote, no la darían a las novelas, y pasarían por ellas, o con priesa
o con enfado, sin advertir la gala y artificio que en sí contienen, el cual se mostrara bien al descubierto
cuando, por sí solas, sin arrimarse a las locuras de don Quijote ni a las sandeces de Sancho, salieran a luz. Y
así, en esta segunda parte no quiso ingerir novelas sueltas ni pegadizas, sino algunos episodios que lo
pareciesen, nacidos de los mesmos sucesos que la verdad ofrece; y aun éstos, limitadamente y con solas las
palabras que bastan a declararlos; y, pues se contiene y cierra en los estrechos límites de la narración,
teniendo habilidad, suficiencia y entendimiento para tratar del universo todo, pide no se desprecie su
trabajo, y se le den alabanzas, no por lo que escribe, sino por lo que ha dejado de escribir.
Manuscrito Porras de la Cámara (c. 1604): El celosos extremeño (con final distinto) y Rinconete y
Cortadillo
LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
LA ORIGINALIDAD DE LAS NOVELAS EJEMPALRES

Las Novelas ejemplares como fusión original de géneros anteriores


- Rinconete y Cortadillo: entremés de jaques (jácara) y novela picaresca.
- La ilustre fregona: novela picaresca junto a la tradición cortesana y caballeresca.
- El Coloquio de los perros: novela picaresca y diálogo lucianesco.
- El Casamiento engañoso: una facecia hecha novela (novella y folclore); al fundirse con el
Coloquio, al que sirve de marco, intensifica la complejidad genérica.
- Licenciado Vidriera: materiales folclóricos (en forma de anécdotas y chascarrillos) se mezclan con
elementos satírico-filosóficos y con la novela de transformaciones (Apuleyo, El asno de oro); ciertos
elementos del viaje bizantino.
- La española inglesa: novela bizantina de ambientación atlántica (cf. el Persiles).
- El amante liberal: género bizantino en su ámbito natural (el Mediterráneo), ligado a la tradición de
la novela morisca y del relato de cautiverio, ya iniciada con la historia del Capitán cautivo.
- La fuerza de la sangre, Las dos doncellas y La Señora Cornelia: las más cercanas al modelo de la
novela italiana, pero remozado por elementos de la comedia (La fuerza y La señora Cornelia), o
bizantino-caballerescos (Las dos doncellas).
- El celoso extremeño: novella italiana, con elementos bizantinos y de comedia (cf. El viejo celoso).
- La Gitanilla: integra elementos cortesanos, caballerescos, pastoriles, bizantinos y picarescos.
LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
CLASIFICACIÓN DE LAS NOVELAS EJEMPALRES

CLASIFICACIÓN TRADICIONAL
NOVELAS MÁS NOVELAS MÁS
“IDEALISTAS” “REALISTAS”
• La gitanilla • Rinconete y Cortadillo
• El amante liberal • Licenciado Vidriera
• La española inglesa • El celoso extremeño
• La fuerza de la sangre • El casamiento engañoso
• La ilustre fregona • El coloquio de los perros
• Las dos doncellas
• La señora Cornelia

Terminan bien: fiesta, boda, Desenlace ambiguo


reencuentro (no hay auténticas tragedias)
LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
CLASIFICACIÓN DE LAS NOVELAS EJEMPALRES
DIFERENCIAS EN LA CONSTRUCCIÓN DE LOS DOS GRUPOS

GRUPO I: “IDEALISTAS” GRUPO 2: “REALISTAS”


(novelas felices) (desenlaces ambiguos)

- Buen nivel social y económico -Marginales o marginados: pobreza,


- Presencia de la familia vejez, locura...
PERSONAJES - Burguesía adinerada o media - Soledad (la familia no se menciona)
nobleza
-Enredo y complicación en la intriga -Sin enredo, sencillez argumental
ESTILOS (modelos bizantino e italiano) - Estilo más llano
NARRATIVOS - Estilo cortesano y referencias
clásicas
-El amor y el matrimonio -No hay amor
TEMÁTICA - Triunfo del amor - Amor fracasado

Pero con frecuencia hay ironía y ambigüedad y elementos del segundo grupo pueden pasar al
primero: La gitanilla y La ilustre fregona sobre todo
LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
LAS NOVELAS EJEMPALRES DE CERVANTES
EJEMPLARIDAD Y MARCO NARRATIVO
 Ausencia de cornice (ruptura con la convención de la novela italiana)
 Los seguidores de Cervantes reponen el marco: cf. María de Zayas .
 Tirso de Molina, Los cigarrales de Toledo: “También han de seguir mis buenas o malas fortunas, Doce
Novelas, ni hurtadas a las toscanas, ni ensartadas unas tras otras como processión de diciplinantes, sino con su
argumento que lo comprehenda todo”
 El marco narrativo como guía de lectura: los narradores y narratarios internos “orientan” la
lectura  lectura ejemplar y pretensión de veracidad
 Cervantes elimina el marco y “libera” la interpretación del lector
 El problema de la ejemplaridad de las novelas de Cervantes: ¿Son ejemplares? Revisar el
prólogo:
Heles dado nombre de ejemplares, y si bien lo miras, no hay ninguna de quien no se pueda sacar algún ejemplo
provechoso; y si no fuera por no alargar este sujeto, quizá te mostrara el sabroso y honesto fruto que se podría
sacar, así de todas juntas como de cada una de por sí.
 Las “moralejas” en las Novelas ejemplares:
 La española inglesa: “Esta novela nos podría enseñar cuánto puede la virtud, y cuánto la hermosura, pues
son bastantes juntas, y cada una de por sí, a enamorar aun hasta los mismos enemigos; y de cómo sabe el cielo
sacar, de las mayores adversidades nuestras, nuestros mayores provechos”
 Rinconete y Cortadillo: “y así se deja para otra ocasión contar su vida y milagros, con los de su maestro
Monipodio, y otros sucesos de aquellos de la infame academia, que todos serán de grande consideración y que
podrán servir de ejemplo y de aviso a los que las leyeren”.
 El celoso extremeño: “Y yo quedé con el deseo de llegar al fin de este suceso, ejemplo y espejo de lo poco
que hay que fiar de llaves, tornos y paredes cuando queda la voluntad libre [...]”
LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
LAS NOVELAS EJEMPALRES DE CERVANTES

