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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO.

MATERIA: LENGUAJE, CULTURA Y PODER.


PROFESORA: PEREZ APARICIO ANA LAURA
ALUMNO: RODRÍGUEZ CARLOS EDUARDO

TEMA 4: PROBLEMAS CONTEMPORÁNEOS DE LA RELACIÓN LENGUAJE, CULTURA Y


PODER
ACTIVIDAD 1: LOS SUJETOS DE LA ACCIÓN POLÍTICA.
TERCER SEMESTRE.
19/11/2021.
Totalitarismos

• Los totalitarismos logran imponerse en sociedades atomizadas, compuestas por


individuos aislados, puesto que es en este tipo de sociedades en los que la lógica
totalitarista logra arraigarse a través del sentimiento de lealtad que emana de los
mismos sujetos (Delgado, 2012, p. 11).
• Logran despertar ya sea por medio de la fuerza, las mentiras, el terror y la
propaganda (Delgado, 2012, p. 11).
• Tienen como propósito concebir y configurar una fusión entre el Estado y la sociedad
en la forma pueblo-Uno (Delgado, 2012, p. 11).

Estos personajes fueron líderes de Partidos totalitarios


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El totalitarismo supone la construcción de
un “espacio totalitario” cuya cohesión o
integración depende exclusivamente de “la
acción y la ciencia del dirigente” que se
impone en un espacio social
homogeneizado previamente por las
mismas dinámicas del sistema totalitario y
que igualmente implica la fusión del Estado
con la sociedad en un solo cuerpo (Delgado,
2012, p. 11).
Funciona con una estructura dual
conformada por el Partido y el Estado en la
cual el Partido se convierte en ““agente
privilegiado del proceso de identificación
del poder y el pueblo y del proceso de Adolf Hitler (1889-1945)
homogeneización del campo social” (Lefort,
Fue uno de los líderes totalitarios más
1990: 51, como se citó en Delgado, 2012, p. reconocidos por su personalidad y
11). Esa estructura de dualidad es la que persuasión a las masas alemanas
permite al Partido que sea el eje rector y principalmente.
controlador del aparato estatal.
Es la autoridad dual la que da lugar al
totalitarismo y a que el Partido sea el sujeto https://i.ytimg.com/vi/59yS9u6p6DA/hqdefault.jpg
de la acción política fundamental y el Estado
pasa a ser el instrumento de poder de dicho
Partido (Delgado, 2012, p. 12).
En los totalitarismos, es el Partido
el que se apropia del aparato
estatal y, de esta forma, se
constituye en el ente abarcador y
controlador que concentra todo
poder existente.
El Partido es el que ejerce
influencia sobre el Estado, por eso
se dice que “el verdadero jefe de
Estado no es el jefe de Estado,
sino el jefe del Partido” (Morin,
1983: 56, como se citó en
Delgado, 2012, p. 12).
El Partido controla, organiza y
también manipula y suprime toda
Los personajes como Mussolini y Hitler fueron líderes de acción política. Asimismo, como
Partido y tenían gran influencia sobre el Estado y la
sociedad de sus correspondientes países. sujeto de acción política en los
totalitarismos ha tomado el poder
del Estado a fin de evitar la
https://2.bp.blogspot.com/_x5gCZUzMdXI/SlUYJxVXoxI/AAAAAAAAAAg/lh0TKQ1ZhKY propagación de poderes
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exteriores y más bien de ser
únicos, totalitarios (Delgado, 2012,
p. 12).
En los totalitarismos el jefe o líder es el centro de atención y el que dirige, sin
embargo, tan solo es relevante principalmente para el Partido, aunque es posible que
sus ideas puedan persuadir a otros más como sucedió con el nazismo por ejemplo
(Delgado, 2012, p. 12).
el jefe del Partido asume una posición privilegiada y por tanto central, porque asume la
responsabilidad personal por todo tipo de acciones y respuestas que se den al interior
del Partido por parte de los diferentes miembros, este privilegio le permite actuar como
si fuese superior al Partido, sin embargo, no puede “apoderarse del poder” (Delgado,
2012, p. 12).
Los mecanismos o estrategias que usan los totalitaristas para preservar el poder son
principalmente la propaganda y el terror, la propaganda es usada para “conectar” al
régimen totalitario con un exterior no totalitario (Delgado, 2012, p. 13).

Los campos de concentración


eran demasiado crueles y
muchos judíos perdieron la vida
en ellos, era una estrategia (de
terror) de los nazis para
mantener el control y la idea
racista de Hitler porque
predominará su raza aria
(alemana).

