Causas y efectos del deterioro en las propiedades, planta y equipo para pymes

María Alejandra Reyes Espinosa1

Cristian Camilo Espitia Riaño2

Resumen

El deterioro del valor es la herramienta que permite identificar si un elemento del

activo ha sufrido una pérdida de su valor. En el campo de la contabilidad, calcular
esta pérdida es todo un reto, ya que si presenta errores por omisión o inexactitud
de la información no se reflejará la realidad económica de una empresa. Es por
ello que el presente artículo busca determinar las causas y efectos que surgen al
no aplicar el deterioro del valor en las propiedades, planta y equipo, para
establecer cómo afecta a la información contable de una compañía. Finalmente
propone generar herramientas que permitan a los preparadores de la información,
determinar la existencia de algún indicio de deterioro para que la información
proporcionada a los usuarios, se ajuste a la realidad de la situación económica,
contable y financiera de las entidades.

Palabras Clave: globalización, deterioro, contabilidad, estado financiero, toma de

decisiones, Activo, pérdida, realidad económica.

1
Estudiante de Contaduría Pública, Universidad Santo Tomás, Correo electrónico:
maria.reyes@usantoto.edu.co. Tunja, Boyacá – Colombia.
2
Estudiante de Contaduría Pública, Universidad Santo Tomás, Correo electrónico:
cristian.espitiar@usantoto.edu.co. Tunja, Boyacá – Colombia.
Abstract

Impairment is the tool that allows identifying whether an asset item has suffered a
loss in value. In the accounting field, calculating this loss is a challenge, since if it
presents errors by omission or inaccuracy of the information, the economic reality
of a company will not be reflected. That is why this article seeks to determine the
causes and effects that arise when not applying impairment to property, plant and
equipment, to establish how it affects the accounting information of a company.
Finally, it proposes to generate tools that allow information preparers to determine
the existence of any indication of deterioration so that the information provided to
users is adjusted to the reality of the economic, accounting and financial situation
of the entities.

Keywords: globalization, deterioration, accounting, financial statements, decision

making, assets, Impairment, economic reality.

Introducción

La globalización económica es un proceso en el cual se busca relacionar todos los

países del mundo para integrar los mercados internacionales de bienes y servicios
con el fin de potencializar la competitividad y rentabilidad de las organizaciones
que, bajo un mismo lenguaje, elimine las fronteras y reduzca las brechas en la
información contable y financiera de las organizaciones.
Por lo tanto, es indispensable la creación de un modelo de contabilidad estándar,
que permita brindar transparencia al reconocimiento, medición, presentación y
revelación de la información financiera. Para esto, El IASB (International
Accounting Standards Board) emitió las Normas Internacionales de Información
Financiera (NIIF), donde varios países han adoptado e implementado
progresivamente este modelo.
Casinelli (2015), manifiesta que:
“Los países de América Latina han realizado progresos significativos en
la adopción e implementación de esta norma. Sin embargo, aún hay
mucho trabajo por hacer, no menos importante, en la sensibilización y la
comprensión sobre el papel de la información financiera”.

Colombia ha presentado progresos significativos en la adopcion de estandares

internacionales, al haberse derogado el decreto 2649 de 1993, que establecia los
principios de contabilidad generalmente aceptados (PCGA) se dio paso al proceso
de convergencia por medio de la ley 1314 de 2009, la cual regula los principios de
contabilidad e información financiera, y de aseguramiento de información
aceptados en Colombia. Esta transición provocó cambios normativos en materia
contable y financiera, que ha llevado a las compañías asumir retos sobre la
presentación de la información, para contribuir a la toma de decisiones.

Las pequeñas y medianas empresas (Pymes), aportan el 40% del PIB en la

economía nacional. Según datos del Ministerio del Trabajo (2019),las Pymes
conforman el 90 % del sector productivo, generando el 80% de empleo en
Colombia; además se han convertido en un reto para el desarrollo económico, al
requerir de normas contables que le brinden las herramientas necesarias para
potencializar el crecimiento y la transparencia en la información financiera. De
manera que, las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF) sirven
como apoyo a las Pymes para emitir información contable fiable y comprensible
acerca de la realidad económica de una compañía.

Las propiedades, planta y equipo constituyen una parte esencial para el desarrollo
del objeto social de una entidad ya que son bienes tangibles (muebles e
inmuebles) los cuales no están destinados para la venta sino para la producción o
uso administrativo y operativo.

