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BARCELONA, 17 DE ABRIL DEL 2024.

UNIVERSIDAD SANTA MARÍA

FACULTAD DE DERECHO

DERECHO CIVIL II

SEGUNDO SEMESTRE

´´PATRIA POTESTAD ´´

Alumnos: Profesora:

José Antonio Fernández Rocchetta Ana Michelangeli

V28.279.429

María Fernanda Marín Rojas

V26.520.369
DESARROLLO
Responsabilidad de Crianza

La responsabilidad en la crianza es el deber de los padres de responder por las


consecuencias que genere su comportamiento en el proceso de desarrollo de sus hijos.
Se ha adjudicado a los hombres la responsabilidad principal de trabajar para la
manutención económica de la familia y a la mujer las funciones de educación y
formación de aquellos.
"la responsabilidad de crianza del menor de edad implica un deber y un
derecho de convivencia del padre en ejercicio de la guarda, hacia el hijo a ella
sometido, como un medio para facilitar el cumplimiento de otros deberes
comprendidos dentro de este mismo atributo de la patria potestad" (Ali Lasser).

Hoy día, a la luz de la doctrina de la protección integral, se sigue observando a


la figura de la guarda como el principal atributo de todo: "el conjunto de deberes y
derechos de los padres en relación con los hijos que no hayan alcanzado la
mayoridad, que tiene por objeto el cuidado, desarrollo y educación integral de los
hijos. Como define el artículo 347 de la Ley Orgánica para la Protección del Niño y
del
Adolescente a la institución de la patria potestad.

Titularidad y Ejercicio

En efecto, el artículo 358 de la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del
Adolescente establece que:

o "La Responsabilidad de Crianza comprende el deber y derecho compartido,


igual e irrenunciable del padre y de la madre de amar, criar, formar, educar,
custodiar, vigilar, mantener y asistir material, moral y afectivamente a sus
hijos e hijas, así como la facultad de aplicar correctivos adecuados que no
vulneren su dignidad, derechos, garantías o desarrollo integral. En
consecuencia, se prohíbe cualquier tipo de correctivos físicos, de violencia
psicológica o de trato humillante en perjuicio de los niños, niñas y
adolescentes".

o "El padre y la madre que ejerzan la Patria Potestad tienen el deber compartido,
igual e irrenunciable de ejercer la Responsabilidad de Crianza de sus hijos o
hijas, y son responsables civil, administrativa y penalmente por su inadecuado
cumplimiento. En caso de divorcio, separación de cuerpos, nulidad de
matrimonio o de residencias separadas, todo el contenido de la
Responsabilidad de Crianza seguirá siendo ejercida conjuntamente por el
padre y la madre.

La Custodia, Ejercicio de la Custodia

Para el ejercicio de la Custodia se requiere el contacto directo con los hijos e hijas
y, por tanto, deben convivir con quien la ejerza. El padre y la madre decidirán de
común acuerdo acerca del lugar de residencia o habitación de los hijos o hijas.

Cuando existan residencias separadas, el ejercicio de los demás contenidos de la


Responsabilidad de Crianza seguirá siendo ejercido por el padre y la madre.
Excepcionalmente, se podrá convenir la Custodia compartida cuando fuere
conveniente al interés del hijo o hija. Reiteramos, por ambos, en conjunto, en forma
compartida, (Coparen talidad).

En caso de desacuerdo sobre una decisión de Responsabilidad de Crianza, entre


ellas las que se refieren a la Custodia o lugar de habitación o residencia, el padre y la
madre procurarán lograr un acuerdo a través de la conciliación, oyendo previamente
la opinión del hijo o hija. Si ello fuere imposible, cualquiera de ellos o el hijo o hija
adolescente podrá acudir ante el Tribunal de Protección de Niños, Niñas y
Adolescentes, de conformidad con lo previsto en el Parágrafo Primero del artículo
177 de esta Ley.

