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El propósito
Faro normalista
s un placer y un alto honor tener la oportunidad de poder expresar a los maestros nor-
malistas rurales del país, mi más amplio reconocimiento por sus valiosas aportaciones
a la educación del pueblo de México, maestros con quien comparto origen y destino.
Saludo con afecto a todas y todos los maestros normalistas rurales quienes con su
trabajo diario en el aula forjan a las nuevas generaciones de mexicanos.
Reciban un fraternal y combativo saludo de parte de los integrantes del Comité Direc-
tivo del FRENTE NACIONAL DE EGRESADOS NORMALISTAS RURALES A.C. organización de
la sociedad civil que nació, en el Congreso Constituyente celebrado los días 30 y 31 de octubre de
2021 en la ciudad de México, como una organización incluyente y plural.
El Frente Nacional nace con el renovado propósito de contribuir en el rescate del normalismo
rural, por difundir la trayectoria histórica de las Escuelas Normales Rurales en la formación de
Profesores, que son quienes sentaron las bases del México actual; para rescatar las experiencias
pedagógicas de los maestros rurales, para fortalecer los canales de comunicación con todos los
egresados de las normales rurales vigentes y extintas. Nuestro objeto social es preservar y for-
talecer el normalismo rural en nuestro país.
El FNENR se pronuncia por la vigencia del proyecto del normalismo rural en México, por la vigen-
cia irrestricta del contenido del artículo tercero constitucional, por una educación gratuita, obliga-
toria, laica y con equidad.
Consideramos que el gobierno debe entender que las Escuelas Normales Rurales son necesarias
e indispensables en el proyecto de primero los pobres, que debe saber que los internados y el
autogobierno son la esencia de las Normales Rurales.
A nombre del FNENR A.C. nuestra cordial y respetuosa invitación a sumarse a nuestra organi-
zación de la sociedad civil a defender con responsabilidad al normalismo rural, a conformar un
solo FRENTE ante las amenazas vertidas por la autoridad en contra de la vigencia del normalismo
rural del país.
Es la hora de la unidad, es la hora de luchar de manera frontal en la defensa del normalismo rural.
Unidos defenderemos al normalismo rural.
¡Que viva el Normalismo Rural!
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Reminiscencias normalistas
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DIME, MAESTRO, TE ESCUCHO...
CAPÍTULO V
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Reminiscencias normalistas
Faro normalista
que construyen, cerca de algún arroyo, con el fin de que no falte el agua, sembrar un maíz de poca
calidad que les da suficiente para sus gordas, alimentar a una o dos vaquitas que pueden llegar a
tener, como la que alimentaba a su becerro y nos saludaba meneando su cola, desde el corral, al
lado de una casita de carrizo, techada con paja, donde el compadre, preparaba su tejuino, que ha-
cen bien fermentado y toman durante los días de fiesta hasta embriagarse. Esa noche, hubo queso
en la cena. Dormimos en el patio de la casa, bajo las estrellas, al lado de una hoguera.
Otro día, al despertar, ya habíamos descansado lo suficiente para retomar las veredas; después
de desayunar las consabidas gordas de masa y un poco de leche y no sin antes jalar nuestro “ita-
cate”, emprendimos la jornada. Por el camino a corto espacio, aparecían vacas, toros y becerros
que lucían el mismo “fierro” o marca, que denotaba al propietario. Al preguntarle a Carmelo sobre
el dueño de esa marca, me contestó que eran de Don Rafael de la Cruz. Cuando escuché este
nombre, recordé algo que me había ocurrido en Jesús María durante los primeros días, después de
nuestra llegada: Un Señor, desconocido para mí, se me acercó y sin que nadie más lo escuchara,
me pidió cien pesos “prestados” —“Voy y vengo a Tepic y enseguida te los pago”— me dijo. Yo, no
traía mucho dinero y al no conocerlo, no le presté mucha atención, separándome inmediatamente
de él; le pregunté al Secretario del Ayuntamiento el nombre de la persona que se alejaba y me con-
testó:¡Ah!….es Don Rafael de la Cruz. En ese momento, oír su nombre no me dijo nada, pero…
¡Vaya!, ¡coritas vemos, propiedades no sabemos!
Después de mucho avanzar entre grandes bosques de pinos y robles, llegamos al Aguacate, un
paraje donde pernoctaríamos.
A decir de Carmelo, muchas personas amanecían muertas por los piquetes de alacrán que ahí
abundaban. Limpiamos la parte del piso que nos serviría de campamento y mientras él buscaba
agua para acompañar las últimas gordas del día, me puse a buscar leña, no sin antes sacudir todos
y cada uno de los pedazos de rama seca que encontraba, “por si las termópilas”, no fuera a haber
algún bicho entre ellos. Esa noche se me voló el sueño y estuve al tanto de los posibles visitantes.
Ya por la madrugada, me venció el sueño y nunca vi algún alacrán.
Serían las cuatro de la tarde del siguiente día, cuando, desde una loma, contemplaba por fin Santa
Teresa. Un frío intenso calaba mis huesos. No obstante, el paisaje valía la pena. Desde el lugar que
nos encontrábamos, se observaba toda la meseta donde se asentaba el poblado. A varios cientos
de metros unas de otras, se veían casitas de madera techadas con paja. A lo lejos, al occidente,
podían distinguirse un conjunto de edificaciones, uno de ellos hecho de piedra, sin techo y dos más
de adobe y techo de paja. Carmelo me sacó del asombro explicándome que eran las ruinas de una
iglesia de los Jesuitas, la Escuela y la Casa Grande, ésta última, lugar de reunión de los coras del
lugar con su Gobernador. Entre estos edificios se notaba un gran patio que al poniente se extendía
hacia la llanura donde alegre, se mecía el pastizal doblegado por el viento helado. A la derecha, se
adivinaba un arroyo por el colorido de la vegetación a lo largo del mismo. Grande fue mi sorpresa
cuando conocí ese arroyo: un agua limpia, zarca y muy fría, donde… adivinen qué... recordé en
vivo y a todo color el arroyo de San Francisco.
Después de contemplar esta belleza natural, aligeramos el paso, sentí que el cansancio desapare-
cía. Carmelo me llevó directamente a la casa del Juez Auxiliar, Don Jesús de la Rosa, ante quien
me presenté y solicité el auxilio indispensable en mi tarea de instalarme en la escuela, pues ya me
había platicado mi guía que estaba…” algo deteriorada”.
Don Chuy, amablemente, me ofreció su casa para que viviera durante mi estancia en el lugar, me
presentó a su esposa e hijos y me asigno el sin par “carretón” para que me alojara, no sin antes
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Reminiscencias normalistas
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prometer toda su ayuda en los menesteres que se ofrecieran en beneficio de mi labor. Le agradecí
a Carmelo y me despedí de él, no sin antes recordarle el compromiso que teníamos de devolver la
mula que nos prestaron en Jesús María.
El carretón es un depósito donde guardan maíz, herramientas, sillas de montar, fustes, etc., con-
struido a metro y medio de altura sobre postes de madera, con tablas, techo de paja y gruesas
rendijas por las que se colaba el frio. Me acomodé lo mejor que pude y luego de cenar tortillas
con chile y té de canela, di las buenas noches y me dispuse a recuperar mis fuerzas para el día
siguiente. Antes de quedarme dormido, recordé paso a paso nuestro inolvidable viaje desde Jesús
María a Santa Teresa. ¡Nunca se me olvidaría!…
(Continuará)
Rubén Darío Flores Salinas. RuDaFloSa.
Egresó en 1964 de la Normal Rural de Xalisco, Nayarit.
Abrazo fraterno para TODOS los lectores.
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Recuerdos normalistas
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ntre los años sesenta y noventas los maestros egresados de las normales rurales del
país, llegábamos al aula con un gran entusiasmo y un deseo inmenso porque nuestros
alumnos aprendieran lo más posible, para ello no solo recurríamos a los procedimientos,
métodos y técnicas de enseñanza, sino que nos valíamos de una gran cantidad de arti-
mañas para lograr nuestros objetivos, algunos con vocación, otros sin ella, pero siempre
tratando de dar lo mejor de nosotros.
La lectura y la escritura se practicaban a diario. En cuanto a la lectura esta tenía que ser de calidad
y también de comprensión, una vez que los alumnos todos le daban dos o tres repasos a la lectura
del día, el maestro pedía a un alumno que leyera , en silencio sus compañeros le seguían en sus
libros, tenían que estar bien atentos porque no se sabía a quién se le indicaría continuar, al copiar
un párrafo del libro de lecturas, el maestro revisaba y si había faltas de ortografía, o no se habían
escrito las mayúsculas, o la letra estaba mal hecha, se pedía al alumno que volviera a copiar el pár-
rafo y si en su segunda revisión había faltas se le indicaba lo volviera a hacer, así hasta que saliera
bien, por lo anterior nuestros alumnos leían y escribían bien.
En matemáticas algunos maestros sacaban a sus alumnos al patio de la escuela a que por equi-
pos dibujaran un rectángulo digamos de 6 por 4 metros y colocando marcas en sus lados a una
distancia de un metro, lo cuadriculaban y luego contaban y anotaban su área en metros cuadrados
y hacían otro y otro y otro con distintas medidas y no faltaba alumno que dijera maestro para que
dibujamos y cuadriculamos, basta con multiplicar lo largo por lo ancho y asi tendremos el área del
rectángulo, el maestro decía, pero mira que bruto soy como no se me había ocurrido, así mismo se
hacía con el cuadrado, el triángulo y demás figuras geométricas. El alumno guiado por el maestro
se convertía en inventor de fórmulas para encontrar áreas y perímetros de figuras planas.
Ya en geografía todos los alumnos trabajaban, el maestro de quinto grado les pedía un mapa
Edel continente americano con la división política e indicaba a sus alumnos iluminar de amarillo el
país de Brasil, ponerle el nombre con letras mayúsculas y su capital con mayúscula inicial y luego
minúsculas, así se hacía con todos los países, se iluminaban los océanos y golfos, se les escribían
sus nombres correspondientes, lo mismo se hacía en los demás grados.
En educación física, gracias a las enseñanzas del maestro Gregorio Barragán nuestras escuelas
siempre se distinguieron. En las demás materias siempre nos la ingeniábamos y procurábamos
que el conocimiento llegara en forma eficaz al alumno.
