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UNIVERSIDAD IEXPRO

Cuatrimestre I

Materia:
ANÁLISIS DEL SISTEMA EDUCATIVO
MEXICANO

Crónica interpretativa,
“La invención del mexicano en la
educación pública”.

NOMBRE DEL ALUMNO:


Perla Esther Jimenez Tadeo.

NOMBRE DEL DOCENTE:


DR. Gildardo Vila Ordoñez

Cd. Juárez Chihuahua, a 17 de marzo de 2024.


INTRODUCCION

La presente crónica interpretativa, da una perspectiva general de la educación en México


respecto a su relación con la política durante el siglo XIX y durante la primera mitad del siglo
XX. Nos permite visualizar de forma general como se consolido el Estado Mexicano y como
la educación al ser parte del sistema político jugo un rol determinante para lograrlo. Se
presentan varios proyectos ideológicos que han moldeado la educación pública en México
en la dimensión de construir ciudadanía con la perspectiva, que para inventar al mexicano
y la mexicanidad, había que construir o inventar el Estado – Nación- Mexicano desde el
ámbito de las instituciones de educación pública.

Se refiere al Estado como la Elite, que como comunidad política reclama para si, el
monopolio de la violencia física legitima y centraliza las decisiones políticas, logrando
ejercer de manera monopólica la dominación coactiva autoritaria. Su poder no reside de
manera exclusiva en la coerción porque este tipo de dominación de imposición y violencia
son inestables. Por lo tanto para que su dominación tenga éxito y pueda sostenerse por
periodos prolongados hace uso de aparatos ideológicos, mecanismos de reproducción o
las tecnologías de poder, tales como redes de comunicación, lengua, simbología, uso de
una sola moneda, religión, música, vestido, gastronomía etc., valorando a cuales someter
y cuales asimilar, para construir una imagen de comunidad, es decir la unión entre
dominados y dominadores con la finalidad de aparentar una unión entre estos dos grupos,
facilitando la sumisión de los dominados y evitando su resistencia. A esta capacidad de
penetrar en la mente de los dominados, se le puede llamar poder infraestructural.

Está crónica interpretativa se divide en cinco apartados. El primer apartado da muestra de


la visión y misión educadoras de las élites estatales liberales del México en el siglo XIX. En
el segundo apartado se expone la educación durante el Porfiriato, y como se realizó una
política educativa que tenía como objetivo lograr que México transitara de ser un país de
ciudadanos de una República imaginaria y comunidades indígenas reales a ser uan
sociedad moderna e industrial. En el tercer apartado señalan los proyectos educativos al
término de la Revolución Mexicana, en este se explica sobre todo el proyecto de la escuela
racionalistas. En el cuarto apartado se aborda el tema de la educación socialista en el
contexto de la política de masas y el populismo tutelar del Estado posrevolucionario. En el
ultimo apartado se muestran el proyecto educativo que imperó en México durante el
“milagro mexicano”, también conocido como el Desarrollo Estabilizador.
LA MISION Y LA VISION EDUCADORAS DE LAS ELITES ESTATALES

LIBERLAES DEL MEXICO SIGLO XIX.

La elite utilizo la educación pública y la consideraba el mejor agente para reproducir y


perpetuar el poder del estado, su instrumento era la enseñanza del Nacionalismo. Nos la
presentaron como el camino para ascender en la sociedad y para mejorar la calidad de
vida. La escuela inculcaba valores actitudes y símbolos, presentaba los valores y normas
culturales de los grupos de elite como universales y naturales, contribuyendo a reproducir
el poder de la elite estatal y condicionando al individuo a cierto tipo de obediencia.

El poder estatal de esta época tenía una fe extrema en las Constituciones para transformar
este país y dos grandes proyectos: los liberales y conservadores. Los liberales creian en
la transformación de esta sociedad basada en la protección de sus libertades, cuando se
promulgo la constitución de 1857, los liberales se dieron cuenta que para que este país
fuera capitalista, secular y republicano no bastaba la Constitución, ni hacerle modificaciones
magníficas a sus leyes, aseguraron que se necesitaba crear instituciones que hicieran
realidad las libertades individuales y confiaban, en que destruyendo los privilegios
heredados del orden colonial, secularizando la vida pública y estableciendo un gobierno
limitado mediante la representación política y el constitucionalismo sería posible el libre
mercado y la democracia en el país. Los conservadores por su parte creían que lo que
mantenía unida a la sociedad mexicana era la religión, deseaban fomentar la
industrialización en el país y protegerlo de amenazas externas.

