Shanna Galea

Categoría: Guerrero Mentalista Nivel: 7 Gnosis: Natural, Nephilim Ebudan 10

Ventajas y Desventajas: Conocedor de todas las materias, Aprendizaje en campo:
Intelectuales, Acceso libre a disciplinas psíquicas, Concentración pasiva, Sueño profundo,
Enemigo poderoso (1).
Tamaño: 15 Regeneración: 2 (20 PV / día y pen -5 al día) Cansancio: 8 Acciones por Asalto:
3 Movimiento: 7 (25 m / asalto)
RF: 70 RV: 70 RE: 70 RM: 65 RP: 85 Presencia: 60
AGI 7 CON 8 DES 11 FUE 8 INT 8 PER 7 POD 7 VOL 13
PV: 180 Turno: 100 Natural, 90 Espada Larga +10

Habilidades de Combate:
HA: 120 Desarmada, 190 Espada Larga +10
HP: 120 Desarmada, 190 Espada Larga +10
Daño: 30 Desarmada (CON), 90 Espada Larga +10 (FIL)
Habilidades Naturales: Uso de Espada Larga (Arma Inicial)
Llevar Armadura: 10
Armadura: Completa de Cuero (Completa +10)
TA: FIL 3 CON 2 PEN 4 CAL 3 ELE 4 FRI 3 ENE 0

Ki: 58
Acumulaciones: Agi 1, Con 1, Des 2, Fue 1, Pod 1, Vol 3
Habilidades del Ki: Uso del Ki, Control del Ki, Detección del Ki 95, Extrusión de presencia,
Extensión del aura al arma, Inhumanidad
Habilidades Psíquicas:
Proyección Psíquica: 145 (165 Caelum) Potencial Psíquico: 120 (140 Caelum)
Innatos: 2 Patrones Psíquicos: Ninguno
CVs Libres: 3
Disciplinas Psíquicas: Telepatía, Telequinesis, Energía
Poderes Psíquicos: Escaneo de zona, Impacto telequinético, Escudo de energía, Armadura
telequinética, Descarga de energía, Prohibición mental, Crear energía, Comunicación mental,
Presa telequinética, Análisis mental, Balística, Asalto psíquico, Destrozar, Inmunidad,
Detección de movimiento
Nivel Psíquico: 15
Red Neuronal: Manipulación Psiónica

Habilidades Secundarias: Acrobacias 20, Atletismo 50, Montar 40, Nadar 20, Trepar 20,
Saltar 30, Pilotar 30, Estilo 30, Intimidar 40, Liderazgo 30, Persuasión 60, Comercio 20,
Callejeo 20, Callejeo (Ciudad natal) 60, Etiqueta 20, Advertir 50, Buscar 50, Rastrear 20,
Animales 60, Ciencia 100, Ley 60, Herbolaria 60, Historia 90, Investigación Psi 80, Táctica 60,
Medicina 90, Memorizar 100, Navegación 60, Ocultismo 60, Tasación 60, Valoración mágica
50, Frialdad 40, Proezas de fuerza 50, resistir dolor 40, Cerrajería 30, Disfraz 30, Ocultarse 60,
Robo 30, Sigilo 60, Trampería 30, Venenos 20, Arte 20, Baile 20, Forja 80, Runas 30, Alquimia
20, Animismo 20, Música 20, Truco de manos 80, Caligrafía ritual 30, Orfebrería 30,
Confección 30, Confección marionetas 20

Idiomas: Latín, Elium Lacrimae, Ultwe’alariel, Irula, Jashú

Equipo: Una montura, varias mudas de ropa variada, raciones de calidad para más de una
semana, un completísimo equipo de viaje que puede incluir armas, y una armadura ligera.

Artefactos: Escudos Rúnicos. Caelum (Espada Larga +10).