Los maestros egresados de las Normales Rurales del país, prestamos nuestro servicio con mucha
pasión, con una verdadera abnegación y entrega desinteresada y no solo éramos maestro de gru-
po, también guías comunitarios, consejeros y en ocasiones enfermeros. Gracias a nuestra amplia
preparación pudimos cumplir con la misión encomendada.
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La Opinión
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Biografía
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Biografía
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Reseña histórica
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uy pocos están enterados que en el año 2022 se cumplieron los cien años de haber sido fundada con
grandes obstáculos, la Primera Escuela Normal Rural de Latinoamérica, en la ciudad de
Tacámbaro de Codallos en el estado de Michoacán de Ocampo, para ser precisos el 22 de
mayo de 1922, que en palabras de Jesús Álvarez Constantino en el prólogo del libro Un
maestro de pueblo y la epopeya de la primera Normal Rural escribe: “No solo merece el
nombre de epopeya el establecimiento de esta primera escuela Normal Rural, que sirvió de
norma y orientación para la creación de las demás normales rurales del sistema, sino que
toda la educación rural mexicana en la década en la que nos estamos refiriendo constituye en sí misma una
de las más notables epopeyas de la pedagogía universal. Esto no lo decimos nosotros, sino que lo afirma el
destacado filosofo norteamericano John Dewey, al referirse a la educación internacional de esa época: No
hay en el mundo movimiento educativo que presente mayor espíritu de unión intima entre las actividades
escolares y las de la comunidad, como el que se ve ahora en México.”
Y tú amable lector, si eres docente y eres tabasqueño(a) te preguntarás ¿y eso en que se relaciona con
Tabasco? La respuesta es inesperada, porque pareciera que se han empeñado en mantener oculto,
en secreto o de plano no se quiere reconocer la importancia de la educación rural impulsada por el
maestro Arcadio Zentella Priego, -contexto- quien desde 1903 se dedicó a fundar escuelas en las zonas
rurales de nuestro estado a falta de apoyo del entonces Gobernador Abraham Bandala, también aquí
se vivió una epopeya educativa, más grave aún porque en esos tiempos los medios de comunicación
eran pluviales y marítimos más que terrestres, sus principales afluentes: el río Grijalva, el Usumacin-
ta y el Mezcalapa, es decir se encontraban en un nivel de aislamiento alto. Pero ¿quién fue Arcadio
Zentella? al respecto el libro Vidas Cunduacanenses del también maestro Ramón Mendoza Herrera
escribe: “Hay un hecho importante en el desarrollo de la vida cultural de Tabasco: La fundación de las
escuelas rurales en 1903. Era director de educación don Arcadio Zentella Priego, natural de Cundu-
acán, y comprendió la necesidad de llevar el abecedario a las masas campesinas. Instó con frecuencia
al gobernador Bandala, pero se hallaba con el obstáculo presentado por la falta de edificios, pues el
gobierno pensaba que produciría una erogación muy fuerte las construcciones.
Zentella calló y días después se marchó a las comunidades rurales. Estableció contacto con el medio y
convenció al campesino de los beneficios de la cultura y de su propio peculio las aldeas construyeron los
edificios. El Ejecutivo ya no pudo poner peros a la idea de don Arcadio y en el presupuesto de egresos
de 1903, se marcó la partida correspondiente para el pago de los sueldos de los profesores del cam-
po. Por tal razón debe considerarse al Sr. Zentella como Padre de la Escuela Rural Tabasqueña.” Con
estas acciones el gobernador del estado ya no pudo negarse a dar apoyo para que la educación en Ta-
basco fuera una realidad, dejando para la posteridad la obra titánica realizada por el maestro Zentella.
Ahora bien con respecto a las instituciones formadoras de docentes, que décadas después fueron
semillero de docentes, María Magdalena Méndez Brito, Vicente Paz Ruiz en su escrito: Las Raíces de
la identidad del magisterio tabasqueño (Etapa 2, PROYECTO DE UNIDAD) documentan datos muy
importantes sobre la fundación de la normal rural del estado, que les comparto a continuación “La ed-
ucación en el Estado ha tenido dos hitos que le han dado presencia a nivel nacional, esos los dieron
los caudillos tabasqueños: Tomás Garrido Canabal (1920 – 1936) el hombre del sureste y su escuela
racionalista y Carlos A. Madrazo Becerra, (1955 – 1963) con su aplicación del plan del once años, líder
político del sureste.”
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Reseña histórica
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La historia nos lleva a concluir que efectivamente en el año 2022 fue trascendental para el Normalismo
Rural y que tanto en Michoacán como en Tabasco habría celebraciones en el mes de mayo y en el mes
de septiembre respectivamente. No omito decir que las dos Escuelas Normales aún están vigentes:
La Escuela Normal Rural “Vasco de Quiroga” y la Escuela Normal del Estado “Rosario María Gutiérrez
Eskildsen” que son las herederas de las dos instituciones más antiguas de Latinoamérica.
Dato curioso: yo fui alumno de las dos Normales 😊
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Normalismo rural
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Normalismo rural
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creación de un espacio y tiempo que nos permite la identificación, distinción y reconocimiento, es darle
paso a la otredad, es aceptar a nuestros semejante, comprendiendo que sin él no somos y sin nosotros
no estamos, se debe redimensionar y reeducarnos bajo el concepto actual de identidad, porque es la
forma más asertiva de hacer patente la existencia del ser humano en el mundo, la identidad le da a los
normalistas categoría de pensar y de sentir, entonces la identidad nos revela no como un regalo, no
como una herencia ni mucho menos como una dadiva sino como la enorme oportunidad de saber lo
que somos, el libro de cuyo contenido vamos a desenredarnos con brillos que traen consigo los días y
preguntarnos cuál es nuestro origen y cuál es nuestra verdadera misión en la sociedad como personas
y maestros normalistas. Identidad es entonces una interrogante permanente, una cuestión en forma
de acertijo que debemos resolver si queremos permanecer en este colectivo de la patria. Tener identi-
dad y amar la historia normalista es entonces existir con voluntad porque permanecer no es persistir,
pertenecer no es existir, por el contrario permanecer es volverse vigente, actuante, crítico y sonoro y
pertenecer es involucrase, hacerse presente pero con voluntad, con decisión y con actitud de asumir
la sabiduría del otro y regalarle a la vida las dudas que se posean para que la magia de la experiencia
vaya dando respuestas a la pregunta sobre la identidad que nos sostiene durante toda la vida. Vivir es
aprender, es cuestionar, es ser rebelde, de no conformarse con el tiempo que nos toca vivir sino trans-
formarlo, sea una parcela o una hectárea, sea una llanura o una montaña, sean los secretos del mar o
la insondable esfera celeste.
Identidad es entonces existir con propósito y vivir cumpliéndolo, es alimentar las destellantes
alegrías y viscitudes del camino que se habrá de emprender porque nuestros padres fundadores una
cosa nos ensenaron: a caminar sereno, a transitar con mesura, a revelar la verdad, a estremecer el
sitial, a enaltecer con valor, a confrontar el presente, a trabajar la cultura, a dialogar nuestro silencio,
a verbalizar nuestro dolor, a entender nuestro sentimiento, a clamar justicia y a conversar con nuestro
hermano, eso es ser normalista con dignidad.
Solo quien conoce y ama su vida, ama entonces su pasado, reconocer y admirar a quienes
transitaron antes que nosotros, a quien con dignidad dignificaron su camino, a quienes les costó andar
abriendo sendas anhelando con pasión resuelta sabiendo que podían trascender y quizá con vehe-
mencia heredar su gloria, por eso amamos la historia del Normalismo porque nos otorga identidad, no
porque sea un manojo de ilusión, no porque sea ramillete de recuerdos, no y claro que no porque sea
adornó en la conversación o el simple sinónimo del ser culto. Amamos la historia de cada una de las
Normales porque nos amamos a nosotros mismos, a nuestro semejante, porque amamos verdader-
amente a la vida y su fructífera andanza, porque arropamos los frutos del tiempo, cuyos renuevos
vuelven a ser semilla que brotan en la tierra y vuelven a la luz cada cierto tiempo, porque la historia es
nuestra guía, son las respuestas del futuro, son la promesa de nuestra vida. Para eso nos sirve la his-
toria de las normales, para recordarnos el recetario puntual, la fórmula de lo que es ser la buena vida
y las nobles costumbres de los maestros criados en un internado. La identidad es tradición, y qué es
la tradición sino la sucesiva practica de lo que nos hace felices y fuertes y además nos otorga el botón
de la unidad, es un hábito incrustado en la conciencia colectiva, pero las tradiciones no lo son todo y
tampoco son verdades incuestionables sino que deben adaptarse a la sociedad y su dinámica, deben
caminar al paso del hombre, debe ser tradición que conservando sus bienes pilares se adaptan, se
mantienen vigente, además propone y postula herencia y trascendencia.
Desmitifiquemos a los héroes y bajémoslos del pedestal en que están, traigámoslos aquí a dia-
logar con nosotros sobre nuestra realidad porque si algo supieron darnos fue su ejemplo, y hoy mucho
más que antes lo necesitamos para sobrevivir a las vicisitudes del siglo XXI. Los héroes son necesari-
os y deseables, pero, así como en la infancia funcionaron como motores de ideales y de imaginarios,
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Normalismo rural
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en la adolescencia o en la madurez deberían ser revisitados para que en nuestra conciencia los de-
smitifiquemos y finalmente podamos exhumar y con ello traerlos aquí en la tierra, porque ellos tuvieron
la virtud de escuchar el latir de sus días, interpretar su realidad, asumir su destino con el carácter que
da la disciplina y el tesón de construir, de edificar de ahí su condición de arquitectos porque primero
esbozaron una meta se alimentaron de conciencia le dieron templanza y gallardía, forjaron al calor de
la verdad y conscientes de que el mundo es la enorme y grata posibilidad de engrandecer la virtud. Dar
espacio a la crítica, aprender a mirar de frente a la historia y a la cultura y a uno mismo como ente social
con el fin de ponerle dudas y hacerle tantas preguntas como sea posible, en otras palabras superar las
vicisitudes mesiánicas las polarizaciones acríticas que obedecen a un pensamiento fanático religioso o
mágico o irracional, somos vulnerables porque no conocemos el pasado y desdeñamos a los héroes,
a los poetas, a los artistas, a los libres pensadores a quienes fueron rebeldes porque su naturaleza
humana contrastaba con su estatura de gigantes, se le habla a los normalistas, se les habla con pasión
y con libertad y se sentencia que si en las Normales Rurales se desdeñan a los forjadores de la patria,
estarán empeñando su futuro, dejando que otros vivan la vida que les corresponde porque no voltear
a ver a los próceres de nuestra tierra, es como si renegáramos de nuestros apellidos que son herencia
y regalo de nuestras familias, así como se encuentra consuelo y alegría en los abuelos, así como ob-
tenemos carácter y disciplina en nuestros padres y madres, así como logramos un abrazo fraterno de
nuestros hermanos y amigos, así de tierno, así de dulce y sobre todo útil es la memoria de los pueblos
reflejada en la acción de sus mujeres y hombres.