Revisión y Modificación de la Responsabilidad de Crianza

El artículo 361 de la LOPNNA, establece que el juez puede revisar y modificar


las decisiones en materia de Responsabilidad de crianza, a solicitud de quien está
sometido a la misma, si tiene doce años o más, o del padre o de la madre, o del
Ministerio Público. Toda variación de una decisión anterior en esta materia, debe
estar fundamentada en el interés del hijo, quien debe ser oído si la solicitud no ha
sido presentada por él. Asimismo, debe oírse al Fiscal del Ministerio Público.

La Restitución

La restitución ocurre cuando por medios legales se exige devolver la custodia de


un menor a sus padres biológicos o tutores legales después de que esta haya sido
otorgada a otra persona o entidad, como ocurre en casos de adopción o custodia
temporal.
La restitución puede implicar un proceso legal que evalúa el bienestar del menor,
la idoneidad de los padres biológicos o tutores legales, así como cualquier cambio
en las circunstancias que pueda haber ocurrido desde que se tomó la decisión
inicial de otorgar la custodia a otra persona. El objetivo es siempre garantizar el
interés superior del menor y su bienestar integral.

Familia Sustituta
se refiere a un sistema de protección para niños, niñas y adolescentes que se
encuentran en situación de riesgo o vulnerabilidad, y cuyos padres no pueden
cuidarlos por diversas razones, como abandono, maltrato o incapacidad para
proporcionarles un entorno seguro y adecuado para su desarrollo.

La Familia Sustituta es una medida de protección contemplada en la Ley Orgánica


para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes. Consiste en colocar
temporalmente a estos niños, niñas y adolescentes bajo el cuidado y protección de
una familia distinta a la biológica, que esté capacitada y dispuesta a brindarles un
ambiente familiar seguro, amoroso y estable.

La familia sustituta puede ser temporal o permanente, dependiendo de la situación


específica de cada caso y de las decisiones tomadas por las autoridades competentes.

La colocación Familiar

La Colocación Familiar es un término que se refiere a una medida de protección para


niños, niñas y adolescentes en situación de riesgo o vulnerabilidad, contemplada en la
Ley Orgánica para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes.
La Colocación Familiar consiste en colocar temporalmente a estos niños, niñas y
adolescentes bajo el cuidado y protección de una familia distinta a la biológica, que
esté capacitada y dispuesta a brindarles un ambiente familiar seguro, amoroso y
estable. Esta medida se toma cuando no es posible que el niño, niña o adolescente
permanezca con su familia biológica debido a situaciones de abandono, maltrato u
otras circunstancias que pongan en riesgo su bienestar.

Sentencia: DP41-V-2007-000227
Régimen de Convivencia Familiar

El Régimen de convivencia familiar tiene como propósito garantizar el derecho de los


niños, niñas y adolescentes a mantener relaciones significativas y continuas con
ambos
progenitores.
La fijación del Régimen de Convivencia Familiar se lleva a cabo principalmente en el
marco de procedimientos legales relacionados con el divorcio, la separación de hecho
o cualquier otra situación en la que los padres no convivan juntos y exista la
necesidad de regular la convivencia de los hijos menores de edad con cada uno de
ellos.

La fijación del régimen de convivencia familiar puede ocurrir de diversas maneras,


dependiendo de las circunstancias específicas de cada caso. Algunas de las formas
comunes son:

 Acuerdo entre las partes: En muchos casos, los padres pueden llegar a un
acuerdo
de manera voluntaria sobre cómo se llevará a cabo el régimen de convivencia
familiar. Este acuerdo puede ser presentado ante un tribunal para su aprobación,
convirtiéndose así en una sentencia judicial.

 Mediación: Los padres pueden optar por participar en un proceso de mediación


con
la ayuda de un mediador neutral, quien les asistirá en la negociación de un acuerdo
sobre el régimen de convivencia familiar.

 Decisión judicial: Cuando los padres no pueden llegar a un acuerdo por sí mismos
o a través de mediación, un tribunal puede intervenir y emitir una decisión sobre el
régimen de convivencia familiar. Esta decisión se basará en el principio del interés
superior del niño, niña o adolescente y en las circunstancias específicas de cada
caso.