Dinero: 15 MO, 450 MP, 500 MC

Caelum
La espada Caelum es una obra maestra de elegancia y poder, reflejando su naturaleza celestial
y su afinidad con la Guerrera Mentalista que la empuña. Posee un diseño femenino con una
estética refinada y etérea. La empuñadura es de un metal plateado pulido, adornado con
grabados intrincados que recuerdan a patrones de plumas y flores entrelazadas, simbolizando
la ligereza y la gracia. La guarda se extiende en curvas suaves, como sutiles y pequeñas alas
desplegadas, ofreciendo protección y al mismo tiempo evocando la imagen de un ser celestial
en vuelo. La hoja de la espada es larga y delgada, forjada en un metal que parece capturar la
luz de las estrellas. A lo largo del filo, hay grabados delicados que brillan con un resplandor
sutil, como si estuvieran imbuidos de una energía mística. A lo largo de la guarda de la espada,
hay pequeños cristales incrustados que reflejan los colores del cielo al amanecer y al
atardecer, cambiando su tonalidad con la luz y el ángulo de visión. Cuando se empuña, la
espada parece emitir un suave halo de luz, no lo suficientemente brillante como para
deslumbrar, pero si lo bastante para destacar su presencia y su conexión con los reinos
superiores.
La Caelum no es solo un arma, sino también un símbolo de la unión entre la mente y el
cosmos, una extensión de la voluntad de Shanna y una manifestación de su poder interior. Es
una espada que cualquier guerrera estaría orgullosa de llevar a su lado en la batalla.
Calidad Excepcional: Caelum es una espada larga de Calidad +10, capaz de dañar energía. Está
diseñada para ser una extensión de la voluntad y el poder psíquico de Shanna, convirtiéndola
en un arma formidable tanto en el plano físico como en psíquico.
Poderes Psíquicos Aumentados: Esta capacidad mejora el Potencial Psíquico y la Proyección
Psíquica de Shanna en un +20.
Ignorar Armadura: Reduce en -3 TA la armadura del enemigo, en todo salvo la TA Energía.
Barrera de Daño: Caelum posee una Barrera que absorbe hasta 80 puntos de daño tanto Físico
como de Energía. Gracias a un Cristal Psíquico incrustado en su empuñadura.
Duplicación de Daño: Bajo ciertas condiciones, Caelum puede doblar el daño infligido. Caelum
duplica su daño cuando se enfrenta a criaturas oscuras, o cuando Shanna ha perdido una
cantidad de vida significativa (al menos la mitad de los PV totales de Shanna). También dobla
su daño si Shanna es privada de sus poderes mentales.
Visión de la Verdad: Caelum otorga a Shanna la capacidad de Ver Magia, Espíritus y Entidades
en la Penumbra.

Escudos rúnicos
Los Escudos rúnicos son trescientos artilugios defensivos creados poco después de la Guerra
de Dios. Tienen forma de joyería: anillos, collares y similares. Fueron redescubiertos por Sol
Negro hace dos décadas, y desde entonces circulan por los mercados clandestinos.
Estudios Psi: 120 / 140 / 240
Poder programado: este artilugio posee un cristal +10. El mismo se encuentra imbuido con el
poder psíquico Escudo telequinético en Difícil y tiene un enfriamiento de cinco asaltos.
Protección rúnica: cuando el usuario del Escudo rúnico reciba un golpe el mismo reduce en 20
puntos la HA del oponente tal y como si tuviera dos capas de armadura adicionales. Funciona
con cualquier tipo de ataque excepto los que tengan como crítico primario energía. Una vez el
escudo se destruye, el personaje debe esperar cinco asaltos para poder hacerlo funcionar
nuevamente.

