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CONSENSO DE HARTFORD III

El Consenso de Hartford III: I

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40 |

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y
de eventos intencionales con víctimas en masa y tiradores activos

V100 nº 7BOLETÍNColegio Americano de Cirujanos

 CONSENSO DE HARTFORD III
Los acontecimientos recientes han demostrado que, a pesar de las
lecciones aprendidas de más de 6.800 muertes en combate
estadounidenses en los últimos 13 años, existen oportunidades para
mejorar el control de la hemorragia externa en el sector civil.
Nota del editor:El Comité Conjunto para Crear una Política Nacional
para Mejorar la Supervivencia en Eventos con Muertes Intencionales
y Tiradores Activos desarrolló el siguiente llamado a la acción en su
reunión del 14 de abril en Hartford, CT. Esta reunión del comité,
presidida por el Regente Lenworth M. Jacobs, Jr., MD, MPH, FACS del
Colegio Americano de Cirujanos (ACS), se centró en la
implementación de estrategias para el control eficaz de las
hemorragias. Las deliberaciones del grupo dieron como resultado el
documento Hartford Consensus III. Este informe fue presentado en
una mesa redonda en la Casa Blanca el 29 de abril, que incluyó a
representantes de 35 organizaciones médicas y quirúrgicas, de
enfermería, policiales, de bomberos, de servicios médicos de
emergencia (EMS) y otras organizaciones interesadas (consulte las
páginas 22 y 24 para obtener listas de organizaciones y agencias
participantes). Los participantes respaldaron unánimemente los
principios establecidos en el Consenso de Hartford III. El siguiente es
el Consenso de Hartford III, editado para ajustarse aBoletínestilo.
oh
La amenaza que enfrenta nuestra nación ante eventos
intencionales con víctimas masivas sigue siendo elevada.
Se ha identificado como una prioridad para la
preparación nacional mejorar la resiliencia pública ante todos
estos peligros potenciales. Los acontecimientos recientes han
demostrado que, a pesar de las lecciones aprendidas de más de
6.800 muertes en combate estadounidenses en los últimos 13
años, existen oportunidades para mejorar el control de la
hemorragia externa en el sector civil.* Estas oportunidades
existen en forma de intervenciones que deben realizarse por
transeúntes conocidos como socorristas inmediatos y socorristas
profesionales, como agentes del orden, técnicos en emergencias
médicas (EMT), paramédicos y bomberos (EMS/incendios/
rescate), en el lugar del incidente.
La ACS fundó el Comité Conjunto para crear una política
nacional para mejorar la capacidad de supervivencia en
eventos con víctimas intencionales en masa y tiradores
activos. El comité se reunió dos veces en 2013, hizo
recomendaciones específicas y emitió un llamado a la acción.
Las deliberaciones del comité se conocen como el Consenso
de Hartford. Se convocó una tercera reunión el 14 de abril.
Esta reunión del Hartford Consensus III
* Holcomb JB, Hoyt DB. Investigación integral de lesiones.JAMA. 2015;
313(14):1463-1464.
centrado en la implementación de estrategias para el control eficaz
de las hemorragias.
El principio general del Consenso de Hartford es que
en eventos intencionales con muchas víctimas y con
tiradores activos, nadie debe morir por hemorragia
incontrolada. Un acrónimo para resumir la respuesta
necesaria es AMENAZA:
• tsupresión de la amenaza
• hcontrol de hemorragias
• RÁpidomixtricación a la seguridad
• AEvaluación por parte de proveedores médicos.
• ttransporte a cuidados definitivos
El Consenso de Hartford exige un sistema de respuesta
integrado y fluido que incluya al público, las fuerzas del orden,
los servicios de emergencias médicas/bomberos/rescate y | 41
atención definitiva para emplear la respuesta a las AMENAZA de
una manera integral y rápida.
Tres niveles de respondedores
Hay diferentes niveles de socorristas en un evento con muchas
víctimas intencionales o con tirador activo:
• Personal de respuesta inmediata: las personas que están
presentes en el lugar y que pueden controlar
inmediatamente el sangrado con sus manos y el equipo
que pueda estar disponible.
• Socorristas profesionales: socorristas prehospitalarios en el
lugar que cuentan con el equipo y la capacitación
adecuados.
• Profesionales de traumatología: profesionales de la salud en
hospitales con todo el equipo y la habilidad necesarios para
brindar atención definitiva.
Respondedores inmediatos
Uno de los objetivos del Consenso de Hartford III es capacitar al
público para brindar atención de emergencia. Durante eventos
intencionales con muchas víctimas, aquellos presentes en el punto
continúa en la página después de la siguiente
JULIO 2015BOLETÍNColegio Americano de Cirujanos

