Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
líquidas orales
Formulaciones líquidas orales
• Una de las vías de administración más empleadas en la población infantil es la oral, en concreto, a través de las
formas farmacéuticas líquidas como soluciones, jarabes, elixires, suspensiones y gotas orales, existiendo diferencias
entre ellas:
• Soluciones: El disolvente principal es el agua. Los principios activos hidrófobos se disuelven en alcohol o glicerina.
• Jarabes: Soluciones acuosas concentradas de sacarosa u otros azúcares en una proporción mínima de 45%
• Suspensiones: Presentan, al menos, un principio activo no disuelto y que se resuspende por agitación.
• Gotas orales: Empleadas por principios activos muy potentes que se administran en pequeños volúmenes.
Formulaciones líquidas orales
• La falta de medicamentos comercializados adaptados a las necesidades del paciente pediátrico hace necesaria la
elaboración de fórmulas magistrales donde el farmacéutico tiene un papel clave en el diseño de la fórmula y en la
elección de los excipientes.
• Algunos excipientes aceptables en formulaciones para pacientes adultos pueden no ser adecuados para uso pediátrico.
• El diseño de una fórmula magistral es clave para asegurar una preparación estable y segura que permita administrar el
medicamento fácilmente teniendo en cuenta las características del paciente.
• Las formulaciones líquidas orales son las presentaciones más adecuadas para pacientes pediátricos ya que permiten
proporcionar la dosis adecuada de forma fácil y segura.
• Sin embargo, debe recordarse que para la elaboración de una fórmula magistral deben utilizarse sustancias auxiliares o
excipientes que contribuyen a que el principio activo se formula de manera estable, eficaz y segura.
Formulaciones líquidas orales
Aquella materia que, incluida en las fórmulas galénicas, se añade a los principios activos o sus asociaciones
para servirlos de vehículo, posibilitar su preparación y estabilidad, modificar sus propiedades organolépticas
o determinar las propiedades físico-químicas del medicamento y su biodisponibilidad.
• La elección de los excipientes es un paso crítico en el desarrollo de formulaciones pediátricas, puesta que algunos
excipientes aceptables en formulaciones para adultos pueden no ser adecuados para uso pediátrico.
• Desde el punto de vista de la seguridad, las formulaciones deben ser lo más simples posibles, reduciendo al máximo el
número de excipientes que se van a emplear.
• Para elegir correctamente un excipiente, deben tenerse en cuenta los siguientes factores asociados a sus características
físico-químicas y las del principio activo.
Formulaciones líquidas orales
• Sustancias hidrófilas:
• Agua
• Disolventes no acuosos hidrosolubles o hidromiscibles
• Sustancias hidrófobas:
• Vehículos no polares
• Soluciones orales:
Los excipientes más comúnmente usados son los vehículos que se emplean para posibilitar la adaptación posológica de
medicamentos a la población pediátrica y a pacientes con problemas de deglución.
Formulaciones líquidas orales
• Agua purificada
• Alcoholes
• Polialcoholes
• Propilenglicol
• Glicerol
• Sorbitol
• Polietilenglicoles
Formulaciones líquidas orales
Alcoholes:
• Se usan para principios activos que son insolubles en agua o que sufren hidrólisis.
• Poseen efectos sobre el sistema nervioso central cuando se sobrepasa una dosis máxima.
• En función de la edad del paciente, existe una cantidad límite que no debe sobrepasarse.
• La Agencia Europea del Medicamento (EMA) establece una cantidad inferior a 6 mg/kg/dosis para niños menores de 6
años, pero las cantidades máximas recomendadas todavía no se han establecido para neonatos y lactantes.
• A efectos prácticos, el contenido de etanol puede minimizarse añadiendo otro solvente que sea menos tóxico como la
glicerina.
Formulaciones líquidas orales
Polialcoholes: Propilenglicol
• Debido a la inmadurez de su sistema enzimático, hay que tener especial precaución en menores de 4 años ya que puede
producir depresión del sistema nervioso central.
