• Anatomía. El bazo deriva del mesodermo y reside en el cuadrante superior izquierdo del abdomen, donde está protegido por las costillas 9 a 11. • El promedio del bazo adulto es de 12 cm de longitud por 7 cm de ancho por 4 cm de grosor y pesa entre 1 000 y 1 500 g. El bazo cuenta con una vascularización muy rica, ya que recibe hasta 5% del gasto cardíaco. • La arteria esplénica, rama del tronco celíaco, transcurre por detrás del páncreas y la mayoría de las veces se arboriza en múltiples ramas pequeñas e ingresa por el hilio del bazo. • La vena mesentérica inferior drena en la vena esplénica, la cual acaba por unirse con la vena mesentérica superior para formar la vena porta. • Función. La histología del bazo revela una pulpa roja muy vascularizada intercalada con áreas de pulpa blanca. • La pulpa roja consiste en senos ramificados de paredes delgadas y cordones esplénicos llenos de glóbulos rojos (eritrocitos) y células fagocíticas. • La pulpa blanca consiste en vainas periarteriolares ricas en células T, y nódulos linfoides que contienen células B, y una zona marginal que sirve de interfase entre la pulpa blanca en la que domina el tejido linfoide y la pulpa roja rica en eritrocitos. • Estas dos características histológicas constituyen • las dos funciones principales del bazo: • 1. Sistema reticuloendotelial: • 2. Sistema inmunitario: • 1. Sistema reticuloendotelial: • El desempeño de la pulpa roja consiste en eliminar los eritrocitos envejecidos y en remodelar los glóbulos rojos sanos. • El bazo también sirve como un reservorio de plaquetas. Mientras la hematopoyesis extramedular es excepcional en adultos • 2. Sistema inmunitario: • El bazo interviene tanto en el sistema inmunitario innato (opsonización) como en el adaptativo (presentación de antígenos). • La opsonización de los agentes patógenos por el sistema del complemento resulta en la fagocitosis y la depuración mejoradas en el bazo. • La pulpa blanca también actúa como sitio de presentación de antígenos a los linfocitos que, junto con un medio de citocinas apropiado, conduce a una actividad citotóxica efectiva mediada por células T y a una respuesta de anticuerpos por parte de las células B. •Indicaciones de la esplenectomía Trastornos hematológicos • a. Trombocitopenias • (1) La púrpura trombocitopénica inmunitaria idiopática (PTI) es la indicación más frecuente de esplenectomía programada. • Se trata de un trastorno adquirido en el que se producen anticuerpos contra una glucoproteína plaquetaria que da como resultado una trombocitopenia de mediación inmunitaria. • El bazo es el principal sitio productor de estos anticuerpos antiplaquetarios y también es el principal sitio donde se destruyen las plaquetas. • (a) Niños de manera más frecuente, se presentan con PTI aguda, y en 70 a 90% de los casos los síntomas remiten independientemente del tratamiento. • En los casos refractarios, se recomienda un periodo de espera de 12 meses, en especial en niños menores de 5 años de edad donde el riesgo de septicemia postesplenectomía es mayor. • Adultos: de manera habitual, se presenta con PTI crónica. • El tratamiento de primera línea con esteroides resulta en una tasa de respuesta de 50 a 75%, y puede combinarse con otras modalidades como inmunoglobulinas intravenosas (IGIV) y/o infusiones anti-Rh (D). • Pese a ello, 80% tendrá recurrencia después de suspender el tratamiento. • La esplenectomía resulta en 65% de remisión de largo plazo (> 5 años) y se mantiene como el tratamiento de elección en pacientes con menos de 30 000 plaquetas por mm3 o con un riesgo alto de hemorragia. • La mayoría de los pacientes logra una respuesta a la esplenectomía al décimo día del postoperatorio. • (2) La púrpura trombocitopénica trombótica (PTT) es una enfermedad sistémica resultante en la péntada de trombocitopenia, anemia hemolítica microangiopática (AHMA), estado mental alterado, insuficiencia renal y fiebre. • Es resultado de la ADAMT13 disminuida, una proteasa encargada de escindir al factor de von Willebrand, lo que conduce a la agregación plaquetaria y a la trombosis de la microvasculatura. • Es más frecuente en adultos • Tratamiento de primera línea: tratamiento médico con plasmaféresis, el cual mejora la respuesta inicial y la sobrevida a 6 meses comparado con la infusión de plasma.. • Además de la plasmaféresis, se usa la esteroidoterapia en el tratamiento de la recaída. • Esplenectomía: se reserva para aquellos que no responden al tratamiento médico o con una enfermedad con recaídas crónicas. • Además, la esplenectomía sólo muestra beneficios cuando se usa junto con la plasmaféresis con el fin de alcanzar una remisión durable • Anemias • (1) Las