Una vez que se ha fijado el régimen de convivencia familiar, este se convierte en una
orden judicial vinculante para ambas partes y debe ser cumplido rigurosamente, salvo
que existan circunstancias que justifiquen su modificación. Es importante destacar
que el objetivo principal del régimen de convivencia familiar es garantizar el
bienestar emocional y psicológico de los hijos menores de edad, promoviendo
relaciones saludables con ambos progenitores.

La extensión del Régimen de Convivencia Familiar se refiere a la modificación de las


disposiciones establecidas en el régimen inicialmente fijado por un tribunal o
acordado
entre las partes en relación con el tiempo de convivencia entre los hijos menores de
edad y sus padres o tutores legales.

La extensión del régimen de convivencia familiar puede ser solicitada por alguna de
las partes o acordada de mutuo acuerdo entre ellos, y generalmente se da cuando
existe un cambio en las circunstancias que justifica la necesidad de modificar el
régimen inicial.
Algunas de las razones comunes para solicitar una extensión del régimen de
convivencia familiar pueden incluir:

 Cambios en las responsabilidades laborales o residenciales de los padres que


dificultan el cumplimiento del régimen de convivencia original.

 Cambios en las necesidades o actividades extracurriculares de los hijos menores de


edad que requieren ajustes en el tiempo de convivencia.

 Mejoras en la relación entre los padres que permiten una mayor flexibilidad en el
régimen de convivencia.

 Solicitudes de los hijos mayores de edad para ampliar el tiempo de convivencia


con
alguno de sus progenitores.

Si el tribunal considera que la extensión propuesta es beneficiosa para el bienestar del


menor, puede modificar el régimen de convivencia existente para reflejar estos
cambios.

La limitación del Régimen de Convivencia Familiar se refiere a la restricción o


reducción de los derechos de convivencia de uno de los progenitores con sus hijos
menores de edad. Esta medida puede ser tomada por un tribunal o autoridad
competente en casos donde se considere que la convivencia con uno de los padres
puede ser perjudicial para el bienestar físico, emocional o psicológico del niño, niña o
adolescente.

Algunas de las circunstancias que pueden llevar a la limitación del Régimen


de Convivencia Familiar en Venezuela incluyen:

 Abuso físico, emocional o sexual por parte de uno de los progenitores hacia el
niño,
niña o adolescente.

 Conducta violenta o agresiva por parte de uno de los progenitores que ponga en
riesgo la seguridad del menor.

 Adicciones o problemas de salud mental no tratados que afecten la capacidad del


progenitor para cuidar adecuadamente al menor.
 Negligencia o falta de capacidad para satisfacer las necesidades básicas del niño,
niña o adolescente.

El incumplimiento del Régimen de Convivencia Familiar ocurre cuando uno de los


padres o tutores legales no cumple con las disposiciones establecidas en la sentencia
judicial o acuerdo extrajudicial que regula las visitas y el contacto del niño, niña o
adolescente con dicho progenitor.
Este incumplimiento puede ser total o parcial y puede manifestarse de diversas
formas,
como:

 No presentarse a recoger al niño o adolescente en el horario establecido.


 No devolver al niño o adolescente en el horario acordado al finalizar la visita.

 Impedir o dificultar el contacto o la comunicación del niño o adolescente con el


otro
progenitor durante las visitas.
 No cumplir con las disposiciones específicas establecidas en la sentencia o
acuerdo,
como restricciones de lugar, duración o supervisión de las visitas.

Cuando se produce un incumplimiento, el progenitor afectado puede tomar medidas


legales
para hacer valer sus derechos y garantizar el cumplimiento del régimen establecido.
Algunas de las acciones que se pueden tomar incluyen:

 Notificación formal: El progenitor afectado puede notificar al otro progenitor por


escrito sobre el incumplimiento y solicitar una solución amistosa.
 Mediación: Se puede recurrir a un proceso de mediación para resolver las
discrepancias y llegar a un acuerdo sobre cómo corregir el incumplimiento.
 Presentación de una denuncia: Si el incumplimiento persiste, se puede presentar
una
denuncia ante el tribunal que emitió la sentencia para que tome las medidas
necesarias, que pueden incluir sanciones al progenitor incumplidor, como multas,
cambios en el régimen de visitas o incluso la custodia.
 Ejecución forzosa: En casos graves de incumplimiento persistente, el tribunal
puede
ordenar medidas de ejecución forzosa para garantizar el cumplimiento del régimen
de convivencia, como la imposición de multas o incluso la detención del progenitor
incumplidor.