Formulaciones líquidas orales
Polialcoholes: Glicerol
Polialcoholes: Sorbitol
Polietilenglicoles (PEG)
• Son sustancias polares e hidrosolubles que se utilizan como cosolventes, agentes suspensores y viscosizantes.
• En caso de principios activos insolubles en agua, inestables en disolución o de sabor desagradable es apropiado el uso de
suspensiones orales.
• Para evitar la sedimentación de las mismas, deben utilizarse “agentes suspensores” o “viscosizantes”.
• En función del pH de máxima estabilidad del principio activo, puede elegirse entre los siguientes:
pH del medio:
• El pH es uno de los parámetros más importantes a controlar. Los principios activos son estables a un determinado pH,
controlarlo hará que las formulaciones sean activas o no, estables o no y condiciona muchas veces el tipo de excipiente
(por ejemplo el agente suspensor).
• El pH de la formulación debe mantenerse estable durante todo el periodo de validez y conservación establecido.
• Las soluciones en general son más inestables que las suspensiones teniendo en cuenta los procesos de:
• Oxidación/Reducción
• Incompatibilidades
• Solubilidad
• Riqueza/Equivalencias (Sales)
• Temperatura
• Tamaño de partícula
Formulaciones líquidas orales
pH del medio:
• El vehículo debe proporcionar un pH adecuado para garantizar la solubilidad y la estabilidad del principio activo sin
perder la tolerancia fisiológica del preparado.
• Cuando el principio activo es estable a un pH muy distinto al fisiológico, es preferible formularlo con un ácido o una
base débil porque el pH de la fórmula es rápidamente neutralizado por los sistemas tampón del organismo.
pH del medio:
• Cuando el principio activo sólo es estable a un rango de pH muy estrecho o muy diferente al fisiológico, hay que
recurrir al uso de una solución reguladora que mantenga el pH de estabilidad, aunque su capacidad tamponante no debe
ser muy potente para que al administrar la fórmula los sistemas tampón fisiológicos pueden ajustar el pH al rango
fisiológico.
• Un buffer adecuado para mantener el pH entre 3-5 sería el tampón citrato (ácido cítrico/citrato sódico)
• Para mantener el pH entre 5,9 y 8, el tampón fosfato (fosfato monosódico/fosfato disódico) es el más
indicado.
Formulaciones líquidas orales
pH en jarabes pediátricos
Principio activo Fórmula magistral pH (estabilidad)
Captopril 1-2 mg/ml solución oral Alrededor de 3
Enalapril 1 mg/ml solución oral 3-3.5
Furosemida 2 mg/ml solución oral 8-9.3
Griseofulvina 25 mg/ml solución oral 5.5-7.5
Propranolol 1-5 mg/ml solución oral Alrededor de 3
Ranitidina 5 mg/ml solución oral 5-7.5
Sildenafilo 2.5 mg/ml solución oral 4
Acetazolamida 25 mg/ml suspensión oral 4
Espironolactona 5 mg/ml suspensión oral 3-4
Hidroclorotiazida 2 mg/ml suspensión oral 3-4
Hidrocortisona 1 mg/ml suspensión oral 3.5-4.5
Omeprazol 2 mg/ml suspensión oral 8-9
Formulaciones líquidas orales
Sacarina 100 mg
Ejemplo:
Butilhidroxitolueno 100 mg
Aceite de almendras csp 100 ml
Formulación del ácido acetilsalicílico oral
16mg/mL para desensibilizaciones a aspirina
Puede añadirse una esencia miscible en
en adultos y como antiagregante en niños.
aceite.
Formulaciones líquidas orales
¿Qué es un jarabe?
• Un jarabe es una preparación acuosa de uso oral caracterizada por un sabor dulce y consistencia viscosa.
• Su sabor dulce se puede obtener también utilizando otros polioles o agentes edulcorantes.
• Cada dosis de un envase multidosis se administra por medio de un dispositivo apropiado que permite medir el volume prescrito.
