campo de batalla, bajo un cielo gris,

donde el estruendo de la guerra se hacía oír,

los soldados valientes se preparaban para marchar,

con el peso de la batalla en su mirar.

La retirada se avecinaba, un momento de decisión,

un paso atrás para buscar una nueva visión,

las batallas perdidas, los sueños desvanecidos,

pero la esperanza no se desvanecía, seguía viva en los corazones heridos.

El estandarte en alto, la bandera en su sitio,

los soldados marchaban con paso decidido,

enfrentando el desafío de dejar atrás el campo de batalla,

y encontrar un nuevo camino en esta retirada.

Las heridas aún frescas, el dolor palpable,

pero la determinación ardía en cada soldado impecable,

no era una derrota, sino un repliegue estratégico,

para ganar fuerzas y regresar con ímpetu mítico.

Los rostros demacrados, cansados y marcados,

mostraban la dureza de los días pasados,

pero en sus ojos se veía la fuerza resiliente,

la voluntad de seguir adelante, aunque el camino sea inclemente.

La retirada no era un acto de cobardía,

sino una táctica de supervivencia y valentía,

los soldados sabían que para luchar otro día,

era necesario reagruparse y encontrar una nueva vía.

En cada paso atrás, dejaban atrás los horrores,

las pérdidas, las lágrimas y los temores,

con el corazón lleno de esperanza y coraje,

se alejaban del pasado, hacia un nuevo viaje.

El sol brillaba en el horizonte, iluminando su sendero,

recordándoles que siempre hay un nuevo amanecer,

la retirada era una oportunidad de renacer,

de encontrar fortaleza en la adversidad y florecer.

Las historias de valor se tejían en cada retirada,

la camaradería y el apoyo nunca faltaban en la jornada,

los soldados se sostenían mutuamente con fuerza,

unidos en la batalla y en la retirada, sin tregua.

No importaba cuántas veces tuvieran que retroceder,

siempre se levantaban y volvían a crecer,

en cada retirada encontraban sabiduría y humildad,

aprendiendo de los errores y buscando la unidad.

La retirada no era el final, sino un nuevo comienzo,

una oportunidad para sanar y fortalecerse en lo interno,

los soldados se alejaban del campo de batalla con honor,

preparados para enfrentar cualquier desafío con fervor.

Y así, en la retirada, encontraron su resiliencia,

encontraron la calma y la paz en su conciencia,

se prepararon para enfrentar una nueva realidad,

con la experiencia de la retirada como guía y verdad.

En cada paso atrás, encontraron su fuerza interior,

se levantaron con valentía, con determinación y honor,

la retirada los transformó en guerreros sabios y serenos,

listos para enfrentar cualquier reto, como un ejército pleno.

Así fue la retirada, un capítulo en la historia de guerra,

donde los soldados encontraron su grandeza y su esencia sincera,

un momento de reflexión y de resurgimiento,

donde el coraje y la esperanza fueron el fundamento.

Y así, la retirada se convirtió en un símbolo de perseverancia,

en una lección de vida y de lucha constante,

donde los soldados encontraron su propia elegancia,

enfrentando la adversidad con valentía y semblante.

En cada retirada, se escribió una historia de valor,

donde los soldados encontraron su paz interior,

la retirada no fue el fin, sino el inicio de un nuevo camino,

donde la fortaleza y el coraje siempre serán el destino.

Y así, en cada retirada, se forjó un legado,

de soldados valientes y de corazones templados,

la retirada fue el puente hacia un nuevo horizonte,

donde la victoria finalmente brilló en su horizonte.

En la retirada, encontraron la fuerza para avanzar,

la sabiduría para aprender y la valentía para luchar,

y aunque la guerra puede haber sido dura y cruda,

la retirada les enseñó a encontrar la paz y la fortaleza en su alma desnuda.

Así, en el poema de la retirada, se rinde homenaje,

a aquellos que enfrentaron la guerra con coraje,

la retirada fue solo un capítulo en su historia,

donde encontraron la grandeza y la gloria.

Y así, en cada verso, se honra su sacrificio,

su valentía y su inquebrantable compromiso,

la retirada no fue el final, sino el comienzo,

de una historia de valor y esperanza, que siempre vivirá en nuestro recuerdo intenso.