Shanna nació en Ilmora, en el seno de una familia modesta pero feliz. Sus padres, Elena y
Marcos, eran personas trabajadoras y amorosas que se esforzaban por criar a su hija en un
ambiente de amor y respeto. Antes de que Shanna manifestara sus poderes, su infancia
transcurrió con relativa normalidad. Disfrutaba de juegos inocentes, aprendía de sus padres y
exploraba la belleza del principado.
Todo cambió cuando, a una edad temprana, Shanna comenzó a experimentar extraños
fenómenos. Al principio, eran pequeños incidentes que sus padres atribuían a la imaginación
de una niña activa. Sin embargo, conforme pasaba el tiempo, los poderes psíquicos de Shanna
se volvían más evidentes y difíciles de ignorar.
Uno de esos días de invierno en Ilmora, donde el frío se colaba por las grietas de las ventanas y
la nieve cubría el paisaje con su manto blanco. Shanna, a sus ocho años, aún una niña curiosa y
enérgica, jugaba en la sala de estar de su hogar mientras sus padres, Elena y Marcos,
realizaban sus labores cotidianas cerca de ella.
De repente, un golpe de viento helado hizo que una ventana se cerrara bruscamente,
provocando un estruendo que sacudió la tranquilidad de la casa. Shanna, sorprendida y
asustada por el ruido, instintivamente extendió la mano hacia la ventana para cerrarla, pero
algo extraño sucedió.
Un destello de energía azul brillante emitió de la palma de la mano de Shanna, rodeando la
ventana con una aureola brillante. La ventana se cerró de golpe, pero el poder descontrolado
de Shanna hizo que se rompiera en pedazos, esparciendo cristales por toda la habitación.
Elena y Marcos, alarmados por el ruido y la repentina explosión, corrieron hacia su hija.
Nadie resultó gravemente herido, pero fue suficiente para que sus padres se dieran cuenta de
la magnitud de los poderes de su hija y las posibles consecuencias de mantenerlos ocultos.
Shanna, atónita y confundida, miró sus manos temblorosas y llenas de cortes mientras
intentaba comprender lo que acababa de suceder. La sensación de perder el control la inundó
de miedo y frustración, temiendo lo que podría suceder. La mirada preocupada de sus padres y
el miedo en sus voces solo intensificaron su angustia.
Elena y Marcos temían no solo por la seguridad de Shanna, sino también por su propia
seguridad y la de su familia. Sabían que, si la Inquisición descubría los poderes de su hija,
podrían enfrentar la persecución y el castigo por ocultarla. El miedo a las represalias y la
incertidumbre sobre cómo proteger a su hija los llevaron a tomar la difícil decisión de avisar a
la Inquisición, en un intento desesperado por buscar ayuda o guía sobre qué hacer con la
situación.
Fue en ese momento de caos y confusión que Shanna decidió huir, temerosa de hacer daño a
sus seres padres y de enfrentar la persecución de la Inquisición, decidió abandonar todo lo que
conocía.
Tras huir de su hogar en Ilmora, Shanna vagó por tierras desconocidas durante varios meses,
hasta que llegó a la bulliciosa ciudad de Arkángel, la joya del Sacro Santo Imperio donde
encontró refugio. Después de vagar durante varios días por las calles, buscando un lugar
seguro donde pasar desapercibida, Shanna fue sorprendida por un encuentro inesperado en
las sombrías calles de la Zona Gris.
En una noche fría y desolada, Shanna se encontraba buscando un refugio temporal en un
callejón oscuro cuando se topó con un hombre misterioso que la observaba desde la
penumbra. Intrigada pero cautelosa, se acercó con precaución, preguntándose quién podía ser
aquel extraño en una ciudad tan grande y diversa como Arkángel.
El hombre, cuyo nombre era Arion, resultó ser un Sylvain. Sin embargo, a pesar de sus reservas
naturales, Arion vio en Shanna a alguien necesitado de ayuda y protección, y decidió acogerla
en su hogar en la ciudad.
Durante sus primeros años en Arkángel, Shanna se centró en aprender a controlar sus poderes
psíquicos y en adaptarse a su nueva vida junto a Arion. Aunque tenía una sed insaciable de
conocimiento, su prioridad era dominar sus habilidades y mantenerse oculta de la Inquisición.
Con el paso del tiempo, Shanna se convirtió en una joven decidida y valiente, lista para
enfrentar los desafíos que el mundo le presentara. A medida que crecía, su deseo de explorar
el vasto conocimiento del mundo se intensificaba, pero aún no estaba lista para ingresar a la
universidad. Sin embargo, su curiosidad y sed de aprendizaje la llevaron a aprovechar cada
oportunidad para adquirir conocimientos, ya sea a través de la lectura de libros en bibliotecas
o de conversaciones con eruditos y viajeros que visitaban la ciudad.
Con el tiempo, Shanna descubrió que Arion era mucho más que un simple desconocido
benevolente. Era un erudito y un maestro en las artes místicas, capaz de comprender y
ayudarle a controlar los poderes psíquicos que tanto atormentaban a Shanna desde la infancia.