En 1857 los conservadores fueron derrotados por los liberales y estos últimos
monopolizaron la dirección del estado mexicano, tenían entre sus principales objetivos
construir ciudadanía republicana. Deseaban que México ocupara un lugar decoroso en el
concierto de las naciones civilizadas y con este fin, Benito Juárez presidente del país, le
pidió a Gabino Barreda la preparación de un proyecto educativo para crear ciudadanos.
Pretendían crear individuos racionales, ilustrados, no influenciados por las ideas religiosas,
emprendedores y con afán de progreso.

Los liberales eran hombres con solida fe en la ciencia y el progreso. Para ellos los indígenas
eran supersticiosos, improductivos, llenos de vicio, por lo tanto creían que debían quitarles
sus creencias, inculcarles la ética del trabajo individual, el ahorro, hábitos de higiene y la
aceptación de la tecnología en sus prácticas agrícolas. También pensaban que su cultura
aldeana y tribal no les permitía amar a su patria. Los consideran sin sentido de amor o
lealtad para con la nación, por eso querían enseñarles que era México y que se sintieran
parte de él.

REFLEXION INTERPRETATIVA

El liberalismo tuvo su punto de origen en las ideas de la Ilustración francesa del siglo XVIII,
en defensa de las libertades individuales, especialmente frente al Estado y en la búsqueda
del progreso material. El conservadurismo era la posición política que exigía mayor respeto
posible a las tradiciones, familiares y religiosas especialmente a los valores tradicionales y
en oposición verdadera al progresismo, es decir, a la idea de que los valores de
la sociedad deben ir cambiando con el tiempo. Ahora podemos imaginar porque estos
pensamientos e ideas distintas ocasionaron un conflicto bélico entre estos dos grupos, en
el país. Los liberales veían en las ideas conservadoras una barrera para el progreso de la
nación. Desde los inicios de México como nación independiente, la escuela era vista por
liberales como un canal fundamental para la transformación social. Impulsaron nuevos
proyectos para sustituir los textos escolares que se empleaban desde el periodo
novohispano por otros que promovieran el estudio del civismo, la historia y la geografía
nacional. Antes de la guerra de reforma la enseñanza estaba orientada hacia fines
religiosos era empleada como bandera de lucha para cuestionar nuevos planes de estudio
y libros de texto.

Desde sus primeras etapas como nación independiente hacia la primera mitad del siglo XIX,
la ciudadanía y el ciudadano fueron más bien ajenos a los proyectos de Estado-nación que
se implementaron. En el plano formal, según la constitución y las leyes como normas, se
establecía la noción de individuo-ciudadano sujeto de derechos, pero la realidad era
esencialmente distinta en un país fragmentado territorial y socialmente, situación constante
a lo largo de todo el siglo XIX. Los ciudadanos eran imaginarios, solo existían en la idea de
los líderes y gobernantes de la época y en los documentos legales, pero no en las acciones
pues estaban ausentes en la mentalidad, las prácticas y la vida cotidiana de la mayoría de
los sectores sociales de aquella época, esencialmente pobres y analfabetos.

A los indígenas no se les considera ciudadanos en el país, porque en general estos


individuos no poseían estas características de ciudadanía. No se acercaban si quiera un
poco a lo que ellos desean, eran todo lo contrario, aquí cobra sentido este refrán: Todo lo
que no puedes ver, en tu casa lo has de tener, ya que todo lo que la elite detestaba de los
mexicanos indígenas, lo tenían, su cultura y creencias las de sus ancestros o las inculcadas
por la iglesia. Para sus fines, los indígenas mexicanos no eran un buen “material” para el
“producto” que requerían, por lo tanto lo iban a modificar por medio de la educación.

LA EDUCACION DURANTE EL PORFIRIATO

Durante el gobierno de Porfirio Diaz la educación no cambió su propósito, aun se persigue


el mismo fin y quizás con más fuerza, ahora sirviéndose de la dictadura, se continua con
el proyecto de Gabino Barrera y Benito Juárez: La educación para el progreso.