EL CONSENSO DE HARTFORD III: IMPLEMENTACIÓN DEL CONTROL DE LAS HEMORRAGIAS
COMITÉ CONJUNTO PARA CREAR UNA POLÍTICA NACIONAL PARA MEJORAR LA SUPERVIVENCIA EN
EVENTOS INTENCIONALES CON VÍCTIMAS EN MASA Y TIRADORES ACTIVOS
PARTICIPANTES
Lenworth M. Jacobs, Jr., MD, MPH, FACS
Presidente, Hartford Consensus
Vicepresidente, Asuntos
Académicos Hartford Hospital
Junta de Regentes,
Colegio Americano de Cirujanos
Richard Carmona, MD, MPH, FACS
17mo Cirujano General de EE. UU.
Norman McSwain, MD, FACS
Director médico, soporte vital prehospitalario para
traumatismos
Universidad de Tulane
Frank Butler, MD, FAAO, FUHM
Presidente del Comité de Atención a
42 |
Víctimas en Combate Táctico
Departamento de Defensa
Sistemas de traumatismos articulares
David Elliot
Presidente, Presidente de
Hartford, Junta Directiva
Hartford Hospital
Andrew L. Warshaw, MD, FACS,
FRCSEd (Hon)
Presidente, Colegio Americano de Cirujanos
Hospital General de Massachusetts, Boston
Jonathan Woodson, MD, FACS
Subsecretario de Defensa para Asuntos de
Salud, Departamento de Defensa
Richard C. Hunt, MD, FACEP
Director de Política de Preparación Médica, Personal
del Consejo de Seguridad Nacional
La casa Blanca
Ernest Mitchell
Administrador, Administración de Bomberos de EE.
UU. Agencia Federal para el Manejo de Emergencias
Departamento de Seguridad Nacional
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CONSENSO DE HARTFORD III
Alexander Eastman, MD, MPH, FACS
Jefe de Traumatología de la Asociación de Jefes de
Policía de las principales ciudades, Parkland
Memorial Hospital
Centro médico del suroeste de la
Universidad de Texas
Kathryn Brinsfield, MD, MPH, FACEP
Subsecretario, Director Médico de
Asuntos de Salud,
Departamento de Seguridad Nacional
Coronel Kevin O'Connor, DO, FAAFP
Médico del vicepresidente
La Casa Blanca
William Fabbri, MD, FACEP
Director, Servicios Médicos de Emergencia
Oficina Federal de Investigaciones
Richard Serino
Miembro visitante distinguido, Universidad
de Harvard, Facultad de Salud Pública
8º Subadministrador,
Agencia Federal para el Manejo de Emergencias
Alasdair Conn, MD
Jefe Emérito, Medicina de Emergencia
Hospital General de Massachusetts
Karyl Burns, PhD
Científico investigador, Hartford Hospital
Matthew Levy, DO, MSc, FACEP
Oficial médico superior de la
Universidad Johns Hopkins,
Centro Johns Hopkins de
medicina policial
Leonard Weireter, MD, FACS
Vicepresidente del Comité de Trauma
Colegio Americano de Cirujanos Facultad
de Medicina de Virginia Oriental
John Holcomb, MD, FACS
Jefe, División de Cirugía de Cuidados Intensivos Centro
de Ciencias de la Salud de la Universidad de Texas
Peter Rhee, MD, MPH, FACS
Departamento de Cirugía
Universidad de Arizona
Ronald Stewart, MD, FACS
Presidente del Comité de Trauma
Colegio Americano de Cirujanos Centro
de Ciencias de la Salud de la
Universidad de Texas en San Antonio
Robert Anderson, CDR, MSC, USN
Asistente Militar del Subsecretario de
Defensa para Asuntos de Salud
Departamento de Defensa
Thomas M. Scalea, MD, FACS
Médico Jefe,
R Adams Cowley Centro de Trauma por Choque
Universidad de Maryland
escuela de Medicina
Donald Jenkins, MD, FACS
Director médico, Centro de Trauma
Mayo Clinic
David R. King, MD, FACS
Traumatología, Cirugía de Emergencia y Cuidados
Críticos Quirúrgicos
Departamento de Cirugía
Hospital General de Massachusetts
 CONSENSO DE HARTFORD III