El descontrol de la globalización nos ha traído desafortunadamente el desconocimiento y el
desinterés por la historia, la masificación y la producción en serie da poco espacio a la autenticidad,
la mera innovación reprime la creación, la imitación vulnera la imaginación, la cosificación del humano
prohíbe la reconciliación, la falta de interpretación nos da distanciamiento y nos aleja del entendimiento
de la existencia del otro, la cerrazón nos separa de la emoción, la disidencia de la inteligencia, la pru-
dencia de la elegancia, la discordancia de la consonancia, la arbitrariedad de la amabilidad, la soledad
de la integridad e integralidad y las redes de los cubículos donde habita el corazón, la razón, la pasión
para privilegiar no lo infame sino lo humano producto de las relaciones sociales.
Es trabajo fundamental en nuestros días recordar y dialogar a través de los libros y la lectura
a quienes con el hilo de la valentía bordaron palmo a palmo una vida de honor, un ejemplo de lealtad,
una muestra de virtud, una porción de grandeza que fundamentalmente es el pasaporte al porvenir de
lo que ahora somos, ellos dieron rostro al Normalismo, pero no solo ellos sino lo que representan ellos,
porque indudablemente ellos lucharon pensando en un nosotros y de los que en los pasillos de las Nor-
males Rurales se formaron para la profesión más noble sobre la tierra, el de ser maestro.
Los ciclones no conocen el reposo, seria delito su afirmación, no pueden conocer el reposo
quienes fueron hacedores de tempestades como Raúl Isidro Burgos, verdaderas rebeldías como Lucio
Cabañas , incontrolables espíritus virtuosos como Rafael Ramírez Castañeda, no se puede hablar de
calma ante quienes el asombro y el desafío les eran comunes, por ello no se puede hablar de pasivi-
dad ni tranquilamente de estos titanes de la libertad, elementales en una sociedad científica, artística
y cultural. Sin nada más un sepulcro para ellos de honor, porque ellos son la base elemental del pens-
amiento de las Normales Rurales.
Por José Manuel Saragos Gómez
Egresado de la Escuela Normal Rural Mactumactzá, Chiapas
Generación 2018-2022
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Historia normalista
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“La Escuela del diablo, apreciaciones del Obispo Lara y Torres, 1921”
Profr. Dr. Tomás Alberto Molina Jardón
tomasmolina.jardon@seiem.edu.mx
Investigador Educativo de Enseñanza Superior (2019-2021)
Escuela Normal Rural Lázaro Cárdenas del Río
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Historia normalista
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A principios de los años treinta, las dos instituciones se fusionaron y recibieron el nombre de re-
gionales campesinas. Las regionales tenían un plan de estudios de cuatro años y estaban desti-
nadas a formar tanto a maestros rurales como a técnicos agrícolas. Según Alicia Civera (2004)
“La legitimación de las escuelas normales rurales”, los estudiantes serían de origen campesino y
la estructura cooperativa haría posible una autosuficiencia que, se esperaba, complementaría las
necesidades de las comunidades aledañas., las regionales campesinas pasaron a ser normales
rurales en 1926.
La Escuela Normal de Tiripitio en Michoacán, vista desde sus orígenes, las luchas se inscriben
dentro de una tradición que tiene que ver con los orígenes mismos de las normales y el proyecto
revolucionario de las que formaron parte, en su contexto histórico, lejos de ser vestigios de otra
era, destaca su visión pragmática, una que en tiempos en que el campo languidece devastado tras
décadas de abandono, haría bien en reexaminarse.
Fue aquí donde se estableció la primera normal rural en Tacámbaro, y fue también donde, como
gobernadores, tanto Francisco Múgica (1920-1922) como Lázaro Cárdenas (1928-1932), le dedic-
aron a la educación rural casi la mitad del presupuesto estatal como una forma de justicia social a
los descendientes de la Revolución.
En Tacámbaro, Michoacán se formó la primera Escuela Normal Regional que dependió de la Sec-
retaría de Educación Pública, creada por Vasconcelos, siendo los profesores Leobardo Parra y
Marquina e Isidro Castillo insistían en tener las puertas y ventanas abiertas para que la gente pu-
diera constatar la forma en que trabajaban y se trataban entre sí los maestros y los 25 alumnos,
con el fin de despejar las sospechas y rumores, que circulaban hasta tierras lejanas, de que se
desvestía a las muchachas, (Villela, 1972:26-27) lo que dio origen a la frase: “La Escuela del diab-
lo” emitida por El Obispo Lara y Torres el 7 de enero de 1921, derivado de que había solicitado la
apertura de un Colegio al General Múgica, quien era Gobernador de Michoacán, el cual no accedió
al considerar una necesidad social una Normal Rural, lo que dio origen a una serie de reuniones
semanales que llamaban “de tipo social” y el director hizo traer a su esposa para que la sociedad
viera que era una familia bien formada y respetable, aminorar la frase que se hizo vox populi.
En estos rumores, desde luego, estaban involucrados otros conflictos políticos, ideológicos, religio-
sos e incluso económicos, un ejemplo: la oposición a la escuela laica y no sólo eran resultado de
una actitud de rechazo o reserva hacia la educación mixta de acuerdo Raby (1915) “Los principios
de la educación rural en México: El caso de Michoacán, 1915-1929”.
En sus labores y estructura las Normales Rurales tenían algunas similitudes con la colonia Gorki,
organizada para niños huérfanos (muchos de ellos delincuentes y vagabundos) por Antón Maka-
renko en Rusia después de la revolución. En las Normales Rurales Mexicanas el aire redentor
provenía de la educación “civilizatoria” que recibían los alumnos y que después de egresados,
debían impartir en las remotas comunidades de la República.
Alma Gómez (2008) lo recuerda de la siguiente forma: “Nosotras fuimos formadas con la idea de
que nuestra función era ir a trabajar a las comunidades rurales. Teníamos que aprender de todo:
carpintería, soldadura, cuestiones agropecuarias, economía doméstica. Yo creo que el plan de es-
tudios no era muy liberal, pero toda la cultura que significaba la normal nos daba esa educación”.
A contracorriente, las Normales Rurales persisten como importantes instituciones en la actualidad
mexicana, abandonadas, y con frecuencia atacadas por el gobierno, su terquedad posee aires épi-
cos; su voluntad de persistir se ve reflejada en las dramáticas acciones de sus alumnos que, con
frecuencia, son apoyadas por las comunidades aledañas también comprometidas con la preser-
vación de estas instituciones, para no perder el espíritu social de que la educación es el único
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Historia normalista
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medio de crear conciencias, logrando ser la primer Escuela Normal Rural que sobrevivió a 1922 e
icono de la lucha social por la Educación Pública.
Referencias
Aguayo, Álvarez José Luis (2002), Salaices: Escuela Normal Rural formadora de maestros. Chihuahua: Ediciones del
Azar, p. 105.
Aguayo, Álvarez José Luis (2007) coordinador, Un paseo por los recuerdos. Chihuahua: La Asociación Civil de Exalum-
nos de Salaices, pp. 41-42. México, s/e.
Civera, Cerecedo Alicia (2004) “La legitimación de las escuelas normales rurales”, Colección Documentos de Investi-
gación, núm. 86, Colegio Mexiquense, p. 6.
Cuevas, Belén (2008) entrevista por la autora, 12 febrero 2008, Chihuahua, Chihuahua.
Molina, Jardón Tomás Alberto (2016) Investigación y Educación, Horson Ediciones Escolares, México.
Raby, David (1915) “Los principios de la educación rural en México: El caso de Michoacán, 1915-1929” en Sobretiro de
Historia Mexicana, VOL. XXII, Núm.
Ramírez, Rafael (1985) “Propósitos fundamentales que la educación rural mexicana debe perseguir” en La casa del
pueblo y el maestro rural, Engracia Loyo Braco, coordinadora. México: Secretaría de Educación Pública,
Villela, O. (1972). La primera normal rural, cincuentenario en Tacámbaro, 1922-1972.
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Despedida normalista
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espués de tantos años, 2024-1965= 59 años, aporto sobre uno de mis compañeros
que estudió junto conmigo la carrera de profesor de grupo primario en la escuela
normal rural “Abraham González” de Salaices, Chih.
Recuerdo a Joaquín como un jovencito de 16-18 años, de vestimenta limpia, cuidado-
so en su persona, de pelo liso, peinado de lado, lo recuerdo de camisa de manga
corta. Joaquín fue mi compañero de la generación 1959-1965, decir esto me traslada a una viven-
cia en comunidad de seis años, dentro y fuera del internado de dicha escuela, representa com-
partir clases en los mismos salones o aulas de ésta, tener el mismo dormitorio, comer incluso en
la misma mesa, formarse en las mismas filas del grupo cuando se tocaba con la banda de guerra”
Levante” a las seis de la mañana, e ir a las primeras clases del día, el primer año las tomamos en
una gran bodega, pasar lista y ahí hay una cercanía por el apellido donde iba:, Pedroza quiñones
Arturo, Piña Delegado José, Puentes Segura Joaquín, para los subsiguientes años ya iríamos a las
aulas “comunes”, es aquí donde empiezo a ubicar a Joaquín Puentes como un compañero atento,
estudioso, destacado y estimado por sus maestros, que eran los míos, nada más que yo era más
inquieto y menos dedicado, tenía otro tipo de relación o cercanía con ellos; incluso había grupos
de amigos o compañeros por afinidad en el estudio, deporte, camadería, Joaquín era más bien del
grupo de la comarca lagunera, ”paisillas” o estudiosos,” era muy amigo de RICARDO RAMÍREZ,
también (q.d.p.) y EFREN ARELLANO. Más tarde por su perfil: buen compañero, participativo, con
conocimientos, DIPLOMATICO, BUENA GENTE, etc. fue elegido democráticamente como secre-
tario general de la sociedad de alumnos Corazón y acero PARA EL PERIODO 1964-1965 (AQUÍ
CABRÍA UBICAR LA OPINIONES Y PARTICIPACIONES DE JOAQUIÍN EN LAS ASAMBLEAS
COLECTIVAS, DEBEN ESTAR EN LAS ACTAS QUE SE LEVANTABAN O ESCRIBIÁN DE CADA
ASAMBLEA, SE UBICABAN EN EL ARCHIVO DE DICHO COMITÉ),
A mí me parecía era una persona de carácter amistoso, no radical, diplomático, en su quehacer
político. En su gestión le tocó liderear con la representación de Salaices en relación con escisión
de las normales rurales. Entre 1960 y 1964 se dio una división de éstas debido a la disputa por la
dirección de la Federación (FECSM). Desde 1961 se conformaron dos grupos: uno que apoyaba
a Lucio Cabañas, de Ayotzinapa, Guerrero y otro a Antonio Valtierra, de Salaices, Chihuahua. La
división se dio en el congreso de El Mexe, cuando Cabañas salió electo secretario de la FECSM, y
el grupo perdedor formó el Consejo Nacional Permanente (CNP). A Joaquín le toco pactar la unidad
de la FECSM en el Congreso Nacional de Cañada Honda, Aguascalientes, en noviembre de 1964,
tras la división que se había dado de esta federación dos años atrás.
