LA MUJER Y EL ÁMBITO RELIGIOSO INCAICO -Los comportamientos ideales que la gente asoció a "hombres" y "mujeres", ya sea porque se atribuyen determinadas funciones masculinas o femeninas a las divinidades. -Rostworowski advirtió, también en 1983, una fuerte presencia femenina dentro de la cosmovisión andina, mostrando la ausencia, en las fuentes, de la figura paterna en los mitos. -Cieza de León menciona que se hacían rituales a la Pachamama , en determinado momento Huiracocha se convierte en un dios ocioso carente de vigencia, y la Pachamama toma relevancia por sus atribuciones relacionadas a la producción de alimentos, pues es considerada como la "Madre tierra", "dueña" y "protectora" de los animales que en ella habitan. -Cury Coca incluso aparece, como heroína cuzqueña, pintada tanto en un Quero como en un lienzo colonial. LA PRESENCIA DE LA MUJER EN LA SOCIEDAD INCAICA -La facultad que tenían las mujeres de hacer cambiar la posición social de sus esposos y definir la de sus hijos.
-La entrega de mujeres como parte
del proceso de formulación de alianzas y la ampliación del parentesco.
-Héctor Noejovich demuestra que en
el mundo andino la capacidad de trabajo solicitado por el inca tanto a hombres como a mujeres resultaba equivalente, razón por la que las mitas se encargaban a las unidades "familiares. LA MUJER Y LA ECONOMÍA: EL SUSTENTO DE LA RECIPROCIDAD Y LA REDISTRIBUCIÓN -El matrimonio constituía una pieza importante en el engranaje político y social que se articulaba entre la nobleza cuzqueña y las élites locales.
-Definitivamente, las alianzas obtenidas fuera del Cuzco
permitían el funcionamiento del Tahuantinsuyo, mientras las realizadas al interior de la élite cuzqueña aseguraban la posición del inca al interior de la misma, es decir, permitían de algún modo su permanencia en el poder.
La importancia de las mujeres en el establecimiento y
mantenimiento de las relaciones de parentesco, así como la capacidad de convocatoria de mano de obra que supone su "entrega" e "intercambio", se puede observar en la forma en que, quien era proclamado inca debía iniciar infinitas entregas de dones y contradones con el propósito de mantener el equilibrio del Tahuantinsuyo. LA COYA Y LA ORGANIZACIÓN DEL PODER El tema de la participación política de la mujer en el mundo andino ha sido tratado anteriormente por algunos autores. Asimismo, existen también algunos trabajos que destacan la participación política de la coya en la organización incaica. En ese sentido, parecería que la participación de la mujer en el manejo del poder estaba relacionada con un protagonismo en los ritos que hacen que el poder funcione, pues es en el espacio de socialización que precede a cualquier convocatoria de energía, y en la ampliación del parentesco, en donde las mujeres tuvieron su más importante rol. La Coya en el imperio Tahuantinsuyo, es el nombre que recibe la esposa principal del Inca o Sapac Inca, para distinguir a las mujeres o miembros de familia imperial como la esposa del emperador, la señora soberana o las esposas secundarias. Los atributos que tiene la coya en el imperio Tahuantinsuyo, es la primera de las mujeres, única esposa legitima del emperador Inca o Sapac Inca, y quien dirige en su ausencia el gobierno de la capital del imperio Cuzco, o Tahuantinsuyo. También organizaba en caso de necesidad las ayudas a los damnificados cuando haya grandes catástrofes, la coya y sus hijas eran las únicas personas autorizadas que tenían el acceso a las vírgenes del sol, las vírgenes del sol Vivian en casas alejadas hechas de barro y en zona de muchos pastizales.
Los atributos que tiene la coya en el imperio
Tahuantinsuyo, es la primera de las mujeres, única esposa legitima del emperador Inca o Sapac Inca, y quien dirige en su ausencia el gobierno de la capital del imperio Cuzco, o Tahuantinsuyo. También organizaba en caso de necesidad las ayudas a los damnificados cuando haya grandes catástrofes, la coya y sus hijas eran las únicas personas autorizadas que tenían el acceso a las vírgenes del sol, las vírgenes del sol Vivian en casas alejadas hechas de barro y en zona de muchos pastizales. La coya en el imperio del Tahuantinsuyo, desempeñaban su vida acompañadas de gran lujo y boato, contaban para su servicio con gran numero de mujeres, ellas no salían de su palacio salvo en contadas coacciones y cuando alían eran acompañadas por personas de su servicio, y siempre sobre un trono para que sus pies no tocasen el suelo, Murua dice que, en la muerte de Tupac Yupanqui, quiso dejar como sucesor no al hijo de su esposa principal, sino al hijo de otra mujer a la que quería mucho. Llamada chiqui Ocllo del cual su hijo se llamaba Cápac huare, cuando ese estaba preparando ya la ceremonia de coronación los hermanos de la coya mama Ocllo, forzaron el nombramiento como sucesor del hijo de esta. Con estas razones tan evidentes se suspendió la coronación. La coya en el imperio del Tahuantinsuyo, desempeñaban su vida acompañadas de gran lujo y boato, contaban para su servicio con gran numero de mujeres, ellas no salían de su palacio salvo en contadas coacciones y cuando alían eran acompañadas por personas de su servicio, y siempre sobre un trono para que sus pies no tocasen el suelo, Murua dice que, en la muerte de Tupac Yupanqui, quiso dejar como sucesor no al hijo de su esposa principal, sino al hijo de otra mujer a la que quería mucho. Llamada chiqui Ocllo del cual su hijo se llamaba Cápac huare, cuando ese estaba preparando ya la ceremonia de coronación los hermanos de la coya mama Ocllo, forzaron el nombramiento como sucesor del hijo de esta. Con estas razones tan evidentes se suspendió la coronación. Finalmente, lo que resulta también evidente para la figura de la mujer principal del Tahuantinsuyo es que, a partir de la lectura de las fuentes, el inca y la coya, en tanto autoridades arquetípicas, se comportaban como partes opuestas y complementarias de una misma dualidad, por lo que eran considerados yanantin, en tanto ambos constituían la pareja primordial del Tahuantinsuyo. Sobre este tema, resulta significativo el hecho de que, aún cuando se trata de una etnía norteña, el curaca de Cajamarca convocaba la mano de obra de sus parientes junto con su mujer, . e se acuerda este testigo aver visto quando el dicho don Pedro yba a sus pueblos que llevaba consigo a la dicha Cosa Vanunchipac su mujer la llevaban en una amaca con munchas trompetas como señora principal e las otras yndias mançebas del dicho don Pedro llevaban chicha e maíz para datalles de comer. Asimismo, como se señaló anteriormente, la presencia de la complementariedad entre el inca y la coya se puede rastrear a partir de los propios mitos de origen de los incas los mismos que, en todas sus versiones, nos ofrecen la imagen de la pareja interactuando a la hora de presentarnos el tema. Incluso, Garcilaso menciona que un anciano tío de su madre le informó que la pareja primordial formada por Manco Cápac y Coya Mama Ocllo Huaco, eran hermanos, hijos del Sol y de la Luna, al igual que los incas y las coyas.