Participantes del Consenso de Hartford III. Sentados, de izquierda a derecha: Dres. McSwain, Warshaw, Jacobs, Woodson, Brinsfield,
y Levy; y el señor Elliott. De pie, de izquierda a derecha: Dr. Rhee, Sr. Mitchell, Dres. Eastman, Conn, O'Connor,
Stewart, Butler, Burns, Weireter, Hunt, Holcomb y Fabbri; y el comandante Anderson.

de las heridas a menudo han resultado invaluables para
responder a las necesidades iniciales de control de hemorragias
de los heridos. Tradicionalmente considerados “espectadores”,
estos socorristas inmediatos no deben considerarse
observadores pasivos y pueden proporcionar un tratamiento de
primera línea eficaz para salvar vidas.
Los socorristas inmediatos contribuyen a la supervivencia de
la víctima al realizar un control crítico de la hemorragia externa
en el lugar de la herida y antes de la llegada de los socorristas
tradicionales. Los socorristas inmediatos contribuyen a lo que es
el paso crítico para eliminar la muerte prehospitalaria evitable: el
control de la hemorragia externa.
El Consenso de Hartford III reconoce el papel vital que
desempeñan los socorristas inmediatos en la respuesta a
eventos con muchas víctimas. Hacen contribuciones
importantes para mejorar la supervivencia tras estos
incidentes. Sin embargo, el Consenso de Hartford III no
recomienda que el público entre en áreas de amenaza
directa o peligro inminente.
Las leyes del buen samaritano han sido eficaces para
empoderar al público a participar en la respuesta inmediata
a una víctima de paro cardíaco o asfixia mediante el inicio de
la reanimación cardiopulmonar y la maniobra de Heimlich,
respectivamente. El Consenso de Hartford recomienda que
estas protecciones legales se amplíen para incluir la
provisión de control de hemorragias.
Primeros auxilios profesionales
Los socorristas profesionales incluyen las fuerzas del orden y los
servicios de emergencias médicas/bomberos/rescate. Como lo indica
AMENAZA, las fuerzas del orden deben suprimir la fuente de la herida
si el tirador todavía está activo y luego, debido a que están
Por lo general, los primeros intervinientes en la escena deben actuar
para controlar la hemorragia externa. Las víctimas con hemorragia
externa potencialmente mortal deben ser tratadas inmediatamente
en el lugar de la herida. Todos los socorristas deben estar
capacitados y contar con el equipo necesario para proporcionar un
control eficaz de la hemorragia externa. Se debe seguir haciendo | 43
hincapié en la integración de los socorristas inmediatos, las fuerzas
del orden y los servicios de emergencias médicas/bomberos/rescate
para optimizar la evaluación, el tratamiento y el transporte rápidos
del paciente a la atención definitiva en el hospital apropiado más
cercano.
Construyendo capacidades educativas
La educación sobre el control de las hemorragias puede
adoptar muchas formas y debe ofrecerse mediante diversas
modalidades. Los programas educativos establecidos para
individuos, comunidades y socorristas profesionales pueden
modificarse para incluir técnicas efectivas de control de
hemorragias externas. El curso Control de sangrado para
heridos (B-Con) ofrecido por la Asociación Nacional de
Técnicos en Emergencias Médicas es un ejemplo de un
programa recientemente creado que es apropiado para
capacitar a personas que tienen poca o ninguna formación
médica. Se deben utilizar otros métodos, como anuncios de
servicio público, lemas, publicidad y medios de
entretenimiento, para transmitir el mensaje de que el control
de las hemorragias es responsabilidad del público y está
dentro de sus capacidades.
Es necesario empoderar al público para que participe en
acciones que salven vidas. Esta capacitación debe incluirse como
parte de la preparación para situaciones que involucran a otros

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29 DE ABRIL DE 2015

MESA REDONDA SOBRE LOS ESPECTADORES: LOS RESPONDENTES INMEDIATOS DE NUESTRA NACIÓN

PARTICIPANTES
• Asociación de médicos del aire • Asociación de servicios médicos aéreos • Asociación de jefes de ciudades principales