Debido al uso de estos activos, sufren un desgaste natural que disminuye la vida
operativa del mismo a través del tiempo, hasta finalmente quedar obsoleto. A esto
se le conoce como depreciación, diferente de deterioro, que es la pérdida de valor
de un activo que no se tenía prevista por parte de la entidad.

Pese a que la sección 27 de NIIF para Pymes, (Deterioro del valor de los activos),
explica el tratamiento contable para reconocer y medir el deterioro, la falta de
aplicación en las Pymes colombianas genera una problemática en la contabilidad
de los activos. Por ello, la presente investigación pretende determinar las
principales causas y efectos que influyen al no reconocer ni medir el deterioro de
las propiedades, planta y equipo, para establecer cómo afecta a la información
contable presentada en los estados financieros. A su vez, generar herramientas
que permitan a los preparadores de la información, determinar la existencia de
algún indicio de deterioro para que la información proporcionada a los usuarios, se
ajuste a la realidad de la situación económica, contable y financiera de las
entidades.

I. Propiedades planta y equipo

La IFRS (2009), define las propiedades, planta y equipo como “activos tangibles
que se mantienen para su uso en la producción o suministro de bienes o servicios,
para arrendarlos a terceros o con propósitos administrativos, y se esperan usar
durante más de un periodo” (p. 4).

Reconocimiento
Para reconocer un activo dentro de las propiedades, planta y equipo es necesario
cumplir con lo descrito en el párrafo 2,27 de las NIIF para pymes, donde se
menciona, que el reconocimiento es el proceso de incorporación en los estados
financieros de una partida, que cumple la definición de un activo y que satisface
los siguientes criterios:

a. Es probable que cualquier beneficio económico futuro asociado con la

partida llegue a, o salga de la entidad; y
b. La partida tiene un costo o valor que pueda ser medido con fiabilidad.
(IFRS, 2009, pág. 21)

Medición inicial

Las propiedades, planta y equipo, al ser activos tangibles serán medidos tras su
reconocimiento inicial al costo. Según Rojas (2007), “el costo es la suma de las
erogaciones en que incurre una persona para la adquisición de un bien o servicio,
con la intención de que genere un ingreso en el futuro”.

Medición posterior

Al momento de finalizar el periodo contable de una compañía, ésta debe llevar a

cabo la medición posterior de cada activo que conforma las propiedades planta y
equipo; esto determina cuál ha sido su depreciación acumulada y establece si
existen indicios de pérdidas por deterioro y así calcular dichas pérdidas para
reconocer su nuevo valor en libros y reflejarlos en los estados financieros.

La medición posterior es igual a:

Costo inicial - Depreciación acumulada - pérdidas por deterioro.

Deterioro del valor

Las pérdidas por deterioro son aquellas en donde el valor en libros del activo es
superior al valor recuperable, lo que genera una pérdida de su valor que no se
tenía previsto, ocasionado por averías, daños, desgaste físico, obsolescencia, y
todo aquello que esté directamente relacionado con la pérdida de su valor.

Antes del proceso de convergencia con la ley 1314 de 2009, existió el decreto
2649 de 1993, en el cual, el deterioro de los activos no se reconocía como
perdida, sino como provisiones para reflejar el deterioro. Es decir, el
reconocimiento del deterioro, se realiza a través de una provisión sin modificar el
valor del activo; mientras que la Sección 27 de la NIIF para Pymes, establece los
procedimientos que una entidad aplicará, para asegurarse de que sus activos
están contabilizados por un importe que no sea mayor a su valor recuperable.
(Toro & Bayona, 2016)

Los activos tangibles como propiedades, planta y equipo son medidos por el
modelo del costo o costo amortizado; están sujetos a presentar deterioro de valor,
una vez se identifique si existe indicios de deterioro. Se debe tener en cuenta que
el deterioro de valor de los activos no depende del valor de mercado sino de los
flujos de efectivo futuros que se espera producir. (Actualicese, 2018)

II. El contador Público, y el juicio profesional.

El contador público, como lo define la ley 43 de 1990, “es la persona natural que,
mediante la inscripción que acredite su competencia profesional en los términos
de la presente Ley, está facultada para dar fe pública de hechos propios del
ámbito de su profesión” (Congreso de la republica, 1993, art.1). Por ello, la
responsabilidad al momento de realizar su trabajo, es de tipo social, ya que a
través de la fe pública que ejerce, brinda la veracidad y transparencia de los
hechos económicos y contables que certifica.