Formulaciones líquidas orales
En función de cada formulación, pueden formar parte de la preparación otros componentes como: conservantes, correctores del sabor,
aromas, etc.
El jarabe simple USP, a pesar de ser muy concentrado, la solución no está saturada ( 1 gr de sacarosa se
disuelve en 0,5 mL de agua por lo tanto sólo necesitaríamos 425 ml de agua para disolver los 850 gr de
sacarosa.
Este ligero exceso de agua mejora la estabilidad del jarabe en un rango de temperaturas, lo que permite
la conservación en frío sin cristalización.
Formulaciones líquidas orales
Componentes de un jarabe:
1. Agua purificada
• La alta concentración de sacarosa y la poca disponibilidad del agua le confieren propiedades conservantes.
(*) En algunas formulaciones, se sustituye la sacarosa por bases sin azúcar. Una de las más utilizadas es el sorbitol,
aunque podemos encontrar formulaciones de vehículos sin azúcar más complejas.
Formulaciones líquidas orales
3. Conservantes
• Los jarabes que contiene altas concentraciones de sacarosa no precisan conservantes.
• Debe tenerse en cuenta que al añadir conservantes puede variar el pH del jarabe.
Precauciones
• Los excipientes farmacéuticos son componentes esenciales y necesarios para garantizar la estabilidad físico-
química y microbiológica de los medicamentos, así como su aceptación por parte de los pacientes.
• A pesar de ser sustancias inactivas desde el punto de vista farmacológico, pueden producir efectos adversos
importantes en determinados grupos de pacientes pediátricos, entre los que destacamos los siguientes:
• Los conservantes no están contraindicados, pero sólo deberían utilizarse en caso necesario. Puede valorarse
sustituir el conservante por la conservación en nevera y un plazo de validad más corto.
• Existen diferentes métodos para el cálculo de la dosis adecuada para pacientes pediátricos:
• Métodos porcentuales basados en un cálculo sencillo a partir de la dosis del adulto, pero cuya precisión es
escasa pues existen grandes diferencias interindividuales en cuanto al peso dentro de la misma franja de
edad.
Edad Peso (kg) Superficie % Dosis adulto
corporal (m²)
Recién nacido 3 0,2 12
3 meses 6 0,3 18
1 año 10 0,45 28
5-6 años 20 0,8 48
9 años 30 1 60
12 años 40 1,3 78
14 años 50 1,5 90
15 años 60 1,7 100
Formulaciones líquidas orales
Alcohol bencílico • Contraindicado en neonatos. (metabolismo 5 mg/kg • Acidosis metabólica, depresión respiratoria y del SNC
(conservante) inmaduro). neonatos y niños < 3 años.
• Evitar en niños (<3 años).
Aspartamo • Contraindicado en fenilcetonuria. 40 mg/kg • En pacientes con fenilcetonuria: daño cerebral.
edulcorante artificial)
Etanol (solvente) • Se recomienda evitar en formulaciones 6 mg/kg/ dosis < 6 años • Depresión respiratoria y del SNC, toxicidad
pediátricas. cardiovascular.
Lactosa (diluyente) • Vigilar en pacientes con intolerancia a la No disponible • Síntomas de intolerancia a la lactosa: distensión y dolor
lactosa. abdominal, diarrea y deshidratación, acidosis metabólica.
• Contraindicado en galactosemia. • En pacientes con galactosemia: fallo hepático, cataratas y
retraso mental.
Polisorbato 80 (humectante) • Se recomienda evitar en formulaciones 10 mg/kg • Síndrome E-fenol en neonatos: trombocitopenia, disfunción
pediátricas. renal, hepatomegalia, colestasis, ascitis, hipotensión,
acidosis metabólica.
Propilenglicol (solvente) • Se recomienda evitar en niños < 4 años 1 mg/kg (neonatos), • Depresión del SNC.
(vía metabólica limitada) 50 mg/kg (< 5 años), • Efecto laxante debido a la elevada osmolaridad tras la
500 mg/kg (adultos) administración oral.
