Quién Qué Tiempo Tiempo

parcial acumulado
Narrador Entre campos de flores y 18” 18”
árboles frutales, se encuentra
un mundo mágico y laborioso,
habitado por millones de
criaturas diminutas pero
poderosas: las abejas. Y en el
corazón de este ecosistema, se
erige un hombre que se ha
convertido en su fiel guardián:
el apicultor.

Sonidos Sonido tipo campo, abejas de 18” 18”

fondo.
Narrador 4:30 de la tarde. Es un día 17” 35”
soleado, hay risas, anécdotas e
historias que cuenta José
Fernando Salazar Aguilar, un
hombre de estatura media,
contextura gruesa, ojos
expresivos y una sonrisa que
lo caracteriza. Se dispone a
hablar sobre lo que para él es
su estilo de vida y una pasión.
Sonido Risas, ambiente fondo. 5” 35”
Personaje “Llevo por ahí unos 30-32 años 22” 57”
(José trabajando con abejas y la
Fernando) razón es porque mi mamá,
pues toda la vida. Lleva más de
quizás 45 años trabajando con
abejas. Entonces digamos que
ahí hay un tema de herencia
por este tema de la apicultura.
Mis padres son veterinarios
zootecnistas los dos, entonces
por ahí viene, digamos, la vena
de trabajar con abejas”.

Narrador José Fernando es el único 35” 1’32”

varón de tres hermanas,
también el único que decidió
optar por el mismo campo
profesional que sus padres,
 aunque laboralmente los seis
intervienen en su empresa y
negocios relacionados al tema.
Hoy tiene sesión de apiterapia
que consiste en el tratamiento
de pacientes con diferentes
tipos de enfermedades como
rinitis, sinusitis, artrosis,
esclerosis, entre otras.
Se prepara para recibir a su
paciente y organiza, mientas
tanto, su tubo de aluminio
donde trae las abejas que
recogió del apiario para
inyectarle el veneno a su
paciente. Es el momento del
“remedio” como él le llama.

Sonido Abeja en tubo de aluminio. 5” 1’32”

Personaje “Con cada paciente yo trabajo 25” 1’57”
(José días intercalados. Entonces
Fernando) lunes, miércoles y viernes o
martes, jueves y sábados.
Se empieza con poca cantidad
de abejas y se va subiendo el
número según la persona pues
aguante y que se avance con el
tratamiento.
Se hace una prueba de alergia,
escoger una abeja y ponerla
aquí, en el antebrazo. Se
evalúa cada 5 minutos hasta
por 30 minutos si hay un signo
evidente de alergia”.

Sonido Sonido campo y abejas. 25” 1’57”

Narrador José Fernando habla con una 29” 2’26”
propiedad convincente.
Mientras espera su paciente
comenta que las abejas son sus
compañeras de vida, aunque
 sus inicios con ellas no fueron
agradables.
De niño las odiaba, pero su
padre siempre lo obligó a
acompañar a su mamá a
trabajar las abejas. Asistía,
para ese entonces, lleno de
temor y mal genio. Sufrió
picaduras muchas veces, pero
la paciencia de su madre por
querer enseñarle fueron el
aliciente y la motivación en el
proceso.

Sonido Enjambre de abejas. 5” 2’26”

Sonido Música. 25” 2’26”
Personaje “Dependiendo de las 10” 2’36”
(José enfermedades, si son
Fernando) articulares, pues las abejas se
colocan en las articulaciones o
si es sinusitis o migraña, pues
aquí en la frente en los senos
paranasales”.

Sonido Abrir puerta. 3” 2’36”

Narrador Su paciente ha llegado. 10” 2’46”

La apiterapia, un arte
milenario que emplea los
productos de las abejas como
herramienta terapéutica, se
prepara para desplegar sus
beneficios una vez más.
Personaje "Antes de comenzar revisamos 9” 2’55”
cuidadosamente el historial
médico de la paciente y
obtenemos consentimiento
informado para el
tratamiento. Todo está en
orden."
Sonido Pasar hojas. 3” 2’55”

Sonido Firmar. 3” 2’55”