Sentencia: FP02-J-2015-001032

Representación y Administración del Patrimonio del Menor Sometido a la


Patria Potestad

LOPNNA, Artículo 364. Representación y administración de los bienes del hijo o


hija. La representación y la administración de los bienes del hijo o hija se regirán en
lo sustantivo por lo previsto en esta Ley y subsidiariamente por lo contemplado en el
Código Civil, tramitándose los procedimientos correspondientes de conformidad con
lo dispuesto en esta Ley.

El atributo de la representación legal supone la realización de actos jurídicos


en nombre del incapaz, siendo que los efectos jurídicos (activos y pasivos) recaen
sobre este último. La representación también puede ser voluntaria, pero esta supone la
capacidad de obrar de la cual carece en principio el menor de edad.

Supone un atributo necesariamente ligado con el de administración "relativo a


gestionar los asuntos patrimoniales del incapaz", pues supone por lo general la
realización de actos relativos a este. De allí que, aunque se trate de dos atributos
distintos, están tan íntimamente ligados que generalmente uno precisa del otro y por
ello las excepciones suelen ser comunes. Se afirma que los actos realizados fuera del
límite de los referidos atributos están afectados de nulidad (CC. art. 261).

*La anulación de los actos ejecutados en contravención a los artículos


anteriores no puede reclamarse sino por el padre, por la madre, por el hijo y por sus
herederos o causahabientes". Así, pues en la materia deben tenerse en presente las
previsiones de la LOPNNA y las del CC, que siguen vigentes y que son parcialmente
aplicable entre las que cabe citar el artículo 267 que dispone: "El padre y la madre
que ejerzan la patria potestad representan en los actos civiles a sus hijos menores y
aun simplemente concebidos, y administran sus bienes..." De lo que se deriva a que a
los progenitores corresponde en principio la representación de sus hijos.
El atributo de la administración apunta al ámbito pecuniario, esto es el manejo de los
bienes o patrimonio del menor, se orienta por el logro de una debida gestión
patrimonial, este corresponde con el antes citado artículo 267 CC.
Representación del (niño o adolescente) sometido a patria potestad:
Atribución:
El artículo 267 CC. establece la regla general en materia de atribución del poder. De
conformidad con lo dispuesto en la mencionada norma legal, el poder de
representación de los menores sometidos a patria potestad esta atribuida.
conjuntamente al padre y la madre que ejerzan la patria potestad. Este poder incluye
la representación de los simples concebidos.
La regla general antes citada tiene un conjunto de excepciones que se justifican
precisamente para tal finalidad de protección del menor con vista a la cual el poder de
administración es conferido por ley, estando dicho por vendado o no concebido, en
todos aquellos supuestos en los cuales es presumible que no se cumplirán los fines
para los cuales el poder se otorgaría. En efecto, cuando el o los progenitores son a su
vez incapaces o carecen de la formación intelectual para proveer eficazmente a la
representación del menor, la ley dispone que dio poder sea ejercido por otra persona.

Extensión de los poderes de representación y administración

El principio fundamental para determinar la extensión del poder del padre o de la


madre que ejerce la patria potestad para representar al menor sometido a ella, es que
dicho poder sólo tiene por finalidad remediar la incapacidad negociar del hijo. De tal
principio se deducen varias consecuencias:

1.- En principio, la representación legal del padre se extiende a toda clase de


negocios jurídicos, patrimoniales o no, ya que en principio la incapacidad negociar
del hijo sometido a patria potestad es una incapacidad general, plena y uniforme.