En forma importante está su presencia en el movimiento maderiano, me explico: Detonado por el
caciquismo y la intransigencia del gobierno de Giner Durán, un malestar popular fue intenso duran-
te la primera mitad de la década de 1960, maestros y estudiantes de normales se unieron
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Despedida normalista
Faro normalista
a los campesinos para exigir una reforma agraria que cambiara la situación: invadieron latifundi-
os, realizaron manifestaciones y organizaron constantes marchas. Esta lucha se concentró en las
normales de Saucillo, “Ricardo Flores Magón”, y Salaices, “Abraham González”; los internados de
las Escuela de Artes y Oficios, cuyo profesorado abrazó posiciones progresistas, además de otras
instituciones como la Escuela Normal del Estado y Normal Nocturna, alcanza una situación crítica
cuando el 23 de septiembre de 1965 un contingente de maestros, estudiantes y campesinos atacó
el cuartel de Ciudad Madera, Chihuahua. Durante ese proceso Salaices tuvo una posición y Par-
ticipación, el actuar de Joaquín no me parece de convocatoria y guía hacia acciones radicales, de
participación de la sociedad de alumnos en conjunto para participar en algún acto o proceso del
movimiento, no lo recuerdo, pero Arturo Gámiz , que lideraba este movimiento, en el primer en-
cuentro de la sierra para determinar cómo desarrollar el movimiento, manifiesta que: “ la delegación
de la Escuela Normal de Salaices sostuvo la tesis idealista de que “antes de hacer revoluciones
y tomar el poder hay que enseñar ética a las masas”. Como es lógico suponer, esta posición no
fue aceptada por aquellos grupos campesinos altamente politizados, ni por el resto de las deleg-
aciones estudiantiles. Durante este periodo, los secretarios generales de la Sociedad de Alumnos
de la Normal de Salaices fueron Jacobo Holguín Guerra (1962-1963) y Joaquín Puentes Segura
(1963-1964). Digo yo, Ante ese reclamo histórico, los salaicinos tenemos que decir, primero, que
aquella era una posición inaceptable para el grueso de la sociedad comunitaria y democrática del
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Despedida normalista
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internado; Gámiz mismo lo observa así: “Evidentemente esta conducta es desconocida o mal con-
ocida y es contraria a los intereses y a la ideología del estudiantado de Salaices”.
Es interesante considerar nuestra generación 1964-1965 como la generación del movimiento ma-
deriano, donde si bien no se participara directamente, estamos en ese contexto, en ese momento
histórico que de alguna manera nos influye: Me comenta Manuel Valdés, ¿cuándo participaste en
alguna toma de tierras?, Sin embargo, para el rescate y conformación de los hechos históricos,
están las fuentes como testimonios orales o escritos, o de otra naturaleza. QUEREMOS COLABO-
RAR CON EL RECONOCIMIENTO QUE LE HARÁ SU FAMILIA.
LOS ALUMNOS QUE CONFORMAMOS LA GENERACIÓN DE 1959-1965 FUERON:
Mario Almeida, Heriberto Álvarez, Efrén Arellano, Juan Cardona, Carlos Corral, Mario Fierro, J. Re-
fugio Larrazolo, Wenceslao Lara, Ezequiel Merino, Saúl Moreno Marrufo, Joaquín Puentes, Carlos
Ruiz, Manuel Valdez, Carlos Acosta, Pedro Arrieta, Natividad Ávalos, Alejandro Carrillo, Heriberto
Caro, Raúl Corral, Alberto Corral, Santiago Cuéllar, Jesús Alfredo
Chávez, Armando Fierro, José M. García, Hermenegildo Hernández, Manuel Hernández, Óscar
Holguín, Apolonio Licerio, Arturo Marín, Reynaldo Marín, Eduardo Meléndez, José Rito Mireles,
Efrén Narváez, Leoncio Ortiz, Alejandro Osuna, Arturo Pedroza, José Piña, Juan Posada, Ricardo
Ramírez, Ramón Ramírez, Andrés Rodríguez, Alberto Rubio, Víctor M. Salazar, Óscar Salazar, Ál-
varo Valenzuela, Juan Vázquez, Cervaldo Vega. En la fotografía sólo se muestran veintidós de los
cuarenta y siete que fuimos.
De esta generación, algunos se distinguieron como deportistas, por ejemplo: Wenceslao Lara que
se destacaba en carreras de fondo; Manuel Valdez, la Chiva, originario de Villa López, Chihuahua,
muy buen basquetbolista. En otras manifestaciones estaban Efrén Arellano, estudiante sobresali-
ente, que tenía muy buena voz y participó en el orfeón. Mario Almeida tenía habilidad para la bat-
ería; su aspiración era tocar alguna vez en la orquesta de Beto Díaz. Hubo alumnos sobresalientes
académicamente: Joaquín Puentes, Manuel Valdés, Efrén Narváez, Ricardo Ramírez, Wenceslao
Lara, Efrén Arellano, Carlos Acosta.
QUE ESTE PRÓXIMO RECONOCIMIENTO “POST MORTEM” PARA JOAQUÍN PUENTES SE-
GURA REALIZADA POR SU FAMILIA EL 10 DE OCTUBRE DE 2023 Y DIFUNDIDA POR LA ASO-
CIACIÓN DE EXALUMNOS DE LA ESCUELA NORMAL RURAL DE SALAICES, A.C. ESTIMULE
LA VALÍA COLECTIVA DE UN BASTIÓN DEL NORMALISMO TAN NECESARIO DE RESCATAR
EN EL PRESENTE.
¡SALAICES VIVE!
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Reminiscencias normalista
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FUNDAMENTOS TEÓRICOS
Una de las principales problemáticas que afronta nuestro país, es el rezago educativo que se ha ido acre-
centado dentro de las aulas en educación básica, la implementación del nuevo plan de estudio (NEM), la
cual no han logrado la meta de implementación entre docentes, por otro lado una de las afectaciones prin-
cipales fue la pandemia del covid-19, con lo que inicio la cúspide y dio a denotar la deficiencias del sistema
educativo en México, hasta el momento siguen en pie las consecuencias pedagógicas y socioemocionales
en el alumnado
En la búsqueda del problema se trata de seleccionar las ideas correctas para empezar con nuestro análisis,
se realizó una revisión de literatura existente en diferentes recursos bibliográficos, buscando antecedentes
de estudios, proyectos o artículos similares o relacionados, que permitan forjar una base sólida de cono-
cimientos previos para el desarrollo del presente proyecto de investigación permitiendo la generación de
conocimientos.
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n las viejas haciendas siempre trasparente, ella se veía llorando, pero no era un
han existido leyendas que se fantasma aterrador pero asustaba.
van pasando de generación En el pueblo, trabajadores y docentes de la Nor-
en generación y el CARMEN mal comentaban que era una hija de don Luis
no podía ser la excepción. Ahí Terrazas, la cual se enamoró de un peón de la
existía una hacienda de Don hacienda, pero por el estatus social se le pro-
Luis Terrazas dicha hacienda fue abandonada hibió cualquier tipo de relación con él, y al tratar
por sus dueños don Luis decía, ¡Que él no era de escapar los dos fueron alcanzados, a ella se
de chihuahua que chihuahua era de él! y era la llevaron con su familia y al joven lo desapare-
cierto que tenía muchas haciendas por todas cieron. Ella lloró mucho y suplicó ante su familia
partes, en ese lugar en particular, se decía que para saber sobre su amado, pero al enterarse
se aparecía una mujer de blanco en un jardín de lo sucedido, se ahorcó en la noche en un ár-
redondo lleno de flores en verano y hojarascas bol que estaba en donde después pusieron la
en invierno. jardinera redonda con flores.
Ahí en ese lugar se instaló la Normal Rural de Todas las alumnas teníamos miedo de salir en
Ricardo Flores una bella y hermosa escuela. Yo la noche, después del toque de silencio se oía
llegué ahí en 1959 como alumna de primero de un grito infernal dentro de los dormitorios se es-
secundaria; de pronto las alumnas de los grados cuchaba un ¡Zaz!, con las cobijas nos tapába-
superiores te ponían al tanto de lo que sucedía mos hasta la cabeza por el tétrico sonido. Si al-
en las noches, los cuales eran de las voces que guien quería ir Alaska (baño de letrina muy frío),
se escuchaban en los salones y en los dormito- nadie nos quería acompañar por el miedo de la
rios se escuchaban los caballos relinchar y cor- noche penumbra noche y sí te acompañaban
rer. normalmente se regresaban gritando y corrien-
Pero lo más catastrófico era lo de la mujer de do como alma en pena por la sombra fantasmal
blanco que se aparecía cerca de los dormitorios, que habían visualizado por los dormitorios.
muchas aseguraban haberla visto y que hasta Don Luis Terrazas era dueño de la hacienda y del
las llamaba con la mano, me acuerdo como era, pueblo se llamó el Carmen y después de 1935
-¡sí yo la vi!-, era una aparición traslúcida, con el se le cambió el nombre a RICADO FLORES
cabello moviéndose al aire una especie de bata MAGÓN.