Los entrenamientos de Shanna con Arion fueron intensos y rigurosos, pero también llenos de
comprensión y apoyo. Arion le enseñó a canalizar y dirigir su energía psíquica, a entender la
naturaleza de sus sueños y a interpretar los mensajes ocultos en ellos. Además, Arion la
instruyó en el arte de la espada, reconociendo la importancia de la autodefensa en un mundo
peligroso y lleno de desafíos.
A medida que pasaban los días, Shanna y Arion desarrollaron una profunda conexión, forjada
en la adversidad y el mutuo respeto. Juntos, enfrentaron los peligros de la ciudad y los desafíos
de sus propios poderes, mientras Shanna se convertía en una mujer fuerte y decidida, lista
para enfrentarse al mundo con coraje y determinación.
En Arkángel, Shanna encontró un nuevo hogar y una nueva familia en la compañía de Arion, su
padre adoptivo y mentor. Juntos, exploraron las calles animadas de la ciudad, visitaron
bibliotecas y academias, y se sumergieron en el vibrante tejido cultural del Imperio de Abel.
Después de años de preparación y dedicación, llegó finalmente el momento en que Shanna
pudo inscribirse en la universidad de Arkángel. Con una mezcla de emoción y nerviosismo, se
sumergió de lleno en la vida académica, ansiosa por expandir sus horizontes y profundizar su
comprensión del mundo que la rodeaba. La universidad ofrecía un vasto abanico de disciplinas
y conocimientos, desde las artes y las ciencias hasta la historia y la filosofía.
Shanna se encontró inmersa en un ambiente estimulante y desafiante, rodeada de estudiantes
ávidos de conocimiento y profesores expertos en sus campos. Aprovechó cada oportunidad
para participar en debates, seminarios y otras actividades, buscando enriquecer su experiencia
universitaria más allá de las aulas.
A medida que avanzaban los años, Shanna se destacó por su dedicación y su capacidad para
absorber nuevos conocimientos. Hizo amigos con intereses similares y encontró mentores que
la guiaron en su camino académico y personal. Aunque enfrentaba desafíos y obstáculos,
nunca perdió de vista su objetivo de aprender y crecer como persona.
Durante su tiempo en la universidad, Shanna también tuvo la oportunidad de embarcarse en
varios viajes fuera de Arkángel, explorando nuevas tierras y culturas, ampliando así su
perspectiva del mundo y enriqueciendo su comprensión de la diversidad humana. Estos viajes
le permitieron no solo adquirir nuevos conocimientos, sino también fortalecer su espíritu de
aventura y su capacidad para adaptarse a entornos desconocidos.
En la bulliciosa ciudad de Arkángel, Shanna vivía rodeada de conocimiento y oportunidades,
pero también luchaba con un desafío constante: su trastorno del sueño. No era simplemente
una dificultad para conciliar el sueño, sino más bien una lucha contra un profundo letargo que
a menudo la envolvía en un estado de somnolencia incapacitante, este obstáculo persistente la
recordaba constantemente su vulnerabilidad y la desafiaba a encontrar formas creativas de
superarlo.
Después de unos años viviendo en Arkángel, la capital del Sacro Santo Imperio de Abel, Shanna
había aprendido a moverse con cautela, siempre consciente del peligro que representaba la
presencia de la Inquisición. A pesar de sus esfuerzos por ocultar sus poderes psíquicos, un
encuentro inesperado con los inquisidores amenazó con revelar su secreto.
En una noche oscura y lluviosa, mientras regresaban a su hogar después de una búsqueda de
conocimiento en una biblioteca secreta en las afueras de la ciudad, Shanna y su padre
adoptivo, Arion, se encontraron con un grupo de inquisidores patrullando las calles. Con el
corazón latiendo con fuerza, Shanna perdió momentáneamente el control y de su mano
comenzaron a brotar destellos de energía exponiéndolos y poniéndolos en peligro.
Gracias a la rápida reacción de Arion, lograron evadir a los inquisidores, después de escapar,
Shanna y Arion se refugiaron en un oscuro callejón de la Zona Gris, tratando de pasar
desapercibidos entre la multitud. La lluvia caía incesante sobre las empedradas calles de
Arkángel, mientras los inquisidores continuaban su búsqueda implacable en las sombras.
En medio de la tensión y el peligro, un joven intrépido llamado Lucien se cruzó en su camino.
Lucien, un habilidoso ladrón y buscavidas que conocía los secretos más oscuros de la ciudad,
vio en Shanna y Arion una oportunidad para escapar de sus propios problemas y comenzar una
nueva vida lejos de las calles.
Con una astucia y determinación impresionantes, Lucien ayudó a Shanna y Arion a evadir a los
inquisidores y a encontrar refugio en un lugar seguro. A cambio, Arion le ofreció a Lucien un
trabajo en su hogar, brindándole la oportunidad de ganarse la vida de manera honesta y
aprender nuevas habilidades.
Bajo la tutela de Arion, Lucien adquirió conocimientos sobre diversos temas. Aunque al