2.- Por excepción, el poder de representación legal no se extiende a:

 A) Los actos que por su carácter íntimo la ley no permite realizar por medio
de representante o que sólo permite realizar a través de representantes
voluntarios (elegidos por el representado). Entre tales actos, llamados actos
estrictamente personales, se cuenta el testamento (salvo en el caso del artículo
966 del C.C., en que propiamente no hay representación), el matrimonio , las
capitulaciones matrimoniales, las donaciones al otro cónyuge por causa del
matrimonio, los contratos que como el contrato de trabajo obligan a la
persona física del menor, el ejercicio de la patria potestad sobre los propios
hijos, el juramento decisorio, etc.

Precisamente porque respecto de tales actos la representación legal del padre no


subsana la incapacidad establecida por la ley, éstas en muchos casos concede a los
menores la capacidad plena o limitada para realizar dichos actos antes de alcanzar la
mayoridad.

 B) Los actos para los cuales el propio hijo tiene capacidad plena (que entonces
realizar el hijo solo) o limitada (que entonces realiza el hijo o autorizado).
 C) Los actos respecto de los cuales el poder de administración no está
atribuido al padre o a la madre que ejerce la patria potestad.

3.- El padre o la madre en ejercicio de la patria potestad debe estar expresamente


autorizado por el Juez competente para que tenga la facultad de celebrar válidamente
ciertos actos en nombre del hijo.

4.- Los actos celebrados por el padre o la madre fuera de los límites de su poder de
representación o sin haber cumplido las formalidades habilitantes requeridas por la
ley, están afectados de nulidad relativa que sólo puede ser demandada por el padre,
por la madre o por el hijo y por sus herederos o causahabientes (art. 271 del C.C.).

Exceptions

A) Los padres menores de edad, sometidos a curatela de inhabilitados o que no sepan


leer y escribir, no tienen la representación de los hijos que estén bajo su patria
potestad, ni la administración de los bienes de los hijos que estén bajo patria potestad.
En consecuencia, la Ley prevé que, si uno sólo de los progenitores se encuentra en
uno de tales supuestos, la representación la ejercerá el otro, previa autorización
judicial (art. 277 encabezamiento del C.C.) y que, si ambos se encuentran en tales
supuestos, el Juez nombrará un curador especial al efecto (art. 277 único aparte C.C.).
Estas reglas se aplicarán también al poder de administración.

B) Los padres que ejercen conjuntamente la patria potestad pueden ver modificados
sus poderes de representación y administración si el Juez llega a acordar la
administración de todo o parte de los bienes y la representación de todo o parte de los
intereses de los hijos a uno solo de sus padres, a solicitud de éste, oída la opinión del
otro progenitor y siempre que así convenga a los intereses del menor (ART. 267
último aparte del C.C.).
C) Las medidas que tome el Juez en caso de que compruebe plenamente la mala
administración de los bienes de los hijos, materia que se estudiará infra. Esto afectará
también el poder de representación de los padres en ejercicio de la patria potestad.
Las medidas en cuestión sólo proceden cuando se compruebe plenamente mala
administración de los bienes de los hijos, por parte del padre y de la madre que
ejerzan la patria potestad, o de uno de ellos. No basta pues que exista temor fundado
de que ocurra la mala administración de referencia, lo que es lamentable porque así el
Juez nada puede prevenir al respecto.

Puede solicitar las medidas cualquiera de los progenitores, ascendientes o parientes


colaterales de los hijos en cuestión, dentro del tercer grado de consanguinidad sin
perjuicio de que el Juez proceda de oficio (art. 275 encabezamiento C.C.)

El procedimiento
será breve y sumario, se limitará a acordar lo necesario para evacuar las pruebas y
diligencias dirigidas a la comprobación de los hechos invocados por el solicitante o
solicitantes, o los que el Juez considere pertinentes, si se procede de oficio (art. 275
encabezamiento C.C.). Pero, además el Juez tiene facultad para solicitar las
informaciones y datos adicionales que estime conducente para ordenar la ampliación
de las pruebas y de los recaudos producidos si lo considere insuficiente (art. 275
único aparte C.C.).