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“La Normal”
(documental próximo a estrenarse en Yucatán)
Miguel Ángel Ancona Ek /
Universidad Autónoma de Yucatán
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“La Normal” pretende ser un material de reflex- “Espero que con el documental “La Normal” re-
ión para los actuales estudiantes normalistas flexionemos sobre la importancia del campo, del
de mantener ese espíritu vivo de fraternidad y campesino, la educación y las normales rurales.
de defensa de los derechos de quienes más lo Que este sea un llamado a los alumnos actuales
necesitan, pero también para la comunidad uni- de todas las ENR de la República a seguir ve-
versitaria en general y la población, en recordar lando por esa lucha en defensa de los derechos
la importancia de defender al pueblo y no olvidar de quien más lo necesita”-Miguel Ancona.
el pasado. Videos así somos fotografías, spin off
y experiencias personales durante la producción
serán publicados en la página de Face-
book Miguel Ancona, perteneciente al di-
rector de este material: https://www.face-
book.com/MiguelAncona23/
¿Quién es Miguel Ancona? Oriundo de
Cancún, Miguel es actualmente alum-
no de último grado en la Licenciatura en
Comunicación Social en la Universidad
Autónoma de Yucatán, enfocado en la
producción audiovisual y la fotografía.
Formó parte del proyecto de investigación
en CONAHCYT titulado “Cien años de
educación indígena y rural en perspec-
tiva transdisciplinaria”, del cual crea el
documental “La Normal”, otras produc-
ciones que ha realizado son: Naj (2022),
Mina´anech ti´ K´íiwik (2022) Wolis t´aan
(2023) y Sueño de cristal (2023).
Su gusto por el documental se debe a
las causas sociales y culturales, ya que,
según él, es la mejor manera de captur-
ar esas vivencias y compartirlas, no sol-
amente con los demás, sino también con
quienes forman parte de esta: “Trabajar
con la comunidad para la comunidad”.
Además de que le apasiona trabajar en
campo, convivir con la gente, conocer his-
torias y compartirlas por el medio audio-
visual.
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Homenaje a un normalista
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Homenaje a un normalista
Faro normalista
tiene recuerdos de otros maestros: Óscar Erives dora pedía que se repitiera el proceso, dado que,
Aragón, José Contreras, Javier López Flores, Ser- según su apreciación, en el Congreso se habían
gio Enrique Castro López, Thelma Isette De los cometido irregularidades. (Fuente: Vicente Rodrí-
Ríos Castillo, todos ellos muy valiosos. guez Quiroz. Autobiografía. Documento publicado
De su fructífera vida estudiantil, Lucy resal- en Internet).
ta lo siguiente: Al no aceptar los adeptos a Cabañas lo an-
Fue nombrado por la Sociedad de Alum- terior, la FECSM se divide y las Normales de la
nos como Secretario General para el ciclo 1963- planilla perdedora se organizan en torno a lo que
64. Ese puesto lo ocupaba siempre alguno de los llamaron Consejo Nacional Permanente, sien-
alumnos con más dotes de liderazgo, que además do el primer presidente Agripino Refugio, de El
fuera conciliador y tuviera el don de la palabra. Y Mexe, Hgo., y después Vicente Rodríguez, Miguel
a los 20 años de edad, cuando cursaba sexto de Quiñones y Joaquín Puentes, los tres de Salaices.
Normal, Joaquín Puentes fue pieza fundamental Este último asumió el puesto en mayo de 1964,
en la reconstrucción de la FECSM, en un congre- cumpliendo doble función, pues además era sec-
so celebrado en Cañada Honda, Ags., en 1964. retario general de la Sociedad de Alumnos de su
Era secretario general del Consejo Nacional Per- escuela.
manente de las Normales Rurales (CNP-ENR) y Al ser nombrado líder del CNP-ENR, en
pugnó por la reconstrucción de la FECSM. el 6º Congreso Nacional, celebrado del 17 al 23
La Federación había sufrido un cisma de mayo de 1964, en Cañada Honda, Ags., Joa-
en mayo de 1961, en el 17º Congreso Nacional quín pugna por la reunificación. Hace uso de su
de La Huerta, Mich., debido a pugnas entre dos capacidad de persuasión y conciliación, y logra,
grupos: el que encabezaba Lucio Cabañas Bar- junto con otros compañeros, entre ellos Marcelo
rientos, de Ayotzinapa, Gro., y el que apoyaba a Amaro Villalobos, la unidad, firmándose el pacto
Antonio Valtierra Limones, de Salaices, Chih. La el 7 de noviembre de 1964. Éste es el gran mérito
votación había favorecido a Cabañas como nuevo político de Joaquín Puentes Segura.
secretario general, por un voto. La planilla perde- Ese año, su generación –y las del resto de
las Normales Rurales- llevaron el
nombre “7 de Noviembre, Unidad
de la FECSM”, en recuerdo de ese
acontecimiento. Al egresar como
maestro, en 1965, sigue siendo
líder por donde quiera que pasa:
empezó en Arisiachi, Chih., ocu-
pando el lugar que dejó vacante
otro salaicino, Miguel Quiñones
Pedroza, quien murió, junto con
otros siete combatientes, en el
asalto al cuartel de Madera, el 23
de septiembre de 1965.
Después pasó por la es-
cuela de Tomochi y posterior-
mente por Creel, hoy pueblo
mágico, que lo marcó positiva-
mente para siempre, pues ahí se
reencontró con varios salaicinos:
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Homenaje a un normalista
Faro normalista
Mario Almeida Ontiveros, Antonio Valtierra Lim- mosa que es Camargo, donde habiendo tanta
ones, Marcelo Amaro Villalobos y José Guadalupe agua que les da el río Conchos y la presa La Bo-
Cortina, con quienes fundó una escuela secundar- quilla, no sólo hay belleza del paisaje, sino pec-
ia por cooperación, de la que Joaquín fue director. es que da el río, frutas en las riberas del mismo,
Y ahí mismo, en Creel, conoció a María abundante oxígeno, un ambiente propicio para
Elena Morquecho Quezada, señorita de belleza que surja el amor por las artes. Tal vez por eso,
extraordinaria, conocida como Nena, y ambos de- Lucy, la autora de este libro, ha desarrollado su
cidieron transitar el mismo camino por el resto de amor por la Literatura, como lo muestran sus li-
sus días. La boda fue el 25 de agosto de 1969. bros, tanto en verso como en prosa. Escribe en
este libro un capítulo que intitula “La magia de los
Después obtuvo cambio a Francisco I.
normalistas rurales”, bellísimo texto.
Madero, Coah., y en 1971 a Rincón de Romos,
Ags., donde fungió como secretario general de la El Maestro Joaquín siempre mostró hu-
Delegación. ¿Por qué pensó el Maestro Joaquín mildad y fue un guerrero incansable. Trabajó 47
en Aguascalientes? Tal vez por el amor que sintió años ininterrumpidos. La autora lo retrata como la
por esa tierra hermosa desde 1964, cuando logró persona que le inculcó los valores universales. El
la reunificación de la FECSM, sólo él lo supo. libro contiene además “Cartas al Cielo”, mensajes
llenos de amor y gratitud, de ex alumnos, del hijo
Cuando Nena y Joaquín se van a tierras
y las cuatro hijas, de nietos y nietas, hermanas y,
hidrocálidas llevan en brazos a Ramiro, nacido en
por supuesto, de su querida Nena, quien lo acom-
Chihuahua, y allá nacen Lucy y Lorena. Pero du-
pañó hasta que Joaquín cerró sus ojos para siem-
rante su estancia en Chihuahua Joaquín se había
pre, el 4 de mayo de 2021, en Chihuahua, Chih.
enamorado de Camargo, tierra de artistas, y la
escoge para asentarse con su familia. Nacen ahí Como homenaje sincero a su vida y obra,
las dos hijas menores, Neyra y Mayra, y él se de- el 10 de octubre de 2023 la Sección 8 del SNTE y
sempeña como profesor de Ciencias Naturales en la Presidencia Municipal de Chihuahua colocaron
la Secundaria Federal y en la Preparatoria, plantel una placa con su nombre en la Rotonda de los
este último donde forma un equipo de futbol del Maestros Ilustres, en la ciudad de Chihuahua.
cual es entrenador, ganándose el mote cariñoso Honor a quien honor merece.
de sus jugadores, de La Tota Puentes. Acerca de la autora: Luz Elena Puentes
Es en Camargo donde desarrolla la mayor Morquecho es Licenciada en Letras Españolas por
parte de su vida profesional y escala a subdirector la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad
y director de la secundaria, y más tarde será Jefe Autónoma de Chihuahua. Fue periodista en TV
de Enseñanza de su área en la región centro sur. Azteca. Cursó la Maestría en Investigación Edu-
Le decían los maestros “El Jefe Puentes”. Pero no cativa en la Escuela Normal Superior de Tampico.
era de los que aprovechaban el cargo para simu- Ingresó al magisterio en 2004. Recibió la Medalla
lar, se desvelaba haciendo materiales de apoyo a la Práctica Educativa Docente por la USICAMM.
para entregarlos a los maestros de grupo en las Es poeta y escribió el libro de poemas Un minuto
Academias. azul, además de otros textos.
Así transcurre su vida, dando amor a sus
cinco hijos y a su esposa Nena, en esa tierra her- Redactor: Ramón Gutiérrez Medrano. Octubre de 2023.