Con la normatividad actual, como los son las NIIF, el profesional contable cuenta
con las herramientas, técnicas y procedimientos que le facilitan comprender e
interpretar la aplicación de la norma, bajo cualquier circunstancia, haciendo uso
del juicio profesional. De acuerdo con La Comision de normas de informacion
financiera (2017), “El juicio profesional del contador público, se refiere
principalmente al empleo de los conocimientos técnicos y experiencia necesarios
para seleccionar posibles cursos de acción en la aplicación de las Normas de
Información Financiera”; indicando que a través del conocimiento y la experticia
que requiere para el ejercicio de su profesión, el contador público debe disponer
de conocimientos en materia económica, legal, tributaria y administrativa
necesarios para la toma de decisiones.

No obstante, el profesional contable, cuenta con limitaciones al momento de tomar

decisiones, ya que, hay ocasiones en donde necesita de apoyo interdisciplinar y
de la ayuda de peritos, para establecer y determinar la realización de un hecho
económico, es decir, cuando se requiera de una opinión externa por parte de un
profesional ajeno al contador público, que establezca la incidencia de un
acontecimiento para reconocer su efecto en la realidad económica de una
compañía.

En el caso para determinar si existen indicios de deterioro sobre un activo, el

contador público podrá necesitar de una opinión externa, en los casos donde sus
conocimientos se limiten. Por ejemplo, para indicar el deterioro de una máquina de
producción, en donde existen indicios de deterioro, se requiere de un examen
físico por parte de un experto en el tema, que determine si dicho indicio es
verdadero o no para que el contador, en uso de sus facultades pueda reconocer el
deterioro, y aplicar el tratamiento contable según lo indica la sección 27.
Por lo anterior, se presenta un diagrama de flujo a través del cual se podrá
establecer si existen indicios de deterioro de las propiedades, planta y equipo para
reconocerlo.

Figura 1. Diagrama de flujo, indicios de deterioro

Fuente: Elaboración propia

 III. El deterioro de valor de los activos en tiempos de pandemia.

Es un hecho que la propagación del COVID-19 alrededor del mundo, desató un

impacto devastador en los mercados económicos y financieros, en especial para
las pymes, que son vitales para la economía colombiana, pues han sido las
principalmente afectadas durante las medidas impuestas por el gobierno nacional
que impide realizar a los comerciantes y prestadores de servicios sus actividades
económicas, tanto así, que una gran cantidad de empresas se han quebrado,
viéndose en la obligación de cerrar por falta de ingresos a causa de la coyuntura
económica actual que tendrá afectaciones en la información financiera del
presente año.

En consecuencia, esta situación probablemente ha originado la disminución del

valor de los activos debido a la falta de uso o abandono en el proceso productivo
de los últimos meses. No cabe duda que las entidades necesitaran valorar si el
impacto del COVID-19 ha conducido a un deterioro del activo, puesto que ha
generado incertidumbre y cuestionamiento para el contador al momento de
determinar la gravedad de esta crisis sin precedentes, la cual afectará
considerablemente el cálculo del deterioro de valor de las propiedades, planta y
equipo, y a su vez, el estado de situación financiera (Deloitte, 2020). Los
profesionales de la contaduría pública, están en la obligación de realizar dichos
cálculos de deterioro, que deberán ser evaluados y ajustados al finalizar cada año
a fin de emitir un dictamen para la toma de decisiones que beneficie a la entidad.

Por otra parte, una disminución en demanda, precios, rentabilidad, y reducción de

ingresos, indica quizá un indicio de deterioro, tal como la Superintendencia de
sociedades (2020) manifiesta dentro de los posibles indicios de deterioro en las
propiedades, planta y equipo, que podrían estar relacionados con los efectos
producidos por el COVID-19 en los cuales se encuentran:
  Cambios significativos en la forma en que se usa o se espera usar el activo:
Dadas las repercusiones generadas por el COVID-19, la compañía puede
estimar cambios significativos en la forma en que se usa o se espera usar
el activo debido a reducciones significativas en sus operaciones.
 La compañía se ha visto enfrentada, o se verá enfrentada en un futuro
inmediato, a cambios adversos significativos, entre ellos legales,
tecnológicos o de mercado: Los efectos colaterales del COVID-19, puede
obligar a disponer de sus activos de manera rápida, por debajo del valor
razonable.
 Cambios en las estimaciones de flujos de efectivo presupuestados para el
mantenimiento del activo o en los flujos netos resultantes de su uso: Debe
evaluarse si es necesario modificar las estimaciones, espacio de tiempo y
desembolsos de dinero realizados para efectuar el mantenimiento de los
activos, así como el efectivo esperado por el uso en la operación; (pág. 21)

En dado caso, en el cual se presenta algún indicio de deterioro del valor del activo,
estaría indicando entonces, que la vida útil restante, el método de depreciación
utilizado o el valor residual del activo necesitan ser ajustados y revisados, incluso
si no se reconoció ningún deterioro del valor del activo (Superintendencia de
Sociedades, 2020).