 D) Cuando el progenitor que ejerza la patria potestad no quiera o no pueda


aceptar una herencia , legado o donación a favor del hijo, deberá manifestarlo
al Tribunal competente y éste, a solicitud del hijo, de alguno de sus parientes
o del Ministerio Público o aun de oficio, podrá autorizar la aceptación. En este
caso, el Juez nombrará un curador especial para que represente al hijo en
orden a la respectiva aceptación (art. 268 C.C.).
 E) Cuando haya oposición de intereses entre los hijos y el padre y la madre
que ejerzan la patria potestad, el Juez nombrará a los hijos un curador especial
para que los represente en este asunto (art. 270 encabezamiento C.C.) y aun
cuando no lo diga la ley si éste no existe o no puede ejercer la representación
o administración, el juez procederá a nombrar a los hijos curador especial.
 Si la oposición ocurre entre hijos sometidos a la patria potestad de una
misma persona , se nombrará curador a cada grupo de hijos que tenga
intereses semejantes (art. 270 único aparte C.C.).

En todos los casos señalados se trata de evitar tanto posibles perjuicios a los hijos
como los conflictos de la patria potestad si se vieran en el caso de tener que decidir
entre el interés propio y el de los hijos o entre el interés de unos hijos frente a otros.

Intereses opuestos no es lo mismo que intereses distintos. Los intereses opuestos, son
intereses contrarios, en el que el padre o la madre que ejerzan la patria potestad puede
representar al hijo en actos en los cuales dicho padre o madre cumplen frente a los
hijos actos debidos o favorables al hijo. Por lo demás, para que proceda la
designación de curador es necesario que la oposición de intereses exista en forma
actual y cierta.

 F) El poder de representación se atribuye a la misma persona a quien se


atribuye el poder de administración de los bienes del hijo que no administra el
padre, cuando se trata de realizar actos relativos a dichos bienes.

Los Actos de Administración que pueden efectuar los padres pueden ser los
siguientes:

1.- Actos de conservación o conservatorios: que reúnen las condiciones de:

A) ser necesarios para sustraer de un peligro inminente a uno o más elementos del
patrimonio y B) no implicar sino a lo más un gasto insignificante en relación con las
posibles consecuencias de peligro.

Los actos de conservación pueden ser de conservación material (reparaciones de


edificios que amenacen ruinas siempre que su costo sea insignificante) o de
conservación jurídica (registro de un documento, interrupción de la prescripción,
etc.).

2.- Actos de simple administración y actos que exceden de ella: estas dos categorías
de actos no pueden ser definidas aisladamente, existen varios criterios fundamentales,
los cuales son:

 A) Criterio de la naturaleza jurídica objetiva del acto: basta examinar la


naturaleza jurídica que objetivamente tiene el acto para determinar si excede
de la simple administración o si es de simple administración. En efecto, si en
virtud del acto sale el patrimonio un bien (sin compensación como ocurre en
la donación o con compensación como sucede en la venta o permita) o se crea
el peligro de ello (Ej. si se lo hipoteca), el acto es un acto de disposición o que
excede de la simple administración. En cambio, si el acto no tiene por efecto
que salga ningún bien del patrimonio ni crea el peligro de ello
(Ej. Arrendamiento ), el acto es de administración o de simple administración,
a menos que reúna las condiciones arriba indicadas para los actos de
conservación.

El criterio de la simple administración se divide en tres categorías: 1) las


enajenaciones, que se caracterizan por producir la pérdida total o parcial de un
elemento del patrimonio (con o sin compensación), venta, permita, constitución del
usufructo, etc.);

2) las renuncias que se caracterizan por causar la pérdida de un elemento del


patrimonio sin que se persiga la finalidad retransmitirlo a otro, como ejemplo la
renuncia de la herencia o legado.

3) las disposiciones propiamente dichas, que se caracterizan por exponer a la persona


a la pérdida de bienes, ejemplo la hipoteca, fianza, prenda, etc.

