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tamDesde hace varias décadas atrás la economía de Venezuela ha sido

malversada, en gran parte debido a los malos manejos que han existido por
parte de los gobiernos, por la caída de los precios del petróleo, las
expropiaciones y las restricciones del control de cambio de la moneda, la
corrupción, entre otros factores.

La situación en Venezuela es crítica y agravante debido a que en los


últimos años las contracciones y desaceleraciones económicas solo han
aumentado la gravedad de la crisis y ocasionado que el país se hunda en la
constante inflación que se ha presentado en los últimos años. El panorama
de Venezuela no es fácil, ya que no existe una solución rápida y sencilla
para solucionar la crisis del país.

No obstante existen una serie de medidas y políticas que se podrían


implementar con la intención de abordar la crisis económica y tratar de
producir cambios en el país a largo plazo. Sin embargo el gran problema de
Venezuela mas allá de solo la inflación reside mucho en sus gobernantes, y
es que los últimos gobiernos que han manejado la nación han dejado en
más que claro que no han sabido manejar bien las políticas económicas.

Es por ellos que considero que para que Venezuela se arregle es necesario
celebrar un proceso justo de elecciones únicas y universales, donde se elija
un cambio de gobierno.

¿Qué haría ante tal situación?

Lo primero que debería hacerse e reunir al gabinete económico, los


Ministerios, y establecer nuevas reformas para la economía, y los sueldos y
salarios del país. Así mismo será necesario eliminar todo aquello que
conlleve al gasto, como los bonos, regalías y tratar de limitar los subsidios,
reducir el gasto público en su mayoría posible.

Partiendo desde el punto de vista de la política fiscal es necesario que el


nuevo gobierno en cuestión elabore presupuestos generales para el estado,
para así tratar de encontrar un equilibrio o balance entre los gastos y los
ingresos.

De acuerda al escenario venezolano es necesario aplicar una política fiscal


restrictiva para reducir la inflación, el gasto agregado y estabilizar los
precios mediante el aumento de impuestos, si bien tal vez sea una medida
muy drástica y que incidirá en los bolsillos de los consumidores en
necesaria ya que al disminuir el gasto público y el déficit presupuestario la
nación podría conseguir llegar por si misma a un superávit.

Pero conseguir un superávit no es una tarea tan sencilla ya que la


hiperinflación que se ha presentado en nuestra nación ha sido uno de los
principales males y causantes de nuestra recesión económica. En
Venezuela los niveles inflación se elevan más y cada vez más ¿Por qué
ocurre esto? Por el mal manejo de los recursos que el BCV de la nación
lleva. La política monetaria entra aquí en juego encargándose de controlar
la cantidad de dinero en circulación en el país y buscar la estabilidad
económica y contribuir a su crecimiento mediante el control del empleo y
la inflación.

¿En que ha fallado el BCV como institución?

Lamentablemente en Venezuela la inflación a ha sido un proceso de


debilitamiento constante de la moneda local, donde los bienes y servicios
no se han hecho más costosos en el tiempo, sino que el bolívar ha perdido
valor, por lo que deben destinarse más bolívares para comprar la misma
cantidad de bienes o servicios. En la actualidad la naturaleza de la inflación
tiene mucho que ver con todos los cambios estructurales que llevó a cabo el
grupo político que arribó al poder en 1998. La alta prioridad que tenía este
grupo por realizar cambios profundos del orden político y económico, privó
sobre la búsqueda de la estabilidad de las variables económicas, entre las
que destaca la inflación. Desde 2013 la inflación venezolana se acelera y
parece haber tomado un nuevo rumbo. En 2013 la inflación llegó a 56,2%,
mientras que en 2014 se ubicó en 68,5%. Para 2015, aunque la cotidianidad
señala que la inflación ha avanzado rápidamente, se desconoce su magnitud
exacta porque el BCV no ha publicado las cifras del Índice Nacional de
Precios al Consumidor (INPC)

Esto pareciera indicar que la política monetaria no ha logrado controlar el


balance adecuado entre la oferta monetaria y la oferta de bienes y servicios.
En este sentido, el balance entre la dinámica monetaria y la dinámica entre
la oferta y la demanda de bienes ha sido una de las causas de la inflación en
Venezuela.

¿Cómo se arreglaría este problema?


El primer y gran paso para comenzar a resolver el problema inflacionario
venezolano –entre otros problemas económicos- empieza por la
reorganización del flujo de divisas de PDVSA, donde el uso de los ingresos
petroleros sea transparente y no existan mecanismos para que el ejecutivo
nacional haga uso discrecional de estos recursos. Del mismo modo seria
esencial aplicar una política restrictiva regulando los niveles de dinero y el
crédito a través del aumento de la tasa de descuento y del encaje legal
bancario; y sobre todo es primordial realizar ajustes en la cantidad de
dinero que se imprime. Si se reduce la oferta de dinero, puede ayudar a
reducir la inflación y buscar conseguir estabilización en los precios para
poder combatir la inflación en el país.