EJEMPLARIDAD Y MARCO NARRATIVO


 El Casamiento engañoso y el Coloquio de los perros como relatos enmarcados
 El Coloquio de los perros como marco (o antimarco)  desenmascaramiento satírico de los
gitanos, las damas, estudiantes, pícaros, pastores, poetas de las anteriores novelas, contrastados
con la “realidad” (desengaño de lo literario):
El Coloquio de los perros [...] sirve a la colección como «marco» y es un desenmascaramiento satírico de los
gitanos, las damas, las mujeres, aristócratas y estudiantes que antes nos fueron presentados bajo un fulgor de
cuento. Este “marco narrativo” contiene, por así decirlo, la solución del enigma, aparta el velo que lo cubría todo
con una luz rosa, transfigurándolo. [...] El Coloquio [...] obtiene su verdadera significación como reanudación de
los temas y motivos de las novelas, a los que repite [...] sobre el duro suelo de la realidad. (Pabst, La novela
corta en la teoría y en la creación literaria: Notas para la historia de su antinomia en las literaturas
románicas, Gredos, 1972)
 El Coloquio de los perros o cómo se hace una novela  la parodia de la novela picaresca
(vs. Guzmán de Alfarache)
 La negación de la novela como “historia”
 Narración vs. moralización

Antonio Rey Hazas, «Género y estructura del Coloquio de los perros, o cómo se hace una novela», en
Deslindes de la novela picaresca, Málaga: Universidad de Málaga. 2003, pp. 377-405.
LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
LAS NOVELAS EJEMPALRES DE CERVANTES

El Casamiento-Coloquio como negación del marco italiano


 Marco pospuesto (no “enmarca”)
 Marco reduplicado (triplicado): mise en abyme  Parodia de la cornice
Marco 1: diálogo Campuzano-Peralta

Marco 2: diálogo Berganza-Cipión

Marco 3: Relato biográfico de Berganza


Relato de la bruja Cañizares

 Teoría de la novela en Cervantes y negación del marco italiano:


 Independencia de lo narrativo frente al discurso moralizante
 Valoración de la ficción en la novela (Poesía y verosimilitud) frente a la Historia (la
Verdad reclamada por los personajes del marco)
LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
El Casamiento-Coloquio y la teoría de la novela de Cervantes

HISTORIA POESÍA
REALIDAD FICCIÓN
VERDAD VEROSIMILITUD

Verdad y ficción en el Coloquio de los perros. .


-Vuesa merced quede mucho en buen hora, señor Campuzano, que hasta aquí estaba en duda si creería o no lo
que de su casamiento me había contado; y esto que ahora me cuenta de que oyó hablar los perros me ha hecho
declarar por la parte de no creelle ninguna cosa. Por amor de Dios, señor alférez, que no cuente estos
disparates a persona alguna, si ya no fuere a quien sea tan su amigo como yo. [...]
-Como vuesa merced -replicó el licenciado- no se canse más en persuadirme que oyó hablar a los perros, de
muy buena gana oiré ese coloquio, que por ser escrito y notado del buen ingenio del señor alférez, ya le juzgo
por bueno.
[...]
El acabar el Coloquio el licenciado y el despertar el alférez fue todo a un tiempo; y el licenciado dijo :
-Aunque este coloquio sea fingido y nunca haya pasado, paréceme que está tan bien compuesto que puede el
señor alférez pasar adelante con el segundo.
-Con ese parecer -respondió el alférez- me animaré y disporné a escribirle, sin ponerme más en disputas con
vuesa merced si hablaron los perros o no.
A lo que dijo el licenciado:
-Señor Alférez, no volvamos más a esa disputa. Yo alcanzo el artificio del Coloquio y la invención, y basta.
LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
LAS NOVELAS DE MARÍA DE ZAYAS
LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
LAS NOVELAS DE MARÍA DE ZAYAS
Lope de Vega, Laurel de Apolo (1630), silva
VIII. Panegírico de Zayas a Lope de Vega

Oh dulces hipocrénides hermosas! Soneto


los espinos pangeos Al segundo Virgilio y Homero español, el doctor
aprisa desnudad, y de las rosas Frey Lope Félix de Vega Carpio
tejed ricas guirnaldas y trofeos Si mi llanto a mi pluma no estorbara,
a la inmortal doña María de Zayas, ¡oh Fénix de la patria, oh nuevo Apolo!,
que sin pasar a Lesbos,ni a las playas de mi lira te hiciera un mausoleo
del vasto mar Egeo, que tu inmortalidad aposentara.
que hoy llora el negro velo de Teseo, Mejor que yo ninguna te alabara,
a Safo gozará Mitilenea que como tú del uno al otro polo
quien ver milagros de mujer desea; el único naciste el sol y él solo,
porque su ingenio, vivamente claro, sólo mi amor por solo te igualara.
es tan único y raro Mas, ¿cómo cantaré cuando te lloro,
que ella sola pudiera, sin esperanza de ningún consuelo,
no sólo pretender la verde rama, o ya ternura sea o sea decoro?
pero sola ser sol de tu ribera, Pues pierden hoy, porque te gane el
y tú por ella conseguir más fama cielo,
que Nápóles por Claudia, por Cornelia Mantua su prenda, España su tesoro,
la sacra Roma y Tebas por Targelia su Dios las Musas y su Vega el suelo.

