Está en la página 1de 4

Agroecología y Soberanía Alimentaria

Hola a todas y todos! ¿Cómo están en sus días? En la clase de hoy, continuando con los
temas que venimos desarrollando les propongo que reflexionemos sobre algunos conceptos
interesantes. Vamos a trabajar en torno a la agroecología, la soberanía y la seguridad
alimentaria. En ese sentido les propongo ver un nuevo capítulo de la serie Autosustentables
y leer algunos fragmentos y artículos breves. Luego deberán resolver algunas actividades.
Este trabajo se puede realizar de forma individual o en parejas. Si necesitan ayuda o tienen
alguna pregunta me escriben y charlamos. Mi intención era realizar una clase virtual para
intercambiar y explicar mejor algunos conceptos pero el 9 y 10 de Julio son feriados, la
semana que sigue la idea es no enviar trabajos y luego comienzan las vacaciones de
invierno. Con lo cual este sería el último trabajo que haríamos antes del receso. Por eso
refuerzo que me escriban si tienen dudas, porque son temas complejos y pueden no
comprenderlos a la primera vez.

Actividades:

1. Leer el siguiente fragmento para comenzar a diferenciar la seguridad alimentaria de


la soberanía alimentaria:

2. Leer los artículos que se encuentran a continuación. El primero está elaborado por la
FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación), un
organismo de la ONU y hace referencia al término de “Seguridad Alimentaria”. El
segundo texto está elaborado por Vía Campesina (un movimiento internacional que
coordina organizaciones de campesinos, pequeños y medianos productores, mujeres
rurales, comunidades indígenas, trabajadores agrícolas emigrantes, jóvenes y
jornaleros sin tierra) y hace referencia al concepto de “Soberanía Alimentaria”.

FAO: En América Latina no faltan alimentos, los pobres no acceden a ellos


Fuente: 31.ª Conferencia Regional FAO América Latina y el Caribe. (Panamá, 26 - 30 de Abril de 2010)

En América Latina el problema del hambre que afecta a 53 millones de personas no se


debe a la escasez de alimentos, sino a la falta de acceso a ellos por amplios sectores de
la población, advirtió este lunes la FAO.

“El problema del hambre en América Latina no es un problema de producción de los


alimentos sino del acceso a ellos, ya que en su conjunto la región produce más alimentos
de los que necesita”, dijo el director de políticas de la oficina de la FAO para América
Latina y el Caribe, Fernando Soto, en la 31.ª Conferencia Regional de la organización,
inaugurada en Panamá.

Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación


(FAO), América Latina y el Caribe se caracterizan por una alta volatilidad de los precios
de productos básicos, especialmente los alimentos, lo que dificulta su acceso para los
más pobres.

La inflación, el desempleo, la disminución de las remesas y los altos precios alimentarios


han reducido los ingresos reales de los segmentos más pobres de la población y han
agravado sus dificultades de acceso a una alimentación adecuada.

América Latina “es una región exportadora principalmente de cereales” donde algunos
países sudamericanos “son exportadores netos” de trigo, maíz y carne, algo que no ha
impedido que tras la crisis el número de hambrientos haya ascendido a 53 millones de
personas en la región, el mismo de hace 20 años, dijo Soto.

América Latina “es una región exportadora principalmente de cereales” donde algunos
países sudamericanos “son exportadores netos”. “Todavía la pobreza es muy elevada y
una buena parte de la población no tiene los ingresos suficientes y aunque los alimentos
estén disponibles no hay como comprarlos”, añadió.

La FAO considera que los países deben incrementar su producción agraria y pesquera,
centrándose en la producción agrícola familiar donde se facilite el acceso de los pequeños
productores a la tecnología, a las semillas mejoradas y a los créditos bancarios para
sufragar los costos de la cosecha.

“Cuando hablamos de acabar con el hambre y la pobreza estamos hablando de un


objetivo de desarrollo humano donde la gente es autónoma y puede satisfacer sus
necesidades y ahí entra la agricultura familiar”, dijo Juan Carlos García, coordinador del
proyecto América Latina y el Caribe sin Hambre, de la FAO.

“La FAO está viendo con muy buenos ojos y apoyando a los gobiernos que están
tomando medidas para revalorizar la pequeña agricultura y para aumentar la producción
interna de alimentos”, añadió Soto.