Para lograr estos objetivos desarrollistas, nacionalistas y positivistas el gobierno ha


decretado la creación de escuelas dirigidas a obreros y jóvenes que no completaron su
educación primaria en la edad correspondiente, se incluye la enseñanza de oficios,
fundación de escuelas para “niños deficientes”, educación obligatoria entre los 6 y 12 años,
creación de Escuelas Normales, de Educación Preparatoria, Escuela Nacional de Artes y
Oficios y la UNM.

Se elaboro un libro único de historia en el cual se mostraba una única versión de la historia
donde los liberales eran los “buenos” y los conservadores los “vendepatrias” según Justo
sierra que era el Secretario de Instrucción Pública y con esa idea es de suponerse que la
mayoría apoyo a los liberales, porque ser mexicano implicaba ser liberal y los
conservadores fueron vistos como malos mexicanos.

En el Siglo XX, la elite estatal le hizo publicidad a México como una nación “civilizada y
progresista” y la educación contribuyó a la proyección de una imagen moderna del país,
hasta los estudios secundarios y superiores se consideran de la misma calidad que los
europeos. Aun así no se logra el impacto tan deseado por los liberales, pues la sociedad
esta polarizada, pocos niños en la urbe reciben la tan anhelada educación para el progreso,
sin embargo para los campesinos el progreso es ir a trabajar en las nuevas industrias y
haciendas.
REFLEXION INTERPRETATIVA

Homogeneizar la educación en el proyecto de Gabino Barreda fue un propósito muy


ambicioso ya que para lograrlo hubiera sido necesario igualar las condiciones de vida de
los habitantes del país. Eso no era posible en aquel momento y tampoco ahora. La sociedad
estaba polarizada, pues mientras la mayoría de los habitantes de las comunidades rurales
debían ir al campo a trabajar desde muy temprano para llevar alimento a su familia, viviendo
en extrema pobreza, en la ciudad para unos pocos, su única tarea es ir a la escuela. Este
es uno de los más grandes errores del sistema educativo nacional, implementar modelos y
proyectos educativos hechos para el mexicano estándar y pretender que tenga el mismo
impacto en la sociedad. Las múltiples desigualdades sean sociales, económicas, políticas,
territoriales, además de las características y necesidades diversas que posee cada
individuo, separa los ideales de la realidad. Pretender que la educación tenga un impacto
general en todos los individuos, es imposible.

PROYECTOS EDUCATIVOS AL FINALIZAR LA REVOLUCION MEXICANA

El grupo triunfante de la revolución fue el constitucionalista, el general Álvaro Obregón y


Plutarco Elías Calles a la cabeza, eran y se sentían los herederos de los liberales del siglo
XIX. No habían hecho la revolución para destruir el sistema político del porfiriato, si no para
perfeccionarlo.

Los liberales y revolucionarios tenían la convicción de crear nación mediante la educación


y creían que lo podían hacer organizando y estructurando la conciencia nacional aunque
fuera de forma autoritaria. En su experiencia en la lucha armada al dirigir multitudes
aprendieron que para tener éxito, el programa liberal, en sus proyectos y acciones debería
reflejar elementos culturales y que identificaran a los mexicanos indígenas.

1920, Albaro obregón creo la SEP junto con José Vasconcelos como el encargado para
unificar al país en un periodo que abarcaba la primaria y hasta la universidad. El propósito
era homologar el pensar y actuar, caminar en un mismo sentido, para evitar otra guerra civil,
divisiones y para protegerlo de amenazas externas como Estados Unidos

José Vasconcelos como secretario de la SEP impulsa y difunde un nacionalismo cultural,


su intención es llevar el progreso a todo México con la misión de alfabetizar a toda la
población mexicana, crear bibliotecas públicas, impulsar la educación tecnológica y
agrícola. Vasconcelos quería integrara a los indígenas a la sociedad mexicana, no estaba
de acuerdo en mantener estas comunidades en reservas aisladas del resto de la población,
como lo hizo Estados Unidos.

Uno de los objetivos principales de Vasconcelos fue que la población compartiera una
misma lengua, consideraba que no era posible ensenar las complejidades de la ciencia
moderna mediante las lenguas nativas de México.

Copio el modelo de los frailes católicos cuando evangelizaron a los indígenas, organizando
el programa de los “Maestros Misioneros” y las “Misiones Culturales”. Bajo ese programa,
los profesores se convirtieron en verdaderos agentes promotores de la ideología oficial del
Estado, como si fuera una religión laica. También se realizaron por primera vez la
ceremonias cívicas y rituales de lealtad a los símbolos patrios, para inculcar el amor y
lealtad a México, a todos por igual, incluyendo a los hijos de los campesinos, indígena y
sociedad en general. Los profesores no solo ensenaban letras y números, también prácticas
de higiene, civismo, artes y educación física.