María de Zayas, en Fama póstuma a la vida y


muerte de Lope Félix de Vega Carpio, recop. Juan
Pérez de Montalbán, 1633 (f. 117r).
Juan de Zabaleta, Día de fiesta por la tarde (1659)
http://parnaseo.uv.es/Lemir/Revista/Revista20/textos/02_Zabaleta_Dia_de_Fiesta.pdf

Acaba de comer la doncella recogida el día sagrado. No ha de salir de casa aquella tarde, no ha de
coger la calle ni aun por la ventana, y toma un libro para entretenerse. ¡Que bueno, si fuese bueno el
libro! Toma uno de comedias: erró la carde. Empieza a leer blandamente. Vase encendiendo en la
comedia, y ella revestida de aquel afecto, va leyendo y representando. Engólfase en una relación en que
hay dos mil boberías de sonido agradable. Enamorase della y determina tomarla de memoria para lucir en
las holguras recias. Llega a un paso tierno en que la dama se despide de su galán, porque su padre la casa
violentamente con otro, y le dice que a él le lleva en el alma, que nada le podrá echar de ella. La doncella
lo lee con el mismo desasimiento que pudiera si la estuviera sucediendo el caso, y le está pareciendo que
si le sucediera fuera razón hacer lo mismo. [...] En los celos toma palabras con que reñirlos cuando los
tenga; desea tenerlos por usar de las palabras. [...] Al cabo aderezan un casamiento todos estos errores y
acábase la comedia. La moza queda doctrinada de amante, de celosa y de fina.
[...]
Acaba de comer el día de fiesta el hombre casado, vase a holgar y deja a su mujer en casa aun más
sola que el día de trabajo, porque en éste la labor la acompaña. No puede trabajar y quiere divertirse:
toma un libro de narraciones amatorias: a esto llaman «novelas». Éntrase en un balcón, que es un
aposento de celosías; siéntase con las espaldas a la calle y abre el libro. Empieza a leer, vuelve de cuando
en cuando a la calle los ojos y revócaselos la dependencia del cuento, porque en esta lectura el principio
hace gana casi incorregible de llegar al fin. No es mal efecto de este libro el apartar los ojos de esta mujer
de la diversidad peligrosa de una calle. Fuera de esto, es lección adornada a largas distancias de
sentencias que hablan con agrado y utilidad a la oreja del corazón. Luego no mueve ni embravece tanto
los afectos como la comedia, porque habla como que cuenta, y no como que padece. Más tiene este libro
de inútil que de útil, pero poco de peligroso. No le doy por malo, pero quisiérale mejor.
23
María de Zayas y Sotomayor
Recepción de su obra por la historia literaria positivista
Pascual de Gayangos, nota 32 a la trad. de George Ticknor, Historia de la literatura
española, t. III,1854 (History of Spanish Literature, 1849):
«Una de las novelas, aunque escrita por una señora de la corte, es de lo más verde e
inmodesto que me acuerdo haber leído nunca en semejantes libros; intitúlase “El
prevenido engañado”, y Scarron se sirvió de ella para su “Precaution inutile”, con muy
ligeras modificaciones»

Ludwing Pfandl, Geschichte der spanischen Nationalliteratur in ihrer Blütezeit, 1929;


trad. Historia de la Literatura nacional española en la Edad de Oro (1933):
«Historias libertinas en las cuales los hombres engañan a porfía a las mujeres y las
mujeres a los hombres en asuntos de amor, de casamiento y de dinero, son las veinte
Novelas amorosas y ejemplares de doña María de Zayas y Sotomayor. [...] El realismo de
Zayas y Sotomayor es extraviado, porque con demasiada frecuencia degenera unas veces
en lo terrible y perverso, otras en obscena liviandad. [...]. Y en cuanto a su distinción
interior y exterior, basta formular una sencilla pregunta: ¿se puede dar algo más ordinario
y grosero, más inestético y repulsivo que una mujer que cuenta historias lascivas, sucias,
de inspiración sádica y moralmente corrompidas? (pp. 369-370)

24
LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
LAS NOVELAS DE MARÍA DE ZAYAS

Al que leyere
Quién duda, Lector mío, que te causará admiración que una mujer tenga despejo, no sólo para
escribir un libro, sino para darle a la estampa, que es el crisol donde se averigua la pureza de los
ingenios. [...] Quién duda, digo otra vez, que habrá muchos que atribuyan a locura esta virtuosa
osadía de sacar a luz mis borrones siendo mujer, que en opinión de algunos necios es lo mismo
que una cosa incapaz. Pero cualquiera, como sea no más de buen cortesano, ni lo tendrá por
novedad ni lo murmurará por desatino, porque si esta materia de que nos componemos los
hombres y las mujeres, ya sea una trabazón de fuego y barro, o ya una masa de espíritus y
terrones, no tiene más nobleza en ellos que en nosotras; si es una misma la sangre, los sentidos,
las potencias, y los órganos por donde se obran sus efetos son unos mismos, la misma alma que
ellos (porque las almas ni son hombres, ni mujeres), ¿qué razón hay para que ellos sean sabios y
presuman que nosotras no podemos serlo?
Esto no tiene, a mi parecer, más respuesta que su impiedad o tiranía en encerrarnos y no
darnos maestros, y así, la verdadera causa de no ser las mujeres doctas no es defeto del caudal,
sino falta de la aplicación. Porque si en nuestra crianza, como nos ponen el cambray en las
almohadillas y los dibujos en el bastidor, nos dieran libros y preceptores, fuéramos tan aptas para
los puestos y para las cátedras como los hombres, y quizá más agudas, por ser de natural más
frío, por consistir en humedad el entendimiento, como se ve en las respuestas de repente y en los
engaños de pensado; que todo lo que se hace con maña, aunque no sea virtud, es ingenio.
[sigue]
Novelas amorosas y ejemplares (1637)
LA NOVELLA EN ESPAÑA Y EL GÉNERO DE LA NOVELA CORTA
LAS NOVELAS DE MARÍA DE ZAYAS