Desde una perspectiva más general, la recesión económica que se está

experimentando en la actualidad como consecuencia de la pandemia, demuestra
que los activos pueden presentar indicios de deterioro por el poco uso que se les
ha dado. Visto de esta forma, cuando una compañía adquiere nuevos activos,
estos pueden estar completamente deteriorados, ya que, el mercado al cual iba
destinado sus productos o servicios ya no existe o se ha visto drásticamente
afectado.
Cabe señalar que, aunque las compañías mantengan suspendidas las
operaciones por la emergencia del COVID-19, deberán seguir contabilizando la
depreciación de sus activos con normalidad, así no se estén utilizando en su
totalidad, como lo señala el párrafo 17.20 de NIIF para pymes, en la cual hace
referencia, que la depreciación de un activo iniciará cuando esté disponible para
su uso, y continuará depreciándose durante su vida útil, incluso si se dejan de usar
los activos. De lo contrario, cuando la depreciación de un activo cese, esta se dará
de baja en cuentas, únicamente cuando se encuentre totalmente depreciado. Sin
embargo, acorde a lo descrito en el párrafo 17.19 señala que, si se cambia las
condiciones de uso, la entidad podría considerar cambiar o modificar sus
estimaciones iniciales como la vida útil, el método de depreciación y el valor
residual del activo si es el caso. (Actualicese, 2020)

IV. Valor recuperable

Una vez determinado, que existen indicios de deterioro, se debe establecer el

valor recuperable del activo, que según la IFRS (2009) “es el mayor entre su valor
razonable menos los costos de venta y su valor en uso” por lo cual, es necesario
establecer cual es mayor. Sin embargo, no siempre es necesario efectuar los dos
cálculos, en caso que alguno de los dos excediera el importe en libros, no habria
pérdida por deterioro del activo, y a su vez , si se presume que el valor en uso no
excede de forma relevante o significativa al valor razonable , se considerara a este
último como el valor recuperable de un activo.

Valor razonable

El valor razonable menos los costos de venta es el importe que se puede obtener
por la venta de un activo en una transacción realizada en condiciones de
independencia mutua entre partes interesadas y debidamente informadas menos
los costos de disposición. (IFRS,2009)
Este valor razonable, se puede encontrar en mercados activos, en donde
compradores y vendedores, en condiciones de independencia mutua, establecen
un precio de mercado, donde se comercializan activos de similares características,
y en donde se rige a indicadores de oferta y demanda.

Valor en uso

El valor en uso, como lo define la sección 27, es el valor presente de los flujos
futuros de efectivo que se espera obtener de un activo (IFRS, 2009). Es decir, una
proyección de entradas procedentes de la utilización del activo, y también de
salidas en donde sea necesario incurrir para generar las entradas de efectivo,
aplicando una tasa de descuento acorde a las condiciones de mercado, por lo
general aproximada a la inflación.

V. Sobrevaloración de activos

Una de las situaciones más importantes que se pueden presentar en el momento

de valorar los activos es determinar la medición, porque es allí donde se establece
el valor del activo para garantizar la transparencia de la información financiera. Si
el deterioro del activo, se produce cuando el valor en libros es mayor al importe
recuperable, inmediatamente se debe realizar un ajuste en la contabilidad para no
sobrevalorar el activo. Muchas empresas en Colombia caen en el error de
sobrevalorar dichos activos como consecuencia de cálculos inexactos, omisiones
y/o alteraciones, que no están reflejando el valor real en los estados financieros,
es decir, que cuanto más se aumente el valor de los activos, menos valor tendrán
estos porque genera un riesgo en el desmejoramiento de los indicadores
financieros.
 VI. Políticas contables

Según la sección 10 de las NIIF para pymes, define las políticas contables como:
“Los principios, bases, convenciones, reglas y procedimientos específicos
adoptados por una entidad al preparar y presentar estados financieros”. (IFRS,
2009)

Con base en lo anterior, las políticas contables representan el manual principal de

la entidad para la preparación y presentación de estados financieros, ya que, es
allí donde se deben presentar los lineamientos y bases que permitan llevar a cabo
la correcta aplicación de la norma.