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Memoria normalista
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Aragonés Natividad
Durán Silviano
Estrada Pedro
González José Inés
González Parra Baldomero
Hernández Chacón José
Isimoto Carlos
López Daniel
Martínez Efrén
Monifacio David
Piñón Encarnación
Rocha Isabel
Rodríguez Mario
Rodríguez Rigoberto
Valverde Alberto
Generación 1941-1944
Barraza Ruiz Bienvenido
Burgos Eugenio
Castillo Roberto
Chacón Victoriano
Gamboa Alfonso
Hernández Armenta José
Lozano Vega Eduviges
Morales Venzor José Francisco
Moreno Flores Alfredo
Ostos Valenzuela Ramón
Parra Perfecto
Rascón Enrique
Sáenz Aureliano
Servin C. Germán
Terrazas Molina Juan
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Remembranzas
Faro normalista
lgunos libros, como el “Made- económica, política y social de los 60s, así como la
ra” del Profesor José Santos exposición de los ideales y los programas no sola-
Valdés, tienen una historia tan mente del grupo guerrillero sino también de otras
interesante como la obra mis- personalidades que actuaban por entonces. No es
ma. En él se relacionan situa- un libro sectario; el autor se duele por la muerte
ciones y personas de las más de los maestros y campesinos y también por la de
diversas que hacen, al libro, un los soldados, hijos del pueblo, a quienes estima
resultado colectivo; producto de muchos esfuer- víctimas de la misma situación social.
zos, dedicación e interés. Durante los capítulos primero, segundo, tercero y
Muy pocas obras, como en este caso, tienen has- cuarto expone los resultados de un estudio crítico
ta un libro que pretende ser la contra parte o la de la economía y la situación social del estado.
réplica para la obra primera, ¡para ello se escribió Se percibe una gran meticulosidad para reducir
“! ¡Que poca Mad... era!” de José Santos Valdés, con tanta eficacia a unas cuantas páginas lo que
el supuesto autor es Prudencio Godínez Jr. (ed- sucede en nuestros 247,087 kms2. “En Chihuahua
itado en 1969 como tercera edición, no lleva el todo es grandioso, hasta la injusticia. La naturale-
nombre de la editorial ni número de ejemplares; za ha sido pródiga: creó ahí, junto a la estepa de
es un anónimo) Otro ejemplo es la Crónica de un pastizales abundantes en épocas de lluvia, los
País Bárbaro de Fernando Jordán para el cual se médanos de Samalayuca y la aridez escabrosa de
escribió otro libro llamado “La Verdadera Crónica muchos de sus cerros talados hasta el límite”.
de un País Bárbaro”. Subrayo el hecho de que dos Al homenajear nuestro suelo concluye en que los
obras muy importantes para Chihuahua tienen su recursos de la naturaleza y la posibilidad de su ex-
contra libro y que ninguno de ellos ha logrado su plotación pueden; “hacer la felicidad no solo del
propósito de opacar la obra original. millón 122 mil habitantes que registra la estadística
José Santos Valdés fue uno de los grandes for- sino de cinco o más millones de seres humanos”.
jadores de maestros rurales, creador de las es- Nos presenta un estudio demográfico para expli-
cuelas internados para esos fines. Fue inspector carse la evolución de la población que en el año
de la zona norte del Sistema de Normales, razón de 1900 sumaba 327,784 habitantes y para 1960
por la cual conoció algunos de los participantes en tenía 1 226,793 por lo cual en un tiempo de 60
el caso de Madera, especialmente al doctor Pablo años casi se cuadruplicó. El desarrollo cultural era
Gómez y a Miguel Quiñones Pedroza. muy lento y los saldos de las políticas educativas
El objetivo del autor fue exponer quienes fueron resultaban más que negativas, había un 25.2% de
los caídos y reivindicarlos como luchadores socia- analfabetas de 6 años ó más de edad.
les y hombres útiles muy alejados de los calificati- Llega a una conclusión drástica como para dar
vos que les aplicó el Gobierno del Estado. Al paso vergüenza a cualquier chihuahuense: “Gobern-
del tiempo el libro de 176 páginas se ha convertido aron para degradar no para engrandecer... no
en un estudio puntual y apasionado de la situación importa, para la validez de este juicio no solo de
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Remembranzas
Faro normalista
valor moral sino también político, lo que hayan * “Que alguien escriba un verdadero libro que lleve
hecho en otros campos de la actividad humana. al pueblo mexicano la verdad sobre esta humana
Sí aumentaron la corriente circulatoria de alcohol, matanza”.
sí crearon las condiciones favorables para que Se han hecho algunos esfuerzos por escribir ese
aumentara su consumo y a la vez, aumentar al libro, pero aún no existe un estudio completo.
número de bebedores no cabe duda que estu-
* “Que los partidarios de las causas de los po-
vieron trabajando para minar, destruir, hacer pe-
bres encuentren argumentos para probar que los
dazos las bases, los fundamentos morales de una
8 acribillados en Madera fueron mientras vivieron
sociedad confiada a su cuidado”.
(sic) hombres jóvenes y valiosos para su país”.
La idea que nos plantea es que el marco socio-
* “La sangre que corrió en Madera no fue producto
económico y político propiciaron la violencia y la
de una acción desesperada o de un acto suicida;
rebelión. No abarca todos los actos de ese tipo
fueron víctimas de una celada, de la traición y del
acontecidos en la época, solo al caso de ciudad
engaño”. Esta y otras hipótesis están pendientes
Madera, ni se refiere a la gran inconformidad so-
de corroborarse con un estudio más profundo.
cial que involucró a diversos sectores de la po-
* “... levantar en Madera... un monumento sobre
blación.
la fosa común que guarda los restos de los sacri-
Pero sobre todo, atribuye a los problemas agrarios
ficados”.
lo acontecido en la sierra; era época en la que aún
Esta es una tarea pendiente, se ha colocado sol-
existía visiblemente el latifundio, el acaparamiento
amente una lápida de mármol que tiene los nom-
de tierra en pocas manos y miles de campesinos
bres de los caídos y una inscripción sumamente
luchando por ella, lo mismo sucedía con el bosque
emocionante que expresa el pensamiento del
y con los pastizales, la revolución mexicana no
doctor Pablo Gómez, quien lo había dejado escrito
había hecho justicia al campesinado.
casualmente, en un libro dedicado a su hija Alma;
El autor le deja la palabra al profesor Arturo Gámiz jamás imaginó que de una manera fatalmente pre-
García para que explique: monitoria estaba escribiendo el epitafio que com-
- La entidad cuenta con 24.5 millones de hectáreas. partiría, para siempre, con un grupo de sus más
De 6 a 8 millones de esta tierra están acaparadas queridos compañeros de lucha: “el México nuevo
por 300 familias. donde existas, una verdadera justicio social se
construirá con su sangre, el dolor y el sacrificio de
100 mil ejidatarios tienen 4.5 millones de hectáreas.
sus hijos en aras de los más sagrados del pueblo”
50 mil hombres del campo carecen de parcela.
Los acontecimientos de que se ocupa el libro cum-
Las autoridades agrarias tienen 400 expedientes plen este 23 de septiembre 37 años.
de solicitantes de tierras.
Aquel día el país amaneció con la noticia trágica
El libro contiene la crónica puntual de múltiples
de que en la pequeña Ciudad Madera Chihuahua
acontecimientos y la lucha denodada de algunos
un grupo de jóvenes: campesinos, estudiantes y
periodistas, ingenieros, maestros y campesinos.
maestros libraron un combate con el ejército na-
Todo ello estalló el 23 de septiembre de 1965 que cional en el cual perdieron la vida 4 soldados y 8
equivale para Chihuahua lo que el octubre del 68 de los atacantes al cuartel. Ellos fueron:
para el país.
El profesor voluntario Arturo Gámiz
Al final José Santos Valdés nos deja una espe- García. .................25 años
cie de pensamientos y deseos dignos de mencio- El maestro y doctor Pablo Gómez
narse:
Ramírez. ................... 39 años
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Remembranzas
Faro normalista
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Remembranzas
Faro normalista
Juventino Gaytán Méndez hermanos de Reynaldo ciones y al pensamiento político. Uno de los caí-
y otras personas. dos en Madera el joven profesor Rafael Martínez
Tiempo después el libro, revisado, regresó a manos Valdivia lo visitó alguna vez y seguramente le pro-
de José Ángel quien lo llevó a México para entre- porcionó propaganda y asesoría para su lucha.
garlo a Miguel Aroche Parra un humilde impresor Años después otro grupo armado, el de Oscar
que se hizo cargo de la edición, recibió los pagos González Iguiarte recibió apoyo y protección de di-
en partes hasta que se liquidó la totalidad. La sec- versas familias de Zaragoza. Posteriormente de la
ción octava compró 100 libros a $15.00 cada uno, familia Gaytán Saldivar partieron rumbo a la guerrilla
el resultado final fue que el dinero se reintegró por de nivel nacional Laurita, Armando y Javier.
las ventas y los apoyos de distintos compañeros. Por todo ello es natural que el libro de Madera
Después les enviaron 100 libros más que eran dis- haya sido revisado y conocido por primera vez en
tribuidos con dificultades porque había cierto temor Chihuahua por los campesinos de Ignacio Zarago-
de que la policía supiera que tenían el libro, la venta za: “muy seguramente también por el Doctor Raúl
fue una actividad casi clandestina. Peña Garibay” - puntualiza Paz Chávez Rojo.
Tenemos la información de que algunas personas
más colaboraron con la preparación del libro; la
Maestra Bárbara Sixtu Urquiza reunió los datos
estadísticos y se los envió al maestro José Santos
Valdés para complemento de su estudio.
La maestra Ramona Flores Soto recuerda que el
libro se comenzó a escribir y tal vez se concibió
en la Escuela Normal de Saucillo donde ella, y
el maestro Marco Vinicio Aguilera y otros colabo-
raron con información. Posteriormente la maestra
participó en la campaña para vender el libro.
El maestro Pedro Medina que trabajaba en Ig-
Esta fue la forma como participó el profesor José nacio Zaragoza y era de uno de los más activos
Ángel Aguirre en aquellos acontecimientos. En el políticamente llevó los testimonios escritos de los
caso de Madera había mucha relación porque al- campesinos y sus familias que habían sido rep-
gunos de los que ahí murieron tenían familiares rimidos, específicamente el caso del señor Secun-
en Zaragoza. También porque este lugar se de- dino López a quien le habían incendiado su casa,
sarrolló mucho en el sentido político e ideológico le robaron sus animales y le destruyeron sus sem-
de tal manera que todas las fuerzas y corrientes bradíos como expresiones de los atropellos del
de izquierda tenían alguna presencia en el ejido lo cacicazgo en la sierra.
que fue creando una cultura muy particular en los Esa es una parte de la historia del libro y sus vicisi-
campesinos de esa región. tudes para llegar a ser una obra muy importante
En el libro de Madera se relata la lucha de Secun- en Chihuahua porque refleja un acto muy concreto
dino López por la posesión de un pedazo de tierra y un período conflictivo en la historia de la entidad.
y la gran represión que sufrieron él y su familia, Para hoy no es fácil localizar un ejemplar del libro
la manera de cómo se fue aproximando a las ac- Madera, pues no ha habido una segunda edición
tan necesaria para las nuevas generaciones.