Y cuando no valga esta razón para nuestro crédito, valga la experiencia de las historias, y
veremos por ellas lo que hicieron las mujeres que trataron de buenas letras [y cita a varias] [...].
Y otras infinitas, de la antigüedad y de nuestros tiempos, que paso en silencio, porque ya tendrás
noticia de todo, aunque seas lego y no hayas estudiado, y que después que ay polianteas en latín
y sumas morales en romance, los seglares y las mujeres pueden ser letrados. Pues si esto es
verdad, ¿qué razón hay para que no tengamos prontitud para los libros? Y más si todas tienen mi
inclinación, pues en viendo cualquiera, nuevo o antiguo, dejo la almohadilla y no sosiego hasta
que le paso.
Desta inclinación nació la noticia; de la noticia, el buen gusto, y de todo hacer versos, hasta
escribir estas novelas, o por ser asumpto más fácil o más apetitoso; que muchos libros sin
erudición suelen parecer bien en fe del sujeto, y otros llenos de sutileza se venden, pero no se
compran, porque la materia no es importante o es desabrida. No es menester prevenirte de la
piedad que debes tener, porque si es bueno no harás nada en alabarle, y si es malo, por la parte
de la cortesía que se debe a cualquiera mujer le tendrás respeto. Con mujeres no hay
competencias: quien no las estima es necio, porque las ha menester; y quien las ultraja, ingrato,
pues falta al reconocimiento del hospedaje que le hicieron en la primer jornada. Y así, pues no
has de querer ser descortés, necio villano, ni desagradecido, te ofrezco este libro muy segura de
tu bizarría y en confianza de que, si te desagradare, podrás disculparme con que nací mujer, no
con obligación de hacer buenas novelas, sino con mucho deseo de acertar a servirte. Vale.

“Al que leyere”, Novelas amorosas y ejemplares (1637)


Introducción
Desengaños amorosos

Concedida facultad para ordenarlo [el sarao], se


dispuso desta suerte: en primer lugar, que habían de ser
las damas las que novelasen (y en esto acertó con la
opinión de los hombres, pues siempre tienen a las
mujeres por noveleras), y en segundo, que los que
refiriesen fuesen casos verdaderos y que tuviesen
nombre de desengaños (en esto no sé si los satisfizo,
porque como ellos procuran siempre engañarlas, sienten
mucho se desengañen).

27
María de Zayas: Desengaños amorosos
Discurso de Filis, previo a la narración del desengaño IV:
“Tarde llega el desengaño”
Demás desto, como los hombres, con el imperio que Naturaleza les otorgó en serlo, temerosos quizá de
que las mujeres no se les quiten, pues no hay duda que si no se dieran tanto a la compostura, afeminándose
más que Naturaleza las afeminó, y como en lugar de aplicarse a jugar las armas y a estudiar las ciencias,
estudian en criar el cabello y matizar el rostro, ya pudiera ser que pasaran en todo a los hombres. Luego el
culparlas de fáciles y de poco valor y menos provecho es por que no se les alcen con la potestad. Y así, en
empezando a tener discurso las niñas pónenlas a labrar y hacer vainillas, y si las enseñan a leer es por
milagro, que hay padre que tiene por caso de menos valer que sepan leer y escribir sus hijas, dando por
causa que de saberlo son malas, como si no hubiera muchas más que no lo saben y lo son. Y ésta es natural
envidia y temor que tienen de que los han de pasar en todo. ¡Bueno fuera que si una mujer ciñera espada
sufriera que la agraviara un hombre en ninguna ocasión! ¡Harta gracia fuera que si una mujer profesara las
letras no se opusiera con los hombres tanto a las dudas como a los puestos! Según esto, temor es el
abatirlas y obligarlas a que ejerzan las cosas caseras.
[Sigue el repertorio de mujeres destacadas por su saber y entendimiento: actuales, no del pasado] [...]

Puédese creer que si como a estas que estudiaron les concedió el Cielo tan divinos entendimientos, si todas
hicieran lo mismo, unas más y otras menos, todas supieran y fueran famosas. De manera que no voy fuera
de camino en que los hombres, de temor y envidia, las privan de las letras y las armas, como hacen los
moros a los cristianos que han de servir donde hay mujeres, que los hacen eunucos por estar seguros
dellos. ¡Ah damas hermosas, y qué os pudiera decir, si supiera que como soy oída no había de ser
mormurada! ¡Ea! Dejemos las galas, rosas y rizos, y volvamos por nosotras, unas con el entendimiento y
otras con las armas, y será el mejor desengaño para las que hoy son y las que han de venir