• Academia Estadounidense • Asociación de Funcionarios de • Asociación Nacional de Técnicos en

de Asistentes Médicos Salud Estatales y Territoriales Emergencias Médicas

• Asociación Americana de Ambulancias • Asociación Oriental para la • Asociación Nacional de enfermeras escolares
Cirugía del Trauma
• Asociación Estadounidense de • Asociación Nacional de

Enfermeras de Cuidados Intensivos • Asociación de enfermeras de emergencia Funcionarios Estatales de EMS

• Asociación Americana para • Alianza Laboral de Servicios Médicos • Asociación Nacional de Entrenadores Atléticos
la Cirugía del Trauma de Emergencia
• Emergencia Nacional
• Colegio Americano de • Academias internacionales de Asociación de gestión
Médicos de Emergencia despacho de emergencia
• Consejo Nacional de Bomberos Voluntarios

• Colegio Americano de Cirujanos • Asociación Internacional • Sociedad de asistentes médicos de

de Jefes de Policía
• Asociación Americana del Corazón medicina de emergencia
• Asociación Internacional de
•
• Asociación Americana de Hospitales Sociedad de enfermeras de trauma
administradores de emergencias
• Asociación Americana de Enfermeras • Asociación de Centros de Trauma de América
• Asociación Internacional de Jefes de
• Asociación Americana de Osteopatía Servicios Médicos de Emergencia • Personal de la Casa Blanca

• Asociación Americana de Terapia Física • Asociación Internacional • Líderes de equipo de grupos de trabajo de

• Asociación Americana de Salud Pública de Bomberos espectadores interinstitucionales

• • invitados federales
44 | • Sociedad Americana de Trauma Asociación Internacional de Jefes de Bomberos

peligros potenciales, incluidos eventos cotidianos que pueden • Uso de torniquetes improvisados como último recurso.
producir traumatismos y hemorragias. Para los socorristas
profesionales, los cursos más avanzados pueden ofrecer opciones Para los socorristas profesionales, el contenido
adicionales para controlar una hemorragia externa potencialmente educativo debe incluir:
mortal. Toda formación formal debe tener objetivos específicos y
formar competencias. Para los socorristas profesionales, la formación • Acciones para garantizar la seguridad personal
debe ser eficiente y rentable. En última instancia, se deben realizar
ejercicios de entrenamiento integrados que incluyan a todos los • Coordinación e integración de todos los intervinientes.
niveles de personal de respuesta.
El contenido educativo específico para el personal de respuesta • Comunicación entre todos los respondedores.
inmediata debe incluir:
• Interacciones apropiadas con los socorristas inmediatos.
• Acciones para garantizar la seguridad personal
• Aplicación de los principios de AMENAZA
• Interacciones apropiadas con las autoridades, servicios médicos de
emergencia/bomberos/rescate y personal médico. • Uso adecuado de la presión directa.

• Cómo identificar el sangrado como una amenaza para la vida • Uso adecuado de apósitos hemostáticos seguros y eficaces.

• Uso de las manos para aplicar presión directa. • Uso adecuado de torniquetes eficaces.

• Uso adecuado de apósitos hemostáticos seguros y eficaces. Es apropiado utilizar las organizaciones nacionales
existentes para difundir ampliamente los principios
• Uso adecuado de torniquetes eficaces. incorporados en estas iniciativas educativas.