anemias hemolíticas son un grupo de enfermedades que se curan con esplenectomía, en casi todos los casos. • (a) La esferocitosis hereditaria es un trastorno autosómico dominante que se caracteriza por un defecto en una proteína de la membrana eritrocítica. • La mutación más común es en la proteína espectrina, pero se han encontrado otras mutaciones en la anquirina, banda 3 y paladina. • Dicha deficiencia da lugar a eritrocitos pequeños, esféricos y relativamente rígidos que no logran deformarse lo suficiente para atravesar la microcirculación esplénica. • En última instancia, esto conduce al secuestro y destrucción de eritrocitos en el bazo. Los síntomas incluyen anemia, ictericia (bilirrubinemia indirecta) y cálculos biliares pigmentados. • El diagnóstico se confirma por la presencia de esferocitos en el frotis de sangre periférica, más la prueba de fragilidad osmótica positiva, y la unión disminuida de eosina-5-maleimida (EMA). • El tratamiento consiste en la suplementación con folato y la esplenectomía para los casos moderados a graves. • La eliptocitosis hereditaria es un trastorno autosómico dominante en el cual un defecto en una proteína citoesquelética del glóbulo rojo determina la formación de eritrocitos de forma elíptica. • La mayoría de los pacientes es asintomática, con una anemia leve y no requieren tratamiento adicional. • En pacientes selectos con anemia sintomática, la esplenectomía suele ser curativa. • (2) Anemias hemolíticas autoinmunitarias adquiridas • (a) La anemia hemolítica autoinmunitaria caliente se produce cuando los autoanticuerpos IgG interactúan de manera óptima con los antígenos a 37 °C. • El diagnóstico se confirma con una prueba de Coombs directa positiva (la incubación con un anti-IgG sérico resulta en la aglutinación de los eritrocitos). • La etiología es con más frecuencia idiopática, pero también puede incluir a la leucemia linfocítica crónica (LLC), el linfoma no Hodgkin, la enfermedad del colágeno vascular, y ciertos fármacos. • La esplenectomía se reserva para los que no responden o aquellos que requieren dosis altas de esteroides y es 60 a 70% de efectiva en alcanzar la remisión. • (b) Las anemias hemolíticas autoinmunitarias frías son mediadas por la fijación del complemento C3 a autoanticuerpos IgM, lo que provoca la hemólisis a temperaturas que se acercan a 0 °C. • Las características incluyen síntomas tipo Reynaud junto con anemia. • La mayoría de los casos responde a la ropa protectora. • No obstante, los episodios graves pueden requerir ciclofosfamida, rituximab o interferón. • La esplenectomía no desempeña ningún papel en el tratamiento de las anemias hemolíticas autoinmunitarias frías. • c. Hemoglobinopatías congénitas • (1) La anemia por células falciformes es resultado de una herencia homocigota de la variante S de la cadena beta de la hemoglobina. • La autoesplenectomía suele producirse de manera secundaria a episodios repetidos de oclusión vascular y la esplenectomía rara vez se requiere. • Sin embargo, la esplenectomía puede ser razonable en pacientes seleccionados con absceso esplénico, esplenomegalia sintomática, • hiperesplenismo o crisis agudas de secuestro esplénico. • (2) Las talasemias son anemias hereditarias que resultan de un defecto en la síntesis de hemoglobina. • De manera típica, la talasemia beta mayor se atiende con un tratamiento de quelación del hierro, ya que la mayoría de los pacientes sucumbe a la hemosiderosis a una edad temprana. • La esplenectomía se reserva para paliación de la esplenomegalia sintomática o de los infartos esplénicos. • d. Trastornos mieloproliferativos y mielodisplásicos • (1) La leucemia mielógena crónica es un trastorno mielodisplásico que se caracteriza por la presencia del oncogén de fusión bcr-abl, conocido como cromosoma Filadelfia. • Este oncogén ocasiona la activación constitutiva de la cinasa de tirosina. • (a) Tratamiento: el tratamiento de primera línea es con mesilato de imatinib, que es un inhibidor de la cinasa de tirosina. • Se aplican otros tratamientos (con dasatinib y nilotinib) en casos de intolerancia o respuesta subóptima al de primera línea. • Cuando el tratamiento falla, a los pacientes seleccionados se les realiza trasplante de células madre • Esplenectomía: • La quimioterapia sola en las primeras etapas de la LMC. • La resección del bazo no tuvo efecto en la supervivencia ni en la progresión de la enfermedad, pero sí generó mayores índices de trombosis y de accidente vascular cerebral. • La esplenectomía sólo está indicada para paliar laesplenomegalia sintomática o el hiperesplenismo, que causan limitación significativa al tratamiento. • (2) La policitemia vera y la