¿Qué es Praxis?

La praxis implica la aplicación concreta de teorías, conocimientos o principios en la

acción o la práctica diaria.
En el contexto de la teología pastoral, la praxis se refiere a la aplicación concreta de los
principios teológicos en la vida y el ministerio pastoral. La teología pastoral es una
disciplina que se ocupa de la aplicación de la teología en el contexto de la vida y las
necesidades de las comunidades religiosas.
Las acciones pastorales
Las acciones pastorales se refieren a las actividades, prácticas ministeriales realizadas
por líderes religiosos, especialmente aquellos que desempeñan el rol de pastor en una
comunidad de fe. Estas acciones están destinadas a guiar, cuidar y nutrir
espiritualmente a los miembros de una congregación.
En el contexto cristiano, Hechos 2:42 es un versículo bíblico que a menudo se asocia
con las acciones pastorales y la vida comunitaria de la iglesia primitiva. El versículo es
un pasaje que describe las primeras actividades de la comunidad cristiana después del
día de Pentecostés:
Hechos 2:42 (Nueva Versión Internacional):
"Se mantenían firmes en la enseñanza de los apóstoles, en la comunión, en el partir
del pan y en la oración."
Este versículo destaca cuatro componentes esenciales de la vida de la iglesia primitiva,
que a menudo se consideran como las acciones pastorales fundamentales:
1. Enseñanza de los Apóstoles: La guía y la enseñanza de las Escrituras eran
centrales en la vida de la comunidad. Los líderes religiosos desempeñaban un
papel crucial al guiar a los creyentes en la comprensión de la fe.
2. Comunión: La comunidad cristiana primitiva valoraba la comunión, la cual
implica la participación activa y la interacción entre los miembros.
3. Partir del Pan: Esta expresión puede referirse tanto a la celebración de la Cena
del Señor como a la participación en comidas compartidas. Ambas prácticas
simbolizan la unidad y la conexión entre los creyentes.
4. Oración: Los creyentes se reunían para orar, buscando la guía de Dios,
expresando gratitud y presentando sus necesidades.
Estas acciones pastorales, basadas en Hechos 2:42, han servido como modelo para
muchas comunidades cristianas a lo largo de la historia.
La división tripartita de la acción pastoral en las funciones de profeta,
sacerdote y rey es un marco conceptual que ha sido utilizado para describir los
diferentes roles y responsabilidades de los líderes religiosos en el contexto de la
iglesia.
Cada una de estas funciones representa aspectos distintos de la labor pastoral y
ministerial. Aunque estas categorías a menudo se asocian con roles específicos en el
Antiguo Testamento, también tienen aplicaciones en el cristianismo contemporáneo.
1. Profeta:
Características: El profeta tiene la responsabilidad de proclamar la Palabra de Dios,
comunicar revelaciones divinas y advertir sobre el pecado. Los profetas a menudo son
vistos como mensajeros de Dios que traen orientación espiritual y moral a la
comunidad.
Función Pastoral: En el contexto pastoral, aquellos que desempeñan el papel de
profetas pueden tener un énfasis en la enseñanza, la predicación y la orientación
espiritual. Su enfoque puede estar en interpretar y comunicar la Palabra de Dios de
manera clara y relevante para la comunidad.
2. Sacerdote:
Características: El sacerdote actúa como mediador entre Dios y la comunidad. Tiene la
responsabilidad de interceder por el pueblo. Los sacerdotes a menudo están asociados
con la función de cuidar de la adoración y el bienestar espiritual de la comunidad.
Función Pastoral: En el contexto pastoral, aquellos que desempeñan el papel de
sacerdotes pueden centrarse en el cuidado pastoral, la intercesión por las necesidades
de los miembros de la congregación y la facilitación de experiencias de adoración.
3. Rey:
Características: El rey representa la autoridad y el liderazgo en la comunidad. Su
función incluye la toma de decisiones, la administración de justicia y la dirección del
pueblo.
Función Pastoral: En el contexto pastoral, aquellos que desempeñan el papel de reyes
pueden estar involucrados en liderazgo y administración dentro de la iglesia. Esto
podría incluir la toma de decisiones estratégicas, la supervisión de programas y la
dirección general de la comunidad.
En el cristianismo, la figura de Jesucristo es a menudo vista como cumpliendo
perfectamente estas tres funciones: Profeta, Sacerdote y Rey. Esta división brinda un
marco conceptual útil para entender la diversidad de funciones y responsabilidades en
el ministerio pastoral.
La estructuración actual de la acción pastoral a menudo se aborda desde la
perspectiva de cuatro dimensiones fundamentales que reflejan aspectos claves de la
vida y misión de la iglesia.

• Martyria (Testimonio):
Martyria se refiere al testimonio o la proclamación de la fe cristiana. Implica la tarea de
compartir el mensaje del evangelio con el mundo, tanto a través de la palabra como de
la acción. Los cristianos son llamados a ser testigos de su fe en Jesucristo, tanto en sus
palabras como en sus vidas.
Esto impulsa a los líderes pastorales a enfocarse en la predicación, la enseñanza y la
evangelización. Implica la comunicación clara y efectiva de la verdad cristiana y la
capacitación de la comunidad para ser testigo en su entorno.

• Leitourgía (Culto):
Se refiere al servicio o al culto público. Incluye las prácticas litúrgicas y rituales que la
comunidad realiza en adoración a Dios. Esto puede abarcar desde la celebración de los
sacramentos hasta la participación en la oración comunitaria.
La dimensión de Leitourgía impulsa a los líderes pastorales a dirigir y organizar las
prácticas litúrgicas de la iglesia. Incluye la planificación de los servicios de adoración, la
administración de los sacramentos y la facilitación de experiencias significativas de
encuentro con Dios.

• Koinonía (Comunión):
Koinonía se refiere a la comunión o la participación en comunidad. Implica la conexión
y la unidad entre los miembros de la iglesia. Abarca la participación en la vida espiritual
y el compañerismo cristiano.
La dimensión de Koinonía impulsa a los líderes pastorales a fomentar la comunidad y el
compañerismo dentro de la iglesia. Esto incluye el cuidado pastoral, la construcción de
relaciones sólidas entre los miembros y la promoción de la unidad.

• Diakonía (Servicio):
Diakonía se refiere al servicio y la acción social. Implica la participación activa en el
servicio a los demás, especialmente a los necesitados y marginados. Los cristianos son
llamados a seguir el ejemplo de Jesucristo, quien vino a servir y no a ser servido.
La Diakonía impulsa a los líderes pastorales a liderar la iglesia en el servicio práctico y
en la búsqueda de la justicia social. Incluye la participación en obras benéficas, el
apoyo a la comunidad y la promoción de la justicia y la compasión.
Estas cuatro dimensiones proporcionan un marco integral para la acción pastoral en la
iglesia contemporánea, abarcando aspectos esenciales de la vida y la misión cristiana.