Muchos de los gobernantes liberales eran masones, mediante estas logias se trasmitía la
fe en el racionalismo, el progreso y la ciencia. Como resultado de estas corrientes
ideológicas radicales y anticlericales el presidente Plutarco Elías Calles implemento un
proyecto pedagógico para des fanatizar a la población, con la idea de desterrar a Dios y a
la religión del corazón y la mente de los niños y jóvenes mexicanos, porque esto era visto
como un obstáculo para facilitar el pensamiento científico racional.

El secretario de educación publica Manuel Puig Casauranc promovió el proyecto educativo


en la que incluía la educación sexual en las escuelas públicas, este proyecto era racionalista
y racista porque pretendía “desindianizar” a México. Puig creía que ser indio era una
enfermedad que podía curarse mediante la educación nacionalista y la cruza de razas. Este
proyecto se caracterizó por la violencia y la discriminación, sometiendo a los indígenas a
prácticas opresivas como uso de uniforme para no usaran vestimentas indígenas, se les
prohibía usar sus lenguas nativas, además se les sometía a humillaciones y castigos físicos.

Otro acontecimiento relevante fue el de la resistencia a la educación racionalista de calles


por parte de las comunidades indígenas y las asociaciones de padres de familia. El artículo
3º prohibía la educación religiosa, pero fue Calles el primer presidente que intentó aplicar
esa disposición de manera absoluta. Los grupos católicos hicieron movilización
defendiendo la libertad religiosa a tal punto que enfrentaron al estado por la vía armada en
la llamada “Guerra de los Cristeros”, este suceso definió la victoria del estado sobre la
iglesia y dejo a gran parte de la población con odios y resentimientos hacia el estado.

REFLEXION INTERPRETATIVA

La educación tiene como punto de unión los liberales del siglo XIX y los revolucionarios del
siglo XX, ambos grupos estaban convencidos de poder crear un avance y desarrollo en la
nación mediante la educación. Durante este período, se promovieron cambios en el
currículo educativo. Se incluyeron temáticas relacionadas con la historia y las luchas
sociales, permitiendo así que los estudiantes se identificaran y se sintieran parte de la
Revolución. Se enfatizó también la educación cívica y se buscó inculcar valores de
igualdad, justicia y participación ciudadana. La educación se convirtió en un medio para
movilizar a las masas y promover la identidad nacional. Se implementaron campañas de
alfabetización, especialmente dirigidas a las zonas rurales donde el analfabetismo era
mayor, el nacionalismo post revolucionario estaba bañado de tintes indigenistas. Se crearon
bibliotecas públicas y se fomentó la lectura como forma de acceder a conocimiento y
educación. A pesar de los avances y los esfuerzos por democratizar la educación, hubo
también limitaciones y contradicciones. A pesar de los esfuerzos, la educación se quedó
rezagada en las zonas rurales y las comunidades indígenas. Muchas veces, los recursos y
las políticas educativas no llegaban a estas zonas de manera efectiva, dejándolas aún más
marginadas. Al finalizar la guerra civil, Álvaro Obregón siendo presidente de la república
mexicana, promueve a José Vasconcelos y este creo la SEP. y difundió el nacionalismo
cultural. Durante la Revolución Mexicana, la educación se transformó de una herramienta
de exclusión a una herramienta de movilización y cambio social. Aunque los avances fueron
significativos, todavía había y hay retos pendientes en cuanto a la garantía del acceso
universal a la educación y la calidad educativa en las zonas rurales y comunidades
indígenas. La educación sigue siendo fundamental para construir una sociedad más
inclusiva, justa y participativa.
LA EDUCACION SOCIALISTA EN EL CONTEXTO POLITICO DE MASAS Y EL

PUPULISMO TUTELAR POSREVOLUCIONARIO.

La educación racionalista en términos políticos se considera como un fracaso por el rechazo


social que provocó. El descontento de la población se debía a diversos factores como las
políticas educativas y religiosas, además de los fracasos de gobierno en la economía.

En este periodo se creó el Partido de la Revolución Mexicana (PRM), que se integró por las
grandes centrales obreras y campesinas, esto generó una política educativa que tenía el
objetivo de contar con un fuerte contenido de justicia social: la educación socialista.

