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LIDERAZGO FEMENINO EN LA

IGLESIA ACTUAL
ESPIRITUALIDAD Y SERVICIO
ESPIRITUALIDAD
Esta sesión es una invitación a explorar conceptos y prácticas para fomentar una espiritualidad viva. Ya
hemos hablado acerca de los tipos de liderazgo, de sus características, hemos reflexionado acerca de las
realidades de nuestras iglesias y ministerios, del contundente llamado al servicio por parte de Jesús.
Ahora pensemos desde adentro, desde nuestro fundamento, desde nosotras mismas. Para conocer y
considerar cómo Dios se hace y está presente en la historia humana, siendo protagonista y participe en
las relaciones cotidianas de las comunidades. En este sentido, se trata de reconocerlo (Dios) nosotras, en
el silencio, en las palabras de otras personas, en la vida misma.
¿QUÉ ES ESPIRITUALIDAD?

• ¿Qué es espiritualidad?
• ¿Qué me enseñaron en mi iglesia por espiritualidad?
• ¿Qué es espiritualidad cristiana?
• ¿ Espiritualidad es lo mismo que religiosidad?
A MANERA DE INTRODUCCIÓN

• Dr. Terry LeBlanc, un teólogo evangélico, y una persona indígena de Canadá.

• “La espiritualidad occidental se define conductualmente, que se hace, cuando, donde. La espiritualidad
indígena dice, somos seres espirituales independientemente de nuestras conductas. No digo que nuestras
conductas sean irrelevantes, sino que somos seres espirituales independientemente de cómo actuamos. La
espiritualidad que poseemos inherentemente no cambia solo porque lo expresamos de manera pobre o no
existente. Reside dentro de nosotros porque Dios nos la ha impartido… Entonces la pregunta debe ser
¿cómo estamos expresando la impartición ontológica de Dios, como seres humanos en nuestras conductas y
nuestras acciones, en una manera que honra a Dios, a otras personas y al resto de la creación?”
JESÚS, EL MEJOR EJEMPLO DE ESPIRITUALIDAD

Mateo 14, 13-14


LA ESPIRITUALIDAD Y EL SERVICIO A LOS DEMÁS

• “Cuando Jesús recibió la noticia, se retiró él solo en una barca a un lugar solitario. Las multitudes se
enteraron y lo siguieron a pie desde los poblados. Cuando Jesús desembarcó y vio a tanta gente, tuvo
compasión de ellos y sanó a los que estaban enfermos.”
EL PASAJE EVOCA ALGUNAS PREGUNTAS

• ¿Cuál fue la noticia que Jesús recibió?


• ¿Qué decide hacer Jesús al recibir esta noticia?
• ¿Qué hubieran hecho ustedes al recibir una noticia parecida?
• ¿Estando en duelo, cómo reaccionarían Uds. si algunas personas les
buscara pidiendo ayuda?
• ¿Qué emoción y acción vemos de parte de Jesús?
TENTACIONES PARA LOS/LAS LIDERES

• Primero, hay una tentación a nunca descansar, a creer que tiene que estar siempre ocupado y siempre disponible.
Jesús lo vence intencionado un tiempo de soledad, algo que él solía hacer (Lucas 5:16).

• Segundo, hay una tentación a valorar tanto la comodidad de uno y sus espacios de descanso que cuando haya una
necesidad, el líder dice que no está disponible. Jesús vence esta tentación estando presente con las necesidades de la
gente, hasta el punto de poder compadecerse y actuar.

• De estas dos tentaciones, ¿cuál es más fuerte para Uds.? ¿Qué podrían hacer para tener una espiritualidad más
integrada?
Mujeres, espiritualidad y liderazgo
Como lideresas debemos fomentar una fe madura, que nos
transforme desde dentro de nuestros corazones y, que nos
conduzca a una ética y compromiso de servicio con los y
las demás.
La experiencia espiritual debe ser un proceso de
autoconciencia de una realidad, que trasciende los propios
límites para encontrarse con Dios. Es una experiencia
liberadora
• La espiritualidad sana permite dar respuesta propia,
autónoma, surgida de la propia interioridad, a la realidad
que habita, potencia la conciencia de la alteridad y de la
responsabilidad, y esto es un factor de transformación
personal y social individual y comunitario.
Debemos procurar una espiritualidad de ojos abiertos, vivida
en gozo y fiesta, que este siempre abierta al abrazo, al
intercambio y la transformación y, que atraviese todas las
fronteras de la edad, sexo, raza, nacionalidad, credo o
cualquier otro tipo de barreras.
La espiritualidad es un acto político, una acción simbólica
como el Magníficat de María y otras mujeres de la
Escritura, que nos recuerdan que la experiencia de Dios no
pasa en silencio por nuestro mundo. Se desvela, penetra en
la realidad violentada y la rescata tiernamente,
reivindicando su lugar como voluntad salvífica de Dios.

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