Formulaciones líquidas orales
• Diabéticos:
• No utilizar sacarosa. Usar vehículos con sorbitol y vehículos preparados con derivados de la celulosa
como la metilcelulosa o la carboximetilcelulosa sódica.
• En principio, no hay restricción de excipientes, pero no es necesario añadir agentes auxiliares como los
saborizantes, edulcorantes o colorantes.
Formulaciones líquidas orales
• Medir el pH: Este debe mantenerse estable y dentro del rango de mayor estabilidad del principio activo.
• En el caso de principios activos hidrosolubles, puede prepararse una solución (con agua o jarabe).
• Hay que comprobar que el pH es el adecuado para asegurar la solubilidad del principio activo.
Formulaciones líquidas orales
• En el caso de principios activos poco solubles, puede prepararse una suspensión (con agentes suspensores o una
mezcla 1:1 del viscosizante con jarabe). Hay que comprobar que es homogéneo y que se redispersa con facilidad.
• Comprobar las características organolépticos, incluidos el sabor. En caso de que la fórmula tenga muy mal sabor,
también es posible enmascararlo en el momento de la administración, recomendando al paciente que tome batidos,
zumos, etc.
• Según la USP795 y la guía de buenas prácticas de preparación de medicamentos, en los Servicios de Farmacia
Hospitalaria puede darse un plazo de validez de 14 días a una formulación de estas características, aunque no haya
ningún estudio de estabilidad publicado.
• En la actualidad, el jarabe ha sido desplazado por soluciones y suspensiones de metilcelulosa, más inertes con respecto
a los principios activos, con menor osmoloridad, menor viscosidad y menor tendencia al crecimiento bacteriano.
• En la siguiente tabla, se indica el pH de una solución al 1% (utilizado con mayor frecuencia como viscosizante) y el
rango de pH a los que son estables las soluciones coloidales obtenidas.
• En función del pH de máxima estabilidad del principio activo, se puede elegir entre los siguientes:
Método patrón:
1. Pesar todos los componentes de la preparación. Pesar la cantidad de sacarosa necesaria, teniendo en cuenta que se
necesita 640 gr de sacarosa y 360 gr de agua destilada para preparar un kg de jarabe simple.
2. Añadir lentamente sobre el agua, bajo agitación, los conservantes, hasta su completa disolución.
3. Adicionar lentamente, bajo agitación la sacarosa. Debe obtener una solución de aspecto homogéneo.
Formulaciones líquidas orales
5. Si es necesario, homogeneizar la solución obtenida en el punto 4 con un agitador de turbina. Puede ponerse también el
calor para favorecer la disolución del azúcar.
7. Incorporar el principio activo en función de su solubilidad en el agua u otro solvente adecuado o directamente en el
jarabe ya elaborado.
8. Proceder a la limpieza del material y equipo según se especifique en los procesos de limpieza correspondientes.
Formulaciones líquidas orales
Consideraciones galénicas:
• La disolución de la sacarosa debe realizarse en frío (generalmente a temperatura ambiente). Si se
aumenta la temperatura para favorecer la disolución se corre el riesgo de que la sacarosa sufra inversión,
produciéndose glucosa y fructosa. La glucosa puede cristalizar favoreciéndose la contaminación microbiana al
bajar la presión osmótica.
• El aumento de temperatura también puede producir fenómenos de sobresaturación. Al enfriarse el jarabe puede
producirse cierta cristalización de la sacarosa, disminuyendo la presión osmótica con el consiguiente riesgo de
contaminación microbiana.
• Si se envasa un jarabe en caliente se pueden producir fenómenos de condensación en la parte interna del tapón.
El vapor de agua se transforma en gotículas situándose en la superficie del jarabe, no distribuyéndose de forma
regular en el seno del mismo debido a la alta viscosidad. Se forman zonas diluidas en la superficie con riesgo
de contaminación microbiana al bajar la presión osmótica.