La educación socialista en México tenía poco que ver con el marxismo, así algunos de sus
conceptos y retórica tengan similitudes, además tuvo distintas interpretaciones, sobre todo
por parte de los profesores y funcionarios medios.

La política del presidente Lázaro Cárdenas, en cuanto a los aspectos sociales relacionado
con la educación pública, lo que tenía en mente por “socialismo” era que las clases
populares tuvieran “justicia social”, implicaba una mejora en la calidad de vida de las masas,
y no una toma del poder por parte de los grupos populares, y mucho menos significaba la
eliminación del capital privado. La enseñanza del socialismo implicaba la creencia de que
la justicia social. La justicia social se vio como la posibilidad de formar parte de grupos como
sindicatos, partidos político, y de intereses en común.

En este tiempo se les infundió la idea de que para tener justicia social debían de formar
parte de un grupo, un ejemplo es el Partido Revolucionario Institucional formado en 1946.

REFLEXION INTERPRETATIVA

Se menosprecia a los indígenas y se les considera como un obstáculo para el progreso,


que en términos del socialismo, deben ser eliminados porque son un lastre que afecta el
avance y progreso del Estado, al igual que la religión de cualquier tipo, prueba de esto la
tenemos con la Guerra Cristera, donde Plutarco Elías Calles, pretende erradicar al
cristianismo del territorio mexicano y no duda en asesinar hombres, mujeres, niños, monjas
y sacerdotes, con el único delito de adorar a un Dios clavado en la Cruz. Con Lázaro
Cárdenas, el tinte socialista de su gobierno, está encaminado a reforzar el creciente
Nacionalismo y la expropiación petrolera fue el pretexto ideal para manejar a las multitudes,
haciendo creer que el petróleo es de los mexicanos, aunque en esa misma época,
empresas trasnacionales se instalen en el país gozando del proteccionismo del Estado
Mexicano, en un México donde los pobres siguen siendo pobres, pero con la idea de que
el país es dueño de sus recursos naturales.

EL MILAGRO MEXICANO (DESARROLLO ESTABILIZADOR)

México consiguió cierta estabilidad durante la presidencia de Lázaro Cárdenas. Algunas de


sus decisiones en materia económica, como la legislación sobre la tierra o la
nacionalización del petróleo, fueron antecedentes del posterior milagro mexicano.

Las políticas populistas de Cárdenas lograron legitimar y consolidar el estado


postrevolucionario y al partido revolucionario mexicano. Cárdenas construyo una
maquinaria política e ideológica que consistía en desarrollar un capitalismo nacionalista,
para esto el estado debía crear una clase empresarial nacional que en ese momento no
existía. Como consecuencia en 1940 la educación debía dejar su orientación socialista y
cargarse al nacionalismo revolucionario ideología del recién creado Partido Revolucionario
Institucional, el cual iba en la misma dirección con el Modelo Desarrollista estatista:
Desarrollo estabilizador.

El gobierno de Cárdenas ofreció amplias garantías a todos los empresarios nacionalistas


para que no fueran obstáculo para su programa económico, incluso a las empresas
extranjeras les brindo facilidades y garantías para beneficiarse de sus productos y su
inversión. En ese mismo tiempo se nacionaliza el petróleo, pero empresas automotrices se
instalaron en México y disfrutaron de múltiples beneficios. El México de la postguerra debía
alinearse con el modelo de desarrollo capitalista de EU.

Jaime Torres Bodet como secretario de Educación Pública fue uno de los principales
artífices de la educación pública del desarrollo estabilizador. En su gestión fue el arquitecto
del libro único de texto gratuito y del SNTE, diseño y aplico el modelo educativo vigente
durante este periodo. Creía que los indígenas y campesinos estaban destinados a
desaparecer producto del proceso de modernización. El nacionalismo revolucionario con
torres Bodet, se propuso crear un centro ideológico que rechazara las posturas extremistas
y radicales, se omitieron temas controversiales en los libros de texto, los líderes nacionales
y caudillos de la revolución fueron presentados como héroes nacionales que buscaban el
bien de la patria, no se presentaban sus rivalidades, ni sus intereses personales. Se
justificaba los temas religiosos y culturales prehispánicos como los sacrificios humanos y
los maltratos de los conquistadores a los indios. Cárdenas preparo a la población mexicana,
en los valores del Nacionalismo Revolucionario, pero con énfasis en la educación urbana
para apoyar el proceso de modernización industrial. El comportamiento positivo de la
economía mexicana llevo a numerosos especialistas a hablar del “milagro mexicano”, a
partir del cual el país dejaba atrás su base agraria para hacer de la industria el motor para
alcanzar la modernización y el desarrollo. Al crecimiento económico se le sumo la
estabilidad política del país que contrastaba con el resto de América Latina, asimismo, se
logró controlar el crecimiento de la deuda externa.