28
Desengaños amorosos

Y en las partes que se hallaba [don Martín] contaba


el suceso que habéis oído, de la misma manera que
yo le he dicho, donde con él queda bien claramente
probada la opinión de que en lo que toca a crueldad
son los hombres terribles, pues ella misma los
arrastra de manera que no aguardan a segunda
información. Y se ve asimismo que hay mujeres que
padecen inocentes, pues no todas han de ser
culpadas, como en la común opinión lo son. Vean
ahora las damas si es buen desengaño considerar
que si las que no ofenden pagan como pagó Elena,
¿qué harán las que siguiendo sus locos devaneos,
no sólo dan lugar al castigo, mas son causa de que
infaman a todas, no mereciéndolo todas? Y es bien
mirar que en la era que corre estamos en tan
adversa opinión con los hombres, que ni con el
sufrimiento los vencemos ni con la inocencia los
obligamos.
(Desengaño IV: “Tarde llega el desengaño”, 254-
255)

29
Desengaños amorosos Decadencia y
afeminamiento

¿De qué pensáis que procede el poco ánimo que hoy todos tenéis, que sufrís
que estén los enemigos dentro de España, y nuestro Rey en campaña, y vosotros en el
Prado y en el río, llenos de galas y trajes femeniles, y los pocos que le acompañan,
suspirando por las ollas de Egipto? De la poca estimación que hacéis de las mujeres;
que a fe que si las estimarais y amárades como en otros tiempos se hacía, por no
verlas en poder de vuestros enemigos vosotros mismos os ofreciérades, no digo yo a la
guerra y a pelear, sino a la muerte, poniendo la garganta al cuchillo, como en otros
tiempos, y en particular en el del rey don Fernando el Católico [...].
¿Es posible que nos veis ya casi en poder de los contrarios, pues desde donde están
adonde estamos no hay más defensa que vuestros heroicos corazones y valerosos
brazos, y que no os corréis de estaros en la Corte ajando galas y criando cabellos,
hollando coches y paseando Prados, y que en lugar de defendernos nos quitéis la
opinión y el honor contando cuentos que os suceden con damas (que creo que son más
invenciones de malicia que verdades), alabándoos de cosas que es imposible sea
verdad que lo puedan hacer ni aun las públicas rameras, sólo por llevar al cabo vuestra
dañada intención, todos efectos de la ociosidad en que gastáis el tiempo en ofensa de
Dios y de vuestra nobleza? ¡Que esto hagan pechos españoles! ¡Que esto sufran
ánimos castellanos! Bien dice un héroe bien entendido que los franceses os han
hurtado el valor, y vosotros a ellos los trajes. Estimad y honrad a las mujeres y veréis
cómo resucita en vosotros el valor perdido.

30
“La inocencia
Desengaño quinto
castigada”

pasados los tres días vino y le trajo una imagen de la misma figura y
[...]
rostro de doña Inés, que por sus artes la había copiado al natural, como si
la tuviera presente. Tenía en el remate del tocado una vela, de la medida
y proporción de una bujía de un cuarterón, de cera verde. La figura de
doña Inés estaba desnuda, y las manos puestas sobre el corazón, que
tenía descubierto, clavado por él un alfiler grande, dorado, a modo de
saeta, porque en lugar de la cabeza tenía una forma de plumas del mismo
metal, y parecía que la dama quería sacarle con las manos, que tenía
encaminadas a él.
Díjole el moro que en estando solo pusiese aquella figura sobre un bufete
y que encendiese la vela que estaba sobre la cabeza, que sin falta
ninguna vendría luego la dama, y que estaría el tiempo que él quisiese,
mientras él no le dijese que se fuese. Y que cuando la enviase no matase
la vela, que en estando la dama en su casa ella se moriría por si misma;
que si la mataba antes que ella se apagase correría riesgo la vida de la
dama; y asimismo que no tuviese miedo de que la vela se acabase,
aunque ardiese un año entero, porque estaba formada por tal arte que
duraría eternamente, mientras que en la noche del Bautista no la echase
en una hoguera bien encendida.
31
“La inocencia
Desengaño quinto
castigada”

En un aposento, el último de toda la casa (donde, aunque hubiese gente


de servicio, ninguno tuviese modo ni ocasión de entrar en él) en el hueco de una
chiminea que allí había [...], habiendo traído yeso y cascotes y lo demás que era
menester, pusieron a la pobre y desdichada doña Inés, no dejándole más lugar que
cuanto pudiese estar en pie; porque si se quería sentar no podía sino, como
ordinariamente se dice, en cuclillas, y la tabicaron, dejando sólo una ventanilla
como medio pliego de papel, por donde respirase y le pudiesen dar una miserable
comida por que no muriese tan presto, sin que sus lágrimas ni protestas los
enterneciese. Hecho esto, cerraron el aposento, y la llave la tenía la mala y cruel
cuñada, y ella misma le iba a dar la comida y un jarro de agua [...].
Aquí estuvo doña Inés seis años [...], pasando lo que imaginar se puede,
supuesto que he dicho de la manera que estaba, y que las inmundicias y basura
que de su cuerpo echaba le servían de cama y estrado para sus pies, siempre
llorando y pidiendo a Dios la aliviase de tan penoso martirio, sin que en todos ellos
viese luz ni recostase su triste cuerpo, ajena y apartada de las gentes, tiranizada a
los divinos Sacramentos y a oír misa, padeciendo más que los que martirizan los
tiranos, sin que ninguno de sus tres verdugos tuviese piedad de ella ni se
enterneciese de ella; antes la traidora cuñada, cada vez que la llevaba la comida le
decía mil oprobios y afrentas).