Narrador Con el protocolo en su lugar, 9” 3’04”
José Fernando se prepara para
aplicar el veneno, por medio
de sus abejas. Viste bata
blanca y desinfecta
meticulosamente sus manos.
Sonido Aerosol desinfectante. 3” 3’04”
Sonido Abejas en tubo. 5” 3’04”
Personaje "Previamente con la paciente 15” 3’19”
hemos realizado un diagnóstico,
de la enfermedad, soportado por
una historia clínica de la entidad
prestadora de salud de la paciente
donde fue diagnosticada artritis
reumatoidea crónica bastante
avanzada."
Narrador De fondo se escucha el sonido 13” 3’32”
de las abejas que José
Fernando ha traído. A su vez
se puede notar un aire de
tranquilidad en el rostro de la
paciente lo que da la
sensación de que no le asusta
el procedimiento que está
próxima a recibir.
Paciente "Aunque ha sido un proceso 30” 4’02”
transformador, debo admitir
que al principio fue bastante
doloroso. Sentir las picaduras
de las abejas no fue fácil, y
hubo momentos en los que
me costaba soportarlo. Sin
embargo, con el tiempo, he
aprendido a tolerar el dolor y
a entender que forma parte
del proceso de sanación.
Además, el alivio y los
beneficios que experimento
después de cada sesión hacen
que el dolor valga la pena. Es
un recordatorio constante de
mi dedicación hacia mi salud y
bienestar".
Personaje “He traído previamente también 33” 4’35”
las abejas en unos frascos.
 Nosotros los llamamos rulos. Son
unos Frascos de plástico
utilizados para apicultura y en
estos frascos, pues tenemos la
ventaja que las abejas pueden
respirar y nos duran más o menos
unos 3 a 5 días (...)
Hoy vamos a trabajar los dedos
de las manos, de ambas manos.
Nos vamos a enfocar en las
falanges específicamente dónde
están las articulaciones de los
dedos y también en las muñecas.
Como ya hemos tenido varias
sesiones, ella, digamos soporta un
número aproximado de 10 a 15
abejas por sesión”.
Sonido Abejas 5” 4’35”
Sonido Sonido de paciente quejándose. 4” 4’35”
Narrador José Fernando espera que las 16” 4’51”
abejas depositen el veneno y
que haga efecto en su
paciente, para dar por
terminada la sesión de hoy.
Mientras tanto, acomoda sus
utensilios, guarda en un bolso
azul oscuro, el tubo donde
traía las abejas, la pinza y unos
guantes de latex azules.
Sonido Sonido utensilios. 6” 4’51”
Personaje “Ella, de manera complementaria, 29” 5’20”
consume los productos de las
abejas en una mezcla que yo le
preparo. No es otra cosa que miel.
Son 500 g de miel, 160 g de
polen, un extracto alcohólico de
propóleo y tres jeringas de jalea
real. Cada jeringa tiene 1 g de
este producto.
Esto se mezcla en un frasco de
vidrio de boca ancha con tapa
hermética y ella consume todos
los días una cucharada. Entonces
ahí ya estamos realizando un
tratamiento completo de
apiterapia”.
Narrador La apiterapia es todo un 10” 5’30”
proceso, por lo mismo
 representa cambios en la
salud, que es el objetivo, pero
también acarrea efectos
secundarios. Cada paciente los
trata de diferente manera.
Paciente "Para ayudar a calmar la 27” 5’57”
hinchazón y otros efectos
secundarios después de las
sesiones de apiterapia, suelo
aplicar compresas frías en las
áreas afectadas. Esto ayuda a
reducir la inflamación y aliviar
la sensación de picazón.
Además, utilizo cremas o
lociones calmantes con
ingredientes naturales como
aloe vera o caléndula para
ayudar a hidratar y calmar la
piel. También evito rascar las
áreas afectadas para prevenir
infecciones y permitir que la
piel se recupere más
rápidamente”.
Narrador José Fernando saca, del bolsillo 30” 6’27”
pequeño delantero de su
bolso, una tarjeta que tiene
letras grandes y dice “Apícola
Oromiel” se la entrega a su
paciente y su vez le dice
“Terminamos por hoy”.
Él es el propietario de una
empresa dedicada a la
elaboración de productos a
base de miel. Apícola Oromiel
es el nombre que le asignó a su
negocio.
Tiene su propio apiario
ubicado a una hora de
Manizales, vía la cabaña en
Morro caliente, allí ocurre la
magia de cosecha para su
empresa.
Sonido Sonido campo, naturaleza, 20” 6’47”
abejas.
Personaje “Generalmente dedico los 23” 7’10”
(José domingos para visitar las
Fernando) abejas por dos razones: una,
porque en la finca donde las
tengo que no es de mi
propiedad, pues hay
trabajadores de lunes a
sábado. Las visitas son los
domingos y segundo, pues
porque entre semana trabajo,
entonces no me queda,
digamos, como la
disponibilidad de tiempo.
Aquí, en el tema de
transformación, dedico las
noches o los fines de semana
para empacar el producto.
Sonido Música. 15” 7’10”
Sonido Abejas dentro de colmena. 10” 7’10”
Narrador En las ondulantes colinas del 19” 7’29”
campo, donde la tierra se eleva
y se inclina como las olas del
mar, se encuentra el apiario de
Don José. Pero llegar hasta
aquí no es tarea fácil. El carro
se detiene en el límite de lo
posible, dejando atrás la
comodidad del asfalto para
enfrentarse al desafío de la
topografía.