La industrialización del país también llevo el crecimiento y consolidación de las ciudades


como centros políticos y económicos, la expansión de la clase media, además de
transformar la relación del hombre con el espacio y los recursos nacionales e impacto en la
vida cotidiana de millones de mexicanos. La industrialización llevada a cabo en México
entre 1946 y 1970 dio lugar a una marcada desigualdad social y cultural.

En el ámbito social agudizo las diferencias entre el campo y la ciudad, debido a que los
campesinos que trabajaban en los ejidos empobrecieron notablemente al extremo de
migran en busca de mejores condiciones de vida, mientras que las ciudades florecieron y
se expandieron. En el interior de las ciudades la desigualdad entre los grupos sociales era
evidente marcando la distribución de la riqueza. A nivel regional el desarrollo se concentró
en el centro y norte. Una de las dificultades a las que se enfrentó el modelo de
industrialización mexicano fue la marcada dependencia tecnológica del exterior, pues la
modernización de fábricas requería la compra de maquinaria creada en países extranjeros
El papel protagónico del estado como impulsor de la industrialización y el desarrollo en
general se tambaleo, debido a que, a partir de 1950 las necesidades de inversión
sobrepasaron sus recursos y tuvo que solicitar préstamos en el exterior para financiar sus
gastos, debido al rápido crecimiento de las ciudades, la carencia de una planta productiva
eficiente, la ausencia de impulsos al sector agropecuario, la demanda de nuevos empleos
y por el deterioro de las condiciones de vida de muchos mexicanos dejando en claro que
“el milagro Mexicano” llegaba a su fin.
REFLEXION INTERPRETATIVA

El populismo que identifica a Lázaro Cárdenas, y el tinte socialista de su gobierno, incluyen


el reparto de la tierra, compromiso adquirido por los caudillos en la revolución, la
proliferación de organizaciones populares y sindicatos que obedecen al Estado mexicano,
dan lugar al ahora tristemente Partido Revolucionario Institucional, notando que ahora la
revolución se convierte en una institución gubernamental. Es momento de que México migre
de las comunidades rurales agrícolas, hacia las Ciudades que acaparan la industrialización
y manufactura de materias primas, privilegiando una clase media obrera, educada en
escuelas públicas con un fuerte nacionalismo, destacando a la revolución como la obra
libertadora de la opresión durante el Porfiriato. Basta con analizar el cine de época o el
llamado Cine de oro mexicano, donde apreciamos al México de la pos guerra, como una
nación donde predomina la clase obrera y la vida transcurre alrededor de las zonas urbanas,
el charro mexicano con botas, sombrero y pistola junto a su china, de trenzas y rebozo de
seda, ahora son desplazados por obreros, hombres y mujeres en overoles, con la ropa sucia
al terminar sus jornadas en las fábricas y campos petroleros, viendo en vecindades,
ahogando sus penas en alcohol y tabaco.

El Milagro Mexicano o Desarrollo estabilizador fue un periodo de crecimiento económico


significativo en la historia de México, pero también fue un periodo de desigualdad y
vulnerabilidad económica. Aunque las políticas económicas implementadas en este periodo
tuvieron un impacto positivo en la economía mexicana, también dejaron al país
dependiendo en gran medida de la inversión extranjera y de la exportación de materias
primas. Hoy en día, México enfrenta nuevos desafíos económicos y sociales, pero el Milagro
Mexicano sigue siendo un ejemplo importante de las políticas económicas que pueden
ayudar a impulsar el crecimiento y el desarrollo en un país. Está crónica interpretativa, ha
sido una reflexión sobre este periodo histórico y su impacto en el México de hoy.
BIBLIOGRAFÍA

Gómez, H. (2017). La invención del mexicano en la educación pública. Voces y

silencios: Revista Latinoamericana de Educación, 8(1), 173-190.

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