Está en la página 1de 1

Oración de la mañana al sagrado Oración de la noche del Padre Pío

corazón de Jesús de Santa Teresita “Oh Cristo, tu reino está cerca; haznos
“Dios mío, te ofrezco todas las acciones participar de tu triunfo sobre la tierra para
que voy a hacer hoy, por las intenciones y así poder tener parte de tu reino celeste.
la gloria del Sagrado Corazón de Jesús; Concédenos la gracia de poder comunicar
quiero santificar los latidos de mi corazón, tu amor y de anunciar tu realeza divina por
mis pensamientos y mis obras más el ejemplo de nuestras vidas y por nuestras
sencillas, uniéndolas a sus méritos obras. Toma posesión de nuestros
infinitos, y reparar mis faltas vertiéndolas corazones aquí abajo, de modo que sean
en el horno de su amor misericordioso. tuyos por la eternidad. No permitas que
Dios mío, te pido para mí y para los que nos alejemos de tu voluntad: que ni la vida
quiero, la gracia de cumplir perfectamente ni la muerte consigan separarnos de ti.
tu santa voluntad; de aceptar, por tu amor, Que nuestro corazón tenga su fuente en ti,
las alegrías y las penas de esta vida nuestro salvador, para que, saciados de tu
pasajera, para que un día nos reunamos amor, nos convirtamos en apóstoles
en el Cielo para toda la Eternidad. Amén.” incansables de tu reino. Que cada día
muramos a nosotros mismos, para vivir
únicamente de ti. Que así sea, amén.”

Oración de la mañana al sagrado Oración de la noche del Padre Pío


corazón de Jesús de Santa Teresita “Oh Cristo, tu reino está cerca; haznos
“Dios mío, te ofrezco todas las acciones participar de tu triunfo sobre la tierra para
que voy a hacer hoy, por las intenciones y así poder tener parte de tu reino celeste.
la gloria del Sagrado Corazón de Jesús; Concédenos la gracia de poder comunicar
quiero santificar los latidos de mi corazón, tu amor y de anunciar tu realeza divina por
mis pensamientos y mis obras más el ejemplo de nuestras vidas y por nuestras
sencillas, uniéndolas a sus méritos obras. Toma posesión de nuestros
infinitos, y reparar mis faltas vertiéndolas corazones aquí abajo, de modo que sean
en el horno de su amor misericordioso. tuyos por la eternidad. No permitas que
Dios mío, te pido para mí y para los que nos alejemos de tu voluntad: que ni la vida
quiero, la gracia de cumplir perfectamente ni la muerte consigan separarnos de ti.
tu santa voluntad; de aceptar, por tu amor, Que nuestro corazón tenga su fuente en ti,
las alegrías y las penas de esta vida nuestro salvador, para que, saciados de tu
pasajera, para que un día nos reunamos amor, nos convirtamos en apóstoles
en el Cielo para toda la Eternidad. Amén.” incansables de tu reino. Que cada día
muramos a nosotros mismos, para vivir
únicamente de ti. Que así sea, amén.”

También podría gustarte