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La propaganda es pues una “necesidad” una
estrategia política imprescindible para
“ganarse” a las personas, persuadir en ellas
y que estas pasen a formar parte del grupo
totalitario (Delgado, 2012, p. 13.
La propaganda totalitaria se sustenta en el
carácter científico de sus afirmaciones, se
dice que se deja la obsesión por lo científico
solo cuando se llega al poder, aunque
también es una estrategia de poder claro.
También actúa como un puente que une la
mentira con lo real que creando mentiras
para hacer valido al experimento totalizador
(Delgado, 2012, p. 13).
Por otro lado, el terror es el recurso
empleado al interior de las fronteras que las
separa del exterior, en resumen “constituye
la verdadera esencia de la forma de gobierno
de los totalitarismos” (Arendt, 2007: 428, Ejemplo de un póster que utilizaban los nazis para
como se citó en Delgado, 2012, p. 13). persuadir a la sociedad.

El Partido asume el rol de guiar, controlar y


monopolizar la acción política mediante el https://th.bing.com/th/id/R.d26330912fc0bd24f9ba15941fa96eee?
empleo del terror como arma política y de la rik=CalCZ6sQZBzofg&riu=http%3a%2f%2fimage.slidesharecdn.com
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propaganda como estrategia (Delgado, 2012, regmenes-totalitarios-2-728.jpg%3fcb
%3d1335094123&ehk=vyF4FXQWnQ8WKtEWFBwwaRxOK
p. 17). %2fNxKSQCv1vSZco828k%3d&risl=&pid=ImgRaw&r=0
Autoritarismo

Su “lógica pragmática” permite identificar en


sus orígenes la necesidad de solucionar
conflictos políticos, el deseo de impulsar
procesos de modernización o incluso, la
voluntad de superar crisis económicas
(Delgado, 2012, p. 13).
Es un régimen con carácter “transitorio” o
“transicional”. La condición de temporalidad
es la que le otorga a los regímenes
autoritarios su legitimidad y también su
“utilidad” para solucionar crisis y
situaciones adversas (Delgado, 2012, p. 13).
Para autores como Linz (2000), los
autoritarismos, son “arreglos
institucionales” o “arreglos de poder” en los
que existe un limitado pluralismo y cierta
movilización política, y en donde un líder
La imagen representa lo que es un autoritarismo, carismático o un reducido grupo, ejerce el
dirigido por un líder o pocos, quienes manejan al resto. poder dentro de unos límites y unas reglas
no necesariamente definidas con claridad,
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rik=TCCzGm%2fD07j8VQ&riu=http%3a%2f%2fwrmx00.epimg.net pero sí predecibles (Delgado, 2012, p. 13).
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En los autoritarismos como regímenes políticos se emplea el término de “mentalidad”
como reemplazo al término “ideología”, debido a que las mentalidades (de los líderes)
“son formas de pensar y sentir, más emotivas que racionales, que proveen formas no
codificadas de reacción a diferentes situaciones” (Linz, 2000: 159, como se citó en
Delgado, 2012, p. 13).
Claro está que los autoritarismos pagan un alto precio por “carecer” de una ideología
como “sistema de creencias” que movilice a la población y que a su vez le permita a
esta identificarse con el régimen (Delgado, 2012, p. 14).
En los autoritarismos, el sujeto de la acción política toma forma en la figura del poder
ejecutivo, este es la máxima autoridad.

La mentalidad era un aspecto


muy importante para los
autoritarios, ellos usaban este
término en lugar del de ideología
que utilizaban en otros
regímenes.

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Este sujeto de acción política
representado en la figura del poder
ejecutivo, puede a su vez tomar varias
formas (dependiendo del tipo de
régimen político autoritario que impere)
(Collier, 1979; Linz, 2000, como se citó
en Delgado, 2012, p. 14).
En el autoritarismo existe un cuerpo
autoritario (sea el Partido o la élite
militar) que “no se encuentra ya
perfectamente organizado ni monopoliza
el acceso al poder” y a la posibilidad de
un pluralismo que aunque no es
democrático, “obliga a distinguir entre
ciertas posiciones” y a un
“descafeinamiento de la ideología oficial
que ahora se presenta cargada de
ambigüedades” (Taibo, 2005: 105, como
se citó en Delgado, 2012, p. 14).
En los Estados autoritarios es el poder Para los autoritarismos el poder y liderazgo recae en el poder
ejecutivo
ejecutivo el encargado de direccionar la
acción política (Delgado, 2012, p. 17).
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Democracias

