Tendencias en Responsabilidad Social Corporativa para 2024

Zuleima Martínez Padron.

Entrevista Radio TV Emprendedores México.

Inicio definiendo que es Responsabilidad Social Corporativa(RSC).

La responsabilidad social corporativa (RSC) es el compromiso voluntario de las empresas de
contribuir al desarrollo sostenible, es decir, de actuar de manera ética y transparente en sus
relaciones con sus empleados, clientes, proveedores, comunidades locales y el medio
ambiente. La RSC implica que las empresas no sólo deben preocuparse por generar
beneficios económicos, sino también por tener un impacto positivo en la sociedad y el
entorno en el que operan. Ejemplos de acciones de responsabilidad social corporativa
incluyen la implementación de programas de igualdad de género, la reducción del impacto
ambiental de las operaciones de la empresa, y la participación en proyectos de desarrollo
comunitario.
¿Ahora bien, cuales son para mi entender las tendencias para este 2024?
1. Inclusión del talento desde la diversidad
Al hablar de diversidad en las empresas, siempre destaca la necesidad de que haya un
equilibrio y, por supuesto, ausencia de prácticas discriminatorias que acaben perjudicando
a las mujeres a la hora de incorporarse a la empresa y desarrollarse profesionalmente dentro
de ella.
No obstante, si hablamos de diversidad en el entorno laboral, existen otros muchos ejes a
través de los cuales estructurar una cultura empresarial verdaderamente orientada al
fomento de la diversidad, como valor a defender, y como herramienta de trabajo a utilizar.
Entre ellas, se encuentran la edad, la orientación sexual, la etnia o diferentes trayectorias
formativas y profesionales, las cuales pueden ser interpretadas como foco de discriminación
o bien como fuente de inclusión y diversidad dentro de las empresas que siguen las
tendencias en responsabilidad social corporativa.
Por esta razón, una de las tendencias más importantes a tener en cuenta será el aumento
de la conversación sobre cómo evitar que los sesgos cognitivos afecten los procesos
empresariales, para garantizar espacios de trabajo más inclusivos.
2. Promoción del bienestar psicológico
Aunque siempre queda mucho por consolidar, hace décadas que la necesidad de proteger
la salud física de las personas ya no se discute. Ahora, más que nunca, es la hora de que las
empresas den el salto definitivo en cuanto al establecimiento de estructuras corporativas
de fomento del bienestar psicológico de sus empleados, a través de planes especialmente
diseñados para ello. Por ejemplo, Implementación de programas de bienestar mental.
3. Sostenibilidad medioambiental
El mundo laboral en el que nos movemos tendrá que ser respetuoso con la naturaleza en
todos los niveles de producción o, sencillamente, no será.
Por tanto, las empresas tienen una obligación ineludible: tener en cuenta el impacto que su
trabajo genera en el medio ambiente y tratar de minimizarlo al máximo, educando a sus
equipos en buenas prácticas de reducción de recursos y uso responsable de materiales y
fuentes de energía. De este modo generarán un entorno laboral más amable, ahorrarán una
enorme cantidad de dinero y, por supuesto, contribuirán al cuidado del planeta.
4. Humanizar a las Empresas
Humanizar una empresa significa enfocarse en las personas que trabajan en ella, así como
en sus clientes y comunidades a las que sirve. Se trata de adoptar una visión centrada en el
ser humano en todas las facetas de la organización, priorizando el bienestar y la satisfacción
de las personas por encima de otros intereses.
Humanizar una empresa implica tratar a los empleados con respeto, empatía y dignidad,
fomentar un ambiente de trabajo inclusivo y colaborativo, y promover el desarrollo personal
y profesional de los trabajadores. También implica establecer relaciones cercanas y
auténticas con los clientes, escuchando sus necesidades y preocupaciones, y ofreciendo
soluciones que realmente agreguen valor a sus vidas. Además, una empresa humanizada se
preocupa por el impacto que tiene en la sociedad y el medio ambiente, buscando contribuir
de manera positiva en su entorno.
En resumen, humanizar una empresa es adoptar una mentalidad más compasiva y centrada
en las personas en todas las áreas de la organización, con el objetivo de crear un ambiente
de trabajo más humano, ético y sostenible.