Ensayo

A lo largo de los años el sistema económico venezolano se ha regido por un

grupo de gestión que ha presentado diversos cambios, es necesario resaltar que
Venezuela es un país rico en minerales naturales, siendo el petróleo una de las
principales fuentes de ingreso del país y con más auge que mantuvo por muchos
años al país en un nivel económico bastante estable, siendo provechoso para que
el país lograra un desarrollo progresista. 

Venezuela maneja dos sistemas económicos como lo son el capitalista que

se basa en la propiedad privada de los medios de producción y en el capital
(dinero) como generador de riqueza, a través del comercio en el libre mercado. Y
por otra parte, el socialismo que se basa en el control de los medios de producción
y del patrimonio público, con el fin de alcanzar una sociedad más equitativa, la
cual contempla que todas las personas son iguales, con la necesidad de acceder a
los mismos bienes y recursos naturales de un país. Por eso propone que el control
social sea la base para la prosperidad y para garantizar la igualdad y la libertad. 

Esta última, ha predominado en el país por encima del capitalismo durante

los últimos años, donde el gobierno siempre ha buscado que la misma sea
establecida como el único sistema económico de la nación, debido a ello desde
que el presidente Hugo Rafael Chávez Frías impuso una serie de cambios
estrictos en el control económico la situación económica del país empezó a
decaer, donde se pudieron evidenciar la devaluación de la moneda y la inflación
empezó a crecer exponencialmente.

Venezuela llego a ser el país con la inflación más grande del mundo superando el
100%. En el año 2017 entra en hiperinflación debido a que la tasa mensual de alza
de precios superaba el 50%, donde se pudo apreciar la caída abrupta del sector
petrolero y como se vino abajo el Producto Interno del País. Ciertamente, el país
para el 2021 pudo lograr una leve recuperación y paso de hiperinflación a inflación
grave. Sin embargo, según el Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF), un
ente independiente integrado por expertos económicos, resaltan que
Venezuela cerró 2022 con una inflación del 305,7 %, con lo que el incremento de
precios anual se redujo a menos de la mitad en comparación con 2021, cuando
llegó al 660%. Asimismo, para este nuevo año 2023 la tasa  de inflación en
enero se situó en 39,4% en tanto que la tasa anualizada fue 440%. Estas
cifras sugieren que la economía venezolana entró en una fase de fuerte
aceleración de la inflación, como expresión de la inestabilidad
macroeconómica que se ha venido observando, este mismo ente alertó de que
las pronunciadas aceleraciones de la inflación que se vienen registrando desde
septiembre de 2022, pudiesen poner a la economía del país ante el peligro de un
rebrote hiperinflacionario, que está tomando fuerza con la sostenida devaluación
del bolívar.

La moneda local, el bolívar, cerró el año pasado con una devaluación de un 73 %

frente al dólar respecto al 30 de diciembre de 2021, luego de que la cotización de la
divisa estadounidense usada para fijar los precios de la mayoría de los productos en la
nación- se incrementara un 280 % en ese período en el mercado oficial. Ciertamente,
la moneda nacional tiene un valor actual muy minúsculo, y lo podemos apreciar a lo
largo de todo el proceso de inflación que ha sufrido el país, donde en los últimos 15
años la misma ha sufrido tres reconversiones, quitándole 14 ceros al bolívar. Pero hay
un punto clave en todo esto y es la dolarización, ¿Qué pasa con la Dolarización? Desde
hace años, los venezolanos han venido usando el dólar como moneda para cada vez más
transacciones. Esto representa un balón de oxígeno para muchos venezolanos que vieron
sus ingresos mermados frente a la caída de valor del bolívar, la cual en su momento el
BCV empezó a aplicar una política de anclaje para intentar contener la devaluación de la
moneda, este intento de anclaje significaba que el BCV tenía que intervenir
constantemente en el mercado, vendiendo dólares de sus reservas para satisfacer la
creciente demanda de dólares. Sin embargo, esta política se quebró porque el Banco
Central sobrestimó su capacidad de controlar un mercado y con el grave problema de no
tener reservas líquidas.

Esta devaluación del bolívar repercutirá en que Venezuela tenga una inflación

más alta de la que venía registrando en los últimos meses y que, de por sí,
ubicaba al país sudamericano entre 5 los más inflacionarios del mundo.
Leonardo Vera advierte que esto tendrá impactos sobre la población porque no
todos los grupos sociales tienen la misma capacidad de protegerse ante la
inflación y puede reducir el poder adquisitivo de los ciudadanos.

Es decir, es necesario que el gobierno tome medidas sobre el asunto y debe

empezar a gestionar planes que logren alzar la economía del país, de manera que
el nivel de inflación desaparezca y tenga un margen normal. Contamos con un
país rico en minerales naturales, es necesario que los grupos de gestión
económica saquen el mayor provecho de esto para beneficio de la la sociedad y
estos puedan disfrutar de una vida económicamente estable, donde el trabajo de
todos valga y reciban lo justo por su labor. Asimismo cada ciudadano debe
hacerse participe para poder sacar y levantar al país de la situación en la que está,
todos podemos construir un mejor país si nos los proponemos.