V100 nº 7BOLETÍNColegio Americano de Cirujanos

 CONSENSO DE HARTFORD III
Capacidades de los equipos de construcción
El personal de respuesta inmediata debe reconocer que
aplicar presión a un vaso sangrante es la primera acción
adecuada y que sus manos son un recurso de primera línea.
En la mayoría de los casos, el control de la hemorragia
externa se puede lograr aplicando presión directa sobre el
vaso sangrante.
Es posible que se necesiten vendajes hemostáticos y torniquetes
para detener el sangrado de manera efectiva. Por esta razón, el
Consenso de Hartford recomienda que todos los agentes de policía y
cualquier ciudadano preocupado lleven un vendaje hemostático, un
torniquete y guantes. Esta directriz también debe aplicarse a todo el
personal de EMS/bomberos/rescate. Los vehículos de transporte
médico terrestre y aéreo deben llevar múltiples apósitos y
torniquetes según las necesidades locales. Además, las bolsas de
control de hemorragias deben ser accesibles en lugares públicos
según lo determine una evaluación de las necesidades locales. Los
sitios potenciales para las bolsas de control de hemorragias incluyen
centros comerciales, museos, hospitales, escuelas, teatros,
instalaciones deportivas, centros de transporte (como aeropuertos,
estaciones de autobuses y estaciones de tren) e instalaciones con
acceso limitado o retrasado. Todos los vendajes y torniquetes
hemostáticos deben ser clínicamente eficaces según lo documentado
por datos científicos válidos. Las pautas de Atención Táctica de
Víctimas en Combate para el ejército de EE. UU. contienen evidencia
objetiva que respalda la seguridad y eficacia de las diversas opciones
de torniquetes y vendajes hemostáticos.
El contenido de las bolsas de control de sangrado
debe incluir lo siguiente:
JAMES BROOKS HART, CMI
Aplicación de torniquete con una sola mano
• Vendajes de presión
• Apósitos hemostáticos seguros y eficaces
• Torniquetes efectivos
• Guantes de protección personal | 45
La colocación de las bolsas de control de sangrado debe ser la
siguiente:
• Junto a todos los desfibriladores externos automáticos según la
necesidad local
• Inmediatamente reconocible visualmente o mediante una
aplicación web
• Ubicaciones seguras pero accesibles
• Capaz de ser utilizado en tres minutos.
Creación de recursos para programas de
control de hemorragias
La adquisición de equipos y capacitación para el control de
hemorragias requiere acciones a nivel federal, estatal y local,
así como en el sector privado. La adquisición de torniquetes
y vendajes hemostáticos debe reflejar la evidencia y la
experiencia que el ejército estadounidense ha adquirido en
los últimos 13 años de guerra o la evidencia científica que
esté disponible. Las agencias federales deberían hacer de la
eliminación de las muertes evitables por hemorragia un
tema prioritario que influirá en la financiación. En el
JULIO 2015BOLETÍNColegio Americano de Cirujanos
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46 | A nivel estatal y local, el gobierno debe interactuar con el sector
privado para identificar riesgos potenciales en lugares y lugares
de trabajo públicos. También es importante señalar que los
municipios pueden participar en actividades de recaudación de
fondos a nivel local para adquirir equipos. Las organizaciones
profesionales deben establecer estándares que fomenten la
educación, el equipamiento y la capacitación del personal de
respuesta inmediata, que deben ofrecerse como medida de
seguridad pública. Los voluntarios pueden ser un recurso para
proporcionar la capacitación.
Las consideraciones para el desarrollo y la sostenibilidad
de los programas de control de hemorragias incluyen las
siguientes:
• Utilizar mensajes claros y concisos de que el control de las hemorragias es una
cuestión que incumbe a los sectores público y privado.
• Involucrar al sector privado, incluidas empresas y
asociaciones comerciales.
• Apelando a organizaciones filantrópicas
• Solicitar subvenciones de agencias gubernamentales
y privadas
• Involucrar a organizaciones profesionales, comunitarias,
sociales y religiosas.
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JAMES BROOKS HART, CMI
JAMES BROOKS HART, CMI
Control de hemorragia de respuesta inmediata
Conclusión
La causa de muerte prevenible más importante en el entorno
prehospitalario es la hemorragia externa. Como lo demuestran las
directrices promulgadas por el ejército, el control generalizado de las
hemorragias es fundamental para salvar vidas. Nuestra nación tiene
una historia de aprender duras lecciones de las experiencias de
tiempos de guerra; el caso del control de las hemorragias no es
diferente. El Consenso de Hartford exige que todos los socorristas
tengan la educación y el equipo necesario para el control de
hemorragias y respalda firmemente que los transeúntes civiles
actúen como socorristas inmediatos. Los socorristas inmediatos
representan un elemento fundamental de la capacidad de Estados
Unidos para responder a estos eventos y son un componente crítico
de nuestra capacidad para construir resiliencia nacional. Los
socorristas inmediatos deben estar facultados para actuar, intervenir
y ayudar.
Somos una nación de personas que responden
a otros necesitados. Ya no basta con “ver algo,
decir algo”. Los socorristas inmediatos ahora
deben “ver algo, hacer algo”.♦
Nota del autor
Todo el texto y las imágenes de este artículo © Hartford Consensus.
Permiso de reimpresión otorgado por el Dr. Jacobs. Para obtener permiso
para reimprimir o para obtener más información, comuníquese con el Dr.
Jacobs en lenworth.jacobs@hhchealth.org .