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Evocación normaloista
Faro normalista
ara ingresar a la Banda de Guerra del Día del Estudiante, como ya era tradición,
no había quién nos enseñara, era participaba la Banda de Guerra y se anunciaba
cuestión de oír, escuchar, los toques el cambio de sargento, en caso de que éste se
que los compañeros realizaban y, despedía de la Normal.
poco a poco, con la práctica, tocan- Para sorpresa de la comunidad escolar y de los
do con varitas en las bardas, se iba integrantes de la Banda, Rocha dijo: “El próximo
aprendiendo a dominar el tambor. sargento de la Banda será Miguel Vázquez Ambriz”.
Yo me quité el tambor y se lo di y él me entregó la
Tuve la suerte de encontrar unos pedazos de
corneta. Ahí empecé a dirigir la Banda hasta 1969,
madera de encino y, como me gustaba mucho la
año en que se cerró el ciclo profesional en la escuela
carpintería, un día fui al taller y elaboré mis propias
de Salaices.
baquetas. Eran un poco distintas en peso a las
reglamentarias, pero con esas aprendí y las seguí Recuerdo algunos nombres de compañeros
usando cuando ingresé a la Banda, en 1965, tocando que formaban parte de la Banda de Guerra en
el tambor, pues ya me había acostumbrado al vuelo el tiempo en que también yo fui: Juan Francisco
de baqueta con ellas. Recuerdo que el sargento era Rocha, Gildardo Amaro, Marcelo Amaro, Mario
Juan Francisco Rocha. Almeida Ontiveros, Enrique Gallegos, Joaquín
Valdez, Mario Acosta Gaytán, Héctor Manuel
Yo estaba muy chiquito y diariamente, cuando
Muela, Saúl Moreno Acosta, Rodolfo Acosta,
hacíamos escoleta por la carretera, desde el
Isidro Franco, José Luis Téllez, Jesús Cañas Loya,
entronque hasta la Normal, tenía que hacer un
Jorge Gallardo Ogaz, Rogelio Jáquez, Miguel
esfuerzo tremendo para dar la zancada y poder ir
Ochoa, Isaías Bañuelos, Gildardo Irigoyen Silva,
al parejo con los demás compañeros, sobre todo
Melquiades “El Gallo” Mascorro, Cuco Orozco (“El
cuando marchábamos en línea horizontal.
Güero Colores”), Héctor “El Popo” Acevedo, Chalú
El vuelo de baqueta que realizábamos no era Solís...
sólo a nivel individual, sino que intercambiábamos
Además: Miguel Ochoa, Fidencio Perea,
baquetas con el compañero de la izquierda o
Francisco Leyva, Fausto Meléndez, Salvador
de la derecha, y a veces entre tres: el tercero
Palma, José Inés Hernández, Isidro Lozano,
la aventaba al primero, el primero al segundo, y
Gilberto Molina, Manuel Arias Delgado, Fausto
hacíamos esos malabares circenses que se veían
Meléndez, Lauro Arturo Martos...
parejos, exactos y muy bonitos.
Participábamos en los desfiles de las
En la Banda siempre toqué tambor, pero
comunidades cercanas a la Normal y cuando
aprendí a tocar corneta a la par que el tambor.
Nos reuníamos tres compañeros para practicar y organizaban bailes por las noches, nos daban
apoyarnos: Joaquín Valdez – que tocaba corneta y oportunidad de bailar gratis. Recuerdo que en el
tambor- hacía los toques de corneta y los otros dos Movimiento Estudiantil del 68 se organizó un mitin
tocábamos tambor. Pero en ocasiones Joaquín en Jiménez y la Banda iba a tener participación.
quería practicar tambor y entonces empecé a Nos trasladamos hacia allá y cuando íbamos a
pasar el puente, resulta que éste estaba cerrado
darle a la corneta y fui aprendiendo.
por soldados, por la Federación, y no nos dejaron
Yo creo que lo hacía bien porque cuando pasar; teníamos el compromiso de llegar a la plaza
Rocha, el sargento, iba a egresar como maestro, y no sé de dónde salió la orden de atravesar el rio
en 1968, me escogió como sucesor. En el festival Florido, que iba crecido, y así lo hicimos.
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Evocación normaloista
Faro normalista
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La Opinión
Faro normalista
¡Saucillo Vive!
Eliud
o hace falta volver porque nunca tristezas y alegrías, las consignas retumban en
nos fuimos, pero cuando volvemos el gimnasio implorando reventar los oídos del
con el alma repleta de melancólica gobierno opresor, ¡Saucillo Chihuahua vive la
lucha volvemos diferentes. Es lucha sigue!
menester abrazar la temperatura
La cooperación viva se respira desde el aseo del
de 42 grados centígrados para
dormí hasta tomarse de las manos y hacer suyas
apreciar mejor los murales las calles, en los dormitorios puedes ver material
desgastados por el tiempo. Saucillo es radicalidad. didáctico siempre manteniendo la creatividad
Donde el rostro de Flores Magón y el Che en flor naciente, todos sus rincones hablan, las
Guevara dan ese toque de rebeldía a las paredes familias se miran con respeto tal y como lo hacen
que resguardan la historia, pero incapaces de sus hijas, padres y madres humildes de todos los
contener los gritos de rabia. Caminar por sus rincones del país, con sombrero y botas de campo,
pasillos y probar su comida nos recuerda el valor vestidos y zapatos de fiesta porque esto es la vida
de una buena sombra por el área académica o normalista una fiesta revolucionaria, celebrando
cerca de la alberca, la explanada luce reluciente y asistir al parto de mujeres nuevas.
en alegre comparsa las baldosas del patio claman
Un saludo especial con todo respeto y
por socioculturales, pasos apurados cargando
admiración a Todas las engresadas de Saucillo de
consignas propias llenas de crítica y fuerza
ayer y hoy quienes siguen sembrando esperanza
transitan todo el día sin parar, agentes de cambio
y coherencia por un mejor mundo en especial a:
sin prebendas. Carmen Guevara Cortez, Sonia Monserrat Salinas
Las cálidas miradas de mujeres van en Alvarado, Lorena
movimiento fulgurantes de sangre nueva, llenas Guadalupe
de pensamientos por la geografía política y la Guevara Cortez
prensa agitadora. No claudican, Saucillo no se y Perla Jaqueline
vende mucho menos se da. Las amenazas al Salinas Alvarado
tiempo no asustan a la base consiente, buscamos incansables
justicia, no callamos, seguimos empujando a saucillas ejemplo
quien se detenga. de lucha, no se
detengan va para
El canto de las aves acurruca a las saucillas
ustedes este
de ayer y de hoy para que crezcan en el infinito y
atesoren el rugir del puño izquierdo en alto. texto de Ricardo
Flores Magón
Volver a saucillo de la mano de quien no ha “No importa; los
bajado la guardia es un acto congruente de amor, revolucionarios
es reparar las heridas que el sistema capitalista vamos adelante.
pretende hacer supurar. El abismo no nos
Volver a Saucillo es volver a nacer con la detiene: el agua
normal, llenar de polvo quimérico las botas y es más bella despeñándose.
cargar las mochilas para el raid con algo más que Si morimos, moriremos como soles,
ropa y libros. despidiendo luz”
Las familias suspiran al ver donde dormían Patria o muerte venceremos ...
sus hijas por 4 años, al saberse sentados en
el comedor el que tantas veces fue testigo de
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Testimonio normalista
Faro normalista
e causa una grata alegría escuchar la narrativa del Mtro. Manuel Nevárez Medrano,
sobre la transformación de las Escuelas Prácticas Agrícolas a Escuelas Normales
Rurales, previo al intento de convertirlas en Vocacionales. Me tocó la fortuna de
formar parte del Comité Nacional de la FECSM de ese tiempo y recuerdo que en
una reunión de dicho comité con el Secretario de Educación Jaime Torres Bodet, le
propusimos que las 11 Escuelas de Prácticas Agrícolas se convirtiesen en Normales
Rurales. Después de varias reuniones la SEP tomó la decisión de convertir a dichos planteles en
Normales Rurales. Fue la última ocasión en que el número de nuestras Normales se incrementó, ya que
10 años después se clausuraron 14, entre ellas mi querida SALAICES. Los estudiantes se integraron
positivamente a la FECSM.
Recuerdo que primero intervino la FECSM porque era su obligación aprovechar la oportunidad
de que creciese el número de Escuelas Normales Rurales, nos entrevistamos con el Secretario
de Educación varias veces y encontramos coincidencias con el SECRETARIO JAIME TORRES
BODET quien es tal vez el mejor Secretario de Educación de la Historia. En las reuniones que la
FECSM tuvimos con el Secretario de Educación solo estuvimos los dirigentes de la FECSM y los
dirigentes de la Confederación de Jóvenes Mexicanos, el orgullosamente Chihuahuense Manuel
Ortega Cervantes Presidente y el aguerrido Guerrerense Blas Vergara Aguilar Secretario General.
Desconozco si la Federación Nacional de Escuelas de Práctica (FNEPA) tuvo por su cuenta
reuniones con el Secretario. Lo cierto es que en el Congreso Nacional de la CJM de 1960 que yo y
Carlos Vela presidimos, no participó ahí la FNEPA.
Recuerdo algunas Escuelas de Práctica Agropecuarias eran: Aguilera Dgo., El Quinto Son.,
Santa Teresa Coah., Roque Gto., La Huerta Mich., Xocoyucan Tlax., Champusco Pue. Reyes
Mantecón Oax. Mactumactzá, Chis.
Lo importante es destacar que la FECSM de mis tiempos logró el incremento de 11 nuevas
NORMALES RURALES y 10 años después la FECSM que no se ocupó de defender de manera
inteligente y sería a las NORMALES RURALES PERDIERON 11, porque sus prioridades eran
otras.
Me causó un poco de riza el comentario que hace el Maestro de los juegos nacionales de
San Diego Tekax, porque efectivamente fueron muy caóticos, principiándolo por el traslado. El
ferrocarril del Sureste era de vía angosta y hacía un viaje por semana, solo tenía espacio para la
mitad de las delegaciones.
Me expresé con sorpresa que los de Aguilera llegaron una semana antes. A mí me tocó por parte
de la FECSM acompañar a esta primera delegación, fue una peripecia de incidentes, principiando
porque en el tren no había comida, de tal suerte que los lugareños hicieron su agosto vendiendo
tamales de cazón, solo que no había para todos y para colmo le avisaron a los poblados continuos
que en el trenecito iba un montón de jóvenes hambrientos y se prepararan para el negocio, recuerdo
que en la estación de Tepepan, la tierra del Presidente los tamales no tenían carne de cañón, ni
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Testimonio normalista
Faro normalista
chile, eran de pura masa de maíz bien caliente en hojas de plátano; Campeche en donde nos
aprovisionamos de latas de sardinas y galletas saladas.