32
“La inocencia
Desengaño quinto
castigada”

Aquí entra ahora la piedad, porque cuando la encerraron allí no


tenía más de veinte y cuatro años, y seis que había estado eran treinta,
que era la flor de su edad.
En primer lugar, aunque tenía los ojos claros, estaba ciega, o de
la obscuridad (porque es cosa asentada que si una persona estuviese
mucho tiempo sin ver luz, cegaría), o fuese de esto, o de llorar, ella no
tenía vista. Sus hermosos cabellos, que cuando entró allí eran como
hebras de oro, blancos como la misma nieve, enredados y llenos de
animalejos que de no peinarlos se crían, en tanta cantidad que por encima
hervoneaban; el color, de la color de la muerte; tan flaca y consumida que
se le señalaban los huesos, como si el pellejo que estaba encima fuera un
delgado cendal; desde los ojos hasta la barba, dos surcos cavados de las
lágrimas, que se le escondía en ellos un bramante grueso; los vestidos,
hechos ceniza, que se le veían las más partes de su cuerpo; descalza de
pie y pierna, que de los escrementos de su cuerpo, como no tenía dónde
echarlos, no sólo se habían consumido, mas la propia carne comida hasta
los muslos de llagas y gusanos, de que estaba lleno el hediondo lugar. No
hay más que decir sino que causó a todos tanta lástima que lloraban como
si fuera hija de cada uno.
33
“Estragos que cusa el
Desengaño décimo
vicio”
Que llegados a ella, abrieron el cerrojo que Florentina había dicho, y
entrando todos dentro, lo primero que hallaron fue, a la puerta de un aposento que
estaba al pie de la escalera, dos pajes, en camisa, dados de puñaladas, y subiendo
por la escalera, una esclava blanca, herrada en el rostro, a la misma entrada de un
corredor, de la misma suerte que los pajes, y una doncella sentada en el corredor,
atravesada de una estocada hasta las espaldas (que aunque estaba muerta no había
tenido lugar de caer, como estaba arrimada a la pared); junto a ésta estaba una
hacha caída, como que a ella misma se le había caído de la mano. Más adelante, a
la entrada de la antesala, estaba don Dionís atravesado en su misma espada, que
toda ella le salía por las espaldas, y él caído boca abajo, pegado el pecho con la
guarnición, que bien se conocía haberse arrojado sobre ella desesperado de la vida y
aborrecido de su misma alma. En un aposento que estaba en el mismo corredor,
correspondiente a una cocina, estaban tres esclavas, una blanca y dos negras; la
blanca en el suelo, en camisa, en la mitad del aposento, y las negras en la cama,
también muertas a estocadas.
Entrando más adentro, en la puerta de una cuadra, medio cuerpo fuera y
medio dentro, estaba un mozo de hasta veinte años, de muy buena presencia y cara,
pasado de una estocada. Éste estaba en camisa, cubierta una capa, y en los
descalzos pies una chinelas. En la misma cuadra, donde estaba la cama, echada en
ella doña Madalena, también muerta de crueles heridas, mas con tanta hermosura
que parecía una estatua de marfil salpicada de rosicler. En otro aposento, detrás
desta cuadra, otras dos doncellas, en la cama, también muertas, como las demás.
Finalmente, en la casa no había cosa viva.
34
Bandello-Lope
Bandello, Novelle, IV, 25 La viuda valenciana
Rimase il giovane con mille pensieri ne la CAMILO
mente, tutto confuso, e non sapeva imaginarsi Y ¿qué sé yo si pensando
ciò che fare si devesse in cotale caso, dicendo ¿Qué sé yo si algún contrario, que abrazo algún ángel bello,
tra sé: de invidia de verme noble, a un demonio enlazo el cuello
me forja este trato doble, que ascuras anda volando
– Che so io che alcuno mio nemico non sia, che
donde sea necesario porque es indigno de vello?
sotto questa ésca non abbia posto il veleno e mi
el sufrir espada o roble? [...] ¿O que fuese alguna vieja,
voglia farmi condurre come uno semplice
Mas yo jamás he entendido ya sin pestaña ni ceja,
castrone al macello? Ma io, che mi sappia, non
que haya hecho a hombre ofensa. con unos dientes postizos,
ho nemico veruno, non avendo mai offesa
Mal mi entendimiento piensa, que me hiciese con hechizos
persona né grande né picciola. Io non posso
que el que a ninguno ha ofendido andar como simple oveja?
imaginarmi chi possa essere colui che debbia
bien camina sin defensa. ¿O fuese
bramare il sangue mio. E chi meco ha parlato,
Y más que aquel que me ha alguna cuitada,
mi ha detto che io, se voglio, posso andare
dado herida de mal francés,
bene armato. Ancora che io di armi sia fornito,
las nuevas de este cuidado que me hiciese andar después,
se sarò incappucciato, come potrò vedere chi
me ha dicho que armarme puedo; por un hora de posada,
mi vorrá offendere? Chi udí mai piú una tale
pero fue por darme miedo, muerto dos años o tres?
novella, che una donna fusse ardentemente
que anda siempre el miedoarmado.
innamorata di uno e non volesse essere da lui
Pero aunque vaya cual voy, (Acto II, vv. 1031-1075)
veduta? Che so io, se pensando abbracciar una
¿de qué peligro me escapa,
delicata e morbida giovane, non mi ritrovi in
si al fin los ojos me tapa?
braccio di alcuna poltrona e male netta
Que, pues sin ojos estoy,
meretrice, che del corpo suo, prodiga, abbia
bien puede echarme la capa.
indifferentemente fatto copia a quanti
¿Quién oyó jamás tal cosa,
mascalzoni e facchini ci sono in la cittá? Potria
que una mujer tan hermosa,
anco essere alcuna piena di male francese, che
que tanto a un hombre desea,
mi desse la sua livvrea e tenermi storpiato tutta
no permita que la vea?
la vita mia, onde io non sarei mai piú uomo.
¡Qué fama tan vergonzosa!