Sin embargo, “el problema es que cuando lo has abandonado tanto tiempo (los pequeños
sectores de productores para favorecer a los sectores exportadores) no lo tienes para
mañana”, explicó García.

Otro problema en la región es el aumento de la inseguridad alimentaria en el Caribe,


donde se pasó de 7.5 a 7.6 millones de hambrientos producto de las catástrofes naturales
y el alza de los precios.

“La disminución del hambre es un conjunto de medidas que tiene que ver con la
generación de empleo, el mejoramiento de los ingresos y la salida de la pobreza”, algo
que si se cumple “puede erradicar el hambre en América latina en una generación”,
puntualizó García.

Soberanía alimentaria:
¿Dónde, quién y en qué condiciones se producen los alimentos?

El concepto de soberanía alimentaria fue planteado en la Cumbre Mundial de


Alimentación de 1996, por Vía Campesina, en reacción al mal uso de la noción de
“seguridad alimentaria”, que si bien proponía que todos tengan una cantidad de alimentos
para comer todos los días, no ponía en discusión dónde, quién y en qué condiciones se
producen los alimentos. Así, se postulaba la idea de soberanía alimentaria, incorporando
un posicionamiento político, social y económico, que ponía en evidencia que la
problemática del hambre, la desnutrición y la exclusión, son consecuencia de la aplicación
de determinadas políticas. De esta manera, la soberanía alimentaria está vinculada a las
ideas de autonomía local, mercados locales y acción comunitaria, lo cual permitiría
democratizar no sólo los alimentos, sino también el acceso y control de los recursos por
parte de la población para la erradicación de la pobreza. (GRAIN, 2006; Jiménez Puente,
2007)
“Entendemos por soberanía alimentaria el derecho de los pueblos a definir sus
propias políticas y estrategias sustentables de producción, distribución y consumo
de alimentos que garanticen el derecho a la alimentación para toda la población,
con base en la pequeña y mediana producción, respetando sus propias culturas y
la diversidad de los modos campesinos, pesqueros e indígenas de producción
agropecuaria, de comercialización y de gestión de los espacios rurales, en los
cuales la mujer desempeña un papel fundamental” (FAO, 2001)
Por otra parte, al poner el centro de la discusión en torno al acceso de los alimentos
desde el ámbito de los Derechos Humanos (avalado por convenios internacionales,
vigentes desde fines de la década del 70) y la participación comunitaria en las instancias
de producción, elección y acceso a la información acerca de qué y cómo producir, y
consumir, permite romper con los programas que abordaban la alimentación desde una
postura asistencialista, destacando que las personas son sujetos de derecho y deben
tomar un rol activo a la hora de acceder y decidir en torno a los alimentos que consumen.
“Las personas tienen derecho a que se les proporcione información para tomar
sus propias decisiones en materia de alimentación en su propio contexto social,
respetando las pautas culturales relacionadas con el aprovechamiento de los
recursos naturales, las formas de acceso y consumo de alimentos. Es decir, las
personas tienen derecho a que se ponga a su disposición la información resultante
del avance científico, que sume elementos para reflexionar acerca de sus propias
prácticas y poder tomar decisiones en consecuencia.” (Abajo, 2010)
Desde el punto de vista de la producción, la soberanía alimentaria plantea la necesidad
de producir los alimentos en el espacio local y nacional, respetando la biodiversidad
productiva (especies y ecosistemas) y cultural propia de cada región. Para ello es
necesario impulsar políticas que brinden apoyo a las economías regionales por sector y
por producto, que permitan a la población rural seguir permaneciendo en sus territorios,
además de fomentar y fortalecer el mercado interno. (Pengue, 2003).

3. Ver en YouTube el video Autosustentables: Agroecología - Canal Encuentro (28:22


minutos)
4. Explicar la diferencia entre la agricultura industrial y la agroecología. ¿Qué relación
podes establecer con los manejos extractivistas y sustentables? ¿Qué relación tiene
esto con la “Revolución Verde”? ¿Qué opinión tenes al respecto?
5. ¿Qué es el monocultivo? ¿Cuáles son sus inconvenientes?
6. Diferenciar a la soberanía alimentaria de la seguridad alimentaria. ¿Qué prioriza
cada uno de estos conceptos? ¿Quién elabora o crea cada una de estas ideas?
7. ¿Qué relación tiene la agroecología con la soberanía alimentaria?

También podría gustarte