ENSAYO SOBRE LA EUROPA SOBERANA

Europa se encuentra en un momento de profunda reflexión y cuestionamiento sobre su identidad,

su papel en el mundo y el rumbo que debe tomar hacia el futuro. Eventos como la crisis financiera
de 2008, la pandemia de Covid-19 en 2020 y la guerra entre Rusia y Ucrania en 2022 cuestionan la
capacidad y eficacia de la Unión para resolver los conflictos que enfrenta. Estos sucesos, junto con el
ascenso de movimientos y partidos antieuropeos al poder en países importantes como Italia o el
Reino Unido, hacen que esta institución esté siendo cuestionada más que nunca. "Europa soberana"
se presenta como un buen punto de referencia para establecer los fundamentos de lo que la UE
debería representar a partir de ahora. En este contexto, el texto analizado ofrece una mirada crítica
y provocadora sobre los desafíos que enfrente el proyecto europeo en el siglo XXI.

Por una parte, es necesario alejarnos en cierta medida de la concepción de la Unión que hemos
mantenido hasta ahora. El autor, a través del análisis de Cantaro, desafía las narrativas dominantes
que tienden a idealizar la idea de Europa como el mercado interior, la libre circulación de personas,
bienes y servicios que son fundamentales, pero no hay que priorizar tanto exclusivamente intereses
económicos sino ahondar sobre el fortalecimiento real de los lazos entre los Estados miembros. De
esta manera, nuestras decisiones políticas y económicas dejarán de estar en manos de 3
multinacionales predominantes. Es paradójico que busquemos establecer una Constitución sin
tener una base sólida de principios y valores compartidos, lo que refleja realmente una falta de
compromiso con la verdadera sustancia política y cultural de continente

De este modo, una de las principales críticas del autor es la tendencia de abandonar problemas
fundamentales de la sociedad, especialmente en lo que respecto a la relación entre el poder y el
derecho donde Europa se ve arrastrada por la corriente de la globalización y una política de
competencia y guerra liderada por los Estados Unidos de demostrar quien tiene más aeronaves o
armas.

Si realmente queremos dar una respuesta coordinada a todas las circunstancias y problemas que
surgen, necesitamos una base sólida de principios y valores, no hay mejor base que un señor texto
constitucional. Esta “columna vertebral” europea nos permitirá enfrentar los nuevos desafíos al
tiempo que preservar la riqueza cultural que proviene de cada Estado miembro, porque nos sobra
cultura, lenguas y personas.

No hay que olvidar la importancia de la política como herramienta para la construcción de una
Europa verdaderamente democrática y participativa. Hay que advertir de los peligros de separar los
derechos humanos de su relación con el poder político y se aboga por una visión mucho más amplia
de la democracia que incluya una participación ciudadana más activa en la toma de decisiones
sobre cuestiones fundamentales.
En conclusión, debo decir que personalmente estos aspectos los veo muy lejanos. La sociedad que
estamos creando mayoritariamente dominada por el consumo y la gratificación inmediata está muy
alejada de los aspectos más importante de la realidad. Somos demasiado cortoplacistas e
individualistas, por esa razón los líderes políticos actuales solo persiguen objetivos a corto plazo, son
un reflejo de lo que quiere la sociedad, al fin y al cabo. Preveamos los problemas, no actuemos
siempre de manera tardía. Por lo tanto, creo que la mayoría de la población como sus mandatarios
no ven o no quieren ver el mundo de esta manera ya que es más fácil (dentro de la dificultad que
conlleva) sobrevivir ahora que mantenerse por siempre.