La hidrografía de América

Ciencias Sociales
 Responde
¿Es la rama de la geografía física que se encarga de la
descripción y estudio de la distribución de las aguas
marítimas y continentales?
 La Hidrografía

Es la rama de la geografía física que se encarga de la descripción

y estudio de la distribución de las aguas marítimas y
continentales.
 Responde
¿Cuál es el objeto de estudio de la hidrografía?
 La hidrografía
Su objeto de estudio son las aguas continentales: arroyos, lagos,
lagunas, aguas subterráneas y, especialmente, ríos.

Analiza las características más importantes de estos, como el

caudal, las cuencas, vertientes, lechos o cauce, régimen fluvial,
erosión y sedimentación entre otros.

Aguas marítimas: océanos y mares, los cuales son objeto de

estudio de la oceanografía.
 Responde
¿Qué diferencia existe entre las aguas marítimas y las
aguas continentales?
 Aguas marítimas / aguas continentales
- Tienen altas concentraciones de sales
minerales, como el sodio.
- Se ubican a lo largo y ancho del
continente por todos los litorales
marítimos.
- Abastecen a algunos pueblos
(desalinización)
- Son utilizadas en las actividades
mercantes y en el transporte de productos.
- Nacen en las diversas regiones del continente.
- Son llamadas aguas dulces.
- Se dividen en:
Aguas fluviales: nacen en las montañas altas y
forman grandes ríos.
Aguas lacustres: constituyen la formación de
lagos, lagunas y aguadas.
Aguas freáticas o subterráneas: de las que se
obtienen agua para el consumo humano.
Zonas hídricas de América
1. Vertiente del océano Glacial Ártico: los ríos se mantienen congelados
gran parte del año son navegables en el verano.

2. Vertiente del océano Atlántico: los ríos son caudalosos, navegables y

de gran extensión.

3. Vertiente del mar Caribe: la conforman los ríos de América Central y

de las islas caribeñas.

4. Vertiente del golfo de México: es el lugar donde desembocan la mayor

parte de ríos de América del Norte.

5. Vertiente del océano Pacífico: se caracterizan por su longitud y

algunos por ser muy raídos en su caudal.