Está en la página 1de 2

Literatura finisecular. Modernismo y noventaiochismo*.

1. Contexto:
Hacia el final de siglo se suceden importantísimos cambios políticos y sociales que conllevan un
giro cultural que se va distanciando del realismo, por considerarlo un movimiento excesivamente
burgués y acomodado que no satisface las necesidades del momento ni representa la nueva
realidad.
La sensación de modernidad, cosmopolitismo y velocidad del nuevo siglo se unen en el caso de
España a la sensación de derrota, fracaso y estancamiento que conllevan la inestabilidad política y
los fracasos del país con la pérdida de sus últimas colonias (Cuba y Filipinas) y la primera guerra de
Rif (problemas con Melilla) entre otros. La sociedad en general reacciona con abulia ante la
situación que les rodea.

2. Corrientes literarias y sus características:

Los intelectuales del momento toman dos posturas muy distintas ante un mismo sentir: unos se
implicarán en la política y en la educación y decidirán con su literatura, cerca de lo experimental a
veces, llevar a los lectores a la reflexión, definir su sentimiento por España y sus orígenes o criticar
una sociedad empobrecida en todos los sentidos, otros por contra buscarán la evasión, la belleza y
el refugio en los “paraísos artificiales” como vía para afrontar ese mismo sentimiento.
Son conocidos como generación del 98 y modernistas respectivamente.

2.1 Características del 98: sobriedad expresiva, rechazo de la España oficial y búsqueda de la
verdadera “alma” de España a través de distintos temas como la historia cotidiana de personas
corrientes (lo que Unamuno llamaba “intrahistoria”), Castilla como metáfora de la situación
actual(porque es la región que tuvo un mayor esplendor en el pasado, y una de las que en el
presente sufre mayor decadencia), en la que su paisaje simbolizará el estado de ánimo del poeta y
la situación de decadencia de España, preocupación por temas existenciales (sentido de la vida),
sencillez en el estilo por una parte, y lirismo por otra.

2.2 Características del modernismo: bajo el lema bohemio surgido en París, meca de la cultura de
aquel entonces, de “libertad, belleza y amor” la literatura modernista se caracteriza por:
Exotismo, evasión de la realidad, preciosismo, léxico sugerente, gusto por lo aristocrático,
experimentación con el verso, rechazo de lo vulgar o cotidiano (incluyendo lo burgués), empleo de
versos largos (uso del alejandrino), extravagancia y “rimbombancia” de la expresión, musicalidad y
sinestesia como principal recurso.

3. Autores finiseculares:
3.1 Autores noventaiochistas:
- Prosa:
-Unamuno: sus dos grandes temas son el problema de España y el sentido de la vida humana. Su
obra gira alrededor de la relación entre Dios y los hombres (conflicto entre razón y fe). Es el
fundador de la novela intelectual en España. Destaca Niebla, una nivola, como la bautiza el propio
autor, que narra la difícil relación que se crea entre el autor y sus personajes. La novela intelectual
no respeta ninguna estructura tradicional. La confusión entre el sueño y la realidad, entre razón y
fe, son un tema unamuniano: la angustia de la existencia humana. Su estilo se caracteriza por una
lengua seca, precisa y rápida, sin perderse en descripciones o detalles.
- Azorín: se caracteriza por la desdibujar la frontera entre novela y ensayo. Pierde importancia el
argumento, de hecho, la obra parece un pretexto para encadenar pinturas de ambiente junto con
una galería de personajes sensibles, heridos o fracasados. Su tema será su visión de la vida
(angustia existencia) y su visión de España. Su obra más destacada es La voluntad.
- Baroja: Su centro es el tema de España, amada con amargura, aparecerá en su obra con sus
miserias morales. El tema principal es la visión de la realidad que tiene el autor, que refleja lo
cotidiano mediante un personaje en quien centra la acción. Su estilo es sobrio, sin recursos
retóricos, aunque destaca su léxico lleno de localismos y arcaísmos. Destaca su trilogía La lucha por
la vida.
- Lírica:
- Machado: Su poesía es el resultado de la conjunción de una extremada sobriedad y sencillez
formal con la emoción sincera y humana. Empleó con mucha frecuencia la rima asonante, las
formas de la lírica popular - romances, coplas y cantares - y de la culta, el soneto, la silva,... En él se
puede observar una evolución que, manteniendo esa línea fundamental, comienza con una poesía
modernista (Soledades), dentro de un tono intimista muy sobrio y personal, para abrirse después a
las preocupaciones propias del 98: España (Campos de Castilla). Su trayectoria termina en una
poesía de contenido ideológico – filosófico.
3.2 Autores modernistas:
- Lírica:
- Rubén Darío: la publicación de su obra Azul, es el pistoletazo de salida que sentará las bases del
modernismo. El poeta, desde su metafórica torre de marfil, crea a su alrededor un mundo de
belleza, sugerencia y sensualidad. Los temas, con cierto toque naif (cursis), se centran en paisajes o
escenas idealizadas donde destacan el azul y el cisne como símbolos de la belleza y el refinamiento
por excelencia.
- Valle Inclán destaca por su poética La lámpara maravillosa en la que teoriza sobre la poesía, la
inspiración, etcétera, que fundamentan su creación lírica.
- Prosa:
- Valle Inclán: considerado representante de ambos grupos (generación del 98 y modernismo),
destaca en la narrativa modernista por su obra Sonatas (Primavera, Invierno, Estío y Otoño), en las
que mediante su personaje principal, El marqués de Bradomín, recorre las más bellas escenas
modernistas hiladas por diversas amantes, que representan las etapas de la vida.

3.3 Teatro finisecular:


El autor más destacado es Valle Inclán, especialmente con su obra Luces de bohemia, en la que su
protagonista, el poeta ciego Max Estrella, realiza su particular viaje por la noche madrileña de la
bohemia del momento para finalizar en un momento de revelación, en el que ve (simbólicamente)
con claridad cual es su misión en la vida y en la que formula la teoría del esperpento, mediante la
cual los personajes literarios son vistos deformados, en el sentido más grotesco y deshumanizados,
llenos de vicios, imperfecciones de igual manera en que los dioses nos ven desde la distancia.

Los hermanos Machado serán también parte de los grandes dramaturgos del momento con sus
obras en colaboración, destacando La Lola se va a los puertos. Su obra dramática transcurre en
paralelo a sus obras individuales tanto de prosa como de lírica (escriben también teatro en verso) y
en ellas se entremezclan elementos modernistas y más propios del 98 así como pinceladas
costumbristas desde un enfoque innovador.

También podría gustarte