trombocitosis idiopática son enfermedades crónicas de producción descontrolada de eritrocitos y plaquetas, respectivamente. • Su tratamiento es médico, pero a veces se requiere la esplenectomía para resolver la esplenomegalia sintomática o los dolores causados por infartos esplénicos. • Sin embargo, la extirpación del bazo puede ocasionar trombocitosis grave, que causa trombosis o hemorragia, • (2) La policitemia vera y la trombocitosis idiopática son enfermedades crónicas de producción descontrolada de eritrocitos y plaquetas, respectivamente. • Su tratamiento es médico, pero a veces se requiere la esplenectomía para resolver la esplenomegalia sintomática o los dolores causados por infartos esplénicos. • Sin embargo, la extirpación del bazo puede ocasionar trombocitosis grave, que causa trombosis o hemorragia, • La esplenectomía palia de manera eficaz los síntomas de compresión, pero las recidivas de las citopenias son frecuentes. • Además, en estos pacientes es mayor el riesgo de hemorragia postoperatoria y complicaciones trombóticas después de la esplenectomía. • e. Trastornos linfoproliferativos • (1) La leucemia linfocítica crónica, que afecta a las células B, es la más común de las leucemias crónicas y se caracteriza por la acumulación de linfocitos maduros, pero no funcionales. • El tratamiento primario es médico y la esplenectomía se reserva para pacientes con esplenomegalia sintomática e hiperesplenismo grave. • (2) Los linfomas de Hodgkin constituyen un grupo de trastornos diversos con amplia gama de conductas clínicas, que abarca desde casos indoloros hasta un trastorno muy agresivo. • Lo mismo que con otros procesos malignos, la esplenectomía está indicada para la paliaLa esplenectomía es muy importante para el diagnóstico y estadificación del linfoma • esplénico aislado (conocido como linfoma maligno con afección acentuada del bazo). • En estos casos, se ha demostrado que los pacientes a quienes se extirpa el bazo logran mayor supervivencia. • (3) Desde el punto de vista histórico, en el linfoma de Hodgkin se ha utilizado la esplenectomía para su estadificación diagnóstica. • No obstante, debido a los refinamientos en las técnicas de imagen y al progreso en los métodos de tratamiento, la esplenectomía para el linfoma de Hodgkin es rara. • (4) La leucemia de células peludas es una enfermedad rara que afecta a varones de edad avanzada y se caracteriza por linfocitos B con la membrana arrugada. • Antes se consideraba a la esplenectomía como tratamiento primario para esta enfermedad, pero los avances en la quimioterapia sistémica han restringido la práctica de esta operación, que ahora se reserva para pacientes con esplenomegalia masiva • f. Neutropenias • (1) El síndrome de Felty se caracteriza por artritis reumatoide, esplenomegalia y neutropenia. • El tratamiento primario es con esteroides, pero en algunos casos resistentes se requiere esplenectomía para revertir la neutropenia. • Muchos pacientes con infecciones recurrentes y anemia significativa se benefician con la resección del bazo que, además, alivia la granulocitopenia en alrededor de 80%. • 2. Afecciones no hematológicas • a. El traumatismo es la indicación más frecuente para una esplenectomía. • En el paciente traumatizado inestable, el procedimiento se realiza a menudo por una laparotomía. • b. La esplenectomía accidental sucede cuando el bazo es lesionado de forma yatrógenica durante un procedimiento intraabdominal. • La lesión puede ser consecuencia de un separador colocado en el cuadrante superior izquierdo del abdomen o durante la movilización de la flexura esplénica. • c. Vascular • (1) El aneurisma de la arteria esplénica es el aneurisma de una arteria visceral más común y de manera típica un hallazgo accidental. • Sucede con más frecuencia en mujeres y se relaciona con una incidencia alta de rotura durante el embarazo, con mortalidad materna y fetal significativas. Pueden observarse aneurismas asintomáticos en una paciente que desconoce su embarazo. • Las indicaciones para la intervención quirúrgica incluyen un tamaño de 2 cm o mayor, mujeres en edad reproductiva que pueden embarazarse y seudoaneurismas inflamatorios. • El tratamiento depende de la localización del aneurisma durante el trayecto de la arteria esplénica. • Los aneurismas del tercio proximal y medio pueden excluirse mediante ligadura proximal y distal de la arteria. • d. Infecciosa • (1) Las infecciones parasitarias representan más de dos terceras partes de los quistes esplénicos alrededor del mundo, pero son raras en Estados Unidos. • La mayoría de los quistes hidatídicos son causados por especies de Echinococcus. • De manera típica, éstos son