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Habermas propone que existen tres tipos de intereses cognoscitivos - técnico, práctico y emancipatorio - que condicionan el conocimiento científico. El interés técnico sustenta las ciencias empírico-analíticas, el práctico las ciencias hermenéuticas, y el emancipatorio las ciencias críticas como la filosofía. La tarea de la filosofía crítica es establecer los límites de la dominación social para explorar el contenido de las utopías culturales que posibiliten proces
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Título original
Teoría de Los Intereses Cognoscitivos de Habermas En
Habermas propone que existen tres tipos de intereses cognoscitivos - técnico, práctico y emancipatorio - que condicionan el conocimiento científico. El interés técnico sustenta las ciencias empírico-analíticas, el práctico las ciencias hermenéuticas, y el emancipatorio las ciencias críticas como la filosofía. La tarea de la filosofía crítica es establecer los límites de la dominación social para explorar el contenido de las utopías culturales que posibiliten proces
Habermas propone que existen tres tipos de intereses cognoscitivos - técnico, práctico y emancipatorio - que condicionan el conocimiento científico. El interés técnico sustenta las ciencias empírico-analíticas, el práctico las ciencias hermenéuticas, y el emancipatorio las ciencias críticas como la filosofía. La tarea de la filosofía crítica es establecer los límites de la dominación social para explorar el contenido de las utopías culturales que posibiliten proces
“trascendental”, que identifica y examina las condiciones de posibilidad del conocimiento objetivo de cada tipo de investigación científica, sea empírico-analítica (ciencias naturales), histórico-hermenéutica (humanidades) o de orientación crítica (filosofía, psicoanálisis) Las condiciones de todo conocimiento están ligadas a la historia natural de la especie humana y a sus imperativos socioculturales, no a un sujeto trascendental absoluto y a-histórico.
No hay una ciencia desinteresada, sino que depende de
la forma singular en la que se proyecta la vida humana a nivel técnico (predicción y control de la naturaleza), práctico (entendimiento intersubjetivo) y emancipatorio (con respecto a fuerzas sociales coactivas). ¿Qué son los intereses? Los intereses no son aspiraciones o disposiciones subjetivas ni ideológicas, son condiciones “trascendentales”, rasgos cognoscitivos fundamentales de la existencia humana históricamente determinada, a partir de los cuales se aprehende la realidad. Están determinados por los procesos de socialización de la especie, ligados a tres aspectos: el trabajo, el lenguaje y el dominio. Ciencias empírico-analíticas (interés técnico) El interés técnico de la acción instrumental se formó a través la evolución de la especie humana, como actividad material de transformación del mundo, como forma que se imprime en la materialidad de la naturaleza para controlarla y predecirla.
Esta actividad es la que condiciona el establecimiento
de creencias sobre el mundo, cuya validez se modifica en razón de su utilidad para predecir fenómenos habituales. “La investigación científica es la forma reflexiva y sistemática de este proceso precientífico de aprendizaje, que viene ya inscrito en la propia estructura de la acción instrumental como tal” (McCarthy, 1987 p. 86)
La investigación empírico-analítica sistematiza el
proceso de aprendizaje acumulativo precientífico, según la acción racional orientada a fines. El interés técnico depende, pues, de una particular disposición humana respecto a la naturaleza: el trabajo como actividad práctica. Ciencias histórico-hermenéuticas (interés práctico) El interés práctico se relaciona con la esencial intersubjetividad que liga a los seres humanos a través del lenguaje (las palabras, las acciones y los gestos) y la posibilidad de su comunicación.
Las ciencias hermenéuticas se sustentan en ese interés y
su objetivo es la indagación sistemática de los lazos intersubjetivos, así como la identificación de las interferencias posibles en la comunicación, en la comprensión de la dimensión cultural de los seres humanos. “El investigador hermenéutico sólo puede interpretar el sentido de sus «textos» en relación con la estructura del mundo al que pertenece. El papel del marco trascendental de referencia viene representado aquí por la gramática del lenguaje ordinario, que establece esquemas de interpretación del mundo” (McCarthy, 1987, pp. 97-98). Ciencias de orientación crítica (interés emancipatorio)
Las ciencias críticas se encargan de distinguir
realidades invariantes de la acción social y relaciones de dependencia anquilosadas ideológicamente.
No es una ciencia exacta o nomológica, sino
reflexiva. La filosofía parte de un interés emancipatorio desde que ha establecido una relación estrecha entre verdad y libertad:
“La actitud de teoría pura, de contemplación
desinteresada iba acompañada de la promesa de que, cuando el hombre se entrega a ella queda purificado de los inconstantes movimientos y pasiones de la vida diaria” (McCarthy, 1987, p. 99) Partiendo de las reflexiones sobre teoría del conocimiento de Kant a Marx, Habermas busca darle un giro materialista el concepto de autonomía, de tal manera que se conciba la relación entre los seres humanos y la naturaleza en términos de una actividad material constitutiva: el “trabajo social”. Para Habermas, el positivismo equiparó a la filosofía con un apéndice de la ciencia, convirtiendo a la teoría del conocimiento en filosofía de la ciencia. Con ello, subordinó todo conocimiento al interés técnico de predicción, propio de las ciencias empírico-analíticas. Ese es también el error de Marx, al haber considerado a la economía política como una ciencia nomológica. Habermas introduce las ideas freudianas en torno a la cultura, relacionadas con la represión de la energía libidinal y agresiva en la constitución del orden social, que le permite “clarificar el status de la ciencia crítica cuya tarea es reconstruir el proceso de autoformación de la especie y explicar las ideas de la razón y de interés emancipatorio de la razón que le subyacen” (McCarthy, 1987, p. 11) ¿Cuál es la tarea de la Filosofía crítica? La función de la reflexión crítica es establecer hasta qué punto es posible llevar a cabo la emancipación, es decir, encontrar los límites de la dominación social para explorar el contenido de las utopías culturales, en el marco de un "ensayo controlado" La teoría crítica elabora una reflexión sobre las estructuras de dominio social y una autorreflexión como sujeto que está inmerso en ellas, haciendo crítica de las ideologías, en tanto distorsiones de la comunicación intersubjetiva, que posibilite procesos de emancipación, es decir, relaciones intersubjetivas no coactivas, baja un interés trascendental de emancipación que ha estado a la base de toda reflexión filosófica, pese a sus inclinaciones en otro sentido. La filosofía debe cumplir una función trascendental, en tanto que busque las condiciones de posibilidad del conocimiento, pero en el terreno fáctico de la historia material de la especie humana, en función de la tarea ilustrada y emancipatoria de liberar a los seres humanos de relaciones coactivas de dominio y de las interferencias en la comprensión intersubjetiva.