¿Cómo manejaremos los

asuntos económicos?

Exploremos 10 claves para el buen manejo de las finanzas dentro del

hogar cristiano.
A. Confíe en Dios como la
fuente para todas sus
necesidades.

(Fil 4:19)
Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en
gloria en Cristo Jesús.
B. Perciba lo que vale más en
la vida que el dinero.
Mateo 16: 26 Porque ¿qué aprovechará al
hombre, si ganare todo el mundo, y perdiere su
alma? ¿O qué recompensa dará el hombre por
su alma?.

Prov. 16:16 Mejor es adquirir sabiduría que oro

preciado;
Y adquirir inteligencia vale más que la plata.

Prov. 22:1 De más estima es el buen nombre

que las muchas riquezas,
Y la buena fama más que la plata y el oro.
C. Sea honrado y fiel en lo
poco
• Estas Escrituras nos advierten de los resultados de
conseguir el dinero deshonestamente. Lo que parece
ser una vía rápida hacia la riqueza puede ser un camino
largo al juicio.
• José fue un administrador fiel en la casa de Potifar—y
en la prisión—antes de llegar a ser gobernador de
Egipto.
• David fue fiel con una pocas ovejas antes de que Dios
lo hiciera rey sobre la nación de Israel.
D. Trabaje
arduamente
(2 Ts 3:6, 10)
6 “Pero os ordenamos… que os apartéis
de todo hermano que ande
desordenadamente… 10Porque también
cuando estábamos con vosotros, os
ordenábamos esto: Si alguno no quiere
trabajar, tampoco coma”
E. Use los talentos
de cada cónyuge.

Dios provee a la iglesia de talentos y dones para

tener éxito. Asimismo, en el matrimonio, Dios
ha creado al esposo y a la esposa como un
equipo. Juntos, tienen las capacidades que
necesitan para tener éxito. La pareja de casados
debe discernir cuáles son las capacidades que
Dios ha puesto en cada uno de ellos.
F. Comparta todas sus
posesiones.

• El esposo y la esposa deben tener una actitud de colaboración y

confianza. El dinero de “él” y el dinero de “ella” debe convertirse
en el dinero de “ellos”. Para llegar a ser completamente uno, el
esposo y la esposa deben compartir su patrimonio. Cuando cada
uno ama al otro como a sí mismo, ésta participación llega a ser un
gozo,

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G. Niéguese a gastar el
dinero apresuradamente
en los deseos carnales
que se presentan.
“Los pensamientos del diligente ciertamente tienden a la
abundancia; mas todo el que se apresura alocadamente, de
cierto va a la pobreza” (Pr 21:5). Este versículo acentúa la
diferencia entre hacer planes lenta y cuidadosamente para los
gastos, y consumir el dinero apresuradamente.

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H. Haga planes
para las
necesidades
futuras.
• La gente insensata piensa solamente en el
presente. “El perezoso no ara a causa del
invierno; pedirá, pues, en la siega, y no
hallará” (Pr 20:4). “Tesoro precioso y aceite
hay en la casa del sabio; mas el hombre
insensato todo lo disipa” (Pr 21:20).
I. Formule un
presupuesto para
dirigir sus gastos.
Un presupuesto es una guía para emparejar sus
gastos con sus entradas. Un presupuesto ayuda a la
pareja a saber cuánto dinero planear para cada
necesidad. La Figura 6.11 muestra un ejemplo de
planear un presupuesto para cada mes.

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Gaste menos de lo que gana.

Es prudente que la pareja de casados lleve un presupuesto. Esto les da un

registro de cómo manejan su dinero. El registro puede mostrar que no hay
suficiente para las necesidades. O el registro puede mostrar que el dinero se
ha gastado en cosas menos importantes. Luego no tienen dinero para las
prioridades—las cosas que son más importantes. Al final del mes, pueden
cambiar el presupuesto.

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J. Sea generoso—
comparta con los
demás.
Dios bendice a los que son generosos.
24Hay quienes reparten, y les es
añadido más; y hay quienes retienen
más de lo que es justo, pero vienen a
pobreza. 25El alma generosa será
prosperada; y el que saciare, él
también será saciado (Pr 11:24-25).
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Conclusión.

• “¿Cómo manejaremos los

asuntos económicos?” es una
pregunta clave. Es importante
que ambos cónyuges analicen los
temas de esta lección. Cada uno
debe comprometerse con los
principios de Dios sobre el
dinero. Y ambos deben convenir
en la forma de manejar el dinero
que les entra.
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