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Teorías de la personalidad

Te explicamos qué son las teorías de la personalidad en psicología y


cuáles son las propuestas por Freud, Jung, Rogers, Kelly y otros autores.

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Cada teoría propone una composición específica de la personalidad.


¿Qué son las teorías de la personalidad?
En psicología, se conoce como teorías de la personalidad a las distintas
aproximaciones teóricas propuestas por los estudiosos de la personalidad en sus
respectivas épocas, es decir, los intentos psicológicos formales por definir y
clasificar las personalidades humanas en base a algún tipo de rasgos mínimos
compartidos.

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La personalidad es un conjunto estable y recurrente de reacciones y
de conductas humanas, que forman parte de nuestro modo de ser y en cierta
medida nos definen.

La personalidad nos hace más semejantes a ciertas personas y menos semejantes


a otras, dado que existen elementos compartidos y no compartidos entre las
diversas personalidades de las personas que conocemos a lo largo de la vida. Se
trata, como se verá, de generalizaciones estadísticas, que sirven para tratar de
clasificar la manera de ser de las personas.

Existen numerosas teorías de la personalidad, adscritas a ciertos enfoques


psicológicos o psicoanalíticos según la escuela a la que pertenecieron sus autores.
El objetivo de cada una es construir un modelo de análisis que se fije en los
rasgos mínimos de las personas, para poder así clasificarlas y establecer
comparaciones, o comprender la manera en que la personalidad se construye.

Ver también: Baja autoestima

Teoría de la personalidad de Freud

Según Freud, la personalidad se funda en aquello que amamos y perdimos.


Propuesta por el célebre padre del psicoanálisis, el austríaco Sigmund Freud
(1856-1939), esta teoría propone que la personalidad de los individuos se
forma a lo largo de su historia de vida, mediante la sumatoria de todos los
objetos amados y perdidos.

Dichos “objetos” vendrían a ser, en primera instancia, los padres, por quienes se
produce inicialmente un vínculo de amor, que el llamado “Complejo de Edipo”
nos hará superar mediante la renuncia. Pero posteriormente serán otros quienes
ocupen ese lugar de objeto amado y luego perdido, como los amigos, parejas,
colegas, etc.

Esta dinámica de amor y renuncia va formando al “yo”, una de las tres


instancias básicas de la psique para Freud (junto con el “superyó” o la ley, y
el “ello” o el inconsciente), a medida que éste asimila como propios algunos de
los rasgos de cada objeto perdido. Así, de un profesor muy querido podemos
“heredar” nuestra vocación, o ciertos gustos de algún amigo, etc.
En todo caso, según Freud la personalidad vendría a ser una suerte de
“colección” de objetos perdidos, que nos confieren un recorrido afectivo único,
pero con muchos puntos de encuentro con los demás.

Teoría de la personalidad de Jung

Carl Gustav Jung propuso ocho perfiles posibles de la personalidad.


Elaborada por uno de los discípulos de Freud, el psiquiatra y psicoanalista suizo
Carl Gustav Jung (1875-1961), esta teoría de la personalidad de 1921 propone
que ciertos arquetipos determinan la conformación de nuestra mente, los
cuales permiten la existencia de ocho perfiles posibles de la personalidad, que
son:

 Pensamiento-introvertido. Personalidades centradas en su mundo


interior, mucho más que en el afuera, e interesadas por el pensamiento
abstracto, reflexivo y teórico.
 Sentimental-introvertido. Personalidades empáticas, que valoran su
vínculo con los demás, aunque no sean muy dadas a expresarlo de
manera abierta y franca.
 Sensación-introvertido. Personalidades enfocadas en fenómenos
subjetivos, introspectivas, pero más vinculadas con lo que captan sus
sentidos, o sea, con su propia sensibilidad.
 Intuitivo-introvertido. Personalidades soñadoras, que se desapegan
de lo real inmediato y son dadas a la fantasía.
 Pensamiento-extrovertido. Personalidades que disfrutan de la
explicación, o sea, de registrar lo que ocurre a su alrededor y constituir
con ello un sistema mental, abstracto.
 Sentimental-extrovertido. Personalidades muy sociables, que
disfrutan de la compañía de los demás y presentan baja propensión
al pensamiento y la reflexión de tipo abstracto, al ser más inmediatistas
en sus intereses.
 Sensación-extrovertido. Personalidades que anhelan nuevas
sensaciones provenientes del afuera y de los demás, por lo que suelen
ser dadas a la búsqueda del placer y ser muy abiertas a lo nuevo.
 Intuición-extrovertido. Personalidades aventureras, carismáticas y
dotadas de liderazgo, que tienden a ocupar roles protagónicos en
su comunidad y a liderar causas sociales, políticas o comunitarias,
dado que se realizan ante los demás.

Teoría de la personalidad de Carl Rogers


Obra del psicólogo estadounidense Carl Rogers (1902-1987), esta teoría propone
un abordaje fenomenológico de la personalidad, es decir, en la manera de captar
la realidad y asumirla como propia. Para ello, Rogers definió lo que es una
“persona altamente funcional”, cuyas características servirían para definir los
distintos tipos de personalidad que hay.

De esta manera, Rogers propuso que las personalidades consistieran en


combinaciones de siete rasgos fundamentales:

 Apertura a la experiencia. Qué tan dispuestos estamos a la


exploración de las nuevas posibilidades y a las nuevas experiencias
vitales, o qué tan defensivos nos mostramos ante ello.
 Estilo de vida existencial. Qué tanto le damos sentido propio a las
experiencias que vivimos, creando así un significado personal para
nuestra vida, o qué tanto tendemos a esperar que la vida encaje en
parámetros prejuzgados.
 Autoconfianza. Qué tanto creemos o no creemos en nosotros mismos
ante las situaciones que se nos presentan.
 Creatividad. Qué tan dados somos a la imaginación, a la elucubración
o a la inventiva.
 Libertad de elección. Qué tanto podemos asumir nuevas formas de
comportamiento frente a las tradicionales en situaciones en que no nos
funcionan bien, creando así nuestras propias decisiones sobre la
marcha.
 Carácter constructivo. Qué tanto podemos conservar el equilibrio
vital a la hora de darle respuesta a nuestras necesidades.
 Desarrollo personal. Qué tan dispuestos estamos a asumir el cambio
constante como un proceso de crecimiento que no posee un fin.

Teoría de la personalidad de Kelly


Derivada del cognitivismo y constructivismo, esta teoría propuesta por el
psicólogo estadounidense George Kelly (1905-1967) se conoce como la Teoría
de los constructos personales.
Este autor propone que cada individuo organiza su experiencia de la realidad
en base a un conjunto ordenado de constructos, mediante sistemas binarios de
oposición (bonito-feo, verdadero-falso, etc.) que sirven para evaluar las
situaciones y para predecir los eventos futuros.

A medida que tenemos experiencias, estos constructos se irían remodelando


constantemente, implicando que nuestra personalidad está en constante cambio y
restructuración mientras vivamos.

Teoría de la personalidad de Allport

Allport clasificó los rasgos de la personalidad en cardinales, centrales o


secundarios.
Para el psicólogo estadounidense Gordon Allport (1897-1967), la personalidad
es la integración de un conjunto de rasgos únicos, que nos distinguen de los
demás, organizados en un sistema de respuestas que, de manera inconsciente,
intentamos usar para responder a todas las situaciones de una misma manera.

Pero como ello no funciona, lógicamente, nos adaptamos al medio,


incorporando o eliminando elementos fundamentales de la personalidad, que
Allport llamó “rasgos”.

