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n de ser de toda argumentación es la de exponer un punto de vista, des-

tacarlo y justificarlo, tratando de convencer a uno o varios interlocutores o «adversa-


rios» de su valor.
Desde 1958, gracias principalmente a los trabajos de ChaYm Perelman y de
Stephen EdelsonToulmin, el interés teórico y práctico de la argumentación no ha
dejado de aumentar. Después de un largo período de eclipse, la retórica, «el arte de
persuadir con el discurso» como la definían los clásicos, ha sido redescubierta en los
últimos decenios y se considera nuevamente como un método que permite examinar
los procedimientos argumentativos yn de ser de toda argumentación es la de exponer un punto de
vista, des-
tacarlo y justificarlo, tratando de convencer a uno o varios interlocutores o «adversa-
rios» de su valor.
Desde 1958, gracias principalmente a los trabajos de ChaYm Perelman y de
Stephen EdelsonToulmin, el interés teórico y práctico de la argumentación no ha
dejado de aumentar. Después de un largo período de eclipse, la retórica, «el arte de
persuadir con el discurso» como la definían los clásicos, ha sido redescubierta en los
últimos decenios y se considera nuevamente como un método que permite examinar
los procedimientos argumentativos yn de ser de toda argumentación es la de exponer un punto de
vista, des-
tacarlo y justificarlo, tratando de convencer a uno o varios interlocutores o «adversa-
rios» de su valor.
Desde 1958, gracias principalmente a los trabajos de ChaYm Perelman y de
Stephen EdelsonToulmin, el interés teórico y práctico de la argumentación no ha
dejado de aumentar. Después de un largo período de eclipse, la retórica, «el arte de
persuadir con el discurso» como la definían los clásicos, ha sido redescubierta en los
últimos decenios y se considera nuevamente como un método que permite examinar
los procedimientos argumentativos yn de ser de toda argumentación es la de exponer un punto de
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tacarlo y justificarlo, tratando de convencer a uno o varios interlocutores o «adversa-
rios» de su valor.
Desde 1958, gracias principalmente a los trabajos de ChaYm Perelman y de
Stephen EdelsonToulmin, el interés teórico y práctico de la argumentación no ha
dejado de aumentar. Después de un largo período de eclipse, la retórica, «el arte de
persuadir con el discurso» como la definían los clásicos, ha sido redescubierta en los
últimos decenios y se considera nuevamente como un método que permite examinar
los procedimientos argumentativos yn de ser de toda argumentación es la de exponer un punto de
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rios» de su valor.
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Stephen EdelsonToulmin, el interés teórico y práctico de la argumentación no ha
dejado de aumentar. Después de un largo período de eclipse, la retórica, «el arte de
persuadir con el discurso» como la definían los clásicos, ha sido redescubierta en los
últimos decenios y se considera nuevamente como un método que permite examinar
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Stephen EdelsonToulmin, el interés teórico y práctico de la argumentación no ha
dejado de aumentar. Después de un largo período de eclipse, la retórica, «el arte de
persuadir con el discurso» como la definían los clásicos, ha sido redescubierta en los
últimos decenios y se considera nuevamente como un método que permite examinar
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dejado de aumentar. Después de un largo período de eclipse, la retórica, «el arte de
persuadir con el discurso» como la definían los clásicos, ha sido redescubierta en los
últimos decenios y se considera nuevamente como un método que permite examinar
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Stephen EdelsonToulmin, el interés teórico y práctico de la argumentación no ha
dejado de aumentar. Después de un largo período de eclipse, la retórica, «el arte de
persuadir con el discurso» como la definían los clásicos, ha sido redescubierta en los
últimos decenios y se considera nuevamente como un método que permite examinar
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Desde 1958, gracias principalmente a los trabajos de ChaYm Perelman y de
Stephen EdelsonToulmin, el interés teórico y práctico de la argumentación no ha
dejado de aumentar. Después de un largo período de eclipse, la retórica, «el arte de
persuadir con el discurso» como la definían los clásicos, ha sido redescubierta en los
últimos decenios y se considera nuevamente como un método que permite examinar
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Stephen EdelsonToulmin, el interés teórico y práctico de la argumentación no ha
dejado de aumentar. Después de un largo período de eclipse, la retórica, «el arte de
persuadir con el discurso» como la definían los clásicos, ha sido redescubierta en los
últimos decenios y se considera nuevamente como un método que permite examinar
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dejado de aumentar. Después de un largo período de eclipse, la retórica, «el arte de
persuadir con el discurso» como la definían los clásicos, ha sido redescubierta en los
últimos decenios y se considera nuevamente como un método que permite examinar
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Stephen EdelsonToulmin, el interés teórico y práctico de la argumentación no ha
dejado de aumentar. Después de un largo período de eclipse, la retórica, «el arte de
persuadir con el discurso» como la definían los clásicos, ha sido redescubierta en los
últimos decenios y se considera nuevamente como un método que permite examinar
los procedimientos argumentativos yn de ser de toda argumentación es la de exponer un punto de
vista, des-
tacarlo y justificarlo, tratando de convencer a uno o varios interlocutores o «adversa-
rios» de su valor.
Desde 1958, gracias principalmente a los trabajos de ChaYm Perelman y de
Stephen EdelsonToulmin, el interés teórico y práctico de la argumentación no ha
dejado de aumentar. Después de un largo período de eclipse, la retórica, «el arte de
persuadir con el discurso» como la definían los clásicos, ha sido redescubierta en los
últimos decenios y se considera nuevamente como un método que permite examinar
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tacarlo y justificarlo, tratando de convencer a uno o varios interlocutores o «adversa-
rios» de su valor.
Desde 1958, gracias principalmente a los trabajos de ChaYm Perelman y de
Stephen EdelsonToulmin, el interés teórico y práctico de la argumentación no ha
dejado de aumentar. Después de un largo período de eclipse, la retórica, «el arte de
persuadir con el discurso» como la definían los clásicos, ha sido redescubierta en los
últimos decenios y se considera nuevamente como un método que permite examinar
los procedimientos argumentativos yn de ser de toda argumentación es la de exponer un punto de
vista, des-
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rios» de su valor.
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