Está en la página 1de 1

¿Qué es la Ley de Coordinación Fiscal?

La Ley de Coordinación Fiscal se encarga de que todas las autoridades de recaudación, entidades
federativas y municipios de México colaboren en orden.

En la Convención Nacional Fiscal de 1947 se propuso la idea de crear un sistema federal donde
cada estado tendría acceso a una parte de los ingresos para aprovecharlos como necesitaran.
Además, el sistema debería garantizar la uniformidad y coherencia en el cobro de impuestos y su
forma de repartirlos entre los estados. Como resultado de estas propuestas, la Ley de
Coordinación Fiscal entró en vigor en 1953.

Los objetivos de la Ley de Coordinación Fiscal

De acuerdo con el artículo primero, el objetivo de esta ley es coordinar el sistema fiscal de la
Federación con las entidades federativas, municipios y demarcaciones territoriales para establecer
la participación que corresponda a sus haciendas públicas en los ingresos federales.

En segundo lugar, distribuir entre ellos las participaciones, y fijar reglas de colaboración
administrativa entre las diversas autoridades fiscales. Para esto, la ley también se encarga de
constituir los organismos de coordinación fiscal y dar las bases de su organización.

Cada estado puede decidir si se une o no al Sistema Nacional de Coordinación Fiscal que establece
esta ley. Si lo hacen participarán en el total de los impuestos federales y en los otros ingresos
señalados en ella.

Actualmente, todos los estados de la Federación han firmado convenios en los que renuncian a la
facultad de cobrar impuestos por sí mismos a nivel estatal y municipal. Esto, claro, a cambio de
que la Federación les dé una parte de los impuestos federales. Como todos han firmado, los
impuestos que más recaudan, el Impuesto Sobre la Renta y el Impuesto al Valor Agregado, son
administrados de forma federal.

También podría gustarte