Está en la página 1de 3

TIPOS DE ARGUMENTOS1

Un argumento es un conjunto de ideas que se combinan con el fin de respaldar una


conclusión sobre algo. Es la justificación de cualquier afirmación válida, a partir de distintos
mecanismos que aparentemente son verdades. Un buen conjunto de argumentos
probablemente termine mostrando las evidencias suficientes para convencer o persuadir al
otro. Esta persuasión puede derivar en pensamientos, pero también en determinaciones a
tomar. En todo debate o proceso de argumentación, la parte principal es la exposición de
estos argumentos, terminando con una conclusión derivada de allí.

Primeramente, el estudio de los argumentos se ha basado en la forma de probar


la existencia de Dios que se tuvo en distintos momentos. Con eso se quiso diferenciar al
argumento cosmológico, del teleológico del ontológico, aunque todos terminaban
derivando en la firmeza de que Dios debe existir. Es más interesante la clasificación de los
argumentos se hace de acuerdo con la base que los respalda, dividiéndose en las siguientes
clases de argumentos:

Argumentos basados en datos: Se presenta información


irrebatible, datos estadísticos o demostrables, así como
también informaciones que se presumen como ciertas o
válidas. Sin embargo, no necesariamente la inferencia
argumentos-conclusión será cierta, a pesar de que lo sean los
datos que la sustentan. Suele tener una efectividad concreta a
la hora de convencer a los receptores, especialmente a
aquellos que se dejan seducir por los conocimientos y los datos
concretos, sin ahondar demasiado en las conclusiones.

1
Rodriguez, G. (2015). Recuperado en
http://expresionoralyargumentaciong43.blogspot.com/2015/11/tipos-de-argumento.html . Revisado
07/08/2018
Material de trabajo en clase Lectura crítica y debate
Departamento de Estudios Generales- Universidad del Magdalena
Argumentos basados en valores: Se apela al
sentido emotivo o afectivo del receptor, que al
ser convencido de que algo es bueno o malo en sí
mismo, seguramente se inclinará por la
aceptación o el rechazo natural a eso. Puede ser
útil cuando se trate de convencer sobre
cuestiones vinculadas a la salud o a
lo convencionalmente aceptado.

Argumentos basados en definiciones: Cuando a partir


de la definición de algo que interviene directa o
indirectamente en el argumento es como se llega a la
conclusión. De ese modo, la conexión con el
argumento tiene un carácter de natural, y da la
impresión de que es cierto ‘en sí mismo’, ‘por
definición’. Esto en muchos casos es cierto, pero
también puede ser falso.

Argumentos basados en descripciones: Es una forma


de acumular varias argumentaciones en una. Si se
trata de persuadir sobre la importancia de algo en virtud de muchas causas, lo más lógico
será describir ese fenómeno, añadiendo detalles que terminen por concluir en la ventaja o
desventaja de su aplicación.

Argumentos basados en la autoridad: Este tipo de argumentos se apoya en alguna figura


reconocida como una autoridad, que de su apoyo se deriva la importancia de que todos lo
apoyen. En la antigüedad (especialmente en las monarquías), era sin dudas el argumento
de mayor fuerza, y más de una persona ha intentado
desafiarlos costándole la muerte. Hoy por hoy, tiende a
estar más instaurada la idea de que aún las autoridades
vigentes pueden tener errores de apreciación, o se puede
disentir con ellas.

Argumentos basados en comparaciones: Como las


personas suelen verse tan reflejadas en lo que le ocurre a
Material de trabajo en clase Lectura crítica y debate
Departamento de Estudios Generales- Universidad del Magdalena
los demás, suelen tener mucho efecto este tipo de argumentos. Se presume que como otro
estaba en la misma situación, tomó cierto camino y tuvo ciertos resultados, cuando uno
esté en esa situación tomando el mismo camino tendrá los mismos resultados. A pesar de
su marcada in-certeza, se utiliza mucho en lugares como la política.

Argumentos por generalización: En algún punto similar a las comparaciones, pero con algo
más de validez científica: si muchos casos iguales en una variable cumplen con cierta
condición, probablemente otros con la misma también la cumplen.

Falacias: En todos los casos anteriores se ha dicho la


posibilidad de que un argumento parezca cierto, pero
no lo sea. Estos casos de engaños han tenido distintas
divisiones respecto a donde esté el engaño (afirmación
de consecuentes, generalizaciones demasiado amplias,
por autoridad, número de adeptos o antigüedad, entre
otros tantos), pero comparten la cuestión de una falsa
conexión entre el argumento y su conclusión.

Material de trabajo en clase Lectura crítica y debate


Departamento de Estudios Generales- Universidad del Magdalena

También podría gustarte