La sección 10 especifica los criterios bajo los cuales se deben aplicar las políticas
contables, sin embargo, la entidad no necesitara seguir un requerimiento a menos
que el efecto causado por esta sea material. Como menciona Cano (2010), “la
entidad aplicará todas sus políticas contables de manera uniforme a menos que
una norma o interpretación exijan o permitan específicamente categorías de
partidas para las cuales sería apropiado aplicar diferentes políticas”.

Es por ello que cada entidad debe evaluar y adaptar las políticas contables para
dar lugar a la presentación de información fiable y relevante de acuerdo a cada
necesidad en particular. Las políticas contables afectan directamente a la sección
17: propiedades planta y equipos; es allí, donde se reflejan temas relacionados
como los métodos de depreciación a utilizar, la vida útil de los activos, baja en
cuentas, el valor residual y determinar si hay lugar a calcular el deterioro de valor
de un activo si existen indicios para realizar el cálculo.

La finalidad de este artículo es servir de guía al contador público para facilitar la

interpretación de la norma y evitar posibles errores en la medición del deterioro de
los activos, los cuales afectan la información contable y financiera. A
consecuencia, se genera la siguiente hipótesis: conocer los factores internos y
externos que afectan el reconocimiento y medición del deterioro de valor en las
propiedades, planta y equipo permite mejorar la calidad de la información contable
y la toma de decisiones.

Metodología

El presente trabajo se clasifica en la investigación aplicada. Según Murillo (2008)

citado por Vargas (2009), “la investigación aplicada se basa en la construcción de
conocimiento y aplicación o utilización en el campo”. Es de tipo descriptivo ya que
busca conocer las causas y efectos en el deterioro de los activos de propiedades
planta y equipo. Es documental puesto que se pretende analizar e interpretar las
fuentes secundarias obtenidas por otros investigadores para profundizar el
conocimiento de este fenómeno.

Se utilizaron técnicas de recolección de información de tipo cualitativo, a partir de

fuentes secundarias como el internet, el análisis de documentos, artículos de
investigación, la sección 10: políticas contables estimaciones y errores, y la
sección 17 Propiedades, planta y equipo y la sección 27: Deterioro del valor de los
activos.

Una vez analizada la información, se estableció un diagrama de flujo como

herramienta necesaria para ayudar al contador público en ejercicio de su
profesión, que le permita identificar con mayor certeza, si existe deterioro en las
propiedades planta y equipo y determinar cuáles son las implicaciones al no
aplicar el deterioro.
Resultados

 La falta de aplicación del deterioro de valor en las propiedades, planta y

equipo, produce imprecisiones en la presentación de la información de los
estados financieros, generando errores contables, y afectando la realidad
económica de las entidades.

 Conocer los factores internos y externos que causan el deterioro, ayudan a

establecer las políticas contables para la correcta medición y
reconocimiento de la pérdida del valor de los activos, y así establecer el
impacto que ocasiona en los estados financieros.

 El diagrama de flujo permite identificar la existencia de indicios de deterioro,

para determinar el cálculo que compruebe el valor real del activo.

 La sobrevaloración de los activos impacta negativamente a una compañía,

ya que amenaza con reflejar cifras que no son reales, afectando la realidad
económica y los estados financieros; al no reconocer el deterioro de un
activo, no se reflejará el gasto de perdida por deterioro en el estado de
resultados, ocasionando un mayor impuesto de renta.
Conclusiones

 La correcta medición y reconocimiento del deterioro brinda transparencia a

los usuarios de la información y permite la toma de decisiones de manera
más precisa, en aras de garantizar la calidad de la información contable.

 No realizar el cálculo del deterioro genera un impacto desfavorable, ya que

en los estados financieros se reflejan cifras que no corresponden al valor
real y que pueden ocasionar perjuicios de carácter financiero, económico y
tributario para la entidad a causa de imprecisiones en la información
suministrada.

 La sección 27 tiene como finalidad establecer el valor real de un activo, ya

que busca controlar que no se encuentren sobrevalorados, con respecto al
importe recuperable, como consecuencia de la venta o el uso del mismo.

 En tiempos difíciles, como la pandemia, se demuestra la importancia de

reconocer el valor real de un activo ya que cambios externos afectan las
propiedades planta y equipo, cuando se identifican indicios de deterioro.
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