principio fue reticente a aceptar la ayuda y la confianza de Shanna y Arion, con el tiempo,
Lucien se ganó su lugar en el hogar y el corazón de ambos, convirtiéndose en un miembro
valioso de su pequeña familia.
Tras esto, Shanna y Arion se sumergieron en la vida cotidiana en Arkángel. Sin embargo, la
ciudad no tardó en ofrecerles nuevos desafíos y oportunidades.
Un día se encontraron con un grupo de mercenarios desesperados por ayuda. Parecían ser
gente común en busca de protección y guía en un mundo cada vez más peligroso. Intrigados
por su situación, Shanna y Arion decidieron unirse a ellos en una misión para enfrentar a una
poderosa criatura que aterrorizaba a un pueblo cercano.
La criatura resultó ser un ser de pesadilla, un monstruo antiguo que había despertado de su
letargo milenario para sembrar el caos y la destrucción. La batalla fue dura, pero Shanna y
Arion utilizando sus poderes en combinación con las habilidades de los mercenarios
derrotaron a la bestia.
Sin embargo, la victoria tuvo un precio, varios de los mercenarios resultaron muy malheridos, y
uno de ellos perdió la vida en la batalla. Este sacrificio dejó una profunda impresión en Shanna,
recordándole la fragilidad de la vida y la importancia de luchar por aquello en lo que creemos.
Después de la batalla, Shanna se encontró reflexionando sobre su propio propósito y destino.
La experiencia la llevó a cuestionarse su papel en el mundo y a buscar un mayor entendimiento
de sus propios poderes y habilidades. Decidió embarcarse en un viaje de autodescubrimiento y
crecimiento, dejando atrás Arkángel temporalmente para explorar nuevas tierras y encontrar
respuestas a las preguntas que la atormentaban.
Durante su viaje, Shanna se encontró con diversos desafíos y aventuras, enfrentándose a
peligros desconocidos y descubriendo aspectos ocultos de sí misma. Sin embargo, su mente
siempre regresaba a Arkángel y a su familia.
A medida que pasaban los meses, Shanna comenzó a experimentar sueños cada vez más
intensos y vívidos, llenos de simbolismo y mensajes ocultos. Uno de esos sueños fue
especialmente revelador, mostrándole visiones del futuro y despertando en ella un sentido de
urgencia y determinación. Esto la hizo volver nuevamente a Arkángel en busca de la guía de
Arion.
Uno de esos sueños, recurrente y perturbador, la transportaba a un paisaje desolado y oscuro,
donde las sombras danzaban en torno a ella y una figura misteriosa se alzaba en la distancia.
En el sueños, se encontraba caminando por las calles laberínticas de Americh, la ciudad de
libre comercio donde los secretos se ocultaban entre las sombras y las almas se perdían en el
laberinto de sus callejones retorcidos.
A su lado, una figura desconocida la guiaba con pasos seguros y determinados, protegiéndola
de los peligros que acechaban en las sombras de la ciudad. Juntos, exploraban los rincones
más oscuros de Americh, en busca de respuestas a los enigmas que los rodeaban. Sin embargo,
a medida que avanzaban, una sensación de inquietud se apoderaba de Shanna, como si algo
oscuro y ominoso estuviera al acecho en las sombras, esperando su momento para desatar el
caos.
De repente, Shanna se encontraba frente a una puerta de ébano adornada con extraños
símbolos y runas antiguas. Un aura de poder oscuro emanaba de la puerta, atrayéndola hacia
su interior con una fuerza irresistible. A medida que se acercaba, las sombras se cerraban a su
alrededor, envolviéndola en una oscuridad palpable y amenazante.
Justo cuando Shanna estaba a punto de cruzar el umbral, una voz susurrante resonaba en su
mente, advirtiéndola del peligro que acechaba más allá de la puerta. Aterrada pero decidida,
Shanna se enfrentaba al desafío, sabiendo que su destino estaba entrelazado con el misterio
que se ocultaba tras esa puerta cerrada.
Cada día despertaba con el corazón acelerado y sudor frío en su frente, Shanna se encontraba
más determinada que nunca a desentrañar el enigma de sus sueños y descubrir la verdad
detrás de su Sue ‘aman.
Tras meses buscando respuestas, Arion había tomado la decisión de emprender un viaje hacia
Americh en busca de respuestas sobre los sueños de Shanna, su pasado y el origen de sus
poderes.
A medida que pasaban los días sin saber de Arion, la preocupación por él y el aumento de sus
sueños inquietantes consumían los pensamientos de Shanna. A pesar de sus esfuerzos por
mantenerse concentrada en sus estudios y en su entrenamiento, el temor por el destino de su
padre adoptivo la perseguía constantemente.
Con el peso de la ausencia de Arion sobre sus hombros y el impulso de sus sueños proféticos,
Shanna se preparó para su propio viaje a Americh, decidida a reunirse con Arion y descubrir la
verdad sobre su pasado. Con el corazón lleno de determinación y el espíritu renovado, se
dispuso a enfrentar los desafíos que el destino le deparaba, decidida a seguir su propio camino
hacia la verdad y la realización.