35
La viuda valenciana. Acto II “Tarde llega el desengaño”
CAMILO
No había pájaro de estos
que de noche vuelan solos,
cuyos ojos no envidiase, Con esto me desvendó los ojos,
por ver lo que a tiento adoro. aunque fue como si no lo hiciera,
Hela cobrado afición,
porque todo estaba a escuras. Yo,
sin ver más que lo que toco
de tacto, como los ciegos,
agradeciéndole tan soberanos favores,
que es peregrino negocio. con el atrevimiento de estar solos y sin
(vv. 1805-18012) luz empecé a procurar por el tiento a
CAMILO conocer lo que la vista no podía,
Pues yo la toco sin vella. brujuleando partes tan realzadas que
LEONARDA la juzgué en mi imaginación por
Sin duda os tengo por loco.
alguna deidad.
CAMILO
Sí, pues a escuras la toco,
y me he enamorado de ella. [...]
LEONARDA
Si la viésedes, yo os juro
que os trocase el desengaño.
CAMILO
Bien puedo estar de ese daño
por muchas causas seguro;
que con las manos la tiento,
y la frente es estremada
la nariz perficionada [...] (vv. 1881-1907)

36
La viuda valenciana. Acto II “Tarde llega el desengaño”
LEONARDA
Joyas os daré en valor
de dos mil ducados.
CAMILO
Hasta dada la una estuve con ella
¿Buenas?
LEONARDA gozando regaladísimos favores, cuantos
¡Hola! Dame esas cadenas la ocasión daba lugar, y ya que le pareció
y ese brinco, dios de amor, hora, habiéndome dado un bolsillo
dame... grande y con buen bulto (pues estaba tan
CAMILO lleno que apenas se podía cerrar), se
¡Paso! No pidáis despidió de mí con amorosos
eso, que me dais enojos.
sentimientos, [...]. Llegué, en yéndose el
Más quisiera vuestros ojos
que cuantas joyas me dais. criado, a mi posada, y hallando en ella ya
Diéradesme esos zafiros [...] acostados y durmiendo a mis camaradas,
También hay oro en mi casa. me retiré a mi aposento, y haciéndome
Gracias a Dios, no soy pobre. millares de cruces del suceso que por mí
LEONARDA pasaba, abrí el bolsillo, y había en él una
Deseo que más os sobre cadena, de peso de docientos escudos
que de Oriente a España pasa.
de oro, cuatro sortijas de diamantes y
Pero por señal de amor,
esta sortija tomad, cien doblones de a cuatro.
que en vos tendrá calidad.
CAMILO
Y esta en vos tendrá valor.
Servíos de que en mi nombre
la traiga esa blanca mano. (vv. 1418-
1438) 37
La viuda valenciana. “Tarde llega el desengaño”

—¿Es posible, amigo, que no hemos de


FLORO saber esta casa dónde es, siquiera para
¿No puedes llevar un yeso seguridad de vuestra vida?
Con que la puerta señales?
—Dudoso lo hallo —dije yo—, por el modo
CAMILO
con que me llevan.
Tiene el hombre industrias tales
Que me hace perder el seso —No muy dudoso —dijo don Baltasar—,
Fuera de la puerta estoy pues se puede llevar una esponja
Y dice que estoy en casa empapada en sangre, y ésta acomodada
en un vaso, y haciendo con ella al entrar o
salir una señal en la puerta, será fácil otro
día que hallemos por ella la casa.
(Acto II, vv. 1837-1842)
En fin, para abreviar, aquella misma noche
llevé la esponja y señalé la puerta, y otro
día don Baltasar y yo no dejamos en toda
la ciudad calle ni plaza, rincón ni callejuela
que no buscamos

38
TEMA III. TEXTOS POÉTICOS
DEL SIGLO DE ORO
La poesía lírica del Renacimiento al Barroco. Comentario de textos poéticos de los
siglos XVI y XVII (Garcilaso, Medrano, Lope de Vega, Góngora, Quevedo...)

39
Gracián, Agudeza y arte de ingenio
 Consiste, pues, este artificio conceptuoso, en una primorosa
concordancia, en una armónica correlación entre dos o tres
cognoscibles extremos [objetos de conocimiento distantes entre sí],
expresada por un acto del entendimiento. (Discurso II)
 De suerte que se puede definir el concepto: Es un acto del
entendimiento, que exprime la correspondencia que se halla entre los
objetos.
 Tipos de agudeza (Discurso III):
 Agudeza de perspicacia
 Agudeza de artificio:

Agudeza de concepto Agudeza de correspondencia y conformidad Agudeza pura


Agudeza de palabra Agudeza de contrariedad o discordancia Agudeza mixta
Agudeza de acción

40
LA POESÍA LÍRICA DEL SIGLO DE ORO

¿CONCEPTISMO VS. CULTERANISMO?


