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Escena “Desconectado”

EXT. PORTAL DE UN EDIFICIO - DÍA

LUCÍA
Javier… ¿Qué haces acá?
JAVI
Empecé.
LUCÍA
¿Qué empezaste?
JAVI
Terapia.
LUCÍA
Qué bueno.
JAVI
¿Vuelves a casa?
LUCÍA
No.
JAVI
Pero empecé.
LUCÍA
Sí pero yo no… no voy a poder, Javier

JAVI
Pero habíamos quedado en algo, Lu, ¿qué más
tengo que hacer?
LUCÍA
Conectarte con tus sentimientos
JAVI
¿De qué me estás hablando, Lucía?

LUCÍA
Lo que escuchaste. Yo no puedo vivir con un
desconectado
JAVI
¿Qué es un desconectado?
LUCÍA
Tú.
JAVI
Me lo explicas mejor porque no entiendo.
LUCÍA
¿De verdad quieres que te lo explique?
JAVI
Por favor…
LUCÍA
Un desconectado es como un cobarde, que le tiene
tanto miedo al dolor, a la vida, al devenir, que
necesita tener sus emociones permanentemente
bajo control, de eso están lejos los
desconectados, de sus sentimientos. Y se
transforman en seres sin alma, sin corazón, en
robots.
JAVI
Yo no soy un robot, ni un cobarde, ni nada de
eso.
LUCÍA
No quise herirte. Perdón.
JAVI
¿Perdón qué, Lu? ¿Perdón qué? Yo ya empecé
terapia, sé de cosas que tengo mal, se me van a
acomodar, vuelve a casa… ¿Qué hice yo? Yo no
hice nada. ¿Yo qué hice, Lu?
LUCÍA
Mira, Javi…
JAVI
No me digas Javi si ya no me quieres.

LUCÍA
Siempre te voy a querer.
JAVI
Entonces no nos separemos.
LUCÍA
Tal vez cuando estés mejor
JAVI
¿Y cómo me doy cuenta?
LUCÍA
¿De qué?
JAVI
De que estoy mejor.
LUCÍA
No sé, trata de conectarte, de no evadir tanto,
de sentir las cosas que te duelen.
JAVI
Todas las cosas me pueden doler si eso es lo que
quieres. Solo que yo trato de ir en contra del
dolor. En contra, no a favor. Yo estoy bien
porque lo decido. Todos los días lo decido,
Lucía. Y si quieres que decida lo contrario,
porque para ti está mal estar bien, lo lamento
mucho pero me defraudaste, pensé que te gustaba
yo, pensé que te habías enamorado de mi
imaginación, de mi locura. Tú misma decías que
te fascinaba, que te ponía que de pronto
estuviera aquí contigo y de pronto me fuera a
cualquier carajo ¿Me lo dijiste o no me lo
dijiste?...
Contéstame lucía, ¿sí o no?

LUCÍA
Sí.

JAVI
Bueno entonces ten el valor de decirme que ya
no me quieres y punto, pero no me pidas que
cambie lo que más te gustaba, no me vengas a
decir que soy un cobarde. Cobarde para mí son
los que viven revolcados en su propia mierda,
esos son cobardes. Los que deciden siempre estar
mal, los que viven mirando para atrás… Y tú te
metiste la pinga de un huevonazo enterita en la
boca y te la pasaste de puta madre y después
sin que nadie te preguntara nada volviste a
abrir la boca para tranquilizar tu consciencia,
porque te sentías mal por haberla pasado bien. Y
yo que trato de pensar en otras cosas y no creas
que me resulta fácil, mucho me cuesta, ¡la
concha de su madre¡, mucho me cuesta pensar en
otras cosas; pero yo soy un enfermo, un cobarde,
un robot, ¿por qué?, porque no me quiebro,
porque decido estar bien, porque no tengo ganas
de meterme en ese túnel apestoso lleno de olor a
mierda en el que quieres que me meta. Mira qué
conectado que estoy ahora. Mira cómo me conecté.
¿Eso querías? ¿Que me conecte con mis
sentimientos? ¿Estoy mejor? ¿Me ves más sano?
LUCÍA
Sí, Javier te veo mejor.
JAVI
Bueno, vuelve a casa.
LUCÍA
No.
JAVI
Yo te quiero aclarar que a partir de ahora estoy
separado. Me considero un tipo separado. ¿Te
queda claro?
LUCÍA
Sí, Javi.
JAVI
Tú lo decidiste, no yo.

JAVI se va.

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