Caótico pero divertido, recuerdo que las compañeras de Normal Rural Flores Magón, estaban
alarmadas porque su maestra había desaparecido, después de buscarla por todo el tren, la
encontramos trepada en todas las maletas diciendo me muero de hambre, sed y calor echándose
aire con sus enaguas. Llegando a Mérida a las mujeres y los hombres nos hospedaron en un
internado de niños, con camas pequeñas durante una semana esperando a la otra mitad de
las delegaciones. Los cuatro compañeros de la FECSM rentamos un cuarto con dos camas y
nos turnábamos un día dos dormíamos en el catre con una sábana y dos en los colchones que
desmontábamos de los catres, luego descubrimos que el administrador rentaba a peso unas
hamacas de lona y nos rentábamos nuestra hamaca. Amarrado los extremos a las columnas del
pasillo. Como nos encontrábamos a varios compañeros les dijimos el cuento de las hamacas y
algunos abandonaron el internado.
En cuanto a los eventos deportivos y culturales dejaron mucho que desear. Malas instalaciones
deportivas, como que el director hizo su agosto y no invirtió correctamente los recursos que le
asignaron.
Roque, Gto.
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Evocaciones
Faro normalista
UNO DE TANTOS…
Florencio Lugo
e llevó algún tiempo decidirme a fue para mí de un valor incalculable; sin embargo,
escribir ésta parte de mi existencia, en el trato y la convivencia con ellos había cierta
que anteriormente no había diferencia de clase social que yo entendía y
tocado y que ahora quiero hacerlo, aceptaba.
no como una queja, sino con la Tiempo después, el Dr. Trejo, me puso en
intención de hacer un llamado a las
contacto con familiares de Genaro Vázquez Rojas
nuevas generaciones para que no y con gente de la Asociación Cívica Nacional
caigan en los mismos errores y dirijan su energía a Revolucionaria con quienes participé en la lucha
la ejecución de acciones que los lleven al camino legal que se llevaba a cabo en el estado de Guerrero;
que habrá de conducirlos a un mundo donde la en un enfrentamiento a balazos con las fuerzas
gente viva en armonía, sin desigualdad social, públicas, resulté herido y fuimos encarcelados
sin injusticias, sin hambre, que la naturaleza sea dos compañeros y yo. Cuando salí de la cárcel me
respetada y se permita su evolución normal para trasladé a la Ciudad de México. Tiempo después,
que la vida, en general, sea mejor para todos los el Dr. Trejo, me puso en contacto con un comando
seres que habitamos el planeta. armado (Comando de Acción y Enlace de la ACNR);
En el Grupo Popular Guerrillero, mis una de las condiciones para ingresar al grupo era
compañeros: Arturo Gámiz, Salomón Gaytán, que tenía que someterme a la prueba del suero de
Antonio Scobell, Juan Antonio Gaytán; también la verdad (pentotal). El hecho de ser ex-militante
Margarito González, Ramón Mendoza y Lupito del GPG y haber participado en el Asalto al Cuartel
Scobell quienes esporádicamente hacían contacto de Cd. Madera no me avaló para ser aceptado
con nosotros, siempre nos tratamos de igual a sin condiciones, pero, como dice el dicho “el que
igual, es decir, no había diferencias y mucho nada debe, nada teme” y acepté someterme a la
menos actitudes discriminatorias; imperaba prueba. Se me aplicó el pentotal y fui sometido
el compañerismo independientemente de ser a un interrogatorio al cual respondí sin problema
profesor, estudiante, obrero o campesino. alguno. Días después, los compañeros del grupo
me citaron en algún lugar de la ciudad, donde
Después del asalto al cuartel de ciudad Madera,
se encontraban reunidos esperando mi llegada.
conocí a muchos compañeros revolucionarios,
Me informaron que se iba a llevar a cabo una
plenamente convencidos de la necesidad de la
expropiación y en un automóvil partimos hacia el
lucha, pero entre ellos también conocí a algunos
edificio (PRI del Distrito Federal) donde se llevaría
pequeño-burgueses que se decían revolucionarios
a cabo la acción revolucionaria. Ellos ya traían su
o militantes de algún grupo, que se creían pequeño-
plan de acción el cual yo desconocía. Uno de los
burgueses. En este contexto, experimenté
integrantes del grupo, apodado “José”, entró al
actitudes negativas que afectaban la convivencia
local, esperó a que saliera todo el personal que
entre militantes y perjudicaban, en gran medida, el
laboraba en el edificio; abrió una puerta para que
avance del movimiento revolucionario.
entrara el resto de los integrantes del comando.
Salí del estado de Chihuahua y llegué a la Entramos al estacionamiento. A mí me ordenaron
capital del país. Me puse en contacto con activistas que siguiera a Miguel Ángel, quien se percató
como el Ing. Álvarez, el Dr. Villegas y el Dr. Trejo, de que el velador del edificio había detenido a
quienes me brindaron protección y apoyo, lo cual “José”. Vámonos –me dijo- y a balazos abrimos el
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Evocaciones
Faro normalista
candado de un portón para escapar más rápido. del avión, en Guadalajara (1973), donde se
En el transcurso de la noche detuvieron a los otros encontraba el cónsul de E. U. George Terrance
integrantes del comando. A las seis de la mañana, Leonhardy, en el cual se negoció la liberación de
agentes policiacos me detuvieron en mi domicilio; un grupo importante de presos políticos, por lo
(“Caímos como chamacos queriendo hacer que el gobierno recibió una lista con los nombres
travesuras”). Después de varios días de torturas de 30 guerrilleros, presos en diferentes cárceles
e interrogatorios, fui llevado a un lugar donde se del país. Días después, cuando los guerrilleros
encontraban los otros integrantes del comando liberados ya se encontraban en Cuba, Alejandro
armado. Fuimos llevados a dactiloscopia, ante López Murillo, me dijo que yo estaba en la lista
ministerio público, presentados a la prensa y de para ser liberado pero que me eliminaron para,
allí a Lecumberri. en mi lugar, pedir la excarcelación de otro preso
político. No me dio más explicación.
Cuando llegamos a la crujía “O” en Lecumberri,
nos recibieron los compañeros del Movimiento de El comité Primeros Vientos, organizó la
Acción Revolucionaria. Tiempo después llagarían presentación del libro “El Guerrillero”. El evento
a la crujía “O” integrantes de la organización se llevaría a cabo en la Escuela Normal Rural de
Comandos Armados del Pueblo y compañeros Saucillo, Chih. En esta ocasión, se contaría con
de otras organizaciones armadas. La convivencia la presencia de Eusebio Vázquez Navarro. El día
con los compañeros era aceptable, pero mucho 21 de septiembre del 2017, nos trasladamos a la
mejor con Francisco Javier Pizarro, Juan Chávez Escuela Normal: compañeros del Comité, Nacho
de la Rocha y Pedro Marín Zárate, quienes tenían Cárdenas y yo. Llegamos a las instalaciones de
interés en saber más a detalle, los sucesos del 23 la escuela, nos recibió la directora del plantel,
de Septiembre de 1965; sin embargo, no faltaron luego nos invitó a desayunar. En la masa nos
léperos (Alberto Ulloa y otros) que se dedicaban a encontrábamos Lalo Gómez y su esposa, Saúl
vigilarme para criticar mis acciones y también mis Ornelas, un joven, la directora, otra dama,
errores. Nacho Cárdenas y yo. Desayunábamos cuando
A la crujía “O” nos llegaba información de llegó Eusebio Vásquez, su hijo y otras personas.
acciones revolucionarias importantes como el Eusebio saludó de mano a Nacho Cárdenas.
secuestro del avión de Mexicana de Aviación Quise saludarlo y me dejó con la mano
(1972) ejecutado en la ciudad de Monterrey en el extendida. “No acostumbro –dijo- saludar a las
cual se negoció la liberación de 7 guerrilleros(as), personas cuando están comiendo”. Se llevó a
presos por llevar a cabo diversas acciones cabo la presentación con el auditorio repleto de
armadas. También supimos del secuestro estudiantes, maestros y empleados del plantel.
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Rincón poético
Faro normalista
ILUSIÓN
José Onésimo Valdiviezo Rodríguez.
Esc. Normal Rural “Abraham González” Salaices, Chih.
Generación 1963-1969
on cuanta ilusión esperaba lleno de ansiedad el día de tu llegada, pero por esos
caprichos del destino no logré cruzarme en tu camino pues cuando iba a buscarte
Yo nunca te encontraba y cuando era yo quien me ausentaba allí estabas tú para
admirarte.
Pero estaba escrito en el libro de la vida que no era justo verme en esos ojos, en
esos ojos que lo dicen todo y tuve que resignarme a tu partida.
Cuando llegó el momento irremediable en que tú ya te marchabas quise con el alma hablarte, pero
en mi pecho las palabras se me ahogaban.
Y tú, sin saberlo por algún capricho de la vida fuí testigo mudo de la hora en que te ibas.
Con mis ojos quise hablarte al ver que mis labios se negaron, pero mis ojos se inundaron con
lágrimas quemantes.
Entonces quise acelerar mis pasos y aún, allá a lo lejos me hice la ilusión de que volteabas y que
tú, con el alma me esperabas.
Verano del 89
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Rincón poético
Faro normalista
Tercera Persona
Poesía
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Rincón poético
Faro normalista
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Memoria fotográfica
Faro normalista
Primera Banda de Guerra que tuvo la escuela Normal Rural San Diego Tekax, Yuc., 1964
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Memoria fotográfica
Faro normalista
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Memoria fotográfica
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Memoria fotográfica
Faro normalista
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Rincón poético
Faro normalista
A LA UNIDAD
Autor: Fidencio Romero.
De Yucatán a Sonora,
llegaron a Aguascalientes
todos guiados por la aurora
de nombrar los dirigentes.
Joaquín Puentes y Venancio,
Dirigentes Nacionales
meditaban en silencio,
la unidad de las Normales.
En Cañada, Aguascalientes,
se discutió de verdad,
muchos pelaban los dientes,
pero al fin salió Unidad.
La Escuela de Zaragoza,
felicita a las Normales
y manifiesta orgullosa
que se acabaron los males.
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Credencial de la FECSM emitida en 1954