En las democracias como formas de gobierno y en las democracias modernas cuya esencia
proviene de la tradición política liberal el “conjunto de ciudadanos miembros [son]
considerados iguales en lo tocante a la posibilidad de adoptar las decisiones de gobierno”
(Dahl, 2000: 104, como se citó en Delgado, 2012, p. 15-16).
Es posible distinguir dos amplias tendencias desde las cuales la democracia es concebida,
ya sea como protección o como desarrollo:
• La democracia como protección alude a la idea de brindar una suerte de defensa a la
comunidad política frente “al uso despótico del poder político” (Delgado, 2012, p. 16).
• La democracia como desarrollo, “además de ser algo instrumental”, lleva a que los
individuos como ciudadanos sean más partícipes o activos en los procesos políticos,
lleva consigo el ideal de un mejor mundo, de una sociedad “más libre e igual”, en la que
los sujetos tengan la plena certeza y posibilidad de desarrollar libremente su
personalidad a través de una participación política que trascienda la mera votación
(García, 2006, como se citó en Delgado, 2012, p. 16).
Dahl señala que el tipo de democracia
“ideal” que contrasta con la forma “real”,
plantea una serie de condiciones o
requisitos mínimos alusivos a conseguir la
igualdad de todos los miembros de la
comunidad política. Dentro de estos
requisitos se encuentran:
La participación efectiva, la igualdad del
voto, la igualdad respecto a las
oportunidades para conocer sobre las
diferentes políticas alternativas y sus
correspondientes consecuencias, el control
de la agenda y la inclusión de la totalidad de
los adultos en calidad de ciudadanos (Dahl,
2000 como se citó en Delgado, 2012, p. 16).
Si tales condiciones son cumplidas, la
democracia es capaz de generar
La participación de la ciudadanía en los procesos prosperidad, igualdad política, desarrollo
electorales hace posible la democracia.
humano, medios para alcanzar la paz,
protección de los derechos esenciales,
https://madreshoy.com/wp-content/uploads/2020/09/democracia.png abolición de la tiranía y autonomía moral,
entre otras “consecuencias deseables”
(Dahl, 2000, como se citó en Delgado, 2012,
p. 16).
Democracia real necesita de instituciones y de
condiciones que la materialicen, por ejemplo,
existencia de cargos públicos electos, elecciones
periódicas libres e imparciales, libertad de
expresión, autonomía de asociación y una
ciudadanía inclusiva (Dahl, 2000, como se citó en
Delgado, 2012, p. 16).
Con los Estados democráticos, se consolida la
figura del ciudadano como el sujeto de la acción
política, como individuo que puede participar en
el proceso político de toma de decisiones, sin
olvidar que dicha participación se encuentra
avalada por la existencia de derechos civiles
formales. Asimismo, también se le asignan
obligaciones y ello se relaciona con el Estado de
una forma particular (Delgado, 2012, p. 16).
El ciudadano entonces como sujeto privilegiado
de la acción política en los Estados
democráticos, es un individuo que se constituye Las campañas electorales ayudan a la
en miembro de la comunidad política. El ciudadanía a escuchar las propuestas de los
reconocimiento de sus derechos y deberes como candidatos y tomar una mejor decisión al
ciudadanos democráticos implica que estos san elegir por quien emitir su voto.
reconocidos por el Estado (Bobes, 2000 como se
citó en Delgado, 2012, p. 16-17).
https://www.importancia.org/wp-content/uploads/politica-de-la/Democracia-2
-1.jpg
A diferencia de los Estados totalitarios y autoritarios, los Estados democráticos
reconocen en el ciudadano aquel individuo que comienza a ocupar el espacio público
(Marshall, 1965 como se citó en Delgado, 2012, p. 17).
En las democracias, el ciudadano como agente y con el uso de la razón práctica,
cuenta con la capacidad de elegir entre diferentes opciones (O´Donell, 2004 como se
citó en Delgado, 2012, p. 17) y de ser parte de los procesos políticos que involucran al
cuerpo social.
La posibilidad de ser parte y, por lo tanto, actor/sujeto de la acción política de los
individuos en calidad de ciudadanos en las democracias, permite sostener la idea de
que estas constituyen el sistema de gobierno más adecuado para evitar los abusos del
poder y para brindar los medios para generar justicia (Dahl, 2000 como se citó en
Delgado, 2012, p 17).

La ciudadanía en la democracia tiene la


oportunidad de elegir a sus representantes a
través del voto.

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Referencias
Delgado, M. (2012). Los sujetos de la acción política en los totalitarismos, los
autorirtarismos y las democracias: de la política del terror a la política de la
deliberación. RAI revista Análisis Internacional, 9-18.

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