• Si los activos lo permiten, los jarabes deben envasarse en frasco cristal topacio. Deben estar limpios y secos, ya
que indicios de humedad pueden producir fenómenos de fermentación.
Formulaciones líquidas orales
• La turbidez de un jarabe al cabo del tiempo puede ser indicio de contaminación microbiana.
• Los conservantes más utilizados para los jarabes (dependerá también del activo) son los parabenos y el benzoato
sódico. Aunque por su alta presión osmótica los jarabes resisten el crecimiento microbiano, pueden existir sobre todo
hongos capaces de crecer en estos medios
Formulaciones líquidas orales
• Fórmula magistral
Evaluación de los caracteres organolépticos: color/viscosidad
Omeprazol A
mg
Bicarbonato sódico 8,4% (1 M) B ml
La preparación tiene una mala palatabilidad por lo que es usual añadir unas gotas de esencia de fresa o similar para
una administración más aceptada por el paciente.
• Debe conservarse refrigerado y protegido de la luz, por lo que suele envasarse en frascos de vidrio topacio.
• Tras agitarlo bien, la administración debe hacerse preferiblemente por las mañanas antes de desayunar, aunque en
cualquier caso, tomarlo una hora antes de las comidas.
• Es bien tolerado y las reacciones adversas son, en general, leves y reversibles como alteraciones gastrointestinales o
cefaleas.
Formulaciones líquidas orales
Ranitidina A mg
Agua conservans B ml
Jarabe simple C ml
• La posología varía según la edad del paciente, siendo habitual entre 2-3 mg/kg tres veces al día en niños de hasta 6
meses, 2-4 mg/kg dos veces al día a partir de los 6 meses con un máximo de 150 mg.
• En ocasiones, en edades más avanzadas (3 y 12 años) se puede aumentar la dosis hasta 5 mg/kg con un máximo de
300 mg.
• Debe conservarse refrigerado y al abrigo de la luz para ser administrado por vía oral con las comidas y a la hora de
acostarse evitando mezclaro con alimentos que produzcan irritación gástrica.
• Las posibles reacciones adversas son infrecuentes, en general, y reversibles con la disminución de la dosis o retirada
del tratamiento.
Formulaciones líquidas orales
Flecainida A mg
Metilcelulosa a 1% B mg
Jarabe simple C ml
• La dosificación se establece según la edad y el peso del paciente. En neonatos, se inicia el tratamiento con una dosis
de 2 mg/kg/día cada 12 horas, pudiendo ser aumentado hasta 4 mg/kg/día en dos tomas. En niños, se administra
primero entre 1 y 3 mg/kg/día en tres tomas, siendo la dosis habitual 3-6 mg/kg/día.
• En general, las reacciones adversas no son frecuentes pero si moderadamente importantes: mareos, arritmias, cefalea,
visión borrosa, desorientación o dificultad respiratoria.
Formulaciones líquidas orales
• La dosis inicial en neonatos es de 0,01 mg/kg cada 24 h, pudiendo llegar hasta 0,5 mg/kg diarios divididos en hasta 3
tomas. En etapas posteriores de la infancia, la dosis habitual es de 0,1 mg/kg cada 24 h al inicio del tratamiento y
hasta un máximo de 1 mg/kg al día distribuida en 1 o 2 tomas.
• Es necesaria la monitorización de la tensión arterial hasta que se estabilice, sobre todo en las primeras horas tras la
administración de las primeras dosis.
• El enalapril, principio activo de esta fórmula, es un IECA que está indicado en el tratamiento de la hipertensión
arterial en todos sus grados y en insuficiencia cardíaca congestiva.
• Debe conservarse refrigerado y puede administrarse con o sin alimentos, aunque al principio del tratamiento las
dosis serán bajas, preferiblemente por la noche con el fin de evitar descensos bruscos de tensión.
• Las reacciones adversas son leves y transitorias siendo las más características la aparición de tos seca.
Questions?
Thank you!