 B) Criterios económicos: Si la finalidad de la ley al distinguir entre actos de


simple administración y actos de disposición es establecer un régimen más
severo para la celebración de éstos, debido a que con ellos pueden causarse
mayores perjuicios al menor, es lógico que la distinción entre ambas
categorías de actos atienda a la trascendencia económica de los mismos.

Bienes exceptuados de la administración paterna


Por excepción no está sujetos a la administración paterna los siguientes
bienes:
A) Los que la Ley llama "bienes excluidos de la administración paterna" (Art. 272
C.C.) que son:
1) Los bienes que el hijo adquiera por herencia, legado o donación, con la condición
de que los padres no los administren, en el entendido de que esa condición no podrá
imponerse a los bienes que vengan al hijo "por título de legítima" (Art. 272 Ord. 1º
C.C.).

2) Los bienes que el hijo adquiera por donación, herencia o legado, aceptados en su
interés contra la voluntad del padre y la madre que ejerzan la patria potestad; si hubo
desacuerdo entre éstos, la administración de tales bienes corresponderá al que hubiese
querido aceptarlos. (Art. 272 Ord. 2º C.C.). Estos bienes serán administrados por un
curador especial que al efecto nombrará el juez, siempre que el donante o el testador
no hayan designado un administrador (Art. 272 último aparte C.C.). Este
administrador, que también recibe el nombre de curador (Art. 311 C.C.) puede ser
dispensado por el testador o donante del deber de rendir cuentas de su administración
y de presentar estados anuales de cuenta (Art. 311 C.C.).
El curador lo nombra el Juez, el testador o el donante, debe sujetarse en la
administración que le han sido confiada, a las normas relativas a la tutela y no a las de
la patria potestad.

Por lo demás, ese curador sea que lo nombre el Juez, el testador o el donante,
debe sujetarse en la administración que le ha sido confiada, a las normas relativas a la
tutela y no a las de la patria potestad.
B) Los bienes que el hijo adquiera con ocasión de su trabajo u oficio, así como las
rentas o frutos provenientes de los mismos. En efecto, tales bienes, rentas o frutos
serán percibidos o administrados personalmente por él, si ha cumplido 16 años, en las
mismas condiciones que un menor emancipado. Esta última previsión implica, como
veremos, que en ciertos casos requerirá la autorización del Juez y en otros la
asistencia de uno de sus progenitores que ejerza la patria potestad. (Art. 273 C.C.).
Pero debe tratarse de bienes adquiridos por el hijo sin el aporte patrimonial del
padre o de la madre puesto que de ser así los bienes serían de los respectivos
progenitores, aunque éstos deberán reconocerles una justa participación en las
utilidades o ganancias como remuneración de su trabajo (Art. 273 único aparte C.C.).
C) Los bienes adquiridos por el hijo en una sucesión donde el padre o la madre eran
indignos de suceder (Art. 813 único aparte C.C.).

D) Los bienes subrogados a los anteriores que son: a) los bienes adquiridos a cambio
de ellos mediante negociaciones jurídicas, por ejemplo, el precio de su venta;

b) Los bienes adquiridos en razón de ellos ejemplo sus cánones de arrendamiento o


frutos naturales;
c) La indemnización obtenida por la destrucción, privación o menoscabo de ellos.

Sentencia: LP61-J-2023-000293
BIBLIOGRAFÍA

- Blog, Fidel A. Gutiérrez. Régimen de Crianza


LOPNNA .https://fidelgutierrez.com/regimen-crianza-lopnna/
- Página, www.Tusolucionlegal.com.ve. Padres separados y la custodia del hijo.

- GUILAR GORRONDONA, José Luis. Personas Derecho


Civil, Universidad Católica Andrés Bello, 14ª edición, Caracas, 2003. 465 pp.
- Código Civil de Venezuela , Gaceta Oficial No. 2.990, de fecha 26 de Julio de
1982.
- TSJ.
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%20por%20su%20inadecuado%20cumplimiento.
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Sometido a la Patria Potestad.
http://lara.tsj.gob.ve/DECISIONES/2023/SEPTIEMBRE/2421-28-LP61-J-2023-
000293-573.HTML

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