Los rasgos pueden ser cardinales, centrales o secundarios, dependiendo de su


importancia estructural en el sistema de nuestra mente y, por ende, algunos serán
más sencillos de cambiar que otros. La personalidad vendría a ser el conjunto de
los rasgos que perduran en nosotros.

Teoría de la personalidad de Cattell


Esta es quizá una de las teorías de la personalidad más conocidas, propuesta por
el psicólogo británico Raymond Cattell (1905-1998), la cual tiene muchos puntos
de encuentro con la de Allport.

Por ejemplo, Cattell plantea que la personalidad consiste en la función de un


conjunto de rasgos, comprendidos como tendencias a reaccionar de una
determinada manera. Dichos rasgos pueden ser temperamentales (cómo actuar),
dinámicos (por qué actuar) o aptitudinales (qué se necesita para actuar).

De este modo, Cattell desarrolló los factores primarios de la personalidad,


que son 16 en total y se miden con el célebre test de personalidad 16PF, y
serían: afectividad, inteligencia, estabilidad del yo, dominancia, impulsividad,
atrevimiento, sensibilidad, suspicacia, convencionalismo, imaginación, astucia,
rebeldía, autosuficiencia, aprehensión, autocontrol y tensión.

Teoría de la personalidad de Eysenck


Hans Eysenck (1916-1997) es el psicólogo inglés autor de esta teoría centrada en
lo biológico, para el cual ideó el modelo PEN, una explicación de
las motivaciones de la personalidad en base a elementos internos del organismo.
Así, Eysenck determina tres factores centrales para definir la personalidad:

 Psicoticismo. O tendencia a actuar con dureza, que dependería de la


activación del Sistema de Activación Reticular Ascendente (SARA).
 Neuroticismo. O estabilidad de las emociones, que dependería del
sistema límbico.
 Introversión/extraversión. O tendencia a focalizarse en el mundo
interno o externo, el cual se vincula con los niveles de andrógenos y de
neurotransmisores como la dopamina y la serotonina.

En base a los niveles de estos factores, las personalidades podrán ser de una u
otra manera, según Eysenck.

Teoría de la personalidad de Costa y McCrae


Conocida como el Modelo de los cinco grandes (Big Five en inglés), esta
teoría propone la existencia de cinco factores alternativos de la personalidad,
que serían rasgos “básicos” en los cuales se fundamenta. Cada uno se compone
de una dupla cuyos extremos denotan cierto rasgo básico de la personalidad, y
que son:

 Extraversión-Introversión. La alta o baja sociabilidad y tendencia al


disfrute de la compañía de los demás.
 Apertura a la experiencia. La imaginación activa, la sensibilidad
estética, el atrevimiento vital, por un lado, y las conductas más
convencionales y familiares por la otra.
 Responsabilidad. El grado de compromiso y autocontrol del
individuo, no solo ante sus impulsos sino en la planificación, ejecución
y organización de sus tareas.
 Amabilidad-Egocentrismo. También considerada cordialidad o
afabilidad, representa la empatía y el grado de conexión emocional con
los demás, aunque en su grado opuesto está la competitividad y
el escepticismo.
 Neuroticismo o inestabilidad emocional. Se trata del afán de control
o de orden de los individuos, o de su capacidad para “dejar estar” las
cosas. Los altos niveles de neuroticismo se traducen en ansiedad,
hostilidad, depresión o vulnerabilidad.

Teoría de la personalidad de Gray


Esta teoría también se conoce como el Modelo de BIS (Behaviour Inhibition
System o Sistema de inhibición de la acción) y BAY (Behaviour Approximation
System o Sistema de aproximación a la acción).

Jeffrey Gray explica que existen dos mecanismos de activación o inhibición


de la conducta humana, anclados por un lado en la introversión y la ansiedad, y
por otro en la impulsividad y extroversión. Ambos sistemas actuarían
conjuntamente para formar nuestra personalidad.

Fuente: https://concepto.de/teorias-de-la-personalidad/#ixzz8YBLxMYuH

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