SOTO Y OCHOA

PROPUESTA
PROYECTO
DE
CIENCIAS
Presentado por:
Castro Sarmiento Fernando Franco
Quintero Nuñez Erika Natalia
Sánchez Arteaga Lia Marie
Segura Lopez Asiel Adriel
 OBSERVACIÓN
Cuando los desechos orgánicos son expuestos a un ambiente sin oxígeno, como en un
entorno anaeróbico como una pila de compost o un digestor anaeróbico, comienza la
fermentación anaeróbica. En ausencia de oxígeno, ciertos tipos de microorganismos,
principalmente bacterias y arqueas metanogénicas, comienzan a descomponer la
materia orgánica.
En la etapa inicial de la fermentación anaeróbica, las moléculas de materia orgánica
compleja se descomponen en moléculas más simples mediante un proceso llamado
hidrólisis. Las enzimas liberadas por bacterias fermentativas descomponen los
carbohidratos, grasas y proteínas en azúcares simples, ácidos grasos y aminoácidos,
respectivamente.
Los productos de la hidrólisis son entonces metabolizados por bacterias acidogénicas,
que convierten los azúcares simples, ácidos grasos y aminoácidos en ácidos orgánicos
como el ácido acético, el ácido láctico y el ácido butírico. Esta etapa se conoce como
acidogénesis y es un paso intermedio en la producción de metano.
Los ácidos orgánicos producidos en la etapa de acidogénesis son luego convertidos por
bacterias acetogénicas en productos como acetato, hidrógeno y dióxido de carbono, en
un proceso llamado acetogénesis. Estos productos son precursores importantes para la
producción de metano.
Finalmente, los productos de la acetogénesis son utilizados por las arqueas
metanogénicas en un proceso llamado metanogénesis. Estas arqueas producen metano
(CH4) como producto final de su metabolismo, utilizando el acetato, el hidrógeno y el
dióxido de carbono como sustratos.
En resumen, los desechos de frutas y verduras son descompuestos por
microorganismos en un ambiente sin oxígeno, generando una serie de productos
intermedios, como ácidos orgánicos y gases. Estos productos son entonces utilizados
por arqueas metanogénicas para producir metano como producto final. Este proceso es
fundamental en la producción de biogás a partir de desechos orgánicos y es una forma
importante de reciclar y aprovechar la energía contenida en los residuos vegetales.

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

1. **Bacterias fermentativas**:
Las bacterias fermentativas son las responsables de iniciar el proceso de
descomposición de la materia orgánica. Estas bacterias descomponen compuestos
orgánicos complejos, como carbohidratos, proteínas y grasas, en moléculas más simples
a través de un proceso llamado hidrólisis. Durante este proceso, liberan subproductos
como azúcares, aminoácidos y ácidos grasos.

2. **Bacterias acidogénicas**:
Después de la hidrólisis, los productos resultantes son metabolizados por bacterias
acidogénicas. Estas bacterias convierten los compuestos orgánicos simples en ácidos
orgánicos como ácido acético, ácido láctico y ácido butírico. Estos ácidos son productos
intermedios en la descomposición de la materia orgánica.

3. **Bacterias acetogénicas**:
Los ácidos orgánicos producidos por las bacterias acidogénicas son utilizados por las
bacterias acetogénicas en un proceso llamado acetogénesis. Estas bacterias convierten 2
los ácidos orgánicos en productos como acetato, hidrógeno y dióxido de carbono.
4. **Arqueas metanogénicas**:
Finalmente, los productos de la acetogénesis son consumidos por las arqueas
metanogénicas. Estas arqueas son microorganismos extremadamente especializados que
prosperan en ambientes anaeróbicos y utilizan los productos intermedios, como el acetato,
el hidrógeno y el dióxido de carbono, para producir metano como producto final de su
metabolismo. Este proceso se conoce como metanogénesis.

Por lo tanto, los microorganismos involucrados en la descomposición de los desechos

orgánicos trabajan en conjunto en un proceso secuencial para descomponer la materia
orgánica en productos más simples y, finalmente, producir metano como uno de los
productos de desecho. Este proceso es crucial en la producción de biogás a partir de
desechos orgánicos y tiene implicaciones importantes en la gestión de residuos y la
producción de energía renovable.

HIPOTESIS
1. Propiedad inflamable del metano:
El metano es un gas altamente inflamable. Esto significa que, cuando se expone a una
fuente de ignición adecuada, puede encenderse y mantener una llama. Esta
propiedad del metano lo convierte en un combustible potencial para generar fuego.
2. Producción de metano por desechos orgánicos:
Los desechos orgánicos, como residuos de alimentos, estiércol animal, restos
vegetales, entre otros, son una fuente rica en materia orgánica. Cuando estos
desechos se descomponen en ausencia de oxígeno, como en un ambiente
anaeróbico, microorganismos presentes en los desechos llevan a cabo procesos de
fermentación que generan metano como uno de los productos de desecho.
Con estas premisas en mente, la hipótesis sugiere que, dada la producción de metano por
parte de los desechos orgánicos y la inflamabilidad del metano, los desechos orgánicos
podrían servir como una fuente potencial de metano para generar fuego. Es decir, si se
captura y concentra suficiente metano producido por los desechos orgánicos, y luego se lo
expone a una fuente de calor adecuada, podría encenderse y mantener una llama, lo que
podría ser útil en diversas aplicaciones, como la generación de energía o la cocción de
alimentos.

EXPERIMENTACION
En un contenedor que alamacene los desechos dejaremos que pasen de 2 a 3 semanas
para que se realice la producciondel metano mientrsa que el contenedor esta
conectado a traves de tubos cerrados para que despues del tiempo requerido se habra
salga el gas y se produzca el fuego.

2
 ANALISIS
Durante los experimentos, se registrarían datos detallados sobre la cantidad de metano
producido, las condiciones de ignición y las características de la llama generada. Estos
datos se analizarían para determinar la eficacia y viabilidad de utilizar el metano de los
desechos orgánicos como fuente de fuego.

CONCLUSIONES
Basándonos en los resultados de los experimentos, llegamos a conclusiones sobre la
capacidad del metano producido por los desechos orgánicos para generar fuego de
manera controlada y sostenible. Estas conclusiones estarían respaldadas por los datos
experimentales recopilados.