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“J. CÉSAR
DICTADOR”
SYME, R.
PERIODIFIZACIÓN DE LA HISTORIA
S. V S. XV S.
Edad Edad Edad XVIII Edad
Antigua media moderna contemporánea
Dictadura Corneliana
“J. CÉSAR
DICTADOR”
Sila fue el primer romano en mandar un ejército contra Roma.
No por elección propia; sus enemigos habían empuñado las
riendas del gobierno y lo habían despojado del mando contra
Mitrídates.
Por tanto, cuando él desembarcó en Italia, tras una ausencia de
cinco años, la fuerza era su única defensa contra el partido que
había atacado a un procónsul que estaba haciendo las guerras
de la República en Oriente.
Sila tenía toda la ambición de un noble romano, pero no era su
ambición adueñarse del poder por medio de la GUERRA
CIVIL y conservarlo todopoderoso y en solitario. Realizada su
obra, el Dictador abdicó.
PRIMER TRIUNVIRATO
“J. CÉSAR
DICTADOR”
La conquista de la Galia, la guerra contra Pompeyo y la
implantación de la Dictadura de César son acontecimientos que
se producen con tanta armonía, tan rápidos y seguros como si
estuvieran preparados de antemano; y la historia se ha escrito a
veces como si César hubiese dado el tono desde el principio,
convencido de que la monarquía era el remedio universal de los
males del mundo y con el propósito de llegar a ella por la fuerza
de las armas. Tal modo de ver es demasiado simple para ser
histórico.
César hizo lo posible por evitar el recurso a la guerra abierta.
Tanto antes como después de la ruptura de hostilidades, trató
de negociar con Pompeyo. Si Pompeyo hubiese escuchado y
aceptado una conversación, la vieja amicitia entre ambos
podría haberse restablecido.
“J. CÉSAR
DICTADOR”
Con el reconocimiento de la supremacía teórica de Pompeyo,
César y sus partidarios se hubieran hecho con el gobierno, y
quizá reformado el Estado.
Esto era lo que los enemigos de César temían y Pompeyo
también. Tras una larga vacilación, Pompeyo decidió al final
salvar a la oligarquía.
Por otra parte, las propuestas del procónsul, tal y como fueron
presentadas al senado, eran moderadas y no se pueden
desechar como meras maniobras con que ganar posición o
tiempo para situar sus ejércitos.
César sabía lo pequeño que era el partido deseoso de provocar
la guerra. Como había revelado la artera moción de un tribuno
cesariano, una aplastante mayoría del senado, de casi
cuatrocientos contra veintidós, deseaba que ambos dinastas
hiciesen entrega de sus mandos extraordinarios.
Prevaleció una minoría temeraria y partidista.
SEGUNDA GUERRA CIVIL:
JULIO CÉSAR contra POMPEYO
Venció a Pompeyo en la
Batalla de Farsalia (48 a.C.)