asintomáticos, pero pueden romperse o causar síntomas debido a la esplenomegalia. • El tratamiento primario es la esplenectomía. • (2) Los abscesos esplénicos son raros pero potencialmente letales si no se diagnostican con precisión y se instituye el tratamiento oportuno. • Dos terceras partes se originan de la siembra del bazo desde un sitio distante, por lo general una endocarditis e infecciones de las vías urinarias. • La TC abdominal y/o las imágenes ecográficas son las modalidades diagnósticas de elección. • Los estafilococos y estreptococos representan a los microorganismos que se identifican con más frecuencia, y provocan más de la mitad de los casos. • Las infecciones micóticas son raras, y pueden resolverse con un tratamiento antimicótico solo. • En casos seleccionados puede utilizarse el drenaje percutáneo; no obstante, la esplenectomía y el tratamiento antibiótico apropiado representan el tratamiento definitivo • e. Las lesiones quísticas del bazo pueden ser quistes verdaderos o seudoquistes, pero su diferenciación es difícil de hacer antes de la operación. • (1) Los quistes verdaderos (o quistes primarios) tienen un revestimiento epitelial y suelen ser de origen congénito. Otros quistes verdaderos raros son los quistes epidermoide y dermoide. • (2) Los seudoquistes (o quistes secundarios) carecen de un revestimiento epitelial y más de dos terceras partes son de quistes no parasitarios. • De manera típica, resultan de la formación de un hematoma traumático y de manera subsecuente se reabsorben. • (3) El tratamiento de los quistes esplénicos depende del tamaño de la lesión y de los síntomas relacionados. • La mayoría suele ser asintomático, pero puede presentarse con dolor en el cuadrante superior izquierdo o en el hombro. • Aquéllos menores de 5 cm pueden seguirse con ecografía y con frecuencia se resuelven de manera espontánea. • Los quistes más grandes implican el riesgo de rotura y requieren el destechamiento quístico o la esplenectomía. • 2. La vacunación contra microorganismos encapsulados es un aspecto importante del tratamiento de los pacientes que se someten a esplenectomía. • La vacuna antineumocócica debe administrarse 2 a 3 semanas antes o 2 semanas después de la esplenectomía para permitir la respuesta inmunitaria adecuada. • Si los pacientes no recibieron la vacuna contra H. influenzae tipo B o la vacuna antimeningocócica también deben administrarse (si son mayores de 2 años de edad). • La vacuna contra la influenza se recomienda con frecuencia anual en pacientes asplénicos, ya que incrementa la susceptibilidad a las infecciones bacterianas. • Transfusiones • a. Los pacientes con enfermedades hematológicas, en particular aquéllos con trastornos autoinmunitarios, con frecuencia tienen autoanticuerpos y resulta difícil realizarles pruebas cruzadas. • Por consiguiente, la sangre debe tipificarse y detectarse cuando menos 24 horas antes de la cirugía programada. • Los pacientes con esplenomegalia deben tener de 2 a 4 unidades de concentrado de glóbulos rojos sometidos a pruebas cruzadas y disponibles durante la cirugía, por si son necesarios. • Los pacientes con trombocitopenia grave (en particular, aquéllos con cuentas < 10 000/µl) deben contar con plaquetas disponibles para la transfusión, pero éstas deben retenerse hasta que la arteria esplénica se ligue, de manera que el bazo no las consuma demasiado rápido. • La mayoría de los pacientes con trombocitopenia por PTI puede someterse a una esplenectomía segura sin transfusión de plaquetas, • Los pacientes que se someten a una esplenectomía laparoscópica deben recibir asesoría en el preoperatorio acerca de la posibilidad de conversión en una esplenectomía abierta o un método asistido con la mano y deben prepararse de manera idéntica a la de los pacientes en quienes se planea un procedimiento abierto. • Esplenectomía abierta • a. Puede practicarse una incisión alta en la línea media o hacer un corte subcostal izquierdo. En caso de esplenomegalia significativa, se prefiere la incisión en la línea media. • No se requiere drenaje de manera rutinaria, a menos que exista la probabilidad de lesión en la cola del páncreas durante la disección hiliar. • La esplenectomía laparoscópica ha mostrado ser segura y efectiva bajo la mayoría de las condiciones y es el método preferido para la esplenectomía programada. • a. La esplenomegalia complica la técnica laparoscópica por la dificultad para manipular de manera atraumática el órgano y lograr una exposición adecuada de los ligamentos y el hilio. • Si el bazo está crecido, es más difícil colocarlo en una bolsa de contención cuando se aplica de manera exclusiva la técnica laparoscópica.