Está en la página 1de 13

IV.

EL CARÁCTER ROMANO: REPÚBLICA


Y VERISMO
Temas de la sesión:

- Crisis de la República y división ideológica del Senado (optimates y


populares)

- Conflictos tardorrepublicanos:
- Tribunado de Tiberio y Cayo Graco
- Guerra social o de los aliados
- Primera guerra civil y dictadura de Sila
- Primer triunvirato y dictadura de César
- Idus de marzo
APIANO, Historia de Roma (Guerras civiles), ca. 160 d.C.

Guerras civiles como conflictos marcados por la lucha de poder unipersonal:

- Tribunado de Tiberio Graco (134-133 a.C.), primero en caer víctima de una


conmoción civil.

- Guerra civil (Sila contra Marianos, 83-82 a.C.) y dictadura de Lucio Cornelio Sila (82-81
a.C.)

- Julio César contra Cneo Pompeyo Magno (49-48 a.C.)

- Triunviros contra los cesaricidas (43-36 a.C.)

- Octaviano contra Marco Antonio (33-31 a.C.)


Conflicto entre optimates y populares

División ideológica del Senado —> dos maneras opuestas


de hacer política.

Optimates: bien común como la conservación de la


tradición al ser esta el elemento que ha mantenido al
estado romano cohesionado durante siglos —> clase
dirigente aristocrática para excluir al resto de los
ciudadanos de las altas magistraturas y del Senado.

Populares: mantención de la tradición que permitiera a la


vez la incorporación de factores reequilibradores dentro
de la sociedad —> necesidades de los nuevos grupos
sociales que buscaban integrarse a los órganos de gobierno.
Patricio Barberini, s. I a.C.
La ley agraria de los hermanos Graco (133 / 121 a.C.)

“La plebe y el senado romano sostuvieron frecuentes disensiones entre sí con ocasión
de la promulgación de leyes, de la cancelación de deudas, de la división de tierras o de
la elección de magistrados […] Pero nunca fue llevada la espada a una asamblea, ni
hubo muerte fratricida hasta que, durante el tribunado de Tiberio Graco y cuando
promulgaba nuevas leyes, éste fue el primero en caer víctima de una conmoción
civil […] Casi de forma constante persistió una violencia desmedida y un
vergonzoso desprecio a las leyes y a la justicia […] En adelante, con frecuencia,
surgieron también jefes de partido con voluntad de poder unipersonal […] Cada
vez que cualquiera de los bandos se anticipaba en posesionarse de la ciudad, el partido
contrario hacía la guerra, nominalmente, contra sus adversarios pero, de hecho, contra
la patria”. APIANO, Guerras civiles, I.1-2.
Bajorrelive con escena de la cosecha (vallus, segadora galo-romana), 77 d.C.
Cenotafio de los Gracos Retrato de Átalo III de Pérgamo, ca. 150 a.C.
Guerra social o de los aliados (90-89 a.C.)

Italia, 100 a.C.


Guerra civil (83-82 a.C.) y dictadura de Sila (82-81 a.C.)

Denario con el rostro de Lucio Cornelio Sila, 82 a.C. Cayo Mario, s. I a.C.
Guerra civil (83-82 a.C.) y dictadura de Sila (82-81 a.C.)

“Ninguna acción desagradable quedó sin realizar, hasta que uno de estos tribunos de
la plebe, unos cincuenta años después de la muerte de Graco, Cornelio Sila,
remediando un mal con otro se designó a sí mismo como soberano durante un
muy largo período de tiempo […] Sila, tras haber llegado a ser dictador de por
vida por medio de la violencia y la coacción, aunque de palabra elegido libremente,
una vez que estuvo saciado de poder fue el primer hombre, me parece, que tuvo
el coraje de dejar este poder absoluto […] De este modo, y por un corto espacio
de tiempo, cesaron las discordias civiles en vida de Sila y hubo una compensación
por las desgracias que él mismo había causado”. APIANO, Guerras civiles, I.3.
El Primer Triunvirato (60 a.C.) y la dictadura de César (49 / 45 a.C.)

Cneo Pompeyo Magno Marco Licinio Craso Cayo Julio César


“Mas, de nuevo, después de la muerte de Sila rebrotó la misma situación hasta
que Gayo César, que había obtenido el mando de la Galia por un largo período de
tiempo por elección popular, ante la orden del senado de que lo depusiera, la
declinó inculpando no al senado sino a Pompeyo, que era su enemigo y mandaba
un ejército en Italia y tenía la intención de privarle de su mandado […] Habiéndose
impuesto claramente, y en especial por la fuerza de las armas, a su más grande
rival, al que, en virtud de sus grandes hechos de armas, se le había apodado el Magno,
nadie osó oponérsele en ningún asunto y fue elegido, en segundo lugar después
de Sila, dictador de por vida. De nuevo cesaron en su totalidad las luchas intestinas
hasta que Bruto y Casio, por encima de la magnitud de su poder y por nostalgia
al gobierno patrio, lo asesinaron en la mansión senatorial a él, que había llegado
a ser muy popular y de una gran experiencia en el mando”. APIANO, Guerras
civiles, I.4.
Idus de marzo, 44 a.C.

Denario acuñado por Marco Junio Bruto, 42 a.C.

Julio César como imperator, s. II d.C.


“A su muerte, de nuevo retornaron las luchas civiles y adquirieron un incremento
desmesurado, llegando a un grado máximo […] se repartieron el imperio romano
entre sí, como si de una posesión particular se tratase estos tres hombres; Antonio,
Lépido y aquel otro que antes se llamaba Octavio”. APIANO, Guerras civiles, I.5.

También podría gustarte