A pesar de ello controlar la cantidad de flujo de dinero en circulación es


una tarea bastante compleja que requiere de mucho análisis y estudio de
mercado, ya que el dinero mueve muchas de las cosas que conocemos en la
actualidad y es algo totalmente indispensable para el desarrollo de nuestra
vida cotidiana. El dinero se representa a través de monedas o billetes,
unidades representativas del precio de las cosas que nos permiten trazar
transacciones comerciales. Sin embargo en el país las decisiones y acciones
que se han llevado a cabo para administrar el valor de la moneda nacional
ante el valor de las otras monedas del mundo ha fallado abismalmente, pues
Venezuela actualmente se encuentra en una constante guerra contra el dólar
y el poder adquisitivo que este ha ido ganando con los años en el país. El $
ha tomado mucha influencia sobre los precios relativos de la economía.
Esto ha arrojado como consecuencia que Venezuela se encuentre
prácticamente dolarizada hasta el punto en el que la mayoría de sus
comprar o pagos se realicen en divisas

La balanza de pagos entre $ y bs fallo

Vzla debe tratar de ajustar la realidad del país y buscar equipara los niveles
de inflación, si bien el país aun no está dolarizado, seria la forma más ideal
para intentar frenar la crisis. Nuestra nación ha llegado a un punto en el que
el nivel de inflación es tan alto que no queda más alternativa que aplicar
políticas restrictivas.
Para luchar con estos altos índices de crisis primeramente buscar reducir la
cantidad de dinero en circulación (subiendo los tipos de interés de la
facilidad de crédito y depósito), haciendo que los bancos concedan menos
préstamos, tanto a las empresas como a las familias. De esta manera, el
movimiento de dinero en la economía es menor ya que resulta más caro
pedir un préstamo.

. Igualmente mediante el intercambio comercial se puede estimular la


confianza y hacer las atractiva la inversión aumentando así la capacidad de
empleos; al poder generar más empleos las personas elevan su demanda de
bienes a un ritmo mayor, que es lo que necesita la economía Venezolana y
el gobierno para poder realizar ajustes y tratar de que el BCV tengo un
control más claro y establecido sobre la moneda.

ya que es necesario tratar de disminuir la inflacion

¿Cómo podría Venezuela solucionar su problema? ¿Podría recurrir al


Fondo Monetario Internacional?
De acuerdo a la situación de crisis en Venezuela, sería poco probable que el
FMI otorgase algún tipo de préstamo, ya que a cambio necesitaría una
seguridad total de que la deuda será saldada. La situación de nuestra nación
ha ocasionado que Venezuela se vea como un país poco fiable y con poca
capacidad para ser responsable de un préstamo. No obstante si no se llegase
a obtener algún tipo de préstamo ¿Cómo se arreglaría el país?

Principalmente la idea debe partir desde dentro, es decir, aplicando nuevas


reformas económicas y políticas a cambio de tratar de reducir un poco la
hiperinflación mediante ajustes fiscales para equilibrar el presupuesto
público y aumentar la entrada de ingresos, e igualmente permitir una mayor
flexibilidad cambiaria para eliminar las distorsiones del mercado de divisas

Con salarios que a menudo están por debajo de los mínimos de


supervivencia, la población venezolana depende en gran medida de los
bonos, las bolsas de alimentos y otros programas sociales, además de
diversas estrategias que transitan entre la legalidad y la ilegalidad. Pero, de
la mano de la inmigración masiva, hoy una gran diferencia pasa por tener o
no familiares en el exterior que envíen remesas.

Decir que en Venezuela existe una profunda crisis política, económica y


social no constituye sorpresa alguna ni tiene un especial atractivo
académico o político. La crisis lleva años abatiéndose sobre la población
venezolana y salpicando hacia el resto del continente, y en general hacia
muchos países del mundo

Como es sabido, el Banco Mundial considera pobre a toda persona cuyos


ingresos estén por debajo de 1,90 dólares al día, o aproximadamente 57
dólares al mes.

Apenas el año pasado, el FMI rechazó una solicitud de préstamo de 5.000


millones de dólares para combatir el nuevo coronavirus en Venezuela por
no existir “claridad” sobre cuál gobernante es legítimo ante los ojos de su
directiva
El problema de Venezuela es complejo y multifacético, y no hay una
solución fácil o única. Sin embargo, algunos expertos han sugerido algunas
posibles estrategias para abordar la crisis económica y política del país con
el uso de políticas monetarias, fiscales, cambiarias, de renta y comerciales.
Algunas de estas estrategias son:

- Reanudar el diálogo con las instituciones financieras internacionales,


como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, para obtener
asistencia financiera y alivio de la deuda a cambio de implementar
reformas económicas y políticas. Estas reformas podrían incluir cambios en
la política monetaria para reducir la hiperinflación, ajustes fiscales para
equilibrar el presupuesto público, una mayor flexibilidad cambiaria para
eliminar las distorsiones del mercado de divisas, una mayor inversión en el
sector petrolero nacionalizado para aumentar la producción y los ingresos,
y una mayor apertura comercial para diversificar la economía y fomentar el
comercio exterior.

- Restaurar la independencia de las instituciones democráticas, como el


poder judicial, el poder legislativo, las fuerzas de seguridad y los medios de
comunicación, y establecer un cronograma para celebrar elecciones libres y
justas con observación internacional. Esto podría ayudar a resolver el
conflicto político entre el gobierno de Maduro y la oposición liderada por
Juan Guaidó, quien se proclamó presidente interino en enero de 2019 con el
apoyo de más de 50 países. También podría facilitar la transición pacífica
del poder y la reconciliación nacional, evitando la violencia y la represión.
- Atender las necesidades humanitarias de la población venezolana, que
sufre escasez de alimentos, medicinas, agua potable y electricidad. Esto
podría implicar aceptar la ayuda humanitaria ofrecida por la comunidad
internacional a través de organizaciones no gubernamentales, así como
mejorar el acceso y la distribución de los bienes básicos dentro del país.
También podría implicar ampliar los programas sociales existentes, como
los bonos Patria y los CLAP (Comités Locales de Abastecimiento y
Producción), que proveen subsidios monetarios y alimentarios a los
sectores más vulnerables.

Estas son solo algunas ideas generales que podrían contribuir a solucionar
el problema de Venezuela con el uso de políticas económicas y sociales.
Sin embargo, su implementación dependería de la voluntad política de las
partes involucradas, así como del apoyo y la cooperación de la comunidad
internacional.

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