Personaje “Entonces llegamos al apiario, 20” 7’49”

(José armamos la carpa ahí ponemos
Fernando) la centrífuga ponemos el filtro
y ponemos el cuñete.
Nos ponemos los trajes,
prendemos el ahumador. El
ahumador es un implemento
que produce humo y el humo
lo que hace es que te
 tranquiliza las abejas, si no
tuviéramos ahumador, sería
casi imposible trabajarlas
porque empezarían a atacar
mucho.

Sonido Sonido humo de ahumador. 7” 7’49”

Narrador Con meticulosidad, José 15” 8’04”
Fernando, selecciona las
colmenas que rebosan de miel
listas para ser cosechadas.
Marco tras marco, retira las
piezas llenas de néctar dorado
cuidadosamente limpiadas
para evitar la presencia de
abejas.
Sonido Sonido marcos. 5” 8’04”
Personaje “Generalmente cuando 19” 8’23”
completamos un cajón con
nueve marcos que puede pesar
20 o 30 kg, lo cargamos entre
las dos personas y lo metemos
en la carpa. Vamos y
cosechamos el resto de las
colmenas, es decir, que esa
actividad de sacar marcos,
meterlos en un cajón sin
abejas y llevarlo hasta la carpa,
se hace por cada colmena que
se coseche”.
Narrador La especie que más se cultiva y 23” 8’46”
sobre la cual se han
establecido principalmente los
lineamientos desde el
Ministerio de Agricultura y
Desarrollo rural y que es sujeta
a producción primaria es la
abeja Apis mellifera. Aunque
se ha incrementado la zoocría
de abejas sin aguijón,
conocidas como melliponas,
las que por ser abejas nativas
se encuentran bajo la
 autorización y control por
parte de la Autoridad
ambiental. (fuente
documental)

Sonido Abejas. 10” 8’46”

Personaje “Cuando ya hemos cosechado 30” 9’16”
(José todo, la miel ya está en los
Fernando) cuñetes bien tapada y digo
bien tapada porque ha
ocurrido que por algún
accidente el cuñete se volteó y
si la no está bien tapado se
regó la miel, entonces se
pierde todo un trabajo y eso
pues no es muy, muy
agradable.
Entonces hay que verificar que
la tapa quede bien asentada en
el cuñete. Cuando ya
terminamos de centrifugar le
devolvemos a las colmenas los
marcos que le sacamos ya
vacíos. Ya después
empezamos a tapar las
colmenas y digamos que ahí
termina la labor con las
colmenas”.
Narrador llevando consigo el fruto de su 45” 10’01”
labor así concluye otro día,
cuando es de campo, en la vida
de un apicultor, un guardián de
las abejas y sus maravillosas
creaciones. En el vaivén de la
naturaleza, su labor persiste.
Mientras tanto, José Fernando
cuenta, con jocosidad, que
disfruta del proceso y que
además de ello agradece a sus
padres por enseñarle, aunque
fuera a las malas, este gran
 arte.
Habla de ellos con ímpetu y
orgullo. Su madre, una señora
con una avanzada edad, aun se
dedica a esa labor. Ella con sus
1,57 m de estatura no le ha
quedado grande la
responsabilidad de conducir un
proyecto de vida. Su padre, un
hombre alto, delgado, de
barba y con una mirada que
produce chispa como dice él,
también se dedica a los
negocios y la vida entre abejas
y miel.

Sonido Música final