 La oposición deriva más de la rivalidad entre sus representantes (Quevedo y Góngora) que de una
auténtica contraposición de estilos.
 Conceptismo y culteranismo no se oponen: se superponen (Chevalier).
CONCEPTISMO :
- Agudeza conceptual  Metáforas, antítesis, hipérboles “apuntadas”
- Agudeza verbal  apodo (comparación degradante), equívoco (dilogías y juegos de palabras),
paranomasia  poesía satírica, caricatura
CULTERANISMO (cultismo, gongorismo) =
Conceptismo + “oscuridad” (lengua literaria autónoma):
- innovaciones léxicas: neologismos, latinismos, cultismos semánticos
- sintaxis latinizante: eliminación del artículo, hipérbaton (destaca el
desplazamiento de los adjetivos), acusativo griego, ablativo absoluto, incisos chocantes (oración
de relativo entre el determinante y el nombre)  sintaxis libre
- alusiones mitológicas y a la historia antigua
- estructuras bimembres y plurimembres, correlaciones, cruces de opuestos
(Culteranismo: termino creado en 1620 sobre el modelo de luteranismo  herejía literaria)
El estilo gongorino se hace manifiesto a partir de 1613 (difusión del Polifemo y de la Soledad I) y se
completa en la Soledad II y en la Fábula de Píramo y Tisbe (1618)
41
LA POESÍA LÍRICA DEL SIGLO DE ORO

PRINCIPALES TEMAS DE LA POESÍA DE QUEVEDO


1. Poesía metafísica: neoestoicismo, tema de la muerte (cotidie morimur)
2. Poesía religiosa: Heráclito cristiano, terminado en 1613 (crisis espiritual).
3. Poemas morales: “Sermón estoico de censura moral” (contra los vicios, de
los que desvela sus efectos); “Epístola satírica y censoria contra las
costumbres presentes de los castellanos” (“No he de callar...”), dirigida al
Conde-Duque en 1625,
4. Poesía panegírica: elogios fúnebres o epitafios, como el dedicado al duque de
Osuna (don Pedro Téllez Girón)
5. Poesía amorosa: renueva las viejas imágenes petrarquistas con hipérboles
(“Retrato de Lisi que traía una sortija”: “Traigo todas las Indias en mi
mano...”, con las viejas metáforas dientes = perlas, labios = rubíes). También
aquí presente el tema de la muerte: “Cerrar podrá mis ojos”.
6. Poesía burlesca y satírica. Donde brilla el conceptismo. Poema heroico de las
necedades y locuras de Orlando.

42
ETAPAS DE LA VIDA Y LA OBRA LITERARIA DE LOPE
A) CICLOS POÉTICOS: PROSAS Y VERSOS
FECHAS VIDA OBRA
1583-1587 Elena Osorio Ciclo de Filis: centrado en la lírica: soneto y romancero , sobre todo
morisco (Zaida - Gazul). Vuelve en 1632 en La Dorotea
1588-1596 Isabel de Urbina, Ciclo de Belisa: romancero pastoril (Belisa-Belardo), églogas, La
Exilio (1588-1595) y Arcadia, prosas y versos (1598); épica: la Dragontea y el Isidro.
casa de Alba (1595-) [Isabel muere en 1594. Armada invencible (1588)]
1598-1608? Micaela Luján (5 hijos, Ciclo de Lucinda: Rimas (1602), sonetos y poemas épicos italianistas
entre ellos Marcela y (La hermosura de Angélica, en Rimas, y Jerusalén conquistada
Lope Félix) (1609)
1598-1615 Juana Guardo (1598- Rimas sacras (1614), El peregrino en su patria (1604), Los pastores
1613), crisis religiosa y de Belén (1612).
sacerdocio (1614), Arte nuevo de hacer comedias (añadido a la ed. de la Rimas de 1609).
duque de Sessa Guerras literarias (Epístolas).
(desde1605)
1616-1632 Marta de Nevares Ciclo de Amarilis / Marcia Leonarda: La Filomena (1621: fábula
(1635) mitológica + poesías varias + novela Las fortunas de Diana), La Circe
(1624: a la fábula se suman 3 novelas más). Égloga Amarilis
1627-1635 Ciclo de senectute Autopromoción, entrada de nuevos poetas (Calderón), búsqueda de un
cargo en la corte, desastres personales (rapto de su hija Antonia Clara,
muerte de Lope Félix).
Laurel de Apolo con otras rimas (1630, incluye la égloga pastoral-
ópera La selva sin amor), Rima humanas y divinas del licenciado
Tomé Burguillos (1634, incluye La gatomaquia, épica burlesca), La
Dorotea (1632)  distanciamiento, ironía, metapoesía.
43
ETAPAS DE LA VIDA Y LA OBRA LITERARIA DE LOPE

B) ETAPAS PARA LA OBRA DRAMÁTICA


(Las fechas de los periodos son aproximadas)

1585- 1595 Lope pre-Lope Las ferias de Madrid (1585-1588, comedia picaresca)
(1600?) Primer Lope La viuda valenciana (c.1595) (publicada en la parte XIV, 1620,
con dedicatoria a Marcia Leonarda)

1595-1627 Lope-Lope Peribáñez y el comendador de Ocaña (1605-1608) (Parte IV,


1614)
La dama boba (1613, ms. autógrafo) (Parte IX, 1617)
El perro del hortelano, (c. 1613) (Parte XI, 1618)
Fuente Ovejuna (c. 1612-1614) (Parte XII, 1619)
Tragicomedia del caballero de Olmedo (1620-1625) (Parte
XXIV, 1641)
El vellocino de oro, 1622, comedia de corte y mitológica (Parte
XIX, 1624)
1627-1635 Lope post-Lope Predominio de comedias cortesanas (de encargo):
Lope de senectute - Mitológicas: La selva sin amor, (1627), El amor enamorado
(en especial desde (1630-35, en La vega del Parnaso, 1637)
1631) -Capa y espada: La noche de San Juan (fiesta cortesana de 1631),
Las bizarrías de Belisa (1634 ms. autógrafo)
- Tragedia al estilo español: El castigo sin venganza (1631 ms.
44 autógrafo)
Manuscrito autógrafo de El castigo sin venganza, datado el 1 de agosto de 1631 (Biblioteca pública de Boston)
Edición ilegal, probablemente del impresor sevillano
Gómez de Pastrana (1630-1635?) Edición suelta autorizada por Lope, Barcelona 1634
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